0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos) 407 vistas188 páginasHidrodinamica Ambiental PDF
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HIDRODINAMICA |
aN t5 Io VaUe
Marcelo H. Garcia }Mareclo H, Garefa. Naci6 en la
ciudad de Cordoba, Argentina,
12 de abril de 1959. Es
Ingeniero en Recursos Hidicos
sduado en la Universidad
‘acional det Litoral, donde
complet sus estudios de grado
fen marzo de 1982. Traaj6 en la
Empresa Agua y Energia
Electrica, entre 1979 y 1983,
realizando varios de 10s modeos
hdeduticns para a obra Parant
Moti, Rela sus esis de
post-grado en ls Universidad de
Minnesota, USA, obteniendo los
gralos de Master y de Doctor
(Ph.D,) en Ingenieria Civil
(Hictéulica), en 1985 y 1989,
respectivamente
“Trabajé como Research Fellow
gael Antony Fal
Iydeaulic Laboratory de la
‘Universidad de Minnesota,
‘bteniendo el premio Alvin G.
‘Anderson en 1989 por méxto
fcadémico, Ha sido Profesor
Tnvitado en la Universidad de
Génova, Italia; en la
Universidad de Essen,
Alemania y en la Universidad
ide Holckaido,Japsa, Se
ddosempefia alemds como
Profesor Vistante en la
Facultad de Tageniera-y
Ciencias Hidricas, de
Universidad Nacional det
Titoral Argentin, desde 1993,
Cuenta can més de
[Asociation for Hydraulic
esearch (AHR), la American
‘Geophysical Uniéa (AGU), y la
International Water Resources
‘Association TWRA), Desde
1990, es Profesor en el
Departamento de Resources
‘Association (IWRA). Desde
1990, es Profesor en el
Departamento de Ingenieria
(Civil de a Universidad de
Ilinois en Urbana-Champaign,
USA,A Estela y BlasAgradecimientos
La preparacién de este libro no hubiese sido posible sin la ayuda del grupo de
estudiantes de post-grado que ha venido a perfeccionarse bajo mi direccién a la
Universidad de llinois. Yarko Nilo de la Universidad de Chile y Fabian Lopez
del Instituto Nacional de Ciencias y Técnicas Hidricas (INCyTH) trabajaron sin
descanso para poder completar el primer borrador de esie libro, el cual fue
Presentado en un curso de post-grado durante el XVI Congreso Latinoamericano
de Hidréulica celebrado en Santiago, Chile, en Noviembre de 1994. Mas
tecientemente, José Rodriguez de la Universidad Nacional de Rosario realiz6 un
exhaustiva revision del material presentado, y Juan José Fedele de la Universidad
Nacional del Litoral colaboré con la edicién del mismo. A todos ellos les estoy
muy agradecido.
Quisiera agradecer también el apoyo brindado por el Departamento de
Ingenieria Civil de la Universidad de Illinois durante la preparacién de este
manuscrito, y el esfuerzo realizado por la Secretaria de Extensién de la
Universidad Nacional del Litoral para la publicacién del mismo.
El material presentado en este libro refleja en gran medida el esfuerzo y
dedicacién de varias personas a lo largo de mi carrera profesional. Es por ello
que quiero agradecer explicitamente al ya fallecido Profesor Juan Carlos Alarcon
de la Universidad Nacional del Litoral, por haberme ensefiado a respetar el
analisis matematico, al Dr. Gertrud Onipchenko de Hidroproyecto (Mosca), por
haberme iniciado en la investigacion hidréulica, y al Profesor Gary Parker de la
Universidad de Minnesota, por haberme brindado total apoyo y libertad
académica durante mis estudios de post-grado.
Finalmente, quiero reconocer el apoyo que siempre me han brindado mis padres,
Betty y Juan Carlos Garcia, dos santafecinos de veras1 INTRODUCCION1. INTRODUCCION
Durante la tiltima década el interés por la proteccién del medio ambiente se ha
incrementado en forma notable. Esto ha traido aparejado una mayor necesidad por
comprender la dinémica del agua en la naturaleza, facilitando asi el manejo y
aprovechamiento de los recursos hidricos en armonia con el medio ambiente. La
idea de aplicar los conocimientos de la hidréulica y la mecénica de los fluidos para
analizar distintos ecosistemas no es nueva. En los afios '70, el Profesor Japonés
Mikio Hino propuso el nombre de ecohidrodinamica para promover el estudio de
temas tales como el flujo de agua en canales con vegetacién, la purificacién del agua
por medio de micro-organismos, el efecto de la turbulencia en la dinamica del
fitoplancton, y la difusién de materiales radiactivos en cuerpos de agua (Hino, 1981).
Al mismo tiempo, los ecdlogos han tratado de utilizar principios basicos de la
hidrodinamica para comprender el metabolismo, alimentacién, y comportamiento
de micro-organismos en ambientes acusticos naturales (Statzner et al., 1988).
La ingenierfa hidréulica y quienes la practican enfrentan hoy un amplio espectro de
problemas.en los cuales la preservacién y mejoramiento del medio ambiente juegan
un rol importante. El grado de desarrollo industrial de una regién o un pais es el
principal determinante del tipo de problemas de hidraulica ambiental que pueden
esperarse. En este sentido, vale la pena considerar el caso de las represas hidrdulicas.
En la mayoria de los paises en los cuales la reduccién del déficit energético tiene
prioridad, la construccién de represas continta avanzando, atin cuando numerosas
organizaciones internacionales para la proteccién del medio ambiente tratan de
argumentar en contra de tales emprendimientos. Por otro lado, en aquellos pafses
donde se ha alcanzado un alto grado de desarrollo y donde existen diversas
alternativas para suplir las necesidades energéticas, y por ende son otras las
ptioridades, se discute la posibilidad de la remocién de represas existentes con miras
a regresar a las condiciones naturales previas a la construccién de las mismas, y de
esta forma, por ejemplo, facilitar la migracién y preservacién de especies tales como
el salm6n. Interesantemente, ambas situaciones presentan preguntas técnicas
dificiles de contestar, ya que una evaluacién seria del impacto ambiental de una
represa por construir es un ejercicio tan dificil como estimar cuantos ahos deben
transcurtir luego de la remocién de una estructura hidréulica para recuperar las
condiciones naturales existentes antes de la construccién de la misma,
tra consecuencia de la revolucién industrial, el crecimiento de la poblacién, y la
explotacién de los recursos naturales, es el estado en el que se encuentran muchos
cuerpos de agua en todo el mundo. Es muy comtin encontrar sitios donde los
sedimentos que conforman el lecho de un rio o de un lago, estan altamente
contaminados. Por ejemplo, en el rfo Amazonas, Brasil, se estima que por cada
Kilogramo de oro que se extrae, dos kilogramos de mercurio terminan formando
parte de los sedimentos que arrastra dicho rfo. En los grandes lagos de América del
Norte (Superior, Michigan, Erie, Huron, y Ontario), también hay numerosos lugares
donde la contaminacién de sedimentos con metales pesados, en especial el plomo,
es un problema bastante comin, particularmente en zonas cercanas a grandes conos
91. INTRODUCCION
Durante la ultima década el interés por la proteccién del medio ambiente se ha
incrementado en forma notable. Esto ha traido aparejado una mayor necesidad por
comprender la dinamica del agua en la naturaleza, facilitando asf el manejo y
aprovechamiento de los recursos hfdricos en armonfa con el medio ambiente. La
idea de aplicar los conocimientos de la hidréulica y la mecdnica de los fluidos para
analizar distintos ecosistemas no es nueva. En los afios '70, el Profesor Japonés
Mikio Hino propuso el nombre de ecohidrodinamica para promover el estudio de
temas tales como el flujo de agua en canales con vegetacién, la purificacién del agua
por medio de micro-organismos, el efecto de la turbulencia en la dindmica del
fitoplancton, y la difusién de materiales radiactivos en cuerpos de agua (Hino, 1981).
Al mismo tiempo, los ecélogos han tratado de utilizar principios basicos de la
hidrodinamica para comprender el metabolismo, alimentacién, y comportamiento
de micro-organismos en ambientes acuaticos naturales (Statzner et al., 1988).
La ingenieria hidréulica y quienes la practican enfrentan hoy un amplio espectro de
problemas.en los cuales la preservacién y mejoramiento del medio ambiente juegan
‘un rol importante. El grado de desarroilo industrial de una regién o un pais es el
principal determinante del tipo de problemas de hidréulica ambiental que pueden
esperarse. En este sentido, vale la pena considerar el caso de las represas hidraulicas.
En la mayorfa de los pafses en los cuales Ia reduccién del déficit energético tiene
prioridad, la construccién de represas contintia avanzando, atin cuando numerosas
organizaciones internacionales para la proteccién del medio ambiente tratan de
argumentar en contra de tales emprendimientos, Por otro lado, en aquellos paises
donde se ha alcanzado un alto grado de desarrollo y donde existen diversas
alternativas para suplir las necesidades energéticas, y por ende son otras las
prioridades, se discute la posibilidad de la remocién de répresas existentes con miras
fa regresar a las condiciones naturales previas a la construccién de las mismas, y de
esta forma, por ejemplo, facilitar la migracién y preservacién de especies tales como
el salmén. Interesantemente, ambas situaciones presentan preguntas técnicas
dificiles de contestar, ya que una evaluacién seria del impacto ambiental de una
represa por construir es un ejercicio tan dificil como estimar cuantos aos deben
transcurrir luego de la remocién de una estructura hidrdulica para recuperar las
condiciones naturales existentes antes de Ia construccién de la misma.
Otra consecuencia de la revolucién itdustrial, el crecimiento de Ia poblacién, y la
explotacién de los recursos naturales, es el estado en el que se encuentran muchos
cuerpos de agua en todo el mundo. Es muy comtin encontrar sitios donde los
sedimentos que conforman el lecho de un rio o de un lago, estan altamente
contaminados. Por ejemplo, en el rfo Amazonas, Brasil, se estima que por cada
kilogramo de oro que se extrae, dos kilogramos de mercurio terminan formando
parte de los sedimentos que arrasira dicho rio. En los grandes lagos de América del
Norte (Superior, Michigan, Erie, Huron, y Ontario), también hay numerosos lugares
donde la contaminacién de sedimentos con metales pesados, en especial el plomo,
es un problema bastante comtin, particularmente en Zonas cercanas a grandes conos
9urbanos. El poder establecer el destino final de particulas contaminadas en un
cuerpo de agua, y en particular las condiciones hidrdulicas bajo las cuales el
sedimento contaminado podria ser erosionado y reincorporado al medio acuatico,
son problemas de ingenieria ambiental donde la turbulencia en la proximidad del
lecho juega un rol preponderante. De aquf la necesidad de entender a fondo la
hidrodinamica en esa zona, con miras a poder estimar el riesgo de que en un
determinado lugar, al ser erosionado el sedimento, este pueda ser facilmente
ingerido por distintas especies acuAticas, las cuales podrian eventualmente ser
consumidas por seres humanos. Dos de los ejemplos mas patéticos de dicha
situacién, son los de la bahfa de Minamata, en Japén y el Iago de Maracaibo, en
Venezuela, donde malformaciones congénitas en nifos han sido atribufdas al
consumo de especies contaminadas por parte de sus progenitores.
El rol de la hidraulica en la gestion ambiental no se limita a los problemas de la
contaminacién. Hoy en dia el diseno y operacién de estructuras hidréulicas también
debe tener en cuenta el impacto de la obra sobre la calidad del agua en el curso donde
la misma se encuentra. Por ejemplo, en un lago o embalse es muy comin observar,
durante los meses de verano, la estratificacién de la columna de agua debido a
diferencias de temperatura, Dicha estratificacién limita la Hegada de oxigeno
disuelto desde la capa superior de agua (epilimnion) a la capa inferior
(hipolimnion). En el lecho, la actividad bioldgica asociada con la descomposicién de
materiales orginicos incrementa la demanda de oxigeno por parte de los
sedimentos. La existencia de condiciones anaerébicas no solo imposibilita la vida de
los peces, siné que ademas induce la descarga de elementos como el fésforo, por
parte de los sedimentos. Dichos elementos constituyen el principal nutriente de
plantas acudticas tales como las algas, y el crecimiento desmedido de las mismas
resulta en la eutroficacién del embalse.. El disefio y aplicacién de aireadores para
mezclar el agua del embalse y promover la oxigenacién, es un problema de
ingenieria hidréulica que no admite soluciones de aplicacién general. La inyeccién
de aire para generar plumas verticales de burbujas cerca del lecho, con las
caracteristicas necesarias para que induzcan el flujo del agua densa y con poco
oxigeno hacia la superficie, es una de las téenicas empleadas comtinmente para
mejorar la calidad del agua en lagos y embalses.
Tradicionalmente, para el disefio de aliviadores se han tenido en cuenta aspectos
hidréulicos tales como la cavitacién y la disipacién de energia, relacionados
exclusivamente con la estabilidad e integridad estructural de la obra. Si bien estos
aspectos siguen teniendo indudable importancia, el impacto de la estructura aguas
abajo de la misma tiene hoy mayor relevancia que nunca. En particular, la cantidad
de aire captado por el flujo de agua al salvar la estructura hidrdulica determina los
niveles de oxigeno disuelto aguas abajo, y por lo tanto tiene un impacto directo en el
grado de desarrollo de la comunidad icticola. La mortandad de miles de peces
causada por la puesta en marcha de algunas turbinas de la recientemente
inaugurada represa de Yacireté sobre el rio Parana, entre Paraguay y Argentina, es
prueba indudable del impacto ambiental que puede tener una obra’ hidrdulica si no
se tienen en cuenta los aspectos biol6gicos relacionados con tal emprendimiento.
10En este libro introductorio de hidrodinémica ambiental se pondré énfasis en el
estudio de problemas que pueden ser analizados con técnicas aplicables a flujos en
capa Ifmite. A los fines didacticos, se considerardn flujos en los cuales las
dimensiones longitudinales son mucho mayores que las dimensiones verticales, y
los gradientes verticales de las propiedades de los mismos son mucho mayores que
los gradientes longitudinales. En particular, en la primera parte del libro se
utilizaran técnicas integrales para reducir ecuaciones en derivadas parciales a
ecuaciones diferenciales ordinarias que pueden ser integradas numéricamente con
facilidad, y por lo tanto pueden ser de gran utilidad en la solucién de problemas de
ingenieria (Capitulos 2, 3, y 4). En la segunda parte del curso se estudiar la
estructura vertical de distintos flujos a través de la resolucién numérica de
ecuaciones en derivadas parciales. Con esos fines se presentarén algunas nociones
sobre la turbulencia, distintos modelos para la prediccién de flujos turbulentos y
aplicaciones a problemas de hidrodinamica ambiental (Capitulos 6, 7, y 8).
Es conveniente mencionar algunos de los problemas tipicos que serdn tratados en
este libro. Un problema que suele ser noticia en repetidas oportunidades esta
relacionado con los accidentes de barcos petroleros y roturas de tuberias que
ocasionan el derrame de grandes cantidades de combustible. Un procedimiento
utilizado frecuentemente para evitar importantes dafos a la vida acuatica consiste
en el uso de barreras flotantes para contener el petrOleo 0 aceite, como se muestra en
la Figura 1.1. Como se vera en el Capitulo 3, la efectividad de dichas barreras puede
estimarse con simples conceptos de hidréulica
Figura 1.1 Contenci6n de derrames mediante una barrera flotante
en ef Boneyard Creek, Universidad de Illinois.
1"Otro problema de interés que también se discutiré en el Capitulo 3, tiene que ver con
la intrusién de agua salada en cursos de agua que desembocan al océano. Cuando el
caudal de dichos rfos disminuye, las bajas pendientes del lecho facilitan la formacién
de una cufta de agua salada que puede desplazarse decenas de kilémetros aguas
arriba y por lo tanto impedir el uso de tomas de agua para consumo ubicadas en las
margenes de los cursos de agua afectados. Aquf la cuestién principal es el tratar de
estimar la longitud de la intrusi6n salina y as{ poder tomar medidas al respecto.
Otro tipo de problema comtin en lagos y reservorios es el relacionado con la
formacién de corrientes de densidad causadas por diferencias de temperatura, o bien
sedimentos en suspensién (Figura 1.2). La dinémica de dichas corrientes tiene un
rol importante en la calidad del agua y la sedimentacién en embalses. La evolucién
de dichas corrientes sera analizada en el Capftulo 4. Dicho andlisis sera acompafiado
por uno similar para el caso de una pluma vertical originada por efectos de flotacion
al descargar agua menos densa en el fondo de un cuerpo de agua. Dicha
configuracién es comtinmente empleada para la descarga de aguas servidas en zonas
costeras y por lo tanto tiene gran importancia practica.
En el Capitulo 5 se presentarén en forma sucinta los elementos necesarios para
obtener soluciones a problemas de ingenierfa que involucren los flujos ya
mencionados. En particular, se analizaran distintos métodos para el control de
intrusiones salinas, curvas de remanso en corrientes de densidad, y el diseno de
difusores para descargas de aguas servidas.
