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Estudio Inductivo
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2 JUAN
Autor Alberto Prokopchuk
Texto seleccionado: 2 Juan 1-13
2 Juan 1-3
“El anciano a la señora I Preguntas inductivas
elegida y a sus hijos, a
quienes yo amo en la verdad;
y no sólo yo, sino también
1.1 ¿Quién fue “el anciano”?
todos los que han conocido la 1.2 ¿Quiénes podrían ser “la señora elegida y sus hijos”?
verdad, a causa de la verdad 1.3 ¿Qué dice Juan acerca de la verdad?
que permanece en nosotros, y
estará para siempre con
nosotros. Sea con vosotros Respuesta:
gracia, misericordia y paz, de 1.1 Existen dos teorías sobre “el anciano”. (1) Que se trata del apóstol Juan,
Dios Padre y del Señor
Jesucristo, Hijo del Padre, en
quien escribió el Evangelio, las tres epístolas y el Apocalipsis. (2) La segunda
verdad y en amor.” teoría dice que existió en Asia Menor, a fines del primer siglo, un pastor
conocido como “el Presbítero Juan” o “El Anciano Juan”, quien, según
algunos, fue en realidad el autor de éstas epístolas y no el apóstol Juan. Esta
suposición surgió por una cita que hace Eusebio en su libro Historia del
Cristianismo sobre un fragmento de un libro de Papías (Siglo II) que dice: “yo
trataba de discernir los discursos de los ancianos: qué había dicho Andrés,
qué Pedro, qué Felipe, qué Tomás o Santiago, o qué Juan o Mateo o
cualquier otro de los discípulos del Señor; igualmente, lo que dice Aristión y
el anciano Juan, discípulos del Señor”. Como podemos ver, Papías mencionó
al apóstol Juan en medio de Santiago y Mateo, y luego “el anciano Juan”
junto a Aristión. Y aquí se ve claramente que existieron dos discípulos de
Cristo con el mismo nombre y en el mismo tiempo. Sin embargo, prevaleció
la primera teoría, que fue Juan el apóstol quien, como Pedro, se
autodenominó “anciano” (1 Pedro 5:1), porque fue el apóstol Juan quien
vivió más y realmente era muy anciano cuando escribió esta epístola.
1.2 Sobre quiénes han sido “la señora elegida y sus hijos”, nuevamente las
opiniones difieren: (1) Algunos suponen que en realidad se trataba de una
señora muy importante quien, con sus hijos, eran parte de la iglesia. (2)
Otros, que se trataba de una pastora y sus hijos que servían al Señor,
porque se la llama “la señora elegida”, es decir, elegida para el ministerio.
(3) En tercer lugar, que es la opinión más generalizada y concuerda con el
contexto, que se trata de una iglesia, y “sus hijos” son los miembros de la
misma iglesia.
1.3 (1) En primer lugar, su amor nace de la verdad. Afirma que ama a la iglesia y
a los miembros de la iglesia dentro de la verdad: “a la señora elegida y a sus
hijos a quienes amo en la verdad,” /2) En segundo lugar, el amor de otros se
debe a que han conocido la verdad. Todos los que han conocido la verdad
aman a la iglesia y a sus miembros: “y no solo yo, sino también todos los
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que han conocido la verdad,” (3) Por último dice que ese amor se debe a la
verdad que está y estará siempre: “a causa de la verdad que permanece en
nosotros, y estará para siempre con nosotros.”
2 Juan 4-6
“Mucho me regocijé porque he 2.1 ¿Recordamos el significado de “regocijo”? ¿de qué se regocijó
hallado a algunos de tus hijos Juan?
andando en la verdad,
2.2 ¿Cuál es el amor y cuál es el mandamiento?
conforme al mandamiento que
recibimos del Padre. Y ahora te
ruego, señora, no como
escribiéndote un nuevo
Respuesta
mandamiento, sino el que 2.1 El regocijo es una acción para expresar satisfacción, gozo, alegría. Por
hemos tenido desde el ejemplo, cuando una persona se regocija aplaude, salta o grita. Es decir,
principio, que nos amemos exterioriza así su alegría. Esto es regocijo. Y Juan se regocijó mucho cuando
unos a otros. Y este es el amor,
se encontró con algunos miembros de la iglesia que andaban en la verdad.
