SOCIEDADES ANTIGUAS DEL CRECIENTE FÉRTIL TERRITORIOS, MEMORIAS E IDENTIDADES CULTURALES Coordinador Roberto R. Rodríguez Escriben Israel Campos Méndez • Marco Antonio Cervera Obregón Leandro Wladimir Gastón Constanze Lima • Paola Corrente Mara Soledad D’Amico • Juan Vicente Estigarribia Andrea Garza-Díaz Barriga • Graciela Gestoso Singer • Pablo Jaruf Katherine Kifer • Rosaura Sanz-Rincón • Marcio Teixeira-Bastos Benjamín Toro Icaza • Marcela Zapata-Meza Centro de Estudios del Egipto y del Mediterráneo Oriental Sociedades antiguas 155x215.indb 3 25/6/2021 15:54:06 Rodríguez, Roberto Sociedades antiguas del Creciente Fertil : vol3 tomo1 : territorios, memorias e identidades culturales / Roberto Rodríguez. - 1a ed. - Buenos Aires : Remitente Patagonia, 2021. 470 p. ; 21 x 15 cm. ISBN 978-987-8464-15-2 1. Historia Antigua. I. Título. CDD 909 Sociedades Antiguas del Creciente Fértil Territorios, Memorias e Identidades Culturales Coordinador: Roberto R. Rodríguez Autores: Israel Campos Méndez • Marco Antonio Cervera Obregón • Leandro Wladimir Gastón Constanze Lima • Paola Corrente • Mara Soledad D’Amico • Juan Vicente Estigarribia • Andrea Garza-Díaz Barriga • Graciela Gestoso Singer • Pablo Jaruf • Katherine Kifer • Rosaura Sanz-Rincón • Marcio Teixeira-Bastos • Benjamín Toro Icaza • Marcela Zapata-Meza Edición y diseño de tapa: Pablo Lo Presti Corrección: Julia Chaktoura Maquetación interior: Julio C. Zani Figura de tapa: Estela de Naram-Sin. Siglo XXIII a.C. (Museo del Louvre. París, Francia). Tirada: 200 ejemplares. 1ra edición - ISBN: 978-987-8464-15-2 Remitente Patagonia Trelew - Chubut www.remitentepatagonia.com.ar Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida, almacenada, transmitida en manera alguna ni por ningún medio, ya sea eléctrico, químico, mecánico, óptico, de grabación o de fotocopia, sin permiso previo del editor. “Editorial Remitente Patagonia, adhiriendo al derecho a la libertad de expresión, auspicia y promueve de manera irrestricta las diversas manifestaciones culturales. Los autores son legal y moralmente responsables de la veracidad y profundidad de sus investigaciones, de la autoría que ejercen sobre sus obras y de las opiniones vertidas en las mismas”. Sociedades antiguas 155x215.indb 4 25/6/2021 15:54:06 K K (1952-1958): L J P Katherine Kifer Leandro Constanze Lima Pablo Jaruf R Kathleen Kenyon (1906-1978) fue una reconocida arqueóloga inglesa que entre 1952 y 1958 excavó la antigua Jericó, localidad moderna de Tell es-Sultan. Se destacó por ser una de las primeras en aplicar los métodos de la ciencia moderna en las excavaciones arqueológicas del Próximo Oriente. Tanto sus técnicas estratigráficas como su novedosa metodología de clasificación por tipo cerámico siguen siendo utilizadas en la actualidad en muchos yacimientos arqueológicos. Las evidencias allí encontradas llevaron a considerar a Jericó la ciudad más antigua del mundo. Esta labor se produjo en un período histórico particular, cuando la región estuvo gobernada por el Reino Hashemita de Jordania, tras alNakba y durante la Crisis de Suez, esto es, durante el desplazamiento de palestinos y el recrudecimiento del enfrentamiento entre el 119 Sociedades antiguas 155x215.indb 119 25/6/2021 15:54:16 Estado de Israel y los países árabes. Kenyon, si bien nunca se había manifestado de manera política (al menos hasta la Guerra de los Seis Días), nunca fue sionista y siempre utilizó el nombre de Palestina para referirse a este territorio, tal como habían hecho los británicos durante el Mandato. El objetivo de este artículo es revisitar la labor de Kenyon durante sus campañas en Jericó, colocando en primer plano su condición de mujer, en el sentido de intentar explicar cómo pudo llegar a dirigir esta importante misión y ganarse el respeto de sus colegas en un ámbito académico dominado por varones. Asimismo, analizaremos sus interpretaciones relativas a los orígenes y destino de Jericó, como las críticas que recibieron. Consideramos que la producción del conocimiento científico está siempre condicionado tanto por la trayectoria del científico / de la científica en cuestión y sus intereses particulares como por el contexto