IIAEE
Políticas Públicas
VOL 1-N*2/3
2020-AGOSTO
NU OS
Reseñas/Reé
Convocatorias/
STE
ST iN
oo (ale- 9010) [Te= ES
eel
aleMUA E
0
Coordinación | Coordenacáo (2019-2021)
Consejo de Redacción | Conselho de Redacáo
Políticas Públicas. Horizontes Latinoamericanos es una
publicación del Grupo de Investigación en Políticas Públicas
Comparadas de la Asociación Latinoamericana de Ciencia
Política (ALACIP). Es de carácter cuatrimestral y de
distribución gratuita y tiene como objetivo la divulgación de la
producción científica y académica en el área de políticas
públicas comparadas en la región.
El editor no se responsabiliza por los conceptos, opiniones y
afirmacionesvertidas en los artículos de los colaboradores de
la publicación, que son exclusiva responsabilidad de los
autores.
Políticas Públicas. Horizontes Latinoamericanos é uma
publicacáo do Grupo de Pesquisa em Políticas Políticas
Comparadas da Associacáo Latino-Americana de Ciéncia
Política (ALACIP). É publicada quadrimestralmente e
distribuida gratuitamente. Seu objetivo é divulgar a producáo
científica e académica na área de políticas públicas
comparadas na regiáo.
O editor náo é responsável pelos conceitos, opinies e
declaracóes feitas nos artigos dos colaboradores da
publicacáo, que sáo de responsabilidade exclusiva dos
autores.
e
Políticas Públicas Comparadas
ALACIP
OÍGICIO
NAAAELO:
3
NOVEDADES | NOVIDADES
ALAES
INAUNel0
Política pública y polity
Política pública e polity
Análisis del “Plan estratégico agroalimentario y agroindustrial
participativo y federal 2010-2016” en Argentina a poco más de 3
añosde su finalización
EIN AETMAAOMe:anoARTOTNle
e Agroindustrial 2010-2016" na Argentina pouco mais de 3 anos após
a sua finalizacáo
CapacidadEstatal: dosis y instrucciones de uso
Capacidadeestatal: dose e instrucóes de utilizacáo
TRANSMENUER SN RRNNECA
os desafios atuais diante da pandemia
La protección social en Brasil y Argentina: los gobiernos
conservadoresy los desafíos actuales ante la pandemia
NOMS
Public management as a SEis MESAARESo
IMEI,
ALAA EAINT AL ENS
Analysis | Guy Peters 8 Guillaume Fontaine (editores)
RA EEC-metodológica E | ELE
Leite Lima 8 Leticia María (organizadoras)
A 0)
POr
INSTRUCCIONES PARA LOS AUTORES| INSTRUCOES PARA AUTORES
A4A AGENDA
PALABRAS DEL DIRECTOR
Palavras do diretor
Estamos presentando el segundo número de Políticas Públicas.
Horizontes Latinoamericanos, la publicación cuatrimestral del
Grupo de Investigación en Políticas Públicas Comparadas (GIPPC)
de la Asociación Latinoamericana de Ciencia Política (ALACIP). A
finales de 2019 cerrábamos la década dando a luz a esta revista
con mucha expectativa y emoción. No tenemos más que palabras
de agradecimiento atodos los colegas de todas partes de América
Latina y otras latitudes que nos enviaron sus felicitaciones y al
mismo tiempo compartieron este humilde producto con sus redes
y equipos de trabajo.
El 2020 se inaugura con una de las mayores encrucijadas de
esta era. Un fenómeno multidimensional, complejo y poliédrico
sacude a casi todos los países del globo: la pandemia desatada
por el coronavirus/COVID-19. No solo es un acontecimiento
epidemiológico, sino que también ha repercutido en la vida
política, económica, social y cultural en todo el orbe. Es un evento
de consecuencias enormemente negativas para la población, pero
al mismo tiempo un catalizador de procesos de cambio que
estaban
desarrollándose
en
nuestras
sociedades.
El
confinamiento ha empujado a la humanidad a buscar soluciones a
nuevos y viejos problemas: la educación a distancia, el teletrabajo,
el gobierno digital, son ahora parte de la realidad cotidiana que
hasta hace poco asomaba tímidamente. Pero sin embargo,
cuestiones de siempre, como la pobreza, la desigualdad, el
desempleo, la falta de oportunidades o el desencanto por los
gobiernos se han recrudecido. Al mismo tiempo es un momento de
gran incertidumbre y enormes desafíos para el régimen político: a
las democracias “fatigadas” se le adiciona esta enorme crisis,
exigiendo a los líderes y a las administraciones públicas una
capacidad de respuesta, movilización de recursos y efectividad
adicional. La legitimidad de las instituciones, la cohesión social y
el desarrollo sustentable parece estar experimentando un
estrepitoso cimbronazo.
En este contexto, plagado de interrogantes es donde nos
situamos ahora. Nos permitimos ser optimistas porque a la
suspensión de los eventos presenciales, se le opuso una vigorosa
“teleacademia” en la que a través de la conectividad y el
streaming, nos hace sentir de alguna manera más cerca que antes,
pero desde nuestras casas. La celeridad con que se ha avanzado
en la virtualización de la vida universitaria, la investigación, la
celebración
de conferencias por medios digitales parece
habernos fortalecido como comunidad. Es en este incierto
escenario donde llega el segundo número de esta publicación.
Para esta edición contamos con cuatro artículos de diferentes
partes de la región. Rodolfo Cantó Sáenz de México nos trae una
reflexión sobre la importancia de la polity como espacio para
elaborar una teoría de las políticas públicas en América Latina;
mientras
que
José
Carabajal
de
Argentina
realiza
un
pormenorizado estudio de caso sobre el Plan Estratégico
Agroalimentario y Agroindustrial Participativo y Federal durante la
década pasada en ese país. Desde Brasil este número cuenta con
dos contribuciones: Por un lado, André Marenco y Lidia Ten Cate,
realizan una discusión teórica y empírica sobre el concepto de
“capacidad estatal”. Por otro lado, Luciana Pazini Papi y Lígia Mori
Madeira nos llevan en un recorrido por la protección social en
Brasil y Argentina de las últimas décadas poniéndonos de cara a
los desafíos actuales.
Una vez más, esperamos que estas páginas nos sirvan de punto
Estamos apresentando o segundo número da Políticas Públicas.
Horizontes Latino-americanos, a publicacáo quadrimestral do
Grupos de Pesquisa em Políticas Públicas Comparadas (GIPPC) da
Associacáo Latino-Americana de Ciéncia Política (ALACIP). No final
de 2019, encerramos a década dando a luz esta revista com muita
expectativa e emocáo. Náo temos mais do que palavras de
agradecimento a todos os colegas de todas as partes da América
Latina e outras latitudes que nos enviaram as suas saudacóes e, ao
mesmo tempo, compartilharam este humilde produto com as suas
redes e equipes de trabalho.
2020 abre-se com uma das maliores encruzilhadas desta era. Um
fenómeno multidimensional, complexo e poliédrico está abalando
quase todos os países do mundo: a pandemia desencadeada pelo
coronavírus/COVID-19.
Náo
.é
apenas
um
acontecimento
epidemiológico, mas também teve repercussóes na vida política,
económica, social e cultural em todo o mundo. É um acontecimento
de consequéncias enormemente negativas para a populacáo, mas ao
mesmo tempo um catalisador dos processos de mudanca que
estavam ocorrendo nas nossas sociedades. O confinamento levou a
humanidade a procurar solucóes para novos e velhos problemas:
ensino á distáncia, teletrabalho, governo digital, fazem agora parte
da realidade cotidiana que até há pouco tempo aparecia
timidamente. No entanto, questóes antigas como a pobreza, a
desigualdade, o desemprego, a falta de oportunidades e O
desencanto com os governos tém sido exacerbadas. Ao mesmo
tempo, é um momento de grande incerteza e enormes desafios para
o regime político: as democracias "fatigadas" junta-se esta enorme
crise, exigindo dos líderes e administracdes públicas uma
capacidade de resposta, mobilizacáío de recursos e eficácia
adicional. A legitimidade das instituicdes, a coesáo social e o
desenvolvimento sustentável parecem estar experimentando um
estrondoso choque.
É neste contexto, cheio de perguntas, que nos encontramos agora.
Permitimo-nos ser optimistas porque ao cancelamento dos eventos
presenciais se contrapós uma vigorosa "teleacademia" na qual,
através da conectividade e do streaming, nos sentimos de alguma
forma mais próximos do que antes, mesmo quando ficamos em
nossas Casas. A rapidez com que foram feitos progressos na
virtualizacáo da vida universitária, da pesquisa e da realizacáo de
conferencias por meios digitais parece ter-nos fortalecido como
comunidade. É neste cenário incerto que chega o segundo número
da revista. Para esta edicáo temos quatro artigos de diferentes
partes da regiáo. Rodolfo Cantó Sáenz do México nos traz uma
reflexáo sobre a importáncia da polity como um espaco para
elaborar uma teoria das políticas públicas na América Latina;
enquanto José Carabajal da Argentina faz um estudo de caso
detalhado sobre o Plano Estratégico Participativo e Federal
Agroalimentar e Agroindustrial durante a última década naquele
país. Foram recebidas duas contribuicóes do Brasil: Por um lado,
André Marenco e Lidia Ten Cate, levam uma discussáo teórica e
empírica sobre o conceito de "capacidade estatal". Por outro lado,
Luciana Pazini Papi e Lígia Mori Madeira fazem um percurso através
da protecáo social no Brasil e na Argentina nas últimas décadas,
face aos atuais desafios.
Mais uma vez, esperamos que estas páginas sirvam de ponto de
encontro para académicos, professores, estudantes e analistas das
políticas públicas, compartilhando eventos, notícias, agenda e
publicacóes recentes. Apoucos meses da primeira edicáo, mas num
cenário radicalmente diferente ao de finais de 2019, deixamos para
vocés o convite para ler esta segunda versáo.
de encuentro entre los académicos, profesores, estudiantes y
analistas de las políticas públicas, compartiendo los eventos,
novedades, agenda y publicaciones recientes. A escasos meses
del primer número, pero en un escenario radicalmente diferente al
de fines de 2019, les dejamos la invitación a leer esta segunda
versión.
Nelson Cardozo
Director | Diretor
Andre-Noél Roth en Ciclo de Diálogos de
Políticas Públicas en pandemia: "La idea de
prevención se perdió en el Estado"
Andre-Noél Roth no Ciclo de Diálogos de Políticas
Públicas sobre Pandemias: "A idéia de prevencáo se
perdeu no Estado”
María
Pía
Martín,
Directora
Académica
del
Magíster en Gestión y Políticas Públicas (MGPP) de
la Universidad de Chile, conversó con el profesor
Andre-Noél Roth sobre la crisis COVID-19 y el fra-
caso de la Nueva Gestión Pública.
"La idea de prevención se perdió en el Estado de
las
naciones
latinoamericanas”,
afirmó
Andre-Noél Roth, Doctor en Ciencias Económicas y
Sociales de la Université de Genéve, Suiza, y Pro-
fesor Titular de la Facultad de Derecho, Ciencias
Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de
Colombia, en el Ciclo de Diálogos de Políticas
Públicas del MGPP.
Durante la actividad, el académico y politólogo
suizo profundizó sobre el cambio de paradigma
que muchos estados latinoamericanos vivieron
luego de la Segunda Guerra Mundial: “En ese
tiempo, hubo una construcción del Estado y de la
Salud Pública desde la gestión de los profesionales del rubro. Surge la idea del Estado capaz de
proveer servicios”, sostuvo ante una audiencia de
160 asistentes (promedio), de distintos países.
Más adelante agregó: “La manera en que este
Estado se construyó también generó una gran bu-
rocracia que tuvo como consecuencia una hiper-
trofia del aparato estatal, con mucha ineficacia e
ineficiencia. Desde este lugar se construyó una
contra-idea de que había que recortar los servi-
cios del Estado".
Roth explicó que las consecuencias de la actual
pandemia en América Latina son una demostración
de que la capacidad de previsión del Estado ha
disminuido. “Los estados latinoamericanos actúan
cuando las cosas ocurren en el momento y no son
capaces de prever. Y eso que tuvimos un poco de
suerte en América Latina porque se podía ver la
crisis del coronavirus con dos meses de anticipación”, indicó. El académico también profundizó
en la transición a la privatización del sistema de
salud pública de los estados latinoamericanos, así
como en su precarización. Por último, respondió
parte de
las
97
preguntas y comentarios
de los
asistentes.
El ciclo de “Diálogos en Políticas Públicas en pandemia” es organizado
por
el
Magíster
en
Gestión
y
Políticas
Públicas
(MGPP)
y
tiene por objetivo reflexionar
sobre
las
bases en la que se
sustentan la creación
de políticas públicas
en Chile.
María Pía Martin, Diretora académica do Mestrado em Gestáo e Políticas Públicas (MGPP) da Universidade do Chile, conversou com o Professor
Andre-Noél Roth sobre a crise da COVID-19 e o
fracasso da Nova Gestáo Pública.
"A idéia de prevencáo se perdeu no Estado das
nacóes
latino-americanas”,
disse
Andre-Noél
Roth, PhD em Ciéncias Económicas e Sociais da
Universidade de Genéve, Suíca, e Professor da
Faculdade de Direito, Ciéncias Políticas e Sociais da Universidade Nacional da Colómbia, na
Ciclo de
MGPP.
de
Políticas
Públicas
do
Durante a atividade, o cientista político e acadé-
mico suíco aprofundou a mudanca de paradigma
que
muitos
estados
latino-americanos
experi-
mentaram após a Segunda Guerra Mundial: "Naquela época, houve uma construcáo do Estado e
da Saúde Pública a partir da gestáo de profissionais da área. A idéia de um Estado capaz de fornecerservigos surgiu", disse ele a um público de
160 pessoas (em média) de diferentes países.
Ele adicionou mais tarde: "A forma como este
Estado foi construído também gerou uma grande
burocracia que resultou em uma hipertrofia do
aparelho estatal, com muita ineficiéncia e inefi-
cácia. A partir deste lugar foi construída uma
contra-idéia que os servicos do Estado tiveram
que ser cortados".
Roth explicou que as consequéncias da atual
pandemia na América Latina sáo uma demonstracáo de que a capacidade de previsáo do Estado
diminuiu.
"Os estados latino-americanos agem quando as
coisas acontecem no local e náo sáo capazes de
prever". E tivemos um pouco de sorte na América
Latina porque vocé pode ver a crise do coronavírus dois meses antes do tempo”, disse ele.
O académico também falou da transicáo para a
privatizacáo dos sistemas de saúde pública nos
estados latino-americanos, bem como de sua
precariedade. Finalmente, ele respondeu a algu-
mas das 97 perguntas e comentários da audiéncia.
AD
O ciclo de "Diálogos
sobre Políticas Públicas em uma Pandemia”
é organizado pelo Mestrado em Gestáo e Políticas Públicas (MGPP)
e visa refletir sobre as
"
S
María Pía Martín
A do isond 0h Mi
A A LA
Diálogos
Y
bases
nas
quais
se
baseia a criacáo de políticas
Chile.
públicas
no
ES
MAA AREAS MAN IA MI RAN]
NI TA ES indígenas en el Sistema Nacional
A NEAL AAA EN ES
Conferéncia: Co-producáo de políticas com os povos
indígenas no Sistema Nacional de Inovacáo
Agrícola (SNIA)?
Martha Isabel Gómez Lee, pesquisadora do
Políticas
Públicas
Comparadas
ALACIP
Martha Isabel Gómez Lee, investigadora del Grupo de
Políticas Públicas Comparadas ALACIP (GIPPC), presentó
el 10 de junio de 2020 en un seminario de investigación
organizado por el GIPPC, el Instituto Iberoamericano de
Berlín (lAl) y la Universidad Externado de Colombia, la
ponencia titulada: ¿Coproducción de políticas con los
pueblos indígenas en el Sistema Nacional de Innovación
Agropecuaria (SNIA) en Colombia? La autora trabaja en el
Centro de Investigaciones y Proyectos Especiales (CIPE)
de la
Universidad Externado y es becaria para una
investigación postdoctoral en el IAl de Berlín.
En
este
seminario
de
investigación
participaron
representantes de la Organización Indígena de Colombia
apresentou em 10 de junho de 2020 em um seminário de
pesquisa
organizado
pelo
GIPPC,
Instituto
Ibero-Americano
de
Berlim
(lAl)
e
a
Universidade
Externado
desde
Los
de
avances
investigación
preliminares
señalan que:
1)
la
transferencia de política?
AAA
El concepto de sistemas de innovación en el sector
agropecuario según el Banco Mundial (2008) reconoce que:
1.
El
Hay un papel importante para un amplio espectro de actores fuera
O
al Gobierno:
La importancia relativa de los actores cambia a lo largo del
proceso de innovación.
A medida que las circunstancias cambian y los actores aprenden,
sus roles pueden cambiar, y
Los actores pueden jugar múltiples papeles (por ejemplo, en
diferentes momentos puedenser fuentes de conocimiento,
buscadores de conocimiento y coordinadores de enlaces, entre
noción de la naturaleza como un
mero
objeto
de
control
y
y
resiste
OS.
la
separación entre el hombre como el
sujeto y la naturaleza como el objeto,
anclado en la
concepción del siglo XVIl de materialismo mecánico, que
es
el
enfoque
que
ha
guiado
las
políticas
gubernamentales. 2) El gobierno colombiano y el indígena
no coinciden en la legitimación de las instancias en las
que se podría presentar una coproducción de políticas
con innovación participativa y democrática. Por una
parte, las demandas sociales de los pueblos indígenas de
consulta previa y Consentimiento Previo e Informado en
salvaguarda de sus derechos afectados se deciden en la
Mesa
Permanente
de
Concertación
de
los
Pueblos
Indígenas (MPC) y por el contrario en el Consejo Superior
del SNIA se decide sobre la asesoría al Ministerio de
Agricultura.
La
pregunta
de
fondo
podría avanzar hacia la práctica de
elaboración
de
políticas
inclusivas
que
también
incorporen
a
las
minorías
étnicas? Hay que romper con la
perspectiva
tradicional
de
elaboración de las políticas y
trabajar en la nueva agenda de
investigación
de
políticas
públicas
en
y
desde
América
Latina.
es
¿Cómo
el
Estado
a
Martha Isabel Gómez Lee
O
trabalho
intitulado:
contou
com
a
participacáo
de representantes da Organizacáo Indígena da Colómbia
(ONIC), académicos que trabalham na Alemanha, Canadá,
Argentina e Colómbia, atores públicos do Ministério da
Agricultura e Desenvolvimento Rural e do Ministério do
Meio
Ambiente
e
Desenvolvimento
Sustentável
da
Colómbia,
estudantes
e
cidadáos.
O
objetivo
era
determinar, a partir da abordagem
teórica
da
co-producáo
de
SNIA en Colombia ¿RRI del Acuerdo de Paz o
SNIA es una arena política en la
que
compiten
ganadores
y
perdedores
con
visiones
divergentes sobre el significado
de la naturaleza y del desarrollo.
Es
así
como
en
su
seno,
el
enfoque
biocultural
de
los
pueblos indígenas cuestiona la
explotación,
Colómbia,
Este seminário de pesquisa
Agricultura y Desarrollo
Rural y del Ministerio
de
Ambiente
y
Desarrollo
Sostenible
de
Colombia,
estudiantes y ciudadanos El objetivo fue determinar,
desde el enfoque teórico de la coproducción de políticas
¿Cómo
ha
sido
la
forma
de
interactuar entre el Estado y los
A.1 Problema
pueblos indígenas en Colombia en
a los recursos genéticos
2017 hasta 2020?
da
Coproducáo de políticas com os povos indígenas no
Sistema Nacional de Inovacáo Agrícola na Colómbia? A
autora
trabalha
no
Centro
de
Investigaciones
y
Proyectos
Especiales
(CIPE)
e
é
pesquisadora
de
pós-doutorando no lAl em Berlim.
(ONIC), académicos que trabajan en Alemania, Canadá,
Argentina y Colombia, actores públicos del Ministerio de
La
implementación
del
SNIA
respecto a las políticas de acceso
Grupo de
(GIPPC),
entre o
políticas,
povos
como
¡indígenas
o
Estado
da
e
os
Colómbia
interagiram na implementacáo do
SNIA
no
que
diz
respeito
as
políticas de acesso aos recursos
genéticos de 2017 a 2020?
Os
avancos
preliminares
na
pesquisa indicam que: 1) O SNIA
sáo uma arena política na qual
vencedores
e
perdedores
com
visóes
divergentes
sobre
o
significado
da
natureza
e
do
desenvolvimento
competem.
Assim, dentro dela, a abordagem
biocultural dos povos indígenas
questiona a nocáo de natureza
como mero objeto de controle e
exploracáo, e resiste á separacáo
homem como sujeito e a natureza como objeto,
ancorada na
século XVIl,
concepcáo do materialismo mecánico
que é a abordagem que tem guiado
do
as
políticas governamentais. (2) O governo colombiano e os
povos indígenas náo concordam sobre a legitimidade
das instáncias em que uma co-producáo de políticas
com inovacáo participativa e democrática poderia ser
apresentada. Por um lado, as demandas sociais dos
povos indígenas para consulta prévia e consentimento
prévio e informado para salvaguardar seus direitos
afetados sáo decididas pela Mesa Redonda Permanente
dos Povos Indígenas (MPC), enquanto por outro lado o
Conselho
Superior
da
SNIA
decide
no
espaco
do
Ministério da Agricultura. A questáo básica é como o
Estado poderia avancar para a
prática de desenvolver políticas
inclusivas
que
também
incorporem as minorias étnicas.
Devemos
romper
com
a
perspectiva
tradicional
da
ls
NES
elaboracáo
de
políticas
e
trabalhar
na
nova
agenda
de
pesquisa de políticas públicas na
e a partir da América Latina.
ES
Revista Mexicana
de Análisis Político
ole
a
Apo o PP.
CORA INEA
Durante el mes de enero del 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró al
COVID-19 como una emergencia de salud pública de preocupación internacional y algunas
semanas más tarde el 11 de marzo la caracterizó como una pandemia a nivel mundial. Desde
entonces se ha planteado para todos los países del mundo, y en particular para el sector
público y sus sistemas de salud un gran desafío. La propagación y el impacto del virus ha
afectado a todos los ámbitos y sectores de la sociedad, ante ello, el sector público que
incluye tanto a la administración pública como el servicio que dan las instituciones públicas
encargadas del sector salud, ha generado un conjunto de estrategias, políticas y programas
dirigidas a reducir el impacto de la crisis. Si bien estas políticas y programas parecieran ser
divergentes, hay también esfuerzos por establecer mejores instrumentos de coordinación y
fortalecimiento de capacidades institucionales.
