ESTUDIANTE: JAFET SAMIR FLORES COOPER 20181008616
LICENCIADO: ELMER CEVALLOS
CLASE: MERCADOTECNIA 1800 SEGUNDO PERIODO
RESUMEN: CAPITULO 1,2 Y 3
FECHA: JUEVES 15 DE JUNIO
Capítulo 1
El marketing es una disciplina y un conjunto de estrategias que tiene como
objetivo principal comprender, crear y satisfacer las necesidades y deseos de
los consumidores a través de la oferta de productos o servicios. Se trata de un
proceso que implica la planificación, ejecución y control de diversas actividades
con el fin de alcanzar los objetivos de una organización.
El marketing se basa en el análisis del mercado y de los consumidores, así
como en la identificación de oportunidades y la creación de propuestas de valor
únicas que diferencien a una empresa de sus competidores. A través del
marketing, las organizaciones buscan establecer relaciones sólidas y duraderas
con sus clientes, generando valor para ambas partes.
Los deseos son formas de necesidad humana, formadas por la cultura y la
personalidad de un individuo. Un estadounidense necesita comida, pero quiere
un Big Mac, papas fritas y un refresco. Un hombre de Papúa Nueva Guinea
necesita comida, pero lo que quiere: arroz, carne de cerdo y tubérculos como
batatas y batatas. Los deseos están moldeados por la sociedad en la que vive
una persona y se describen en términos de objetos que satisfacen esas
necesidades. Cuando los deseos están respaldados por el poder adquisitivo, se
convierten en necesidades. Con base en sus deseos y recursos, las personas
necesitan productos cuyos beneficios se suman para brindar el mayor valor y
satisfacción.
En sus actividades de marketing, las empresas exitosas se esfuerzan por
aprender y comprender las necesidades, los deseos y los requisitos de los
clientes. Realizan investigaciones de consumo, analizan grandes cantidades de
datos de clientes y observan a los clientes mientras compran e interactúan en
línea o en persona. Sus empleados en todos los niveles, incluida la alta
dirección, mantienen un estrecho contacto con los clientes.
El marketing ocurre cuando las personas deciden satisfacer sus necesidades y
deseos a través de relaciones de intercambio. El intercambio es el acto de
obtener un artículo deseado en manos de alguien y ofrecer algo a cambio. En
términos generales, los especialistas en marketing intentan obtener respuestas
a las ofertas del mercado. La respuesta puede ir más allá de comprar o
intercambiar productos y servicios. Por ejemplo, los candidatos políticos
necesitan votos, las iglesias necesitan feligreses, las orquestas necesitan
audiencias y los grupos de acción social necesitan apoyo para las ideas.
Los conceptos de producción siguen siendo una filosofía útil en algunos casos.
Por ejemplo, el fabricante de PC Lenovo y el fabricante de electrodomésticos
Haier han dominado el mercado chino altamente competitivo y sensible a los
precios a través de bajos costos laborales, producción eficiente y distribución
masiva. Sin embargo, si bien son útiles en algunos casos, los conceptos de
producción pueden conducir a una miopía de marketing. Las empresas que
adoptan esta orientación corren el enorme riesgo de centrarse demasiado en
sus propias operaciones con el objetivo real: satisfacer las necesidades de los
clientes y construir relaciones con ellos.
La calidad y mejora del producto es una parte importante de la mayoría de las
estrategias de marketing. Sin embargo, centrarse solo en los productos de una
empresa también puede conducir a la miopía de marketing. Por ejemplo,
algunos vendedores creen que, si pueden "diseñar una ratonera mejor, todo el
mundo llamará a su puerta", sin embargo, a menudo se sienten profundamente
decepcionados. Los consumidores pueden estar buscando una mejor solución
para sus problemas con los ratones, pero no necesariamente una mejor trampa
para ratones. La mejor solución es probablemente los aerosoles químicos, los
servicios de control de plagas, los consumidores necesitados y convencerlos
de que este es un producto mejor.
