Transformación Educativa en Venezuela
Transformación Educativa en Venezuela
Tenemos que abrirle espacio a la escuela de la liberacin y del trabajo, la escuela de calidad que se revisa y
reflexiona, la escuela que se centra en la atencin integral de los nios y nias, que parte de sus intereses, que
construye un futuro mejor para esta Patria. El camino de transformacin requiere mucho pensamiento, mucho
estudio y mucha accin. Necesita de comunidades educativas activas, movilizadas y comprometidas con la
educacin de sus hijos e hijas. Maestras y maestros que asuman un rol protagnico en empujar, hacer concreta
y viva la transformacin.
Como la transformacin educativa requiere su tiempo, hay que comenzar ya. Estamos en un proceso de
transformacin curricular, de transformacin institucional, de desarrollo de nuevas condiciones de trabajo y una
formacin permanente de las y los docentes. Pero las concreciones, en la vida diaria, en el aula, en la escuela,
tienen que ser obra de nosotras y nosotros mismos, los maestros y maestras venezolanas, de nuestras
reflexiones, nuestra comprensin de los procesos educativos, nuestra disposicin a arriesgarnos a transformar...
La formacin que queremos no la vamos a lograr con lecciones tradicionales, de sas que combinan las
explicaciones breves con los interrogatorios. No lo vamos a lograr con cuestionarios para responder copiando
del libro. Ni siquiera con actividades prcticas, cuando estas se hacen siguiendo instrucciones paso-a-paso, con
escasa reflexin de los estudiantes ante, durante o al final del proceso.
En este sentido los detonantes son concebidos como ideas, propuestas o tareas que tienen como propsito
familiarizarnos con mltiples y diversas realidades del contexto en el que interactuamos, adems permiten
convertirlas en experiencias transformadoras y significativas para enriquecer los procesos de aprendizaje.
Se estima que los detonadores despiertan inquietudes, interrogantes y acciones en la formas diversas de
concebir algunos temas que pueden resultar en actividades ms atractivas y placenteras al estudiante.
Estos intentan que nos problematicemos y nos confrontemos con nuestro quehacer pedaggico...
Proponemos en esta lista 15. Antes del inicio del trabajo con los colectivos pedaggicos en
los estados, prometemos desarrollar otros.
Son ideas para discutir y reflexionar. Para que se nos ocurran otras ideas. Par ir dndoles cuerpo y
plantearnos cambios en nuestra prctica pedaggica, acordes con nuestras convicciones, que
estemos dispuestos y dispuestas a emprender.
N 1. Podemos mandar tareas para la casa que se puedan hacer en familia y con placer?
Podemos iniciar una discusin sobre esta idea, presentando y discutiendo esta noticia:
Los alumnos son de escuelas pblicas en Espaa de nivel primaria, secundaria y Bachillerato.
       Espaa es el quinto pas con la mayor carga de tareas para los estudiantes despus de Rusia, Italia,
       Irlanda y Polonia, 6.5 horas a la semana frente a una media de 4,9, segn la edicin 2012 del informe
       PISA de educacin, elaborado por la OCDE.
       En cambio, en Finlandia y Corea del Sur, dos de los pases con mejores resultados segn el informe
       PISA, el tiempo promedio que le dedican a las tareas es inferior a tres horas.
                                                                              Tomado de: ciudadania-express.com
Para hacernos una idea ms completa de los motivos de la huelga de los deberes, agregamos un
fragmento de otra noticia al respecto:
      "El tiempo del fin de semana no es de la escuela, es de la familia", enfatiza el secretario general de
      Ceapa, Jos Luis Pazos, en declaraciones a Efe TV, sobre una convocatoria que comienza maana y
      que no est exenta de polmica, ya que la rechazan varios sindicatos de maestros y la asociacin de
      padres Concapa (mayoritaria en la educacin privada).
      La polmica existe en Espaa desde hace tiempo, ya que muchos padres critican la excesiva carga de
      tareas escolares que los nios tienen encomendados en su tiempo libre y que, segn el 48,5 % de los
      padres, afectan de forma negativa a su vida familiar, segn un estudio de la propia Ceapa.
Este tema de las tareas escolares, puede abordarse de otros puntos de vista, como los recogidos en
este reportaje sobre los deberes escolares, donde se comenta la tesis de la profesora catalana
Natalia Surez Fernndez:
      (...) El estudio tom como base un compendio de cinco publicaciones cientficas (...). Natalia Surez
      Fernndez realiz adems dos estancias de tres meses en el Center on School, Family and Community
      Partnership and the National Network of Partnership Shools (NNPS) de la Johns Hopkins University de
      Baltimore (EEUU) (...). De hecho, una de las recomendaciones de su trabajo es tomar como ejemplo este
      centro a la hora de poner en marcha medidas en el campo de los deberes escolares.