A raíz de estos acontecimientos, la Revista Mexicana de Análisis Político y Administración
Pública (REMAP), invitan a enviar artículos de investigación y ensayos con el tema del COVID
y la Administración Pública. Se aceptan contribuciones enfocadas al papel de la
administración pública en el contexto del brote del COVID-19, en México y en el mundo.
Algunos de los temas que se pueden considerar sin que se limiten solo a estos, incluyen
los siguientes:
e
e
.
.
+
e
e
e.
Análisis comparativo de la gestión pública frente a la pandemia.
Estudio y análisis de políticas y programas en contextos nacionales, subnacionales e
internacionales.
Gestión de crisis y liderazgo.
El papel de la burocracia internacional en la respuesta a la pandemia.
Elimpacto y funcionamiento de las organizaciones del sector salud en la gestión de la
emergencia (hospitales, clínicas, laboratorios).
El papel del servicio público y las políticas que lo afectan durante la crisis.
Gobernanza y sistemas de salud.
Transferencia de políticas públicas y aprendizaje institucional
Fecha límite para el envío de los artículos:
30 de agosto del 2020. Los trabajos serán enviados por correo electrónico a los editores:
+
.
Jorge E. Culebro M. (jorgeculebromtgmail.com)
Benjamín Méndez (bmendezbthotmail.com)
Con copia a remap.revistaogmail.com
Coordinadores del Dossier:
Jorge E. Culebro Moreno. (UAM-C)
Benjamín Méndez Bahena.(IPN.CIECAS)
Diana Vicher (FCPyS. UNAM)
INTERNATIONAL PUBLIC POLICY ASSOCIATION
30'"
JUNE
SINO JULY
BARCELONA
¡od
dl
NFERENCE ON
PUBI
MN
TIMELINE OF THE CONFERENCE
R PANELS | 1* September 2020 > 26" October 2020
APERS
| 16 November 2020 > 29” January 2021
A
¿ENCE
29" June 2021
www.ippapublicpolicy.org
anaBuS
CALL FOR PAPERS
LA PANDEMIA
Y EL ROL DE LAS
CIENCIAS SOCIALES
Iberoaméricasocial: Revista-redde estudios sociales
Año 8, Núm. XV
Recepcióndeartículos
hasta el 15 de octubre
0 IBEROAMÉRICA
SOCIAL
Y
AA AAA OS
DE ADMINISTRACION PUBLICA
NA ica SA
un tiempo de cambios disruptivos
13 A 16 DE OCTUBRE
(MODALIDAD VIRTUAL)
El Il Congreso Nacional de Estudios de Administración Pública de la AAEAP se propone
consolidar un espacio para facilitar la exposición, el intercambio y el debate de experiencias
originadas en la gestión pública en los distintos poderes del estado de todos los niveles de
gobierno, así como estudios, aprendizajes y reflexiones producidas en universidades,
asociaciones profesionales, equipos de gestión y entidades de la sociedad civil con interés
en los asuntos públicos.
Existirán tres modalidades abiertas de participación asincrónica:
.
.
.
presentación de ponencias
presentación de sesiones en panel
presentación de libros o revistas
Las modalidades de participación sincrónica en los días del congreso incluyen:
+
.
.
conferencias a cargo de expertos del país y del exterior
sesiones en panel institucionales, organizadas por la AAEAP y entidades auspiciantes.
conversatorios con expositores de las sesiones en panel
A todas/os las/os inscriptos/as en el congreso se les extenderá el certificado según su
participación como COORDINADOR/A-EXPOSITOR/A, EXPOSITOR/A, ASISTENTE,
MODERADOR/A y AUTOR/A DE PONENCIA (si es en co-autoría, la certificación es para los que
se hayan registrado en el Congreso).
Fechas Importantes:
e.
e.
e
+
14 de agosto: Recepción de resúmenes de ponencias, propuestas de sesiones en panel
y de presentación de libros y revistas.
19de agosto: Aceptación provisional de ponencias, sesiones en panel y de
presentación de libros y revistas.
26 de agosto a 22 de septiembre: videograbación de sesiones en panel y de
presentación de libros y revistas.
05de octubre: Recepción de Ponencias.
E CE EA MA A AR EE
https://aaeap.org.ar/congresos/ii-congreso-nacional-de-estudios-de-administracion-publi
ca/tt1593812335947-585054c9-13a3
adeap
ME
GOBIERNO
UNER TrabajoSocia
invita a presentar artículos de investigación, ensayos y
notas de investigación sobre la pandemia de coronavirus en
AméricaLatina
inglés, español o portugués
fecha límite: 1 de septiembre de 2020
Número especial: Conmociones políticas, sociales
culturales en la era de COVID-19 en América Latina
y
mayo de 2020, la Organización Mundial de la Salud declaró a
América Latina el epicentro de la pandemia mundial. Las
tasas de nuevos contagios siguen en aumento y se teme una
profunda recesión que podría arrojar a millones de personas
a la pobreza.
Como nuestro reciente número de junio reveló en la sección
sobre la pandemia, cuando el tejido social y la estabilidad
política de América Latina están en peligro, se vuelve
apremiante contar con estudios que proporcionen una
profunda comprensión de los vínculos entre la grave crisis
de salud y los problemas sociales, económicos, políticos y
culturales.
Este número especial de MARLAS—que se publicará el 31 de
octubre—espera contribuciones de las ciencias sociales, las
humanidades y las artes. Consideraremos artículos basados
en rigurosos acercamientos teóricos y metodológicos que
se centren en las consecuencias de la pandemia COVID-19 en
los países de América Latina. Los temas de interés incluyen,
pero no se limitan a:
los procesos de gobernanza
intersecciones de las prácticas tradicionales con la
medicina moderna, la política y el capitalismo
enfrentamientos entre religión y ciencia durante la
pandemia
democracia, libertad de expresión y justicia social
impactos en la cultura en los sistemas de
expóe grandes desigualdades na forma de disparidades de
renda, acesso desigual a saúde e educacáo e processos
políticos ineficazes na América Latina. Em maio de 2020, a
Organizacáo Mundial da Saúde declarou a regiáo o epicentro
da pandemia global. Novas taxas de contágio continuam a
aumentar, e crescem as preocupacóes com uma profunda
recessáo que pode lancar milhóes na pobreza.
Como nosso recente número de junho revelou numa secáo
especial sobre la pandemia, nesta conjuntura crítica,
quando o tecido social e a estabilidade política da América
Latina estáo em jogo, é urgente a necessidade de estudos
que fornecam uma compreensáo aprofundada dos vínculos
entre a grave crise de saúde e as questóes sociais, a cultura,
governanca, regimes políticos e a economia política.
Esta edicáo especial de MARLAS - a ser publicada em 31 de
outubro — está aberta a contribuicóes das ciéncias sociais,
humanidades e artes. Consideraremos artigos baseados em
rigorosas abordagens teóricas e metodológicas, prontas
para revisáo por pares, que enfoquem nas consequéncias da
pandemia da COVID-19 nos países da América Latina. Os
tópicos de interesse incluem, mas náo estáo limitados a:
de expressáo e justica social
Impactos na cultura, sistemas de crencas,
literatura, artes
la literatura, las artes
imigrantes, fronteiras, Estado-nacáo e
nacionalismo
nacionalismo
Los artículos de investigación (máximo 8.000 palabras) y los
ensayos y notas deinvestigación (máximo 3.000 palabras)
deben presentarse utilizando las directrices para el autor
en
A pandemia do novo coronavírus, além da tragédia humana,
a pandemia e os desafios a democracia, liberdade
migrantes, fronteras, el Estado-nación y el
están
Prazo: 1 de setembro de 2020
Número especial:
Turbuléncias políticas, sociais e culturais na era COVID-19 na
impactos na saúde, instituicóes estatais e
processos de governanca
intersecóes de práticas tradicionais com medicina
moderna, política e capitalismo
confrontos entre religiáo e ciéncia durante a
pandemia
impactos en la salud, las instituciones estatales y
que
América Latina
Inglés, espanhol ou portugués
América Latina
La pandemia del nuevo coronavirus, además de la tragedia
humana
que
acarrea,
pone
de
relieve
grandes
desigualdades, como ingresos dispares, acceso diferencial
a la salud y la educación y procesos políticos ineficaces. En
creencias,
convida autores a enviar artigos de pesquisa, ensaios e
notas de pesquisa sobre a pandemia do coronavírus na
la
página
web
https://www.marlasjournal.com/
septiembre de 2020.
a
más
de
MARLAS
tardar
el
1
en
de
Pueden anotar en La sección COVER LETTER de la primera
Lo
envío
Me
bajos:
om/about/submissions/
cto con la Editora de
Artigos de pesquisa (máximo de 8.000 palavras) e ensaios ou
notas de pesquisa (máximo de 3.000 palavras) devem ser
enviados usando as diretrizes do autor na página de MARLAS
na web em https://www.marlasjournal.com/, o mais tardar
em 1 de setembro de 2020.
Por favor, observar na secáo COVER LETTER na primeira
página de envio que o texto é para o número especial. Para
enviar
seu
trabalho
siga
este
link:
https://www.marlasjournal.com/about/submissions/
Para mais informacóes, entre em contato com a editora de
MARLAS, Ivani Vassoler-Froelich, ivani.vassoleregmail.com
Política pública €: polity
Política pública e polity
PALABRAS CLAVE
PALAVRAS CHAVE
HPolity
HPolity
Hbpolitics
Hpolítica pública
eo
iS
Eolo (ileMo 10 ollLes=
*Constituicáo
RODOLFO
CANTO SÁENZ
RESUMEN
RESUMO
Este artículo abordará la
relación que existe entre la
esfera de la polity y la
politics. En primer término
comprende las estructuras o
arreglos institucionales que
caracterizan a un sistema
político, mientras que el
segundo implica la esfera de
la política electoral. Este
artículo explora el estudio
del régimen constitucional o
polity para desarrollar una
teoría general de la política
pública en América Latina. A
partir
de
esta
idea
abarcaremos el contexto de
los conflictos surgidos en los
últimos años en países como
Chile y otros de la región.
Este
relacáo
artigo
entre
abordará
a
esfera
a
da
polity e a politics. A primeira
compreende as estruturas ou
arranjos institucionais que
caracterizam
um
sistema
político, enquanto a segunda
envolve a esfera da política
eleitoral. Este artigo explora
O
estudo
do
regime
constitucional ou polity para
desenvolver uma teoria geral
da
política
pública
na
América
Latina. A
partir
desta ideia abrangeremos o
contexto dos conflitos que
surgiram nos últimos anos
em países como o Chile e
outros na regiáo.
Profesor-investigador de la
Facultad de Economía de la
Universidad Autónoma de
Yucatán
Professor - pesquisador na
Faculdade de Economia da
Universidad Autónoma de
Yucatán
NA rodolto.cantocuady.mx
La influencia de la política (politics) en todo
el proceso de la política pública, desde el establecimiento de la agenda hasta la evaluación, está bien acreditada en la literatura. El
juego cotidiano de intereses entre actores
sociales y políticos, todos con diferentes
cuotas de poder, define en gran medida los
derroteros de la mayoría de las políticas públicas, una realidad que hoy pocos ponen en
duda. Sin embargo, con toda su influencia, la
política no explica en su totalidad esos derroteros. Las estructuras o arreglos institucionales que caracterizan a un sistema político su polity, como se les conoce en lengua inglesa- se cuentan entre los determinantes
esenciales de la política pública, y la institución de mayor trascendencia en cualquier democracia es su régimen constitucional, constitución política o simplemente constitución,
y el entramado institucional que de ella
deriva.
La influencia del régimen constitucional o
polity se da en un plano distinto a la competencia entre actores por promover sus objetivos en el proceso de la política pública y también al llamado ajuste partidario mutuo (Lindblom, 2007). El modelo pluralista o de
grupos de presión, como sabemos, no alcanza a dar cuenta de toda la política pública
(Lowi, 2007; Forester, 2007), como tampoco
alcanzan a hacerlo las demandas de la sociedad civil organizada y ni aun las demandas de
núcleos mayoritarios de la población. Así
como no todos los asuntos pueden someterse a consulta popular (como los derechos humanos, por ejemplo), tampoco pueden definirse todas las políticas públicas en el marco
de la politics y el ajuste partidario mutuo. En
una república democrática ciertos temas de
importancia cardinal quedan plasmados en
su constitución y no pueden modificarse
como resultado del juego cotidiano de intereses entre grupos de presión, por fuertes que
estos sean. Aun si algunos intentos de hacerlo llegaran a convertirse en leyes o decretos,
corresponde a la instancia superior del Poder
Judicial, o Suprema Corte, dictaminar su
constitucionalidad.
El análisis del régimen constitucional o polity
ofrece amplias posibilidades para el desarrollo de teoría general de la política pública en
América Latina, especialmente en el contexto
de los conflictos surgidos en los últimos años
en países como Chile y otros de la región. La
constitución de un país define los parámetros
esenciales en los que se desenvuelve la política pública, por ejemplo, al distribuir las facultades y competencias entre los distintos
poderes públicos y los ámbitos del gobierno,
al definir la duración de los mandatos de los
gobernantes y regular los mecanismos de su
elección o al contemplar o no dispositivos de
democracia directa al lado de los mecanismos de la democracia representativa, por
mencionar algunos temas.
Los imperativos constitucionales fijan parámetros a la naturaleza, contenidos y alcances
de las políticas públicas para adecuarlas a los
objetivos nacionales plasmados en la propia
constitución. Si estos objetivos incluyen, por
ejemplo, servicios universales de salud, educación y seguridad social gratuitos para toda
la población, los gobiernos estarán legalmente obligados a diseñar e implementar políticas que lleven a la práctica el mandato constitucional, incluida una política fiscal que
asegure los medios necesarios para hacerlo.
Las políticas redistributivas de la riqueza y el
poder para combatir la pobreza, la desigualdad y las discriminaciones de todo tipo, o
para asegurar trabajo y salario dignos, son
ejemplos de imperativos constitucionales de
corte progresivo que los gobiernos en turno
deben cumplir, al margen de sus preferencias
ideológicas. Pero la experiencia de algunos
países latinoamericanos demuestra que también puede ocurrir lo contrario: que la constitución establezca imperativos de corte regresivo que propicien la desigualdad en vez de
combatirla, por ejemplo, al reservar a inversionistas privados la oferta de servicios de
salud, educación superior o seguridad social
que los ciudadanos deberán comprar en la
medida de sus posibilidades. Imperativos
constitucionales como estos representarán
obstáculos formidables a las políticas redistributivas de la riqueza y el poder. Un buen
ejemplo del primer supuesto es la constitución alemana, y un ejemplo del segundo es la
constitución chilena, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet.
El artículo 20 de su constitución define a Alemania como un “estado federal social”, El
principio del estado social obliga a los responsables de la política pública en cada nivel
de gobierno a proteger el bienestar social de
los alemanes, y esta definición tiene implicaciones de fondo. Por ejemplo, luego de la
crisis financiera internacional de 2008, el gobierno alemán redujo considerablemente las
prestaciones sociales y de desempleo fusionándolas en un solo esquema y, a pesar de las
críticas recurrentes, eliminó de la agenda de
políticas la cuestión de la idoneidad de los niveles de beneficios. En 2010, la Corte Constitucional de Alemania dictaminó que los
nuevos niveles de beneficios no estaban en
línea con el texto constitucional y obligó al
Legislativo a reponer los anteriores. Su sentencia trajo de vuelta el tema de la idoneidad
de los niveles de beneficios a la agenda nacional de políticas públicas (Knill and Tosun,
2012: 43 y 114).
El caso chileno está en el otro extremo. La
actual constitución de Chile, promulgada en
1980 durante la dictadura de Augusto Pinochet, reserva alos individuos la responsabilidad de satisfacer con sus propios medios sus
necesidades de salud, educación y seguridad
social. Como escribe el analista chileno Jorge
Van de Wyngard:
La Constitución de 1980 “define el rol del
Estado como subsidiario y se prioriza
como eje del desarrollo el ejercicio de la libertad y el consiguiente emprendimiento
de las personas. El Estado deja de asumir
un rol paternalista y entrega la responsabilidad de proveerse la satisfacción de las
necesidades a las propias personas y a su
capacidad de esfuerzo, trabajo y superación... Ahora las personas han ido progresivamente entendiendo y asumiendo que la
satisfacción de las necesidades de salud,
educación, trabajo, seguridad social, desarrollo económico etc., son asuntos que
dependen priorita riamente
de
ellas
mismas y que ya no estará siempre el
Estado para proveérselas. Es indudable
que ese camino ha sido duro para algunos,
pero en definitiva ha generado una profunda transformación sociocultural, sobre
todo en las generaciones más jóvenes, que
entienden que deben ser capaces por sí
mismos de con figurar sus propias existencias, prescindiendo en buena medida
del Estado” (Van de Wyngard, 2013; citado
en Osorio Rauld, 2019).
En el marco de estas ideas, el sistema de pensiones chileno fue privatizado durante la dictadura, con la excepción de las pensiones de
los militares, que se mantuvieron a cargo del
Estado; también fueron privatizados amplios
sectores de la educación y la salud. Los resultados de las privatizaciones están a la vista:
las pensiones administradas por empresas
privadas promedian 150 dólares al mes, por
completo insuficientes para un retiro digno.
La educación superior de calidad requiere de
la contratación de créditos que están fuera
del alcance de la mayoría de los chilenos y la
privatización de los servicios de salud ha
dado lugar a una segmentación de los servicios en función de la capacidad de pago de
los individuos. Para la mayoría de los trabajadores chilenos, que perciben un salario pro-
medio de
unos
650 dólares
mensuales,
muchos de los servicios de salud que ofrecen
las llamadas Instituciones de Salud Previsional (ISAPRE), en manos privadas, sencillamente quedan fuera de su alcance. “Esto
genera inequidad inmediatamente, porque diferencia entre los grupos de pacientes que no
pueden pagar, los que pueden pagar menos y
los que pueden pagar más. La salud, la vida y
la muerte dependen del bolsillo" (Bernucci,
2019).
El descontento ciudadano generado por este
estado de cosas y acumulado durante décadas, llevó a un estallido social en el mes de
octubre de 2019 que se tradujo en el incendio
y destrucción de más de la mitad de las estaciones del tren metropolitano de Santiago,
disturbios violentos en las principales ciudades del país, enfrentamientos entre manifestantes y la policía que provocaron la muerte
de decenas de personas y centenares de heridos y -quizá lo más significativo- la manifestación más grande desde el golpe de estado
de 1973 en la capital del país, con la participa-
ción de alrededor de 1.2 millones de ciudadanos, uno de cada cinco habitantes de Santiago. Las dos principales demandas de los chilenos hoy en día son precisamente una nueva
constitución, que permita cambiar lo que
llaman la herencia neoliberal de la dictadura,
y una agenda social urgente que incluye “salario mínimo digno, pensiones básicas decentes, abaratamiento de los medicamentos,
acceso oportuno a la salud, condonación de
la deuda por créditos universitarios”, entre
otras demandas (Anfossi, 2019).
En efecto, para que los ciudadanos chilenos
puedan dejar atrás el modelo económico y
social heredado de la dictadura y avanzar
hacia el modelo europeo de bienestar social
un requisito insalvable es cambiar su constitución y, con ella, mucho del entramado institucional del Estado chileno, es decir, su
polity. Salud, educación y seguridad social
para todos, independientemente de su capacidad de pago, son políticas redistributivas
indispensables para asegurar la dignidad
humana en el sentido de Lasswell (1951) que
requieren el mandato constitucional expreso
de formularlas e implementarlas.
Pero la experiencia chilena también demuestra que cambiar una constitución no es en
modo alguno una tarea fácil, aun si se intenta
al más alto nivel. La presidenta Michelle Bachelet, del Partido Socialista de Chile, trató
de hacerlo al final de su mandato, sin éxito.
Hubo otros intentos, por lo menos desde una
década atrás, pero todos fueron infructuosos
(Van de Wingard, 2013). El relevo de una constitución por otra normalmente desborda las
posibilidades de las instituciones políticas
vigentes, incluidos los partidos políticos que,
inmersos en el cotidiano ajuste partidario
mutuo, no pueden por sí mismos agendar
transformaciones políticas tan radicales,
sobre todo cuando implican un pacto social
completamente nuevo, como se plantea en el
caso chileno. La política tradicional en una
democracia tiende a mantenerse en los
marcos del incrementalismo (Lindblom), y el
cambio constitucional que se plantea en
Chile es de tal magnitud que solamente el es-
tallido social de octubre de 2019 pudo hacerlo
posible. A la inversa, la constitución de 1980,
promulgada para institucionalizar el modelo
neoliberal de gobierno, solo se explica por el
régimen dictatorial de entonces, que no requirió del consenso democrático para imponerla.
La experiencia chilena deja una lección más.
El contraste entre un estado de cosas percibido como profundamente injusto por el grueso
de la población y un orden político incapaz de
responder a ese estado de cosas con políticas
redistributivas de la riqueza y el poder que
estuvieran a la altura de las demandas sociales condujo a un creciente distanciamiento
entre los ciudadanos chilenos y sus instituciones políticas, incluidos por igual los partidos y los poderes constitucionales. El descontento de la ciudadanía con el funcionamiento del sistema político no fue en modo
alguno repentino. Ya en 2016, el Programa de
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) reportó un incremento del porcentaje de chilenos que pensaba que la democracia funcionaba mal o muy mal, de 20% en 2012 a 40% en
2016. También, el informe del PNUD daba
cuenta de que el porcentaje de chilenos que
no se identificaban con ninguna posición política (ni izquierda, ni centro, ni derecha) pasó
de 34% en 2008 a 68% en 2016, y el de quienes
no se identificaban con ninguno de los partidos políticos existentes pasó de 53% en 2008
a 83% en 2016. El informe del PNUD concluía
que Chile enfrentaba en su sistema político
un problema estructural desde hacía más de
una década (PNUD, 2016; Osorio Rauld, 2019).
Sin embargo, a pesar de la visión crítica que
expresaban los chilenos respecto de las
élites y las instituciones públicas y privadas,
la encuesta del PNUD también mostró un aumento en el interés ciudadano por los asuntos
públicos y una visión positiva del futuro de su
democracia. La manifestación de 1.2 millones
de personas en Santiago, en octubre de 2019,
confirma que el distanciamiento entre los
chilenos y su sistema político no significaba
apatía o desinterés por los asuntos públicos,
[lo—,
sino tan solo un descontento creciente con sus
instituciones políticas que condujo al estallido
social. La experiencia chilena también refuerza
una tesis que tiende a ganar terreno en las ciencias sociales y en el análisis de políticas públicas: la democracia es necesaria pero no suficiente para abatir la pobreza, la desigualdad y la
exclusión social. También es necesaria la movilización de los desfavorecidos para catapultar
sus demandas a la agenda pública (Dréze y Sen,
2014; Canto, 2018).