socio-político. A Kathleen Kenyon (1906-1978) was a famous British archaeologist. She digged up the ancient Jericho, modern location of “Tell esSultan”, from 1952 to 1958. Furthermore, she was one of the first to brush over the modern science methods Near East´s excavations. Her stratigraphic technique and ceramic methodology are applied in every tell at present. The evidences found there led to consider that Jericho was the oldest city in the world. This work was performed in a particular period when the region was under Hashemite Kingdom´s control, contemporary the Suez crisis and the displacements of many palestinian (Nakba) for the Arab–Israeli war. Even though Kenyon never expressed her political ideology openly –at least not until Six-Day War–, she wasn´t Zionist. 120 Sociedades antiguas 155x215.indb 120 25/6/2021 15:54:16 She always used the name “Palestine” to refer to this territory, as the British had done during the Mandate. The aim of the present study is to reconsider Kenyon´s work in Jericho, standing out her effort to lead this important digging and to receive acknowledgment inside the social field in a moment when men had the control. Similarly, we´ll check Kenyon´s interpretations about the beginning and the end of Jericho and the critics that she received. We consider that the academic knowledge is always conditioned by the scientist´s trajectory, his/her interest and the sociopolitical context. 121 Sociedades antiguas 155x215.indb 121 25/6/2021 15:54:16 “You don’t consider whether you are a man or a woman. You are just an archaeologist. That’s all there is to it.”1 J XXI: 17 de abril de 2018. El embajador de Palestina en Argentina, Husni M. A. Abdel Wahed, en una conferencia ofrecida en el Centro Cultural Paco Urondo, sostiene que, tarde o temprano, el dominio ilegítimo de Israel se va a terminar. Se presenta como nacido en la ciudad más antigua del mundo, Jericó, cuyos 10000 años de historia vieron varios reinos e imperios caer, la mayoría de ellos ya olvidados, y que lo mismo sucederá con el Estado de Israel, de apenas 70 años de existencia. El embajador, así, vincula la identidad palestina con esta ciudad y toda la historia de la región, fortaleciendo la esperanza de lograr la independencia y el pleno autogobierno. 15 de septiembre de 2019. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en uno de los últimos actos de campaña para su reelección, legaliza la colonia Mevoot Yericho, como parte de su promesa de anexionar prácticamente todo el valle del Jordán. Jericó, ocupada desde la Guerra de los Seis Días, pasó a control directo de la Autoridad Nacional Palestina tras los Acuerdos de Oslo, pero al día de hoy se encuentra rodeada de territorios Zona C, es decir, bajo administración del Estado de Israel. La ciudad ocupa un lugar simbólico central en el discurso sionista por ser, según el relato bíblico, la primera localidad cananea en ser conquistada por Josué, significando la entrada en la tierra prometida que hoy los colonos pretenden replicar. ¿Cómo es posible que la misma ciudad desempeñe dos funciones tan opuestas: ser a la vez un símbolo para los palestinos así como también para los israelíes? Fuera como fuese, ambos discursos 1 Steele, 1968: 15. 122 Sociedades antiguas 155x215.indb 122 25/6/2021 15:54:16 no podrían ser enarbolados hoy día si no fuera gracias al trabajo arqueológico realizado en la década de los cincuenta por Kathleen Kenyon, entre otros, quien no sólo pudo precisar mejor la naturaleza y el fechado de la ciudad en la Edad del Bronce, sino también los estratos más antiguos, correspondientes al Neolítico, estableciendo la extraordinaria antigüedad del sitio. K J : A medida que recorremos el trayecto académico y profesional de Kenyon, también transitamos una fracción importante de la disciplina arqueológica del siglo XX. En este camino nos encontramos con muchas mujeres que pugnaban por ocupar espacios en un ámbito mayormente masculino2. Kathleen, hija de Frederic Kenyon, director del Museo Británico, entró al Somerville College de la Universidad de Oxford en 1925, uno de los colegios femeninos más liberales y de mayor reputación de Londres (Fig. 1). Pronto se