PERSONA Y CULTURA HUMANISTA.
MÓDULO 2
2. LAS CONCEPCIONES DEL HOMBRE A TRAVÉS DE LA HISTORIA.
2.1 PREHISTORIA
EL HOMBRE EN LA PREHISTORIA
Cuevas de Altamira
Arte Rupestre
En sus comienzos, el hombre se rige por arquetipos que expresan mitos, relatos y
narraciones que le dan un sentido a cuanto hace y que rememora
permanentemente a través de sus rituales. Todo aquello realizado por el hombre
en esa época como las herramientas y su forma primitiva de comunicación,
muestran claramente que el hombre es diferente a los demás seres vivos.
Se relaciona con los demás, forma grupos, cada uno con sus actividades y roles.
Restos arqueológicos del Paleolítico demuestran que al hombre primitivo le
afectan profundamente el misterio de la muerte y la procreación. Creía depender
de las fuerzas de la naturaleza y tenía la seguridad de que algo superior era el
origen de la vida. Para dicha relación con su ser superior se valía de ritos. Ya
desde entonces se reconoce como un ser dependiente de algo o alguien superior,
que no se basta él mismo ni que está él y sólo él, en su mundo.
Se acepta como una parte de un todo. También creían que había algo después de
la muerte, se reconocen como seres trascendentes, por lo que enterraban a sus
muertos con utensilios y alimentos, prueba de esto son sus construcciones
funerarias.
En el Neolítico el hombre primitivo vive muy ligado a la naturaleza, utiliza amuletos
y fetiches.
Tiene necesidad de comunicación con la “causa de todas las cosas”, que originan
los rituales. Así mismo, atribuía fuerzas misteriosas a los fenómenos atmosféricos.
Se reconoce en el otro ser humano como un igual.
Durante la Edad Antigua, en Egipto es mucha la importancia que le dan a la vida
después de la muerte, entierran a sus muertos de acuerdo a la clase social e
importancia que tenía esa persona en vida. Muestra de ello son los hallazgos
arqueológicos. La momificación reafirma la creencia de que la persona realiza un
viaje al más allá.
2.2 EDAD ANTIGUA: GRECIA, ROMA Y EL CRISTIANISMO.
EL HOMBRE EN EL PENSAMIENTO GRIEGO
Aquiles y Ajax jugando con los dados
En la literatura griega más antigua se sabe que:
Homero (s. VIII-VII a.C) afirmó que falta todavía la conciencia de la unidad y la
autonomía de la vida psíquica del hombre.
•Las decisiones humanas se relacionan inmediatamente con decisiones de los
dioses.
•En la tragedia griega, el hombre se debate entre sus pasiones, su conciencia de
libertad y la sensación de un destino que se cumple inexorablemente y que acaba
con la muerte siempre misteriosa.
Los filósofos presocráticos:
•No se plantearon directamente la pregunta por el hombre, porque la primera
admiración la tuvieron a causa de los fenómenos de la naturaleza y se
preguntaron cuál era el principio último de fenómenos naturales tan distintos como
los que observaban.
Sócrates centró el pensamiento Griego sobre el hombre porque la primera
admiración se la causaron los fenómenos de la naturaleza y se preguntaron por el
principio último de los fenómenos naturales tan distintos que observaban.
Centró el pensamiento griego sobre el hombre, sobre la posible búsqueda y
consecución de la verdad, sobre la dignidad humana, el conocimiento de sí mismo
y la vida conforme a las normas morales que dictaba la razón.
•Para Platón el hombre es ante todo un alma, que posee un origen divino,
inmaterial, eterno e inmortal, unida accidentalmente al cuerpo como consecuencia
de un pecado y con la misión de gobernar y dirigir el cuerpo como el timonel la
nave.
.•El cuerpo es la cárcel del alma
•La Antropología de Platón tuvo una gran influencia en el pensamiento cristiano y
en el medieval.
Cráteras Griegas con escenas teatrales
La filosofía griega antigua estuvo determinada por un pensamiento
preponderantemente objetivo. Su mirada se orienta al mundo, al cosmos, al
universo. Se pretende estudiar el ser, las formas y leyes esenciales de las cosas.
Se establece un escalonamiento ordenado de los seres que va subiendo desde las
cosas inanimadas hasta alcanzar las formas de vida y culminar en los modos de
ser y de operar del espíritu. Dentro de ese orden universal, al hombre le
corresponde un puesto primordial. Lo que lo caracteriza y constituye su propia
esencia es única y exclusivamente su alma: El escrito más importante acerca del
hombre para la tradición, que no dejará de comentarse hasta la Edad Media es
aquel que trata acerca del alma (más que el que trata acerca del hombre).