que andemos según sus
mandamientos. Este es el Literalmente dice: “Me regocijé muchísimo (en exceso) que he hallado de
mandamiento: que andéis en entre tus hijos que están andando en la verdad”
amor, como vosotros habéis
oído desde el principio.” 2.2 Juan hace aquí un juego de palabras: “Este es el amor: que andemos en sus
mandamientos” y “Este es el mandamiento: que andéis en amor”. Indicando
que el amor nunca debe separarse de los mandamientos. Un mandamiento
obedecido sin amor “de nada sirve” diría el apóstol Pablo, y un amor sin
obedecer los mandamientos no sigue la verdad, es un engaño, una mentira.
2 Juan 7-8
3.1 ¿Qué es “mirar por nosotros mismos”?
“Porque muchos engañadores
han salido por el mundo, que 3.2 ¿Qué significa “galardón”?
no confiesan que Jesucristo ha 3.3 ¿Qué puede ocurrir si no miramos por nosotros mismos?
venido en carne. Quien esto
hace es el engañador y el
anticristo. Mirad por vosotros Respuesta:
mismos, para que no perdáis el 3.1 Mirar por nosotros mismos significa tener cuidado para no equivocarnos, no
fruto de vuestro trabajo, sino errar el camino, no fracasar. La Nueva Biblia Española simplemente traduce
que recibáis galardón
completo. “Atención, no echen a perder lo trabajado”. La esposa, del Cantar de los
Cantares, se lamenta porque no miró por sí misma, es decir, no se ocupó de
cuidar lo que le pertenecía, diciendo “Me pusieron a guardar las viñas; y mi
viña, que era mía, no guardé” (Cantares 1:6b)
3.2 Galardón significa “premio, recompensa”. Es un premio que se otorga en
agradecimiento o reconocimiento por el esfuerzo realizado, por lo que se ha
logrado o también por un servicio. Por ejemplo, se dice que “el premio
Nobel de la Paz, es uno de los galardones máximos que se otorgan.”
3.3 Si no miramos por nosotros mismos podremos perder dos cosas (1)
Primero, nuestro fruto: “para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo”.
O, una mejor traducción sería “para que no echen a perder el fruto de su
trabajo”. Porque uno puede perder el fruto de lo trabajado sin ser
totalmente responsable, pero cuando uno echa a perder algo, queda
establecido que es el único responsable. (2) Segundo, si no nos ocupamos
de nosotros mismos, podemos perder la recompensa “el galardón
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completo” que Dios tiene preparado para los que conservan el resultado de
su trabajo.
2 Juan 9-13
“Cualquiera que se extravía,
y no persevera en la doctrina
de Cristo, no tiene a Dios, el 4.1 ¿Quiénes se extravían y no perseveran?
que persevera en la doctrina 4.2 ¿Cómo debemos comportarnos con los que no traen esta doctrina?
de Cristo, ése sí tiene al
Padre y al Hijo. Si alguno 4.3 En este caso ¿No es falta de amor negarnos a recibir a alguien en
viene a vosotros, y no trae nuestra casa?
esta doctrina, no lo recibáis 4.4 ¿Quiénes son “los hijos de tu hermana, la elegida”? ¿qué nos
en casa, ni le digáis sugiere éste saludo?
¡Bienvenido! Porque el que le
dice: ¡Bienvenido! Participa
en sus malas obras. Tengo Respuesta:
muchas cosas que escribiros,
pero no he querido hacerlo
4.1 Todos los que se extravían, o una mejor traducción sería “los que se pasan
por medio de papel y tinta, de los límites, o sobrepasan, “que van demasiado lejos” (NBE) “el que se
pues espero ir a vosotros y excede” y no perseveran en la enseñanza de Cristo, no tienen a Dios.
hablar cara a cara, para que Algunos exégetas o intérpretes de la Biblia, se han basado en éste versículo
nuestro gozo sea cumplido.
para afirmar que, si una persona que recibió a Cristo, una vez salva, es salva
Los hijos de tu hermana, la
elegida, te saludan. Amén.” para siempre. No puede perder su salvación, porque si tiene a Dios, no se
extraviará, y si tiene a Dios sí o sí va a perseverar. Y si alguien no persevera,
es porque nunca tuvo a Dios, nunca recibió a Cristo aunque se haya
manifestado como creyente.