Hasta antes del estallido social de octubre de
2019, el dominio de las élites chilenas permanecía incuestionado, atrincherado en una constitución diseñada para hacer prevalecer sus intereses frente a los de las mayorías chilenas. La
democracia, sujetada por esa constitución,
poco podía hacer para combatir a fondo la
desigualdad y mejorar las condiciones de vida
de los chilenos. La polity neoliberal permitió a
las élites diseñar instituciones económicas
para enriquecerse y perpetuar su poder a costa
de la vasta mayoría de las personas de la sociedad y convirtió a Chile en otro ejemplo de un territorio latinoamericano donde las instituciones
extractivas han generado excedentes elevados
que se concentraron en la cúspide de la pirámide social (Acemoglu y Robinson, 2014; Vázquez-Barquero y Rodríguez-Cohard, 2016).
En el contexto de una polity neoliberal, los partidos afines a los intereses de las mayorías tampoco podían hacer mucho para cambiar el
estado de cosas. Por lo demás, varios de los
partidos políticos en Chile apoyaban al statu
quo y se identificaban con una democracia funcional a los intereses de los más ricos. Por esto
mismo, los partidos políticos compartieron el
descrédito de las instituciones políticas antes
referido y fueron incluidos en el “que se vayan
todos”, exclamado en el estallido social de octubre de 2019 (Osorio Rauld, 2019).
Sin embargo, la organización política de los
desfavorecidos es imprescindible para llevar
sus demandas a la agenda pública, y el enorme
movimiento popular que siguió al estallido
social con toda probabilidad requerirá aliarse
con partidos afines o en todo caso crear uno
nuevo. Los partidos políticos, pese a sus bien
conocidos defectos, son necesarios en una democracia (Canto, 2014) y no hay duda de que seguirán desempeñando un papel relevante en la
nueva polity que habrá de sustituir a la constitución de 1980.
Los ejemplos de Alemania y Chile confirman el
poder de los arreglos institucionales que caracterizan a un sistema político para modelar el
proceso de la política pública. No solo el juego
cotidiano del poder define quién se queda con
qué, cuándo y cómo, o quién se queda fuera.
También lo hacen las estructuras institucionales, surgidas de anteriores batallas por el poder.
Las reglas que dan cuerpo a las instituciones
son resultado de esas batallas. La polity es, a fin
de cuentas, poder institucionalizado. Una nueva
constitución representa un nuevo pacto social,
con cláusulas y compromisos nuevos que normalmente responden a nuevas correlaciones de
fuerzas en el seno de la sociedad.
La sociedad chilena avanza por el mejor camino
al exigir una nueva constitución, que funde una
polity afín a los intereses de las mayorías. Hoy
un paréntesis provocado por la pandemia del
Covid 19 obliga a posponer por algún tiempo el
proceso constituyente, pero una vez superada
la contingencia, los chilenos deberán retomarlo
con todo su vigor. La constitución de 1980 es el
resultado de una histórica batalla perdida por la
sociedad chilena: su democracia misma, destruida por el violento golpe de Estado de 1973.
El estallido social de octubre fue el inicio de
otra batalla histórica, que habrá de ganar el
pueblo chileno para enterrar la polity neoliberal, herencia de la dictadura.
RALESTAO
Acemoglu, D. y Robinson, J. (2016). Por qué fracasan los países. México: Crítica-Paidós.
Anfossi, A. (7/12/2019), Lucha social en Chile, sin avances, La Jornada. Recuperado de
https://www.jornada.com.mx/ultimas/mundo/2019/12/07/lucha-so
cial-en-chile-sin-avances-4325.html
Bernucci, J. M. (20/11/2019), Secretario General del Colegio Médico de Chile. BBC News.
Recuperado de https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-50405749
Canto, R. (2014). Democracia y Políticas Públicas. El contorno de sus relaciones, Perspectivas de Políticas Públicas, No. 6, 13-41.
Canto, R. (2018). Movilización de los desfavorecidos: condición del desarrollo humano y
sostenible. Estudios Políticos, número 45, 83-112.
Dreze, J. y Sen, A, (2014). Una gloria incierta. India y sus contradicciones. Madrid: Taurus,
Forester, J. (2007). La racionalidad limitada y la política de salir del paso. En L. F. Aguilar
(Comp.), La hechura de las políticas (pp. 315-340). México: Miguel Angel Porrúa.
Knill, C. 8 Tosun, J. (2012). Public policy. A new introduction. London: Palgrave Macmillan,
Lasswell, H. D, (2007), La orientación hacia las políticas. En L. F. Aguilar (Comp.), El estu=
dio de las políticas públicas (pp. 79-103). México: Miguel Angel Porrúa.
Lindblom, C. (2007). La ciencia de "salir del paso””. En L. F. Aguilar (Comp.), La hechura de
las políticas (pp. 201-225). México: Miguel Ángel Porrúa,
Lowi, T. J, (2007). Políticas públicas, estudios de caso y teoría política. En L. F. Aguilar
(Comp.), La hechura de las políticas (pp. 89-117). México: Miguel Angel Porrúa.
Osorio, N. A. (2019), ¡Que se vayan todos, que no quede uno solo! La crisis institucional en
Chile: factores contributivos del socavamiento de las bases culturales de la democracia. Revista de Investigaciones Políticas y Sociológicas, volumen 18(2), 73-94,
PNUD (Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo) (2016). IV Encuesta Auditoría a la
Democracia. 9 de septiembre de 2016, Recuperado de https://www.cl.undp.org/content/chile/es/home/presscenter/pressrelea es/2016/09/09/pnud-presenta-iv-en-
cuesta-auditor-a-a-la-democracia.html
Van de Wyngard, J. (2013), Los aportes fundamentales de la Constitución de 1980 al siste-
ma jurídico-político y social chileno. Derecho Público Iberoamericano, número 2,
abril, 277-288.
Vázquez-Barquero, A. 8 J, C. Rodríguez-Cohard (2016), Endogenous development and institutions: Challenges for local development initiatives. Government and Policy, volu=
men 34 (6), 1135-1153.
O
Análisis del “Plan estratégico agroalimentario y
agroindustrial participativo y federal 2010-2016” en
Argentina a poco más de 3 añosdesufinalización
Análise do “Plano Estratégico Participativo e Federal
Agroalimentar e Agroindustrial 2010-2016” na Argentina
pouco mais de 3 anos apósa sua finalizacáo
PALABRAS CLAVE
PALAVRAS CHAVE
HPlan
Ec) [0]
Plano
HEstratégico
NE
No
No] dolrSide!
e Ello)
NE
+tArgentina
JOSÉ DANIEL
CARABAJAL
RESUMEN
RESUMO
En el
presente artículo se
analizará el "PLAN ESTRATEGICO
AGROALIMENTARIO
Y
AGROINDUSTRIAL PARTICIPATIVO
Y FEDERAL 2010-2016”. Teniendo
en cuenta que existen dos
versiones del mencionado plan
se tomará la última versión, es
decir la 2? versión. El PEA nace
como una iniciativa desde el
Ministerio
de
Agricultura,
ganadería y pesca de la Nación.
Este plan se enmarca dentro de
Este artigo analisará o "PLANO
ESTRATÉGICO PARTICIPATIVO E
FEDERAL
AGROALIMENTAR
E
AGROINDUSTRIAL
2010-2016".
Considerando que existem duas
versóes do plano mencionado, a
versáo
mais
recente
será
adotada, ou seja, a 2? versáo. A
PEA nasceu como uma iniciativa
do Ministério da Agricultura,
las
¡iniciativas
surgidas
del
acuerdo firmado en septiembre
del año 2000 en New York y
conocido como Declaración del
Milenio. El PEA toma ciertos
objetivos de este tratado y los
reformula
necesidades
Argentina. El
según
las
propias
de
PEA se define
como
un
plan
estratégico
impulsado por el gobierno y
participativo en sentido que se
convocará a diferentes sectores
agroalimentarios
y
agroindustriales de Argentina a
definir
dentro
un
plan
estratégico
de
los
límites
establecidos por el PEA y con
una metodología de trabajo
participativa preestablecida por
el
ministerio
de
agricultura
ganadería y pesca de la nación.
Pecuária e Pesca da Nacáo. Esse
plano faz parte das iniciativas
decorrentes do acordo assinado
em setembro de 2000 em Nova
York
e
conhecido
como
Declaracáo do Milénio. A PEA
seleciona
certos
objetivos
deste tratado e os reformula de
acordo
com
as
próprias
necessidades da Argentina. A
PEA é definida como um plano
estratégico
promovido
pelo
governo
e
participativo,
no
sentido
de
que
diferentes
setores
agroalimentares
e
agroindustriais
da
Argentina
seráo convocados para definir
um plano estratégico dentro dos
limites estabelecidos pela PEA e
com
uma
metodologia
de
trabalho
participativa
pré-estabelecida
pela
Ministério
da
Agricultura,
Pecuária e Pesca da Nacáo.
Licenciado en Ciencia Política
(Universidad Nacional de La Rioja)
Licenciado en Sociología
(Universidad Nacional de Santiago
del Estero) Investigador en Centro
de Investigaciones Jurídicas y
Sociales (CIJS) de la Universidad
Nacional de Córdoba.
Bacharel em Ciéncia Política
(Universidad Nacional de La Rioja)
Bacharel em Sociologia
(Universidad Nacional de Santiago
del Estero. Pesquisador do Centro
de Investigaciones Jurídicas y
Sociales (CIJS) da Universidad
Nacional de Córdoba.
NA]
licenciadojdcOgmail.com
Introducción
La palabra política refiere a esas acciones
emprendidas desde el Estado que procuran
alcanzar el bien común. Y el hecho de que
esas políticas sean públicas está indicando,
por oposición, que no se trata de una política
dirigida hacia un particular o hacia un grupo
reducido, sino que se trata de que la esencia
de esa política sea pública. Con estos elementos es posible afirmar que las políticas
públicas son acciones que realizan los gobiernos para brindar soluciones y buscar el
bien común de amplios sectores de la población sin importar su condición social política
o económica (Graglia, 2017; Repetto, 2010;
BID, 2006).
En el plan se detallan una serie de procedimientos e instrumentos a ser utilizados por
los actores involucrados, entre estos instrumentos se encuentran las definiciones de
Misión, Objetivo de Gran Visión., definición de
objetivos y metas cuantificables, futuros deseables, matriz F.O.D.A. y toda una amplia batería de herramientas propias del planeamiento de las ciencias empresariales. Con
esto se quiere significar también el fuerte
sentido comercial y productivo del PEA. Fue
un plan pensado para producir ganancias y
ampliar la capacidad productiva de las diferentes regiones del país. Se parte de la necesidad de generar un plus productivo con la intención de aprovechar el fuerte excedente
agropecuario que registraba el país, en esos
años, con el aumento de la exportación de
granos.
Procesos y metodología de planificación
estratégica
Los procesos y metodología empleada y sugerida por el PEA responden a un esquema
tradicional o típico de una planificación estratégica más propia de las ciencias empresariales antes que al conocido esquema de
fases de las políticas públicas propio de las
ciencias sociales y de la ciencia política.
En concreto la planificación del PEA se desarrolla de acuerdo a dos lógicas que van en paralelo, por un lado, la lógica metodológica,
ocho pasos, por otro lado, la lógica participativa, con doce etapas. Ambas lógicas deben
desarrollarse en forma simultánea, lo cual
coloca frente a la discusión abierta sobre la
conveniencia o no de esta lógica metodológica. Por un lado, están las concepciones a
favor del esquema de fases que argumentan
que sirve como esquema analítico del proceso de formulación de las políticas públicas.
En tal sentido las políticas públicas son vistas
como un esquema que permite su simplificación en contextos de complejidad y puede
usarse como una guía visual para el análisis
de las mismas. En este caso el PEA está destinado a servir de guía a los responsables de su
formulación en las distintas provincias donde
se implementa y lograr una planificación homogénea.
Por el lado de las concepciones en contra del
modelo de fases podemos sintetizarlas en la
falta de poder explicativo de las fases con
respecto a los procesos políticos y negociaciones entre Estado y grupos de actores involucrados en la problemática que la política
pública intenta dar respuesta.
En definitiva como guía para la elaboración de
sucesivas versiones del PEA este plan, tiene
de positivo el hecho de tener una estructura
secuencial y de fases para que los propios
participantes puedan entender la metodología, se debe tener presente que en este plan
participaron diferentes sectores sociales con
diversidad de intereses, por tanto se procuró
la uniformidad y cohesión de las diferentes
partes mediante un esquema homogéneo y
simplificado que garantice la participación de
todos los implicados.
El caso de su implementación en la provincia de Santiago del Estero
Los avances en cuanto al PEA en Santiago del
Estero fueron exiguos, por lo tanto, se analizaron los resúmenes trabajados por la Facultad de Agronomía y Agroindustrias de la Universidad Nacional de Santiago del Estero.
En el instrumento número 2 denominado
“Análisis de los Ejes Estratégicos de la Misión
del PEA2" se encuentra una matriz de trabajo
en la cual se inscriben los ejes estratégicos
de la misión, en las otras dos columnas lo que
se podría denominar la conformidad, o no,
con el eje propuesto y en la última columna, el
eje estratégico a ser modificado según la necesidad de cada actor involucrado. En este
caso los ejes estratégicos fueron dados por el
Estado a través del ministerio encargado de
la implantación a las distintas provincias (en
el caso de Santiago del Estero, el Ministerio
de la Producción) y los diferentes actores redefinen según sus particulares necesidades
y circunstancias de cada caso.
El instrumento 2 tiene 6 ejes estratégicos de
la Misión de los cuales se modificó y adaptó
la totalidad, quizás en algunos casos no
fueron modificaciones ni sustanciales ni importantes, por lo que refieren a una diferente
visión de la realidad por parte de los actores
implicados.
Para comprender a que se refieren estos ejes
estratégicos de la misión se cita una definición de Misión y la utilidad de la misma según
el propio PEA
“La Misión es, en este esquema, el punto
de partida para el diseño de los objetivos.
Es la guía o marco de referencia para
orientar las acciones y enlazar lo deseado
con lo posible. De aquí la trascendencia
que tiene la misión, ya que le da sentido a
las distintas políticas, programas y accio
nes destinadas a transformar lo que tene
mos en lo que queremos.” (PEA, 2010: 41)
El instrumento también incorpora al final una
sección para introducir otros ejes estratégicos. Hubiera sido interesante si se hubieran
introducidos algunos ejes en este campo,
tales como el calentamiento global, el uso racional del agua, la producción agrícola en
condiciones de sequía, prevención y contención de catástrofes naturales, combate de la
desertificación, etcétera.
Concretamente los ejes estratégicos propuestos se centran en cuestiones productivas y de comercialización, y el incremento de
la productividad asociada a la unidad regional para favorecer una salida competitiva de
la producción de cada región. Una vez trabajado el instrumento debe ser enviado al ministerio que lleva adelante la implementación
del PEA, es decir Ministerio de agricultura,
ganadería y pesca de la nación, en dicho requerimiento puede percibirse la centralidad
del Estado tal como lo planteamos más
arriba.
En el caso del instrumento 3 se enuncia los
objetivos por cada uno de los 6 ejes estratégicos, con la misma estructura, una matriz con
una columna para los objetivos sugeridos,
otra columna para marcar la no modificación,
la siguiente columna sirva para marcar modificación, y la última columna para anotar las
modificaciones al objetivo propuesto. Puede
notarse que existen ejes estratégicos que
contienen más de 20 objetivos, desde una
perspectiva más racional debieran reducirse
el número de objetivos a no más de 40 5 por
eje estratégico para hacer más mensurable y
posible el plan, garantizando de este modo el
cumplimiento de los objetivos. No obstante,
la mayoría de los ejes estratégicos contiene
más de 6 objetivos. La variedad de temas que
abordan los objetivos es tan amplia como su
número, y en algunos casos parecen hasta repetitivos con otros objetivos de otros ejes estratégicos.
En el caso del instrumento 8 se observa una
matriz (Matriz de metas) muy compleja de
llenar con muchos indicadores, difícil de
seguir, se requiere gran cantidad de información para su llenado, es de suponer que se
trató de una matriz que debieron llenar los
actores individualmente y luego se procedería a la confección de una mega matriz de
metas.
Actores involucrados en el PEA
En este caso es posible evidenciar el carácter
participativo del plan no se diluye en las
mismas instituciones estatales, sino que pretende ser inclusivo de los actores involucrados en la realidad misma de la problemática
que pretende resolver, también se ve el carácter solo instrumental del gobierno, pues sus
órganos solo actúan facilitando las condiciones de desarrollo del PEA.
“Los actores deben ser vistos, en esta perspectiva, como activamente involucrados en
forjar su propio destino, y no simplemente
como recipientes pasivos de programas de
desarrollo forjados en el lejano escritorio de
una organización burocrática estatal.” (PEA,
2010: 12)
En este sentido se debe entender a las políticas
públicas como un proceso de negociación e interacción entre el Estado y los diferentes actores sociales, tal como se plantea más arriba. El
sentido de este procedimiento seria captar las
relaciones de fuerzas y las distribuciones de
poder que se delinean en una política pública.
Lo que sí es de destacar, haciendo un análisis
cuantitativo de los actores, es la fuerte presencia de los actores del “sistema científico tecnológico” con seis (6) actores, lo cual demuestra
el carácter científico que se pretende dar a la
producción agroindustrial y agroalimentaria,
también se puede observar al énfasis social
puesto en los actores del “sistema social” contando cinco (5) actores representativos a nivel
local.
También es posible advertir el fuerte carácter
federal del plan pues se trata de dotar de independencia a las unidades ejecutoras (es decir
las provincias) y se intenta que ellas mismas
sean las que elaboran el plan de acuerdo a su situación particular en el área productiva agroindustrial y agroalimentaria, según sus posibilidades. Siguiendo con el carácter federal del
plan se establecen una serie de consejos federales, los cuales nuclean al conjunto de actores
genéricamente mencionados más arriba, cada
uno con una función diferenciada, pero con un
mismo objetivo rector y una confluencia de resultados. El propio plan define a los consejos
federales:
“Los Consejos Federales son espacios destinados a facilitar el juego ordenado de los
actores con normas de funcionamiento y
relaciones de interacción previamente establecidas. En dichos espacios, se utilizará
como mecanismo participativo el trabajo en
mesas (subsectoriales, regionales, provin
ciales y temáticas) en función de las características de cada Consejo. Dichas mesas
trabajarán en base a lineamientos estratégicos aportados por el MAGyP.” (PEA, 2010:
34)
En este sentido se considera importante la iniciativa de la pluralidad de aportes que puedan
hacerse desde estos diferentes consejos, ya
que constituyen una base interdisciplinaria que
facilita el mejor tratamiento del problema que
se intenta solucionar.
Conclusiones
Es posible concluir de este análisis que el PEA
noes más que un manual de recomendaciones o
de instrucciones acerca de cómo desarrollar y
como llevar adelante. Quizá por su carácter de
inconcluso o de pautas para la formulación de
un producto final se deba el hecho de las versiones de las cuales estamos analizando su versión 2 y así seguirán apareciendo versiones
hasta que se llegue finalmente a la versión definitiva del plan. En cuanto a los instrumentos
analizados se estima que no favorecen la participación y la originalidad de los aportes, pues al
venir con una guía a ser modificada o ampliada
se está condicionando de alguna manera la
agenda de temas y objetivos a plantear. Sería
deseable que los instrumentos vinieran en
blanco sin sugerencias de modo que todos los
aportes sean realizados desde la propia inventiva de los actores involucrados.
Con la escasa tradición de cumplimiento de los
planes que se tienen en la Argentina un plan de
estas características es de dudosa finalización,
y teniendo en cuenta el carácter provisorio del
PEA, habrá que esperar una versión final y definitiva para su implementación.
En síntesis, este instrumento presenta algunas
dificultades expresadas por el actor Facultad de
Agronomía y Agroindustrias de la Universidad
Nacional de Santiago del Estero para su completamiento, las dificultades tienen que ver con
el tipo de información solicitada, la dificultad
de acceso las fuentes de información, entre
otras. También es notable el carácter puramente cuantitativo de los datos requeridos. Luego
el instrumento incorpora definiciones agrupadas en dimensiones, y al final agrega 95 preguntas que deben funcionar como disparadores
de datos cualitativos, de las cuales se tomarán
las más relevantes.
ASES
Banco Interamericano de Desarrollo (2006) La política de las políticas públicas, Progreso
económico y social en América Latina: Editorial Planeta Mexicana
Graglia, J (2018). Políticas públicas: 12 retos para el siglo 21: Konrad Adenauer Stiftung.
Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (2010). Plan Estratégico Agroalimentario y
Agroindustrial Participativo y Federal 2010 2016. PEA. Versión 2.
Repetto, F (2010). "Coordinación de políticas sociales: abordaje conceptual y revisión de
experiencias latinoamericanas”, en Los desafíos de la coordinación y la integralidad
de las políticas y gestión pública en América Latina: Jefatura de Gabinete de Ministros.
E
Capacidade estatal:
dose e instrucóes de utilizacáo
ANDRÉ
MARENCO
Profesor del Programa de
Postgrado en Políticas Públicas de
la Universidad Federal de Rio
Grande do Sul (UFRGS)
Professor do Programa de
Pós-Graduacáo em Políticas
Públicas da Universidade Federal
do Rio Grande do Sul
RESUMEN
RESUMO
State Capacity ha visto una
fuerte expansión en su uso
como herramienta analítica para
la investigación de instituciones
y políticas públicas. Abrazando
amplias
dimensiones,
la
polisemia
se
ha
vuelto
inevitable.
Considerando
la
"capacidad del Estado" como
enforcement, o el poder de
alterar la distribución previa de
recursos, frente a oposición real
o potencial, este paper sigue la
literatura
que
adopta
la
profesionalización
de
las
burocracias gubernamentales y
su impacto en la capacidad del
Estado
para
formular
e
implementar políticas en áreas
conflicto potencial o latente.
State Capacity conheceu forte
El procedimiento adoptado para
verificar esta proposición fue
examinar
el
impacto
del
indicador de profesionalización
de
las
burocracias
gubernamentales en 20 países
de América Latina en diferentes
áreas públicas. Fue posible
identificar
una
asociación
fuerte y positiva entre la métrica
adoptada aquí para "capacidad
estatal" y "provisión de bienes
públicos",
"distribución
equitativa
de
recursos"
y
"acceso
a
la
justicia”
e
igualmente fuerte pero negativa
con "corrupción del Ejecutivo".
expansáo em seu uso como
ferramenta analítica
para a
NA
amarencoufrgsOgmail.com
investigacáo sobre instituicóes
e políticas públicas. Envolvendo
dimensóes amplas a polissemia
tornou-se
inevitável.
