Miradas Alternativas
Miradas Alternativas
La educación argentina es una de las más avanzadas y reconocidas de América Latina. Está
gestionada por el gobierno nacional, las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que
son los responsables de garantizar el acceso a la educación en todos los niveles y modalidades.
Objetivos Generales.
a) Principios generales
El sistema educativo ha de ser flexible, articulado, equitativo, abierto, prospectivo y orientado a
satisfacer las necesidades nacionales y la diversidad regional.
b) Derecho a aprender.
El sistema educativo asegurará a todos los habitantes del país el ejercicio efectivo de su derecho a
aprender, mediante la igualdad de oportunidades y posibilidades, sin discriminación alguna.
c) Gratuidad y asistencialidad.
El Estado Nacional, las provincias y la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires se obligan
mediante la asignación en los respectivos presupuestos educativos a garantizar el principio de
gratuidad en los servicios estatales, en todos los niveles y regímenes especiales.
El Estado Nacional realizará el aporte financiero principal al sistema universitario estatal para
asegurar que ese servicio se preste a todos los habitantes que lo requieran. Las Universidades
podrán disponer de otras fuentes complementarias de financiamiento sobre la base de los principios
de gratuidad y equidad.
El Estado Nacional, las provincias y la MCBA establecerán un sistema de becas para alumnos/as en
condiciones socio-económicas desfavorables, que cursen ciclos y/o niveles posteriores a la
Educación General Básica y obligatoria, las que se basarán en el rendimiento académico.
El Estado Nacional, las provincias y la MCBA se obligan a:
a) Garantizar a todos los alumnos/as el cumplimiento de obligatoriedad que determina la presente
ley, ampliando la oferta de servicios e implementando, con criterio solidario, en concertación con los
organismos de acción social estatales y privados, cooperadoras, cooperativas y otras asociaciones
intermedias, programas asistenciales de salud, alimentación, vestido, material de estudio y
transporte para los niños/as y adolescentes de los sectores sociales más desfavorecidos. En todos
los casos los organismos estatales y privados integrarán sus esfuerzos, a fin de lograr la
optimización de los recursos, y se adoptarán acciones específicas para las personas que no
ingresan al sistema, para las que lo abandonan y para las repitentes.
b) Organizar planes asistenciales específicos para los niños/as atendidos por la Educación Inicial
pertenecientes a familias con necesidades básicas insatisfechas, en concertación con organismos de
acción social estatales y privados.
c) Organizar planes asistenciales específicos para los niños/as atendidos por la Educación Especial
pertenecientes a familias con necesidades básicas insatisfechas desde la etapa de estimulación
temprana en concertación con los organismos estatales y privados que correspondan.
Los planes y programas de salud y alimentación que se desarrollen en el ámbito escolar estarán
orientados al conjunto de los alumnos/as.
La educación es obligatoria desde los cuatro hasta los 18 años y gratuita en los centros públicos en
todos los niveles hasta los grados universitarios. Los posgrados ya son de pago y los centros
privados a cualquier nivel también, pero a veces tienen convenios con la administración para reducir
los costes.
La diferencia entre las universidades y los institutos universitarios es que estos últimos ofrecen
carreras orientadas a un único campo del conocimiento, mientras que las universidades están
divididas en facultades, lo que les permite brindar carreras de distintas áreas del conocimiento.
Educación preprimaria
Son objetivos fundamentales de la educación preescolar:
Garantizar el desarrollo integral de los niños en el orden físico, intelectual, moral y estético.
Proporcionar una formación adecuada para el futuro aprendizaje escolar.
La educación preescolar consta en tres componentes principales:
Circulo infantil, institución prescolar que atiende a niños desde los 6 meses hasta los
6 años de edad.
Grado preescolar, destinado a cinco años, que puede estar indistintamente
involucrado en un circulo infantil, o una escuela primaria.
