Asociación de Elementos
Se manifiestan en general por las condiciones de formación, mostrando asociaciones de
características en cualquier condición geológica, tales como rocas ígneas particulares,
rocas sedimentarias y ciertas menas, esto es porque algunos elementos pueden viajar
juntos durante los procesos ígneos y metamórficos, pero que pueden separarse durante el
ciclo de meteorización (Vásquez, 2009), se puede distinguir como:
a) Elemento indicador (Target). - Elemento indicador, indicador directo o elemento
blanco “Target element” se refiere a uno de los elementos principales del depósito mineral
que se espera encontrar (Tabla 1 y 2).
b) Elemento explorador (Pathfinder). – Debido a que los elementos muestran diferentes
grados de movilidad controlados inicialmente por la estabilidad de los minerales que los
contiene posteriormente por el ambiente en el cual están migrando, un elemento
“Pathfinder element” puede ser definido como un elemento fácilmente detectable (Tabla
1 y 2).
El hecho de que uno o más elementos y minerales puedan estar estrechamente asociados
y puedan constituir un halo, ayudan en el descubrimiento de depósitos minerales después
de buscados lo que lleva al concepto de elemento guía, elemento indicador o Pathfinder
(Warren & Delarault 1953, 1956).
Tabla Nº 1: Elementos con afinidad geoquímica y elementos guías asociados usados
en exploración de depósitos (Tomado de Rose, 1979; Beus & Gregorian, 1977) en
Hurtado 2002).
Tabla Nº 2: Elementos indicadores y exploradores de algunos tipos de depósitos minerales
(Modificado de Hurtado, 2002).
Conceptos básicos
Según la definición original de GOLDSCHMIDT (en ROSE et al. 1979) la geoquímica se ocupa
de dos ramos:
la determinación de la abundancia relativa y absoluta de los elementos de la tierra y
el estudio de la distribución y de la migración de elementos individuales en varias partes de la
tierra con el objetivo de descubrir los principios, que controlan la distribución y la migración de
los elementos.
Estadísticas de los resultados y evaluación geológica de los datos tomando en cuenta los
datos geológicos y geofísicos.
Confirmación de anomalías aparentes, muestreo encauzado en áreas más pequeñas (red de
muestreo con espaciamiento corto), análisis de las muestras y evaluación de los resultados.
Investigación encauzada con muestreo y análisis adicionales de muestras tomadas en un paso
anterior.
Elemento indicador, elemento explorador
Elemento indicador, indicador directo o elemento blanco (‘target element’) se refiere a uno
de los elementos principales del depósito mineral, que se espera encontrar.
Elemento explorador o elemento pionero (‘pathfinder element’)
se refiere a un elemento asociado con el depósito mineral, pero que puede ser detectado más
fácilmente en comparación al elemento blanco, que puede ser dispersado en un área más extendida
y que no está acompañado por tanto ruido de fondo en comparación al elemento blanco. La
selección de un elemento explorador requiere un modelo del depósito mineral, que se espera
descubrir. Arsénico (As) por ejemplo puede presentar un elemento explorador para la búsqueda
de cobre (Cu) en un depósito macizo de sulfuros, pero no es un elemento explorador para cada
tipo de depósito de cobre.
Proporciones de isótopos estables también pueden servir para indicar un depósito mineral, por
ejemplo Pb, S y Sr están distribuidos en zonas alrededor de algunos depósitos minerales y las
variaciones en la composición de carbón y oxígeno pueden indicar la proximidad de un depósito
mineral del tipo Mississippi Valley.
Anomalía geoquímica
Una anomalía es una desviación con respecto a la norma. Una anomalía geoquímica es una
variación de la distribución geoquímica normal correspondiente a un área o a un ambiente
geoquímico. Una anomalía se expresa por medio de números, que se puede separar de un grupo
más amplio de números constituyendo el fondo geoquímico. Para ser detectada una anomalía
tiene que desviar claramente de este fondo.
En sentido estricto un depósito mineral como un fenómeno escaso y anómalo por su mismo es
una anomalía geoquímica. La distribución geoquímica relacionada con la génesis o la erosión del
depósito mineral también es una anomalía.
