[go: up one dir, main page]

0% encontró este documento útil (0 votos)
49 vistas18 páginas

Constitucion 3

El documento presenta un resumen de los principales aspectos de la Constitución de Venezuela, incluyendo la organización política del Estado como una república democrática y social de derecho, la división política territorial, el reconocimiento de los derechos humanos y su protección, y los derechos políticos de los ciudadanos.
Derechos de autor
© Attribution Non-Commercial (BY-NC)
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOC, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
49 vistas18 páginas

Constitucion 3

El documento presenta un resumen de los principales aspectos de la Constitución de Venezuela, incluyendo la organización política del Estado como una república democrática y social de derecho, la división política territorial, el reconocimiento de los derechos humanos y su protección, y los derechos políticos de los ciudadanos.
Derechos de autor
© Attribution Non-Commercial (BY-NC)
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOC, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 18

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES la Constitucin, consagra la condicin libre e independiente de la Repblica Bolivariana de Venezuela; condicin permanente e irrenunciable que fundamenta

en el ideario de Simn Bolvar, el Libertador, su patrimonio moral y los valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional. de lucha incesante y abnegada por la libertad, la justicia, la moral pblica y el bienestar del pueblo, en virtud de lo cual se establece que la Nacin venezolana, organizada en Estado, se denomina Repblica Bolivariana de Venezuela. ORGANIZACIN JURDICO POLTICA DE LA NACIN VENEZOLANA La Republica Bolivariana de Venezuela es un Estado democrtico y social de Derecho y de Justicia . 1.- Los principios de la solidaridad social y del bien comn 2.- Es expresada libremente por los medios de participacin poltica y social para conformar el Estado democrtico. 3.- Con el fin supremo de refundar la Repblica para establecer una sociedad democrtica. 4.-. Se establece que la educacin y el trabajo son los procesos fundamentales para garantizar los fines del Estado. ESTRUCTURA DEL ESTADO VENEZOLANO Se consagra un Estado Federal que se define como descentralizado, que se regir por los principios de integridad territorial, cooperacin, solidaridad, concurrencia y corresponsabilidad. LA SUPREMACA DE LA CONSTITUCIN Se consagran los principios de supremaca y fuerza normativa de la Constitucin, segn los cuales ella es la norma de mayor jerarqua Con base en lo anterior, todos los rganos que ejercen el Poder Pblico, sin excepcin, estn sometidos a los principios y disposiciones consagrados en la Constitucin, y por tanto, todos sus actos pueden ser objeto del control jurisdiccional de la constitucionalidad. TITULO II DEL ESPACIO GEOGRFICO Y DE LA DIVISIN POLTICA CAPITULO I DEL TERRITORIO Y DEMS ESPACIOS GEOGRFICOS Se adopt la expresin ms amplia de espacio geogrfico para sustituir la de territorio. En efecto, espacio geogrfico alude a los espacios continentales, insulares y martimos, Se reiter la versin tradicional de la Constitucin del ao 1830 y que se repite hasta la de 1961, es decir, el que corresponda a la Capitana General de Venezuela para el 19 de abril de 1810. Se estableci que el espacio geogrfico venezolano como zona de paz, en virtud de lo cual se prohbe establecer en l bases militares extranjeras o cualquier instalacin de potencia o coalicin de potencias que tengan propsitos militares. CAPITULO II DE LA DIVISION POLITICA Se divide el territorio nacional en el de los Estados, el del Distrito Capital, el de las dependencias federales y el de los territorios federales, mientras que el territorio se organiza en Municipios. se establece la ciudad de Caracas como la capital de la Repblica y asiento de los rganos del Poder Nacional, lo cual no impide el ejercicio del Poder Nacional en otros lugares de la Repblica. TITULO III DE LOS DERECHOS HUMANOS Y GARANTAS, la Constitucin reconoce expresamente el principio de progresividad en la proteccin de tales derechos, conforme al cual el Estado garantizar a toda persona natural o jurdica, sin discriminacin alguna, el respeto, el goce y el ejercicio irrenunciable, indivisible e interdependiente de los mismos. Se reconocen como fuentes en la proteccin de los derechos humanos a la Constitucin, a los tratados internacionales suscritos y ratificados por la Repblica en esta materia.. Se reconocen los derechos al libre desenvolvimiento de la personalidad y a la igualdad. Se consagra la garanta de no retroactividad de las leyes y de las disposiciones normativas y se ampla su alcance a fin de que en caso de dudas sobre su vigencia temporal, se aplique la norma que beneficie al reo. Se mantiene la garanta segn la cual todo acto dictado en ejercicio del Poder Pblico que viole o menoscabe los derechos garantizados por la Constitucin y la ley es nulo; y los funcionarios pblicos que lo ordenen o ejecuten incurren en responsabilidad penal, civil y administrativa, Se reconocen los derechos de acceso a la justicia y tutela judicial efectiva, en virtud de los cuales toda persona puede acceder a los rganos de administracin de justicia para obtener la tutela judicial la Constitucin exige al Estado garantizar una justicia gratuita, accesible, imparcial, idnea, transparente, autnoma, independiente, responsable, equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones intiles. El amparo se reconoce como una garanta derecho constitucional, cuya finalidad es la tutela judicial reforzada de los derechos humanos, aun de aquellos inherentes a la persona humana que no figuren expresamente en la Constitucin o en los instrumentos internacionales.

Se reconoce por vez primera el hbeas data o el derecho de las personas de acceso a la informacin que sobre s mismas o sobre sus bienes consten en registros oficiales o privados. Por otra parte, como una conquista de la lucha por la proteccin integral de los derechos humanos, la Constitucin impone al Estado la obligacin de investigar y sancionar legalmente los delitos contra los derechos humanos cometidos por sus autoridades Igualmente, se impone al Estado la obligacin de indemnizar integralmente a las vctimas de violaciones de los derechos humanos que le sean imputables, o a sus derechohabientes, incluido el pago de daos y perjuicios, todo lo cual constituye una consecuencia del principio de la responsabilidad patrimonial del Estado reconocido por la Constitucin. CAPITULO II DE LA NACIONALIDAD Y DE LA CIUDADANIA Seccin Primera De la Nacionalidad Se mantienen los criterios atributivos de la nacionalidad originaria propios de la tendencia constitucional venezolana, marcada por la presencia del ius soli absoluto y del ius sanguinis. En esta materia destaca que siendo la nacionalidad venezolana por nacimiento un derecho inherente a la persona humana, no podr privarse de ella a quienes, conforme a la Constitucin, cumplieren los requisitos para obtenerla. En cuanto a la nacionalidad derivada o por naturalizacin, en aras de garantizar el vnculo y compromiso efectivo de los venezolanos por naturalizacin con la Nacin venezolana, con su pueblo, sus costumbres y su destino, se exige que las personas que opten a la carta de naturaleza, posean domicilio con residencia ininterrumpida en el territorio de Venezuela de, por lo menos, diez aos inmediatamente anteriores a la fecha de la respectiva solicitud. Esta exigencia se rebaja a cinco aos, en el caso de aquellas personas que tuvieren la nacionalidad originaria de Espaa, Portugal, Italia, pases latinoamericanos y del Caribe. Se consagra sin discriminacin alguna el derecho del cnyuge extranjero casado con venezolano o venezolana por nacimiento, de obtener la nacionalidad venezolana por naturalizacin, transcurridos por lo menos cinco aos a partir de la fecha del matrimonio. Por otra parte, siguiendo las orientaciones de los ordenamientos constitucionales contemporneos, se admite la doble nacionalidad y el carcter renunciable de la nacionalidad venezolana El ejercicio de los derechos polticos en principio pertenece a los venezolanos y venezolanas no sujetos a interdiccin civil ni a inhabilitacin poltica, en las condiciones de edad que establezca la Constitucin para el ejercicio de los derechos polticos. No obstante, se otorga potestad electoral activa a los extranjeros que hayan cumplido dieciocho aos de edad, con ms de diez aos de residencia en el pas y no estn sometidos a interdiccin civil o inhabilitacin poltica, para votar en las elecciones parroquiales, municipales y estadales. En esta materia destaca, adems, la ampliacin de los derechos polticos de los venezolanos por naturalizacin con el objeto de integrarlos ms estrechamente a la vida y destino del pas. Por ello, se les permite el desempeo de cargos pblicos hasta ahora reservados constitucionalmente a los venezolanos por nacimiento. As, los venezolanos por naturalizacin, si tienen domicilio con residencia ininterrumpida en el pas no menor de quince aos, podrn desempearse como diputados a la Asamblea Nacional, aunque no podrn ejercer la Presidencia o Vicepresidencia de dicho cuerpo; como Ministros, menos en los cargos relacionados con la seguridad de la Nacin, finanzas, energa y minas y educacin; o como Gobernadores o Alcaldes, excepcin hecha de los Estados fronterizos. CAPITULO III DE LOS DERECHOS CIVILES En el Captulo III se recogen y amplan los derechos civiles de las personas, con base en una regulacin progresiva que establece normas y principios contenidos en tratados internacionales suscritos y ratificados por la Repblica en materia de derechos humanos. Se reafirma el derecho a la vida como derecho fundamental, base para disfrutar y ejercer los dems derechos, comprometiendo al Estado a proteger la vida de las personas que se encuentren privadas de su libertad Se prohbe en forma absoluta y sin excepciones, aun en estado de emergencia o de excepcin o restriccin de garantas, practicar, permitir o tolerar la desaparicin forzada de personas. Se establece que los cuerpos de seguridad del Estado, los cuales debern adecuar su actuacin al respeto a la dignidad de las personas y sus derechos humanos, en razn de lo cual el uso de armas y sustancias txicas estar sujeto a los principios de necesidad, conveniencia, oportunidad y proporcionalidad. Se garantiza la libertad de expresin sin que sea posible censura alguna. CAPITULO IV DE LOS DERECHOS POLITICOS Y DEL REFERENDO POPULAR Seccin Primera De los Derechos Polticos