      La Universidad de Oviedo contina en esta lnea de investigacin con dos grupos de las universidades
      de A Corua y de Minho, en Portugal, (...). Un nuevo estudio que este equipo acaba de publicar en
      Contemporary Educational Psychology, una de las revistas americanas ms prestigiosas, indica que los
      deberes que ms contribuyen a un buen rendimiento matemtico son aquellos que requieren
      del alumno aplicacin a contextos y situaciones distintas a las que aparecen en los libros. Es
      decir, tareas no repetitivas y con la intencin de probar si el estudiante ha comprendido y es
      capaz de usar el conocimiento que se est trabajando en clase. En resumen, vale ms poco y
      bueno que mucho y superfluo.
      El estudio revela que las labores para casa son ms tiles cuando los nios ya tienen cierto grado de
      autonoma (...)
      La controversia sobre las tareas de los alumnos salt a la opinin pblica en 2006 despus de que una
      madre estadounidense publicara un libro titulado The case against homework, una lucha contra las
      tareas para casa en Primaria, que hace alusin a los escasos beneficios de los tr abajos escolares. El
      libro incluye afirmaciones tan impactantes como que las tareas son una de las causas de la obesidad
      infantil porque privan a los nios de la prctica del juego y del deporte.
En Nuestra Amrica, este es tambin un debate abierto, como lo demuestra la siguiente nota de un
diario mexicano:
      Sin duda el modelo educativo de nuestro pas (recordemos que habla de Mxico) no ha dado los
      resultados esperados, a pesar de las modificaciones constantes que se han dado a los programas de
      estudio e incluso con todo y Reforma, seguimos reprobando en este apartado. Qu es lo que estamos
      haciendo mal?
      Ello, tras los argumentos que el Ministerio de Educacin de Ecuador present ante esta instancia,
      afirmando y tras varios estudios, que los nios son mejores estudiantes cuando no invierten tanto tiempo
      en tareas extraoficiales, de ah que surge este llamado por parte de la OMS para que se eliminen las
      tareas para alumnos en primaria en el mundo.
      El Ministerio de Ecuador por lo pronto, ha decidido reducir las horas de trabajo en casa debido a que los
      padres de familia as lo solicitaron, por lo que en aquella nacin esto se aplicar a partir de enero de
      2017.
      De acuerdo con las investigaciones realizadas desde 1989 por Harris Cooper (Investigador del
      Departamento de Psicologa de la Universidad de Duke), los alumnos comprenden mejor los temas
      dentro del saln de clases, que dejndoles tareas, pues esto slo les quita tiempo, segn arguye, para
      realizar actividades que tambin son parte de su desarrollo.
      Para lograr que las tareas sean eliminadas, se han llevado a cabo pruebas que demuestran que los
      estudiantes son mejores si slo invierten una hora en las labores extraoficiales que los que le dedican
      cuatro.
      ... De verdad, mi mujer que es maestra cuando llega a la casa se consigue con que tiene que ayudar a mi
      hija por varias horas a terminar la tarea, y a veces se queda la nia despierta hasta que yo llegue, porque
      las tareas de Matemtica son muy difciles o, por lo menos no las entiende... Los sbados se nos enreda
      el da y no termina las tareas que se pasan para el domingo y se terminan, entre una cosa y otra, en la
      noche... No queda tiempo para la vida familiar, y terminamos teniendo el sndrome del domingo por la
      tarde, en que empezamos a sentirnos culpables por cualquier distraccin, porque ya viene el lunes y
      todava no est listas las benditas tareas. Creo que afectan la vida familiar y no nos dejan ni siquiera ir al
      parque o salir de la casa a pasear tranquilos... No dejan el tiempo para que los nios sean nios...
No son, por supuesto, recetas, pero he aqu algunos elementos para reflexionar e imaginar
otra manera de hacer las cosas. Como insistiremos en cada tema, se trata de avanzar en
aquellas cosas en las que creamos, que se identifiquen con nuestras convicciones
pedaggicas y que nos sintamos listos para poner en prctica.
N 2. Es importantsimo cantar en el aula, las canciones son uno de los usos sociales de la
lengua y la lengua escrita.
         En la actualidad, nadie pone en duda las infinitas cualidades que posee la msica en la educacin de los
         nios, lo que hace de ella que se convierta en un elemento cotidiano en la vida de los seres humanos. El
         nio y la nia, desde que nacen, entran en contacto con el mundo sonoro que les rodea, dentro del cual
         se produce abundante msica dirigida expresamente al mundo infantil con diferentes finalidades. (...)
Sin duda, el canto, sea cancin de cuna, romntica, joropo, polo, pera o galern, es una actividad tan
humana y hermosa, que no necesita explicarse su valor. Slo por eso debera estar en la escuela
presente todo el tiempo. Pero adems de las ventajas educativas enumeradas (contacto con la
cotidianidad, participacin en la cultura, expresin de sentimientos, disfrute esttico, contacto con el
entorno, recurso accesible, conciencia de uno mismo, aprender a usar la voz), tiene una estrecha
relacin con la adquisicin de la lengua escrita. Como seala Prez Corts 2
1
  . Camara Izagirre, Aintzane, La actividad de cantar en la escuela: una prctica en desuso. Revista de Psicodidctica [en
linea] 2004, ( ): [Fecha de consulta: 18 de noviembre de 2016] Disponible en: ISSN 1136-1034
2.
