Economías Alternativas

The aim of this paper is to investigate to what extent buen vivir (‘good life’), Latin America’s new concept for collective well being, can be considered a way forward beyond current paradigms related to economic growth, development, ideology and state building, with its strengths and potential weaknesses or just a new version of political discourse. In order to answer this question, we will briefly review the literature that can help to trace the buen vivir origins in the cosmovisions of Latino American indigenous peoples, and to connect it to reflections made in different areas of social, economic and political sciences, trying to identify the areas in which divergences arise using established approaches and frameworks. In the conclusions we will also try to look at the added value brought by the buen vivir towards a renewed understanding of political, social, and economic objectives of the associated life.

La economía colaborativa tiene varias aristas y aquella practicada por
la ciudadanía no solo es una provocación para el gobierno y para las grandes corporaciones transnacionales que prefieren perpetuar el engranaje del hiperconsumismo; claramente hay a quien no le conviene promover el fortalecimiento de ciudadanos empoderados, proactivos, informados y autogestivos. Por lo tanto, la economía colaborativa en México no ha terminado de explotar como en otras regiones del mundo. Y si el término “economía colaborativa” no ha tenido la suficiente permeabilidad, el de “cooperativismo de plataforma” aún menos

The Project “Amidst docks, tracks and villages: Community organization and Sustainable practices at Mosqueiro District , PA” aims to achieve interaction of academic and traditional knowledge, in order to study and analyze social organization at Mosqueiro District -specifically the communities of Caruaru and Castanhal of Mari-mari-, to contribute to the improvement of livelihood practices so as to enable them understanding their own actions as well as the political and cultural processes involved. In this context, we will discuss actions attempting a dialog between systematized and traditional knowledge, interacting and planning, altogether with local families and partners, actions favoring sustainability of natural resources and supply as well as the widening of economic alternatives that provide employment, income, social inclusion and non-destructive environmental practices. One of these possibilities is community-based tourism.

The articles in this special section, by offering ethnographically grounded reflections on diverse strains of economic activism, begin to articulate a non-capitalocentric political ecology that we think can help scholar-activists politicize, reimagine, and recreate socio-ecological relations. In this introductory article, we offer a useful vision of how scholar-activists can engage with and support more just and sustainable ways of organizing human–human and human–environment relations. Specifically, we argue that engaged researchers can significantly contribute to a meaningful "ecological revolution" by (1) examining the tremendously diverse, already-existing experiments with other ways of being in the world, (2) helping to develop alternative visions, analyses, narratives, and desires that can move people to desire and adopt those ways of being, and (3) actively supporting and constructing economies and ecologies with alternative ethical orientations. Each article in this collection attempts one or more of these goals, and this introductory article provides a conceptual grounding for these ethnographic studies and a synthesis of some of their primary contributions. We begin by describing why critique is analytically and politically inadequate and explain why we think a non-capitalocentric ontology offers an essential complement for engaged scholarship. We then turn to the work of J.K. Gibson-Graham and the Community Economies Collective in order to explain how ideas of overdetermination, diverse economies, and performativity better equip the field of political ecology to contribute to alternative futures. And finally, we discuss how the articles in this volume reconceptualize values, politics, and scale in a manner that illuminates our scholarly and activist efforts.

Les articles de cette section spéciale offrent des réflexions ethnographiques sur diverses souches de l'activisme économique. Ils commencent à articuler une écologie politique «non - capitalocentrique» que nous pensons peut aider universitaires militants politiser, réinventer, et de recréer les relations socio-écologiques. Dans cette introduction aux articles, nous vous offrons une vision utile de la façon des chercheurs-militants peuvent s'engager et soutenir les modes d'organisation des relations humaines-humain et humain-environnement plus justes et durables. Plus précisément, nous soutenons que les chercheurs engagés peuvent contribuer de manière significative à une «révolution écologique» significative par (1) l'examen des diverses expériences, déjà existants avec d'autres manières d'être dans le monde, (2) d'aider à développer des visions alternatives, analyses, récits, et les désirs qui peuvent se déplacer les gens à désirer et d'adopter ces manières d'être, et (3) de soutenir activement et de construire des économies et écologies des orientations éthiques alternatives. Chaque article de cette collection tente un ou plusieurs de ces objectifs, et cet article d'introduction fournit une base conceptuelle pour ces études ethnographiques et une synthèse de certains de leurs principales contributions. Nous commençons par décrire pourquoi la critique «seule» est analytiquement et politiquement inadéquate et expliquer pourquoi nous pensons une «ontologie non capitalocentrique» offre un complément essentiel pour l'érudition engagée. Nous passons ensuite aux travaux de J.K. Gibson-Graham et les économies communautaires collectives afin d'expliquer comment les idées de surdétermination, diverses économies, et performativité mieux peut équiper le domaine de l'écologie politique pour contribuer à d'autres avenirs. Et enfin, nous discutons de la façon dont les articles repenser les valeurs, la politique, et de l'ampleur d'une manière qui appuie nos efforts scientifiques et activistes.

