DIPLOMATURA EN PNL
HISTORIA PNL
                       Milton Erickson
                        Virginia Satir
                         Fritz Pearls
                       Milton Erickson
                        Virginia Satir
                         Fritz Pearls
                       Milton Erickson
                        Virginia Satir
                         Fritz Pearls
¿QUÉ ES?
La PNL (Programación Neurolingüística) constituye un modelo formal y
dinámico de cómo funciona la mente y la percepción humana, cómo
procesa la información y la experiencia y las diversas implicaciones que
esto tiene para el éxito personal. Con base en este conocimiento es
posible identificar las estrategias internas que utilizan las personas de
éxito, aprenderlas y enseñarlas a otros para facilitar un cambio evolutivo y
positivo.
La Programación Neurolingüística, por analogía con el ordenador, utiliza
los patrones universales de comunicación y percepción que tenemos para
reconocer e intervenir en procesos diversos (aprendizaje, desarrollo
personal, afrontar el estrés, negociación, gestión de conflictos, superación
de fobias, etc.).
El campo de trabajo es tan amplio como lo es el de las relaciones
interpersonales.
Además, la PNL investiga los procesos que hacen que transmitamos
nuestra representación del mundo a través del lenguaje. Es por tanto una
aplicación práctica que nos permite, mediante técnicas y herramientas
precisas, reconocer y desarrollar habilidades para el crecimiento personal
y la mejora de las relaciones interpersonales. Pero sobre todo, es como si
tuviéramos incorporada una “máquina de la verdad” que podemos
manejar de manera infalible en un 99% de los casos.
¿QUÉ SIGNIFICA?
PNL significa Programación Neurolingüística. “Programación” se refiere a
nuestra aptitud para producir y aplicar programas de comportamiento.
“Neuro” se refiere a las percepciones sensoriales que determinan nuestro
estado emocional subjetivo. “Lingüístico” se refiere a los medios de
comunicación humana, tanto verbales como no verbales. Si se interpreta
el concepto literalmente, podríamos relacionarlo con la informática.
Para comprender cómo se da el proceso de cambio, podríamos imaginar a
una persona introduciendo datos en una (cerebro), quien procesa,
almacena y se actualiza cuando las circunstancias lo requieren. Los datos
son las experiencias sensoriales (lo que se oye, siente, palpa, saborea, ve).
Todo esto es procesado y almacenado. Cuando se debe decidir cómo
actuar ante determinada situación, los datos se actualizan y se antepone
el que decidirá cómo tomar la decisión.
La PNL parte de una experiencia sensorial específica almacenada en el
cerebro. Lo importante para trabajar con ella, es conocer la estructura y
las condiciones en las que se procesó y almacenó la experiencia.
¿PARA QUÉ?
La PNL se puede utilizar para desarrollar de manera rápida y eficaz un
proceso de aprendizaje y así superar una situación de estrés, de conflicto,
negociar con mayor ventaja frente a nuestros interlocutores, etc.
En realidad, nos permite conocer la percepción de las otras personas a
quienes tenemos enfrente o a las propias. Es un complemento en el
desarrollo de la inteligencia emocional. Entre otras cosas, la PNL:
      Aumenta de manera notable y rápida la autoconfianza.
      Mejora las relaciones interpersonales.
      Desarrolla el crecimiento personal y profesional hacia el éxito.
      Nos permite convertirnos en quien deseamos y queremos ser.
      Sirve para reducir el estrés.
    Nos permite negociar y solucionar conflictos de manera positiva.
¿QUIÉNES?
Comenzó a utilizarse por pedagogos y psicólogos. Los primeros, para
mejorar los procesos de enseñanza-aprendizaje; los segundos, como una
forma de terapia eficaz y rápida. De este modo, la PNL se extendió al
ámbito empresarial y al autodesarrollo de la mano de directivos y otros
profesionales.
Así, profesionales de otras disciplinas (economía, recursos humanos,
comunicación, etc.) la utilizan como una herramienta de demostrada
utilidad en entrevistas personales, comunicación, negociación, entre otras.
La ventaja principal de la utilización de la PNL consiste en la capacidad que
tenemos para reprogramarnos y superar o afrontar situaciones que en
otras condiciones no podríamos.
A modo de guía exponemos los ámbitos de aplicación más usuales:
    Salud: En aquellas patologías relacionadas con el estrés, en la
     somatización, alergias, como coadyuvante de terapia tradicional, y
     disfunciones en las que se requiera de un especial autocontrol. La
     OMS afirma que más del 90% de las enfermedades tiene
     componentes psicosomáticos. Esto quiere decir que si nos
     liberamos de los patrones de pensamiento que nos provocan
     malestar (miedos, falta de perdón, ansiedad, juicios negativos, etc.)
     nuestra salud podrá mejorar notablemente.
    Liderazgo: El liderazgo efectivo consiste en ser capaces de
     liderarnos a nosotros mismos. Poder alinear nuestros
     pensamientos con nuestras emociones y nuestras actitudes es
     fundamental para desarrollar nuestros talentos, lograr los objetivos
     y colaborar con una fuerte salud física y mental, ya que al eliminar
     los conflictos internos aumentamos el estado de congruencia. Este
     estado de congruencia implica alinear lo que pensamos, sentimos,
     decimos y hacemos; y que todo ello vaya de acuerdo con nuestros
     valores. Este proceso permite que la palabra tenga fuerza de
     realización y convencimiento para, de esa manera, liderarme a mí
     mismo y a los demás.
    Deportes: Al deportista le permite mejorar su rendimiento de
     manera espectacular. En la escuela deportiva se utiliza para el
       aprendizaje de diversos deportes como tenis, golf, tiro, ciclismo y
       atletismo, entre otros. Los deportistas de élite afirman que más del
80% del rendimiento deportivo tiene que ver con la PNL. Sin embargo, se
entrena la parte física y técnica casi con exclusividad.
    Empresas: Es el más reciente de los ámbitos de aplicación. Qué
     duda cabe de los aportes en trabajo en equipo, solución de
     conflictos, administración de personal, liderazgo, motivación,
     comunicación, creatividad, planificación estratégica, toma de
     decisiones, adaptación al cambio, selección de personal, evaluación
     de desempeño y ventas.
 Desarrollo y mejora personal: Es este otro de los campos donde la PNL
se mueve con soltura, en áreas específicas, como la autoestima, la
asertividad, las relaciones de pareja, las relaciones interpersonales, los
conflictos, el manejo de las crisis personales y la orientación hacia el éxito,
por ejemplo.
 Educación: Hay varias áreas dentro de la educación: por un lado en la
relación enseñanza-aprendizaje en un contexto práctico y dirigido a
resultados y a solucionar problemas de aprendizaje, aumento de la
creatividad, aprendizaje de las matemáticas, aprendizaje de la física y la
química, etc. Por otro lado, en la mejora de las relaciones en el aula:
solución de conflictos y mejora de la eficacia docente.  Otros campos
como la política, las relaciones públicas, las ventas o la comunicación
también se benefician de las aplicaciones de este modelo.