Considerando
"capacidade
estatal” como enforcement, ou
poder para alterar distribuicáo
prévia de recursos, diante de
real ou potencial oposicáo, este
paper segue
adota
a
literatura
profissionalizacáo
que
de
burocracias governamentais e
seu
impacto
sobre
as
habilidades
do
Estado
para
formular
e
implementar
políticas em áreas de conflito
potencial ou latente.
O procedimento adotado para
verificar
tal
proposicáo
consistiu
impacto
em
do
examinar
indicador
O
de
profissionalizacáo
de
burocracias governamentais em
20 países na América Latina
sobre diferentes áreas públicas.
Foi
possível
identificar
associacáo forte e positiva
entre a métrica aqui adotada
para "capacidade estatal” e
"provisáo de bens públicos”,
“distribuicáo
¡gualitária
de
recursos” e “acesso á justica” e,
LIDIA
TEN CATE
Pesquisadora do Grupo de
Pesquisa Instituicóes Políticas
Comparadas (IpoC) da
Universidade Federal do Rio
Grande do Sul (UFRGS) e bolsista
do Conselho Nacional de Pesquisa
(CNPg).
Investigadora del Grupo de
Investigación de Instituciones
Políticas Comparadas (IpoC) de la
Universidad Federal de Rio Grande
do Sul (UFRGS) y becaria del
Consejo Nacional de Pesquisa
Científica (CNPq).
igualmente forte mas negativa
com
“corrupcáo
do
Poder
Executivo”.
ES
Capacidad Estatal conoció fuerte expansión
en su uso como herramienta analítica para la
investigación sobre instituciones y políticas
públicas. Sin embargo, la audiencia alcanzada terminó por presentar su cuenta. Revisiones de la literatura internacional sobre el
tema permiten reconstituir un panel sobre
conceptos adoptados, dimensiones analizadas, medidas empleadas y efectos y resultados esperados por la provisión de “capacidad
estatal”
(Cingolani,
2013;
Cingolani,
Thomssom and Crombrugge, 2015; Souza él
Fontanelli, 2020). Abarcando dimensiones
amplias como “coercitiva”, “fiscal” y “administrativa”, sino también “política”, “transformativa”, “territorial”, “infraestructural” y
“legal”, y un amplio ámbito de formas de
mensuración, de genéricas (PIB per capita,
tasa de asesinatos, densidad de red ferroviaria, censo, indicadores del servicio postal, índices de corrupción) a específicas (ingreso,
profesionalización burocracia, infraestructura disponible), la polisemia se volvió inevitable. Considerando resultados o utilidades esperadas, “capacidad estatal” debería ser
capaz de responder por control de la violencia (Huntington, 1968), prosperidad (Acemoglu € Robinson, 2012), crecimiento econó-
mico (Evans € Rauch, 1999; Acemoglu, Gar-
cia-Jimeno € Robinson, 2015), provisión de
bienes públicos (Nistotskaya 8. D'Arcy, 2018;
Mecling and Nahm, 2018) condiciones favora-
bles para democracias (Tilly, 2007) o corrupción y calidad de democracias (Rothstein,
2011).
La polisemia conceptual que contagiara la
noción de “state capacity” atravesó los
mares, ofreciendo nuevos contornos para su
ensanchamiento conceptual: arreglos institucionales (Gomide € Pires, 2015), capacidades socioestatales (Vaz, 2018), gobernanza
(Gomide € Pires), capacidades burocráticas
(Souza, 2016; Marenco, 2017), capacidades
administrativas + políticas (Grin et al, 2019).
El conceptual stretching (Sartori, 1970) aquí
se vuelve saliente al mezclar categorías que
implican en eficiencia, desempeño, hacer
más con menos en condiciones de interacciones horizontales, con herramientas diseñadas para disecar relaciones marcadas por
conflicto y asimetría, donde “capacidad” im-
plica en poder para tomar decisiones sobre
oposición existente. De la misma forma,
abarca circularidad entre los medios necesarios para la provisión de “capacidad estatal”
(coerción, leyes y burocracia administrativa),
con efectos producidos por su disponibilidad
(provisión de servicios públicos, eficiencia,
desarrollo).
La duda aquí se refiere a hasta qué punto la
polisemia observada no corresponde a observaciones válidas, pero correspondientes a diferentes arenas de políticas públicas. Como
demostró Lowi (2009) en su conocida taxonomía, variaciones en las policies adoptadas se
refieren a la probabilidad de coerción en su
aplicación (inmediata o remota) y su destinatario (individual versus ambiental/colectiva).
De esta forma, políticas redistributivas son
aquellas que generan ganadores y perdedores identificables: Implican en la destinación
progresiva o regresiva de recursos, renta o
propiedad de x para y, diseñando juegos de
suma-cero. En la misma dirección, políticas
regulatorias generan aplicación de reglas y
sanciones, promoviendo beneficios sociales
difusos.
Así, la “capacidad” necesaria para implementar agendas de políticas en áreas de conflicto
reducido e interacción horizontal es distinta
de aquella exigida cuando se trata de transferir y redestinar recursos, regular cambios
económicos, imponer sanciones y determinar
ganadores y perdedores.
Capacidad estatal, burocracias y enforcement
En este punto, vale la pena un regreso a los
orígenes. Revisitando trabajo seminal de Tilly
(2007) sobre “state capacity", esta es comprendida en modo restricto, equivalente a la
intervención de agentes estatales capaz de
alterar la distribución de recursos, prerrogativas, estatus, renta o propiedad previamente
fijados, utilizando medios como coerción, decisiones, reglamentos, procedimientos, leyes,
información, conforme se deprende en sus
palabras,
State capacities means the extent to wich
interventions of state agents in existing
A
A
non-state resources, activities and interpersonal connections alter existing
distributions of those resources, activities and interpersonal connections as
well as relations among those distributions. (Tilly, 2007:16)
Esto puesto, los retos para el uso de "capacidad estatal” como herramienta analítica
válida para explicar decisión/implementación
de políticas públicas están asociados a dos
fronteras: (1) la identificación de récords analítico parsimonioso y una métrica para “capacidad estatal”, a través de variables e indicadores apropiados para mensurarla; (2) una focalización de las áreas de políticas públicas
que pueden ser explicadas por esta categoría
analítica, distinguiéndola de un instrumento
de mil utilidades.
implement official goals, especially over
the actual or potential opposition of
powerful social groups or in the face of
recalcitrant socioeconomic circumstances. (Skocpol, 1985: 9).
Considerando “capacidad estatal” como enforcement, o poder para alterar distribución
previa de recursos, delante de real o potencial
oposición, este paper sigue la literatura que
adopta profesionalización de burocracias gubernamentales y su impacto sobre las habilidades del Estado para formular e implemen-
mn
Bajos índices de “capacidad estatal” inviabilizan la provisión de bienes públicos y no garantizan un ambiente favorable a interacciones democráticas. A medida en que crece la
escala en que burocracias públicas codifican
y hacen cumplir leyes, ofrecen seguridad, recogen impuestos que financiarán servicios
públicos, promueven inversiones y aseguran
la legitimidad de decisiones democráticas, es
de esperar que indicadores de bienestar y
transparencia institucional registren avances. Sin embargo, se puede esperar un turning point, a partir del cual la asimetría en las
relaciones entre principals (ciudadanos, políticos) y sus agentes (burócratas) crea incentivos para la captura de las agencias gubernamentales por el civil service, independiente de cuán profesionalizado este sea (Miller €
Moe, 1983; Mccubbins, Noll, Weingast, 1987;
Lewis € Selin, 2015).
LDAE Cíe
Los marcos establecidos de que “capacidades estatales” implican en alterar distribución previa de recursos (Tilly) y que esto
ocurre delante de real o potencial oposición
(Skocpol), implican en atributos distintos de
mera eficiencia o gobernanza, correspondiendo a escenario de interacciones de suma-cero, y condiciones capaces de producir
enforcement junto a potenciales perjudicados o perdedores como resultado de las elecciones promovidas por agentes estatales (Acemoglu, Garcia-Jimeno 8 Robinson, 2015;
Akhtari et al., 2015; Nistotskaya € Cingolani,
2016: D'Arcy € Nistotskaya, 2017).
Diferentes estudios buscaron comprobar la
asociación entre burocracias profesionales e
incremento en la capacidad estatal para promover la implementación de políticas públicas. Esfuerzo sistemático en esta dirección
fue elaborado por Evans and Rauch (1999),
identificando una asociación entre profesionalización del servicio público y desempeño
económico. Para esto, los autores construyeron una “escala weberiana” para medir niveles de profesionalización verificados en el
servicio público en una muestra de 35 países
en desarrollo, en el intervalo entre 1970 y
1990. Como indicadores se utilizaron reclutamiento meritocrático y carreras profesionales
de largo plazo en el servicio público. Los resultados encontrados revelaron una correlación positiva (r=0.67, significativa al 1%) entre
los valores de la “escala weberiana”y crecimiento económico, medido por la variación en
el PIB per capita en el período. Kohli (2010),
adaptó la “escala weberiana”, como una proxy
de “capacidad estatal”, replicando nuevamente la relación entre calidad de la burocracia
pública e indicadores de desempeño económico de países en desarrollo. Igualmente
convergentes fueron encontrados de estudio
promovido por el Banco Interamericano de
Desarrollo, sobre el impacto de las instituciones políticas sobre políticas públicas en América Latina (Bid, 2007).
"E
a
$
No muy distante de este punto, podemos encontrar las coordenadas para “capacidad estatal”, fijadas por Skocpol (1985):
o
MN
tar políticas en áreas de conflicto potencial o
latente (Evans €, Rauch, 1995; Acemoglu, Garcia-Jimeno 8 Robinson, 2015; Nistotskaya
and D'Arcy, 2018).
Parece posible aislar dos elementos capaces
de explicar las conexiones entre la profesionalización del servicio público y la adopción
de determinadas políticas: (1) información
técnica disponible incrementa la influencia
de burocracias meritocráticas en la definición de la agenda de políticas públicas; (2)
reclutamiento meritocrático y carreras profesionales estables amplían la autonomía de
estos agentes con relación a ciclos políticos
y electorales, en especial cuanto a la adopción de policies redistributivas o reglamentarias, que abarcan imposición de costos concentrados, y, por lo tanto, relaciones de suma-cero entre ganadores y, especialmente,
perdedores dispuestos al veto en estas
arenas (Krause, Lewis 8 Douglas, 2006; Lowi,
2009).
res de “producción de bienes públicos”,
“distribución igualitaria recursos”, “acceso
a lajusticia” y “corrupción en el Poder Eje
cutivo”, todos extraídos de la Base V-DEMiLos resultados pueden ser verificados en
los gráficos a seguir:
Relación entre criterio para nombramientos en la administración pública e
indicadores públicos, países América
Latina (2019)
Producción de bienes públicos
Distribuciónigualitaria recursos
Procedimientos y resultados
El procedimiento adoptado para verificar tal
proposición consistió en examinar el impacto
del indicador de profesionalización de burocracias gubernamentales en 20 países en
América Latinai sobre diferentes áreas de decisiones de destinación. Como proxy de profesionalización burocrática, se adoptó la
escala “Criteria for appointment decisions in
the state administration”ii, da Base V-DEM,
así constituida:
O = todos los nombramientos para cargos públicos se basan en discrecionalidad personal
1 = mayoría de los nombramientos basada en
relaciones personales
2 = cerca de mitad de los nombramientos
basada en relaciones personales
3 = mayoría de los nombramientos basados
en procedimientos meritocráticos
4 = nombramientos exclusivamente basados
en procedimientos meritocráticos
Para evaluar su efecto sobre decisiones
de destinación, se escogieron indicado-
y
—_—
Nombramiéntos
nombramientos
Fuente: Varieties of Democracy (V-DEM), procesamiento de los autores
Comparando profesionalización de la administración gubernamental medida por la
escala V-DEM para criterios de nombramiento
en el servicio público- con indicadores referentes a decisiones públicas en áreas que
abarcan asimetría y conflictos redistributivos, fue posible identificar asociación fuerte
y positiva entre la métrica aquí adoptada para
“capacidad estatal” y “provisión de bienes
públicos”, “distribución igualitaria de recursos” y “acceso a la justicia” e, igualmente
fuerte pero negativa con “corrupción del
Poder Ejecutivo”.
radas presentaron valores que corroboran las
hipótesis, mostrando relación fuerte y positiva
entre capacidad estatal y políticas redistributivas y reglamentarias (Lowi, 2009). El indicativo
es de que burocracias reclutadas de forma meritocrática generan más capacidad estatal para
enfrentamiento de los conflictos involucrados
en la creación e implementación de políticas
con “perdedores y “ganadores”. La relación negativa encontrada con la proxy de corrupción en
el poder ejecutivo indica poder fiscalizador y de
alivio del ciclo electoral cuando de la capacitación de la burocracia. El mecanismo por el cual
eso sería posible, como citado anteriormente,
se da por la calificación de la influencia burocrática en la definición de la agenda y la ampliada autonomía que el cuerpo adquiere con relación al ciclo político.
Conclusión
A través de análisis de países de América Latina,
el presente estudio trae al debate el argumento
de que la polisemia observada en el avance del
uso de la capacidad estatal como herramienta
analítica, estaría relacionada a las diferentes
arenas de políticas públicas analizadas en los
estudios realizados hasta el momento. Con la
revisión de los principales estudios de que se
dispone información, se puede identificar el
uso e incluso ampliación del término “capacidad estatal" relacionado a diferentes políticas.
/
La prueba de las arenas de destinación mensu-
e
RARE
NN
>
Y
|
DAVE 0
LA
=
El estudio trae un ejercicio que además de la
búsqueda por poner a prueba el argumento presentado, se dispone a superar uno de los retos
relacionados al uso del modelo de capacidad
estatal, la focalización necesaria para indicar lo
que de hecho se puede explicar. Con el uso de
marcos ya expuestos por otros autores como
Tilly (2007) y Skocpol (1985) se identifican características que implican escenarios para
además de eficiencia o gobernanza, y sí relacionados con escenarios donde hay arenas con
conflictos. Sumándose a la literatura que considera la profesionalización de burocracias factor
relevante para explicación de niveles distintos
de capacidad de estatal, se analizó el impacto
del indicador de profesionalización de burocracias gubernamentales en diferentes áreas de
decisiones de destinación.
pa
Acemoglu, D.; Garcia-Jimeno, C. y Robinson, J. (2015). “State Capacity and Economic De
velopment: A Network Approach”, American Economic Review, Vol 105(8):
2364-2409.
Acemoglu, D.; Robinson, J. (2012). Why Nations Fail? The origins of power, prosperity and
poverty. New York: Crown.
Akhtarl, M. etal. (2015), “Political Turnover, Bureaucratic Turnover, and the Quality of
Public Services”. Working Paper, Harvard University.
Banco Interamericano de Desenvolvimento/BID (2007) A política das políticas públicas. 2.
ed, Rio de Janeiro: Elsevier,
Cingolani, L. (2013). “The state of state capacity: a review of concepts, evidence and measures”. Maastricht: UNU-MERIT, Working Paper, n. 53.
Cingolani, L.; Thomsson, K. and Crombrugghe, D. (2013). Minding Weber more than ever?
The impact of state capacity and bureaucratic autonomy on development goals.
Bordeaux ECPR General Conference.
Evans, P.; Rauch, J. (1999). “Bureaucracy and growth: A cross-national analysis of the
effects of "Weberian" state structures on economic growth”. American Sociological
Review, 64(5):748-765, 1999.
Gomide, A.; Pires, R. (2016). "Governanca e capacidades estatais: uma análise comparativa de programas federais”. Rev. Sociol. Polit., v. 24, n. 58, p. 121-143
Grin, Eduardo; Fernandes, G. (2019). "Capacidades estatales en los municipios brasileños:
resultados tímidos en un contexto de autonomía política local y un escenario de
dependencia financiera”. En: Grin, E. etal (Org.). Capacidades estatales en gobiernos locales iberoamericanos - actualidad, brechas y perspectivas. led.Rio de Janeiro: FGV Editora, p. 92-148,
Huntington, S. (1968). Political order in changing societies. New Haven: Yale University
Press.
Kohli, A. (2010). “State capacity for development". Global Event Working Pape,r New York:
UNDP.
Krause, G.; Lewis, D. y Douglas, J. (2006). “Political appointments, civil service systems
and bureaucratic competence: organizational balancing and executive branch revenue forecasts in american states”. American Journal of Political Science, vol. 50, n*
3, pp. 770-787.
Lewis, D. y Selin, J. (2015). “Political Control and the Forms of Agency Independence”.
George Washington Law Review, vol. 83, n* 4/5, pp. 1487-1516.
Lowi, T. (2009). Arenas of Power. Boulde: Paradigm Publishers.
Marenco, A. (2017). “Burocracias Profissionais Ampliam Capacidade Estatal para Imple-
'
De esa forma el estudio abre precedente para
análisis similares con uso de otros recortes, a la
luz de la capacidad estatal como modelo posible para profundizar estudios sobre arenas de
destinación redistributiva y reglamentaria,
Dentro del escenario democrático hoy esas
arenas son responsables por importantes cambios en la dinámica institucional y presupuestaria de diferentes países y otros niveles territoriales. Para más allá el refinamiento del foco de
la capacidad estatal mientras herramienta analítica induce al paso de maduración necesaria
para la técnica, una vez que ya se consolidó su
uso, ahora se hace necesario estudios como
este para su uso correcto en cantidad y método
como lo señala el título.
py
mentar Políticas? Governos, Burocratas e Legislacáo em Municípios Brasileiros”.
Dados - revista de ciéncias sociais, v. 60, p. 1025-1058.
Mccubbins, M.; Noll, R.; Weingast, B. (1987). "Administrative procedures as instruments of
political control”. Journal of Law, Economics and Organization, 3, 243-279.
Meckling, J; Nahm, J. (2018). "The power of process: State capacity and climate policy”.
Governance 31: 741-757. https://doi.org/10.1111/gove.12338
Miller, G. y Moe, T. (1983). “Bureaucrats, legislators and the size of government”. American
Political Science Review, vol. 77, pp. 297-323.
Nistotskaya, M.; D'Arcy, M, (2018). “State Capacity, Democracy and Public Good Produc-
tion: The case of Child Mortality”. QoG Working Paper Series N* 14,
Rothstein, B. (2011). The Quality of Government: Corruption, Social Trust, and Inequality in
International Perspective. Chicago: University Of Chicago Press.
Sartori, 6. (1970). "Concept Misformation in Comparative Politics”, American Political
Science Review Vol. 64, No. 4, pp. 1033-1053
Skocpol, T. (1985). “Bringing the state back in: strategies of analysis in current research”.
En: Evans, P.; Rueschemeyer, Dietrich; Skocpol, Theda, eds. (1985). Bringing the
State Back In. Cambridge, England: Cambridge University Press. ISBN
978-1-107-71713-8.
Souza, C.; Fontanelli, F.(2020). Capacidade estatal e burocrática: sobre conceitos, dimensdes e medidas”. En: Mello, J.; Ribeiro, V.; Lotta, G.: Bonamino, A. V.; Paes de
Carvalho, C. (Org.). Implementacáo de políticas e atuacáo de gestores públicos: experiéncias recentes das políticas de redugáo das desigualdades. led.Brasilia: Ipea,
v. 1, p. 45-71.
Souza, C. (2016). "Capacidade Burocrática no Brasil e na Argentina: Quando a Política Faz
a Diferenca”, En Gomide, A. y Boschi, R. (eds.), Capacidades Estatais em Países
Emergentes: o Brasil em Perspectiva. Rio de Janeiro, Ipea, pp. 51-103.
Tilly, C. (2007). Democracy. Cambridge: Cambridge University Press.
Vaz, A. (2018). "Dispersáo decisória, centralidade política e entropia burocrática: mitigan
do custos transacionais na gestáo pública”, Opinido Pública, Campinas, vol. 24, n* 3,
set.-dez., p. 622-669.
¡ Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Ecuador, Guatemala,
Honduras, Jamaica, ll México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana,
Surinam, Uruguay, Venezuela.
li To what extent are appointment decisions in the state administration based on personal
and political connections, as opposed to skills and merit?
li https://www.v-dem.net/en/, consulta el 11 de mayo de 2019,
ES
Protecáo social no Brasil e Argentina:
governos conservadorese os desafios
atuais diante da pandemia
La protección social en Brasil y Argentina:los
gobiernos conservadores y los desafíos
actuales ante la pandemia
PALABRAS CLAVE
PALAVRAS CHAVE
+FProtección social
HProtecáo social
Nile
SEE
IN)
NE]
SES
DIE
LUCIANA
PAZINI PAPI
Professora Adjunta do curso de
Administracáo Pública e Social da
Universidade Federal do Rio Grande do
Sul; Dr. em Ciéncia Política pela mesma
Universidade e coordenadora do
Núcleo de Pesquisas em Gestáo
Municipal — NUPEGEM.
Profesora Adjunta del curso de
Administración Pública y Social de la
Universidade Federal do Rio Grande do
Sul. Doctora em Ciencia Política por la
misma universidad, y coordenadora del
Núcleo de Investigaciones en Gestión
Municipal (NUPEGEM)
NA luppapifEyahoo.com.br
RESUMEN
RESUMO
Este trabajo analiza en forma
comparada el desarrollo de la
protección en social en forma
comparada en Brasil y Argentina
en el siglo XXI. Para esto,
consideramos las trayectorias
Este
individuales
asumiendo
de
cada
país,
que
ambos
avanzaron durante los años
2000 en la construcción de
estructuras
de
protección
social de una manera más
inclusiva, y que los gobiernos
conservadores tuvieron como
objetivos poner en jaque el
modelo de Estado y las políticas
sociales
anteriores.
Las
elecciones de Macri y Bolsonaro
tomaron este giro, pero en la
Argentina el retorno al modelo
anterior
se
produjo
rápidamente, mientras que en el
Brasil
persiste
la
peor
experiencia
de
desmantelamiento del Estado y
sus mecanismos de protección
social del período posterior a la
democratización.
documento
analisa
0
desenvolvimento da protecáo
social no Brasil e na Argentina
no século XXI. Consideramos as
trajectórias individuais de cada
país, assumindo que ambos
avancaram durante os anos
2000
na
construcáo
de
estruturas de protecgáo social de
uma forma mais inclusiva, e que
os
governos
conservadores
tinham como objetivos pór em
LÍGIA
MORI MADEIRA
xeque o modelo de Estado e de
políticas sociais anteriores. As
eleicóes de Macri e Bolsonaro
sacramentaram essa guinada,
no entanto na Argentina 0
retorno ao modelo anterior
deu-se rapidamente, enquanto
o Brasil ainda perdura na pior
experiéncia de desmonte do
Estado e de seus mecanismos
de protecáo social do período
pós-redemocratizacáo.
