Clase N°5 – El poder divino para servir
“El bautismo del Espíritu Santo”
1) El bautismo en el Espíritu Santo ‐ Sus propósitos
a) Nos da fortaleza para ser testigos fieles de Cristo.
“Recibiréis poder…y me seréis testigos” (Hechos 1:8).
“Fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban con denuedo (valor) la Palabra de
Dios” (Hechos 4:31). La timidez, el desánimo, el temor, son vencidos por este gran
poder.
b) Nos da poder para cumplir con la comisión de Cristo.
Jesús nos envía a predicar a un mundo muy conflictuado, donde reina el pecado y
toda corrupción, donde hay enfermos, donde hay personas oprimidas por el diablo.
¿Cómo enfrentarnos a un mundo así? Con el poder del Espíritu Santo. Jesús dijo a sus
discípulos que antes de empezar la tarea esperasen ser “investidos de poder desde lo
alto” (Lucas 24:47‐49) y nos prometió que de esta manera nosotros podríamos hacer
mayores obras aún de las que Él hizo (Juan 14:12).
c) Nos da protección personal
Frente al enemigo. El diablo huye de un cristiano lleno del Espíritu Santo y que
está en comunión con Dios.
Frente al pecado. La llenura del Espíritu Santo es como un manantial
desbordante que no permite que la basura entre a nuestro corazón, ni se
deposite en él.
d) Es una puerta de acceso a riquezas espirituales insospechadas.
Al recibir el bautismo en el Espíritu Santo se abre ante nosotros una vida espiritual
completamente nueva, la vida “en el Espíritu” se torna realidad, y vemos como Dios
nos capacita para hacer su obra con los dones del Espíritu Santo, que son las
herramientas espirituales que Dios nos da para cumplir nuestra función específica en
este mundo.
2) El bautismo en el Espíritu Santo ‐ Su naturaleza
En la Palabra de Dios se compara el bautismo en aguas con el bautismo en el Espíritu
Santo (Ver Mateo 3:11, Hechos 1:5). Ahora bien, ¿en qué sentido los podemos
comparar? : La palabra “bautismo” en su etimología lleva el sentido de estar
completamente cubierto, ser sumergido, mientras en el bautismo en aguas somos
cubiertos por las aguas, en el bautismo en el Espíritu somos cubiertos, sumergidos en el
Espíritu Santo de Dios.
Leamos el capítulo 2 del libro de los Hechos y apreciaremos otros detalles acerca de esta
experiencia:
a) Manifestaciones sobrenaturales (Hechos 2:2‐4).
b) Participación humana en el evento, con manifestaciones externas (hablar en lenguas,
ser conmovidos). Ver Hechos 2:5‐13.
c) Resultados poderosos (3000 almas a Cristo). Ver Hechos 2:14‐47.
3) El bautismo en el Espíritu Santo ‐ Su recepción
Tres importantes condiciones para recibirlo:
a) Arrepentimiento: Antes que nuestro vaso sea lleno con “el agua de vida”, debe
hallarse limpio de todo pecado mediante el arrepentimiento y el perdón de Dios
(Hechos 2:38).
b) Fe: Leamos Hechos 2:39, ¡debemos tener fe en esta promesa!
Debes creer que es para ti
Debes creer que si lo pides, lo recibirás (Lucas 11:13)
Debes asumir una actitud de expectativa
Debes esperar en actitud de alabanza (Lucas 24:52‐53).
c) Sumisión: Todo tu ser rendido al Señor.
4) El bautismo en el Espíritu Santo ‐ La evidencia inicial
Se denomina “lenguas” a un idioma celestial que Dios nos concede al recibir esta
experiencia. Vemos que así ocurrió en los siguientes pasajes de las Escrituras: Hechos
2:4, Hechos 10:44‐46, Hechos 19:6. Esta evidencia externa convence al hombre y a los
que lo rodean que esta experiencia sobrenatural ha acontecido.
5) Las evidencias de una vida llena del Espíritu Santo
Una vida rebosante: Vivimos solo dedicándonos al Señor (Ef 5:19), compartiendo
el agua de vida (Jn 7:37‐38) y somos un manantial que salpica al mundo con el
testimonio de Cristo.
Un Espíritu de agradecimiento (Ef 5:20)
Sumisión con humildad (Mt 11:29 y Ro 12:10).
Obediencia al Espíritu Santo
Consagración cada día
El fruto del Espíritu manifestado: Jesús va imprimiendo su carácter en nuestras
vidas. Ver Gálatas 5:22‐23.
Año 2014
Iglesia “Rey de Reyes”
Pastores Claudio y Betty Freidzon