La PNL es un arte y una ciencia a la vez; es una combinación de elementos
y aportes personales (arte), y también es una ciencia desde el punto de
vista de los métodos y procesos que utiliza, y que provienen de individuos
sobresalientes en determinados campos de estudio, que obtuvieron
resultados también sobresalientes en los mismos. Estos procesos
probados constituyen modelos que aportan un importante bagaje de
información, técnicas y habilidades que, en su conjunto, son una
contribución aplicable a diferentes áreas y disciplinas: educación y
aprendizaje, asesoramiento, negocios, terapias, familia, etc. En sus inicios,
uno de los usos y objetivos de la PNL consistió en identificar aquellas
estrategias internas de personas con éxito, que podían servir para
modelar y enseñar a otros a alcanzar la excelencia en todos los ámbitos de
la vida en que una persona se desarrolla. La PNL se sirve de algunas
ciencias auxiliares. En primer lugar de la neurología, que estudia cómo
opera el sistema nervioso y cómo se utilizan los sentidos. Por otro lado, en
el mismo campo de la neurología la PNL se concentra mucho en lo que se
conoce como los “programas mentales”, es decir, las estrategias o
secuencias internas realizadas por la mente antes de llevar a cabo una
tarea o actividad específica. También podemos destacar la lingüística, que
ocupa un lugar fundamental en cuanto a los aspectos relacionados con la
comunicación que se establece con el medio externo. La PNL consta de
múltiples ventajas:
 Permite una comunicación más efectiva y un mayor desarrollo personal.
 Es una habilidad práctica que crea los resultados que se quieren ver en el
mundo, mientras se valora a los demás en el proceso.
 Marca la diferencia entre lo excelente y lo normal.
Historia de la PNL
La PNL surgió en los años sesenta, en Santa Cruz, California, a partir de las
investigaciones realizadas por los norteamericanos Richard Bandler
(estudiante de psicología e interesado en la psicoterapia) y John Grinder
(profesor de lingüística en la Universidad de California), que consistían en
dar una explicación a por qué ciertos terapeutas obtenían mejores logros
y se destacaban por encima de los otros de su misma generación.
Específicamente, el estudio comenzó considerando el enfoque de tres
grandes terapeutas de la época: Fritz Perls, Virginia Satir y Milton Erickson.
Virginia Satir, reconocida como la mejor terapeuta familiar de nuestros
tiempos. Fritz Perls, creador de la terapia Gestalt que posibilita el
desarrollo total del ser humano, y el Dr. Milton H. Erickson, máximo
exponente de la hipnosis contemporánea y fundador de la primera
escuela de hipnosis. Estos “magos” de la terapia moderna tenían
comportamientos en común que hicieron que se destacaran de manera
muy prominente en comparación con el resto de su generación. Virginia
Satir Milton Erickson Fritz Perls Grinder y Bandler no tenían la intención de
fundar una nueva escuela de terapia, sino de develar o descubrir, por así
decirlo, ciertos patrones de excelencia de los psiquiatras sujetos de
estudio. De modo que no estudiaron sus teorías propiamente dichas, sino
los modelos de excelencia empleados por ellos, que funcionaban en la
práctica y que además podían ser aprendidos e incorporados por otras
personas con mínimos conocimientos de psicología. Descubrieron que
estos tres destacados profesionales tenían personalidades muy diferentes,
e inclusive opuestas, en muchos puntos de vista. Sin embargo, y para
sorpresa de ellos, utilizaban patrones muy similares en lo esencial. Grinder
y Bandler los identificaron, depuraron y construyeron un nuevo modelo de
trabajo (metamodelo del lenguaje), que hoy puede servir a cualquier
persona y en distintos contextos terapéuticos.
Con los resultados obtenidos de sus cuidadosos estudios, en los años
setenta publicaron su primera obra titulada La estructura de la magia
(1975, 1976), que se centraba en identificar los patrones verbales y
conductuales particulares de estos terapeutas. Años después publicaron la
segunda parte, luego de su contacto con el famoso antropólogo Gregory
Bateson (antropólogo británico), destacado en la comunicación y teoría de
los sistemas. La contribución de Bateson a la PNL fue importante. Con los
nuevos estudios ampliaron y mejoraron aún más el metamodelo del
lenguaje, diversificándolo y estructurándolo en cuanto a técnicas,
estrategias y habilidades para poder transmitirlas al mundo entero. Los
libros que le siguieron a estas dos primeras publicaciones fueron: Patrones
1 y 2, sobre el trabajo de Erickson con hipnoterapia. Hoy en día estos
trabajos siguen siendo difundidos en todo el mundo y se encuentran
traducidos a muchos idiomas. Luego, la PNL se desarrolló en dos
direcciones complementarias:
1. Proceso para descubrir patrones que permitan a quien los utiliza
sobresalir en determinadas áreas y disciplinas.
  2. Formas de pensar y comunicarse empleadas por personas
sobresalientes, que pueden utilizarse para provecho propio.
Hemisferios cerebrales Así como los hombres necesitan las dos piernas
para caminar bien, los ojos para tener una buena visión y ambas manos
para desenvolverse mejor, de igual manera sucede con el cerebro. Sin
embargo, se sabe que aprovechamos solo un 10% del cerebro. 10 FICDE
Consta de dos hemisferios que se encuentran relacionados con áreas muy
diversas de actividad, y funcionan de modo muy diferente, aunque
complementario porque para realizar cualquier tarea necesitamos recurrir
a los dos hemisferios. Podríamos decir que cada hemisferio, en cierto
sentido, percibe la realidad y procesa la información a su manera. ¿Qué
sucede con la enseñanza? Se da prioridad al desarrollo del hemisferio
izquierdo, sin aprovechar la plenitud del contenido que nos brinda el
hemisferio derecho. Ambos hemisferios tienen funciones totalmente
distintas, procesan la información de forma diferente, pero son
complementarios. Cuando trabajamos con ambos hemisferios en forma
equilibrada y armónica, trabajamos con una capacidad mayor y los
resultados exitosos son evidentes. Equilibrar e integrar ambos
hemisferios, es el desafío para que podamos parecernos a los grandes
genios de la humanidad. Parece increíble, ¿no? Pero la realidad es que
desarrollando las capacidades que nos brinda el hemisferio derecho,
aumentaremos el coeficiente intelectual y, en consecuencia, también
nuestra autoestima. Hemisferio izquierdo Este hemisferio es conocido
como la parte dominante. Procesa el lenguaje, la información analítica y
secuencial, paso a paso, de forma lógica, racional y lineal. Analiza, abstrae,
cuenta, mide el tiempo, planea procedimientos paso a paso, verbaliza.
Este lado absorbe rápidamente los detalles, hechos y reglas.
