fundamentos de
SAMUEL H. MARON
I'r,>lusor de Fi.sicoquí»iica y
Cirmia de lor Polimeros en
el Inoiluro TecnoMgico Cnsu.
MÉXICO
-
Espana
Venezuela. Colombia
VERBO^ AUTDRWDA E h ESPA&OL DF U 08RA
EN mc.<s c m E r:rnc
PRINCIPLES OF PhYSlCALCHEMiSTRY
@ T-E MACM~LAN
PJB.ISHW CO., Ihc.
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Iiic. MAIUEL ARAGONES A.
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DRA. NORAH V. COHAN
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FUNDAMENTOS DE.FISICOOU~MICA
SON PROPIED~ DEL EDITOR. NINGUNAPARTE DE ESTA OBRA
PUEDE SER REPRODUCIDA O TRANSMITIDA, M E D I M E NINGUN
SISTEMA O METODO. ELECTRÓNKOOMEC~ICO(INCLUYENDO
EL FOTOCOPIADO, U GRABACI~NO CUALQUIER SISTEMA DE
RECUPERACION Y ALMACENAMIENTO DE INFORMAC~ÓN).SIN
CONSENTIMIENTO POR ESCRITO DEL EDITOR.
02002, EDITORIAL LIMUSA, S.A. DE C.V.
GRUPO NORIEGA EDITORES
BALDERAS
95. M C x i c o . D.F.
C.P. 06040
En el prefacio de la primera edición, los autores indicaban que su
propósito al exribir un texto de fisicoquímica, era poner en manos de pmfesores y alumnos un libro moderno que abarcara los principios fundamentales de la materia, con amplitud, consistencia, solidez y claridad.
Para lograr en todo momento ese fin, cuando el conocimiento se amplía
rápidamente, ha sido necesario introducir cambios en el desarrollo de loa
temas y en el orden de presentación de la obra. Concretamente dichos cambios tuvieron por objeto lograr: (1) un tratado más riguroso, extenso y
lógico de la termodinámica; (2) un estudio m i s completo de la estructura
atómica y molecular basado en la mecánica cuántica; y 3) la introducción
de las ideas básicas de la mecánica estadística. El grado en que fueron alcanzados estos fines puede juzgarse por el contenido y por los temas de
cada capítulo. Fue necesario reagrupar y ampliar el material expuesto con
anterioridad y preparar capítulos nuevos sobre estmctura atómica, naturaleza del enlace químico, química nuclear, y mecánica estadística. Al
mismo tiempo se aumentó el número de problemas de 634 a 800, y los
nuevos despiertan aún mayor interés y son más útiles que los anteriores.
El libro se planeó originalmente para impartirlo en un curso anual completo de fisicoquímica. Sin embargo, con una selección juiciosa de su contenido, puede adaptarse a un curso semestral. Lo que debe exponerse u
omitirse depende principalmente de las circunstancias y necesidades y debe
dejarse a dixreci6n y decisión de cada profesor.
5
Los autores deseamos expresar nuestro agradecimiento a los colegas,
amigos y profesores que tuvieron la amabilidad de hacernos sugerencias y
críticas de la mayor parte del texto, y a los que nos señalaron los inevitables
errores que escaparon a nuestro estudio a pesar dc todos nuestros esfuerzos
CONTENIDO
Prólogo
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Introducción
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5
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11
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15
1
Gases y líquidos
.
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2
El estado sólido
3
La primera ley de la termodinámica
4
Tesmoquimica
5
La segunda y tercera ley de la termodinámica
171
.
6
La energia libre y el equilibrio
.
7
.
.
.
.
.
.
197
8 Contenido
7
Equilibrio químico
8
Soluciones
9
Propiedades coligativas de las soluciones
10
Regla de las fases
11
Conductancia y equilibrio iónico
12
Celdas electroquímicas
.
.
.
13
Cinética de las reacciones homogéneas
14
.
.
.
.
.
Naturaleza del enlace químico
.
.
.
Estructura atómica
.
15
16
Investigación de la estructura molecular .
17
Química nuclear
.
18
Mecánica estadística
19
Fotoquímica
.
.
.
.
.
.
Contenido 9
20
Fenómenos superficiales y catálisis
21
Coloides
lndice
.
.
.
.
.
.
.
.
Pesos atómicos
Constantes f i ~ i ~ ~ q ~ í m k c i ~
Tabla de logaritmos de cuatro cifras
.
.
.
.
.
.
803
guardo izquierda del frente
guardo derecha
del frente
guaidor porteriorer
Se llama fisicoquimica a la parte. de la química que estudia las propiedades físicas y estructura de la materia' las leyes de la interacción química
y las teorías que las gobiernan. La fisicoquímica recaba primero todos los
datos necesarios para la definición de las propiedades de los gases, líquidos,
sólidos, soluciones, y dispersiones coloidaies, a fin de sistematizarlos en
leyes y darles un fundamento teórico. Luego se establecen las relaciones
de energía en las transformaciones físicas y químicas y se trata de predecir
en qui. magnitud y con qué velocidad se producen. determinándose cuantitativamente los factores reguladores. F.n este sentido deben tomarse en
cuentl no sólo las variables comunes de la temperatura, presión y concentración, sino además los efectos de la interacción cstrecha de la materia
con la electricidad y la luz. Finalmente se debe examinar la materia misnia
en cuanto a su naturaleza y estructura, si queremos lograr un entendimiento hisico de la conducta fisicoquímica de las propiedades de los constitnyentes fundamentalrs de la materia.
Para realizar este propósito la fisicoquímica se apoya ampliamente en
la euperimentacióri, cuyos métodos y temicas desempeñan un papcl tan
importante como las leyrs y métodos físicos y matemáticos. De hecho, podemos considerar a esta ciencia que nos ocupa como un campo m dondr
la físira y las rnatriniticas se aplican ainpliampnte al cstudio y resolurión
de los problemas qiiírnicus de interés fundamental. En poscrióri de los datos
necesarios. la fisicoqiiírnira procede a correlacionarlos ciiri fines tróricos
m virtud de dos modos gcn~ralcsde ataqiic. quc son el ti.riiiorliii:iinicr> )- cl
riniliro. F.ri ?I prirncro sc iisnii las lqxs fiiii<larrirntnlir la tcirrioiliri.irriic'i
12
Introducción
para sacar conclusiones basadas en las relaciones de energía que ligan las
etapas iniciales y finales d e un proceso. Evitando las etapas intermedias de
los IxocPsos, la teriiiodinámiia nos permite obtener niuchas deducciones válidas sin conocer los detalles íntimos de aquéllas. En consecuencia, este
enfoque del problema vale para dccimos qué puede suceder, pero por su
naturaleza es incapaz de darnos información dc cómo y con cuánta rapidez
se
un cambio. El enfoque cinético exige para su operación una
descripción íntima y detallada de los procesos, y a partir del mecanismo
postulado, es factible deducir la ley del proceso total y de sus diferentes
etapas. Es obvio que el enfoque cinético del problema, es de un carácter
m i s ciplicativo, pero tanibien más complicado y dificil de aplicar. Ambos
procedimientos de abordar el problema, aparecen a lo largo de la obra.
En los ejemplos presentados, el estudiante podri diferenciarlos con mayor
claridad y apreciar su potencialidad y utilidad.
Los fundamentos de la fisicoquímica pertenecen a ambos campos: al
de la física y a l de la quimica. Al principio estas ramas de la ciencia se
desarrollaron con cierta independencia, pero en el siglo pasado se encontró
que los descubrimientos hechos en la física tenían importante confirmación
y aplicación en la química, y de aquí surgió la necesidad de establecer
un campo que tratase de la aplicación de las leyes físicas a los fenómenos
quirnicos. Fue esta necesidad la que impulsó a N', Ostwald, van't Hoff y
Arrhenius a organizar y sistematizar los temas que hoy comprende la fisicoquímica y a fundar el Zeitschrift fü7 physikalis~he Chemie, en el año 1881;
y hoy podemos considerar que esta revista inauguró la fisicoquímica como
rama de la ciencia química.
Con el estimulo de dicha publicación y nutrida por las contribuciones
de los autores mencionados, la fisicoquímica creció rápidamente. Este progreso fue estimulado por los avances de la química y la serie de hallazgos
importantes en el campo de la física, que comenzaron con el descubrimiento del electrón, e incluyen el de los rayos X, la radiactividad, el estahlecimiento de la teoría cuántica y el de los fenómenos subatómicos. Gracias
a estas contribuciones, adquirió una posición de importancia y utilidad, no
sólo para la química sino también para otras ciencias.
Por la relación que time con los principios y teorías de la química, el
estndinnte o profesional de esta ciencia debe familiarizarse con la fisicoqiiímica a fin de entender su propio tema; y lo mismo cabe decir del ingeniero químico. La diferencia principal entre un químico y un inzeniero
qiiimico es que el primero realiza sus reacciones y operaciones en peque& magnitud, en cambio el ingeniero las efectíia en escala comercial.
Para transferir una operación del laboratorio a nna planta, el ingeniero
q ~ z í ~ ~debe
i r o poseer la habilidad de aplicar los principios de ingeniería y
ccniinrriia, pero al mismo tiempo dehc imtciider tariibih la natiiralczn quim¡<-nde los proccios cnri los que csti tratando; y para eso iicccsitn la fisico-
Introducción 13
química. De hecho: el ingeniero químico ha sido descrito romo un fisicoquímico prictico; y desde este punto dc vista, muchos aspectos de la ingeniería
química sc encuentran en el dominio dc la fisicoquímica y pueden tratarse
en función de sus leyes familiares. Por otra parte, cualquier intento para
considerar a la ingeniería química como una simple tarea empirica, le resta
los atributos de una ciencia y la transforma cn un arte.
Cuanto se ha dicho de la importancia de la fisicoquímica para el químico e ingeniero químico es válido tamhién para el metalúrgico e ingeniero
metaliirgico; estos Últimos realizan iguales funcioncs que los primeros, aunque su atención está confinada principalmente a los metales. Vista así,
se aprecia claramente la posición predominante de la fisicoquímica y se
explican las valiosas contribuciones hechas a estos campos por la aplicación
de sus principios.
Finalmente, pueden también aplicarse a la física, a la geología, y a las
diversas ramas de las ciencias biológicas. Para apreciar la magnitud de su
utilidad, basta comparar un libro de química, fisica, geología o bioquimica
con otro de fisicoquimica. Entonces se comprcnderi por qué la fisicoquímica se incluye tan a menudo entre tales disciplinas y por qué puede aplicarse con buenos resultados a dichas ciencias.
1
GASES Y LIQUIDOS
Los estados de agregación de la materia son tres: el sólido, cl liquido
y el gaseoso. El sólido puede definirse como aquél en que los cuerpos poseen volumen definido y forma propia a cierta temperatura y presión. Pero:
además, para clasificar a un cuerpo sólido como tal, debe ser cristalino, es
decir, los átomos, moiéculas o iones que lo constituyen han de hallarse
agrupados en una configuración geométrica característica de la sustancia
en cuestión. Por otra parte, un líquido posee nn volumen definido pero no
forma propia, mientras que nn gas carece de ambas. Los líquidos y gases
se denominan fluidos. Un líquido, en la medida que llene un recipiente
adoptará la forma de éste, pero retendrá su volumen, mientras que nn gas
llenará siempre totalmente cualquier vasija en que se le confine.
No siempre las distinciones entre los tres estados de la materiz Eon tan
claros como las definiciones anteriores podrían hacernos suponer. Por ejcniplo, nn líquido en su punto crítico es indiferenciable dc su vapor. De
nuevo, las sustancias como el asfalto o el vidrio, aunque exhiben muclias
propiedades dc los sólidos. bajo ciertas condiciones de temperatura se hacen plisticas y presentan características que no son propias de los sólidos
puros. Por esa razón se considera que dichas sustancias son líquidos sobrenfriados con una viscosidad muy elevada.
El estado particular de agregación de una sustancia está drterniinado
par la temperatura y presión bajo la cual existe. Sin embargo, dentro de ciertos límites de temperatura y presión una sustancia puedc encontrarse
en más de un cstado a la v m , c iricliiso cn todos ellos cuando las coiidici*
ncs son muy especialcs. Así, a 1-57 r n m de HS de prcsión y a 0.010'C.
16 Capítulo 1: Gases y Iíqiiidos
coexisten el Iiielo; el agua y el vapor en forma estable. Este tópico de la
existeiicia simultinea de 10s estados se tratari más ampliamente en diferentes lugares de este libro.
GASES IDEALES Y REALES
Por motivos de discusión, con~ieneclasificarlos en dos tipos: a ) gases
ideales, y b ) pases n o ideales o reales. El gas ideal obedece ciertas leyes que
se describirin a continuación, mientras que los reales las cumplen sólo a
bajas presiones. En los gases ideales, el volumen ocupado por las propias
moléculas es insicnificante en comparación con el volumen total, y esto es
váiido para todas las presiones y temperaturas; ademis, la atracción intermolecular es ínfima bajo cualquier condición. Para los gases reales, ambos
factores son apreciables y la magnitud de ellos depende de la naturaleza,
temperatura y presión gaseosa. Resulta claro que un gas ideal es hipotético,
ya que cualquier gas debe contener moléculas que ocupan un volumen
definido y ejercen atracciones entre si. Sin embargo, con frecuencia la
influencia de estos factores es insignificante y el gas puede considerarse
idcal. Veremos después que estas últimas condiciones se obtendrán a presiones bajas y a temperaturas relativamente elevadas, condiciones bajo las
cuales el espacio "libre" dentro del gas es grande y pequena la fuerza de
atracción entre las moléculas.
GENERALIZACIONES DE LA CONDUCTA DE UN GAS IDEAL
Por el estudio de los gases se han llegado a establecer sus kyes o generalizacianes que constituyen el punto de partida de la conducta gaseosa
en cualquier discusión. Estas son: a ) la ley de Boyle, b ) la ley de Cliarles o
Gay Lussnc, c) la ley de las presiones parciales de Dalton y d ) la ley
de difusión de Graham. Otra generalización la coustituye el principio de
Avogadro, que se estudiará mis adelante.
LEY DE BOYLE
En lfi62, Robert Boyle señaló que el volumen de u11 gas a temperatura
constante disrniuiiia cuando sc aumentaba la presión a qiie estaba sonietido y que de acuerdo con los limites de su exactitud experimental, el
z~olunii~n
dc cualquier cnntidnd definida de gas a tcmprratura constante
varinbn inzcriamente a la prcsión ejercida sobre él. A esta importante gencralizacióri se le conoce como ley de Boyle. Si se expresa matemáticamente,
establec(! qur a temperatura constante 1 n 1 ;P, o qiie
-
Ley de Boyle
17
rlondc P' es el rolumen y P la ~ ~ r e s i ódel
n gas, micntras que K , es un factor
de proporcionalidad cuyo valor dependc dc la temperatura, el peso del
gas, su naturaleza: y las unidades en que se exprew, P !. V.
V-Litros
Figura 1-1.
Gráfica irotérmica
P-V de acuerdo
m01 de gas).
con la ley dc Boyle ( p i r a 1
La ecuación anterior conduce a la siguiente:
de la cual se deduce que, si en cierto estado la presión y el volumen del
:as son P, y I',,mientras que en otro son P , y V 2 , se cumple a temperatura constante:
P,V, = K , = P I V ,
La fisura 1-1 nos muestra la representación xráfica de la ecuación ( 1 )
que es la de una lainilia de Iiipérbolas donde cada una corresponde a un
\.alar difercntc de Ki y como para cada peso de gas dado K , es función
iiriicarnerite de la tenipiratura, cada c u r a es una línea isoterma, y a las
~itundasmis arriba corresponden valores niayores de temperatura.
LEY DE CHARLES O GAY-LUSSAC
(:harlt,s en l i 8 7 ohsenó que el hidrógeno, aire, dióxido de carbono y
<>xigeiiose cxpandian t-n igual proporción al calentarlos desde O0 a 8O0C,
manteniendo la presión constante. Sin r~iihargo;fue Gay-Lussac el priiricro
que, cri 1802; eiicuntró que todos los %asesaumentaban isual rolumen por
cada grado dc clcvación de tcrnpeniiira, y quc el incrcrricnto rra aproxirrindniiicnte ?h
cl voliiriirm dri Sas a O''(:, o con ~i~a!orpricisii,ri, ! 5 7 3 1 í .
Si d~si~nniiios
por I',,
cl volurnrri dc.1 ,<a\:i 0°C: y por V s u volunicn a
I<:,
eiiioriccs podrrinos cscrihir rlc :iiiio-<lo r-o11Gay-l.iissnr:
18 Capítulo 1: Gasei y líquidos
Aliora pode~riosdefinir una nuera escala de ternperatufii tal cluc p r ; i una
t dada corresponda otra establecida por la relación T =- 2 i 3 . 1 5 S- t , y
0°C por T,= 273.13; con lo cual la ccuación ( 3 ) toiiin una forma ~ i i i s
siniple
V- - T-17,
T,,
-
Esta nueva escala d e temperatura, de Keliin o absoluta: es d c irriportancia fundamental en toda la ciencia. Eri fiinciiiii de ella l a ecuación (.II
nos dice que el uolumcn de una cantidad d ~ f i n i d ade gas a preiiiin conrtante?ir dircctammle proporcional a la tcmpcrntura absoÍzitn. es d x i r
i = K,T
(5)
donde Ki~s un factor de proporrionaliilad dcti,ririinado por la p i c ~ i ó i ila~
naturaleza del gas y las unidades d r 5.. L a roiicl~isiónanterior y la ecuación ( 5 son expresioncs de la L q de Charlr-.r o dc Gay-Luisnr.
Como para una raritidnd dada d e gas. Ií? teiidri difercntcs i-aloi-ci a
distintas presioiivs, ohtendreino~lima serie de líncas rectas para <-ad:i ,mesiiin c<iiistaiite v cada ima de r,ilns es una iiobnra \rriiicánclose q ~ i i : si,
Ley combinada de los gases 19
La ecuación ( 5 ) sugiere t a m b i h quc si enfriamos un gas a OCK
( - 273°C) su \.olumen se reduciría a ccro. Sin embargo, nunca acontece
cie fenó~nenopoique, ordinariamente, mucho antes de que se alcance O°K
el gas se licúa o solidifica.
Dc nuevo se demostrará después que bajo condiciones tan drasticas no
p u d e considerarsc que la ecuación niisrria tenga validez.
LEY COMBIXAD.4 DE LOS GASES
Las dos leyes discutidas dan separadamente la variación del volumen
d e un gas con la presión y temperatura. Si queremos obtener el cambio
sinidtineo, procedei-emos así: consideremos una cantidad de gas a P,,V ,
TIy supongamos que se desea obtener el volumen del gas V , a P, y T,.
Primero comprimimos ( o expandirnos) el gas desde P, a P, a temperatura
constante T,.
El ~ o l u m e nresultante ;1 será entonces de acuerdo a la ley
de Boyle
y
Si ahora el gas a V,, P1 y T, es calentado a presión constante P2 desde
i', a i',: el estado final a P2 y T 2 tendrá un volumen V , dado por la le)- de
Charles: esto es,
Si suititniiii<isen csta relaciíin el valor de I', obtenido en la ecuación ( 6 ) ,
l.? se tr;i:?\fiii.nia cii
20 Capítulo 1: Gases
y líquidos
L a ecuación ( 8 ) es conocida como la le) combinada de loi gairi, que
nos da la relación entre la presión, el volumen y la tcmpciat~irade cualquier gas tan pronto como sca e\,aliiada la constante K. Es iicil demostsaique las leyes de Boyle y Charles son simplemente casos especiales de la
ecuación ( 8 ' . De nuevo, cuando P es constante, aqiiclla ecuación se hace
que es la 'ley de Charles
LA COR'STANTE DE LOS GASES
E1 valor numérico de la constante K en la ecuación (8) está determinado por el número de moles' del gas problema y las unidades elegidas
para medir P y 11'; pero es totalmente independiente de la naturaieza del
:a.c. La ecuación (8) nos enseña que, para una presión y una temperatura
dadas, un incremento en la cantidad de gas aumenta cl volumen y por
K es directamente
lo tanto t a m b i h la r n a ~ n i t u dde K. EII otras
proporcional al número de moles del gas. Por conveniencia esta constante puede reemplazarse por la expresión K = nR, donde n es el número de
nioles del gas que ocupa un volumen V a una presión P y temperatura T.
mientras que R es la constante del gas por mol, que es unicersal para todos
los cases, y finalmente la ecuación ( 8 ; adquiere la forma
L a ecuación (9) es la de los xasei ideales, una de las m i s importantes
relaciones en físico-qiiirnica ya que establece nna relación directa entre el
volumen, temperatura, presión y el número de moles de iiu gas, y permitc
toda clase de cálculos cuando se conoce el valor de R . Este puede liallarse
por el hecho de que 1 inol de cudquier gas ideal cn condiciones estindar.
es deiir 0°C y 1 atrnósfers de presión, ocupa un voliiirien de 22.113 litros. Si
expresamos entonces el u u l u v x n m litros y la pri,sión en ofmós~ern.~,
se cleduce de la ecuación ( 9 ) que R vale
R =
PV - 1 X 22.413
- - 0.138205 litnis-atiri grado-' niol-'
nT
1 X 273.15
Este valos de R puede risai-se úriicarneritr cimido el i-oliirneii e expresa en
litros y la presiún en atmósferas, mas para otras c~imbiriai.i«nr:sde unidades R tendrá otros valores. Así, cuando la presión sr da en atmósfri-as y el
vo~uriii.rlcn ceritÍinetrr>s cúbicos se ronvicitr m:
!
!
1.a constante de los gases
21
Conio la prcsióri es una fucrza pos unidad de área !-el volumen es el
Ixoducto de un irea por longitud, se sigue que las unidades de PV/nT son
= trabajo grado-' n i o l '
En consecuencia R puede expresarse en un conjunto de unidades que represcritan trabajo o erier:ia. Aunque en los cálculos de gases hechos en el
sistema mCtrico: las unidades anteriori:~son las de mayor utilidad, en otras
ocasiones hay necesidad de emplear otras unidades de R que usualmente
son crgios. julios y calorías.
Para obtener R en essios la presión dche expresarse en dinas por centímctro cuadrado y el volumrn en centímetros cúhicos. Para el volumen
en condirioues tipo tenemos I = 22,413 cc. De nuevo, una presión, atniosférica de 1 atm cs la de una columna de mercurio de 76 cm de altura
1- 1 cm' de sección transversal a OcC. El volumen total de dicha columna
es i 6 cc. y su masa 76 x 13.595, donde la última cantidad es la densidad del mercurio a 0%. L a presión en diiias por centímetro cuadrado será
a la aceleración de la gravedad, 980.66 cm
entonces esta masa ~ n i i l t i ~ l i c a dpor
irc-'. Al colocar estos valorcs de 1 - y P en la expresión de R: hallamos que
Y,
10; ergios grados-' mol- '
\ l i s a k n como 1 julio = 10: ergios, y una caloría = 4.184 julios, ohteneriioi tamhién
8.314
-.
- - 1.987 cal grado-' inol-'
.t.IXf
22 Capítulo 1: Gases y líquidos
Valorci de R m diferentes unidades
Tnsrn 1-1.
Presión
.%tmósferas
Atmósferas
Dindcm2
mrn H g
R en julios
R en calorías
Volumen
Temperatura
Litros
"K
cc
'K
cc
cc
"K
n
-'
0.08205 atm-litro 1 ° K )
(niol-gj -'
82.05 atm-cc ( ' K j - 1 (niol-g) -1
8.311 x l o - ; i r K j - 1 ( r n o l - g ) '
62,360 cr-mm H g ( ' E :
(mol-g) -'
0.314 julios ( ' K ) - 1 (mol-g) -'
1.987 cal ( " K )
(niol-g)
mol-S
mol-g
mol-g
mol-g
mol-g
mol-g
"K
'K
'K
-'
-'
-'
CALCULOS Q U E I W O L U C R A N LA LEY D E LOS GASES IDEALES
Esta ley puede emplearse para encontrar una cualqiiicra de las variables P, V, T o n a partir de un conjunto específico de tres de ellas. En
vía de ejemplo, snpongamos que necesitamos determinar el volumen ocupado por 10.0 g de oxígeno a 2j3C y 650 m m dc Hg de presión. A partir
de h datos conocemos que
R = 0.0821 lt-atm grado-' mal-'
La inserción dc estoi valores en la ecuación ( 9 ' nos da para rl volumen
nRT
1,. = --
P
=
0.312
x
0.0821 x 298.2
0.853
= 8.94 litros
De manera análoga, a partir de datos cspccíficos adecuados es posihle
calcular otras cantidades involucradas cn la rruación ideal de liis :ascs.
LEY DE DALTON D E LAS PRESIOKES PARCIALES
Cuando diferentes gases se introducen en el misino ricipieiitr se interdifunden o mezclan rápidarncnte. La Ir) de Dnlton d c lni $rcsiones parciales dice que a temperatura conitantr la prcsión ijercidn por u n a mezcla di.
suws en un volumen definido c i i p a l a la s u m a di. las prcsionei indiriduales que cada Ras ejercería si ocuprüe solo el i'o1umi.n total. Eri otras
palabras,
(10)
P ,.,,:,, P , 1 P' ;
P , I~
-.
Ley de Dalton 23
donde las prrsioiics iiidividiiales, P,, P,, P,: etc., se dcnomiiian jrcsiones
pnrcinlci de los gasrs i-cyjectiios. L a presión parcial de cada constitu?ente
puede mticihirce coino la presión que ejercería si estuviera aislado en el
niismo !olurnen )- a igual temperatura que en la inezcla. E n fiiiici6n d e las
presiones liaiciales la ley dc Dalton puede rstablecerse de nucxo así: L a
preiión total d e u n o mrzcia d e g a s a F S ijiual a la s u m a dt, lai jrrrinnes
pnrcia!ps n'<~los componcntcs indiridunics de 10 m ~ : c l a .
El sigificado de la le? de Dalton y el coiicepto de las presioiicr ; n r ciales se entiende con rria:~or claridad con VI ejemplo sigiiieiite: si toniisimos tres frascos de iin litro cada uno d r cllos l!i.nos con 1iidró:erio a 70
niiri de I I g de prcsiiiii, rrioiiáuido d r rai-horio a 5COmrri y riitró,oeno a
1,000 mm, todos a igual temperatura y fueran ohligaclos a ocupar un cuarto
recipiente de u n litro: la presión total dentro d e este frasco srría
y las p~esioncsde los e s e s indi\-iduales serían las prrrioiies parciales de
estos gases en la mezcla.
Consicler~mosahora una mezcla gaseosa compuesta de n, moles de un
gas, 11, moles de otro gas, y n , moles de u n tcrcero Imaginemos que el
)- temvolumen total es 11- y la tcrnperatura T. Si las condiciones de ~~resióri
peratura no son extremas, las leyes dc los gasesideales srrian i i l i d a s para
cada qas en la m e d a y obten~inospara las respectivas presiones parciales
Be acuerdo
-
roii
la Iey di: Dalton la p r & h
total se convierte en
donde n t
(11, : I
I z : - ~ i í i i i i e r ototal d i . iiiolt,s dci gas rri I:i i i i i m I ; i .
S
las I c y s <Ir Ioq ~ ; I w \ S<! l j m , ~ < I t ~ n
A p r I i r dc Ix ~ u x i Í (, 1 ~2 ; ~ \ < ~ B N , ~1uc
24 Capítulo 1: Gasec y líquidos
aplicar a las iiiczclas igualmente que a los gascs puros y cii forma idtntica.
Si dividimos las eciiaciones ( 1 l a ?- ( 1 l<-i por la ecnación 112 i se m r u r n tra que
n,
P , = -P
U3a)
ni
Las ecuaciones (13) son muy importantes en los cálculos quíniicos o de
irigcniería cpimica porque establecen una relación entre la presión parcial
y la total de un gas en una mezcla. Como las fracciones n i / n r , nilnt y
n,/n, representan los moles de un constituyente particular en la mezcla
divididos por el número total de moles presentes, estas caiitidades se Ilaman fracciones molares y se desipan con los símbolos M,,N-, N,, . . . : etc.:
respectivamente. La suma de estas fracciones molares para un sistema debe
ser igual a 1, es decir
En función de estas definiciones la presión fiarcial de cualquier compon m t e e n una mezcla gaseoya es igual a la fracción molar d e aquél multiplicada por la presión total. Esto es cierto sólo cuando la ley de los cases
ideales se aplica a cada uno de los constituyentes de la mezcla.
LA LEY DE AMAGAT DE LOS VOLUMENES PARCIALES
Una ley similar a la de Dalton es la ley de Amagat de los volúmenes
parciales.
Dice que en una mezcla ~ualquierade gases el uolumen total p w d e ser
considerado como la suma de los aolúmenes parciales de los constituyentes
dc la mezcla, es decir
donde V es el volumen total mientras V.,, V,,etc., son los parciales. Por
volurnrn parcial de un constituyente, entendemos aquél que ocuparía si
estu\-irse presente solo a una temperatura dada y a la presión total de la mezcla. Por un arcumento similar al empleado para las presiones parciales, es
fácil demostrar que si las leyes de los gases son aplicables de nuevo, entonces
V,= N,V,
V , = N,V, etc.
(16)
donde V I , V,, etc., son los volúmenes parciales, N,, N-, etc., las fraccciones
inoiarrs y 1' el voliirnen total a cualquier preiiún y temperatura. Las leyes
Ley de la difusión de Grahani 25
de Dalton y de Amagat son equivalentrs y se cuinpleii igualmente bien
con gases cuya conducta se aproxima a la ideal; es decir, cuando no se hallan
próximos a las temperaturas de condeiisacióii o sometidos a presiones demasiado ele\adas, > a qur en ese caso eshihen atracciones intermolecularcs
corisiderahles que no son cenerales sino cspccíficas de la composición y
naturaleza de las sustancias En tales condiciones presentan desviaciones
de las ecuaciones (13) y (16) así como de las ecuacioiies (10) y (15). En
general la ley de los volúmenes parcialt:~se mantient. algo mejor que la
de las presiones parciales a presiones elevadas y tcmperatiiras bajas.
LEY DE LA DIFUSIOK DE GRAHAM
Gases distintos se difunden por un tubo o un escape de un recipirnte
que posce una abertura fina con velocidades diferentes que dependen dc las
densidades o pesos moleculares que poseen. La ley que gobierna tales difusiories fue enunciada por Graham en 1829 por vez primera !. lleva su
nombre. Esta Icy dice que a temperatura y presión constantes las velocidades de difusión de diferentes gases varían inversamente con la raíz cuadrada de sus densidades o pesos moleculares.
De manera que si designamos por u, y uz a las velocidades de difusión
'de los dos gases, y por p, y pi a sus densidades respectivas, obtendremos:
De nuevo como a la misma presión y temperatura ambos poseen icual
volumen molar: resiiltarA:
donde .VI 111, son los pesos moleciildies de los gases
LA TEOKIA CINETICA I)E LOS GASES 1DEAI.ES
26
Capítulo 1 :
<:n\ec
>
líquido?
