EL CICLO DE LAS ROCAS
Las rocas son el material más común y abundante de la Tierra. Para un viajero curioso,
la variedad parece casi infinita. La naturaleza y el aspecto de una roca están
fuertemente influidos por los minerales que la componen. La composición mineral y la
textura de una roca, a su vez, son el reflejo de los procesos geológicos que la crearon
TIPOS DE ROCAS
Los geólogos dividen las rocas en tres grandes grupos: ígneas, sedimentarias y
metamórficas:
Rocas ígneas: Las rocas ígneas se forman cuando la roca fundida, denominada magma,
se enfría y solidifica. El magma es roca fundida que se puede formar a varios niveles de
profundidad en el interior de la corteza de la Tierra y el manto superior. Cuando el
magma permanece en el interior profundo de la corteza, se enfría lentamente durante
miles de años formando las rocas ígneas de grano grueso llamadas plutónicas. Los
núcleos de muchas montañas están constituidos por roca ígnea que se formó de esta
manera. Sólo la elevación y la erosión posteriores dejan expuestas estas rocas en la
superficie. Un ejemplo común e importante es el granito. A veces el magma se abre
paso hacia la superficie de la Tierra, como durante una erupción volcánica. Dado que
se enfría con rapidez en un ambiente de superficie, la roca fundida se solidifica muy
deprisa y no hay tiempo suficiente para que crezcan grandes cristales. Las rocas ígneas
que se forman en la superficie terrestre se denominan volcánicas y suelen ser de grano
fino. Un ejemplo abundante e importante es el basalto.
Rocas sedimentarias: Los sedimentos, la materia prima de las rocas sedimentarias, se
acumulan en capas en la superficie de la Tierra. Son materiales que se forman a partir
de rocas preexistentes por los procesos de meteorización. Algunos de estos procesos
fragmentan físicamente la roca en piezas más pequeñas sin modificar su composición.
Otros procesos de meteorización descomponen la roca, es decir, modifican
químicamente los minerales en otros nuevos y en sustancias fácilmente solubles en
agua. El agua, el viento o el hielo glacial suelen transportar los productos de la
meteorización a lugares de sedimentación donde éstos forman capas relativamente
planas. Normalmente los sedimentos se convierten en roca o se litifican por uno de los
dos procesos siguientes. La compactación tiene lugar a medida que el peso de los
materiales comprime los sedimentos en masas más densas. La cementación se
produce conforme el agua que contiene sustancias disueltas se filtra a través de los
espacios del sedimento.
Rocas metamórficas: Las rocas metamórficas se producen a partir de rocas ígneas,
sedimentarias o incluso otras rocas metamórficas. Así, cada roca metamórfica tiene
una roca madre, la roca a partir de la que se ha formado. Metamórfico es un adjetivo
adecuado porque su significado literal es «cambiar la forma». La mayoría de cambios
tienen lugar a temperaturas y presiones elevadas que se dan en la profundidad de la
corteza terrestre y el manto superior
El CICLO DE LAS ROCAS
La Tierra es un sistema. Esto significa que el planeta está formado por muchas partes
interactuantes que forman un todo complejo. El ciclo de las rocas nos permite
examinar muchas de las interrelaciones entre las diferentes partes del sistema Tierra.
Nos ayuda a entender el origen de las rocas ígneas, sedimentarias y metamórficas, y a
ver que cada tipo está vinculado a los otros por los procesos que actúan sobre y dentro
del planeta. El magma es la roca fundida que se forma a una gran profundidad por
debajo de la superficie de la Tierra. Con el tiempo, el magma se enfría y se solidifica.
Este proceso, denominado cristalización, puede ocurrir debajo de la superficie
terrestre o, después de una erupción volcánica, en la superficie. En cualquiera de las
dos situaciones, las rocas resultantes se denominan rocas ígneas. Si las rocas ígneas
afloran en la superficie experimentarán meteorización, en la cual la acción de la
atmósfera desintegra y descompone lentamente las rocas. Los materiales resultantes
pueden ser desplazados pendiente abajo por la gravedad antes de ser captados y
transportados por algún agente erosivo como las aguas superficiales, los glaciares, el
viento o las olas. Por fin, estas partículas y sustancias disueltas, denominadas
sedimentos, son depositadas. Aunque la mayoría de los sedimentos acaba llegando al
océano, otras zonas de acumulación son las llanuras de inundación de los ríos, los
desiertos, los pantanos y las dunas. A continuación, los sedimentos experimentan
litificación, un término que significa «conversión en roca». El sedimento suele litificarse
dando lugar a una roca sedimentaria cuando es compactado por el peso o cuando es
cementado conforme el agua subterránea de infiltración que llena los poros con
materia mineral. Si la roca sedimentaria resultante se entierra profundamente dentro
de la tierra e interviene en la dinámica de formación de montañas, o si es instruida por
una masa de magma, estará sometida a grandes presiones o aun calor intenso, o a
ambas cosas. La roca sedimentaria reaccionará ante el ambiente cambiante y se
convertirá en un tercer tipo de roca, una roca metamórfica. Cuando la roca
metamórfica es sometida a cambios de presión o a temperaturas aún mayores, se
fundirá, creando un magma, que acabará cristalizando en rocas ígneas. Los procesos
impulsados por el calor desde el interior de la Tierra son responsables de la creación
de las rocas ígneas y metamórficas. La meteorización y la erosión, procesos externos
alimentados por una combinación de energía procedente del Sol y la gravedad,
producen el sedimento a partir del cual se forman las rocas sedimentarias.
Las vías mostradas en el ciclo básico no son las únicas posible. Las rocas ígneas, en vez
de ser expuestas a la meteorización y a la erosión en la superficie terrestre, pueden
permanecer enterradas profundamente. Esas masas pueden acabar siendo sometidas
a fuertes fuerzas de compresión y a temperaturas elevadas asociadas con la formación
de montañas. Cuando esto ocurre, se transforman directamente en rocas
metamórficas. Las rocas metamórficas y sedimentarias, así como los sedimentos, no
siempre permanecen enterrados. Antes bien, las capas superiores pueden ser
eliminadas, dejando expuestas las rocas que antes estaban enterradas. Cuando esto
ocurre, los materiales son meteorizados y convertidos en nueva materia prima para las
rocas sedimentarias
ACTIVIDAD PRÀCTICA
1-Busca ejemplos de roca sedimentaria y metamórfica.
2-Elabora un cuadro conceptual especificando los procesos por los cuales se forman
cada tipo de roca
3- ¿Te has preguntado alguna vez cual es la materia prima de ciertos objetos que
usamos a diario? Investiga qué objetos se producen con roca ígnea (granito,
basalto), sedimentaria y metamórfica.
BIBLIOGRAFÌA:
- CIENCIAS DE LA TIERRA Tarbuck, E. J.; Lutgens, F. K., y Tasa, D. Pearson Educación S.
A., Madrid, 2005