Análisis Allegros de Beethoven y Chopin
Análisis Allegros de Beethoven y Chopin
1: 29/Mayo/2019
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Índice
Marco Teórico p. 4
Descripción y Análisis p. 9
Conclusión p. 36
Bibliografía p. 41
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Resumen
Este trabajo se trata sobre el análisis comparativo musical de dos Allegros de Sonata, una
perteneciente a Ludwig Van Beethoven, y la otra, a Frédéric Chopin. Ambas obras son del período
temprano del Romanticismo, pertenecen a su última obra de este género de sonata, siendo compuestas
pocos años antes de sus muertes. La orientación del análisis se volcó desde el punto de vista de la
composición, enfocándose a las principales diferencias que las hacen tan distintas entre sí, a pesar de
poseer varias similitudes.
Abstract
This work is about the musical comparative analysis from two Allegros of Sonata, one of
them composed by Ludwig Van Beethoven, and the other one, by Frédéric Chopin.
Both works are from the early period of romanticism, belong to their last work of this genre of sonata,
being composed a few years before their deaths. The orientation of the analysis was overturned from
the point of view of composition, focusing on the main differences that make them so different from
each other, despite having several similarities.
Introducción
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analizando las obras desde los puntos de vistas auditivo, compositivo, interpretativo, estilístico y
técnico.
Marco teórico
El objetivo, y planteamiento al problema, propuesto para este trabajo fue el de encontrar las
principales diferencias que hacen a ambas obras, elegidas por el alumno, tan distintas entre sí, a pesar
de poseer tantas similitudes si uno las percibe desde la forma estructural y técnicas de composición.
Sonata Nro. 3 Op. 58, en Si menor – Frédéric Chopin (1er. Mov, Allegro Maestoso de
Sonata)
Sonata Nro. 32, Op. 111, en Do menor – Ludwig Van Beethoven (Allegro de Sonata, 1er.
Movimiento)
Para poder determinar sobre cuáles parámetros se basó el análisis de este trabajo de
investigación, fue necesario entender el contexto musical al que nos encontramos, ya que el período
Romántico tiene sus características que lo hacen distinto al resto.
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Periodos:
La tonalidad sigue siendo la clásica, pero de acuerdo con su más amplia concepción
cromática.
La escritura cromática gana más y más posiciones, pero el romanticismo se deja sentir
sobre ella con imprecisiones deliberadas que aspiran a dar sensaciones de lejanía, de
poesía nocturna, de interrogaciones, etc.
Las modulaciones son variadas y constantes. Muy frecuentes las modulaciones truncadas
(las que no llegan a su término).
En extensos pasajes musicales, se elude toda cadencia conclusiva, ya sea apelando a las
cadencias rotas (especialmente en sus infinitas variedades modulantes), ya sea
engarzando encadenamientos cromáticos que, al sucederse sin cadenciar, dan lugar a que
la tonalidad quede indefinida, por falta de elementos que la determinen.
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Se emplean armonías extrañas y ricas para obtener variedad de colores y
sonoridades, con mayor uso de la disonancia. La naturaleza lógica de la armonía tonal es
tal, que el oído armónicamente afinado aceptará finalmente que tenía una relación lógica
con la estructura armónica del todo; más aún, incluso es posible que el oído no advierta
siquiera las disonancias.
Las notas extrañas se emplean en todas las voces. Muchas veces con un carácter
armónico tan acentuado que las simultaneidades en que figuran producen la sensación de
nuevos acordes en oportunidades en que resultan perfectamente analizables por los
métodos de la armonía tradicional. Hay que destacar el importante papel que desempeñan
las apoyaturas.
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de artificios imitativos, de fondo diatónico y elementos limitados; es el contrapunto libre,
en el cual intervienen cuantos elementos interesan. El siglo XIX completó la oscilación
entre una concepción horizontal de la música y una vertical.
La melodía adquirió curvas más expresivas, un colorido más amplio y una mayor riqueza
de matices dinámico- expresivo. Es indudable que, a lo largo de aproximadamente tres
siglos de vida, la música de la tradición armónica y tonal es de una riqueza y una
diversidad increíbles.
