AEROSOLTERAPIA
AEROSOLTERAPIA
¿QUE ES UN AEROSOL?
Es una suspensión de pequeñas partículas sólidas o líquidas muy finas en un gas que es administrada por vía
inhalatoria. Los aparatos utilizados para generar aerosoles de partículas sólidas se denominan inhaladores y los
empleados para producir partículas líquidas, nebulizadores.
AEROSOLTERAPIA
Es un método de tratamiento que permite administrar sustancias en forma de aerosol por vía inhalada, siendo los
nebulizadores los dispositivos encargados de generar aerosoles de partículas líquidas. La ventaja principal de la
aerosolterapia es que pueden alcanzar concentraciones mayores de la sustancia en el árbol bronquial, con menores
efectos secundarios que por vía sistémica, al depositar la sustancia directamente en el tracto respiratorio.
Los factores principales que lo determinan son el tamaño de las partículas y otros dependientes del paciente, como
la edad, el patrón respiratorio al efectuar la inhalación, y las condiciones del pulmón subyacente. El rendimiento de la
aerosolterapia nebulizada, valorado de forma exclusiva en términos de depósito pulmonar escaso, ya que aprox.,
solo un 10-20% de la medicación se deposita en el pulmón, incluso con los mejores nebulizadores disponibles.
Respecto al sistema de nebulización, no solo influyen las características técnicas del equipo, sino también todos los
componentes necesarios para nebulizar un fármaco determinado (conexiones, filtros, pieza bucal, mascarillas, etc.).
Todos estos factores condicionan una gran cantidad inter- e intraindividual en el depósito de una sustancia en el
árbol bronquial. Por ello, antes de comenzar un tratamiento nebulizado, debe elegirse preferentemente, el sistema de
nebulización que haya probado su eficacia en la administración del preparado que se trate de nebulizar.
1. MECANISMO DE DEPÓSITO DE LAS PARTÍCULAS DEL AEROSOL EN LA VÍA AÉREA
Las partículas se pueden depositar mediante cuatro mecanismos fundamentales:
a. Choque: es el fenómeno físico por el que las partículas de un aerosol tienden a continuar con su trayectoria
cuando discurren por la vía aérea en vez de adecuarse a las curvaturas del tracto respiratorio. Las partículas
con suficiente momento (producto de la masa por la velocidad) se verán afectadas por las fuerzas
centrífugas en puntos en los que el flujo de aire cambie de dirección repentinamente, chocando así contra la
pared de la vía aérea. Esto sucede principalmente en las primeras diez generaciones bronquiales, en las que
la velocidad del aire resulta elevada y el flujo turbulento. Este fenómeno afecta sobre todo a las partículas
mayores de 10 µm y es el principal responsable del elevado depósito orofaríngeo que se da con todos los
fármacos inhalados.
b. Intercepción: ocurre principalmente en el caso de las fibras, en las que, debido a su forma alargada, el
depósito sucede en cuanto contactan por un extremo con la pared de la vía aérea.
c. Sedimentación: es el fenómeno físico por el que las partículas con una masa suficiente se depositan por
acción de la gravedad, siempre que el tiempo de permanencia en la vía aérea resulte suficientemente largo.
Predomina en las cinco últimas generaciones de la vía aérea, en las que la velocidad del aire es baja y por lo
tanto el tiempo de residencia se prolonga. De ahí la importancia de realizar una apnea al final de la maniobra
de inhalación de un fármaco para aumentar dicho tiempo de residencia en la medida de lo posible y
favorecer así el depósito mediante este mecanismo.
d. Suspensión: se trata del fenómeno por el que las partículas de un aerosol se desplazan de forma errática de
un sitio a otro de las vías aéreas. Sucede como consecuencia del movimiento browniano de las partículas,
que sucede principalmente en las partículas de tamaño inferior a 0,5 µm de “diámetro de la masa mediana
aerodinámica” (DMMA) cuando alcanzan los espacios alveolares, en los que la velocidad del aire es
prácticamente nula. Estas partículas por lo general no llegan a depositarse, por lo que resultan expulsadas
nuevamente al exterior con la espiración.