Generalmente se asocia con todo lo consciente. Hemisferio derecho Se
especializa en la percepción global sintetizando la información que le
llega. Con él vemos las cosas en el espacio, y cómo se combinan las partes
para formar el todo, entendemos las metáforas, soñamos y creamos
nuevas combinaciones de ideas. No procesa la información por partes,
sino que busca pautas generales, del todo a las partes, partiendo de la
imagen global. Está asociado con lo inconsciente.
A continuación, un breve resumen y ejemplos que simplifican las
características más importantes de los dos hemisferios.
HEMISFERIO IZQUIERDO:
   Verbal: Usa palabras para nombrar, describir, definir
   Analítico: Estudia las cosas paso a paso y parte a parte.
   Simbólico: Emplea un símbolo en representación de algo. (ej. el
    signo +)
   Abstracto: Toma un pequeño fragmento de información y lo
    emplea para representar el todo.
   Temporal: Sigue el paso del tiempo.
   ordena las cosas en secuencias: empieza
   por el principio y relaciona el pasado con
 el futuro, etc.
 Racional: Saca conclusiones basadas en la razón y los datos.
 Digital: Usa números, como al contar.
 Lógico: Sus conclusiones se basan en la lógica: una cosa sigue a la
  otra en un orden lógico. Por ejemplo, un teorema matemático o un
  argumento razonado.
 Lineal: Piensa en términos de ideas encadenadas, un pensamiento
  sigue a otro, llegando, a menudo, a una conclusión convergente
 Lenguaje: Es la palabra
   HEMISFERIO DERECHO
 No verbal: Es consciente de las cosas, pero le cuesta relacionarlas
  con las palabras
 Sintético: Agrupa las cosas para formar
 conjuntos.
 Concreto: Capta las cosas tal como son, en el momento presente.
 Abstracto: Toma un pequeño fragmento de información y lo
  emplea para representar el todo.
 Analógico: Ve las semejanzas entre las cosas; comprende las
  relaciones metafóricas.
 Atemporal: Sin sentido del tiempo,
 centrado en el momento presente.
 No racional: No necesita una base de razón ni se basa en los
  hechos, tiende a posponer los juicios.
 Espacial: Ve donde están las cosas en relación con otras cosas, y
  cómo se combinan las partes para formar un todo.
 Intuitivo: Tiene inspiraciones repentinas, a veces basadas en
  patrones incompletos, pistas, corazonadas o imágenes visuales.
 Holístico: Ve las cosas completas, de una
 vez: percibe los patrones y estructuras
 generales, llegando, a menudo, a conclusiones divergentes.
   Lenguaje: Es la imaginación.
   Lenguaje verbal y no verbal
   Comunicación y sintonía La palabra “comunicación”: deriva de
   “común”, lo que tenemos en común. Puede aplicarse casi a
cualquier tipo de relación con otras personas: una conversación
casual, el intento de persuadir a otro, la enseñanza, una
negociación, etc. La comunicación es un ciclo o círculo en el que
intervienen por lo menos dos personas; en ese ciclo hay una
reacción y una respuesta en la que subyacen pensamientos y
sentimientos. También en la comunicación hay un mensaje, las
palabras, e intervienen otros elementos, como el tono de voz, los
gestos, las posturas, ciertas expresiones.
Comunicación intrapersonal Es la comunicación que uno
mantiene consigo mismo, el diálogo interno. Dentro de nuestro
cerebro hay una voz que traduce a la mente lo que uno tiene
escrito en su propio manual. Esa voz del pensamiento consciente
tiene total intimidad con cada uno, y puede decirnos cosas que
jamás diríamos a otras personas. Esa voz eres tú; se trata de tu
comunicación intrapersonal. Cuando mantenemos con nosotros
mismos una conversación acerca de cada uno de nosotros, esa
conversación nos acompaña allí donde estemos. Por eso, si tienes
una mala opinión de ti en cualquier aspecto (por ejemplo, “No me
desempeño bien en los deportes”, “No tengo suerte en el amor”,
“Mi destino es ser pobre” y otras cosas parecidas), esa opinión irá
contigo aunque te mudes a otro país o cambies de profesión, de
religión, de pareja, etc. Y todo seguirá ocurriendo para ti de la
misma manera. ¿Por qué ocurre esto? Porque todo lo que tiene
lugar en el universo físico sucede primero en la mente. Cualquier
evaluación que hagas respecto a ti mismo es una predicción (un
pronóstico) de tu comportamiento. Así pues, tienes un
pensamiento que genera en tu cerebro un sentimiento (estado
mental), que a su vez genera en ti un comportamiento. Y eso es
algo que funciona en los dos sentidos. Es decir, tu comportamiento
genera sentimientos, que a su vez generan pensamientos. Esto
significa que podemos cambiar a partir de nuestro comportamiento
(adoptando actitudes más positivas) procurando hacer cosas para
las que no nos creíamos capacitado o a partir de nuestro
pensamiento, ya que esa voz interior (el “presidente de la
empresa”) nos pertenece.
No hay manera de “no comunicar”, siempre hay cierto mensaje que
se está dando, incluso cuando no se dice nada. Por ello, la
comunicación es mucho más que las palabras que emitimos; estas
forman solo una parte pequeña de la expresividad y del mensaje
general que queremos transmitir. Los estudios indican que aparte
del mensaje que se escucha, los receptores perciben otros
mensajes. Si bien los porcentajes mencionados pueden variar de
acuerdo a situaciones especiales, es indiscutible que el lenguaje
corporal y el tono de voz impactan profundamente en el significado
de lo que queremos expresar. Por ejemplo, el vocablo “Hola”
puede significar un simple reconocimiento, una amenaza o un
agradable saludo dependiendo del tono de voz y el lenguaje
corporal que lo acompañan. En las diferentes culturas se dan
muchos matices de significado en las conversaciones cotidianas y,
con toda probabilidad, tenemos múltiples maneras de decir “No”,
de modo que signifique una ironía, una negativa, etc. Lo mismo
sucede con el resto de las expresiones. Si las palabras que
utilizamos para comunicar nuestro mensaje son el contenido, las
posturas, gestos, expresiones faciales y tono de voz son el contexto
en el que el mensaje está enmarcado, y juntos dan sentido a la
comunicación. Para ser un eficaz comunicador utilizamos
habilidades comunicativas que tienen el objetivo de influir en las
demás personas, pero estas herramientas no tienen la misma
connotación negativa que la manipulación, en la que alguien está
arrastrando a otra persona a hacer algo en contra de sus intereses.
La PNL es la capacidad de responder de forma afectiva a los demás
y comprender y respetar su modelo del mundo. El círculo de la
comunicación ilustra que lo que uno hace influye en otras
personas, y lo que los demás hacen también influyen en uno. Cada
uno debe hacerse responsable de la parte que le toca en ese
diagrama que muestra el sentido de la comunicación, aunque no
siempre seamos conscientes de los efectos que producimos.
