b         Diario de Avisos sábado 6 de diciembre 2008
                                                                                                                                      molécula. No estaba dispuesto a que
                                                                                                                                      aquel par de charlatanes propusiera
                                                                                                                                      nuevas estructuras teóricas que, sin
                                                                                                                                      duda, de nuevo, tendrían muy poco
                                                                                                                                      que ver con los datos experimentales
                                                                                                                                      obtenidos por los que realmente sabían
                                                                                                                                      del asunto: Maurice Wilkins y Rosalind
                                                                                                                                      Franklin, del King's College de la Uni-
                                                                                                                                      versidad de Londres.
                                                                                                                                          Así pues, teóricamente alejados del
                                                                                                                                      estudio de la molécula de sus sueños,
                                                                                                                                      transcurrió para Watson y Crick casi
                                                                                                                                      todo el año 1952, hasta que a mediados
                                                                                                                                      de diciembre llegó la noticia que tenía
                                                                                                                                      que llegar, la más temida: Linus Pau-
                                                                                                                                      ling, el genial químico norteamericano,
                                                                                                                                      andaba tras una estructura para el
                                                                                                                                      ADN. Gracias a la información sumi-
                                                                                                                                      nistrada inocentemente por Peter, el hi-
                                                                                                                                      jo de Linus, que trabajaba con ambos
                                                                                                                                      en el Cavendish, supieron que la es-
                                                                                                                                      tructura propuesta por Pauling era
                                                                                                                                      errónea, y muy similar a aquella con la
                                                                                                                                      que ellos habían fracasado el año ante-
                                                                                                                                      rior. Conociendo a Linus Pauling, dis-
                                                                                                                                      ponían de un escaso margen de tiempo,
JOSÉ MARÍA RIOL CIMAS *                                                                                                               hasta que advirtiera su tremendo error
                                                                                                                                      y volviera a la carga.
                                                                                                                                          A partir de una fotografía de difrac-
     l veinticinco de abril de 1953 se                                                                                                ción de rayos X del ADN obtenida por
E    publicaba en la revista Nature el
     descubrimiento más importante
     de la Biología del siglo XX: un
modelo de estructura tridimensional
                                                                                                                                      Rosalind Franklin, que Watson y Crick
                                                                                                                                      consiguieron empleando métodos no
                                                                                                                                      muy limpios, comenzaron el treinta de
                                                                                                                                      enero de 1953 la construcción del mo-
para el ácido desoxirribonucleico                                                                                                     delo molecular que concluirían el siete
(ADN), la molécula mediante la que                                                                                                    de marzo. En solo treinta y seis días,
todos los seres vivos transmiten a su                                                                                                 quizá los más apasionantes de la re-
descendencia su información genéti-                                                                                                   ciente historia de la ciencia, resolvieron
ca. Este espectacular avance contri-                                                                                                  el rompecabezas al descubrir la estruc-
buyó decisivamente a la emergencia                                                                                                    tura en doble hélice del ADN.
de la moderna Biología Molecular,                                                                                                         Pero, si extraordinario era el des-
que representa la gran revolución                                                                                                     cubrimiento, más importantes todavía
científica de nuestros días, equipara-                                                                                                eran las implicaciones biológicas del
ble a la provocada por Charles Dar-                                                                                                   mismo. Al tratarse de una molécula
win en 1859 con la publicación de El                                                                                                  formada por dos cadenas, con estruc-
origen de las especies.                                                                                                               turas complementarias en cada una de
                                              La molécula de ADN en un sello de Suecia de 1989.
   Los descubridores de la estructura                                                                                                 ellas, la función saltaba a la vista: ca-
J. WATSON Y F. CRICK
ADN, LA MOLÉCULA DE LA VIDA
del ADN fueron dos personajes peculia-       transmisión de la información. Y ello a      ge, donde trataría de desentrañar la es-    da una de las cadenas actuaba como
res desde cualquier punto de vista, a los    pesar de que ya en 1944 Oswald Avery,        tructura de la molécula mediante la         un molde sobre el que componer la
que es necesario referirse de forma          junto a Colin Macleod y Maclyn               mejor técnica posible: la difracción de     otra. El sencillo mecanismo permitía
conjunta: el biólogo estadounidense de       McCarty, del Instituto Rockefeller para      rayos X. Allí le enseñarían a "leer" las    al ADN fabricar copias exactas de sí
veinticinco años James Dewey Watson          la Investigación Médica de Nueva York,       fotografías obtenidas cuando los rayos      mismo, y así lo señalaron en su pri-
(1928- ) y el físico británico de treinta    habían obtenido pruebas concluyentes         X eran dispersados tras chocar con la       mer artículo sobre la estructura de la
y seis Francis Harry Compton Crick           a favor del ADN.                             molécula de ADN. En el Cavendish, tra-      molécula. Comenzaba una nueva era
(1916-2004). Para ambos la historia ha-          No obstante, algunos científicos sí      bajando en su Tesis Doctoral, se encon-     en la Biología, marcada por los gran-
bía comenzado muy poco tiempo antes,         entendieron el significado de los resul-     traba Francis Crick, el personaje con el    des logros que hoy sorprenden a to-
en el otoño de 1951, cuando decidieron       tados de Avery. Los más destacados           que, a partir del otoño de 1951, forma-     dos, como la clonación, los organis-
que se daban las circunstancias apro-        fueron Max Delbrück y Salvatore Luria,       ría la pareja científica más famosa del     mos modificados genéticamente o la
piadas para afrontar el gran reto, la        fundadores del "grupo del fago", esen-       pasado siglo.                               terapia génica.
elucidación de la estructura del mate-       cial para el posterior desarrollo de la          En noviembre de 1951 Watson y               En 1962, nueve años después de su
rial genético de la célula. Pero ¿cuál era   Biología Molecular, llamado así por la       Crick, sólo dos meses después de poner      gran descubrimiento, Watson y Crick
ese material genético? Por aquellos          dedicación de sus integrantes al estudio     en funcionamiento su unión temporal         recibieron el Premio Nobel de Fisiolo-
años la pregunta no tenía la misma res-      de los fagos, los virus más simples, de      de intereses, propusieron una estructu-     gía o Medicina, compartido con Mauri-
puesta para todos los científicos, pues      los que se pensaba que no eran más que       ra equivocada para la molécula de           ce Wilkins. Rosalind Franklin, que mu-
muchos todavía consideraban insufi-          una forma de genes. Ante la fundamen-        ADN: se trataba de una hélice de tres       rió de cáncer en 1958, con sólo treinta
cientes las pruebas a favor del ADN y        tal aportación de Avery, Luria decidió       cadenas, carente de base experimental,      y siete años, nunca llegó a saber que la
pensaban que los genes estaban forma-        enviar a Europa a su joven discípulo         con la que consiguieron sobradamente        estructura del ADN se descubrió a par-
dos por otras moléculas más complejas:       Watson, de sólo veintidós años, a            hacer el ridículo ante sus colegas. Su      tir de los datos obtenidos de su foto-
las proteínas. Sencillamente porque pa-      aprender la química del ADN. Tras di-        insensatez, unida a cierta arrogancia,      grafía ●
recía impensable que una molécula co-        versos avatares, y casi por casualidad,      hizo que el director del laboratorio, Sir
mo el ADN, repetitiva y "estúpida", tu-      Watson fue a parar al laboratorio Ca-        William Lawrence Bragg, les prohibie-       * Profesor titular de Bioquímica y Biología mo-
viera algo que ver en el proceso de          vendish de la Universidad de Cambrid-        ra volver a ocuparse del estudio de la      lecular de la Universidad de La Laguna.