Ims postulados fundamentales [le esta teoría son:
1 . Se considera qiie los p s c s cst5.n constituidos por di~niniitaspartíruIns discrr,tas llamadas molécuins de i p a l masa y tamaño en iin
mismo gas, pero diferentes para gases distintos.
?. 1,as r n d i c d a s rle un recipiente e hnllan en movimiento caótico sin
cesar. diirante el rrld rliocan entre sí o com Ias p a r c d ~ sdel rccipiente
donde sc encuentran.
3 E1 tioiril~ardir>de las paredes del recipiente origina una firrsión, es
dccii-. una fiicria por unidad de h a ,
dc las colisiones
de 13s mo16~~11~1s.
4. Las cdisioiies de las moléculas son elásticas, cs decir niientras no
iarie con el tiempo la presión del p s d c iin recipiente, a cualquier
tcmperatnra y presión n o se produce pérdida de energía' por f r i c c i h
3. La temperatura ahsoliita cs una cantidad Iii-i>porcioriaial fponiidio
de la energía cinítica de todas las molículas d c un sistema.
6. A presioncs relativamente bajas la distancia promedio entrc las moliciilas es grande en comparación con sus diimetros, y d e ahí que
las fuerzas de atracción, que deyicnden de l a separación molecular,
se consideran despreciablcs.
7 . Finalmente, como las moléculas son pequeñas en comparación con
la distancia entre ellas, su volnmcn se considera despreciahle en rr,lación al total.
A1 desconocer cl tamaño de las moléculas y su intcracción, segíln nos lo
"aw
muestran los p«stulados 6 y 7, este tratado tcórico sc limita a los ,
ideales.
Un anilisis rnatem5tico d e este concepto d e gris nos llei,a a conclilsiones fundamentales verificahles directamente por la experiencia. Supongamos rni i-ccipieritc cíibiro lleno con n' moléculas de gas todas iguales !.
con la niismn masa y sclocidad, rn y u i-esprrtivamerite. E- posible di:scomponer la ~ i l o c i d a du en tres comlioncritcs s e g h los ejes s, 7 , z,como enseña
a estos componentes u:: u,, u:. entonces:
la figura 1-3. Si d<:\ig~amos
1 i z = 71:
+ u; +
11:
0 9)
Eje z
L/
Fisura 1-3.
Drs~oin~oiición
de la rrloridad r n L r ilirccciones ile los rjrr x. i,z.
Eje z
-
Troría cinética dc los ga5es ideales
27
donde ii cs la ~ ' ? i o c i ú a dciindráficn nlcdin. Asncicrnos ahora a cada iiiio ik
estos componentes una sola niolí-cula de masa ni capjz de desplxzarsc
iridepciiclieirtcr~~vnte
en crialqiiirra dc las corrcspoiirlientes dircrcioriiis .Y. 1,'
:. El efccto final de estos ~iro&~ie~itos
indepedjentes se ohtienc por con~hinación de las velocidades de aciirrdo ron la ecuación (19).
Suponganios ahora que la molCciila se rlrsplaia en la dirección i hacia
la derecha con la ~elocidad71,. Chocari con el plano y: con el niomciito
mu,, y como la colisión es rlistica rebotar: con una irlocidad -u,- y la
cantidad de ]no\-iiriiento -inu,.
E n consecuencial la mzriación dc la
rmitidnd d i morirnimtu, ii (ir niomrnto; por riiolkula colisiúri en la d . , x es mu, - f - m u , . = 2 niu,. .kites dc qiii p u d a goll~ear de
reccion
nuevo la niisnia parir1 dcbe recorrer el cariiino dv ida y vuelta a la de enfrente. Al hacerlo recnrre una distancia 21, donde 1 es la lon?itud de asista
del ciibo. De aquí di.dii<-inios que el riiiiriero d i cliocjues con la p r e d
dcrecha dc la inolkiila que nos oiwpa. en un s e p n d o seri: ~ ' 2 1 por
, lo
cual CI canbio de momento por segundo y mol6ciila valdi-á:
u,
mu:
( 2 mu,) - = 21
1
(20)
Igual i-ariacióii se produce para esa misma rnolécula t.n el plano 1: de inanera que el cambio total de la cantidad de movimiento por moiC.cula y
s e p n d o en la dirección x, es dos vcces la cantidad señalada en l a ecuación ( 2 0 ) o:
mu;
Cambio de momento,'se~indo/molécuIa~en la dirección s = 2- (21)
1
.\nilogas variaciores tienen lugar en las direccioncs y, z, quc expresamos
1JOr 2 mu;/l y 2 muili. De todo esto deducimos:
2 mu:
2 muy
2 mu:
Yariación drl r n o i r i e n t ~ i i i o l t c ~ ~ l a ; s e ~ i =
i i ~d n1
f7+- 1
(:o~no existen n' irioi6cii!as cii el criho, 13 ccllación ( 2 2 ) ni miiitiplicnrse
liar rre ní~incronos dará:
Pi'io la velocidad con que varía la cantidad dc iiioviiiiirtito es 13 fiii:na
13 presión r i la fuerza por iinidad dc i r r a l tcndremos:
qtrr actiia. J. Como
28
Capítulo 1: Ga\es
y
líquidos
dondc P es la prcsión. mientras que A es el área total subre la cual
aplica la fuerza. En nurstro caso A = 6 l', y por lo tanto
FP
Pero l3 es el volumen V del cubo, d e maiirra quc
p
mn'u'
L.
--
3 1.
Cecún la ecuación (26) el producto P V para un gas cualouiera debe
ser igual a la tercera parte del producto d e la niasa dc toda4 ias inollciilas
( n ~ n ' ) por el cuadrado de la velocidad cuadrática media. Auiiqiie esta
ecuación sc dcrivó con la suposición de iiiia vasija cúbica, puede demostrarse que un resultado análoco se obtiene eii todos los caso?, es decir independientemente de la fornia del recipiente, y en consecuncia la deducciíin
anterior es completamente general.
CONSECUENCIAS DE LA TEORIA CINETICA DE LOS GASES
La ley de Boyle. Hemos visto que uno de los postulados fiindaineniales
de la teoría cinética es la proporcionalidad directa entre la energía de las
~iioléculas,esto cs:
rnn'u', y la tcniperntura ahsoluta, csto es
donde k , es u n factor de proporcionalidad. Si ahora se multiplica y di\.ide
la rcuacii>n (261 por 2: tenemos
!. de aquí, teniendo en ciiriita In ecuación ( 2 7 )
A teiiiperaiura coiistaiite la eciiacióri ( 2 8 ; nos d a PT,' = coristantc, es decir, la l<:) de Boyle.
Ley dc Charles. Esta ley se curiiple a presión constante. Si se iiiiponc
mi condición en la eciiacióii 128) ohtericinos
Consccuenciar, de la teoría cinética d e los gases
29
Principio de Avogadro. &te erimició en el año 181 1 el principio d e
que coiiíiiient,s igua1t.s de todos lor qairs, a la rnixnxa $rcsión y temperatzrra,
i-ojitit
i ~ ~ niínir.,o
r l
d e moléculn,. Este priricipio se dcducc f i c i l r n ~ n t e
dc la teoría ciiiitica. Cnrno los volúnienes y presiones soii igiialcs: P , l., =
P,
para dos gases dif<iientes>y dc aqui Fe sigue, teiiii.ndo rn riimta la
ecuación (26 ,', que
DI: iiiielo, como la teniperatura es tairiijih constaritc: la r i i e r ~ í aciiiética
11or rrioléciila drhc ser la riiisrna,
1
colocar esta Última relación en la precedrnti:. ohtenmms
ni = n*
(30)
que es el enunciado del principio d e A ~ o g a d r o .
El riúmero de moléculas por mol de cualquier gas es una constante
flsica importante conocida como número de Ac,o,eadro, y esti r~prcsentada
por el símbolo N. S e determina por dii-ersos metodos y el rnejor valor
nctiia.1 de esa cautidad es 6.0229 x
iiiolí.culas por mol-gramo. Con este
dato PS posible calcular ficilniente la masa de una rnoléciila en particular
de cuakjuier sustancia por simple d i v i s i h del pi:so molecular gramo entre el
número d e Avo:adro. .4sí, como el peso mdecular del oxígeno es 32.00,
la masa de una molécula individual dehe 5rr
Ley de l a difusión de Graham. T a m b i k i esta ley se deduce cnieyuida
desde la tiwría cinítica de los gases. Conio a volurneii y liiesiúii criristaiite
para dos gnsm diferiiites sc wi-ifica
Tenemos
Y
doridc p2 pi son las dcrisidadri de los dos gases. Las ccuacio~iei ( 3 % Y
(33; son iguales quc !as ( 1 7 : y (18, Y su:i piaiitcos de In ley d e Crahani.
."I odns estas dcduccio~iespuiitiialiiaii un lieclio: que la. rclacióii teórica
n'mu? e s t i dc acutrdo coii 1 ~ iIr)- criiliírira dc los gascs ideaPI- =
les P1. =: nRZ'. E n coiisecueiicia poclr~iicrjcicribii si;? nirigiiria duda quC
donde M = 1\-7n es el peso iiiolccular dcl gas en cuestión, y n el iiúrncro
d e m u h del gas en cl vcilunicn V a la presión P y tciiiperatura T.
OTRAS COSSECUESCIAS DE LA TEORIA CISETICA
L a v a l i d u dc uiia teoria yacc iio solo en su aptitud p a r a explicar los
hechos cspcriincritalcs cuiiocidos sino tairibitii en sus proposiciones de iiucvos niodos de abordar un prul~leiria.En este scritido tsta teoría h a sido 1riu1~
iructifera. Heiiios visto que la ecuación (26i, que es iiiia coiisccueiicia
dirccta. y expresión de dicha teoría, nos da las leyes de la coiiductü ideal de
los gises. Al riiisnir~ticnipii, sc deduccri dc ella otras relaciorics suinarrieriit:
iiiq~r>rtaiitis.alguna de las cuales detalhrciiios n coritiiiuacióii.
La \elocidad de la5 riioliculas de los gases. D e acuerdo con la teoría;
tudas las mol&culas 3 igual tesnperaturil dchcn poseer In riiisina iiier$a
ciri&tica prurncciio: cito es;
<le lo cual
E C d c d u c ~ :q u e cuarlto r~~:i!or cs M I I I I J S ~ ~ ~ m l r m
m la ~ c l u c i dad dc dcsiila~aiiiicii~o.
Es dc uri iriteri:~co~isidcrahli:n\crigii;ir la vi.lo<iclacl
con q
x':~ n u v w r i las difcreiitei I L I . Ilc la i
3
tc-
ricriim r p c
por medio dc cualqiiicra dc estas eciixio:ies se pucck ~ k t c r n i i r i xla ve!<>,~.ielad ciiadritica riicdia dci Zas descic cantidades nii:diblcs dircctaniente.
.i.i Ii,icirli~.si R sc espreia en e r ~ i u spor g a d o y inol, P c ~ di i n x por
r-i:i,tir.ii:tio cuadrado y la densidad en gramos por ccritíiiietro cúbico, eiitonics 11 veiidii cxpreaada cn centímetros por sesuriclu.
.kI calcular la \elocid;id del iiiciró~eiioa O3 s a b ~ m o s( 1 1 1 ~R =L 8.314
2.016. Ur ~ l u c111e
í
10' crgios por mol y qradi~,T = 2 i ? . l j ' K , y .lI
!a ecuación (3%) nos d a para 11
C!orno el hidróseiio es i.1 riiás lisero de los cli.irii.iitos. esta enormi: rcloci-
repr,,seiita d límite riiperir~r!>ara las v e l o d a d e s de! n~oximirntonlolh:dnr. Para todas !as deni:is iiiolér.ulas su vclocidad s e r i inciior se$in 1.i
1cy clr Graliam. :lií para cl dióxido de azufre, coi: M = 6 4 la v l o r i d a d
3 O^C s e r i
c!:id
1.a cnergia cinéticd de traslación. El único tipci r l r ciicyi:i a ~ I I Cnos
i-ifiiido i.s In ilrl riioviniieiito niolcciilar a l i i ! a l y o di. 1,ic dircccir>iiw dc los ejes coordenados. esto <:S, a la c i i c i ~ í n:iirbtica dl, trnilircióii.
q , ~ <~: > i ~ ~evaliiarse
ldi>
a partir de la cciiacióii 1 3 ~ Py como de i1i.i ~ i b t i n i m o j
M R T= n.\i~i"?, v la ciir:rgia riii6tira E; e d i dada por ir,:= 71.1111'2. crit i m ( . ~ s para n nioles d r gas
Iiwiiiii~
y por mol
32 Capítulo 1: (;are\ y liquido5
E n consecuciicia la energía d e traslacióri d r un gas i d ~ a les coinpletariicnte
independiente d e la naturaleza o presión dcl gas, y es función de la tciriperatiira únicamente. A 30OCR, por ejcrnplo, todos los gases idealcs coiitend r i n por mol
EL =
3
- R (300)
= 450 R
= 895 cal
o aproximadamente 900 calorías de enercía cinética d e traslación.
La energía cinética promedio por moléciila se deduce e n i e p i d a desde
la ecuación (36b) dividiéndola por el níiniero de A\,ogadro S,
dondc k = R/,V se denomina la constante d e Boltzmann, y valr 1.3805 i
10-'U crgios por grado.
Distribución de las relocidades moleculares. Por conveniencia en nuestro tratamiento consideraremos que todas las moléciilas d e nn gas dado a
una cierta temperatutq se mueven con una velocidad cuadrática media
constante u. E n realidad esto n o es cicrro, porque como conseciimcia d e
las colisiones hay una redistrihución d e la energía y velocidad. Maxwell y
Rolt7niann di~irioitsarrin.hasándoie en consideraciones d e probabilidad, que
la distribiicióri de las velocidades niolr:culares depende d e l a temperatura y
1:i.so niolecular del gas y ~ s t ádada por
E n esta ecuación dn, rs el número de moléciilas del conjiinto total TI',
qne poseen velocidades entrc c p c -1 dc, mientras quc .ti I; T son r e s l ~ ~ c t i inmeiite, el peso moleciilar y la temperatura del p. Obvianiente i l n ' i i '
es la fracción d e aquc1l;is cu!;is vi:locidades seíiaiairios arriba. 1.a eiuai.iÚii
j38! se conoce como la /<.yr!c !a dirfriburión d e Aías;cell-Boltz,nun>l para
las vcloridailes inoleculaws. Si la eciiacióii ( 3 8 ) sc divide ciitrc dc tirienios
dondi /, cs la probabilidad de riicontrar niriICcula~con la xelrxidad
r.
1
f
pl!bfrkx
1
c-Velocidad de las moléculas
O
Fisura 1-4.
Distribución d c las velocidades rnoleculare~ en un car
La f i p r a 1-4 nos muestra esquemiticamente las gráficas de la p-c
para diversas temperaturas quc incremcntan en el orden T,, T?,S,.Desde
ellas puede verse que la prohabilidd de encontrar una molécula en reposo
cri Iin instantr, dado es muy prqueiia. M i s aún, para velocidades ma);>res de cero la probabilidad aumenta con c, alianza un miximo, y decrece
&: nuevo con mayor o menor rapidez cuando las velocidades son muy
?!el-adas. Es evidente pues, que tanto las velocidades altas como bajas son
inay poco probables y que la mayoría de las moléculas de un gas tienen
xrloridades a p z p a d a s junto a la iirloridad más probable que corresponde
nl ~ i c ude la curva para cada temperatura. Dicha velocidad no cs consiaiite, iiuo que se ini:r<rncnta hacia valores cada vez m& elevados de c con el
.iuirimto de la teii1pcra:iira; m decir para temperaturas elevadas es mis
;iiiibahle qiie sii vi:locidad sea tainbiin más elevada quc baja.
El análisis matemitico nos cuseña que la velocidad más probable: no es
i p a l a la velocidad coadritica media u o a la de promedio de todas las
niol(.ciilas 1 ' . Si designamos por e,, e?, e,,. . . c, las \-elocidades individuales
de n' moléculas de 9 s ' la de promedio u será
y la riiadritica inedia es
Liji :ir~iinirritosdc la teoría cin6tica demuestra11 que varias de a t a s vcloci
dades se enruentran relacionadas por las ecuaciones
34 Capítulo 1: Gases y líquidos
y de aquí que al sustituir el valor de u obtenido en la ecuación (35a),
obtenemos:
Como para una velocidad particular c, la ener$a cinitica dcl gas por
m01 es E = M c 2 / 2 , podemos reemplazar esta relación en la ecwxibn (381
y obtener la distribución de las energías cinéticas. El resultado es el siguiente
donde ahoia dn,./nf es la fracción del número total de moléculas que poseen
las energías cinéticas entre E y E
dE. De nuevo, al dividir la ecuación
(45) por d E nos da
+
donde p' es la probabilidad para la incidencia de las energías ciuí.ticas de
traslación de masniUd E. Las &ficas de jf y E que se obtienen a partir
de la ecuación (45a) son muy parecidas a las que nos muestra la figura 4
La frecuencia de colisiones y el canino libre medio. Es fjcil demostrar que en un gas que contiene n* mol&ulas idénticas por centímetro
cúbico, el número de Gstas con que choca una sola por segundo es:
donde L. es la velocidad promedio expresada en centimetros por scgundo y
m el diámetro molecular en centímetros. De aq~iique el número total de
moléculas que colisionan por cada centímetro cúbico por segundo, 2. será
n" veces este valor, o
Z = 1/1liuo~(n*)~
(46)
Más aún, como cada choque se realiza entre dos molÉculas, el número dc
ellos por cada centimetro cúbico por segundo N,, será la mitad clc csta
cantidad, o sea,
z
N, = -
2
7
1
-
\/2
" ( n" )
(47)
Aplicación de la ley de los gases ideales 35
Otra cantidad importante en las consideraciones de la teoría cinética
es la de distancia promedio que recorre una molCcula antes de su coiisión, es
decir, el camino libre me&, l. Si una molécula tiene una velocidad promedio u y experimenta @Ac2n't choques, la distancia promedio entre
ellos, o %u camino Iibre medio, será
A',, Z y 1 se calculan fácilmente si conocemos los diámetros de las moltculas. que generalniente se obtienen a partir de medidas de la viscodad
de los gases por un procedimiento que se describe al final del capítulo.
APLICACION DE L.4 LEY DE LOS GASES IDEALES
La concordancia entre las relaciones empíricas agrupadas en la expresión PT' = nRT y las deducciones de l a teoría cinética de 10s gases
presta un crédito considerable a nuestra concepción de la naturaleza de
los p s e s y su comportamiento. Pero aún permanece en pie la pregvnta
de cuin completamente con qué seguridad la expresión P V = nRT re~>rndiicelas relariones P-I--T reales de los gases. Para verificar este
punto haganos uso del hecho que a temperatura constante la ley combin a d ~de los gases se reduce a P V = nRT = constante. De aquí deducimos
que eri tanto T no varíe, el producto P V para una cantidad de pas dada
dehe permanecer igual a todas las presiones, y la gráfica de P L . 2 bajo
aquella condición será una línea recta paralela al eje de las abscisas.
1.a figura 1-5 nos muestra una gráfica tal para distintos gases a 0%
e iuinediatamente se observa que PI' no es constante para la mayor parte
diil intervalo de presiones quc ce muestra. Las curvas son en general de dos
tipos. Eri uno incluinios al h i d r ó p i o helio, y comienza en el valor PT'
+ $ d o por la ecuaciiin PL,. nRT para la temperatura problema y se incremeiita continiiameiitc cori la presión. Siempre el producto P V es mayor
111 quc seiiala la teoría. Además, en el segmdo tipo la gráfica corriiema
conlo en el caso antrrior en e1 mismo punto, pero primero decrece con
la 1xrsi0n. I l ~ ap un valor mínimo característico de cada gas y temperatura. y I L ~ Oasciende hasta valores aprcciablernente mayores qiic los
tcbricos.
Anitios tipos de curva son parte de un rnodclo único de c»rnport;iniicrilo rluc <:xtiil,<:ii :OS gr,sc.s. Para di:rriostrarlo es convmiciite einplcar u r j a
"
-
"
36 Capítulo 1: Gares y Iíqiiidos
cantidad z , llaniada factor de compresibilidad, que está definida por
Para un gas ideal z = 1 para todas las temperaturas y presiones. En el
caso de los gascs reales el factor de compsesibilidad suele variar con ambas
F i p r a 1-5.
Gráfica PV y
P
para di\crsor gi-scs a ODC
variables; y su desviación de la unidad es un índice de la separación dcl
iomportam'iento ideal.
De los datos experimentales P-1.-T de los gases es factible calcular :
inediantc l a rciiación (49; así como su variación m f u n c i h de la triiipcratura y presión obsrn.adas. L a figura 1-6 nos muestra una grifica de
z y P, cn el caso del nitróseno m diversas tcmlirsatiiras. Si la irispeccion;inios vcrrmos qiie todas las isoteri~ias l~i-incipiaririi := 1 )- P
O> y el
cariihio con la presión c l t p n d c de la tcinpcratura di. < a & p n ~ e h a .Sin
rinhar$o a 51nC, r peimancre próxima a la uriidad en el i n t r i ~ a l oaiiiplio
de presionm de O a 100 atm6sferas. durante el cual aquella variahli.
cambia dc 1.00 a 1.02. M i s al15 de las 100 atriiíxfmas z inri-einentrt z:il>idaniente con la presión y adquicrr d o r e s que exceder; coniidcrühlrineiite
la. unidad. Esta temprratura para la ci:al un ;:u mal si. coni~xiitaen foriiia
ideal en un intervalo amplio de presiones se dcnmnina t i m p e r a t u r a o
p u n t o dc Roylc que es también una línea divisoria dc los tipos de isoternias
exhibidas por el gas. Por encima de tú1 puntc i.1 ras iiiiiestra iiiiicanieritc
una desviación positiva dr la idealidad: es decir todni los \ d o r r s rlc r s r m
rnaynic, dc la unidad. ~ ) , + <ir
~ j!, ~tc~iil,rr;~tiii,i
cic I h v ! ~ .: ~ I C - C ~ C W~ w i ~ ~ l
ro c<m 1% prrsii>~irsci<,rirritc~,
alcnii;.a i i r i iiiíniiiix ! : t s c i i , ~ , < I < : X \illllm\
:~r~rwi:ibl~meiiti:
~ i i : i ) . i > l - , . ~<I,. l:, ,,,,i<l:,<I.
n<.I>i.
ol>s<.n:iisv' I I ~ CC \ I : L I Ii i~
l r 'O
rl''i-
-
Aplicación de la ley de los gaies ideales 37
es la ternperatlira mcrior es el niínimo y que este sc presenta a presiones
que dependen de T.
1
Figura 1-6.
Factores de coinpreribilidi<i para el nitrógeno
Las grificas P-V-T de la figura 1-6 son típicas del cornportaniento
d e todos los :ases cuando tomamos intervalos amplios dc la tcinperatura y
presión. Las únicas diferencias o b s e r d a s son las temperaturas de Boyle
Y las posiciones d e las isotcrmas en las grificas ya que estas son sicrnpre
función del gas en c~iestió~i.
No obstante, se encuentra que por encima del
referido punto existen desviacioncs positivas de la idealidad únicaiiiente.
I'or debajo [Ir ta! temperatura en cambio, el incrrmento dc la presión
oriciria qtic los \.alores d e z clecre~cand e uno Iia\t? un mínimo y aumenta
Iiii'qo a otros q i i p sobicpasan la unidad.
Despuís d e la discusión anterior una mirada rápida de la figura 1-5
di.hc scr suficiente para mostrarnos quc a 0°C cl hidrógeno y el helio se
eliciicntran por encima del punto de Boyle, mientras q u e el monóuido
de carhono y PI rnctano cstán aún por debajo dcl snxo. Cabe esperar t:imI i i i r i qiic a tciripvr;ituras si~firi<ritrrnvritr
bajas el iiidri>geno y Iiclio prescnten ,115 r r l i r l i ! r , i > ~n la grifira :y P niierltr~rs i l w ' a tciiipcratiiras nlis
<.iev:~ci;isV I iiiorii,~icI<>
<Ir. r;rrbi,~io)- r.1 ! r i i t : i i i o i ~ i 1 ~ ~ ' ~ l rgr.'dicns
:iri
;ináiog;is
38 Capítulo 1: Gases y líquidos
a las del helio e hidrógeno a O°C, y ese es en realidad el caso real como
nos lo muestra la figura 1-7.
La conducta peculiar de cada gas señala que a fin de establecer su
ecuación de estado mediante una relación P-11'-T es necesario una que contenga aquellas variables, pero además otros términos que den cuenta de
las fuerzas especificas que operan en el gas en cuestión. La conducta de los
Figura 1-7.
Factores de compresibilidad del metano.
gases a baja presión se aproxima muy estrechamente a la ideal, siendo
el acuerdo de los valores P V calculados y obsenados tanto más próximos
entre sí, cuanto menor es la ~ r e s i ó na que están sometidos. Entonces pierden sus características particulares y comienzan a obedecer la expresión
general y simple deducida de la teoría cinética: PV = nRT que se considera una ley límite, es decir, aquella que obedecen los gases rigurosamente,
sólo cuando se hallan tan diluidos que el volumen de sus moléculas es
despreciable en relación al total que ocupa: y las fuerzas atractivas son tan
débiles que no ejercen influencia en la presión del gas. Se establece por
tanto la conclusión, de que un gas es tanto m i s ideal cuanto menor es la
presión a que se encuentra sometido, y se hace ideal totalmente cuando
la presión tiende a cero. Esta conclusión está confirmada por el hecho de
que conforme P tiende a cero, los factores de compresibilidad a clialquier
temperatura tienden a la unidad.
La magnitud de la concordancia expuesta para presiones elevadas depende de la naturaleza del gas y su temperatura. Para los gases permanentes a la temperatura ordinaria, es decir: aquellos que se eiiciientran
por cncirna de su temperatura critica romo el Iiidrógrrio, nitrógeno, oxí1.u ternper;iturn critica es In máxima tcinpcritiirn a In riial r;uide k m r
un grr.
Uso de los factores de compresibilidad
39
geno y helio, la concordancia es de un 5 por ciento aproximadamente para
presiones hasta 50 atniósferas; en cambio, con los gases fácilmente condensables, como el dióxido de carbono, dióxido de azufre y cloruro de metilo,
aparecen discrepancias de 2 ó 3 por ciento para la presión de una atmósíera.
El uso de la ley ideal para tales gases confiere a los resultados una validez
limitada cuando se desean resultados precisos, por ese motivo es aconsejable
siempre tener en cuenta la naturaleza del gas en cuestión y cuán distante
se encuentra por encima de la temperatura crítica. Cuanto mayor sea esa
separación mayor rs la amplitud de presiones en las que los cálculos se
efectúan con cierta se,~ridad.
USO DE LOS FACTORES DE COMPRESIBILIDAD
Cuando se conocen, se emplean sin dificultad en los cálculos exactos
de los gases. Por ejemplo, supongamos que se desea conocer el volumen
de 10 moles de metano a una presión de 100 atmósferas y O0C. Bajo esas
condiciones r = 0.783, y de aquí, según la ecuación (49), resulta:
= 1.734 litros
El volumen observado experimentalmente es de 1.756 litros. Supongamos
de nuevo, que c i ~ r t acantidad de metano ocupa un volumen de 0.138 litros
hajo una presión de 300 atm y 200°C, y deseamos conocer su volumcn a
600 atrn y O0C. 1.4s valores de z en las condiciones iniciales y finales del
prohlema son: z2 .= 1.067 y z, = 1.367; además se tienen las relaciones
sisuientes: P, TV, = z,nRT, y P, V , = z I n R T 2 a temperaturas bajas y altas
respectivamente, por lo tauto:
en donde por sustitución de valorrs obteiirmos
=
0.051 lt.
.
.
40 Capítulo 1: Gases y líquidos
ECUACION DE ESTADO DE VAN DER \\'AALS
Debido a la desviación de los gases reales de la l q ideal, se han hecho
muchos intentos de establecer ecuacioiies de estado que reproduzcari la
relaciones P - V - T de una manera nAs satisfactoria. De ellas, es la dc van
der TVaals una de las primeras y rnrjor conocida. Esta ecuación difiere de
la ley de los gases.ideales, en que da cuenta tanto del volumen ocupado
por las propias molEculas, como de las fuerzas atractivas existentes entre las
mismas. Para efectuar la corrección debida a estos factores, supon,wmos
qiie b rs e1 volumen efectivo de las moléculas en un mal de gas y V el
total correspondiente a n moles, En este volumen total, el qiie ocupan
las moléculas mismas será nb y el disponible para la compresión es
( V - n b ) . Como este último es "el espacio libre" debemos reeinplanrio
en la ecuación de los gases ideales. Podemos anticipar que b es característico y diferente de unos gases a otros.
El segundo factor a considerar, es el de las fuerzas atractivas que actúan
entre las moléculas. Consideremos la pared de un recipiente sometida al
bombardeo de las moléculas de gas. Si no existiera interacción eri ellas,
chocarían con las paredes con toda la fuerza debida a su movimiriito libre, pero en nuestro caso, ese movimiento se ve frenado y su presión reducida por P'. La presión obseivada, P, resultará así menor a la ideal P,;
Como en la expresión P L V = nRT, Pi es la presión ideal, podemos sccinplazarla por el valor obtenido en la relación anterior, con lo cual resulta
(P
+ P )( V
-
n b ) = nRT
(51)
Van dcr TVaals estableció que la magriitud del factor dc correccibn
P para n moles de gas presente en el ~olunieri11- está dada por
donde a es una constante peculiar de cada gas e indcpendiente de la presirin y temperatura, y coiistituye una medida de las fueras intcriiioleculares. Si reeniplazamos esta expresión de P' eu la ecuación ( j l \ obteiiemm:
(P +$)
(V - nb)
=
nRT
que es la célchre ecuación de cstado de van der M'a:ils ~,Irli~riicla
1'0'.
nolnhrc.
m 1873 y qur. lleva su
&ir
Ecuación de estado de xan der Waal* 41
E n las aplicaciones debemos elegir con cuidado las unidades apropiadas
di: n )- 6. C:oiuo n2a'T.2 represenia una presión, las iinidadrs d c a serán
presión ( v o l a m e ~ i l[mal)':
~/
es decir, atn-litro! rnol-'. En cualquier caso,
las unidades dc P )- 1- y las de la constante dehen 5i.r i ~ u a l e s .y esto es
lhlido tambitn para R
El uso dc la ecuacióri se ilustra con un ejemplo. S u p o n p m o s que se
desea calcular rncdiantc la cciiación d i van der TVaals la presión a que
se encuentran dos moles de amoníaco que ocupan un volumcn de cinco
litros a 2i°C. Para el anioniaco n = 4.17 atin-litro2 rnol-', n i i e ~ t r a sque
b = 0.0371 litros por nol l. D e aquí:
L a presión correspondiente calculada por la ley de los p i e s ideales es
9.86 atm.
