A.
A N° 05: CAMBIOS
ANATOMOFISIOLÓGICOS EN LA
MUJER GESTANTE
1. INTRODUCCION
SE DEFINE EL EMBARAZO COMO EL PERIODO DE
TIEMPO COMPRENDIDO DESDE LA FECUNDACIÓN
DEL ÓVULO HASTA EL PARTO Y SU DURACIÓN
APROXIMADA ES DE 280 DÍAS, (DE 37 A 40
SEMANAS).
LA MADRE EXPERIMENTA UNA SERIE DE
TRANSFORMACIONES FISIOLÓGICAS Y ANATÓMICAS
2. Cambios cardiovasculares y cardíacos
Aumenta 15-20 latidos / min, hasta el máximo a la 23-30 semana, luego ↓ hasta estabilizarse
en los primeros días postparto.
La P.A disminuye y se normaliza al final del embarazo.
El corazón aumenta de tamaño 10-12 % hipertrofia del musculo cardiaco.
El volumen sanguíneo aumenta en un 40% -50%
Aumento de leucocitos a 6.000-12.000 / mm3, hasta 15.000
Aumenta los factores de coagulación.
Estancamiento de sangre en los miembros inferiores (edema en bipedestación, venas varicosas
en piernas y vulva, hemorroides y predisposición a trombosis venosa profunda).
3. Cambios respiratorios
Fosas nasales edematosas e hiperémicas como consecuencia
congestión nasal y rinitis que retornan a la normalidad después del
parto.
El diafragma se eleva 4 cm, ensanchamiento compensador de las
costillas, por ello la respiración pasa de ser abdominal a torácica.
Como consecuencia de la hiperventilación, se produce una
disminución de la PCO2 (de 37-40 mmHG a 27-32 mmHG), lo que
facilita el intercambio de gases a través de la placenta, favoreciendo
el paso del CO2 fetal a la madre.
4. Cambios renales y urinarios
La progesterona actúa sobre el sistema urinario provocando una dilatación de pelvis renales,
uréteres y vejiga.
la dilatación de los uréteres es debida al efecto del útero gravídico que los comprime.
Su tamaño aumenta muy levemente, 1-1,5 cm aproximadamente por el aumento de la
vascularización y del volumen intersticial,
Durante el primer trimestre, la polaquiuria es consecuencia de la presión del útero intrapélvico
La acumulación de líquidos durante el día en bipedestación es el responsable de la nicturia de
la mujer gestante.
Con el aumento del flujo plasmático renal, la filtración glomerular se incrementa en un 40 % -
50 %.
Aumento de la secreción de aldosterona. Como consecuencia se retiene agua y sodio, de forma
más acusada en el tercer trimestre.
5. Cambios metabólicos
Período anabólico La energía es destinada principalmente a cubrir las modificaciones del
organismo materno y las reservas de tejido adiposo.
Catabólico, se emplea menor energía en los depósitos grasos y aumenta la destinada al
crecimiento fetal y a las necesidades oxidativas de la unidad fetoplacentaria.
Incremento de peso medio de 12,5 kg (9,5- 13), 400-500 gr a la semana.
La principal fuente de energía fetal es la glucosa materna.
Hay un aumento de lípidos totales, ya que las grasas se movilizan como fuente energética,
dejando la glucosa libre para su uso por el feto.
Tanto el nitrógeno como las proteínas son esenciales para el crecimiento fetal y la síntesis de
nuevos tejidos, tanto maternos (1ª mitad del embarazo) como fetales (2ª mitad).
Se produce un incremento importante de agua (siete litros) durante la gestación para
responder a las necesidades de crecimiento y desarrollo del feto, la placenta, el líquido
amniótico, útero, mamas y volemia.
Se produce un incremento importante de agua (siete litros) durante la gestación para
responder a las necesidades de crecimiento y desarrollo del feto, la placenta, el líquido
amniótico, útero, mamas y volemia.
Las necesidades de sustancias inorgánicas varían de un trimestre a otro. El ácido fólico es
necesario preconcepcionalmente y durante el primer trimestre del embarazo, el yodo hasta el
final de la lactancia; el magnesio y calcio comienzan a necesitarse en el segundo trimestre y el
hierro en el tercero, de forma que es este último trimestre el que más requerimientos tiene.
6. Cambios genitales y mamarios
En la vulva y zona perineal se produce un aumento de vascularización, también
se origina una hiperemia y un ablandamiento del tejido conjuntivo. Los genitales
presentan un aspecto edematoso con coloración cianótica y una consistencia
más blanda y elástica.