El ritmo se explotó con mayor flexibilidad, más libre y menos estructurado que en el
clasicismo. Se produce el descubrimiento de nuevos ritmos, algunos procedentes del
folclore. También se utilizaron con eficacia, combinaciones de ritmos diferentes y de
síncopas hasta llegar a su punto más complejo.
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Metodología de Trabajo
2 – Elección de las obras y escucha: Una vez que pude elegir ambas obras de cada
compositor, cumplí con la tarea de realizar cinco escuchas de cada composición. A medida que se
realizaba este paso, fue necesario hacer anotaciones a mano de las primeras y últimas percepciones
personales que surgían de mi intelecto y capacidad de juicio musical.
3 – Análisis individual de cada partitura: Este paso fue el más largo, pero a su vez, el más
importante. Se empleó un análisis exhaustivo de la mayoría de los componentes necesarios para
comprender las similitudes y diferencias entre las piezas musicales. Esto ayudó a complementar el
entendimiento global del paso anterior. Se analizó la Armonía, Contrapunto, Ritmo, Textura,
Estructura Formal y Articulatoria, Dinámica, Registro y Análisis Motívicos de cada obra.
5 – Conclusión: En este último paso, se realizó la descripción final, siendo este el que ofreció
la respuesta al planteamiento del problema del Marco Teórico. Se reveló las diferencias encontradas
que mayor peso conllevaban ambas obras entre sí, revelando la respuesta final a mi trabajo a juicio
propio.
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Análisis y Descripción de los Procesos
1 - Sonata Nro. 3 Op. 58, en Si menor – Frédéric Chopin (1er. Mov, Allegro Maestoso de Sonata)
Frases de A: Frase 1: cc. 1 a 16; Frase 2: cc. 17 a 22; Frase 3: cc. 23 a 30; Frase 4 (Puente
o Frase Cadencial): cc. 31 a 40.
Tema B: cc. 41 a 91
Frases de B: Frase 1: cc. 41 a 55; Frase 2: cc. 51 a 65; Frase 3: cc. 66 a 75; Frase 4
(Cierre de Tema B o Coda): cc. 76 a 91.
Reexposición: Tema B’: cc. 151 a 202 (al fine) (Todo en Si Mayor, homónima mayor de la
tonalidad de inicio/principal)
Frases de Tema B’: Frase 1’: cc. 151 a 163; Frase 2’: cc. 164 a 173; Frase 3’: 174 a
183; Frase 4’ (Cierre de Tema B): cc. 184 a 195;
En las secciones de Exposición y Reexposición, los elementos realizados son varios. Los
Temas A y B están compuestas por 4 frases cada una, realizando así 8 tipos de materiales semi
temáticos en Exposición. A cada una de estas, la nomenclaremos como “Frase”.
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Es interesante cómo la Frase 3 del Tema A es muy similar a la Frase 1 del Tema B, como si
el compositor quisiera anticiparlo.
EXPOSICIÓN
Tema A, Frase 1:
Tema A, Frase 2:
El discurso musical prosigue: la frase 2, inicia en c. 17. Junto con la Frase 3, son de
corta duración. La textura de homofonía vertical se va desarrollando poco a poco de manera
más horizontal. El color musical sigue siendo el mismo, escribiendo empleos armónicos
similares a la frase anterior.
El ritmo, notablemente, es lo que más toma impulso, proponiendo células rítmicas
que dan paso a una densidad armónica más alta.
La tonalidad sigue siendo la principal, Si menor.
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Figura 2 - Tema A, final de Frase 1 e inicio de Frase 2 en c. 17 (desde tercer compás del primer sistema)
Tema A, Frase 3
Figura 3 - Tema A, Frase 3 (cc. 23 en adelante). Préstese atención a la melodía: Posible anticipación de Tema B.
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Tema A, Frase 4
Esta frase tiene carácter cadencial hacia el inicio de Tema B, como función
articulatoria de Puente. Se escucha una textura contrapuntística de tres voces independientes:
Aguda, Media y Grave.
Una modulación más clara es notable. La frase anterior presentó su primer acorde
como Re mayor, pero en casi en medida de factor sorpresa. Aquí, por el contrario, los acordes
de quinto de Re (también quintos con novena y séptima disminuida), son más puestos en
escena para la enfatización de la nueva tonalidad.