El lenguaje, los sentimientos y las convicciones de cada persona
actúan como un filtro. Son como un mapa de nuestros
pensamientos, recuerdos y experiencias pasadas. Por eso, la PNL
ofrece una manera de pensar acerca de nosotros mismos y el
mundo, y actúa como un filtro en sí misma. Las técnicas de PNL son
neutrales; cómo se usan y con qué intenciones dependerá de las
habilidades y motivaciones de cada persona. Es posible respetar y
apreciar el modelo del mundo de otra persona, manteniendo, al
mismo tiempo, nuestra integridad. La sintonía, clave en la
comunicación También conocida como “empatía”, la sintonía es un
elemento esencial para comunicarse y establecer un ambiente de
credibilidad y confianza. Esta palabra deriva del término riego
empátheia, recibe también el nombre de “inteligencia
interpersonal” (término acuñado por Howard Gardner) y se refiere
a la habilidad cognitiva de una persona para comprender el
universo emocional de otra. La empatía es fundamental en la
comunicación humana; es la capacidad de tener en cuenta los
aspectos positivos del otro, de compartir aspectos en común; y eso
depende de uno mismo, no del otro. La sintonía es como un baile
en el que cada integrante responde y refleja los movimientos del
otro con movimientos propios. El lenguaje, el tono y las posturas o
gestos, son habilidades complementarias. Estas expresiones que
igualan las del interlocutor no son una imitación ofensiva, sino una
correspondencia que tiende un puente para comprender el mundo
de los demás.
Crear sintonía es una opción La única manera de comprobar
la efectividad de la sintonía o de los efectos que la misma puede
producir es probándola. En PNL hay dos conceptos relacionados
con la sintonía, ese puente que permite la comprensión y el
contacto en el proceso de la comunicación. Estos dos conceptos
son compartir y dirigir. Los mejores profesores son aquellos que
establecen una sintonía y entran en el mundo de sus alumnos; esto
posibilita que ellos accedan a una mayor comprensión de la
materia o habilidad. Una buena relación entre los profesores y los
estudiantes hace que el proceso de enseñanza sea una tarea más
sencilla y con mejores resultados. Compartir, establece un puente
mediante la sintonía y el respeto. En cambio, dirigir es cambiar su
propia conducta para que la otra persona le siga. El liderazgo no
funciona sin sintonía, pues no se puede guiar a alguien a transitar
por un puente que aún no ha sido construido. Quien está
preparado para modificar su propia conducta para que esta se
amolde a su objetivo, estará preparado para tener más éxito. No
así aquellos que mantengan su conducta sin cambios y esperen que
los demás sean quienes le comprendan y amolden. Crear sintonía
es una opción.
¿Qué significa “compartir y dirigir”? Compartir es una
habilidad que se emplea cuando se discute con alguien acerca de
intereses comunes o aficiones. En ese tipo de conversaciones se
comparten emociones, pero no siempre son las correctas. Por
ejemplo, con frecuencia cuando alguien está triste o depresivo, con
la intención de ayudarlo usamos gestos y tonos que levanten su
ánimo. Expresiones tales como “¡Ánimo!”, con un sonoro grito,
probablemente harían que la persona en problemas se sintiera
peor o nos rechazara por nuestro exagerado entusiasmo. En
cambio, reflejar e igualar los gestos, y emplear un tono suave y
acorde a los sentimientos del otro, podría predisponerlo a ver las
cosas de manera positiva. Una vez que el puente esté construido, la
otra persona nos seguirá porque percibirá de manera inconsciente
que hemos respetado su estado. Esta forma de compartir y dirigir
emocionalmente es una poderosa herramienta a la hora de
aconsejar y también en las terapias.
Ante una persona colérica, por ejemplo, lo aconsejable es bajar su
cólera a un nivel inferior. Una vez que los interlocutores estén en
armonía podrá guiar a la otra persona a bajar gradualmente su
estado, usando un tono de voz más calmado. Por otra parte, para
responder al sentido de emergencia de otra persona, puede
compartir e igualarse mediante el tono de voz: hablando un poco
más alto y rápido de lo normal. Compartir y dirigir son elementos
básicos de la PNL, es una manera de respetar y tener en cuenta el
modelo del mundo de la otra persona. Es una manera positiva y
poderosa de encaminarse hacia un acuerdo o meta.
La sintonía es el contexto general que rodea al
mensaje verbal. El significado de la comunicación
es la respuesta que provoca, de modo que
conseguir la sintonía es la habilidad para provocar
respuestas.
Límites para alcanzar la sintonía Existen dos límites para la
habilidad de lograr sintonía: en primer lugar, el grado de habilidad
para percibir o captar las posturas, gestos y formas de hablar de un
interlocutor. En segundo lugar, la habilidad para corresponder a las
mismas o “bailar el mismo compás” que la otra persona.
Sistemas representativos
La PNL enseña que si se mejora la capacidad de los sentidos se
puede transformar la vida. La propuesta consiste en desarrollar una
mayor sensibilidad sensorial. Todo conocimiento del medio exterior
e interior proviene de la decodificación y de la interpretación de los
mensajes sensoriales surgidos de los diferentes receptores
sensoriales distribuidos a través de todo el cuerpo (ojos, oídos,
boca, piel), nuestros puntos de contacto con el mundo. Las
sensaciones dan nacimiento a las percepciones, que consisten en
una toma de conciencia de los sucesos exteriores. Este proceso nos
lleva al conocimiento de nuestro medio ambiente.
El mundo que percibimos no es el mundo real, sino un “mapa”
hecho neurológicamente. Ese mapa que construimos está filtrado
por nuestras convicciones, intereses o preocupaciones. Por ello, a
mayor habilidad para enriquecer la información percibida por
nuestros sentidos, más mejorará nuestra calidad de vida en las
diferentes áreas. Este desarrollo de la agudeza sensorial es una
meta explícita de la PNL. Pensar es una actividad tan obvia y común
que nunca nos detenemos a “pensar” en ella. Tendemos a pensar
en lo que estamos pensando, y no en cómo lo estamos haciendo.
La mayor parte de nuestros pensamientos son una mezcla de
impresiones sensoriales recordadas y construidas. Es una manera
de utilizar los sentidos interiores que fueron almacenados en algún
momento. Por ejemplo, el sabor de una comida que resultó
sabrosa, el crujido bajo los pies de las hojas en otoño, la fragancia
de un bosque de eucaliptos… Empleamos los mismos caminos
neurológicos para representar la experiencia en nuestro interior
que para experimentarla directamente. En la PNL la manera en que
recogemos, almacenamos y codificamos la información en nuestra
mente, como resultado de lo que perciben nuestros sentidos, se
conoce con el nombre de “sistemas representativos”.
 Sistema visual: puede ser usado externamente para mirar el
mundo, o internamente cuando visualizamos algo en nuestra
mente.
  Sistema auditivo: también puede ocuparse del mundo externo o
del interno.