La aplicacién de distintos modelos de turbulencia a problemas en los cuales la
catacterizacién de las propiedades de la turbulencia es de importancia, tendra lugar
en el Capitulo 8. Dichos problemas incluyen: la suspensin de sedimento debido a
Ja turbulencia generada por un chorro de agua confinado; las corrientes generadas
por el viento en lagos, la erosién de un gradiente de densidad en un cuerpo de agua
por medio de la turbulencia; 1a dispersién de particulas en flujo turbulent
mediante una cadena de Markov; y las caracteristicas de la turbulencia en un canal
abierto, sin y con la presencia de vegetacién
En la naturaleza, las condiciones de contorno y las vastas dimensiones de los
dominios de interés presentan verdaderos desafios. Afortunadamente, en muchas
ocasiones es posible simplificar las ecuaciones diferenciales que rigen el
movimiento de los fluidos para un problema especifico, sin perder los elementos
esenciales que permiten la obtencién de soluciones validas. El objetivo de este libro
es el de mostrar algunas de las metodologias que pueden utilizarse para artibar a
dichas soluciones, y de esta forma establecer los elementos necesarios para el estudio
de distintos problemas en la hidrodinémica ambiental, promoviendo el uso de la
mecénica de los fluidos para su solucién.
2“aquatpuad ap orquens jap spndsap oyuaunyoypauiny ‘ousany ovxppspry onppsas un ap viguesaad v] a}:a14po ag “poprsuap ap
‘ajuat4109 Dun json opuave1a ‘Dsuap souau & nanj9 DnBD AD4qUOIUD JP PE19UENS 98 o}MoUNpAS uoD VND ap Ofmyf uA) Z| DANIReferencias
Hino, M. (1981). "Ecohydrodynamics." Advances in Hydroscience, Editor: Ven T.
Chow, Vol. 12, 143-193,
Statzner, B., et al. (1988). "Hydraulic stream ecology: observed patterns and potential
applications." Journal of the North American Benthological Society, Vol. 7, Na, 307-
360.
142. APLICACION DE LA TEORIA DE CAPA LIMITE A FLUJOS EN
CANALES CON VEGETACION: CURVAS DE REMANSO2, APLICACION DE LA TEORIA DELA CAPA LIMITE A FLUJOS EN CANALES,
‘CON VEGETACION: CURVAS DE REMANSO
Dado que la mayoria de los flujos considerados en este curso forman parte de la
familia de flujos en capa limite, es de interés considerar un ejemplo donde la teoria
de la capa limite y las aproximaciones asociadas con la misma son presentadas en el
Ambito de un problema que es bien conocido por los ingenieros hidréulicos.
El caso de un flujo gradualmente variado en un canal con vegetacién emergente
provee una buena oportunidad para entender cémo las ecuaciones diferenciales en
derivadas parciales de movimiento del flujo pueden ser tratadas para finalmente
obtener ecuaciones més simples, que a su vez puedan utilizarse para el célculo de
curvas de remanso en presencia de vegetacién.
Consideremos el flujo en canal abierto con vegetacién emergente, esquematizado en
la siguiente figura, donde las plantas se encuentran representadas por cilindros
verticales de diametro D.
Emplearemos aqui el método tradicional de incorporar el efecto de obstrucciones en
las ecuaciones diferenciales de movimiento a través de un término denominado
fuerza de arrastre. Esta fuerza F se representa usualmente para un cilindro en flujo
uniforme como:
1
FaspCo A
v7donde C’, es el coeficiente de arrastre local, A es el area del cilindro proyectada en la
direccién perpendicular al flujo, y 7 es la velocidad media local del flujo. Como las
ecuaciones de cantidad de movimiento representan un balance de fuerzas por
unidad de volumen, esta fuerza de arrastre por unidad de volumen resulta
lic an
PC ait
Vol
donde a= D/P es una medida de la densidad horizontal de la vegetacién, como se
muestra en la figura siguiente.
Flujo
Flujo D
=> col!
1
Superficie
del Agua dy
Por otra parte el sistema x-y constituye un sistema coordenado de capas limites,
donde, debido a la pendiente longitudinal $0, el vector aceleracién de la gravedad
pose dos componentes:
B= (gsend ; - 3 c0s0)
Usualmente en canales con vegetacién 0 es lo suficientemente pequefio como para
asumir cos® = 1 y sen @= tan 6, de tal manera que:
Por lo tanto, las ecuaciones diferenciales que gobiernan el problema en estudio son:
18Continuidad
+ gSo- a ai
donde @ es la velocidad segiin el eje y,p es la presién y C’, es el coeficiente de
arrastre para flujo turbulento en canales con vegetacion. La tension de corte 7
incluye el esfuerzo de corte debido a la viscosidad del agua y el esfuerzo de corte
inducido por la turbulencia del flujo, al cual se lo denomina normalmente tensi6n
de Reynolds:
Cera)
donde 1 es la viscosidad dinémica del agua
Cantidad de movimiento en y
Teniendo en cuenta que H<)
expresion que permite estimar el volumen de petréleo por unidad de ancho
contenido por la barrera flotante, teniendo en cuenta el efecto del viento.
3.14 Referencias
Pedersen, F. B, (1986). "Environmental Hydraulics: Stratified Flows". Lecture Notes
on Coastal and Estuarine Studies. Springler-Verlag.
Wilkinson, D. L. (1971). "Dynamics of Contained Oil Slicks". J. of Hydraulic Div.,
Vol 98, No HY6, pp 1013-1030.
Soresen, R. M., y Spencer, E.B. (1971). "Two-Dimensional Wind Set-up of Oil on
Water". Proceedings ASCE, Vol.97, WW3, pp 517-530.3.2, CUNAS DE AGUA SALADA
3.2.1 Introduccién
Las cuftas de agua salada son un fenémeno caracteristico de las zonas costeras. La
pendiente de fondo cerca de la desembocadura de grandes rios es, tipicamente, de
Pequefia magnitud, Debido a esto, una cufla de agua salada (mas densa que el agua
dulce del rio) tiende a remontarse hacia aguas arriba impulsada por efecto de la
gravedad. El flujo de agua dulce tiende a oponerse al movimiento de la cufta de
agua salada, ejerciendo un esfuerzo de corte en la interface entre el agua salada de la
cufa y el agua dulce del flujo sobre ésta. Eventualmente, cuando el efecto
gravitatorio que tiende a llevar la cua hacia aguas arriba equilibra al efecto del
esfuerzo de corte interfacial que tiende a oponerse a dicho movimiento, la cua
detiene su avance y alcanza un flujo permanente, en el cual se dice que la cufa es
"arrestada’. Este es el estado que se analiza en la presente secci6n
‘Agua salada
‘0
Océano
Tal como se observa en la figura, el flujo en la zona de la cufia puede ser dividido en
dos capas. EI flujo en la capa superior es de agua dulce y es en la direccién del mar.
El flujo de agua salada en la capa inferior es en la direccién del mar en la zona alta
de ella, y hacia aguas arriba mas cerca del fondo. Este flujo en la direccién de aguas
arriba es bastante débil en comparacién con el flujo de agua dulce en la capa
superior. Debido a la diferencia de direcciones del flujo de agua salada en la capa
inferior, éste se caracteriza por exhibir una circulacién en el sentido horario.
La distancia aguas arriba de la desembocadura alcanzada por la cufia de agua salada
depende en gran medida de la potencia del flujo de agua dulce y de la pendiente del
rio, So. Grandes catidales de agua dulce tienden a desplazar la cufla hacia el mar. Por
el contrario, durante periodos de bajo caudal de agua dulce, la cufta tiende a penetrar
grandes distancias rfo arriba. En estas circunstancias se ha observado que las cuas
de agua salada pueden penetrar hasta 50 a 100 km aguas arriba de la desembocadura
La importancia practica de este fenémeno es que la penetracién de la cufla de agua
salada puede (y frecuentemente lo hace) contaminar e inutilizar la provisién de
agua potable y para uso industrial en ciudades costeras y de més aguas arriba.3.2.2 Formulacién de las Ecuaciones que Rigen el Flujo en Cufias de Agua Salada
Considérese la configuracién mostrada en la figura anterior. El flujo se supone
permanente y bidimensional. Las coordenadas x e y se indican en la figura. La
altura normal del flujo es H = hy + hz, donde hy y hz representan el espesor de las
capas superior de agua dulce, e inferior de agua salada, respectivamente. La
densidad del agua (promediada sobre la turbulencia) esta dada por po (1 + @), donde
Po denota la densidad del agua dulce, y 9(x,y) denota la fraccién de aumento de
densidad por efecto de la presencia de sal. Notese que @ > 0. Valores tipicos de ¢
para el agua de mar cerca de la desembocadura de rios estin en el rango 0.005 a 0.02.
En esta definicién, 9 es proporcional a la concentracién en masa de sal disuelta en el
agua.
Usando las aproximaciones para la capa limite y promediando sobre la turbulencia,
las ecuaciones que gobiernan el flujo en el sistema en consideracién son las
siguientes:
a
Breas gies oF a)
@
@)
@
Donde (1) representa la ecuacién de cantidad de movimiento en x, (2) representa la
ecuacién de cantidad de movimiento en y, (3) representa la ecuacién de continuidad
suponiendo fluido incompresible, (4) representa la ecuacién de conservacién de la
masa de sal, y u,v, y p son las velocidades en x y en y, y la presiGn, respectivamente,
promediadas sobre la turbulencia. En (1), el esfuerzo de corte t, est4 dado por los
esfuerzos turbulentos de Reynolds y los esfuerzos viscosos:
)
En (4), Fg denota el flujo medio vertical hacia arriba de la fraccién de aumento de
densidad por efecto de la sal debido a la mezcla inducida por la turbulencia y a la
difusién molecular, el cual esté dado por:
39donde k denota el coeficiente de difusién molecular de la sal en agua
La descarga por unidad de ancho de agua dulce en la capa superior corresponde a
4
ay = Judy o
i,
Definiendo el espesor de la capa inferior, ho, de modo que:
i udy=0
[rua
e integrando (3) en la capa inferior definida por 0 < y < hz:
, ay
asf Su =o fiuay— oj, Be,
donde en el tiltimo paso se utilizé la regla de integraci6n de Leibnitz, se llega a:
a
Ose
hy
al, <2
(nae
0 @)
Integrando (3) en Ia capa superior (hz < y < H) usando (8) y la condicién de borde
cinemética en la superficie libre, que para flujo permanente toma la forma:
oH
y= Hy
es posible demostrar que la descarga qf permanece constante en la direccién x:
day
ax
Lfuay = <0
i,
Integrando (4) en la capa superior e imponiendo:
que indica que el flujo vertical de sal en la superficie libre es nulo, y de (8):se llega a:
4
L hugay=r,, oe
que indica que el flujo vertical de sal en el fondo es nulo, se lega a:
ah
oA f gd)
(90)
¥
donde:
iy
representa el valor del flujo vertical de sal evaluado en la interface. En el caso de
una cufta de agua salada tipica, el efecto de la estratificacién (gradiente de densidad
en la interface de gran magnitud) usualmente limita en gran medida los procesos de
mezcla en la interface. De acuerdo a este argumento, en lo que sigue se usaré la
siguiente aproximacién:
Fy=0 a0)
Con el objeto de determinar el gradiente de presion en x de este escurrimiento, se
integra (2) en la vertical y se impone que en la superficie libre la presién es nula, de
donde se obtiene la siguiente expresi6n para la presién:
1"
P -osf -y)+ jv ay
>
ecuaci6n que es vélida en cualquiera de las dos capas en las que se ha dividido el
flujo.
El gradiente de presién en.x esta entonces dado por:
afee aire
a Pest a ae Joey
Substituyendo esta ecuacién en (1) y dividiendo por po se obtiene:
avolediend) ate a[fer]pones2z (12)
El término en el lado izquierdo de (12) puede ser transformado como se indica a
continuacién
8
Pero de (3) y (4):
Por lo tanto:
7 ar,
(gate nd] Zlu+on?] Fleer owe
Ahora integrando cada término de (12) en la capa superior, utilizando la condicién
de borde cinematica y (8), se obtiene:
Javo[adtee x y= fae onan fred “
ji 3h Elsie
4
850 (+ oy =
i,
4
| emo] ©
4
42%
1
ely ~ th,
al ado,
©
donde 1 representa el esfuerzo de corte en la interface: ty = 7,
Considerando que: 4 = B + C+ D, se obtiene para la capa superior:
slave je Bayne eS fos 0s fay]
i [pay a-a}n the 5] ze
aly is
a3)
Efectuando la misma integracién, ahora en la capa inferior, se obtiene para cada
término de (12):
by ov), a ay
Javo(sgted}y iy =F toy - |e Say (a)
o a
hy
8 1 Bah Shearer @) |
4
ssf (1+ 9) = sno] ©)
,
14a yetfy —y)-(ate :
po ay pl ‘le Po ad
donde ty representa el esfuerzo de corte en el fondo: To
yao
De nuevo, considerando que: A’ = B’ + C’ + D’, se obtiene para la capa inferior:
"
wrfoleas(ne on} ea
°
«aay
43El signo negativo elegido para 1 responde a la necesidad de usar la convenci6n: 79 >
0 para indicar que el esfuerzo de corte de fondo se opone al flujo en las cercanias del
fondo, el cual en este caso es en la direccién hacia aguas arriba.
Mediciones de los perfiles de wy 9 en una cufa de agua salada se muestran en la
siguiente figura. Es importante destacar que las velocidades en la capa inferior son
mucho més pequefias que las velocidades del flujo de agua dulce en la capa superior.
En vista de la definicién de hz con el propésito de anular la descarga neta de agua
salada en la capa inferior, es facil ver que la siguiente aproximacién permite efectuar
‘una estimacién més 0 menos gruesa del perfil de velocidades del flujo:
ux (as)
»)
Ua), yeh
“Lo, yshy
-02 00 02 OF 08 08 10
Sits splape
Esta aproximacién es conocida como “sombrero de copa”. En forma similar, es
posible estimar que la estructura de ¢ esta dada por:
449(x,9)
feo} yeh, ie
P(x), y 0,=0
is
Similarmente, reemplazando (15) y (16) en (13) con @,=0:
aU? hy
dr
a y
shy + gSphy ——L
hg ESO
Pero como de (A)
entonces, reemplazando en la ecuacion anterior se llega a:
2
a {ay at u
-eh, .
(2) ay Ge tah ~ aL an
ecuacién que expresa la variacién de cantidad de movimiento en x en la capa
superior. EI primer término del lado derecho corresponde a la fuerza neta de
presion actuando en la capa superior, el segundo témino del lado derecho
corresponde a la fuerza de gravedad actuando sobre la capa superior, y el tercer
término del lado derecho corresponde a la fuerza de friccién actuando sobre la capa
superior ejercida por el esfuerzo de corte interfacial,
Reemplazando (15) y (16) en (14) v llamando ®,= @, se obtiene
(t+ 70)
Po
-{in temo asp(te 6) LED 9 ©
45donde:
4
a
or:
Reemplazando By en (C) se llega a:
dH , diz) (+m)
-se( Bo dz)? 81+ on +
Hi ven elie i 4a dys
B [5 lowe -ofs Jo Jr 0f She-viav=
aly
oh,
0 (as)
En la mayorfa de las aplicaciones, las velocidades del flujo en las cercanfas del fondo
son tan pequefias que el esfuerzo de corte en el fondo, to, resulta despreciable
comparado con el esfuerzo de corte interfacial, 7. Por otro lado, la pendiente media
de fondo de grandes rfos en zonas deltaicas es frecuentemente muy pequefia, con lo
cual el valor de So se puede considerar despreciable en (17) y (18). Con estas
aproximaciones, (17) y (18) pueden ser reducidas de modo de obtener ecuaciones
adimensionales para el célculo de curvas de remanso para hy y hz. como se muestra a
continuacién,
De (17) y notando que H = hy + hp, se tiene:
2
(S51
(gh "Far de poy
De (18):
@(Ztamles)
dx" dx” pogia 1+
Reemplazando (B) en (A) y notando que:
11 = poe U = acy,
donde cf, es el coeficiente de friccién interfacial, se tiene:
2
Go|
ar Sar
dividiendo por ®, se obtiene:
46
@
@B)anne)
© reagrupando términos:
hy oy Pre?
de (Fre) hy
cas)
ecuacién que es andloga a la ecuacién de curvas de remanso en un flujo en canales
abiertos, y que permite determinar Ia variacién en x del espesor de la capa superior
del flujo. En (19), Frg es el némero de Froude densimétrico del flujo el cual esta
dado por:
= Fry?
gone Td (20)
Asimismo, cj es el coeficiente de friccién interfacial, el cual esta definido por la
relacion:
11 = pot, U?
Por otro lado, reduciendo Ia expresién (B) se obtiene:
2
thy ath afm
Me 41 - @ys(1-0)e, Se
ae EG aa en
Utilizando (20) y despreciando los términos de orden ® y de orden superior en® ,
se puede demostrar que:
thy thy
dy dy
2
ecuacién que indica que la altura total del flujo, H, permanece constante a lo largo de
la cua de agua salada, con un valor Ho, igual al valor de H en la posicién x = 0.
Reescribiendo el nimero de Froude densimétrico se tiene:
2
Peg eg gH a ert
Bh ROH, hy r
donde r= hy / Ho, ¥:
a7Hy
Hoh,
Fiz
Por Jo tanto (19) puede ser reescrita como:
ce Fro? cn cp Fro? a
donde:
ret; xeds mga, my
ie "Hy 20%
‘Suponiendo que cq es constante, (23) puede ser integrada desde la punta de la cufia
de agua salada (X= 0, donde r= 1) de modo de obtener la forma de la cufta de agua
salada, la cual esta dada por la siguiente expresién adimensional:
1 nod 1
reread mye ated peg L
Prot G DPI 45 oo Fro tog
og Prot X
La condicién de borde en la desembocadura (x =) es una condicién de
escurrimiento critico, completamente andloga a aquélla correspondiente a una caida
libre en la situacién tfpica del cfleulo de curvas de remanso en canales abiertos. Esta
condicién de escurrimiento critico en el caso de la cua de agua salada, sin embargo,
corresponde a una condicién en términos del numero de Froude densimétrico del
flujo, la cual est dada por:
eco
reemplazando en la expresién anterior se obtiene:
Fre
yt |
k= Fry?