Su dinámica va disminuyendo, pero en los últimos compases la incrementa.
Los registros del piano hasta ahora, en todo Tema 4, es muy abarcativo y completo.
En figura 3 inclusive se observa un registro bastante distanciado de las dos manos: muy
graves y muy agudos.
Figura 4 - Tema A, Frase 4. Inicia en último compás del primer sistema, al fine. Puede considerarse como Puente y/o frase
cadencial para ir a Tema B, frase 1.
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Tema B, Frase 1
Una vez ya confirmada la nueva tonalidad, proseguimos con el Tema B, que da pie
con su primera frase, nomenclada como Frase 1 de Tema B.
Claramente su textura es de melodía con acompañamiento, el acompañamiento lo
realiza la mano izquierda mediante arpegios abiertos y la mano derecha toca la melodía. Cada
acorde tiene su pedal.
Esta ya empieza en Re mayor, luego de la Frase 4 de Tema A que conllevaba su
modulación a este nuevo todo.
Los patrones rítmicos son menos rápidos, la densidad armónica también lo es. Es
interesante pensar que cuando la obra reexpone, no presenta ningún elemento de Tema A en
Exposición, como si el Tema A se tratase de una introducción al Tema B en Exposición. Solo
es en el Desarrollo donde se verán algunos elementos temáticos del Tema A.
Las sucesiones armónicas en esta frase no van más allá de acordes disonantes,
centrándose más en tríadas mayores y menores.
Figura 5 - Tema B, inicio de Frase 1 (c. 41 a 50). Nótese la semejanza melódica con Frase 3 de Tema A (ver Figura 3)
Tema B, Frase 2
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frase, la textura sigue siendo la misma, pero cambia su disposición, haciendo la melodía por
octavas y el acompañamiento a modo de preludio.
La densidad de la música va en apogeo, y el registro del instrumento es usado más
en medios y agudos.
Tema B, Frase 3
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Figura 7 - Tema B, frase 3 (inicio en tercer compás del primer sistema, cc. 66 a 75)
Tema B, Frase 4
Esta frase puede ser considerada como coda de Exposición, pero sugiero que se la
nomencle como frase, debido a que presenta elementos temáticos muy relevantes que luego
aparecerán en Desarrollo y, por supuesto, en Reexposición.
Visualmente la textura tiene cierta semejanza con los dos últimos compases de la
Frase 1 de Tema A (cc. 15 y 16). Pero no suena igual, lo que me lleva a la siguiente
conclusión: Chopin emplea la célula de 4 semicorcheas descendentes o ascendentes como un
material muy recurrido en la obra completa, pero la utiliza en momentos clave, como, por
ejemplo, el de crear un efecto de reminiscencia, diciéndote que no te olvides de ese material.
Aquí la dinámica disminuye progresivamente, dando inicio al Desarrollo.
La textura, complejo de comprender aquí, se entendería como una doble mixtura
donde a veces realiza melodía con acompañamiento, y, en otras, contrapunto de las voces.
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Figura 8 - Tema B, Frase 4 (cc. 76 a 92). Se puede considerar como cierre de Tema B, Coda, o Codetta.
DESARROLLO (generalidades)
Como es de esperarse, el Desarrollo empieza en Re mayor (figura 9). Los primeros compases
parecen ser elementos propios de esta sección, obviamente citando pequeñas células rítmico-
melódicas presentadas antes en Exposición, creando una textura contrapuntística nuevamente a tres
voces.
Seguido de eso, a partir de c. 97, presenciamos material temático de Frase 1 de Tema A, con
sus respectivas variaciones: Tonalidad en Re mayor, con menos silencios y con la dinámica un poco
más fuerte.
La armonía que emplea en esta obra, a nivel general, se basa constantemente en el empleo de
dominantes secundarias, acordes de séptima disminuida y acordes con novena.
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Figura 9 - Inicio de Desarrollo. Nótese el uso fluido de textura contrapuntística a modo de comienzo, luego sonará una
variación de Tema A, Frase 1, en c. 97.
