[go: up one dir, main page]
Scribd
Cargar
223 vistas2 páginas

La Revelación de Dios

Dios se revela a sí mismo al hombre de diversas maneras: a través de la creación natural, en lo profundo del interior humano, y de forma definitiva en Jesucristo mediante su muerte y resurrección. Para que la revelación sea salvadora, el hombre debe recibirla a través de la fe y obediencia, convirtiéndose así en una nueva creación en Cristo y ganando el acceso al Padre. La revelación de Dios es su comunicación salvadora al hombre a lo largo de la historia, la cual se recibe a través de la fe eclesial.

Cargado por

eslatan
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
223 vistas2 páginas

La Revelación de Dios

Dios se revela a sí mismo al hombre de diversas maneras: a través de la creación natural, en lo profundo del interior humano, y de forma definitiva en Jesucristo mediante su muerte y resurrección. Para que la revelación sea salvadora, el hombre debe recibirla a través de la fe y obediencia, convirtiéndose así en una nueva creación en Cristo y ganando el acceso al Padre. La revelación de Dios es su comunicación salvadora al hombre a lo largo de la historia, la cual se recibe a través de la fe eclesial.

Cargado por

eslatan
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 2

La revelación de Dios

1.- Dios se da a conocer

“Quiso Dios con su voluntad y sabiduría revelarse a sí mismo y manifestar su


misterio de su voluntad por Cristo la Palabra hecha carne y con el espíritu Santo,
Pueden los hombres llegar hasta el Padre y participar de la naturaleza Divina en
esta revelación Dios Invisible movido de amor habla a los hombres como a amigos,
trata con ellos para invitarlos y recibirlos en su compañía”.

Dios pues, se revela al hombre a sí mismo mostrando a la vez su plan salvífico


respecto al hombre este proyecto salvífico de Dios no es accesible a la sola fuerza
razonadora del hombre.

Dios se da a conocer al hombre por medio de la creación. Así, en sentido amplio, se


podría hablar de una revelación por la creación. También intuimos su presencia en
lo profundo de nuestro interior: hacia Él, suma Verdad y sumo Bien, tiende todo el
dinamismo humano, y en Él encuentra la felicidad. Pero Dios, en su amor y libertad
absoluta, puede venir al encuentro del hombre en la historia, auto revelársele. De
hecho, fue así y su auto comunicación culminó en la donación de sí mismo en
Jesucristo mediante el Espíritu. La pascua de Jesús, su muerte y resurrección (con
la donación de su Espíritu), es esa culminación, el comienzo de lo definitivo, de la
venida del reinado de Dios.

Pero para que haya revelación, para que sea salvadora respecto al hombre
concreto, ella tiene que ser recibida, necesita la respuesta de nuestra fe. Esto es
esencial al proceso de la auto comunicación de Dios: acoger su Palabra. La Palabra
de Dios se la acoge propiamente en la fe, por la que el hombre se entrega a Dios en
la obediencia de la fe. La fe viva es transformante y el pecador es justificado.

Lo que recibe no es un recuerdo de Cristo, sino al mismo Cristo actuante en su


Espíritu, y así el creyente pasa a ser una nueva creación en Cristo, un hijo de Dios,
con acceso al Padre por Cristo en el Espíritu. La fe es un don gratuito de Dios. Por
eso se puede recibir a Dios sin convertirlo en ídolo, a la medida humana: en el
fondo, Dios se recibe a sí mismo en nuestro acto de fe. La fe es eclesial. ¿Cómo
creeríamos si no se nos anuncia el Evangelio? La Palabra reveladora de Dios
convoca una comunidad, Iglesia, y es confiada a ella para su transmisión. Siempre
que se recibe la Palabra, se produce la revelación para ese individuo o comunidad.
Lo que se revela y comunica es Dios mismo y su plan de salvación. Es la revelación
del reinado de Dios y su venida en la historia y como historia. Se comunica, pues,
al hombre la verdad y amor salvíficos, la vida eterna, la comunión con Dios. Dios es
la Verdad que se comunica. La revelación, por tanto, es la auto comunicación
salvadora de Dios al hombre en la historia, que se recibe en la fe eclesial.
2.- Las Etapas de La Revelación

También podría gustarte