Ya Pero Todavía No - John Stott
Ya Pero Todavía No - John Stott
CONTEMPORANEO
      John Stott
        ,
  CON GUIA DE ESTUDIO
                           CONCLUSION
El ahora y el todavia no
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                          EL AHORA Y EL TODAVIA NO
oir con ambos y prestemos atencion cuidadosa a ambos lados de         cia, porque son doblemente desagradables para Dios, y perjudicia-
toda cuestion; dos ojos, a fin de que veamos derecho y no torcido;    les para nuestra mision en el mundo.
dos manos, para que captemos ambos extremos de toda antino-              Un ejemplo se relaciona con el extraordinario desarrollo mundial
mia biblica; y dos pies, con el objeto de que caminemos firme-        de las iglesias pentecostales y el movimiento carismatico. Crecen
mente y no atravesemos la vida cojeando.                              mas rapido que cualquier otro grupo cristiano. Sin embargo,
   Una equilibrada comprension de la tension entre el «ahora» y el    algunos cristianos adoptan hacia ellos una posicion tan completa-
«todavia no» conduciria eficazmente a la unidad cristiana yespe-      mente negativa que parecerian estar en peligro de apagar el Espi-
cialmente a una mayor armonia entre los creyentes evangelicos.        ritu, mientras que algunos carismaticos son tan triunfalistas que
Confieso que me perturban profundamente las barreras que nos          les resulta dificil escuchar a los que tienen serios interrogantes
separan a los que compartimos la misma fe biblica fundamental.        teologicos acerca de sus creencias y practicas pentecostales
No estoy pensando ahora ni en la division entre Roma y las iglesias   distintivas. LEs posible, por 10 tanto, que los evangelicos caris-
de la Reforma, ni en la brecha entre cristianos conservadores y       maticos y no carismaticos se respeten y se acepten 10 suficiente
liberales, vale decir, entre los que creen que la verdad ya ha sido   como para admitir una genuina com union y una activa
revelada y aquellos cuya principal autoridad es 10 que llaman «el     colaboracion? Personalmente creo que si es posible, si bien
clima de la opinion modema». Me estoy refiriendo mas bien a la        problematico, y que una consideracion de la tension entre el «ya»
desunion dentro del movimiento evangelico mismo. Va sin decir         y el «todavia no» deberia contribuir considerablemente al discer-
que creemos el Credo de los Apostoles y el Credo Niceno, y 10         nimiento y al mutuo entendimiento.
fundamental de las principales confesiones reformadas tambien.
Mas todavia, recientemente hemos encontrado un util punto de
encuentro teologico en el Pacto de Lausana (1974), y su desarrollo    El reino que ha venido y el reino venidero
en el Manifiesto de Manila (1989). De modo que estamos de acuerdo
en los fundamentos doctrinales y eticos de la fe. Con todo, pare-        Fundamental para el cristianismo neotestamentario es la
ceria que somos constitucionalmente propensos a peleamos y            perspectiva de que vivimos «entre los tiempos»: entre el pasado y
dividirnos, 0 simplemente a seguir nuestro propio camino y            el futuro, entre la primera y la segunda venidas de Cristo, entre 10
levantar nuestro propio imperio. Pareceria que padecemos una          que se ha hecho y 10 que falta hacer, entre la realidad presente yel
incapacidad patologica de andar de acuerdo 0 de cooperar en la        destino futuro, entre el ruego «venga tu reino» y el reino venidero,
causa del reino de Dios. No deberiamos tomar a la ligera esta         entre el «ya» en relacion con la inauguracion del reino y el «todavia
deplorable situacion.                                                 no» en relacion con su consumacion. Fisicamente, por supuesto,
   LConoce ellector el maravilloso cuento corto de Saki titulado      es imposible tener el rostro vuelto en dos direcciones a la vez; pero
The Secret Sin of Septimus Brope 1 [El pecado secreto de Septimus     espiritualmente, resulta esencial proceder as!, mirando hacia atras,
Brope]? En este cuento la senora de Troyle expresa constemacion       a la encamacion y todo 10 que ella comprendia, y mirando hacia
ante el pensamiento de perder a su empleada domestica, Florinda.      adelante, hacia la parusia y todo 10 que ella traera aparejado. Un
«Te aseguro que no se que haria sin Florinda ... Ella entiende mi     texto de muestra, si se me permite desarrollarlo un poco, seria
cabello. Ya hace mucho que he dejado de intentar hacer algo con el    este: «Queridos amigos, ahora ya somos hijos de Dios, pero todavia
yo misma. Considero el cabello de la misma manera que conside-        no se ha revelado 10 que hemos de ser. »2
ro a los esposos; siempre que se nos yea juntos en publico, las          La base teologica para esta tension se ha de encontrar en la
divergencias privadas no tienen importancia.» Pero no tenemos         ensenanza del propio Jesus tocante el reino de Dios. Se acepta
ninguna libertad para consideramos unos a otros de la manera          universalmente tanto que el tema del reino aparece en forma promi-
que la senora de Troyle consideraba su cabello y a su esposo. Tanto   nente en su ensenanza, como que anuncio la venida del reino.