4.2 A los que no traen la doctrina de Cristo no debemos recibirlos ni darles la
bienvenida. “Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo
recibáis en casa, ni le digáis ¡Bienvenido! Porque el que le dice ¡Bienvenido!
Participa de sus malas obras”. Es evidente que Juan no se refiere a cualquier
persona que viene a nuestra casa, sino a los propagadores de una doctrina
falsa o anticristiana. La Biblia de Jerusalén dice “Si alguno viene a vosotros y
no es portador de esta doctrina, no le recibáis en casa ni le saludéis, porque
el que le saluda se hace solidario de sus malas obras”.
4.3 Para algunos creyentes este punto les resulta conflictivo no dar la
bienvenida y cerrar la puerta a alguien que nos visita, porque suponen que
es una falta de amor y consideración al prójimo y, en consecuencia, pasan
por alto este mandamiento, exponiéndose y exponiendo a toda su familia a
ser cómplices de la diseminación del engaño y la mentira. Porque no recibir
al que hará daño no es falta de amor sino todo lo contrario. Es amor a
Jesucristo y a su enseñanza, es amor a la iglesia que representa el cuerpo de
Cristo, es amor a la propia familia que uno quiere proteger.
4.4 Los “hijos de tu hermana” son los miembros de la iglesia donde se
congregaba Juan, tal como traduce o interpreta la Nueva Versión
Internacional: “Los miembros de la iglesia hermana, la elegida, les mandan
saludos”. Este saludo, tan simple, nos sugiere que no solo los creyentes, de
manera individual, somos todos hermanos en la fe, sino también las iglesias
locales son hermanas entre sí. Y así, como cada uno de nosotros somos
únicos, con características distintivas que forman nuestra identidad,
también cada iglesia local es única y con rasgos particulares que forman
también su identidad. Además, este versículo echa por tierra la teoría que
las iglesias locales no existen y lo que algunos con sorna dicen que “Cristo
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no tiene concubinas sino una sola esposa. Lo cual es cierto en un sentido
pero ¿dónde ubicamos a las iglesias hermanas? ¿son acaso concubinas de
Cristo? ¡Absolutamente no! El mismo apóstol Pablo se refiere al “misterio
de Cristo y la iglesia”, porque es un misterio que haya una sola iglesia, que
es la esposa del Cordero, y a las vez es un misterio que sea una y a las vez
muchas hermanas, es decir, muchas congregaciones diferentes. Por eso,
damos gracias a Dios por nuestra iglesia local que es el cuerpo de Cristo, y
damos gracias a Dios por las demás iglesias hermanas, a las cuales
saludamos, que también son el cuerpo de Cristo. Somos uno y somos
muchos; somos iguales y somos diferentes. Todo para la gloria de Dios.
II Actividad práctica
1. Cada año celebramos reuniones, eventos y actividades con iglesias
hermanas en nuestra propia zona, en el país, y también con iglesias
hermanas en otros países. El grupo podría comprometerse para asistir y
colaborar y también para orar a favor de estas iglesias para que el Señor
las bendiga y prospere. Además, como grupo, podrían escribir una o
varias cartas afectuosas para decirles que están orando por ellos.
III. Sugerencias para el líder del grupo
1. Al mencionar otras iglesias, puede ocurrir que alguno intente criticar o
hablar mal de alguna de ellas solamente porque son diferentes. No
dejes que lo hagan, porque en nuestras diferencias se encuentra la
riqueza y la bendición de Dios. Recuérdales que nuestro amor a Cristo
se demuestra por nuestro amor a la iglesia, y esto incluya a las iglesias
hermanas.
IV. Texto bíblico para memorizar: 2 Juan 1:13
“Los hijos de tu hermana, la elegida, te saludan. Amén.”