Las anomalías relacionadas con un depósito mineral, que se puede usar como guías para el
depósito mineral se denominan anomalías significantes. Generalmente las anomalías tienen
valores que exceden los valores del fondo. Anomalías negativas, cuyos valores son menores que
aquellos del fondo, apenas sirven para la búsqueda de depósitos minerales. Desdichadamente las
concentraciones altas de elementos indicadores pueden ser causadas por una mineralización no
económica o por procesos geológicos o geoquímicos no relacionados con una mineralización. El
término 'anomalía no significante' se refiere a estas anomalías no relacionadas con un depósito
mineral.
Otros factores de una anomalía geoquímica de importancia son el marco topográfico y la
asociación geológica.
En el caso de anomalías detectadas en suelos hay que tomar en cuenta, que estos podrían ser
desplazados de su substrato mineralizado por deslizamiento del suelo (creeping en inglés).
Solamente una anomalía detectada en un suelo residual en terreno plano o sobre un cuerpo
verticalmente inclinado puede ubicarse directamente encima de un depósito mineral.
Anomalías hidromórficas se producen por la precipitación de material en lugares, donde el agua
subterránea alcanza la superficie, por ejemplo en un pantano (en un orificio
de desague = seep o shallow hole en inglés).
Tipos de anomalías geoquímicas
Anomalias epigenéticas en las rocas de caja
Las anomalías epigenéticas se describen como aureolas químicas, mineralógicas e isotópicas
generadas por los procesos de mineralización, de escape y de lixiviación de los elementos a través
de los fluidos, que causan la mineralización y que pasan por canales desde el cuerpo mineralizado
hacia las rocas de caja. Estas anomalías están superpuestas a las rocas preexistentes y se ubican
en las rocas de caja de un cuerpo mineralizado. El desarrollo más extensivo de
anomalías epigenéticas se observa cerca de depósitos hidrotermales y canales de transporte de
fluidos. La viscosidad baja de los fluidos favorece su penetración a lo largo de fracturas y por
intersticios de la roca hacia la roca de caja. Las anomalías epigenéticas están caracterizadas por
cantidades anómalas de elementos distribuidas cerca de canales hidrotermales, por la alteración
hidrotermal de minerales de las rocas de caja y la lixiviación de elementos en sectores del corrido
de los fluidos formadores de la mineralización. Factores, que controlan la formación de
las aureolas son entre otros los gradientes de temperatura, el estado de oxidación de los iones
involucrados, la movilidad de los elementos participantes, los sistemas de fracturas, la
permeabilidad y la reactividad de las rocas.
Anomalía causada por difusión de elementos
Una aureola de difusión se genera por la difusión de metales disueltos por fluidos intersticiales
estacionares hacia la roca de caja de un cuerpo mineralizado como una veta o un dique por
ejemplo. Los metales disueltos subsecuentemente son precipitados en o absorbidos por la roca de
caja.
Los constituyentes disueltos en un fluido realizan movimientos atómicos al azar y tienden a
difundir hacia las regiones de concentración más baja. Debido a la velocidad extremadamente
pequeña de la difusión el efecto de difusión normalmente es mucho menor en comparación con
aquel de la infiltración. En comparación con el efecto de un fluido moviéndose con una velocidad
de 0,001mm/s (= 32m/año) por ejemplo el efecto de difusión es despreciable (ROSE et al. 1979).
En ausencia de un gradiente alto de presión o de una salida hacia una zona permeable el fluido
solo podrá pasar lentamente por los poros finos y fracturas de la roca y el efecto de la difusión
podría ser significante.
La naturaleza de una aureola formada por difusión y por absorción y precipitación depende de los
factores siguientes:
Concentración del elemento difundiéndose desde su fuente: una concentración inicial alta resulta
en valores altos a lo largo de un perfil de concentración trazado a partir de la fuente del elemento
o es decir a partir del cuerpo mineralizado hacia la roca de caja; una variación de la concentración
del elemento en la fuente también influye la difusión.
Intervalo de tiempo, en que puede actuar la difusión: tanto más tiempo disponible, tanto más
extendida será la aureola de difusión.