nuestras divergencias publicas como las privadas tienen importan-     Donde los entendidos no se ponen de acuerdo, sin embargo, es
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                                EL AHORA Y EL TODAVIA NO
sob:e el m?ment~ de su venida. ~ Ya ha llegado el reino porque           te6logo holand.es Herman Ridderbos en La venida del reino (1950),
Jesus 10 traJo conslgo? ~O su venida sigue siendo futura, de modo        y el ~orteamencanoGeorge Eldon Ladd, tanto en su El evangelio
que la esperamos con expectativa? ~O esta la verdad entre estas          del remo (1959), como en su tratamiento maduro del tema, The Pres-
dos posiciones, y las combina?                                           ence of the Future [La presencia del futuro] (1974). La tesis central
    Albert Schweitzer, el sorprendentemente versatil musico,             de Ladd era que el reino de Dios, es decir el gobiemo dinamico y
medico, te6logo y misionero aleman (que falleci6 en 1965), sostu-        redentor de Dios,
vo en s~ fa:n0,s~ libro The Quest of the Historical Jesus [La busqueda
del Jesus hlstonco] (1906) que, segun Jesus, el reino se encontraba        que apareceni como un acto apocaliptico al final de la era, ya ha entrado
totalmente en el futuro. Era un profeta apocaliptico, que ensen6           en la historia ~umana en la persona y la misi6n de Jesus, para veneer
~err6nea~ente)que en cualquier momento Dios estaba a punto de              ~~ara lIberal' a los hombres de su roder, y rara conducirlos a
mtervemr sobrenaturalmente para establecer su reino. Las radicales         las bendiciones del reino de Dios.s
                                                                            ,-.----
demandas qu.e hizo Jesus a sus discfpulos (pOl' ejemplo, la de
                                                                         De modo que el reino vino con Jesus. «Pero no vino sin saldo res-
vender sus benes, volver la otra mejilla y no resistir el mal)
constitufan una «etica interina» a la luz del inminente arribo del       tante: la consumaci6n todavfa yacia en el futuro indeterminado.»6
                                                                            Es indudable que Jesus consideraba y describia al reino como
r~ino. La posici6n de Schweitzer ha sido llamada «escatologfa
ngurosa>~ 0 «coherente», porque elabor6 su unica tesis con rigor y
                                                                         un fen6meno presente. Ensenaba que el tiempo del cumplimiento
coherenCla.                                                              habia llegado;7 9-~e «el hombre fuerte» ya estaba encadenado y
                                                                         desarmado, facihtando el saqueo de sus bienes, como resultaba
   En el.extremo opuesto estaba C. H. Dodd (que falleci6 en 1973).
En su lIbro The Parables of the Kingdom [Las parabolas del reino]        evidente pOl' sus exorcismos;B que el reino ya estaba «dentro de la
(1934). desarro1l6 su «escatologfa realizada», a saber, que la venida
                                                                         gente» 0 «entre» el pueblo;9 que ahora se «entraria» en el 0 se 10
                                                                         «recibiria»;10 y que, desde la epoca de Juan el Bautista, su precur-
d~l remo es un. hecho. t?talmente pasado. Si bien el gobiemo de
DlO,S es eterno, urumplO en el espacio y el tiempo en la persona de      sor, que habia anunciado su inminente llegada, hombres «violen-
Jes,:s. Do~d puso mucho enfasis en dos verskulos cuyos verbos            tos» de hecho habfan podido «arrebatarlo» 0 entrar con «esfuer-
estan en tlempo perfecto, a saber, «el reino de Dios ha llegado»3 y      zo» en elY
«ha lleg~do a vosotros el reino de Dios».4 Ademas, segun Dodd,              No obstante, en la perspectiva de Jesus el reino era, a la vez, una
no hay ~gun f~turo venidero del reino. Los vers1culos que hablan         expectativa futura. No seria perfeccionado hasta el ultimo dfa. POl'
de un remo vemdero se han de entender como concesiones a una             ello esperaba anhelosamente el fin, y a la vez ensenaba a sus
escatologfa cristiana popular, primitiva; no formaban parte de la        discipulos a hacerlo. Debian oral' «Venga tu reino»12 y «buscarlo»
ensenanza del propio Jesus.                                              primeramente,13 dando prioridad a su expectativa. Algunas veces
   En lugar de. estas pol~rizaciones extremas (Schweitzer que decla-     tambien describia el estado final de sus seguidores como su «entrar»
r~ que la vemda del remo es totalmente futura, y Dodd que sos-
                                                                         en el rein0 14 0 «heredarlo».15
bene que es algo enteramente pasado), la mayorfa de los entendi-            En particular, sus parabolas agricolas (pOl' ejemplo, la de la
dos h~ tornado una pos~ci6n intermedia segun la cual Jesus hablaba       semilla que crece secretamente, la del grano de mostaza, y la del
del remo como una reahdad presente y como una expectativa futu-          trigo y la cizana)16 reunen los procesos de plantar, del crecimiento
ra. POl' u~ lado, el mismo 10 habfa inaugurado, y por otro, cuando       y de la cosecha. Como la semilla, el reino ya habia sido sembrado
                                                                         en el mundo; ahora creceria mediante la actividad divina e invi-
s~ produJese. s~, parusf~, 10 consu~arfa. Joachim Jeremias, pOl'
eJemplo, e~cnblO en su lIbro Las parabolas de Jesl1s (1947) sobre una    sible hasta el final. Esto parece ser 10 que Jesus quiso decir al hablar
«escatologia en proceso de realizaci6n». A. M. Hunter en su Inter-       del «misterio (0 secreto) del reino» .17 Su presencia era discreta, pero
p~etil~g the Parables F~terpretando las parabolas] (1960) prefiri6 el    a la vez revolucionaria, porque el poder de Dios la haria crecer
termmo «escatologla maugurada». Una posici6n similar adopt6 el           hasta que finalmente se haria manifiesta a todos.