En materia de Derechos Polticos se incluyen modificaciones sustanciales en relacin con la Democracia Representativa y de Partidos establecida en la Constitucin anterior. Se inicia el Captulo con la consagracin amplia del derecho a la participacin en los asuntos pblicos de todos los ciudadanos y ciudadanas, ejercido de manera directa, semidirecta o indirecta. Se reconoce el sufragio como un derecho, mas no como un deber, a diferencia de la Constitucin de 1961. Se establece el ejercicio del mismo mediante votaciones libres, universales, directas y secretas. La consagracin de la personalizacin del sufragio debe conciliarse con el principio de la representacin proporcional, requerido para obtener rganos conformados de manera plural, en representacin de las diferentes preferencias electorales del pueblo. En cuanto a la definicin de los electores se da ese carcter a los venezolanos y venezolanas, que hayan cumplido dieciocho aos de edad, amplindose este derecho a los extranjeros que hayan cumplido dicha edad, pero limitado a las elecciones parroquiales, municipales y estadales, exigindose en todo caso como condicin el que tengan ms de diez aos de residencia en el pas. En cuanto a las diferentes etapas de los procesos electorales se otorga a los ciudadanos amplias posibilidades de participacin superando las restricciones del sistema partidocrtico que nos rigi. El derecho a desempear funciones pblicas y ejercer cargos de eleccin popular se les otorga de manera igualitaria a los electores venezolanos y venezolanas, que sepan leer y escribir, En el mismo contexto de la anterior disposicin, se consagra el derecho al control por parte del pueblo de los representantes electos, el cual abarca la rendicin de cuentas pblicas, transparentes y peridicas. La Constitucin consagra como un derecho poltico consustancial con la vida democrtica, el de la manifestacin pacfica y sin armas. En este sentido, se consagra la prohibicin del uso de armas de fuego y sustancias txicas para enfrentar manifestaciones pacficas. Igualmente se reconocen y garantizan los derechos de asilo y refugio, como principios reconocidos universalmente. Seccin Segunda Del Referendo Popular En relacin con los medios de participacin en los cuales se concretizan los derechos de los ciudadanos a ejercer su soberana, se consagran las diversas formas de referendo popular a la que se dedica una seccin en particular que regula el referendo consultivo, revocatorio, aprobatorio y abrogatorio. CAPITULO V DE LOS DERECHOS SOCIALES Y DE LAS FAMILIAS Los derechos sociales contenidos en la Constitucin consolidan las demandas sociales, jurdicas, polticas, econmicas y culturales de la sociedad en un momento histrico en que los venezolanos y venezolanas se redescubren como actores de la construccin de un nuevo pas Queda evidenciado a lo largo de todo el texto constitucional el uso del gnero femenino, expresamente indicado de acuerdo con las recomendaciones de la Organizacin para la Educacin y la Cultura de las Naciones Unidas (UNESCO) y de diversas organizaciones no gubernamentales, todo lo cual se inscribe dentro del principio de igualdad y no discriminacin reconocido por el texto constitucional, con el objeto de evitar dudas o equvocas interpretaciones de la Constitucin. La participacin directa de la gente en la toma de decisiones para la solucin de sus problemas y los de su comunidad, crea una nueva relacin ciudadana que en el mbito de los derechos sociales, desarrolla la trada solidaria entre sociedad, familia y Estado, lo que coloca al legislador y a los rganos que integran el sistema de justicia, en un nuevo espacio de interpretacin de la democracia social y del Estado de Derecho y de Justicia. La pluralidad de las familias, el rescate de la tradicin oral de los ancianos y de las ancianas, como patrimonio familiar para una educacin cotidiana; la garanta de la autonoma funcional de los seres humanos con discapacidad o necesidades especiales. Se garantiza para todos la seguridad social, la cual debe responder a los conceptos de solidaridad, universalidad, integralidad, unicidad, participacin y eficiencia. En el campo laboral se reconocen los derechos individuales al trabajo, a la estabilidad y a las vacaciones, as como los derechos colectivos de sindicalizacin, contratacin colectiva y derecho a la huelga por parte de los trabajadores y de las trabajadoras. Todos estos derechos constituyen la base fundamental del nuevo ordenamiento jurdico en el que la vida, la tica, la moral, la libertad, la justicia, la dignidad, la igualdad, la solidaridad, el compromiso, los deberes ciudadanos y la seguridad jurdica, son valores que concurren en la accin transformadora del Estado, la Nacin, el gobierno y la sociedad, en un propsito de realizacin compartida para producir la gobernabilidad corresponsable, la estabilidad poltica y la legitimidad jurdica necesarias para el funcionamiento de la sociedad democrtica. CAPITULO VI DE LOS DERECHOS CULTURALES Y EDUCATIVOS En las primeras disposiciones de este captulo se garantiza la absoluta libertad en la creacin cultural, tanto para la inversin en ella como para su produccin y divulgacin.

Se garantiza a los trabajadores culturales su incorporacin a un sistema de seguridad social; y se prev a travs de una legislacin perentoria la figura del mecenazgo. El articulado garantiza igualmente, la obligatoriedad de la informacin cultural, con el objeto de corregir la desigualdad comunicacional que frente a nuestra propia cultura exhiben los medios de comunicacin. Por ello se establece el deber de dichos medios de coadyuvar a la difusin de los valores y aportes de los creadores venezolanos. Las disposiciones siguientes estn dedicadas a derechos y definiciones de carcter educativo. De acuerdo con la Constitucin, la Educacin es plural en su apertura a todas las corrientes del pensamiento universal, como instrumento del conocimiento cientfico, humanstico y tecnolgico. A tales fines, la educacin debe ser integral de calidad, permanente, en igualdad de condiciones y oportunidades para acceder a ella; igualdad que incluye a quienes califiquen en condiciones especiales, o estn discapacitados, o que se encuentren privados de su libertad. CAPITULO VII DE LOS DERECHOS ECONOMICOS En este Captulo referido a los derechos econmicos se establece el derecho que tienen los consumidores a disponer de bienes y servicios de calidad y a un tratamiento digno y no discriminatorio. En consecuencia, el Estado se obliga a tomar las medidas necesarias para combatir toda prctica que afecte la libre formacin de precios, sea ella originada en la morfologa del mercado, como los monopolios, o en el abuso de posicin dominante. El derecho de propiedad se garantiza sin ambigedades, sin obviar las consideraciones de utilidad pblica e inters general, en tanto que la accin del Estado, considerada como esencial en la definicin de un marco institucional apropiado para el crecimiento y el bienestar, est sometida al imperio de la ley. CAPITULO VIII DE LOS DERECHOS DE LOS PUEBLOS INDIGENAS Actualmente habitan en Venezuela, al igual que en el resto del continente americano, pueblos cuya existencia antecede a la llegada de los primeros europeos, as como a la formacin de los estados nacionales, razn por la cual se les denomina pueblos indgenas. Sus antepasados ocuparon durante miles de aos estas tierras, desarrollando formas de organizacin social, poltica y econmica, culturas, idiomas y tecnologas muy diferentes entre s y respecto a las conocidas por los europeos de entonces. Ante la invasin, conquista y colonizacin europea, los indgenas defendieron heroicamente sus tierras y vidas. Durante ms de quinientos aos han mantenido su resistencia y lucha por el reconocimiento pleno de su existencia como pueblos, as como del derecho sobre sus tierras, lo cual hoy se materializa con la refundacin de la Repblica. CAPITULO IX DE LOS DERECHOS AMBIENTALES En lo que se refiere a los derechos ambientales, la Constitucin, adems de establecer por vez primera en nuestra historia constitucional un Captulo especialmente dedicados a los mismos, supera, con una visin sistemtica o de totalidad, la concepcin del conservacionismo clsico que slo procuraba la proteccin de los recursos naturales como parte de los bienes econmicos. La Constitucin en su prembulo seala entre los fines que debe promover nuestra sociedad, la proteccin del equilibrio ecolgico y de los bienes jurdicos ambientales como patrimonio comn e irrenunciable de la humanidad. Consecuente con ello, el texto constitucional se caracteriza por desarrollar con la amplitud necesaria, los derechos y deberes ambientales de cada generacin, y por reconocer el derecho que ellas tienen a un medio ambiente seguro, sano y ecolgicamente equilibrado. Destaca, en este sentido, la necesidad de mantener un eficaz desarrollo de la seguridad ambiental en las fbricas y complejos industriales. CAPITULO X DE LOS DEBERES En este Captulo, retomando principios de nuestra historia constitucional se consagran los deberes de los venezolanos. El origen de los deberes es la Declaracin de los Derechos del Pueblo de 1811, publicada en la Gaceta de Caracas el 23 de julio de ese mismo ao, en la cual se desarrollaron los derechos y deberes del hombre en sociedad. Luego, en la Constitucin Federal de Venezuela de 1811 publicada en la Gaceta de Caracas el 27 de diciembre de ese mismo ao, en su parte final se consagraron los deberes del hombre en sociedad conjuntamente con los deberes del cuerpo social, con fundamento en la figura romana del buen padre de familia. Se consagra el deber de honrar y defender la Patria, independientemente de cualquier tipo de corriente ideolgica, como una obligacin consustancial con la nacionalidad. Este deber implica no slo resguardar y proteger la soberana, la nacionalidad y nuestra integridad territorial, sino adems, defender y promover la autodeterminacin poltica, territorial, cultural y social de la Nacin. TITULO IV DEL PODER PUBLICO CAPITULO I

DE LAS DISPOSICIONES FUNDAMENTALES Seccin Primera Disposiciones Generales El presente ttulo referente al Poder Pblico adquiere especial significacin dado que se propone rescatar la legitimidad del Estado y de sus instituciones, recuperando la moral pblica y la eficiencia y eficacia de la funcin administrativa del Estado, caractersticas complementarias e indispensables para superar la crisis de credibilidad y de gobernabilidad que se ha instaurado en el pas en los ltimos tiempos. En las Disposiciones Generales, en primer lugar se consagra la conocida distribucin vertical del Poder Pblico: Poder Municipal, Estadal y Nacional; colocados en este orden segn su cercana con el ciudadano, sujeto protagnico de este modelo de democracia participativa. En lo que respecta a la distribucin horizontal del Poder Pblico Nacional se incorporan, adems de las funciones tradicionales, la innovacin de los denominados Poder Electoral y Poder Ciudadano. La razn de esta novedosa inclusin se entiende en un contexto social y poltico en el cual se deben dar signos claros del respeto a la independencia y autonoma funcional de la que deben gozar los rganos encargados de desarrollar las funciones respectivas, para facilitar la recuperacin de la legitimidad perdida en terrenos tan delicados como el de los procesos electorales, as como el de la funcin contralora y la defensa de los derechos humanos. Se consagra, igualmente, una divisin de las funciones que corresponden a cada rama del Poder Pblico, tanto en sentido vertical como horizontal. Pero si bien se acepta la especialidad de la tarea asignada a cada una de ellas, se establece un rgimen de colaboracin entre los rganos que van a desarrollarlas para la mejor consecucin de los fines generales del Estado. Se establece el principio restrictivo de la competencia, segn el cual los rganos que ejercen el Poder Pblico slo pueden realizar aquellas atribuciones que les son expresamente consagradas por la Constitucin y la ley. La usurpacin de autoridad, consistente en la invasin del Poder Pblico por parte de personas que no gocen de la investidura pblica, se considera ineficaz y los actos dictados se consideran nulos. En cuanto a la responsabilidad individual consecuencia del ejercicio del Poder Pblico, se abarca tanto el abuso de poder, la desviacin de poder, as como la violacin de la Constitucin y la Ley. Esta disposicin es una de las que ha adolecido de ineficacia, por la cual su consagracin en esta Constitucin implica generar los mecanismos legales para su aplicacin efectiva. Finalmente, en las disposiciones generales, se establece bajo una perspectiva de derecho pblico moderna la obligacin directa del Estado de responder patrimonialmente por los daos que sufran los particulares en cualquiera de sus bienes y derechos, siempre que la lesin sea imputable al funcionamiento, normal o anormal, de los servicios pblicos y por cualesquiera actividades pblicas, administrativas, judiciales, legislativas, ciudadanas o electorales, de los entes pblicos o incluso de personas privadas en ejercicio de tales funciones. SECCIN SEGUNDA DE LA ADMINISTRACIN PBLICA Por definicin, la funcin ejercida por la Administracin Pblica est sujeta al servicio pblico o inters general, por ende debe estar al servicio de la ciudadana sin ningn tipo de distinciones, de privilegios o discriminaciones. Es por ello que se precisan los principios que deben fundamentar a la Administracin Pblica, los cuales no requieren de mayor explicacin: honestidad, participacin, celeridad, eficacia, eficiencia, transparencia, rendicin de cuentas y responsabilidades. SECCIN TERCERA DE LA FUNCIN PBLICA La nueva Constitucin le otorga a la funcin pblica, en la medida en que la honestidad, la eficiencia y la eficacia de su ejercicio constituyen prioridades indiscutibles dentro de las exigencias que la sociedad venezolana Se consagra la creacin del Estatuto de la funcin pblica mediante ley, donde se deber regular el ingreso, ascenso, traslado, suspensin y retiro y, as mismo, la incorporacin de los mismos a la seguridad social. En este mismo contexto el ingreso a la carrera administrativa ser exclusivamente por concurso pblico que garantice la seleccin de los mejores, tanto en el aspecto tico como en el de la preparacin tcnica y profesional. SECCIN CUARTA DE LOS CONTRATOS DE INTERS PBLICO En materia de contratos de inters pblico . Se prev, as, como regla general que los contratos de inters pblico nacional debern ser aprobados por la Asamblea Nacional en los casos que determine la ley. No obstante, se establece con carcter preceptivo esta aprobacin en los supuestos de contratos de inters pblico nacional, estadal o municipal si los mismos pretenden celebrarse con Estados o entidades oficiales extranjeras o con sociedades no domiciliadas en Venezuela. . SECCIN QUINTA DE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