Naturaleza de reacciones con la roca de caja: en una roca de caja reactiva se desarrollará una
aureola pequeña, caracterizada por altas concentraciones de elementos; en una roca de caja menos
reactivo se desarrollará una aureola de difusión más extendida con concentraciones de elementos
más bajas.
Porosidad y permeabilidad de la roca de caja: una roca de caja con alta porosidad y con poros
conectados entre sí tiende a hospedar aureolas más extendidas en comparación con una roca
menos porosa.
Valor de la constante de difusión característica para la especie química (elemento, molécula) y
para las condiciones químicas respectivas: generalmente iones pequeños y temperaturas altas
tienden a favorecer aureolas grandes.
Anomalía de corrosión o de lixiviación
Un halo de corrosión (leakage en inglés) se causa por fluidos, que pasan por vetas,
fracturas y intersticios de la roca y cuyos metales disueltos subsecuentemente son precipitados o
absorbidos. Este tipo de transporte se denomina infiltración, las anomalías resultantes se llama
anomalías de corrosión o de lixiviación.
La ubicación, las dimensiones y la intensidad de una anomalía de corrosión dependen de los
factores siguientes:
Corrido del fluido mineralizado: Zonas de fracturas o de alta porosidad en la roca figuran zonas
permeables, que favorecen un recorrido rápido en comparación al corrido a lo largo de bordes de
granos o en poros de rocas macizas. Normalmente el corrido de los fluidos hidrotermales está
dirigido hacia arriba debido a las presiones elevadas presentes en altas profundidades, sin
embargo no se excluye corridos horizontales o dirigidos hacia abajo.
Concentración de los elementos indicadores en el fluido mineralizado: BARNES &
CZAMANSKE (1967, en ROSE et al., 1979) estiman, que los fluidos formadores de los depósitos
de los metales básicos comunes, contienen metales en rangos entre 1ppm y 1000ppm. En
comparación las aguas superficiales y subterráneas normalmente están caracterizadas por
concentraciones en Cu, Pb y Zn de aproximadamente 0,01ppm.
Influencia de precipitación, absorción, intercambio iónico y de otros procesos al transferir los
elementos indicadores de su forma disuelta en el fluido hidrotermal hacia una fase sólida en la
roca.
Prácticamente los dos efectos anteriormente descritos, la difusión y la infiltración pueden
contribuir a la formación de una anomalía.
Distribución de los elementos por zonas en depósitos minerales epigenéticos y en sus aureolas
Los depósitos minerales epigenéticos y sus aureolas pueden ser caracterizados por una
distribución de elementos por zonas. Las proporciones de pares de elementos varían gradual- y
progresivamente en función con la distancia o de la posición respecto al depósito mineral debido
a variaciones en las condiciones de deposición y en el fluido, que genera la mineralización. Las
proporciones de metales pueden proveer un medio indicador para la dirección, en que la
mineralización se ubica o se vuelve más rica, y un medio para distinguir las raíces de la
mineralización de anomalías, que superponen la mineralización.
Anomalías en suelos residuales
Anomalías en 'gossan' y cubiertas afectadas por corrosión y lixiviación
'Gossan' se refiere a un producto de meteorización, que contiene Fe y que se sitúa encima de un
depósito de sulfuros. Se forma por oxidación de los sulfuros y por la lixiviación del azufre y la
mayoría de los metales dejando como únicos remanentes hidróxidos de Fe (limonita por ejemplo)
y raramente algunos sulfatos (definición según BATES & JACKSON, 1984).
Capas de limonita residual y otros productos de meteorización de sulfuros de Fe usualmente
pueden figurar guías valiosas hacia menas en áreas caracterizadas por meteorización profunda y
cubiertas residuales. Desdichadamente se puede confundir fácilmente los productos de
meteorización de menas con aquellos de rocas comunes. Los estudios de elementos trazas son
útiles para distinguir entre menas meteorizadas y los productos de meteorización de otras
formaciones geológicas como por ejemplo de pirita de formación hidrotermal o singenética o de
carbonatos de Fe.