Curiosamente, a partir de c. 108 (figura 10), se retoma nuevamente material temático de Frase
1 de Tema A (figura 1), pero aquí lo hace de manera secuencial. La secuencia es empleada con
variedad, la primera repetición la hace a la quinta disminuida con respeto a la primera aparición del
material citado, luego, a distancia de tercera menor.
Se descata de que, a pesar de que claramente oímos una secuencia, las variaciones musicales
generales están muy marcadas, especialmente en el acompañamiento de la mano derecha: Véase cómo
emplea direcciones lineales, ascendentes, y luego descendentes.
El empleo de tantas alteraciones accidentales en las notas musicales, mayormente se deben a
el uso de notas ajenas a la armonía (tratándolas como disonancias que enriquezcan más el discurso
musical, a veces para crear acordes de novena y undécima); y, por otro lado, debido a las
sensibilizaciones de otros grados a los que Chopin quizá trató de dirigirse a ciertos pasajes armónicos
breves.
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Figura 10 - Desde segundo compás de primer sistema, c. 108, inicia un tratamiento secuencial del Tema A, Frase 1 de
Exposición.
A partir de c. 115 (figura 11), el Desarrollo por vez primera cita elementos del Tema B de
Exposición, refiriéndonos a la Frase 2 de la misma.
La textura es casi idéntica. Son muy pocos los elementos nuevos oídos aquí, o, al menos, si
no entramos en detalle de este fragmento y lo comparamos.
El primer acorde nos indica un quinto de Re bemol mayor, la cual luego acude a esa tonalidad.
Esto, sin antes haber preparado con antelación el direccionamiento a esta nueva tonalidad.
Pero a Chopin no le basta solo tal suceso musical. Luego, al ir cerrando este fragmento del
Desarrollo, escuchamos y observamos que la música moduló a la tonalidad de Mi bemol mayor,
(observar en la partitura, cc. 121 a 126), donde claramente se percibe auditivamente dicha tonalidad.
Sorprendentemente, al final este fragmento, al estar en Mi bemol mayor, en solo cuatro
compases logra volver a la tonalidad de Re mayor, iniciando el siguiente fragmente del Desarrollo
(Figura 12).
Al decir verdad, los componentes recién descritos, son los únicos a los que Chopin utiliza
como variación para este Desarrollo. Lo demás, como la textura, dinámica, registro, siguen siendo
muy parecidos al de la Frase 2 de Tema A.
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Figura 11 - Sacado de Tema B, Frase 2 de Exposición (ver figura 6), pero aquí lo presenta en Re bemol mayor, que luego va
a Mi bemol mayor. El fragmento empieza en último compás del primer sistema, c. 115.
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Figura 12 - Final de anterior fragmento (figura 11), e inicio de otro fragmento en c. 131, último compás del primer sistema.
Cita el Tema B, Frase 2, pero de manera más contrapuntística y subiendo en intensidad.
Se arriba, por lo tanto, al último fragmento de este Desarrollo. Se determina con claridad que
este pasaje musical proviene de la Frase 4 de Tema A.
Así como en la Frase 4 de Tema A también servía de frase modulante con criterio de puente
para entrar al Tema B, aquí cumple la misma función, pero modulando hacia la tonalidad de Si mayor,
es decir, a la homónima mayor de la tonalidad principal con la cual se inició este Allegro de Sonata.
Aquí, se observa la textura contrapuntística vertical nuevamente a 3 voces, (semicorcheas,
corcheas y negras). La dinámica va en disminución para entrar con esa intensidad hacia la
Reexposición.
Figura 13 – Último fragmento en Desarrollo, cc. 140 a 148. Elemento desarrollado de cierre similar a Tema A, Frase 4
(compárese con figura 4)
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REEXPOSICIÓN
Figura 14 - Tema B’, inicio de Frase 1’. (cc. 149 a 157). Ahora en tonalidad de Si Mayor. Reexposición
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Figura 15 - Tema B’, inicio de Frase 2’, desde último compás de primer sistema, c. 164, a c. 171
Figura 16 - Tema B’, inicio de Frase 3’. (desde último compás de primer sistema, c. 174, a c. 182)
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Tema B’, Frase 4’
Figura 17 - Tema B’, inicio de Frase 4’ (desde segundo compás de primer sistema, c. 184, a c. 189)
Codetta
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Figura 18 - Codetta de Reexposición (desde último compás de primer sistema, c. 196, al fine)
2 - Sonata Nro. 32, Op. 111, en Do menor – Ludwig Van Beethoven (Allegro de Sonata, 1er.
