Analizaremos los elementos necesarios para reconocer y describir los suelos
empezando por sus capas constitutivas. los procesos pedogenéticos o de
formación de los suelos, denominados procesos de edafización, alteran el
material original o madre dando origen a un nuevo cuerpo, único en sus
características, conocido como “SUELO”. El estudio de dichas características da
origen a la morfología de los suelos y nos proporciona las pautas necesarias
para diferenciarlos unos de otros. trataremos de describir un suelo desde el
punto de vista de todas esas características diferenciales con respecto a otro u
otros, inclusive los adyacentes.
El suelo
Es la parte más externa de la corteza está formada por materiales en diversos
estados.
. Sólidos. Fragmentos de la roca madre, en diferentes estados de
descomposición, constituidos por una mezcla de minerales.
. Líquidos. El agua que se filtra entre las partículas sólidas.
. Gaseosos. Principalmente el oxígeno y el dióxido de carbono.
Además de estos componentes, en el suelo y sobre él, existen seres vivos. Los
animales, las raíces de las plantas y numerosos microorganismos. El suelo es
importante para todos ellos pero, sobre todo, para las plantas ya que ellas deben
tomar el agua y las sales minerales presentes en él por medio de sus raíces.
Clases de suelo
Los suelos se clasifican según diferentes criterios: su evolución, composición,
capacidad de uso en agricultura y textura, entre otros.
Las partículas minerales que forman el suelo tienen diferentes tamaños y se
llaman arena, limo y arcilla, de mayor a menor.
La textura del suelo depende de la partícula mineral más abundante en él.
Entonces, de acuerdo a la textura, los suelos se clasifican en:
. Arenosos. En ellos predomina la arena. Por el tamaño grande de sus
partículas, estos suelos no retienen el agua que baja a zonas más profundas.
Generalmente son de color claro y como no contienen mucha materia orgánica
no suelen ser productivos para la agricultura.
. Limosos. Las partículas de tamaño medio, el limo, son las que predominan.
Por ello, son suelos que no filtran el agua rápidamente, contienen mucha
materia orgánica pero se compactan mucho al secarse.
. Arcillosos. La arcilla, partícula de menor tamaño es la predominante. Son
suelos casi impermeables pero muy compactos en ausencia de agua. Contienen
mucha materia orgánica pero cuando están secos casi no permiten el
crecimiento de las raíces.
Se llama suelo franco a aquel que tiene aproximadamente la misma proporción
de las tres clases de partículas minerales y por ello tiene propiedades que lo
hacen ideal para la agricultura.
Según la evolución del suelo y la descomposición de la roca que le dio
origen, los suelos se clasifican en:
•Suelos no evolucionados: De formación reciente, próximos a la roca madre
con poca materia orgánica.
•Suelos poco evolucionados: Con gran cantidad de materia orgánica y color
variable dependiendo de la composición.
•Suelos evolucionados: Con mucha materia orgánica en diferentes estados
de descomposición, roca madre bien desintegrada. Aptos para la agricultura.
CLASIFICACIÓN DE LOS SUELOS
¿CÓMO SE CLASIFICAN LOS SUELOS?
Los suelos se clasifican conforme a distintos criterios que son
El Geológico, Químico, Climático, Genético, Capacidad De Uso, Ingenieril, y por
sus bases morfometricas; siendo estos impuestos por la Geología de forma
genérica para poder estudiar los mismos, en toda su extensión y composición
pudiendo así abarcar mejor su evalúo.
Contrario a lo que puedas pensar, la tierra que pisamos es objeto de grandes
estudios dada la importancia vital que representa para la existencia humana,
animal y vegetal; efectivamente estudiar los suelos permite evidenciar los que
son más aptos para el desarrollo de vida, de plantaciones y de construcciones,
como también de excavaciones y extracción de recursos o minerales.
El termino suelo denota la corteza superficial de la tierra, pero en un sentido
más técnico, constituye el conjunto de capas sobre el cual se desarrolla la vida,
siendo apreciable en el minerales, materia y organismos.
El estudio de su clasificación guarda relevancia para conocer la habitabilidad de
los mismos y poder así determinar una utilidad sobre los mismos, veamos de
que trata.
GEOLÓGICO
Este es uno de los criterios más genéricos y versa sobre la distinción de los
suelos como un ente o bien organismo propio, de modo tal que su estudio se
realiza de forma integral aprehendiendo su origen, composición, formación y
degradación.
QUÍMICO
Esta versa sobre la composición de los suelos, es decir, por el cumulo de
partículas que el mismo dispone, siendo el objeto de estudio el nivel de
saturación que reside en los mismos, el cual determina los procesos de
degradación.
CLIMÁTICO
Esto se establece conforme a la relación que puede haber entre el suelo y el
clima, es decir, evalúa los efectos del clima sobre el mismo, en sí la distinción
se produce en base al proceso que desarrolla el suelo respecto aquel, si este
puede o no evolucionar con total independencia de la temperatura.
GENÉTICA
Su nombre refiere al génesis de las partículas que conforman el suelo, en efecto,
esta distingue a los suelos por su origen y proceso de formación; siendo una
de las clasificaciones que distingue entre los minerales que hacen parte del
mismo.