No obstante, en el primitivo pensamiento griego se encuentran auténticos
elementos antropológicos. En los orígenes de la Filosofía. Intenta comprender el
sentido de su existencia, tanto por el origen divino, de donde procede el alma –que
está encadenada al cuerpo-. En consecuencia se considera al alma como una
realidad superior, por encima del mundo, pero en esa realidad está la verdadera
esencia del hombre. El primitivo pensamiento griego presenta ya una dualidad
fundamental del alma espiritual y cuerpo material. Al hombre le incumbe asimismo
una responsabilidad por su conducta; existe lo justo y lo injusto, la culpa y la
expiación, a través de las cuales debe alcanzar su perfección definitiva.
Ya en Heráclito de Éfeso aparece un pensamiento antropológico aún más claro.
Según él, el hombre se caracteriza por la percepción del logos; es decir, del
sentido y ley del mundo.
Para Parménides, el hombre se caracteriza por la facultad de pensar. Mientras el
hombre se encontraba en un orden meramente exterior, con los Sofistas se llega a
las primeras reflexiones como éstas: ¿somos capaces de conocer la Verdad?
¿Existen normas objetivas que rigen nuestra conducta?. ¿ Todo es relativo?. ¿No
es acaso el propio hombre la “medida de todas las cosas”?. (Protágoras).
Según Platón, el hombre está ordenado por su espíritu al mundo inteligible. Ese
mundo es la verdadera realidad en comparación con todo lo exterior que cambia y
se percibe por medio de los sentidos. El alma del hombre es inmortal. Platón es el
primero que intenta demostrar filosóficamente la inmortalidad del alma.
Sin embargo, para ellos el espíritu es razón, de tal forma que el espiritualismo va
ligado al intelectualismo de la imagen del hombre.
También para Aristóteles, (discípulo de Platón), el hombre está por encima de
todas las demás cosas por su razón. Sin embargo, él intenta superar el dualismo
platónico entre cuerpo y alma así como entender la unidad esencial del hombre.
El Partenón de Atenas
Aristóteles entiende el alma como principio esencial y constitutivo que configura
al hombre convirtiéndolo en un cuerpo humano vivo. El influirá profundamente en
el pensamiento cristiano. Otras de las características de su pensamiento son:
•Define al hombre como animal racional o como animal que tiene razón o palabra
•Contempla también al hombre como animal sociable por naturaleza.
•Sólo en la comunicación social tiene el hombre asegurado un género de vida en
el que puede satisfacer todas sus necesidades.
•En su política afirma que aislado sólo podrían vivir una bestia o un dios.
Sin embargo, no supera por completo la visión platónica del hombre: el ser
espiritual del hombre se define principalmente por el elemento cognoscitivo. El
espíritu es razón. Queda en segundo plano la facultad de la libertad, decisión,
responsabilidad, del amor y comunión personales. Es cierto que no se niegan
estos elementos, pero quedan muy por detrás de la razón. La historia no tiene un
significado pleno, esto se lograra hasta en el marco cristiano en el que al hombre
se le capta en su historia, entendida ésta como una historia de salvación, como el
lugar del diálogo histórico entre Dios y el hombre, como el marco de la acción de
salvación divina sobre la humanidad. Es así como la historia alcanza por primera
vez el significado de salvación eterna. Sin embargo sería aventurado decir que no
tenían una conciencia histórica. Sustentando esto, se han encontraron
interpretaciones históricas de carácter mitológica con las que el hombre intenta
descubrir su origen.
El hombre se sabe bajo un destino absoluto, ciego e impersonal, y no frente a un
Dios vivo y personal como en el Cristianismo, que se revela en la historia como
Dios del amor y de la Salvación. Aquí es donde radica la oposición más profunda
entre las concepciones griega y cristiana relativas al hombre.
EL HOMBRE EN EL PENSAMIENTO CRISTIANO
La curación de la hemorroísa en catacumbas , Roma
El cristianismo aporta algo muy distinto al pensamiento Griego: el mensaje de
salvación para el hombre concreto en la Historia. La doctrina de la Fe Cristiana
está en la esfera de un acontecimiento libre y personal que se desarrolla entre
Dios y el hombre. El Cristiano sabe que la Humanidad tiene su origen en la libre
voluntad del Creador “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza” (Gen
1,26).
El mal tiene origen en la libre y personal decisión del hombre que se rebela contra
la voluntad de Dios. Él actúa en la historia de la salvación con un amor personal.
Por primera vez, se acuña en el ámbito cristiano el concepto de Persona.
El hombre se encuentra en el centro entre el mundo material y sensible del cuerpo
y el mundo espiritual. Constituye el escalón más alto del mundo físico, comparte
las leyes de la materia y las fuerzas vitales de la planta y el animal.
El buen pastor en Catacumbas de Roma.
Sin embargo, pertenece ya al orden de lo espiritual a través de su espíritu que en
cuanto alma es el principio vital del cuerpo y está llamada a la vida inmortal.
