Sois Mason
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Frater CattusSois Mason
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Frater CattusSOIS MASN?
Solo recordaba aquel fuerte dolor en el pecho.
Cmo llegue aqu?. El ambiente era familiar, yo ya estuve aqu una vez
pero cuando? Caminaba sin rumbo.
Personas desconocidas pasaban a mi lado, pero no tenia el coraje para hablar con ellas.
Esper, y me pregunte: qu grupo es aquel reunido con trajes negros?
Lgico! Estar yendo o viniendo de un entierro. No, claro son Hermanos!
Me aproxim al grupo. Al verme llegar, interrumpieron su dilogo.
Discretamente me identiqu como Maestro Masn, obteniendo respuesta.
La alegra fue inmediata. Estaba entre Hermanos! Me identique con mi nombre y
grado. Pregunt ansioso lo que estaba sucediendo conmigo.
Me respondieron con mucha suavidad y fraternalmente: Haba muerto
Me asust mucho y mi familia? mis amigos? como estn?.
Estn bien, estn siendo atendidos por la Orden, no se preocupe a su debido tiempo
los ver, me respondieron.
Todava asustado, pregunt el motivo de sus vestimentas.
Estamos camino a nuestro Templo, fue la respuesta.
Templo? Mis HH.. tienen uno? S Por qu no?
Me sent mas tranquilo, yo soy un Gran Inspector General de la Orden y con seguridad
recibir los honores debidos a mi posicin.
Ped poderlos acompaar, y as fue. Despus de una pequea caminada vi el Templo.
Coneso que me qued admirado por su gran belleza.
Las columnas de la entrada, majestuosas. Nunca antes haba visto nada igual. Imagine
como debera ser su interior y como me sentira al participar en sus trabajos.
Caminamos en silencio, al llegar a los pasos perdidos me encontr con Hermanos
hablando animadamente, pero en un tono respetuoso.
Uno de ellos, el que me acompaaba, llam al que estaba frente de el.
Hermano Experto! acompae al Hermano recin llegado y con l espere en la antesala
de los pasos perdidos.
No entend bien? Yo haba mostrado mis credenciales y no era ese el tratamiento que
se me debera dar. Esper unos instantes, seguro de que me preparaban una recepcin ms fraternal. Con certeza estn preparando alguna ceremonia especial para mi
entrada; en realidad un grado 33 no podra esperar nada diferente.
Veriqu que los Hermanos que haban quedado en el atrio, en silencio, estaban formando un cortejo para la entrada en el Templo.
Por la distancia no consegu escuchar lo que los Hermanos decan?
Un rayo de luminosidad los invadi a todos.
Entraron silenciosamente en el Templo. Junto a mi se qued el hermano Experto. De
tanta emocin no consegua decir palabra.
El tiempo pas no se cuanto tiempo. Finalmente la puerta del Templo se abri y sali
el Hermano Maestro de Ceremonias, se dirigi a mi y me comunic que sera recibido
y. Ajust el mandil e hinch mi pecho.
Comprob que mi collar y las medallas estuvieran en orden y lo acompa.
Estaba un poco intranquilo: quin no lo estara en estas circunstancias?
Respir profundamente y entr ritualmente al Templo. Extrao esperaba encontrar
lujo y esplendor, mucha riqueza. Comprob, de inmediato, una simplicidad enorme.
Una luz brillante, que no se de donde vena, iluminaba todo el ambiente.
Salud al Venerable Maestro y a los vigilantes en la forma acostumbrada.
Nadie se levanto por mi entrada. Ninguna batera acompa mi caminar.
Todos se mantenan silenciosos y en actitud respetuosa.
Realmente no saba que hacer era todo diferente para mi. Esperaba instrucciones
y por n ellas vinieron con la voz rme del Venerable Maestro: Sois Masn?
Reconociendo la necesidad de la comprobacin en tales circunstancias respond: Mis
HH.. me reconocen como tal.
Sonre para mis adentros mientras esperaba tranquilamente la siguiente pregunta y el
momento adecuado para demostrar mis conocimientos y desenvoltura. Pero, el Venerable Maestro dirigindose a los presentes, pregunt: Los Hermanos aqu presentes
lo reconocen como Masn?.