convirtió en miembro de la Sociedad Arqueológica de la Universidad de Oxford y, aunque la Sociedad aceptaba mujeres desde hacía solo cinco años, al poco tiempo se convirtió en la primera mujer presidente de la misma. En esa época, Margery Fry, la nueva directora del Somerville College, recomendó a Kenyon para que participara en una excavación en el sudeste de África, que abriría el camino para su carrera arqueológica. En 1928, la Asociación Británica invitó a la arqueóloga Gertrude Caton-Thompson a examinar el sitio del Gran Zimbabue. Formada en el University College de Londres y habiendo participado en 2 Para una biografía extensa y detallada de la vida de Kenyon, véase Davis, 2008. 123 Sociedades antiguas 155x215.indb 123 25/6/2021 15:54:16 excavaciones con Flinders Petrie en el Alto Egipto, y por su cuenta en Fayum, en un principio se mostró reticente a recibir a Kenyon debido a su inexperiencia. Sin embargo, esta excavación parece haber sido un momento de quiebre en los intereses de Kathleen, donde se desempeñó principalmente como fotógrafa del sitio y acompañó a Caton-Thompson a otros yacimientos cercanos. En 1930, al regresar a Inglaterra, pasó los primeros meses investigando en el Museo Británico y preparando su contribución para un capítulo en el libro sobre el trabajo realizado3. A mitad del mismo año, se sumaría a la excavación de la ciudad romana de Verulamium en St. Albans, dirigida por Mortimer Wheeler y su esposa Tessa. Es aquí donde aprendió el método de excavación que Wheeler venía utilizando a partir de los trabajos del general PittRivers. El sistema consistía en dividir el sitio en cuadrículas de cinco metros cuadrados y dejar sin excavar la tierra entre las parcelas. Al cavar por capas, se podía establecer el registro estratigráfico y el nivel en que se hallaban los objetos. La capacidad para la estratigrafía de Kenyon sería clave en este sentido para poder perfeccionar el método y aplicarlo en diversos contextos. Ella permanecería en Verulamium durante cinco temporadas, llevando adelante su primer proyecto independiente con la excavación del único teatro romano conocido en Gran Bretaña4. Durante estos años también viajó periódicamente al Cercano Oriente para sumarse a la expedición conjunta de Samaria, un esfuerzo combinado de varias organizaciones y bajo la dirección de John Crowfoot5. El trabajo de Kenyon con la cerámica hallada en el sitio recibió críticas favorables y rápidamente se volvió el trabajo de referencia para la cronología de la Edad del Hierro en la zona de Palestina6. Debe considerarse que al momento de completar las excavaciones en Samaria, Kathleen tenía 29 años y llevaba poco más de un lustro dedicándose a la arqueología en el terreno. Su dedicación por el 3 4 5 6 Caton-Thompson, 1931. Kenyon, 1935: 213-261. Crowfoot, Crowfoot & Kenyon, 1957. Wright, 1959: 13-29. 124 Sociedades antiguas 155x215.indb 124 25/6/2021 15:54:16 trabajo sistemático siguiendo el ejemplo de Wheeler permitió que años después pudieran reexaminarse los hallazgos del sitio. Por otra parte, su aplicación de nuevos métodos de excavación en el terreno, prestando especial atención a los niveles en que se halló la cerámica, abrió el camino para todo un sistema de análisis de la evidencia material en las siguientes décadas, al punto que hoy el método es habitualmente conocido como Wheeler-Kenyon. Luego de participar en estas excavaciones, se unió como Secretaria al Instituto de Arqueología del University College de Londres, recientemente fundado por el matrimonio Wheeler, mientras continuaba su trabajo de campo participando en la excavación de la ciudad romana de Viroconium, cerca del poblado de Wroxeter. En 1935, un comité creado por el ayuntamiento de la ciudad de Leicester se contactó con Kenyon para que condujera una excavación en “Jewry Wall”. Este sitio consistía en un muro romano de gran longitud, parte del asentamiento de Ratae Corieltauvorum7. Durante la Segunda Guerra Mundial, Kenyon reemplazó a Wheeler en la administración del Instituto de Arqueología, convirtiéndose en Directora en 1942, siendo la primera mujer en dirigir una dependencia mayor de una universidad británica. Durante este