1
A unque os parezca mentira la princesa cagona
existi de verdad. Claro est que no se llamaba
cagona, sino Herminia.
Y puede que no fuese princesa sino baronesa
tan slo y no es que estuviese, de hecho, cagan-
do a todas horas aunque s que poda hacerlo varias veces
en un da, dependiendo de la fruta que comiese, por ejem-
plo: ciruelas, o higos, que son muy fibrosos y adems tienen
mucho calcio.
quedaban abandonadas sobre el plato zanahorias, judas ver-
des, ajos, berros y puerros. Una verdadera pena! Y a media
tarde poda comer todo tipo de golosinas, cualquier cosa
antes que una pieza de fruta. Pero claro, era una princesa, y
cualquiera le deca nada
Como consecuencia, iba poco al retrete y estaba ms gorda y
era menos gil que su hermana.
Yo creo que fue Virginia la que le llam Cagona a Herminia
Porque a Ca perdn, Herminia, le encantaba la fruta, y por primera vez, cuando eran nias para insultarla (Como
adems, las verduras. incluso ms que la carne. Y eso, como si eso fuese un insulto!) Y desde luego, no era la primera a
sabis, ayuda a ir al retrete. quien as llamaban. Pero ese bien pudo ser el principio de
la princesa Cagona. Aunque sucedieron otros hechos que
Herminia tena una hermana, dos aos mayor que ella, lla- la hicieron cargar con ese ttulo. En esto tuvieron mucho que
mada Virginia. Virginia no era tan amiga de comer fruta y decir los pedos.
verduras. En realidad, no le gustaban nada, aunque no haba
ninguna verdadera razn para ello. Cuando terminaba de Y por lo dems, las Princesas jugaban y crecan como los
comer, por ejemplo, un estofado de carne con verduras, dems nios y nias...
2 3
Porque a Ca perdn,
Herminia, le encantaba la
fruta, y adems, las ver-
duras. incluso ms que la
carne. Y eso, como sabis,
ayuda a ir al retrete.
4 5
E n una ocasin Herminia sorprendi a los chicos en pleno
concurso de pedos y sin pensrselo dos veces inscribi el
suyo en la competicin.
Como sabis, un pedo es una mezcla de gases lanzado a la at-
msfera con un repiqueteo que sirve como aviso. Si no avisas es
-Os ordeno que salgis!, pedo
Y increblemente, el pedo obedeci. Esta vez el culo hizo de
trompeta y son como la ms chirriante de las trompetas.
Un repiqueteo seguido de un estruendoso y glorioso sonido
interminable y ruidoso que desat las risas de los nios.
peor: despus se percibe el olor. Pero el culo no siempre est
dispuesto a hacer de trompeta. La divertida hazaa pas a las madres de los nios y lleg a odos
de la reina quien algo avergonzada la anim a seguir la dieta de
El pedo de Herminia result ms bien fofo aunque maloliente. La su hermana, una chica realmente discreta y refinada (y bastante
causa fue el abundante metano que contenan las alubias que ha- estirada). Una dieta prdiga en perdices, pasteles y patatas fritas.
ba ingerido en la comida, resultado de una activa digestin. Pero
de ah a decir como luego se dijo que ola ms que una legin de Pero no hace falta decir que Ca.. quiero decir, Herminia, no
pedos, ms que todas las cloacas juntas y ms que un camin de abandon sus hbitos alimenticios, ya que verduras y legumbres y
cerdos y de vacas tirndose pedos a la vez hay mucha diferencia. fruta fresca era lo que ms le gustaba.
(Ya sabis como exageran los nios tratndose de pedos).
Aprendi eso s a combinar las legumbres para favorecer su
El caso es que Herminia, no contenta con su pedo intent expe- digestin. Y a medida que creca fue dejando de tirarse
ler otro de efecto ms sonoro y para lograr que saliera apret y pedos con los chicos.
apret y al no conseguirlo, exclam: Pero la fama, me temo, ya estaba echada...
6 7
Y increblemente, el
pedo obedeci. Esta
vez el culo hizo de
trompeta y son como
la ms chirriante de las
trompetas.
8 9
U n cierto ao cuando Virginia y Herminia eran ya bellas
mozas, todas las cosechas del campo se vieron afectadas
por una climatologa realmente adversa.
Hizo fro en verano y calor en invierno. Heladas a destiempo, o
granizadas repentinas, todo se combin en un ao fatdico.
Ya que su cuerpo retena lquidos: engord.
Durante un tiempo no visitaba el retrete ms que su hermana.
Tambin eructaba a menudo para su disgusto y sus digestiones
eran pesadas. Hasta su carcter se haba agriado. Y no se puede
decir que no echara pedos. Aunque eran mucho menos contun-
No hubo fruta en los rboles y la que hubo fue raqutica. dentes y ahora Herminia, adems, haca lo posible por ocultarlos
No aparecieron las invernales coles ni nabos ni espinacas, ni las Las duras condiciones climticas se prolongaron otro ao ms.
deliciosas acelgas o lechugas tiernas del esto, ni tomates, claro. Llevaban ya un par de largos, disppticos y estreidos aos, en lo
Y hubo por fuerza que cambiar la dieta a medida que fueron es- que pareca una maldicin cuando la climatologa cambi por fin y
caseando garbanzos, habas, frutos secos. las reservas de legum- los frutos volvieron a aparecer en campos y ramas. Y la tierra pro-
bres y frutos secos se agotaron pronto. Y la poca cosecha verde dujo en mucha ms cantidad y abundancia que antes.
hubo que compartirla con el abundante y hambriento ganado
Los puestos de pizza, cadenas de hamburgueseras, pasteleras, Fue entonces cuando sucedieron los hechos que fueron el co-
trabajaron ms que nunca... lofn de su fama. lo que termin por definir a Herminia como la
Princesa Cagona.
