UNIVERSIDAD TECNOLOGICA DE HONDURAS
SAN PEDRO SULA, CORTES
Asignatura: Macroeconomía
Trabajo: Caso Harvard
Catedrático: Lic. Johana Mejía
Integrantes:
Angie Suzeth Ramírez 201720010234
Hiliana Aguilar 201910010207
Katia Benegas 201620010350
Lourdes Díaz 201620010373
Nusly Rodríguez 201420010291
Rubén Aguilar 20191001044
El Déficit de Cuenta Corriente de EE. UU en 2005
Inversionistas y políticos se enfrentaban al reto de decidir cómo responder al
desequilibrio económico mundial, ejemplificado por el déficit de cuenta corriente en
los Estados Unidos.
1998 el déficit estadounidense de cuenta corriente era equivalente al 2,4% del PIB,
para el 2004 representaba el 5,7%, sin mostrar señal de disminuir. Los déficits
anuales de cuenta corriente venían acompañados de grandes entradas de capital
proveniente del exterior, los extranjeros financiaban el exceso de gasto de EE. UU
en relación con sus ingresos. La mayoría de los formuladores de políticas de EE.
UU le restaban importancia a los ingresos implícitos en el déficit de cuenta corriente
y en el PNII, lo miraban como que solo reflejaban el crecimiento estadounidense
como destino de inversión mundial. Otros especialistas lo miraban como hipotecar
el futuro de los Estados Unidos, en favor del consumo presente, y alegraban que
las postergaciones del ajuste para poner fin a los desequilibrios externo solo
estadounidense solo aumentaría la severidad del ajuste final inevitable. Se hablaba
de un 75% de que surgiera una crisis de moneda dentro de los Estados Unidos.
9 se encontraba industrializando fue que el déficit de cuenta corriente se encontraba
cerca de los niveles que exhibían en el siglo 21, paso a representar el -22% del PIB
que fue en 2004, era común encontrar grandes desequilibrios económicos, los
académicos encontraban que le patrón oro funcionaba como sello de aprobación
para los países que emitían deuda soberana. El principal enfoque fue en el capital
de inversión a largo plazo. Después de un serio pánico financiero en 1907establecio
el Banco de Reserva Federal de EE. UU con el objetivo de brindar una moneda
elástica para establecer una supervisión más eficaz de la banca de los Estados
Unidos.
Durante el periodo de las guerras entre 1914 a 1939, los países limitaron el comercio
y la inversión internacionales mediante aranceles y controles de capital. Además,
de la inflación que existía en Europa y los altos niveles de deuda de Europa con
Estados Unidos no se pudo volver al patrón oro anterior. La economía
estadounidense se derrumbó cuando un asedio contra dos grandes bancos resulto
en la quiebra de 10000 bancos. A partir de la segunda guerra mundial 44 países se
unieron a Brenton Woods, para establecer un nuevo régimen monetario mundial.
Por lo que se aceptó que el dolor fuera convertible a oro y en 1945, los estados
unidos superaron a Gran Bretaña como el principal tenedor de activos
internacionales y se convirtió en el nuevo banquero del mundo.
A partir de 1958, las autoridades monetarias estadounidenses creían que en
Estados Unidos había d Los problemas asociados con el déficit de pagos oficiales
se vinieron exacerbados por la expansión económica estadounidense. En 1965 la
economía estadounidense comenzó a recalentarse y la inflación empezó a subir,
ante los grandes aumentos de gasto social y la intensificación de gastos militares
que apoyaban la guerra de Vietnam. La compra de dólares aumento la oferta
monetaria interna en el exterior, lo que llevo a la inflación en los países extranjeros.
En 1971 la balanza comercial estadounidense se volvió negativa por primera vez
desde 1893. Ante los bajos rendimientos que ofrecían los activos en dólares y
preocupados por una posible devaluación futura del dólar.
En 1973 las monedas del mundo comenzaron a flotar independientemente, luego
vino una recesión mundial, cuando se intensificaron las presiones inflacionarias,
exacerbada por la crisis petrolera de 1973.
Déficits Gemelos de la Década de 1980
La cuenta corriente estadounidense cambio su curso espectacularmente en la
década de 1980. Con el inicio de la presidencia de Ronald Reagan, se redujeron los
impuestos y se aumentó el gasto en defensa, en un esfuerzo por estimular un
crecimiento impulsado por la oferta en la estancada economía estadounidense. A
fin de impedir que la economía se recalentara, la Reserva Federal mantuvo
elevadas las tasas de interés.
El dólar revalorizado volvió más caras las exportaciones estadounidenses para los
extranjeros y más baratas las importaciones para EE. UU, lo que hacía que el déficit
comercial se abultara cada vez más. Las tasas de crecimiento económico de los
socios comerciales de EE. UU se desaceleraron, lo que implicaba que los
extranjeros demandaban menos exportaciones estadounidenses, en tanto que los
EE. UU demandaban más importaciones.
En el mismo periodo, el déficit presupuestario del gobierno aumento del 2,8% al
4,8% del PIB. Los déficits de la cuenta corriente y del presupuesto fiscal llegaron a
conocerse como los “Déficits Gemelos”.
Los mayores impuestos, el mayor crecimiento y el menor gasto de gobierno
ayudaron a reducir el déficit del impuesto fiscal. Al mismo tiempo el crecimiento del
PIB en el resto del mundo aumento. Para 1989, a consecuencia de los continuos
déficits de cuenta corriente, la PNII de EE. UU, resulto negativa, implicando que en
el país se había vuelto un deudor neto con el resto del mundo.
