MONICIÓN DE ENTRADA
Buenos días, hermanos y hermanas. Sean bienvenidos a esta celebración eucarística. Hoy nos reunimos como
comunidad de fe para alabar y dar gracias a Dios, encomendándole la misión evangelizadora que iniciaremos hoy.
Pidamos al Señor que nos conceda la gracia de abrir nuestros corazones a su palabra y participar activamente en
esta misa. Con espíritu de recogimiento y alegría, iniciemos nuestra celebración
PRIMERA LECTURA
Tomada del libro de los Reyes, nos narra la historia del llamado de Eliseo nos ofrece un mensaje de esperanza. En
un momento de desánimo y duda para Elías, Dios le muestra su poder y le da una nueva misión. Escuchemos la
primera lectura
SALMO
El Salmo 15 es una oración de confianza y entrega a Dios quien es nuestro refugio y consuelo. Junto al salmista
digamos confiados:
EVANGELIO
En el santo evangelio según San Mateo, Jesús nos habla de la importancia que debe de tener la sinceridad y verdad
en nuestras palabras y acciones. Nos llama a que nuestro “sí” sea “sí” y nuestro “no” sea “no”. como preparación les
invito a ponerse de pie y cantamos.
PETICIONES: respondamos con fe: “Danos la gracia de servirte, Señor”.
1.- Por los sacerdotes, diáconos, religiosas y todos los hermanos consagrados a Dios: para que enciendan el amor
del principio y sirvan con alegría y constante renovación su llamado oremos “Danos la gracia de servirte, Señor”.
2.- Por los que dirigen las naciones: para que guien con sabiduría, justicia. Y tomen decusuiones que promuevan el
bien de los mas necesitados oremos. “Danos la gracia de servirte, Señor”
3. Por todos los evangelizadores para que Dios les cuide y bendiga y les de a su alma lo que ellos necesitan, fe,
esperanza, paciencia oremos “Danos la gracia de servirte, Señor”
4. Por los enfermos, los que sufren los mas necesitados para que encuentren el amor de criso en la comunidad y
reciban ayuda y esperanza oremos: “Danos la gracia de servirte, Señor”
5. Por todos nosotros: para que podamos dar testimonio de Jesús no solo con palabras sino con
nuestra vida entera. Roguemos al Señor. “Danos la gracia de servirte, Señor”
Monición a las Ofrendas
Con los dones del pan y del vino, presentemos también al altar nuestras vidas, con nuestras alegrías,
preocupaciones y esperanzas. Que este momento de ofrenda sea una verdadera entrega de nosotros mismos al
Señor.
MONICIÓN DE COMUNIÓN
Al acercarnos a recibir la Sagrada Comunión, recordemos que es Cristo mismo quien se nos da como alimento y
vida. Hagamos 2 filas al centro los que estén preparados y cantamos todos.