Movimiento)
Introducción: cc. 1 a 19
Puente: cc. 35 a 50
Tema B: cc. 50 a 55
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Tema B’: cc. 116 a 121
EXPOSICIÓN
Introducción:
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Figura 19 - Introducción, cc. 1 con levare a 16.
Tema A:
Este tema marca una melodía muy pegadiza que al oyente le vale de importancia de
saber con mucha certeza cuándo la obra recurre nuevamente a este tema en otra parte de la
sonata.
Su textura es contrapuntística de una sola melodía que se realiza por octavas. Esta textura,
ofrece un estilo clásico, alejado al contrapunto romántico. Su dinámica, mayormente, es sobre
Forte.
Todo Tema A se encuentra en la tonalidad original, Do menor. Particularmente.
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Figura 20 - Inicio de Tema A, cc. 20 a 26.
Figura 21- Final de Tema A, cc. 30 a 35. Compare esta textura con la figura 20.
Puente
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que la otra, por semicorcheas generalmente por grados conjuntos. Toda su dinámica es Forte
y vivaz, es una parte donde la obra va tomando impulso en cuando a la densidad de las voces
y ritmo.
Figura 22 - Puente. Inicío en último compás de figura 21, c, 35. Esta figura representa un compás después, de cc. 36 a 43.
Tema B
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modulación hacia Mi bemol mayor, pero quizá lo consideró como dominante de La bemol
mayor.
Este tema es muy breve, tan solo dura unos cinco compases. Aun así, sus elementos
son muy importantes para el futuro desarrollo de la obra que se verán más adelante.
La textura empleada es variada, pero prioriza la de homofonía vertical, siendo las
melodías en tiempos veloces solo adornos melódicos.
El final del tema genera contraste con el inicio de la Coda: el Tema B termina con
ritardando un una dínamica baja, que repentinamente, solo separados por un silencio de
corchea, la Coda empieza con mucha fuerza y a velocidad mucho más rápida.
Los registros del instrumento hasta aquí, fueron jerarquizados los medios, los muy
agudos y graves aún no tienen relevancia musical por el momento. Es decir, si escuchamos
registros agudos y graves del piano, estos rápidamente acuden de nuevo al registro medio.
Figura 23 - Tema B, de cc. 50 a 55. Luego, desde el mismo compás 55, siendo un levare, empieza la Coda.
Coda:
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Figura 24 - Coda, esta inició en el último compás de figura anterior. Aquí, de cc. 57 a 64.
DESARROLLO (Generalidades)
Esta sección inicia en el compás 72, como lo muestra la figura 25. Oímos elementos de Tema
A de Exposición, construyendo una variación del mismo en textura de homofonía vertical y a una
dinámica de Piano. Nótese que esta homofonía, se basa en una melodía que va por terceras
intervalicamente y octavadas, respectivamente.
A partir del c. 76, nos encontramos con una variación de Tema A nuevamente, pero a modo
de desarrollo fugado de los elementos, repartiéndose las voces en distintos registros e
intercambiándolos entre sí.
Curiosamente, esta parte de la obra comienza en la tonalidad de Sol menor.
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El Desarrollo continúa con el progreso fugado enunciado anteriormente. En el último compás
de la figura 26, escuchamos un retorno a la tonalidad principal, Do menor.
En estas instancias, cabe mencionar que el compositor se sigue valiendo de células rítmicas
empleados a lo largo de toda la obra, reciclándolas de varias partes de la Exposición para poder
desarrollar aquí el Tema A.
La dinámica en esta mitad, va en aumento.
Finalizando esta sección, la dinámica es bastante Forte. Armónicamente acude a todos los
compases a el uso de acordes de séptima disminuda de otras tonalidades, es decir, efectivos.
Estos pasajes parecen ser nuevos, elementos propios del Desarrollo, a modo de final para dar
pie al inicio de la Reexposición de este Allegro de Sonata.
