EL VIAJE INESPERADO
Una tarde de invierno, Carlos, Guille, Elisa, Manuel y otros amigos se
encontraban reunidos en una cabaña de madera, alrededor del fuego. Nadie
decía nada, parece que no tenían nada que hacer. Por fin Lucía comentó:
- ¡Qué pueblo más aburrido! Conocemos todos sus rincones y ya no se
nos ocurre hacer nada nuevo.
- Tienes razón- corearon todos.
- Yo quiero ver un lugar diferente- dijo Manuel.
- Y yo, y yo, y yo,… - se escuchó a continuación.
Parece que todos estaban de acuerdo y querían irse.
- Pero, ¿qué les diremos a nuestros padres? ¿A dónde iremos? ¿cuándo
nos iremos?- preguntó desanimado Carlos.
Después de un gran rato de silencio, cuando parecía que el plan no se podía
realizar, María gritó:
- Ya lo tengo
- ¿Qué?- dijeron todos abriendo mucho los ojos.
- Iremos a visitar al viejo sabio, sin decírselo a nuestros padres, él nos
ayudará.
Cogieron los abrigos, las bufandas, los gorros y, con mucho cuidado de no
hacer ruido se dirigieron a la casa del sabio. Le explicaron qué querían hacer
y el viejo, sin decir palabra, los montó en una vieja avioneta que tenía de
cuando era joven, y los llevó a la cima de la montaña nevada que se veía
desde el pueblo.
Una vez allí, sacó una botella de color naranja e invitó a los niños a que
echaran un gran trago.
El primero que lo hizo fue Guille.
- ¡Qué bueno está!, aunque es de color naranja sabe a fresa- dijo
lamiéndose los labios.
- ¡Pásamelo!- gritó María.
Cuando se terminó la ronda el sabio dijo:
- Ahora cada uno va a decir, mirando las montañas y gritando, dónde
quiere ir y qué va a hacer en ese lugar.
Pedro, que era el más valiente y decidido, gritó con todas sus fuerzas:
- ¡Voy A casa de mi tía Emilia A ver a mis primos!
Pero no sucedió nada. El sabio le indicó que lo repitiera, y Emilio,
colocándose las manos alrededor de la boca, repitió las mismas palabras:
- ¡Voy A casa de mi tía Emilia A ver a mis primos!
Fue entonces cuando, asombrados, vieron como la letra “A” al pronunciarla
caía congelada al suelo.
Carlos, entonces, animado gritó:
- ¡Quiero ir A un parque de atracciones, A montar en la noria!
Después gritó Manuel, después Elisa, después Guille… cuando terminó el
último, cada uno recogió sus “A” congeladas. El sabio dijo:
- Con estas aes, al contar tres, podréis viajar hasta el lugar escogido y
hacer lo que cada uno quiera. Pero cuando las as se hayan
descongelado, contad otra vez tres y estaréis de vuelta al pueblo,
concretamente a vuestra cabaña de reunión.
Y así sucedió.
Los niños, cuando se volvieron a encontrar en su cabaña, no paraban de
hablar, se quitaban la palabra unos a otros, se reían, bromeaban… Pasaron
días muy divertidos y no se acordaron para nada de los ratos aburridos
vividos anteriormente.
1.- OBJETIVO GENERAL
Utilizar correctamente la preposición “a”
OTROS OBJETIVOS
Área perceptiva
- Desarrollo de la discriminación auditiva.
- Discriminación de cualidades sonoras (intensidad)
- Discriminación sonido-silencio
- Discriminación auditiva fonética
- Discriminación del sentido del gusto.
Área memórica
- Recordar órdenes de diversa complejidad
- Recordar la narración, diálogos, frases,…
Área gnósica
- Representar gestualmente acciones y situaciones del cuento
- Ordenar una secuencia temporal
- Reconocer colores y formas
- Reconocer nociones espaciales.
Área de respiración
- Ejercitar la respiración nasal
- Mejorar la capacidad pulmonar.
Área del lenguaje:
Comprensión
- Comprender exposiciones y consignas presentadas por el adulto.
- Comprender y realizar órdenes simples que contengan la
preposición “a” con sus diferentes significados.
- Ampliar el vocabulario comprensivo.
Expresión:
- Realizar descripciones correctas que contengan la preposición “a”
con sus diferentes significados.
- Ampliar el vocabulario expresivo.
- Crear frases que contengan la preposición “a” con sus distintos
significados.
Valores y normas:
- Respetar los turnos en las conversaciones y emplear normas.
- Desarrollar la creatividad y la fantasía.
2. ACTIVIDADES A DESRROLLAR
2.1 Muchas de las actividades pueden realizarse al mismo tiempo que se les
narra el cuento.
- Comenzamos la sesión contando el cuento, los niños sentados en círculo
personalizando los protagonistas y los lugares. El sabio puede ser también
un seños del pueblo.
- “…cogieron los abrigos, las bufandas, los gorros,…” Los niños gesticulan
como si se pusieran ellos las prendas.