Las partículas de los fármacos aerosolizadas suelen poseer una forma uniforme, con simetría en varios
planos, y raramente tienen un tamaño inferior a 1 µm, por lo que los mecanismos predominantes en su
depósito son el choque y la sedimentación. De modo general puede considerarse que las partículas con un
DMMA mayor de 10 µm se depositan en la orofaringe, las de 5-10 µm en las vías aéreas centrales y las de
0,5-5 µm en las pequeñas vías aéreas y los alvéolos. Por lo tanto, para dar fármacos inhalados interesa
emplear partículas con un DMMA comprendido entre 0,5 y 5 µm. Esto es la denominada “fracción respirable
de un aerosol”.
2. FACTORES QUE AFECTAN AL DEPÓSITO DE FÁRMACOS INHALADOS
Son el tamaño y la forma de dichas partículas, la velocidad del aire que las arrastra, las características de la vía
aérea por la que circulan, el grado de humedad del pulmón y, por último, pero no por ello menos importante, los
mecanismos de aclaramiento mucociliar del pulmón.
1. Tamaño y forma de las partículas
El tamaño y la forma de las partículas son factores primordiales que condicionarán su depósito en el pulmón. El
tamaño se define mediante el denominado “diámetro de la masa mediana aerodinámica” (DMMA) o “diámetro de una
partícula de masa igual a la mediana de las partículas de una población”, es decir, el diámetro de la partícula en el
que el 50 % de la masa del aerosol se encuentra por encima y el otro 50 % por debajo.
2. Velocidad del aire
Dado que las partículas son transportadas en la vía aérea por una corriente de aire, sus trayectorias, lógicamente, se
verán afectadas por sus características. El flujo de aire en los pulmones lo determinan el volumen corriente y la
frecuencia respiratoria del individuo. En las cuatro primeras generaciones de la vía aérea, para cualquier tamaño de
partícula, el depósito aumenta según lo hace el flujo inspiratorio, puesto que predominará el comportamiento de
choque. Sin embargo, sucede lo contrario en las últimas generaciones de la vía aérea, en las que el depósito de
partículas resulta inversamente proporcional a dicho flujo. Esto se debe a que el incremento del flujo inspiratorio
disminuye el tiempo de permanencia de las partículas en la vía aérea, por lo que los efectos de la gravedad y del
movimiento browniano se ven muy reducidos. Por tanto, cuanto menor sea el flujo inspiratorio y, sobre todo, mayor la
apnea posterior, mayor resultará el depósito de fármaco en la vía aérea más periférica. Evidentemente, se precisa un
flujo inspiratorio “mínimo” capaz de arrastrar las partículas hacia el interior del árbol bronquial.
3. Geometría de las vías aéreas
Las probabilidades de depósito de las partículas por el mecanismo de choque resultan más elevadas cuanto mayor
es el tamaño de las propias partículas y el flujo de aire inspirado. Sin embargo, otros factores incrementarán dicho
depósito: cuanto mayor sea el ángulo de separación entre dos ramas de la vía aérea y menor sea su calibre, más
alta resultará la probabilidad de que la partícula choque y quede atrapada en las paredes bronquiales. En diversas
patologías, como la bronquitis crónica o el asma, se altera la arquitectura del pulmón debido a la aparición de
fenómenos de broncoconstricción, inflamación o acumulación de secreciones, lo que hace que se modifique el
depósito de los fármacos aerosolizadas. La disminución del calibre de la vía aérea aumenta la velocidad del aire,
produciendo así turbulencia en lugares en los que el flujo es normalmente laminar. Además, la obstrucción de la vía
aérea también obliga a que el aire tienda a desplazarse a zonas sin obstruir, por lo que asimismo el fármaco inhalado
se inclinará a depositarse mayoritariamente en las zonas sanas del pulmón.
4. Mecanismos de aclaramiento mucociliar
Una vez depositadas en las vías aéreas, las partículas pueden ser arrastradas hacia el exterior por el sistema
mucociliar, degradadas o absorbidas a la circulación sistémica o a los conductos linfáticos. El primero de estos
mecanismos se da en las vías aéreas de conducción (desde la tráquea hasta los bronquiolos terminales), que están
tapizadas por un epitelio ciliado cubierto por moco en el que se distinguen dos capas: una periciliar de baja
viscosidad o sol y otra que la cubre, más espesa, denominada “gel”. Esta capa bifásica de moco protege el epitelio
de la deshidratación, ayuda a humidificar el aire y proporciona una barrera protectora que atrapa las partículas
inhaladas. Las partículas insolubles quedan atrapadas en el gel y se desplazan hacia la región faringolaríngea por el
movimiento de los cilios del epitelio respiratorio, desde donde serán expectoradas o deglutidas. La velocidad de
aclaramiento dependerá del número de células ciliadas y de la frecuencia con la que batan los cilios, lo que puede
verse afectado por factores que actúan sobre el funcionamiento de los cilios o la cantidad y calidad del moco. Por
ejemplo, en la fibrosis quística se produce un moco muy espeso que no se desplaza correctamente por el
movimiento de los cilios.