7
Lia
Ay 4¢q| SFr?
= 243 Fr? —
ms) (25)
ecuacién que permite estimar la distancia de penetracién de una cufta de agua salada
arrestada, dadas la altura de escurrimiento del flujo uniforme de agua dulce, la |
descarga por unidad de ancho de agua dulce, y el valor de® del agua salada de la
cufia, La ecuacién (25) fue inicialmente presentada por Schijf y Schonfeld en la
Conferencia Internacional de Hidrdulica de la IAHR realizada en Minnesota en 1953,
48 |En realidad, el esfuerzo de corte interfacial no es constante sino que varia con el
ntimero de Reynolds definido como q,/ v y con el mimero de Froude densimétrico.
La figura siguiente ha sido tomada de Arita y Jirka (1987), y en ella puede observarse
la variacin de %; (cy en ec(25)) en funcién de los mencionados ntimeros
adimensionales.
‘ate (1970) 1 tr ontario
Cnet 980) 1 rn nat 1985
Finalmente, efectuando la razén entre (23) y (25), y definiendo las variables
adimensionales:
z Ho (tr
L Me Care
se obtiene la siguiente ecuacién para la forma adimensional de la cufa de agua
salada, la cual resulta ser s6lo funcién de Fr:
(Fr y= Fre) hg a-2a-Fr”) he +hd~ Fr?) eK E (6)
donde:
enLa forma adimensional de la cufia de agua salada dada por (26) se grafica en la
siguiente figura para distintos valores de Frg
10
og
os 9
oa
ot BZ
09
or oa
3.23 Ejemplo
Considérese el siguiente caso como un ejemplo de ta intrusién de una cua de agua
salada en un rfo, Los datos son los siguientes:
Altura de flujo uniforme: Hy = 12m
Fraccién de aumento de densidad: ® =0.015
Coeficiente de friccién interfacial: og = 2x10
Caudal por unidad de ancho: ~ en condiciones de bajo caudal: gy = 3 m3/s
~ en condiciones de crecidla: gp = 50 m3/s
Calculando el ntimero de Froude densimétrico del flujo en cada condicién de caudal
usando (24), se tiene:
— en condiciones de bajo caudal: Fr = 0.19
~ en condiciones de crecida: Fry =3.14
Calculando el valor de la distancia de penetracién de la cufla de agua salada, L, en
cada condicién de caudal usando (25), se tiene:
~ en condiciones de bajo caudal: Lig = 564x109 => L= 68 km
~ en condiciones de crecida: Lig es negative => la cufa de agua salada es
completamente barrida hacia el mar.
En condiciones de crecida, en el presente ejemplo, la cua es completamente
desplazada hacia el mar, lo cual ocurre para un nimero de Froude densimétrico del
flujo bastante mayor que 1a unidad. En tal situacién, el flujo no puede ser
50controlado desde aguas abajo (en la desembocadura), y por lo tanto no existe
intrusion de la cua de sal hacia el rfo. El problema de control del flujo se discute
brevemente en la siguiente secci6n, haciendo una analogia con el flujo en canales
abiertos
3.2.4 Analogia con la Hidréulica de Canales
El problema del control hidréulico del flujo de cufias de agua salada es andlogo a
aquél del flujo en canales abiertos. Flujos estratificados con nimeros de Froude
densimétrico inferiores a la unidad son controlados desde aguas abajo, en tanto que
flujos con valores de dicho ntimero mayores que la unidad son controlados desde
aguas arriba. Esta situaci6n se ilustra en la siguiente figura:
Canal abierto Cuna de agua salada
Agua dulee
nae ‘Agua salada
Control desde aguas abajo
Fro “Frat Aeuadulee
\ \ Agua salada
Control desde aguas arriba
El sentido fisico del control hidraulico en flujos estratificados es también
completamente anélogo al de la hidréulica de canales clisica. Como se sabe, la
velocidad de propagacién de ondas en un flujo en canales abiertos es igual a:
Ash
donde # representa la profundidad del flujo. Es facil ver que reemplazando el valor
de c en la expresiGn clasica de! nimero de Froude se obtiene 1a condicién: ;
Este resultado indica que flujos con velocidades medias mayores que c tienen
nimeros de Froude mayores que la unidad, y lo opuesto es valido para flujos con
51velocidades inferiores a c. En conclusién, se tiene que fisicamente en flujos con
ndmero de Froude superiores a la unidad, la propagacién de ondas es posible s6lo
en el sentido del escurrimiento (es decir las ondas no pueden remontar el flujo), y
Por lo tanto el flujo de informacién es sélo hacia aguas abajo. En tal caso, el control
del flujo es desde aguas arriba. Por otro lado, en flujos con ntimero de Froude
inferiores a la unidad, Ia informacién puede remontar el flujo (las ondas pueden
Propagarse hacia aguas arriba), y por lo tanto el control del flujo es desde aguas abajo.
En flujos estratificados, donde una capa de mayor densidad se sitita bajo otra de
menor densidad, como se muestra en la figura siguiente, se puede demostrar que la
velocidad de propagacién de ondas est4 dada por (Turner, 1973):
Bh;
donde po representa la densidad del fluido en la capa superior, Ap representa Ia
diferencia de densidad entre las capas, y hz representa el espesor de la capa inferior.
Es facil ver que reemplazando el valor de ce en la expresién del numero de Froude
densimétrico se obtiene la condicién: Fry = 1. Anélogamente a lo discutido para
canales abiertos, este resultado indica que flujos con velocidades medias mayores
que ce tienen ntimeros de Froude densimétrico mayores que la unidad, y lo opuesto
es vilido para flujos con velocidades inferiores a c.. Considerando el mismo
argumento dado previamente con respecto a la direccién de desplazamiento de las
ondas, es posible concluir que flujos estratificados con ntmeros de Froude
densimétrico superiores a la unidad son controlados desde aguas arriba, en tanto que
flujos estratificados con niimeros de Froude densimétrico inferiores a la unidad son
controlados desde aguas abajo.
3.2.5 Referencias
Arita, M. y Jitka, G. H. (1987). "Two-Layer Model of Saline Wedge. Il: Prediction of
Mean Properties". J. of Hydraulic Engrg., Vol 113, No 10, pp 1249-1263.
Schijf, J. B., y Schonfeld, J. C. (1953). "Theoretical Considerations on the Motion of
Salt and Fresh Water”. Proceedings Minnesota International Hydraulics
Convention, IAHR, Minneapolis, Minnesota, pp 321-333.
Tumer, J. S. (1973). "Buoyancy Effects in Fluids". Cambridge Monographs on
Mechanics and Applied Mathematics. Cambridge University Press.
624.» FLUJOS ESTRATIFICADOS CON MEZCLA.| aa conrtenres De DENsIDAD
Considérese un flujo de agua de baja temperatura moviéndose hacia aguas abajo en
un plano inclinado con una pendiente § << 1. La corriente ocurre sumergida bajo
una capa de agua mds caliente, en reposo, con una densidad, pp, constante. La
densidad local de la corriente esta dada por:
4p _(P~po)
Po Po
P=Po +B) 3 B
donde f(x, y, 1) es el valor instanténeo de la fraccién de aumento de densidad del
agua de la corriente por efecto de su menor temperatura con respecto al agua de la
capa superior. La variable f fluctia en el tiempo debido a la turbulencia, no
obstante, su valor medio es positive.
SN =e
Po baa
Fuente de agua fri
Lotsa) | yay) —_,
a ere ei
s
Sih es una medida del espesor de la corriente sumergida, y H representa la
profundidad total del agua en reposo, entonces se puede suponer que hiH << 1, lo
cual permite utilizar la aproximacién de la capa limite en a derivacién de las
ectiaciones que rigen el movimiento de la corriente de densidad. Por otro lado, dado
que la diferencia de densidades de la corriente y el agua en reposo es relativamente
pequefia, es posible hacer uso de la aproximacién de Boussinesq, la cual permite
despreciar la diferencia de densidad en los términos inerciales de las ecuaciones de
Navier-Stokes, atin cuando ésta se incluye explicitamente en el término
correspondiente’ la fuerza de flotacion,
Considerando la aproximacién de Boussinesg,
el movimiento del fluido son:
Jas ecuaciones instanténeas que rigen
(du, au
Pol a 3 wo
55OB, auB , vB
at oe tay no @
Donde (1) corresponde a la ecuacién de cantidad de movimiento en x, (2)
corresponde a la ecuacién de cantidad de movimiento en y, (3) corresponde a la
ecuacién de continuidad, y (4) corresponde a la ecuacién de conservacién de la
fraccién de aumento de densidad debido a la presencia del agua mas helada de la
corriente, B. Es importante destacar que es precisamente la presencia de f lo que
induce el movimiento de la corriente de fondo a través de un efecto gravitacional.
Nuestro objetivo es deducir un sistema de ecuaciones que gobierne el movimiento
de la corriente de densidad sumergida. Para ello es necesario, en primer lugar,
promediar las ecuaciones (1) a la (4) sobre la turbulencia. Con este fin, se
consideraré que cada variable se puede descomponer en un valor medio més una
fluctuacién, como se indica a continuacién.
B+o : p=p+e
Promediando sobre la turbulencia, considerando la descomposicién anterior, se
obtienen las llamadas ecuaciones de Reynolds:
a Fi Fw Fls—, 22» aa
Bs pu Si SE + spo(1+B)S~ po —— po=T~ (8)
ap ay FF FB), 5, ee
Se +P0 FZ) salt Bl 9y SE 6)
ai,
xt! O)
8)
donde los términos:representan los esfuerzos turbulentos de Reynolds, y los términos:
up: vB
representan los flujos turbulentos de Reynolds
El siguiente paso es reducir las ecuaciones anteriores introduciendo las
aproximaciones de la capa limite, para lo cual se utilizan las siguientes escalas:
Tau ; yuh, xb; BaB
donde U representa la velocidad media caracterfstica de la corriente de densidad, h
representa el espesor tipico de la corriente, L representa una escala de longitud en el
sentido del escurrimiento, y 8 representa un valor medio de la fraccién de aumento
de densidad en la corriente, La siguiente relacién se supone valida, lo que indica
que el flujo corresponde a una capa limite:
det
L
Para simplificar ain més las ecuaciones se supondré que la corriente se desarrolla en
condiciones de flujo permanente.
De la ecuaci6n (7) es posible deducir que
ox oy
donde V es una medida de la escala de v, y como A/L << 1, entonees es claro que la
componente vertical de la velocidad del flujo en la corriente es de mucho menor
magnitud que la componente horizontal de la misma
Introduciendo las escalas U, V, h, y L indicadas anteriormente, considerando iL << 1,
despreciando el término:
y tomando los Iimites:validos para flujos turbulentos totalmente desarrollados, se pueden despreciar
términos de pequefia magnitud, y es posible reducir (5) a
du - du op 7 auy
of iba ) et ePAAI+B)S Po O}
Repitiendo el mismo procedimiento, (6) puede ser reducida a
a0)
Similarmente, introduciendo las escalas U, V, h, y L en (8), considerando que: A/L <<
1, y teniendo en cuenta que la componente horizontal del flujo turbulento de
Reynolds es de mucho menor magnitud que el flujo medio UB de la fraccién de
aumento de densidad en la corriente en la direccién x, de tal modo que:
HB ect
v
y notando que, si bien se tiene que
el gradiente vertical de la componente vertical del flujo turbulento de Reynolds no
es de magnitud despreciable, se llega a la siguiente ecuaci6n
2B, 8 , OR
a ay
ay
Integrando (10), ¢ imponiendo la condicién de presién nula en la superficie libre, es
posible obtener la siguiente expresién para la distribucién de presién en el flujo:
- HO
PU») = po 8 f+ Bony dy
Ia cual puede ser diferenciada con respecto a x, para obtener:
op ate
Fe 7 PISS Pog iB ay (12)
donde se ha utilizado la siguiente relacién:
58
ET
|y el limite superior de integracién y = H, ha sido reemplazado por el limite y = =, lo
cual es una aproximacién suficientemente buena si Hih >> 1, es decir, sila corriente
de densidad ocurre a una profundidad mucho mayor que el espesor de la misma.
Una vez que las ecuaciones que gobiernan el flujo de las corrientes de densidad han
sido simplificadas, ellas pueden ser integradas en la vertical. Reemplazando (12) en
(9) se obtiene:
OT OE oo a
00'S, [Bay + F+ spoBs (13)
donde:
pov
representa el esfuerzo de corte turbulento de Reynolds.
Por otro lado, es facil ver, usando la ecuacin de continuidad (3), que:
795 IE ais
ox ay ax oy
donde se han utilizado las relaciones siguientes
‘a
Y 1 representa el esfuerzo de corte actuando sobre el fondo,
4)
59Ahora integrando (7) se llega a:
a
aio as)
donde se ha utilizado:
y se define:
como la velocidad de incorporacién de agua de menor densidad hacia la corriente de
densidad,
Integrando (11) se obtiene:
Oto
§ [ito a6
donde se han utilizado las relaciones:
TA
¥BI
ly-0
La ecuacién (16) implica que el flujo de la fraccién de aumento de densidad en la
direccién x es constante, y por lo tanto debe ser igual al valor de este flujo en el
Punto de origen de la corriente de densidad (el cual es impuesto externamente):
[Bay = constante = Up hy By
€8 decir, el flujo Uy hg By es un invariante del problema.
Para proseguir el anélisis es conveniente introducir algunas suposiciones. En
Particular, es necesario imponer relaciones de cierre del problema, que permitan
estimar la velocidad de incorporacién de agua de menor densidad hacia la corriente,
2, y el esfuerzo de corte en el fondo, . Estos parametros pueden ser modelados
como se indica a continuacién:an
donde ey representa el coeficiente de incorporacién de agua de menor densidad
hacia la corriente, y cp representa el coeficiente de friccién en el fondo.
Es necesario ahora definir més precisamente los valores del espesor h, de la
velocidad media U, y de la fraccién de aumento de densidad B, de la corriente
sumergida. Estas definiciones pueden efectuarse en términos de los siguientes
momentos
whe ftw: UBh= JiBay
2 0
donde 1a primera integral corresponde al caudal de agua de mayor densidad
transportado por la cortiente sumergida, la segunda integral corresponde al flujo de
cantidad de movimiento de la corriente sumergida en la direccién x, y la tercera
integral corresponde al flujo boyante de la corriente sumergida en la direccién x
dado por la diferencia de densidades.
Usando las integrales anteriores es posible definir U, h, y B como:
Pa fit con _ (Si)
Uh Judy wh Firay”
a7)
los cuales varfan en la direccién x.
Adicionalmente, se introduce una hipétesis de similitud para las distribuciones en
Ia vertical de la velocidad del flujo y de la fraccién de aumento de densidad.
Basicamente, la hipétesis de similitud consiste en suprimir la dependencia en x de la
distribucion vertical de la variable considerada, de tal manera que es posible obtener
‘un colapso de dicha distribucién en una sola curva cuando las variables se hacen
adimensionales usando los parémetros adecuados.
Considerando la siguiente normalizacién:
se ha demostrado con resultados de laboratorio que, efectivamente, las curvas fz y f2,
las cuales son independientes de x, permiten obtener un colapso satisfactorio de ios
datos experimentales (Parker et al., 1987).
61Dadas las definiciones (17), las siguientes condiciones deben cumplirse
necesariamente si la normalizacion anterior es efectiva:
[itanet: fA2Mane: [rmsalnjan= 1
0 2 0
Reemplazando (17) y (17') en (14), (15), y (16) se obtienen las siguientes relaciones:
I ,dBh?
2
Cis igBIS—25,9BE — egy? as)
as)
20)
donde, 8 y S2 son factores de forma, definidos por:
Se [rs = 2fftnar an ay
7
los cuales, tal como se verifica experimentalmente, toman valores cercanos a 1
De (20) se concluye que, tal como se discutié previamente:
vB.
Up Ba by = constante
donde Uo, Bo y ho representan la velocidad media, la fraccién de aumento de
densidad y el espesor de la corriente, respectivamente, en el punto de origen de la
corriente de densidad, los cuales constituyen una condicién de borde del problema.
Usando la propiedad de que el flujo boyante UBh se mantiene constante, es posible
manipular las ecuaciones (18) y (19) para obtener:
@-t
2 Ri) ey -S, RIS+ ep
(22)
GSR -
BIS1
(14 Sy Ri) ey = S, RES +
BA ce Dene acta @3)
3Ri dx (1S; Ri)
donde Ri representa el niimero de Richardson del flujo, el cual se define como:
pe sthent o
donde a representa el angulo de inclinacién del fondo, tal que cos(a) = 1 si S << 1. Es
f4cil ver que Ri es igual al inverso del cuadrado del ntimero de Froude densimétrico
del flujo.
Las ecuaciones (22) y (23) fueron derivadas originalmente por Ellison y Turner
(1959), Estas ecuaciones, analogas a las ecuaciones para el célculo de curvas de
remanso en canales abiertos, permiten calcular las propiedades del flujo
gradualmente variado de una corriente de densidad sumergida. Bfectivamente, es
fécil demostrar que despreciando el valor del coeficiente ew en dichas ecuaciones, es
posible obtener las ecuaciones para el flujo gradualmente variado en canales
abiertos.