A Herminia estos nuevos hbitos alimenticios le sentaron fatal.
Su rostro perdi mucho del brillo que da el consumo frecuente Todo comenz con aquel banquete en honor de alguien o para
de frutas y verduras. celebrar algo, ya no recuerda uno...
10 11
Hizo fro en verano y
calor en invierno.
Heladas a destiempo, o
granizadas repentinas,
todo se combin en un
ao fatdico...
12 13
13
L o cierto es que ah estaba Herminia rodeada de sus pa-
dres hermana y amigas de dentro y fuera del reino.
Fue justo al principio de las nuevas buenas cosechas.
Las viandas llegaban a la mesa guarnecidas de todo tipo de
garse de un penetrante olor de pedo.
Ya sabis cmo huele el pedo de carnero asado...
E iba en aumento... silenciosamente.
Muchos, tan pronto como perciban el olor, alzaban la ca-
frutas y verduras frescas. beza y dirigan su mirada hacia Herminia que enrojeci de
El cordero estaba estupendo. Pero antes que eso, Herminia vergenza.
se lanz a las coles de bruselas.
De hecho acab ella sola con toda una racin. Alarmado, el sumiller orden agitar ms aprisa las palmas que
Despus comi ciruelas, y manzanas, ocultas a montones en impulsaban aire a los comensales. Se abrieron las ventanas.
el relleno de los pavos, zanahorias provenientes de la ensala- Pero era intil: el olor se extenda como una nube txica.
da junto con pasas, y tambin un poco de cordero. Se opt por desalojar la mesa y pasar el siguiente evento:
el concierto.
Tena sentado en frente a un joven amigo suyo llamado Ed-
mundo o Ed como familiarmente se le llamaba y que fcilmen- Los camareros que venan con los postres se cruzaron con la
te podra ser un prncipe, el cual no poda dejar de observar- gente que se diriga en solemne cortejo al saln del concier-
la comer con admiracin... to. Algunos tomaron al vuelo directamente de las bandejas
flanes, galletas y otras delicias pstricas que engullan antes de
Y fue hacia el final del banquete, la atmsfera comenz a car- llegar a la sala de msica.
14 15
Se abrieron las
ventanas. Pero era intil:
el olor se extenda como
una nube txica.
16
16 17
R esult muy injusta la silenciosa acusacin con que se
carg a Herminia y que estrope los postres pero lo
cierto es que ahora su estmago haba entrado en reac-
cin... (Durante el concierto su estmago ruga y.. en fin! era
como un volcn a punto de entrar en erupcin).
la torre haba una antigua letrina que desaguaba en el foso del
castillo merced a una pequea corriente de agua.
Un fabuloso invento.
Pens que podra librarse de l y de paso librarse de aquel
Y aprovechando una interrupcin entre pieza y pieza, Hermi- peso que la agobiaba...
nia se desliz entre las filas sosteniendo su largo vestido y cru- Herminia subi corriendo por la escalera en crculos de la to-
z a toda prisa la sala capitular... rre agitando su gran carga intestinal lo cual aumentaba su ur-
gencia por librarse de ella.
Herminia gir a la izquierda y se abalanz al W.C. de la sala
capitular: ocupado! igual que el otro w.c.. dos salas ms Cuando lleg a la portezuela que ocultaba el retrete lo hall,
all...y el otro!... de nuevo... ocupado!...y ya oa las pisadas del prncipe su-
Entonces vio que Ed quien haba abandonado tambin la sala biendo las escaleras ms abajo
del concierto vena hacia ella con una expresin de alegre
complicidad. -Salid!, os lo ordeno- grit a quien fuera que estuviese dentro
Ms nadie sali de all. Ni dijo nada. Por el hueco de la torre
Desesperada, corri en direccin a la Torre y comenz a subir vio al Prncipe a punto de alcanzarla...
por sus escaleras con un objetivo. Vindose as atrapada y con aquel lastre en el vientre, Hermi-
Recordaba que a media ascensin y sobre el mismo muro de nia subi a toda prisa hasta lo alto de la torre...
18 19
Recordaba que a media
ascensin y sobre el mismo
muro de la torre haba una
antigua letrina que desagua-
ba en el foso del castillo
merced a una pequea co-
rriente de agua.
20 21
P ara cuando el Prncipe subi ella haba recuperado no slo
su compostura sino toda su belleza y lozana de golpe junto
con su magnfica sonrisa...
Por supuesto no hace falta que os diga lo que hizo all arriba en lo
ms alto de la torre...
No
olvidis
tirar de la
En aquel tiempo todo el mundo lo haca.
Aunque no desde lo alto de la torre, eso es cierto.
cadena!
No falta quien asegura haber visto el culo de la Princesa emerger
entre la almenas y soltar su carga aunque eso slo lo comentan en
privado...
Y puede ser que sea verdad, pero fue por causa mayor:
Una dieta excesivamente calrica que obr en su cuerpo un tapn
tan grande que le impidi visitar el retrete con la asiduidad acos-
tumbrada.
Pero de ah a decir, como se dijo que haba llenado ella sola el
foso del castillo hay mucha diferencia, aunque ya sabis cmo
exagera la gente.
Todo esto, por cierto, acab de asentar su, a mi juicio inmerecida
fama. Y ya est. De momento..
22 23