Vías no formales de la educación preescolar, para los niños que no asisten a las
instituciones oficiales, mediante el concurso de los padres o de la comunidad
La educación primaria:
Constituye la base de la educación general. Tiene una duración de seis grados, de 1ro a 6to
grado, divididos en dos ciclos:
Un primer ciclo de 1to a 4to grados, con carácter propedéutico, en el que se incluyen
elementos esenciales de la lengua española y matemáticas como base para el
desarrollo de habilidades indispensables para el aprendizaje. Se complementa con las
nociones elementales que el niño recibe acerca de la naturaleza y la sociedad y las
actividades que este realiza de educación física, laboral y estética que contribuyen a su
formación integral.
Un segundo ciclo de 5to a 6to, Como etapa de culminación de la educación primaria y
que sirve de tránsito entre el primer ciclo y la enseñanza media básica , donde se
continua con el desarrollo de habilidades iniciado en el ciclo anterior , adquiriendo una
mayor prioridad las relacionadas con el desarrollo con las habilidades intelectuales
generales y para el trabajo docente.
Los niveles primario y medio con doce años en total, se articulan asi para que cada
escolar pueda realizar sus estudios en forma ininterrumpida hasta alcanzar la
educación completa o su equivalente.
En 1995 comenzó la nueva aplicación curricular que pretende alcanzar los siguientes
objetivos:
Preservar la presente estructura educacional mientras mejoran los vínculos entre los
ciclos y niveles, como también realizar los conceptos y su relación con las asignaturas.
Mejorar la formulación de metas de las diferentes asignaturas y niveles.
Dirigirla formación de los estudiantes hacia aspectos cotidianos de la vida cotidiana.
Adecuar al máximo la programación de acuerdo a las edades y características de los
estudiantes.
Mejorar la organización del primer ciclo y la transición del profesor y sus alumnos a
través de los diferentes niveles.
Disminuir a cantidad de la totalidad de los programas y centrarlos en contenidos
fundamentales; además de reducir el número de asignaturas por año académico.
Para satisfacer los objetivos antes planteados, en las clases de primer ciclo, tienen lugar
actividades lúdicas y la duración de algunas clases es reducida a 30 minutos. En la
asignatura de lengua se busca el desarrollo de la expresión oral y escrita y en aritmética el
cálculo, en la nueva asignatura “El mundo en que vivimos” se imparte conocimiento sobre e
entorno natural. En el segundo ciclo, el objetivo radica en el desarrollo de las habilidades
intelectuales, y se tratan asignaturas como ciencias naturales, historia y geografía de Cuba,
etc.
Educación secundaria:
La educación general media, está constituida por dos niveles secundaria básica o ciclo medio ( de
séptimo a noveno grado), y preuniversitario o ciclo medio superior ( de decimo grado).
La secundaria básica forma parte de la educación obligatoria, los cursan alumnos de entre los 12 a
15 años de edad. El segundo nivel de la educación general media es la enseñanza preuniversitaria
con tres grados ( de 15 a 18 años que no son obligatorios pero si gratuitos).
En el preuniversitario se amplían y profundizan los conocimientos adquiridos en la secundaria
básica y se perfeccionan y enriquecen las capacidades y habilidades para la incorporación a la
educación superior, a centros de enseñanza técnica y profesional, o a la incorporación social.
Enseñanza superior:
El ministerio de educación superior es el órgano que ejerce la dirección metodológica, técnico
docente y administrativo de las universidades, institutos y centros de educación superior (CES),
entre sus funciones cabe señalar:
Ejercer la dirección metodológica, técnico - docente, administrativa de las universidades,
institutos y otros centros de educación superior, directamente subordinados al mismo, y dirigir
metodológicamente a los centros que se subordinan a otros organismos.
Establecer los planes nacionales del desarrollo de la educación superior, y de la educación de
posgrado, aprobar las líneas de investigación de educación superior, en coordinación con la
Academia de Ciencias de Cuba, y proponer al Gobierno la creación y desactivación de los
centros de educación superior.
Establecer los principios generales para la organización y dirección docente metodológica y
científico-investigativa, asi como la aprobación de los planes de estudios de todos los centros
de educación superior del país, y, en su caso, de los programas correspondientes.