En la hidréulica de canales, h y Ri (o mas bien el ntimero de Froude del flujo) estan
directamente ligados a través de la ecuacién de continuidad. En dicho caso, debido a
que no hay incorporacién externa de agua (ew = 0), de (19) se obtiene: U h = constante,
por lo tanto existe una cierta altura 4 para el cual Ri = 1, y otra para la cual dhidx = 0 y
dRildx = 0. En el caso de corrientes de densidad, sin embargo, atin cuando el
‘comportamiento de Ri es similar a aquel de 1/F? en hidraulica de canales, el espesor
de la corriente, 4, no esté relacionado de manera tinica con este pardmetro.
Es importante destacar que el uso de (22) y (23) requiere conocer los factores de forma
Sry Sz, los cuales se pueden conocer sélo a partir de resultados experimentales,
ademiés de los coeficientes de incorporacién de agua, ey, y de friccién, cp.
El coeficiente de incorporacién de agua, ew, es en general una funcién del niimero de
Richardson. Este puede ser evaluado usando la relacién propuesta por Garcia (1985)
0.075
aT
(715K @s)
Es facil ver que cuando Ri + 0, ey + 0.075, el cual corresponde al valor para un
chorro sumergido, pegado al fondo (es decir, un flujo sin estratificacién por
densidad). Para valotes grandes de Ri, (25) se puede aproximar usando:
by = 28X10 Ri 26)
63La siguiente figura muestra una comparacién entre (25) y datos experimentales.
(0.075 (CLEAR WATER JET)
ew
© ELLISON & TURNER (1959)
© LOFQUST (1960)
4 ASHIDA & EGASHIRA (1975)
(© FUKUOKA & FUKUSHIMA (1980)
9 GARCIA (1985)
6 1° 10! 10
Ry = ou?
Un anélisis de las ecuaciones para el flujo gradualmente variado de corrientes de
densidad dadas por (22) y (23), incluyendo los distintos tipos de escurrimiento
posibles de ocurrir, se presenta en el Capitulo 5.Referencias
Ellison, T. H., y Turner, J. S. (1959). "Turbulent Entrainment in Stratified Flows". ].
of Fluid Mech., Vol 6, pp 423-448.
Garcia, M. (1985). "Experimental Study of Turbidity Currents". Tesis de Maestria en
Ingenierfa Civil, Universidad de Minnesota, Minneapolis,
Parker, G., Garefa, M., Fukushima, Y., y Yu, W. (1987). "Experiments on Turbidity
Currents over an Erodible Bed”. J. of Hydraulic Research, Vol 25 , no.1, pp 123-147.
654.2 PLUMA VERTICAL
4.2.1 Introduccién
Una pluma o penacho es un flujo inducido principalmente por fuerzas de flotacién
resultantes de la diferencia de densidad entre el fluido de un chorro y el fluido
ambiente al cual dicho chorro descarga. Considérese la situacién mosirada en la
siguiente figura, donde un fluido de densidad p es descargado desde una tuberfa a
un fluido ambiente de densidad pp. Se supone que el fluido descargado es de menor
densidad que el fluido ambiente. El proceso de mezela de los fluidos es inducido
inicialmente por la cantidad de movimiento del chorro. Sin embargo, para chorros
de relativamente baja energia se puede esperar que a una corta distancia los efectos
de flotaci6n pasen a ser més importantes que los de cantidad de movimiento, y sean
ellos los que controlen los procesos de mezcla. El patrén de flujo resultante de tal
situacién se denomina pluma,
En lo que sigue, se derivan las ecuaciones que rigen el flujo en plumas verticales
circulares. En el andlisis se introducen las aproximaciones de la capa limite
suponiendo que el diémetro de la pluma, caracterizado por la escala 5, es mucho
menor que una escala de longitud en el sentido axial, L, de modo que:
Feet
L
y la aproximacién de Bousinessq, la cual permite despreciar el efecto-de la diferencia
de densidad en los términos inerciales de las ecuaciones de Navier-Stokes, atin
66cuando ésta se incluye explicitamente en el término correspondiente a la fuerza de
flotacién.
4.2.2 Ecuaciones que Rigen la Puma Vertical
Considerando las ecuaciones instanténeas de Navier-Stokes en coordenadas
cilindricas. para flujo permanente utilizando la aproximacién de Boussinesq, se
tiene:
1a( dw), Bw
o-oes 22 (2). 22) «
Taf ou) udu
(4-4-8) @)
@
rug , nwo
a” a
a)
donde (1) corresponde a la ecuacién de cantidad de movimiento en la direcci6n z, (2)
corresponde a la ecuacién de cantidad de movimiento en la direccién r, (3)
corresponde a la ecuacién de continuidad, y (4) corresponde a la ecuacién de
conservacién de masa. En estas ecuaciones, u denota la velocidad radial, w la
velocidad axial, y 9 denota la fraccién de defecto de densidad por la presencia del
fluido descargado, la cual se define como:
= PO=P BP. y,2
Po Po
siendo una funcién de r y z, como se indica.
Introduciendo la descomposicién tfpica de las variables instanténeas en un valor
medio y una fluctuacién, se tiene:
i waWtw i papty 5 o=8+¢
Reemplazando en las ecuaciones (1) a (4), y promediando sobre la turbulencia, se
obtiene el siguiente conjunto de ecuaciones:
678)
donde los términos:
iw;
representan los esfuerzos turbulentos de Reynolds, en tanto que los términos:
ees ow
representan los flujos turbulentos de Reynolds.
Usando ahora la aproximacién de la capa limite, introduciendo las escalas
caracteristicas: U, W, 6, y L, correspondientes a la velocidad radial, velocidad axial,
didmetro y longitud de ta pluma, respectivamente, y considerando que se cumple:
Yb
wee
y ademas:
eee
Oe
y suponiendo un ntimero de Reynolds del flujo suficientemente alto de modo de
despreciar efectos viscosos, entonces es posible reducir la ecuacién (5) a:
— @
68No obstante, considerando que el fluido ambiente impone una distribucién de
presién en la capa limite dada por:
2 GG et (io)
donde:
corresponde al esfuerzo de corte de Reynolds,
Es importante destacar que el término§ g en (10) corresponde a Ja fuerza flotante
que induce el movimiento de la pluma. Este es el término que diferencia el
comportamiento de la pluma del de un simple chorro con diferencia de densidad
nula.
Aplicando el mismo procedimiento a la ecuacién (6), se obtiene
ecuacién que indica que la presién es constante en la direccién radial
Finalmente, aplicando la mismas aproximaciones anteriores a la ecuacién (6) se
llega a!
ap
‘A continuacién, con el objeto de simplificar atin més las ecuaciones (7), (10) y (11), se
procede a integrar dichas ecuaciones en el plano (r, 6), en el tango: 0 =>)
Le ecuacién (15) indica que la cantidad de movimiento en z de la pluma no es
constante (por efecto de la existencia de la diferencia de densidad con el fluido
ambiente), sino que ésta gana cantidad de movimiento en la direccién z por efecto de
las fuerzas de flotacién. Esta es la principal diferencia entre un chorro y un pluma.
En un chorro, en el cual la diferencia de densidad con el fluido ambiente es nula, la
cantidad de movimiento en z se conserva,
Es conveniente introducir ahora algunas hipétesis de similitud para los perfiles de
distribucién de la velocidad vertical y de la fraccién de defecto de densidad en la
direccién radial. Estas hipétesis permiten eliminar la dependencia en z de dichos
perfiles, permitiendo el colapso de ellos en curvas independientes de z cuando se
introducen pardmetros adimensionales adecuados. Introduciendo las escalas W, ® y
para la velocidad media en z, la fraccin media de defecto de densidad, y el radio de
la pluma, respectivamente, se supone que las siguientes relaciones son validas:
am in 6)
slo
z fin)
3
Si las funciones fy g eliminan efectivamente la dependencia en z, entonces se deben
cumplir las siguientes condiciones, las cuales permiten definir las variables W, ®, y
be
[Pry gy batee
7 S
donde S), S2 y S3 corresponden a factores de forma que se definen como:
sa[Pnan ss
(rendn s S=[endn
Estos factores de forma pueden evaluarse s6lo a partir de datos experimentales.
Introduciendo la hipétesis adicional de "sombrero de copa’, como se muestra en la
figura siguiente, de modo que:
FM = gO
1 O 0.1, para las cuales la altura de la barrera de
control es menor o igual al espesor de la intrusién, h2, el control es combinado,
estatico y dinémico. En la regién B, correspondiente a valores de n $0.1 y $0.1, para
los cuales la altura de la barrera de control es del orden del espesor de la intrusién,
hig, el control es puramente estatico. En la regién C, correspondiente a valores 1 2 0.1
yf $0.1, para los cuales la altura de la barrera de control es mucho menor que el
espesor de la intrusién, ha, el control es puramente dindmico. Finalmente, en la
regiGn D, correspondiente a valores de Fg mayores que el limite dado por la ec(9)
valida para ¢ = 0, el numero de Froude densimétrico del flujo de aproximacién es
suficientemente grande como para impedir la intrusién salina sin necesidad de
recurrir a elementos de control.
Fo
845.1.6 Conclusiones y Recomendaciones
1) Los elementos de contro! dinémico son considerablemente més efectivos que los
elementos de control estético puesto que requieren una menor altura de barrera. El
control por Venturi es extremadamente inefectivo pues requiere una excesiva
contracci6n det flujo.
2) Una regla tentativa para el uso de barreras de control estatico es:
21x (13)
3) Una regla tentativa para el uso de elementos de control dinémico es:
201 aa)
en conjunto con un valor de Fy que exceda el valor dado por la ecuaci6n (11),
5.1.7 Referencias
Benjamin, T. B. (1967). "Gravity Currents and Related Phenomena’. J. Fluid Mech.,
31, pp 209-248.
Jirka, G. H., Akar, P. J., y Sutherland, N. D. (1988). “Salinity Intrusion Control in
Well Stratified Estuaries and Waterways". Third International Symposium on
Stratified Flows, Pasadena, California
Jirka, G. H., y Arita, (1987). "Density Currents or Density Wedges: Boundary Layer
Influence and Control Methods". J. Fluid Mech., 177, pp 186-206.52 TRANSICION A UNA CORRIENTE SUMERGIDA
La transicién desde un flujo homogéneo en canales a una corriente de densidad
sumergida ocurre cuando la densidad del flujo de aproximacién, p + 4p, es mayor
que aquélla del agua del lago o reservorio, p, al que descarga dicho flujo. Esta
transicién es de comin ocurrencia, bastando sélo una pequefia diferencia de
densidad para causar dicho fenémeno. La situacién es la indicada en la siguiente
figura:
Punto de sumergencia
zona de flujo zona de flujo sumergido
homogéneo zona de
sumergencia
La zona de flujo homogéneo, aguas arriba de la sumergencia, corresponde
simplemente a un flujo en canales. La zona de sumergencia es una zona de cambio
brusco, donde ocurre bastante mezcla, y donde se produce la incorporacién de agua
de densidad p a la corriente de densidad en formacién. La zona de flujo sumergido
corresponde a un flujo estratificado donde se desarrolla la corriente de densidad.
La prediccién de la posicién y condiciones de flujo asociadas al punto de
sumergencia se puede efectuar, de acuerdo a Stefan et. al (1988), definiendo un
nuimero de Froude densimétrico asociado con dicho punto, Fy, el cual est dado por:
u,
ha
iit
donde Up representa la velocidad media del flujo, y Hp representa la altura de
escurrimiento correspondientes al punto de sumergencia, respectivamente. Sin
embargo, existe suficiente evidencia de que el valor de Fy no es universal, sino que
depende de la geometria de la transicién desde el flujo de aproximacién al lago 0
reservorio, y también del tipo de pendiente hidréulica del canal de aproximaci6n.
86Considerando la situacién de geometria més simple, correspondiente a la
sumergencia en un canal de ancho constante, Akiyama y Stefan (1984) encontraron
que cuando la pendiente del canal es hidraulicamente suave el efecto de dilucién de
la corriente por incorporacién de fluido de densidad p es pequefio, es decit existe
poca mezcla, como se indica en el siguiente esquema. En esta situacién, el valor de
Fy esté dado por:
1-094 |=
Vi
donde S es la pendiente del canal, y f; es el factor de friccién total del flujo (es decir
aquel debido a la friccién en el fondo del canal mas la friccién en la interface)
Punto de sumergencia
Por el contrario, cuando la pendiente del canal es hidréulicamente fuerte, el efecto
de mezcla e incorporacién de agua de densidad p a la corriente es significativo, como
se indica en la siguiente figura. En esta situacién, el punto de sumergencia est
definido por la condicién:
LO>F, 20.5
Punto de sumergencia
La determinacién de 1a profundidad del flujo Hy para la cual se inicia el
escurrimiento sumergido, tiene valor practico. Una expresion para dicho parémetro
se puede obtener con la ayuda del ntimero de Froude densimétrico:
87"= g Apip es la
figura siguiente
campo (Ford y
cubierto va desi
mismos resulta
1H, (n)
1g
B
yé
+
donde q=UpHy es el caudal de agua por unidad de ancho que ingresa al reservorio y
aceleracién de la gravedad afectada por el exceso de densidad. En la
se presentan observaciones de laboratorio (Singh y Shah, 1971) y de
Johnson, 1981) (Hebert et. al, 1979). El rango de profundidades
de unos pocos centimetros hasta varios metros, y el ajuste de los
en la siguiente expresién (r=0.97):
Hp sald
i
100
10
1
Singh & Shah (lab)
O1 2 2
Ford & Johnson (campo)
Hebbert etal, (campo)
an
oo oa 1
Pg”? (my
100
crDespreciando la pequefia diferencia en el exponente con respecto a Ja unidad, la
comparacién del ajuste con la expresién anterior resulta en
(4) 2201 4F,=03
FP
Este resultado y el ajuste empfrico para Hp, pueden ser utilizados para estimar, en
forma aproximada,las condiciones en las cuales se puede producit el sumergimiento
de una corriente de agua que se encuentre ingresando a un embalse.
Referencias
Akiyama, J., y Stefan, H. Z. (1984). "Plunging Flow into a Reservoir: Theory
Hydraulic Engrg., 110 (HY4), pp 484-499.
J. of
Stefan, H. Z., Johnson, T. R,, Ellis, C. R., Farrel, G. J., y Akiyama, J. (1988)
“Laboratory Studies on the Initiation of Density Currents by Inflows to Lakes and
Reservoirs". 1. Physical Limnology. pp 58-61.
Ford, D. E., y Johnson, M. C. (1981). "Field Observations of Density Currents in
Impoundments". Proceedings of the Symposium on Surface Water Impoundments,
Minneapolis, Minn., Junio de 1980, publicado por ASCE.
Hebbert, B., Imberger, J., Loh, L, y Patterson, J. (1979). "Collie River Underflow into
the Wellington Reservoir". J. of the Hydraulics Division , 105 (HYS), pp 533-545.
Singh, B. y Shah, C. R. (1971). "Plunging Phenomenon of Density Currents in
Reservoirs", La Houille Blanche, 26 (1), pp 59-64
895.3 ANALISIS DE CURVAS DE REMANSO EN CORRIENTES DE DENSIDAD
En la presente seccién se analizan las posibles curvas de remanso que ocurren en los
flujos estratificados asociados con las corrientes de densidad. Como se discute en lo
que sigue, estas curvas de remanso guardan cierta semajanza con aquéllas asociadas
al flujo en canales abiertos, sin embargo por efecto de la estratificaci6n del flujo, la
situacin es algo mas compleja, encontrandose un numero mayor de distintas
posibilidades de flujo.
5.3.1 Ecuaciones
Las ecuaciones que gobiernan el movimiento de las corrientes de densidad fueron
derivadas en el Punto 4.1, efectuando un andlisis similar al de Ellison y Turner
(2959). Mediante la sencilla manipulaci6n de dichas ecuaciones se puede obtener el
siguiente sistema
tea
dh _ 2b +e)~ (Si S+5 Sr &y) Ri
1
dx (1S, Ri) ©
Q)
Lai _
3Ri dv :
TF (@)
ey = f(Ri) (5)
Donde las variables ya han sido definidas en el Punto 4.1, y la ec.(5) indica que el
coeficiente de incorporacién, ey, es una funcién del ntimero de Richardson, Ri, dada
por alguna de las expresiones presentadas en el Punto 4.1. En cualquier caso, ey
siempre decrece con Ri
5.3.2 Valores Caracteristicos del Nuimero de Richardson
Del analisis de las ecuaciones anteriores se pueden deducir los siguientes valores
caracterfsticos del ntimero de Richardson y los flujos asociados.
903) Flujo critico:
Esta condicién de flujo ocurre cuando:
Bote ©
Por lo tanto de la ec(1) el valor eritico del niimero de Richardson, Ric, esta dado por:
1
Ri a
f ”
y se define:
Ri> Ri: Flujo suberttico
Ri< Ri: Flujo supercritico
ii) Flujo normal o en equilibrio:
Esta condicién de flujo ocurre cuando:
a = Ri=Ri,=constante 6)
donde Ri, representa el valor normal del ntimero de Richardson. Reemplazando en
la ec.(2) se obtiene:
)
donde eyn representa el coeficiente de incorporacién asociado con el flujo normal
dado por:
lyn = F(R
= constante (10)
Es importante notar que como fisicamente el ntimero de Richardson es siempre
positivo, de la ec.(9) se concluye que siempre debe satisfacerse la siguiente condici6n:
al
SS>5 526m ay
En estas circunstancias, de la ec.(1) se tiene que la altura normal, /n, de la corriente de
densidad esta dada por:
adh,
a
eon a2
de donde se deduce que fy aumenta linealmente con la distancia x, de acuerdo a la
ecuaci6n:
Fig 8) = Cy OE —H;) ty (13)
donde hy y x; representan condiciones iniciales de integracién.