 Prez Corts, Sergio. Leer, or, cantar. El lector en la antigedad. Alteridades, vol. 10, nm. 20, julio-diciembre, 2000, pp. 117-127.
Universidad Autnoma Metropolitana Unidad Iztapalapa Distrito Federal, Mxico.
            ... cantar es un medio de amplificar y proyectar la voz, y sirve para hacerla ms articulada y audible.
            Cantar es tambin un estilo solemne de leer, (...) Adems, cantar es el medio ms efectivo de
            impresionar al odo y a la memoria con aquello que es ledo, porque con sus entonaciones, pausas y
            ritmos, el canto provee una va ms gratificante para el oyente (...). Es la estrecha asociacin entre
            lectura y canto la que hizo que en los primeros siglos cristianos la figura del lector y la del cantor se
            confundieran. No fue sino hasta el siglo IV D.C. que surgi el oficio especfico de cantor...
La cancin guarda en s algunas de las propiedades de la lengua escrita. Por una parte, a diferencia de
lo dicho en una conversacin, el texto de una cancin se recuerda y se difunde mucho ms all del
momento de su produccin. En segundo lugar, al componer una cancin se planifica, corrige y revisa el
lenguaje, de manera que la letra de una cancin se diferencia claramente de un texto oral espontneo,
pues ha sido revisado por el autor antes de ser comunicado y supone un compromiso similar que el
texto escrito. Y adems, la letra de una cancin (y parece que se llama letra precisamente porque es
como un texto ledo, en que se reproducen palabras escritas por otro) no requiere para escucharla o
cantarla de la presencia del autor, de sus gestos complementarios o de sus explicaciones.
Cantar es una forma de leer. Y eso lo entienden quienes quieren cantar y ensayar una cancin, por lo
que muchas veces se recurre a escribir, copiar o reproducir la letra de la cancin. La cancin que se
canta en la escuela, que el nio o la nia cantan y disfrutan, necesita escribirse y la puede ensear en
la casa para que otros la conozcan, la conserven y la canten. Es un texto con sentido que vale la pena
copiar y leer. No como las repeticiones de letras y slabas y las frases artificiales de las cartillas.
N 3. El dibujo libre y el texto libre son ms liberadores que el dibujo esclavo y el texto
esclavo
El Texto Libre es una obra clsica del maestro francs Clestin Freinet. El texto libre no es ms que
eso: textos pensados, redactados y escritos por los propios nios 3, por las propias nias. Pero, como
resalta el propio Freinet, esa idea naci desafiando una concepcin pedaggica general y universal
que est muy lejos de haber desaparecido. Una concepcin que se basa en que el nio no sabe. Las
ilustraciones que cita Freinet sobre esa vetusta concepcin pedaggica son claras:
            -Tonteras de nios... me decan los camaradas de Niza a quienes mostraba clandestina y tmidamente
            mis primeros intentos...
            - Textos de nios!, escriban en las revistas pedaggicas. Ya sabemos, por desgracia, lo que los nios
            pueden producir en su pobre cerebro si no les ayudamos ()
Estas, por supuesto, son frases de los aos veinte del siglo pasado, pero no es cierto que algunos
todava piensan as?
Como atestigua Freinet: Tenamos razones para el desaliento. No obstante, nuestro maestro
encontr quien sostuviera sus convicciones y esfuerzos:
3.
     De aqu en adelante, en este aparte, todas las citas son de El Texto Libre de Clestin Freinet
        Quin nos ha sostenido, renovando cada da la seguridad de que estbamos en el camino correcto y
       en un camino fecundo que nos reservaba reconfortantes sorpresas? Los nios!
       Nos dimos cuenta de que estbamos trabajando en un terreno slido. Los alumnos ms rebeldes a la
       enseanza tradicional a base de manuales para adultos, se aficionaron definitivamente a estas prcticas
       hechas a su medida y a esas expresiones de vida que les resituaban al fin en su medio; comenzaban a
       hablar, ms tarde a escribir; los ojos brillaban; la inteligencia comenzaba a despertar.
       Se abran ante nosotros infinitas posibilidades porque habamos reencontrado la vida. Y cada vez que
       hicimos la misma prueba de los nios, fuera de todo contexto escolstico, siempre obtuvimos el mismo
       xito total.
Freinet nos ofrece un resumen de sus avances y del valor del texto libre:
        Durante veinte aos, no sin dramticos sacrificios de dinero (para publicar los textos e imprimir el
       peridico escolar), hemos facilitado innumerables ejemplos de las riquezas que son capaces de
       ofrecernos los nios que por fin tienen la posibilidad de interesarse por su medio ambiente y de decirnos
       en la forma que mejor convenga a su temperamento -prosa o poesa, canto, dibujo, encuestas, cuentos,
       realizaciones manuales- sus verdaderas necesidades sobre las que podremos construir una
       inquebrantable pedagoga.
       Los escoliastras intentaron borrar de la vida la expresin infantil que es un encanto consustancial a la
       infancia y sin el cual no se pueden construir ulteriores conquistas. Nosotros restablecemos las vas
       naturales de las que nadie se separa sin riesgo.
       La batalla ha sido dura. Si los nios fueron ganados en su conjunto, los educadores siempre han sido
       reticentes.
