[go: up one dir, main page]

0% encontró este documento útil (0 votos)
106 vistas14 páginas

Espacios Públicos Patrimoniales

Este documento discute la importancia del espacio público en las ciudades, particularmente en los centros históricos. Explica que el espacio público es esencial para la vida social y democrática de una ciudad. Además, analiza como teóricos urbanos del siglo XIX como Cerdá y Sitte enfatizaron la importancia de los espacios públicos como plazas en sus visiones de ciudades modernas y en el diseño de ciudades. Finalmente, argumenta que los espacios públicos patrimoniales deben ser repensados para adapt

Cargado por

Mario Monroy
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
106 vistas14 páginas

Espacios Públicos Patrimoniales

Este documento discute la importancia del espacio público en las ciudades, particularmente en los centros históricos. Explica que el espacio público es esencial para la vida social y democrática de una ciudad. Además, analiza como teóricos urbanos del siglo XIX como Cerdá y Sitte enfatizaron la importancia de los espacios públicos como plazas en sus visiones de ciudades modernas y en el diseño de ciudades. Finalmente, argumenta que los espacios públicos patrimoniales deben ser repensados para adapt

Cargado por

Mario Monroy
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 14

Construcción

36

de los espacios
públicos
patrimoniales
Salvador Urrieta García *

Introducción

L
a dinámica urbana va creando nuevas funciones y nuevas actividades que se recrean en otros tantos nuevos
espacios urbanos particulares, esto como producto de nuevas o renovadas dinámicas sociales. Sin embargo,
en muchos casos un buen número de estas nuevas actividades hacen uso de los espacios urbanos antiguos o
tradicionales. De una u otra manera estamos ante el uso actual de las ciudades construidas, muchas de ellas con la
etiqueta de ciudad histórica, en un universo urbano que se quiere hipermoderno, pero que es inequitativo, diverso y
contrastante.
Ante estas nuevas circunstancias de vida para las sociedades urbanas de hoy, es conveniente hacer una reflexión
y en particular sobre el espacio público, éste como sinónimo de ciudad y que se hace un tema de actualidad, pero que
requiere ser repensado y reconceptualizado, con el fin de entender el fenómeno socioespacial que estamos viviendo y
poder participar del presente y futuro de la ciudad.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
37
Museo Soumaya. Fotografías: Salvador Urrieta García.

Aproximación a la noción de espacio público

Antes de referirnos específicamente al espacio público patrimonial, es me- el que nos lleva a tener una idea más amplia
nester mostrar una aproximación a lo que entendemos por espacio público de este espacio.
(que en otros espacios hemos digerido en términos de usos y cualidades) La comunicación pública implica una serie
nociones que pueden aplicarse en los espacios patrimoniales. de acciones que en principio deben de estar
En términos generales este espacio urbano es parte del dominio concertadas, lo que implica un acuerdo so-
público no construido en donde su fisonomía puede ser modelada bre la libertad de los participantes (cada uno
por la masa construida y por los reglamentos urbanos (alineamiento) y autoriza al otro a hacer lo que se autoriza a sí
afectada por sus usos públicos mismo, siguiendo las reglas sociales) y tien-
Desde el punto de vista social y legal la idea del espacio privado den a estar orientadas políticamente.
(donde se valoriza lo individual) se contrapone a la de espacio público; ¿Cómo acotar una concepción de espacio pú-
así, como espacio privado podemos considerar al espacio familiar ínti- blico? Con el fin de mostrar algunas vertientes
mo o cerrado, en cuanto al espacio público podemos señalar de manera teóricas, que podrían llevarnos eventualmente a
común al espacio abierto, mismo que puede ser un lugar de anonimato una saludable y larga discusión, tomamos la pos-
o de encuentros informales, espacio de sociabilidad. tura de Michel Watin quien define el carácter de
En síntesis, el espacio público es el espacio de todos, con alto gra- un espacio público de la siguiente manera:
do de accesibilidad y con una deseable laicidad. Un espacio común a todos los individuos
El espacio público se puede entender como escenario o como co- que componen una sociedad no constituye ne-
municación. El escenario es seguramente la imagen que más fácil- cesariamente un espacio público, por lo que el
mente retenemos en nuestra memoria, es decir la calle, la plaza, el par- espacio debe responder a tres principios:
que, etcétera, pero es quizás el espacio público como comunicación

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052


38

Contraste socioespacial urbano.