Las empresas de marketing exitosas hacen lo que sea necesario para
mantener contentos a los clientes clave. La mayoría de los estudios muestran
que una mayor satisfacción del cliente se traduce en clientes más leales, lo que
a su vez conduce a un mejor desempeño de la empresa. Las empresas
inteligentes deleitan a los clientes prometiendo solo lo que pueden ofrecer y
luego entregando más de lo que prometieron. Los clientes satisfechos no solo
vuelven a comprar, sino que se convierten en socios de marketing.
Una buena gestión de las relaciones con los clientes proporciona satisfacción al
cliente. Los clientes satisfechos, a su vez, se mantienen leales y elogian la
empresa y sus productos frente a los demás. Varios estudios han demostrado
que existen grandes diferencias en la lealtad de los clientes poco, poco y
completamente satisfechos. Incluso una pequeña caída en la satisfacción total
puede conducir a una gran caída en la lealtad. Por lo tanto, el objetivo de CRM
no es solo crear satisfacción, sino acopla los conceptos y estrategias para un
mejor desarrollo.
Una parte importante del marketing es la investigación de mercado, que implica
la recopilación y análisis de datos sobre los consumidores, la competencia, las
tendencias del mercado y otros factores relevantes. Esta investigación
proporciona información clave para la toma de decisiones estratégicas y
tácticas, permitiendo a las empresas comprender mejor a su público objetivo y
tomar acciones fundamentadas.
La estrategia de marketing implica la planificación de las acciones y tácticas
que se implementarán para alcanzar los objetivos de la organización. Esto
incluye la definición de la propuesta de valor única de la empresa, es decir,
cómo se diferenciará de la competencia y qué beneficios ofrecerá a los
clientes. Además, se establecen los objetivos de marketing, que pueden incluir
el aumento de las ventas, la expansión del mercado, la mejora de la fidelidad
de los clientes, entre otros.
El explosivo crecimiento de la tecnología digital ha cambiado de manera
fundamental la forma en que vivimos, es decir, cómo nos comunicamos,
compartimos información, tenemos acceso al entretenimiento y compramos. Se
estima que unos tres mil millones de personas, esto es, el 40 por ciento de la
población mundial, tienen acceso a internet. Casi la mitad de todos los
estadounidenses adultos poseen teléfonos inteligentes; el 50 por ciento de ellos
usan sus teléfonos y otros dispositivos móviles para tener acceso a sitios de
social media. Estas cifras se dispararán como cohetes de la tecnología digital
en el futuro.
Mientras redefinen la relación con el cliente, los especialistas en marketing
también obtienen una nueva comprensión de cómo se relacionan con el
entorno más amplio que los rodea. Hoy en día, casi todas las empresas,
grandes o pequeñas, se ven afectadas de alguna manera por la competencia
global. Una floristería cercana compra flores de un vivero en México, mientras
que un gran fabricante de productos electrónicos de EE. UU. compite en su
mercado local con un gran competidor de Corea del Sur. Un nuevo minorista en
línea recibe pedidos de todo el mundo, mientras que un fabricante de bienes de
consumo de EE. UU. lanza nuevos productos en mercados extranjeros
emergentes
Capítulo 2
Cada empresa debe encontrar el mejor plan de juego para la supervivencia y el
crecimiento a largo plazo en función de sus circunstancias, oportunidades,
objetivos y recursos específicos. Este es el enfoque de la planificación
estratégica, el proceso de desarrollar y mantener un ajuste estratégico entre las
metas y capacidades de una organización y sus cambiantes oportunidades de
marketing.
En la planeación estratégica, la principal actividad de negocios es el análisis de
cartera, un proceso mediante el cual la gerencia evalúa los productos y
negocios que conforman la empresa. La compañía buscará dedicar amplios
recursos a sus negocios más redituables y reducir o eliminar los más débiles.