()
        Los textos de nios, el pensamiento y las obras de nios, ya tienen derecho de ciudadana. Los textos
       escolares defienden speramente sus prerrogativas, pero hoy se admite que los nios puedan
       apasionarse escribiendo sus textos y leyendo las historias vivas de otros nios. Se ha consumado una
       revolucin cuyas consecuencias tendrn repercusiones importantes en el nuevo clima de la escuela y en
       el comportamiento de los educadores.
       Pero no nos engaemos. El favor del que goza actualmente el texto libre, aun en las esferas oficiales, no
       es un don del cielo, sino una lenta conquista de los educadores de nuestro movimiento, que han
       demostrado, por sus realizaciones, el esplendor de la nueva obra.
                Apasiona a los nios, y no solamente a los autores sino tambin a los lectores, sobre todo si
                 pueden, por su parte, convertirse en autores.
Unos fragmentos del libro de Francesco Tonucci, Ensear o aprender?4, nos sirven para ilustrar este
aspecto:
         La escuela tiene que renunciar a un monopolio que no le corresponde, que no es capaz de garantizar y
         que la expone a una serie de contradicciones. Debe reencontrar su funcin especfica, por otra parte
         insustituible, que consiste en permitir que un grupo de alumnos, en dinmica confrontacin y cooperacin
         recproca, junto con adultos competentes, en un lugar adecuado, desarrollen a los mximos niveles
         posibles las capacidades cognitivas de cada uno, elaborando sus propias experiencias y utilizando todos
         los lenguajes (de los expresivos a los formales) y todas las dimensiones de su propia personalidad
         (emotivas, creativas, lgicas).
         (...) la escuela obligatoria debe ser capaz de poner a disposicin de todos sus alumnos los instrumentos
         fundamentales para un conocimiento consciente, actualizado y crtico de la realidad. Debe saber ofrecer
         las motivaciones, las competencias y los instrumentos que servirn tambin maana, en un futuro que
         nosotros hoy da no podemos conocer, y en el cual no viviremos y en donde los nios de hoy debern
         poner a prueba los beneficios de la escuela.
         (...) Para ello hace falta un proyecto educativo integrado, que prevea la propuesta y la organizacin de
         experiencias significativas fuera de la escuela, a cargo de entidades no escolares y con caractersticas
         absolutamente no escolares. La ciudad, las organizaciones sociales, las asociaciones, las estructuras
         productivas y culturales pblicas y privadas tienen que redescubrir al nio y ofrecerle espacios,
         itinerarios, posibilidades de conocimiento, de contacto, de experiencia.
         Rompiendo con las viejas tradiciones acadmicos y sin imitar modelos escolares, se pueden proponer
         experiencias que ofrecer al nio como tal y en la escuela. Me refiero al parque natural, al museo
         cientfico, al museo para nios, a los laboratorios ubicados en teatros, museos, universidades, a las
         granjas-escuela, al supermercado, a la ciudad con su historia, su dialecto, su estructura urbanstica...
         Para que no se quede en mera recomendacin, Tonucci nos cuenta tambin algunas experiencias, en la
         ciudad italiana de Turin:
         La ciudad no es solamente el monstruo de cemento que ha condenado a los chicos a vivir como pjaros
         enjaulados: puede ser diferente si utilizamos los espacios que ya existen y otros que habra que
4
 . Este libro debe estar disponible en la Biblioteca de la Maestra y el Maestro en todos los Centros Locales de Investigacin y
Formacin.
recuperar con intervenciones urbansticas programadas. Adems, la ciudad es tambin su propia
historia, con todos los estmulos culturales que solamente ella puede ofrecer.
Esta es una de esas oportunidades educativas que puede ser utilizada al ms alto nivel, frente a las
cuales resulta ridcula la acusacin de tentar a las familias a abandonar a sus hijos durante diez horas
en la escuela. (...)
Apenas habamos lanzado la convocatoria y ya una sonrisa encantadora se dibujaba en los despachos
del Ayuntamiento (...) Despachos y servicios municipales estaban dispuestos con sus empresas
municipalizadas, a convertirse en oportunidades educativas. Al cabo de pocos das, un regalo-sorpresa:
el registro civil. Quin poda imaginar, aun siendo optimistas como nosotros, que el despacho del
registro civil, reunin de chupatintas de toda la vida, era una mina tan viva e interesante por descubrir y
donde excavar?
Como si no tuviera otra idea en la cabeza desde hace mucho tiempo, el concejal de Medio Ambiente nos
propone para los viernes la visita al colector en construccin. Con impermeables y cascos entramos en
galeras y trincheras. Luego, otra idea, la lectura de la seccin de la ciudad, a travs de sus vas de
alimentacin (agua, gas, luz, telfonos) y de eliminacin de residuos (cloacas).
Era obligada la presencia, original y atenta, del concejal de Cultura, que ofreca una serie de animadas
visitas y de experimentos didcticos en las bibliotecas y en los museos municipales.