Dirigir y controlar la formación de los especialistas de nivel superior que reclama el desarrollo
económico -social del país, acorde con las crecientes exigencias de la cultura, la ciencia y la
técnica.
La comprensión de los derechos y responsabilidades individuales, así como los de los ciudadanos,
el Estado y otros grupos comunitarios.
Respetar la dignidad del ser humano y las libertades fundamentales.
Fortalecer la unidad nacional y la solidaridad internacional.
El desarrollo integral de la personalidad humana y su participación para conseguir el bien común.
Preparar a las personas y a la sociedad para dominar los recursos científicos y tecnológicos, que les
permitan utilizar las posibilidades existentes para facilitar el bienestar común.
La protección, difusión y expansión del patrimonio cultural.
Condenar cualquier trato desigual que resulte de una creencia filosófica, política o religiosa, así
como las clases sociales o prejuicios raciales.
Naturalmente, estas metas y objetivos se aplican según el grado de madurez y edad de los alumnos.
Como resultado, la legislación actual define objetivos distintos para los diversos grados educativos.
La educación es obligatoria para todos los niños en edades comprendidas entre seis y catorce años
y gratuita en todas las instituciones públicas, incluso las instituciones de adultos, para aquellos que
no tuvieron acceso a la escuela durante la edad apropiada. La Constitución no establece
expresamente límites de edad, sino que determina que "la educación es obligatoria, cuyo objetivo es
proporcionar la estructura necesaria para el desarrollo del potencial de los alumnos como un
elemento de satisfacción propia, de formación para el trabajo, y de ejercicio consciente de
ciudadanía".
La educación intermedia, también conocida como la educación secundaria superior, también es
gratuita en todas las escuelas públicas, aunque no es obligatoria. Este nivel de educación tiene por
objeto el pleno desarrollo de los adolescentes, así como los elementos que constituyen el objetivo de
la educación fundamental, y la formación para el empleo, en función de la elección / enfoque
específico de cada institución educativa.
En cuanto a la educación superior, el sistema vigente tiene por objeto el desarrollo de las ciencias,
las artes, la capacitación de profesionales en el ámbito universitario, la investigación y la
especialización. La educación superior también es gratuita para los estudiantes en las escuelas y
universidades públicas de Brasil.
El sistema educativo de Brasil: Estructura
El sistema educativo en Brasil se divide entre 5 niveles o etapas distintas: la educación pre-primaria
o preescolar, educación primaria, educación secundaria, educación secundaria superior y la
educación terciaria o superior. De estos cinco niveles, sólo la educación primaria y la educación
secundaria son obligatorias.
Educación Pre-escolar
La educación preescolar en Brasil, conocido localmente como Educação Infantil, es totalmente
opcional. El sistema ofrece a los padres dos opciones: Maternal o guarderías de publicas para niños
de 2-5 años de edad, y Jardim, para niños de tres a seis años de edad.
La única diferencia clave entre Maternal y el Jardim es que el primero es básicamente un grupo de
juego, donde los niños aprenden a socializar colectivamente en un ambiente muy informal. Jardim,
por otro lado, tiene un enfoque más académico para los niños pequeños.
Para determinar la mejor opción para un niño en edad preescolar, las escuelas brasileñas se reúnen
con los padres y el niño antes de la inscripción y, en función de las habilidades académicas y
sociales del niño, la escuela aconseja a los padres donde creen que el niño tendrá más éxito. Todos
los centros preescolares y guarderías estatales son gratuitos para todos los padres,
independientemente de su nivel de ingresos.
La escolarización obligatoria: Educación primaria y primer ciclo de secundaria
La escolarización es obligatoria en Brasil para todos los niños en edades comprendidas entre seis y
catorce años. Los niños menores de seis años pueden inscribirse en el nivel primario de educación,
siempre y cuando cumplan seis años en el primer semestre.
El periodo de escolarización obligatoria, de ocho años, se conoce como Educación Fundamental,
o Ensino Fundamental. Se divide en dos etapas distintas de cuatro años:
El plan de estudios básico en las dos etapas de la educación fundamental es fijado por el Consejo
Nacional de Educación e implementado a nivel local. Los alumnos en la primera etapa de la
Educación Fundamental reciben la enseñanza de un solo maestro, mientras que los del segundo
nivel tienen tantos maestros cada día como materias.