En la Constitucin las relaciones internacionales de la Repblica responden a los fines del Estado en el ejercicio de la soberana y de los intereses del pueblo. En esta seccin se establecen los principios de independencia, igualdad entre los estados, libre determinacin y no intervencin, solucin pacfica de los conflictos internacionales, CAPITULO II DE LA COMPETENCIA DEL PODER PUBLICO NACIONAL En esta Constitucin se actualizan las competencias del Poder Nacional, incorporando materias nuevas tales como la determinacin de los tipos impositivos o alcuotas de los tributos estadales o municipales; la creacin y organizacin de impuestos territoriales o sobre predios rurales, as como transacciones inmobiliarias, cuya recaudacin y control corresponder a los municipios; la administracin del espectro electromagntico; el rgimen general de los servicios pblicos domiciliarios; el manejo de la poltica de fronteras; la legislacin en materia de pueblos indgenas y territorios por ellos ocupados; as como la organizacin y funcionamiento de los rganos del poder Pblico Nacional y dems rganos e instituciones del Estado. A continuacin se incluye una declaracin general sobre la valoracin del concepto de descentralizacin, como lineamiento estratgico de la poltica de desarrollo, no slo a los fines de la democratizacin de lo pblico sino tambin como elemento decisivo para promover la efectividad y eficiencia de los cometidos estatales. CAPITULO III DEL PODER PUBLICO ESTADAL Comienza con la caracterizacin de los estados como entidades autnomas e iguales en lo poltico, con el atributo de personalidad jurdica plena, haciendo mencin expresa del compromiso de mantener la integridad nacional y cumplir y hacer cumplir la Constitucin y las leyes de la Repblica, que es la esencia del pacto federal. Se definen los rganos superiores de las entidades estadales, a saber, el gobernador y el Consejo Legislativo, con las funciones de gobierno y administracin el primero, y de legislacin y de deliberacin poltica el segundo. Se sealan los requisitos del cargo y el perodo de duracin del mandato del gobernador, adems de la obligacin de rendicin de cuenta ante el Contralor del Estado y la presentacin de un informe del mismo ante el Consejo Legislativo y el Consejo de Planificacin y Coordinacin de Polticas Pblicas. En el caso de la rama legislativa y deliberante de los estados, se define su rgano que es el Consejo Legislativo, su conformacin, sus atribuciones y los requisitos para ser integrante del Consejo Legislativo. Se establece la existencia en cada Estado de una Contralora que gozar de autonoma orgnica y funcional. En la distribucin de competencias que corresponden a la Constitucin se definen en este captulo la competencia exclusiva de los estados, mantenindose y amplindose las previstas en la Ley Orgnica de Descentralizacin. CAPITULO IV DEL PODER PUBLICO MUNICIPAL Se inicia con una norma de caracterizacin del Municipio, en la cual se incluye el reconocimiento expreso de la autonoma municipal con la definicin del contenido mnimo que corresponde a esa cualidad esencial, as como la garanta jurisdiccional de la misma. Se incorpora una declaracin general sobre la participacin como elemento consustancial con la naturaleza del gobierno y la administracin municipal. Se estableci la remisin a la legislacin, de la materia correspondiente al desarrollo de los principios constitucionales relativos a los municipios y dems entidades locales, imponindose a tal efecto, la necesidad de partir de la diversidad municipal de modo imperativo y no como una simple orientacin al legislador, abarcando no slo la organizacin municipal propiamente tal, sino tambin en lo que respecta a sus competencias y recursos. Se enfatiza la necesidad de que dicha legislacin establecer opciones para la organizacin de gobierno y administracin de los municipios indgenas. Se ha previsto la posibilidad de que los municipios se asocien en mancomunidades, as como la creacin de modalidades asociativas intergubernamentales. Se prev la organizacin de los municipios en distritos metropolitanos mediante ley, lo que permite el diseo de un rgimen ms autntico para la organizacin distrital que no debe quedar constreido a una forzada reproduccin a escala de la organizacin municipal. Se propone una habilitacin general al legislador para crear condiciones de elegibilidad, prohibiciones y causales de inhibicin para la postulacin y ejercicio de las funciones de alcaldes y concejales. Respecto a los ingresos, se consagran y caracterizan en la Constitucin los ramos de ingresos, incluyendo aquellos de naturaleza tributaria que corresponden al municipio de manera irrestricta, dejando abierta la posibilidad de que por va del desarrollo legislativo puedan ser creados otros impuestos, tasas y contribuciones especiales. Adems del enunciado del sistema de ingresos se consagra que la potestad tributaria de los municipios es distinta y autnoma de las potestades reguladoras que esta Constitucin o las leyes atribuyan al Poder Nacional o Estadal. Asimismo, se establecen que las inmunidades frente a la potestad impositiva de los municipios a favor de los dems entes politicoterritoriales, se extiende slo a las personas jurdicas estatales creadas por ellos, pero no a concesionarios ni a otros contratistas.

Se ha incluido una norma que establece la presuncin del carcter de ejidos de los terrenos ubicados en el rea urbana de los Municipios, sin menoscabo de legtimos y mejores ttulos de terceras personas, vlidamente constituidos. Igualmente, se constituyen en ejidos las tierras baldas ubicadas en el rea urbana, dejndoles la excepcin para las tierras correspondientes a las comunidades y pueblos indgenas. Se ha incorporado la creacin del Consejo Local de Planificacin Pblica que tiene por objeto la planificacin, coordinacin y cooperacin en la definicin y ejecucin de las polticas pblicas. Se incluye una norma que consagra la creacin mediante ley, de los mecanismos necesarios para que los estados y municipios formalicen el compromiso de descentralizacin hacia las comunidades y grupos vecinales, organizando los servicios que stos gestionen previa demostracin de su capacidad asi nace los Concejos Locales de planificacin publica a niveles comunales, parroquiales, municipales, Estadales y nacionales con miras a fortalecer la participacin ciudadana en las polticas publicas CAPITULO V DEL CONSEJO FEDERAL DE GOBIERNO Como rgano constitucional de carcter interterritorial se crea el Consejo Federal de Gobierno, como un rgano producto de la fase ms avanzada del federalismo, el federalismo cooperativo, superacin histrica de lo que ha sido denominado federalismo dual que entenda al Estado como producto de un pacto entre los distintos entes politicoterritoriales los cuales tendran una esfera de soberana no delegada a la Unin y, en principio, intangible a la accin del Poder Federal. Las funciones de este Consejo Federal de Gobierno sern bsicamente las de planificar y coordinar horizontalmente las polticas y acciones para el desarrollo del proceso de descentralizacin y la administracin del Fondo de Compensacin Interterritorial destinado al financiamiento de inversiones pblicas con el fin de promover el desarrollo equilibrado de las regiones de menor desarrollo relativo. DEL PODER LEGISLATIVO NACIONAL Seccin Primera Disposiciones Generales El Poder Legislativo Nacional es ejercido por una Asamblea Nacional cuya estructura unicameral responde al propsito de simplificar el procedimiento de formacin de las leyes, reducir los costos de funcionamiento del parlamento, erradicar la duplicacin de rganos de administracin y control y la duplicacin de comisiones permanentes, entre otras cosas. Los diputados que integran la Asamblea Nacional son elegidos, en cada entidad federal, segn una base poblacional de uno coma uno por ciento de la poblacin total del pas; adems, correspondern tres diputados por cada entidad federal y habr tres diputados en representacin de los pueblos indgenas. El perodo de duracin del mandato es de cinco aos, pudiendo ser reelegidos hasta por dos perodos consecutivos como mximo. De acuerdo con lo expuesto, el nmero de diputados de la Asamblea Nacional slo aumentar o disminuir en la misma medida en que aumente o disminuya la poblacin, en una o varias entidades federales. Con esta forma de integracin y con la estructura unicameral del rgano legislativo nacional desaparecen los llamados diputados adicionales; adems, en virtud de la eliminacin del Senado, desaparece la figura del senador vitalicio. La representacin parlamentaria, de acuerdo con el artculo 186 del texto constitucional, reviste un doble carcter. El diputado es, al mismo tiempo, representante de la entidad federal y representante popular, lo cual reafirma el artculo 201 al expresar que los diputados son representantes del pueblo y de los Estados en su conjunto. Ese doble carcter de la representacin parlamentaria exige de los candidatos haber residido en la entidad federal en la cual aspiran ser elegidos, por lo menos, durante los cuatro aos anteriores a la fecha de la eleccin. Este requisito de elegibilidad unido a la obligacin de la Asamblea Nacional de consultar a los Estados cuando ella trate de materias relativas a los mismos, al derecho de palabra a los Estados en el proceso de formacin de las leyes relativas a ellos y la iniciativa legislativa por parte de los Consejos Legislativos de los Estados, son complementos tanto del carcter federal de la representacin parlamentaria como del contenido federal del Estado venezolano. Por otra parte, el texto constitucional consagra los principios de la personalizacin de las elecciones y el de la representacin proporcional, dejando a la ley la tarea de garantizar la presencia de estos principios que constituyen parte sustancial del sistema democrtico. Respecto a las condiciones de inelegibilidad de los diputados, se obliga a la separacin absoluta de sus cargos a los aspirantes, por lo menos tres meses antes de las elecciones, en los casos expresamente sealados, sin perjuicio de los que por ley puedan establecerse. La Asamblea promover la organizacin y la participacin ciudadana en los asuntos de su competencia y tendr iniciativa en materia de leyes, enmienda, reforma y Asamblea Constituyente. En lo relativo a la organizacin y funcionamiento de la Asamblea Nacional, el nmero de comisiones queda limitado a quince, aun cuando mediante votacin calificada de las dos terceras partes de los diputados se pueda disminuir o aumentar su nmero. Igualmente se definen las figuras del Presidente, dos Vicepresidentes, un Secretario y un Subsecretario de la Asamblea Nacional, remitindose al reglamento las formas de resolver las faltas temporales y absolutas de estos cargos.