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REEXPOSICIÓN
Tema A’
Dicha sección empieza con una gran variación del mismo Tema A de Exposición, ya
que el primer compás realiza la armonía de La bemol mayor, pero que, luego, al siguiente
compás ya retorna a la tonalidad principal, tonalidad la cual acababa el Desarrollo.
La melodía se encuentra octavada y con una dinámica más fuerte que en Tema A.
Hacia su final, realiza cambios texturales, melodías a dos voces por contratiempo
entre ambas manos. Finaliza esta parte en la tonalidad e Fa menor, por medio de la
articulación de yuxtaposición.
Figura 28 – Inicio de Tema A’ de Reexposición, desde segundo compás del primer sistema de la imagen.
Puente’
Este puente se presenta similar al de la Exposición, pero, con más densidad rítmica,
más notas agregadas. Sigue manteniendo su textura contrapuntística nombra en el anterior
Puente.
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Empieza en la tonalidad de Fa menor, y termina en la tonalidad de Sol, pudiendo ser
mayor o menor.
Nuevamente los acordes de séptima disminuidas secundarios son muy relevantes, en
especial para dar colores armónicos a la obra.
Figura 29 – Inicio de Puente’ de Reexposición. Inicia desde el tercer compás del primer sistema, cc. 100 a 106.
Tema B’
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Tema B’’, extensión/desarollo
Beethoven se toma la molestia ahora de expandir un poco más este tema, valiéndose
de elementos totalmente nuevos para la obra.
Es aquí, donde al finalizar, antes de ir a la Coda, donde retoma el modo menor de
Do.
Coda’
La coda final del primer movimiento de esta sonata, es más extensa que la de
Exposición. Expone características similares a anterior Coda.
En los tres últimos sistemas, figura 33, notamos el cambio de modo para que este
movimiento termina en Do mayor, dinámicamente diminuendo hasta un Pianíssimo. También
se observa un cambio de textura, el de homofonía vertical y melodía con acompañamiento
hacia sus últimos compases.
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Figura 32 – Inicio de Coda’, cc. 132 a 135.
Figura 33 – Final de primer movimiento, últimos tres sistemas, cc. 150 al fine.
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Conclusión
Es quizá la diferencia más fácil de encontrar. Los compositores emplean la forma sonata
clásica. Las subdivisiones de las secciones de Exposición y Reexposición son diferentes, presentan
los temas y codas de maneras poco usuales en la forma sonata. De todos modos, ambos respetan la
forma, debido a que lo primordial de esta forma compositiva es que haya Exposición, Desarrollo y
Reexposición, donde en Exposición presente un Tema A y Tema B.
En cuanto a Beethoven, es el ejemplo que nos permite con más facilidad determinar las frases
de las secciones, lo que significa que es el que más respeta la forma tradicional, escribiendo los Temas
A y B separados mediante un claro pasaje modulatorio denominado Puente. Al finalizar la primera y
última sección, escribe codas que marcan con claridad la finalización de la sección o movimiento.
En Chopin, las frases en la primera y última sección son distintas, es decir, por ejemplo, cada
tema presenta cuatro frases diferentes, sin presentar un Puente claro entre ambas. Se considera que la
última frase del Tema A es el Puente hacia el Tema B, pero esta frase ya presenta la tonalidad de
Tema B, lo que remite a que la tonalidad de planteó con anterioridad a esta. Algo similar sucede con
la última frase de B, considerándose ésta como una Codetta hacia el inicio del Desarrollo.
Chopin, reexpone desde el Tema B, ausentando por completo el Tema A. Claramente esto
nos deja con la incertidumbre y a nuestra hermenéutica de considerar el Tema A solo como una
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introducción o no. El allegro de sonata lo cierra con una Codetta nueva, sonando luego de terminar
la frase cuatro del Tema B que dijimos que tenía función de coda anteriormente en Exposición.
2 –Planteamiento Armónico/Melódico:
Chopin plasma en su composición un carácter melódico más variado (o podría decirse que
menos clásico y más romántico), pasajes virtuosos con velocidad que conllevan cromatismos y saltos
interválicos disminuidos y aumentados. Las células rítmicas tanto melódicas como armónicas son un
poco más variadas que las de Beethoven. El empleo de acordes disonantes en tiempos fuertes, como
los acordes de novena y séptima disminuida, son de uso frecuente en el desarrollo de su música. El
carácter clásico no es percibido en casi ningún aspecto, más allá del de la forma.