Imponiendo (8) en (3) se obtiene:
aw,
7 ay
Jo cual indica que en condiciones de flujo normal tanto el nimero de Richardson
como la velocidad media de la corriente son constantes. Es importante destacar que
si bien la velocidad de la cortiente de densidad es constante en esta situacién, la
altura de ésta no lo es. Por el contrario, la altura aumenta en el sentido del
escurrimiento. Esto se explica debido.a la incorporacién de agua hacia la corriente
desde 1a capa superior. En efecto, la ec.(12) indica que la tasa de crecimiento de hy es
precisamente ey.
Por tiltimo, la ec.(4) permite deducir que:
as
y usando la ec.(13) se concluye que la diferencia de densidad media asociada con el
escurrimiento normal decrece como I/x, lo cual indica que la cortiente tiende a
desaparecer, es decir, se disuelve debido a la incorporacién de agua clara desde la
capa superior.
iii) Flujo con altura uniform
Esta condicién de flujo ocurre cuando:
dh
D0 = hah, =constame
Sa 0 = = hy = constant (16)
Reemplazando en la ec.(1) se obtiene el niimero de Richardson asociado a esta
92
|Ri, = Zeno a7
S415
S455) ud
Sin embargo, de la ec.(2) se concluye para la condicién (16) que:
dBi __, 3Ri
Mig, SRI co
7 : as)
Esto indica que el ntimero de Richardson de este flujo no puede permanecer
constante, igual a Riy, a menos que ey» = 0. En otras palabras, la corriente de densidad
de altura uniforme no puede ocurtir, excepto en condiciones donde la incorporacién
de agua desde la capa superior del flujo sea nula, es decir, en flujos sin mezcla,
5.3.3 Anilisis de las Ecuaciones
Con el objetivo de analizar las posibles distintas situaciones que pueden dcurrit en
el flujo de corrientes de densidad, las cuales estén implicitas en las ecuaciones
presentadas en las secciones previas, es conveniente introducir las siguientes
definiciones:
Riy= ep as)
T
S456)
20)
Es importante destacar que tanto Ri) como Riz son funciones del ntimero de
Richardson del flujo. Més atin, de las ecuaciones (9) y (17) se puede demostrar que:
Rii(Ri,) = Rig ay
Riz( Rig) = Rip 22)
Introduciendo las definiciones (21) y (22) en las ecuaciones (1) y (2) se llega a:
L
(SSH ey
S435 60)
-Ri)
a 23)
de Sy (Ri, = Ri) “©
93(Ri, Ri)
(24)
(Ri, = Ri) »
Con el objeto de analizar el signo de los gradientes de hy Ri de las ecuaciones (23) y
(24), es conveniente notar que numéricamente se pueden demostrar las siguientes
relaciones
RICRi, > Ri, Rig > Rig > Ri (5b)
RI Rip> Ri (5c)
Ri>Ri, > Riz by > (25e)
RI> Ri, > Cy < yy sp
Ric Ri, > Rip>Ri (25g)
Ri> Ri, => Ripe Ri (25h)
La clasificacién de los posibles tipos de flujo se hace en base al valor de Ri relativo a
los tres valores caracteristicos del ntimero de Richardson: Ric, Rin, Riy. Se define
| como flujo en pendiente suave la siguiente condicién:
Ri, < Ri, < Ri, 26)
¥ como flujo en pendiente fuerte Ia siguiente condicién:
Ri, < Ri < Rig on
| De acuerdo a lo anterior se tienen 8 casos distintos de curvas de remanso, los que se
resumen en las Tablas 1 y 2, Estos casos se han deducido de acuerdo al signo de los
gradientes de / y Ri en cada caso, los que se indican en dichas tablas con los sinbolos
"+" (que indica que el gradiente es positivo) y "" (que indica que el gradiente es
negativo)..
5.3.4 Resalto Hidréulico Sumergido
Tal como ocurre en la hidréulica de canales abiertos, las corrientes de densidad
pueden experimentar una transicién de régimen supercritico a subcritico a través de
un resalto hidraulico. Observaciones de laboratorio parecen indicar que la ecuacién
de Belanger comtinmente usada para estimar la magnitud de la altura conjugada en
un resalto hidréulico a cielo abierto, también puede utilizarse en el caso de
corrientes de densidad siempre y cuando el ntimero de Froude sea reemplazado por
el ntimero de Froude densimétrico (Garcia, 1993). La ecuacién valida en corrientes
94de densidad puede ser expresada en forma equivalente, en términos del ntimero de
Richardson, como’
ary
Bl iseri
eal t+ Ri
I (28)
donde hy y hz representan los espesores de aguas arriba y de aguas abajo de la
corriente, respectivamente, con respecto del resalto hidraulico sumergido. La
situaci6n se ilustra en la siguiente figura
Ric Rig
Resalto hidréulico Ri > Rig
Flujo supereritico
Flujo suberitico
5.3.5 Referencias
Ellison, T. H., y Turner, J. . (1959), "Turbulent Entrainment in Stratified Flows". J.
of Fluid Mech., Vol 6, pp 423-448,
Garcfa, M. H. (1993). "Hydraulic Jumps in Seciment-Driven Bottom Currents". J. of
Hydraulic Engrg., Vol 119, No 10, pp 1094-1117.
95Tabla 1 Flujo en pendiente suave: Ri, < Ri, < Ri,
Caso ARi/dx | dh/dx Curva de remanso
Ri, 0 wed
<0 v>o
En promedio:
uv<0 = t>0
6.3 Viscosidad de Remolino
Uno de los modelos més simples para los esfuerzos de Reynolds corresponde al
concepto de viscosidad turbulenta 0 de remolino. Esta idea desarrollada por
Boussinesq (1877) consiste en hacer una analogia entre las fluctuaciones turbulentas
del transporte de cantidad de movimiento y el movimiento molecular propuesto
por la teoria cinética de los gases. Basicamente, t se expresa usando un modelo de
gradiente, como se indica a continuacién.
donde #; se denomina viscosidad de remolino.
Alternativamente,
donde ¥, se denomina viscosidad cinematica 0 de remolino, o también difusividad
de remolino,
La derivacion de este modelo puede hacerse siguiendo a Prandtl (1925).
Considerando que en el célculo del promedio i7¥, parte del tiempo v'>0 y parte del
tiempo v’<0, uno puede expresar dicho promedio como la suma de dos términos:
pV =-plu-a)¥, -p w-V_
110donde el subindice (+) indica un promedio sélo durante los intervalos
correspondientes a v'>0, y el subindice (-) indica un promedio s6lo durante los
intervalos correspondientes a v’<0.
Siv’>0, entonces un volumen infinitesimal de fluido se esté desplazando
verticalmente hacia arriba. Se puede suponer que, en promedio, éste tendré una
velocidad horizontal tfpica igual a la del fluido correspondiente al plano en el que
dicho movimiento vertical se origina, por ejemplo a una distancia y-/, donde / es
una longitud caracteristica, usualmente Hamada "longitud de mezcla’,
7h
4H
fy +).
v>0
Suponiendo que:
y por continuidad:
por lo tanto:
WIG +) ~"Q =D)
1Ahora, desarrollando las funciones en series de Taylor:
x wit
sty Ht
io +=toy+S
se llega a:
de modo que:
y como se defini
se concluye que la viscosidad de remolino esta dada por:
Br =pWil
y por lo tanto la difusividad de remolino est dada por:
vp MET AL
donde (v)"? representa la desviacién esténdar de las fluctuaciones de la
componente vertical de la velocidad.
Definiendo:
vaOPP 5 wa @l? swat?
entonces la difusividad de remolino puede expresarse como:
vpevl
112Si bien es posible medir v’, el valor de la longitud de mezcla, 1, es desconocido, lo
cual dificulta la estimacién de vr.
64 Teoria de la Longitud de Mezcla de Prandtl (1925)
Usualmente, u(t) y v'(t) son aproximadamente de igual magnitud y estén
correlacionados negativamente, por lo tanto:
wav =
con lo cual:
tye di da
Fayre ya
Pp dy dy
entonces la difusividad de remolino queda dada por:
y finalmente:
Es importante notar que la ecuacién anterior no es valida cuando:
i
o
Jo que ocurre por ejemplo en la linea del centro de flujos en conductos cerrados. No
obstante, dicho problema no se presenta, en general, en flujo en canales ni en capas
limites sobre placas planas.
El modelo de longitud de mezcla de Prandtl ha sido utilizado extensivamente en el
pasado, al menos en el caso de flujos relativamente simples, ya que la longitud de
mezela, |, puede ser especificada mediante el uso de formulas empiricas sencillas,
Por ejemplo, se puede demostrar usando argumentos basados en anilisis
dimensional, que en las cercanfas de una pared (por ejemplo el fondo de un canal) la
longitud de mezcla es proporcional a la distancia desde la pared, y, tal que:
leKy
donde x se denomina la constante de von Karman,
118Es posible argumentar que en las cercanfas de la pared existe una capa donde el
esfuerzo de corte se puede considerar constante, con un valor aproximadamente
igual al valor del esfuerzo de corte de la pared, %. Definiendo us, la velocidad de
corte del flujo, como:
weet
_
y reemplazando en la expresién de Prandtl para el esfuerzo de corte, 7, se tiene que
fen las cercanfas de la pared:
Febewer ya
PP ay
con Io cual se llega a:
di_w
dy Ky
e integrando:
i= Siny+e
ecuacién que corresponde a la conocida ley logaritmica de distribucién de
velocidades en la direccién vertical
En la zona adyacente a la pared, donde los efectos viscosos juegan un papel més
importante, la relacién lineal para la longitud de mezcla debe ser modificada,
aplicéndose una funcién de amortiguamiento dada por:
exp) =
[=n y(-exp-7) 5 A=26
donde v representa la viscosidad cinematica del fluido (van Driest, 1956).
En flujos turbulentos completamente desarrollados en conductos cerrados (de
seccién circular o rectangular), la longitud de mezcla puede ser estimada con la
formula de Nikuradse
Ll
=0.14-0.08 (1
donde R denota el radio hidréulico,
1146.5 Escalas Caracteristicas del Movimiento en Flujos Turbulentos
En flujos turbulentos existe un amplio rango de escalas de longitud. Las escalas
mayores son determinadas por las dimensiones del campo de flujo (por ejemplo la
altura de escurrimiento en un flujo en canales abiertos, 0 el diémetro de la tuberia
en un flujo en conductos cerrados), en tanto que las escalas mas pequeitas son
determinadas por la difusién molecular.
‘Cémo se estiman las escalas de longitud caracteristicas més pequefias en un flujo
turbulento? Para contestar esta pregunta es necesario analizar el balance de
produccién y disipacién de energia cinética turbulenta.
Basicamente, la energfa turbulenta es obtenida del flujo medio, a través de la accién
de los vértices de mayor tamafo presentes en el flujo. Esta energia es
eventualmente disipada, en forma de calor, a través de la accién de la viscosidad.
Sin embargo, como la disipaci6n viscosa esté asociada con procesos moleculares, ésta
puede ser efectiva sélo en una escala de tamaftos de pequefa magnitud. Debido a
ello, la disipacién de la energ{a turbulenta esta asociada con los vértices de menor
tamatio presentes en el flujo.
El proceso a través del cual Ia energia contenida en los grandes vértices del flujo es
transferida a los vértices mas pequefios se denomina "cascada". De acuerdo a este
proceso, la energfa turbulenta es transferida hacia escalas inferiores a través de la
generacién de vértices de tamafios intermedios, los que a su vez generan vortices
més pequefos, hasta que finalmente se alcanza la escala de tamafios correspondiente
a aquélla escala donde los efectos viscosos son predominantes (y donde ocurre la
disipacién de la energia turbulenta).
Es importante notar que la tasa a la que la energia turbulenta es disipada por la
viscosidad, es dictada por la tasa de produccién de dicha energia desde el flujo
medio, y no por la viscosidad misma, EI mecanismo a través del cual la energia se
transfiere entre las distintas escalas corresponde al “estiramiento" 0 trabajo de
deformacién de los vértices ejercido por los esfuerzos de corte del flujo.
La teoria de la turbulencia homogénea e isotrépica indica que los vortices de
Pequefias escalas estan localmente en equilibrio, es decir, la tasa de disipacién es
igual a la tasa a la cual la energia turbulenta es transferida desde las escalas mas
grandes. En capas limites turbulentas, donde el flujo no es homogéneo, produccién
y disipacién no estén necesariamente en equilibrio local. Sin embargo, se puede
postular que en este tipo de flujos las escalas mas pequefas son aproximadamente
isotrépicas, lo que indicaria que al menos dichas escalas si estarfan en un pseudo-
equilibrio local, Un andlisis del balance de energia cinética turbulenta en flujos en
conductos (abiertos o cerrados) indica que, efectivamente, en las cercanias de la pared
(donde ocurren los vértices de menor tamafio) produccién y disipacién son,
localmente, aproximadamente iguales.
115En dichos flujos, en la zona cercana a la pared denominada “capa de la pared’, es
donde ocurre la mayor parte de la produccién de energia turbulenta, y como ya se
indicd, también la disipacién de dicha energia, equilibrando la produccién. El rol de
la zona externa a la capa de la pared (llamada también nucleo del flujo),
caracterizada por la presencia de los vértices de mayor tamao, no es el de producir
turbulencia sino de transportar la energia del flujo medio hacia la capa de la pared,
donde dicha energia es transformada en energia turbulenta a través del trabajo de
deformacién de los vértices por parte de los esfuerzos de corte. Mediante el proceso
de cascada, la produccién de energfa es transferida hacia los vértices de pequefia
escala donde es disipada por los efectos viscosos.
En capas limites turbulentas asociadas con el flujo en conductos abiertos 0 cerrados,
asi como también en chorros y estelas, la produccién de energia cinética turbulenta
se puede estimar como:
a ot
pais
Ya se ha indicado que, en general, los esfuerzos de Reynolds pueden estimarse
como:
~ Te au?
donde u' representa una medida de la desviacién esténdar de las fluctuaciones de
velocidad.
Por otro lado en flujos en las cercanias de una pared, donde la ley logaritmica de
velocidades es valida, se tiene que:
Git te
ayy
con lo cual se puede estimar que una medida de la produccién de energ(a cinética
turbulenta esta dada por
ya que, tfpicamente, w' es de una magnitud similar ala de us. Por dltimo,
Suponiendo que la distancia y corresponde a una dimension caracterfstica del flujo,
L, asociada con los vortices de mayor tamafo, entonces una medida de P puede ser
estimada como:3
pole
L
‘Suponiendo equilibrio local en las escalas més pequefas, la produccién, P, es igual a
la disipacién, ¢, resultando en:
Por otro lado, en capas limites turbulentas asociadas con el flujo en conductos
abiertos o cerrados, la disipaci6n esta dada por el término:
Llamando vy 7a las escalas de velocidad y longitud, respectivamente, asociadas a
los vértices de menor tamafto presentes en el flujo, entonces el orden de magnitud
de la disipacién puede ser estimado también como:
Ahora, con el objeto de estimar la magnitud de vy m es conveniente considerar el
anélisis de Kolmogorov. Suponiendo que los vértices de menor tamaiio estén en
equilibrio, entonces sus escalas caracteristicas dependen solo de la viscosidad
cinematica del fluido, v, la que controla la tasa de disipacién, y de la tasa de
transferencia de energia turbulenta en el proceso de cascada, P=e. Usando v(m2is), €
(n?is3), y anélisis dimensional puede obtenerse
las cuales se denominan escalas de longitud y velocidad, respectivamente, de
Kolmogorov.
Comparando 1 con L, se tiene que si Pe, de modo que:
ys
entonces:donde Ry representa un mimero de Reynolds definido como:
aL
7
R
Andlogamente, es facil obtener la siguiente relacién:
vip
Popp
R
la que permite comparar las escalas de velocidad de Kolmogorov y aquélla asociada
con la produccién de energia cinética turbulenta. Claramenie, las escalas de
Kolmogorov se hacen més y mas pequefias a medida que el némero de Reynolds del
flujo aumenta.
Es interesante notar que el mimero de Reynolds, Rx, asociado con las escalas de
Kolmogorov, vy 7, es efectivamente pequeto
Rea 24a
Jo cual indica que a dichas escalas los efectos viscosos son importantes, tal como se
ha discutido anteriormente.
A partir de las escalas de Kolmogorov de velocidad y longitud, es posible definir la
escala de tiempo de Kolmogorov como:
Yue
4
a que puede interpretarse como una medida del periodo de rotacién de los vortices
mAs pequefos presentes en el flujo. En la naturaleza, observaciones de la tasa de
disipacién indican que la misma toma valores entre 10°6 y 10°1 cm?/s3. Para dicho
rango, la figura de la pagina siguiente muestra los valores correspondientes de las
escalas de tiempo y de longitud de Kolmogorov, ambos estimados con una
viscosidad cinematica de 10-2 em?/s.
Bs importante destacar que, a pesar de su pequefia magnitud, la escala de longitud de
Kolmogorov es, en general, mucho mayor que la escala de longitud molecular, lo
que como ya se ha indicado, demuestra que los flujos turbulentos pueden ser
considerados como continuos.
11810!
Toa)
10% 10° wot 3° 10 107
een? /seg°
Otra escala caracteristica de la turbulencia asociada con el movimiento de pequefia
escala es la llamada microescala de Taylor, A. Esta escala se puede estimar a partir de
la siguiente relacién vélida para turbulencia isotrépica:
de donde se puede deducir la siguiente relacién, valida también para turbulencia
isotr6pica
emis vy
z
De acuerdo a estas relaciones, la microescala de Taylor se relaciona con la varianza
de Ia aceleracién de las fluctuaciones de velocidad turbulenta.