Tampoco se le entiende ya como pura razón sino que al mismo tiempo es voluntad
y facultad de libertad y de amor. Es así como Dios mantiene relaciones de tipo
personal con el hombre, dialoga con él, le orienta y le declara lo que es bueno y
malo, le ayuda, respeta su libertad, le premia, le corrige y con todo esto le
dignifica.
2.3 EDAD MEDIA
EL HOMBRE EN EL PENSAMIENTO MEDIEVAL
Escultura de Gilabertus
Entre los pensadores más importantes, se encuentra San Agustín, cuyo
pensamiento filosófico está hondamente influido por Platón, ve en el alma y en el
cuerpo dos realidades separadas:
-El hombre es visto a la luz de Dios que es principio último de su ser, perfección
única, hogar único de toda Verdad, principio, modelo y fin de todo hombre.
-En el conocimiento de nuestra Verdad está nuestra felicidad que se define como
el gozo de poseer la Verdad, por eso el vivir humano es un anhelo intenso y
continuado de Dios.
-“Nos hiciste para ti y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en ti”
-Distingue entre el libre albedrío o la capacidad de elegir y libertad como
realización del Bien.
La escuela de Atenas de Rafael
-El hombre posee la libertad de elegir entre el bien y el mal, pero para elegir y
practicar el Bien necesita del auxilio de la gracia divina.
-El hombre sólo se realiza en el amor.
Por su parte, Tomás de Aquino, adopta la doctrina Aristotélica, según la cual el
alma espiritual, es al propio tiempo el principio interno que conforma al cuerpo,
alma y cuerpo no son por lo mismo, dos substancias separadas sino dos principios
internos que unidos substancialmente dan como resultado el hombre completo.
-El alma humana ocupa un ínfimo lugar entre los seres espirituales.
-El alma por su naturaleza es creada por Dios
-Sólo el hombre es persona, no lo es el alma de por sí aunque pueda subsistir con
independencia del cuerpo.
-El fin último del hombre es Dios poseído plenamente como Verdad y Bien
supremos.
-El alma es simple y espiritual, por eso no perece con el cuerpo y es ella la que
puede poseer plenamente a Dios. Alcanzar dicha posesión depende del libre
ejercicio de la voluntad humana.
-La sabiduría consiste no sólo en el conocimiento sino en el amor.
-El Dios de Santo Tomás es el Dios de la revelación evangélica.
-Para alcanzar su fin último Dios ha dado al hombre la ley natural que es la
participación de la ley Eterna en la criatura racional. Esta ley se puede descubrir
por la razón, pero Dios ha ayudado a su conocimiento por la revelación.
-La ley natural enseña y manda al hombre a vivir como persona. En ella se
fundamenta el valor de las leyes positivas legítimas que pueda dar cualquier otra
autoridad
2.4 ÉPOCA MODERNA.
El regreso del Hijo Pródigo de Rembrandt
SIGNIFICADO ANTROPOLÒGICO DEL RENACIMIENTO:
La historia del mundo occidental se encuentra dividida en tres grandes edades:
Antigua, Media y Moderna. La historia moderna da principio con los humanistas
durante el Renacimiento. (Arostégui, 32).
El Humanismo es el movimiento cultural que marca el inicio de la Época Moderna.
En el transcurso de la Historia se dan diversos acontecimientos que transformaron
la concepción que el Hombre tenía de sí mismo y frente al Universo. Entre otros,
podemos nombrar el descubrimiento y conquista de América, las aportaciones de
Copérnico, la Reforma, el Renacimiento y un poco después, las ideas de la
Ilustración.
La transformación del pensamiento pasa de una visión teocéntrica, que fue
característica fundamental de la Edad Media, a una visión antropocéntrica que se
concentra en la especulación filosófica del hombre como ser racional. La Razón
adquiere un papel fundamental dentro de las facultades del hombre.
•El Renacimiento no es más que el Humanismo, pero es también un humanismo y
un humanismo nuevo, es decir, una nueva comprensión del hombre.
•Renace el entusiasmo por las humanidades clásicas, o sea, griega y romana, y
ello comporta la exaltación del hombre en cuanto a hombre.
•Los grandes pintores y escultores italianos pintan y esculpen al hombre y a la
mujer buscando siempre su expresión más bella, más vigorosa, más natural.
•Todos los artistas son cristianos pero sus pinceles y sus gubias, no buscan una
representación de lo divino en lo humano sino sólo lo humano.
•Se acentúa un antropocentrismo.
•Por eso, avanza un proceso de autonomía del hombre y de sus realizaciones que,
andando los años, desembocará en la secularización de la razón, de la ciencia, de
la sociedad y de la política.
Biblioteca palafoxiana construída en
1646 por orden de Juan de Palafox y Mendoza
LOS RACIONALES
El Racionalismo es una corriente de pensamiento que se desarrolla en Europa a
partir del siglo XVII con las ideas de René Descartes y se consuma con el
criticismo de Immanuel Kant.
Resalta el papel de la razón en la adquisición del conocimiento, oponiéndose al
Empirismo que defendía la experiencia como protagonista principal de la
percepción humana.