Las cubiertas alóctonas se constituyen de depósitos glaciares, de depósitos aluviales
y coluviales , de turba, de sedimentos eólicos y material piroclástico. Una
cubierta alóctona impide la observación directa de un depósito mineral subyacente. Los estudios
de trazas de metales en la cubierta transportada pueden contribuir al descubrimiento de un
depósito mineral escondido.
En cubiertas alóctonas se distingue anomalías geoquímicas singenéticas y epigenéticas. La
anomalía singenética se forma simultáneamente con el depósito de material transportado. La
anomalía epigenética se refiere a una distribución de uno o varios elementos introducida en el
depósito de material transportado subsecuentemente a su formación. Ambos tipos de anomalías
pueden ocurrir juntos en una cubierta alóctona y pueden superponerse mutuamente.
Anomalías en agua
Una distribución anómala de elementos en aguas subterráneas y meteóricas se denomina
anomalía hidrogeoquímica. Como generalmente los elementos son transportados en forma
disuelta en las aguas naturales, los elementos más aptos para la exploración geoquímica de aguas
son los elementos relativamente móviles.
Una aplicación muy exitosa de la exploración geoquímica de aguas consiste en la determinación
de U en aguas subterráneas y meteóricas.
Anomalías en sedimentos de drenaje
A los sedimentos de drenaje pertenecen los sedimentos de manantiales, de lagos, de llanuras de
inundación, los sedimentos activos de corrientes de agua y los sedimentos, que funcionan como
filtros para el agua (seepage sediments en inglés).
Los sistemas de drenaje a menudo parten de manantiales. Los sedimentos situados en la cercanía
de los manantiales y los sedimentos de filtración tienden a exhibir anomalías apreciables y por
consiguiente estos sedimentos son útiles para una exploración geoquímica. Los sedimentos
activos de corrientes de agua incluyen material clástico y hidromórfico de los sectores de
filtración, el material clástico erosionado de los bancos de material detrítico situados en los lechos
de los ríos y de material hidromórfico absorbido o precipitado por el agua de la corriente. Las
anomalías desarrolladas en estos sedimentos activos pueden extenderse varios diez de kilómetros
con respecto a su fuente. Los estudios de estas anomalías se utilizan frecuente- y preferentemente
para lograr un reconocimiento general. En el caso de los lagos se estudia los componentes
clásticos y el material absorbido o precipitado de los sedimentos. En áreas con una alta cantidad
de lagos como en el área del escudo precámbrico de Canadá modelado por glaciares el estudio
geoquímico de los sedimentos de lagos puede ser el método más económico y efectivo para un
reconocimiento general.
SOLUBILIDAD
Los minerales son sustancias inorgánicas solidas que poseen una composición química defina;
debido a esto, los mismos llegan a ser susceptibles a ser disueltos, bien sea por distintos ácidos o
simplemente por el agua común.
Como compuestos estos se agrupan en:
Metales: son solubles en ácidos salvo los mas nobles como el oro que lo son únicamente en el
agua regia.
Sulfuros y Sulfosales: son solubles débilmente en ácido.
Óxidos: son parcialmente solubles en los ácidos.
Hidróxidos: como el amonio, potasio y sodio son solubles en agua, y los de calcio son
ligeramente solubles.
Halogenuros: como los cloruros son solubles en agua con la excepción de los de plomo y plata.
Carbonatos: los sencillos mayormente son insolubles en agua; los complejos y los minerales con
radicales carbónicos son fácilmente solubles en agua. Particularmente muchos de los carbonatos
son fácilmente solubles en ácido.
Boratos: con agua estructural (cristalización) son fácilmente solubles tanto en agua como en
ácidos.
Los Sulfatos: son solubles en agua y el ácido excepto los de plomo, calcio y bario.
Fosfatos: son ligeramente solubles en ácido.
Arseniatos Variables: algunos son solubles en agua y fácilmente solubles en ácidos.
Vanadatos: son débilmente atacables en ácido.
Molibdatos: son débilmente solubles en ácidos.
Nitratos: son solubles tanto en agua como en ácido.