período también colaboró activamente con la Cruz Roja y continuó escribiendo sobre sus trabajos arqueológicos en diversas revistas. En 1944, se formó el Consejo para la Arqueología Británica con el objetivo de promover la arqueología regional. La meta del Consejo era conformar una organización que nucleara museos, universidades y sociedades arqueológicas y asegurase la preservación de los sitios históricos. Kenyon fue nombrada Primera Secretaria del Comité Ejecutivo. A fines de la década, tendría la oportunidad de participar en la expedición de la British School at Rome que, dirigida por Ward Perkins, tenía como objetivo continuar las excavaciones en las ciudades de Leptis Magna y Sabratha en la costa de Trípoli8. 7 Kenyon, 1948. 8 Kenrick, 1982: 51-60. 125 Sociedades antiguas 155x215.indb 125 25/6/2021 15:54:17 Desde que comenzó su carrera en Arqueología, Kenyon se involucró con muchas mujeres que participaban y dirigían excavaciones. Mientras algunas como Tessa Wheeler y Molly Crowfoot, la esposa del director del proyecto de Samaria, participaban en principio a través de sus maridos, no por ello su aporte era de menor relevancia. Crowfoot, por ejemplo, dirigía el campamento de la excavación y se encargaba del registro de la cerámica. También vemos otras mujeres que conocieron a sus maridos como resultado de su participación en el campo arqueológico. Por último, son diversos los casos de mujeres independientes que forjaron sus propias carreras. De Kenyon y Caton-Thompson ya hemos hablado, pero también encontramos a Olga Tufnell que trabajó en Tell Lachish y a Veronica Seton Williams que dirigió las excavaciones de Buto en los años sesenta, ambas arqueólogas profesionales de la misma generación. En este sentido no podemos dejar de nombrar a Margaret Murray, que se formó con Petrie y era una reconocida egiptóloga, o a Dorothy Garrod que excavó sitios del Paleolítico en Irak y Palestina, siendo la primera mujer que pudo ocupar un cargo de profesora en la Universidad de Cambridge9. En resumen, podemos asegurar que en el contexto de la academia y el trabajo arqueológico de principios y mediados del siglo XX, encontramos a varias mujeres británicas que, aún en minoría, ocupaban puestos importantes y eran reconocidas por sus pares varones. Asimismo, cabe destacar que la mayoría de aquellas que trabajaron de manera independiente, es decir, sin estar acompañadas por sus maridos en las campañas, compartieron el perfil de ser mujeres que nunca se casaron ni tuvieron hijos, lo que sin dudas contribuyó a que pudieran dedicar gran tiempo a las actividades arqueológicas. Por último, podemos afirmar que casi todas compartían un origen socioeconómico semejante, de familias con una cierta posición, y que contaban con una figura masculina ya respetada en la disciplina. 9 Sobre el lugar de estas arqueólogas británicas en la academia, véase Lönnqvist, 2008: 381-382, 389. 126 Sociedades antiguas 155x215.indb 126 25/6/2021 15:54:17 K J P : El fin de la Primera Guerra Mundial trajo aparejado la fragmentación del Imperio Otomano. Ya en 1916, el Acuerdo SykesPicot había establecido que, en caso de repartirse el territorio del Próximo Oriente, Francia y Reino Unido establecerían allí nuevos Mandatos10. Los británicos lo impusieron sobre Palestina, al tiempo que promovieron campañas de exploración con fines comerciales como políticos sobre el territorio. Simultáneamente, establecieron un Departamento de Antigüedades, lo que proporcionó cierto control sobre las excavaciones en la región, específicamente sobre los sitios bíblicos. En los años 1930-1936, un gran equipo, bajo la dirección del profesor John Garstang de la Universidad de Liverpool, trabajó en Tell es-Sultan, la antigua Jericó11. Sin embargo, las excavaciones no contaban con una metodología precisa y la datación de los restos materiales era inadecuada haciendo que las fechas asignadas a las cerámicas y a las murallas resulten dudosas. En el período de entreguerras (1919-1939), Próximo Oriente se había convertido en una zona geoestratégica para Gran Bretaña, ya sea por su cercanía al canal de Suez como su acceso al territorio indio vía el Golfo Pérsico. No obstante, alcanzar el dominio absoluto del territorio levantino implicaba constantes negociaciones, especialmente con los gobernantes árabes quienes, tras haber impulsado el apoyo al bando británico durante la Primera Guerra Mundial y no haber recibido recompensa por ello, parecían inclinarse por una tendencia cada vez más filogermana. Las tensiones fueron en aumento durante la Segunda Guerra Mundial, debido a la emigración masiva de judíos, particularmente rusos y polacos, ansiosos por realizar el deseo sionista de crear un Estado judío en Palestina12. 