En el S XIV Se produjo un corrimiento hacia el estudio de las matemáticas.
La importancia enorme de Galileo Galilei consiste en haber instaurado el método
matemático como clave definitiva para interpretar y dominar a la naturaleza. A
partir de él, la Matemática es la ciencia reina y todas las demás se postrarán ante
ella para pedir su consejo.
RENE DESCARTES.
•Pretendió hacer del método matemático el método filosófico.
•Creyó poder explicar al hombre por las ideas claras y distintas que él tenía en su
mentem, porque, según su método, había que pasar del pensamiento a la
realidad, no de la realidad al pensamiento.
•En adelante será el pensamiento lógico el punto de partida de toda explicación de
la realidad. El ser queda subordinado al pensar.
•Vale más el pensamiento lógico, racional, matemático, que el ser.
•En adelante importará más lo subjetivo que lo objetivo, la representación que la
realidad, el fenómeno que el ser, lo psicológico que lo ontológico, las ciencias de
lo mensurable o cuantificable que las ciencias humanas, que la Filosofía o la
Teología.
•El hombre queda definido como “una máquina que piensa”.
Retrato de Descartes por Moncornet
LOS EMPIRISTAS.
•El hombre es un ser de sensaciones que asocia de diversas maneras, y debe
renunciar a la pretensión de cualquier otro conocimiento racional trascendente.
•Sólo son ciencias válidas las ciencias de lo experimental. Las ciencias humanas
son ciencias nominales, formadas convencionalmente por los hombres sin valor
objetivo, universal y necesario.
•El instinto de la naturaleza es el mejor guía del hombre que no necesita saber lo
que es verdadero sino lo que es útil y agradable.
•Con el empirismo el hombre quedaba enclaustrado en la subjetividad de sus
sensaciones, a las que llamaba “ideas”, sumido en la ignorancia de toda la verdad
trascendente, sin explicación posible del sentido de su vida, vacío como persona
convertido en un muñeco de impresiones agradables
EL SIGLO XVIII. LA ILUSTRACIÒN.
Fue un movimiento intelectual europeo que se desarrolló principalmente durante el
siglo XVIII y declina con la Revolución Francesa (1789).
Su nombre proviene de la pretensión de disipar la oscuridad mediante las luces de
la razón, debido a ello, al XVIII se le llamó el Siglo de las Luces.
•El hombre es un ser racional. Si se guía por su razón no necesita para nada otra
instancia, ni siquiera la revelación divina que no se ha dado. La razón ni nos
engaña ni se engaña nunca.
•A la crítica racional debe someterse todo, incluso la religión y la moral para no
admitir más que lo que sea racional.
•La naturaleza del hombre es por sí misma buena y, si no se la deforma con
prejuicios sociales y religiosos, le dice al hombre mediante los instintos cómo debe
proceder.
•Razón y naturaleza llevarán al hombre a la felicidad para la que está hecho y a la
que tiene derecho.
•La felicidad es por supuesto en este mundo no en otro hipotético.
•El hombre ilustrado no es ateo sino deísta. Esto dignifica que admite la existencia
de Dios. Nos lo dice la razón estamos ante esta grande y admirable máquina que
es el cosmos, luego hay un Gran Arquitecto constructor, pero de ese Dios no
sabemos nada. Una vez que puso al cosmos en marcha se retiró al Olimpo y no
ha intervenido para nada en la sociedad de los hombres.
•Las religiones son supersticiones y mitos.
•De ahí, la tenaz persecución al cristianismo.
•El hombre posee un instinto certero que nos indica qué es lo honesto y qué no lo
es y nos impulsa con suavidad a hacer lo uno y a evitar lo otro.
•Las ideas de la ilustración se extendieron por toda Europa sobre todo a través de
la Enciclopedia y por influencia de la Revolución Francesa.
LOS IDEALISTAS.
A) Emmanuel Kant
•Las realidades en sí (noumenon) pueden ser pensadas pero no pueden ser
conocidas. Conocer sólo conocemos el (fenómeno) o sea los datos de la
sensibilidad externa o interna, informados primero por las formas sensibles de
espacio y tiempo y después por las categorías que pone el entendimiento
trascendental y que confieren inteligibilidad al “objeto” así constituido
•Lo mismo sucede con el conocimiento que el hombre posee de sí mismo.
Tenemos conocimientos experimentales de nosotros mismos, pero cuanto
queramos decir de nuestra realidad última no serán sino paralogismos.
•En La crítica de la razón pura el hombre es visto en tres dimensiones distintas:
“yo empírico”, “yo trascendental”, “yo metafísico”
•En La crítica de la razón práctica aparecen los postulados metafísicos del
hombre: la libertad, la inmortalidad del alma, y la existencia de Dios. Los tres
exigidos por la conciencia moral del imperativo categórico.