Además de evaluar los negocios actuales, el diseño de la cartera de negocios
implica encontrar negocios y productos que la compañía debería tomar en
cuenta para el futuro. Las organizaciones necesitan crecer si desean competir
de manera más eficaz, satisfacer a sus inversionistas y atraer a los grandes
talentos. Al mismo tiempo, una empresa debe tener cuidado de no convertir el
crecimiento mismo en un objetivo
El plan estratégico de la compañía establece en qué clases de negocios
participará y cuáles serán sus objetivos para cada negocio. Luego, dentro de
cada unidad de negocios, se realiza una planeación más detallada. Los
principales departamentos funcionales en cada unidad (marketing, finanzas,
contabilidad, compras, operaciones, informática, recursos humanos y otros)
deben trabajar en conjunto para alcanzar los objetivos estratégicos.
El marketing juega un papel clave en la planificación estratégica de una
empresa por varias razones. En primer lugar, el marketing proporciona una
ideología guía para los conceptos de marketing y sugiere que la estrategia de
una empresa debe girar en torno a la construcción de relaciones rentables con
importantes grupos de consumidores. En segundo lugar, el marketing informa a
los planificadores estratégicos ayudándolos a identificar oportunidades de
mercado atractivas y evaluar el potencial de la empresa para beneficiarse de
estas oportunidades. Finalmente, dentro de cada unidad de negocios,
marketing desarrolla estrategias para lograr las metas departamentales. Una
vez que se determinan los objetivos de la unidad, es trabajo de marketing
ayudar a lograr esos objetivos y obtener ganancias.
El plan estratégico de marketing es una herramienta esencial para las
organizaciones, ya que establece la dirección y las metas a largo plazo en
términos de marketing y ventas. Este plan se basa en un análisis exhaustivo
del entorno interno y externo de la empresa, lo que permite identificar
oportunidades y desafíos, y desarrollar estrategias efectivas para lograr los
objetivos establecidos.
Una vez establecidos los objetivos, se desarrollan las estrategias de marketing.
Estas estrategias son los planes generales que guiarán las acciones de
marketing en línea con los objetivos establecidos. Pueden incluir estrategias de
segmentación y posicionamiento, estrategias de diferenciación, estrategias de
expansión geográfica, estrategias de desarrollo de productos, entre otras. Las
estrategias deben ser coherentes y alineadas con la visión y los valores de la
organización.
Se definen las tácticas y acciones específicas para implementar las estrategias
de marketing. Estas tácticas pueden incluir el desarrollo de campañas
publicitarias, la optimización del sitio web, la participación en eventos y ferias
comerciales, la implementación de programas de fidelización de clientes, el uso
de las redes sociales como herramienta de marketing, entre otros. Cada táctica
debe estar alineada con la estrategia general y adaptarse a las necesidades y
características del mercado objetivo.
El plan estratégico de marketing también debe incluir un presupuesto detallado
que refleje los recursos necesarios para implementar las tácticas y acciones
propuestas. Es importante asignar adecuadamente los recursos financieros,
humanos y tecnológicos para lograr los objetivos de marketing de manera
eficiente y efectiva.
Además, es fundamental establecer métricas y sistemas de seguimiento para
evaluar el rendimiento y el impacto de las acciones de marketing. Esto permite
medir el retorno de la inversión y realizar ajustes en el plan según los
resultados obtenidos. Las métricas pueden incluir indicadores clave de
desempeño, como el crecimiento de las ventas, la cuota de mercado, la
satisfacción del cliente y el reconocimiento de marca.
Los mercados se componen de muchos tipos diferentes de clientes, productos
y necesidades. Los especialistas en marketing deben determinar qué
segmentos presentan las mejores oportunidades. Los consumidores se pueden
agrupar y atender de diversas maneras según factores geográficos,
demográficos, psicográficos y de comportamiento. El proceso de dividir un
mercado en diferentes grupos de compradores que tienen diferentes
necesidades, características o comportamientos y pueden requerir productos o
programas de marketing específicos se denomina segmentación del mercado.
