Un emprendimiento es el esfuerzo que hace una persona o grupo de personas para impulsar un
proyecto, crear una empresa o una solución innovadora. Con base en esta actividad se generarán
ganancias y se aportará valor a los consumidores, de tal forma que el negocio o proyecto permanezca,
crezca y escale.
Un emprendimiento es un negocio que surge a partir de una persona o grupo de personas que tienen un
espíritu inquieto, que buscan poner en juego su creatividad y ven la oportunidad de ofrecer una solución
diferente a una necesidad existente, asumiendo diferentes riesgos.
El emprendimiento es la actividad que involucra el proceso de creación de nuevas empresas o negocios,
así como la expansión de las que ya existen, guardando una estrecha relación con la dinámica
económica de un país, el desarrollo social y la formación de una cultura empresarial.
Necesidad:
La principal motivación de los venezolanos para emprender un negocio es «la necesidad» de generar
mayores ingresos en un entorno de poco crecimiento económico y ante la cada vez más escasez de
trabajos formales.
A pesar de las dificultades para financiarse, las pocas políticas públicas para su desarrollo y el bajo
conocimiento sobre cómo tener un emprendimiento, muchos venezolanos lo ven como una
oportunidad para «salir adelante».
Tipos:
Emprendedor corporativo. Asimila el espíritu y pensamiento innovador de los ‘startuperos’ para ayudar
a empresas de gran tamaño.
Emprendedor "listo para empezar". Tiene la idea, el equipo y la tecnología a su alcance. Todo está
preparado para poner en marcha su idea innovadora, pero le falta un pilar clave: la financiación.
Emprendedor asociado. No posee la idea inicial, pero integra sus valores para que el proyecto
evolucione. Este tipo de emprendedores son el apoyo necesario para promover la visión de la compañía
y permitir que escale.
Emprendedor visionario. Explora nuevas áreas, no duda en aumentar sus conocimientos y trata de
conocer todos los detalles del emprendimiento.
Emprendedor recién llegado. No conoce el propósito de la compañía, pero tiene plena autoconciencia
de sus capacidades para ayudar a crecer al negocio.
No obstante, en el universo del emprendimiento también existen otros tipos de emprendedores:
Emprendedor inversionista. Cuenta con los recursos y el capital necesario para invertir en proyectos
rentables. Su objetivo es obtener un retorno mayor de la inversión que ha realizado al inicio.
Emprendedor especialista. Alberga un gran conocimiento sobre un área, de tal modo que se orienta a un
sector concreto. Es técnico, racional y lógico en las decisiones que toma y se alza como una persona de
referencia para sus compañeros.
Emprendedor multifuncional. Dedica su esfuerzo a varios proyectos ejecutados en paralelo. Es versátil y
suele poseer una gran capacidad de adaptación.
Emprendedor intuitivo. Sus acciones están guiadas por impulsos o corazonadas. Es proactivo y no duda
en encarar las dificultades que se presenten en el desarrollo del proyecto.
Emprendedor apasionado. Disfruta de su labor y muestra una gran capacidad de resiliencia para que sus
ideas y proyectos salgan adelante.
Emprendedor persuasivo. Conoce su audiencia, es capaz de construir diferentes mensajes dependiendo
del público al que se dirige y cuenta con un alto grado de confianza en su labor.
Desafío e impacto:
1. Disposición de capital:
El primer reto suele ser no contar con el capital suficiente para desarrollar tu negocio y conseguirlo no
es tan sencillo, los bancos pueden ser reacios a conceder préstamos sin garantías. Por lo tanto es
necesario que busques dinero de otras formas, como contar con ahorros o apoyarte en inversores
privados. Todo esto no es nada fácil, al contrario es un desafío encontrar esa fuente o ese socio clave
que te ayude con el dinero necesario para comenzar.
2. La recesión o crisis económica:
Una crisis puede presentarse en el momento menos pensado y eso puede afectar las ventas de tu
negocio y más aún cuando estás empezando. Ante eso hay que saber cómo reaccionar, adoptar
cambios, implementar tácticas y planes de acción, así como apoyarte en herramientas que te ayuden a
manejar la situación.
3. Conseguir un buen plan de marketing:
Lograr que una empresa sea rentable requiere de mucho esfuerzo y dedicación, para esto, un buen plan
de marketing puede ayudarte, pero saber crearlo tampoco es una tarea fácil, es algo que irás
aprendiendo día a día, tras aciertos y desaciertos.
4. Crear o vender un producto original y diferente:
Todo negocio, además de capital, busca reducir costos, optimizar procesos, pero todo esto no se puede
lograr si no cuentas con un producto o servicio diferente y atractivo, que lo destaque entre los demás y
haga que todos quieran conocerlo, este es uno de tus mayores retos.
5. Gestión de flujo de caja:
Tener flujo de caja limitado puede restringirte a la hora de implementar tus planes de acción, por lo que
tienes que ser cuidadoso y selectivo en determinar cómo usarás tus recursos. Lo bueno de esto es que
te obliga a ser ingenioso y a encontrar maneras creativas de gestionar el dinero e invertirlo en
estrategias que realmente le aporten al crecimiento de tu negocio.
6. Obtener acuerdos, licencias, registros o patentes:
Otro de los retos importantes para emprender, es lograr un acuerdo de licencias con fabricantes o
distribuidores que tengan los recursos o vínculos para comercializar tus productos. Así mismo ocurre a la
hora de registrar una patente, un sitio web, proteger los derechos de propiedad, entre otros, es
complejo cuando cuentas con pocos recursos. Para esto, lo mejor que puedes hacer es comenzar a crear
relaciones y alianzas con los involucrados en tu sector