Pueden aparecer varices vulvares, principalmente en multíparas, y edema
conforme avanza la gestación.
Hay un aumento de la secreción (transudación) vaginal y cervical, dando lugar
a la llamada leucorrea fisiológica, una secreción de color blanco y ligeramente
espesa, más marcada al final de la gestación
Hay un aumento de la secreción (transudación) vaginal y cervical, dando lugar
a la llamada leucorrea fisiológica, una secreción de color blanco y ligeramente
espesa, más marcada al final de la gestación.
Aumento de la producción de ácido láctico con disminución del pH vaginal
Útero
Este órgano sufre grandes transformaciones debido a la necesidad de albergar al feto, la
placenta y el líquido amniótico, al tiempo que se prepara para desempeñar el papel de motor
del parto.
Cervix: Se produce un aumento de la vascularización con hipertrofia e hiperplasia tanto de las
fibras elásticas, aumento de secreción mucosa densa, no filante y no cristalizable que da lugar al
tapón mucoso o limos.
Cuerpo uterino: En la mujer no grávida éste es un órgano pequeño, intrapélvico, de forma
piriforme, aplanado en sentido anteroposterior, de 70 gramos de peso, capacidad de 10 ml y
dimensiones de 7,5 x 5 x 2,5. Alcanza un peso aproximado de 1.100 gramos, capacidad de 5
litros y dimensiones de 28 x 24 x 21.
A partir de la semana 20 pueden ser percibidas por la mujer las denominadas
contracciones de Braxton-Hicks; generalmente son irregulares, de baja
intensidad e indoloras.
Trompas: Hay leve hipertrofia muscular, hiperemia y aumento de la
vascularización para garantizar la nutrición de la mórula.
Ovarios: A causa de los altos niveles de estrógenos y progesterona, la
maduración de folículos nuevos se interrumpe, cesando de este modo la
ovulación.
Mamas
Hay mayor sensibilidad y hormigueo desde las primeras semanas; y desde el
segundo mes podemos apreciar un aumento de peso y tamaño debido al
incremento del tejido glandular.
Los pezones se vuelven más eréctiles, sensibles y agrandados, con aumento de
la pigmentación areolar. Aparece la segunda areola de Dubois rodeando a la
primitiva, y se desarrollan múltiples y pequeñas papilas, que corresponden a las
glándulas sebáceas hipertrofiadas, los tubérculos de Montgomery .
7. Cambios endocrinos
La placenta se considera una glándula endocrina incompleta al colaborar la madre
con el feto para su funcionalidad y adquiere el principal papel de control hormonal.
De ahí la denominación de unidad fetoplacentaria.
Tras la ovulación se forma el cuerpo lúteo, que se encarga de la secreción de
estrógenos y progesterona. Una vez implantado el trofoblasto se segrega una
luteotropina, la gonadotropina coriónica humana (HCG) que es la encargada de
mantener el cuerpo lúteo hasta que su función la pueda llevar a cabo la placenta
(semana 8-10). Sin su presencia tendría lugar la regresión uterina por acción de las
prostaglandinas.
El cuerpo lúteo mantiene los niveles de estrógenos y progesterona elevados que
suprimen la producción de la FSH (Hormona Folículo Estimulante) por la hipófisis. La
supresión de dicha hormona impide una nueva ovulación y por lo tanto, desaparece
la menstruación.
8. Cambios en piel
Varices. Aparecen en un 40 % de las gestantes por dilatación del
sistema vascular venoso superficial de las piernas, vulva,
principalmente en multíparas.
Angiomas o arañas vasculares. Son pequeñas tumoraciones
vasculares constituidas por una arteriola que se ramifica en la
epidermis. Son más frecuentes en la raza blanca, siendo su
localización más habitual en los brazos, cara, tórax y cuello.
Eritema palmar. Suele localizarse en eminencias tenar e
hipotenar de la mano sin afectar a los dedos. Aparece en el Ier
trimestre. Al igual que los angiomas es más frecuente en la raza
blanca. Los angiomas y el eritema palmar aparecen como un
mecanismo de defensa para disipar el calor excesivo generado
por el aumento de metabolismo que se produce durante la
gestación.
Cambios en la pigmentación
La progesterona produce un aumento de la MSH. Como
consecuencia hay un aumento de pigmentación de la línea alba
abdominal o línea nigra o alba, vulva, areola y pezones.