La tahla 1-2 enumera las constantes dc van d r r JVaals para una serie
h e gases. .4quellos que como el disiilfiiro de carbono. amoníaco: dióxido de
:rn,fs~~.cloro1ornio~etc.. se coridmsari ficilinentc. time11 valores de a relativamente altos, indicando qne sus atracciones intennoleculares son fuertes;
miiintras qiiii para los gases permanentes coino c1 a r ~ ó n .rnonóxido de
cai-hono, helio, e hidróscno. los valores de n son considerahleniente menores,
cirino consecuencia d e que sus interacciones son débilcs.
Conio puede verse en la tabla 1-3: la ecuación dc van dcr \i'aals es
vilida m un intervalo de presiones más amplio que la ley d e los gases ideaIcs y cs rriás esacta. Sin embarco. en condiciones extielriasl tales como en las
t e m p ~ r a t ~ ~ rpróximas
as
a la crítica y presiones iuuy elevadas, siis predicciori~sdistan mucho de los d o r e s espcriiiiiritales ohserv,idos. Krsiilta rnuy
dudoso si cs justificable considcrar n y b coiistantey. En efecto, si si: d r s m
qiie catisfai.m l i ~datos rxperirnent:~li~sfi<:lrrieiiie_es necesario elegir difiirentes ralores de n y h para distintos intervalos de la tr~nipcraturn)presión.
OTRAS ECUACIONES DE ESTADO
S r liari propiiesto i t ~ ici-ari i i ~ i n c r odc ccii;ii.i<>iiesq ~ wr c p w s ~ ~ t : mla'
ri~l;icir>iii.sP-1.-T di. 10s r a s c s . Ciias baracl;iq t ~ jxiitc
i
en ciniriilcrnciories
t i . S
c
t
i S
t
t I
. 2 1 1 0 ~ ~~ s t u d i x ~ r ~ ~ » s
:,l~,,,,;,,
<l,.
1 x 5 ,,,;',S
ir,,p<>r;int?s.
42 Capítulo 1:
C h i e s y líquidos
TABLA
1-2. Constantes de van der Waalr para varios
gascs
( a en atm-litro2 mol-?; b en litros mol-1)
Fórmula
-
NH,
Ar
.\rnonizco
.4&n
co,
Di6xida de carhono
DirulIuru Lir: carbono
l ~ o n ó x i d ode carbono
Tetracloruro de carbono
Clom
<:lorofomo
Etano
Eteno
Helio
Hidrógeno
Bromuro de hidrógeno
Metano
Seón
Oxido nítrico
Nitrógeno
Oxígeno
Dióxido de azufre
Agua
CS,
co
CCI,
CI1
CHCI,
C>H,
C:H,
He
H?
HBr
CH,
Ke
NO
N?
o:
SO,
&O
TABLA
1-3. Comparación de la ley d~ los %ases idenles
de van der lia.lls. a 100DC
la ecuación
Dióxido de r a r h n o
Hidrógeno
P
y
P Calc.
dr l,i Ec,
5
Desvia. van der DfsviaWaals
ción
ción
P observada
(atm)
Idea1
Calculada
50
i5
100
'18.7
-2.6
50.2
72.3
95.0
-3.6
- 5.0
7j.7
CC
100.8
+O4
t0.9
+O8
P
Caic.
Ideal
P Calc.
dc la Ec.
*o
Desvia- van der DciviaWaalr
ción
ción
37.0
92.3
133.5
--11.0
C17.3
+33.5
5
49.5
73.3
95.8
- 1.0
- 2.3
-4.2
Ecuación de estado dc K a r n e r l i n g h Onncs. E s t a cciiación e x p r e s a al
pro:liicto P I - como u n a srrie d e potencias de l a prciión, a cualqiiicr ternperatiira d a d a , esto e s :
pv,
-
A
+BPL
cp-
+ »p. + . . .
(03)
<liirirk: P r.s l a prciióii gcnri-aliricntc t w atrrióferas. V , cl \oliirnirl m d n r
en l i t r o s o crritírnvtros cíihicos. 1.m r o ~ f i ~ i ~An, t l3,
c ~(:. v t c , i m r o l ~ ~ < . i d ~ l s
Otras ecuaciones d e estado 43
como el primero, seqiindo, etc.: coeficiente uirial. A presiones muy bajas
sólo el prinier coeficiente es significati\.o, y es i-mal a RT, pero a temperaturas mayores los restantes son tambitn importantes y deben tomarse en
m i n t a . En ccneral, el orden c k importancia dc los coefirieiites )- cl de la
i:ciiación coincideu Los roi.ficientes son constantes para una teiiiperatiira
pero son función d c la misma. El p ~ i r n r r ode ellos, A, es sirniprc positivo:
el srgundo, es necativo a temperaturas bajas. pasa por i1 valor cero y se:
hace positivo y creriente cuando la temperatura aumrnta. Cluando Csta hace
qiic B = 0, tencrnns la tc.niperntura dr. Boylu, porque entonces la le) rir
Hoyle es r-ilida en u n intc~n-al»bastante amplio.
Si utilizamos u n número suficiente de términos, esta ecuación satisface
los valores experimcntales con gran precisiiin. Los coeficientes viriales de
diferentes Sases se presentan en la tabla 1-4. Con ellos es posible calcular
PZ' hasta las ]:O00 atmósferas.
La ecuación de Berthelot.
L a expresión de erta ecuación para presiones elevadas es dificil de manipular. A presiones bajas se reduce a :
donde P, ,'TI
R, T y n tienen el mismo significado que cn la ley d e los gases
T ABLA 1 4 . Coeficientes viriales d: algunos gases
( P e n atm, V , eh 1itrosmolk1)
-
-
A
I'C
- 50
O
100
200
.-
---20
O
100
200
1R.312
22.414
30.619
38.874
B x 10'
- 2.8790
-1.0212
0.6662
1.4763
C x 10'
14.980
8.626
4.411
2.775
D x 10'
E x 10'
- 14.470
-6.910
- 3.534
-2.379
4.657
1.704
0.9687
0.7600
-1i.911
7.721
- 3.618
- 2.449
6.225
1.947
0.9735
0.7266
Monóxido dc carbono
18.31?
22.414
30.619
38.824
- 3.6878
- 1.4825
0.4036
1.3163
17.900
9.823
4.874
3.022
Hidróqeno
44 Capítulo 1:
Gaíes y líquidos
perfectos, y P, y i', son la prcsión y la tenlperatura crítica^.^ Esta ecuación
cs muy exacta cuando las presiones son próximas o menores de una atmósfera y es muy útil en cl c:ilcillo dc los pesos moleculares a partir d e las
densidades. Su uso se ilustrará con tal fin.
T ABLA 1-3. C o n ~ t m l e sd c Beattic-Bridgemm para slgiirios cases.*
(Prcsión. P, en ztmósf~r3s; Y en litros mol-1)
Gas
A ,,
o
b
Bo
c
--
Hc
Nr
Ar
Hd
N,
0,
.Aire
CO,
C:H,
fC,H,)oO
@.0?16
0.2125
1.2907
0.1975
1.3415
1.4911
1.3012
5.0065
22769
31.218
00j98t
0.2196
0.02328
-0.00506
002617
0.02362
0.01931
00i132
0 01855
012426
0 01.100
0.0?060
O 03931
002096
0.05046
0.04624
UOt6il
0.10476
0.05j8i
0.43416
0
[N
0
-0.043219
-000691
0.00420fJ
-0.01101
00i235
-0.01.58i
0,11934
0 0 0 4 x lo1
0.101 X 10"
5.99 x l o i
0.050 X 10'
4.20 X 10"
4.80 X 1 0 4
1.34 X 10"
66.00 X 10"
12.81 X 10'
33.33 X L O r
1. A?. Chem. Soc., 50, 3156 (19281. Véase tainbii.n Maron y Turiibull.
Inil. E n g ~ h e m . ,33, 408 (1941).
La ecuación d e estado de Beattie-Bridgernan. Esta ecuación di. estado
que posee cinco coriytaritrs pueclc establccerse de dos maneras, una explícita
en la presiónl la otra en voliimrn molar V,,
p = -R
+ - +T- + -B
r
6
(55)
v; vn, v:,
6 P
v m = -Rl'+ m0 + (i;):?
+(~m
(56)
v,
donde
E n estas relacicines T es clc nueve la telupcratura absoluta, y R In coirstante d e los casrs: micntras que A,,, B,,, a' h y c, son constantes cdracterísticas d c rada g:is D Dlas
~ dos ioi-mas de lxr c c u a r i ~ ~ i e(55i
s
y ( 5 61 la
pririier.a es la ni& segural Iiorqiie la scgunda sc drdiijo dc ~ l l : i coii rici-las
:rproxirriaciuncs.
Pesos moleculares de los cases
45
Esta eciiación v i aplicable en i ~ i iamplio intervalo de tcinyeratui-a y
presión y nos d a U I M ~ s a c t i t r i deucelriitc. Los rolíirnerii.~y prtsiuni:~calciiladas mediante i,lla riincuerdan con la csperiencia con una aIirr>sirnacii>ii
no rricnor de 99.75 para piesionrs de unas cien atmósferas y temperatiiras
tan hnjas como - 150°C. Tamhién se aplica con mmor seguridad a preqioiies considcrahleniente niis c l e v a d x E n la tabla 1-5 i c sr,iialaii las constantes de Beattie-Rridgcmari d e algiiiior : a w
PESOS MOLECULARES DE LOS GASES
Estos valores son esr.nciales para todo tipo de cálculos. Debe tenerse hien
claro que. el análisis químico sólo rcsiilta insiifieiente para dc.terriiinar el
;>eso iiiolecular de uiia iiiitancia: ya que seiiala simplemente a los elrmentos que forman parte d e la composici51i de u n a molécula así como sii
proporción. pero no nos dice ciiar,tos itoinos d e cada siistaricia la constituyen.
El anilisis qiiiniico del etano mueitra qiir rstli constituido por C e I
eii la proporción d e uno a tres respectiramcnte. Con rstc dato solo. podi-Í:mir>s sentirnos tentados a cscrihir sil fimniila así: CH,. Pero las medi<-ir~ries
de la densidad enseiian cliie ~ i fói-iiiula
i
no es tal, sino u n míiltiplo
ili. la niisina, bien sea fCH, I 6 C 2 H , , : cs decir está constituida de dos
itomos de C y seis de H. E n resumen VI ;inAlisis proporciona íinicamcnte
la irimlmsición y la fórmula empírica. iiiieiitrai que las inrdicioncs físicoquímicas nos permiten rstahlccer el peso nioleciilar d i n d o n m el factor por
(il ~ . i ; ~dehenios
il
multiplicar la fórmula empírica a fin de obtener el peio
iiiol~ci!larde la sii5tancia.
Hasta el año de 1961 todos los pesos niolcciilai-es estaban has.idos en la
~ ~ l ( ~ i ' i ial-hitrari:~
>n
del o u i p i o conio tipo. riiyo peso atóniico Fe fijaba
cn 15.0ii80, pero m la fvcha nicncii>nada, ;a lriiii5n Internaciond d e Quí111ic:i Piii-n y p l i r : i d ; i adopth i i r i niievo sistmia di: pesos atjimicos m y n tipo
:le i~oiiip;imciúnrs el ijótopo m i s ahiindaiiti: dcl carliono, i.1 (2": :al que se
.~rir~iO
el peso 120niiii. Con ello el peso ;it(>riliir>y mnliciilnr dcl oxii.iiio
i
1 l o I
r l . ? l
.
. Ci>ii<irieiirioel peso n~oliciilarilpl
oxi:t~!io podi.iri,ii c.~lciil:iilos de los IWS~:IIIICF
qairs por métodoi fisic~j-quí~iiirn%
\:i;ií.iidoiio> d i l:i liil>ót<~iis
di. .\ioc;iili-<>:quc como iahenim. sriiala
t],.'.
i t > ' ! w los q . i i i r ~!>ajo icii:ilc,
ion<lirlori<,c<Ir t?m,,zratiira y l~r?siiin. si
~ > < I I ~ iI i~n I vi>Iiiiiic~i
I
iciiil. ~x>si.cti
i.1 riii5ino r:i~nii.i-ode ~nolb<.iilas.
Por tanto.
t i i x ~ ~ : o i m n r nI ~
11c01'11ar
i~s
1 1 n ~ ! i ~ m i . idi.
i
i i i i :i~nlde oxígrno hajo ciertas
<r>ilriirii>iir~i
eip?<iiic:ii. ~i.r:i t:iiiilii,::i c! <lc ciinlqiiier :as l n j o iciiales coniiiciriuvc: y el jiccn d e rse \oliiiiicii nos propoi-ciori;i~i:r i.1 p.\o molccular
iIi.1 v:is clircctaiiii~iiir.( ' m i i r > mi. l., liil,<iti.~is
dc A\r,gadiu 10s dr>s vo!úrrierics
tld,,rim rc,,,tc,>,~,i~.,,Jl,,lÍ,,,,.,<,d? ,n<dí.nll~s,
1 0 5 p r s o s 7lnnlr<.l,la,.?s1,;in d r
Ii.iIl.ii\t
i'ii 1.3 riiiiiii.r
I > l r i l N ; l ~ i < ; l i 1 1 1 1 , . I:l< 1l):ii:)S ' I ~ l i l : l l < ' \ ( I l ~ l,li lil<>l;<ill:i~
.'
~ m * / i i\ , l h ~ l , - ~ .
46 Capítulo 1: Gases y líquidos
E n físico-química la unidad d e masa enipleada usualmente es el gramo,
sicndo un iiiol graino el peso dc una sustancia en gramos correspondieritc
al ~ C S Omolei.ular cjue. por ejemplo, en el caso del oxígcno vale 31.9988 g.
M i s aún. por rncdicióri directa se h a encontrado qnr la densidad de este
xas corregida a la idcalidad y en condiciones tipo. mto es; 1 atmósfera de
presión y 27315°K vale 1.4276 g por litro. De la definición de densidad,
se sixui: que rl voliinicii molar del osigeiio en las condiciones ~specíficas
c l e h ~V I .
-31'9988 - 22.413 litros
1:J?T6
que también es el volumen molar d e cualquier gas ideal en condiciones
tipo, y por lo tanto, el problema d e la determinación del peso molecnlar
exacto d e cualquier gas se reduce en si al d e l a determinación del peso de
22.413 It del gas a 1 atmósfera d e presión y 273.15"K, después de realbar
la corrección a su comportamiento ideal.
No es conveniente, ni necesario, medir bajo las condiciones anteriores.
Por el contrario: puede hacerse en las que sea preciso y calcular el peso
molecular desde ellas. El procedimiento seguido para lograr!^ con exactitud se describe en el capítulo siguiente: pero ahora nuestro interés reside
en la determinación de los pesos moleculares aproximados que junto con el
análisis qiiiinico, son gcnei-alinrnte suficientes para poder establrccr i:l peso
molecular de la surtan&. Para este propósito cmpleainos la Ir? de los p s ~ s
ideales. S i designamos por W' al peso del gas bajo tal coiidición, eiitoricrs
n = W/My
Así pues, para obtener el peso molecular de un gas necesitamos la teniperatura y prcsión a la cual mi peso d e pis IV ocupa el volumen V ;reemplamr despuís estas cantidades cn la eciiación (58) y despejar .\f. L a
ecuación 58 se expresa si se dcsea, en finii.ión d e la densidad del :as p.
Como p = il'/V resnlta
y el pcso rriolecular se obtiene di: la densidad del gas a una temperatura
presión dadas. L a mayoría dc los niitodos de determinación d e los p C 5 O i
molccularcs estiri basarlos en cstas ccrin~:ioiies.
t1
Método dc Victor Meyer para la5 densidades de vapor
47
AIETODO DE REGNALTLT PARA LA
DETERRIINACIOS DE LOS PESOS MOLECULARES
Este método se usa para determinar los pesos moleculares de las sristancias gaseosas a la tcmiicratura ambiente; y se realiza así: Uii matraz
de vidrio d e unos 300 a 500 c.c. d e capacidad, provisto de llave. se evacúa y pesa, llenándolo a continuación con el gas cuyo peso molecular sc
husca a una teiriperatura y presión, procediendo a pesarlo de nuevo. 1.3 diferencia d e pesos representa el del gas W en el matraz cuyo volumen se
determina llenindolo y pcsindolo con agua o mercurio, cuyas densidades
se conocen. Con los datos así obtenidos, se deduce el peso molccular buscado mediante la ecuación (58).
E n u n trabajo preciso se usa u n bulbo m i s grande para llenarlo y otro
de contrapeso, 1 se corrigen las mrdicioner reduciéndolas al vacío.
METODO DE DUMAS PARA LA
DETERMINACION DE LAS DENSIDADES DE VAPOR
Es el método usnal d c determinación del peso molecular en fase de
vapor d e los líquidos muy volitiles. Sc toma u n bulbo d c forma de retorta
provisto d e una pequeña abertura conectada a u n tubo capilar y se pesa
prirnero lleno de aire. Se coloca inicialmente dentro del biilbo bien frío:
iinos centíirietros cúbicos del liquido y dcrpiiés se sumerge en un baíio
cuya temperatura es superior al punto de ebullición d e ese liqiiido. Sc
hicrvc basta que los vapores formados cspulsan el aire del matraz y la vaporización es completa; entonces se srlla el bulbo, se enfría a I:r temperatura
aiiibierite y se pesa. El voliimen si: ditcrmina por el método de Kegriault. La
~ x r s i ó ndel vapor durantc rl sellado cs la atmosférica y la tcmpcratura la del
baño. El peso del vapor, despiiés d e las dchidas correcciones se deduce
mrdiaiitc la ecuación
El valor d r II',,,,, se r~litirmemultiplicaiidr> el voliimr.n del frasco por la
<Ieiisidad d d aire, ) si conorenios P , l., i' y II',,;.,,.
cl pcso m o l ~ r i i l a rdel
liquido en la fase de v'ipor sf, ralciiln como aritrs.
Sirvi. IIdm iqiini f i n qiic el d i . I h r i a s l pero C S lrlll~h(>
m i s sirr:plc y SlixiSii.iir.t 1 8 I i i i i c r t i n i ~ i icsiluciiia <ir1aparato. ']u'. r o r l 9 t ; r di. un tiitx
it~tcrior11, c l c trrws 50 r n ~
dc. l < > n ; . i t t ~ lr ~ x l c x l[Ir
~ ~u r l a ~ ~ t r u i.A,
w lx~rciaL
l>li.. 1.a
18 Capítulo 1: G a s e ~y líquido\
iiiente llena con un líquido ciiyo p~isitnde chullición es por lo menos 30
grados niayor quc el dc la siistancia en istiirlio. La fiinción de la camisa
externa es mantener 13 t ~ ~ n p e r a t u l .da ~ tubo
l
interior constante por ebullición del líquido en ,1.Adernis dentro de este iiltimo tubo: existe otro C,
!
Figura 1-8.
4leycr.
Aparato de Yiclor
Ikteniiinación cxacta de los pesos moleculares 49
\apores forniados a la tcrnpcratui-a del tubo interior. En cuanto enfría
;I ln teinpcratura arntjierite se iiiide el \-oliiiricn otra vez. Si los niveles en
G y L son ipalcs, la prrsii:n dpl aire es la atiiioif&rica exterior a la buseta. ? la tciripcratiira nos la proporciona el terrniimctro H.
Detenninado cl liew 117 de líqiiido p sii \-olurnen corno vapor a la
trriiperritiira ainhicnte T y presión P, la densidad d ~ vapor
l
y su peso moj t ~ t t l asc
~ ~.alculanficihncute.
J)ETERMIKACION EXACTA DE LOS PESOS MOLECULARES
Los pesos molcculares calciilados mediante la ley de los gases ideales
son aproximados incluso ciiando los datos son precisos, y la razón es que
- i h a la presión atmmfériia dicha ley no representa con exactitud la condiirta de los valmr?s. Por ese nioti\,o: si deseamos un valor exacto de1 peso
:iiolecular: dehe efectuarse un tratamiento especial de la ley de los gases
idenlcs o mar nna ecuación de los cascs más precisa.
Ciiando se conocen las constant~sa y 6, el uso de la ecuación de van
rG.r \\'aals nos d a r i una concordancia niayor entre los valores calculados
,. los ohseri~ados.Para nuestro propósito sin ernhargo la ecuación de Ber:I!i.lrit es la mis conicniente pero sólo pucde usarse cuando la temperatura
v ~rcsiióii crítica de la sustancia e s t h disponibles. Como n = W / M ,
!.iiriiación ( A
nos da para .U.
\ l i s ~ Ú i i .como W / T 7 = p, la ecuación 61 se escribir& así:
cual sc ditii:iie la densidad cuando se conoce M, o viceversa.
I,a in:ixirna exactitud lograble con la ecuación de Bertheiot se mostrará
i ' í ~ i i los datris del cloriiro de metilo siguientes. T , = 416.2'K,
Pc = 65.8
:rtni_niientr;is que la densidad en las condicioiics tipo es 2.3076 g por litro.
1 )? nqiii quc por la cruación 162)
de
I:i
=
50.62 g mol - 1
la ohtciiicln teói-irninente es: 50.19. Con los niismos datos, mediante la
1i.y dc los p i r s iclcalci <ihteiirrnos: 51.71.
L'n initrirlo drt ohtcniión de los prios iriolrciilarcs rxactos es VI dc 1 ; s
i l i ~ i i ~ i d n r l r iir,ii/<c
i
l i c ~iiiCtodn <iiir rla rxwlrritr.~risiiltados, estA basado
).
50 Capítulo 1: Gases y líquidos
en el hecho de que cuando la presión tiende a ccro la Ic, de los gasrs es
exacta en rualquier caso. Las densidades dr un qas o vapor sr: drtmninan
a una teuiperatura dada y a la presión atmosférica otras menores. La
relación se grafica contra la presión P. Si el vapor n qas son idealis. esta
relación debería ser la misma a todas las presiones
P T
P=-R
Y
-P = -
P
M
M = constante
(63)
RT
Sin embargo, como esta conclusión no es válida para los gases i-cales, la
relación p / P se modifica con la disminución de la presióii. ?ifortuiiaciamente la gráfica es casi lineal en la práctica y puede extrapolarse a cero
sin dificultad y entonces tenemos la relación (>'P límite correspondiente a
la ley de los gases ideales.
Este método se ilustra con los datos del bromuro de hidró:eno dadoi
en la tabla 1-6, mientras que la figura 1-9 nos muestra la grifica dc p,'P y P.
T ABLA 1-6. Las denridades del HBr a diferentes presiones ( 0 ° C )
El valor extrapolado de p / P es 3.6108 g por litro por atmósfera a 0°C. De
aquí que el peso niolecular del broiiiuro de liidróseno es
M = 3.6108 X 0.082054
x
273.15 = 80.93
El valor calculado a partir del peso atómico es 80.92.
RESULTADOS D E LAS MEDICIONES
DE LAS DENSIDADES DE VAPOR
mol-'
l<e\ultado\ de la, mediciones de las densidade? d e vapor 51
67
Figura 1-9. Grdfir:i de p / P contra P para el HBr a O CC.
en u n intervalo de temperatura establecido. es la qui: se podría esperar de sri
fórmula simple. .4sí acontece con el amoníaco, diósido d e carbono, monóxid o de carbono, Iiidrógeno, cloruro de metilo, fluoruro de metilo, éter etílico:
teti-acloruro de carbono, cloroformo: disulfuro de carbono y acetona. Sin
riiibargo: hau otras sustancias que exhiben iina conducta anómala. Estar
;:iiedeii dividirse en dos grupos: ( a ) el constituido por aquellas sustancias
con densidad de vapor más elevada de la que era d e esperar de sus f ó m u lar siiiiples, y (bj los de u n a densidad menor. Todas estas anormalidades
ion mayores de las quc podría obtenerse por la incertidumbre experimental
ii 1101 la desviación de la idealidad.
1,as sustancias que presentan densidades ariormalmcnte elevadas, se coníidera que presentan asociación en la fasc d < vapor: es decir, son mol~culas
ioinpucstas de rnás de iina unidad ertriictural simple. Concuerda con este
11unto d e vista el Iiecho d e que el peso molecular calculado es u n número
eiitwo i ~ i í i l t i ~ lde
o la fónnula siniple. Así sc observa que el cloriiro de aluii:iriio ? t i rsiado de vapor es (AlCI,,)?6 Al,CI,,. el cloruro férrico es Fe,CI,,,
i.1 rloriiro de txrilio es Bv2<:l,: l; el de ;dio: Ga,CI,. El a m f r e cs otra
custar1i.i~.qiir rriiicstia difcrentrs estados de asociaciiin en su fasc gaseosa
a difereiit?s tcmpcratuias. I.ar sustancias que cxliiben dcrisidadcs d e vapor
anoriiidinciitr bajas, se dis<iciari por efecto del calor i:n niolí.culas m i s
sii~iplrs~
11) que coiidiice a iin iiúrnero de liartículas niayor y en consecuencia
a iiria dciisiilacl nieniir j ~ i r r iuna presión dada. ;\si el vapor del cloriiro de
ainoiiio coiitirric S I I ; y IIC1 como i-ecultado d e la reacción:
52 Capítulo 1: Gases y iíquidos
anormalidad si su temperatura es suficientemente elevada. Así por ejemplo
el C 0 2 se disocia arriba de los 2000°C en CO y O, lo mismo sucede
con el cloruro de aluminio a W ° C , que es AI,Cl,, pero a 50O0C forma una
mezcla de Al,CI, y AlCl,, mientras que a llOO°C no existe otra cosa que
AlG,. Si aún se calienta más, este último compuesto se disocia en Al y C1.
De aquí que cuando nosotros hablamos del peso molecular de una sustancia en fase gaseosa es muy importante tener en mente la temperatura a
que nos referimos.
LA CAPACIDAD CALORIFICA DE LOS GASES
Se define así a la cantidad de calor necesaria para elevar la temperatura de la unidad de masa de una sustancia 1 @do. Así el calor especifico es el número de calorías requerido para elevar 1 grado centígrado
la temperatura de 1 gramo de sustancia. Los cálculos químicos se hacen
más frecuentemente en base al número de moles, y por esa razón, es más
conveniente tratar con la cajacidad calorífica molar que es la cantidad
de calor preciso para aumentar la temperatura de un m01 de sustancia 1
grado. Forzosamente resulta igual al calor especifico gramo multiplicado por
el peso molecular de la sustancia en cuestión.
Hay dos tipos de capacidad calorífica, esto es, según se calienta la
sustancia a presión constante o a volumen constante. En este último caso
toda la energía proporcionada va a incrementar la interna de la sustancia
y a esa capacidad la designamos por C,. Por otra parte, al calentar una
sustancia a presión constante, la energía suministrada no sólo incrementa la interna sino que hace posible la expansión de la sustancia venciendo
la acción que ejerce la presión atmosférica, por eso esta capacidad que
designamos por C,, debe ser mayor que la anterior. En líquidos y sólidos,
donde la variación de volumen por calentamiento es pequeño, la diferencia entre C, y C, es ordinariamente ligera. Sin embargo, en los gases donde
aquellos cambios son grandes, la diferencia C, - C, es significativa siempre
y no debe despreciarse.
Es posible realizar alguna deducción importante sobre la conducta de
los gases relativa a los calores específicos, a partir de la teoría cinética.
Según la ecuación (36b) la energía cinética de traslación de un gas ideal
por m01 es
Si ésta es k única forma de energía que el gas posee (monoatómico), la
diferencia correspondiente a dos temperaturas distintas T,y T,valdrá:
La capacidad calorífica de los gases 53
Cuando Tz- T i= 1, AE es la energía necesaria para aumentar la de
traslación de un m01 de gas, un grado, sin realizar un trabajo externo, o
en otras palabras, la capacidad calorífica por m01 a volumen constante
C,, de aquí que:
= 2.98 cal grado-' mol-'
(65)
La teoría cinética predice, por esa razón, que C, para cualquier gas ideal
con energía de traslación únicamente es de unas 3 calorías por mol, y,
además, su capacidad calorífica debe ser constante e independiente de la
temperatura.
Análoga predicción puede hacerse para la capacidad calorífica a presión constante, C,. En vista de las cunsideraciones anteriores se deduce que
C, = C , + w
cal grado-' mol-'
(66)
donde zu es el trabajo realizado contra la presión de confinamiento P, cuando un m01 de gas se expande desde un volumen V , a TIal de V* a TT,=
T I + 1. El valor de m puede obtenerx por la relación
que se discutirá con mayor detalle en el capítulo 3. Si diferenciamos ahora
PV = RT manteniendo constante la presión, tendremos: PdV = RdT y
al sustituir en la ecuación (67) vemos que:
.
=
/:'PdV
=
R(T2 - TI)
=
/-; RdT
Cuando T2- T I = 1 ésta se reduce a w = R por mol, y de aquí que para
un gas ideal
C, = C.
+R
cal grado-' mol-'
(68)
La ecuación (68) es válida para todos los gases, y permite la conversión de C, a C, o viceversa. Al insertar el valor de C, en la ecuación (65)
tomando en cuenta el de R , vemos que para un gas ideal que posee energía
de trorlación únicamente, C, debe ser igual a
= 4.97 cal grado-'. .mal-'
(W
54 Capítulo 1: Garei y líquidos
En conseciieiicia, C, resulta coristantc c indeprndiente de la tenipeiatura en
todos los casos, lo mismo que C,:y la relación C , i C , criniíinniente designada
110' y , debe ser constante e icual a
En la tabla 1 -7 se presentan los valores de C,:C,: C, - C,: y y para
diferentes gases a 1 5 T Se observará antes que nada, que el requisito
C,, - C, = R = 1.99 cal por mol, es satisfecho por casi todos los gases dc
la tabla. Además las predicciones d e la teoria cinética por las cuales
C, = 4.97 y C, = 2.98 cal m01 se ven apoyadas por las capacidades caloríficas de u n grupo de cases que iiiclu?e al argón y helio. así como también
al kriptón. xenón y u n grupo de vapores metálicos. Sin embargo, la predicción no es válida para los restantes cases d e la tahla. Su inspección
revela que los diferentcs gases pueden dividirse en clases de acuerdo con los
valores de y. El primer q u p o lo constituyen los cases que obedccen la
teoria cinética con u n valor d e y = 1.67. Los demis están acrupados según
que :i sea próxima a 1.4, 1.3 ó tenga otros valores menores. El decrecimiento en y está asociado siempre con la complejidad de las moléculas
T ABLA 1-7. Capacidad calorifica de los gases a 15°C
(Calorías mol-l grado-')
Gas
Fórmula
Cn
C,
C p - C.