Es regido por el derecho y no es desaso- en este sentido lo más colectivo de la ciudad es el espacio público,
ciable del funcionamiento democrático de los que articula el espacio privado para generar un todo que nos muestra
principios de ciudadanía, de equidad entre los el paisaje urbano, que a su vez muestra una idea de ciudad como el
individuos, además del de universalidad. espacio del público, de todos, de la sociedad. En este sentido, los
Supone la existencia de individuos más ciudadanos al reinventar las ciudades reinventan colectivamente los
o menos autónomos, no alienados por los dis- espacios públicos.
cursos dominantes, que hacen valer su opi- La ciudad, en tanto que producto cultural, es un producto colectivo
nión y creen en las ideas y no solamente en el y la ciudad como un todo es susceptible de desagregarse para mos-
enfrentamiento físico. trar las diferentes acciones y actividades que se han desarrollado en
Se caracteriza por el flujo y la movilidad: el tiempo por las sociedades. Independientemente de las funciones
movimiento, mezcla, pasaje y desplazamiento que muchas veces definen a las ciudades como comerciales, admi-
de los individuos y transmisión de mensajes; nistrativas, industriales, universitarias y otras, las ciudades muestran
se autorizan y se garantizan tanto como se cómo han sido habitadas, el uso que se ha hecho de ellas, siempre con
puede en una sociedad compleja, en donde se diversidades que fueron creciendo y desarrollándose, hasta llegar a la
confrontan diversidades y diferencias.1 complejidad de las metrópolis modernas.
La ciudad es un espacio compartido, lo
que establece una historia social en la ciudad, El espacio público y los centros antiguos o históricos
pero también es una historia espacial, produc-
to de la acción de los habitantes en un sitio El espacio público, como se ha dicho, tiende a cobrar cada vez mayor
determinado, así la ciudad da cuenta de las relevancia en los estudios que se hacen de las ciudades del mundo,
acciones de los individuos que van transmi- estos trabajos son en realidad el preámbulo de las políticas públicas
tiendo a otras generaciones sus conocimien- en las urbes. Lo paradójico de esto es que el espacio público siempre
tos, costumbres y en el caso de la ciudad los ha estado ahí, en los centros antiguos, espacios urbanos que un día
espacios concebidos y construidos, todo a fin también fueron toda la ciudad misma. Desde el siglo XIX el espacio
de heredar una cultura adquirida. público fue razón y objeto de discusión entre las ciudades modernas y
La ciudad tiene un rasgo natural, es decir, antiguas, pero también de planteamientos teóricos.
que es un espacio esencialmente colectivo,

1 , bajo la dirección
de Michel WATIN, Edit. Anthropos, Paris, 2001, pp. 61-62.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
39
Parque México espacio de gran relación social.

Uno de los trabajos más significativos en lo que sería el urbanismo Otro texto de los que Françoise Choay con-
moderno, fue la Cerdá, sidera como uno de los textos precursores del
que se publicó a mediados del siglo XIX.2 urbanismo del siglo XIX es “El Arte de construir
En el sentido que hoy le damos al urbanismo, según Choay, este las Ciudades, ‘Der Stadtebau’” de Camilo Sitte.4
trabajo teórico acredita a su autor como el inventor de la palabra urba- En esta obra, Sitte desarrolla una especie
nismo y el primer teórico de esta disciplina como ciencia. Así, tanto en de apología de la plaza, uno de los ejemplos
esta teoría, como en el resultado de ésta, es decir, el proyecto para el más emblemáticos del espacio público, par-
ensanche de la ciudad de Barcelona, Cerdá deja ver la importancia que ticularmente de las ciudades antiguas, así,
tiene el espacio público para concebir la ciudad moderna, en efecto, este autor trata de las relaciones entre los
este autor desarrolla la noción del desplazamiento urbano como uno edificios, los monumentos y las plazas, del
de los fundamentos de su teoría, esto último se puede ver en el plano del despeje o de la reducción del espacio de las
ensanche de esta ciudad. plazas, de sus formas y dimensiones, del
El tercer capítulo de su libro, Cerdá lo intitula “Examen analítico agrupamiento de las diferentes plazas de
de las ciudades” de tal manera que desarrolla justamente un aná- una ciudad, de su organización, criticaba las
lisis de los desplazamientos de la ciudad y de sus implicaciones limitantes artísticas de los ordenamientos ur-
espaciales y sociales, por ejemplo, en lo que él denomina “trazo banos modernos, pero también proponía las
horizontal de vías urbanas” dice: mejoras a llevar a cabo en los ordenamientos
urbanos modernos. Sitte buscaba también
encontrar el origen de los valores estéticos de
las ciudades antiguas, el efecto que ejercían
Cerdá estudia la economía vial de la urbe, es decir,
3
sobre los habitantes. Cita a Aristóteles para
“los medios o los instrumentos con los cuales las vías disponen para señalar que el arte de construir las ciudades
funcionar en todo centro urbano”. Es notable cómo, en este análisis de se resumía en el hecho de que una ciudad
vías e intervías, Cerdá concibe la movilidad de la ciudad, más allá del debe ofrecer a sus habitantes a la vez segu-
simple funcionamiento, este autor nos muestra la pauta de la articula- ridad y bienestar. Sitte indica cómo en la an-
ción de los espacios urbanos. tigüedad “las grandes plazas eran para cada
ciudad un imperativo vital, en la medida que

2 Teoría General de la Urbanización, Ildefonso Cerda, versión francesa, presentada y


adaptada por Antonio López Aberasturi, Éditions du Seuil, París, 1979. 4 “L’art de bâtir les villes, ‘Der Stadtebau’”, Camilo
SITTE, Édi-
3 . p.115. tions L’Équerre, París, 1980.