La Comisin Delegada se integra con la Junta Directiva de la Asamblea Nacional y los Presidentes de las Comisiones Permanentes atendindose al criterio del conocimiento en una determinada materia que corresponde a sus integrantes. Se consagra la inmunidad parlamentaria como una garanta del ejercicio autnomo de las funciones legislativas respecto de los otros poderes y como garanta para el mejor y efectivo cumplimiento de la funcin parlamentaria. Sin embargo, la inmunidad slo est referida al ejercicio de las funciones parlamentarias desde el momento de la proclamacin por parte del rgano electoral competente hasta la conclusin del mandato. Su desconocimiento por parte de los funcionarios pblicos ocasiona sanciones de naturaleza penal que el legislador deber establecer en la ley correspondiente. En cuanto a los presuntos delitos cometidos por los diputados, conocer el Tribunal Supremo de Justicia en forma privativa, siendo la nica autoridad que, previa autorizacin de la Asamblea Nacional, podr ordenar la detencin o continuar el enjuiciamiento, segn sea el caso. En caso de delito flagrante cometido por algn diputado, la autoridad competente pondr a ste bajo custodia en su residencia y comunicar de manera inmediata el hecho al Tribunal Supremo de Justicia. la Constitucin establece cinco tipos de leyes orgnicas: las que ella misma denomina como tales, las que se dicten para organizar los poderes pblicos, las que se dicten para desarrollar derechos constitucionales, las que sirvan de marco normativo a otras leyes y las que hayan sido calificadas como tales por la Asamblea Nacional, en cuyo caso stas habrn de ser remitidas a la Sala Constitucional del Mximo Tribunal, para que se pronuncie acerca de la constitucionalidad de su carcter orgnico, esto con el propsito de evitar el uso indiscriminado de tal denominacin. En cuanto a la iniciativa legislativa se incorporan al texto constitucional tres nuevos elementos de inciativa, el Poder Ciudadano, el Poder Electoral y el Consejo Legislativo Estadal, cuando se trate de leyes relativas a los Estados. Se destaca la obligatoriedad de la Asamblea Nacional de discutir los proyectos de ley presentados por iniciativa ciudadana y el sometimiento de dichos proyectos a referendo aprobatorio, CAPITULO II DEL PODER EJECUTIVO NACIONAL La Constitucin eleva el perodo presidencial a seis aos debido a la modificacin del sistema de controles polticosociales sobre el Ejecutivo Nacional. Y, como una innovacin estructuralmente importante, desde el punto de vista de la legitimidad y responsabilidad del Presidente en el ejercicio del Ejecutivo Nacional, se permite su reeleccin inmediata por una sola vez para un nuevo perodo. Esta nueva regulacin constitucional evita la irresponsabilidad poltica de los Presidentes que caracteriz el perodo republicano que culmina con la aprobacin de la nueva Constitucin. De esta manera, quien sea titular de la Presidencia puede ser evaluado polticamente por su gestin en dos oportunidades: la primera, cumplida ms de la mitad del perodo presidencial de seis aos, por la solicitud del veinte por ciento o ms de los electores para efectuar un referendo revocatorio del mandato; y la segunda, por la postulacin del Presidente a la reeleccin popular para un segundo mandato. la Vicepresidencia es el rgano natural de rectora del sistema de registro, seguimiento y control de las decisiones presidenciales, se produzcan stas por cuentas ministeriales o en Consejo de Ministros, y de los sistemas de seguimiento, evaluacin y control de las polticas pblicas sectoriales. La segunda funcin del Vicepresidente corresponde a sus facultades para dirigir y coordinar el proceso descentralizador; para armonizar los intereses nacionales, estadales y municipales; y, para garantizar el debido equilibrio en el desarrollo econmico social de las regiones. Estas facultades las ejerce el Vicepresidente de la Repblica a travs de la Presidencia del Consejo Federal de Gobierno, al cual se adscribe el Fondo de Compensacin Interterritorial. La creacin de este Fondo conlleva a la transformacin del actual Fondo Intergubernamental para la Descentralizacin. De esta manera, el Vicepresidente es un doble instrumento o instancia para la coordinacin, una coordinacin horizontal del Gobierno Nacional y otra vertical entre los gobiernos territoriales. La tercera funcin consiste en la asesora que requiere el Presidente de la Repblica como Jefe de Estado, para la formacin de las polticas de Estado de largo alcance en el tiempo La cuarta funcin del Vicepresidente es la que lo encarga de las relaciones entre el Ejecutivo Nacional y la Asamblea Nacional. Funcin que convierte al Vicepresidente en el natural vocero del Gobierno ante la Asamblea Nacional. Son estas funciones, ms las atribuciones que el Presidente le puede delegar, las que convierten al Vicepresidente en un rgano fundamental para el funcionamiento del Estado, con poder suficiente para la coordinacin interna del Poder Ejecutivo Nacional y la coordinacin con los otros Poderes del Estado venezolano. El calificar el sistema presidencial como flexible se debe a que las atribuciones del Vicepresidente sern an mayores en tanto el Presidente de la Repblica le delegue sus propias atribuciones. La seccin primera de este Captulo II es ntida en lo referente a las faltas absolutas o temporales del Presidente de la Repblica. En este sentido, adquiere un rol de particular importancia el Vicepresidente Ejecutivo de la Repblica, al ser el suplente formal del Presidente de la Repblica en las diferentes hiptesis de faltas tanto absolutas como temporales que contempla el texto constitucional.

La Seccin Segunda detalla las competencias del Presidente de la Repblica. En este sentido hay aspectos a resaltar que significan una mayor flexibilidad en el manejo de los asuntos pblicos y una conduccin ms operativa de la Administracin Pblica por parte del Presidente de la Repblica. As, y siguiendo la tendencia del derecho comparado, se le permite al Presidente fijar el nmero, denominacin, competencia y organizacin de los ministerios y otros organismos de la Administracin Pblica Nacional, as como tambin la organizacin y funcionamiento del Consejo de Ministros, dentro de los principios y lineamientos sealados por la correspondiente ley orgnica. Con esto se permite agilizar los trmites para hacer efectivas las exigencias de adaptabilidad de las estructuras administrativas, convirtindose el Presidente en el verdadero rector de la Administracin Pblica Nacional. Finaliza el Captulo del Poder Ejecutivo Nacional creando la institucin del Consejo de Estado que, en el derecho comparado, como nos lo demuestran las experiencias francesa y colombiana, ha marcado, con estructura y funciones anlogas, pauta en la profesionalizacin del ejercicio del Poder Pblico. En Venezuela ser un rgano superior de consulta del Gobierno y la Administracin Pblica Nacional que recomendar polticas de inters nacional en aquellos asuntos que el Presidente de la Repblica reconozca de especial trascendencia y requieran su opinin. Queda as estructurado un Poder Ejecutivo Nacional moderno, dinmico, profesional, sujeto a controles polticos y al mismo tiempo generador de dinmicas polticas novedosas. Se trata de un captulo que abre a Venezuela las puertas de una modificacin profunda de sus instituciones polticas. CAPITULO III DEL PODER JUDICIAL Y DEL SISTEMA DE JUSTICIA El Estado democrtico y social de Derecho y de Justicia consagrado por la Constitucin, al implicar fundamentalmente, divisin de los poderes del Estado, imperio de la Constitucin y las leyes como expresin de la soberana popular, sujecin de todos los poderes pblicos a la Constitucin y al resto del ordenamiento jurdico, y garanta procesal efectiva de los derechos humanos y de las libertades pblicas, requiere la existencia de unos rganos que institucionalmente caracterizados por su independencia, tengan la potestad constitucional que les permita ejecutar y aplicar imparcialmente las normas que expresan la voluntad popular, someter a todos los poderes pblicos al cumplimiento de la Constitucin y las leyes, controlar la legalidad de la actuacin administrativa y ofrecer a todas las personas tutela efectiva en el ejercicio de sus derechos e intereses legtimos. El conjunto de rganos que desarrollan esa funcin constituyen el Poder Judicial y el Sistema de Justicia que se consagra en el Captulo III del Ttulo V de la Constitucin, configurndolo como uno de los poderes del Estado. En el referido Captulo, la Constitucin, con fundamento en el principio de soberana, declara que la potestad de administrar justicia emana de los ciudadanos y se imparte en nombre de la Repblica y por autoridad de la Ley. Sobre esta base, el Texto Constitucional constituye el sistema de justicia integrado por el Tribunal Supremo de Justicia, los dems tribunales que determine la ley, el Ministerio Pblico, la Defensora Pblica, los rganos de investigacin penal, los auxiliares y funcionarios de justicia, el sistema penitenciario y los abogados autorizados para el ejercicio. Por otra parte, se incorporan al sistema de justicia, los medios alternativos para la resolucin de controversias, tales como el arbitraje, la mediacin y la conciliacin, todo ello con el objeto de que el Estado los fomente y promueva sin perjuicio de las actividades que en tal sentido puedan desarrollar las academias, universidades, cmaras de comercio y la sociedad civil en general. Asimismo, siendo que la administracin de justicia no es monopolio exclusivo del Estado aunque slo ste puede ejercer la tutela coactiva de los derechos, es decir, la ejecucin forzosa de las sentencias, la Constitucin incorpora al sistema de justicia a los ciudadanos que participan en el ejercicio de la funcin jurisdiccional integrando jurados o cualquier otro mecanismo que la ley prevea. Adems, como consecuencia del principio y derecho a la justicia gratuita consagrado en el Texto Constitucional, se establece que el Poder Judicial no est facultado para establecer tasas, aranceles, ni para exigir pago alguno por sus servicios. El ingreso a la carrera judicial y el ascenso de los jueces ser por concursos de oposicin pblicos, que aseguren la idoneidad, capacidad y probidad de los jueces designados. En tal virtud, todos los cargos de jueces o magistrados de tribunales o cortes, unipersonales o colegiados, distintos al Tribunal Supremo de Justicia, debern ser designados mediante concurso pblico de oposicin. Se prev que la ley regule lo referente a la capacitacin y especializacin de los jueces con la participacin de las universidades, las cuales debern organizar estudios universitarios al nivel de postgrado en el rea de derecho, dirigidas a la especializacin en la rama judicial. La jurisdiccin penal militar ser integrante del Poder Judicial y sus jueces sern seleccionados por concursos. La competencia de los tribunales militares se limita a la materia estrictamente militar. En todo caso, los delitos comunes, violaciones de los derechos humanos o crmenes de lesa humanidad, sern procesados y juzgados por los tribunales ordinarios, sin excepcin alguna. Se constituye el Tribunal Supremo de Justicia como el mximo tribunal de la Repblica y rector del Poder Judicial, el cual estar integrado por las Salas Constitucional, Polticoadministrativa, Electoral, de Casacin Civil, de Casacin Penal y de Casacin Social.