Estudiantes brasileños
Las tareas de los estudiantes en la escuela intermedia están esencialmente diseñadas para
prepararlos para la admisión a la universidad (generalmente pública). Los cursos se imparten, ya sea
en la escuela privada a la que los estudiantes han estado asistiendo, o en centros concretos donde
se prepara a los adolescentes para las pruebas de acceso a universidades concretas, unas pruebas
establecidas por dicha universidad. Los estudiantes también pueden optar por la formación
profesional cursándola al mismo tiempo que sus estudios académicos; una formación que les
ayudará a prepararse para un oficio o carrera específica.
Educación Especial
La educación especial en Brasil se ofrece desde la preescolar hasta el nivel secundario superior. El
Ministerio de Educación, el estado, algunas secretarías municipales, así como organizaciones no
gubernamentales (normalmente las iglesias y otras organizaciones sin fines de lucro) son fuentes de
apoyo para los programas de educación especial. Dependiendo del tipo de programa, la escuela o
institución pueden incluir centros de rehabilitación, clínicas, hospitales y más. Según las últimas
estadísticas, el 63 por ciento de la población de educación especial en Brasil sufre algún tipo de
retraso mental (retrasos de aprendizaje, etc.), el 15 por ciento sufre problemas de audición, el 9 por
ciento son discapacitados físicos, y el 5 por ciento tiene deficiencias visuales. Hay muchos
programas existentes en Brasil diseñados para ayudar a la población de educación especial, donde
existe un interés creciente en ayudar a los estudiantes ciegos o con visión insuficiente a aumenta su
rendimiento académico, a una edad temprana, con el fin de que alcancen su máximo potencial.
Educación para adultos
La educación para adultos en Brasil, como otros países, se considera la educación correctiva. La
edad mínima para el ingreso en la escuela de adultos de Brasil es de 18 años para el nivel de
primaria y 21 años de edad para el nivel secundario. El Ministerio de Educación de Brasil y las
secretarías estatales dan apoyo a la educación de adultos a través de cursos especiales,
equivalentes al GED de Estados Unidos, que se pueden tomar en las escuelas o a través de un
formato en línea. La supervisión está a cargo de las Juntas Estatales de Educación y los servicios de
inspección. A los estudiantes que finalizan con éxito el programa completo de la educación para
adultos se les otorga un diploma que indica la finalización satisfactoria de todos los cursos.
Educación a Distancia
Un mayor acceso a Internet ha hecho que la educación a distancia sea cada vez más popular en
Brasil, sobre todo para aquellos que tienen acceso limitado a la educación tradicional. A principios
del siglo XXI, el gobierno federal brasileño creó la Secretaria de Educação a Distancia o SEED
(Secretaría de Educación a Distancia). La formación de este liderazgo es un claro ejemplo del
compromiso del gobierno con la modernización de la educación. SEED estratégicamente aplica
nuevas tecnologías y metodologías con el fin de diversificar y elevar el nivel de la calidad educativa.
La televisión en Brasil es un importante vehículo para la Educación a Distancia. El aprendizaje a
distancia se realiza con la ayuda de la TV Escuela (Escuela TV), que llega a más de 60.000
escuelas de todo el país. Se transmite en un canal especial por satélite y proporciona horas de
programación que se repiten cuatro veces al día. TV Escola también es un programa diseñado para
los maestros y se actualiza por la Reforma do Ensino Médio o REM (Reforma de la Educación
Secundaria). Fue creado en octubre de 1999 como un programa experimental y ha resultado ser una
de las herramientas más eficaces que el Ministerio de Educación tiene para la actualización de los
métodos y recursos de los docentes de nivel primario y secundario.