•Pero no son sino postulados, es decir, exigencias o condiciones de posibilidad
que necesariamente tenemos que pensar pero que no podemos conocer.
•La moral kantiana es personalista. Se exalta la dignidad de la persona humana y
su libertad sobre todo mecanicismo de la Naturaleza. El hombre es fin en sí mismo
y con él, toda la humanidad.
•Aunque la realidad última del hombre pertenece al mundo noumenal postula para
él todo respeto y excluye toda manipulación
La balsa de Medusa de Gericault
B) FEDERICO HEGEL
•Supera a sus predecesores en sistematización, amplitud y coherencia de
pensamiento.
•El Absoluto es la Idea ya que “todo lo racional” es una Idea que se piensa a sí
misma en todo lo real, también en la Naturaleza pero que se revela a sí misma
sólo en el hombre que por eso queda definido como autoconciencia, el ser donde
la Idea o Absoluto se hace consciente de sí misma.
•De ahí, la suprema importancia del hombre, por una parte, aunque por la otra, lo
contempla como un momento del desarrollo dialéctico de la Idea-Todo.
•Ve también en la manifestación de la Idea en sus tres fases: espíritu subjetivo; el
Espíritu en cuanto cognoscente por tres grados: alma, conciencia, razón, en busca
de la libertad; el espíritu objetivo que se hace presente primero en la familia, luego
en la sociedad, por fin en el Estado, grado último al que quedan subordinados los
otros dos, ya que es la suprema manifestación de la racionalidad.
•Da una peligrosa prevalecía al estado sobre la sociedad, la familia y el individuo
que ha inspirado muchas dictaduras.
•El espíritu Absoluto se manifiesta en el Arte, la religión y la Filosofía.
•El hombre perfecto no es el religioso sino el filósofo que profesa el Idealismo
absoluto.
C) FEUERBACH Y MARX
•Fueron seguidores de Hegel y, al mismo tiempo, críticos y adversarios suyos.
Ludwig Feuerbach
El objeto central de sus reflexiones fue la filosofía de la religión.
•Su intención es hacer ver que lo que nosotros llamamos teología, en realidad, es
antropología. Es decir; que atribuimos a un ser superior imaginado y ficticio, al que
llamamos Dios, las cualidades y los atributos que son sólo del hombre.
•El hombre no tiene otro Dios que el hombre.
•Por el hombre-Dios entiende no el hombre singular sino el género humano (la
Humanidad)
Carlos Marx
Para Marx el hombre es un ser material de naturaleza material, de ella nace, en
relación laboral con ella vive, en esa relación mediante el trabajo se humaniza y se
naturaliza, a ella vuelve después de la muerte.
La naturaleza material es el cuerpo inorgánico del hombre. De ahí la importancia
de la Industria como ciencia de la Naturaleza y de la Economía que decide las
relaciones hombre-Naturaleza y hombre-hombre. Porque el hombre, según Marx,
es también un ser social, o mejor, una esencia genérica. Es el conjunto de
relaciones sociales, pero las relaciones sociales, en su perspectiva, son en primer
lugar, relaciones económicas de producción e intercambio.
El hombre es visto en función de la Economía y determinado por ella. La
Economía es la infraestructura social que determina la superestructura, es decir,
aquel conjunto de realidades políticas, jurídicas, artísticas, filosóficas, religiosas o
morales que necesariamente configuran la esencia del hombre y sus
comportamientos.
El hombre es visto por Marx no como un individuo personal sino como miembro de
la especia, como ser social y comunitario. Sólo en el ser genérico puede realizarse
y el género humano universal como tal tiene más valor que la persona singular.
EL VITALISMO.
Sostiene que los organismos vivos, no la materia simple, se distinguen de las
entidades inertes porque poseen fuerza vital que no es ni física, ni química. Este
impulso vital es reconocido frecuentemente como el alma o el espíritu del que
hablan las religiones. La muerte es la pérdida del impulso vital o su separación del
cuerpo material.
A) Soren Kierkegaard
Pensaba que el hombre existente es algo tan único e irrepetible que resiste a toda
clasificación. Incluso el pensamiento es absolutamente subjetivo, e invalida el
pensamiento puro, objetivo, abstracto e idealista. El pensamiento subjetivo es
apasionado no desinteresado, porque el verdadero pensamiento humano es el
pensamiento ético-religioso. La verdadera subjetividad consiste en ponerse
personalmente en relación sólo con Dios y referirlo todo a Él.
El hombre se encuentra solo en la existencia y tiene que elegir voluntarísticamente
su modo de vida. Hay tres modos en el camino de la vida: estético, ético, religioso.
El primero es del hedonismo pero termina en el tedio y la desesperación. En el
segundo el hombre vive de normas y deberes pero no puede vivir plenamente su
subjetividad. En el tercero es el más perfecto.