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                                 EL AHORA Y EL TODAVIA NO
   Otro modo por el cual la Escritura expresa la tensi6n entre el        plenitud de Dios. 32 Cristo ya reina, aunque sus enemigos no han
«ahora» y el «todavia no», el presente y el futuro, es por medio de      sido puestos como estrado de sus pies. 33
la terminologia de las dos «eras» 0 «siglos». Desde la perspectiva           Atrapados entre el presente y el futuro, la posici6n caractenstica
del Antiguo Testamento, la historia se divide en «este siglo» y          de los cristianos se describe diversamente como de esperanza,34
«aquel siglo»,18 entre «este siglo» (que es malo) y «el venidero» 0      de espera,35 de anhel036 y de gemir,37 porque seguimos sufriendo
«los ultimos dias», a saber, el reino de justicia que ha de ser          penosas pruebas y tribulaciones. 38 En realidad, «debemos ver la
introducido por el Mesias. 19 A veces este siglo, 0 era, se asemeja a    realidad de este sufrimiento como una manifestaci6n concreta del
una noche larga y oscura, a ser seguida por el amanecer de un            'todavia no'».39 Mientras tanto, debemos aguardar anhelosamen-
nuevo dia. Esta estructura simple de dos eras consecutivas se            te,40 como tambien «pacientemente».41 Como ha escrito John
cambi6, decididamente, sin embargo, por la venida de Jesus.              Murray:
Porque el trajo consigo la nueva era y muri6 por nosotros con el
objeto de «libramos del presente siglo malo».20 En consecuencia,           Intentos de exigir para la vida presente elementos que pertenecen a la
por medio de Jesus, el Padre ya «nos ha librado de la potestad de          perfecci6n consumada ... no son sino sfntomas de esa impaciencia que
las tinieblas, y trasladado al reino de su amado HijO».21 Hasta hemos      desgarrarfa el orden divino. La expectativa y la esperanza no deben
sido levantados de entre los muertos y sentados con Cristo en el           cruzar las fronteras de la historia: deben esperar la llegada del fin, «la
reino celestial. 22                                                        libertad gloriosa de los hijos de Dios».42
   Al mismo tiempo, la era antigua persiste, de modo que las dos
                                                                            La esencia del penodo interino entre el «ahora» y el «todavia
se superponen parcialmente. «Las tinieblas van pasando, y la luz
verdadera ya alumbra.»23 «Lado a lado ... con la continuaci6n de         no», entre el «venga tu reino» y el reino venidero, es la presencia
este esquema mas antiguo (a saber la nueva era sucediendo a la           del Espiritu Santo en el pueblo de Dios. Por una pade, el don del
antigua), puede observarse el surgimiento de uno nuevo, que invo-        Espiritu es la bendici6n distintiva del reino de Dios, y por ende la
lucra la coexistencia de los dos mundos 0 estados.»24 Un dia la era      principal senal de que la nueva era ha amanecido. 43 Por otra parte,
antigua se dara por terminada (10 cual constituira «el fin del           dado que la morada del Espiritu en el creyente es s6lo el comienzo
siglo»),25 y la nueva era, que fue inaugurada por la primera venida      de nuestra herencia real, es tambien la garantia de que 10 demas
de Cristo, sera consumada en su segunda venida. Mientras tanto,          sera nuestro algun dia. El Nuevo Testamento usa tres metMoras
prosiguen las dos eras, y nosotros nos sentimos atrapados por la         para ilustrar esto. El Espiritu Santo es las «primicias» que
tensi6n entre ellas, en tanto que se nos invita a no «[conformar-        garantizan que la cosecha total vendra despues,44 el «dep6sito» 0
nos] a este siglo», sino mas bien a ser «transformados» segun la         primera cuota que garantiza que el pago total se ha de efectuar,45 y
voluntad de Dios; de hecho, a vivir coherentemente, como hijos           el anticipo que garantiza que vendra el dia cuando se disfrutara
de la luz. 26                                                            de la fiesta plena. 46 De esta manera, el Espiritu Santo es «tanto el
   No obstante, la tensi6n se mantiene. De hecho, aparece en casi        cumplimiento de la promesa como la promesa del cumplimiento:
todas las metMoras que el Nuevo Testamento usa para referirse a          el es la garantia de que el nuevo mundo de Dios ya ha comenzado,
la bendici6n de pertenecer a Cristo. Asi, ya hemos sido salvados;        como tambien la senal de que este nuevo mundo todavia ha de
sin embargo, seremos salvos algun diaY Ya «tenemos redenci6n»,           venir».47
pero el dia de la redenci6n esta todavia en el futuro. 28 Ya somos los      Es hora ya de presentar algunos ejemplos de la tensi6n entre el
hijos adoptados por Dios, pero tambien estamos a la espera de            «ahora» y el «todavia no».