8.75
8.63
8.82
9.;1
6.71
6.54
6 :;
2.04
Argón
Helio
Monóxido de carbono
Cloro
Hidrógeno
Cloruro de hidrógeno
Nitrógeno
Oníg~nu
Dióxido de carhuno
Si~liurod e hidrógeno
Oxido nitroso
Dióxido de azufre
('0:
HiS
\-.O
SO:
, ~i
-,
?.O9
2.05
2.18
1.30
1.32
1.30
1.29
Teoría de los gases no ideales 55
iiivoliicracias. Así el argón y el lielio cuyo valor de y es 1.67 son monoatómicos: las rustancias con un valor de y igual a 1.1 ó próximos a este valor, como
1.1 0;: Kl,
Cl,, son diatórnicac y cuando aquel coeficiente es próximo a 1.3
cui-responde a sustancias triatórnicas. Valores aún menorcs de este Último
iiiirnei-o corrispondcn a moléculas m i s complejas. Finalmente señalaremos
rluc todas las sustancias cuyo valor de y es menor a 1.67 poseen valores
de C, y C, mucho rnayores a los uredichos por la teoría cinética de C, =
l?RyC,=",iR.
Estas capacidades caloríficas sugieren que el supuesto fundamental de
que 13 íinica energia de un gas es cinética; no es válida en todos los casos.
Lila riiol6cula monoatómica puede realizar sólo un movimiento de traslaci6ri y las dedurcioncs de 13 teoría serin correctas entonces, pero cuando
1.1 irioltciila es complcja, entonces esii sujeta no sólo al movimiento de
t;.aslación sino también al de rotación y vibración. Si imaginamos a una
iiiolécula diatómica como una "pesa de gimnasia" unida por u n resorte
elistico, entonces los dos itomos pueden ejecutar vibraciones entre sí a lo
larsu de la línea de sus centros. M i s aún, la molécula como una unidad
~ x ~ e drealizar
e
rotaciones alrededor de ejes perpendiculares a la línea de
unión de los centros de masa de esas moléculas. Estos movimientos invohci-an términos adicionales para la energía del gas; y si dependen de la
ieinperatiira, como cs el caso, aparecerin términos adicionales en la ecuación de capacidad calorifica del gas. En los capitulas 16 y 18 daremos una
discusión detallada de las erierzías de vibración y rotación de las moléculas de gas.
TEORIA DE LOS GASES NO IDEALES
Se rrclucc csencialmente a la de las fuerzas intermoieculares de van
ahora para discutir la naturaleza
i1i.s l\-aals. .4unqiic no estamos
r l estas
~
fuerzas:- es sin embargo importante presentar un breve resumen de
los res~dtados. La tcoria nos mseiia que la energía de interacción, E',
m t r e un par dc nioiéculas esti dada por:
h x i c
.4 y B so:i constantes caiactesísticas de las moltciilas implicadas,
iiiin constante cuyo valor puede variar
r i.s la distnnri:i di: srp:iiación y n
56 Capítulo 1: Gases y líquidos
desde O a 12. En estas cciiaciones, el primir término de la derecha represriita la atracción y el segiindo la rrpiilsiin intranioli:ciilar. De esms c c x ciones es obvio que las fuerzas interriioleciiiares son clc corto alcance en
su carácter, y que aumentan con gran rapidez cualido la distancia entre
12^\ moléculas se hace pequeña.
El estudio de estas interacciones hizo posible la explicación trói-ica del
se,wndo coeficiente virial, y con menor éxito del tercero, pero aún no ha
sido posible establecer una teoría que dé cuenta cabal del comportamierito
P-Y-T de los gases en una amplia zona de valores de la teniperatura
presión.
LIQUIDOS
Desde el punto de vista teórico. un líquido se considera como uiir continuación de la fase gaseosa en una región de volúmenes pcqueiios y atrarciones inoleculares muy grandes. Las fuerzas cohesivas en un líquido dchen
ser más fuertes que las de un gas incluso a presiones muy altas, porque son
suficientemente elevadas para mantener las moléculas en im volumen definido. No debe pensarse que están rígidamente fijas; tienen algún ~ r a d ode
movimiento, pero restringido, y su camino libre medio es mucho incnor
que en la fase gaseosa.
Nuestro conocimiento de la naturaleza del estado !íquido cs incompleto
aún. A causa de la proximidad de las moléculas entre sí, sc observan efectos propios característicos, que en los gases son secundarios ciiando se prrsentan. Así sucede con el agrupamiento, asociación y orientación geniral
de las moléculas en algún orden, aunque no miiy pron~inciado.La situación
de los líquidos es muy complicada y el progrcsn en su conocimiento ha
sido bastantr lento.
LOS FENOMENOS CRITICOS EN LOS 1,IQVIDOS
Si un líquido como el agua, se coloca en un tubo vacío, quc se sella
después, se evaporará en parte y ejercerá una presión aniloga a la dc un
gas, y si la temperatura es constante se establrce un equilibrio entre las
fases líquida y vapor. La presión de vapor establecida es característica
de cada liquidc y es constante a cualquier temperatura dada; se le conoce
como la presión saturada de unpor del liquido qiie se incrimerita continiiamente con la temperatura. Así a 2j°C la prcsióii de v a p r del a i i a es
23.76 mm de Hg, mientras que a 100" ~s 760 mrn dc Hg. A mcdicla que
el agua contenida en el tiiho scllado se ralicnta dc nucvo, se evapora mis
y más a p a y la presión se sigue incr~inentando.En todas las masion~scxistc
un Iíniite definido de drinarracióii o mcnixo. cntrc pl líqiiido y la fasi. dr
vapor. Cuando alcariz:iriios In ternjicintiira clc 37.1C , rin cnih:~l-ir[>,1.1 n l r . l i i s -
Las relacione, P-V-T cii gaie,
>
líquido,
57
i:<i
se hace indcfiriido y dcs:ip;irecc. .l
esta rciiiperatura las propicdadcr
ilrl líquido y vapor si: 1i:iceii iiiíriticas. no 1i;iy diutincióri entre arnhos. Lrn
l i r l ~ ~ i dcii
c cita cmdiiióri sc i,iimentra cri el pun:o ci-ítiro. L a triiilieratiira,
la ~ x r s i ó i idc v a p w saturado, y el vriluiiieri ~riolnrcorrispondiente a cstc
f i i r n 13
ri6n critica. y el ~ o l i i punto se di,sigia coriio la t < ~ ~ , ~ / ~ r ncritica,
n l c n clitico r e y ~ r a i v o s . Si15 ~ a l o r r sque son constanter y c~iracteriiticos
di, cada sustancia. se conocen como cominnti r ciíli<-os.Para cl azua ion las
si:iiientes: t ,
3; t. l^C:: P.
21'J.j ariiiósfir;i~.y l.,. = 58.7 cc por mol.
A1 calcntar el riiho scllado aún livi-amcnte por encima clc 13 tcmpiratiira critica no Iia? iiinriina e\idi:ncin de que esi5tc líqiiido. 1.a masa
tot:il :aseosa perInaiirii. r ~ ii s i cstado, indel~ericlii:nteiiientc de cuiiito se
c;iliiriin o c u i n grarirle Tea la p r e i i h extci-na apiicada. Como los feníimenos descritos cn PI caso drl agua los :iresentan todos los liciiiidos. se 1lci.a
J. la concliisiiin de q i i i . n i ~ y i i nlíquido existe a tales temperaturas por enciiiia de la crítica hnjo ciialqiiicr prc\ión que se aplicjuc.
en cl tiiho sellaclo
Los ienórnenos críticos son revirsible~.(Cr~aridoel
se rrifría drhajo de la temperatura ci-ític;i. si la presión es siificicntemente elcvada reaparece el riieriisco y d c niievo tcncriios do5 fases: líquido
y vapor.
-
-
I..\5 R E L A C I O N E S P-\ -T E S G.%SES Y LIQUIDO§
El prirner dato coiiipleto d c las relaciones P-1.-T dc u n a siistancia en
:iriiln>s ertados, ?ni y iíquido. iilrron ohtciriclos por Aridrc\i-5 "en el dióxido
clc carhoiio, 1>31aello midi6 la ni-iaiióii dcl ~oliirricndr ('0, con la preqií~n difrrcntes temprrntiirau, dernostraiido qilc la ternperailira crítica
del C:O, ei 31°C: a una presión crítica de 7 3 atm¿>sferas.
1.3 f i q ~ r a1-10 i n i i r s t ~ iuna grifica pi-piii>n-voliinien del ( : O 2a divesSas tciii~leratlisas Constniltrs. co11oii6llche cada una de las clirvils romo
i i i i i i r n i r i r i, l í n i n i iiot<:,-niicor.
1.0s datos d r la g r i f i r a iio sc dehin a Aricire~vssino a irivtrtigudori-s
!jr)stil-iorcc. L a lírica isoti.l.~mi~osrespondii.nti.a la temperatura dc 4X.1°C
?S a i i . i ! o ~ a
la iiiliíhola esigidn por la 1c)- dc H i y k y n o Iniiestra la míriiina
pi-iwicia dc dióxido d e cni-hono líquido aún :i las pscsio~icsm i s rlrvadni
alrniiirhlt.5. Triiales cr>iidicioiics si. lozrari a 35.5. 32.5 y 31.1OCC IXTO "1
apiii.:~~la ir.? dc Boyk se ohsema u n ri-i-rii- coiiridci-:~hli.. poriliic el s a ?
r!o se corii!ioit:i idenlriiriite. A 70!38'C, sin r r i i h n r p el <:O.:pirir~anecr
S a e o r c íiniranientc n psoiorics nirriorcs dc: 7 3 atrníisicrau. (liiica a6 . A 7 3
~ltiliósfera?.f1~11rito
i> apawce el priiii<~rIíq~i;ilon la tr.niIi<xituin m i s alta
i'I1 qui: l > ~ ~ endhrs c ~ ~ : i rel
v Iíqiiido, por Ir> ciinl :10.<18'C dchc v r 1.1 tcmj1i:raiiirn crítirn dr:l (:O1, V i i inri-rnicrit~p o ~ t c i i o rc ~ 1:i
i prcsióii a dirha
1
1 a
f ' iriurstrn iinir::inir.ritc la p , ~ i ! r i : idi. liq>iido y r n
58 Capítdo 1: Gasa y líquidos
I
Volumen-a
Figura 1-10.
I
Isotemiaa del
COI.
consecuencia esta línea representa la compresibilidad del dióxido de carbono líquido a esta temperatura. Debajo de 30.98'C, la conducta del gas
en compresión es muy diferente, como se juzga en las isotermas 21.5, 13.1; y
a 21.5OC, por ejemplo, existe un solo gas a lo largo de la línea di. En i aparece líquido, con un volumen específico n, y la presión del sistema permanece inalterable mientras coexistan el gas y el liquido. Durante esta etapa,
u$ aumento de la presión produce simplemente una condensación mayor
hasta que se alcanza el punto f, en donde el gas se condensa totalmente, y
entonces una nueva sobre-presión origina compresión en el líquido únicamente, como nos lo enseña la línea fg. A temperaturas más bajas, la
conducta es análoga a la de 21.5OC, exceptuando las porciones horizontales,
que corresponden al intervalo de coexistencia del líquido-vapor, que se
hacen más largas a temperaturas m& bajas.
E1 principio de continuidad de los estados 59
De esta explicación es posible concluir, que, en el área situada a la
izquierda de la que tiene forma de bóveda y debajo de la linea bE, existirá 5610 COZIíquido; a la derecha de bE y del área en forma de cúpula
existe únicamente CO, gaseoso, mientras que en el interior del área repetidamente citada hay una coexistencia del Iíquido y vapor.
Todos los gases se comportan análogamente al C o z por compresión
isotérmica, pero en cada caso las curvas se desplazan de acuerdo con las
características y temperatura crítica del gas en cuestión. Así, por ejemplo,
la temperatura crítica del helio es - 26S°C y el área en forma de bóveda
se mueve hacia abajo; en tanto que la temperatura crítica del cloro ec de
144OC y el área en forma de bóveda ectá desplazada hacia arriba recpecto
a la del CQ,.
EL PRINCIPIO DE CONTIiVUIDAD DE LOS ESTADOS
Para efectuar nuevas consideraciones teóricas es esencial mostrar que el
estado líquido no representa una transición discontinua y aguda del gas,
sino más bien una continuación de la fase gaseosa en la región de las atracciones intermoleculares intensas y volúmenes muy pequeiios. Nos pmponemos logrado mediante las consideraciones siguientes: supongamos que se
desea convertir el COZlíquido a 21.5OC y presión establecida por el punto
A de la figura 1-10, en gas a igual temperatura y una presión dada por el
punto E La forma más fácil de efectuarlo es siguiendo la isoterma de
21.5OC al reducir la presión a lo largo de la línea AfiB. Al hacerlo, aparece
el gas de repente de manera brusca, y coexiste con el Iíquido a lo largo de la
línea fi, hasta que finaimente desaparece todo el Iíquido al alcanzar el
punto i. Igual transformación puede realizarse de otra manera. Si se calienta el líquido en A manteniendo constante el volumen, el aumento de temperatura conducirá al de la presión y la masa se mueve a lo largo de la
línea AEC. Tan pronto como el CO, se encuentre debajo de la isoterma
crítica, punto E, el CO, es líquido y si lo sobrepasa se hace gas. A la temperatura crítica, como acabamos de ver, el líquido pasa imperceptiblemente
a gas en forma continua, y de aquí que al calentar el líquido desde A a C
lo transformamos sin discontinuidad. Una vez el gas en C puede expandirse hasta D a una presión constante por calentamiento, y entonces se
enfría a volumen constante desde D a B. Por esta serie de operaciones
podemos convertir el COZIíquido en gas a 21.5OC sin introducir una discontinuidad entre las fases.
La inferencia de este principio de continuidad de los estados es de gran
importancia porque sugiere que si tenemos una ecuación de estado satisfactoria en una región de presiones elevadas y temperaturas bajas, dicha
ecuación debe aplicarse también a las condiciones que prevalecen en el
punto critico y en el líquido mimo. Verema a continuación cómo la ecuación de van der Waals satisface t o d ~
ata8 w i e e n o a 8 .
60 C'apitiilo 1 : ( r a w
)
liquido\
L.l hPl.lC.1CIOS UE
LA ECC:ICIOS DE \.-;\ND t K b'.1;\LS
.1 L.1S ISOTEKMAS DEL DIOXIDO 13E Ci.1RUOSO
-41 riistiiuir en la ecuación de van der 'i\-n:ik n por 1" i u i i k i d . y lo,
valoi-cs dc n y b generales por los del í:(>,:
es decir:
l~<~dciiios
c;ilciilar para una temperatura dada 1'1 reiüciíiii P-1. por cxcinin.
debajo y e n la temperatura critic3. 1.0:. re~iiltadosd r tal cilciilo s i req~irrien en la fi,~iiris1-11, L a gi..Ífica. en ~ e n e r n l ,es 3n:iloga 3 13 uhtcriidn
experimeiitaliiicntc. A t , , por ejemplo; situada encima de la timperatura
critica. la rrlación P-l' correspoiidc muy aprosirn;id;inicnte a la iioteima de
-t8.1eC de la fi'ura. 1-10. A t , que es l ; critica
~
se ohicrva un lixero salta
en o, el punm critico, que e i t i de acuerdo con la observación. Debajo de la
temperatura crítica, el intervalo quc determina la coexistencia di.1 líquido
y gas rrt,i indicad» por la línea cii foiiii;i de S. h r d en l.$. i.n l i i ~ dr
r p r
i.1 intrtialo de yreiióri criiictariir olicrnadn. I'or rqa r a ~ í m .Y cn e w i m
I>ctei.rninación dc lai comtante, d e van der M'aals
61
Esta ccuación es cúbica en V., y par3 un valor dado de P ? 7.. dai-:i
iics soliiciorirs diiereritcs de 1' cri gr:ncral, qi.c piiccii.n ?vi- todas iialcs.
11 una real y positiva y las otras dos iriia+miar. :\sí 1:i fi-lira 1-11 iiiuciiin
i.11 t..: las tres raíccs d. c y b: niiiiitrx iliic cn t , IX'.x:11t3 una sdü. Sin
cnib:i:.<o. en el punto crítico ins tres raíces son i i u sólo reales y positi~assino
i<!Ciiticas e i p a l e s a T.,. I k aqr;í: In <!ii<:rcrii:ia :I;- 1
0;y i.n coii?ITLI<.IIC~~.
(1. - 1-, .< -- O
(74)
I;ii r1 ]>iiiito ciitico las c:cuariimrs (ij) \ (7:; d i d ~ i isi.¡
1
í i
d : los ciii:iicii.iitrs d i t e n d i - r n i m
ii1ínlii.n~..'il roin-
62 Capítulo 1: Gases y Líquidos
De la ecuación (77) se obtiene para a
mientras que las ecuaciones (77) y (78) nos dan para el valor de b
Así obtenemos los valores & y b cuando los de P, y V , son conocidos, o
viceversa.
Ordinariamente el volumen crítico es la constante conocida con menor
seguridad, y por esa razón, es preferible calcular a y b a partir de T , y P,
únicamente, y se logra con facilidad por eliminación de Vc~entrelas ecuaciones (76) y (80), con lo cual tenemos
De nuevo, entre las ecuaciones (76), (80) y ( 7 7 ) se deduce que a vale:
También una combinación entre las ecuaciones (76) y (80) nos proporciona el valor de R en función de las constantes, es decir:
Aunque la ecuación de van der Waals predice un valor de 2.67 para el
coeficiente en la ecuación (83), los valores del mismo son generalmente más
aktos y difieren entre sí en gases diferentes. Así en el caso del helio esa
constante vale 3.18, y en el agua es 4.97. Estas diferencias obedecen a las
incertidumbres inherentes a la ecuación de van der Waals.
LAS CONSTANTES CRITICAS DE LOS GASES
La tabla 1-8 da los valores de las constantes chicas de algunos gases.
En lugar del volumen crítico, se da la densidad crítica; es decir el peso de
sustancia en el punto crítico por centímetro cúbico. El volumen crítico
se obtiene al dividir el peso mokulax & la sustancia por ia densidad
critica.
Las constantes criticas de los gases 63
TABLA1-8. Constantes críticas de los gases
Amoníaco
Argón
Dióxido de carbono
Monóxido de carbono
Cloro
Etano
Alcohol etílico
Etileno
Helio
Hidrógeno
Neán
Oxido nítrico
Nitrógeno
Oxígeno
Propano
Tolueno
Agua
Cailletet y Mathias hallaron que cuando los valores medios de la suma
de las densidades del líquido y vapor saturado de la sustancia se grafican
contra la temperatura, se obtiene una línea recta, como nos lo muestra la
figura 1-12. La ecuación de esta línea es
donde dr es la densidad del líquido a una temperatura cualquiera t, do la
densidad del vapor saturado a esa temperatura, y A y B constantes evahadas gráficamente. Una vez que se determina la ecuación, la densidad
crítica se puede evaluar para la temperatura crítica d, = di = d,, y la
ecuación se reduce a ,
1
1
La sustitución de t , nos da entonces la densidad crítica. Estas densidades se
obtienen con mayor seguridad por este procedimiento que por medición
directa en el punto crítico.
Si sustituimos en la ecuación de van der Waak bs valores de a, b y R
proporcionados por las ecupUones (81), (&2), y . (88), obtenemos
64 Capitrilo 1: <:%\e? y líquidos
dos y gmcq. Se la roiirici: coiiio iiiu i c i i n c i < i nridir<-ida di. cct<rdo. Su sirnifii-;ido iibico m que p r : i 1111 valor i\t.ibleciclo dc T, > P,, triclos l<is lic!iiid»i
) ,<;,\,,\ <lt!t>,TÍa!l posrcr .i<ild \,>I,,IIIc,,c ~ ~ r r ~ ~ ~ ~ ~ ~l .~, , ! ~ l ~ ~ ~ l l l ~ ~ :
Estr principio rs siih p i c i a l i i m i t c ci>riccto. y iugiere que es posihle
ol>teiir.r iiri:r c~irc1;iciimi i i i s c u i t a dc los c l a t o ~c\lii.iiiiirnt.rlcs ciinrido las
r l i n , i < . i \ siiit:i,ici:is r.st.iii cii r i i , t.st;idi,s
i,ii,~~ljr~,i<lii~iiti.c.
<.S c l < r i l - n ii.il.ili \
v:il<>ii.Y',. I', y 1>,. E1 Iji-iri<iliiovs ir i i w fii.ciii,iiit. y uti!id;iil 1'11 i < . i , .
n,ri<liii.iiiiiiay v r i 10, r i l r . i i l , i s d<. I:, iilX,.,,i,.,i;, ,,,,lllllc:l,
,,,,,y ~ i ~ ~ ~ ~ r i : i l l l l ~ ~
Licuefación de los gases 65
I.ICL-EFACCIOS DE LOS GSSES
El ~ n é t o d oparticiilzr empleado depende d e la natiiraleza del gas. Los
~ n p o r e sd c las siistaiicias que son líquidos en o cerca d e la temperatura
:iiiihiente y pr<:rión atnimférica sc condr,iisan oinrplcn~cntepor erifriamiento.
Otras siirtaricias que son Iíqiiidas a teinprraturas ndis bajas pueden conilciiiarsc bien, sea por presión o por iina combinación d e enfriamiento y
i.<iiiipi-rsiónEl enfriamiento reduce corisiderahlen~entela presión requerida
~ n r ala liciirfaccióii corno priedc Terse en la figura 1-10, Con los gases
.prrmanrntes" sin i r n b a r ~ o ;tales como el oxígeno, nitrógeno y helio, la aplicación d e la prcsión no ocasiona licncfaccióii y es necesario para lograrla
iicurrir a procidimientos i n i s complicados d e enfriamiento, compresión
y expansión antes de poder licuar dichos yases.
Para que el proceso que nos ociipa sca factible, un gas debe enfriarse
debajo d e su temperatura crítica y corno tstas son muy bajas, como se
puede ver en la tabla 1-8, ia licuación de los gases "permarientes" exige
1111 erifriamieiito intenso así corno una co~npsesióncoiisiderablc. Para lograr
rms teniperatiiras tari bajas. se utilizan dos principios $enerales o iina comliiriación d e los dos, esto es: a'! una expansión adiabitica en la cual se
toma en cuenta el efecto de Joule-Tliomsori,"' y bl se deja enfriar el gas
en si. realizando n n trahajo en expansiim adiabitica contra el pistiin. Estos
iiiitodiis se ilustra11 en el proceso de Linde y Claiide de licuación del aire.
El principio ICisico dr estr procrso cs el uso del ~iriiicipioa ) seiialado
~iiiteririr~nentc.La iiciira 1-13 rniiestra <~rqiiem:iticamentelas ctapas del
rjrimm. El airr se comprime primri-o a m a s c i m atniósferas, y así se
l ~ g i - ala condensación y elirniiiación de la mayor parte dcl agua que contierii. el aire. El calor prodiicido durante la corripresii>n sc elimina al pasar
ti1 p i s por los serpentines C: refrigerados por asira o amoníaco. El gas
v r o 11a'a entonces por una ccfpiral de cohrc SI dr. la cual se expande a una
. .
1 m " i h casi igual a la atniosf6rica iiiediante iina d i u l a 1. El $as 3si
m f t i a d o por cl electo de Joule-Tlioiiiion pasa lmr cl i.erpeiitiil de cohri: y
i.iifri:i aiiri m i s nqirella porrión del mismo cornpriiriida entretanto. Al sepetir este ciclo \aria? i-eres' la teniperat~irare abate d e tal forma que parte
del airr roiidrrisa y si. recoge por el fondo dc la c i i i n r a l., cxtrayéridose.
I : ) rrito sin c n r i i l ~ ~ ~ sc
s n rcirciila d<i nurvo.
\laron y Tiimhull, I n d . I<ri.s. C h r n z , S i , 5 4 1 (1911)
I)r>iixv, C h m ~ ~ c Eni.inernns
al
i ' h ~ i ~ i i o i l j n o » i i i .>lrCr;i\v-Hili
~,
iiuok Coiiilr.iriy.
Tm., X t u x Y , d , 19.1 l .
' t . " S l . h .C i i »> 38. iIO? ( 1s-16)
I ' ' VGdW el ~:a,,;t,h
:4.
.
1
66 Capítulo 1: Gases y líquidos
Figura 1-13.
l
1
Pmceso de Linde para la licuefacción del aire.
En el proceso de Claude, el gas, en vez de expandirse libremente, es
forzado a realizar un trabajo contra un pistón que lo confina; como está
aislado adiabáticamente, dicho trabajo se realiza a expensas de la energía
interna y en consecuencia se enfría. El trabajo logrado se puede utilizar
para operar compresoras.
Los gases fácilmente licuables, como el SO*, amoníaco, cloruro de metilo y dicloro-diiuorometano (freón) se usan en la refrigeración y aire
acondicionado, y en el laboratorio se emplean otras sustancias refrigerantes
tales mmo el hielo, aire líquido, hidrógeno líquido y mezclas de "hielo
seco" (dióxido de carbono sólido) y alcohol, éter o acetona. Con estas mezclas se alcanzan temperaturas de -80 a -90°C. El aire líquido da temperaturas de - 180° y el hidrógeno líquido hasta de -250°C.
VISCOSIDAD
Gases y líquidos poseen una propiedad conocida como viscosidad, que
se define como la resistencia que una parte del flúido ofrece al desplazamiento de la otra. La viscosidad se produce por efecto de corte de una
capa de flúido al deslizarse sobre otra, y es muy distinta de la atracción
intermolecular. Puede pensarse que está causada por la fricción interna de
las moléculas y está presente tanto en los gases ideales como en los reales
y líquidos.
Para definir la viscosidad, supongamos que un líquido se estratifica en
capas o planos moleculares. Designemos al Area de cada plano por A, y
por dy la distancia interplanar. Supongamos además que cada uno de los
planos se mueve a la derecha w n las velocidades u,, u*, etc., donde cada
valor de esta sucesión es mayor que el precedente según el incremento da.
El flujo que tiene lugar así se denomina laminar, y es diferente del turbulento en el cual no se conserva el paralelismo de los planos. En el flujo
laminar la fuerza requerida para mantener una diferencia de velocidad
estacionaria du entre dos planos pralelos cualesquiera es directamente Pro-
Viscosidad de lcm ga~es 67
porcional a A y du, y es invenamente proporcional a dy. En consecuencia
donde q es una constante de proporcionalidad Uamada coeficiente de viscosidad del flúido. La cantidad d u l d y en la ecuación (88) se refiere a la velocidad de corte G, mientras que f/A, fuerza por unidad de área se denomina
fuerza de corte, F. En función de F y G la ecuación (88) se transforma en
Tanto la ecuación (88) como la (89) pueden tomarse como expresiones
que definen q.
El coeficiente de viscosidad resulta así como la fuerza requerida para
mover una capa de flúido con una diferencia de velocidad de un centímetro por segundo respecto a otra capa situada a un centímetro de separación.
Aunque la fuerza f puede variar con las condiciones experimentales, el
coeficiente de viscosidad es una cantidad física característica de cada
flúido. En el sistema cgs, la viscosidad se expresa en poies, siendo éste el
coeficiente que requiere una fuerza de una dina cuando A, du y dy son
todas la unid$ en la ecuación (88). Como esta unidad es bastante grande,
pises,
las viscosidades de los gases se expresan en micropoises, es decir
mientras que las de los líquidos se dan en poises o centipises, es decir
10-= poises.
VISCOSIDAD DE LOS GASES
La viscosidad de los gases se mide por diversos métodos, alguno de los
cuales se describirán en la sección siguiente. Los resultados enseñan que
los coeficientes de viscosidad de los gases se incrementan con el aumento de
temperatura. Así en el cloro a una atmósfera de presión es de 132.7 micropoises a 20°C, 167.9 a 100°C y 208.5 a 20O0C.De nuevo, aunque es casi
independiente de la presión a temperaturas bajas, no sucede lo mismo
a presiones elevadas. Por ejemplo, para el CO, a 35OC y una atmósfera de
presión tl = 156 micropoisy, pero a 80 atmósferas y la misma temperatura
1) = 361 micropoises.
La teoría cinética de los gases atribuye la viscosidad a una transferencia
de momento desde un plano en movimiento al otro. Consideraciones de
esta transferencia de momento, entre los planos de flujo nos muestran
que para los gases ideaies está relacionado con la densidad del gas p, el
camino libre medio I, y la velocidad promedio de las moléculas de gas v por
la ecuación:
1
7 = - ulp
3
(so)
68 Capítuln 1: Gaics y líquidos
( h n o rl c ~ i n i i i olihsc i n d i o \ a l í a ini-ciurnr.iit<.< u n la dm4clad del p s .
debe coii<liiir qiic la iiscosidad de un :as idml dcbe ser indcpeiidientr
de la densidad y d e ahí tainbién, de sn pi-e\ión. Esta deducción 5e ha
coiifirmado a prcsioncs relatii.anieiite balas.
L a ecuación (90) puede emplearse pala ralcu!ar el camino lihrc inedio
dirictaniente de los cncficieritrs de 1 iscmidad. Paia Iiacer esto rieccsitanios
sólo sustituir el ~ a l o rde 2 desde la ecuación (4'3 . en cii)o ra5o i iewlta
5e
L-na vez hallado 1, se puede insertar en la tcuación ' k8 y chtener el di'ímetro molecnlar o de1 @ascn cnestión.
I,A VISCOSIDAD DE LOS 1,IQCIDOS
Los líquidos exhiben una resistencia a fluir mucho mayor que los gases
y por consiguiente tienen tinos coeficientes d e visco~idadmayores. En los
p s r s dichos coeficicntcs se incirmcntan con la tcnipcratiira. niicntras que los
de la mayoría de los 1;quidos disminuyen. De nuevo, la viscosidad es independiente de la presión en los gases cuando se trabaja a moderadas presiones pero en los líquidos no succde así sino que IIJ! un ainnento dc la
viscosidad con cl aumento de la l~rcsióii.
L a mayoría de los mítodos cmpleados en la deteiininación de viscoiidades se basa en las eciiacionrs d e Poiseuille o Stokcs. L a primera de estas
dos ccuaciones es
7PPt
71 =8 LI'
donde t' es el voliirnrii dcl líquido d e \iscosidad 7 que tiiiyc cii cl tiempo t
por u n tubo capilar de radio r 1 Ionptud L Injo una p ~ r s i ó nde P dinas poi
centímetro cuadrado. E L cciuci(>ri lis sido \ciificada rclictidamcnte.
Cuando se cmplea en los líqnidoi no es rieciwiio medir todas las cantidades indicadas si se conoce la visioiidxl di. aloíiii liquido de ief~,ri.ncia i i i r i
sepridad.