El sistema educativo de Brasil: La educación superior
La tradición de la educación superior en Brasil se remonta a mediados del siglo XVIII con la
fundación de colegios jesuitas y a principios del siglo XIX con la fundación de las primeras escuelas
profesionales. Hoy Brasil tiene decenas de universidades de primera categoría, dos de las cuales
fueron incluidas en el Ranking Académico Mundial de Universidades de 2010 (Universidad de Sao
Paulo y la Universidad de Campinas).
Estructura de la Educación Superior
El sistema de educación superior en Brasil consiste en las escuelas públicas y privadas, este último
realizado por organizaciones con y sin fines de lucro. El último censo de Brasil enumeró 1.900
instituciones de educación superior, de las cuales 163 eran universidades. Casi la mitad de estas
universidades son públicas, aunque el 70 por ciento del mercado total de la educación superior es
privado, pues el número de instituciones privadas se ha incrementado en los últimos años con el fin
de mantener el ritmo de la demanda de educación superior y de formación profesional. La admisión
a las universidades públicas de Brasil es extremadamente competitiva, dado el hecho de que los
estudiantes no pagan las cuotas de admisión y debido a la percepción del público de mayor calidad
de la enseñanza en estas universidades. Las universidades públicas sobresalen en las ciencias
agrarias y humanas, como son la medicina, la formación del profesorado y la psicología, mientras
que las instituciones privadas se distinguen por las ciencias sociales aplicadas, como la legislación,
la administración y la economía.
Instituciones de Educación Superior
El sistema de educación superior en Brasil está compuesto por tres tipos de instituciones:
Universidades, Federações de Escolas y Faculdades.
Universidades son instituciones multidisciplinarias que deben incluir la capacitación del personal
profesional en la educación superior, la investigación y la creación del conocimiento humano.
Aproximadamente el 35 por ciento de los instructores en Universidades deben tener una maestría o
un doctorado. Las universidades son más autónomas, con la capacidad independiente para abrir
nuevos programas de estudio y establecer el número de alumnos matriculados.
Federações de Escolas también son instituciones multidisciplinares, pero no tienen el mismo número
de disciplinas como las Universidades. Son algo menos autónomas en sus ofertas de cursos y
colocación del estudiante, y no están obligadas a invertir en la investigación, como lo están las
Universidades.
Facultades, aunque son casi tan autónomas como las Federações de Escolas, estas instituciones
por lo general sólo se especializan en una o dos disciplinas, como el derecho o empresariales.
Mientras que los centros privados de educación superior tienen la capacidad de determinar sus
propios niveles de dotación de personal y tomar decisiones respecto al mismo, no así en las
instituciones públicas donde todas las decisiones de recursos humanos están vinculadas a la función
pública y a las normas del sector público respecto a la remuneración y las condiciones de trabajo. El
nombramiento de un presidente o rector de la Universidad, sin embargo, es una decisión otorgado a
la institución y por lo general se decide con una considerable participación del profesorado.
La propuesta pedagógica/curricular del actual gobierno se llama “nueva escuela mexicana” (NEM).
El secretario de educación, Esteban Moctezuma, presentó a la NEM como un modelo que ofrecerá:
“una educación humanista, integral y para la vida, que no solo enseñe asignaturas tradicionales, sino
que considere el aprendizaje de una cultura de paz, activación física, deporte escolar, arte, música y,
fundamentalmente, civismo e inclusión”.
Los planteamientos más prácticos sobre la NEM fueron comentados por el subsecretario de
educación Gilberto Guevara Niebla quién sugirió que: “la estrategia será aumentar las escuelas de
tiempo completo; instrumentar un mecanismo para entregar de manera directa los recursos de la
SEP a las escuelas; dotarlas con servicios de cocina, comedor y alimentación en las zonas más
pobres; y asegurar que tengan infraestructura digna, con energía eléctrica, agua potable, baños
limpios, y conexión a internet.”