nuestra adopci6n. 29 Ya hemos «pasado de muerte a vida», aunque
la vida etema sigue siendo un don futuro. 30 Ya somos una nueva          La revelaci6n, la santidad y la sanidad
creaci6n, aunque todavia Dios no ha hecho nuevas todas las cosas. 31
Ya estamos «completos», pero no todavia hasta el grado de la                E1 primer ejemplo se encuentra en la esfera intelectual,       0   sea, la
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cuesti6n de la revelaci6n.                                             mas sabio de nuestra parte ponemos dellado de aquellos autores
   Afirmamos con gozosa confianza que Dios ya se ha revelado a         biblicos que, si bien sabian que eran vehiculos de revelaci6n divina,
los seres humanos, no s6lo en el universo creado, en nuestra raz6n     no obstante confesaban humildemente que su conocimiento seguia
yen nuestra conciencia, sino de manera suprema, en su Hijo Jesu-       siendo limitado. Moises, a quien Dios conoda «cara a cara»,
cristo y en la totalidad del testimonio biblico. «Dios, habiendo       admiti6: «Senor Jehova, ttl [solo, RSV] has comenzado a mostrar a
hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los          tu siervo tu grandeza, y tu mana poderosa.»54 Luego el ap6stol
padres por los profetas, en estos postreros dias nos ha hablado        Pablo, con quien la iglesia tiene una deuda permanente por su
por el Hijo.»48 Ya nos atrevemos, por 10 tanto, a decir que cono-      profunda ensenanza, consideraba, no obstante, que su
cemos aDios, porque el se ha dado a conocer a nosotros. El mismo       conocimiento era parcial e imperfecto, y 10 comparaba con los
ha tomado la iniciativa de descorrer el velo que, de otro modo, 10     pensamientos inmaduros de un nino y las deformes imagenes que
ocultaria de nosotros. Nos regocijamos grandemente en las glorias      refleja un espejo.55 Y el ap6stol Juan, que habia penetrado pro-
de la autorrevelaci6n de Dios. Verdaderamente, su Palabra arroja       fundamente en la mente de Cristo, admitia que «alin no se ha mani-
luz sobre nuestra senda. 49                                            festado 10 que hemos de ser».56
   Todavia, sin embargo, no conocemos a Dios como nos conoce el           Asi que, si bien es correcto que nos gloriamos en 10 que se nos
a nosotros. Nuestro conocimiento es parcial, porque su revelaci6n      ha dado en la revelaci6n divina, como tambien en su caracter defini-
ha sido parcial. Esto es 10 que debe querer decir el proverbio de      tivo, al mismo tiempo es correcto confesar nuestra ignorancia en
que «gloria de Dios es encubrir un asunto».50 Nos ha revelado todo     cuanto a muchas cosas. Sabemos y no sabemos. «Las cosas secretas
10 que quiere revelamos, 10 que considera que es para nuestro bien,    pertenecen a Jehova nuestro Dios; mas las reveladas son para
pero no todo 10 que hay para revelar. Quedan muchos misterios          nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos
en los que no deberiamos tratar de penetrar, porque Dios no ha         todas las palabras de esta ley.»57Es muy importante mantener esta
querido darios a conocer. «Por fe andamos, no por vista.»51            distinci6n entre las cosas reveladas y las cosas secretas, porque
   En particular, para tomar la llamativa imagen que us6 Lutero        entonces podremos estar seguros, incluso ser categ6ricos en cuanto
cuando se dirigia a sus colegas, los monjes agustinos, en Heidel-      a 10 primero, que nos pertenece, a la vez que permanecer agn6sticos
berg en 1518, todo 10 que podemos ver hasta aqui son «las espal-       tocante a 10 segundo, que pertenece aDios. Entonces, tambien,
das visibles de Dios, tal como nos fueron reveladas en el sufri-       estaremos libres para explorar las cosas reveladas y ser firmes en
miento y la cruz», no su rostro. Como 10 ha expresado el doctor        cuanto a no violar los secretos de Dios. Ala inversa, mientras nos
Alister McGrath, «el Dios que nos habla en la cruz es --para valemos   refrenamos ante las cosas secretas, no debemos ser timidos para
de la asombrosamente audaz frase de Lutero-- 'el Dios crucificado      creer, exponer y defender 10 que Dios ya ha dado a conocer. Me
y oculto'».52                                                          gustaria ver entre nosotros mas audacia en proclamar 10 que ha
   Deberia servirnos como advertencia el caso de Eunomio, que           sido revelado, y mas reticencia ante 10 que se ha mantenido secreto.
fue obispo de Cizico en Misia en el siglo IV. Era uno de los lideres    El comlin acuerdo en 10 concemiente a la verdad c1aramente
de un grupo hereje denominado los «anomeos», arrianos extremos          revelada es necesario para la unidad, aun cuando nos dejemos
que ensenaban que el Hijo era «distinto» (anomoios) del Padre, y        mutuamente en libertad en el area de las adiafora, 0 sea, las
que en realidad habia sido creado por el Padre. Eunomio tuvo una        «cuestiones indiferentes». El criterio para discemir cuales son estas
vez la osadia de afirmar: «Yo conozco a Dios tan bien como el           cuestiones indiferentes sera que los cristianos que estan igualmente
mismo». Unequivalente modemo (si bien mas humoristico) podria           ansiosos por someterse a la Escritura llegan, no obstante, a
ser el entusiasta predicador de los viejos avivamientos en los          conc1usiones diferentes acerca de elias. Estoy pensando, por
Estados Unidos, que en una oportunidad dijo: «Hoy les voy a             ejemplo, acerca de las controversias sobre el bautismo, el.gobiemo
explicar 10 inexplicable. Voya definir 10 indefinible. Voy ponderar     de la iglesia, la liturgia y el ceremonial, 10 que soshenen los
10 imponderable. Voy a escrutar 10 inescrutable.»53 Seria mucho         carismaticos y el cumplimiento de las profedas.