Los Magistrados del Tribunal Supremo durarn en ejercicio de sus funciones doce aos, no pudiendo ser reelectos. A los efectos de su eleccin se prev la postulacin correspondiente ante el Comit de Postulaciones Judiciales y un procedimiento especial que tiene por objeto una seleccin y eleccin pblica, objetiva, transparente e imparcial de los candidatos. Ser en definitiva la Asamblea Nacional la encargada de elegir a los Magistrados. Corresponder al Tribunal Supremo de Justicia, a travs de la Direccin Ejecutiva de la Magistratura, el Gobierno y Administracin del Poder Judicial, as como todo lo relacionado con la inspeccin y vigilancia de los tribunales de la Repblica y la elaboracin y ejecucin del presupuesto del Poder Judicial. CAPITULO IV DEL PODER CIUDADANO Adaptando a nuestro tiempo las ideas inmortales del Libertador Simn Bolvar, la Constitucin rompe con la clsica divisin de los poderes pblicos y crea los Poderes Ciudadano y Electoral. El primero de ellos se inspira, en parte, en el Poder Moral propuesto por el Libertador en su Proyecto de Constitucin presentado al Congreso de Angostura el 15 de febrero de 1819. El Poder Electoral por su parte, encuentra su inspiracin en el Proyecto de Constitucin que el Libertador redact para Bolivia en 1826. El Libertador concibi el Poder Moral como la institucin que tendra a su cargo la conciencia nacional, velando por la formacin de ciudadanos a fin de que pudiera purificarse "lo que se haya corrompido en la Repblica; que acuse la ingratitud, el egoismo, la frialdad del amor a la patria, el ocio, la negligencia de los ciudadanos". Con ello, Simn Bolvar quera fundar una Repblica con base en un pueblo que amara a la patria, a las leyes, a los magistrados, porque esas "son las nobles pasiones que deben absorber exclusivamente el alma de un republicano". El Poder Moral del Libertador tena entre sus misiones velar por la educacin de los ciudadanos, en cuyo proceso se deba sembrar el respeto y el amor a la Constitucin y a las instituciones republicanas, sobre la base de que "si no hay un respeto sagrado por la patria, por las leyes y por las autoridades, la sociedad es una confusin, un abismo". Inspirada en esas ideas y adaptndolas a nuestro tiempo, la Constitucin crea el Poder Ciudadano, el cual se ejercer por el Consejo Moral Republicano integrado por el Defensor del Pueblo, el Fiscal General de la Repblica y el Contralor General de la Repblica. El Poder Ciudadano es independiente de los dems poderes pblicos y sus rganos gozan de autonoma funcional, financiera y administrativa, para lo cual se les asignar una partida anual variable dentro del presupuesto general del Estado. En general, los rganos que ejercen el Poder Ciudadano tienen a su cargo la prevencin, investigacin y sancin de los hechos que atenten contra la tica pblica y la moral administrativa. Adems, deben velar por la buena gestin y la legalidad en el uso del patrimonio pblico, por el cumplimiento y la aplicacin del principio de la legalidad en toda la actividad administrativa del Estado. De igual forma, deben promover en el mbito de sus competencias, la educacin como proceso creador de la ciudadana, as como la solidaridad, la libertad, la democracia, la responsabilidad social y el trabajo, todo ello conforme a lo establecido en la Constitucin y en las leyes. Recogiendo una institucin que nace en los pases escandinavos y que ha tenido auge en Europa y en gran parte en Amrica Latina, se crea la Defensora del Pueblo como rgano del Consejo Moral Republicano que tiene a su cargo la promocin, defensa y vigilancia de los derechos y garantas establecidos en la Constitucin y en los tratados internacionales sobre derechos humanos, adems de los intereses legtimos, colectivos o difusos de los ciudadanos. La Defensora del Pueblo representa la institucin del Poder Pblico ms vinculada y cercana a los ciudadanos, cuyas funciones son esenciales para controlar los excesos del poder y garantizar que el sistema democrtico no slo sea una proyeccin constitucional, sino una forma de vida en sociedad con eficacia y realidad concreta, donde los derechos e intereses de los ciudadanos sean respetados. Se atribuyen al Defensor del Pueblo las ms amplias funciones y competencias en las materias antes sealadas, tales como velar por el efectivo respeto y garantas de los derechos humanos consagrados en esta Constitucin y en los tratados, convenios y acuerdos internacionales sobre derechos humanos ratificados por la Repblica. Al Ministerio Pblico se le atribuyen todas aquellas funciones necesarias para el cumplimiento de los fines que debe gestionar ante la Administracin de Justicia, tales como garantizar en los procesos judiciales el respeto de los derechos y garantas constitucionales, garantizar la celeridad y buena marcha de la administracin de justicia, el juicio previo y el debido proceso. La Contralora General de la Repblica, por su parte, ser el rgano de control, vigilancia y fiscalizacin de los ingresos, gastos y bienes pblicos, as como de las operaciones relativas a los mismos, para lo cual le otorga las ms amplias competencias. Se prev un sistema nacional de control fiscal, el cual ser desarrollado por la ley. CAPITULO V DEL PODER ELECTORAL Como expresin del salto cualitativo que supone el trnsito de la democracia representativa, a una democracia participativa y protagnica, se crea una nueva rama del Poder Pblico, el Poder Electoral,

ejercido por rgano del Consejo Nacional Electoral que tiene por objeto el regular el establecimiento de las bases, mecanismos y sistemas que garanticen el advenimiento del nuevo ideal u objetivo democrtico. Una nueva cultura electoral cimentada sobre la participacin ciudadana. Para dimensionar su contenido es necesario integrar las disposiciones en este Captulo V del Ttulo V con las establecidas en el Captulo IV de los Derechos Polticos y del Referendo Popular perteneciente al Ttulo III del nuevo texto constitucional. El nuevo esquema conlleva una modificacin sustancial en la prctica electoral sobre la cual se edific el anterior modelo, desde la concepcin del sufragio como derecho, hasta la consagracin de nuevas formas de participacin que trascienden con creces a la simple formulacin de propuestas comiciales. Se expresa esta nueva concepcin a travs de la implementacin de instituciones polticas como la eleccin de cargos pblicos, el referendo, la consulta popular, la revocatoria del mandato, la iniciativa legislativa, constitucional y constituyente, el cabildo abierto y las Asambleas de ciudadanos y ciudadanas, cuyas decisiones revisten el carcter de vinculante, entre otros. Son estos, entonces, los novedosos medios que le garantizan al pueblo la participacin y protagonismo en el ejercicio de su soberana. En tal sentido, resultan trascendentes las formas en que el ciudadano puede participar en la formacin, ejecucin y control de la gestin pblica, pues ella no se limita a la intermediacin de los partidos polticos, sino que puede hacerse en forma directa, en perfecta sujecin al concepto de soberana que en forma expresa prev el artculo 5 del novsimo texto constitucional. En general, se atribuye al Poder Electoral la facultad atinente a la constitucin, renovacin y cancelacin de asociaciones con fines polticos, lo que viene relacionado con el origen o nacimiento de dichas organizaciones al mismo tiempo que con su funcionamiento y desarrollo, el cual se sujeta al estricto respeto de los mecanismos de consulta democrtica y participativa consagrados en la Constitucin, a los cuales deben igualmente sujetarse los estatutos que regulen la vida de estas instituciones. Como principios que debe desarrollar y garantizar la legislacin en materia electoral se encuentran la igualdad, confiabilidad, imparcialidad, transparencia y eficiencia de los procesos electorales, as como la aplicacin de la personalizacin y la representacin proporcional en las elecciones. Estos principios constituyen atributos o cualidades que deben conformar los nuevos sistemas electorales que se adopten y, en tal sentido deben ser asumidos como elementos diferenciadores de los que constituyen las bases de integracin de los distintos cargos de eleccin popular, la que referida fundamentalmente a la Asamblea Nacional est integrada por tres condicionantes a saber: la base poblacional, la representacin federativa de cada entidad y la representacin de las minoras, en nuestro caso los pueblos indgenas. Se adopta de esta manera un criterio de integracin cerrado, conformado por un nmero fijo de representantes cuya modificacin slo vendra dada por el incremento de la base poblacional; tal es la interpretacin que se deriva de la disposicin contenida en el artculo 186, propia de la concepcin unicameral que para el Poder Legislativo Nacional precepta el texto constitucional, convertido en virtud de tal disposicin en un claustro legislativo. Especial mencin, en la consagracin de este nuevo poder, merece por su novedad la integracin del Registro Civil y Electoral, cuya organizacin, direccin y supervisin se atribuye al Poder Electoral; busca esta frmula la posibilidad de explotar el desarrollo de mecanismos armnicos que permitan la conformacin y depuracin automtica de un registro nacional como base fundamental para garantizar la transparencia de dicha institucin. As, como rama del Poder Pblico, el Poder Electoral se rige por los principios de independencia orgnica, autonoma funcional y presupuestaria, despartidizacin de los organismos electorales, imparcialidad y participacin ciudadana, descentralizacin de la administracin electoral, transparencia y celeridad del acto de votacin y escrutinio, para lo cual se crea un Comit de Postulaciones Electorales integrado por representantes de diferentes sectores de la sociedad, organismo que tendr a su cargo hacer viables las elecciones de los miembros del Consejo Nacional Electoral, que en un nmero de cinco, provienen tres de la sociedad civil, uno de las Facultades de Ciencias Jurdicas y Polticas de las Universidades Nacionales y uno del Poder Ciudadano. Asimismo, el Poder Electoral asume no slo las funciones que eran ejercidas por el anterior Consejo Nacional Electoral, extendidas o ampliadas a la organizacin y realizacin de los actos electorales destinados a la eleccin de cargos pblicos, sino tambin las atinentes al rgimen refrendario, elecciones de sindicatos, gremios profesionales y asociaciones con fines polticos, cuya regulacin se remite a la Ley. Igualmente se establece la posibilidad de que el Poder Electoral participe en la organizacin de procesos electorales de otras organizaciones de la sociedad civil, previa solicitud de stas con miras al desarrollo de vas o mecanismos de autofinanciamiento. En tal sentido, y en atencin al control jurisdiccional necesario de los actos, omisiones, vas de hecho emanados del Poder Electoral, a propsito de los procesos comiciales referidos y a su funcionamiento, el nuevo texto constitucional cre la Jurisdiccin Contencioso Electoral, ejercida por la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia. TITULO VI DEL SISTEMA SOCIO ECONMICO CAPITULO I DEL RGIMEN SOCIO ECONMICO Y DE LA FUNCIN DEL ESTADO EN LA ECONOMA