En un artículo reciente Eduardo Andrade —actual Director General de Profesiones de la Secretaría
de Educación Pública— escribió que la NEM será un modelo que se alineará a los cambios
realizados al artículo 3ero constitucional y que por ello: tendrá una visión regionalizada, que tome en
cuenta las realidades económicas, geográficas, sociales y culturales de las diferentes zonas del
país. Añade que incluirá, y enfatiza, por primera vez la perspectiva de género en los planes y
programas de estudio. En la NEM se tendrán contenidos para las ciencias y las humanidades con
orientación a: “la enseñanza de las matemáticas, la lecto-escritura, la literacidad, la historia, la
geografía, el civismo, la filosofía, la tecnología, la innovación, las lenguas indígenas de nuestro país,
las lenguas extranjeras, la educación física, el deporte, las artes, la música, la promoción de estilos
de vida saludables, la educación sexual y reproductiva y el cuidado al medio ambiente, entre otras.”
A pesar de la información antes mencionada, hasta el momento no se conocen detalles puntuales y
de fondo acerca del planteamiento curricular y/o pedagógico que sustenta la NEM y con el que se
acompañará a los maestros para promover el cambio en el aula. En mi opinión, los planteamientos
hasta el momento parecen más una lista de buenos deseos que una política educativa clara y que
cuente con estrategias puntuales a llevar a cabo para su ejecución.
Puntos de acierto de lo que conocemos de la NEM, así como aspectos que debieran ser
considerados para apoyar que el cambio llegue a las aulas.
Puntos de acierto:
1. Comenzar temprano. En México la política pública es más una política sexenal que una política de
Estado. Por ello, uno de los mayores desatinos de la reforma peñista fue dejar para el último la
instauración del nuevo modelo educativo, sabiendo que los cambios en educación llevan tiempo y
que existía una alta probabilidad de cambio de partido en el poder. El gobierno actual, al arrancar
desde los primeros meses con propuestas en materia educativa, abre la oportunidad de arranque
oportuno, así como la posibilidad para un proceso de monitoreo de avances que luego sirvan para
justificar (o no) la continuidad del modelo para futuros gobiernos.
2. Valorar el trabajo docente y por ello contar con apoyo de los maestros. La gran campaña
educativa de esta administración se ha basado en puntualizar que los maestros fueron lastimados
por el gobierno anterior. Así, la transformación se propone a partir de mirar al maestro no como “el”
problema sino como la solución o “el instrumento” para el cambio. Con ello, se construyeron alianzas
políticas con el sindicato de maestros que se espera podrán apuntalar el apoyo para la
implementación de la propuesta educativa.
Puntos a considerar:
1. Clarificar qué modelo pedagógico sustentan los cambios propuestos. Los maestros han sido
formados como profesionales de la educación. Si queremos comprendan qué tipo de modelo de
enseñanza habrá de utilizarse para la NEM, éste deberá ser explícito y específico. De lo contrario,
los maestros continuarán trabajando de la forma en la que hacen, pues no habrá claridad en cómo
es que habrá de enseñarse el contenido de los nuevos libros de texto (ello asumiendo que habrá
libros de texto nuevos).
2. La instrumentación de la NEM requiere más que libros de texto nuevos. Aunado a los puntos
mencionados como aciertos, se debe comenzar a trabajar para que los maestros, los asesores
técnico pedagógicos, los directores, los supervisores, en resumen, todo el andamiaje del sistema
educativo conozca los cambios a instrumentar para la NEM. Una de las grandes debilidades de la
reforma peñista en términos curriculares fue que, a pesar de la gran campaña de difusión,
poquísimos fueron los maestros que recibieron apoyo puntual para entender e instrumentar el
modelo. Así, ya hemos visto, es muy difícil que el cambio llegue a las aulas. Por ello, es importante
que el cambio de andamiaje institucional del nuevo gobierno apoye de manera efectiva a los
maestros para poder implementar cambios curriculares y pedagógicos de la NEM. Es cuestionable,
por ejemplo, que al momento se establezcan únicamente dos días para trabajar con los docentes
durante el verano para la instrumentación del NEM. Esperemos que esos dos días se traten de un
primer acercamiento, muy necesario, con los docentes, pero que más acercamientos y
acompañamiento se tengan previstos para garantizar un cambio.