Un segmento de mercado es un grupo de consumidores que responden de
manera similar a un conjunto determinado de campañas de marketing. Por
ejemplo, en el mercado automotriz, los clientes que desean el vehículo más
grande y cómodo, independientemente del precio, constituyen un segmento de
mercado. Los clientes preocupados principalmente por el precio y el
rendimiento constituyen otro segmento del mercado. Es difícil hacer un modelo
que se convierta en la primera opción de los consumidores en estos dos
segmentos de mercado. La empresa se ha centrado sabiamente en satisfacer
las diferentes necesidades de los distintos segmentos del mercado.
El posicionamiento de un artículo se refiere a la posición que ocupa en la
mente del consumidor en relación con los productos de la competencia. Los
mercadólogos buscan desarrollar un posicionamiento de mercado único para
sus productos. Si se considera que un artículo es idéntico a todo lo demás en el
mercado, los consumidores no tienen motivos para comprarlo. El
posicionamiento es el arreglo por el cual un producto ocupa un lugar claro,
único y deseable en la mente de los consumidores objetivo en relación con los
productos de la competencia. Los especialistas en marketing planifican
posiciones que diferencien sus productos de las marcas de la competencia y
que les brinden la mayor ventaja estratégica en su mercado objetivo.
La posición de mercado es la posición relativa de una empresa, producto o
marca en el mercado en comparación con sus competidores. Es el lugar que
ocupa en la mente de los consumidores y cómo se percibe en relación con
otros jugadores del mercado. La posición de mercado puede estar determinada
por diversos factores, como la calidad del producto, la percepción de la marca,
el precio, la distribución y la reputación.
La posición de mercado es un aspecto fundamental en el marketing, ya que
afecta directamente el desempeño y la rentabilidad de una empresa. Una
posición sólida y favorable en el mercado puede brindar una ventaja
competitiva significativa, mientras que una posición débil puede resultar en
dificultades para atraer y retener clientes.
El marketing desempeña un papel clave en el establecimiento y el
fortalecimiento de la posición de mercado de una empresa. Al comprender las
necesidades y deseos de los consumidores, el marketing ayuda a diseñar y
ofrecer productos o servicios que satisfagan esas demandas de manera
efectiva.
Capitulo 3
El entorno de marketing de una empresa incluye agentes y fuerzas externas de
marketing que afectan la capacidad de la dirección de marketing para
establecer y mantener relaciones satisfactorias con los clientes objetivo. Al
igual que Microsoft, la empresa está constantemente observando y
adaptándose a las circunstancias cambiantes; incluso, en algunos casos,
liderando el cambio.
El entorno de marketing consta de microentorno y macroentorno. El
microentorno incluye a las partes interesadas cercanas a la empresa que
afectan su capacidad para atender a los clientes: la empresa misma, los
proveedores, los intermediarios de marketing, los mercados de clientes, los
competidores y el público. El macroentorno incluye las fuerzas sociales más
grandes que afectan al microentorno, a saber, las fuerzas demográficas,
económicas, naturales, tecnológicas, políticas y culturales. En primer lugar,
examinaremos el microentorno de la empresa.
La macroeconomía es una rama de la economía que se centra en el estudio de
las variables económicas a nivel agregado, es decir, a nivel de una economía
en su conjunto. Examina fenómenos económicos que afectan a una amplia
gama de actores económicos, como consumidores, empresas, gobiernos y el
sistema financiero. Su objetivo es comprender y analizar los patrones y
tendencias económicas que surgen a partir de las interacciones de estos
actores a nivel nacional o incluso global.
En el contexto del marketing, la macroeconomía desempeña un papel
fundamental al proporcionar una visión general del entorno económico en el
que operan las empresas. Ayuda a los profesionales del marketing a
comprender cómo los factores macroeconómicos pueden influir en el
comportamiento del consumidor, las oportunidades de mercado y las
estrategias de marketing.
Uno de los aspectos clave de la macroeconomía es el estudio del ciclo
económico. Este se refiere a las fluctuaciones periódicas de la actividad
económica en una economía, que incluyen períodos de expansión y
contracción. Comprender la fase en la que se encuentra la economía puede
ayudar a las empresas a ajustar su estrategia de marketing en consecuencia.
