Universidad Popular Autónoma de Veracruz.
UPAV Tuzamapan.
Tema: “El dengue”
Materia: Laboratorio de investigación.
1er trimestre
Alumna: Katia Casas Dominguez
Asesor: Lic. Jorge Alberto Martínez Hernández.
Tuzamapan, Ver. A 29 de junio de 2024.
Introducción.
El dengue es una enfermedad viral transmitida por mosquitos que afecta a
millones de personas en todo el mundo, especialmente en regiones tropicales y
subtropicales. Causado por el virus del dengue (DENV), que pertenece a la familia
de los Flaviviridae, este padecimiento presenta cuatro serotipos distintos (DENV-1,
DENV-2, DENV-3 y DENV-4), lo que complica su control y prevención.
El vector principal del dengue es el mosquito Aedes aegypti, conocido por su
capacidad de adaptarse a ambientes urbanos y reproducirse en pequeñas
acumulaciones de agua. Este mosquito también es responsable de la transmisión
de otras enfermedades, como el Zika y la fiebre chikungunya.
El impacto del dengue es multidimensional, afectando no solo la salud de las
personas, sino también la economía y el desarrollo social de las comunidades
afectadas. Los síntomas de la enfermedad varían desde fiebre leve y dolores
musculares hasta complicaciones graves, como el dengue grave (anteriormente
conocido como fiebre hemorrágica del dengue), que puede ser mortal sin un
manejo médico adecuado.
Este informe tiene como objetivo proporcionar una visión integral del dengue,
abarcando aspectos como la epidemiología, la biología del vector, los métodos de
prevención y control, y las estrategias de tratamiento. Asimismo, se analizarán los
desafíos actuales y las oportunidades futuras en la lucha contra esta enfermedad,
con el propósito de fortalecer las acciones de salud pública y reducir la carga del
dengue en las comunidades afectadas.
Desarrollo
El dengue es una de las enfermedades virales transmitidas por mosquitos más
prevalentes a nivel mundial, afectando a aproximadamente 400 millones de
personas cada año. Hablemos un poco sobre la epidemiologia:
Distribución geográfica: El dengue es endémico en más de 100 países de
Asia, América Latina, África y el Pacífico, se estima que el 40% de la
población mundial vive en áreas con riesgo de dengue. En regiones como
el sureste asiático y las Américas han experimentado un notable incremento
en la incidencia de brotes.
Tendencias temporales: El dengue ha mostrado una gran incidencia
durante la temporada de lluvias, cuando las condiciones son óptimas para
la reproducción de los mosquitos Aedes. Sin embargo, cambios en el clima
y en los patrones de urbanización han alterado estos patrones tradicionales.
Grupos de riesgo: Aunque el dengue puede afectar a personas de todas las
edades, los niños y las personas con condiciones de salud preexistentes
están en mayor riesgo de desarrollar formas graves de la enfermedad.
El mosquito Aedes aegypti, principal vector del dengue posee características
únicas que facilitan la transmisión del virus, por ejemplo:
Ciclo de Vida: El ciclo de vida del Aedes aegypti comprende cuatro etapas:
huevo, larva, pupa y adulto. La hembra adulta necesita alimentarse de
sangre para producir huevos, lo que la lleva a picar a múltiples personas
durante su vida.
Hábitos de Alimentación: Aedes aegypti prefiere alimentarse durante el día,
con picos de actividad en las primeras horas de la mañana y las últimas de
la tarde. Su habilidad para reproducirse en pequeñas cantidades de agua
hace que los entornos urbanos, con sus múltiples recipientes y
acumulaciones de agua, sean ideales para su proliferación.
Adaptación Urbana: Este mosquito se adapta bien a ambientes urbanos,
utilizando contenedores artificiales como neumáticos, botellas y depósitos
de agua como criaderos.
El dengue puede presentar un espectro de manifestaciones clínicas, desde
infecciones asintomáticas hasta cuadros graves:
Dengue Clásico: Caracterizado por fiebre alta, dolor de cabeza severo,
dolor retroocular, mialgia, artralgia y exantema. Los síntomas suelen
aparecer entre 4 y 10 días después de la picadura del mosquito infectado y
pueden durar de 2 a 7 días.
Dengue Grave: Se desarrolla en aproximadamente el 5% de los casos y
puede incluir síntomas como hemorragias, daño a órganos y choque,
conocido como síndrome de choque por dengue. Este cuadro puede ser
mortal sin atención médica oportuna.