Los ensayos en este número especial, ofreciendo reflexiones fundamentadas en estudios etnográficos sobre diversos esfuerzos de activismo económico, comienzan a articular una política ecológica no-capitalocéntrica que pensamos puede ayudar a los académicos-activistas a politizar, reimaginar, y recrear relaciones socio-ecológicas. En este ensayo introductorio, ofrecemos una visión útil de cómo académicos-activistas pueden comprometerse con y apoyar más formas justas y sustentables de organización de relaciones humano-humano y humano-ambiente. Específicamente, argumentamos que investigadores comprometidos pueden contribuir significantemente a una valiosa "revolución ecológica" (1) examinando los tremendamente diversos, ya-existentes experimentos con otras maneras de ser en el mundo, (2) ayudando a desarrollar visiones, análisis, narrativas, y anhelos alternativos que puedan llevar a la gente a anhelar y adoptar esas otras maneras de ser, y (3) activamente apoyando y construyendo economías y ecologías con orientaciones éticas alternativas. Cada ensayo de esta colección busca uno o más de estos objetivos, y este ensayo introductorio provee una base conceptual para estos estudios etnográficos y una síntesis de algunas de sus principales contribuciones. Comenzamos describiendo por qué la crítica es analítica y políticamente inadecuada, y explicando por qué nosotros pensamos que una ontología no-capitalocéntrica ofrece un complemento esencial para académicos comprometidos. Después presentamos el trabajo de J.K. Gibson-Graham y el Colectivo de Economías Comunitarias (Community Economies Collective) con el fin de explicar cómo ideas de sobredeterminación, economías diversas, y performatividad equipan mejor el campo de la ecología política para contribuir así a futuros alternativos. Y finalmente, discutimos cómo los artículos en este volumen reconceptualizan valor, política, y escala en una manera que ilumina nuestros esfuerzos académicos y activistas.

La crisis internacional de 2008, originada en el centro del sistema financiero norteamericano, hizo que varios países de la zona euro se vean obligados a pedir ayuda financiera externa. ¿Cuáles son entonces las implicaciones que este contexto económico y social plantea a los
jóvenes desde el punto de vista de la construcción de alternativas de futuro y de sus itinerarios profesionales? En el caso específico de aquellos que ambicionan construir una carrera musical, ¿qué tipo de estrategias y qué tipo de posicionamientos se adoptan? ¿Pueden estas estrategias de creación y promoción musical entenderse como prácticas
económicas alternativas? Centrándonos en la ciudad de Lisboa y en la música independiente, es nuestro objetivo responder a estas cuestiones, explorando las formas de colaboración entre jóvenes músicos, editores, promotores y programadores, comprendiendo la importancia de su inserción en redes compuestas por los diversos agentes del medio musical en la construcción de su trayectoria profesional.

Los trabajos que aquí se presentan son el resultado de un
año de investigación, discusión, reflexión e intercambio en
procesos de investigación e interaprendizaje entre académicos
del Grupo de Trabajo del Consejo Latinoamericano de Ciencias
Sociales (gt-Clacso) “Economías alternativas y buen vivir:
experiencias de solidaridad económica y democratización
del poder en América Latina” y, a su vez, compartidos con comunidades
y luchadores sociales, que desde lo cotidiano construyen
alternativas de vida y de trabajo en los ámbitos rural y
urbano, para enfrentar y revertir el proceso actual de mercantilización
total de la vida. (Tomado de la Introducción de Hilda Caballero)