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                               EL AHORA Y EL TODAVIA NO
  La segunda tension es en La esfera moraL,   0   sea, la cuestion de la   a Dios con todo el corazon, y a nuestro projimo como a nosotros
santidad.                                                                  mismos ... 'entregamos aDios' ... romper con toda forma de mal,
   Dios ya ha puesto su Espiritu Santo dentro de nosotros con el           y seguir todo 10 bueno.»69 Siguio asi: «Estamos totalmente
fin de lograr que seamos santos. 58 El Espiritu ya esta trabajando         comprometidos a hacer a un lado todos los propositos secretos de
activamente dentro de nosotros, subyugando nuestra naturaleza              entrar en componendas en 10 moral, toda tolerancia de pecados
humana caida y egoista, y haciendo que los nueve aspectos del              habituales ... De ningu.n modo podemos hacer menos que caminar
fruto maduren en nuestro caracter. 59 Podemos afirmar que el Espi-         con Dios, en Cristo, por la gracia del Espiritu Santo diariamente,
ritu ya esta transformandonos por grados a la imagen de Cristo. 60         cada hora, continuamente.»70 Pero luego, bajo «limites» (no en los
   Sin embargo, todavia no ha sido erradicada nuestra naturaleza           objetivos sino en los logros) agrego: «Sostengo con absoluta
caida, porque todavia «el deseo de la came es contra el Espiritu»,61       conviccion, tanto por la experiencia de la Iglesia como por la
de modo que «si decimos que no tenemos pecado, nos enganamos               infalible Palabra, que, de conformidad con el misterio de las cosas,
a nosotros mismos».62 Todavia no hemos sido completamente                  habra limites hasta el final, y limites muy humillantes, fracasos
hechos conformes a la perfecta voluntad de Dios, porque todavia            muy reales. Hasta el final ha de ser un pecador el que camina con
no amamos a Dios con todo nuestro ser, 0 a nuestro projimo como            Dios.»71 Del mismo modo, segu.n el obispo J. C. Ryle: «el viejo John
a nosotros mismos. Estas cosas esperan la llegada de Cristo. Como          Newton», el traficante de esclavos que se convirtio, dijo: «No soy
10 expreso Pablo, todavia no somos «perfectos», sino que «prose-           10 que tendria que ser, no soy 10 que quiero ser, no soy 10 que
guimos», confiados en que «el que comenzoen [nosotros] la buena            espero ser en otro mundo, pero tampoco soy 10 que solia ser, y por
obra, la perfeccionara hasta el dia de Jesucristo».63                       la gracia de Dios soy 10 que soy».72
   Luego, entonces, nos vemos atrapados en una dolorosa dialec-                La tercera tension entre el «ya» y el «todavia no» la encontramos
tica entre el «ahora» y el «todavia no», entre la derrota y la victo-       en La esfera fisica, 0 sea, la cuestion de la sanidad.
ria, entre el desaliento debido a nuestros constantes fracasos, y la           Ya, afirmamos, el largamente prometido reino de Dios ha side
promesa de liberacion ultima, entre el anheloso grito: «2,Quien me          inaugurado, por cuanto ingreso en la historia con Jesucristo. Mas
librara de este cuerpo de muerte?», y la exc1amacion de certi-              au.n, Jesus no se conformo meramente con proclamar el reino; prosi-
dumbre: «Gracias doy aDios, por Jesucristo Senor nuestro.»64 Por            guio a demostrar su llegada mediante sus poderosas obras en el reino
un lado, hemos de tomar con la mayor seriedad el mandamiento                fisico. Camino sobre el agua y convirtio agua en vino. Reprendio al
de Dios: «Sereis santos, porque santo soy yO»,65 el mandato de              viento, aquietola tormenta y multiplico hogazas de pan y pescados.
Jesus: «Vete, y no peques mas»,66 y la manifestacion de Juan de             La naturaleza Ie estaba subordinada. Su poder se mostraba
que escribe para que sus lectores «no [pequen]», y que «todo aquel          particularmente evidente en el cuerpo humano, cuando sanaba a los
que es nacido de Dios, no practica el pecado».67 Por otro lado, tene-       enfermos, expulsaba demonios y levantaba a los muertos.
mos que reconocer la realidad del pecado que mora en nosotros, a                Tambien dio autoridad y poder, tanto a los Doce como a los
la vez que la realidad de que el Espiritu tambien mora en nosotros. 68       Setenta, para ampliar su mision mesianica en Israel y para realizar
La perfecta impecabilidad que anhelamos sigue eludiendonos,                  milagros. La medida en que considero que debia ampliar. su
pero, al rechazar el perfeccionismo, nos negamos a abrazar el                autoridad es cuestion de disputa. Hablando en general, los mI1a-
reduccionismo, es decir, a aceptar niveles bajos de comportamiento.          gros eran «las senales de [un verdadero] apostol».73 No obsta~te,
   El obispo Handley Moule resumio esta tension en el primer                 seria ridiculo intentar limitar 0 domesticar al todopoderoso DlQs.
capitulo de su libro Thoughts on Christian Sanctity [Pensamientos            El Dios que creo el universo y que por medio de Jesu~ acerco el
sobre la santidad cristiana] (1888), titulado «Aims, Limits, Possi-          reino hasta nosotros, de ningu.n modo puede ser metldo en un
bilities» [Objetivos, limites, posibilidades]. Bajo «objetivos» escri-       chaleco de fuerza por nosotros. Es preciso que tenga el pl~no uso
bio: «Nos proponemos nada menos que caminar con Dios a 10                    de su libertad soberania,           ue estemos enteramente ab1ertos a
largo de todo el din; permanecer todas las horas en Cristo ... amar          la POSl 1 idad de los milagros fisicos en el dia de hoy.