Por turnos, el concejal de Hacienda nos propone una vista al mercado de fruta y verdura, y al
matadero. Abastecer una gran ciudad, qu empresa! Millones de toneladas de comida, desde la fruta a
la verdura y a la carne. Observar, apuntar, comparar calidad y precios entre el mercado y las tiendas del
barrio, y con el gran supermercado deslumbrante, rebosante de colores, de voces, de olores y de
movimiento.
Tambin el Instituto Tcnico Agrario Municipal est dispuesto a ofrecer al profesorado, personal tcnico
y la explotacin agraria anexa para llevar a cabo momentos de estudio y de actividad de los ms
estimulantes: cultivos de hierbas y rboles, mquinas, pequeas zonas cultivadas y zootecnia. Por fin,
los nios dejarn de creer que la leche la hace la Central Lechera!
(...)
Ms estimulante y emocionante -s, creo que sta es la palabra- fue todava recoger las respuestas a
Fuera los muros: arrastrados por los bomberos, inmediatamente abiertos y entusiastas, presentaron su
adhesin la Comisara, la Escuela de Alumnos Policas, la Regin Militar noroeste y la ENEL (Ente
Nacional para la Energa Elctrica), el parque zoolgico, la central de leche, la RAI (Radio Televisin
Italiana) con sus centros de produccin y la sala de conciertos, los ferrocarriles estatales con la gran
estacin Puerta Nueva. Y, para terminar, las editoriales turinesas Einaudi y SEI con toda su organizacin
y las oficinas grficas.
      (...)
      La propuesta de la administracin municipal obtuvo gran cantidad de respuestas por parte de entidades
      pblicas y privadas que ponan a disposicin recursos e ideas para contribuir a la educacin de los nios
      fuera de la escuela (...)
      Como ejemplo del valor de estas experiencias he escogido una muy sencilla, sin ninguna pretensin de
      enseanza, y por ello especialmente significativa.
      La asociacin de panaderos turineses invit a los nios de las escuelas a sus tahonas para hacer pan. La
      invitacin era, como es costumbre en este trabajo, para la maana temprano, hacia las siete, una hora
      antes del comienzo de clases. Ayudados y aleccionados por los panaderos, los nios amasaban,
      manipulaban, moldeaban los panecillos, los horneaban, esperaban que estuvieran cocidos, los cogan
      bien calentitos y se los coman camino de la escuela.
      b) Lo excepcional del horario reviste de encanto y originalidad esta propuesta, y es del todo coherente
      con la profesin que queremos conocer, la de los panaderos que, efectivamente, estn ya trabajando
      antes de que nosotros nos levantemos.
      d) Si quiere, la escuela puede partir de esta experiencia para profundizar, analizar, estudiar; pero esa
      experiencia, simple y directa, mantiene su significado y su valor: seguro que los nios que a las siete de
      la maana fueron a hacer pan entendieron cosas que la escuela difcilmente puede ensearles.
Seguro que en la escuela has visto a nios y nias llevando orgullosos sus maquetas escolares para
que les sean evaluadas, cada una ms linda que la otra. Pero en la mayora de los casos, una vez que
reciben la calificacin, la maqueta comienza a perder vistosidad e importancia para los estudiantes,
sus padres, madres, representantes o responsables. Ya no parecen tan bonitas y comienzan a
incomodar hasta deteriorarse. En la escuela dicen que tienen no pueden guardarla... y en la casa,
dnde la colocamos para que no estorbe..?
Por eso nos preguntamos cmo unos trabajos tan maravillosos pueden tener tan triste final? Por
qu es tan banal y efmero su valor? Para qu le sirve a un estudiante hacer una maqueta? Se trata
de confeccionar un proyecto de arquitectura en la escuela?
La maqueta permite que los conocimientos se capten a travs de los cinco sentidos, ayudando a que
se internalicen con gran facilidad en su mente.
A travs de la maqueta, los nios plasman lo que imaginan y ven, experimentan la recreacin de un
concepto o reproducen figuras de revistas y lminas en tres dimensiones. Esto les desarrolla su
percepcin espacial, nociones de proporcionalidad y ubicacin, comprensin de procesos, etc.
Que sus familiares los ayudan? Es cierto, y eso no est mal. Hacer una maqueta es una actividad muy
laboriosa y requiere acompaamiento durante su desarrollo, sobre todo cuando lo hace por primera vez
y su cabecita se llena de dudas, entonces la solidaridad familiar es muy importante.
Por ejemplo, si los padres, madres o familiares programan junto con los estudiantes la tarea para
varios das, ser divertido para todos. Un da para conversar de qu se trata; otro da o das a conseguir
los materiales y los dems a construir el proyecto.
Sin embargo, algunas veces se piden las tareas de un da para otro y en ocasiones son los familiares
quienes compran o hacen la maqueta, pero lo cierto es que el orgullo que se pintar en el rostro de los
nios y nias con algo hecho por ellos mismos, no tiene precio.
No ser mucho mejor que la maqueta se haga en la escuela con los materiales que tenemos al
alcance? Y si creamos una caja mgica con materiales que podamos conservar en el saln? Creen
que alguien se la pueda robar si lo que tiene la caja son palitos, tapitas, retazos de telas, peridicos,
ramas secas, semillas, cortezas de rboles, caracoles, piedras, flores.