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052


40

Ensanche de Barcelona 1865. Fuente: portada del libro

en estos espacios se desarrollaba una gran ción, conservando siempre sus valores estéticos e históricos. La postura
parte de la vida pública”. de Giovannoni sobre el patrimonio urbano va a revelarse con la publica-
No obstante que posteriormente Le Corbu- ción, ese mismo año, de Vecchie Città, Ed Edilizia Nouva.
sier estigmatiza a Sitte, tratándolo de paseísta, De alguna manera, Giovannoni toma en cuenta tanto de las expec-
lo cierto es que este último estaba consciente tativas del urbanismo moderno desarrolladas por Cerdá a través de su
de los cambios que se estaban produciendo en idea de ciudad en tanto que organismo “cinemático”, como de la va-
las ciudades como consecuencia de la revolu- loración que Camilo Sitte hace de los valores de integración espacial
ción industrial, esto no le impide criticar la feal- de los tejidos urbanos antiguos, subrayando a la ciudad en tanto que
dad de las ciudades del siglo XIX. Esta crítica la organismo estético.6 Así, cita ambas fuentes en el texto de Vecchie
basa en los estudios que hizo de las ciudades Cittá, en donde se revela la importancia del espacio público cuando
antiguas, de donde toma como paradigma del trata los temas de espacios libres, los espacios en relación con los
tejido urbano a la plaza pública, en sus aspec- edificios, el movimiento en las ciudades antiguas, el desplazamiento
tos morfológicos.5 Ya en el siglo xx, en 1931, del centro urbano, la localización de los transplantes de los barrios
se realiza la Conferencia Internacional sobre la exteriores, la comunicación, etcétera.
Conservación y la Restauración de los Monu- Con el devenir del tiempo, estas ideas que emergen entre la segun-
mentos Históricos, este evento va a marcar la da mitad del siglo XIX y la los primeros decenios del siglo XX, van a in-
pauta para lo que sería posteriormente la teoría cidir en las cartas internacionales en donde se despliegan desde hace
y práctica de la Conservación del Patrimonio Ur- más de 45 años una gran cantidad de recomendaciones, de una u otra
bano, esto principalmente por la contribución manera se percibe la presencia y la importancia del espacio público,
hecha por uno de los participantes, se trata de que a continuación leemos entre líneas:
Gustavo Giovannoni, en su participación en la Venecia, 1964. Se habla de sitios urbanos, de su significación cultu-
conferencia desarrolla su idea y defensa de ral y utilidad social, no podemos separar estos temas del espacio, por-
la “arquitectura menor”, pero también hace re- que es en el espacio público en donde interactúan los grupos sociales
ferencia a la integración de las ciudades y los con su bagaje cultural.
tejidos antiguos en la vida contemporánea, es Quito, 1967. Se reitera la función social, esta vez introducida a los
decir; que el patrimonio urbano deviene parte planes de desarrollo, si nos referimos a la función social la esfera públi-
integrante de los nuevos procesos de urbaniza- ca se hace inherente, para replantear el beneficio social.

5 “L’invention du Patrimoine Urbain”, Fraçoise Choay,


Revista , Comité científico Internacional 6 Gustavo Giovannoni, Éditions du Seuil, París,
de ciudades y pueblos históricos de ICOMOS p. 276. 1998, p. 59.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
41
Plaza del Mercado en Viena, ilustración tomada del libro de Camilo Sitte.

En 1972 la Carta del Restauro deja ver la influencia de Giovannoni, Estas ciudades identifican a sus socie-
así, se aborda el ámbito urbanístico, la relación del centro histórico con dades y a sus culturas —sobre todo si nos
el resto de la ciudad y se recomienda intervenir en la vialidad, es decir, referimos a las ciudades históricas—, más
espacio público, para proteger el núcleo antiguo. que a individuos, salvo que estos individuos
Amsterdam, 1975. Se toca el tema de la permanencia de la com- también sean emblemáticos de un pueblo, de
posición social de los habitantes, el respeto a la escala humana y la una civilización o de una cultura, pongamos
diversidad socio cultural. Este enfoque de la ciudad imbrica la morfo- el caso de Miguel Ángel Bonarote el florenti-
logía con la dimensión sociocultural y esta relación tiene como esce- no, a Fidias el ateniense o a Netzahualcóyotl
nario al espacio público. el texcocano.
Washington, 1987. La relación entre los diferentes espacios (abier- Los lugares a que nos referimos y a otros
tos, construidos y verdes, la relación de la ciudad con su medio, natu- muchos que nos podemos imaginar tienen un
ral o el creado por el hombre, las vocaciones de la ciudad adquiridas carácter social, colectivo o público.
en el curso de su historia, la participación de sus habitantes, todo Aquí reafirmamos el carácter público de
esto no se puede dar sin tomar como vehículo de operación al espa- esos celebres lugares o de esos personajes
cio público. de la historia, es decir que, se relacionan con
Nara, 1994. Se hace un pronunciamiento sobre el respeto a la di- la colectividad y son públicos. Estos lugares
versidad cultural y de los patrimonios (tangibles e intangibles) para la de alto significado además de las imágenes
práctica de la conservación. El patrimonio en tanto que bien público que proveen de tipo histórico, mítico, social o
heredado no puede dejar de tener al espacio público como un esce- cultural, también dan cuenta de la realidad de
nario principalísimo. la ciudad, sus problemas (de tráfico, margina-
lidad o contaminación) y de sus aspiraciones
Los espacios públicos como lugares de alto significado como sociedad (culturales o sociales).
Son lugares que mezclan lo tangible y lo
Las ciudades en el mundo cuentan de manera particular con lugares intangible de la ciudad.
emblemáticos, que sintetizan de alguna manera el espíritu del conglo- Con el fin de ser más explícitos, vamos a re-
merado urbano y generan la o las imágenes que las van a distinguir de ferirnos brevemente a algunos lugares de alto
las otras ciudades del panorama internacional. significado en la ciudad de México, que de
Si pensamos en las grandes ciudades del mundo, nuestra imagina- manera implícita para los habitantes de la ciu-
ción nos remite a imágenes de lugares que se convierten en sinónimo dad, son lugares públicos, altamente aprecia-
de: Nueva York, París, Roma, Río de Janeiro, Sídney, El Cairo. dos, sujetos de un culto social y a una preser-
vación por parte de quien tutela o administra
enero-junio 2011, ISSN 1870-9052
42