Las partículas solubles son eliminadas por mecanismos absortivos. Las moléculas liposolubles atraviesan el epitelio
respiratorio por transporte pasivo, mientras que las moléculas hidrosolubles pueden traspasar la barrera epitelial
mediante los espacios intercelulares o por transporte activo. Una vez ubicadas en la región submucosa, las
partículas pueden pasar a la circulación sistémica, a la circulación bronquial o al sistema linfático. Las partículas que
llegan a depositarse en los alvéolos pueden ser fagocitadas y eliminadas por los macrófagos alveolares si son
insolubles (mecanismo no absortivo) o ser absorbidas hacia la circulación sistémica si son solubles.
3. DISPOSITIVOS DE AEROSOLTERAPIA
INHALADORES DE POLVO SECO (DPI)
La administración de aerosoles, surgieron en el cuidado respiratorio, una serie de dispositivos que entregan no
líquidos suspendidos, sino fármacos en forma de polvo seco, los cuales conforman el grupo de equipos para la
inhalación pulverulenta (en forma de polvo). Sus ventajas se relacionan con la facilidad de uso pues no requieren
coordinación, con la eliminación definitiva de los propelentes y con la dosificación exacta y reproducible del fármaco
liberado.
Ventajas.
Mezclar el
medicamento: no
agitar el inhalador previo al uso puede disminuir hasta un 25%-35% la dosis total y respirable.
Almacenamiento: usarlo en una temperatura exterior baja o almacenamiento en un lugar frio disminuye
significativamente la entrega del aerosol.
El tamaño de la boquilla y la limpieza: Los residuos cristalinos del medicamento en la válvula o salida del
aerosol influyen tanto en la dosis inhalada como en el tamaño de la partícula. Se recomienda limpiar el
dispositivo periódicamente.
Intervalos de actuación: la activación de más de un puff a la vez reduce la entrega por la turbulencia y
coalescencia de las partículas. Se recomienda entre 30 a 60 segundos entre cada puff.
Características del paciente: el depósito suele ser menor en los niños por cambios anatómicos, por sus
capacidades físicas o cognitivas que hacen que no sigan instrucciones, esto ocurre igualmente con los
adultos mayores.
IDM ACTIVADOS POR LA RESPIRACIÓN
Los inhaladores de dosis medida activados con la respiración son una nueva generación diseñada para evitar el
problema de coordinación entre el disparo y la inspiración del paciente. Tiene un auto disparo, en los que la válvula
libera el aerosol con la inspiración del paciente, por lo que no es necesaria la coordinación entre dicha inspiración y
la pulsación del dispositivo. Son sistemas multidosis un poco más grandes en tamaño que los convencionales y no
permiten la extracción del cartucho dosificador. Proporcionan un mayor depósito pulmonar que los convencionales
(ver anexo 9). Entre sus desventajas se encuentra que la evaluación de su eficacia en niños menores de seis años
es limitada, y su uso debería estar restringido a niños mayores de esa edad y adultos; además el depósito
orofaríngeo de esteroides en este dispositivo es muy alto.
Es similar en sus partes al IDM convencional, lo diferencia un resorte que activa el canister para liberar la dosis
durante la inspiración la cual debe tener un flujo entre 22-36 L/min; que se puede lograr en la mayoría de los
pacientes.
Técnica para el uso del IDM activados por la respiración
1. Preparar el dispositivo
2. Retirar la tapa, agitar de 3-4 veces, sostener de forma vertical el canister y de forma horizontal la
boquilla.
