¿Qué es la fotosíntesis?
Todos los seres vivos del planeta tienen que alimentarse, y
las plantas, los árboles, las algas y las bacterias también son
seres vivos.
Sin embargo, la forma en la que las plantas y algunas
bacterias marinas se alimentan es algo distinta a la del resto
de los animales: mientras mamíferos, peces, aves y demás
seres vivos consiguen su alimento del entorno que le rodea y
realizar directamente su digestión, las plantas producen su
propio alimento a partir de la fotosíntesis el cual luego
digieren.
Esto no significa que, especialmente las plantas, algas, etc,
no necesiten nutrientes externos. De hecho, sus raíces
absorben agua, minerales y otros nutrientes de la tierra para
precisamente realizar la fotosíntesis de forma correcta.
Lo que sí es importante recordar es que el alimento que
permite a la planta crecer se produce mediante la
fotosíntesis.
¿Cómo se produce la fotosíntesis?
Para que se produzca la fotosíntesis, las plantas necesitan de:
Dióxido de Carbono (CO2) de la atmósfera. Este gas lo producimos los animales
al respirar: inspiramos oxígeno y expiramos Dióxido de Carbono. También lo
producen los vehículos y otro tipo de transportes, las calefacciones o el plástico
cuando se disuelve con los años.
Energía de la luz solar.
Agua y nutrientes que consiguen a través de sus raíces.
Con estos elementos, las plantas ya pueden realizar la fotosíntesis. Este se produce en
cuatro etapas principales:
Absorción
Las plantas poseen también células. Estas se llaman cloroplastos y se encuentran
mayormente en las hojas de árboles y plantas. Los cloroplastos, a su vez, tienen dentro
moléculas. Entre las más importantes está la molécula de la clorofila, que es la que absorbe
desde las hojas la energía de la luz del sol.
Además, las plantas tienen raíces para absorber agua y nutrientes.
Por último, también desde las hojas, las plantas absorben CO2 de la atmósfera para poder
empezar la fotosíntesis.
Circulación
Con el CO2 y la energía de la luz solar que absorben la hojas no es todavía posible realizar
la fotosíntesis. Hacen falta los nutrientes. Estos pasan de las raíces al sistema circulatorio de
la planta o el árbol en forma de savia bruta. Es decir savia que todavía no alimenta a la
planta.
Fotosíntesis
Cuando la savia bruta llega a las hojas, entonces los cloroplastos empiezan a transformar
la energía lumínica, el agua, los nutrientes y el CO2 en energía química como es la
glucosa y otras moléculas complejas. Todas ellas forman la savia elaborada, que ya sí es el
alimento de plantas y algas.
Respiración y eliminación de desechos
La planta aprovecha al máximo la savia elaborada y solo produce un desecho en la
fotosíntesis: el oxígeno, el cual se expulsa durante todo el día.