Basílica de Guadalupe. Fotografía: Tonatiuh Santiago Pablo (TSP).

esos espacios urbanos que sería inimaginable cientos de años7 y que hoy ofrece la posibilidad de solazarse de ma-
verlos desaparecer. nera colectiva.
La Basílica de Guadalupe: el lugar más visita- Chapultepec es un lugar lúdico (la milla), histórico (el castillo), cultu-
do por locales y extranjeros que goza de una ral (los museos de antropología, de arte, de ciencias naturales, tecnoló-
sacralización evidentemente ligada a la reli- gico, del papalote) recreativo (el zoológico, los lagos), es difícil pensar
giosidad o al misticismo de los mexicanos y que un ciudadano no conozca este bosque, que no haya venido con la
de otros ciudadanos del planeta. familia, con un grupo escolar o con los amigos.
El carácter religioso del lugar no le quita Chapultepec cualifica a la ciudad en lo recreativo y en lo cultural,
al sitio, el carácter de público, sería como ofrece oxígeno al organismo, al mismo tiempo que al espíritu de los
negarles el carácter de creyentes guadalu- habitantes de la ciudad de México, es un sitio público como el que
panos, a todos aquellos que por millones de deberían tener todas las ciudades del mundo. Chapultepec es un lugar
personas se congregan de manera anual o de visita, con horarios, este hecho no lo hace menos público, lo públi-
con otra periodicidad, según su voluntad y co también merece un orden.
sus posibilidades La Plaza de la Constitución o el Zócalo. Un lugar de convergencia, es el
Resulta claro que la basílica de Guadalupe centro del centro a donde llegan todos con distintos fines. El Zócalo
tiene un uso ligado a su carácter religioso, es físicamente árido, con un tránsito vehicular permanente, pero al
pero esto no le impide conjugar la devoción mismo tiempo es un espacio muy humano, donde la gente se expre-
de los feligreses con el deseo de consumir sa, se comunica.
alimentos o de adquirir un recuerdo de este Esta plaza es la vitrina de la ciudad al mismo tiempo que termóme-
santuario para llevarlo a su casa, para estable- tro del país. El Zócalo de la Ciudad de México ha influido en la deno-
cer así una relación entre lo íntimo de su ho- minación de otras plazas centrales, por eso esas otras ciudades tienen
gar con lo público del lugar de peregrinaje. también sus “zócalos”. Lo anterior se explica por qué el Zócalo es el lu-
El Bosque de Chapultepec: venero de agua gar con el cual se identifican los habitantes de la Ciudad de México.8
prehispánico, uno de los lugares más tradi-
cionales de la ciudad, el bosque más vasto de
la metrópoli, con una carga histórica que da
cuenta de los usos que ligaba el placer con la 7 Cfr. Chapultepec, su leyenda y su historia, Rubén M. Campos, DDF, México, 1988,
naturaleza por parte de los monarcas durante pp.11-18.

8 El 27% de los habitantes de la Ciudad de México manifestaron identificarse con el


Zócalo, contra 10% que lo hicieron respecto al Palacio de Bellas Artes, veáse
, Armado Silva, Document 11, Hatje Cantz, New York, 2003,
pp. 45-55.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
43
El Bosque de Chapultepec, el espacio lúdico más antiguo de la ciudad. El Zócalo, el espacio público más importante de México. Fotografía: TSP.

Para Kathrin Wildner el Zócalo son muchas plazas con diferentes dignidad y con alegría, de tal manera que
épocas y diferentes funciones, siendo la más importante la función los espacios urbanos y arquitectónicos son
simbólica, “es un espacio en el cual se manifiestan, muy evidentemen- consecuentes con la vida cotidiana simple y
te, los referentes y símbolos básicos de la identidad mexicana…un de manera colectiva, estamos haciendo alu-
lugar que es construido cotidianamente y se reproduce como símbolo sión a la vida de barrio, en donde se acepta
de la historia y cultura nacional”.9 la presencia de los otros, no sin reglas, pero
Si bien la plaza de la constitución se revela probablemente como el en donde el espacio, el equipamiento y los
espacio público urbano más importante de nuestro país, este espacio servicios son para todos.
no puede entenderse sin el contexto inmediato que lo contiene, es de- Estos modos de vida en la ciudad tradicio-
cir su centro histórico. La mención de este centro histórico nos da pie nal contrastan con otras propuestas de vida,
para abordar otros espacios de alto significado, que en algunos casos o “amenidades”10 que hoy ofrecen espacios
y dada su importancia espacial, social y cultural se han convertido en colectivos privados (gimnasios, piscinas o
“patrimonio cultural de la humanidad”. spas, salones de fiestas, y
vigilancia privada) que terminan por confinar
Perspectiva de los espacios públicos patrimoniales a los habitantes por grupos que se excluyen
principalmente en lo que se refiere al uso del
Si bien estamos ante espacios urbanos, históricos o antiguos, que espacio público, es decir que estos ciudada-
han creado las ciudades y les han dado sentido, ahora estos espa- nos usan al espacio público solamente para
cios patrimoniales se encuentran en dificultades, muchos de ellos desplazarse y no para convivir con otras gen-
sufren de deterioro o abandono, porque aparentemente no son ca- tes una vez que traspasan el umbral de sus
paces de competir con otros espacios urbanos ligados con la moder- exclusivas viviendas.
nidad o la posmodernidad. No podemos negar los tiempos en que
En nuestros días, muchas ciudades del mundo han tomado un estamos viviendo, cuando las nuevas tec-
sentido monosémico ligado al valor económico-comercial y entonces nologías no dejan de asombrarnos. Son
hay que rentabilizar centímetro a centímetro el suelo urbano. tiempos de globalización en que los flujos
Sin pretender una visión idílica, creemos oportuno señalar que de información tienden a desbordarnos y
las ciudades históricas nos han mostrado la posibilidad de vivir con se convierten en un arma de dos filos, por