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   Sin embargo, todavia no ha llegado el reino de Dios en su pleni-    mantenerla erguida. En cuanto al amor, Cristo, mediante su cruz,
tud. Porque «los reinos del mundo» au.n no «han venido a ser de        ha «[derribado] la pared intermedia de separaci6n» entre gente de
nuestro Senor y de su 'Cristo», cuando «reinara por los siglos de      diferentes razas, naciones, tribus y c1ases, con el fin de «crear en si
los siglos».74 Ese dia sigue siendo futuro. En particular, nuestros    mismo ... un solo y nuevo hombre».80 En cuanto a la santidad, su
cuerpos aun no han sido redirnidos. La naturaleza tampoco ha           nueva sociedad recibe diversos nombres: naci6n santa, sacerdocio
sido enteramente subyugada al gobiemo de Cristo. En cambio,            santo y pueblo santo. 81 De modo que la verdad, el amor y la
«toda la creaci6n gime a una, y a una esta con dolores de parto        santidad son esencialmente marcas de la nueva sociedad en Jesu-
hasta ahora», a la espera del nacimiento del nuevo mundo. «Y no        cristo.
s6lo ella, sino que tambien nosotros mismos ... tambien gemimos            Sin embargo, todavia no ha recibido Cristo a su esposa como
dentro de nosotros mismos, esperando la adopci6n, la redenci6n         «una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa
de nuestro cuerpo.»75                                                  semejante, sino que fuese santa y sin mancha».82 Todo 10 contra-
   De modo, entonces, que tenemos que reconocer la tensi6n entre       rio,la vida y el testimonio presentes de la iglesia eshin estropeados
el «ya» y el «todavia no» en esta esfera tambien. De cierto, hemos     por muchas manchas, por errores, discordias y pecado. La historia
gustado «los poderes del siglo venidero»,76 pero hasta ahora no ha     de la iglesia es la historia de la increible paciencia de Dios para con
sido sino un anticipo. Ademas, forma parte de nuestra experien-        su discolo pueblo.
cia cristiana que la vida de resurrecci6n de Jesus se «manifieste en       Asi, entonces, toda vez que pensamos en la iglesia, tenemos
nuestra came mortal»,77 su vida en medio de nuestra muerte, su         que tener presentes el ideal y la realidad. La iglesia esta compro-
fortaleza en nuestra debilidad, proporcionandonos un cierto vigor      metida con la verdad, pero tambien es propensa a cometer errores;
y vitalidad fisicos, que de otro modo no conoceriamos. Al mismo        esta unida y tambien dividida; es pura y tambien impura. No es
tiempo, nuestro cuerpo se mantiene debil y mortal, y exigir plena      que tengamos que consentir sus fracasos. «El innegable 'todavia
salud ahora es anticipar la resurrecci6n. La resurrecci6n corporal     no' jamas puede servir como coartada para cubrir nuestras de-
de Jesus fue la garantia, y de hecho el comienzo, de la nueva           rrotas.»83 Hemos de alirnentar la visi6n de la pureza tanto como la
creaci6n de Dios. No obstante, Dios todavia no se ha levantado de       unidad de la iglesia; en otras palabras, su pureza doctrinal y etica,
su trono para pronunciar la palabra decisiva: «He aqui, yo hago         y su unidad visible. Dado que estas cosas constituyen la voluntad
nuevas todas las cosas.»78 Para resumir, quienes desechan la            de Dios, ellas deben ser nuestra meta. En consecuencia, somos
posibilidad misma de los milagros en el dia de hoy, olvidan el          llamados a pelear «la buena batalla de la fe».84 Tambien tenemos
«ya» del reina, mientras que quienes los esperan como 10 que se         que ser «solicitos en guardar la unidad del Espiritu en el vinculo
ha dado en llamar «la vida cristiana normal», olvidan el «todavia       de la paz».85 Y en tanto buscamos estas cosas, hay lugar para la
no» del reino.                                                          disciplina en casos de herejia 0 pecados serios.
                                                                            Y con todo, el error y el mal no van a ser completamente erradi-
                                                                        cados de la iglesia en este mundo. Seguiran coexistiendo con la
La iglesia y la sociedad                                                verdad y el bien. «Dejad crecer juntamente 10 uno y 10 otro hasta la
                                                                                                                                    86
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   En cuarto lugar, la misma tensi6n se experimenta en la esfera        argumentan que, dado que en esta parabola «el campo es el
cclcsiastica,
            0 sea, la cuesti6n de la disciplina de la iglesia.           mundo»,87 la coexistencia a que se refiere Jesus es en el m~do, no
   Desde ya, sostenemos acertadamente, Jesus el Mesias esta              en la iglesia. Pero el enemigo siembra malezas «en~:e el tngo»,88 y
reuniendo un pueblo para s1. Y ya la comunidad mesianica se carac-       en ultima instancia es «de su reino»89 de donde el HiJo del Hombre
teriza por la verdad, el amor y la santidad, a los cuales ha sido        va a eliminar el mal. Ni la Escritura ni la historia de la iglesia
Hamada. La iglesia es «columna y baluarte de la verdad»,79 vale          justifican el uso de severas medidas disciplinarias en un intento
decir, el fundamento para mantenerla firme y la columna para             de asegurar una iglesia perfectamente pura en este mundo.