En términos mas generales, una medida de la disipacién, ¢, a partir de la microescala
de Taylor se puede estimar como:
Comparando la microescala de Taylor, 4, con la escala de Kolmogorov, 1, y la
macroescala L, se tiene:
119por lo tanto:
aa
a
L
por otro lado, como ya se probs que:
a
L
entonces se tiene que:
Se concluye asf que, para altos niimeros de Reynolds, la macroescala de la
turbulencia es mucho mayor que la microescala de Taylor, y ésta a su vez es mucho
mayor que la escala de Kolmogorov: L >> 2>> 1
Ejemplo : Turbulencia en un floculador.
Es conveniente considerar un ejemplo para aclarar algunos de los conceptos
presentados anteriormente. Para el tratamiento de agua es muy comin el uso de
Teactores, en los cuales se inyecta coagulante con el objetivo de promover la
aglomeracién de pequefas particulas que se encuentran en suspensién y, de esta
forma, facilitar la decantacién de las mismas. La intensidad de la turbulencia en el
reactor es el factor determinante en cuanto a la efectividad del mismo. El principal
objetivo es lograr la mezcla del coagulante con el agua en el reactor en la forma mas
eficiente, sin destruir los fléculos.
Consideremos un reactor de forma cilfndrica, con un diémetro de 1m y una altura
de 2m. Se emplearén paletas con un diametro de 25 cm para crear turbulencia en el
reactor y promover el mezclado. Supongamos que se desea estimar la potencia que
se necesita transmitir al fluido por medio de las paletas, con el fin de lograr un flujo
turbulento con fluctuaciones de velocidad u’= Vw" del orden de 0.1 m/s asociadas
con los remolinos mas grandes (escalas mayores) en el reactor.
El volumen de agua en el reactor-es:
120La masa de agua es:
pv = 10008 1 57m! = 1.57x10°Kg
La dimensién de las escalas (remolinos) mayores en el flujo puede ser estimada
como:
Le 16 m
Para el caso de fluctuaciones de velocidad w'= 0.1 m/s, Ia disipacién por unidad de
masa y unidad de tiempo se puede estimar de la siguiente forma:
3 _ (1 mish
=0.86 x10" m/s?
LT L16m “all
La disipacién total por unidad de tiempo es entonces
pVex = 0.86107 m? /s* x 15710 kg = 135 W
Si el flujo turbulento esta en equilibrio, la potencia P; suministrada al agua a través
de las paletas debe ser igual a la disipacién por unidad de tiempo
Po = per = 1.35 W
Dado que el tamafo de los agregados o fléculos en el reactor depende, en gran
medida, de las escalas mas pequefias, seria interesante determinar cual es la potencia
necesaria para mantener el mismo nivel de fluctuaciones pero para escalas de
longitud del orden de r=0.05m.
La tasa de disipacién se puede estimar ahora como:
eon
r
Dado que el nivel de fluctuaciones es el mismo, se puede demostrar que:
ee
Por lo tanto, la potencia P, requerida es:
P= pe, =1.35 Ww HO"
1.33 W
0.05 m
12valor que es 23 veces el estimado para las escalas mayores (L = 1.16 m.).
Las escalas de longitud de Kolmogorov n son:
se
m (E)
a
y
ay
v
Ne =|—
(=)
Tomando la raz6n etre ambas escalas:
ee 8
Thy €L r 0.05 my
mm .(8)"-(ry" = = 0.456
nh () () (ren
Si consideramos una temperatura de 20°C, v=0.01 cemt2js, entonces:
1m, = 0.185 om
y
1, = 0.456 x 0.185 cm = 0.08 cm = 0.8 mon
Es interesante notar que para reducir el tamafto de los remolinos de Kolmogorov en
un 50%, es necesario incrementar la potencia suministrada al fluido mas de 20
veces.
6.6 Derivaci6n de la Ecuacién para la Energia Cinética Turbulenta
EI valor medio temporal (promediado sobre Ja turbulencia aplicando el
procedimiento usado en la derivacién de las ecuaciones de Reynolds) de la energia
‘inética turbulenta por unidad de masa, K, se define como:
L opto
Kel aa
36 )
‘0, mas concisamente, usando notacién tensorial:
122El objetivo de la presente seccién es derivar una ecuacién que gobierne la variacién
espacial y temporal de K. Es de hacer notar que esta ecuacién se puede obtener
simplemente manipulando la ecuaci6n de Navier-Stokes. En efecto, multiplicando
dicha ecuacién (expresada en variables instantaneas) en la direccién x; por la
fluctuacién de la velocidad en la direccién x; w', se obtiene:
(DAUD 5 eg yy ATAU), LOD+ DY, PT +us)
(yO (ED 5 yo
Efectuando un promedio temporal de la ecuacién anterior, empleando el mismo
procedimiento utilizado para obtener la ecuacién promediada de Reynolds, se tiene
para el miembro izquierdo de la ecuacién resultante:
7 i oo oh a,
Lieu; Misi su, Mw,
Cy es
© reescribiendo la ecuaci6n anterior:
1 dw eon, 1, Oia
Lite LE rag Se 4 big Sy Lye, i
a I oe 2 Oey
Usando la definicién de K:
tote sm Se oi a 1
Por otro lado, aplicando el mismo procedimiento para el miembro derecho se
obtiene:
LD. oe a sen
Por lo tanto, la ecuaci6n resultante para K es:
aK a OM,
Kg es Bev, oe
donde X’ representa el valor instanténeo de la energfa cinética turbulenta.
Introduciendo la ecuacién de continuidad para las fluctuaciones dada por:
os
as
123La ecuacién para K se puede reescribir como:
He A 1 TB IE agg, Fs vu
a Mae pax ay Ox; | ORR,
aa
En la ecuacién anterior, el lado izquierdo representa el cambio total de K, el cual
consiste en dos términos: una derivada local con respecto al tiempo y el transporte
SCnvectivo asociado al flujo medio. Los dos primeros términos del lado derecho
fepresentan la difusién turbulenta de energia, donde el primero corresponde al
aumento local en la energia turbulenta causada por el trabajo realizado por las
fluctuaciones de presién, y el segundo corresponde al aumento local en la energia
turbulenta debido a las fluctuaciones de velocidad. Es relativamente facil ver que
estos términos corresponden efectivamente a un proceso de difusién si se los integra
en el campo de flujo. En efecto, la resultante de estas integrales es nula, lo que
indica que dichos términos no representan ni un aumento ni una disminuci6n neta
de la energia del flujo sino una redistribucién de ésta. El tercer término del lado
derecho corresponde a la produccién de energfa cinética turbulenta que resulta de la
interaccién no lineal entre los esfuerzos de Reynolds y el gradiente local de la
velocidad media del flujo. Finalmente, el cuarto término corresponde a la
disipacidn de energfa turbulenta, en forma de calor, debido a efectos viscosos. Como
ya se ha indicado, la conversién de enezgia turbulenta en calor ocurre gracias al
proceso de cascada, donde la energia contenida en los vértices de mayor tamafio es
Fransferida hacia los vértices de menor tamafio, hasta llegar a la escala de
Kolmogorov, donde dicha energfa es disipada a través de la accién molecular
relacionada con la viscosidad del fluido.
En capas limites turbulentas asociadas con el flujo en conductos abiertos 0 cerrados,
Ja ecuacién para K puede simplificarse como:
donde ¢ denota la disipacién.
Tal como ocurre con los esfuerzos de Reynolds en las ecuaciones de cantidad de
movimiento, el procedimiento de promediacién empleado en la derivacién de la
ecuaci6n para la energia cinética turbulenta introduce ciertos términos que
constituyeh incégnitas adicionales en el problema. Andlogamente al caso de los
esfuerzos de Reynolds, el tratamiento matemético de la ecuacién para K es factible
‘solo si los términos correspondientes a la difusion, producci6n y disipacién de la
energfa turbulenta son modelados. Algunos aspectos de esta modelacién se discuten
en el préximo capitulo.
124
|
|6.7 Referencias
Prandtl, L. (1925). "Uber die Ausgebildete Turbulenz". ZAMM 5, pp 136-139,
Tennekes H., y Lumley, J. L. (1972). “A First Course in Turbulence". The MIT Press,
Cambridge, Massachusetts.
van Driest, E. R, (1956). "On Turbulent Flow near a Wall". J. of Atmos. Science 23,
pp 1007-1011.
1257.» MODELACION NUMERICA DE FLUJOS TURBULENTOS,7. MODELACION NUMERICA DE FLUJOS TURBULENTOS
El problema del célculo de flujos turbulentos puede ser considerado como parte de
un problema més general que involucra el campo de la dinamica de fluidos
computacional. Dicho campo incluye la representacién numérica y el célculo del
sistema de ecuaciones diferenciales en derivadas parciales que gobiernan el
movimiento de fluidos reales.
Por lo tanto, el problema puede subdividirse en dos éreas: el desarrollo de métodos
numéricos y la creacién de algoritmos para poder implementar estos métodos.
Obviamente el progreso alcanzado actualmente en las diversas técnicas ha seguido
un camino paralelo al del desarrollo de las capacidades computacionales de las
iiltimas décadas.
Desde un punto de vista conceptual los métodos desarrollados pueden subdividirse
en dos:
(a) aquéllos basados en la resolucién numérica de las ecuaciones (no promediadas)
de Navier-Stokes;
(b) aquélllos otros métodos basados en la resolucién numérica de las ecuaciones
promediadas sobre la turbulencia.
En estos iiltimos métodos el principal problema consiste en cerrar las ecuaciones
promediadas, 0 sea determinar o especificar el tensor de esfuerzos de Reynolds
(recuérdese que basicamente el problema del cierre consiste en que se poseen mayor
ntimero de incdgnitas que de ecuaciones). Por el contrario, los primeros resuelven
las ecuaciones que gobiernan el problema sin introducir ningun promedio sobre la
turbulencia, y por lo tanto el sistema de ecuaciones queda determinado al poseer
igual niimero de ecuaciones que de incégnitas. Obviamente cada uno posee sus
propias ventajas y desventajas relativas, y s6lo la consideracién de un problema
concreto puede determinar la adopcién de uno u otro método. Por otro lado, es de
esperar que el tamafio de los dominios de computacién asociados con problemas de
hidraulica ambiental, limite severamente la aplicacién de soluciones directas de las
ecuaciones de movimiento a problemas de ingenieria, al menos en el futuro
inmediato.
7.1 Simulacién Numérica Directa (DNS)
Tal como se mencioné previamente, la simulacién numérica directa implica la
resolucién (por métodos numéricos) de la ecuaciones de Navier-Stokes. Esto
conduce a una solucién dependiente del tiempo en el sentido de que para flujos
turbulentos (atin estacionarios) el campo de velocidades y presiones es variable con
el tiempo localmente, atin cuando los estadisticos que describen este campo sean
estacionarios. Las aplicaciones resultan por lo tanto inmediiatas ya que las sohciones
129pueden ser empleadas para el estudio de Ia estructura de la turbulencia, y atin en
Fiertos casos como una fuente adicional de datos “experimentales"
La simulacién numérica directa cuenta actualmente con un restringido campo de
aplicaciOn, debido principalmente a limitaciones de indole computacional, Fs
Sencillo demostrar que para una grilla computacional uniforme el numero total de
puntos (N) resulta proporcional al cubo de la raz6n Ln, 0 sea a la potencia 9/4 del
niimero de Reynolds (Re):
N=KRe™ w
‘A modo de ejemplo basta mencionar que para simular numéricamente los
experimentos pioneros de Laufer (1951) con un rtimero de Reynolds de 12300, 30800
y 61600, harian falta 6.7x108, 4x107 y 1.5x108 puntos respectivamente. Puede
Yemostrarse asimismo que el paso de tiempo debe ser del mismo orden que la escala
de Kolmogorov, y por lo tanto para la simulacién numérica de los tres experimentos
‘anteriores se requeririan 32000, 47000 y 63000 pasos de tiempo respectivamente, En el
ako 1980, Kim et al. calcularon un flujo de Re = 6000 con 4x10° puntos de grilla y
requirieron el uso de 250 horas de CPU (més de diez dias) empleando una
supercomputadora CRAY X/MP.
Estas, y otras complicaciones asociadas con la implementacién numérica de los
algoritmos, forman parte de las mayores desventajas de la simulaciOn numérica
divecta de flujos turbulentos con las disponibilidades computacionales actuales.
7.2 Simulacién de Grandes Vértices (LES)
La idea basica de LES consiste en asumir que ciertas escalas de la turbulencia (las
mayores o de menor niimero de onda) se encuentran directamente afectadas por las
Condiciones de contorno, mientras que otras (las menores 0 de mayor nimero de
onda) presentan caracteristicas (cuasi) universales e isotrépicas, Por lo tanto,
nicamente las mayores escalas son calculadas numéricamente (escalas resueltas),
mientras que las menores escalas son modelads. EI problema puede ser concebico
Como el reemplazo del sistema original por otro con mayor viscosidad efectiva, que
absorbe o disipa la energia no resuelta por el modelo numérico. Existen por lo tanto
diversas propuestas relativas respecto de la forma a adoptar para la modelacién de
Gsta viscosidad efectiva, siendo la més divulgada la de Smagorinsky (1963). Este
investigador calculé Ia circulacién general de la atmésfera en una grilla en
diferencias finitas y represento el flujo de energia a escalas menores que las resueltas
en la grilla empleando un modelo basado en la viscosidad efectiva de Heisenberg.
En el plano hist6rico, la primera aplicacién de estas ideas al campo de Ia ingenieria
es debida a Deardorif (1970) para el caso de un flujo de Poiseuille. Deardorff empleo
tinicamente 6720 puntos para simular numéricamente los experimentos de Laufer
130(1954), obteniendo un sorprendente grado de coincidencia con resultados
experimentales.
7.3 Métodos Basados en las Ecuaciones Promediadas de Reynolds
Desde un punto de vista hist6rico, el origen de estos métodos se remonta a los fines
del siglo pasado, cuando Reynolds publicé sus resultados de investigaci6n en flujos
turbulentos. Asimismo, entre los primeros intentos de una descripcién matemética
de los esfuerzos turbulentos (actualmente denominados esfuerzos de Reynolds) se
encuentra el concepto de viscosidad de remolino o turbulenta, introducido por
Boussinesq (1877). Este concepto se basa en la hipétesis de que, en analogia con los
esfuerzos laminares, el tensor de esfuerzos turbulentos es proporcional a los
gradientes de velocidad media. En el caso més general puede entonces escribirse:
oun au) 2
ot 26, 2)
uj (2-2) 55 @
Donde v; representa la viscosidad cinematica turbulenta, la cual, a diferencia de la
viscosidad cinemética molecular, no representa una propiedad del fluido sino del
flujo. Por lo tanto v; puede variar no s6lo de un punto a otro en el campo del flujo,
sino también obviamente de un flujo a otro
Sin embargo ni Reynolds ni Boussinesq intentaron resolver las ecuaciones
promediadas de Navier-Stokes, y no fue si no hasta principios de este siglo cuando
Prandtl (1904) introdujo el concepto de capa limite que la fisica de flujos viscosos
comenzé a ser entendida en su esencia. A partir de alli diferentes formulaciones han
sido propuestas para la modelacién de los esfuerzos de Reynolds, y por lo tanto para
cerrar el problema de la turbulencia. Las propuestas pueden ser clasificadas de
acuerdo a las siguientes categorias:
(a) Modelos algebraicos (o de cero ecuaciones)
(b) Modelos de una ecuacién
(©) Modelos de dos ecuaciones
(d) Modelos de orden superior.
7.3.1 Modelos Algebraicos
Tal como se mencioné previamente, el concepto de viscosidad turbulenta fue
concebido en analogia con la teoria del movimiento molecular que deriva en la
conocida ley de viscosidad de Stokes en flujo laminar. Seguin esta hipétesis, los
vortices turbulentos son concebidos como entes de fluido que colisionan e
131intercambian cantidad de movimento (como las moléculas). Por lo tanto, de la
misma manera que la viscosidad molecular resulta proporcional a 1a velocidad
media y al camino de mezcla promedio de las moléculas, la viscosidad turbulenta se
considera proporcional a la velocidad caracterfstica del las fluctuaciones turbulentas
y a una longitud t{pica del movimiento turbulento (que Prandt! denominé longitud
‘de mezcla). Muchas objeciones a esta analogia han surgido desde su formulas
(algunas son mencionadas mas adelante), pero sin embargo desde el punto de vista
prictico los resultados alcanzados en la gran mayoria de los estudios son lo
Suficientemente buenos como para justificar su aplicacién a problemas ingenieriles,
En sintesis, el concepto bésico consiste en representar la viscosidad turbulenta en
forma proporcional al producto de una velocidad por una longitud caracteristica:
ae @
Similarmente, en analogia directa con el transporte turbulento de cantidad de
movimiento, el transporte turbulento de calor o masa (transporte turbulento de
propiedades escalares) se asume proporcional al gradiente de la especie transportada:
29
ag =r Zh ®
eos:
donde representa la difusividad turbulenta. [no representa ninguna propiedad
Gel fluido, sino que depende de las propiedades turbulentas del flujo en particular,
La analogia de Reynolds entre tranporte de calor y masa con el tranporte de cantidad
de movimiento sugiere que I” se encuentra intimamente relacionada con ve
att ©)
donde o; se denomina usualmente niimero de Prandtl (para transporte de calor) 0
de Schmidt (para transporte de masa).