10 De esta manera los desarrolladores inmobiliarios,


9 “El Zócalo de la Ciudad de México, Un acercamiento metodológico a la etnografía de definen en su a las nuevas prestaciones espacia-
una plaza,” Kathrin Wildner, en: , UAM, México, 1998,p. 165. les, de los condominios de lujo.

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052


44

El Centro Histórico, la epidermis deteriorada del espacio público Conjunto residencial en la colonia Granada, espacio urbano fragmentado al margen del espacio público
patrimonial. articulado.

lo que hay que reflexionar en estos nuevos trimonio urbano como el precioso vestigio a embalsamar de un pasado
tiempos de comunicación en las ciudades que nunca volverá?
históricas, de aquí es que surge una pregun- Esta autora se responde de manera categórica con un “no” y fun-
ta ¿la comunicación cómo? Esta interrogan- da esta respuesta en la hipótesis según la cual el ordenamiento a
te nos parece muy pertinente, si como lo escala local representa un valor antropológico fundamental, porque
hemos expuesto antes, el espacio público el espacio orgánico es irremplazable y porque la escala humana del
es sinónimo de comunicación. espacio urbano y sus habitantes constituyen el patrimonio, el más
En esta época el espacio público tiene dos precioso a conservar.11
vertientes, una referida al espacio físico u or- Por nuestra parte y en abono a esta postura, señalamos primero la
gánico que pone a las gentes cara a cara y a variabilidad de los espacios patrimoniales que se registran en el mundo
escala barrial y otra que es de escala territo- y las diferentes maneras de cómo se manejan estos espacios urba-
rial y ligada al espacio público virtual (léase nos según los recursos que dispone cada ciudad histórica, y segundo,
espectro radioeléctrico e internet), que multi- subrayamos que en el caso de la ciudad de México es evidente la he-
plica los espacios de manera sincrónica (nos terogeneidad del espacio urbano en centros históricos y en las áreas
da el don de la ubicuidad) y reduce las distan- de conservación patrimonial (ACP), en donde se registra un desfase
cias, planteando la posibilidad de obtener un económico y tecnológico, además de diferencias sociales y cultura-
superávit de tiempo. les, de otros conjuntos urbanos patrimoniales en Europa. Esto
El espacio público virtual al que Françoise último nos pone en alerta sobre la pertinencia de reflexionar sobre la
Choay denomina ciberespacio y supone em- teoría urbana y poner bien firmes los pies en nuestro terreno de estudio
blemático de la desafectación de los espacios y de acción.
orgánicos, de proximidad, de escala local, es La recuperación de los centros históricos es un fenómeno interna-
decir, el patrimonio urbano arquitectónico de cional, aunque las razones sean diferentes en cada país, mismo la po-
nuestros conjuntos históricos y barrios tradi- lítica pública orientada hacia el turismo, que parece ser una política
cionales de la ciudad. general, es diferente en cada ciudad por razones culturales y sociales.
En la eventual perspectiva de perder el con- A nivel de apoyo teórico para las orientaciones del manejo de los es-
tacto cuerpo a cuerpo con el mundo y perder pacios patrimoniales, es oportuno retomar la reflexión que hace Choay
el espacio concreto, Choay, refiriéndose a los para diferenciar respecto al divorcio contemporáneo entre la y
nuevos escenarios urbanos en los países de-
sarrollados de occidente, se pregunta si ¿tene-
mos que resignarnos y considerar nuestro pa- 11 Cfr. “Patrimoine urbain et cyberespace” en: ,
Françoise Choay, Édit. Du Seuil, Paris, 2006, pp. 222- 224.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
45
Dada la proliferación de nuevas modalidades del uso de los espa-
cios urbanos que concentran a la gente con fines particularmen-
te comerciales, en esta reflexión también encontramos presente
la “condena de muerte” del espacio público tradicional.
(términos que crearon los romanos para concebir el espacio y la Entre otras tenemos lo que Borja manifiesta
sociedad en la ciudad antigua). respecto a que “la ciudadanía es un estatus
Nuestro mundo de hoy es mayormente urbano y lo urbano Choay que reconoce derechos y deberes para todos
lo interpreta como: “ese sistema operativo válido y desarrollable en los que viven –y conviven– en un mismo terri-
todos los lugares, tanto en la ciudades como en las campiñas, tanto torio caracterizado por una fuerte continuidad
en los pueblos como en los suburbios y el advenimiento de lo urbano física y relacional y con una gran diversidad de
deshace la antigua solidaridad de y (ciudad y ciudadanía). actividades y funciones….El ideal de la socie-
La interacción de los individuos es desde ahora a la vez desmultiplicada dad urbana entendida como civitas (o urbani-
y deslocalizada. La pertenencia a comunidades de intereses diversos dad) es el de una colectividad basada en la
no se funda ya ni sobre la proximidad ni sobre la densidad demográfica convivencia y la tolerancia, heterogénea, pero
local. Transportes y telecomunicaciones nos implican en las relaciones con valores básicos y pautas elementales de
siempre más numerosas y diversas, miembros de colectividades abs- comportamientos comunes, que construyen y
tractas en donde las implantaciones espaciales no coinciden ya y no mantienen algunos elementos de identidad”.14
presentan más una estabilidad que dure”.12 Por nuestra parte esta idea de ciudadanía coin-
En esta reflexión encontramos una relación directa entre la esca- cide con la noción que tenemos del espacio
la humana y la escala del barrio, ese espacio local que hoy ha caído público, ese que incluye a todas las categorías
en demérito, que es parte del tejido urbano de la ciudad tradicional sociales y culturales y les ofrece la oportunidad
y en particular de sus espacios públicos. de comunicarse y llegar a un acuerdo.
Dada la proliferación de nuevas modalidades del uso de los espa-
cios urbanos que concentran a la gente con fines particularmente co- Reconquistar el espacio público
merciales, en esta reflexión también encontramos presente la “conde-
na de muerte” del espacio público tradicional. Lo que planteamos finalmente es que hay que
En la literatura no muy abundante en nuestro país sobre espacio darle una oportunidad a la ciudadanía de rein-
público, encontramos la postura de Jordi Borja en cuanto a la rela- ventar sus espacios patrimoniales a través del
ción entre espacio público y ciudadanía13 se trata de un texto que de espacio público, aprovechando su misión in-
alguna manera sintetiza diferentes ideas con las cuales comulgamos. tegradora. Un espacio público que ha estado
siempre ahí, lo vemos en los conjuntos histó-
12 Cfr. “Le règne de l’urbain et la morte de la ville”, en: ricos que guardan una talla y una morfología
, pp.165-198.

