Decía Walter Isaacson, el mejor biógrafo que haya tenido Steve Jobs, que de los cuatro hijos del fundador de Apple, era la pequeña, Eve Jobs, la más cercana al corazón del magnate, ingeniosa y testaruda a partes iguales. Una caracter que mantiene intacto y que le ha llevado a compaginar dos pasiones: la hípica, a la que todavía dedica buena parte de su tiempo, y una carrera como modelo que empezó en 2020 y ha reactivado en 2024 tras un año de parón. Pero Eve Jobs es noticia hoy por haber confirmado en su Instagram quién es su misterioso nuevo novio, del que ya había compartido guiños en el último medio año: Harry Charles, medallista de oro en salto ecuestre por equipos en los Juegos Olímpicos de París 2024. Y que celebró así su victoria:
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Como otras exparejas de la modelo, Charles es un jinete consumado, cuyo oro en estos Juegos venía precedido de una trayectoria ascendente desde su debut en Tokio 2020. Una pasión que le viene de familia: su padre fue también medallista en los juegos de Londres 2012. Y la familia, incluyendo a las también jinetes Scarlett y Sienna, hermanas de Harry (y que acompañaban a Eve Jobs en el momento de la victoria), posee una granja ecuestre con varias sedes, la principal de ellas en Hampshire, Inglaterra, al suroeste de Londres. La medalla de Charles tiene además mérito extra, pues el jinete sufrió una doble fractura de brazo y muñeca exactamente cuatro semanas antes del inicio de los Juegos de París.
Por su parte, Eve Jobs, que en los últimos meses había ralentizado su trabajo como modelo -entre otras marcas, para Louis Vuitton, en cuyos desfiles sigue siendo una presencia constante como invitada- había reaparecido esta primavera como la protagonista principal de la nueva campaña de Enfants Riches Deprimes, la provocativa marca que fusiona moda urbana y alta costura creada por Henry Alexander Levy en 2018. Antes, Jobs ha sido presencia habitual en grandes eventos (como la Met Gala de 2022, a la que acudió vestida de Louis Vuitton) y en las páginas del corazón gracias a sus relaciones.
Primero con el jinete y empresario mexicano Eugenio Garza, con el que también conectó gracias a su afición ecuestre, en una época en la que Jobs, recién licenciada en Stanford, era habitual de concursos hípicos junto a rivales como Jennifer Gates, la hija del gran rival (y eventual salvador) de su padre, Bill Gates. Las dos siguientes relaciones de Jobs se decantaron por la música, sin embargo: primero con Harry Hudson, amigo de Kylie Jenner y autor de un par de hits melódicos entre 2018 y 2020. Y ya en 2023 con Drew Taggart, el 50% de los DJ expertos en dance comercial The Chainsmokers. Una relación que duró un suspiro y que acabó con Taggart manteniendo otro breve noviazgo con Selena Gomez. De la vida sentimental de Jobs no volvió a saberse nada oficialmente hasta la medalla de oro ganada por su pareja.