10 Pérez González & Sánchez Herráez, 2012: 37. 11 Kenyon, 1966: 18. 12 Uno de los principales referentes del sionismo había sido Theodor Herzl quien en 127 Sociedades antiguas 155x215.indb 127 25/6/2021 15:54:17 Los años de postguerra fueron de grandes transformaciones. Ya en 1945 se había creado la Liga Árabe, la cual reflejaba la voluntad de unión de todos los árabes en un único Estado nación13. Pero un día antes de la fecha prevista para la entrega del Mandato sobre Palestina por parte de Gran Bretaña, David Ben-Gurión proclamó la independencia de Israel (1948), declaración que promovió el descontento de la Liga, la cual intervino militarmente. Finalizada la primera guerra árabeisraelí en 1949, se procedió a un nuevo reparto del territorio entre Israel, Jordania y Egipto; simultáneamente se forzó la migración de palestinos hacia los campos de refugiados en los países limítrofes. Aún a pesar de la situación, las excavaciones arqueológicas se reiniciaron con renovado vigor. Es en este contexto, en 1951, cuando Kenyon realizó la primera visita preliminar a Tell es-Sultan, con el objetivo de evaluar la fiabilidad del proyecto como así también solicitar el permiso de excavación al Departamento de Antigüedades del Reino Hashemita de Jordania, a la sazón soberano del territorio donde se hallaba el sitio arqueológico14 (Fig. 2). Kenyon entendía que era necesario comenzar con antelación el envío de material, por la posibilidad de que su llegada se retrasase varios meses, ya sea porque los puertos estaban controlados por los israelíes, o ante la posibilidad de ser confiscados por el ejército jordano15. La expedición duró seis años (1952-1958) y contó con el patrocinio de distintas instituciones inglesas, norteamericanas, australianas y alemanas. El personal que trabajó allí fue de origen internacional, aunque destacó la colaboración de refugiados palestinos, desde niños hasta hombres, para cavar y acarrear la tierra16. Sucede que en el curso de la guerra entre Israel y Jordania se había establecido al norte del 1896 declaró que el pueblo judío sólo podía ser aceptado si se establecía un Estado con el consentimiento de las grandes potencias, recuperando con ello el status de nación y acabando con el antisemitismo. 13 Pérez González & Sánchez Herráez, 2012, 49. 14 Kenyon, 1966: 7. 15 Davis, 2008: 129. 16 Kenyon, 1966: 24. 128 Sociedades antiguas 155x215.indb 128 25/6/2021 15:54:17 tell un campo de refugiados que alojaba a unos doce mil palestinos y recurrentemente le solicitaban trabajo debido a la situación de pobreza en que vivían17. Un fragmento del informe preliminar de Kenyon puede servir para ilustrarnos mejor acerca de su penosa situación: La población de Jericó es patéticamente pobre, y su falta de empleo es casi permanente, razón por la cual los que solicitan empleo se amontonan frente a las puertas cuando se van a enlistar a los peones. Para el trabajo de cavar se contratan hombres, y niños o adolescentes para el acarreo de la tierra al vaciadero. El número total de trabajadores contratados cada año ha sido de ciento veinte o doscientos, entre hombres y muchachos (…) Más cada año tiene lugar una escena, capaz de ponerle en tensión los nervios a cualquiera, cuando los empleados en la temporada anterior y los nuevos solicitantes tratan de llamar mi atención, y son violentamente echados a empellones por los privilegiados que tienen el empleo seguro. Cada año igualmente se presenta el problema de los muchachos que han crecido y desean ser contratados como hombres, y alegan que están casados y que tienen un hijo…18 Ahora bien, el interés de Kenyon por Jericó, en parte motivado