Professora Associada do Departamento
de Ciéncia Política e Coordenadora do
PPG em Políticas Públicas da
Universidade Federal do Rio Grande do
Sul; Dra. em Sociologia pela mesma
Universidade e coordenadora do Núcleo
de Estudos em Direitos, Instituicóes e
Políticas Públicas — NEDIPP
Profesora Asociada del Departamento
de Ciencia Política y coordinadora del
PPG en Políticas Públicas de la
Universidade Federal do Rio Grande do
Sul. Doctora en Sociología por la misma
universidad y coordenadora del Núcleo
de Estudios en Derechos, Instituciones
y Políticas Públicas NEDIPP
NA
ligiamorimadeiraGgmail.com
HS
Introducáo
No caso em análise, consideradas as trajetó-
rias individuais de cada país, ambos avancaram durante os anos 2000 na construcáo de
estruturas de protecáo social em moldes mais
inclusivos, assim como ingressaram em go-
Diante do cenário recente de pandemia ficou
evidente o quanto a protecáo social de um
país é fundamental na gestáo dos efeitos da
crise provocada pela doenca. Sistemas de
protecáo com maior capacidade de cobertura
universal de saúde e assisténcia social,
assim como com elevada articulacáo intersetorial, como os casos dos países escandinavos e como o continental alemáo, tém revela-
vernos conservadores cujos objetivos eram
pór em xeque o modelo de Estado e de políticas sociais anteriores. As eleicóes de Macri e
Bolsonaro sacramentaram essa guinada, no
entanto na Argentina o retorno ao modelo anterior deu-se rapidamente, enquanto o Brasil
mitigar seus efeitos (Madeira et al, 2020).
te do Estado e de seus mecanismos de prote-
do melhores condicóes de lidar com crise e
Considerando a atualidade do debate e o
quanto de desafios se impóem aos países no
combate ao coronavírus, o artigo se propóe a
refletir sobre a importáncia da protecáo
social, em especial sobre as políticas de combate a pobreza e assisténcia social atuais no
Brasil e Argentina países, considerando o
peso que as políticas conservadoras pretéritas e atual (no caso brasileiro) podem ter na
(des) estruturacáo das políticas públicas.
Analisar esse cenário do ponto de vista comparado pode dar pistas sobre modelos de
protecáo social bem-sucedidos, assim como
dos constrangimentos que afetam o processo
de implementacáo de medidas e seus efeitos
políticos.
Estudos em políticas públicas ganharam
grande destaque na agenda da ciéncia política latino-americana, dado o crescente interesse académico sobre o que os governos
fazem, como fazem e por que fazem. Se por
um lado autores do policy study argumentam
com frequéncia que a definicáo dos tipos de
políticas é determinada pelas instituicóes
(tipos de governo e natureza dos regimes
(Przeworski et al, 1997); por outro, há os que
defendem que as políticas públicas também
fazem a política (Lowi, 1972). Nesse sentido,
as políticas geram tendéncias, difusáo,
podem sustentar e derrubar governos. Sinteticamente a policy pode influenciar a politics.
E na confluéncia dessas duas linhas de argumento que este artigo trabalha, indicando
que legado e dependéncia de trajetória de
políticas públicas sáo fruto de definicóes
institucionais do passado, mas indicando
também que escolhas sobre as políticas públicas em curso no contexto da pandemia tém
um peso grande na manutencáo ou derrubada de governos.
;
A
A
.
:
o
4
“3
,
1
YA
y
rusa
Y
»
GN
A
"7
+ a » dl
4 E ' Dí
xi
Á
sy
dl
TS
'
ainda perdura na pior experiéncia de desmon-
cáo social do periodo pós-redemocratizacáo.
Quais as diferencas entre atravessar uma
pandemia em um e outro modelo de Estado?
Os estudos em políticas públicas podem
ajudar a compreender e responder essa questáo.
Nas sociedades latino-americanas, que acumulam problemas históricos como exclusáo
social, pobreza, desigualdade e baixa quali-
dade de prestacáo de servicos em educacáo,
saúde e assisténcia social, o conhecimento
científico crítico dos problemas sociais é fundamental para uma intervencáo estatal adequada e de qualidade. Os estudos em políticas públicas tém muito a contribuir, sobretudo os de perfil comparado.
Sendo assim, este artigo tem como objetivo
refletir sobre a construcáo de estruturas de
protecáo social, especialmente náo contribu-
tivas, no Brasil e Argentina e seus efeitos (políticos e de políticas) na gestáo da crise da
COVID-19,
Para tanto organizamos a seguinte estrutura:
após essa introducáo, apresentamos as características e especificidades da protecáo
social desenvolvida na América Latina, para
posteriormente analisar comparativamente
Brasil e Argentina com base em seus sistemas
de protecáo social e políticas de desenvolvimento. Iniciamos explicitando porque compa-
rarambos os países e tracamos um panorama
da construcáo da protecáo social com foco,
sobretudo, nos padróes erigidos a partir dos
anos 2000 e no desmonte acarretado pelo
contexto político conservador que emplacou
nos dois países com os governos Macri e Bol-
sonaro. Por fim refletimos acerca dos desafios atuais da protecáo social diante da crise
do coronavírus.
ue
q
1. Protecáo social na América Latina
As sociedades, desde as mais tradicionais
até as mais complexas, sempre buscaram
formas de manter-se bem e em equilibrio
para lograr dos benefícios da vida coletiva.
Para tanto, historicamente, desenvolveram
estratégias de protecáo diante das insegurancas da vida natural e social que permitiram a sobrevivéncia e a integracáo, sob
várias formas (Di Giovanni, 1998).
No caso latinoamericano, conceituacáo e categorizacáo dos regimes de bem-estar é
tarefa complexa, dadas as especificidades do
nosso continente, em que há sucessáo de períodos democráticos e autoritários; direitos
civis e políticos náo garantidos e/ou efetivados paratoda a populacáo; diferencas territoriais, económicas, demográficas significativas; disparidades em matéria de gasto entre
os países; implementacóes em espacos temporais distintos (Del Vale, 2010).
Iniciando pelas formas comunitárias e familiares, como cooperativas de auxilio mútuos e
organizacóes ligadas ou náo á Igreja, os sistemas de protecáo social foram se complexificando com o avanco do capitalismo e o processo de industrializacáo e urbanizacáo que
trouxeram consigo a agudizacáo das vulnerabilidades e inseguranca sociais (Kerstenetzky, 2012). Comisso, o Estado nacional foi assumindo paulatinamente o dever de protecáo
frente ás crescentes demandas oriundas da
modernidade, provendo protecáo social por
meio de políticas públicas sociais (Di Giovan-
Entretanto, as origens do Welfare State latinoamericano podem ser encontradas nas explicacóes de Mesa Lago (1989, 1996, 2003),
que considerou o surgimento da seguridade
social como um fenómeno dirigido pela demanda, refletindo as mudancas sociais e estruturais dos países, gerando sistemas particularistas, estratificados e meritocráticos. Já
de acordo com Draibe e Riesco, na América
Latina os Estados de Bem-Estar dirigiram o
processo de construcáo segundo duas sucessivas estratégias: a desenvolvimentista e
a liberal (Draibe €: Riesco, 2011).
relacáo com o processo de complexificacáo
societária derivada da evolucáo do modelo
Na primeira, dada a auséncia dos atores responsáveis pelos processos originários (trabaIhadores assalariados e empresariado),
coube ao Estado atuar na constituicáo do capitalismo, cumprindo o papel de ativista e regulador, criando instituigóes básicas de infraestrutura e as bases da acumulacáo capitalista, ao mesmo tempo em que erigiu um
sistema de políticas sociais (de educacáo e
de saúde, com coberturas limitadas, mantendo-se os graus de exclusáo social) responsável pela protecáo dos trabalhadores assalariados (Draibe € Riesco, 2007, P. 42; Draibe €
Riesco, 2011, p. 239-240). Assim relegou o
restante da populacáo -os trabalhadores
rurais, os pobres urbanos e a massa de integrantes do crescente mercado informal de
trabalho a gestáo filantrópica da pobreza.
ni, 1998; Castel, 2003). Por ter uma intrincada
produtivo, os sistemas de protecáo social se
configuraram conforme ás peculiares realidades socioeconómicas de cada sociedade e
seus distintos níveis de conflito (Marshall,
1967).
Se, nos países centrais no contexto do pós-guerra, investia-se em grande medida na
ampliacáo das segurancas sociais rumo a
processos de universalizacáo de políticas
como educacáo e saúde, nos países periféri-
cos, dado o distinto tempo histórico e a distinta rota do desenvolvimento, iniciou-se a
montagem dos modernos sistemas de protecáo sociale atentativa de construcáo do welfare state no ámbito do capitalismo dependente apenas nos anos 1930 (Draibe, 2011;
Diniz, 2007) e ainda hoje há forte discussáo
sobre sua rota incompleta (Santos, 1987).
Na segunda, erigida após e em funcáo da
crise dos anos 1980, foram a agenda das insti-
a
|
tuicóes internacionais e a adocáo de tendéncias gerais responsáveis por mudancas profundas nos sistemas latino-americanos de
políticas sociais, que deram centralidade ao
tema da pobreza, a expansáo de programas
sociais focalizados, especialmente de transferéncia monetária para os grupos sociais
mais pobres, fazendo frente aos programas
sociais universais (Draibe € Riesco, 2011, p.
243-244). Apesar de os autores apontarem
que tais reformas náo obedeceram a um
padráo único no continente, nem afetaram os
países de modo homogéneo, é certo que
houve fragilizacáo nos programas sociais e
reducáo nos Estados de Bem-estar, sem con-
tudo, eliminar suas estruturas prévias (Draibe
8 Riesco, 2011, p. 245).
Há vasta literatura classificando os países
latino americanos em diferentes modelos de
protecáo social (Del Valle, 2010; Barrientos,
2009 Draibe él Riesco, 2006, 2009, 2011) partindo seja da classificacáo a respeito dos primeiros sistemas de seguridade social (Mesa
Lago, 1989); considerando a estrutura ocupacional e a cobertura dos sistemas de seguridade social (Del Valle, 2010); seja levando em
conta o grau de industrializacáo e aincorporacáo política de grupos marginalizados para
a formacáo dos sistemas de protecáo social
(Pribble, 2011), ou o nível de universalismo1
(Pribble, 2014).
A despeito das diferentes classificacdes e do
período em que foram produzidas, parece
haver consenso na literatura em apontar trés
grandes grupos na América Latina, sendo que
no primeiro encontraríamos países como
Uruguai, Argentina, Chile e Costa Rica; num
segundo grupo estariam Brasil e México; e
num terceiro os países da América Central,
além de Bolívia, Equador, Peru e Paraguai. O
Brasil, dadas suas dimensóes e suas desigualdades, muda de posicáo em alguns modelos, variando entre o primeiro e o segundo
grupo.
Assim, apesar das diferencas terminológicas,
costumava-se identificar, portanto, Argentina, Chile, Costa Rica e Uruguai como os regimes de maior éxito no continente, dado o alcance de melhores resultados de suas políticas de bem-estar, os níveis relativamente
baixos de pobreza e desigualdade e os altos
níveis de capital humano, gasto social e alocacáo de benefícios de maneira progressiva;
enquanto Brasil, México tendendo a ficar em
um patamar inferior, caracterizado pela exis-
téncia de sistemas de protecáo, mas ainda
com parcelas da populacáo descobertas. Os
demais países, coincidentemente os de baixa
renda (LICs), estavam classificados, em várias
análises, como tendo regimes excludentes.
Dentre todas essas classificacóes, nos é
muito cara a que considera fatores como o
legado das políticas, a competicáo eleitoral e
as características dos partidos (náo apenas
em termos ideológicos, mas principalmente
sua estrutura organizacional e seus mecanismos de linhagem), somados a outros fatores
como o desenho político institucional, a ca-
pacidade de mobilizacáo da sociedade civil, o
papel dos atores internacionais e a perfor-
mance da economia na modelagem da natureza e do escopo das reformas nos sistemas de
políticas sociais na América Latina (Pribble,
2014, p. 10).
Partindo desse cenário, em que Brasil e Ar-
gentina ora figuram em um mesmo grupo de
classificacáo de sistema de protecáo social,
ora em grupos distintos; mas cuja trajetória
recente indica a presenca da segunda rota em
direcáo ao universalismo, optamos por apresentar razóes para compará-los.
2. A problemática da protecáo social e do
desenvolvimento em Brasil e Argentina: por
que comparar Brasil e Argentina?
Brasil e Argentina sáo dois países que cumprem os requisitos necessários a pesquisa
1."Universalism refers to social policies that guarantee coverage for a set of essential social services (preschool, primary, and secondary education as well as
health care) and ensure a basic minimum income during the working years and after exiting the labor market because of old age, sickness, or unemployment, In
this way, the concept of universalism recognizes the important role of state-provided social spending, but is simultaneously concerned with the question of
whether this spending reaches marginalized population. [...] My definition of universalism does one step further, contemplating to what extent social policies improve the quality of services and the size of transfer payments, as well as whether the financing of such programs is fiscally sustainable” (Pribble, 2014: 7-8).
E
comparada: proximidade de sociedades no
rais, mais uma vez esses dois países seguiram rotas semelhantes: elegeram governos
de centro-esquerda como resposta, e, nesse
caso, náo apenas acompanharam a onda da
tempo e no espaco, similaridade nos fatos
observáveis e certa dessemelhanga no am-
biente em que ocorrem. Quer dizer, sociedades sujeitas a agáo de mesmas causas, com
alguns tragos originários comuns e importantes dessemelhancas no ambiente interno
(Bloch, 1963). Os dois países foram fundados
na relacáo centro-periferia, possuem as
maiores dimensóes geográficas da América
Latina e acumulam problemas ligados ao desenvolvimento económico e á inclusáo social.
Ademais, fazendo fronteira entre si, possuem
forte peso político na regiáo, influenciando
os demais países a adotarem náo apenas modelos económicos, mas projetos políticos e
desenhos de políticas públicas.
América Latina, mas lideraram esse processo
de mudanca, dado seus pesos políticos na
regiáo. Nos anos 2015 e 2016, respectivamente, ambos os países guinaram sua política á
direita novamente, no caso brasileiro por
meio do impeachment da presidenta Dilma
Rousseff (PT), deixando seu vice Michel
Temer (PMDB) no poder, responsável por iniciar o processo de retirada e desmonte do
Estado aprofundado com a eleicáo de Jair
Bolsonaro (do Partido Social Liberal - PSL- no
momento da eleicáo e atualmente sem partido); enquanto no caso argentino, por meio do
voto popular, a populacáo levou ao poder
Mauricio Macri (Proposta Republicana) cuja
agenda liberal acabou por aprofundar a crise
económica argentina e a restringir essa experiencia a apenas um mandato.
Portanto, apesar das distincgóes culturais e
aspectos que singularizam a formacáo nacional e simbólica das sociedades, em termos
processuais -— políticos e económicos - pode-se afirmar que ambos produzem (e respon-
No que se refere á construcáo da protecáo
social, em ambos os países ela foi forjada a
dem a) fenómenos relativamente sincrónicos
(Fiori, 2007). Isso é evidente quando observamos alguns paralelismos.
partir de uma concepcáo contributiva, por
meio dos seguros socials voltados aos trabaIhadores formais e, em geral, urbanos, em que
a carteira de trabalho era o único garantidor
de direitos e cidadania. Atrelado a um processo de desenvolvimento coordenado pelo
Estado, típico de países periféricos, Brasil e
Argentina conduziram o processo de industrializacáo e a sustentacáo para o surgimento
de classes (empresariado e trabalhadores
assalariados urbanos) por meio da concessáo
de direitos e protecáo exclusivos aqueles en-
Do ponto de vista político económico, ainda
como colónia e logo após suas independéncias, ambos implementaram modelos de desenvolvimento económico voltados ao exterior (agroexportacáo). A partir da década de
1930, no Brasil, e 1940, na Argentina, dado o
cenário de crise, ambos os países tentaram
inverter importacóes e ampliaram o papel do
Estado na conducáo da economia, da industrializacáo e na producáo de uma incipiente
protecáo social. Na década de 1970, passa-
volvidos em relacóes de assalariamento
formal. Com isso, os demais indivíduos, tra-
ram concomitantemente por regimes autoritários, e, na década seguinte, por transicóes
democráticas, com pequenas diferencas
temporais nos acontecimentos. Na década de
1990 foram atingidos pela crise económica e
aplicaram reformas pró-mercado e as orientacóes do consenso de Washington no que
tange ás privatizacóes, a descentralizacáo e
a focalizacáo de políticas sociais. Na virada
do século XXI, a partir do desgaste da aplicacáo das ¡delas político-económicas neolibe-
balhadores rurais ou informais, ficaram sem
qualquer tipo de cobertura de protecáo orientada pelo Estado, sujeitos a filantropia realizada predominantemente por instituigóes caritativas, eclesiásticas e por programas subsidiários desenvolvidos por primeiras damas.
No Brasil o movimento de constituicáo do sis-
Pr!
4
tema incipiente de protecáo social iniciou em
1930 com Getúlio Vargas atrelado ao projeto
|
Ea
de construcáo do Estado moderno de bases
industriais. Observa-se nesse período o surgimento de um conjunto de iniciativas de
criacáo de órgáos gestores de políticas sociais tais como o Ministério do Trabalho, Indústria e Comércio, e o Ministério de Educa-
cáo e Saúde Pública, assim como a normatizacáo de direitos ligados ao trabalho: a instituicáo da carteira de trabalho, a jornada de
8h diárias no comércio e indústria, a regulamentacáo do trabalho feminino, a regulamentacáo do trabalho de menores, o direito a
férias, além de pensóes e aposentadorias a
serem providas pelos Institutos de Aposentadorias e Pensóes (IAP"S) (Earp e Kornis,
2004: 38). Esses direitos foram estruturados
em um modelo de protecáo social focado nos
trabalhadores urbanos sob protecáo de um
Estado que objetivava manter a ordem e incluir esta camada societária no mercado de
consumo. Já a protecáo social náo contributi-
va - ou seja, o conjunto de programas e acóes
que buscam assegurar um nível básico de
bem estar económico e social a todos os
membros da sociedade, possibilitando sustentar níveis de qualidade de vida considerados básicos para o desenvolvimento das
pessoas (Cecchini 8 Martínez, 2011) - ficou
relegada a iniciativas voluntárias, filantrópi-
cas, configurando-se até 1988 como um
campo de baixa prioridade estatal.
Na Argentina trés principios básicos orientaram acóes de protecáo social simultanea-
mente até meados do século XX: acdes filan-
trópicas de atencáo aos pobres, veiculadas
pelas instituigóes de la Sociedad de Beneficenciaz; um extenso sistema público de educacáo básica moldado sobre o principio da cidadania; e um crescente sistema de seguridade social contributiva destinado aos trabaIhadores assalariados, configurando uma
visáo trabajo céntrica que impregna até hoje
os olhares sobre o modelo de bem estar
social argentino (Arcidiácono, 2012). No período peronista, aprofundou-se e massificou-se tal modelo de protecáo social centrada na
defesa dos trabalhadores formais, com
E
Jl dl
i
ho]
;
>
E
y
;
e A
q
enfase na seguridade contributiva (Isuani,
2008, Repetto 8: Masseto, 2011). Com efeito,
esse foi um período em que se expandiu a
participacáo do Estado na atencáo médica e
na ampliacáo da cobertura do sistema previdenciário. No entanto no que se refere ao sistema de assisténcia social, houve o aprofundamento do modelo de benemeréncia iniciado pela Fundacáo Eva Perón, que se perpetuou como legado para a protecáo social náo
contributiva ao longo da história argentina.
Conforme Isuani (2008: 35), os programas sociais prestados pela beneficéncia pública
foram assumidos logo no fim do governo peronista em 1955, tendo diferentes denominacóes: Acáo social, desenvolvimento social e
bem estar social, todas responsáveis por
prestar assisténcia aos pobres distribuindo
alimentos, vestimentas, materiais de construcáo e transferéncia de subsidios diretos.
Processos de democratizacáo marcaram os
dois países durante os anos 1980 e 1990, com
direitos sociais inscritos e (re) escritos nas
Constituicóes brasileira e argentinas, com definicóes e compartilhamento de competéncias de políticas sociais que acabaram por dar
grande foco a descentralizacáo. As garantias
constitucionais oriundas de grande atuacáo
da sociedade civil e de movimentos sociais
criaram grandes expectativas pela ampliacáo
da protecáo social nos países e a subtracáo
de seus passados autoritários e centralizadores, exigindo reformulacáo das instituig0es
estatais e maior abrangéncia das políticas
públicas.
No entanto, se os documentos constitucionais garantiram cidadania, o período de
grande recessáo que atingiu a América Latina
nessas décadas acabou marcando a adocáo
de políticas de liberalizacáo, pela flexibilizacáo das relacóes laborais e entrega de empresas públicas á iniciativa privada. Assim, ao
contrário do cumprimento do texto legal, em
termos da protecáo social foram décadas que
representaram o desmonte do ELADBES (Draibe, 2011) e a producáo da chamada “nova
questáo social”, gerada pelos altos níveis de
desemprego, subemprego, informalidade e a
exclusáo social (CEPAL, 2014; Repetto € Dal
Masseto, 2011).
QT
e
dl
ed
2. Foi uma instituicáo criada pelo presidente Bernardino Rivadavia em 1823, quando decidiu que o Estado se encarregaria do cuidado com os pobres. A partir
desse momento as damas da oligarquia de Buenos Aires presidiram a instituicáo conduzindo-a com base na lógica da benemeréncia (Castineiras, 2013).
ES
questáo social”, gerada pelos altos níveis de
desemprego, subemprego, informalidade e a
exclusáo social (CEPAL, 2014; Repetto 8, Dal
Masseto, 2011).
No Argentina, que investiu desde os primórdios em um modelo de inclusáo por meio do
assalariamento, o contexto recessivo (dos
anos 1980 até inícios do século XXI) produziu
um impacto em termo do aprofundamento
dos problemas sociais (Repetto €: Dal Masetto, 2011). Assim, as fortes variacóes nos Índices de pobreza medidos em funcáo da renda,
sensíveis as mudancas macroeconómicas, le-
varam a um empobrecimento inclusive dos
setores médios (ibidem, 2011)».
O Brasil náo destoou muito dessa realidade.