Si medimos el tiempo de fliilo de un mismo \oiurnen dc dos Iíqiiidor
diLcrcntes por el niismo rapilai. critonces de a i u i i d o i o n la cciiarión de
Poiseuille la relación d e Inc ioeficientei de \ic<o\iclad dc los liqtiidos cstari
dada por
= 1
' 1 x 1.1- l ' ,-l ,-v2
X /,l.
nl'zr'/2
/'.l:
L a v i ~ c o ~ i d ade
d los líquidos 69
Como las presiones P, y P, son proporcionales a las densidades d e los
dos líquidor p, y p?; podemos escribir también
en consecuencia, una vez que p,, p, ) 7, se conoccn, la determinación de
t , y t , permiten el cálculo del coeficiente d e viscosidad, 7,. del líquido bajo
consideraciln.
Las cantidades t , y t , sc determinan más convenientemente con uii
i.icco~ímetiodc Ostwald. figura 1-14. Se introduce una cantidad definida
d e líquido en el viscosímetro inmerso en un termostato y se Ic arrastra por
succión al bulbo B harta que el nivel del liquido se halle por encima d e la
niarc'i a. Eiitoncer sc pennitc la salida del liquido y se mide el tiempo ncc c , ~ r i ol i a n q u e rl liquido de~ciendadi. a Iiasta h. Se limpia el visco~iriietro.
\e ayicga el líqiiido d r releiciicia y se irpite la operaciíiii totalirierite. Dc
estn rriaiir,ia iari simple re obtienen !, t: > se calcula l a viscosiilad del
liqiiirlr> iniiii.rntc la ecuación (9'5).
1.3 le, d e Stolx\ csti relacionada con 1,i caída d e los ciiirpos libics
.t tia\.ís di,l iliii<lo. Luaiido iiii ciicilm c i / ¿ ~ i c od e iadio i- > drnsidad p cac
pui . i i i i ' i i i dc 1.r q i n \ ~ d ; i da traxis de i i r i iliiido de deiiíidad p,,, sobre ei
1 l i i \ i i i r > 'ii tiia I:i iaei/n ~ ~ a \ i t n c i o r l /,,
al
70 Capítulo 1: Gases y líquidos
cuerpo que cae. Llega el momento en que se alcanza una velocidad uniforme de caida para la cual las fuerzas de fricción se hacen iguales a la
gravitacional y entonces el cuerpo sigue cayendo con una uelocidad constante a. Sir George G. Stokes demostró que para un cuerpo esférico
cayendo bajo las condiciones de una velocidad uniforme constante, la fricción f?, está dada por
Icualando las fuerzas gravitacionales y las de fricción vemos que
Esta ecuación, conocida romo la ley de Stokes, es aplicable a la caida
de cuerpos esféricos en todos los tipos de fluidos con tal de que el radio del
cuerpo que cae, r, sea grande comparado con la distancia entre las moléculas
del fluido. Cuando r es menor que la distancia entre las moléculas hay una
tendencia del cuerpo que cae a "descender" y la ecuación no se aplica.
La ley de Stokes es la base de un viscorímetro de esfera que cae. Este
consta de un tubo cilíndrico vertical lleno del líquido en estudio y sumergido en un termostato a la temperatura deseada. Una bala de acero de
densidad p, y un diámetro adecuado para lograr una velocidad de caida
pequeña se deja caer a través del cuello del tubo, y se mide con un cronómetro el tiempo de caida entre las marcas. Si se repite el proceso con un
líquido de densidad y viscosidad conocida, entonces la ecuación (96) nos
da para el cociente de las dos viscosidades
Por esa razón, si conocemos una de las viscosidades, la densidad de la
bala y las de los dos líquidos, se puede calcular la viscosidad del liquido
en estudio por medio de la ecuación (97) con los valores observados de
ti y tz.
En conexión con la \iscosidad se emplea frecuentemente la fluidez.
Esta, designada por 4, es simplemente el valor recíproco de la viscosidad:
es decir 4 = 117.
La tabla 1-9 nos da los coeficientes dr viscosidad, en centipoi?cs, de
varios líquidos a distintas tcmperaturas. Con muy pocas excepciones (coirio
el caso del dióxido de carbono liquido a baja temperatura), la viscosidad d e un líquido disminuye con el aurncnto de tcrnpcratura. Se han pirl-
-
,,
Referencias
71
T ABLA 1-9. Coeficientes de viscosidad de los líquidos
(Centipoires)
Líquido
Benceno
Tctraclomro de carbono
Alcohol etilico
Eter etilico
Mercurio
Agua
0 % ~
0.912
1.329
1.773
0.284
1.685
1.792
20°C
40°C
60°C
80°C
0.652
0.969
1.200
0.233
l.55+
1.002
0.503
0.739
0.834
0.197
1.450
0.656
0.392
0.585
0.592
0.140
1.367
0.469
0.329
0.468
0.118
1.298
0.357
puesto varias ecuaciones para representar 7 como una función de T , de la
cual la mis simple es
A y B son constantes, y T es la temperatura absoluta. Esta ecuación se'
cumple satisfactoriamente para gran número de líquidos.
REFERENCIAS
F. Dodge, Chemicoi Engineering Thermodynarnici, McGraw-Hill Book
Cornpany, Inc., Nueva York, 1944.
2. 11. S. Green, T h e Moiecular Theory of Fluids, Interscience Publishers Inc.,
Nueva York, 1952.
3 . J. O. Hirshfelder, C. F. Curtis y R. B . Bird, T h e ,Wolecular Theory of Gases
and Liquidb John Wiley & Sons, Inc., Nuera York: 1954.
t. E. Kennard, Kinetic Theory of Cara, McGraw-Hill Book Cornpany, Inc., Nueva
York, 1938.
5. C. J. Pings y B. H. Sage, "Equations of State," Ind. Eng. Chem., 49, 1315
(1957).
6. H. S. Taylor y S. Glasitone, A T ~ e o t i r eon Physical Chemirtry, D. Van Nortrand
Cornpuny, I n c , Kueva York, 1951, Vol. 11.
7. A, Weisrberg-er, Phyricol Methadr of Orgonic Chemirtr>,, Interscience PublisherP,
Inc., Nueva York, 1959, capitulo 12.
l . B.
PROBLEMAS
Nota: A menos que se indique lo contrario, debemos suponer que 10s
gales de los problemas siguientes son ideales.
1. Cuatro gramos de metano a 27.0'C .Y .preribn de 2.50 atmósferas ocupan un
volumen de 2.46 litros. Calcular el valor de la constante de los gases R en cc-atrn
s r a d o r l mol-1.
2. Dos gramos de oxigeno sc encuentran enc~rrzdosen un recipiente de dos
litros a una p r c r i h de 1.21 ami. ;Cuál rs la terriprratuin del gas en grados ccntigradoi?
Rerpucrto; 200°C.
72 Capítulo 1: Gases y líquidos
3. Cierto gas ocupa un volumen de 6 litros bajo una presión de 720 mm de
este gas bajo las condiciones tipo de temperatura
y presión?
4. A 0% y bajo una presión de 1000 mm de Hg. un peso dado de N, ocupa
un volumen de un litro. A - 1M)"C el mismo peso de gas a la misma p ~ s i h
mupa un volumen de 0.6313 litros. Calcule el valor del cero absoluto en 5ador centígmdos, y dé razones acerca de la diferencia observada entre aquél y el aceptado.
Respuesta: -271.Z°C.
5. Hallar la densidad del gas amoníaco a 100QCcuando está encerrada a una
presión de 1603 mm de Hg.
6. Suponiendo que el aire sew contiene 79% de N, y 21% de O, en volumen,
calcular la densidad del aire húmedo a 25°C y una atmósfera de presión cuando
la humedad relativa es 60%. El vapor de agua tiene una presión de 23.76 mm de
Hg a dicha temperatura.
Rcspucrta: 1.171 gflitro.
7. La composición de una mezcla de gases en panentaje en volumen es 30%
de N,, 50% de CO, 15% de H, y 5% de O,. Calcular el porcentaje en peso de
cada gas de la mezck.
8. (a) Haiiar el peso del gas helio necesario para llenar un balón cuya capacidad es 1,MX),000 de litros a una atmósfera de presión y 25%. (b) ¿Cuál será la
capacidad de ascenso de este balón en gramos por litro en el aire cuya composición
se señaló en el pmblema 6 ? ( c ) ¿Cuál será su capacidad total de ascenso, en kilo-
HS, a 25°C. ~ Q n volumen
é
ocupará
gramos?
9. A 27"C, 500 cc de %, medidos a una presión de 400 mm de Hg y 1000 cc
de N,, medidos bajo una presión de 600 mm de Hg se colocan dentro de un frasco
evacuado de dos h s de capacidad. Calcúlese la presión resultante.
Respuesta: 400 mm de Hg.
10. Hallar la presión total ejercida por dos gramos de etanno y tres gramos de
dióxido de carbono contenidos en una vasija de 5 litros, a la temperatura de 50°C.
11. El tiempo necesario para que cierto volumen de N, se difunda por un orificio
es de 35 segundos. Calcular el peso molecular de un g a que precisa 50 segundos
Para difundir por el mismo orificio bajo idénticas condiciones.
Rcspucrta: 57.15 gfmol.
12. Compárense los tiempos de difusión por un orificio dado, y bajo las mismas
condicione de temperatura y presión, de los gases H,, NH, y CO, relativas a
la del N,.
13. Por medio de una bomba de vapor de mercurio se logra un vacío de lo-'
mm de H s con cierto aparato. Calcular el número de moléculas que aún permanecen
en un cc del aparato a 27%.
Respuesta: 3.24 X 10*.
14. (Cuál es la energía unética total de traslación en ergios de dos moles de
un gas perfecto a 27'C? ¿En calorías?
15. Calcular la raíz cuadrada media de la velocidad en centímetros por segundo de las molécub del N, a 27°C. Repetir el cálculo cuando la temperatura
es 127°C.
16. Calcular la velocidad cuadrática media, promedio y más probable upreiandoliu en centímetros por segundo, para las moléculas de H, a 0°C.
17. El diámetro de la moltcula de CO es 3.19 x 10-8 cm. A 300°K y una presión de 100 mm de Hg, ¿cuál será (a) el número de colisiones por centhetm cúbico
por segundo; (b) el número de wlisiones bimoleculares; y (e) el camino libre medio del gas
Respuarca: ( a ) 2.23 x 1027; (b) 1.12 x IW'; ( e ) 6.87 X 10s cm,
Problemas 73
18. Repetir los cálculos propuestos en el problema 17 para la misma temperatura pero una presión de 200 mm de Hg. ¿Cuán pronunciado es el efecto de la
presión en lar cantidades buscadas?
19. Repetir los cálculos propuestos en el problema 17 para una presión de 100
mm de Hg, y una temperatura de 600°K. ¿Cuál es la influencia de la temperatura
en las cantidades calculadas?
20. Mediante la ecuación de van der Waals hállese la tempratura a la cual
3 males de SO, ocupan un volumen de 10 litms a la presión de 15 atmósferas.
Rcspucsta: 350%
21. (a) Usando la ecuación de van der Waalr, calcular la presión producida
por 100 g de CO? antenidos en un volumen de 5 litros a 40°C. (b) Compam este
valor con d calculado usando la ley de los gases ideales.
22. A 0°C y bajo una presión de 100 atm el factor de compresibilidad del
O? es 0.927. Calcular el peso de 0, necesario para llenar un cilindro de gas de
100 litms de capacidad bajo las condiciones dadas.
23. Utiliindo la ecuación explícita en volumen de Beattie-Bridgeman, calcúlese la densidad en gramos por centimetm cúbico del N, a 0°C y 100 atm de
Rcrpucrta: 0.127 g/cc.
presión.
24. Utilizando los coeficientes viriales de la tabla 1-4, determínese analíticamente
la presión a la que en la gráfica de P V contra P wrrespondiente al N, a - 50°C
presenta un mínimo.
25. Mediante la ecuación de Kameriingh Onnes, hallar las factores de compresibilidad del C O a -50°C y presiones de 10, 100 y 1000 atmósferas.
Respuerta: a 10 ahn, r = 0.981.
26. Los siguientes datos fueron tomados en la determinación del peso molecular
de cierto gas por el método de Regnault:
Peso del bulbo vacío
=
42.5050 g
Peso del bulbo
gas = 43.3412 g
Peso del bulbo
H,O = 365.31 g
Temperatura
= 25°C
Presión ( m e g i d a )
= 745 mm
+
+
Hallar el peso molecular del gas.
27. En un experimento por el método de Victor Meyer de determinación del
peso molecular del alcohol etílico se obtuvieron los sirnientes datos:
Peno del liquido tomado
= 0.1211 g
= 67.30 cc
Volumen del aire medido sobre agua
Temperatura
= 28.0" C
Presión atmosférica
= 755.2 mm de H g (corregida)
Presión de vapor del agua a 28OC (de ks tablas) = 28.3 mm de Hg
De estos datos (a) calcular el pero molecular del alcohol, y (b) comparar el resul.
tado con el calculado a partir de los pesar atómicos.
Respuerta: ( a ) 46.5 g/mol.
28. El análisis elemental de un compuesto dio el siguiente resultado: C, 39.98%;
H, 6.72%; y 0, 53.30%. En una determinación por el método de Vietor Meyer
0.1510 g del compuesto vaporizado desplazaban 33.8 cc de aire medido a 25'C S*
bre H,O a una presión barmétrica de 745 mm. Calcular (a) la fórmula empírica,
( b ) el peso molecular aproximado, y ( c ) la fórmula molecular del compuesto.
29. Una muestra de vipor que pesa 0.180 g ocupa un volumen de 53.1 cc a
27°C y 760 mm de presión (corregida). La presión crítica del vapor es 47.7 ami,
mientras la temperatura crítica es 288.5-C. Mediante la ecuación 'de Berthelot
71 Capítulo 1: Gase~y líquidos
calcular el peso inole~ul,srdrl Lapor
de los gases ideales.
>
compararlo con el obtenido nicdiante la ley
30. Las deiisld.idrs del C I I , a 0 ° C fueron medidos a diversas presiones obteniendose l a reiultados sicuieiites:
Presión (atmósferas)
Densidad (g/litro)
'/a
O 17893
0 35808
Ih
Respuesta
Hallar el peso molecular exacto del CI-1,.
16 03 g / m d
31. ;Cuánto calor será necesario para elevar la temperatura de 3 moles de
hielo dcsde 0 ° C a 100°C ( a ) a volumen constante y ( b ) a presión constante?
32. Utilizando la tabla 1-4, hallar la temperatura de Boyle del monóxido de
carbono.
33. ( a ) Calcular las constantes dc i n n der Wavls del C_H, a partir de las temperaturas critnis y presiones de la tabla 1-8 ( b ) Esando las constantes ari calculadas hallar la presión ejercida por 10 g de C,H, cuando se hallan contenidos en
un frasco de u n litro a la temperaturv de 13°C.
Reipueita: ( b ) 7.39 atm.
34. Las constantes de I a n der IVaals para. el HCI son 0 = 3 67 atm-litro?
mol-2, y b = 40.8 cc mol-1 Hallar l z constantes criticas de esta sustancia.
35. Una forma modificada de la ecuación de
brin
der Waalr (Berthelot) es
donde todos los términos tieiicn su significado usual, y o y P son constantes. Deducir las expresiones de n, fl y R e n función de lar constancias criticas.
36. Calcular la densidad critica del alcohol rnctilico desde los datos siguientes
t'C
P (atm)
di,,
(S/CC)
d..,
(S/CC)
La temperatura critica es 2.10 0 ° C
37. Comparar las presioiies reducidas del N, y NH, cuando cada uno c j r r c e una
presión de 100 atmósferas.
Reipueita: N > : 2.99, NH,: 0 90.
38. Comparar las temperaturas reducidas del etileno y el H 2 a 2 7 ° C .
39. Hallar la ecuación reducida de estada corrrspondiente a la ecuación dc van
der Waals rriodificada dada en el problema 35.
40. La ecuación dc estado dc u n liquido d a el volumen romo una función de
la timperatura y presión. Más aún, cl coeficiente térmico de c~pansión, a, está
definida como
mientras el coeficiente de compresibilidad, P , lo está por
~
~
En el supuesto de que a es indrpendienti de la trrnperatura y
deducir la expresión de V en funriím de Y' y P.
p de
la presión,
-
Problemas 75
41. f a ) Para el benceno liquido a = 1.21 x 10-d grado-' a 20-C y una atm
dr presión Usandri la ecuación obtenida e n el problema 4 0 y considerando quc a
" S indepeiidicnte de la temperatura, hallar el cambio d c porcentaje en \olumen de
una muestra de bfnceno que se calienta a una atm de presión desde 20" a 5 0 ° C
b ) , C u á l scria el cambio de porccntaie e n \olumen de u n gas ideal calentado
cn el mismo i n t e n a l o a presión ronstantr?
Respueita: ( a ) 3 8 7 0 ; ( b ) 10 2%.
42. (a) Para el benceno liquido /3 = 9.30 x 10-"tm-'
a 20°C y 1 a t m d e
presión. Mediante la ecuación derivada e n el problema 4 0 y suponiendo q u e B sea
independiente de la presión, hallar el porcentaje e n volumen de u n a muestra dc
beiiceno que se comprime de 1 a 11 atmóiferas. ( b ) ,Cuál seria el cambio de porcentaje e n volumen de un gas ideal comprimido en el mismo i n t e n d o de presión a
temperatura constante'
43. Supongamos que una muestra d e bcnceno inicialmente a 20°C y 1 a t m de
prcnión se s o m m a una presión de 11 atmósferas y una temperatura de 5 0 r C
Si a y /3 son constantes, hallar cl cambio dcl porcentaje e n volumen del benreno
' b ) .Para u n gas ideal cuál seria el cambio anterior?
44. El coeficiente d r viscosidad del CI, qascoso a una a t m y 20°C es 1 4 7 0
inirropoints Hallar el diámetro molecular del cloro.
Respuesta: 4.30 10-8 cm.
45. Consideremos dos capas paralelas dc NH, gaseoso, una de área grande y
estarianaria y otra de 10 cm? dcaplazándoie una distancia fija de 1 X lo-" rni
?obre la primera. ( Q u é fuerza cn dinas se requcriiá p a r a mantener l a pelicula supcrior moviéndosp con una ~ e l o c i d a dde 5 cm por scgundo cuando la presión del gas
fs 10 m m de Hg-y l a temperatura es 3 0 0 a K ? E1 diámetro molecular del NH, es
3 X
cm.
46. U n Sar cuya viscosidad es de 200 mirropoisei fluye por u n tubo capilar
de 2 mm de diámetro y 2 metros d e longiutd. Si 5 litros pasan por el tubo cada 1 0
scgundor, ,cuál debe ser la presión al iniciar la salida del gas q u e fluye?
R e r p u e i t a . 5 09 x 10' dinas/cm2.
47. El tiempo de flujo del agua p o r u n viarosimetro de Ostwald es 1.52 minutos. Para el mismo volumcn de u n liquido orgánico d e densidad 0 800 g/cc rl
tiempo es 2 25 minutos Hallar l a viscosidad del liquido relativa a l a del igiia
v su valor absoluto e n milipoises, siendo la temperatura de 20°C.
48. Una bala d e acero de 7 90 g/cc dc densidad y 4 m m d e diámetro requicre
55 segundas para caer una distancia de 1 metro a través de u n liquido de driiiidad
1 10 c / c = Calcular la viscosidad del liquido en p o i s ~ s .
49. U n a esfera de radio 5 X 10-2 cm y drnsidad de 1 10 g/cc cae a \ciocidrd
con%mte por u n liquido de densidad 1 00 c$rc y \iscosidad de 1 00 poise. ;Cuál
es la velocidad de la rsfera?
Reipueita 5 45 X 10-3 <ni/rcg.
50. Supongamos q u c todas las condiciones d a d a en el problrnia 49 se conrera e x ~ e p c i b ndc l a densidad dc la esfera que ahora es 0 90 g/cc. ,Cuál cs la
velocidad de la erfera dcl caso? E ~ p l i c a rel significado del resultado.
VaIl,
51. U s m d o los datos para los <opficientes de \isioiidad del C - H 011 corno
i i n ~función de la tempcratura dados e n la tabla 1-9, hallar las conitvntcr A y B
Para esta sustancia mediante la ecuacibn (98).
EL ESTADO SOLIDO
1,"s s6lidos difirren de los líquidos v <ases por poseer volumen y forma
definida. La estabilidad geornétrica de un sólido no se debe a una diferencia
de ionipacta<ióii entre estados. pumto que la densidad dc una sustancia pneclc sscr mcnor para un sólido que el líquido correspondiente, como
acontece con cl caso del hiclo y el agua. M i s bien, la fornia definida de iin
sólido debe relacionarse con el hecho de poseer unidades eitrnctiirales,
es decir. en luqai del movimiento libre de las moléculas de un gas o liqiiido. estin confinadas a posiciones definidas de equilibrio dentio del cri~tal
del síilido, alicdedor de las cuales las partírnlas pucdcii vibrar pero no
al~cinrloriarlasf:icilrnente.
Las sustancia? sólidas se clasifican ron fiecucncia en cristalinns o a n m {ni C n sólido cristalino es aquel en qne las unidades cstructuralcs consti-
tnyerites se disponm segíin una configuraciún geométrica definida característica de la sustancia. Las aniorlas, por otra parte, aunque poseen muchos
atributos de un sólido, corno la forma definida, rigidez y durera, no mueshan un agiupamirnto ¿onfiguracioiial di finido, Iirir esa r a h n no se coiisidelan verdaderos sólidos, sino líquidos muy sobir cnfriados de iiscoiidad niuy
elevada. M i s aún, las s u ~ t a i i ~ itales
a ~ corno el hiclo, cloruio de sodio o
naftalcnu funden riiarcadarne~~te
a tina teiniieratura constante y definid+
mientras que las arnorfas como el vidrio o cl asfalto lo hacen de un modo
~ r a d u a ly en un intcmalo de trrnperatuia dinplio. Sin embargo, bajo ciertas condiciones, una SUStdn<La atnorla adquiere < aractvii?tiias cristalinac.
como succde con cl vidrio que piicdc ciictalizar ciiardo pcrmanecc Idrgo
tiempo en rcposo o por calentaniicnto. l ) c nuevo, 1.1 hiilc natiirai ni arr
78 Capítulo 2: El estado sólido
estirado exhibe iin modelo definido al examen con rayos X, lo cual es
una indicaciíin de que se iia originado un agrupamiento c o n f i g ~ r a d o ~ d
definido.
CRISTALIZACION Y FUSION
Al enfriar, a presion coristante, un líquido puro experimenta un decremento en la energía de traslación promedio de sus molécula^, y de aquí
que su temperatura desciende Iiasta alcanzar el punto de congelamiento.
en el cual las fuerzas de atracción vencen a la energía de traslación y la?
moléculas se ven obligadas a acomodarse en una configuración geomktrica
caracteristica de cada sustancia. Cuando comienza la cristaliiación se drsprende calor que impide un nucio descenso de la temperatura que así
penrianece iiirariable en tanto ambas fases se hallan presentes. L a remoción
de nuevo calor origina simplemente la cristalización de otras masas Iíquidas, hasta lograi la solidificación total; únicamente entonces la temperatura
corriicnia a descender por enfriamiento. Sc denomina calor de c?iitaliznczón
a la cantidad de calor desprendido por mol d e sustancia.
L a fusión es el proceso inverso de la cristalización. Al calentar un sólido
puro, incrementa su cncrgía de vibración, hasta que en cl punto de fusión
algunas partículas xibran con suficiente energía pala vencer l a fuerzas de
confinamiento, y entonces el sólido fiindc Para una presióii establecida
la temperatura dc fusión es la nusma que la dc cristalización y para que
aquella se efectúe en toda la ma5a hcmos de suministrar calor que compense
la pkrdida debida a las partículas con elevada energía. Se denomina calor
de fusión a la cantidad absorbida necesaria para realizar la transición de
un mol del estado sólido al líquido, y csa cantidad es igual y de signo
contrario al calor de ciistalinción de la sustancid.
CRISTALOGRAFIA
Es la rama de la ciencia que trata d e ia gecmetría, propiedades y e e
triictura de las sustancias cristalinas Concierne a la cristalopfía ceomttrica el emidio d r los a-riiparnientos esl>aciales externos de los planos
cristalinos y forma geométrica de los cri5talcs, y se basa cn las tres leyes
fuiidainent~leiriquicntes: (a! Ir? dc la cnnsta~iciadc lo5 ángulos iriterfaciales; ( b ) ley de la racionalidad de los indicrs, y ( c ) ley de simetría.
La ley de la constancia de !oí ángulos intcrfaciales establece que para
una wstancia dada, las caras correspondiente^ a los planos que forman la
superficie exteina de un crictal intersectan en un ángulo definido, y este
permanece constanre sin importar como desarrollan las caras que comúnmente lo hacen en f o m a desigual en tamaiio y f o m a , pero el á n p l o de
intersección dc do5 caras corrc~~ondientes
es siempre la misma Para cualqi1ir.r cristal dc la misma sustancia.
Cristalografía 79
Es posible elegir, para un cristal, una terna de ejes coordenados de
forma que las caras del cristal los interseczen a una distancia definida del
origen, o bien sean paralelos a alguno de ellos, en cuyo caso su intersección
es en el infinito. Haüy, en el ano 1784, propuso la ley de racionalización de
los indiccs o parámetros que establece la posibilidad de elegir a lo largo
de tres ejes de coordenadas distancias unitarias (a, b, c ) , no forzosamente
i p a l e s entre si, tales que las intersecciones de un plano cualquiera del
cristal están dadas por ( m a : n b : p c ) , donde m, n y fi son númeios enteros
cualquiera incluso infinito, o fracciones de los números enteros. Esta ley
se ilustra a continuarión con los datos de un mineral de topacio, Al,
(FOH),SiO, para el cual cuatro planos distintos tienen los parámetros
siguientes
y de aquí que sus ramnes de intersección son
Cualquier plano particular está caracteriiacio por estas razones que se
rniplcan para representarlo. Los coeficientes de a; b y c se dcnornirian indzres de IVeiis del plano. Sin embargo, estos índices son de uso embarazoso
y se han reemplazado por los de Miller, q u r se obtienen tomando los
\.alnies rcciprocoq de lo? coeficientes de l l ' e i ~y multiplirhdolos por el
número menor que transforma todos lo? recíprocos en niimeros enteros
Asi un plano cula notación d e Weiss esti dada por n : b : cac, se transforma
eri la de Miller o : b : O c, o bien simplcmeirtc en ( l l O ' , porque el orden
n, h, c se sobrcntiende; anAoqamente una cara a : m b : ?i c no? da (104). El
estudiante pucde verificar como ejercicio que los ciiatio plano? di1 topacio
mencionados con antcriori+d son ( 1 11), ( 1 l o ) , (223) y (120' rrqíin la
notación de Millcr para las caras cristalinas.
L a trrcera ley cristalogrifica establece simplemente qiie todos los cristales de la misma sustancia posetn los mismos elementos d r simetría. de la
(iial existen trcs tipos posiblcs Primero, si un criqtal sc di\¡& por uri plano
imaginario que pasa por su crntro. en dos mitades iguales entre sí que son
la una imagen de la otra, se dice cntonccs qiic cl cristal posee un Blano d e
simetría. Scgundo. un cristal tiene una línea de simetria si es posible dibujar
una línea imaginaria que p a x por 511 centro de manera qiie al hacerlo
girar 360°, el cristal aparece sin inmhir> dos, t r m , cuatro o seis veces, y en
80 Capítulo 2: El estado sólido
1
función de rste grado de repetición se dice que posee un ejc de simetria
binario, temario, ciiaternario o senario. Finalmvnte, el cristal posee un
centro de simetría si cada cara tiene otra idéntica en el lado opucsto de este
crntio. El níimero total de planos, líneas ? centros de simetria que poseen un
cristal se denomina elt~mentosde simetrin.
LOS SISTEMZIAS CRISTALINOS
Existen 230 formas cristalinas posibles, y han sido observadas prácticamente todas ellas. En base a su simetría estas 230 formas se agrupan
m 32 clases, que a su r r z e s t h incluidas en seis sistemas. Todos los cristales que pertenecen a un sistema particular se caracterimn por el hecho
de que aunque a veccs cueceri de algún elemento de simetría, se hallan
referidos a un conjunto particular de ejes cristalográficos que difieren de
un sistema a otro en longitud e inclinación entre si. La tabla 2-1 enumera
a los seis sistemas cristalinos, sus características axiales, la simetria m á x i m a
que es de esperar en cada sistema y algunos ejrmplos de sustancias que
cristalizan en varios sistemas. Si el estudiante desea una discusión de las diversas formas geomPtricas que corresponden a cada sistema, debe consultar
los tratados existentes sobre cl tema '
Las formas elemrritalcs como el cubo. octaedro y dodecaedro, figura
esta última que posec doce caras dc rombo, pertenecen todas al sistema
resular y poseen una simetría mrí~ima.De menor simetria pero perteneciente al mismo sistema es el tetraedro.
PROPIEDADES D E LOS CRISTALES
En el caso de los gases. líquidos y sólidos amorfos no sometidos a esfuerzos, las propiedades como el índice de refracción, coeficiente de expansión térmica, condiictividad tGrmica y elktrica y velocidad de soliibilidad
son indeprndientes de la dirección. Lo mismo es cierto para las sustancias
que cristali~anen el sistema re$plar que por las raLones expuestas se les
denomina iiutrópicas. Sin embarso, para las sustancias que cristalizan
en otros sistemas, las propiedades enumeradas arriba varían según los ejes en
q u c se rfectúan las observacioner por esa razón se denominan nnimtrdpicas;
para talcs sustaricias los coeficientes de expansiíin térmica no sólo puedin
diferir con la dirección sino liacerse positivos en una y negativos cn otra.
como sucede con el yoduro de plata. De nuevo, los sólidos anisotrópicos
exhiben mis de un índicc de rcfracción para el niisrno cristal. Desdc cl
punto de vista Aptico, las su\tancias anisotrópicas se dividen en uniaxialcs
y biaxinlci. Los cristalrs iiiiiaxiales qiir abarcan a los sistemas tetragonal
.
Propiedades de los cristales 81
T ABL A 2-1. LOS sistemas cristalinos y
Sistema
1 Regular (cúbico o isométrico)
2. Tetrigonal
Características axiales
SUS
características.
Simetría
máxima
Ejemplos
Tres ejcs en un árida Nueve planos NaCl
recto. Distancias m i - Trece ejes
KCl
dad: a = b = c
Alumbres
Diamante
CaFz (Espato de flúor)
Tres ejes en ángulo recto, s61o dos ejes iguales. Distancias unidad:
o=bf
Cinco planos
Cinco ejes
T i 0 2 (Rutilo)
ZrSi04 (Zirc'ón)
S n 0 2 (Casiterita)
c
3. Hexagonal
Dos ejes de igual longi- Siete planos
tud en un plano Iia- Siete ejes
ciendo un ángulo dc
120" entre si, y iin tercer eje en ángulo recto
a los anteriores, de longitud desigual. Distanciar unidad: a = b # c
PbIz
M%
Berilo
CdS (Grcnoquita)
ZnO (Zincita)
4. Ortorámbico
(rómbico)
Tres ejes en ángulo rec- Tres planos
to, pero todos de di- Tres ejes
ferente longitud. Distancias unidad: a # b
KN03
Azufre rómbico
KSOl
BaSO, ( B a d a )
P b C 0 8 (Cerusita)
#c
5. Monoclínico
Tres ejes, desiguales. Dos Un plano
en ángulo rccto, el ter- U n eje
cero inclinado en u n
ángulo diferente de
90". Distancia unidad:
a#b#c
Na.SO,. 10 H:O
Na2B,0z- 10 H i O
C a s o , . 2 HeO
Azufre monoclínica
6 Triclinico
Tres ejes desiguales, in- Sin planos
clinador entre si en án- Sin ejes
qilos dktintos de 90".