CAPACIDAD DE USO
Considera una de las clasificaciones más ambiguas, pues deviene de criterios
industriales, que permiten determinar si el suelo puede o no ser aprovechable.
INGENIERIL
Optamos por incluirla como una subclasificación de la capacidad de uso, ya que
la misma deviene del evaluó de sus granos y de si los mismos sirven o no para
la construcción.
NUMÉRICA
Para muchos más que una clasificación es un método estadístico empleado por
los geólogos para dividir los suelos, conforme a sus características más
externas, como sus minerales u organismos, sin inferir su composición
geológica.
TIPOS DE COLUMNAS
Bases Morfométricas
Esta alude al estudio y la distinción de los suelos con arreglo a la forma de las
partículas que lo componen. En efecto, su estudio se realiza por medio de una
muestra que se toma del suelo y se somete a la observación permitiendo
evidenciar así su forma.
ENTRE LOS DISTINTOS TIPOS DE SUELOS TENEMOS LOS LOS
ARENOSOS, LOS LIMOSOS, O LOS DE TURBA.
Conocer las peculiaridades de cada tipo de suelo es importante en la agricultura.
Según el tipo de suelo se podrán plantar unos cultivos u otros, además
hay suelos más vulnerables a la contaminación y la sequía. En Tendenzias te
contamos más sobre los distintos tipos de suelo.
Entre los distintos tipos de suelos tenemos los los arenosos, los limosos,
o los de turba. Conocer las peculiaridades de cada tipo de suelo es importante
en la agricultura. Según el tipo de suelo se podrán plantar unos cultivos u otros,
además hay suelos más vulnerables a la contaminación y la sequía. En
Tendensias te contamos más sobre los distintos tipos de suelo.
HAY BÁSICAMENTE CINCO TIPOS DE SUELOS
Que son los que los jardineros y agricultores trabajan. Los cinco tipos son en
realidad la combinación de tres tipos de partículas de roca erosionada que
componen el suelo, son el limo, la arena y la arcilla. Según se combinan entre
sí estas partículas crean un suelo con unas características distintas.
Suelos arenosos
Entre los tipos de suelos, el arenoso
contiene partículas más grandes que el resto de los suelos. Es áspero y seco al
tacto porque las partículas que lo componen están muy separadas entre ellas y
no mantienen bien el agua.
En los suelos arenosos el agua se drena rápidamente. Estos suelos no son los
de mejor calidad para la agricultura ya que no retienen los nutrientes. Las
plantas en suelos arenosos no tienen la oportunidad de aprovechar bien los
nutrientes de forma eficiente por la velocidad con la que el agua se drena.
El suelo arenoso por otro lado retine mejor la temperatura, así que en cuento
llega la primavera resulta más cálido que otro tipo de suelo. Entre los árboles
que se pueden cultivar en suelos arenosos está el aguacate, las palmeras, los
pinos, eucualiptus o los cipreses.
SUELOS CALIZOS
Llamamos caliza a una roca natural y de pequeño tamaño blanca. En su
composición encontramos el carbonato de calcio, de magnesio y además otros
minerales como puedan ser la arcilla, el cuarzo o la hematita. Se trata de un
suelo especialmente seco y muy árido.
Además, al contener carbonato del calcio hace que se seque muy rápido y que
no pueda adquirir de forma correcta los nutrientes de la tierra a través de las
plantas. Es por esto que el cultivo en los suelos calizos no es nada recomendado
porque no tiene ni agua ni nutrientes y es muy difícil que la planta
sobreviva. Aunque siempre existen tecnologías y fertilizantes que pueden
ayudar a cultivar estos suelos, con dificultad.
SUELOS CALIZOS Algunos árboles que se cultivan en este tipo de suelos
calizos porque pueden resistir, de alguna manera, a estas condiciones son las
higueras, el granado, el citrus, el caqui y el almendro.
SUELOS LIMOSOS
Estos tipos de suelos se componen de partículas más pequeñas y
suaves al tacto que los arenosos.
Los suelos limosos retienen el agua por más tiempo, así como los nutrientes. Su
color es marrón oscuro, los limos se componen de una mezcla de arena fina y
arcilla que forma una especie de barro junto al lodo y restos vegetales. Este tipo
de suelos se suele dar en el lecho de los ríos. Son suelos muy fértiles dado su
grado de humedad y nutrientes. Más fácil de cultivar que suelos arenosos o los
de arcilla.
ENTRE SUS CARACTERÍSTICAS PRINCIPALES:
1. Son pedregosos
2. De color oscuro
3. Filtran el agua con bastante rapidez, son suelos muy fértiles
4. La materia orgánica presente en este tipo de suelos se descompone con
rapidez, por esto es un suelo rico en nutrientes
Estos suelos se componen de partículas más pequeñas y suaves al tacto que los
arenosos. Los suelos limosos retienen el agua por más tiempo, así como los
nutrientes. Su color es marrón oscuro, los limos se componen de una mezcla
de arena fina y arcilla que forma una especie de barro junto al lodo y restos
vegetales. Este tipo de suelos se suele dar en el lecho de los ríos.