Em 1993 o número de indivíduos considerados “pobres” (com renda domiciliar per
capita inferior a linha de pobreza) chegou em
60,9 milh0es de brasileiros e a taxa de pobre-
za (fracáo da populacáo com renda domiciliar
per capita inferior á linha de pobreza) a
43,0%. A desigualdade, medida pelo Índice de
Gini, atingiu seu nível máximo em 1993
(0,604) se comparado com o ano de 2012,
quando o coeficiente baixou incisivamente
até o valor de 0,530. A respeito da ocupacáo
no mercado de trabalho, até o ano de 1999
havia uma tendéncia crescente ainformalizacáo, chegando-se a um patamar de quase
52,0% da forca laboral nos anos 2000 (Campos, 2015).
Toda essa situacáo de crise pressionou á
apresentacáo de solucóes por parte do sistema de protecáo social á populacáo mais atingida: os pobres e vulneráveis. Apesar da ampliacáo dos direitos constitucionais e da inclusáo da assisténcia social como um pilar da
protecáo social náo contributiva garantidora
de direitos no caso brasileiro, as opcóes em
ambos países foram pela implementacáo de
acóes assistenciais focalizadas, incluindo-se
políticas dispersas de combate á pobreza,
como “transferéncias condicionadas de
renda”; transferéncias de responsabilidade
de execucáo de servicos para ONG's e, no
caso brasileiro descentralizacáo da autono-
mia para os municipios desenharem e imple-
mentarem acóes de assisténcia social confor-
me suas capacidades (Papi, 2017). Desta
forma, avancou-se pouco na institucionaliza-
cáo de uma política de protecáo social náo
contributiva que fizesse frente ao crescente
empobrecimento e vulnerabilidade social trazidos pela crise dos anos 1990,
2. Os anos 2000 os governos de centro-es-
querda no Brasil e Argentina: o debate
sobre desenvolvimento social
A desigualdade de renda e oportunidades
sempre foi uma das principais barreiras para
o desenvolvimento humano, social e económico na América Latina. No entanto, a partir
dos anos 2000 mudancas significativas e a
emergéncia de novas formas de assisténcia
social caracterizaram um processo de infle-
xáo na história da protecáo social de nossos
países, caracterizados por novos moldes de
assisténcia social (Barrientos € Santibáñez,
2009, p. 6).
Essas reformas foram conduzidas a partir da
eleicáo dos governos de centro-esquerda no
Brasil e Argentina, revisando-se o padráo de
fragilidade das políticas de protecáo social
típico de um cenário anterior de deterioracáo
social. Tanto Nestor Kirchner quanto Luiz
Inácio Lula da Silva elencaram as políticas de
combate a pobreza e de assisténcia social
como prioritárias para atender ao projeto político eleito nas urnas.
Inserido em um debate sobre desenvolvimento social dependente de uma conjuncáo de
3. Em 1948 ano foi criada a Fundacáo Ajuda Social Maria Eva Duarte de Perón por um decreto presidencial (220.564/48) para ser presidida pela primeira-dama
Eva Perón. Nela se iniciou um trabalho social voltado as criancas, idosos, máes solteiras e mulheres sem lar— pessoas pertencentes aos estratos mais carentes
da populacáo. Foi fundada uma casa de passagem para mulheres e criancas desabrigadas (Castineiras, 2013).
4. No Brasil a nova Constituicáo Federal em 1988, inscreveu os direitos sociais como fundamentais para se assegurar ajustica social. Conhecida como constituicáo cidadá, incluiu a assisténcia social como parte da seguridade social também composta pela saúde e a previdéncia. Com isso avancou-se em uma concepcáo
de protecáo social náo contributiva, sendo a assisténcia social reconhecida como uma política pública garantidora de direitos, voltada, especialmente, a segmentos populacionais que se encontram em situacáo de vulnerabilidade social e económica. Na Argentina a Constituigáo federal de 1853 foi reformada em 1994,
momento em que se incluiu no artigo 14, a seguridade social com um carácter de integral e irrenunciável. Entretanto, por náo ser uma constituicáo detalhada
como a brasileira, náo foi dado o devido alcance a área de assisténcia social como no Brasil,
5. De 1990 a 1996 a inflacáo aumentou e chegou a ter média anual de 252% (1990 a 1996), o desemprego alcancou uma taxa histórica de 18,80% em 1997 e a pobreza agravou significativamente (Fausto 8, Devoto, 2004).
E
fatores - como a eleicáo de partidos de centro-esquerda/ esquerda; somada á expansáo
económica de países emergentes como a
China, que impulsionou a demanda por minerais e alimentos, garantindo um ciclo de recuperacáo económica com grande expansáo de
exportacáo de produtos primários, ampliando as taxas de crescimento; permitiu-se uma
expansáo no gasto social, o que favoreceu
uma mudanca paradigmática na concepcáo
das políticas sociais e um novo padráo de desenvolvimento social baseado em quatro
eixos principais: uma considerável expansáo
do gasto em educacáo e saúde e no investimento social em geral; um aumento dos salários médios reais e dois salários mínimos; um
incremento na cobertura e na qualidade da
protecáo social aos trabalhadores; a expansáo e consolidacáo de transferéncias condicionadas de renda aos pobres (Larrea, 2015,
p. 109-109).
Para esse novo padráo de desenvolvimento
social, os governos defenderam a recuperacáo do papel do Estado de modo a promover o
crescimento do país náo apenas do ponto de
vista económico, mas sobretudo do resgate
da dívida social.
No caso brasileiro, o governo Lula iniciou seu
governo priorizando o combate á pobreza uma das bandeiras centrais de sua eleicáo.
Para isso criou o Programa Bolsa Família,
principal programa de transferéncia de renda
condicionada do governo federal e o maior da
América Latina que chegou ao ano de 1013
com 13,8 milhóes de famílias inseridas, o que
correspondia a um quarto da populacáo brasileira (Campello € Neri, 2013). A criacáo do
Ministério do Desenvolvimento Social e Com-
bate a Fome (MDS) em 2004 buscou articular
e centralizar as políticas de transferéncias
dls asrento, de , guna alimentar,
Quanto á assisténcia social, a criacáo do Sistema Unico de Assisténcia Social (SUAS) em
2004 e das Normas Operacionais Básicas
(NOBs) de 2005, 2010 e 2012 configuraram
uma concepcáo de sistema orgánico da política pública, em que a articulacáo entre as
trés esferas de governo constituiu-se como
elemento fundamental, a exemplo do Sistema
Unico de Saúde (SUS). O SUAS estabeleceu a
regulacáo e a organizacáo das acóes socioassistenciais em todo o território nacional,
dado que todos os entes federados tém responsabilidades e atribuicóes específicas estabelecidas na Norma Operacional Básica do
SUAS.
Os avancos da época no campo assistencial
náo foram poucos: dados do Censo SUAS de
2010 mostravam uma crescente instituciona-
lizacáo da assisténcia social no Brasil, por
meio de instalacóes de equipamentos públicos. Até 2010, foram implantados no país
7.475 novos CRAS, em 5.254 municipios (95%
dos municipios brasileiros) e 2.109 novos
CREAS. Dados do Censo SUAS de 2011 apontavam que 75% dos municipios brasileiros passaram a contar com secretarias municipais
exclusivas. Ademais registrou-se um crescimento de profissionais de 9,6% ao ano, entre
2005 e 2010, totalizando 232.085 profissionais, sendo que 47% eram compostos por vínculos estáveis. Embora estudos apontassem
para essa fragilidade do SUAS — funcionários
com vínculo precário (BRASIL, 2014) - e a ne-
cessidade de se avancar na qualificacáo técnica por meio de contratos com protegáo aos
direitos
trabalhistas,
o
quadro
mostrava
muitos avancos se comparado ao período an-
terior. Do ponto de vista dos indicadores sociais, as políticas combinadas de transferéncia de renda, inclusáo social, trabalho e renda
ofereceram um panorama distinto dos anos
1990. A taxa de pobreza recuou entre 2003 e
2012, chegando a 15,9% da populacáo e o
número de indivíduos considerados “pobres”
chegou ao menor patamar desde 1994 atingindo 30,4 milhóes em 2012 — número ainda
6. No caso brasileiro, os principais programas de Transferéncia Condicionada de Renda no governo de Fernando Henrique Cardoso foram: o Bolsa-Alimentacáo
(na área de saúde); o Agente Jovem (na Secretaria da Assisténcia Social) e o Auxflio-Gás (2002). Posteriormente, foram acoplados o programa Bolsa-Escola em
1998 e o Programa de Erradicagáo do Trabalho Infantil (PETI). Na Argentina, houve uma proliferacáo de políticas focalizadas de forma que em 1996 o Estado contava com 48 programas sociais destinados a pessoas em situacáo de pobreza e vulnerabilidade social. Entre os programas focalizados de protecáo social/assisténcia social, cabe atencáo especial ao que ficou sob a orientacáo do Ministro do Desarollo Social: O Programa de Políticas Sociales Comunitarias (PROSOCO)
e o Programa Alimentar Nutricional Infantil (PRANI); o Plan Trabajar 1, II, III, que mais tarde se converteria no Plan Jefes e Jefas de Hogar. Para mais sobre o
assunto ver Papi (2017).
ES
significativo, mas muito inferior a qualquer
outro da série (IPEA, 2015).
No caso argentino, mesmo sem uma densidade institucional, comparável á brasileira (Díaz
Langou et al, 2010), os governos de centro-esquerda (Nestor e Cristina Kirchner) avancaram na institucionalizacáo de políticas náo
contributivas a partir do programa Asignación Universal por Hijo (AUH)s, criado em 2009.
Apesar de se tratar de um programa de transferéncia de renda, o AUH tornou-se uma iniciativa de protecáo social das mais relevan-
tes nas últimas décadas, avancando-se em
um piso de protecáo social no país ao garantir um repasse mínimo para cerca de dois miIhóes de familias argentinas. Os impactos do
programa implicaram na reducáo nos índices
de pobreza, indigéncia e desigualdade de
renda no país (Repetto 8 Díaz Langou, 2010).
Além de seu impacto na situacáo social dos
setores mais vulneráveis, a AUH também significou a unificacáo parcial dos programas de
transferéncias condicionadas (PTC) relevantes que se implantaram no país. Pode-se sustentar que se constituiu como um possível
pilar para a construcáo de um incipiente sistema de protecáo social (SPS) da Argentina.
Apesar de ser um modelo náo táo abrangente
como o brasileiro, as medidas de protecáo
social náo contributivas, somadas ás acóes
voltadas á recuperacáo do emprego na argentina resultaram em indicadores sociais meIhores que os dos anos 1990. Com a chegada
dos presidentes Kirchner á presidéncia,
embora sem um acordo sobre os números
exatos das mudancas, a pobreza parece ter
diminuído, o emprego crescido e melhorado o
acessoa educacáo. De acordo como Instituto
0
nal deEstatísticas e Censos
uanto noano de 2001, quand
« MA
mo crise económica
ha
Sobre a taxa de desemprego em aglomeracóes urbanas, de acordo com o INDEC, esta
caiu de 20,4 em 2003 para uma taxa de 71 em
2015 (INDEC, 2020).
Dada a característica cíclica das experiéncias
político económicas nos dois países, especialmente quanto a opcdes ora reguladoras,
ora liberalizantes, se nos anos 2000 Brasil e
Argentina avancavam na edificacáo de estruturas de protecáo social em moldes mais inclusivos, com a onda conservadora que emplacou nos países a partir da eleicáo de Macri
e Bolsonaro, o modelo de Estado e de políticas sociais foi posto em xeque.
3. Os governos liberais/conservadores e a
desconstrucáo de um caminho incompleto
Assim como houve sincronía nos países latino
americanos que, no virar do século XXI, elegeram na maioria dos países governos ligados
ao espectro centro-esquerda, a partir dos
anos 2015 uma nova onda sincrónica voltou
atingir a América Latina, porém trazendo de
volta a política liberal e conservadora para a
regiáo. Iniciando-se pelas eleigóes de Maurício Macri na Argentina em 2015; de Sebastián
Piñera no Chile, Lenín Moreno no Equador e
Ivan Duque na Colómbia, este último eleito
pelo Centro Democrático, recém-criado partido de direita que se consolidou em oposicáo
ao ex-presidente Juan Manuel Santos e ao
acordo de paz com as FARC; culmina em 2018
com a eleicáo de Jair Bolsonaro no Brasil.
A nova onda conservadora latino-americana
reflete mudancas económicas e políticas internacionais, como a queda do preco das
commodities, a revalorizacáo do projeto neoliberal e das políticas fiscais típicas da cartiIha imposta nos anos 1990 pelo Consenso de
Washington na regiáo; a eleicáo de Donald
Trump (EUA) e a ascensáo de uma política
conservadora e nacionalista em ámbito mundial, que mais uma vez parece indicar um mo-
7. Conforme demonstra Langou, a fragmentacáo institucional náo foi facilmente superada neste período, de forma que determinados programas de transferéncia condicionada de renda foram distribuidos entre o MDS e o MTEySS —ficando aqueles mais relevantes em termos de cobertura e orcamento, sob a responsabilidade do MTEySS. Ademais, o programa “Argentina Trabaja”, que busca reincorporar ao trabalho, trabalhadores que formam parte de cooperativas, ficou sob
condugáo do MDS, sendo utilizado como moeda de troca política e associado a visóes assistencialistas (Díaz Langou et al, 2010).
8. a AUH é um benefício destinado aos filhos menores de 18 anos de pessoas desocupadas ou que trabalham no mercado informal e ganham menos de um
salário mínimo mensal e também aos monotributistas sociales uma contribuicáo tributária simplificada para trabalhadores em situacáo de vulnerabilidade, para
que possam ser regularizados, e aqueles incorporados ao Regime Especial de Seguridade Social para Empregados Domésticos e que recebam menos de um
salário mínimo. O benefício também se destina a familias com pessoas com algum tipo de deficiéncia. O valor transferido atualmente é maior: 1.500 pesos por
família por més contra 460 pesos mensais para as familias do primeiro perfil.
0
vimento de chutar a escada dos países periféricos (Chang, 2004). Os principios morais
dessa política incluem um retorno aos valores conservadores, especialmente com foco
na família, um questionamento da laicidade
dos Estados, com a emergéncia de governos
de políticos com base de sustentacáo religiosa, eleigóes com grande apelo ao uso de fake
news e críticas á imprensa livre, amparados
em uma renovacáo da lógica macartista da
guerra fria, de perseguicáo a projetos populares e a partidos de esquerda.
Na área social, o questionamento dos avan-
cos também foi posto em funcáo de algumas
condicóes externas e internas em andamento: as mudangas no contexto internacional,
especialmente com a queda no crescimento
de países emergentes e a manutencáo da vulnerabilidade económica da regiáo, que implicaram em retrocessos no efetivo investimento em qualidade dos servicos públicos (Larrea, 2015).
Na Argentina a eleicáo de Macri em 2015,
marcou a preferéncia da populacáo por um
projeto declaradamente liberal, depois de
anos do Kirchnerismo. Com efeito, desde 2011
a Argentina passou a experimentar problemas no setor externo que afetaram negativamente o desempenho da economia, trazendo
de volta ainflacáo e emplacando os argumentos liberais acerca da necessidade de reformas económicas e do Estado para “volver ao
mundo” e fazer a economia voltar a crescer
(Freitas e Crespo, 2018). Macri promoveu inicialmente uma reforma na burocracia do
Estado, cercando-se funcionários ligados ao
setor privado (Carmona, 2018), promoveu
também reformas económicas embasadas na
desconstituigáo dos controles regulatórios
criados durante os governos kirchneristas, a
partir de medidas que promovessem uma
maior abertura da economia com a liberalizacáo financeira, cambial e do comércio exterior. Porém as medidas de liberalizacáo e flexibilizacáo do Estado náo surtiram resultados
imediatos. Houve queda do PIB no primeiro
ano do mandato presidencial em 1,8%, a desvalorizacáo cambial levou ao aumento nas tarifas públicas que provocaram uma grande
queda do poder aquisitivo da populacáo e, na
sequéncia, elevacáo da inflacáo, em especial
nos precos dos alimentos (Gaitán, 2019; Freitas € Crespo, 2018). Com isso a taxa de de-
semprego voltou a crescer na Argentina em
aproximadamente 30%, passando de 6,5% em
2015 para 8,5% em 2016 (INDEC). Nos anos se-
guintes o desemprego cresceu chegando a
10,1% no primeiro trimestre de 2019 (INDEC).
Em concomitáncia a esse processo, conforme
demonstra Gaitán, aumentou o subemprego
saindo de uma taxa de 9,8% em 2018 para
11,8% em 2019 (Gaitán, 2019, p.100).
Buscando fazer frente a esse cenário de deterioracáo do poder aquisitivo e sobretudo do
trabalho, principal pilar da protecáo social ar-
gentina, foram mantidos os principais programas sociais, porém com mudancas vinculando sua esséncia ás perspectivas de mercado,
pela via da capacitacáo (Gaitán, 2019). Enquanto houve ampliacáo do gasto com prestacóes sociais, representando 48,4% em 2016,
56,4% em 2017 e 60,8% em 2018 do gasto
total, seu efeito foi atenuado pelos indicadores do mercado de trabalho.
Macri criou em 2016 uma pensáo náo contributiva vitalícia para idosos sem qualquer
renda, nos moldes do Beneficio de Prestacáo
Continuada (BPC) brasileiro, denominada
Prestación Básica Universal (PBU). Apesar de
ampliar a cobertura a idosos a 97%, se questiona a imposicáo de uma lógica assistencial,
contribuindo para a segmentacáo de direitos
entre aqueles que dependem de benefícios
contributivos e os inseridos nas políticas náo
contributivas. O reconhecimento do trabalho
informal e doméstico e sua equiparacáo com
os direitos dos trabalhadores formais teria
aproximado a seguridade social da lógica focalizada e assistencialista na opiniáo de
Gaitán (2019).
Também nos programas de transferéncia de
renda houve manutencáo da fragmentacáo
dentre programas dirigidos a filhos de trabaIhadores formais e aqueles orientados a
filhos de informais, apesar da ampliacáo da
cobertura do AUH a filhos de familias autóno-
mas, com rendas mais baixas antes náo contemplados, o que resultou no aumento do
número de beneficiários. A visáo quanto aos
efeitos produzidos é da producáo de "un formato de políticas sociales que parece más
cercano a la visión asistencialista que a un
enfoque de derechos, agravada por “problemas de gestión”. A pesar que no se han desactivado los pilares de políticas, la narrativa
se basa en la asistencia como paliativo frente
a una situación de desempleo entendida
como anómala y transitória.” (Gaitán, 2019, p.
101).
No Brasil, após a destituicáo da Presidenta
Dilma Rousseff por impeachment em 2015,
seu vice Michel Temer assumiu com uma
agenda liberal voltada a melhorar o clima de
negócios a partir da desregulamentacáo económica, diminuicáo do gasto público, como
forma de promover o ajuste fiscal. Assim
como no caso argentino, a fórmula pautada
na ortodoxia económicas náo levou aos resultados esperados levando o país, que náo
estava em crise severa em 2014, a uma grave
recessáo, com dois anos seguidos (2015-16)
de queda da atividade económica em torno
de 3,5% do PIB (Fagnani, 2017).
A recessáo foi funcional para aplicacáo das
políticas liberais que tiveram como eixos
principais as reformas trabalhista e previdenciária. A reforma trabalhista alterou mais
de 21 tópicos da antiga Consolidacáo das Leis
Trabalhistas (CLT), permitindo fundamentalmente a terceirizacáo para atividades fins, o
aumento da jornada semanal de trabalho; a
permissáo para o trabalho diário de 12 horas
por um período determinado; o fim da regra
de valorizacáo do salário mínimo; prevaléncia
do “negociado sobre o legislado” (Lei N*
13.429/2017); entre outras flexibilizacóes que
precarizam as relacóes trabalhistas. A refor-
ma da previdéncia alterou a idade mínima de
aposentadoria e aumentou o tempo de con-
tribuicáo, assim Ena aumentou a ¡idade
g rantido,
constituci
7
he [fosos pessoas com deficiénci
Juntamente com essas reformas, duas acdes
afetaram diretamente a capacidade de consolidar e expandir o incipiente EBS brasileiro: 1)
a proposta de emenda constitucional (PEC
241/2016, consolidada na PEC 95/2019) que
conseguiu congelar o aumento de gastos públicos pelos 20 anos seguinteso e, 2) a
Emenda Constitucional n. 86 de 2015 em que
se desvincularam gastos com educacáo e
saúde modificando a garantia de estabilidade
do financiamento do SUS desde 2002 e fragi-
lizando a possibilidade de aprimoramento do
sistema frente ás demandas públicas por
atencáo emergencial, por exemplo.
Em face a crise económica associada e a
baixa intencionalidade do Estado em investir
em políticas sociais, os indicadores sociais
sofreram severa deterioracáo nos anos que se
seguiram, de forma que chegamos no quarto
trimestre de 2019 com um total de 11,6 miIhóes de desempregados, chegando a uma
taxa de 10,6% e 4,6 milhóes de desalentados
(aqueles que desistem de procurar emprego
por algum motivo e dependem de auxílios do
Estado). De 2016 para cá aumentou o número
de pessoas a viver com menos de R$ 406 por
més. Em 2016 o país tinha 54,8 milhóes de
pessoas que viviam abaixo da linha da pobrezae em 2017 dois milhóes a mais. Isso significa que a proporcáo da populacáo em situacáo
de pobreza subiu de 25,7% para 26,5%, de
acordo com a Síntese de Indicadores Sociais
(IBGE, 2017). Em 2018 esse índice caiu para
25,3%, porém, o percentual está longe do alcancado em 2014, o melhor ano da série, que
registrou 22,8% da populacáo brasileira.
O quadro de deterioracáo social, somado ás
alteracóes constitucionais contribuem para
desconstituir o incipiente EBS brasileiro em
seu pilar contributivo e a capacidade das políticas públicas atenderem ás demandas sociais.
UN
9. Essa fórmula se pauta na ¡dela de se colocar a inflacáo no "centro da meta” económica pelo desaquecimento da demanda. Mantem-se a taxa real de juro elevada, se avanca no corte de investimentos e gastos sociais, no desemprego e rebaixamento da renda do trabalho sáo funcionais para esse objetivo (Fagnani,
2017)
10.Esse congelamento afetará diretamente o financiamento de políticas sociais como a educacáo, saúde e assisténcia social. Conforme assevera Fagnani (2017:
12), “0 propósito é reduzir a despesa primária do governo federal, de cerca de 20% para 12% do PIB entre 2017 e 2036, aproximando o Brasil do patamar de gastos
realizados por diversos países africanos”.