La principal diferencia entre los modelos de diferente ntimero de ecuaciones, radica
en el empleo 0 no de ecuaciones de transporte para caracterizar las variables V y L
necesarias para determinar la viscosidad turbulenta. Es asf que los modelos
algebraicos (0 de cero ecuaciones) no hacen uso de ecuaciones de transporte para
definir la velocidad y longitudes caracteristicas, sino que especifican la viscosidad
turbulenta directamente de manera empirica, 0 mediante procedimientos de prueba
y error, 0 a través de formulaciones empiricas, 0 relacionéndola a la distribucién de
Yelocidades medias. Estos modelos pueden a su vez ser subclasificados en:
(a.1) Viscosidad turbulenta constante
(a.2) Modelos de longitud de mezcla
(a.3) Modelo de Prandtl para flujos no confinados
132De todos ellos el més divulgado es el de longitud de mezcla, que constituye
histéricamente a su vez el primer modelo sugerido para describir la distribucién de
viscosidad turbulenta (Prandtl, 1925). Considerando el caso de capas limites con s6lo
un esfuerzo de Reynolds significativo (iv) Prandtl postulé que ¥ es igual al
producto de una cierta longitud de mezcla por el gradiente de velocidades medias
(Schlichting, 1979)
5 = al
= ta )
tay
Asumiendo a su vez L = In, la viscosidad turbulenta resulta entonces:
”
Esta es la denominada hipétesis de mezcla de Prandtl, la cual ha sido y es empleada
satisfactoriamente en un sinntimero de problemas précticos. El problema se traslada
entonces a la especificacién de Im en cada caso particular. Por ejemplo, en flujos no
confinados (estelas, chorros, etc.), Im puede asumirse constante y proporcional al
espesor local &. El factor de proporcionalidad, o sea la constante empirica en este tipo
de modelo, depende sin embargo del tipo de flujo en particular.
En capas limites, en la zona cercana a la pared |,, usualmente se modela como
proporcional a la distancia a la pared, ,, = xy siendo xa constante de von Karman.
La hipétesis de longitud de mezcla en la forma presentada hasta el momento se
aplica tnicamente a flujos en capa limite bidimensionales (incluyendo flujos
asimétricos). Para flujos generales las hip6tesis anteriores pueden escribirse como:
a
1A, am
nag” das Jax;
En la practica, sin embargo, muy limitado uso se ha encontrado para expresiones
generales, debido principalmente a las dificultades vinculadas con la especificacién
de iy
En el caso de aplicaciones a problemas de transferencia de calor y/o masa la hipétesis
de longitud de mezcla requiere la determinacién del ntimero de Prandtl y/o
Schmidt. los cuales usualmente adoptan valores cercanos a 0.5 en chorros planos y
capas de mezclado, 0.7 en chorros circulares y 0.9 en flujos cercanos a la pared,
1337.3.2 Modelos de Una Ecuacién
Como se mencioné anteriormente, modelos que resuelven ecuaciones diferenciales
de transporte han sido desarrollados para superar las limitaciones de los modelos
algebraicos. Los modelos de una ecuacién proveen un vinculo directo entre Ia escala
de fluctuaciones de velocidad (velocidad caracteristica ¥) y los gradientes de
velocidad promedio, mediante la resolucién de ecuaciones diferenciales de
transporte
Los modelos més comunes son aquéllos basados en el concepto de viscosidad
turbulenta, y por lo tanto seran los que desarrollaremos aquf. La manera natural de
caracterizar una escala de fluctuaciones de velocidad es hacerla proporcional a Ja rafz.
pHi). Dado
que la mayor cantidad de energia cinética turbulenta se encuentra contenida en las
grandes escalas (pequenos niimeros de onda), Yi es una escala de velocidad para los
grandes vortices de escala L. Por lo arriba mencionado, la viscosidad turbulenta
resulta’
cuadrada de la energia cinética turbulenta por unidad de masa (K =
%
NRL ©
donde c’, es una constante empfrica. Esta expresién es conocida como la formula de
Kolmogorov-Prandtl, ya que ambos la propusieron de manera independiente.
Igualmente, ambos sugirieron la determinacién de K mediante la resolucién de una
ecuacién diferencial de transporte para la energia cinética turbulenta, la cual puede
ser derivada de manera exacta a partir de las ecuaciones de Navier-Stokes, tal como
‘quedé demostrado en el capitulo 6:
OK 7 OK 1, © Pi,
at ¥, wi Sota iat (10)
Sin embargo, la forma exacta de esta ecuacién resulta de poco interés prictico ya que
nuevas incégnitas aparecen en los términos de difusién y disipacién. De manera de
cerrar el problema, deben entonces asumirse modelos para los mencionados
términos. Haciendo uso nuevamente de la hipétesis de gradientes, el flujo difusivo
de K se asume usualmente proporcional al gradiente de K, o sea:
yore 2p cls
2 PP) OK ax
donde o, es un coeficiente empitico de difusién.
modela como:
134se
ot (az)
donde Cp representa otra constante empirica, (Nétese que aunque la disipacién tiene
lugar en las pequefas escalas de la turbuencia, la tasa de disipacién se encuentra
determinada por las grandes escalas). Adoptando las hipétesis anteriores y el
concepto de viscosidad turbulenta para modelar los esfuerzos de Reynolds, la
ecuacién de transporte de K se convierte en:
¥
Bo
oa;
(a3)
x aK. 2(2H),fB 2) +s
at Ox” Bu oK ax; ax)” dx: Jxy
Como puede observarse, en la ecuacin anterior se ha incluido el termino boyante
Bait & que corresponde a la modelacién del flujo difusivo 7p" asumiendo que
7 Ox)
es proporcional al gradiente de @. La variable es la que produce Ia diferencia de
densidad (por ejemplo temperatura, salinidad, concentracion de sedimentos en
suspensi6n) y fi es una constante de transformacién que relacionag con variaciones
en la densidad
Merece remarcarse que la anterior expresién es vélida Gnicamente para elevados
ntimeros de Reynolds, no pudiendo aplicarse por lo tanto en la subcapa viscosa
cercana a la pared. Para bajos mimeros de Reynolds un término de difusién
molecular debe incluirse en la anterior expresin, con constantes que resultan ser
st
v
funcién del niimero de Reynolds, el cual es definido como R,,
Como caso particular resulta interesante la aplicacién de la anterior ecuacién
diferencial de transporte a regiones donde K sea invariante en el tiempo, y tanto los
términos convectivos como de difusién sean despreciables. En estas circunstancias la
turbulencia se encuentra en un estado de equilibrio local, donde, en ausencia de
términos boyantes, para capas limites se obtiene un balance entre produccién y
disipacién de energia turbulenta:
(a)
y reemplazando esta igualdad cn la expresién de Kolmogorov-Prandt! se obtiene
finalmente:
a
ay}
oe
195que no es otra cosa que la expresin de Ja longitud de mezcla introducida
anteriormente, donde:
(16)
De esta manera queda de manifiesto una de las limitaciones del concepto de
longitud de mezcla: que la hipétesis es tinicamente aplicable a turbulencia en estado
de equilibrio local.
De las expresiones anteriores resulta evidente que para completar la modelacién se
requiere la especificacién de la longitud caracteristica L. Es precisamente la
determinacién de Llo que distingue a los diferentes modelos de una ecuacién.
Desafortunadamente L resulta tan dificil de determinar como lo es Ip,, En el presente
curso nos limitaremos a mostrar més adelante, mediante un ejemplo de aplicacién
particular, una de las formas de especificar L. El lector interesado en mayores detalles
puede encontrarlos en la excelente monografia de Rodi (1984).
7.3.3 Modelos de Dos Ecuaciones
En este tipo de modelos se busca la determinacién de la longitud caracteristica de las
grandes escalas turbulentas, L, a partir de la resolucién de una ecuaci6n diferencial
adicional de transporte. La idea general se basa en suponer que el tamafo de los
vortices turbulentos depende de sus dimensiones iniciales al ser conveccionados por
el flujo, de la disipacién turbulenta (la cual al destruir los vértices pequefios
aumenta el tamafio efectivo de las grandes escalas), de los procesos relacionados con
la cascada energética, etc. Por lo tanto, el balance de estos procesos puede ser
modelado a través de una ecuacién diferencial para L. De esta manera se dispone de
dos ecuaciones de transporte, lo que da el nombre a este tipo de modelos.
Como cuestién anecdética cabe mencionar que en realidad la mayoria de los
modelos existentes no resuelven ecuaciones de transporte para L. La especificacion
de una variable del tipo Z = KL" cumple la misma funcién, ya que K es conocida
como solucién de la modelaci6n de la ecuacién de transporte de la energia cinética
De esta manera diferentes modelos de dos ecuaciones K-Z existen en la literatura,
siendo los mas conocidos:
Modelo K-€: Aqu{ 1 = 3/2 y m =-1, resultando Z proporcional a la disipacién e de
energia turbulenta. Este modelo es el més popular, y por lo tanto el que ha sido
aplicado a mayor variedad de problemas ingenieriles.
Modelo K-@ : En este modelo = 1/2 y m=-1, y por lo tanto Z representa la variable
referida originalmente por Kolmogorov como @, entendiendo por ello Ia tasa de
136disipacién de energia por unidad de voltimen y tiempo. Fisicamente @ representa
cierta frecuencia media caracteristica de las grandes escalas de la turbulencia
Modelo K-KL: Obviamente en este modelo n=1 ym = 1
Modelo K-z En este modelo n = -1/2 y m =-1, donde t= K/e.
Para todos los modelos arriba mencionados, los resultados generales son similares,
existiendo por lo tanto una ecuacién comin de transporte para la variable Z que
puede expresarse como:
Ox Oxi oe
a FEE vndrcaethes a7
donde 02, csr y ¢:2 Fepresentan constantes empiricas, P es la produccion de energia
cinética turbulenta y S representa un término fuente secundario que difiere segiin la
eleccion de la variable Z de modelo en modelo.
Por ser el mas popular desarrollaremos a continuacién en mayor detalle el modelo
Ke
Modelo K-e
Sintetizando, este modelo se basa en la resolucién numérica de dos ecuaciones
diferenciales de transporte, una para la energia cinética turbulenta (K) y otra para la
disipaci6n (e). Una vez resueltas ambas, se obtienen valores locales e instantaneos
de Ky € para todo el campo del flujo en estudio. Conocidos estos valores es posible
entonces estimar la viscosidad turbulenta instanténea (v,) en todo el dominio del
problema. Finalmente, conocida v; pueden estimarse los esfuerzos de Reynolds, con
lo que se cierra el problema de la turbulencia (igual ntimero de ecuaciones que de
incdgnitas), y s6lo resta la resolucién de las ecuaciones promediadas de Navier-
Stokes para asf determinar el campo de flujo. Los anteriores pasos son solo a titulo
explicativo, ya que como se detalla a continuacién, normalmente para obtener tanto
K como & se requiere conocer vi, y por lo tanto es necesario resolver todas las
ecuaciones simultaneamente (0 iterativamente). Las ecuaciones diferenciales semi-
empiricas de transporte para K y € son, respectivamente:
OK OK _ a iy ) ats VG
Fee — “8
dd _ @(mae) ie et
ane (EE) rackerronsecry ene 9)
197donde:
(20)
Qi)
(22)
mientras que Ge, Cie, €2e y Cae Tepresentan constantes empiricas y Ry un ntimero de
Richardson que para el caso de superficies de corte horizontal toma el valor
Ry=-G[(P+G) (Rodi, 1984).
Determinacién del Valor de las Constantes en el Modelo K-€
Para poder resolver numéricamente las ecuaciones diferenciales de transporte es
preciso especificar el valor de todas las constantes mencionadas anteriormente. El
valor de las mismas surge de la aplicacién del modelo a casos simples donde, debido
a simplificaciones inherentes a cada problema, sélo alguna(s) de las constantes
apaecen en las ecuaciones, permitiendo asf su calibracién. A continuacién
presentaremos algunos ejemplos.
in dec,
Para el caso de superficies de corte en estado de equilibrio local, P =
de las anteriores ecuaciones se obtiene:
;¥ por lo tanto
23)
Mediciones en este tipo de flujos arrojaron valores de oa = 0.30, de donde se
obtiene:
oud es)
138Obtenci6n de ze
En el caso particular de turbulencia de grilla, los términos de difusion y produccién
son idénticamente nulos, de manera que la tinica constante presente en las
ecuaciones de transporte es cze, obteniéndose por lo tanto:
5)
y
26)
cuya solucion general es:
K = const." en
8)
De la comparacién con resultados experimentales se llega a valores de czeentre 1.80
y 2.00
Obtencign de cre
a
En flujos en capas limites (=0) cercanas a la pared la velocidad puede
aproximarse mediante el clasico perfil semi-logaritmico; por otro lado, produceisn
es igual a disipacién, Entonces, en flujos estacionarios, la ecuacién de transporte de
disipacién se reduce a:
29)
2
ce (30)
reemplazando estas tiltimas dos expresiones en la ecuacién de transporte, puede
demostrarse que:
139an
y reemplazando valores se obtiene Cie = 1.44
7.3.4 Modelos de Orden Superior
Una forma de evitar la modelacién de los esfuerzos de Reynolds (y por lo tanto
obviar el uso de la hip6tesis de Boussinesq) consiste en derivar de manera exacta
una ecuacién para estos esfuerzos (detalles algebraicos pueden encontrarse en Hinze,
1975). Obviamente esto no cierra el problema de la turbulencia, sino que traslada las
incégnitas a momentos de orden superior del tipo www , los cuales necesitan ser
modelados, dando origen ala denominacién de este tipo de modelos. En algunas
aplicaciones particulares donde la hipétesis de Boussinesq resulta inadecuada (por
ejemplo en casos donde el flujo de cantidad de movimiento es opuesto al gradiente
local de velocidades medias; para mayores detalles consultar Raupach y Thom,
1981), estos modelos han mostrado ser eficaces en la descripcién del campo de flujo,
A modo de restimen de 10 expuesto anteriormente, el diagrama de la pigina
siguiente tiende a brindar una visién general del problema de modelacién numérica
de flujos turbulentos.
140MODELOS DE TURBULENCIA
ECUACIONES EXACTAS|
‘SIMULACION, ECUACIONES
PROMEDIADAS DE
REYNOLDS,
‘SIMULACION,
DE GRANDES.
VORTICES
NUMERICA
DIRECTA,
PROBLEMA, MODELACION DE
DE ESCALAS
CIERRE INFERIORES A LA
GRILLA,
MODELACION| MODELACION
DE DE
a, LETC.
CIERRE DE MODELOS DE
PRIMER ‘ORDEN
ORDEN SUPERIOR,
(ODELOS
DE
CERO ECUACIONES
MODELOS| ‘VISCOSIDAD
— TURBULENTA,
UNA ECUACION NO-ISOTROPICA,
MODELOS ‘CORRECCION PARA
DE BAJOS NUMEROS DE
DOS ECUACIONES. REYNOLDS
‘SOLUCIONES
PROMI iN
PROFUNDIDAD
1417.4 Referencias
Boussinesq, J. (1877) "Essay sur la Theorie des Eaux Courantes.” Mem. Presentes par
Divers Savants I'Acad.emie Sci. Paris. Vol. 23, pp 46-50.
Deardorff, J.W. (1970) "A Numerical
Channel Flow at High Reynolds Number
tudy of Three-Dimensional Turbulent
"J, Fluid Mech. Vol 41, pp 453-480.
Hinze, J.0. (1975) "Turbulence."McGraw Hill
Kim, J., Kline, SJ. y Johnston, J.P. (1980). "Investigation of a Reattaching Turbulent
Shear Layer: Flow over a Backward-Facing Step."Journal of Fluids Engineering.
ASME. Vol. 102 pp 302-308.
Laufer, J. (1951) "Investigation of Turbulent Flow in a Two-Dimensional Channel."
NACA Report 1053.
Laufer, J. (1954) "The Structure of Turbulence in Fully Developed Pipe Flow."NACA
Report 1174
Prandtl, L. (1904) "Uber Flissigkeitsbewegung bei sehr kleiner Reibung."Proc. Third
Intern. Math. Congress, Heidelberg.
Prandtl, L. (1925) "Bericht iiber Untersuchingen zur ausgebildeten Turbulenz." Z:
ang. Math. Mech., Vol. 5, pp 136-139.
Raupach, MR. y Thom, AS. (1981) “Turbulence in and above Canopies." Ann. Rev.
Fluid Mech.. Voi 13, pp 97-129.
Rodi, W. (1984) “Turbulence Models and their Applications in Hydraulics." IAHR
Monograph.
Schlichting, H. (1979) "Boundary Layer Theory." McGraw Hill
smagorinsky, J. (1963) "General Circulation Experiments with the Primitive
Equations, 1. The Basic Experiment.” Monthly Weather Review . Vol 91, pp 99-165:
142EJEMPLOS DE APLICACION DE MODELOS NUMERICOS
a8, EJEMPLOS DE APLICACION DE MODELOS NUMERICOS,
A continuacién expondremos brevemente algunos ejemplos de aplicacion de los
modelos anteriores, concentréndonos en mayor detalle en el modelo K-€. Una
enumeracién de los ejemplos a desarrollar es la siguiente:
Modelos Algebraicos:
Distribucién Rouseana de concentracién de sedimento en suspensién en la vertical
‘Modelos de Una Ecuacién:
Suspensi6n de sedimento debida a turbulencia generada por un chorro.