Nueva Economía A Finales De La Década De 1990
Para finales de la década de 1990, parecía que los “Déficits Gemelos” se habían
separado. La inversión de las empresas aumento espectacularmente sobre todo en
las tecnologías de información, del 5,5% del PIB en 1992 al 8,6% en 2000. Las bajas
tasas de desempleo, la creciente riqueza y las estimaciones optimistas de la renta
futura llevaron a un mayor gasto de consumo y menores tasas de ahorro en los
hogares. Pero esto fue insuficiente para cerrar la creciente brecha entre la inversión
privada y el ahorro privado interno.
Como lo describe el gobernador de la junta de la Reserva Federal, “Saturación
Mundial Del Ahorro”, impulsada por factores demográficos. Los inversionistas
extranjeros, atraídos por los rendimientos del capital y los aumentos de
productividad que crecían rápidamente, optaron por invertir parte de sus excedentes
de ahorro en los Estados Unidos. Las entradas de capital extranjero se enfocaron
cada vez más en las inversiones del sector privado, ayudando así a financiar la
creciente innovación y productividad de la “Nueva Economía”.
Desequilibrios de la balanza de pagos y que no había liquidez.
Cambió de Trayectoria
El comunista y presidente de la universidad de Harvard Larry sumner, utilizó el
término “ balanza de terrorismo financiero para referirse en la situación en la
cual estados unidos confía en que continuaría el financiamiento en vista del que
le costaría el resto del mundo no financiar el déficit de cuenta corriente
estadounidense
Se reconoce la manera generalizada que el constante desequilibrio comercial
entre Asia y los Estados Unidos es decir que los ahorros asiáticos financia el
consumo estadounidense, no se pueden sostener y que podrían potencialmente
plantear un riesgo sistémico al sistema financiero mundial.
Las importaciones estadounidense proveniente de China estaban aumentando
25% al año en total se pronosticaba que las importaciones estadounidense
provenientes de la cuenta del Pacífico aumentarían del 4.2% del PIB en 2004 al
6 % en 2008.
En 2004 y 2005, se estaban intensificando las presiones proteccionistas pues el
congreso Introdujo leyes para imponer aranceles de hasta 27 % a los bienes
chinos , en un esfuerzo por presionar a China para que revalorizara su moneda .
Se estimaba que al mantener el déficit de la cuenta corriente en el 5 % del PIB
implicaría que el PNII finalmente se estabilizaría en 83 % del PIB
Los analistas también observaban que los pagos de renta asociados con la
creciente masa de obligaciones financieras externas , que tenían que pagarse
en la producción corriente se volvieran cada vez más difíciles efectuar para los
estados Unidos , los economistas estimaban que los pagos netos de interés
podrían llegar a más de 2,5 % del PIB en 2010 si persistían los déficits
elevados de cuenta corriente.
El ecosistema de berkeley observaron que mientras los bienes no
comercializados representaban la mayor parte de la producción estadounidense,
una aguda contracción de las importaciones netas un cierre significativo de la
cuenta corriente estadounidense llevará a un gran ajuste del tipo de cambio
bajo de los escenarios verosímiles, más específicamente los economistas
hicieron el cálculo aproximado de una depreciación adicional del 10 % del dólar
representaría una transferencia de 5 % del PIB estadounidense del resto del
mundo hacia los estados Unidos.
Respuesta Normativa Mundial
Al conocer que los déficits de la cuenta corriente estadounidense planteaban riesgos
mundiales, muchos comentaristas hicieron un llamado para que los países
dependieran menos de las expansiones de la demanda interna estadounidense
para apoyar su propio crecimiento.
Un declive en las importaciones de petróleo también ayudaría a la cuenta corriente.
El déficit en la cuenta corriente se ha reducido desde un máximo nivel de un 6,2 por
ciento del PIB en el cuarto trimestre del 2005, en parte debido a un incremento
significativo en el volumen de exportaciones petroleras.
En el cuarto trimestre, las exportaciones de bienes y servicios subieron un 2,5 por
ciento, a 785.200 millones de dólares, mientras que las importaciones se elevaron
sólo un 0,7 por ciento.
El superávit sobre ganancias se elevó a 64.400 millones de dólares desde 59.100
millones de dólares en el tercer trimestre. Las transferencias unilaterales netas
cayeron a 31.600 millones de dólares desde 34.000 millones de dólares.
En otro reporte, la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA, por su sigla en
inglés) dijo que su índice desestacionalizado de la actividad de solicitudes de
hipotecas, que incluye tanto compras como refinanciación, bajó un 1,2 por ciento en
la semana terminada el 14 de marzo.
El índice desestacionalizado de solicitudes de refinanciación de la MBA bajó un 1,3
por ciento, mientras que el de solicitudes de préstamos para comprar viviendas -un
importante indicador de ventas de casas- cayó un 0,9 por ciento.
La tasa de interés para las hipotecas con tasa fija a 30 años promedió un 4,50 por
ciento la semana pasada, una caída de 2 puntos base desde un 4,52 por ciento la
semana anterior.
El sondeo cubre más de un 75 por ciento de las solicitudes de crédito hipotecario
residencial minorista de Estados Unidos, según la MBA(Master of Business
Administrativo)