9ª sinfonía de Beethoven, compositor que va del período Clásico al Romaticismo en la música
La fe subjetiva es el martirio de la razón y produce también la incomprensión de
los demás. Por eso cree que la vida del “caballero de la fe” es una vida de
sufrimiento. Así fue la de Abraham.
Influido por la teología protestante, reduce al hombre a su vivencia religiosa en
soledad y en dolor, aunque tiene el indiscutible mérito de haber defendido el valor
del hombre singular y los componentes emocionales y volitivos de la persona
frente al abstraccionismo hegeliano.
B) FRIEDERICH NIETZSCHE
Exalta la vida como valor supremo del hombre, y que por vida entiende instinto y
voluntad de poder como dominio de los demás, desprecio de la verdad y, sobre
todo, la exaltación de la moral de los señores sobre la moral del Cristianismo que
es una moral de los esclavos. Se considera llamado a destruir las tablas de la
moral cristiana: la piedad, la compasión, el amor, la austeridad, la castidad, la
humildad, y a sustituirlas por el orgullo, la violencia, la guerra, el dominio, los
instintos.
Influido por el darwinismo exige que así como los monos fueron capaces de
engendrar el hombre, así los hombres deben llegar a producir el superhombre.
El superhombre del futuro será libre, es decir, liberado de los valores de la turba,
creador en cuanto que él se dará a sí mismo todos los valores, legislador del
rebaño de los hombres, su dueño y su tirano, orgulloso, bélico necesita la guerra
para obtener la victoria, duro e inflexible, solitario ya que se mantiene por encima
de la turba, resistente a todos los sufrimientos, en suma, creador del bien y del
mal. Ni siquiera la muerte lo vencerá porque Nietzche resucita el mito griego del
eterno retorno.
La influencia de Nietzche a través de filósofos y literatos ha sido enorme, sobre
todo en la exaltación de lo instintual y dionisíaco frente a lo equilibrado, lo apolíneo
y lo cristiano.
.
A) JEAN PAUL SARTRE
Considera que la vida humana es un sufrimiento inútil, carece de sentido. No hay
proyecto ni esencia del hombre porque “la existencia precede a la esencia”. Esto
significa que nos encontramos arrojados en este mundo sin que nadie haya
proyectado nuestra vida y cada uno tiene que darse a sí mismo sus valores y sus
verdades, cada uno, después de que existe, elige su esencia.
Ser libre significa para él una total autonomía y auto posición.
Dios no puede existir porque si existiese, el hombre no sería libre. La experiencia
filosófica fundamental del hombre es la náusea, que significa la experiencia del
absurdo de todo. El hombre es una cosa entre las cosas.
Ni siquiera puede consolarnos la convivencia con los demás porque los demás
son “el infierno”, en cuanto a que son límites a mi libertad y no me permiten
realizar mi esencia. Así, la angustia es una estructura permanente del ser humano.
La gente huye de ella construyendo mitos tranquilizadores como son los derechos
humanos, las pautas de conducta, las normas morales. Con ello huyen de su
propia libertad y de la radical soledad que el hombre debe aceptar.
El existencialismo de Sartre no es un humanismo, es más bien la negación de
todo humanismo. Un nihilismo más radical, si cabe, que el de Nietzche porque
para él hay al menos unos valores y la vida puede tener un sentido aunque sea
tan desaforado como el del superhombre.
2.5 ÉPOCA CONTEMPORÁNEA
ANTROPOLOGÍAS DEL SIGLO XX
Palacio de Bellas artes
A) SIGMUND FREUD
Su aportación más valiosa ha sido el descubrimiento de esas zonas profundas y
oscuras del psiquismo que llamó inconsciente y subconsciente. En ellas quedan
registrados y en desorden los ecos emocionales y afectivos de innumerables
vivencias psicológicas, que hemos experimentado desde nuestra primera infancia
y que hemos olvidado; “el ello” lo llama Freud en las que subyacen muchas
impresiones o conflictos no resueltos. El método psicoanalítico que Freud utilizó,
consiste en un intento de penetrar, en cuanto se pueda, hasta esas zonas
profundas, sacar de ellas, al nivel de la conciencia psicológica, lo que allí está
soterrado y racionalizarlo para que donde estuvo el ello, esté el yo, que lo
irracional quede clarificado y dominado por lo racional y el hombre quede liberado.
Su teoría del super-yo que es el conjunto de modelos ante la vida y pautas de
comportamiento que asimilamos de nuestros padres, permanecerán ya para
siempre, de manera inconsciente, como los paradigmas a los cuales debemos
conformar nuestra conducta. El super-yo tiene también la función de censor. Nos
aprobará o nos censurará según conformemos o no nuestras actuaciones al
modelo asimilado.
Otras de sus teorías son la del complejo de Edipo, la represión del instinto sexual
o sus explicaciones sobre la prohibición del incesto, o los orígenes de la religión
en la sublimación de la imagen del padre. Con ella, no están de acuerdo hoy ni
psiquiatras ni filósofos, excepto algunos dogmáticos freudianos, pero, cada vez
son menos.