por su padre, se vinculaba al deseo de encontrar evidencia material que corroborase la ocupación temprana del sitio sostenida por Garstang19, como a su destrucción a fines del Bronce Antiguo. Para esto aplicó y terminó de refinar el método Wheeler-Kenyon ya descrito en el apartado anterior. Asimismo, fue allí donde por primera vez se inventaron y utilizaron los conceptos de Neolítico Pre Cerámico y Neolítico Cerámico, ambos subdivididos a su vez en fases A y B, que hoy siguen siendo utilizados para periodizar la Prehistoria del Cercano Oriente. A su vez, algunos de los restos orgánicos hallados en el sitio fueron de los primeros en ser datados después mediante radiocarbono20, con lo cual no cabe duda que estas campañas marcaron un hito trascendental en la Arqueología de Palestina. 17 18 19 20 Lönnqvist, 2008: 406. Kenyon, 1966: 24 Kenyon, 1966: 25; Lönnqvist, 2008: 397. Lönnqvist, 2008: 398. 129 Sociedades antiguas 155x215.indb 129 25/6/2021 15:54:17 Los resultados de estas técnicas de datación arrojaron fechas de enorme antigüedad, ubicando las primeras evidencias de agricultura hace aproximadamente unos diez mil años. Pero lo más llamativo es que ya para esa época el asentamiento contaba con murallas, torres, grandes viviendas y numerosas evidencias de prácticas rituales y mortuorias, todo lo cual llevó a considerar a Jericó como “la primera ciudad del mundo”, título que Kenyon adoptó rápidamente, como indica en el comienzo de su informe preliminar de excavación: La mayor parte de los artículos que han aparecido en los periódicos y que describen los resultados obtenidos al desenterrar Jericó, llevaban por título: “La ciudad más antigua del mundo”. Pero eso sólo demuestra que dicha circunstancia es la que mayormente atrae a la imaginación de la gente. En los siguientes capítulos me propongo demostrar que tal afirmación es una verdad21. Kenyon, al igual que Childe22, sostenía que la presencia de un oasis —en este caso ‘Ain es-Sultan, ubicado al pie del tell—, habría sido clave para favorecer la domesticación de plantas y animales en la región. Esta cuestión, sumada a la controversia acerca de su verdadero carácter urbano, motivó un temprano debate con Robert Braidwood, especialista también en sitios neolíticos, quien desconfiaba de las fechas tempranas de Jericó23. Hoy día, pasado más de medio siglo de excavaciones, existe casi un pleno consenso entre los especialistas de que Jericó, al fin y al cabo, no era todavía una ciudad sino sólo una aldea amurallada. Aún así, todavía persiste aquel título, tanto como atracción turística (Fig. 3) como en el trabajo de reconocidos urbanistas24. Sobre los estratos posteriores, la interpretación de Kenyon, acorde con el enfoque histórico-cultural predominante en la época, se basaba en que los cambios en la cultura material eran resultado de migraciones, donde nuevas poblaciones reemplazaban a las 21 22 23 24 Kenyon, 1966: 11. Childe, 1997: 97-149. Braidwood, 1957. Soja, 2008: 62-72 130 Sociedades antiguas 155x215.indb 130 25/6/2021 15:54:17 antiguas. Desde este punto de vista, luego de que los primeros habitantes neolíticos de Jericó abandonaran el asentamiento, otros pasaron a ocupar su lugar, procedentes ya sea del Norte o del Este. Uno de los cambios más significativos se daba entre fines del Bronce Antiguo y comienzos del Bronce Medio, cuando amplias evidencias de destrucción se asociaban con la llegada de invasores nómadas. Pero, sin dudas, la mayor atención estaba centrada en el Bronce Tardío, cuando se suponía los israelitas habían cruzado el Jordán y conquistado la ciudad. Anteriormente, Garstang había vinculado las evidencias de destrucción con los tiempos de Josué. No obstante, si bien Kenyon nunca dejó de considerar la Biblia como evidencia histórica25, sometió a crítica los datos establecidos por su antecesor, descartando esta posibilidad. En general, más allá de algunas pocas evidencias dispersas, ella sostuvo que gran parte de los restos de fines del Bronce Tardío, como los subsiguientes de la Edad del Hierro, se habían perdido producto, entre otros factores, de la erosión. Llegados a este punto, podemos decir entonces que el hecho de ser mujer no