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Folleto de La Misa

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FOLLETO MISA CON NIÑOS

23. VI. 2024. T.O. 12º B


Marcos 4, 35-41:
“¿Por qué tenéis miedo?
¿Aún no tenéis fe?”
1. MONICIÓN DE ENTRADA
Bienvenidos, hermanos y hermanas a la eucaristía dominical. La
vida humana no siempre es fácil, a menudo nos encontramos con
tempestades que sacuden nuestra vida y nuestro mundo,
bastante lo sabemos con todo lo que hemos vivido en esta
pandemia. En el evangelio de hoy leeremos el relato de la
tempestad calmada, Jesús calma el viento y el mar y nos da
consuelo, fuerza y paz. Pidamos a Jesús en esta eucaristía que sea
nuestro Capitán, que tome el mando de la barca de nuestra vida y
nos llene de fe y de paz en nuestras tempestades. (El Cartel de
Fano de este domingo “Jesús es mi Capitán” o una barca, un
puente de mando o una gorra de capitán).

SALUDO del sacerdote: En el nombre del Padre...


Nuestro Señor Jesucristo, que acompaña nuestra
fe en las tormentas de nuestra vida, esté con
todos vosotros.

2. SÚPLICAS DE PERDÓN
Sacerdote: Sabiendo por la fe que el Señor Jesús está siempre en
medio de nosotros, acudimos a Él y nos acogemos a su
misericordia.
- Niño/a: Tú, Jesús que calmas toda tempestad, perdona nuestras
cobardías. Señor, ten piedad.
- Catequista: Tú, Jesús que nos tienes que reprochar tantas veces
nuestra falta de fe. Cristo, ten piedad.
- Padres:Tú, Jesús que, aun estando siempre con nosotros, no te
reconocemos en los momentos difíciles. Señor, ten piedad.
Sacerdote: Dios nuestro Padre tenga misericordia de nosotros,
nos ayude a superar nuestros miedos y nos guíe hasta la vida
eterna.
3. MONICIÓN A LAS LECTURAS
Hoy en el evangelio contemplaremos la escena de la tempestad
calmada por Jesús en el lago de Galilea cuando parecía que iba
acabar en una tragedia. Jesús les recrimina su falta de fe. En la
primera lectura escucharemos cómo el Señor habla a Job que se
había quejado a Dios de sus desgracias. San Pablo afirma que desde
que Jesús murió por nosotros ha comenzado una época nueva y
nosotros somos criaturas nuevas.
LECTURAS
JOB 38,1. 8-11 Aquí se romperá la arrogancia de tus olas.
Esto dice el Señor Dios: «También yo había escogido una
rama de la cima del alto cedro y la había plantado; de las
más altas y jóvenes ramas arrancaré una tierna y la plantaré
en la cumbre de un monte elevado; la plantaré en una
montaña alta de Israel, echará brotes y dará fruto. Se hará
un cedro magnífico.
Aves de todas clases anidarán en él, anidarán al abrigo de
sus ramas. Y reconocerán todos los árboles del campo que
yo soy el Señor, que humillo al árbol elevado y exalto al
humilde, hago secarse el árbol verde y florecer el árbol
seco. Yo, el Señor, lo he dicho y lo haré». Palabra de Dios.

SALMO 106: ¡Dad gracias al Señor, porque es eterna su


misericordia!

2 CORINTIOS, 5, 14-17: Ha comenzado lo nuevo.


Hermanos: Nos apremia el amor de Cristo, al considerar
que, si uno murió por todos, todos murieron. Y Cristo murió
por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino
para el que murió y resucitó por ellos. De modo que
nosotros desde ahora no conocemos a nadie según la carne;
si alguna vez conocimos a Cristo según la carne, ahora ya no
lo conocemos así. Por tanto, si alguno está en Cristo es una
criatura nueva. Lo viejo ha pasado, ha comenzado lo nuevo.
MARCOS 4, 35-41: ¿Quién es éste? ¡Hasta el viento y las
aguas le obedecen!

Narrador: Aquel día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos:


Jesús: -“Vamos a la otra orilla”.
Narrador: Dejando a la gente, se lo llevaron en barca, como
estaba; otras barcas lo acompañaban. Se levantó una fuerte
tempestad, y las olas rompían contra la barca hasta casi
llenarla de agua. Él estaba en la popa, dormido sobre un
cabezal. Lo despertaron, diciéndole:
Discípulos: -“Maestro, ¿no te importa que perezcamos?”.
Narrador: Se puso en pie, increpó al viento y dijo al mar:
Jesús: -“¡Silencio, enmudece!”. El viento cesó y vino una gran
calma.
Narrador: Él les dijo:
Jesús: - “¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?”.
Narrador: Se llenaron de miedo y se decían unos a otros:
Discípulos: - “¿Pero quién es éste? ¡Hasta el viento y las
aguas lo obedecen!”.
Palabra del Señor.