- “…los montó en una vieja avioneta que tenía de cuando era joven, y los
llevó a cima de la montaña…” todos en fila hacen la avioneta, produciendo la
onomatopeya correspondiente. Harán distintos recorridos por la clase
dirigidos por el profesor hasta llegar a algún sitio que represente la cima de
la montaña.
- “…Una vez allí sacó una poción mágica viajera…”. Los niños degustarán
algún tipo de refresco o líquido con sabor a fresa. Después pueden hacer
degustaciones de otros sabores. Adivinan el sabor y utilizan la expresión:
“sabe a…”.
- “…cada uno, mirando las montañas, va a gritar dónde quiere ir…” Cada
niño irá enunciando frases del tipo a las presentadas en el cuento (Voy a casa
de mi tía Emilia a ver a mis primas). Estas frases se harán con distintas
intensidades: suave-fuerte-muy fuerte. La profesora, al pronunciar la
preposición “a”, dejará caer ante cada niño un rectángulo que contenga la “a”
dibujada, también puede ser una “A” hecha con plastilina.
- “Can estas as, al contar tres, cerráis los ojos y podréis viajar hasta el lugar
escogido y las “as” habrán desaparecido”. La profesora aprovechará que los
niños tengan los ojos cerrados para recoger todas las “as” que están en el
suelo.
2.2 Actividades para desarrollar una vez contado y vivido el cuento.
- Elaborar, por parte del profesor o de los niños, distintas secuencias del
cuento (desde dos viñetas en adelante). Ordenarlas temporalmente.
- Dibujar los lugares dónde cada niño ha viajado.
- Elaborar el cuento en diapositivas “caseras”.
- Elaborar secuencias de diapositivas donde se encuentren las distintas
frases elaboradas por los niños. Frase tipo “Voy a casa de mi tía Emilia
a ver a mis primos”
- Juegos de tarjetas: consistirá en elaborar una baraja de dibujos de tres
campos semánticos que se refieren concretamente a los cuatro
significados importantes de la preposición “a”:
- Lugares: calle, casa, campo, jardín, escuela, barrio, Salamanca,…
- Sabores: comidas, especialmente frutas.
- Acciones (infinitivos): comprar, leer, barrer, jugar,…
- Personas: Juan, Alicia, primo, abuelo, mamá, papá,…
Con esta baraja se podrán realizar infinidad de ejercicios:
- Hacer frases con una, dos o tres tarjetas donde se tengan que
utilizar obligatoriamente la preposición “a” con sus diferentes
significados.
- Ante un número determinado de tarjetas, el profesor enuncia una
frase y el niño tiene que designar la tarjeta o tarjetas
correspondientes por el significado.
- Hacer lecturas de los dibujos de frases propuestas por la
profesora utilizando pictogramas fijos para cada campo
semántico, como pueden ser:
Saber Ir
A naranja, A la escuela
A fresa,… A Salamanca…
Mirar Voy a
A Juan Cocinar
A mi primo Estudiar
- Dados los pictogramas fijos, completar frases diferentes…
- Hacer cuentos móviles, puede ser un cuaderno de anillas dividido en
dos partes. En la parte de arriba pueden figurar fotografías o dibujos
buscadas por el profesor o los alumnos que representen sujetos de
acción, y en la parte de abajo, fotografías o dibujos que representen
lugares. La actividad consistirá en realizar distintas frases dependiendo
de las fotografías escogidas. Ejemplo: ante las fotografías de una niña
(sujeto en la parte de arriba) y la escuela (lugar en la parte de abajo) se
puede hacer frases como “la niña va a ala escuela”.
El cuaderno de anillas móvil podrá estar dividido en tres partes: una de ellas
estará reservada a un pictograma fijo (Ej.: saber, ir, mirar, voy a) y las otras
dos partes irán referidas a los cuatro campos semánticos que corresponden a
los significados de la preposición “a”. Por ejemplo, ante las fotografías de un
niño (parte de arriba), el pictograma fijo ir a (en la parte central) y una acción
en infinitivo (en la parte de abajo) se pueden hacer frases como: “El niño va a
comer”.
Es importante que el cuaderno sea de anillas con el fin de poder hacer las
combinaciones de las fotografías sin problemas. Los cuadernos se pueden
elaborar por los propios alumnos, buscan, recortan y pegan las fotografías
que les interesen.
3. MATERIAL
- Pociones mágicas: líquidos de distintos sabores.
- Rectángulos con la letra “a” dibujada dentro de ellos (una por niño) de
cartulina o de plastilina.
- Secuencias del cuento bien hechas por el profesor o dibujadas por los
niños.
- Diapositivas (del cuento o bi8en de frases hechas por los niños) hechas
por el profesor.
- Tarjetas correspondientes a los cuatro campos semánticos explicados
anteriormente y de los pictogramas fijos.
- Cuadernos de anillas móviles de fotografías, elaborados por el profesor
e incluso con los alumnos.
4. EVALUACIÓN
Se puede llevar a cabo mediante una hoja de registro como la siguiente
PREPOSICIÓN A
Significado Significado Significado Significado
referido a referido a referido a referido a
acciones personas lugares sabores
Com. Exp. Com. Exp. Comp. Exp. Comp. Exp.
Nombre de
alumnos