En los suelos limosos puede crecer casi todos los tipos de árboles y plantas,
salvo las que necesiten condiciones muy secas. Crecen bien árboles como
lossauces, los fresnos, las encinas, los chopos o los álamos.
SUELOS HUMÍFEROS O DE TIERRA NEGRA
Llamamos suelos humíferos a aquellos suelos que ya cuentan con material
orgánico descompuesto. En este tipo de suelos podemos ver organismos o
microorganismos que pueden ser muy beneficiosos para sembrar. De esta
manera, los suelos humíferos son los más elegidos para desarrollar actividades
del terreno agrícola.
SUELOS HUMÍFEROS O DE TIERRA NEGRA
En los suelos humíferos es normal encontrar lombrices y otros tipos de anélidos
que se dedican a hacer agujeros y permiten así que el suelo atrape todo el agua
y los minerales, siendo tierras muy fértiles.
Estos suelos también se conocen como suelos de tierra negra porque, al haber
sustancias en descomposición en la tierra, presenta un color muy oscuro.
Además, suelen absorber muy bien el agua por lo que es normal que también
sean muy oscuros por la humedad. De hecho, los trabajadores del campo o de
la tierra suelen pensar que cuánto más negra sea la tierra a trabajar mejor
es para los cultivos.
SUELOS ARCILLOSOS
Este tipo de suelos está formado por granos finos de color amarillento, arcilla
en un 45%, retienen mucho el agua y forman charcos. Si se mezcla con
humos es bueno para cultivar. Este tipo de suelos tienen gran poder de retener
agua y nutrientes pero una baja porosidad así que es difícil trabajarlos. Su
textura y viscosidad hace que las raíces no tengan una adecuada aireación y por
lo tanto se pueden pudrir.
En este tipo de suelos no se puede plantar cualquier tipo de plantas o árboles,
funcionan los que tiene raíces de ir hacia zonas más profundas buscando
aireación. Como la melisa o el nogal, los alisos, el fresno, o el álamo blanco.
SUELOS PEDREGOSOS
A este tipo de suelos se les llama así porque tienen pequeñas formaciones de
piedra en su composición. Esto se produce porque la superficie terrestre se
desdobla por causas naturales o por causas provocadas. El gran problema de
este tipo de suelos es que son semi-impermeables por lo que no permiten la
entrada de agua. De esta manera, es muy complicado el cultivo en este tipo
de suelos aunque existe un tipo de plantas de origen xerófilo que sí pueden
crecer en este tipo de suelos.
Algunos de los cultivos típicos de estos suelos
son: milenrama, caléndula, amor de hombre o lavanda fina.
SUELOS DE TURBA
Un excelente suelo para el cultivo, se usa en la agricultura como sustrato
para el cultivo. El suelo de turba es de color oscuro marrón o negro. Son de
textura suave y tienen un alto contenido en agua y nutrientes. Los suelos de
turba suelen estar saturados de agua pero una vez drenados son excelentes
para el cultivo.
Una de las características valiosas de los suelos de turba es su capacidad para
retener agua en los meses secos y su capacidad para proteger las raíces de la
bajas temperaturas en épocas de invierno. Los suelos de turba contienen un ph
ácido entre 3,5 y 4 de pH y los agricultores lo usa para regular la química del
suelo así como agente de control de las plagas del suelo.
El suelo de turba es perfecto para todo tipo de semillero al ser porosos y retener
bien la humedad.
SUELOS SALINOS
Son característicos de regiones secas, su alto contenido en sales influye en las
plantas, no son suelos buenos para la agricultura ya que causan dificultades en
su crecimiento. En este tipo de suelos los cultivos crecen poco ya que se
acumulan las sales solubles en la zona de las raíces. Se suelen reconocer a la
vista por el cultivo de plantas débiles y raquíticas y por la presencia de costras
blancas de sal en la superficie.
Si la salinidad de suelo es moderada puede pasar desapercibía ya que no causa
efectos muy evidentes, influye en el crecimiento de las plantas que suelen tener
hojas más pequeñas y con un color verde azulado más oscuro que la hojas
normales. Además mucho suelos salinos contienen cantidades altas de yeso. Su
valor de Ph saturado es siempre menor a 8,2.
Los suelos salinoso son indicativos de un drenaje inadecuado para lixiviar
la sal de la tierra o la que proviene del agua. Algunos suelos son de forma natural
sódicos o salinos si se han formado sobre material alto en sales como depósitos
marinos.
No hay un «punto crítico» de salinidad donde las plantas no crecen. A medida
que aumenta la salinidad las plantas se debilitan acumulan cloro y se mueren.
Entre los árboles resistentes a los suelos salinos destacan: el madroño, la
morera, la acacia, el arce, el cedro, el algarrobo o el ciprés común. Hay que
destacar que la gran mayoría de lo cultivo en sus primeras fasees, las de
germinación son muy suscetibles a problemas por salinidad. Si la planta supera
las primeras etapas de crecimiento luego es más fácil sobrevivir en estas
condiciones.