Silicatos: tienden a ser solubles en ácido sulfúrico (y fluorhídrico), pero hay sus excepciones,
entre las cuales están las zeolitas por ejemplo.
Desde ese punto de vista resulta interesante tener al menos, los minerales mas "comunes" y su
respectivo medio de solubilidad, representada en una tabla práctica como la que se presenta
a continuación:
Fugacidad
En termodinámica química, la fugacidad de un gas real es una presión parcial efectiva que
reemplaza la presión parcial mecánica en un cálculo preciso de la constante de equilibrio químico.
Es igual a la presión de un gas ideal que tiene la misma temperatura y energía libre molar
de Gibbs que el gas real.
Las fugacidades se determinan experimentalmente o se estiman a partir de varios modelos, como
un gas Van der Waals, que están más cerca de la realidad que un gas ideal. La presión de gas ideal
y la fugacidad se relacionan a través del coeficiente de fugacidad.
Fugacidad aplicada a yacimientos
Ejemplos de graficas de fugacidad de S,O,PH y temperatura
Mayormente hidrotermales
Figura 1. Solubilidad de H2O en fundidos silicicatados
de
composición a andesítica y basáltica a 1100°C. Un
magma
de composición intermedia con 2.5% H2O requiriría
75,
60 y 10 % de cristalización para alcanzar saturación
a 5 kbar (A), 2 kbar (B) y 0.5 kbar (C), respectivamente
(tomado de Reed, 1997; modificado de Burnham y
Ohmoto, 1980).
Figura 2. Relaciones presión-temperatura de
reacciones de equilibrio de deshidratación y
transformaciones polimórficas (tomado de
Burt y Rose, 1979)
yacimiento de skarn
Figura 3. Estabilidad de minerales de fierro
y otras especies en función de log aO2 vs.
1/T. Ad = andradita; An = anortita; Ann =
annita; Ep = epidota; Fay = fayalita; Fe =
fierro; Ftr = ferrotremolita; Gar = granate;
Hd = hedenbergita; Hm = hematita; Iv =
ilvaita; Kr = kirschsteinita; Ksp = feldespato
K; Mt = magnetita; Ps = pistacita;
Figura 4. Diagrama esquematico de estabilidad
para sistema Fe-S-O (línea negra gruesa), para
sistema Cu-Fe-S-O (línea de puntos) y porcentage
de Fe en esfalerita (línea punteada), en función de
log aO2 vs. log aS2 calculado a 250°C y presión
de vapor = 40 bares (modificado de Barton y
Skinner, 1979).
Figura 5. Diagrama esquemático de estabilidad
para sistema Fe-S-O (línea negra gruesa), para
sulfosales de Sb (línea punteada) y As (línea
punteada-punto), para el sistema As-Fe (línea
punteada-doble punto) y para el sistema As-S
(línea a puntos) a 250°C y presión de vapor =
40 bares (modificado de Barton y Skinner,
1979).
Figura 6. Diagramas de estabilidad Eh vs. pH y
aO2 vs. pH para el sistema Fe-S-O, para el
sistema Cu-Fe-S y para contenido de Fe en
esfalerita a 250°C y presión de vapor = 40 bares
(tomado de Barton y Skinner, 1979).
Figura 7. Diagrama composicional para el
sistema Fe-Zn-S en función de actividad de S2 y
temperatura, mostrando contenido de Fe en
esfalerita en equilibrio con una fase con Fe
(tomada de Barton y Skinner, 1979).
Epitermales de alta y baja sulfuración
Figura 8. Diagrama de correlación entre
temperatura y fugacidad de azufre para los
estados de sulfuración relativos de los fluidos
hidrotermales en el ámbito de depósitos
metalíferos en pórfidos y epitermales, definidos
según los campos de estabilidad de minerales
clave. Adaptado de Einaudi et al. (2003). Las
reacciones de sulfuración fueron tomadas de
Barton y Skinner (1979).
Bibliografía
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GEOLÓGICA
juan Rodríguez GEOQUÍMICA (2014), UNIVERSIDAD NACIONAL DE
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Brian K. Townley, "Hidrotermalismo"(2014) Geología Económica, Departamento de
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