ES
Esse cenário se agrava ainda mais no que
tange ao pilar náo contributivo. É o caso da
assisténcia social que desde o início do governo Temer passou a ser fragilizada a partir
de duas frentes: modificando-se a estrutura
do Ministério de Desenvolvimento Social e
combate a fome (MDS), que passou a dividir
sua estrutura física e financeira com o Ministério do Desenvolvimento Agrário (MDA),
passando a se chamar Ministério do Desenvolvimento Social e Agrário (de MDS para
MDSA); e coma criacáo do programa Crianca
Feliz da primeira dama Marcela Temer, que
além de trazer de volta a figura das primeiras
damas para a gestáo dos programas de assisténcia social, deslocou recursos que seriam
voltados ao fortalecimento do SUAS. Segundo nota técnica da Confederacáo Nacional
dos Municipios (2017), entre os anos de 2016
e 2017, houve um corte de 19% para área da
assisténcia social, indicando a inversáo de
prioridades advinda com aquele programa. O
PCF teve uma previsáo orcamentária em 2017
de RS 1 bilháo, porém só implementou 435
milhóes de reais em 2018, enquanto a AS
entre 2016 e 2017 deixou de receber RS 471
milhó0es entre estes anos.
Com o governo Bolsonaro o quadro de desvalorizacáo simbólica da assisténcia social
avancou iniciando-se pela reorganizacáo institucional e pelas escolhas da burocracia de
alto escaláo. Já no início de seu governo o
presidente eliminou o MDS e instituiu o Ministério da Cidadania que congregou duas
outras pastas: o esporte e a cultura. Com
isso, o Ministério de Desenvolvimento Social
ficou reduzido a uma secretaria, conforme
organograma do governo, dividindo náo
apenas recursos orcamentários, departamentos, servidores, mas o projeto de desenvolvimento social que vinha sendo priorizado
nos governos anteriores.
A partir desse contexto nacional, as gestóes
locais de assisténcia social passaram a rece-
ber menor apoio federal para consolidacáo do
SUAS, inclusive do ponto de vista simbólico.
Desta forma, o avanco da protecáo social náo
contributiva, realizada pela AS, sobretudo por
meio de atencáo básica voltada ás familias
em vulnerabilidade, voltou a ficar a cargo da
priorizacáo ou náo pelos municipios, confor-
me sua agenda política. Com isso, como mostram alguns casos analisados na Regiáo Metropolitana de Porto Alegre (Papi et al, 2019),
equipes passaram a ser desfeitas, equipa-
mentos públicos fechados e servicos foram
fragilizados para atender a crescente demanda social que se aprofundou com a crise de
2014. Esse cenário revela-se agravado no
atual contexto de pandemia, visto que a política de assisténcia social foi escolhida pelo
governo federal como uma das poucas medidas a atuarjunto com a saúde no combate aos
efeitos económicos e sociais da doenca.
Reflexóes finais: desafios atuais da prote-
cáo social diante da crise do coronavírus
Acontingéncia humanitária que o coronavírus
impós ao mundo, revelou como as políticas
públicas sáo fundamentais para mitigar os
efeitos por ele provocados. Dados recentes
divulgados sobre o perfil da doenca COVID-19
(Ahmed et al, 2020)) mostram que, para além
da questáo etária e das comorbidades de
saúde que compóem o chamado grupo de
risco, sáo potencialmente afetados aqueles
pertencentes a grupos populacionais mais
vulneráveis incluindo negros, imigrantes e
pobres, populacóes tradicionais, em razáo do
acesso limitado a condicóes de vida como
moradia, seguranca alimentar e servicos sanitários e de saúde adequados.
Este panorama traz a tona a necessidade de
se pensar sobre a importáncia da consolidacáo de sistemas de protecáo social e sua capacidade de dar respostas aos dilemas humanitários como revelam os casos de Brasil e Argentina. Apesar da crise ter testado especialmente os sistemas de saúde, o desemprego
decorrente de medidas de isolamento social,
e apobreza agudizada pela falta de capacidade de gerar recursos com atividades informais, pressionaram os Estados e seus sistemas de protecáo social. Estudos como de Tavares, Silveira e Paes Souza (2020) revelam
que o tempo de resposta, suficiéncia, coeréncia e coordenacáo sáo essenciais para o sucesso de políticas de protecáo social no combate a COVID-19. Beck et al (2020) aponta a
importáncia da setorialidade na gestáo da
pandemia. Porém a estruturacáo dos sistemas de protecáo social prévios e a coalizáo
político partidária parecem ser cruciais para
gerenciar a crise como mostram os casos
analisados.
tro da Saúde, por governadores e prefeitos,
seguindo-se as recomendacóes da Organizacáo Mundial da Saúde (OMS).
Na Argentina, a manutencáo de um modelo de
Desta forma, se iniciamos o processo de contencáo do avanco da doenca “em tempo”, já
que em 03 de fevereiro, trinta e trés dias após
a notificacáo inicial da China, o Ministério da
Saúde do Brasil declarou estado de EmergénciaemSaúde Pública de Importáncia Nacional
(e o confinamento social a partir de 06 de
protecáo social situado no grupo dos países
de maior e melhor cobertura, a despeito de
um último mandato de governo de tendéncia
liberal, parece ter sido crucial tanto para o re-
torno via eleigóes a um governo de base
social, quanto para a conducgáo acertada e
com ampla legitimidade na gestáo da pandemia. Desde 12 de marco de 2020 o governo de
Alberto Fernandez ampliou o escopo da
emergéncia pública, declarada no final de dezembro de 2019, para incluira emergéncia sanitária causada pela COVID-19. A partir de
entáo, contando com coordenacáo política
(apoio no congresso) e social decretou, em
20 de marco, isolamento social drástico e fechamento de fronteiras.
Entre as medidas de protecáo social com enfoque na preservacáo do emprego e da renda,
destacou-se o reforco a Programas de apoio a
pessoas vulneráveis, como pensóes por idade
e invalidez, mediante concessáo de bónus
extraordinários, de no máximo 3 mil pesos,
pagos uma única vez ea criacáo da Renda Familiar de Emergéncia, direcionada a cidadáos
que estejam desempregados ou que atuem
na economia informal (Tavares, Silveira 8
Paes Souza, 2020, p. 119) ambas as medidas
foram editadas em 24 de marco de 2020. Em
31 de marco proibiu, por sessenta dias, demissóes sem justa causa no país ou com base
em falta ou diminuicáo da forca de trabalho
(Ibdem). A essa acáo seguiu-se a implemen-
tacáo do Programa de Assisténcia Emergencial ao Trabalho e á Producáo em 1* de abril de
2020, que normatizou a redugáo ou postergacáo de até 95% do valor das contribuicóes patronais, concessáo de compensacáo salarial
para empresas de até cem trabalhadores, e
de benefício de emergéncia sanitária para
trabalhadores de empresas com mais de cem
trabalhadores (Ibidem).
No Brasil elementos para além das características e padróes do sistema de protecáo
social tem contribuido com as diferentes tra-
gédias causadas pela doenca e pela forma de
lidar com ela por parte do governo federal.
Essas tragédias revelam-se na cisáo social
entre aqueles que creem na ciéncia e acreditam na seriedade e potencial de contágio e
risco da doenca versus uma parcela significativa da populacáo, de seguidores do Presidente da República, que consideram o Coronavírus uma "gripezinha" e boicotam as me-
didas sanitárias impostas pelo antigo Minis4
US
E
marco), por outro lado, desde entáo parte da
sociedade civil, em especial os pequenos e
médios empresários pedem o fim do confina-
mento social e a flexibilizacáo das medidas
de isolamento social horizontal. Desta forma,
se na Argentina percebe-se uma maior coor-
denacáo entre sociedade civil, Congresso e o
chefe do Executivo, no Brasil há, náo apenas
conflito, mas um tensionamento que acabou
por derrubar o Ministro da Saúde (Luis Henrique Mandetta) em 16 de abril e por jogar ao
STF a definicáo de competéncias quanto á decretacáo de medidas de isolamento, com
ganho por parte de governadores e prefeitos.
Outro problema enfrentado no caso brasileiro
foi a demora na implementacáo de medidas
de protecáo social. Em que pese as medidas
de retencáo do emprego e de alívio financeiro
e deimpostos a empresas (em especial o Programa Emergencial de Manutencáo do Emprego e da Renda e as medidas de disponibilizacáo de crédito ao setor empresarial) tenham
sido tomadas com brevidade, as medidas de
extensáo da protecáo social, com destaque
para a ampliacáo da caracterizacáo da situacáo de vulnerabilidade social para elegibili-
dade ao benefício de prestacáo continuada
(BPC) e para a instituicáo do auxilio emergen-
cial no valor de R$ 600,00 ao trabalhador demoraram a ser implementadas de forma que
boa parte da populacáo mais vulnerável náo
conseguiu (ainda hoje) acessar o beneficio e
continua promovendo aglomeracóes em filas
de banco por todo o país.
Todos esses fatores, somados aos constrangimentos impostos por períodos de descons-
trucáo do sistema de protecáo social e das
políticas sociais contributivas e náo contributivas afetaram o processo de implementa-
cáo de medidas de emergéncia. Nesse sentido, para além desses efeitos desastrosos
sobre a populacáo em termos de número de
mortos, de pessoas adoecidas, dos níveis ele-
vados de hospitalizacáo, bem como do fosso
de subnotificacáo, dada pela falta de testes e
de condicóes estruturais para lidar com doentes e mortos, o Brasil comeca a sentir os
efeitos políticos.
Ao longo dos últimos 50 dias, enquanto menos
a demonstrar que tal forma de (náo) lidar com
da metade da populacáo consegue cumprir meacoisa pública e com a vida de seus cidadáos
didas de isolamento social, seja pelas conmerece um desfecho semelhante ao demonsdicóes de vida e de trabalho impostas, seja por
trado por eles nas urnas? Enfim, as escolhas
descrenca, vivemos sob constantes ameacas de
. sobreas políticas públicas em curso no contexruptura democrática, dadas por manifestacóes
todapandemiateráo algum um peso nas escol2 e apoio presidencial a atos defendendo inter- has políticas dos próximos governos?
,
|.
1 vencáo militar, fechamento do Congresso e do
- Supremo Tribunal Federal, somadas a alteSe as políticas públicas também fazem a políti4 racóes na alta burocracia que em nada contri- =
ca, o fenómeno da pandemia será paradigmáti- buem com a emergéncia da gestáo da pandeco para o futuro político de Brasil e Argentina.
mia. Saberáo os brasileiros copiar a Argentina e
Y
ANO
Arcidiácono, P. (2012). “Politicas sociales y bienestar en Argentina 2002-2009. Entre el
trabajo asalariado y los programas sociales”. Revista SAAP, Vol. 6, N* 2.
Barrientos, A. 8 Hinojosa-Valencia, L. (2009). A review of Social Protection in Latin America. Sussex: Centre for social Protection —1DS.
Barrientos, A. € Santibáñez, C. (2009.) "New forms of social assistance and the evolution
of social protection in Latin America”, Journal of Latin American Studies, 41, 1: 1-26.
Barrientos, A. 8 Santibáñez, C. (2009b). “Social policy for Poverty Reduction in Lower-in
come Countries in Latin America: Lessons and Challenges”. Social Policy 8 Administration, v. 43, n. 4, Agosto, p. 409-424,
Barrientos, A., Gideon, J.; Molyneux, M. (2008). “New Developments in Latin America's
Social Policy”. Development and Change, v. 39, n. 5, p. 759-774,
Beck, A., Bartos, M. € Lotta, G. (2020). “Só a saúde resolve? A urgéncia de acóes intersetoriais na crise do Covid-19”. Blog Gestáo, Política € Sociedade do Estadáo
[published 03 Maio 2020]. Available from: https://politica.estadao.com.br/blogs/gestao-politica-e-sociedade/so-a-saude-resolve-a-urgencia-de-acoes-intersetoriais-na-crise-do-covid-19/
Bloch, M. (1963). "Pour une histoire comparée des sociétés euroéenes”. Em Mélanges historiques. París: Ecole Pratique des Hautes Etudes, p.15-50.
Breckenrigde, S.(Eds.) Políticas sociales en América Latina y el Caribe: Escenarios contemporáneos, inversiones y necesidades. Buenos Aires: FLACSO.
Bulcourf, P. 8 Cardozo, N. (2008). "Dinámica estatal y políticas públicas: estrategias para
la construcción de un modelo de análisis comparado”. Em Nuevo Espacio Público
nro, 1, octubre.
Campello, T. 8, Neri, M. (2013). Programa Bolsa família uma década de inclusáo e cidada-
nia. Brasília: IPEA.
Campos, A. (2015). Bem-estar social nos anos 1990 e 2000: tracos estilizados da história
brasileira. Texto para discussáo. Rio de Janeiro: IPEA.
Carmona, 6. (2018). “Intereses en conflicto en tiempos de Macri: La imperiosa necesidad
de un nuevo régimen legal frente al fenómeno CEOcrático”. Im: García Delgado, D.,
Del Ferrier, C. (orgs.) Elites y captura del Estado: Control y Regulación en el Neoli-
beralismo Tardío. Buenos Aires: FLACSO,
Castel, R. (2003). As metamorfoses da questáo social: uma crónica do salário. Rio de Janeiro: Vozes.
Castineiras, N. (2013). “Eva Perón Foundation From Its Beginnings to the Death of Evita”.
Historical Research Fundation.
Cecchini, S 8 Martínez, R. (2011). Protección social inclusiva en América Latina: una
mirada integral, un enfoque de derechos. Libro de la CEPAL, n* 111. Santiago: CEPAL.
Chang, H-J. (2004). Chutando a escada. A estratégia do desenvolvimento em perspectiva
Histórica. Sáo Paulo: UNESP.
Del Valle, A. (2010). “Comparando regímenes de bienestar en América Latina”. Revista Europea de Estudios Latinoamericanos y del Caribe, v. 88, abril, p. 61-76.
Del Valle, A. (2010b). “Informalidad y modelos de bienestar en América Latina”. Política y
Sociedad, v. 47, n. 3, p. 239-261,
Di Giovanni, G. (1998). “Sistema de protecáo social: uma introdugáo conceitual”.Em: De
Oliveira, M. (org.). Reforma do Estado e política de emprego. Campinas: lE/UNICAMP,
p. 9-29:
Díaz Langou, 6, Forteza, P. 8 Potenza Dal Masetto, F (2010). "Los principales programas
nacionales de protección social. Estudio sobre los efectos de las variables político-institucionales en la gestión”, Documento de Trabajo N*45, julio, Buenos Aires:
CIPPEC.
Diniz, E. (2007). Globalizacáo, Estado e Desenvolvimento. Dilemas do Brasil no Novo Milénio. Rio de Janeiro, FGV.
Draibe, S. € Riesco, M. (2006). “Estado de bienestar, desarrollo económico y ciudadanía:
algunas lecciones de la literatura contemporánea”. Serie Estudios y perspectivas.
México. CEPAL -.
Draibe, S. 8 Riesco, M. (2007). “Latin America: a New Developmental Welfare State in the
Making?” Em Riesco, M. Latin America: A New Developmental Welfare State Model in
the Making? Nova lorque: Palgrave Macmillan/UNRISD, p. 21-113.
Draibe, S. 8 Riesco, M, (2009). "Social policy and Development in Latin America: The Long
View". Social policy and Administration, v. 43, n. 4, p. 328-346.
Draibe, S. 8 Riesco, M. (2009). El estado de bienestar social en américa latina: una nueva
estrategia de desarrollo. Madrid: Fundación Carolina.
Draibe, S. 8 Riesco, M. (2011). “Estados de Bem-Estar Social e Estratégias de Desenvolvimento na América Latina: Um Novo Desenvolvimentismo em Gestagáo?” Sociologias, vol.13, n.27, Porto Alegre: UFRGS.
Earp, F. 8 Kornis, G. (2004). “Desenvolvimento económico sob Getúlio Vargas”. Em: Silva,
R, M,. Cachapuz, P 8 Lamaráo, S (orgs.) Getúlio Vargas e seu Tempo. Rio de Janeiro:
BNDES.
Fagnani, E. (2017). “O fim do breve ciclo da cidadania social no Brasil (1988-2015)". Texto
para Discussáo n* 308, jun. Campinas: Unicamp.
Fausto, B 8 Devoto, F. (2004). Brasil e Argentina: um ensaio de história comparada
(1850-2002). Sáo Paulo: Ed. 34.
Fiori, J. (2007). “Olhando para esquerda Latino-americana”. Em Diniz, E. (org). Global
izacáo, Estado e Desenvolvimento. Dilemas do Brasil no Novo Milénio. Rio de Janeiro, FGV, p. 97-125.
Freitas, A. € Crespo, E. (2018). "Da Vitória a Crise: Uma Análise das Políticas Económicas
do Governo Macri (2015-2019)”. Anais XXIIl Encontro Nacional de Economia Política.
Frey, K. (2000). “Políticas Públicas: um debate conceitual e reflexóes referentes a prática
da análise de políticas públicas no Brasil”. Planejamento e Políticas Públicas, N* 21
- junio.
Gaitán, F. (2019). “Actores, coaliciones y cambio institucional: la política social ante la reversión conservadora en Argentina y Brasil”. Desenvolvimento em Debate v.7, n.1,
p.89-111, 2019.
Isuani, E. (2008). “La Política Social Argentina en perspectiva”. Em Cruces, G. (editor) Los
programas sociales en Argentina hacia el Bicentenario: visiones y perspectivas.
Buenos Aires: Banco Mundial.
Kerstenetzky, C. (2012) O Estado de Bem-estar Social na Idade da Razáo. A Reinvencáo do
Estado de Bem-estar no mundo Contemporáneo. Rio de Janeiro: Elsevier.
Larrea, C. (2015). “Politicas sociales y cambio social en America Latina y la Region
Andina: Alcances y perspectivas”. Em Bonilla Soria, A., Alvarez Echandi, |. ; Saénz
Lowi, T. (1972). “Four Systems of Policy, Politics, and Choice”. Public Administration
Review, 32: 298-310.
Madeira, L., Papi, L., Geliski, L., € Rosa, T. (2020). "Os estudos de políticas públicas em
tempos de pandemia”. Blog DADOS [published 17 April 2020]. Available from:
http://dados.iesp.uerj.br/os-estudos-de-politicas-publi
cas-em-tempos-de-pandemia/
Marshall, T. (1967) Política Social. Sáo Paulo: Zahar.
Mesa-Lago, C (1996). “Las reformas de las pensiones en America Latina y la posición de
los organismos internacionales”. Revista de la CEPAL, n. 60, Santiago de Chile.
Mesa-Lago, C. (2003) “A reforma estrutural dos beneficios da seguridade social na
America Latina: modelos, caracteristicas, resultados e licoes”. Em: Coelho, V. (Org.).
A reforma da previdencia social na America Latina. Rio de Janeiro: FGV.
Mesa-Lago, C. (1989). "Financiamiento de la atencion a la salud en America Latina y el
Caribe, con focalizacion en el seguro social". Documento de la Serie de Estudios de
Seminarios del Indes, n. 42. Washington DC: Banco Mundial.
Ministério do Desenvolvimento Social e Combate á Fome (2014) Censo SUAS 2013.
Brasília: SAGI- SNAS.
Papi, L., Eger, T. 8 Rosa, T. (2019). “Capacidades estatais na implementacáo da assisténcia
social na RMPA". Encontro Brasileiro de Adminsitracáo Pública. Salvador: UFBA,
2019. p. 1-16.
Pribble, J. (2011). "Words Apart: Social Policy Regimes in Latin America”. Studies in Comparative International Development, v. 46, p. 191-216.
Pribble, J. (2014). Welfare and Party Politics in Latin America. Cambridge: Cambridge University Press.
Przeworski, A., Alvarez, M., Cheibub, J., 8 Limongi, F. (1997). O que mantém as democracias?. Lua Nova: Revista de Cultura e Política, (40-41), 113-135. https://
doi.org/10.1590/50102-64451997000200006
Repetto, F. 8, Dal Masetto, F. (2011). “Protección Social en la Argentina”. Serie Políticas Sociales n* 174 Santiago: CEPAL.
Santos, W. (1987). Cidadania e Justiga: a política social na ordem brasileira. Rio de Janeiro, Editora Campos, 1987.
Sposati, A., Falcáo, M. do C. € Teixeira, S. (1989). Os direitos (dos desassistidos) sociais.
Sáo Paulo: Cortez.
Tavares, A., Silveira, F., 8 Paes-Sousa, R. (2020). “Protecáo Social e COVID-19: a resposta
do Brasil e das maiores economias da América Latina”. Revista NAU Social - v.11,
n.20, p. 111-129 Maio.
Sites consultados:
https://www.indec.gob.ar/indec/web/Institucional-Indec-BasesDeDatos
https://www.ibge.gov.br/indicadoresttdesemprego
https://www.ibge.gov.br/estatisticas/multidominio/condi
coes-de-vida-desigualdade-e-pobreza.html
https://www.paho.org/bra/index.php?option=com_contentéáview=ar
ticlegid=6101:covid198ltemid=875
ES
Public management as a
Design-Oriented professional discipline
Michael Barzelay
Edward Elgar Publishing Inc. Cheltenham. 2019. 168 páginas
ISBN 9783-1-78811-911-5
Por Agustina Pratti
[EE]
Elgar.
MICHAEL BARZELAY
.
Pu blic
Management
as a Design-Oriented
Professional Discipline
El profesor de management de la London School of Economics, nos presen-
ta un nuevo trabajo que continúa la línea de docencia e investigación ¡iniciada hace casi 20 años con The New Public Management: Improving Research and Policy Dialogue. La vinculación entre el ámbito de reflexión, enseñanza y práctica es un hilo que se desarrolla a lo largo de los 8 capítulos
de este trabajo, estructurados como un “manual” de enseñanza, antes que
un libro académico, ya que orientado desde la "mirada del profesor" (p. 8).
En este volumen se despliegan diferentes estrategias, como el story telling,
cuadros conceptuales, entrevistas, dramatizaciones, para llegar de un
modo innovador a los estudiantes de las escuelas de gestión pública y académicos. Las preguntas que se responderán a lo largo de las páginas serán:
¿Para qué es la gerencia pública? ¿Cómo funciona? ¿Y, finalmente, en qué
consiste?