  Sistema del tacto: llamado también cinestésico o kinestésico. La
cinestesia externa incluye las sensaciones táctiles como el tacto, la
temperatura y la humedad. La cinestesia interna incluye
sensaciones recordadas y emociones. El sistema vestibular es una
parte importante del sentido cinestésico, puesto que nos permite
mantener el equilibrio y la conciencia del propio cuerpo en el
espacio. Este sentido tan importante y amplio es considerado por
muchos como un sentido totalmente independiente.
Los sistemas visual, auditivo y cinestésico son los sistemas
representativos primarios empleados en la cultura occidental. Por
otra parte, los sentidos del gusto y el olfato, no son tan
importantes y a menudo están incluidos en el sistema cinestésico.
Estos últimos sirven como nexos inmediatos a las imágenes,
sonidos y escenas asociadas con ellos.
El ser humano constantemente emplea los tres sistemas primarios
que se mencionaron, aunque no siempre es consciente de ellos de
la misma manera, y tiende a favorecer a unos por encima de otros.
Los sistemas representativos no se excluyen mutuamente, por
ejemplo, es posible visualizar una escena, tener las sensaciones
asociadas a ella y escuchar los sonidos simultáneamente, aunque
ciertamente es difícil atender a las tres cosas a la vez y algunas
partes del proceso serán inconscientes.
Sistemas de uso preferido
  Cuando una persona tiende a utilizar de manera habitual un
sentido de forma interna, en PNL se considera que ese es su
sistema preferido o primario. No hay ningún sistema, de forma
absoluta, que sea mejor que otro; esto dependerá de las
habilidades naturales de cada persona y del uso o desarrollo
natural que cada persona tenga de determinado sistema. Por
ejemplo, difícilmente alguien se destacará en arquitectura si
naturalmente no tiene la habilidad para hacer imágenes mentales
claras y bien construidas. Al músico le sucederá lo mismo con la
habilidad para escuchar los sonidos; al deportista con la conciencia
cinestésica, etc. El conocimiento de nuestro sistema predominante
nos ayuda a saber cuál es la manera óptima en la que podemos
comunicarnos con una determinada persona. También nos permite
darnos cuenta que no todas las personas funcionan igual a la hora
de procesar la información del mundo exterior. Una persona
auditiva va a responder más a las palabras que a las imágenes. Sin
embargo, una persona cinestésica será más receptiva al contacto
corporal. Ignorar esta distinción puede causar mucha frustración.
 Veamos las características de cada sistema representativo:
 VISUAL
 El sentido predominante es la vista, por este motivo piensa en
imágenes.
 Prefiere que se le explique a través de imágenes y gráficos.
 Mira a los ojos al hablar y espera que el otro lo mire.
  En general habla muy rápido.  Utiliza palabras visuales como por
ejemplo: ver, imagen, foco, escena, visualizar, perspectiva, brillo,
reflejo, clarificar, examinar, ojo, ilustrar, observar, revelar, ver,
mostrar, visión, oscuridad, claridad, etc.
 Utiliza también frases visuales como por ejemplo: “Ahora veo lo
que dice” o “La situación no está para nada clara”.
 En general, es multitarea. Aprende yendo de lo general a lo
particular.
 Cuida su apariencia y manera de vestirse. Tiende a vestirse con
colores llamativos.
 Tiende a sentarse al borde de la silla.
Las personas visuales tienden a ser las más aceleradas, dado que
las imágenes en el cerebro se procesan a una gran velocidad. Como
consecuencia de esto pueden aburrirse fácilmente y tender a
pensar que las personas con otro sistema representativo
predominante son lentas o poco proactivas.
AUDITIVO
  El sentido predominante es el oído; presta mucha atención a las
palabras.
 Tiende a recordar lo escuchado.
 No necesariamente mira a los ojos al hablar con alguien ni espera
que lo miren. Es posible que incline la cabeza para escuchar mejor.
Puede entender un concepto sin ningún soporte visual.
 Habla a una velocidad media.
  Utiliza palabras auditivas como por ejemplo: decir, acento, ritmo,
tono, sonido, timbre, preguntar, discutir, notar, oír, escuchar,
gritar, silencio, mudo.
  Utiliza también frases auditivas, como por ejemplo: “Me suena lo
que decís” o “Nunca había oído algo así”.
 Le gusta que le expliquen los conceptos claramente, sin importar
cuánto pueda tardar.
 Aprende paso a paso. Necesita aprender un concepto antes de
pasar al siguiente.
Las personas auditivas procesan la información a una velocidad
media
CINESTÉSICO o KINESTÉSICO
 Una persona cinestésica percibe preferentemente a través de
sensaciones o sentimientos.
 No necesariamente mira a los ojos al hablar. En general mira
hacia abajo, ya que busca conectarse con sus sentimientos.
 Es el más lento de los tres sistemas representativos.
 Se sienta en una posición más relajada.
 Está muy atento a lo que siente y a sus emociones. Confía mucho
en sus sentimientos.
 Utiliza palabras cinestésicas: tocar, contacto, sólido, frío, áspero,
agarrar, presión, sensible, estrés, tensión, suave, rascar, sufrir,
tangible.
 Utiliza frases cinestésicas, como por ejemplo: “Estamos en
contacto” o “Tu idea es muy sólida”.
 Aprende haciendo, tocando. Las personas cinestésicas son las
más lentas de los tres grupos. Se toman su tiempo para hacer las
cosas, dado que buscan conectarse con lo que están sintiendo. Sin
lugar a dudas, los sistemas influyen en la comunicación, pues
cuando usamos las palabras para describir nuestros pensamientos,
por lo general nuestra elección de palabras indicará que sistema
representativo empleamos como predominante. Por ejemplo, tres
personas diferentes pueden describir un libro que hayan leído
como: “brillante”, “escalofriante” o “equilibrado”, y cada una de
estas palabras será un indicio del sistema representativo favorito
de cada persona. Para un entendimiento mayor en el proceso de
establecer una sintonía con otra persona, el mayor secreto
consistirá en su agudeza acústica para escuchar o captar el modelo
de lenguaje de la otra persona. Y, además, en utilizar el lenguaje
adecuado para responder utilizando el mismo sistema. En cambio,
cuando uno se dirige a un público numeroso, es buena idea
emplear una mezcla de sistemas, de manera que los pensadores
auditivos le escuchen alto y claro, los visualizadores vean lo que
dice, y los pensadores cinestésicos puedan sentir los mensajes. De
otra manera, nos estaríamos arriesgando a que las dos terceras
partes de la audiencia no sigan su explicación si se limita a
exponerla en un solo sistema representativo.
El sistema director De la misma forma que tenemos un sistema
representativo para nuestro pensamiento consciente, tenemos
también un medio preferido de llevar información a nuestros
pensamientos conscientes. Se trata del sistema director que
empleamos para remontarnos a una memoria. Por ejemplo, si uno
recuerda sus vacaciones y la relajación que obtuvo en ese
momento, pero la manera en que le viene a la mente es por medio
de una imagen; el sistema director será el visual, pero el preferido
será el cinestésico. Además, una persona puede tener un sistema
director distinto para diferentes tipos de experiencias. Por ejemplo,
puede emplear imágenes para recordar experiencias dolorosas, y
sonidos para rememorar experiencias agradables.