13 “Espacios Urbanos y ciudadanía”, en:


, Jordi Borja, Edit. UAM Izt.- Plaza Valdes, México, 2004, pp. 129-156. 14 . pp. 129 y 130.

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052


46

Madero nueva calle peatonal y su nuevo ambiente sociocultural. Fotografía: TSP.

humana que tenemos que aprovechar, esto Al igual que lo hizo Gustavo Giovannoni a principios del siglo xx, en
sin contar la historia social y cultural que so- esta época no podemos negar el desarrollo urbano y la evolución de
porta la riqueza del espacio urbano. las tecnologías de la información y la comunicación, pero frente a este
El vehículo de la reconquista del espacio hecho también es menester conservar los espacios patrimoniales de los
público está en los proyectos urbanos, porque conjuntos históricos y tratar de hacerlos espacios urbanos vivos.
un proyecto urbano que se identifica sustan- Esta pretensión requiere de proyectos urbanos que reafirmen la es-
cialmente por la escala local y un proyecto de cala humana y el contacto cara a cara en el espacio público; el uso
esta naturaleza es susceptible de interpretar del espacio virtual debe ser complementario del espacio orgánico tan
y materializar un proyecto de vida colectivo. enfatizado por Choay y tan necesario en esta época en que la ciudad
Los proyectos urbanos en los espacios pú- entra en crisis al igual que el espacio público, que en lugar de ser para
blicos patrimoniales (v. gr. los centros histó- todos aparentemente no es de nadie.
ricos) deben de tomar más en cuenta cómo Según Barthez la riqueza del espacio público consiste en la civilidad,
mejorar la calidad de vida de sus habitantes es decir, en la capacidad de albergar un público y a mantenerlo sin
–que se traducirá en la calidad de vida de la segregaciones. “La unidad del tiempo, la unidad del lugar se hacen
ciudad–, más que los dividendos que deja unidad del público, entendiéndose diferencia por esto la posibilidad de
el turismo cultural, mismo que no tiene que una coexistencia pacífica de la diferencia”.15
estar necesariamente excluido. La ciudad y
sus barrios deben seguir reproduciendo su prácticas y por sus funciones, así la que nos parece la función determi-
cultura y claro, enriquecerla con invitados, nante es la comunicación que ya hemos abordado tanto en lo que se
vengan de donde vengan, esto ya lo experi- refiere a lo físico como a lo virtual. Esta última modalidad es producto
mentó la Ciudad de México cuando fue una de los tiempos en que estamos viviendo, de la tecnotopía o del cybe-
ciudad refugio. respacio, esto no quiere decir que surjan usos espaciales y prácticas
La conservación de los espacios públicos sociales espontáneas, esto es lo que nos han enseñado las diferentes
patrimoniales, debe ir más allá de los espacios revoluciones que han reorientado la vida del planeta.
de alta significación, que de alguna manera se A partir de la revolución industrial las cosas cambiaron en este mun-
protegen solos, habrá que insistir sobre todo do, a partir del siglo XIX los periodos se han hecho más cortos y las
en aquellos espacios públicos de todos los transformaciones de las ciudades se hicieron manifiestas, no sólo por-
días, aquellos que le dan una continuidad a la que las ciudades fueron más grandes y más altas, sino simplemente
ciudad, en lo físico y en el espíritu social, es
menester solventar el derecho a la ciudad.
15 ., p. 130.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
47
Nextitla un barrio tradicional en un Área de Conservación Patrimonial.