implicó realizar una interpretación distinta de la evidencia arqueológica, la cual se ajustó a los estándares de la época. Nada más lejos de lo que hoy podría suponerse como un enfoque feminista, esto es, divergente del impuesto por la academia. Por ejemplo, al leer el informe preliminar uno se encuentra con expresiones como las siguientes: cuando habla de la superficie de los suelos, dice “esta capa es tan dura que cuando hay que limpiarla para tomar fotografías, aún se la puede frotar con agua, como seguramente lo hacían las amas de casa neolíticas…”; más adelante, cuando explica la introducción de la alfarería, asegura que “constituye un paso hacia delante (porque) pone a la disposición del ama de casa vasijas más manejables…”; finalmente, sobre la debatida cuestión de la llegada de los israelitas, sugiere que “la prueba me parece ser que el pequeño fragmento de edificación que hemos encontrado es parte de la cocina de una mujer cananea, que pudo haber dejado caer el pequeño jarro junto al horno 25 Lönnqvist, 2008: 401-402. 131 Sociedades antiguas 155x215.indb 131 25/6/2021 15:54:17 y huyó al escuchar el sonido de las trompetas de los hombres de Josué”26. Como se ve, cada vez que se refiere a las mujeres las ubica dentro del hogar, estando a cargo de la limpieza o de la cocina, llegando al punto de considerarlas como verdaderas amas de casa, naturalizando así un rol y una imagen que correspondía más al contexto de su época. Llama la atención esta caracterización, pues Kenyon nunca fue una mujer que se quedara en su casa a realizar tareas domésticas. Al contrario, no sólo ocupaba posiciones destacadas dentro de la academia, sino que quienes la conocieron la recordaban siempre con un cigarrillo en la mano y como una amante del gin-tonic, amén de un cierto destrato para con las personas que no conocía27. Nada más alejado, pues, del estereotipo de la mujer sumisa y ama de casa. A nuestro entender, sin embargo, es posible realizar una lectura alternativa de aquellas apreciaciones, pues es de destacar que en todo este informe no hubiera ninguna mención a una actividad específica realizada por varones, como pudo haber sido la caza o la guerra, por citar dos posibles ejemplos. En efecto, tanto ella como algunas de sus colegas estaban interesadas en las actividades domésticas realizadas por las mujeres prehistóricas, y particularmente por el origen de la agricultura o de la alfarería, a quienes atribuían su origen. Por ejemplo, su directora en Zimbabue, Caton-Thompson, había realizado excavaciones en Fayum durante la década del veinte, estudiando las evidencias más antiguas de agricultura en el continente africano28. Podemos decir, por lo tanto, que las afirmaciones realizadas por Kenyon tenían como objetivo visibilizar a las mujeres, otorgándoles un rol central en la vida de las comunidades prehistóricas. 26 Estas citas corresponden a Kenyon, 1966: 36, 58, 151. 27 Lönnqvist, 2008: 395. 28 Caton-Thompson & Wight Gardner, 1934. 132 Sociedades antiguas 155x215.indb 132 25/6/2021 15:54:17 K J : Luego de Jericó, a partir de 1961, Kenyon pasó a trabajar en Jerusalén, con el objetivo de aplicar su nuevo método WheelerKenyon y establecer mejor la supuesta llegada de los israelitas. No obstante, el contexto político durante la década de los sesenta empeoró cada vez más, dificultando las excavaciones en la ciudad, así como también enturbiando las relaciones tanto con las autoridades como entre los colegas. El clímax llegó con la Guerra de los Seis Días y la ocupación israelí de los territorios palestinos. Kenyon, que nunca se había manifestado políticamente, redactó una carta que fue publicada en The Times, en la cual, si bien por historia y cultura afirmaba sentir una gran empatía por los judíos, no podía aceptar una acción que consideraba ilegítima: Desde el inicio del conflicto en Medio Oriente, el Reino Unido ha declarado que se mantendrá neutral (…) [pero] Israel debe volver a sus fronteras pre-existentes. Sólo insistiendo en este punto, y haciendo nuestro mejor esfuerzo para lograrlo, podremos ejercer realmente nuestra neutralidad. (…) Después del período bajo control romano y cristiano, Jerusalén fue conquistada por los árabes en 636 a.C. Desde aquel entonces ha sido la tercera ciudad más sagrada para el islam, un período que representa hasta la fecha 1331 años de presencia interrumpida sólo por un siglo de control cristiano durante las Cruzadas. Los judíos no tienen derechos prescriptivos sobre Jerusalén. (…) La creación del Estado de Israel implica la expulsión o la migración de cerca de un millón de árabes. Esta es la injusticia que los árabes no pueden digerir.29 29 La carta completa puede leerse en Davis, 2008: 197-199. 