Solamente recoger y clasificar los materiales puede ser una actividad de alto valor
pedaggico.
N 6. Cadver exquisito:
Quizs ya no se practica, pero hace algn tiempo era comn ver en las escuelas un juego de palabras
por medio del cual se creaban frases o relatos, que permitan extraer de una imagen muchas otras. Se
relaciona, como lo seala ROBERT IRWIN:
       ... con una tcnica usada por el Movimiento Surrealistas en 1925, y se basa en un viejo juego de mesa
      llamado "consecuencias" en el cual los jugadores escriban por turno en una hoja de papel, la doblaban
      para cubrir parte de la escritura, y despus la pasaban al siguiente jugador. El nombre se deriva de una
      frase que surgi cuando fue jugado por primera vez en francs: Le cadavre - exquis - boira - le vin -
      nouveau (El cadver exquisito beber el vino nuevo).
Es un juego muy similar a lo que nosotros llambamos El abanico o El acorden, ya que puede ser
jugado por un grupo de estudiantes, quienes escriben o dibujan una composicin en secuencia. Cada
persona escribe un verso sin saber lo que escribieron los jugadores anteriores. En resumidas cuentas
se combinan cosas de una idea agregando elementos de otra. Es una construccin colectiva.
       Cuando curs mi primaria era una de mis atracciones preferidas. Un momento emotivo y lleno de
       fantasa. La experiencia genera una sensacin de libertad para crear, de donde surgen temas y hasta
       relatos que, alimentados por nuestra imaginacin, resultan un divertido episodio o el inicio de historias
       maravillosas.
Como recuerda Juan Antonio Calzadilla, premio nacional de literatura(*) : La poesa suena.
       El efecto potico, la poesa de una frase, surge de un uso inusual del lenguaje. La poesa hace sonar el
       lenguaje como no suena en nuestro uso corriente (...) Nadie se detiene ante las palabras que emitimos
       todos los da. La poesa, en cambio, hace sonar el lenguaje de otra manera, hace que nos detengamos
       ante la palabra.5
Los nios pequeos pueden comenzar con pareos como los que transcribe Carmen Dez Navarro,
en La oreja verde de la Escuela:
N 7. Grandes y chiquitos:
A menudo, cuando se plantea el tema de la educacin, de cmo debera ser y cmo no debera ser, se
olvida que la educacin es el resultado de un complejo proceso social. Y el ambiente escolar, en
particular, es un espacio de rica, diversa y permanente interaccin humana, donde los diferentes
grupos etarios se funden en una masa heterognea de personalidades y posibilidades.
Sin embargo, gran parte del sistema escolar se fundamenta en la separacin de los nios por edades.
Esto se fundamenta en la idea de juntar a nios del mismo nivel. Cada nio es asignado a su grado
estrictamente segn su edad cronolgica. A cada grado se asignan pautas de enseanza, objetivos,
tipos de conocimiento y habilidades especficas.
Los que defienden esta idea de separacin tambin defienden la enseanza en serie, como en una
fbrica. Aseguran que se debe ensear a todos lo mismo, y con un mismo mtodo. Por eso desean que
sus alumnos estn todos al mismo nivel de comprensin y conocimiento.
 Pero la realidad demuestra que esto no funciona as. La madurez entre nios de una misma edad vara
de uno a otro. Dice un viejo principio pedaggico que no es saludable comparar a los nios entre s:
Pedro es ms inteligente que Arnaldo; Carla es ms obediente que su hermana; Felipe es mejor
5
 .Tomado de Crear con la palabra . Modulo para talleres de escritura y lectura de Juan Antonio Calzadilla
Arreaza. Narrador, investigador, promotor de lectura y poeta venezolano, ampliamente premiado.
deportista que Juan; Anita es ms bonita que Fabiola  Adems, en una determinada seccin de
tercer grado, por ejemplo, podra haber nios que estn tan avanzados en matemticas como los nios
de quinto grado, mientras otros nios de la misma edad estn todava en la etapa intuitiva y no pueden
encontrar ningn sentido en los nmeros que tienen que escribir en sus cuadernos. Por otro lado,
podramos encontrar que Pedrito, que est ms maduro en su pensamiento matemtico, no
necesariamente lo est en su lenguaje o en sus habilidades manuales, y viceversa.
Adems, la separacin de los nios por grados incentiva una mentalidad de competencia que es
antisocial. Puesto que, en la teora, todos deberan estar al mismo nivel, un nio que se queda atrs
se considera fracasado. Los nios compiten entre ellos por alcanzar o superar este nivel imaginario.
Los pocos que estn en la punta, desarrollan orgullo y egosmo. Los muchos que se quedan atrs, se
desaniman, pierden su autoestima y su deseo natural de aprender. En su lugar adquieren una
motivacin no natural: Estudian para no ser ridiculizados, o para no tener que repetir el ao; pero ya no
por el deseo de saber y entender. En un sistema as, los alumnos son masificados: pierden su
individualidad y su personalidad propia. Ya no valoran su propia manera de ser; ya no pueden entender
que es normal que cada nio es diferente. En vez de ver la diversidad como un valor, la ven como un
defecto. En vez de ayudarse mutuamente, compiten todos contra todos. A los nios no se les permiten
los beneficios de tener hermanos mayores y menores.