Test VAK para descubrir si eres Visual, Auditivo o
Cinestésico
  ¿Eres visual, auditivo, cinestésico? O, lo que es lo mismo,
¿entiendes el mundo a través de las imágenes, los sonidos o las
experiencias? Todos los seres humanos pertenecemos a una de las
tres tipologías, descubrir tu sistema preferido te puede resultar útil
para comunicarte y relacionarte con los demás, contigo mismo y
con tus métodos de aprendizaje. Responde al siguiente test
extraído del libro de Robert Dilts Coaching, herramientas para el
cambio, para descubrir cuál de las respuestas se ajusta más a tus
preferencias.
1. Evoca alguna ocasión en la que hayas aprendido a hacer algo
nuevo para ti, como por ejemplo un juego de mesa, ¿cómo
aprendiste mejor?
a) Por medio de indicaciones visuales: imágenes, diagramas o
instrucciones escritas.
b) Escuchando las explicaciones de alguien. c) Experimentando,
probándolo tú mismo.
2. Tienes dificultades para encontrar el hotel en el que te alojas en
una ciudad donde solo llevas unos pocos días, ¿qué haces?
a) Sigo conduciendo en busca de alguna referencia conocida.
b) Pregunto.
c) Miro el mapa.
3. Tienes que aprender un nuevo programa informático, ¿qué
haces?
a) Le pido a un amigo que me ayude.
b) Consulto el manual que viene con el programa.
c) Llamo a un conocido y le pregunto.
 4. No estás muy seguro si se escribe “haber” o “a ver”, ¿qué haces?
a) Me imagino ambas versiones mentalmente y elijo la que me
parece correcta.
 b) Las escucho mentalmente.
c) Las escribo, y elijo la que me parece mejor.
 5. Prefieres a los maestros o conferenciantes que utilizan:
 a) Diagramas de flujo, apuntes, transparencias.
 b) Salidas al campo, laboratorios, sesiones prácticas.
c) Discusiones, conferencistas invitados.
6. Adquiriste un artículo que tienes que armar tú mismo, ¿qué te
ayudará más?
a) Escuchar una cinta que describa los pasos a seguir.
b) Comenzar a armarlo y aprender sobre la marcha.
c) Ver un video o consultar las instrucciones impresas.
7. Te estás ocupando de la casa de un amigo durante su ausencia.
Tienes que aprender rápidamente a cuidar su jardín y sus animales
de compañía. Lo mejor será:
a) Ver cómo lo hace otra persona.
b) Recibir instrucciones y aclararlas a fondo.
c) Que alguien te acompañe mientras lo haces.
8. Alguien te confía un número importante que debes recordar,
como por ejemplo el de un teléfono, algún código o un número de
serie. Para estar seguro de no olvidarlo, lo mejor será:
 a) Repetírtelo a ti mismo o a otra persona.
 b) Hacerte una imagen mental de ese número.
 c) Escribirlo o tipearlo varias veces.
9. Tienes que realizar una presentación ante un grupo reducido de
personas. Para sentirte cómodo prefieres:
 a) Tener claro el tono de voz y las palabras que vas a comunicar.
 b) Tener a mano diagramas y notas que puedas consultar durante
la presentación.
 c) Ensayar la presentación varias veces.
10. ¿Con cuál de las siguientes aficiones disfrutas más?
a) Pasear/cuidar del jardín/bailar.
b) Dibujar/pintar/ver paisajes/sacar fotografías.
c) Música/cantar/contar historias.
11. Para adquirir una nueva habilidad prefieres:
a) Escuchar una descripción y hacer preguntas.
b) Ver diagramas y presentaciones. c) Hacer ejercicios.
12. Cuando realmente quieres enseñar algo a alguien:
a) Creas una imagen para esa persona.
b) Se lo explicas lógicamente. c) Le acompañas físicamente
mientras lo hace.
Mayoría de V, VISUAL Las personas visuales entienden el mundo tal
como lo ven y aprenden a través de la vista: fotografías, esquemas,
diagramas de flujo, etc. Para comunicarse utilizan verbos y
expresiones que tienen que ver con el sentido de la visión: ver,
imaginar, proyectar, enfocar, punto de vista, etc. Su aspecto físico
es generalmente esbelto, tienden a alargar el cuello y su
movimiento corporal es fijo.
Mayoría de A, AUDITIVO Las personas auditivas dialogan tanto
interna como externamente y aprenden escuchando y hablando,
memorizan por pasos, por secuencias. Para comunicarse utilizan los
predicados auditivos: oír, escuchar, hablar, contar, decir, sonar, etc.
Suelen ser excelentes conversadores y les resulta fácil hablar de lo
que sienten. Son más sedentarios, les gusta la música y su
movimiento corporal es rítmico.
  Mayoría de K, KINESTÉSICO o CINESTÉSICO Las personas
kinestésicas aprenden haciendo. Son los que más gesticulan, los
que más contacto físico necesitan, y tienden a acercarse a las
personas para comunicarse. Para hablar utilizan los predicados
kinestésicos: siento, percibo, aprecio, etc. Son personas sensitivas,
suelen tener las emociones a flor de piel. Su movimiento corporal
es el más rápido y su tono de voz el más lento y grave.
  Cómo crear sintonía con los demás usando técnicas de
rapport Todos conocemos la importancia de la comunicación no
verbal, ya que esta puede crear cercanía o producir un alejamiento
entre las personas que están interactuando, por ello su importancia
en las relaciones interpersonales. 32 FICDE La PNL nos aporta una
técnica que puede ayudar en ese proceso de acercamiento, un
suplemento extra en la buena comunicación como puede ser el
control del lenguaje no verbal. Esta técnica se llama rapport o
“acompasar”. De acuerdo con la definición proporcionada por el
diccionario, “es una interacción marcada por armonía,
conformidad, acuerdo o afinidad. En esencia es una idea de
comunidad o una sensación de unicidad”. ¿Qué es el rapport? El
rapport es una herramienta básica dentro de la PNL, es un término
anglosajón y no tiene una traducción, pero básicamente es crear
sintonía, lograr una sinergia con la persona con la cual se
interactúa. Tiene como objetivo crear un ambiente agradable, de
confianza y cooperación mutua, que ayuda a quitar del medio los
posibles juicios, distorsiones y malos entendidos, logrando así una
escucha activa por parte de ambas partes. Este proceso se da muy
fácilmente, nos pasa de continuo sin darnos cuenta, con personas a
las que apreciamos o con las que nos sentimos a gusto, ya sean
amigos, familiares o una persona que acabamos de conocer. Por
ejemplo, podemos observar en un restaurante o en un grupo
grande de gente, y comprobar fácilmente quien lo está pasando
bien y qué grupos no tienen un buen nivel de rapport. Unos
parecen que “hablan el mismo idioma y bailan la misma música”,
esto se debe al nivel de sintonía que se ha generado, ya sea de
forma consciente o inconsciente. Mientras tanto, el grupo que no
logró crear ese buen nivel de rapport parece que tiene un muro
entre cada miembro. Todos nos hemos visto en alguna de esas dos
situaciones, pero el peor escenario puede evitarse si aprendemos a
crear rapport. El rapport establecido, ya sea en un nivel consciente
o en un nivel inconsciente, es el principal ingrediente de todos los
procesos de comunicación que se realizan con la PNL. Existen
muchos estilos para establecer rapport y también muchas maneras
para mantenerlo.