Modelos de Dos Ecuaciones (nos limitaremos a describir ejemplos correspondientes a
la aplicacién del modelo K-e)
Simulacién de corrientes inducidas por el viento en cuerpos de agua;
Profundizacién de la zona de mezcla en un fluido estratificado;
Simulacion de la dispersion longitudinal de partfculas en flujo turbulento;
Simulacion de las caracteristicas de la turbulencia en canales abiertos;
Simulacion de las caracteristicas de la turbulencia en canales abiertos con vegetaci6n;
8.1 Modelos Algebraicos:
Distribucién vertical de sedimento en suspensi6n en condiciones de equilibrio
Se utilizara este ejemplo, ya clasico en numerosos textos, a fines de clarificar el concepto
de modelo algebraico y sus diferencias con los restantes modelos. Un simple andlisis
usando volimenes de control revela que la ecuacién de conservacién de masa de
sedimento puede escribirse como (Garcia y Parker, 1991)
ae , IF i
jor
a)
at” Ox, wy
donde
Fy=Q,-vae ®
denota el flujo de sedimento en Ia direccién coordenada xi, vei €S la velocidad de caida
del sedimento proyectada sobre la direccion xj y c es la concentracién de sedimento en
suspensiGn, Desarrollando la expresion, y adoptando xs = z como ordenada vertical, se
obtiene
ae , ue, dve
ot ox OyPromediando sobre la turbulencia, considerando ¢=€+ ¢', resulta:
@
El problema del cierre aparece nuevamente, ya que poseemos més incégnitas que
ecuaciones (solo disponemos de la anterior ecuacién, las tres de cantidad de
movimiento y la de continuidad), y por lo tanto los flujos de masa de Reynolds deben
ser modelados, Asumiendo una hipétesis andloga a la de Boussinesq para cantidad de
movimiento, podemos escribir:
me -. Ze 6
Particularmente en flujo uniforme, estacionario sobre fondo fijo se obtiene:
= (H(z), 0,0) 3)
y como condiciones de borde:
en la superficie libre, y
Fa, = vB - ey) ©
en el lecho (0 cerca de él).
En las anteriores ecuaciones, E denota una tasa adimensional de incorporacién de
sedimento en suspensiGn desde el lecho (Garefa y Parker, 1991) y cp es la concentracién
fen una posicién muy cercana al lecho. Para condiciones de equilibrio de suspensién
estacionaria y uniforme, donde no existe un flujo neto de sedimento desde el fondo ni
hacia el, entonces Fsz = 0, 0 sea E = cy, Por lo tanto, segiin las hipétesis anteriores, la
ecuacién de conservacién cle sedimento se reduce a:
ay
a ”
p= ¥,620 ))
La interpretacién de los términos de la ecuacién anterior es muy simple, representando
un balance entre la tasa de sedimentacién debido a efectos gravitatorios y la tasa de
transporte vertical debido a efectos turbulentos, modelada segun la hipétesis de
146Boussinesq. Para poder resolver la ecuaci6n anterior necesitamos adoptar algunas
hipétesis respecto al coeficiente Dy. Segtin lo desarrollado anteriormente podemos
escribir:
an
donde q, es el niimero de Schmidt para transporte de sedimento. De esta manera el
problema se traslada a la determinacién de la viscosidad de remolino v, que puede a su
vez expresarse como
a2)
siendo m un factor de proporcionalidad. Considerando o-=1 y reemplazando las
anteriores expresiones en la ectiacién de conservacién del sedimento, obtenemos:
as)
siendo b la distancia desde el lecho en donde la concentraci6n media adopta el valor cy.
En general el producto VL es variable en el campo del flujo, y numerosas expresiones.
han sido propuestas para su modelacién, siendo una de ellas la longitud de mezcla de
Prandtl. Es bien conocido el hecho que, asumiendo un perfil de distribucién de
velocidades semi-logaritmico la integral anterior conduce al famoso perfil de
distribucién de concentracién debido a Rouse (1937). Sin embargo, creemos de mayor
importancia conceptual en el presente contexto describir un experimento del mismo
Rouse (1938) en el cual la suspensién de sedimento se gener6 en un tanque cilindrico
mediante la oscilacién vertical harménica de una grilla (Figura 8.1). Se emplearon
diferentes tamafios de sedimento con distintas frecuencias de oscilacién, y una pipeta
lateral permitia Ia toma de muestras de concentracién media. En estas condiciones la
velocidad caracteristica { debe ser proporcional a la frecuencia de agitacién de la grilla
(para amplitudes constantes) y, por lo tanto, uniforme en la vertical. Por otra parte la
longitud caracteristica de la turbulencia, L, debe ser tambien constante para agitadores
de geometrfa uniforme. En estas condiciones, la viscosidad turbulenta puede astumirse
constante en la vertical, y la anterior integral conduce entonces a:
a hee
e De aay
a
La Figura 82 ilustra el grado de ajuste de las anteriores hipétesis a los resultados
experimentales. Como puede observarse, este simple experimento provee una excelente
base de justificacién y explicacién conceptual de los procesos involucrados e hipétesis.
adoptadas.
147ra
Figura 8.1. Vista general del aparato experimental de Rouse.
Figura 82 a) Frecuencia del agitador en funcidh de fe pendiente deta curva de distribucidh
semilogarttmica de concentraciones.
igure 62 ¥) Reach entre confine de mecla ya frecuencia de agitador.
1488.2 Modelos de una Ecuaci6n:
‘Suspensién de sedimento debido a turbulencia generada por un chorro
Un néimero importante de cuerpos de agua presenta sedimento contaminado en su
echo, el cual eventualmente puede ser incorporado en suspensién dependiendo de las
condiciones hidro-climaticas particulares (viento, olas, corrientes submarinas, etc.) y de
las caracteristicas del sedimento (tamafo, densidad, etc.). Seria por lo tanto importante
contar con un instrumento que permita la evaluacion in situ de la erosion y
resuspensin de sedimento,
Un modelo conceptual de este tipo de instrumento se encuentra ilustrado en la Figura
8.3. El mismo consiste en un cilindro vertical que recibe en su cara superior la descarga
de un chorro, generando por lo tanto un flujo turbulento en su base asentada sobre el
lecho erosionable del cuerpo de agua. Este campo turbulento es responsable entonces
por la erosién y/o deposicién de sedimento (ndtese que el caudal egresa del cilindro
también por su cara superior, por lo tanto la erosidn en el lecho no es causada de la
accién directa del chorro de agua siempre que z/D 2 3, siendo z la distancia vertical
medida desde la cara superior). Una aproximaci6n en la descripcién del campo
turbulento puede obtenerse aplicando un modelo de una ecuacién, donde la velocidad
caracteristica esta representada localmente por la rafz cuadrada de la energia cinética
turbulenta por unidad de masa, y la longitud caracterfstica es proporcional al diémetro
del cilindro, 0 sea:
VeVK
L=aD
a5)
Para elevados ntimeros de Reynolds en la regién 2/D > 3 puede asumirse un balance
local entre difusion de K y disipacién (produccién es igual a cero y se desprecia la
energia transferida al sedimento en suspensién), por lo que la ecuacién de energia
puede entonces escribirse como:
aa
dp¥ dK K
{14 ]-c,5—
ee a PL a6)
6 Sut akg
ag OL a7
La ecuacién anterior se reduce a una del tipo:
(18)
149donde X =k”, 6
tanto, para K que
tipo:
2/D y 2 es un parametro que retine todas las constantes. Por lo
de a cero cuando 2/D tiende a infinito, la solucion general es del
K
MS a9
°
172
(5) = 2) 20)
K D'D
donde K; es el valor de K para z = ,. Por otra parte, del ejemplo anterior se tiene que:
Da a)
asumiendo Da = v_(0 sea Ge = 1.0), y:
ve = quLVK = qovKD 2)
la solucién de la ecuaci6n de difusi6n vertical de sedimento resulta:
S38 (hE -
donde y=20-2, d es el didmetro inicial del chorro, Q es el caudal del chorro, yn es una
constante empirica tal que:
co
(24)
que toma, para el presente ejemplo, un valor de n = 0.337 para z-/D = 3 (experimentos
de Sonin et al., 1986). Resumiendo, empleando un modelo de turbulencia de una
ecuacién, y resolviendo una ecuacidn diferencial de transporte para la energia cinética
es posible modelar la distribucién vertical de sedimento en suspensién, la que en
términos generales resulta
25)
La Figura 844 ilustra la variacion de la velocidad caracterfstica (K"2) en funcién de z/D
para diferentes caudales Q/(dD). Por otra parte, la variacién de c/co en la vertical se
muestra en la Figura 8.5 para diferentes valores de v,/(Q/db) asumiendo (20-21) /D=2.
150caudal de epreso Q)2
zona de vértices
primarios
zona de turbulencia
‘esarolada
cuca de ingreso Q
«caudal de egreso Q?2
ingreso del choro
7)
tobera de salide
Gediamevo'e
za
}— eter principal
J Sedianero"t
4
pueris de muesteo
=
echo de sedimento
Figura 8.3 Esquema del instramento para el estudio de la suspensién de sedimento
contaminado
151|
|
2D
om © 6 100 120
Fig 8.4 Variacién de la ratz cuadrada de la energia cinética turbulenta en la vertical
Fig 8.5 Distribucién de sedimento en suspensién para distintos valores de v(QIMD)8.3 Modelos de dos Ecuaciones:
Modelo K-€
Presentaremos a continuacién algunos ejemplos de aplicacién del modelo K:
problemas clasicos, donde la estructura de Ia turbulencia juega un rol fundamental en
los procesos hidrodinémicos dominantes. Algunos resultados de la modelacién seran
contrastados con valores experimentales y/o con expresiones propuestas en la
literatura.
Cabe destacar que los ejemplos que a continuacion se describen poseen la caracteristica
comtin de constituir procesos en los cuales los términos convectivos resultan
despreciables, y por lo tanto permiten ser descriptos por una ecuacién de difusion
clasica mAs algunos términos fuentes segiin el caso (Patankar, y Spalding, 1970). El
cédigo computacional empleado en la resolucién numérica de las aplicaciones es una
versién modificada de PROBE (Svensson, 1986).
Simulaci6n de corrientes inducidas por viento en cuerpos de agua
El estudio de corrientes inducidas por el viento constituye un excelente ejemplo de uno
de los principales mecanismos que afectan los procesos de mezcla turbulenta en
reservorios. La Figura 8,6 presenta un esquema simplificado del problema en
consideraci6n. El lector interesado puede encontrar en la publicacién de Tsanis (1989)
un buen resumen de los diferentes métodos empleados hasta el presente para modelar
corrientes inducidas por el viento, incluyendo modelos de viscosidad turbulenta
constante, modelos basados en la longitud de mezcla y modelos de una y dos
ecuaciones.
En el presente ejemplo el modelo K-e fue empleado para modelar los resultados
obtenidos por Tsanis, seleccionando tres numeros de Reynolds (20000, 50000 y 100000),
definido como Re = UsH/v (siendo Us la velocidad superficial del agua y H la
profundidad del cuerpo de agua). Las ecuaciones que gobiernan el problema son:
Flujo medio:
(pt) _ _ ap
ao =P 26)
‘at x tou
Energia Cinética
aK
& 27)
a en
153Disipacién’
28)
wage 09)
Las condiciones de contorno impuestas son’
1 Una condicién de contorno tipo Dirichlet, dada por la condicién de no
resbalamiento, H(z = 0) = Oen el fondo; y
2. Una condicién de contomno tipo Neumann (o de flujo) en la superficie libre:
dle
az |
=w 30)
H)
donde 4, es el esfuerzo de corte debido a la accién del viento,
Los resultados incluyen perfiles en la vertical de K, €, de la viscosidad v:
adimensionalizada con el producto de la profundidad por la velocidad de corte en la
superficie hus, y de velocidad @ adimensionalizada con la velocidad superficial,
ilustrados respectivamente en Figuras 87, 88, 89 y 8.10. La figura 8.11 muestra
mediciones de Tsanis para un amplio rango de ntimero de Reynolds, donde puede
observarse la bondad de las resultados de Ia simulacién
1547.
Figura 8.6 Representacidn esquemética del problema de corrientes inducidas por el viento en
‘ewerpos de agua.
155£0
OLLIS = 2y poomsos v] U9 uprondisip ap DSO} N ap YOIODUDA gg PANTIE
(4) Zz
zo vo oo
1 1 1 1 T Ob
Ee +f 01
[ 3
5 e,
E 4 ot
1 : ! 4
oF
=
158ORLIS = 2Y TOIA94 Bj Ua DJUaINGIM DONZUID MSi9Ua D Bp UOIIMIMA {°g DUNTIY
(w) Zz
187“pais = 94 Teoms04 v] ua youoysuoupD Msuapnqim PopIso9sys.M] 2p UOTOMLMA 6'8 MART
(4) Zz
ot go 90 +0 zo oo
00'0
T T T T T T T T T
zoo
yoo
90°0
80°0
oro
“ny/a
Cc)
158os Re=5.264 h1,T1
= Re=1.4E5h2.71
ce cess Ree20E4 83,71
a+ ReeL.OES Hi T2
04
Sos = Re=2AE4 W173
0.2
°
“0.2 ° 0.2 0.4 08 08 1
wus
Figura 8.10 Perfiles simulados de velocidad adimensional para distintos nuimeros de
Reynolds.
1590.20 iy Ee eageaecnne
|
|
0.00 ;
0,75 0,80 -0.25 0,00 0.25 0.80 0.75 1.00 1.28
Wea
Figura 8.11 Distribuciones observadas de velocidades medias en corrientes inducidas por el
viento (Teanis, 1989).
160Profundizaci6n de Ja zona de mezcla en un flu atificac
En el presente ejemplo el modelo K-€ es utilizado para simular los procesos de mezela
turbulentos a través de la interface de densidad en un medio estratificado, cuya
modelacion resulta de gran interés préctico en el estudio de flujos geoffsicos. La
mecanica del proceso puede ser sintetizada como sigue (Figura 8.12): En condiciones de
viento calmo, los grandes cuerpos de agua exhiben en sus capas superficiales una
distribucién continua y moderadamente estable de densidad. El viento (0 el esfuerzo de
corte inducido por el viento) genera un flujo turbulento en estas capas superiores de
masas de agua tales como océanos o lagos, y a medida que el efecto persiste, la region
afectada por la turbulencia aumenta, penetrando poco a poco las capas inferiores del
medio. Debido a la relativa gran velocidad del proceso de mezcla, la distribucién de
densidad es aproximadamente uniforme en las zonas superiores, lo que implica avanzar
en contra de un salto (0 gradiente) local de concentracién bastante pronunciado.
El presente problema se encuentra gobernado por las siguientes ecuaciones:
Flujo Medio:
pu)
Ot BD
Conservacién de la Salinidad, S (salinidad media temporal):
a8 _ 9 ve 3
28 _ 2 ve @, @
at” Be “Gey de
Energia Cinética
% 2 (243K). | (28) 8 °
a ae a2)” a2) * or, 82 bi
Disipacion:
de _ Ove
Suef nd 0
2 alte) MK a
Donde:
ve 24%, oo
= pull +8.S) 6
y Be =8x10"
161a /
Do
so
Sato en la “)
distribucidh vertical ee
de salnidad Distribucién
vertical ée |
salinidad
con gradiente
constante
y
nat
Zh . t
— —
D@)
| Do -
L__,,
s@
Salto en la .
dibacdaveriea Disa
de salinidad etary
con gradiente
constante
Figura 8.12 Representacign esquemética de la evolucion de la zona de mezcla en cuerpos de
agua estratificados ante la accion del viento.
162Las condiciones de contorno empleadas para las ecuaciones del flujo son similares a las.
del problema anterior.
El desarrollo de la capa de mezcla D(t) se simul empleando el modelo K-e. A los fines
comparativos, se modelaron numéricamente los resultados experimentales de dos
trabajos: el primero debido a Kato y Phillips (1969), el cual consistié en la aplicacién de
tun esfuerzo de corte a la superficie de un fluido con un gradiente uniforme de salinidad.
en la vertical; el segundo debido a Kanta et al. (1977), donde la profundizaci6n de la
capa de mezcla se estudié para el caso de la aplicacién del esfuerzo de corte aun fluido
con una distribucién uniforme de salinidad en las zonas superiores, 0 sea con un salto 0
interface de densidad.
a) Distribucién vertical de salinidad con gradiente constante:
La Figura 8.13 muestra resultados numéricos de la profundizaci6n de la zona de mezcla
en funci6n del tiempo, para las siguientes condiciones, correspondientes a uno de los
experimentos de Kato y Phillips (1968):
ap
22192107 £ iticac = 0.995 in
7 0 ant (stratificacién lineal) yt» = 0.995 Si 7”
En el grafico de la Figura 8.14 se presenta la simulacién de la variacién vertical de
salinidad y energia cinética turbulenta luego de 600 segundos de aplicacién del esfuerzo
de corte. Puede observarse claramente la existencia de una regién de salinidad
aproximadamente uniforme (0.3 m 2
%
~" ¢000'0
orost
¥000°0 an
oor
g000'0(6961)
sdirtyd & omy 2p somauodsa & soousumu sopoynsas axtua uprovinduo) stg vandiyy
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L r 4
r sooupueny soponnsoy © A 1
r sopmuaupadrg sopoqnsoy ~~ * a 4
L y, 4
2
e ’ 4
b a“ ed 4
a
L wo 4
2
eo
oe 7
L ° 4
°
00°0
soo
oro
sto
() a
167superficie libre
os
04
03
x (m)
O41
00
salinidad (0/000)
Figura 8.16 Resultados numéricos de la evoluci6n del perfil de salinidad (Rj=36)
168
|
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