El Ttulo VI de la Constitucin se refiere al sistema socioeconmico. El rgimen socioeconmico no se define de forma rgida, no obstante se consagran principios de justicia social, eficiencia, democracia, libre competencia e iniciativa, defensa del ambiente, productividad y solidaridad, fuera de cualquier dogmatismo ideolgico con relacin a la ya superada disputa sobre los roles del mercado y el Estado, evitando una visin extrema y excluyente de los contenidos sociales de todo sistema econmico, pero sentando las bases de una economa de respeto a la accin individual. CAPITULO II DEL REGIMEN FISCAL Y MONETARIO Otra importante innovacin del texto fundamental es la introduccin de principios constitucionales dirigidos a establecer como una obligacin del Estado velar por la estabilidad macroeconmica, promoviendo un ambiente propicio para el crecimiento y la generacin de bienestar para los ciudadanos. La estabilidad macroeconmica se establece con base en tres principios fundamentales, a saber: equilibrio fiscal y un nivel prudente de deuda pblica; autonoma del Banco Central en el cumplimiento de sus funciones, con un claro mecanismo de rendicin de cuentas y coordinacin transparente de las polticas macroeconmicas. Seccin Primera Del Rgimen Presupuestario El principio de equilibrio fiscal obliga que las finanzas pblicas estn en orden, y en un plazo razonable de tiempo los ingresos ordinarios sean suficientes para cubrir los gastos ordinarios; ese plazo razonable de tiempo estar definido de acuerdo con la ley, en el plazo del marco plurianual del presupuesto. El equilibrio fiscal adems debe ser consistente con un nivel prudente de deuda, aspectos sobre los cuales deber hacerse legislacin especfica. TITULO VII DE LA SEGURIDAD DE LA NACIN CAPITULO I DISPOSICIONES GENERALES En el Ttulo VII de la Constitucin se definen los principios que rigen la seguridad de la Nacin, la cual es responsabilidad no slo del Estado, sino de todos los venezolanos, as como de las personas naturales o jurdicas que se encuentren en el espacio geogrfico nacional. Se crea un Consejo de Defensa de la Nacin con el objeto de que sea el mximo rgano administrativo de consulta, para la planificacin y asesoramiento del Poder Pblico en los asuntos relacionados con la defensa integral de la Nacin, su soberana y la integridad de su espacio geogrfico, CAPITULO II DE LOS PRINCIPIOS DE SEGURIDAD DE LA NACION En el Captulo II de este Ttulo se establecen los principios de seguridad de la Nacin, la cual se fundamentar en la corresponsabilidad entre el Estado y la sociedad civil para dar cumplimiento a los principios de independencia, democracia, igualdad, paz, libertad, justicia, solidaridad, promocin y conservacin ambiental y afirmacin de los derechos humanos, as como en la satisfaccin progresiva de las necesidades individuales y colectivas de los venezolanos . CAPITULO III DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL Para la mejor ejecucin de los altos fines que le han sido encomendados por la Constitucin, se unifica a las Fuerzas Armadas Nacionales en un cuerpo militar uniforme denominado la Fuerza Armada Nacional, pero manteniendo cada uno de los cuatro componentes integrantes de la institucin, sus caractersticas y especificidad como Fuerza; siendo esta institucin esencialmente profesional, sin militancia poltica alguna, subordinada a la autoridad civil, organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberana de la Nacin y asegurar la integridad del espacio geogrfico, mediante la defensa militar, la cooperacin en el mantenimiento del orden interno y la participacin activa en el desarrollo nacional, de acuerdo con esta Constitucin y la ley. En el cumplimiento de sus funciones, la Fuerza Armada Nacional est al servicio exclusivo de la Nacin y de la Constitucin, en ningn caso al de persona o parcialidad poltica alguna. Sus pilares fundamentales son la disciplina, la obediencia y la subordinacin conforme a lo establecido en la Constitucin y las leyes. CAPITULO IV DE LOS ORGANOS DE SEGURIDAD CIUDADANA Con el objeto de mantener y restablecer el orden pblico, proteger a los ciudadanos, hogares y familias, apoyar las decisiones de las autoridades competentes y asegurar el pacfico disfrute de las garantas y derechos reconocidos por la Constitucin, se le impone al Ejecutivo Nacional la obligacin de organizar, de conformidad con la ley, un cuerpo uniformado de polica nacional, un cuerpo de investigaciones cientficas, penales y administrativas, un cuerpo de bomberos y de administracin de emergencias de carcter civil y una organizacin de proteccin civil y administracin de desastres. TITULO VIII DE LA PROTECCION DE ESTA CONSTITUCION

CAPITULO I DE LA GARANTIA DE ESTA CONSTITUCION Siguiendo una tendencia presente en Espaa, Francia, Italia, Portugal, Rumania y en algunos pases latinoamericanos, cuyas constituciones regulan la justicia constitucional en un ttulo o captulo distinto del que se refiere al Poder Judicial, la Constitucin incluye en el Ttulo VIII un Captulo denominado De la Garanta de esta Constitucin, que contiene las disposiciones fundamentales sobre la justicia constitucional y consagra las principales competencias que corresponden a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. Dicho Captulo da eficacia a los postulados contenidos en el artculo 7 del Ttulo I, que consagra los principios de supremaca y fuerza normativa de la Constitucin, base sobre la cual descansa la justicia constitucional en el mundo. En el mencionado Captulo se describe el sistema venezolano de justicia constitucional y al efecto se indica que todos los jueces de la Repblica estn en la obligacin de asegurar la integridad de la Constitucin en el mbito de sus competencias y conforme a lo previsto en su texto y en las leyes, reafirmndose de esta manera, que la justicia constitucional en Venezuela la ejercen todos los tribunales de la Repblica, no slo mediante el control difuso de la constitucionalidad, sino adems, por otros medios, acciones o recursos previstos en la Constitucin y en las leyes, como la accin de amparo constitucional, destinada a ofrecer una tutela judicial reforzada de los derechos humanos reconocidos y garantizados expresa o implcitamente en la Constitucin. Como consecuencia de ello, se eleva a rango constitucional una norma presente en nuestra legislacin desde 1887, caractersticas de nuestro sistema de justicia constitucional y segn la cual, en caso de incompatibilidad entre la Constitucin y una ley u otra norma jurdica, sern aplicables en todo caso las disposiciones constitucionales, correspondiendo a los tribunales en cualquier causa, aun de oficio, decidir lo conducente. En otras palabras, se consagra el control difuso de la constitucionalidad de las leyes y de las disposiciones normativas. Al mismo tiempo, se consagra el control concentrado de la constitucionalidad de las leyes y de los dems actos de los rganos que ejercen el Poder Pblico dictados en ejecucin directa e inmediata de la Constitucin, el cual corresponde exclusivamente a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. En consecuencia, se trasladaron a la Sala Constitucional las competencias que en esta materia tena la extinta Corte Suprema de Justicia en Pleno, con el objeto de especializar el rgano que ejerce la jurisdiccin constitucional y descongestionar de atribuciones a la nueva Sala Plena, para que slo ejerza las competencias que le son asignadas en el artculo 266, numerales 2 y 3 del texto constitucional, no teniendo en consecuencia, competencia ni atribucin alguna en materia constitucional. La exclusividad de la Sala Constitucional en el ejercicio de la jurisdiccin constitucional, implica que slo a dicho rgano le corresponde ejercer el control concentrado de la constitucionalidad de las leyes y dems actos de los rganos que ejercen el Poder Pblico dictados en ejecucin directa e inmediata de la Constitucin, pero no impide que la propia Constitucin o las leyes, le atribuyan otras competencias en materia constitucional. De esta forma, se esboza el sistema venezolano de justicia constitucional, reafirmndose la coexistencia de los mtodos de control concentrado, difuso y extraordinario de la constitucionalidad, los cuales se ejercen a travs de la accin popular de inconstitucionalidad, la aplicacin preferente de la Constitucin respecto a leyes o normas inconstitucionales en un caso concreto, y la accin de amparo. Ante la Asamblea Nacional Constituyente se presentaron algunas propuestas con el objeto de crear una Corte o Tribunal Federal Constitucional, en lugar de una Sala Constitucional en el Tribunal Supremo de Justicia. No obstante, prevaleci por consenso esta ltima tesis. Sin embargo, la Constitucin en el Captulo referido a la Garanta de esta Constitucin, dota a la Sala Constitucional del carcter y de las competencias que tienen en derecho comparado cualquier Corte o Tribunal Constitucional. Por ello se indica que el Tribunal Supremo de Justicia garantizar la supremaca y efectividad de las normas y principios constitucionales; ser el mximo y ltimo intrprete de la Constitucin y velar por su uniforme interpretacin y aplicacin, cualidad y potestades que nicamente posee en Sala Constitucional dado que sta ejerce con exclusividad el control concentrado de la constitucionalidad. En efecto, las facultades interpretativas que en tal sentido se otorgan al Tribunal Supremo de Justicia, en consonancia con las caractersticas bsicas de la justicia constitucional en derecho comparado, slo pueden ser ejercidas por rgano de la Sala Constitucional, pues a ella le corresponde exclusivamente el ejercicio de la jurisdiccin constitucional. Adems, con fundamento en el principio de divisin de poderes, tales facultades no pueden ejercerse de oficio o mediante acuerdos, sino con motivo de una accin popular de inconstitucionalidad, accin de amparo, recurso de interpretacin de leyes u otro caso concreto de carcter jurisdiccional cuya competencia est atribuida a la Sala Constitucional. En esta materia, se consagra una herramienta indispensable para que la Sala Constitucional pueda garantizar la supremaca y efectividad de las normas constitucionales. As, se indica que las interpretaciones que establezca la Sala Constitucional sobre el contenido o alcance de las normas y principios constitucionales sern vinculantes para las dems Salas del Tribunal Supremo de Justicia y dems tribunales de la Repblica, todo ello con el objeto de garantizar la uniforme interpretacin y aplicacin de tales normas y principios.