El manejo de los pacientes con dengue se basa en la evaluación clínica cuidadosa
y la atención de apoyo, por eso es importante:
Mantener una hidratación adecuada, el control de la fiebre y el monitoreo de
signos vitales. En casos de dengue grave, se requiere atención hospitalaria
intensiva para manejar el choque y las complicaciones hemorrágicas.
Protocolos de Tratamiento: Los protocolos de tratamiento varían según la
severidad de la enfermedad y pueden incluir la administración de fluidos
intravenosos, transfusiones de sangre y otros cuidados intensivos en casos
de dengue grave.
“Respuesta de la OMS
En su respuesta al dengue, la OMS:
apoya a los países para que confirmen los brotes por medio de la red de
laboratorios colaboradores; brinda apoyo técnico y orientación a los países para
que controlen eficazmente los brotes de dengue; ayuda a los países a mejorar sus
sistemas de notificación y a determinar la carga real de morbilidad del dengue;
junto con algunos de sus centros colaboradores, ofrece capacitación sobre
atención clínica, diagnóstico y control de vectores en el plano regional y nacional;
formula estrategias y políticas basadas en datos científicos; ayuda a los países a
formular estrategias de prevención y control del dengue y a adoptar la Respuesta
mundial para el control de vectores (2017-2030) y la Iniciativa Mundial sobre
Arbovirus (2022–2025).estudia y recomienda el desarrollo de nuevas
herramientas, como insecticidas y la tecnología necesaria para su aplicación;
reúne los registros oficiales de dengue y dengue grave de más de 100 Estados
Miembros; y publica directrices y manuales para los Estados Miembros sobre
vigilancia, gestión de casos, diagnóstico y prevención y control del dengue.”
(OMS)
(Informe Semanal/Situación Epidemiológica de Dengue en México).
Subtema 1: Diagnostico
El diagnóstico temprano y preciso del dengue es crucial para el manejo efectivo de
la enfermedad:
Lo primero es realizarse pruebas de laboratorio, estas pruebas serológicas
(detección de anticuerpos IgM e IgG) y las pruebas moleculares (RT-PCR) son
herramientas clave para confirmar la infección por dengue. La elección de la
prueba depende del momento de la enfermedad y los recursos disponibles.
Por consiguiente, debemos diferenciar los síntomas con otras enfermedades, el
diagnóstico diferencial es esencial debido a que los síntomas del dengue pueden
ser similares a los de otras enfermedades tropicales como la malaria, el Zika y la
fiebre chikungunya.
“Ante un caso sospechoso de dengue, se deben realizar pruebas de sangre,
dependiendo de la evolución de la enfermedad: Si la infección es aguda (días 1 a
5 del inicio de los síntomas), se debe tomar una muestra de sangre en busca del
virus (RT-PCR en tiempo real ó NS1). Si la infección se encuentra en la fase de
recuperación o convalecencia (a partir del 6to día del inicio de síntomas), se
tomará una muestra de sangre para detectar anticuerpos IgM e IgG. También se
puede realizar el aislamiento viral en suero, líquido cefalorraquídeo o biopsia
hepática.” (Secretaría de Salud | 03 de marzo de 2016)
La combinación de síntomas clínicos, historial epidemiológico y pruebas de
laboratorio son fundamentales para un diagnóstico preciso y manejo adecuado de
la enfermedad.
Subtema 2: Prevención y control
Controlar el dengue requiere un enfoque variado que incluya estrategias a nivel
comunitario, sanitario y gubernamental.
Es importante involucrar la eliminación de criaderos de mosquitos, el uso de
insecticidas y la implementación de barreras físicas como mosquiteros y ropa
protectora. Programas comunitarios que promuevan la eliminación de agua
estancada y la vigilancia de criaderos son esenciales.
Aunque se han desarrollado vacunas contra el dengue, su uso está limitado a
ciertos grupos de edad y serotipos del virus. La vacuna Dengvaxia es una de las
más conocidas, pero su administración debe ser cuidadosamente gestionada para
evitar complicaciones en personas no previamente infectadas por el virus.
La educación comunitaria sobre la prevención de picaduras de mosquitos y la
importancia de eliminar posibles criaderos es fundamental. Campañas de
sensibilización pueden ayudar a reducir la exposición al mosquito vector.