El silencio fue total. Me asuste qu era esto? porqu tal pregunta?
Esto con certeza no era parte del Ritual.
Dirigindose a mi, el Venerable Maestro respondi:
Mi querido Hermano visitante, los Hermanos aqu presentes no lo reconocen como
Masn.
Cmo no? Dije. No ven mis insignias? mis diplomas? mis medallas? no vericaron
mis documentos? Interrguenme!.
Si querido Hermano, respondi solemnemente el Venerable Maestro. Mas por el hecho facto de haber ingresado a la Orden, tener diplomas, ostentar insignias y medallas,
no basta para ser reconocido masn. Es preciso antes que nada haber construido su
Templo Interior y vericamos que esto no ocurri con el Hermano.
Observamos, que a pesar de haber tenido todas las oportunidades de estudio y de
haber llegado al mayor de los Grados, no has realizado ningn progreso personal. Su
paso por el arte Real fue efmero.
No consegu aguantar ms y respond: Cmo efmero?.
Ustedes, que todo lo saben, no observaron mis actitudes fraternas?.
El V..M.. me interrumpi: Hermanos veamos entonces su defensa:
De inmediato enfoc una pantalla como de televisin y en la imagen me reconoc junto
a un grupo de Hermanos haciendo comentarios humillantes contra otros Hermanos,
burlndome con la presencia de los aprendices, contando chistes en el atrio, conversando y desatentos durante los trabajos, intolerante con los Hermanos, haciendo
gestos para llamar la atencin de mi presencia en Logia
Era verdad! Me dio vergenza trat de justicarme, pero no encontraba argumentos
para mi defensa. Record entonces mis acciones bencas y habl de ellas. Mudando
la imagen como se mudan en la Televisin, me vi colocando la mano vaca en el Tronco
de la Viuda.
Era verdad y por costumbre lo hacia as, por pensar que el bolo no sera bien utilizadoPensaba que yo le dara mejor destino, pero, por desgracia, nunca lo haciaMe
vi en las visitas a los Hermanos enfermos y comprend que era ms por obligacin que
por fraternidad.
Me qued en silencio y lgrimas de arrepentimiento nacieron de mis ojos.
Instintivamente comenc a retirarme triste. Par al or la voz autoritaria y al mismo
tiempo fraterna del Venerable Maestro:
Mi Hermano, reconocemos las debilidades de todo el mundo y en la Masonera, con
todo, reconocemos tambin que el Hermano fue iniciado en nuestros Augustos Misterios.
Prometemos a sus iniciados protegerlos y lo haremos.
El Hermano tendr la oportunidad de enmendar sus errores, todos los aqu
presentes ya los cometimos alguna vez.
Reljese ahora.
Tmese el tiempo necesario y, al volver a hablar de este tema, venga con nuevas experiencias, nosotros lo encaminaremos nuevamente en el camino correcto de la Orden
Masnica. Su nuevo caminar ser seguramente mas promisorio y til.
Sal decepcionado ms extraamente aliviado. Aquellas palabras parecen haberme
tirado un gran peso de encima. Con seguridad, all yo desbastara parte de mi Piedra
Bruta. Estaba saliendo ritualmente, y, cuando pas entre columnasdespert.
Despert sobresaltado y mojado de sudor. Mi corazn estaba muy agitado.
Me levant asustado, ms bien con cierta alegra en el pecho. Haba soado!.
Me dirig al guardarropas. Mi traje negro y mis guantes blancos all se encontraban. Rpidamente retire de la chaqueta las medallas y insignias, junto a los diplomas, algunos
sin mrito, y los guard en una caja bien en el fondo donde nadie los pudiese ver.
Todava emocionado y con los ojos llenos de lgrimas, me dirig a mi mesa de trabajo
y con las manos temblorosas y lleno de una alegra enaltecedora, retire mi Ritual de
Aprendiz masn y comenc a leerlo.
Autor Desconocido.
CUALQUIER SEMEJANZA CON ALGUN HERMANO QUE CONOZCAMOS, QUE HAY MUCHOS, ES PURA COINCIDENCIA