Puede ocurrir que se oscurezca la cara, es el denominado
cloasma o melasma, más frecuente en el segundo trimestre, y
que afecta principalmente a la zona alrededor de los ojos,
mejillas, frente y mentón, pudiendo aparecer también en nariz y
cuello.
Sistema tegumentario:
Cambios en el crecimiento piloso. Hay variación individual, de tal
forma que en unas mujeres se produce aumento del crecimiento
piloso y en otras disminución. De forma general después del
parto se pierde pelo.
9. Cambios gastrointestinales
Variedad en cuanto al apetito, pudiendo darse situaciones tanto de anorexia como de aumento
de apetito; pudiendo modificarse la percepción del gusto, lo que influye en la preferencia de
determinados alimentos, incluso cabe observar el fenómeno de pica en alguna gestante.
Pueden aparecer náuseas y vómitos debido a los cambios hormonales (niveles de HCG,
relacionado con el grado de emesis), neurovegetativos o en menor medida metabólicos
(metabolismo de los hidratos de carbono
Boca
Las encías están hiperémicas y reblandecidas por acción de la HCG y los estrógenos, con cierto
grado de tumefacción. Esto hace que las encías sean friables y sangren ante cualquier mínimo
traumatismo, incluido el cepillado dental (gingivitis gravídica).
aumento de salivación o sialorrea fisiológica
Esófago y estómago
El incremento uterino lleva consigo un desplazamiento de los órganos. De esta forma el
estómago asciende, modifica su contorno y se horizontaliza
Intestino
La progesterona : disminución del tono y la movilidad del tubo digestivo. Como consecuencia la
absorción de nutrientes está favorecida (como el hierro o el calcio), pero también la aparición de
estreñimiento.
Vesícula biliar
La vesícula, por acción de la progesterona, se encuentra átona y distendida, hay una disminución
de sus contracciones, por lo que la mujer puede tener la sensación de hinchazón. El vaciamiento
también está disminuido, lo que unido al éxtasis y a un mayor grosor de la bilis al tener mayor
contenido en colesterol, hace que sean más frecuentes los cálculos biliares y la colestasis
intrahepática.
Cambios musculoesqueléticos
Cambio del centro de gravedad
Habitualmente se ha discutido de la hiperlordosis lumbar que se va
instaurando progresivamente en la mujer embaraza como
consecuencia de la presencia del útero gravídico. En la actualidad se
interpreta como una compensación del desplazamiento del centro
de gravedad corporal, de forma que se desplaza hacia atrás todo eje
cráneo-caudal.
También se separan los pies para aumentar la base de apoyo.
Cambios musculoesqueléticos
Pelvis
Por acción de la progesterona y la relaxina, las articulaciones de la pelvis están
más laxas. Esto lleva consigo un aumento de la movilidad de la articulación
sacroilíaca, de la articulación sacrocoxígea y de la pubiana (permite un aumento
en 0.5-1 cm). La finalidad de estos cambios es facilitar el paso del feto en el
momento del parto.
Como consecuencia la mujer adopta una marcha contoneante o de pato y puede
presentar dificultades para permanecer de pie por períodos prolongados,
además de ser causa de lumbalgias.
Alteraciones musculoesqueléticas
A. Dolor lumbar y pélvico. Consecuencia de la hiperlordosis aparente con contracción de los
músculos paravertebrales y relajación de las articulaciones pélvicas.
B. Dolor dorsal. Por tensión de los músculos dorsales.
C. Ciática. Por compresión nerviosa.
D. Calambres en miembros inferiores. Son contracciones involuntarias que afectan
principalmente a pantorrillas y peroneos. Son más frecuentes por la noche. Están relacionados
con desequilibrios dietéticos (bajo aporte de calcio).
E. Parestesias y dolor en miembros inferiores. Al final de la gestación pueden presentarse en
muslo y dorso de la pierna por cambios comprensivos (edemas de las vainas).
F. Síndrome del túnel carpiano. Se produce por compresión del nervio mediano a su paso por el
túnel carpiano. Produce dolor y parestesia en el territorio inervado (1º, 2º y 3er dedo) que se
puede extender a manos y muñecas. Lleva consigo debilidad y disminución de la función
motora.
G. Dolor de ingles. Como consecuencia de la elongación de los ligamentos uterinos.
H. Diástasis de los músculos rectos del abdomen. Los rectos pueden separarse de la línea media
si no soportan la tensión a la que están sometidos.