Durante períodos de expansión, por ejemplo, las empresas pueden aprovechar
el mayor poder adquisitivo de los consumidores y aumentar su inversión en
publicidad y promoción. Por otro lado, en tiempos de contracción económica,
es posible que las empresas deban ajustar sus precios, reducir costos o
enfocarse en segmentos de mercado más resilientes.
La política monetaria y fiscal también son factores clave de la macroeconomía
que afectan al marketing. La política monetaria se refiere a las decisiones de un
banco central sobre tasas de interés, oferta monetaria y crédito. Estas
decisiones pueden influir en la capacidad de los consumidores para
endeudarse y gastar, así como en la disponibilidad de financiamiento para las
empresas. Por lo tanto, los profesionales del marketing deben tener en cuenta
el entorno crediticio y las tasas de interés al diseñar estrategias de precios,
promociones y financiamiento para sus productos o servicios.
La política fiscal, por su parte, se refiere a las decisiones del gobierno en
relación con los impuestos y el gasto público. Cambios en la política fiscal,
como recortes de impuestos o aumentos del gasto público, pueden tener un
impacto en el poder adquisitivo de los consumidores y en la inversión
empresarial. Los profesionales del marketing deben monitorear las políticas
fiscales y considerar cómo pueden influir en la demanda de sus productos o
servicios.
Además de los factores económicos, la macroeconomía también considera
aspectos demográficos y sociales. El estudio de las tendencias demográficas,
como el envejecimiento de la población, la migración o los cambios en la
estructura familiar, puede ayudar a los profesionales del marketing a identificar
segmentos de mercado emergentes o cambios en las preferencias y
necesidades del consumidor. La macroeconomía también considera factores
sociales, como la distribución del ingreso, las desigualdades socioeconómicas
y las actitudes y comportamientos del consumidor.
El macroentorno en el contexto del marketing se refiere a los factores externos
que influyen en la toma de decisiones de marketing de una empresa y que
están más allá de su control directo. Estos factores macroambientales son
importantes porque pueden tener un impacto significativo en el éxito o fracaso
de una estrategia de marketing.
Uno de los factores clave del macroentorno es la economía. La situación
económica general de un país o región puede tener un impacto significativo en
las actividades de marketing. Durante períodos de crecimiento económico, los
consumidores suelen tener un mayor poder adquisitivo y estar más dispuestos
a gastar en productos y servicios. Esto presenta oportunidades para las
empresas de expandir sus operaciones y aumentar las ventas. Por otro lado,
en tiempos de recesión económica, los consumidores pueden ser más
cautelosos en sus decisiones de compra y restringir su gasto. Esto puede
requerir que las empresas ajusten sus estrategias de marketing, como reducir
precios, enfocarse en ofertas de valor agregado o mejorar la segmentación del
mercado para llegar a consumidores más resistentes a la crisis económica.
Además de la economía, los factores demográficos y sociales también
desempeñan un papel importante en el macroentorno. Los cambios en la
composición demográfica, como el envejecimiento de la población, el
crecimiento de la clase media o los cambios en los patrones de migración,
pueden tener un impacto significativo en los hábitos de consumo y las
preferencias del mercado. Las empresas deben estar atentas a estos cambios
demográficos y adaptar sus estrategias de marketing en consecuencia. Esto
puede incluir la personalización de productos y servicios para segmentos
específicos de la población o la adopción de enfoques de marketing
multicultural para atender a una base de consumidores diversa.
El macroentorno también incluye factores tecnológicos. Los avances
tecnológicos rápidos y constantes están transformando la forma en que las
empresas operan y se relacionan con los consumidores. La adopción de
tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, el aprendizaje
automático, el internet de las cosas y la realidad virtual, ha abierto nuevas
oportunidades para el marketing. Las empresas pueden utilizar estas
tecnologías para mejorar la personalización, optimizar las experiencias del
cliente, recopilar datos relevantes y mejorar la eficiencia operativa. Sin
embargo, también implica desafíos, ya que las empresas deben mantenerse
actualizadas con las últimas tendencias tecnológicas y asegurarse de que sus
estrategias de marketing estén alineadas con estas innovaciones.