Distancia unidad: a f
b#c
CuSO. 5 HIO
KoCr%OI
H3BO3
.
Y hcxaxonal poseen índices d e refraccibn de acuerdo con el eje en que se
rfectuó la observación. Asi el hielo qiie es hexagonal, tiene d e índice de rcfracción 1.3090 y 1.3104 ambos para la línea D del sodio. Por otra paitr,
los cri5tales biaxialcs qiie comprmden a los sistcmas ortorrómbico, rnoriocliniro y triclíriiro, tienrn tres í n d i c e de refracción y así, cn rl caso dcl di-
82 Capítulo 2: El estado sólido
cromato de potasio que pertenece al sistema triclínico. son 1.7202, 1.7380 y
1.8197 todos para la línea D del sodio.
El caricter anisotrópico de ciertos cristales es re~ponsahlede las diferencias de solubilidad observadas en muchos sólidos y a coiisecuencia de
esta disolución preferente se debe al origen de los modelos característicos
denominados figuras de corrosión que, como son muy típicos, se utilizan
para caracterizar la natiirale7a y composición de la sustancia. Este método
de identificación y e~aluaciónse emplea miicho en el análisis metalogrifico.
POLIMORFISMO
Muchas sustancias existen en una sola forma sólida cristalina, pero
otras se presentan en más de una modificación o efectúan cambios por calentamiento o bajo presión. L a existencia de una sustancia en m i s de una
modificación se conoce como polimorfismo, así el carbono existe bajo la
forma de diamante y grafito, el carbonato de calcio como calcita o aiagonita, mientras que el azufre se presenta en una amplia variedad de formas.
El polimorfismo de elementos como el azufre se conoce como alotropia.
Algunos polimorfos existen como modificaciones en el mismo sistema cristalino. así sucede con el cloruro amónico en sus formas cúbicas, o bien
cristalizan en sistemas diferentes como el ioduro de plata que lo hace en
el hexagonal y cúbico, o el azufre en el rómbico y monoclínico.
Cada forma polimórfica de una sustancia es termodinimicamente estable dentro de un internalo particular de temperatura y presión. y la transformación tiene lugar dada una presión cualquiera, a una temperatura fija
conocida como temperatura de transición o punto de transición. La variedad
rómbica del azufre es estable a la presión atmosférica hasta los 95.6OC, a
la cual se transforma en monoclínico; también tiene lugar el proceso inverso al descender la temperatura lentamente. Al llegar a 95.6OC se hallan
en equilibrio la forma rómbica y monoclínica y la temperatura no cambia
hasta que todo el azufre monoclínico se h a transformado en la variedad
rómbica.
A este respecto la temperatura de transición presenta una semejan7a
marcada con los puntos de fusión y se emplea por ese motivo en termometría en el establecimento de puntos fijos.
En ocasiones como la anterior el cambio es totalmente reterrible, esto
es, procede en ambas direcciones y la temperatura en que ambas foiiiiai
estin en equilibrio es definida y constante. Sin embargo, con frrcueiicia el
cambio de una foima a otra no es reversible sino que piorcde en una sola
dirección.
El hecho es que si hay m j s de una f o m a dentro dp un mi5mo intervalo de t~rnperaturay presión sólo una de ellas es rilable, las restantes
son inestables y tienden a cambiar continua c irreversiblemente a la forma
.
L a estructura de los cristales
83
estable. No obstante, a menudo el cambio es suniamente lento y la forma o formar inestables presentan en apariencia todas las cualidades de la
estabilidad. cn ejemplo de dicha inestabilidad la ofrece la aragonita
( C a c o , ) , que puede transformarse en calcita. L a transformación i n ~ e r sa es imposible a las presiones ordinarias, hecho que nos habla de la inestabilidad termodinámica de la aragonita. L a tabla 2-2 enumera varias sustancias polimórficas así como las transformaciones que efectúan y las
temperaturas de transición a la presión atmosférica.
TABLA 2-2. Puntos de transición de las sustancias polimórficas
a la presión atmosférica.
-~
Sustancia
Azufre
Transición
Rómbico
Gris
Blanco
Monoclínico
e
e
Blanco (tetragonal)
Rómbico
Temperatura de
transición
93.6"
18"
170'
Nitrato de amonio
Tetragonal e
(Rómbico), e
(Rómbica).
Romboédrico +
(Rómbico),
(Rómbico)?
Romboédrico
Cúbico
-17"
32.1'
84.2"
123.2
Nitrato de potaaio
Rómbico
Rambaédrico
128.5'
Cúbico
146.5'
Romboédrico
1 5 9 . 5"
Ioduro de plata
Nitrato de plata
Hcxagonal
Rómbico
LA ESTRUCTURA DE LOS CRISTALES
Hemos visto antes cómo, basándose en la geometría pura, los ciistalAgrafos han encontrado que es posible clasificar todos los cristales en 32
clases d e simetria y 6 sistemas cristalinos. Sin embargo, tal clasificación
no dice nada de su estructura interna y para lograr u n conociniimto del
problema la cristalografía postula que un cristal macroscópico de una sustancia es una repetición y extensión en todas las direcciones de la unidad
rstructural fundamental conocida como unidad rcticuiar cristalina o grupo
csfiacial. Cada unidad reticdar, a su vez, debe estar constituida de itomos,
mol&culas o iones, según el caso, dispuestos para dar la configuración geométrica particular de la red. M i s aún, la forma geornétrica de la celda
Unitaria dehe ser la misma que la del cristal macroscópico: es decir, si el
iriytal PF un cubo, la cclda unitaria tiene sus constituyentes dispiiestos para
dai un cubo diminuto.
84 Capíhilo 2: El estado sólido
El anilisis matemático de estas ideas, combinado con las leyes fundamentales de la cristalografia, demuestra que existen únicamente 14 agrupamiento~ básicos, conoiido? como w d r s erpacialccs, en función de los
cuales es posible describir la estructura interna de los cristales. Estas redes
espaciales se muestran en la figura 2-1 en donde los círculos negros indican
las posiciones de los átomos, moléculas o iones quc componen la estructura.
El número de estas r e d ~ sespaciales qur pertenecen a un sist~madado
se halla enumerado en la segunda columna de la tabla 2-3. Comennndo
con las redes espaciales que se presentan en un sistema particular, es posible combinarlos dentro de un número definido de griipos más complejos,
T ABLA 2-3.
Distribución de las rcdes
Número de redes
Sistema
Cúbico
Tewagonal
Hexagonal
Ortorómbico
espaciales
y grupos espaciales
N ú a e r o de grupos
espaciales
3
2
2
4
Monoclínico
2
Triclinico
1
14
grupos espacia le^, cuyo número va en la última rolurnna de la tabla. .4si,
las tres redes espaciales que existen en el sistema cúbico dan 36 grnpos
espaciales sin violar los requisitos de simetría, mientras que el sistema tetragonal origina 68 modelos de ag-rupamiento. La tabla 2-3 muestra que
las catorce redes espaciales producen 230 grupos espacialcs, número prácticamente análogo con el de las clases de cristales observadas en la realidad.
Aunque la cristalografía ha sido capaz de delimitar el número de grupos
espaciales que existen para un sistema dado, no puede definir los qne corresponden a nn cristal en particular. Así se conocía que un cristal cúbico presentaba uno de los 36 grupos posibles, pero no existian procedimientos
para elucidar a cual pertenecía. Esta situación perduró hasta el descubrimiento de los rayos X, cuya aplicación en este campo ha permitido la
diferenciación y esclarecimiento de la estructura cristalina.
RAYOS X
Fueron descubierto? por Roentgen en 1895 y se producen por bombardeo de los electrones en !os metalis m esa dos, e igual que La luz ordinaria
son de naturaleza clectromagnt:tica pcro con una longitiid de onda iiiilcho
La estructura de los cristales 85
Clbico de
cuerpo centrado
Tetragonal
simple
Tetragonal de
cuerpo centrado
Hexagonal
rombo4drico
Ortorrdmbico
simple
Ortorr6mbico de caras
b6sicas centradas
Ortorrómbico de
caras centradas
Monocllnico de caras
basicas centradas
Figura 2-1.
Tricllnico
I..,s catorce rcdes espaciales
Cúbico de caras
centradas
Hexagonal
Ortorrómbico da
cuerpo centrado
Monocllnico
simple
86 Capitulo 2: El estado sólido
menor. La posición de los rayos X en el espectro de radiación electromagnética puede juzgarse de la figura 2-2 donde las distintas formas de dicha
radiación están dispuestas en orden decreciente de longitud de onda, y se
Ondas Herhianas
y de radio
lob
10'
Figura 2-2.
101
inira.
rojo
$2
R
5.:
I
10-'
10.'
Longitud de anda en cm
10-e
~
S
1
X
; ?Rayos
I
10-a
10-lo
Espectro de l a radiación electromagnética.
cm ó 1 angstrom;
observa que la de los rayos X está casi centrada en
distancia del mismo orden de magnitud que los diámetros moleculares en
gases y aproximadamente igual que las distancias interatómicas en un
sólido.
EL METODO DE LAUE DE ANALISIS POR RAYOS X
Al investigar por vez primera los rayos X surgió el problema de mcdir
su longitud de onda. Ya entonces era muy conocido el hecho de que cuando la luz choca con una superficie que consta de una serie de aristas o de
lineas muy agrupadas de manera que su separación es del mismo orden
que la longitud de onda de la luz, tsta se difracta, y las diversas radiaciones se dispersan en una serie de espectros conocidos como de primero,
segundo, etc., orden. Más aún, existe una relación definida entre el á n p l o
de difracción, la longitud de onda de la radiación y el espacio de las Iíneas de la rejilla. Como los rayos X son de igual naturaleza que la luz,
debia ser teóricamente posible determinar su longitud de onda de manera
parecida. Sin embargo, resultaba imposible, por medios mecánicos obtener rejillas por rayado que contengan 108 lineas por centímetro. Para
vencer esta dificultad, Max von Laue tuvo la feliz idea de pensar que un
cristal es un ordenamiento de átomos separados a intervalos de unos
un y por e x motivo constituía una rejilla de difracción de rayos X tridimensional. También predijo que si un haz heterogéneo de rayos X se
dirige contra un cristal y se coloca detrás del mismo m a placa fotográfica,
se obtendria una serie de manchas dispuestas geométricamente alrededor
del centro del haz.
La investigación experimental comprobó la exactitud de sus ideas en
todos los aspectos. Se obtuvieron una serie de modelos de difracción que
mostraban las diferencias características de los materiales examinados. Uno
de tales diagramas se muestra en la figura 2-3, perteneciente a la blenda, y
todos ellos hablan cn favor de un agrupamiento definido de los átomos
dcl cristal y hoy día permiten la reconstrucción del ordenamiento de ]a red.
Método Bragg de análisis
crislino 87
Figura 2-3. El modelo d e diiracción d e Laue di! auiiuro de cinc. (Según A. S.
Shankland, Atomic ond " i u c i e ~ r Phyricr, 2/E. The hlacmillan Co., Nueva York.)
Sin embargo el método de reconstrucción por el método de Laue es muy
complicado y \.V. H. y 11'. L. Bragg sugirieron otro procedimiento de análisis mucho más simple que se discutiri a continuación con detalle.
METODO D E BRAGG D E ANALISIS CRISTALINO
l
Los Bragg observaron que un cristal se halla compuesto por series de
planos atómicos de igual espacio entre sí y que pueden emplearse no sólo
como una rejilla de transmisión, como señala el método de Laue, sino también como lan nos de reflexión. Un haz de rayos X que choca con los
átomos que forman estos planos se difractará de manera que produzca
una interferencia o un refueizo del haz difractado en el primer plano o
externo y el haz total de reflexión se comporta como si hubiese sido reflejado en la superficie del cristal.
Para comprender mejor la teoría de este método, consideremos como
nos muestra la figura 2-4, un frente de onda GG'G" de rayos X , que incide según el ángulo B sobre un conjunto de planos paralelos equidistantes
W, X, Y, 2,etc., que constituyen los planos atómicos del cristal. Parte del
liar HGO se reflejará en O en la dirección OE con un ángulo B igual que el
de incidencia. Análogamente, el haz H'G'O' se reflejará parcialmente
en O' a lo largo de O'E' y entonces de nuevo en C sobre el segundo
plano en la dirección COE. A fin de emerger en la dirección OE el segundo haz debe viajar una distancia mayor que cl primero, es decir,
H'G'O'CO en lugar de HGO que recorre el primer rayo. Si la diferencia
en distancia de los dos caminos es exactamente igilal a un número entero
de longitudes de onda de la radiación, los dos liacrs se encontrarán en
faie en 0, con lo cual hay un refuerzo y una intciisidad máxima dc refle-
88 Capitulo 2: El estado sólido
z
Figura 2-4.
Reflexión de los rayar X por planos paralelos.
xión, pero cuando no están en fase se p o d u c e una interferencia y la intensidad del haz reflejado es menor que la máxima.
La condición de miximo es:
G'CO - GO = nA
donde X es la longitud de onda de los rayos X utilizados, y n es un número entero cuyos valores 1, 2, 3, . . . , son conocidos como el orden de reflexión.
Si se traw. una línea perpendicular desde O a la prolongación de
G'O'C y otra desde O hasta A perpendicular a W , X e Y, se deduce que:
G'CO = G'A - CA
= G'A
+ CO
pues CO = CA por construcción de la figura. Pero
Por esa razón
y de aquí
GO = G'B
G'CO - C O = G'A
= BA
BA = nX
-
G'B
Es fácil ver que el ingulo BOA es también 0. Entonces, como OB fiie
trazado perpendicular a G'A,
BA
sen 8 = OA
BA = OA sen 0
= 2dsen0
donde d es la distancia entre dos planos atómicos cuales~~iiera
en el cristal,
Por ese motivo
n,i = 2 d scn 0
(1)
Método Bragg de análisis cristalino 89
Esta ecuación simple relaciona directamente la longitud de onda y el
de rrflexióii de los rayos X, con la distancia interplanar d y el ángulo
máximo de reflexión 8. Sin otra información adicional se obtiene la relación X l d midiendo 71 y O. Además, si conocemos h se puede calcular d o
viceversa, si se conoce d se utiliza el cristal en la terminación de la longitud
de onda de los ra!os X.
1.0s Anplos de reflexih 8 y las intensidades de los rayos reflejados
correspondientes, se determinan con un espectrómetro de rayos X de Dragg,
diagrama del cual se \.e en la figura 2.5. Los rayos X producidos en el
t ~ h oA por bombardeo de un blanco adecuado B pasan por una serie de
\="tanas y pantallas (C, D, E) para producir un haz agudo y monocromático que se envía sobre la cara del cristal dispuesto adecuadamente en
una piatina giratoria F, capaz de moverse para producir un i n p l o de inci-
.f
Figura 2-5.
Espectrómetro de
rayos X de Bragg.
dencia cualquiera, según se desea. Coaxialmcnte con la platina y cristal va
rnoritada una cámara de ionización H, por la cual pasa el haz reflejado.
La ionización del gas que llena la dniara, usualmente dióxido de amfre, es
Pro~mcionala la intensidad de los rayos X que pasa por la cdmara. Como
la corricnte que circula por la cimara de ionización es proporcional al
grado dc ioiiimción del gas, la intensidad de dicha corricnte se mide con
electrómctro que nos da directamriitc las intensidades de los rayos X
reflejados en el cristal. Por determinación de las intensidades dc los haccs
r<'flcjados a diicrsos ingulos de reflexión cs posible hallar con facilidad
el ingulo de reflexión máxima.
L.
90 Capítulo 2: El estado sólido
ANALISIS DEL CLORURO DE SODIO
MEDIANTE RAYOS X
A continuación se descrihe con detalle el procedimiento usado para elucidar la estructura del cloruro sbdico, ejemplo que pucdc servir como p í a
geiieial eii los métodos de estudio de otros tipos cristalinos. Se tia elegido
al clomro sódico por pertenecer al sistema cúbico cuya elevada simetría
facilita el estudio.
Tanto la celda unitaria corno el cristal macroscópico deben ser cubos,
y los itomos de sodio y cloro se disponen, romo hemos visto, en una de las
tres formas posibles para las redes espaciales conocidas como cúbica siniple, de caras ceiitradas y de cuerpo centrado. En el primer caso cada átomo
se sitúa eii una esqiiina dcl cubo; la red de caras centradas tiene sus
i t o n ~ o scomo el caso anterior )- además en los centros dc las seis caras del
cubo, finalmente la red de currpo centrado prcscnta de nuevo la disposición del cubo simple modificada por la presencia de un solo 5tomo en el
centro dc dicho cubo.
En el sistema cúbico, )os planos q ~ i cpasan a ira& de los átomos tienen
los índices de Millcr siguientes (100), ( 1101 ó ( 111) como se observa en
la figura 2-6; sin embarco, la razón de distancias entre ellos en los tres
tipos de red no es la misma. Si designamos por a la distancia entre los
Figura 2-6. 1'l.mos cn redes cúbicas.
,
Análisis del cloruro de sodio mediante r a p s X 91
planos 100 en la red cúbica simple, entonces la distancia perpendicular
entre los planos ( 110) valdrá a/ \/:: y la distancia entre los ( 111) será
4\/3. En la red cúbica de caras centradas es posible colocar planos paralelos interpuestos en el punto medio de los (100) y los (110) d e la red
cúbica simple, y de aquí que las distancias iiiterplariares en este caso serán
a,'?, a / 2 V T y a / V % ; finalmente en la red de cuerpo centrado es posible
interponer planos paralelos en el punto medio de la distaricia cntre los
(100) ó ( l l l ) , de manera que las distancias respectivas son ahora a i 2 ,
a,'\Eya / ( 2 \ / 3 . En la figura 2-6 se muestran resumidas todas estas distancias correspondientes a los difcrerite~planos de los trei tipos de las redes
cúbicas. Las relaciones dloa:diio:diii del ciibico simple, de caras centradas
y de cuerpo centrado son entonces:
a
a
, a
Cúbico de cara centrada: d ~ o o : d ~ ~=o : d ~ ~ ~
2 2\/2
-
1:0.707: 1.151
,/T
Cúbico de cuerpo centrado: d,,,:dlIo:d,,,
!
a
a
a
= -:-:- = 1 : 1.414:0.577
2 ~7
2 ~ 3
Se observa que dichas relaciones son diferentes cn los tres casos y de
aquí que una determinación de las relaciones interplanares en el cloruro
sódico debe pcrrnitir efectuar una decisión respecto al tipo de red a que
pertenece dicha sustancia. Como para un ordcn de reflexión y loncitud
de onda de rayos X dados se cumple que d = ( n X ) / ( 2 seno) entonccs
para los máximos de orden n correspondientes a los planos (100), (110)
y ( 111) tendremos:
y es suficiente conocer los ánciilos de reflexión cuya intensidad es máxima
para los tres tipos de planos, para decidir la rcd a que pertenece el cloruro de sodio. En la tabla 2 - 1 se dan los ralorei de 0 y scn 8 para distintos
valores de n en cada uno de los tres tipos de planos. Considerando las
reflexionei de primer o r d ~ núnicaniente vemos que:
92 Capítulo 2: El estado sólido
TABLA
i l. .Znsiilm de los máximos para el rloiiir<>sódico utilizando
la l i m a K del paladio.
Priiiier ordcn
Planos
81
Sen 8 ,
Segundo orden
8?
Tercer ordcn
Sen 8!
83
Sen 0 ,
Al comparar estas relaciones con las establecidas anteriormente llegamos a
la conclusión de que el cloruro de sodio pertenece a la red cúbica de caras
centradas, e igual conclusión se obtiene al considerar los resultados de los
miximos de reflexión de segundo orden.
POSICIONES DE LOS ATOMOS DE
CLORO Y SODIO EN LA RED
L a determinación del tipo de red a lo largo de la cual se hallan colocados los átomos del cloruro sódico no resuelvc el problema en su totalidad, porque subsiste la interrogante del agrupamiento relativo de los átomos
de sodio y cloro, pre~mntaque puede contestarse al tener en cuenta las
intensidades relativas de los máximos de reflexión para los distintos planos
y órdenes. En la tabla 2-5 se dan las intensidades correspondientes a los diferentes órdenes de reflexión en los planos (100), (110) y (111) tomindose como 100 la intensidad máxima de primer orden correspondiente al
plano (100).
La interisidad de nn haz difractado depende en primer lugar de la
masa de la partícula responsable de la difracción: cuanto mayor es dicha masa ma!or es la intensidad: ? scgundo en cuanto al orden de difracción se rcfier- la intensidad disminuye claramente con órdenes crecientes.
Estos dos hechos se emplean para explicar los resultados de la tabla 2-5. Se
observará que en los planos (100) y (110) las intensidade~di5minuyen
TABLA2-5.
Orden
Primero
Scsundo
I r i t ~ n s i d a d c relativas de los rndxinior d e reflexión
en el cloruro sódico
Intensidades de
los planos ( 100)
100.00
19.90
Tercpro
4.87
Cuarto
0.79
Qiiiritu
0.12
Intensidades correspondientes a
los planos ( 110)
lntenaidades correspondientes a
los planos ( 111)
50.4
6.10
0.71
9.00
33.1
0.58
2.82
0.14
Posicioiies de lo$ átomos de cloro y sodio en la red
93
procresiramentc con el ordcn y esta disminución sistemática se explica
cuairtitatiramente s i s~iliorimiosque los planos coiitierien igual número de
;tomos de cloro y sodio. Sin embargo en los planos (111) se observa una
.ltrrnación de las intrrisida<le\.la correspondierite al primer orden es m i s
débil que la de segundo, la de tercero más débil quc las anteriores, pero la
cuarta es menos intensa quc la segunda y más fucrte que la tercera; hechos
que admiten una explicación si se supone que los planos (111) cst'an compuestos de átomos de cloro y sodio alternativamente y que los planos que
contienen este último elemento se interponen a la unidad de distancia entre
los planos (111) que conticnen los de cloro Úriicamerite. El estudio emeña
que el único agrupamiento posible de los átomos señalados que satisface
todos los liechos descritos anteriormente en relación con las intensidades,
es cl que se muestra en la figura 2-7. dondc cl sodio representado por
círculos iiegros está situado eri los \&&es y centros de las caras del cubo y
el cloro se aloja en los puntos medios de las aristas y eslá representado
por los círculos abiertos. Si reflexionamos un poco sc observa que esta estructura reúne todas las cxigcncias y consta esencialmente de dos redes
b
Figura 2-7.
Red de cloruro sódica
E d , L
cúbicas de caras ceiitradas coinpenetradas y constituidas dc a' t omos de
sodio una de ellas, y la otra de cloro únicamente. Esta última red se rncuentra desplazada siiriplemcntc la distancia a a lo largo de cualquier arista del
cubo. Aunque con fines de discusióii Iirnios considerado las uiiidadcs eitructiirales constituidas de át&os de cloro y yodio: cn la actualidad es opinión
Sineral que el cloro y sodio sr ei?cuenii-an ionizados. Si tenemos rri cuenta
la interpretación de la estructura del cloriiro sódico ohteriida por rayos X.
vemos que la designación de moI6cula carece casi totalnierite de sentido.
es posible asegurar que un ion cloro particular pcrtcriccc a iirio de
"odio defiriidn, en su lugar está corripartido dc ¡,val forrria por seis rlotos
Y vice\.ri-sa. Todo lo que podcmos decir es que a cada ion dc sodio coxespondc iin ~ c x t odc los sris ionri cloro ~ L I Plo rodcax y i ~ corirrciiivii-ja
i
'ime el eqiii\-alcritcde uii cloro, pero niiigiino dc ellos cxclusivamcntc.
94
Capítulo 2: El estado sólido
CALCULO DE d Y A
El cnho indicado en la figura 2-7 se considera la celda unitaria de
clomro sódico y la arista del mismo es entonces la distancia entre dos átomos de doro o de sodio consecutiros, es decir el duplo de la distancia entre
10s planos (100). El c r i 4 macroscópico se construye por extensión de la
red unitaria en todas las direcciones.
cna vez establecida la naturaleza de la celda unitaria es ficil calcular
la longitud de su arirta y la distancia entre los planos (100) a partir del
volumen molar y el número de Avogadro. Cada uno de los iones sodio
de los \+tices se halla compartido por los ocho cubos vecinos y de aquí
que a cada cubo corresponden ('Á) 8 = 1 ion de sodio, además, cada uno
de los iones de sodio en el centro de las caras se encuentra compartido
por dos cubos, lo que a p g a ('h) 6 = 3 iones de sodio más haciendo un
total de cuatro iones. Análogamente, cada uno de los iones cloro a lo
largo de las aristas esti compartido por cuatro cubos y como hay 12 de ellos
( ) 12 = 3 iones cloro forman parte del cubo, y agregando el átomo
central &tenemos cuatro iones cloro como promedio contenido por cada
cubo. Entonces podemos decir que cada celda unitaria posee cuatro iones
cloro y cuatro de sodio o un total equiaalentc a cuatro moléculas de cloruro
sódico.
El volumen molar d e esta sustancia es su peFo molecular, 58.143, dividido por la densidad, 2.165 g/cc, o
Este es el volumen ocupado por A' = 6.023 x loz3moléculas, de aquí que
el que ocupan cuatro de ellas, V , es decir el volumen del cuho unitario,
será:
A partir de este volumen se deduce quc la ari3ta del cubo e?:
Como esta arista del cubo es el duplo de la distancia entre los planos ( l M ) ) ,
la distancia d a utilkar en la ccuacián de Bragc es d1/2 ó
Análisis de cristales por el método de polvos 95
El valor m & aceptado en la actualidad para esta distancia es 2 8138+ X
cm a 18OC.
Una vez conocida la distancia interplanar del cloruro de sodio, se puede
utilizar en la determinación de la loncitud de onda de los rayos X. Así
en las experiencias de Bragg se encontró que el seno 0 es 0.103 cuando
n = 1 y en consecuencia los rayos X utilizados en estos experimentos tenían
una longitud de onda de
ANALISIS D E CRISTALES P O R EL
METODO D E POLVOS
Deb)e y Schcrrer en 1916 y Hull en 1917 independientemente, idearon
un método de anilisis de cristales por rayos X que permite el uso de una
sustancia en forma de polro. En este procedimiento se incide un haz monocrornático de rayos X sobre un tubo pequeño que conticne la sustancia
investigada finamente dividida. Como los planos del polvo cristalino se
hallan orientados de todas las maneras posibles respecto al haz incidente
algunos producen imágenes de difracción refor~adasen todos los planos
simultáneamente. Estos máximos se fotografíar sobre una película fija colocada detrás de la muestra en forma de un arco de círculo.
Los rayos difractadm obtenidos d e esta manera forman coiios coricéntricos. Al fotografiarse en una pelicnla estrecha, aparecen como irnigenes
unas líneas casi ~erticalescolocadas a cada lado dc una mancha ceintral
brillante debida a un haz no difractado, aonqiie realmente estas líneas so11
porciones de arcos de círculo cuyo centro es el punto del foco del Iiaz de
rayos X. Cada par de líneas equidistante a la derecha .e izquierda d d centro corresponde a iin orden siniplc de difraccih para una familia de
planos, par que se obtiene para los distintos órdenei de difraccibn !-cada
tipo de plano. 1.a figura 2-8 noi muestra un modelo d e difracción de polvo
de óxido de Zn.
Los modelos de difracción 1o:i-adoi dc al~iiiiosóxidos son característicos
de cada sustancia particular. por ruya rarún este m6todo se n t i l i ~ aeii el
anilibii cualitatiro y cuantitativo de las sustancias puras o de merclas de
ellas. ('iiando se usa ron este fin se prcpara una placa coniparativa con
96 Capítulo 2: El estado sólido
,.
%
la posición de las diferentes líneas de los di~ersoscoristituyentes que cabe
suponer en la muestra desconocida. La presencia de líneas análogas en
ambas placas atestigua la presencia de la sustancia particular que exhibe
aquellas Iíiieas en los dos problemas. La identidad de rada línea se determina por comparación de las placas con los diagiamas obtenidos de los constituyentes puros.
Para efectuar una valoración cuantitatiia debe determinarse las iritensidades y compararlas con las obtenidas a partir de cantidades de conrtituyntes definidos bajo identicas condiciones de operación. Como la intensidad
de la línea es proporcional a la cantidad de sustancia presente por comparación podemos evaluar cn qué proporción existe.
En cierto sentido el anilisis por rayos X suministra mayor información
que el químico. .4si por ejemplo, del anilisis químico de una inezcla de
cloruro de calcio y broinuro sódico es imposible decidir si los constituyentes
son los señalados o bien se trata de una mezcla de bromuro de calcio y
cloruro sódico. La respuesta a esta pregunta por el metodo de rayos X es
directa, ?a que muestra las líneas del cloruro de calcio y del bromuro de sodio
y no haí líneas de las s?iles recíprocas.
RESULTADO DEL ESTUDIO D E LOS
CRISTALES P O R RAYOS X
Se ha realizado gran número de estudios de sustancias sólidas en forma
análoga al descrito antcriormente con el cloruro sódico. Algunos de los
resultados se resumen ahora.
Miiclios metales c r i s t a h n en el sistema cúbico, con los átomos colocados en los centros de las caras o en el centro del cuer- de la red. El
alurninio, ralcio: níquel, cobalto, plata, platino, oro y plomo son ejemplos
dcl ~~rirncro;
y al segundo pertenecen el litio, cromo, sodio, potasio y tungsteno. El agrupamiento cúbico simple no se encuentra particularmente favorecido, mientra5 que la citiurtura típica del cloruro sódico con sus redes
compenctradas y de cara rentrada es muy común entre los compuestos del
sistema regular. Asi, por ejcmplo, lo presentan los óxidos de masncsio, calcio, estroncio, bario, níqirl y cobalto, ciertos sulfiiros como los dc m;tgnesio,
bario, niarigancso y plomo y todos 10s haliiros dc lo5 metales a l c a h o s salvo
Resultado del estudio de los cristales por rayos X 97
el de cesio que se presenta en dos redes cúbicas simples, una de cesio y la
otra de halógeno interpuestas entre sí y originando una red cúbica de cuerpo
centrado con el equivalente de una molécula de haluro de cesio por celda
unitaria, estructura que se muestra en la figura 2-9.