Sintonizar y guiar Cuando igualamos a otra persona nos
estamos comunicando desde su propio contexto o modelo del
mundo y hacemos una sincronización con sus procesos internos.
Este proceso se extiende a todos los aspectos de la comunicación.
Igualando el tono y ritmo de la voz, el uso de predicados, las
posturas, los gestos y movimientos, el ritmo de la respiración. Se
establece rapport por medio de dos acciones diferentes: sintonizar
y guiar.
 Sintonizar consiste en igualar la conducta del otro en el nivel
consciente o en el inconsciente. Después de aplicar rapport
durante un tiempo, necesitamos comprobar si ya se estableció,
entonces pasamos a “guiar”.
  Guiar consiste en iniciar una conducta diferente a las que está
presentando la persona en ese momento. Si la otra persona repite
nuestra conducta, (nos sigue) es señal de que estamos en rapport.
Por ejemplo: la guía puede ser tan sutil como un cambio en el ritmo
de la respiración o un cambio en la postura corporal. En caso de
que el seguimiento no ocurra entonces debemos igualar
nuevamente hasta que obtengamos y verifiquemos el rapport. Es
conveniente probar intermitentemente para asegurarse que
continuamos en sintonía con la otra persona. Rapport mediante la
igualación y el seguimiento Corporalmente, el rapport tiene dos
modalidades: el directo y el cruzado. El directo consiste en igualar
como si fuéramos una imagen en un espejo. En cambio, el cruzado
consiste en utilizar una modalidad diferente a la que estamos
igualando. Para establecer rapport vamos a prestar atención a las
conductas de la otra persona. Las conductas a observar son:
conducta corporal, conducta tonal, estructura verbal. Una vez que
hemos identificado los elementos que en nuestra opinión pueden
producir el mayor resultado, entonces vamos a copiar o reflejarlos,
ya sea de manera directa o de manera cruzada.
Igualar la conducta corporal
  Frecuencia respiratoria
 Postura corporal
 Movimientos de manos, brazos, piernas
 Inclinación de cabeza, cuerpo
 Gestos faciales típicos
Igualar conducta tonal
 Volumen de la voz (alto, medio o bajo)
 Ritmo y pausas al hablar
 Tono de la voz (agudo, medio o grave)
 Modismos verbales Estructura verbal
  Igualar los predicados verbales: visual, auditivo, cinestésico,
olfativo/gustativo. Igualar la secuencia de presentación de los
predicados.
Estas igualaciones también se conocen como “técnicas de espejo”,
y lo esencial de ellas reside en el hecho de que por medio del
reflejo de los gestos físicos el interlocutor se siente tenido en
cuenta, reconocido y escuchado.
En resumen, los pasos del rapport son: observar y escuchar,
acompasar, igualar y comprobar. Cuando queremos romper el
rapport entonces lo único que necesitamos hacer es desigualar
Estilo de Aprendizaje PNL
Estilos de Aprendizaje y Sentidos Potenciales
El aprendizaje es un proceso activo y dinámico, y cuando no "sucede" de
forma natural y sencilla, hay que buscar el estilo propio de cada persona y
llevarlo a su mayor potencial posible. En "Preparados para aprender"
optimizamos tus habilidades fisiológicas, respetamos y ampliamos tu
estilo de aprendizaje con nuevas metodología para que aprender sea un
proceso ágil y sencillo.
Toda persona recibe información, la procesa por su vía preferente, y la
expresará según sus características comunicativas, su estilo y sus
dominancias sensoriales y cerebrales. Las dominancias cerebrales
marcarán un estilo "vital" diferente, analítico y ordenado para los
dominantes de hemisferio izquierdo, o creativo y global los dominantes de
hemisferio derecho.
Si comprendemos este hecho, nos tendremos que cuestionar si la forma
en que estamos aprendiendo cotidianamente, recibiendo clases, o la
forma en la que nos comunicamos, es la más adecuada a los diferentes
estilos y procesos existentes, y a modificar nuestro estilo propio
comunicativo para que pueda resultar el más eficaz en un momento dado
y para que todas las personas puedan comprendernos aunque tengan un
estilo muy diferente al nuestro.
El que percibamos más un tipo de información que otra, el que tengamos
un estilo de aprendizaje propio, está directamente relacionado con la
forma en la que filtramos y percibimos la información, pero también, de
forma indisoluble, y lógicamente, de cómo recordamos después esa
información, cómo la procesamos en nuestro cerebro y cómo la
expresamos a través del lenguaje, la escritura, los signos no verbales...
Las investigaciones realizadas sobre la memoria avanzan, y aunque aún
hay mucho por aprender de nuestro cerebro, sabemos que la forma de
procesar y memorizar la información exterior y las impresiones interiores
siguen patrones y estilos característicos. Cuando queremos recordar
tenemos que recuperar datos de diversas partes de nuestro cerebro,
elaborarlas según un proceso propio, y comunicar ese recuerdo. Las
preferencias o referencias a utilizar más una determinada manera de
aprender que otra constituyen nuestro estilo de aprendizaje.
La PNL, Programación Neuro-Lingüística, investigó estas preferencias y su
impacto en la enseñanza. También la Gumnasia Cerebral ha estudiado los
patrones de dominancia sensorial y cerebral. Ambas teorías nos ayudan a
comprender cómo aprendemos y cómo no aprendemos.
La PNL tuvo su origen en las investigaciones de dos jóvenes
estadounidenses: Richard Bandler y John Grinder, acerca de por qué los
tratamientos de tres terapeutas de gran éxito en Estados Unidos: Virginia
Satir, Milton Erickson y Fritz Perls. Después de investigaciones y
observaciones sistemáticas concluyeron que el procedimiento que
empleaban con excelente resultado era un patrón de comunicación muy
eficaz, estos terapeutas conseguían hacerse entender, existía gran
congruencia entre sus palabras, entonación, expresión corporal y el
proceso de pensamiento que evocaban, se hacían entender por personas
con características muy distintas.
En el campo de la psicopedagogía, la PNL nos ayuda a comprender cuáles
son las vías preferentes de entrada, procesamiento y salida de la
información, y cuál sería el estilo de una persona con un vía sensorial
preferente:
- Persona Visual: aprende principalmente mediante imágenes, se fija en
las características que puede ver e imaginar. Si utiliza este canal para el
aprendizaje, necesita que sus habilidades en visión de cerca sean buenas
(lo que no siempre sucede). Este tipo de aprendizaje suele ser muy rápido,
recordarán la página del libro y los esquemas existentes.