porque los modos de vida fueron cambiando, sobre todo a partir de la a una sociedad interiorizada en el santuario
segunda mitad del siglo XX, ayudados con el desarrollo de la tecnología vivienda y tiende a segregar territorialmente
En estos tiempos, como parte de los procesos urbanos, estamos ante las diferentes capas sociales por niveles de
la transformación de los espacios de las ciudades y cada ciudad tiene su renta y es en esta óptica una fiel traducción
historia y sus cambios. Lo que sí es un hecho, es que las sociedades cam- de la ciudad capitalista… los intereses econó-
bian y dado que éstas son inherentes a las ciudades estas últimas también micos privados están por encima del interés
cambian. Dentro de estos cambios sobresale el cambio en los espacios general e incluso, se apropian directamente
públicos, de tal manera que Jordi Borja plantea que existe una crisis en de importantes áreas de la ciudad”.18
la ciudad y por ende en la concepción y en el desarrollo de estos espa- Lo que busca este autor es clarificar al-
cios públicos, dado que ya no son como antes ni se usan como antes, gunas nociones que él considera eran ambi-
en algunos casos ya no existen. ¿Estamos en procesos de mutación de guas, de dos modelos de ciudad, la antigua,
la ciudad o son reacomodos sociales y espaciales? histórica o tradicional y la moderna.19 Y a lo
En el panorama urbano mundial, es conveniente preguntarnos ¿a que a nosotros se refiere, pensamos que Oli-
qué tipo o modelo de ciudad nos estamos refiriendo?, dado que el va se inclina por la ciudad pública, sin dudar
panorama, sólo en occidente es vastísimo y diverso. de que ésta exista y que como modelo es
Puede resultar pertinente lo que señala otro autor catalán, Josep más que vigente.
Oliva i Casas,16 en el sentido de que hay dos modelos de ciudades En el mismo sentido y refiriéndose al pa-
que a veces se confrontan pero que también se mezclan y esa mezcla trimonio urbano, Françoise Choay también
produce confusión. plantea el futuro de la ciudad en dos planos
Este autor plantea dos tipos de ciudades, una la ciudad pública opuestos, se trata de la nueva era de lo urba-
que pone el acento en un espacio público “neutro, imparcial de trato no contraponiendo dos escalas en aparente
igualitario y de sumisión a unas reglas que afectan a todo mundo… antagonismo, “una de dimensiones del terri-
La ciudad pública da forma al espacio con la idea de que se convierta torio, véase planetaria y otra local y sobre la
en receptáculo, contenedor y escenario de vida cotidiana, es decir, un manera en que la primera tiende a suplantar
lugar de encuentro”.17 La otra es la , más orientada al
orden de usos y volúmenes (resaltándolos) pero separado del conjunto
urbano y orientado al urbanismo de maqueta, dice Oliva: “responde 18 ., p. 21.

19 Para caracterizar los dos modelos de ciudad, Oliva


establece los parámetros de: artificialidad, continuidad físi-
16 , Josep Oliva i Casas, Editorial Dossat, Madrid, 2005. ca, formalización del espacio, mezcla de usos, predominio
de escala, edificios encarados a la calle, prioridad del pea-
17 p. 15. tón, actitud de la arquitectura.