En todo caso, la ley orgnica respectiva establecer los correctivos y las sanciones necesarias para aquellas Salas del Tribunal Supremo de Justicia y tribunales de la Repblica que violen la Constitucin o las interpretaciones que sobre sus normas o principios establezca la Sala Constitucional. Del mismo modo, la ley orgnica deber consagrar un mecanismo de carcter extraordinario mediante el cual la Sala Constitucional pueda revisar los actos o sentencias de las dems Salas del Tribunal Supremo de Justicia que contraren la Constitucin o las interpretaciones que sobre sus normas o principios haya previamente fijado la Sala Constitucional, a fin de dar eficacia a los principios de supremaca y fuerza normativa de la Constitucin consagrados en el artculo 7, conforme a los cuales todos los rganos que ejercen el poder pblico, sin excepcin, estn sujetos a la Constitucin. En definitiva, el carcter vinculante de las interpretaciones de las normas y principios constitucionales ser el principal instrumento de la Sala Constitucional para fortalecer la justicia constitucional, darle eficacia al Texto Fundamental y brindar mayor seguridad jurdica a los ciudadanos. En lo que atae a las competencias de la Sala Constitucional, el fundamento de aquellas que le atribuye la Constitucin y de las que se le asignarn mediante ley, estn representados por los principios de supremaca y fuerza normativa de la constitucin consagrados en el artculo 7 y en virtud de los cuales, todo acto del Poder Pblico, sin excepcin, debe estar sometido al control constitucional. Por tal razn, a la Sala Constitucional se le atribuye competencia para controlar la constitucionalidad de todos los actos de los rganos que ejercen el Poder Pblico dictados en ejecucin directa e inmediata de la Constitucin o que tengan rango de ley. En todo caso, la ley orgnica respectiva garantizar que ningn rgano del Poder Pblico quede fuera del control constitucional, estableciendo entre otros aspectos, la competencia de la Sala Constitucional para controlar la constitucionalidad de las actuaciones de las dems Salas del Tribunal Supremo de Justicia, mediante el mecanismo extraordinario que considere ms adecuado. Con base en lo anterior, se atribuye a la Sala Constitucional competencias en el ejercicio del control represivo de la constitucionalidad, para declarar la nulidad total o parcial de las leyes nacionales, Constituciones y leyes estadales, ordenanzas municipales y dems actos dictados por cualesquiera de los rganos que ejercen el Poder Pblico, en ejecucin directa e inmediata de la Constitucin. En materia de control preventivo, se atribuye a la Sala Constitucional la potestad de verificar la constitucionalidad de los tratados internacionales suscritos por la Repblica antes de su ratificacin. En derecho comparado, una de las principales funciones de la justicia constitucional es el control de la constitucionalidad de los acuerdos y tratados internacionales, a travs de un control preventivo que se ejerce antes de su ratificacin y entrada en vigencia. Particularmente en las constituciones europeas, as como en varias constituciones de pases de Amrica Latina, se prev ese mecanismo con el objeto de que las relaciones entre el derecho internacional pblico o el derecho comunitario, por una parte, y el derecho interno de cada Estado, por la otra, se presenten con la mayor armona y uniformidad posible. Se consider necesario el control preventivo de la constitucionalidad de los tratados internacionales dado que luego del proceso de conclusin de un tratado internacional, es decir, de su ratificacin y entrada en vigencia por las vas previstas en el derecho constitucional y en el derecho internacional pblico, la eventual y posterior declaracin de inconstitucionalidad del mismo o de alguna de sus disposiciones por parte de la Sala Constitucional no podra, en principio, ser opuesta como una justificacin para incumplir dicho tratado sin que se comprometa la responsabilidad internacional de la Repblica. En todo caso, el objetivo de ese mecanismo de control preventivo, no slo es que se verifique la constitucionalidad de un acuerdo o tratado internacional sin que se comprometa la responsabilidad internacional de la Repblica, sino adems que, en el caso de que alguna de sus disposiciones resulte inconstitucional, se ratifique con la debida reserva, siempre que se desee su ratificacin, o si el mismo no admite reservas, se evale la necesidad y conveniencia de ratificarlo luego de una enmienda o reforma de la Constitucin en los aspectos que sean necesarios, para lograr as la mayor armona posible en las relaciones entre el derecho internacional o comunitario y el derecho interno venezolano. La potestad de activar el control preventivo de los tratados internacionales corresponder al Presidente de la Repblica o a la Asamblea Nacional, siendo facultativo su ejercicio. Se descart as la posibilidad de un control preventivo con carcter obligatorio, dado que podra traducirse en un obstculo para la fluidez y la buena marcha de las relaciones internacionales de la Repblica. Otra competencia de la Sala Constitucional en materia de control preventivo ser la de verificar la constitucionalidad de las leyes antes de su promulgacin, conforme al procedimiento establecido en el Ttulo V Captulo I Seccin Cuarta de la Constitucin, para el caso del reparo presidencial fundamentado en razones de inconstitucionalidad. En esta materia, la Asamblea Nacional Constituyente consider inconveniente extender la legitimacin para activar el mecanismo de control preventivo a otras personas con determinado inters u rganos del Poder Pblico distintos al Presidente de la Repblica. Al respecto, se tuvo en cuenta que con posterioridad a la promulgacin de una ley, todas las personas tienen a su alcance la accin popular clsica del sistema de justicia constitucional venezolano y, adems, la Sala Constitucional tiene el poder cautelar propio de toda Corte o Tribunal Constitucional en derecho comparado, en virtud del cual puede dictar cualquier medida que fuere necesaria para proteger los derechos humanos y garantizar la integridad de la Constitucin.

Finalmente, en esta materia, conforme al Ttulo V Captulo I Seccin Cuarta de la Constitucin, la Sala Constitucional ejercer el control preventivo de la constitucionalidad del carcter orgnico de una ley que haya sido calificada como tal por la Asamblea Nacional. Aunado a ello e inspirada nuevamente en una tendencia presente en derecho comparado, la Constitucin atribuye a la Sala Constitucional la potestad para decidir sobre la inconstitucionalidad de las omisiones legislativas, mecanismo que ha tenido un auge creciente en pases como Argentina, Brasil, Costa Rica, Hungra y, especialmente, Portugal. La inconstitucionalidad por omisin se produce por la falta de desarrollo por parte del Poder Legislativo, durante un tiempo excesivamente largo, de aquellas normas constitucionales de obligatorio y concreto desarrollo, de forma tal que impida su eficaz aplicacin. Con este mecanismo se persigue evitar situaciones como las que se originaron en el caso del artculo 49 de la Constitucin de 1961 y la falta de una legislacin sobre amparo constitucional, durante casi treinta aos. En lo que se refiere a la proteccin de los derechos humanos, la Sala Constitucional tendr importantes funciones. En primer lugar, con el objeto de reforzar la proteccin de los derechos humanos reconocidos y garantizados expresa o implcitamente en la Constitucin, se acoge un mecanismo consagrado en alguna Constitucin de Amrica Latina, en virtud del cual la Sala Constitucional debe, en todos los casos y aun de oficio, controlar la constitucionalidad de los decretos que declaren estado de excepcin. Esta ser la nica competencia que podr ejercer de oficio la Sala Constitucional y ello por tratarse de la proteccin de los derechos humanos, razn por la cual se ha previsto expresamente en el texto constitucional. Adems, con motivo de su creacin, de la entrada en vigencia de la Constitucin y de la naturaleza esencialmente constitucional de los derechos humanos y de la accin de amparo, la Sala Constitucional podr asumir las competencias que en materia de amparo constitucional tenan las diferentes Salas de la extinta Corte Suprema de Justicia, en los casos de amparo autnomo contra altas autoridades de rango constitucional, amparo contra decisiones judiciales y apelaciones o consultas en amparo, dado que la Sala Constitucional pasa a ser la Sala del Tribunal Supremo de Justicia con la competencia a fin para conocer y decidir tales asuntos. Por su parte, como consecuencia de lo anterior y dado que slo la Sala Constitucional ser competente para resolver las acciones de amparo en el Tribunal Supremo de Justicia, la ley orgnica respectiva deber eliminar la accin cautelar de amparo que se ejerce conjuntamente con el recurso contencioso administrativo de nulidad y que permite a las Salas Politico administrativa y Electoral, suspender los efectos de los actos administrativos cuya nulidad les corresponde conocer y decidir. Para ello, la legislacin deber dotar al juez contencioso administrativo de todo el poder cautelar necesario para decretar de oficio o a instancia de parte, cualquier tipo de medida cautelar que fuere necesaria para garantizar la tutela judicial efectiva de los administrados y el restablecimiento de sus situaciones jurdicas infringidas mientras dure el proceso de que se trate, bien sea a travs de la suspensin de los efectos del acto administrativo correspondiente, o a travs de rdenes de hacer o no hacer, incluyendo el pago de sumas de dinero, que se impongan a la administracin dependiendo del caso concreto. De igual manera y con el objeto de hacer efectiva la tutela judicial de los administrados y garantizar su derecho de libre acceso a la justicia, la ley orgnica deber eliminar la carga que tienen los administrados de agotar la va administrativa antes de interponer el recurso contencioso administrativo de nulidad, lo cual debe quedar como una opcin a eleccin del interesado, pero no como un requisito de cumplimiento obligatorio. Aunado a ello, la legislacin deber establecer expresamente que en caso de que un acto administrativo estuviere viciado de inconstitucionalidad o de algn vicio que acarree su nulidad absoluta, no operar en modo alguno, el plazo de caducidad para el ejercicio del recurso contencioso administrativo de nulidad. Lo anterior tiene por objeto ofrecer al administrado una proteccin de sus derechos humanos acorde con el principio de progresividad consagrado en la Constitucin, una vez eliminada la accin de amparo cautelar contra actos administrativos. Por otra parte, consecuente con lo antes expuesto, la ley orgnica respectiva eliminar la accin de amparo cautelar que se ejerce conjuntamente con la accin popular de inconstitucionalidad contra leyes y disposiciones normativas, teniendo en cuenta que en este sentido la Sala Constitucional tiene el poder cautelar propio de toda Corte o Tribunal Constitucional en derecho comparado, en virtud del cual puede decretar cualquier medida cautelar que fuere necesaria para proteger los derechos humanos y garantizar la integridad de la Constitucin, incluyendo la suspensin de los efectos de la norma cuya nulidad se solicite, nicamente para la situacin concreta de los accionantes, partes o terceros que intervinieren en el proceso y mientras dure el juicio de nulidad correspondiente. La Constitucin establece como competencia de la Sala Constitucional resolver las controversias constitucionales que se susciten entre cualesquiera de los rganos que ejercen el Poder Pblico. Al respecto, destacan dos elementos esenciales; en primer lugar, que se trata de controversias entre cualesquiera de los rganos que la Constitucin prev en la distribucin horizontal o vertical del Poder Pblico y, en segundo lugar, que deben tratarse de controversias constitucionales, es decir, de aquellas cuya decisin depende del examen, interpretacin y aplicacin de normas constitucionales, tales como las que se refieren al reparto competencial entre los diferentes rganos del Estado, especialmente, las que distribuyen el poder en los niveles nacional, estadal y municipal.