En el primer capítulo se plantea el enfoque de la obra, su visión de public
management como una disciplina orientada al diseño. Esta idea intenta
"tensionar” la visión esencialmente técnica que se tiene del management
como una “tecnología administrativa” basada en una racionalidad. La
Qaaá
noción de “diseño” permite imaginar posibilidades que remiten a otros
campos que históricamente han sido lejanos a la tradición administrativa
o
:
$
como arquitectura, ingeniería, artes escénicas, diseño industrial, entre
otras-, fuertemente marcada por el pensamiento de Fayol, Moore and
Simon. En esta sección se focaliza la orientación didáctica, pero no solo
orientada a gestores, sino también a profesores e investigadores. A partir de los recursos escénicos y un manejo
histriónico recurre a la simulación de una entrevista televisiva donde expone los fundamentos del libro. En la segunda sección se centra en la idea de las organizaciones públicas como creadoras de valor público, defendiendo la concepción del “gerencialismo” como una "práctica" que debe superar la tradición de "Harvard" y sentar las bases para
una teoría propositiva orientada al diseño.
El tercer capítulo desarrolla su idea del "diseño conceptual" (conceptual design) y el "diseño incorporado" (embodiment design) -a partir de un diálogo entre los profesores donde recurriendo a la mayéutica van definiendo los principales puntos-. Ambos conceptos, buscan mejorar las organizaciones públicas. En la sección siguiente, se simula
una visita virtual a la "galería del public management" donde mostrará que la gerencia pública es efectivamente una
efectivamente una disciplina (metaforizando con las escuelas pictóricas) con artistas cuyas obras cualquier estudiantes y gestor público debe conocer. En este punto Barzelay se convierte en la voz de una audio-guía de "Public
Mangement Gallery", haciendo un recorrido histórico como el curador de ese espacio con tres niveles: la teoría de
las burocracias públicas, la creación de proyectos, y finalmente las actividades profesionales. En este recorrido,
aparecen autores y escuelas: Moore de la Havard Kennedy Schoool con su idea del valor público, Bryson de la Humprey School of Public Affaris con su concepción del planeamiento estratégico, Simon con la su teoría del diseño de
proyectos, y finalmente la última sala hace un recorrido la obra de Tilly, Cross, Goffman que representan la escuela
de la práctica.
A la pregunta troncal del libro acerca de ¿para qué es el public management? La respuesta de Barzelay es: para crear
valor público, (p. 131). A la pregunta, ¿Cómo funciona? Se argumenta que se verbaliza a través de funciones de la administración y resolución de problemas organizacionales. Finalmente, a la pregunta ¿En qué consiste? la contestación es que se trata de una disciplina orientada al diseño destinada a mejorar las organizaciones públicas. En suma,
este volumen puede ser mirado con diferentes lentes: Primero, como un manual para funcionarios y capacitadores
en función pública, segundo como una obra de análisis metateórico de los fundamentos de la gerencia pública como
disciplina, y finalmente, como un manifiesto acerca del carácter terapéutico que debe tener la indagación, innovación y la creatividad a la hora de mirar y resolver los problemas organizacionales en aras ofrecer mejores políticas.
E
Handbook of Research Methods and ApplicaNES AAN
Guy Peters € Guillaume Fontaine (editores)
Editor: Edward Elgar Publishing Ltd. Cheltenham. 2020. 424 páginas
ISBN-13: 978-1788111188
Por Tania Zabala-Peñafiel
Una de las preocupaciones latentes en las ciencias sociales, tiene que ver con la selección de
los métodos idóneos para abordar los problemas de investigación; principalmente porque las
preguntas e inquietudes investigativas no pueden, ni deben ser abordadas con un mismo
método. En particular, el análisis comparado de políticas (CPA por sus siglas en inglés), como
área emergente de las ciencias sociales, comparte este desafío, no solo sobre la forma de elaborar diseños de investigación que tomen en cuenta la multiplicidad de métodos y que en su selección sean coherentes, sino también en el empleo de herramientas metodológicas que permitan abordar de manera sistemática la comparación de sistemas más similares y más diferentes.
Con el objetivo de abordar y caracterizar este desafío, el "Handbook of Research Methods and
Applications in Comparative Policy Analysis” (2020), editado por Guy Peters y Guillaume Fontaine, postula dos preguntas que son atendidas desde diferentes aristas por los autores que participan en la publicación. A saber, ¿cuáles son los mejores métodos disponibles para realizar un
CPA sistemático a través del tiempo, el espacio y las áreas de políticas? Y ¿cómo pueden ser seleccionados y combinados para mejorar la consistencia interna y la coherencia externa del
diseño de políticas en investigación y práctica?
Partiendo de ello, el manual reconoce la importancia de los métodos en la investigación y en la
práctica de las políticas públicas en perspectiva comparada, y plantea que un adecuado diseño
de investigación debe conectar la perspectiva teórica con el método; de forma que sea plausible la confirmación o refutación de las hipótesis de trabajo. Si el CPA ayuda a mejorar el diseño
de políticas tanto a nivel teórico como práctico, entonces los métodos empleados tienen que
probar de manera comparada ambas implicaciones.
Se considera importante en el análisis, no solo la naturaleza de las políticas, sino sus complejidades dentro de los sistemas políticos, de los subsistemas de políticas, así como a través del
tiempo. Luego, la selección de métodos con los que abordar tales complejidades en el campo
del CPA, debería evidenciar que no solo los métodos probabilísticos, generan análisis válidos y
útiles en el campo de estudio.
El problema de los métodos cuantitativos que priman en los análisis, concretamente en el oficio
del CPA, es el desarrollo de explicaciones mediante el empleo de -pocos- métodos; lo que resta
potencial a la explicación de los problemas de políticas públicas. En ese sentido, el manual
plantea que los métodos mixtos y múltiples son herramientas capaces de proporcionar explicaciones más exhaustivas de las relaciones causales. Asimismo, los estudios de n-pequeña y estudios de caso permiten comprender las políticas y detallar, por lo tanto, las consecuencias de
estas políticas en análisis más individualizados. La naturaleza del objeto de comparación y el desafío de hacer frente a las diferencias entre los sistemas políticos, las áreas de política y los contextos históricos, obligan a los investigadores a considerar diferentes tipos de evidencia; renunciando así al diseño de investigación con un único método.
Respecto al manejo del contexto, los métodos cuantitativos para la comparación normalmente buscan “controlar” los factores contextuales, de tal
forma que estos se mantengan lo más estable posibles. Sin embargo, las teorías que buscan comparar políticas, involucran factores contextuales
directamente en el análisis, y para ello los diseños de investigación se justifican en términos de sistemas más similares o más diferentes. Aún más,
el análisis de caso desarrolla un examen exhaustivo de los factores contextuales que determinan la dinámica de las políticas. Por lo tanto, factores
como la economía, la política, la cultura, la estructura social, deben incluirse en los análisis para explicar cómo condicionan a las opciones de políticas y los efectos de estas políticas en una sociedad.
Asimismo, en la práctica de las políticas públicas, especialmente en lo que se conoce como “formulación de políticas basadas en evidencia”, se
plantea el empleo de evidencia de un contexto específico para informar el diseño de políticas en otros contextos. En ese sentido, partiendo de que
los métodos no deben ser asumidos como instrumentos neutros produciendo resultados “correctos”, la diversidad de métodos tiene sus propios
prejuicios y puntos ciegos. Lo que importa entonces es en qué condiciones se usan y si se aplican adecuadamente. Por ello, una elección consciente de los métodos es importante en el sentido de aportar validez y contundencia a los hallazgos.
En relación con la selección de casos, varios capítulos del manual la abordan como un paso crucial que garantiza una buena investigación comparada. En efecto, en un diseño de investigación comparado en donde no se ha seleccionado los casos de manera rigurosa, es bastante probable que
los conceptos no "viajen" como se espera (Sartori 1970). Esto implica un problema en la medición de esos conceptos, ya sea cualitativa o cuantitativa.
La diversidad de enfoques, tanto como métodos con los que se trabaja en CPA, confirma que no hay “una” mejor manera de realizar un CPA sistemático, y esto precisamente es lo que se destaca a lo largo del Manual que organiza los contenidos en seis partes. La primera parte se enfoca precisamente en el debate metodológico actual en el campo de las ciencias sociales que interesa al CPA. La segunda parte se basa en las tendencias contemporáneas en los métodos y agendas de investigación de algunos marcos analíticos importantes, relacionados con la comparación y la causalidad en los estudios de políticas. La tercera parte revisa el problema de las mediciones y experimentos en CPA. La cuarta parte aborda los métodos
mixtos y múltiples en los diseños de investigación de CPA. La quinta sección presenta técnicas cualitativas empleadas cada vez con mayor frecuencia en CPA. Por último, la sexta parte aborda reflexiones acerca del desarrollo del CPA y el debate metodológico del mismo.
Finalmente, este manual proporciona una descripción y evaluación completa de los métodos vigentes y disponibles en CPA, rescatando el uso cada
vez más frecuente de métodos experimentales y el desarrollo general de técnicas cualitativas de investigación, como aspectos que enriquecen el
debate metodológico y la comprensión de las políticas a través del estudio de su proceso.
NE EMS TS
CN A NR NS
Luciana Leite Lima y Leticia María (organizadoras)
Editora de la UFRGS/CEGOV. Porto Alegre. 2020. 412 páginas.
ISBN: 978-65-5725-002-0
Por Pablo Navarro Urquiza
Esta obra colectiva nos introduce al campo de las políticas públicas desde la intercepción de varias perspectivas de análisis, reflexionando sobre las diferentes facetas que se pueden
presentar, tanto desde un punto de vista analítico, geográfico
y problemático. Abriendo por lo tanto varios frentes que resultan enriquecedores desde un punto de vista tanto global como
crítico reflexivo.
Desde el plano teórico se indaga tanto sobre la dinámica del
Estado y del espacio público como desde el mismo proceso de
políticas públicas, algo no muy frecuente en estudios que a su
ven realizan análisis empíricos concretos. Es ahí donde el capítulo de André Marenco nos provee de un marco general de
referencia que interroga al resto del libro y le otorga una riqueza especial y de un hilo conductor de sentido. A su vez esto
se articula especialmente con el segundo trabajo centrado en
los modelos de coaliciones con el aporte de Ligia Mari Madeira, Leornadro Geliski, María Cabral Juliano y Kalita Hilário Trini-
dade. Entre algunas de las tradiciones más especificas que se
rescatan encontramos la obra de Pierre Muller, con el aporte
de Catia Grisa en el tercer capítulo.
Uno de los elementos centrales del libro es la incorporación de la perspectiva de género, algo
central hoy en día. Esto se expresa específicamente en el tercer y décimo quinto capítulos con
los trabajos de Valéria Calvi, Soraya Vargas Cortes y Ximena Chavez.
La compilación analiza, en sus capítulos empíricos, el campo de políticas públicas de Brasil en
lo general y de Rio Grande do Sul en el aspecto subnacional, a partir de estudios focalizados en
áreas temáticas específicas como también en el estudio de las burocracias públicas. Estas últimas ocupan un espacio de especial interés en el capítulo quinto; Natalia Massaco Koga, Rafael
Rocha Viana y también en el ya mencionado décimo quinto; lo que nos permite indagar en un
cruce fértil con el aporte del feminismo.
La implementación de políticas públicas es uno de los ejes centrales del libro. Teniendo cuatro
capítulos que lo abordan desde diferentes facetas, tanto desde el estudio empírico como desde
la reflexión teórica. Ahí Ramao Correa, Marilia Pata Ramos, Bianca Burdini Mazzei, Marta Ferreira
Santos, Leticia Maria Schabbach, Martins y Davide Carbonai presentan una visión robusta de
uno de los aspectos centrales del proceso de políticas públicas.
El estudio de la economía creativa, el nivel internacional de las políticas públicas y otros aspectos del estudio focalizado de políticas se expresará en los trabajos de Mariana Willmersdorf,
Claudia Tirelli, Rafael Barbosa, Luciana Leite, Denis Rodrigues, Lizandro Lui y Luciano D'Ascenzi.
No encontramos por lo tanto con un libro que nos brinda un aporte sustantivo para comprender
y reflexionar sobre las políticas públicas en el Brasil que extiende su mirada hacia el propio
campo de conocimiento.
ARTÍCULOS
Se reciben manuscritos originales en castellano/español, portugués e inglés
que sean producto de una investigación o bien, ensayos de reflexión sobre
temas de Estado, políticas públicas, gobernanza, servicio civil, de preferencia
con un abordaje comparativo. Deberán tener una extensión de entre 12.000 y
15.000 caracteres con espacios, incluyendo resumen (de hasta 1000 caracteres)
y palabras clave (hasta 5).
En lo posible, se debe limitar al mínimo indispensable la extensión de las citas
textuales y las notas al pie. Asimismo, la bibliografía debe contener únicamente
las referencias citadas a lo largo del texto.
Todos los manuscritos
gippc.alacipEgmail.com.
deben
ser
enviados
por
correo
electrónico
a
FORMATO
Formato DOC, DOCX, RTF; tamaño de página A 4; interlineado 1,5; fuente Times
New Roman 12, sin justificar.
AA lo
Hacia el final del documento agregar un cv resumido de cada autor/a que
indique, en no más de 4 renglones, la siguiente información (a modo de
ejemplo): Títulos de grado y posgrado y nombre completo de la institución
otorgante; organismo donde se desempeña; centro de investigación al que
pertenece, si corresponde; actividad docente; áreas de investigación, etc.
e
nn
CITAS
La citación de fuentes se basa en el estilo bibliográfico APA (o autor-año) para
la confección de citas y referencias.
Las referencias se colocan en el cuerpo del texto, entre paréntesis (no como
nota a pie de página). Los datos que se incluyen aquí son: apellido del autor, año
de edición, página/s en la/s que se encuentra el texto citado. Ej: (García, 1998:
75).
CITAS DIRECTAS
O TEXTUALES
Las citas directas deben ir entre comillas (no en cursiva).
Ejemplo 1: ”.........." (García, 1998: 75).
Ejemplo 2: Para García (1998: 55) los temas de interés
investigación y políticas públicas ”..............”
en
materia
de
> dl
e
_
INSTRUCCIONES PARA LOS AUTORES
INSTRUGOES PARA AUTORES
a
Ao
AS
La lista se compone en orden alfabético. Se detallan a continuación las fórmulas de
uso habitual elaboradas por la APA, acompañadas de ejemplos: es importante
respetar la puntuación y el uso de cursivas cuando corresponde.
Libros:
Autor, A. A. (1967). Título del trabajo. Lugar: Editorial.
Autor, A. A. (1967). Título del trabajo. Recuperado de http://www.xxxXXXXXX
Capítulos de libro:
Autor, A. A. (1995). Título del capítulo. En Nombre y Apellido del Compilador
(Comp./Dir./Ed.), Título del libro (pp. xx-xx). Lugar: Editorial.
Autor, A. A. (1995). Título del capítulo. En Nombre y Apellido del Compilador
(Comp./Dir./Ed), Título del libro (pp. xx-xXx). Recuperado de http://www.xxxxXxXXXX
Publicaciones periódicas:
Autor, A. y Autor B. (año). Título del artículo. Título de la publicación,
volúmen(número), pp-pp. (si corresponde: Recuperado de http://www.xxxXxXxXXXX)
En cursiva se indica el volumen, si lo tuviera, y luego sin espacio, entre paréntesis y
en redonda, el número de la revista.
Tesis:
Autor, A. (año). Título de la tesis (Tesis doctoral/Tesis de maestría), Institución,
Ciudad, País. (si corresponde Recuperada de http://www.xxxX.xxx)
Documento o informe gubernamental:
Nombre de la organización (Ej. Ministerio de Economía). (año). Título del informe.
Nro. de publicación si existe. (si corresponde: Recuperado de http://www.xx.xxxX)
Artículo de diario en línea:
Autor, A. (día, mes, año). Título del artículo. Nombre del periódico. Recuperado de
http://www.xX.xx
RS
os
—.
—
E
o
_
A
E
Las reseñas deberán comprender libros de no más de un año de antiguedad desde
su lanzamiento. Se deberá indicar en el encabezado: Título de la obra, autor/a o
coordinadores/compiladores;
Editorial, Ciudad, cantidad
de páginas, ISBN y
nombre y apellido del autor. La extensión deberá ser desde 3.000 a 6.000
caracteres con espacios, y se deberán enviar en formato DOC, DOCX, RTF; tamaño
de página A 4; interlineado 1,5; fuente Times New Roman 12, sin justificar. Las
referencias se colocan en el cuerpo del texto, entre paréntesis (no como nota a pie
de
página),
indicando el
número
de página/s en
la/s que se
encuentra
fragmento citado. Ej: (p. 75). No se deben incluir referencias a otros textos.
el
SS
Se reciben informes de tesis de maestría y doctorado dentro del campo del área de
Estado y Políticas Públicas que no tengan más de un año desde su defensa. La
extensión de esta comunicación será de entre 3.500 y 6.500 caracteres con espacios.
Se deberá indicar en el encabezado: Título de la tesis, autor/a, director/a, institución y
grado para el cual fue presentada. El formato del archivo debe ser DOC, DOCX, RTF;
tamaño de página A 4; interlineado 1,5; fuente Times New Roman 12, sin justificar.
>
EN
INSTRUCCIONES PARA LOS AUTORES
INSTRUGOES PARA AUTORES
a
IN clOjS
Os manuscritos originais podem ser submetidos em espanhol, portugués e
inglés. Se aceitam produtos de pesquisas ou ensaios de reflexáo sobre temas
de Estado, políticas públicas, governanca, servico público, de preferéncia com
uma abordagem comparativa. A extensáo deverá ser de no mínimo 12.000 e no
máximo
15.000
caracteres
com
espacos,
caracteres) e palavras-chave (até 5).
incluindo
o
resumo
(até
1.000
Na medida do possível, as citacóes textuais e as notas de rodapé devem ser
limitadas ao mínimo necessário. Da mesma forma, a bibliografia deve conter
apenas as referéncias citadas ao longo do texto.
Todos
os
manuscritos
gippc.alacipegmail.com.
devem
ser
submetidos
por
e-mail
para
FORMATO
A submissáo do artigo deve se fazer num arquivo em formato DOC, DOCX, RTF;
tamanho da página A 4; Fonte Times New Roman 12; com espaco 1,5, e sem
justificar.
CV RESUMIDO
Ao final do documento, se deve adicionar um CV resumido de cada autor/a,
indicando, no máximo em 4 linhas, as seguintes informacóes (a título de
exemplo): título de graduacáo e pós-graduacáo e o nome completo da
instituicáo; organizacáo onde trabalha, centro de pesquisa a que pertence, se
foro caso; atividade docente, áreas de pesquisa, etc.
[pyNelo]35
A citacáo de fontes é baseada no estilo bibliográfico APA (ou autor-ano) para a
preparacáo de citacóes e referéncias.
As referéncias sáo colocadas no corpo do texto, entre parénteses (náo como
nota de rodapé). Os dados aqui incluídos sáo: sobrenome do autor, ano de
publicacáo, página(s) em que se encontra o texto citado. Ex: (García, 1998: 75)
Ads
JUNE
As citacóes diretas devem ser inseridas entre “aspas duplas” (náo em iitálico).
Exemplo li Munocccciccc... " (García, 1998: 75).
Exemplo 2: Para García (1998: 55) os tópicos de interesse na investigacáo em
políticas
públicas
REFERÉNCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
ES
A bibliografia se deve colocar no final do artigo em ordem alfabética, seguindo os
critérios bibliográficos APA que se seguem. É importante respeitar a pontuacáoeo
uso do itálico quando seja apropriado.
Livros:
Autor, A. A. A. (1967). Título do Livro. Local: Editorial.
Autor, A. A. A. (1967). Título da obra. Recuperado de http://www.xxxxXxXxXXX
Capítulos de livros:
Autor, A. A. A. (1995). Título do capítulo. Em Nome e Sobrenome do compilador
(Comp./Dir./Ed.), Título do livro (pp. xx-XX). Local: Editorial.
Autor, A. A. A. (1995). Título do capítulo. Em Nome e Sobrenome do compilador
(Comp./Dir./Ed), Título do Livro (pp. xx-Xx). Recuperado de http://wwwW.xXxxXXXXXX
Publicacóes periódicas:
Autor, A. e Autor B. (ano). Título do artigo. Título da publicacáo, volume (número),
pp-pp. (se for aplicável: Recuperado de http://www.vx0000000)
O volume deve ser indicado em i¡tálico, se houver, e depois sem espaco, entre
parénteses, o número da revista.
Tese/ Dissertacáo:
Autor, A. (ano). Título da tese (Tese de Doutorado/dissertacáo de Mestrado),
Instituicáo, Cidade, País. (se for aplicável: Recuperado
Documento ou relatório governamental:
Nome da organizacáo (p. ex., Ministério da Economia).
de publicacáo, se existe. (se for aplicável: Recuperado
Artigo de jornal online:
Autor, A. (dia, més, ano). Título do artigo. Nome
http://www.xX.xx
de http://www.xxxX.xxxX)
(ano). Título do Relatório. N*
de http://www.xx.xxx)
do jornal.
Recuperado
de
RESENHAS
DANOS
As recensóes devem ser de livros que náo tenham mais de um ano desde o seu
lancamento.
O
cabecalho
deve
indicar:
Título
da
obra,
autor
ou
coordenadores/compiladores; Editora, Cidade, número de páginas, ISBN, e nome e
sobrenome do autor. A extensáo deverá ser de ser no máximo desde 3000 até
6.000 caracteres, e ser submetidas num arquivo em formato DOC, DOCX, RTF;
tamanho A 4; espaco 1,5; fonte Times New Roman 12, semjustificar. As referéncias
sáo colocadas no corpo do texto, entre parénteses (náo como nota de rodapé),
indicando o número de página(s) onde o fragmento citado se encontra. Ex: (p. 75).
Referéncias a outros textos náo devem ser incluídas.
TESE
Sáo recebidos relatórios de dissertacóes de mestrado ou teses de doutorado no
campo de Estado e Políticas Públicas que náo tenham mais de um ano desde a sua
defesa. A extensáo desta comunicacáo deve ser entre 3.500 e 6.500 caracteres. O
cabecalho deve indicar: Título da tese, autor, diretor, instituicáo e grau para o qual foi
submetida. O formato do arquivo deve ser DOC, DOCX, RTF; tamanho da página A 4;
espaco 1,5; fonte Times New Roman 12, sem justificar.
O
AIN ie
AAA AMAN AIN INCAS
>
'
,
AAA A
IN
PAI A AN ATA o
ASIAN
SYMPOSIUM
Dil
SAIVTNO)
fl NINA AA ANA
CIA DON OS
AMAN ATA TAS INIA LN
ES
ÍA A
fí TES
o) VENIS
AIM
AAA lA
JUNIO
JUNHO
JULIO
JULHO
fl
International Public Policy Association (IPPA)
Barcelona, ESPAÑA/ESPANHA
E
S
E
=2 Internacio Aids ENEE olsi
i
o
O ROSario,
>
y
A |
¡canos (ISSN2683-8850) esuna publicación del
olíticas Públicas Comparadas dela Asociación
adeCienciaPolítica (ALACIP).