El sulfuro de cinc, el diamante, silicio, germanio y el estaño gris tienen
otro tipo de agrupamiento, con una red de caras centradas que también
contiene un átomo en el centro de cada cubo pequeño alternativamente
dentro de la red mayor, así resulta que cada átomo se halla equidistante de
otros cuatro. Los fluoruros de calcio, estroncio y bario presentan una modificación del esquema anterior, en dichas sales los iones metálicos están situados en la red de caras centradas mientras que los no metálicos se colocan
en los centros de cada uno de los ocho cubos que componen la red metálica.
Los iones no mctálicos forman de esta manera una red cúbica simple dentro
de la de los iones metálicos de cara centrada.
Una estructura cúbica diferente la presentan los iones de óxido cuproso
y óxido de plata, como lo muestra la figura 2-10. En los cristales d e dichos
Figura 2-10.
Red de óxido cuproso.
óxidos, el oxígeno se encuentra sobre una red cúbica de cuerpo centrado
mientras los átomos metálicos compenetran esta red para quedar en el centro de cada pequeño cubo altemadamente dentro de la red oxigenada.
Como ejemplo de un agppamiento no cúbico se puede señalar a la red
hexagonal de cuerpo centrado, como se observa en la figura 2-11, y a la
*¡gura
2-11. Agrupamiento hexagonal compacto.
cual llertenecrn los elcmentos corno el magnesio, cinc y titanio. 1.0s comPuestos de kxido de cinc, de bcrilio, sulfuro de cobalto y estannoso, son
talcs que sc compenetran en sus rcdes hexagonales dc manera que una está
98 Capítulo 2: El estado sólido
:
.>
compuesta de átomos metilicos y la otra de no metálicos: por otra parte los
carbonatos de magnesia, manganeso y hierro poseen una red romboédrica
en la cual los ejes son todos iguales en ingulos diferentes de 90". Si imaginamos que esta red es un cubo distorsionado entonces, los iones metálicos
y los aniones se hallan sobre dos redes compenetradas distorsionadas de
caras centradas comparables a la red sin distorsión del cloruro de sodio.
Es de interés señalar que los aniones CO;' y SO; se ha comprobado que
constituyen una unidad cristalina con los oxígenos distribuidos alrededor
del átomo central. Lo mismo es válido para otros aniones inorghicos como
el SO;% POo3 C10; y Mn0;. Estos hallazgos son una evidencia excelente para la disociación de las sales en el estado sólido y para la existencia
de estos radicales como entidades individuales.
UNIDADES RETICULARES Y FUERZAS
Dependiendo d e la naturaleza de la sustancia problema, las unidades
que entran en la construcción de una red pueden ser iones, átomos o moléculas. Los compuestos inorgánicos generalmente tienen redes iónicas, en
las cuales las fuerzas de enlace son las atracciones electrostáticas entre los
iones cargados opuestamente. Como se ha señalado, para tales sustancias
la definición ordinaria de molécula no tiene significado, puesto que ningún
ion negativo se puede atribuir exclusivamente a uno particular positivo.
Más bien a causa de las exigencias de la electroneutralidad, cada ion positivo tiene asociado con él un número promedio suficiente de cargas negativas para contrarrestar las positivas. Las redes iónicas generalmente son
muy estables y los cristales constituidos por las mismas funden a temperaturas relativamente elevadas.
~ ' eln diamante y grafito las unidades que constituyen la red son átomos.
En el caso del diamante cada átomo de carbono está rodeado por otros
cuatro en forma de un tetraedro; agrnpamiento que confirma la valencia
del carbono y la direccionalidad de los enlaces como lo postula la química
orgánica. Los átomos se mantienen juntos por fuerzas covalentes y como
éstas son muy fuertes, los cristales son duros, resistentes y de elevado punto
de fusión. Por otro lado, la estructura del grafito, consiste de anillos hexagonales planos en los que los átomos están unidos trigonalmente por enlaces
covalentes. Estos planos, a su vez se mantienen juntos debido a fuerzas de
van der Waals que como son mucho más débiles que las covalent~spermiten
una separación interplanar fácil; hecho que d a cuenta de la fracturabilidad del grafito.
Los metales tienen también átomos como unidades estructurales y
son buenos conductores eléctricos porque mantienen libres a los electrones.
Además, la mayoría de los cristales metálicos son tenaces y generalmente
dúctiles y maleables.
.
El empaquetamiento de las esferas regulares 99
En ciertos casos como en el dióxido de carbono, cloruro de hidrógeno y
ioduro estánnico la molécula completa actúa como unidad estructural dentro de la red y el examen por rayos X indica que tales mol&culas ocupan
posiciones espaciales c l a ~ e mientras
,
que los átomos dentro de las moléculas
están colocadas en una configuración definida alrededor de la posición
media de equilibrio para cada inolécula. Estas se mantienen en su distribución geoinétrica dentro de la red por f u e r a s de van der Waals que son
mucho niás débiles que las atracciones electrostiticas en las redes iónicas
y por consiguiente tales cristales son menos fuertes y funden a temperaturas menores. La menor rigidez y elevada presión de vapor pueden también
relacionarse a la debilidad relativa de las fuerzas de van der Waals.
Otra fuerza presente en alsunos cristales es el enlace de hidrógeno, cuya
fortaleza es algo mayor que las fuerzas de van der Waals pero considerablemente menor que los enlaces covalentes o electrovalentes. Un ejemplo
de un cristal donde el enlace del puente de hidrógeno juega un papel de
importancia es en el hielo que cristaliza en el sistema hexagonal.
EL EMPAQUETAMIENTO D E LAS
ESFERAS REGULARES
En la discusión anterior hemos considerado a los ocupantes de los lugares de la red como esferas d e dimensiones sin especificar. Más aún, de
la forma en que se describieron, el estudiante pudo formarse la errónea
impresión de que son pequeñas en relación con la distancia que las separa.
En realidad no es así. Resulta provechoso considerar a la red como compuesta de esferas rígidas d e dimensiones definidas en un agrupamiento lo
suficientemente compacto para tocarse entre sí. Sobre esta base es posible
entender más cabalmente las diferencias de empaquetamiento involucrados
en los diferentes tipos de red y también deducir el radio de las esferas que
nos ocupa.
Consideremos una red cúhka unitaria, cuya arista tiene de longitud a,
compuesta de esferas uniformes de radio r. Bajo estas condiciones necesitamos
que los átomos sean idénticos. Si la red es cúbica simple las esferas que la
constituyen se apilan sobre una base y sus caras se superponen de manera
que cada esfera se sitúa encima de otra. Con tal agrupamiento su vista
frontal se muestra en la figura 2-12(a). De esta puede verse que la distancia entre los centros de las esferas es a, el radio de cada esfera es ai2, y
el volumcn de una de ellas es ( 4 X r 3 ) / 3= (h)
( ~ / 2 ) ~ /Como
3 . en este
empaquetamiento hay únicamente una esfera por cada red unitaria y el
volumen de la red es a', entonces la fracción d.el voluinen total ocupada
Por la esfera es:
ra3
=
6
= 0.5236
100 Capítulo 2: El estado sólido
mientras que el resto, es decir 0.4764, del volumen total es espacio uacío.
En la red cúbica de cuerpo centrado la situación es diferente. Aquí el
empaquetamiento consiste de una base de esferas, sepida de una segunda
capa donde cada una de ellas descansa en el hueco de la unión de cuatrc:
debajo de la misma esfera. La tercera capa descansa con un agrupamiento
idéntico a la primera. En la figura 2-12(b) se observa la disposición s e k lada. Aquí el radio de las esferas se calcula que es ( ~o ) 14;
3 y como hay
dos por red unitaria obtendremos para la fracción del volumen total ocupado por las esferas
La figura 2-12(c) muestra una vista frontal del empaquetamierito en
una celda unitaria cúbica de cara centrada. Consideraciones similares a
@ @
a
a
Simple
Cuerpo centrado
la1
lb)
Cara centrada
[cl
Figura 2-12.
Empaquetamiento de las esferas en lar redes cúbicas
las usadas anteriormente enseñan que el radio de las esferas en este empaquetamiento vale ( V T a )14. Como una red cúbica de caras centradas
contiene cuatro esferas, la fracción de volumen ocupada por estas es
La tabla 2-6 da un resumen de las redes de empaquei irniento cúbico y
hexagonal; en la misma se dan el níirriero de vecinos pi6xiirios que rodcan
El empaquetamiento de las esferas no uniformes 101
a una esfera particular, la distancia entre centros de esfera, el radio y el
número de esferas por celda unitaria, el volumen de la red y la fracción
de empaquetamiento para cada agrupamiento. En el caso de las redes
hexagonales a es una distancia igual que la mostrada en la figura 2-1. La
TABLA
2-6. Empaquetamiento en las redes cúbicas y hexagonal
Red
Cúbico
Simple
Cuerpo centrado
Cara centrada
Distancia
entre
vecinos
próximos próximos
No. de
vecinos
más
Radio
de las
esferas
No. dc
esferas
por celda
unitaria
Volumen Fracción
de la de empacelda
quetaunitaria
iniento
a
4 2
1
a
'
0.5236
8
V3d 2
2
a3
0.6802
12
b13a/2
\'Ta/4
V 2 a/4
4
a'
0.7404
12
\'2 0 / 2
fi0 / 4
2
a3/2
0.7404
12
VTa/2
V?n/4
2
a3/2
0.7404
6
-
Hex~gonai
Ernpaquetamiento compacto
Rombotdrico
inspección de la tabla rrvela que la fracción de empaquetamiento es independiente del radio de las esferas y depcnde únicamente de la naturaleza
del rmpaquetamiento que es el menos compacto para el agrupamiento cúbico simple, siguitndole el cúbico de cuerpo centrado y caras centradas
10s dos empaquetamientos hexagonales, siendo estos tres últimos casos los
más compactos posibles.
EL EMPAQUETAMIENTO DE LAS
ESFERAS NO UNIFORMES
Cuando un sistema consta de esferas de dos tamaños como por ejemplo
el cloruro de sodio, las de mayor tamaño toman un agrupamiento definido
Y las menores se acomodan entre los huecos d r las primeras. La figura 2-13
ilustra con claridad esta situarión donde se observa la agrupación cúbira
de caras centradas d e l cristal. L a arista de la celda unitaria, a, esti relarimada ron el radio d e los iones r + y r - mediante las ecuaciones
Esta suma es obviamente la distancia intrratómica entre los iones de so-
102 Capítulo 2: El estado sólido
Figura 2-13. Empaquetamiento de lar
esferas en el cloruro sódico.
dio y cloro. Para las redes de cuerpo centrado del tipo de cloruro de cesio,
la distancia interiónica vale
En la tabla 2-7 se establecen un conjunto de \,alores de los radios iónicos
tales que sus sumas dan las distancias interiónicas r 7 y r - . Los resultados obtenidos por este procedimiento concuerdan con el de rayos X o la
TABLA 2-7.
Li+
Na+
K+
Rb+
Cs+
Ag+
0.60
0.95
1.33
Radios iónicos de los cristales
(En A)
Be+2
Mg+2
CatZ
1.48
Sr+2
1.69
1.26
Ba+2
Z n+2
0.31
0.65
0.99
1.13
1.35
0.74
F-
CIBr10 - 2
S-2
1.36
1.81
1.95
2.16
1.40
1.84
difracción electrónica dentro de una discrepancia de un pequeño porcentaje. Así la distancia interiónica predicha por los radios en la tabla 2-7
para el SrS es de 7 - + r _ = 1.13 + 1.84 = 2.97 A frente al valor observado de 3.00 A.
DIFRACCION ELECTRONICA Y NEUTRONICA
En 1924 DeBroglie observó que los electrones en movimiento presentan
aparte de sus propiedades corpusculares, propiedades ondulatorias características de la luz. Así cuando un electrón se desplaza con velocidad u
tiene asociada una onda de longitud X dada por
Difracción electrónica y neutrónica
103
g, mientras h es la consdonde m es la masa del electrón, 9.108 x
erg-seg. La velocidad de un electrón
tante de Planck, es decir, 6.625 x
depende de la diferencia de potencial del campo aplicado. Si dicha caída E,
se expresa en voltios, tenemos
Insertando la ecuación (6) en (5) obtenemos para X
Con potenciales comprendidos entre 10 y 10,000 voltios, X debe variar
entre 3.89 y 0.12 A, y de aquí que tales electrones deben comportarse
como rayos X respecto a los cristales. Esta predicción fue confirmada brillantemente por Davisson y Germer en 1925. Estos investigaban la difracción de electrones por una superficie de níquel y hallaron que el modelo
de difracción electrónica y el de los rayos X coincidían, y el valor de la
longitud de onda de los electrones obtenida experimentalmente coincidía
con el calculado por medio de la ecuación de DeBroglie.
Estos y otros experimentos no sólo confirman la teoría de DeBroglie sino
que proporcionan un nuevo medio de investigación de los sólidos. En comparación con los rayos X, el haz de electrones es mucho menos penetrante
y mientras aquellos son difractados por planos atómicos profundos del
cristal, los electrones se difractan en los planos superficiales con lo cual hay
un mcdio muy conveniente de investicar la naturaleza de las superficies
sólidas y películas superficialei, y una gran cantidad del trabajo realizado
e11 este campo está encaminado hacia el esclarecimiento de la naturaleza de
los óxidos y otras películas superficiales de los sólidos. Si bombardeamos
a ktos ron neutrones de gran velocidad también se difractan pero su longitud de onda, dada de nuevo por la ecuación ( 5 ) , aparece ahora con m
w a l a 1.673 x
g. Los neutrones se dispersan fuertemente por los átomos de hidrógeno y de aquí que la difracción ncutrónica es muy efectiia
en la localización de tales átomos en los cristales.
LA CAPACIDAD CALORIFICA DE LOS SOLIDOS
La variación de la capacidad calorífica con la temperatura para vaiios
Sóldos sc muestra en la figura 2-14 donde se observará que es cero a
O3K, y para los elementos como el Al, Cu y Ag se inir~rnentamuy rápidaWntv ron la temperatura aproximándose al valor de 3 R = 5.97 cal niol-'
104 Capítulo 2: El estado sólido
al medio ambiente o en sus proximidades. En cambio el carbono y silicio
experimentan un incremento más
y no alcanzan el valor de 3 R
sino a temperaturas mucho más elevadas, asi el carbono no llega a dicho
valor sino por encima de los 1300°C.
Albert Einstein en 1907 dio el primer enfoque satisfactorio de las capacidades calorificas de los sólidos monoatómicos cristalinos y para ello consideraba que los átomos que constituyen un cristal son osciladores, que
ejecutan un movimiento armónico simple alrededor de sus posiciones de
equilibrio en el cristal, y asignó a cada sustancia una frecuencia de vibración constante y característica v , y postuló que la absorción de energía por
los osciladores no tiene lugar en forma continua sino discontinuamente de
acuerdo con la teoría de P l a n ~ k . ~
Temperatura - ' K
Figura 2-14.
Variación de la capacidad calorifica con la temperatura
Con estos postulados Einstein demostró que la capacidad calorífica por
mol a volumen constante C,., a cualquier temperatura T dcbc estar dada
para un sólido cristalino morioatómico por la ecuación
donde N es el número de A\,ogadro, k la constante de Boltzmann RllY, e la
base de los logaritmos neperianos, /L es la constante dc Planck, mientras
O,, la ternfieratura caracteristica de Einstein, esti definida por
2
Véase el Capitulo 14.
I
L a capacidad calorífica de los sólidos 105
La ecuación (8), indica que C, rs la misma función de BE/T pai-a todos los
,ólidos monoatómicos, y predice que se aproxima al valor ccro cuando
1' c O, y a 3 R cuando las temperaturas son muy elevadas, lo cual está de
.c~ierdo con los hechos. En el intervalo medio: sin e m b a r p , la ecuación
nos d a valores de C , menores que los observados.
Debyc en 1912 estableció una teoría de las capacidades caloríficas m i s
rigurosa. Supuso que un sólido puede vibrar con una frecuencia cualqiiirra
que varía desde cero a un límite 2,. Introduciendo ciertos principios de la
teoría de elasticidad y usando la teoria c u h t i c a obtuvo para C, una ecuación que es función de la temperatura, m i s complicada que la de Einctein
prro que presenta una concordancia excelente con los hrchos para un grupo
grande de sólidos cristalinos, en el que se incluye no sólo los monoatómicos
sino sustancias como los clomros de sodio, potasio, plata y plomo. La teoria
de Debye da a C, como una función de Bn/T, donde BU, t e m j z r a t u r a caracteristica d e Debye, está definida por
M i s aún, predice que C,. será cero a T = O y se aproximará al limite 3 R
a temperaturas más elevadac.
Otra valiosa contribución d r esta teoria es que a muy bajas temperaturai hay una relación lineal entre C, y T 1 .es decir:
12 Rr4
c*= (m)
T,
donde a es una constante dada poi
12Rñ'
a =5 e;
Esta ecuación conocida como lcy de la tercera potencia de Dcbye, ha
sido repetidamente confirmada. < b m o no es posible realbar detennina<.lonrs exlierirnrntalr~de los calorcs específicos i>or drhajo de 15 ó 20°K,
utili7a rsta ley para -hallar las capacidades caloríficas de los sólidos a
PS:IS temperaturas.
C n a drficicncia de la teoría <Ic Ilehyr C F que da cuenta sólo de las ca~'acidaclelcalorífica~hasta un valor mixiino de 3 R, sin cmbarxo los metal ~ alcalinos
?
dan \alorcc muy siiprriorcs a estc límite a temperaturas elevadas. El exceso de abs<irción de cnercia se atribuye a la contribución
~ l e r t r ó n i r ade cuyo desplazamiento por medios tfhiicos no da cuenta
p5ta teoría.
106 Capítulo 2: El estado sólido
1 h.1 J. Buerger, Elementary Crj<toilogrnphy, John Wiley & Soni, I n c , Nueva
York. 1956.
2. M. J. Huerger, C ~ j i t a lStructure Annijsu, Juhn Wiley 8; Sons, Inc., S u e \ a
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1919.
6. L. Pauling., T h e Xature o/ the Chcrnicoi Bond, Cornrll Unitersity Prcss, Ithaca,
S. Y , 1960.
7. R. \'v. G. Wyckoff. Crjrtol Structurei, Iiiterscirnce Publishers, I n c , Kuera York,
19411-1960.
PROBLEMAS
1. U n plano cristalino intericcta a los tres ejes cirtalográficos en múltiples d e
las distancias unidad :S, 2 y 1 ;Cuáles son los índices de Miller del plano?
Respuesta: ( 4 3 6 ) .
2. Los Índices d e Millcr de u n plano del cristal son ( 2 1 0 ) . ( a ) (Cuáles son las
Índiiri de Weiss? ( b ) i C u á 1 es el sigriifiiado de estos?
3. L a rrllexión de primer ordcn dc un haz d e rayos X p a r a u n cristal dado
tieiic liigar a 5' 15'. ;Para que ángulo tcndrá lugar la reflexión de tercer orden?
Respuesta: 15' 56'.
4 . L a reflexión d e primrr orden dc u n haz d e r.iyos X correspondiente a las
caras ( 1 0 0 ) del cloruro de sodio timc liigar en u n ángulo de 6 " 30'. ( a ) ¿Cuál
es la longitud dc onda d e 10s rayDS X utilizados? ( b ) ,Cuál seria el ángulo de reflexión con rayos X de longitud de onda h = 1 5 0 A?
5. Si se usan rayos X d e loneitud de onda X = 1.540 A, hállese el ángulo que
se obtendrá p a r a los máximos de rcflrxión de segundo ordcn correspondicnter a
los planos ( 1 11 ) del cloruro sódico.
6. I.as rrflenionrs de prinwr ardrri coircspondientcs a los pl.inos ( 1 0 0 ) , (110)
y ( 1 1 1 ) d e un cristal cúbico dado tienen lugar e n ángulos de 7" 10', 10" 12' y
IZ" 30' r e ~ ~ e c t i ~ a r n e n;t.c4 qué tipo de md cúbica prrtrnece el cristal?
7. El bramuro de crsio crist&zu en una r r l d a unitaria cúbica d e cuerpo centrado i o n una arista de 4.287 A. ( a ) Calcular los áneulos para los cuales puede
e s p e r ~ r i errflcxioiies niáxinias de segundo orden correspondientes a los planos (IDO),
( 110) y ( 111 ) cuando se usan los rayos X de una longitud de onda A = 0.500 4.
( b i cLuánrar inol(cular de bromuro de cesio habrá en la celda unitaria?
Ruspuerto: ( a ) 13" 29'; 9 " 30', 23' 49'; ( b ) Una.
8. L a denridad del fluoruro de calrio es 3.180 g/cc a 20'C Calcular las dimensiones de u n r a h uriicirio dr 1.r s u i t d n i i a quc contierir cuatro ionen ea++y ocho
iones F Keipueitn. 5.46 A.
9. El aluniinio cristaliza en una rrd cúbica de caras centradas y su denridad es
2 70 g/cc a 20°C Calcular la distancia entre planos sucesivos ( 1 0 0 ) y la mínima
entrr Átornus de aluminio del cristal
10. El <lomro de crsio cuya densiddd cs 3.97 g / c c , cristalira en una red cúbica
dc <iierpo ceiitrado cuya .iriita es de 4 12 A, con t i t i equivalente de una molécula
,,ur < u b o utiit.~ti<,..4 &>a",,d c estor d.~tu, Iiallar r l \dar del númrio dc A\ogadro.
'
Problemas 107
11. El tungatcno cristaliza e n una red cúbica de cuerpo centrado cuya arista
,,,ide 3.16 A. ( a ) ¿Cuántos átumos d e tungsteno están presentes en una celda uniRespuesta: (b) 19 3 g/cc.
ta ria? ( b ) ;Cuál es l a densidad del metal?
12. Cierto compursto cuya densidad es 4 56 q/cr, cristaliza e n u n sistema tetraconal con las distanciar de la celda unitaria siguientes a = b = 6.58 4 y c =
93 A. Si l a celda unitaria cuntienr cuatro moléculas, calcular cl peso molccular
del compuesto.
13. Demostrar que en el empaquetamiento cúbico centrado en las caras d e csferas i ~ u a l e sD = a/ \'L, donde D es cl diámetro dc l a esfera y a la longitud de la
arista del cubo
14. Demostrar q u e en rl empaquctamiento cúbico dc cuerpo centrado de esferas
iguales r = \ 3 a/4, donde r es el radio de l a esfera y a la longitud de la arixta.
13. .4 I 4 ? j 0 C el F e ( S ) cristaliza e n una red cúbica de cuerpo centrado cuya
arista es 2 93 A Suponiendo que los átomos son esferas empaquetadar, r.zlriilar (a) el
radio de las esferas, ( b ) la distancia entre los centros vecinos, ( c ) el número de
átomos de Fe por celda unitaria, y ( d ) el volumen total ocupado p a r átomo de Fe.
Respuesto: ( a ) 1.27 A;
( b ) 2.54 A ; ( c ) 2;
( d ) 12.6 A3.
16, A 1100°C el Fe(y) cristaliza e n u n a r r d cúbica de caras centradar con u n a
arista de longitud de 3.63 A. Si suponemos que los átomos son esferas empaquetadas, calcular ( a ) el radio de las mismas, ( b ) la distancia entre lui centros de las
esferas vecinas, ( c ) cl número de átomos de F e por celda unitaria, y ( d ) el volumen
total ocupado por átomo dc Fe.
17. Supongamos que el Fe(-,) cristalizara e n cl sistema hexagonal y quc el
radio de aua átomos se determina de acuerdo con el problema lb, calcular (a)
la distancia entre los Atornus vecinos, ( b ) el número de átomos por celda unitaria, y
(c) el volumen ocupado por átomo de Fe. Comparar estos rcsultador con los obtenidos e n el problema precedente.
18. E l CaO cristaliza en cubas d e cata centrada con u n a distancia unitaria de
4.80 A. ( a ) Calcular l a distancia entre las dos iones en l a red. ( b ) Curnpárese esta
distancia con l a predicha por Los radios iónicos del Ca+"
O-2?
19. El cloruro .imónico c r i s t ~ i i z aen cubos de cuerpo ccritrado con una distinci3 unitaria d e 3 87 A. ( a ) Calcular la distancia entre los dos iones en la red. ( b )
Utilizando el radio del CI- dado e n la tabla 2-7,hallar el radio del ion N<:.
5
R e i p u e i t n : ( b ) 1 5 4 A.
20. Para aceleiar un elcctrón en un campo ellctrico a una srlocidad d e u
cnl/srs, debe realizarse u n trabajo de V e , dondc V er l a caida dc potencial y
e = 4 8 0 3 X 10-'0 es la carga e k t r i c a , ambos e n unidades elrctrostiticar ("su).
M i s aún, 300 V = E, donde ¿ es el potencial e n ~ o l t i o s .D c cstoi datos, dedúicare
la cruación ( 6 ) de este capitulo.
21. Los electrones emitidos por un iil.imciito calicnte se a t e l e r m bajo u n c a n Po ~ l k t r i c oharta q u e sii \clocid,id es 5 x l U 8 un/seg. IIaliar Id longitud dc onda de
10s electrones, y el potenciA reqwrido para lograr psta longitud de onda.
Xeipueita: 0 146 4: 7110 \ d t i o r .
22. ,Cuál será l a irlocidad de los nrutroncr a f i n dv logr.ii q u e su lorigitud
de onda sea de o 6 0 A ?
23. A 20'K, l a capaciddd calorilica por Átunio q i . m m d e pl.ita es d c 0 39
'aI/-I<. Suponiendo que rr válida la ley de D ~ b y edi. 1.1 fcr<i,ra po~cricia, calcular
la capacidad calorifica por áturno gramo .i 1 K
24. L t i l i ~ . i n d o los &tos d d problcnia L i . i . i k i i l . i r 1.1 triiipcr.itura cardctcriila p1.it.i
~ K de
L
Debyi y Id frccueniia dc vibra<lúii l i i i i i t r
LA PRIMERA LEY
DE LA TERMODINAMICA
Una de las manifestaciones más fundamentales de la naturaleza es la
energía que acompaña a todos los cambios y transformaciones. Así, fenómenos tan diversos como la caída de una piedra, el movimiento de una
bola de billar, la combustión del carbón, o el crecimiento y reacciones de
lus inecanisrrios complejos de los seres vivicntcs, todos comprenden alguna
absorción, emisión y redistribución de la energía. La forma más común en
que ésta aparece y hacia la cual tienden las demás, es el calor. Junto a él
se produce energía mecánica en el movimiento de cualquier mecanismo;
energia eléctrica cuando iina corriente calienta un conductor o es capaz de
realizar u n trabajo mecánico o químico; energía radiante inherente a la luz
visible y a la radiación en general; y finalmente la energía química almacenada en todas las sustancias, que se pone de manifiesto cuando aquEllas
realizan una transformación. T a n difcrentes y di\-t-rsas como a primera
vista cabe suponerlas, sin embarco, rstán ligadas intimamente entre sí, y
bajo ciertas condiciones sc cfectíia iina runvcnión de una en otra. Es materia dr: la t<,rrnodi~irí»iicaestudiar tales interrelaciones que tienen lu,mar en
los sistemas, y sus leyes, que son aplicables a todos los fenlrnenos naturales,
se ciiniplen rigurosamente ya qiic cstán basadas en la conducta de los sistema ~nacroscópicos,es decir ron gran níiniero de mol&culai en vez de los
microscópicos que coiiipreiiden un número rcducido de d a s . Aíin ~riás,
la termodinámica no considera cl ti~1111)o
de trarisforrriacih. Su intcits se
centra en los cstados inicial y final rlc un sistema sin rtiostrar ninguna
curiosidad por la velocidad con qiic tal cambio se produce.
110 Capitulo 3: L a primera ley de termodinámica
La energía de un sistema dado es cinética, potencial o aiiibas a la vrz.
La primera es debida a su movimiento, bien sea moleciilur o del ciicrpo
como un todo. Por otra parte, la potencial es aquella clase de energia que
un sistema posee en virtud de su posición: es decir, por su estructura o
configuración respecto a otros cuerpos. El contenido de energia total de
cualquier sistema es la suma de las anteriores: y aunque su ~ a l o rabsoluto
puede calcularse teniendo en cuenta la famosa relación de Einstein E =
mcZ,donde E es la energía, m la masa, y c la velocidad de la Iiiz: este hecho
nos sii-ie de poro en las consideraciones ordinarias de la termodinámica.
El motivo es, que las energías involucradas son tan grandes que cualquier
cambio de ellas corno resiiltado de los procesos físicos o quiinicos es insi,pificante.
Así los cambios de masa resultantes de aquellas transferencias son imponderables por lo cual la tem~odinámicaprefiere tratar con tales difermcias de energia que son medible3 y se expresan en diversos sistemas de
unidades. Por ejemplo las unidades cgs de energía mecánica, eléctrica o
térmica son el crgio, el julio y la caloria. La relación entre la unidad mecánica de trabajo y la ttrmica se conoce como equiualente mecánico del calor.
Las primeras determinaciones de este equivalente por Joule fueron la piedra fundamental que permitió establecer la primera ley de la temodinámica.
SISTEMA
Este término muy usual, se define como cualquier porción del universo
aislado en un recipiente inerte, que puede ser real o imaginario, con el fin
d t rsturliai t.1 efccto de las cli\crsas variables wbrc 61. .2 su vez la porción dt, uriiwrso rrrliiido del sistema se denomina "ccintoino". El contenido de iin sistema puede ~ a r i a rampliamente des& una cantidad pequeña
d i agua, por e,jeniplo. ha5ta cl univerx total.
Las interacciones entre un sistema y su contorno, son muy importantes
en termodinámica y cuando rntre arribos existe intercambio de materia
y enrrgía tencriios un sistema ahi, rto, y aislado rn caso contrario. Se llama
sistema cm-arlo aquel que no intercarribia matcria con sus alredrdores pero
sí energía.
Un sistema honlogénro contiene íinican~ente una fase, micntras que
o
más de una. Se define por fase la porción lioniouno I ~ c t ~ r o g í n ccontiene
génea de un sistema, físicamente diferenciable y separable niecinicamente.
Si en el sistema "agua" coexisten el hirlo, VI liquido y el vapor, rada
forma constituye una fa5e separada de otras por un limite. Aiin mis,
cada fase puede scr continua como la liquida o gaseosa o dividida en
porciones menores corno una masa dc cristalr~dc hielo. El tí-mino ''separable rnecánicaiiicnte" de la definición significa que las fases pueden sc-
1
.
Propiedades y variables de un sistenia
111
paraise entrc sí por operaciones tales como la filtración, sedimentación,
decantación u otros procedirnicntos rnecinicos, iomo por ejemplo la recoiección a mano dc los cristales. No incluye, sin embargo, otros procediniientos
de separación tales iomo la evaporación, destilación, adsorción. o ehtracción. Conio los gases son niiscibles totalmente, sólo es posible un sisienia de
una fase gaseosa. Con líquidos o sólidos no parece existir un límite teórico
al número posible de fases, pero ocho' es el máximo de fases liquidas observadas en un sistema.