3. Se necesita claridad más que “belleza” en la propuesta educativa. Hemos observado que a los
gobiernos les gusta poner adornos a sus propuestas educativas. Este gobierno ha incluido, por
ejemplo, el termino literacidad que es en realidad un anglicismo para hablar de la enseñanza de la
lectura y la escritura desde un enfoque sociocultural. Lograr literacidad requiere de un enfoque
metodológico particular que, de ser explicitado, podría ayudar a que la comunidad escolar
establezca estrategias para mejorar las competencias lectoras y de escritura de los estudiantes. Sin
embargo, en el abstracto, utilizar términos sólo porque están de moda o suenan bien no ayuda a que
las propuestas se conviertan en acciones de cambio. Como ejemplo podríamos preguntarnos en
cuántas escuelas se comprendió qué significaba el “aprender a aprender” de la reforma de 2013.
4. Se necesita menos “ambición” y más certeza en la propuesta educativa. Al igual que en
propuestas de gobiernos anteriores, la enseñanza de lenguas extranjeras, del deporte y el arte (no
sólo la música) son estandarte para justificar que la NEM nos llevará a la mejora educativa. Sería
necio argumentar que esas áreas de formación no son importantes; sin embargo, más valdría la
pena apostarle a la capacitación de esos docentes que a la fecha son insuficientes mientras se
trabaja en un modelo curricular que les dé el peso necesario tanto en la carga horaria como en la
evaluación de los estudiantes.
5. Establecer una nueva cultura de género requiere más que incluir secciones nuevas en los libros
de texto. Transformar/corregir los estigmas de género requiere de campañas profundas para
modificar los roles asignados tanto a los hombres como a las mujeres en el sistema educativo. Se
requiere trabajar en conjunto para corregir no sólo la forma en que los maestros llaman, tratan y
enseñan a sus alumnos, sino la forma en que se trata, comunica y enseña dentro del sistema
educativo y desde el gobierno a todos sus miembros.
Concluyo. No es nuevo que los gobiernos traten de comenzar de cero en materia educativa. Muchas
han sido las “reformas que han sido abanderadas por cada gobierno en turno”. La propuesta de la
NEM se ve (hasta lo poco que ha circulado al respecto) como un intento ideológico de establecer un
nuevo punto de partida en educación. Más allá de la concepción ingenua de que la implementación
de política pública se realiza como resultado de un gran proceso de planeación, de racionalidad y
eficiencia, hay que aceptar que el quehacer de cambio involucra intervenir a un “animal vivo”. El
sistema educativo está vivo: se mueve, reacciona, y se defiende. Por ello, si se habla de transformar,
requerimos que de manera efectiva se construya un sistema educativo que funcione de manera
diferente a la de “cascada”. Ojalá se logre involucrar de manera práctica a la comunidad escolar para
que la NEM pueda ser un modelo apropiado por todos los actores.
Educación Preescolar
Se proporciona a niños y niñas de entre 3 y 5 años de edad y consta de tres grados o niveles.
Estimula el desarrollo intelectual, emocional y motriz del niño y de la niña, lo cual favorece un mejor
aprovechamiento de la educación primaria.
Desde el ciclo escolar 2004-2005 el tercer año de este nivel educativo es obligatorio; a partir del ciclo
escolar 2005-2006 el segundo año también se hizo obligatorio; mientras que a partir del ciclo escolar
2008-2009 el primer año será obligatorio.
Educación Primaria
Consta de seis grados y normalmente se imparte a niños de 6 a 12 años de edad. Las personas de 15
años o más que no hayan cursado o concluido este nivel pueden hacerlo en los cursos para adultos.
Es obligatorio cursar la Primaria.
Educación Secundaria
Bachillerato General
El cual ofrece la carrera de profesional técnico y al mismo tiempo prepara estudiantes para el ingreso a
la educación superior.
Bachillerato Tecnológico
Esta es la opción de bachillerato de modalidad bivalente, es decir, que puedes estudiar el bachillerato al
mismo tiempo que una carrera técnica.
Educación superior
- Licenciatura
- Especialidad
- Maestría
- Doctorado
Los planes de estudio de primaria y secundaria son los mismos en todo México.