La prevención y control del dengue requieren un enfoque variado, combinando
medidas de control vectorial, protección personal, vigilancia epidemiológica y
educación comunitaria. La integración de tecnologías avanzadas y la participación
de la comunidad son esenciales para el éxito a largo plazo en la reducción de la
transmisión del dengue.
“¿Es posible prevenir el dengue?
Es posible prevenir el dengue, evitando la reproducción del vector y la exposición
a éste.
Si vives donde hay casos de dengue, debes….
Si viajas hacia donde hay casos de dengue, debes…
Cubrir la piel expuesta con camisas de manga larga, pantalones y
sombreros.
Usar repelente como se indica y reaplicar como se sugiere.
Dormir en lugares que estén protegidos con mosquiteros.
Evitar lugares infestados de mosquitos.
Consultar al médico si se presenta fiebre luego de regresar.
En México ya existe una vacuna en que protege contra el dengue. Su aplicación
se dará a conocer durante el año 2016, su uso no cancela las acciones de
prevención dirigidas al control de los mosquitos y a evitar la probabilidad de ser
picado por uno.” (Secretaría de Salud | 03 de marzo de 2016)
Consecuencias.
El dengue puede ser fatal, especialmente en su forma grave. La tasa de
mortalidad varía, pero se estima que el dengue grave tiene una tasa de mortalidad
de entre 1% y 5%, si no se maneja adecuadamente. En muchos países en
desarrollo, la falta de acceso a atención médica oportuna y adecuada puede
exacerbar esta tasa.
Según la OMS, se reportan entre 100 y 400 millones de infecciones por dengue
anualmente. De estas, aproximadamente 500,000 desarrollan dengue grave, lo
que puede resultar en hospitalización prolongada y un riesgo elevado de muerte.
Aunque la mayoría de los pacientes se recuperan completamente, algunos pueden
experimentar secuelas prolongadas como fatiga crónica, debilidad muscular y
complicaciones psicológicas debido al estrés y el impacto de la enfermedad grave.
Esta enfermedad reduce la capacidad laboral de las personas afectadas y puede
llevar a ausencias prolongadas del trabajo o la escuela, afectando negativamente
la economía y el bienestar social.
El diagnóstico de dengue, especialmente en su forma grave, puede generar estrés
y ansiedad en los pacientes y sus familias, debido a la preocupación por la
mortalidad y las posibles complicaciones a largo plazo. Pacientes que han
experimentado formas graves de la enfermedad pueden desarrollar trastornos de
estrés postraumático (TEPT) y otros problemas de salud mental.
La educación sobre la prevención del dengue y la importancia del control de
criaderos de mosquitos es fundamental para reducir la incidencia de la
enfermedad. Las campañas de sensibilización pueden cambiar el comportamiento
de la comunidad y reducir la exposición al virus.
El uso extensivo de insecticidas para controlar el mosquito vector puede tener
efectos negativos en el medio ambiente, incluyendo la contaminación del agua y el
suelo y la afectación de otras especies.
Estas consecuencias destacan la necesidad de un enfoque integral para abordar
el dengue, considerando sus efectos en la salud pública, la economía, el sistema
de salud y el medio ambiente, así como la importancia de políticas y estrategias
coordinadas para disminuir su impacto.
Conclusión
El control del dengue requiere un enfoque holístico que combine la vigilancia
epidemiológica, el control del vector, la educación comunitaria y el manejo clínico
efectivo. La integración de tecnologías innovadoras y la adaptación de estrategias
en respuesta a los cambios ambientales y sociales son esenciales para enfrentar
este desafío. Además, la cooperación global y la financiación adecuada para la
investigación y la implementación de medidas preventivas y de tratamiento son
claves para reducir la incidencia del dengue y mitigar sus efectos en la salud y la
economía.
El compromiso continuo de los gobiernos, las organizaciones de salud y las
comunidades afectadas es fundamental para avanzar en la lucha contra el
dengue. Solo a través de esfuerzos coordinados y sostenidos se podrá lograr una
reducción significativa en la carga de esta enfermedad y mejorar la calidad de vida
de las poblaciones en riesgo.
Bibliografía.
https://www.gob.mx/salud/acciones-y-programas/dengue#:~:text=
%C2%BFC%C3%B3mo%20se%20hace%20diagn%C3%B3stico%20del,en
%20tiempo%20real%20%C3%B3%20NS1).
https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/dengue-and-severe-
dengue
https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/918652/
Dengue_SE21_2024.pdf