(Narrador-Jesús-Discípulos)
4. ORACIÓN DE LOS FIELES
Sacerdote: Padre, gritamos en nuestra angustia y confiamos en
ser escuchados, las olas se alzan a lo alto, llévanos a tiempo de
bonanza. Repetimos:
-Sálvanos, Señor. / -Toma tú el timón de mi vida.

1.- Por el Papa Francisco, para que conduzca la barca de la Iglesia a


buen puerto. Oremos.
2.- Por las familias y matrimonios
cristianos, para que el Señor calme las
tempestades que se generan en la vida
diaria. Oremos.

3.- Por quienes dudan o vacilan en su fe,


para que sepan que Jesús está con ellos en medio de sus
dificultades. Oremos.

4.- Por los jóvenes que realizan sus exámenes, para que el Espíritu
les ayude también en sus estudios. Oremos.

5.- Por nosotros aquí presentes en la Eucaristía, y por todos los


cristianos del mundo, para que seamos valientes y no tengamos
que escuchar de los labios de Cristo: “¿Por qué sois tan cobardes?
¿Aún no tenéis fe?”. Oremos.

6.- Por nuestra comunidad parroquial, para que sea una comunidad
viva y evangelizadora. Oremos.

Sacerdote: Padre, tú que calmas las aguas y apaciguas los mares,


arráncanos de la tribulación y condúcenos al ansiado puerto. Por
JCNS.
5. PRESENTACIÓN DE OFRENDAS

- GORRA MILITAR O DE CAPITÁN:

En las tormentas de la vida, que nunca faltan, sobre todo en


estos tiempos de pandemia, queremos, Jesús, que tú seas
nuestro capitán, el que nos marque la ruta, el que nos guíe a
buen puerto. Para eso confiamos en ti, Señor.

- PAN Y VINO

Con el pan y con el vino te ofrecemos, Señor, el trabajo de todas


aquellas manos amigas que se ponen a nuestro lado cuando no
sabemos cómo superar las dificultades. Y que en este pan y vino
que comulgamos cada domingo nos haga fuertes en la fe y nos
llenen de fuerza, de paz y nos den la seguridad de que tú nos
llevas de la mano siempre.
TEMPESTADES DE LA VIDA
-Tú, Señor, acompañas nuestro vivir
cuando las aguas están calmadas y todo va sucediendo en armonía.
-Tú, Señor, estás aún más cerca de nosotros
cuando de pronto surge una enfermedad,
un problema de trabajo, un conflicto de relación,
una muerte o cualquier dificultad.
-Tú estás cuando los huracanes de la vida nos hacen sentir miedo,
porque se mueve la barca,
creemos que no vamos a poder superar ese momento
y entonces dudamos de tu presencia y de tu amor.
-Tú, que conoces nuestras tempestades vitales,
nos tienes siempre envueltos en tu amor,
estás esperando que nos pongamos confiados en tus brazos
para desarrollar todos nuestros recursos y capacidades.

Tú, que crees en nosotros, nos has regalado a cada uno


un potencial infinito y nos haces salir airosos de todas las dificultades.

Tú sólo esperas que tengamos fe en Ti,


que creamos de verdad que acompañas nuestra vida,
y nos llenas de fuerza para poder con todo lo que la vida nos depare,
siempre que sepamos que vives dentro de nosotros,
que somos personas habitadas, impulsadas desde dentro a ser.
Mari Patxi Ayerra
6.- ORACIÓN DE GRACIAS

Sé tú el Capitán
-A veces en la barca de nuestra vida
surgen tormentas, parece que todos se va a pique.
Nos cansamos de sembrar y de seguirte,
nos asaltan dudas de fe, parece que estás dormido,
que te desentiendes de nosotros cuando nos hundimos.

-Pero tú, Jesús, pones calma en nuestros miedos,


y nos dices: “¿aún no tenéis fe?”.
Y tú, Jesús, sigues ahí a veces callado o escondido
pero sabemos que siempre nos acompañas
cuando no encontramos respuestas,
la soledad nos acecha, o la suerte nos abandona.

-Sí, tú Jesús, sigues acompañándonos


y nos invitas a “pasar a la otra orilla”,
a la orilla de la confianza, a superar los miedos
que nos paralizan y a tener fe porque todo está seguro,
pues cada comunidad y cada persona está en tus
manos.
Sé tú el capitán, toma tú el timón de nuestras vidas.

DOMINGO 12º del


TIEMPO ORDINARIO
¡FELIZ DOMINGO!

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