De esta forma, todas aquellas controversias constitucionales entre la Repblica y alguno de los estados o municipios, es decir, entre el poder central y el descentralizado territorialmente, sern resueltas por la Sala Constitucional dentro del procedimiento que se establecer en la ley orgnica respectiva. En todo caso, esta atribucin tiene por objeto que la Sala Constitucional como garante y mximo defensor de los principios consagrados en el Texto Fundamental ajuste la actuacin de los rganos que ejercen el Poder Pblico, al cauce constitucional. Finalmente y al margen de su competencia para conocer de acciones de amparo, se atribuye a la Sala Constitucional la competencia para revisar las decisiones definitivamente firmes dictadas por los tribunales de la Repblica en materia de amparo constitucional y control difuso de la constitucionalidad, a travs de un mecanismo extraordinario que deber establecer la ley orgnica que regule la jurisdiccin constitucional, slo con el objeto de garantizar la uniformidad en la interpretacin de las normas y principios constitucionales, la eficacia del Texto Fundamental y la seguridad jurdica. Ahora bien, la referida competencia de la Sala Constitucional no puede ni debe entenderse como parte de los derechos a la defensa, tutela judicial efectiva y amparo consagrados en la Constitucin, sino, segn lo expuesto, como un mecanismo extraordinario de revisin cuya finalidad constituye nicamente darle uniformidad a la interpretacin de las normas y principios constitucionales. Por ello, no siendo un derecho y teniendo en cuenta que el legislador puede ensayar y errar en forma evolutiva en la bsqueda del mecanismo extraordinario ms adecuado, la Asamblea Nacional Constituyente decidi dejar a la ley orgnica respectiva su desarrollo concreto. Siendo as, la ley orgnica podr establecer, por ejemplo, un mecanismo extraordinario de revisin de ejercicio discrecional por la Sala Constitucional, tal como el writ of certiorari que utiliza la Suprema Corte de los Estados Unidos de Amrica; un mecanismo cuyos rasgos de discrecionalidad no sean absolutos, como el utilizado por el Tribunal Constitucional Federal de Alemania; o bien, un mecanismo cuyos requisitos de admisibilidad y procedencia estn prestablecidos en la ley, como el que se puede evidenciar en algunos ejemplos de derecho comparado. En todo caso, el mecanismo extraordinario de revisin que se deber establecer por ley orgnica, vincular por vez primera y dejando a salvo la temprana regulacin de la Constitucin de 1901, los mtodos de control difuso y concentrado de la constitucionalidad que han coexistido en nuestro ordenamiento jurdico por ms de cien aos, respondiendo con ello a la principal crtica formulada a nuestro sistema de justicia constitucional, que reconoca la coexistencia de los mencionados mtodos de control, pero destacaba que entre uno y otro no exista realmente una coordinacin, vnculo o conexin que procurara armonizarlos o articularlos para lograr una interpretacin uniforme de la Constitucin, razn por la cual no poda ser calificado como integral, dado que existan modalidades de control paralelas, establecidas una al lado de la otra, sin conexin entre s. Por tal razn, la Constitucin consagra un sistema mixto e integrado de control de la constitucionalidad, atribuyndole a la Sala Constitucional la funcin de coordinar los mtodos de control mediante la armonizacin de la jurisprudencia constitucional y la interpretacin uniforme del Texto Fundamental. CAPITULO II DE LOS ESTADOS DE EXCEPCIN El primero de los preceptos dedicados a esta materia recoge dos principios bsicos rectores de los estados de excepcin: el de estricta necesidad y el de temporalidad. Se circunscriben tales situaciones jurdicas a aquellas circunstancias extraordinarias que afecten gravemente la seguridad de las personas, de la Nacin o de las instituciones, y que no puedan ser afrontadas mediante las facultades ordinarias de los rganos del Poder Pblico. Se destaca, igualmente, la temporalidad de esas situaciones. Por otro lado, el precepto menciona los principales derechos que no pueden ser suspendidos o restringidos durante los estados de excepcin. Se trata de un listado meramente enunciativo, pues tampoco son susceptibles de suspensin o restriccin los derechos sealados en los artculos 4.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos y 27.2 de la Convencin Americana sobre Derechos Humanos. Importa subrayar que entre los derechos intangibles se encuentran las garantas judiciales necesarias para la defensa de los derechos. El segundo de los preceptos que componen este Captulo contempla los distintos estados de excepcin, estableciendo, de conformidad con el principio de gradualidad, las circunstancias fcticas que pueden justificarlos y su limitacin temporal. Se remite a una ley orgnica la regulacin de los detalles del rgimen de los estados de excepcin. El ltimo de los preceptos de este Captulo establece, en primer lugar, que el decreto declaratorio del estado de excepcin deber sealar, para preservar la seguridad jurdica, las medidas que podrn tomarse con fundamento en el mismo. En segundo trmino, dada la trascendencia de la decisin correspondiente, se prev la intervencin de los tres Poderes clsicos en la declaracin de los estados de excepcin: en virtud de la urgencia que los caracteriza, se faculta al Presidente de la Repblica, en Consejo de Ministros, para dictar el Decreto respectivo, pero se prescribe su remisin a la Asamblea Nacional, la cual, como instancia deliberante y representativa por excelencia de la soberana popular, puede revocarlo si estima que las circunstancias invocadas no justifican la declaracin de un estado de excepcin o si considera que las medidas previstas para hacerle frente son excesivas. Si la Asamblea Nacional se encuentra en receso al dictarse el decreto correspondiente, ste debe ser remitido a la Comisin Delegada, la cual ejercer las facultades respectivas.

A lo anterior se suma un control judicial automtico atribuido a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, la cual habr de pronunciarse sobre la constitucionalidad o no del estado de excepcin y de lo establecido en el decreto que lo declar, a menos que la Asamblea Nacional, o la Comisin Delegada, haya revocado previamente ese decreto. Por otra parte, se otorga al Ejecutivo Nacional y a la Asamblea Nacional la atribucin de revocar el decreto que haya declarado un estado de excepcin, al cesar las causas que lo motivaron. TITULO IX DE LA REFORMA CONSTITUCIONAL La Constitucin ha mantenido la clasificacin que distingue entre la Enmienda y la Reforma Constitucional, incorporando, a su vez, la facultad de convocar a una Asamblea Nacional Constituyente, para ser consecuentes con la idea de que es el pueblo el legtimo depositario del poder constituyente originario. Esto guarda concordancia con lo establecido en la misma Constitucin que hace residir la soberana en el pueblo quien puede ejercerla de manera directa o indirecta. Se establece una serie de mecanismos a travs de los cuales las posibilidades de modificacin del texto constitucional sean factibles y accesibles, para evitar el divorcio entre la norma fundamental del sistema jurdico y la realidad social, poltica, cultural y econmica. La contraposicin entre una Constitucin formal y una Constitucin real genera distorsiones que agravan considerablemente las crisis de gobernabilidad y de legitimidad del sistema poltico, al no existir opciones para superarlas. Prueba de ello la encontramos en nuestra experiencia en el marco de una democracia formal y representativa, en la cual las que deban impulsar los cambios constitucionales eran las cpulas ms renuentes a producirlos, lo cual explica el entrabamiento y obstaculizacin de los intentos de reformar la Constitucin anterior. La democracia moderna insertada en un mundo globalizado y condicionada por la dinmica de la vida actual, a su vez determinada por los cambios tecnolgicos, requiere de una institucionalidad lo suficientemente flexible para poder adaptarse a los cambios que se van generando. De all que nuestra Constitucin a pesar de tener la rigidez de las constituciones escritas ha de incluir elementos que permitan esa adaptacin a la realidad. Uno de esos elementos lo constituye la existencia de un Alto Tribunal que mediante una interpretacin de carcter histrico progresivo, fundamentada en la comprensin del momento histrico, permita la mejor aplicacin posible del mximo cuerpo normativo a la realidad que le corresponde regir; tal como se prev en esta Constitucin con la creacin de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia. Pero, adems, debe incluir elementos de flexibilidad en el aspecto ms rgido de las constituciones escritas que lo conforma las previsiones relativas a la forma y mecanismos para la modificacin de la propia Constitucin. En este sentido, las posibilidades de modificacin de la base jurdica del pas deben ser amplias y estar efectivamente en manos de una pluralidad de actores polticos y sociales. Una democracia participativa y protagnica no puede construir una rgida y petrificada normativa constitucional. Al contrario, debe dejar abiertas muchas ventanas para que los procesos participativos se desarrollen a plenitud, evitando el divorcio profundo entre la norma y la realidad. El protagonismo del pueblo en la conduccin de su destino debe quedar explcitamente consagrado con especial nfasis en este punto de la reforma constitucional. Un pueblo deseoso de ejercer la soberana no debe tener que pasar por toda clase de vicisitudes y superar un cmulo de obstculos para lograr los cambios que las estructuras jurdicas requieren. Es principio consustancial con este texto constitucional la facilitacin de los procesos en los cuales el pueblo se manifiesta para solicitar la modificacin de normas constitucionales. En este contexto se debe entender que el ejercicio de la soberana por parte del pueblo, lejos de afectar el proceso de refundacin de la Repblica y de lograr el objetivo de la profundizacin democrtica se convierte en herramienta indispensable del protagonismo popular, desterrando el sistema de cnclaves que decidan los destinos del pas a espaldas de la sociedad. En lo que respecta al procedimiento de enmienda, se superan las limitaciones establecidas en la Constitucin de 1961, que hacan complicada la consecucin de resultados efectivos. En el nuevo texto constitucional se ha previsto una manera ms gil y flexible y se procede a formular una definicin de enmienda, entendida como la adicin o modificacin de artculos del texto, siempre y cuando no se altere la estructura fundamental. La iniciativa de la reforma se le atribuye a la Asamblea Nacional, por la mayora de sus miembros; al Presidente de la Repblica en Consejo de Ministros o a los electores o electoras inscritas en el registro electoral en nmero no menor del quince por ciento. Una vez cumplidos estos requisitos se inicia la tramitacin ante la Asamblea Nacional la cual realizar tres discusiones antes de la aprobacin del proyecto para lo cual tiene un plazo no mayor de dos aos. Para esta aprobacin se requiere una mayora calificada de dos terceras partes de sus miembros. El proyecto aprobado ser sometido a referendo dentro de los treinta das siguientes y bastar para su aprobacin con un nmero mayor de votos positivos. Finalmente, en este Ttulo se consagra expresamente la Asamblea Nacional Constituyente, instrumento fundamental para garantizar al pueblo de Venezuela la posibilidad abierta de modificar sustancialmente el Estado y crear un nuevo ordenamiento jurdico, creando un nuevo texto constitucional. Esta posibilidad

inexistente formalmente en la Constitucin del 1961 hubo de ser incorporada por va de interpretacin de la Corte Suprema de Justicia, para hacer posible la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente que produjo esta Constitucin. En el presente texto constitucional pasa a ser norma vigente, expresiva de la ms acertada definicin democrtica en torno a la soberana popular.

También podría gustarte