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052


48

a la segunda y a sustituirla”, Choay se resis- ciudad contrastada, también fragmentada y, desde el punto de vista
te a aceptar un futuro socioespacial fundado patrimonial, ha dejado de ser una ciudad monocéntrica.
por las telecomunicaciones cuando se des- Los procesos de metropolización han generado un conjunto de
cuida la escala tradicional del ordenamiento centros antiguos, centros históricos y espacios públicos patrimoniales
urbano, cuando se hace a un lado al espacio diversos, mismos que constituyen un parque urbano importante que-
orgánico, ése de los centros antiguos, porque puede caracterizarse entre lo que postulé antes como requisitos del
dice, “el es emblemático de esta espacio público y la ciudad pública de Oliva.
desafección de los espacios orgánicos. Éste Dentro de los planteamientos y estrategias para reordenar la ciu-
es un instrumento privilegiado de los nuevos dad de México, es de resaltar la importancia que se le ha otorgado al
poderes que nos confieren la velocidad y la espacio público, de alguna forma este espacio se ha convertido en el
teleinformación: ubicuidad que hace perece- de la administración en su programa denominado un Nuevo
deras las nociones de límites y proximidad, Orden Urbano, no solamente para el centro histórico, sino en general
instantaneidad, nombrada por la antífrasis [ac- en el conjunto de la ciudad, al final de esta gestión administrativa, sería
ción en tiempo real] que elimina la duración, la interesante ver la suerte que corrió el espacio público, en tanto que
temporalidad, substrato del espacio próximo espacio vertebrador o integrador de la ciudad.
y de la relaciones interpersonales”.20 La actual administración de la ciudad parece haber entendido de
Hemos tomado estas referencias porque el esta manera la importancia del espacio público al manifestar que:
objeto de nuestra exposición se dirige al espa- “Para el Centro Histórico de la Ciudad de México, de manera coordina-
cio público patrimonial, mismo que puede ser da con la Autoridad del Centro Histórico hemos comenzado acciones
contenido en un centro histórico o no. Este puntuales para recuperar y mejorar el espacio público como elemento
espacio también puede localizarse en una pe- básico de la estructura urbana, la convivencia social y la movilidad.
queña ciudad o en una metrópoli, como sería Con proyectos contemporáneos que respondan a las necesidades ac-
el caso de la Ciudad de México, a la que he- tuales y futuras de la población, el rescate del espacio público permitirá
mos tomado como laboratorio para compren- potenciar la conservación del patrimonio cultural, la regeneración del
der los procesos urbanos de hoy. Nos preocu- espacio edificado, la accesibilidad y la diversidad de usos y actividades
pa el futuro de nuestra ciudad y nos preocupa para generar una nueva centralidad urbana que sea respetuosa tam-
la pérdida de la memoria de la ciudad y la pér- bién de los procesos urbanos locales”.21
dida de la sociabilidad. Es de celebrar esta postura de la administración de la ciudad dado
La Ciudad de México, a la que podríamos que, el espacio público que es doblemente público cuando se trata del
calificar de ciudad dual, tendría representación ámbito patrimonial, porque el patrimonio es un bien público heredado,
en los modelos de ciudad que señala Oliva, a porque el patrimonio, sobre todo el urbano y sobre todo lo público, no
la vez pública y doméstica. Pero esta ciudad se hereda a individuos sino a sociedades, estamos hablando de bie-
no deja de ser una ciudad histórica (casi 700 nes culturales y naturales que se deben de transmitir de generación en
años lo sustentan) que simultáneamente se generación. Pero con el requisito de haber enriquecido o por lo menos
ha constituido en una ciudad de ciudades, una preservado lo recibido.

20 Véase “Patrimoine urbain et cyberspace”, en:


, Françoise Choay, Edit. Du
SEUIL, Paris, 2006. 21 Informe SEDUVI, 2007.

www.esenciayespacio.esiatec.ipn.mx
49
Espacio escultórico arte urbano en zona cultural de la UNAM.

Lo patrimonial trascendiendo el tiempo Fuentes de consulta:

Borja, Jordi. “Reabrir espacios públicos, políticas


Hasta ahora nos hemos referido a los espacios públicos patrimo- culturales y ciudadanía”,
, Edit. UAM Izt.- Plaza Valdez, Mexico,
niales, justamente por su carácter de herencia y de herencia colectiva.
2004.
Pero la ciudad es un proceso, es decir un espacio humano y cinético Cerda, Ildefonso.
que puede trascender el tiempo, si esa herencia es valorada adecua- versión francesa, presentada y adaptada por
Antonio López Aberasturi, Editions du Seuil,
damente. Es por lo anterior que no podemos sujetarnos solamente Paris, 1979.
al espacio pasado, al antiguo o histórico, sino también a ese espacio Choay, Fraçoise. “L’invention du Patrimoine Urbain”,
Revista Ciudades Históricas, Comité científico
público que se está construyendo ahora mismo y que por sus valores Internacional de ciudades y pueblos históricos de
socioespaciales, simbólicos, estéticos, culturales y otros, es suscepti- ICOMOS.
——. Edit. Du
ble de constituirse en la herencia del futuro. Seuil, Paris, 2006,
Es necesario adoptar una mirada integradora del espacio y del tiem- Giovannoni, Gustavo.
anciennes, Editions du Seuil, Paris, 1998.
po en la actual construcción del espacio público, para esto debemos
SEDUVI. Informe del Secretario, 2007.
adoptar todos los señalamientos que cualifican o califican a este es- Sitte, Camilo. “L’art de bâtir les villes, ‘Der Stadtebau’”,
pacio, y este propósito sí debemos retener lo que la memoria urbana,
Éditions L’Equerre, Paris, 1980.
ya sea histórica o colectiva, que nos indican ciertos espacios como Watin, Michel.
dignos de valorar. Edit. Anthropos, Paris, 2001

Esta idea nos sugiere también una seria reflexión sobre los espa-
cios urbanos que se producen actualmente y que en muchísimos ca-
sos adolecen de esa gama de valores que los harían trascender el
tiempo por sus propios méritos.
En el universo urbano han dejado de producirse espacios públicos *Datos del autor:
que refuercen la constitución de la ciudad, esa que fue la evidencia de Profesor investigador de la Sección de Estudios de
la evolución humana y que fueron gratificantes para las sociedades, Posgrado e Investigación de la ESIA Tecamachalco.
esos espacios significantes que la propia memoria de la ciudad nos Doctor en Urbanismo.
surrieta@ipn.mx
reclama, de éstos se pueden desprender los nuevos conceptos que
hagan al espacio público realmente patrimonio de todos

enero-junio 2011, ISSN 1870-9052

También podría gustarte