Un caso muy comn de convivencia de estudiantes de distintas edades son las escuelas multigrado,
las cuales no deben ser consideradas como soluciones de emergencia. Las escuelas multigrado
estn ms cerca del modelo familiar, y permiten a cada nio avanzar segn su ritmo individual. Los
alumnos escogen sus actividades, temas y materiales de acuerdo a su propio nivel de comprensin.
(Vea Pedagoga de la escuela activa.)
       En 1959, Goodlad y Anderson publicaron evidencia irrefutable de que el sistema de aulas por grado
       (inventado en 1847 y adaptado de un sistema militar prusiano de 1536) est equivocado. La
       Investigacin Medford de Crecimiento y Desarrollo del Nio, llevada a cabo durante doce aos por la
       Universidad de Oregon (1957-1969), demostr que entre los alumnos de sptimo grado existe una
       variacin fisiolgica de seis aos: Algunos nios de una edad cronolgica de 12 aos, tienen
       fisiolgicamente solo 9 o 10 aos, mientras otros tienen un desarrollo correspondiente a los 14 o 15 aos.
       () La variacin acadmica entre los alumnos de sptimo grado refleja una gama de diez aos en el
       rendimiento  desde puntajes correspondientes al tercer grado hasta el dcimo tercer grado segn
       exmenes tradicionales estatales. No puede existir una clasificacin de sptimo grado [basada en la
       edad cronolgica], sin embargo, sigue persistiendo hasta hoy como si fuera un edicto de los dioses.
Los grupos estables en el marco del Proceso de Transformacin Curricular permiten desde las
prcticas educativas sencillas y cotidianas ser establecido por el colectivo escolar donde los distintos
participantes pueden tener diversas edades y diversos saberes. (p.135).
No ser recomendable que la escuela promueva actividades donde participen y se integren distintos
grupos de edad?
               N 8. De qu color es el cielo? Por qu siempre usamos papel blanco?
Como dijera Henry Giroux: ...potenciar alumnos crticos de forma que estos puedan interpretar
crticamente el mundo y si fuera necesario, cambiarlo..
Por mucho tiempo hemos escuchado que los maestros son simples consumidores de conocimientos
que otros producen, de teoras y modelos que elaborados en universidades o de soluciones
prefabricadas que aparecen en los libros de texto y los materiales educativos. Su funcin queda
limitada a poner en prctica los resultados de estas teoras o a administrar los programas que otros
disean para ellos.
       ...la buena docencia dependera de ser un tcnico competente o sea, de que la persona en cuestin
       aplique adecuadamente reglas generales que contemplan todos los aspectos de la situacin... (Elliot,
       1990:177)
De manera que, darle a los maestros lectores la importancia que merecen implica tambin reconocer
que tienen cosas importantes que decir, y que valorar sus formas propias de conocimiento. El maestro
que lee posee gran capacidad de informacin, un enorme potencial intelectual y creativo, un amplio
panorama del saber, no slo para alimentar el dilogo educativo como forma de divulgar y compartir
con sus estudiantes, sino tambin como herramienta intelectual para reconstruir la experiencia, y
tomar distancia de ella para pensarla, enriquecerla o transformarla.
Pero ojo, lo que el maestro nos comunica no es simplemente el recuento de una lectura, sino el
resultado de un ejercicio reflexivo de su experiencia, en el que la lectura acta como elemento
mediador. Acaso nuestro pensamiento es el mismo luego de una lectura? La escritura no constituye
un instrumento intelectual que aquilata nuestros saberes?
En este sentido, la escuela que se asume como parte de la ciudad y que asume la ciudad como
parte de ella, es dinmica, participativa, productiva, innovadora, cultural. De manera que ese
espacio de vida, junto al conjunto de bienes muebles, inmuebles, paisajsticos, de interacciones
y manifestaciones, que se consideran relevantes para la sociedad, ya sea por su genialidad,
excepcionalidad, antigedad, etctera, es un espacio de enseanza-aprendizaje, un centro de
valores y recursos que nos ofrece una inmensa riqueza pedaggica.
Por otra parte, hay que tener en cuenta que la realidad de nuestras ciudades es tambin nuestra
realidad y en esencia, las creencias, tradiciones, organizaciones, costumbres alimentarias,
actividades econmicas, tecnologas, artefactos, preferencias culturales, etc., se configuraron
hace decenas, centenares o miles de aos. De manera que la coercin que ejerce la historia
sobre nuestro presente es determinante. La historia es un aspecto del cual ningn pueblo o
grupo humano puede prescindir y por tanto, es de obligatorio tratamiento en la escuela.
Conocemos escuelas que practican una gran cantidad de actividades educativas cuyos
objetivos pueden ser de carcter tico y de educacin para la ciudadana. Como potenciar y
desarrollar valores, formas de comportamiento en espacios pblicos, normas de trnsito y
maneras distintas de ver la realidad. Actividades que van desde la adopcin de jardines y
espacios pblicos para su mantenimiento, hasta la recogida de basura, latas y plsticos en las
plazas o en el cauce de un ro.