- Persona Auditiva: aprende principalmente mediante sonidos. Aprende
las lecciones como secuencias memorizadas casi de forma literal. Necesita
el silencio para estudiar y preferirá escuchar los temas o que se los lean.
- Persona Kinestésica: percibe con gran intensidad sensaciones,
emociones,... procesa por el tacto, el gusto, el olfato, y la visión y audición,
pero en la medida en que estos sentidos se pueden hacer "corpóreos", se
sienten en el cuerpo. Aprende mediante el tacto, el movimiento y las
percepciones sensoriales. Prefiere las clases prácticas y mientras lee o
estudia puede estar “meciéndose” o caminando, pues necesita
continuamente el movimiento.
En nuestro estilo de aprendizaje influyen muchos factores. Nuestro
cerebro, no puede procesar todo lo que sucede a nuestro alrededor, debe
filtrar y seleccionar parte de esa información e ignorar el resto. En general,
la forma de filtrar será aquella que para cada cerebro resulte más eficaz y
práctica, por lo tanto, elige un forma de filtrado, un sentido preferente, y
omite el resto de informaciones sensoriales que percibe.
Un ejemplo claro se da en un aula de clase. Tras la exposición de un
maestro/a si al salir de clase preguntamos uno por uno a cada alumno/a
qué ha pasado en el aula, algunos/as (normalmente la mayoría)
conservarán imágenes de lo que se ha tratado y evocarán momentos que
vieron en clase, otros, narrarán lo que se ha tratado y unos pocos, nos
comentarán sobre todo cómo se han sentido en clase. Cada uno hablará
de cosas distintas, porque cada uno habrá percibido de forma prioritaria
cosas distintas.
Estilo de Aprendizaje
Por eso es importante caer en la cuenta de que nuestras comunicaciones
como padres, madres o maestros/as estarán sesgadas por nuestro estilo
de aprendizaje, y del mismo modo los niños/as seleccionarán la
información según el suyo propio. Por supuesto que lo ideal es que cada
persona sea capaz de adaptar su estilo de aprendizaje al contenido de la
información, y esto sucede más y mejor cuánto más integrados estemos,
más flexibilidad, mayor capacidad de acomodación y conexiones se hayan
generado en nuestro cerebro..., mayores posibilidades tendremos de un
aprendizaje integral.
Hemisferios Cerebrales y Aprendizaje
Para integrar la información a nivel de hemisferios cerebrales necesitamos
tenerlos eficazmente conectados, y para conseguirlo es especialmente
importante el desarrollo adecuado del cuerpo calloso que los une y
conecta, así como una situación de tranquilidad y confianza que nos aleje
del estrés y de las reacciones de supervivencia, pues se procesan solo con
el hemisferio dominante.
Cada hemisferio cerebral tiene un estilo de procesamiento de la
información que recibe, en relación con las áreas más o menos activas y
especializadas que tenga, y por ello, es más o menos eficaz la activación
de un hemisferio y otro.
Hemisferio Izquierdo
El hemisferio izquierdo procesa la información secuencialmente, paso a
paso, de forma lineal. Piensa en palabras y en números, es decir contiene
la capacidad para las matemáticas y para leer y escribir. La percepción y la
expresión verbal se produce en orden y en la secuencia en la que se
producen los sonidos. Conoce el tiempo y su medida. Se guía por la lógica
lineal y binaria (si-no, arriba-abajo, antes-después, más-menos, etc.). Este
hemisferio emplea un estilo de pensamiento convergente obteniendo
nueva información al usar datos ya disponibles, formando nuevas ideas de
datos preexistentes. Aprende de la parte al todo y absorbe rápidamente
los detalles, hechos y reglas. Analiza la información paso a paso. Quiere
entender los componentes uno por uno. Es el hemisferio lógico y piensa
en símbolos y conceptos abstractos.
Hemisferio Derecho
El hemisferio derecho, parece especializado en el proceso simultáneo o en
paralelo, es decir, busca pautas generales y gestaltes; procesa la
información de manera global, partiendo del todo para entender las
distintas partes. El hemisferio holístico es intuitivo, piensa en imágenes,
símbolos y sentimientos. Ve las cosas en el espacio, y cómo se combinan
las partes para formar un todo. Gracias al hemisferio derecho,
entendemos las metáforas, soñamos, creamos nuevas combinaciones de
ideas. Tiene capacidad imaginativa y fantástica. Este hemisferio se
interesa por las relaciones. Es eficiente para la mayoría de las tareas
visuales y espaciales y para reconocer melodías musicales a partir de la
sensación global que percibe de los estímulos visuales y auditivos. Este
hemisferio emplea un estilo de pensamiento divergente, creando cantidad
de ideas nuevas, más allá de los patrones convencionales. Con el modo de
procesar la información usado por el hemisferio derecho, se producen
llamaradas de intuición, sin tener que explicar las cosas en un orden
lógico. Aprende del todo a la parte. Para entender las partes necesita
partir de la imagen global. No analiza la información, la sintetiza. Es
relacional, no le preocupan las partes en sí, sino saber como encajan y se
relacionan unas partes con otras. El hemisferio holístico piensa en
ejemplos concretos.
Los Hemisferios Cerebrales en las Aulas
En las aulas hay alumnos que tienden a utilizar más el modo de
pensamiento asociado con un hemisferio que con otro, por ejemplo: Un
alumno hemisferio izquierdo comprenderá sin problemas una explicación
de reglas de ortografía (pensamiento abstracto) Un alumno hemisferio
derecho puede comprender los ejemplos (pensamiento concreto) pero no
ser capaz de aplicar bien las reglas.
Debemos explicar la materia de clase combinando el lenguaje de los dos
modos de pensamiento de cada hemisferio y en los tres modos de
percepción sensorial (visual, auditiva y kinestésica) siempre que sea
posible. Con alumnos/as para los que la dominancia de un estilo de
aprendizaje es muy marcada, debemos realizar actividades para potenciar
la utilización equilibrada de los diferentes modos de percibir y procesar.
Estos diferentes modos de pensamiento, hemisferio derecho o izquierdo,
tenemos que combinarlo con los sistemas de representación. Se producen
así casuísticas diferentes, entre la recepción y comunicación de
información (que suelen seguir el mismo sistema sensorial de
representación), y los modos de procesamiento.
En líneas generales se observa más congruencia entre las características
del hemisferio derecho y el estilo y sistema de representación visual, y por
otro lado, entre el hemisferio izquierdo y el estilo y sistema de
representación auditivo. Pero no siempre es así, y podemos encontrarnos
todo tipo de combinaciones.
Encontrar la dominancia propia, el sentido preferente, el estilo
característico y aportar métodos y claves para optimizarlas es parte
importante del trabajo que desarrollamos en "preparados para aprender".