133 Sociedades antiguas 155x215.indb 133 25/6/2021 15:54:17 Estas declaraciones le valieron que fuera considerada como antisionista por Hershel Shanks, fundador de la Sociedad de Arqueología Bíblica, en la prestigiosa revista publicada por esta misma institución, Biblical Archaeology Review. Kenyon, a pesar de esta provocación, la cual sugería además que ella sería anti-semita, decidió no responder30. A lo anterior se sumaron una serie de desavenencias con sus colegas, especialmente con un alumno suyo, Basil Hennessy, quien asistió, por invitación de Mortimer Wheeler, a la ceremonia por la celebración del triunfo israelí, actitud que los distanció para siempre. Desde entonces, Kenyon se mantuvo alejada del trabajo de campo. Sin dudas, tanto sus buenas relaciones con las autoridades jordanas como su posición política la colocaron en una situación incómoda, donde ya no podía mantenerse equidistante. A diferencia de muchos colegas varones, en especial los más jóvenes, escogió no adaptarse a las nuevas circunstancias, denunciando lo que ella consideraba que era una injusticia. Años después, su trabajo en Jerusalén recibió fuertes críticas, apreciaciones que, si bien eran certeras, fueron realizadas con excesiva saña, a diferencia de otras excavaciones anteriores que seguramente merecían un juicio mucho más severo31. También se criticó que el informe completo final de las excavaciones de Jericó nunca fuera publicado, ausencia que por suerte puede ser suplida de manera imperfecta por los dos volúmenes de divulgación que redactó basándose casi exclusivamente en la evidencia de este sitio: Digging Up Jericho (1957) y Archaeology in the Holy Land (1960). Estos libros fueron rápidamente traducidos al español, el primero en 1966 y el segundo en 1963, logrando amplia difusión y cimentando la fama de Jericó como la primera ciudad del mundo. 30 Sobre la relación entre la práctica arqueológica y el discurso sionista, véase una síntesis en Milevski & Gandulla, 2016. 31 Davis, 2008: 205-212; Steiner, 2003. 134 Sociedades antiguas 155x215.indb 134 25/6/2021 15:54:17 C En el ámbito académico, como dijimos, existe casi un pleno consenso de que Jericó no era todavía una ciudad en el Neolítico Precerámico, sino sólo una aldea amurallada32. No obstante, sigue presentándosela como el asentamiento urbano más antiguo del mundo, y es a partir de este carácter que hoy es objeto de disputa. En la actualidad, Jericó ha pasado a convertirse en un símbolo en la lucha por la independencia de los palestinos, otorgándoles una enorme antigüedad que antecede en milenios a cualquier pretensión israelí. Estos últimos, si bien no sienten esa misma ligazón, saben que ocupa un lugar central en el relato bíblico y el cumplimiento de la promesa divina en otorgar esta tierra a los hijos de Israel, promesa que hoy suena con más valor al saber que se trataría, nada más y nada menos, de la ciudad más antigua del mundo. Si bien es poco probable que en estas disputas se recuerde o se mencione la figura de Kenyon, es nuestra obligación, como historiadores, conocer quiénes y de qué manera han contribuido a generar los conocimientos que hoy, independientemente de su voluntad, encuentra estos usos políticos. Es imposible saber qué hubiera sucedido si otra persona era quien excavaba Jericó, pero ha sido ella quien lo hizo, y es esta historia la que aquí hemos intentado recuperar. 32 Liverani, 2014: 230-233 135 Sociedades antiguas 155x215.indb 135 25/6/2021 15:54:17 B BRAIDWOOD, R. J. (1957): “Jericho and Its Setting in Near Eastern History”. En Antiquity, 31, pp. 73-81. CATON-THOMPSON, G. 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