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                                   EL AHORA Y EL TODAVIA NO
  La quinta area de tensi6n entre el «ahora» y el «entonces», el               He aqui, entonces, cinco areas (intelectual, moral, ffsica, eclesiasti-
«ya» y el «todavia no», es la esfera social, 0 sea, la cuesti6n del         ca y social) en las que es vital preservar la tensi6n entre el «ya» y el
progreso.                                                                   «todavia no». Podriamos decir que hay tres tipos distintos de
   Desde ya, sostenemos, Dios esta obrando en la sociedad huma-             cristianos, segun el grado con el cual logran mantener este
na. Esto se da, en parte, en su «gracia comUn», en el sentido de            equilibrio biblico.
que proporciona al mundo las bendiciones de la familia y el go-                Primero, estan los cristianos del «ya». Estos son los optimistas
biemo, por medio de los cuales se restringe el mal y se controlan           risuefios. Con justicia enfatizan 10 que Dios ya ha hecho por
las relaciones. Pero tambien se da a traves de miembros de su               nosotros por medio de Cristo, y 10 que nos ha conferido en Cristo.
comunidad redimida, que mantienen sin concesiones los valores               Pero dan la impresi6n de que, en consecuencia, ya no quedan
de su reino. Han de penetrar la sociedad, ensefi6 Jesus, como la sal        misterios, no quedan pecados que no se puedan vencer,
y la luz. Es legitimo deducir de estos modelos que Jesus queria             enfermedades que no se puedan curar y males que no se puedan
que sus seguidores influyeran para bien en el mundo. Porque                 erradicar de la iglesia 0, incluso, del mundo. En una palabra,
ambos elementos son productos efectivos. Hacen una gran                     parecen creer que la perfecci6n es alcanzable ya. Me recuerdan a
diferencia en el entomo en el cual se los coloca; la sal impidiendo         esos creyentes corintios a quienes escribi6 Pablo: «Ya estais
la descomposici6n, y la luz despejando la oscuridad. En                     saciados, ya estais ricas, sin nosotros reinais. jY ojala reinaseis,
consecuencia, a traves de los siglos, a la par de la descomposici6n         para que nosotros reinasemos tambien juntamente con vosotroS!»93
social, ha habido un mensurable progreso social: mayor                         La motivaci6n de los cristianos del «ya» es irreprochable. Quieren
disponibilidad de atenci6n para la salud, ampliaci6n de la                  glorificar a Cristo. De modo que se niegan a poner limites a 10 que
alfabetizaci6n y la educaci6n, la defensa de los derechos humanos,          el es capaz de hacer. Consideran que resulta despreciativo no
mejores condiciones laborales, la abolici6n de la esclavitud y el           sostener la posibilidad de la perfecci6n ahora. Pero su optimismo
comercio de esc1avos, y la protecci6n de los debiles y los                  puede facilmente convertirse en presunci6n y terminar produ-
vulnerables.                                                                ciendo desilusi6n. Olvidan el «todavia no» del Nuevo Testamento
   Todavia no ha creado Dios, sin embargo, los prometidos «cielos           y que la perfecci6n espera la llegada de la parusia.
nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia».90 La justicia del      En segundo lugar, estan los cristianos del «todavia no». A estos se
reino todavia no ha extirpado todo vestigio de opresi6n, y la paz del       podria calificarlos, con cierta justicia, de los pesimistas sombrios.
reino todo vestigio de violencia. Todavia existen las «guerras y ..,        Con justicia enfatizan 10 incompleta que por el momento es la obra
[los] rumores de guerras».91 Todavia no han sido convertidas en rejas       de Cristo, y con justicia se proyectan hacia la parusia, cuando Cristo
de arados las espadas y las lanzas en hoces. 92 Las naciones todavia        completara 10 que ha comenzado. Pero dan la impresi6n de ser
no han renunciado a la guerra como metodo para solucionar sus               extremadamente negativos en sus actitudes. Parece preocuparles
disputas. El egoismo, la crueldad y el temor continuan.                     nuestra ignorancia y fracaso humanos, el dilatado reino de la
   Asi, entonces, si bien es correcto hacer campafias en pro de la          enfermedad y la muerte, y la imposibilidad de lograr una iglesia
justicia social, y procurar mejorar todavia mas la sociedad, con el         pura 0 una sociedad perfecta. Arrojan un balde de agua fria sobre
fin de convertirla en algo mas agradable para Dios, sabemos que             todo intento de afirmar que Cristo pudiera estar victoriosamente
nunca lograremos perfeccionarla. Los cristianos no son personas             activo en cualquiera de estas areas.
ut6picas. Si bien conocemos el poder transformador del evangelio               La motivaci6n de estas personas tambien es excelente. Si los
y los saludables efectos de la sal y la luz del cristianismo, sabemos       cristianos del «ya» quieren glorificar a Cristo, los cristianos del
tambien que el mal esta instalado en la naturaleza humana y en la           «todavia no» quieren hacer que los pecadores se humillen. Es~~n
sociedad humana. No nos hacemos ilusiones. 5610 Cristo en su                decididos a ser fieles a la Escritura en su enfasis en la depravaclOn
segunda venida va a erradicar el mal y entronizar la justicia para          humana. Pero su pesimismo puede facilmente convertirse en
siempre. A ese dia 10 esperamos con gran ansiedad.                          complacencia; tambien puede conducir a una aceptaci6n del statu
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                       EL CRISTIANO CONTEMPORANEO
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EL CRISTIANO CONTEMPORANEO                                                                                                                                            NOTAS
11  Mt. 11.12; Lc. 16.16.                                                                53 Citado por Bruce Larson en Wind and Fire: Living Out the Book of the Acts
12  Mt. 6.10.                                                                               [Viento y fuego: Reproduciendo ellibro de Hechos] (Word, 1984), p. 11.