B) MARTÍN HEIDEGGER.
Su mérito consiste en haber remitido el problema antropológico al problema
ontológico fundamental, la pregunta por el ser. Su filosofía se interesa
directamente por el ser. Pero como sólo el hombre posee la inteligencia y la
comprensión del ser, el sentido de ese ser sólo se puede exponer a través de un
análisis de la existencia humana
El hombre está arrojado en el mundo e inmerso en las cosas todas que forman el
mundo y actúa sobre ellas, no solo las piensa. Esta inmersión puede llevarle a una
vida inauténtica, absorbida por la cotidianidad, sin hacer referencia al ser,
arrastrada por la masa y por el “se” impersonal (se piensa, se dice, se hace, se
disfruta) vive sólo el presente. Pero experimenta la nada del tiempo que huye y la
nada de la existencia. De ahí la angustia y la concepción del hombre como “ser
para la muerte” ya que la muerte es el final inevitable el no ser más ya.
El hombre auténtico es el que hace referencia al ser no vive sólo ónticamente sino
ontológicamente. Es consciente de la angustia, no huye de ella, no se deja
absorber por el presente, ni se sumerge en las cosas, vive personalmente y
acepta la muerte como la más cierta posibilidad y como la suprema experiencia de
la nada. En esa actitud encuentra la libertad.
C) ESTRUCTURALISMO.
Al disolverse el Existencialismo, en la década de los años setenta, apareció este
movimiento que empezó siendo un método específico de investigación científica y
después derivó hacia un cierto programa filosófico y antropológico.
Se presentó como un método de la investigación psicológica con la teoría de la
Gestalt, y sobre todo, tuvo aplicación y éxito en la lingüística.
Tiene la convicción de que el hombre no puede actuar libremente, sino que está
determinado por fuerzas y estructuras de su mismo ser de las que, sin embargo,
no es consciente. Las estructuras de la Naturaleza hacen al hombre no un sujeto
sino un objeto, un elemento del sistema que no tiene sentido ni valor más que en
él.
El hombre es un animal simbólico, pero, los símbolos en que vive, lingüísticos,
familiares, culturales, artísticos, religiosos, morales, etcétera, ocultan la verdadera
realidad de la naturaleza humana que es un conjunto, un sistema, un código
secreto de relaciones, siempre las mismas, en último término biológico-
neurológicas, que determinan la conducta del hombre, aunque éste tiene la
convicción engañosa de ser libre. La libertad es una ilusión.
La historia humana no tiene un sujeto humano, es un conjunto de movimientos
psíquicos que, a su vez, provienen de fenómenos cerebrales físico-químicos.
Es un profundo pesimismo antropológico.
2.6 ÉPOCA POSMODERNA.
El Quijote de Pablo Picasso
Es un exponente de la situación actual de las sociedades occidentales.
El término Posmodernidad está indicando por sí mismo, como algo que viene
detrás de la Modernidad. Lo que entendemos por Modernidad es, hablando en
términos generales, el intento de una explicación racional, coherente y sistemática
de toda la realidad: el mundo, el hombre y Dios, y de su historia. A esta
racionalidad moderna y optimista se la han hecho críticas incisivas que han
acusado a la Modernidad, con fundamento, de haber hecho de la razón un
instrumento de la subjetividad con olvido de la realidad, y de haber identificado la
razón verdadera con la racionalidad científico-técnica para el dominio o voluntad
de poder. Tal racionalidad ha fracasado estrepitosamente ya que ha desembocado
en las grandes dictaduras y las grandes guerras. Nadie espera ya que la ciencia
resuelva los problemas humanos. El marxismo que un tiempo fue la esperanza de
la Humanidad, ha muerto. La multiplicación de teorías ha generado la
desconfianza con respecto a las grandes palabras: Dios, persona, ley natural,
valores, verdades, compromisos, fidelidad, sentido de la vida, sentido de la
Historia, etcétera.
Los posmodernos niegan la posibilidad de legitimar o fundar racionalmente una
interpretación y un sentido de la vida, una sociedad humana, una moral.
No quedan sino fragmentos, diferencias, palabras y la melancolía de un fracaso.
Vivir el presente sin preocuparse del pasado ni del futuro. Y vivirlo sin un
sentimiento trágico, como hacían los existencialistas.
Se pretende salvar esta situación apelando a la convivencia, a consensos locales,
al bienestar para todos, sin pretender alcanzar normas objetivas universales o
verdades definitivas.
La persistencia de la memoria o relojes blandos,de Salvador Dalí
La Posmodernidad intenta hacer viable el vivir una situación continuamente
cambiante, con una tolerancia fruto del relativismo que acepta las diferencias y las
múltiples perspectivas, y con moderadas y pragmáticas ambiciones.