Alguien dijo alguna vez que la palabra es vida. Y de acuerdo con Freire educar es compartir la
palabra. Sin embargo, en muchas de nuestras escuelas hay unas reglas y un marco de
convivencia que hace de nios y nias con estas caractersticas sean etiquetados y etiquetadas
como alumnos y alumnas problema, que molestan al maestro y al resto del grupo que aprende a
callar. Cmo puede atender a las indicaciones del docente si no para de hablar? y en
definitiva, es excluido y empujado al fracaso escolar.
      Se dice por ejemplo, que el nio charlatn pone en entredicho la autoridad y la legitimidad del
      profesor. A menudo, se establece un pulso entre el nio y el adulto, (Genevive Henry). Pero el
      charlatn tambin puede provocar el rechazo de sus compaeros si les impide constantemente
      escuchar y seguir la clase.
      Por tanto sera interesante conocer Qu hay detrs de esa necesidad de expresarse
      continuamente? No sera lgico generar las condiciones para que todos pudiramos
      expresarnos, con respeto, pero sin temor?
      FREIRE Cmo puedo yo, en verdad, continuar hablando del respeto a la dignidad del
      educando si lo trato con irona, si lo discrimino, si lo inhibo con mi arrogancia? Cmo puedo
      continuar hablando de mi respeto al educando si el testimonio que doy es el de la
      irresponsabilidad, el de quien no se prepara u organiza para su prctica, el de quien no lucha
      por sus derechos ni protesta contra las injusticias? La prctica docente, especficamente
      humana, es profundamente formadora y, por eso, tica. Si no se puede esperar que sus agentes
      sean ngeles, se puede y se debe exigir de ellos seriedad y rectitud.
N 12. El grupo de salsa como grupo estable: ( Salsa? Puede ser joropo, tambores, llanera,
gaitas, tamunangue...otros):
      Nunca pude, a lo largo de toda mi vida, resignarme al saber parcelado, nunca pude aislar un objeto de
      estudio de su contexto, de sus antecedentes, de su devenir. He aspirado siempre a un pensamiento
      multidimensional. Nunca he querido reducir a la fuerza la incertidumbre y la ambigedad. Edgar Morin.
      Introduccin al pensamiento complejo. Gedisa. Barcelona, Espaa 1997 (p.23) tomado de cuadernos de
      pedagoga N 10 Proyectos estudiantiles en la escuela y el liceo. Editorial labo ratorio estudiantil. Ao
      enero 2008) autor: La Cueva Aurora.
            Esta interesante iniciativa rompe con la separacin de los estudiantes por grado, se trata
      de constituir grupos inter cursos con estudiantes de diferentes edades quienes desarrollan
      proyectos en horas especiales, segn su preferencia temtica. El grupo puede ser de cualquier
gnero musical de acuerdo a su realidad y contexto. La intencin de estos grupos heterogneos
enriquece la formacin de todos y todas.
      Este detonante nos permite como docentes realizar comparaciones, en nuestras clases si
el contexto geogrfico se encuentra cerca y hasta lejos del mar...podemos inspirar a los
estudiantes hacer un recorrido mental de como por ejemplo los nios de una comunidad
indgena en el estado amazonas, pueden imaginarse el mar...cuando ellos en su contexto viven
cerca de los caos y ros.
Si vives cerca del mar o tienen ocasin de visitarlo, pueden explorar este rico ecosistema.
Podemos hacer preguntas como las siguientes: Cmo es la playa que encontramos? arenosa,
con lodo, rocosa? Si existe arena, de tamao son sus granos?  hay olas? De qu tamao y
fuerza son? En las playas rocosas, los charcos que se forman entre las rocas son ambientes
ricos en vida animal y vegetal.  hay muestras de contaminacin en la playa estudiada?  de
qu tipo? Cuan grave es , o son los problemas?
Las notas y las calificaciones son siempre un error, como detonador, permite visualizar como la
calificacin es con frecuencia un obstculo, al menos en la escuela bsica, ya que lejos de
ayudar, entraba, crea jerarquas que enturbian el ambiente escolar. Los y las estudiantes son
ms que una nota, aunque no se les quiera etiquetar, se les termina etiquetando. La calificacin
acta adems como un perjudicial refuerzo extrnseco del aprendizaje escolar (1980, pp.(108-
109) :
liberar a los nios y las nias de la recompensa de la nota (....) significa aproximar el trabajo escolar a
los intereses, de los nios, se cree preferiblemente en los juicios cualitativos, razonados del docente que
orienta sobre lo alcanzado y lo que falta por lograr, y evitar la artificial ordenacin de los estudiantes a
partir de las notas. Estos juicios pueden ser orales y escritos. (p. 130) Ciencia y tecnologa en la escuela.
La Cueva Aurora. Editorial popular. Editorial laboratorio educativo. Ao (2006) segunda edicin.
  Tomado de: La Nueva Ciencia su desafo, lgica y mtodo. Miguel Martnez Miguelez. Editorial
                                                                                 Tillas 1999.