13  Mt. 6.33.                                                                               [Lo jocoso (que en buena medida se pierde en la traducci6n) esta
14  Mr. 9.47; d. Mt. 8.11.                                                                  principalmente en la ultima trase (<<I'm going to unscrew the inscrutable»:
15  Mt. 25.34.                                                                              «voy a destornillar 10 inescrutable»), que pierde sentido si se tradujese <<Voy a
16  Mr. 4.26-29; Mt. 13.31-32, 24-29, 36-42.                                                escrutar 10 inescrutable» (N. del T.).]
17  Mr. 4.11.                                                                            54 Dt. 34.10; d. Nm. 12.8; Dt. 3.24.
18  Lc. 20.34-35.                                                                        551 Co. 13.9-12.
19  P. ej., Is. 2.2; Mt. 12.32; Mr. 10.30.                                               561 In. 3.2.
20  Ga. 1.4.                                                                             57 Dt. 29.29.
21  Col. 1.13; d. Hch. 26.18; 1 P.2.9.                                                   58 1 Ts. 4.7-8.
22 Et. 2.6; Col. 3.1.                                                                    59 Ga. 5.16-26.
23 1 In. 2.8.                                                                            602 Co. 3.18.
24 Geerhardus Vos, The Pauline Eschatology [La escatologia paulina] (1930; Baker,        61 Ga. 5.17.
   1979), p. 37; cf. Oscar Cullmann, Cristo y el tiempo (1946; Estela, 1968) y Stephen   621 In. 1.8.
   H. Travis, I Believe in the Second Coming ofJesus [Creo en la segunda venida de       63 Fil. 3.12-14; 1.6.
   Jesus] (Hodder, 1982).                                                                64 Ro. 7.24-25.
25 P. ej., Mt. 13.39; 28.20.                                                             65 P. ej., Lv. 19.2.
26 Ro. 12.2; 13.11-14; 1 Ts. 5.4-8.                                                      66 In. 8.11.
27 Ro. 8.24; 5.9-10; 13.11.                                                              671 In. 2.1; 3.9.
28 Col. 1.14; Et. 4.30.                                                                  68 P. ej., Ro. 7.17, 20; 8.9,11.
29 Ro. 8.15, 23.                                                                         69 H. C. G. Moule, Thoughts on Christian Sanctity [Pensamientos sobre la santidad
30 In. 5.24; 11.25-26; Ro. 8.10-11.                                                         cristiana] (Seeley, 1888), p. 13.
312 Co. 5.17; Ap. 21.5.                                                                  70 Ibid., p. 15.
32 Col. 2.10; Et. 5.18; 3.19.                                                            71 Ibid., p. 16.
33 Sal. 110.1; Ef. 1.22; He. 2.8.                                                        72 J. C. Ryle, Home Truths [Verdades domesticas] (Charles Thynne, novena edici6n,
34 Ro. 8.24.                                                                                sin fecha), pp. 94-95.
35 Fil. 3.20-21; 1 Ts. 1.9-10.                                                           73 2 Co. 12.12.
36 Ro. 8.19.                                                                             74 Ap. 11.15.
37 Ro. 8.22-23, 26; 2 Co. 5.2, 4.                                                        75 Ro. 8.22-23.
38 Mr. 10.30; Hch. 14.22; Ro. 8.17; 1 P.4.12.                                            76 He. 6.5.
39 G. C. Berkouwer, The Return of Christ [EI regreso de Cristo] (1961 y 1963;            772 Co. 4.10-11.
   Eerdmans, 1972), p. 116.                                                              78 Ap. 21.5.
40 Ro. 8.23; 1 Co. 1.7.                                                                  79 1 Ti. 3.15.
41 Ro. 8.25.                                                                             80 Et. 2.14-15.
42 John M. Murray, The Epistle to the Romans, the New International Commentary           81 P. ej., 1 P. 2.5, 9.
   on the New Testament [La epistola a los romanos, el Nuevo Comentario                  82 Ef. 5.27; d. Ap. 21.2.
   Int~rnacional del Nuevo Testamento] (Eerdmans, 1959 y 1965), t. I, p. 310.            83 G. C. Berkouwer, op. cit., p. 138.
43 P. eJ., Is. 32.15; 44.3; Ez. 39.29; Jl. 2.28; Mr. 1.8; He. 6.4-5.                     84 1 n. 6.12.
44 Ro. 8.23.                                                                             85 Ef. 4.3.
452 Co. 5.5; Ef. 1.14.                                                                   86 Mt. 13.30.
46 He. 6.4-5.                                                                            87 Mt. 13.38.
47 Johannes Blauw, The Missionary Nature of the Church [La naturaleza misionera          88 Mt. 13.25.
   de la iglesia] (1962; Eerdmans, 1974), p. 89.                                         89 Mt. 13.41.
48 He. 1.1-2.                                                                            902 P. 3.13; Ap. 21.1.
49 Sal. 119.105.                                                                         91 Mr. 13.7.
50 Pro 25.2.                                                                             92 Is. 2.4.
512 Co. 5.7.                                                                             931 Co. 4.8.
52 Alister McGrath, The Enigma of the Cross [El enigma de la cruz] (Hodder and           94 Oscar Cullmann, Cristo y el tiempo, p. 71.
   Stoughton, 1987), pp. 103-105.
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