Beethoven, con tendencia a un estilo cromático y disonante propio del estilo romántico, aún
conserva el estilo clásico en cuanto a su planteamiento armónico y melódico se refiere. La
introducción es la parte musical quizá más cercana al estilo romántico, empleando una secuencia
ómnibus y acordes efectivos disonantes hacia otros tonos ajenos a la principal.
Figura 34 – Ejemplo de escritura en la Sonata de Chopin. Variación en células rítmico/melódicas y textura; cc 60 a 67.
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Figura 35 – Ejemplo de escritura en la Sonata de Beethoven. Compare con figura 34, aquí, claramente notamos una
regularidad más estable en cuanto al empleo de células rítmico/melódicas y textura; cc. 36 a 41.
Figura 36 – Introducción de Sonata de Beethoven. Compare con figura 34. Encontramos un grado de similitud más
interesante. La secuencia ómnibus se encuentra en el tercer sistema de la figura en cuestión; cc. 1 a 9.
Este punto viene de la mano del anterior, debido a que también se basa en la utilización
rítmica y de textura en las frases sobre ambas obras, pero, sin focalizar la armonía y melodía.
En las siguientes figuras, (como también en la escucha de las sonatas y en la visualización
general de las partituras de las mismas), notamos que Chopin le da más importancia a la
independencia de las voces, ya sean de acompañamiento o melodía principal, o, si se trata de una
textura de desarrollo vertical. El compositor polaco emplea una variedad rítmica que propone una
sonoridad más densa pero clara en la mayoría de su allegro de sonata, que, junto a la variedad
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dinámica también, conmemora una composición donde la independencia de los sonidos adjuntos es
digna de apreciar con detenimiento.
Figura 37 - Ejemplo de voces y ritmos empleados por Chopin. Nótese que las tres y cuatro voces empleadas tienen
independencia máxima, tanto en su desarrollo por intervalos, como por sus ritmos diferentes; cc. 32 a 37.
Figura 38 - Ejemplo de voces y ritmos empleados por Beethoven. Las voces tienen un cierto grado de independencia, pero no
llegan a su totalidad. En momentos puede percibirse una misma melodía por terceras u octavas, o una segunda melodía con
el mismo pulso, pero con tiempos más lentos o rápidos; cc. 104 a 112.
Finalizando este trabajo de investigación, se puede decir que las principales diferencias entre
ambas obras son la del estilo de cada compositor. Es decir, ambos utilizaron la misma forma
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estructural, texturas similares, modulaciones, acordes disonantes, etc.; pero es primordialmente el
empleo de técnicas diferentes de ejecutar la obra en el piano las que las hace distintas entre sí.
Por ejemplo, como se menciona en punto tres de esta Conclusión, cuando ambos plantearon
una textura homofónica vertical, utilizaron registros diferentes, ritmos menos o más variados, alguna
voz se independiza sobre todas o no, etc. O en el caso de las voces en las texturas contrapuntísticas
que ambos emplean, donde uno realiza más variación rítmica que el otro, generando distintos
contrastes y expresiones más allá de que hayan utilizado la misma textura.
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Bibliografía
Zamacois, Joaquin; “Curso de formas musicales”, España; 2002; Editorial IDEA BOOKS,
S.A; ISBN: 84-8236-235-6;
Bas, Julio; “Tratado de la forma musical”; Buenos Aires, Argentina; 2010; Editorial Melos
Ediciones Musicales S.A; ISBN: 9-789-502201689;
Kuhn, Clemens; “Tratado de la forma musical”; España; 2003; Editorial IDEA BOOKS,
S.A; ISBN: 84-8236-281-X;
“A study of Chopin’s piano sonata No. 3 in B minor, Op. 58, with suggestions for performance”;
Janida Dhuvabhark, 1992; The Ohio State University;
“https://etd.ohiolink.edu/!etd.send_file?accession=osu1164135970&disposition=inline”;
extraído el 20 de Mayor del 2019.-
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