Como dice Victoria Camps, sólo resulta posible hoy una “microética”, pensada
desde el escepticismo y la desorientación, o según Miguel Ángel Quintanilla, por
propuestas concretas, formuladas tentativamente y para las que no hay que
reivindicar ninguna garantía definitiva de acierto o de bondad.
Este desierto nevado en el que ha terminado la ilusión racionalista y secularizante
que se inició en el siglo XIV, constituye una situación particularmente favorable
para una oportuna reconstrucción de una Antropología que devuelva a los
hombres la seguridad, el sentido de la vida y el gusto por ella.
Entre otras características, en la posmodernidad, el modelo capitalista cambia de
una economía de producción a una de consumo. Por otra parte, se da una
excesiva emisión de información a través de todos los medios de comunicación.
Existe una crisis de la verdad y esta es generada y transmitida por los medios de
comunicación. En cuanto a la vida personal, ésta es expuesta a los demás
mediante las redes sociales. En ellas, también, se opina, trabaja, conspira en
relación a los problemas sociales, económicos, psicológicos, medioambientales,
religiosos, etcétera. En la posmodernidad, sólo existe el presente, el pasado y el
futuro carecen de importancia.
A) PERSONALISMO
Surge como una alternativa a los colectivismos y a los individualismos, buscando
recoger los aspectos positivos de las otras dos posturas. Su característica
principal es la primacía de la persona. La sociedad y el Estado están al servicio de
la persona y no al revés. El Estado no puede traspasar los derechos de la
persona.
La persona es un ser digno en sí mismo. Además, es un ser espiritual y corporal.
En todo proyecto, la persona es central. La persona es dinámica y activa, capaz
de transformar al mundo. Esta corriente de pensamiento sostiene que es
imprescindible darse a los demás, para lograr la plenitud. El hombre está obligado
moralmente a ser solidario y a esforzarse por el bien común.
Propone que el ser humano siempre debe actuar con ética y con nobleza.
Asimismo, expresa que la lucha diaria tiene un valor extraordinario.
Estatua de Juan Pablo II por Arcienza
Los filósofos más representativos de éste movimiento aunque con diversas
variantes son: Max Séller, Martín Buber, Gabriel Marcel, Pierre Teilhard de
Chardin, Karol Wojtyla y otros.
El Personalismo es una filosofía que tiene más posibilidades de éxito en el futuro
en orden a crear una sociedad más humana, por su comprensión de la persona,
por la importancia que da a la dignidad de la persona y a la comunicación
interpersonal.
Pero la comunicación interpersonal no se agota en el diálogo verbal. Se inicia allí
pero se completa en el amor. Esta palabra, sin embargo, es tan densa tan
compleja y tan manipulada que necesita, antes de nada, una clarificación.
Parece que hay tres clases principales de amor entre las personas, que los
griegos expresaban con tres vocablos distintos: en primer lugar (eros) que es el
atractivo instintual que un hombre siente por una mujer o una mujer por un
hombre. Este amor es posesivo y excluyente, el eros es ansioso turbador y al
mismo tiempo placentero. Hay otro modo de amor que los griegos llaman (filia)
que viene a identificarse con lo que nosotros llamamos amistad. La amistad es
una intercomunicación cordial y gratuita, abierta y sin ánimo de posesión,
semejanza de puntos de vista, interés del amigo por el amigo, descanso
psicológico. Existe un tercer modo de amor que en griego se expresaba como
(ágape) y consiste en una actitud oblativa, desinteresada y gratuita para el servicio
y ayuda a los demás. Es la expresión más alta del amor humano Puede incluir a
los anteriores pero no necesariamente. Es el amor más constructivo de la persona
porque, misteriosamente, cuanto más da la persona más es ella misma.
Es misteriosa porque no cabe duda que esa actitud humana que hace que cuanto
más nos olvidamos de nosotros mismos para ayudar a los demás, nos
encontremos que somos más verdad nosotros mismos. Esto no es una
consideración piadosa o moralizante sino una realidad óntica, una propiedad del
ser humano, verificable por la experiencia.
Martín Buber dedica una parte de su obra al “Tú eterno” porque piensa
acertadamente que la relación yo-tú, no se cierra en sí misma, más aún es el
camino hacia un Tú absoluto y eterno. Un Tú que sea fundamento y término y que
por eso dé un sentido y un valor absolutos a la relación humana yo-tú. Cada tú
individual abre una perspectiva sobre el Tú eterno. En cada tú individual la palabra
fundamental invoca al Tú eterno. Sin un Dios creador, personal y comunicativo del
que todos participamos, difícilmente podríamos comprender y vivir el amor, no
existiría la posibilidad de pronunciar de manera estable la palabra-principio yo-tú.
Esa palabra no puede agotarse en ninguna relación humana. Sólo se realiza
perfectamente en su relación con el único Tú absoluto que por esencia nunca
puede convertirse en ello. De esa experiencia nace algo tan humano como la
esperanza de la Plenitud.
Pintura del Mexicano Jorge Estrada