3. Levantar la palanca superior
4. Realizar una inspiración completa
5. Poner los dientes y labios alrededor de la boquilla
6. Activar el dispositivo: iniciar con una inspiración lenta y no pare cuando el dispositivo se active.
7. Retirar el cartucho y sostenga la espiración unos 10 segundos
8. Bajar la palanca superior
9. Tapar el dispositivo
10. Enjuagar la boca con agua
NEBULIZADORES
Los nebulizadores generan aerosol de soluciones o suspensiones líquidas para ser administrados a través de
boquillas, máscaraoronasal, tubo en T o máscara de traqueostomía. Pueden clasificarse según el tamaño del
reservorio: nebulizadores de pequeño volumen (SVNs, por sus siglas en inglés); y los nebulizadores de gran volumen
también llamados nebulizadores jet los cuales son más usados para administrar aerosolterapia suave.
En los nebulizadores de pequeño volumen encontramos tres categorías: nebulizadores neumáticos o tipo jet,
nebulizadores ultrasónicos (USNs, por sus siglas en inglés) y de malla (VM, por sus siglas en ingles), Los
nebulizadores en general son efectivos en la entrega de medicamento que no puede realizarse mediante pMDI.
Ventajas
Que tienen es el uso en cualquier edad, no requieren de coordinación con el dispositivo, se pueden usar varios
medicamentos juntos y a altas dosis, algunos son compatibles con oxigenoterapia y ventilación asistida y a su vez
proporcionan humidificación a las vías aéreas.
Desventajas
Se encuentra que requieren mayor tiempo para el tratamiento, no son portátiles comparado con los inhaladores, se
debe preparar el medicamento, necesitan una fuente de energía (eléctrica o neumática),10 pueden generar molestias
oculares cuando se usa la máscara oronasal, y se debe ser cuidadoso con la limpieza en cada uso.
NEBULIZADORES DE TIPO JET
Es el tipo de nebulizador neumático que libera gas comprimido a través de un jet, de tal modo que crea una región de
presión negativa, La solución que se nebuliza se desplaza con el flujo del aire y disuelve la parte líquida, la cual
forma la nube de aerosol y es de- pendiente del fármaco, la densidad y el paciente para establecer la dosis nominal
del fármaco. Por lo regular queda una dosis remanente de 0.5 a 1 mL en promedio, lo cual puede evitarse si se
aplica un golpeteo al nebulizador de volumen pequeño.
Equipo convencional para el uso de nebulizadores Jet. En la fotografía, llega el flujo de gas al micronebulizador por la
parte inferior. En la parte superior de este, se observa la más- cara de aerosol. Nótese que esta posee agujeros
grandes para permitir el escape del exceso de aerosol al ambiente, en contra de la máscara simple de oxígeno en la
que los agujeros son pequeños
Principio de Bernoulli
La base del funcionamiento de los nebulizadores Jet es el principio de Bernoulli, el cual expresa que, la presión
lateral de un fluido (líquido o gaseoso) disminuye a medida que aumenta su velocidad. Según este principio, es
posible disminuir la presión lateral de un fluido aumentando su velocidad por medios mecánicos, tales como la
colación de una constricción en el conducto por el cual circula dicho fluido
Cualquier neumopatía que curse con broncoespasmo (asma, bronquiolitis, enfisema pulmonar)
Cardiopatías cianozantes.
Tromboembolismo pulmonar.
Insuficiencia respiratoria aguda.
Tosferina.
Edema pulmonar.
Falla cardíaca o insuficiencia cardíaca congestiva.
Obstrucción aguda de la vía aérea superior.
Crup laríngeo.
Hemoptisis.
La nebulización ultrasónica debe usarse con precaución en los siguientes casos:
1. En el recién nacido por el riesgo de sobrehidratación, edema pulmonar o disnea.
2. En el paciente anciano con historia de disnea.
3. En el paciente con historia de enfermedad pulmonar intersticial.
4. En el paciente portador de EPOC.
5. En el paciente que ha broncoaspirado ácidos o álcalis
NEBULIZADORES DE MALLA O MEMBRANA VIBRANTE
En estos aparatos se genera el aerosol al pasar el líquido mediante una presión determinada por los orificios de una
malla estática o con el uso de una placa de abertura unida a un material piezoeléctrico que vibra a alta frecuencia,
crea una acción de bombeo para producir el aerosol desde la solución líquida (malla dinámica), sin precisar de
compresor Algunos liberan el aerosol en la fase inspiratoria al detectar el patrón respiratorio del paciente sobre
varias respiraciones, se optimiza con ello el tratamiento y evita contaminación ambiental. Consiguen un mayor
depósito del medicamento en los pulmones, son más rápidos que los neumáticos, pueden funcionar con baterías o
pilas (además de electricidad), poco voluminosos y silenciosos Son los más utilizados para la nebulización de
antibióticos a largo plazo. El volumen de medicamento residual esta entre 0,1 – 0,4 ml, comparado con otro tipo de
nebulizadores que es de 0,8 – 1,5 mL.
Debido a la gran variedad de nebulizadores la técnica de preparación y uso inicial debe ser individualizado, seguir las
instrucciones del fabricante por lo cual a continuación se describe de manera general la técnica durante la terapia
nebulizada
El diseño de los equipos más modernos ha conseguido superar las limitaciones de los nebulizadores ultrasónicos y
NJ, Estos nuevos dispositivos electrónicos emplean una malla vibratoria (mesh) o una placa con aberturas para
generar aerosoles con mayor eficiencia ciencia; predomina así la fracción final en el tamaño de las partículas del
aerosol, con un volumen residual mínimo al final de la nebulización.
Este principio de funcionamiento emplea una placa de abertura unida a un material piezoeléctrico que vibra a alta
frecuencia. Esta vibración a gran velocidad activa una acción de bombeo para producir el aerosol desde la solución
líquida. Pueden generarse aerosoles con una fracción de partícula altamente final que puede favorecer una
liberación más eficiente
del compuesto en comparación con los nebulizadores convencionales. Se genera el aerosol en la forma de una
niebla fina. Al finalizar la dosis queda un remanente mínimo si se compara con el sistema jet y Los equipos son
portátiles, de diseño compacto, que pueden operarse con baterías y administran el fármaco en un menor tiempo y de
modo silencioso. Los dispositivos de este tipo disponibles en la actualidad para uso clínico son Omron MicroAir,
Nektar Aeroneb y Parieflow.
Algunos están aprobados sólo para uso con fármacos específicos. Los nebulizadores de malla vibratoria tienen una
velocidad elevada de nebulización y la liberación del compuesto es dos a tres veces mayor respecto de los NJ.
Al utilizar estos dispositivos, la temperatura de la solución no varía durante la operación (a diferencia de los
nebulizadores ultrasónicos), lo que hace posible nebulizar proteínas y péptidos sin riesgo de desnaturalización. Estos
nebulizadores poseen muchas ventajas comparativas sobre los NJ y ultrasónicos y es posible que en el futuro
aumente su utilización para suministrar aerosoles específicos. distintos de los broncodilatadores, a la vía respiratoria
de pacientes dependientes del ventilador.
Debido a estas novedosas características, este dispositivo se incluye en la categoría de los denominados
“nebulizadores inteligentes”, dado que se adaptan al patrón respiratorio del paciente, optimizan la liberación del
aerosol y aumentan el depósito pulmonar.
Están diseñados para emplearse en individuos en ventilación espontánea mayores de dos años, capaces de utilizar
una pieza bucal.
Durante la terapia se pueden presentar como efectos secundarios y complicaciones:
El broncoespasmo infección, sobre hidratación de secreciones exposición del personal médico a gérmenes durante
la expectoración del paciente o la tos, broncoconstricción; este último es más frecuente durante el uso de solución
salina hipertónica para inducir esputo en el paciente con enfermedad pulmonar obstructiva crónica, asma, fibrosis
quística entre otras enfermedades pulmonares.
Técnica para el uso de los nebulizadores de pequeño volumen
1. Seleccionar si usara el dispositivo con máscara o pieza bucal (en caso de la segunda opción es necesario
una pieza nasal).
2. Lavado de manos
3. Si se utiliza el dispensador de medicamento unidosis colocarlo en el nebulizador. Si se utiliza una vial
multidosis adicionar la solución salina para un total de 4-5 mL de líquido en el nebulizador. Conecte la fuente
de gas a 6-8 L/min o al compresor.
4. Poner la boquilla en la boca y cerrar la nariz y la boca con la máscara oro nasal del tamaño adecuado.
5. Mantener el nebulizador de forma vertical durante el tratamiento
6. Mantener el nebulizador de forma vertical durante el tratamiento
7. Inhalar y exhalar con respiraciones normales, de forma ocasional realice respiraciones profundas.
8. Cuando el tratamiento este completado, retire la boquilla o máscara
9. Desarme y limpie el nebulizador