Las fases presmtes en un sistenia son siistancias puras como el K1,
H,O. NaCI, o C,H, o solucioiies de éstas. Vna solución verdadera, está
definida como una mezcia físican!cnte homocínca de dos o más sustancias.
Esta definición no señala restricción sobre el estado de agregacion o la
cantidad relativa de constituyentes. E n consecuencia una solución puede
ser gaseosa, liquida o sólida y variar de composición dentro de límites muy
amplios. Este hecho excluye a los compuestos puros de la clasificación,
porqne persiste una relación fija y definida entrc los constituyentes de un
compuesto.
PROPIEDADES Y VARIABLES D E UN SISTEMA
Las propiedades de un sistema se dividen en dos clases: intensivas y
extensivas. Estas son las que dependen de la cantidad de sustancia del
sistema, por ejemplo, la masa total, el volumen y la energía. Por otra parte,
las propiedades intensivas son aquellas cuyo \-alor es independiente de la
cantidad total siendo función de la concentración de sustancia, así tenemos
a la densidad, índice de refracción, y masa, volumen o energía molar.
En ausencia de fuerzas especiales, como los campos magnéticos o eléctricos, las propiedades extensivas de una sustancia pura, dependcn de dos
de las tres variables, P, V y T, y el núrncro de moles, n, de la sustancia
presrnte. Sólo dos de las rariables dc estado son iridependicntcs, porque
en principio se supone que el sistema posee una ecuación que relaciona P,
V, y T; esto hace que una de las variables resulte drpendimte. En nuestra actual discusión elrgiremos a las variables P y 7' como dos iiidependientes. En consecuencia, cuando 71 es constante las propiedadrs esttmiivas
de un sistema dependen únicamentt de P y Y', isual conclusión sr aplica
a las intensivas. Por definición éstas son independientes dc n y de aquí
que P y T son las única< variahlm independientes involucradas.
Cuando se trata de soluciones la situación es distinta. Las propieclades
extensivas son fnncibn dc P, T y cl ní~nierode moles de los difcrcntes constituyentcs presentes, es decir, n,, n,, n,, etc. A su vez las intensivas dependen de P, T y las concentraciones de las diversas q e c i e s . EL nún~erode
variables de estas últimas cr una iiirrins que rl total de constituyentes de la
' Kittslry y
Cmden, J . Ani. Ciiern. Soc., 72, 4811 (1950)
Capítulo 3: La primera ley de termodinámica
soluciln por la ra7bn siguiente: Si eqxrsamos la concentración en fracción
molar, la especificación de todas menos una de éstas da la última de ellas
por sustracción de la unidad, que es la suma de todas las fracciones molares.
Una iez que se hallan especificados los valores de las variables independientes de un sistema el estado del mismo queda determinado. Para
devolver el sistema a sus condiciones iniciales, las variables deben ajustarse
a su xalor original. Este hecho por el cual el estado de un sistema se repite al rcpctir el valor de las variables, se conoce como principio de reproducibilidad de los estados.
METODOS D E EXPRESION D E LA
CONCENTRACION D E LAS SOLUCIONES
Según el propósito particular de cada caso, existen muchos procedimientos por los cuales se puede expresar la concentración, los más comunes son:
Tomando el $eso como base:
1. Porcentaje o fracción de sustancia, en peso, disuelta.
2. Peso de sustancia disuelta por peso definido de cada constituyente.
3. Peso de sustancia disuelta por peso definido total de solución.
4. hlolalidad-niimero de moles de sustancia disuelta por 1000 g de
solvente.
5. Fracción molar.
Tomando corno base el aolumcn
1. Por ciento o fracción de sustancia disuelta, expresada en \olumen.
2. Peso de la wstancia disuelta paia un volumen dado de solución.
3. hfolaridad-número de moles de sustancia disuelta por litro de solución.
4. Normalidad-número de equivalentes de sustancia disuelta por litro
de solución..
Todos estos esquemas son en si suficirntemente explicativos y conocidos
del estudiante. De los diversos procedimirntos enumerados antes, los que
se expresan cn base al peso son independientes de la temperatura, es decir, las roncrntraciones son las mismas a todas las temperaturas, mientras
que las que se basan en el volumen variarán con aquélla, de manera que
dependen de la expansión tí.rmica de la solución.
CANTIDADES MOLARES PARCIALES
Considcrarrmos una solución cornpumta de j constituyentes, y designemos por n,, n,, -. n, los nírriieros de niolcs de los diferentes constituyentes
Cantidades molares parciales 113
presentes. Supongamos que G es una propiedad extensiva del sistema. Entonces, por cuanto se dijo anterionriente G debe ser una función de P, T
y el número de moles de los diversos constituyentes presentes, o
La diferenciación parcial de la ecuación ( 1 ) nos da para dG
donde n, representa en cada caso todos los valores de n excepto aquel
respecto a l cual se diferencia G. Si escribimos ahora
la ecuación ( 2 ) se transforma en
Aún más, a una tcniperatura y piesión constante los dos primeros términos de la ecuación (6) son cero, y así obtendremos:
Por uso del teorema de Euler de las funciones homogéneas, la ecuación ( i )sc intcgra para dar
La ccuación (8) enseña que cualquier propiedad extensiva de una solución puede a temperatura y prcsión constantes, expresarse como una suma
de productos E n para cada uno de los componentes individuales de la son representa un factor de potencia,
lución.
Más aún, como en cada
G , la cantidad molar parcid rcpresenta un factor de intensidad. En conse<Ucncia, las cantidades molares prciales rcprcsentan propiedades intensivas
114 Capítulo 3: La primera ley de termodinámica
de una solución. Cuando la ecuación (8) se diferencia de una manera
total, obtendremos:
Pero, de acuerdo con la ecuación ( 7 ) d G está dada por el primer t h mino del paréntesis del lado derecho de la ecuación ( 9 ) , y en consecuencia
el segundo término debe ser cero. Así que en general obtendremos
y para dos constituyentes únicamente, es decir, una solución binaria,
Las ecuaciones (10) y (11) son dos formas de la de Gibbs-Duhem, y
enseñan que las cantidades molares parciales no son independientes entre
sí y que la variación de una cantidad molar parcial afecta a las restantes
en la forma dada por las ecuacionis. Por ejemplo, la ecuación ( I l b ) indica
que si d c , es positiva, es decir, G, incrementa, entonces dC2 debe ser negativa y G 2 debe decrecer al mismo tiempo, y viceversa. El significado
de esta conducta aparecerá cuando discutamos las soluciones con mayor detalle en el capitulo 8.
DETERMINACION D E LAS
CANTIDADES MOLARES PARCIALES
Las cantidades molares parciales se determinan por gran número de
procedimientos gráficos o analíticos de los cuales discutiremos sólo tres.
De manera especifica, supongamos que se desea determinar los volúmenes
molares parciales de una solución binaria, y que con este propósito medimos
el volumen total V de la solución como una función de la molalidad m
de soluto. Como por definición aquélla representa el número de moles de
soluto para 1000 g de solvente, el número de moles de solvente presentes
en cada instante es fijo y está dado por n, = 1000/Al,, donde A4, es el
peso molecular de solvente. De nuevo, m debe ser n,. Por esa razón, si graficamos V contra m, figura 3 - l ( a ) y determinamos la? pendientes de las
cun,as a diferentes concentraciones tales romo A y B cstas pmdientes
serán los valorcs de Y, a concentraciones seleccionadas. IIahiendo olitcnido
I
I
Determinación de las cantidades molares parciales 115
1
Oo
m
la1
Figura 3-1. Determinación gráfica de las cantidades rnolares parciales.
así
los valores correspondientes de F, se calculan por sustitución de V,
n, y n, para cada concentración en la ecuación (8), que en este caso
toma la forma
Un método distinto de manejar los mismos datos es el siguiente. Calculamos a partir de V, n, y n, la cantidad
y graficamos v contra la fracción molar de soluto N,, figura 3 - l ( b ) . Si
ahora trazamos una tangente a la curva en cualquier punto tal como A, se
demuestra que la intersección de la tangente sobre el eje en N , = O nos
da
y en intersección en hl,= 1.0 da
Repitiendo este procedimiento
en diferentes puntos de la curva F, y 1/, pueden ser evaluados para las
~olucionesde distintas concentraciones.
Aún un tercer procedimiento de manipular los datos involucra una
expresión analítica de V como una función de m. Supongamos que V
como función de m se expresa por la relación
v,
v,.
donde a, b, y c son constantes a una temperatura dada y presión. La diferenciación de la ecuación (13) con respecto a m nos da entonces V,, es
decir
116 Capitulo 3: La primera ley de termodinámica
y la sustitución de las ecuaciones (13) y (14) en la ecuación (12) da
para Y,
Aunque los métodos anteriores de determinación de las cantidades molares parciales se describieron en función de los \olúrnenes de la solución,
son aplicables de igual manera a otras propiedades extensivas de una
solución.
LA PRIMERA LEY D E LA TERMODINAMICA
Después de estos preliminares estamos en condiciones de estudiar la
primera ley termodinámica que establece la conservación de la energía,
es decir, ésta ni se crea, ni se destruye. En otras palabras, esta ley se forrnula diciendo que para una cantidad dada de una forma de cncrgía que
desaparece otra forma de la misma aparecerá en una cantidad igual a
la cantidad desaparecida. Para ser más específicos considerpmos el destino de cierta cantidad de calor q agregada al sistema. Esta cantidad dará
origen a un incremento de la energía interna del sistema y también efectuará cierto trabajo externo como consecuencia de dicha absorción calorífica.
Si designamos por &E al incremento de energía interna del si3tcma y w al
trabajo hecho por el sistema sobre el contorno, entonces por la primera Icy
tendremos:
La ecuación (16) constituye el establecimiento rnatemático de la primera ley. Como la energía interna depende únicamente del estado dc un
sistema, entoncm el cambio de la misma aE, involucrado en el paso de
un estado donde la energia es El a otro donde es .E2 debe estar dada por
AE depende así únicamente <le los estados inicial y final del sicterna y de
ninpna manera de la forma'en que se ha realizado tal cambio.
Estas consideraciones no se aplican a w y q, porque la magnitud de
éstas, depende de la inanrra en que se efectúa el trabajo en el paso del estado inicial al final. El símbolo w r~presentael trabajo total hecho por un
sistema. En una celda galvánica, por ejemplo, ui puede incluir la encrgía
eléctrica proporcionada, rnas, si hay cambio dc volumen, cualquier pncr-
La primera ley de la termodinámica
117
sía utili~adapara efectuar la expansión o contracción contra una presión
oponente p. Ahora estamos interesados solamente en el trabajo mecánico o
de pesión contra volumen desarrollado en el proceso; y esta energía se deduce fácilmente de la manera siguiente.
Consideremos un cilindro, figura 3-2, de sección transversal A ajustado
con un pistón p. Entonces como la presión es una fuerza por unidad de
área, la fuerza total que actúa sobre el pistón es f = pA. Si éste se desplaza
ahora una distancia dl, el trabajo dw realizado es
Pero Adl es un elemento de volumen, dV, barrido por el émbolo en su
rnoiimiento. De aquí
y, por integración entre los limites V , y V ,
Si el único trabajo hecho por el sistema es de esta naturaleza, entonces la
sustitución de la ecuación (19) en la (161 nos d a para la primera ky,
la expresión
Las etuaciones (19) y (20) son perfectamente senerales y aplicables
al cálculo de w, q, y AE, en cualquier expansión o contracción de un sistema. Sin embargo, bajo condiciones especiales estas ecuaciones p e d e n tomar
formas particulares:
118 Capitulo 3: La primera ley de termodinámica
l . El uolumen es constante. Cuando éste no varía: dV = 0, dw = O y la
ecuación (20) se convierte en
2. L a presión de ojosición es cero. Un proceso de este tipo se denomina
expansión libre. Aquí p = O, dw = O y de nuevo AE = q.
3. L a presión de oposición constante. Si p = constante, entonces la ecua-
- p(v,
ción (19) por integración nos da
w
-
V,)
..
.
(22)
y la ecuación (20) se convierte en
4. L a presión oponente es uaritzble. Cuando p es variable debe quedar
establecida como una función de V para una situación dada antes
de que la ecuación (19) sea integrable. Si no se dispone de una función analítica, la inte ración puede llevarse a cabo por un procedig.
miento gráfico de p contra V , determinando el área bajo la curva.
Una vez que w ha sido determinada, se reemplaza en la ecuación (20)
para obtener AE,o q, según el caso.
El trabajo involucrado en la expansión de sólidos o líquidos es pequeño, y frecuentemente dnprcciable. Sin embargo, no sucede igual con
los gases, donde los cambios de volumen pueden ser grandes. En todos los
cálculos de w que comprendan expansiones de gas, debe quedar claramente
enrendido que exceptuando las condiciones señaladas más abajo, la presicín
que determina el trabajo realizado, n o es la prisión del gas P, íinr
aquélla contra la cual el gas está trabajando, es decir, p. Una vez que nos
damos cuenta de este hecho no hay dificultad en realizar cálculos. Más aún,
cuando V , V I , entonces el proceso n de expansión, w es positibo, y
el trabajo hecho por el gas sobre su contorm. Si V , < V,, sucede todo lo
contrario.
De la discusión anterior resulta evidente que para un cambio dado la
mapitud de w depende de la forma en que se efectúa el trabajo, y por
ese motivo w no puede ser una función de estado. De nuevo, como para un
cambio dado AE tiene un valor fijo q debe variar con w resulta dependiente del camino seguido por el proceso.
Las cantidades q , w, y aE son experimentalmente medibles, pero las
magnitudes de E no lo son, este último hecho no es un obstáculo cn temodinámica, ya que estamos interesados principairnente en los rairibios de E
Y no en los valores absolutos.
>
1
Reversibilidad y trabajo máximo 119
REVERSIBILIDAD Y TRABAJO MAXIMO
Cualquier proceso, que se conduce de forma que en cada etapa la fuerza
impulsara es sólo infinitesimalmente mayor que la opuesta y que puede invertirse al incrementar ésta un infinitésimo, se denomina proceso reversible
y otio que no satisface estos requisitos se dice irrcuersible.
Hablando con propiedad, los procesos reveisibles son imposibles en la
naturaleza ya qtie exigirían para su realización un tiempo infinito, y en consecuencia todos los procesos naturales deben ser irreversibles. De cualquier
manera. el concepto de reversibilidad es tan valioso teórica y prácticamente,
que se justifica su empleo. Además a la reversibilidad puede uno acercarse mu)- estrechamente. Así en el método potenciométrico de medición de
potenciales de las celdas galvánicas, el voltaje de éstas, está opuesto por
otro hasta que prácticamente no fluye corriente. Haciendo la fuerza de
oposición sólo ligeramente menor a la de la celda, ésta, descarga o vuelve
a carcar cuando la citada fuerza vuelve a hacerse mayor que la de la celda.
De esta manera, una corriente cualquiera que fluye por el circuito tiene que
realizar trabajo contra el potencial que en todas las ocasiones es ligeramente
menor al propio. Este dispositivo es la aproximación más estrecha que hasta el presente puede hacerse a un proceso realmente reversible.
Ahora procederemos a demostrar que el trabajo lograble en un proceso
dado, bajo condiciones reversibles es el máximo posible y que es el mínimo
requerido para invertirlo.
De los argumentos señalados anteriormente resulta evidente que la
cantidad de trabajo que un sistema tiene que realizar respecto a un cierto
cambio depende de la oposición que el sistema experimente a su modificación. Cuanto mayor es la resistencia, también lo es el trabajo necesario
para sobrepasarla. Para ser más específicos, consideremos la expansión de
un gas frente a una presión externa p para una cambio infinitesimal de volumen dV. El trabajo realizado es pdV. Cuando fl es cero, es decir, cuando
el sistema expande frente al vacío el pistón de encierro no experimenta
ninguna fuerza restrictiva y si aquel no sufre fricción y es sin peso pdV = 0.
Sin embargo, a medida que p aumenta desde cero, debe realizarse mayor
trabajo conforme la presión se aproxima a la del mismo gas.
Cuando se alcanza este punto, se establece un equilibrio de fuerzas Y ya
no liay mis cambio de \ o l u i n ~ n Si
. continuamos iilcrementando la presión,
<'\ta se l1c:a a hacer ma)or que la del gas, y hay una contracción reali72ndose un trabajo robre el sistema en vez de por el mismo. Es evidente,
Iior la descripción, que el trabajo que puede realizarse por un sistema es
injximo cuando la presión de oposición p difiere sólo un infinitésimo en magnitud de la interna del propio g a Pero éstas son exactamente las condiciones definidas por ]a reversibilidad dc un proceso. De aquí concluimos que
120 Capítulo 3: L a primera le)- de termodinámica
'i
se logra u n trabajo máximo de u n sistema cuando tiene lugar cualquier
cambio que sea totalmente reversible. Aún más, bajo condiciones reversibles
la presión externa p difiere sólo un infiitési~node la del gas mismo P.
Podemos pues reemplazar fi por P en todas las expresiones dadas con antcrioridad para w, y obtener w
,, que es el trabajo máximo que puede cfectuarse en la expansión reversible de un gas.
Consideremos ahora la compresión reversible. Como la presión del gas
es P, la presión mínima requerida para con~primirloserá P i-dP. E n consecnencia, como la presión de oposición es P, el trabajo mínimo exigido para
realizar un cambio de volumen dV será P d V , que es exactamente igual y
de signo contrario al reversible de expansión del gas. Si la fuerza motriz
dP, el proceso se hace irreversible, y será preciso
se hace mayor que P
mayor trabajo que P d V para llevar a cabo la compresión.
+
LA ENTALPIA DE UN SISTEMA
Los cambios térmicos a presión constante se expresan más adecuadamente mediante otra función H, llamada entalpia o contenido calorífico
de un sistema. Esta función se define por l a relación:
donde P y V son la presión y el volumen del sistema. Como E y P V se
encuentran totalmente caracterizadas por el estado del sistema, H es tanibién una función de estado y es completamente independiente de la manera
en que se logra aquél. En consecuencia el cambio de entalpia, AH, puede
escribirse as!:
AH = H , - H ,
(25)
donde H 2 es la entalpia del sistema en su estado final y H , en el estado
inicial. Al sustituir H 2y H , por SUS equivalentes de la ecuación (241, obtenemos para A H
AH = H* - Hi
= (Ez
PzVz) - (Ei PiVx)
= (Ez - El)
(P2V2 - PiVi)
= AE
(PzVz - P1Vd
+
+
+
+
(26)
La ecuación (26) es la definición m t general de m. Cuando la piesión permanece constante durante el proceso, entonces:
AH
=
=
AE
AE
+ P(V2 - VI)
+ PAV
es decir, el cambio de entalpía a Presión constante es igual al incremerito en e n e r ~ í ainterna más cualquier trabajo de presión-volumen realizado. De q u í que a presiiin roiistantc AH represente cl calor ahsorbido en
p a a r del ertarlo inicial al final, con i d que .r& se e/e<tzic trabajo debido
!
1
i
i
Capacidad calorífica 121
P-V. Cuando las presiones inicial y final no son igiiales, se calcula AH
o. por medio de la ecuación (27) sino por la ( 2 6 ) .
En este libro utilizaremos la convención de que cualquier ganancia en
cantidad por parte del sistema es positiva y las pérdidas son negatibas. Sobre
esta base, los valores de q , 4 E y AH que son ma)ores de cero corresponden
a la absorción de calor por el sistema y a incrcmentos en E y H del sistema.
Viceversa, cuando estas cantidades son menores que cero denotan jjérdida
de calor por el sistema y decrementos en E y H. Finalmente cuando w > O
se iealiza trabajo por el sistema, mientras que cuando w < O el trabajo es
efectuado sobre el sistcma.
CAI'ACIDAD CALORIFICA
Consideremos una cantidad de calor mny pequeña dq aíiadida a un
sistema y supongamos que como rc~ultadode la absorción de calor el ascenso de temperatura producido es dT.Entonces la cantidad de calor requerida para producir un ascenso de temperatura de iin grado cs
y C es así la capacidad calorífica del sistema. Ahora, de la ecuación (20)
obtenemos dq = dE
pdV y de aquí:
+
Cuando r1 volumen se mantiene constante dV = O, y la ecuación (28)
se reduce a
Esta ecuación es la rclación tcrmodi~iimicaque define C, y nos dice
que rs la velocidad de cambio de la energía interna con la temperatura
a \olumen constantc.
Sin e m b a r p . cuando la absorción dr: calor ocurre rcr-cr<iblemrnte 3
Presión constante. entonces p = P, 1 la ecuación (28) se tiansforma en
P. =
($1,+ ($)
P
P
Pelo, si difercuciamos la ecoacih 1 2 1 I con rclxión a T a riresión constante P obtenemos
122 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
que es la definición termodinimica de C,; es decir, es el cambio de entalpia con la temperatura a presión constante.
La diferencia entre las dos capacidades caloríficas se deduce fácilmente
por un argumento termodinámico. De las ecuaciones (29) y (30) obtenemos
+
Pero, H = E P1.. Diferenciando esta cantidad con respecto a la temperatura a presión constante obtendremos
y por sustitución de la ccuación (32) en la (31) resulta
El problema ahora radica en relacionar el primer y tercer término de la
derecha de la ecuación ( 3 3 ) , para lo cual procedemos así: la energia interna E seri en general una función de cualquiera de dos de las tres variables P, I', T. Si elegimos a T ? I' como las independientes, entonces:
dividiendo ambos lados de la ecuación por dT e imponiendo la condición de que la presión es constante, obtenemos:
y la ecuación ( 3 5 ) sustituida en la (33) nos da finalmente
La ecuación (36) cs conipletariientc general. Veremos más adelante
&no se piicrie usar Csta para ohtcnrr la difeirncia dc las dos rapacidadec
< alorifiras.
DEPENDENCIA DE LAS FUNCIONES
DE ESTADO DE LAS VARIARLES
Hriiios d~firiidohasta aquí dos cantidades cjue son funciones del estado del sistrnia, es decir, E y H , y tamhitn C , y (,',,. Si nos referirnos úriicamente a las sustancias puras, cntonces catas cantidades son lunción de dos
Dependencia de las funciones de estado de las variables 123
cualesquiera de las tres variables P, V y 1'. Al tratar con estas variables
encontró que E y C, se expresan m i s adecuadamente en función de T
y V , mientras que para H y C, la elección más conveniente es 1' y P.
Si comenzamos ahora con el hecho de que E = f(T, V ) , cntonccs:
De acuerdo con la ecuación (29), (aEIVT), = C,. Una expresión correspondiente para (aE/aV)T no puede lograrse sin la segunda ley de la
termodinámica. Sin embargo Dor razones pedagógicas supondremos su valor
aquí; qne se someterá a prueba en el capítulo 5, lo cual nos permite establecer
Sustituyendo estos valores de las derivadas parciales en la ecuación (37)
obtendremos:
El primer término dcl lado derecho en la ecuación (39) nos d a el efecto
del cambio de temperatura a volumen constante sobre E, mientras que el
segundo proporciona el efecto del cambio de volumen a temperatura
constante.
Consideraciones semejantes de H como una función de T y P dan
Pero (VHJST),= C,. De nuevo snjeto a prueba en el capítulo 5,
En consecuencia
El primer ttrmino en la ecuación (42) nos d a la variación de H con la
tem~~eratura
a presión constante, mientras que el segundo nos muestra
el efecto de la presión, a temperatura constante.
El efecto del carnbio de volumen en C, se deduce por diferenciación
de la ecuación ( 2 9 ) respecto al volumen a temperatura constante y utilizando la ecuación (38). El resultado es
124 Capítulo 3: La primera ley de termodinámica
.
' .
,
Anilogamente, el efecto dc la ~ r e ~ i óenn C, se deduce de la diferericiación de la ecuación (30) respecto a P, a i' constante, utilizando la ecuación
14.1 . Así obtenemos:
COMPORTAMIEKTO TERMODINAMICO
DE LOS GASES IDEALES
Para ilustrar el uso de las ecuaciones anteriores y deducir también algunas conclusiones importantes condcraremos ahora, el comportamiento
de los gases ideales. La ecuación ('38) se lisa para hallar la dependencia de
E en V a T constante de esta manera: Para un gas ideal PV = nRT. La
diferenciación de esta expresión respecto a T a voliimen conitante nos d a
que por sustitución en la, ecuación (38 j, nos aa
E n consecuencia la enerzia interna de un ,oai zdcal es independiente del
uolvmen y función únicamente de la temperatura. Esta conclusión es idéntica con la alcanzada en el capítulo 1 en base a la teoría cinética. D e nuevo,
si diferenciamos la ley de los gases ideales con respecto a la temperatura a
presión constaute, obtendremos:
que, cuando se inserta en la ecuación (11) ensciia que:
De aquí que la entalpia ae un cal zdcal es inárfiindic7ite de la presión
y es función únicamente de la tcrnperatura.
De estas deduccioncs se sigue ta~rilijí-iique C, y C , son furiciones dc T
únicamente, independientes dcl iolunirri y la presión. Por esa razón:
Procesos isotémicos y adiabáticos
125
hfis aún, como para un gas idcal (iE,/alv)T
= O la ecuación (36) se
reduce a
Pelo para un gas ideal
y así Iiallamos que
para n moles, o para uno so!@
C, -
R
(1.9)
Esta conclusión cs de nuero la misma qne la obtenida a partir de la
teoría cinética de los gases en el capítulo l.
('"=
PROCESOS ISOTERlllICOS Y ADIABATICOS
Las relaciones de energía y el estado de cualquier sistema durante un
proceso dependen no solamente de la manera en qiic el trabajo se 112 efeltuado, sino también de ciertas condicioner expeiiinintales impuestas sobre
el sistema como un todo. Dos restricciones tales, de importancia especial
in\olucran procesos efectuados bajo ( a ) rendiciones isotérmicas ( b ) adiabiticas. Un proceso irotérmico es cualquirra realvado de manera que la
temperatura permanece constante durante toda la operación. A su vc7.
un piocesri ndiabdtico es aquél en qur no hay ahsorción ni desprrndimiento de calor por parte del sistema.
PROCESO ISOTERMICO EN LOS GASES IDEALES
Como la cnerzía interna de los gases ideales es una función de la temperatura únicamente, la impori~iónde una tempeiatura constante significa
también constancia en E y de aquí que AE = O. La insercibn de este criterio para un cambio isotémico en los gases idcales en la ecuación (20 1
nos da
Yernos pur ese motivo, que cn tal pioccso todo el trabajo rcali7ado
ser.: a exprnsas dcl calor absoibido. o cualquier calor obtenido proceder2
del trabajo hecho sobre el riqtema. La magnitud dc rl dependeri obriamentr de la manera pn que el trabajo se llevó a cabo y puede variar desde
cero para una ctpansión libre a iin miximo cuando se logra la revirsibilidad
La expresión para cl trahajo rn&imo, ra,, obtenida ruando u n gas ideal
126 Capitulo 3: L a primera ley de termodinámica
se expande isotirmica y reaersiblemrnte puede deducirse de esta forma: Bajo
condiciones reversibles p =P = nRT/V. Al sustituir este valor de p en la
ecuación (50) obtendremos
V . nRTdV
L a ecuación (51) nos da el trabajo máximo alcanzable en una expansión isotérmica reversible de n moles de un gas ideal desde un volumen
V , a V 2 a la temperatura T. De nuevo, como la temperatura es constante L7,/V, = P,/P, de acuerdo con la ley de Boyle y por tanto la ecuación
(51) puede escribirse en la forma equivalente
La aplicación de la ecuación (51) y la diferencia entre el trabajo reversible isotérmico o el simplemente isotémico, realizado contra una presión constante, se comprende mejor mediante los ejemplos siguientes:
Ejemplo ( a ) : Hallar el trabajo realizado cuando dos moles de hidrógeno se expanden isotérmicamente d e 15 a 50 litros contra una presión
constante de una atmósfera a la temperatura de 25'C. Mediante la ecuación ( 2 2 ) , obtenemos
w = j ( V 2 - V I ) = l(5O - 15) = 35 litro-atm
= 847 C r i l
Ejemplo ( b ) : Calcular el trabajo efectuado cuando dos moles de hidrógeno se expanden isotérmica y reoersiblemente a 25OC de 15 a 50 litros.
Si usamos la ecuación (51) tendremos
vz
vi
1'2
w, = nRT In - = 2.303 nRT log VI
=
50
(2.303 X 2 X 1.987 X 288.2) log E
=
1427 cal
Los calores absoibidos durante las expansiones son iguales a w en ambos
casos y xalen 847 y 1427 calorías en ( a ) y ( b ) respectivamente. La variación de eucrgia interna es cero en los dos ejemplos, ya que no hay ningún cambio de temperatura.
Procesos adiabáticm en los gases ideaIes 127
Con los gases reales LE# 0 en condiciones isotFmicas, pues aun ent o n e s hay una variación de energía interna debida a un cambio de \olinnen
de presión. Igual conclusión se aplica a AH.
PROCESOS ADIABATICOS EN LOS GASES IDEALES
Como en este caso no hay intercambio de calor entre un sistema y sus
alrededoies, resulta que q = O, e introduciendo este criterio para un proceso
adisbático en la ecuación (16) tenemos
De L
a ecuación ( 5 3 ) se sigue que cualquier trabajo en un proceso adiabático se realiza a expensas de la energía interna y conforme aquel \ a
efectuándose, la energía interna del sistema disminuye y en consecuencia desciende la temperatura. Por el contrario, si se hace traba.jo sobre el
sistema todo éi incrementa la energía interna del sistema y en consecuencia
se eleva la temperatura.
Una ecuación que todo gas ideal debe obedecer en cualquier etapa de
una expansión reversible adiabática, se deduce fácilmente a partir de la
rcuaiión ( 5 3 ) . Supongamos n moles de un gas ideal a la presión P \ \ o lumen V . Para un incremento de volumen infinitesimal dV y presión P, el
trabajo realizado es PdV, y como es a expensas d e la energia interna del gas,
ésta debe disminuir en la proporción dE. Según la ecuación (53), tendremos, por ese motivo:
PdV = - d E
Sin embargo por la ecuación (29) d E = G d T , y por lo tanto:
PdV =
- dE
= - nC%dT
(54)
Además, como P = nRTIV, la ecuación (51) se convierte en
Considerando ahora a C, constante, e integrando entre los límites V , a
T I y V, a T,, tenemos: '
128 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
y, por tanto:
Ordenando y tomando antilogaritmos iesulta
.
S
donde C, es una constante.
Se obtienen otras formas de la ecuación (55) al eliminar dT o dV cn
vez de P de la ecuación (51),una de ellas muy común es la que comprende
a P y 17, es decir,
donde CI es uua constante y y = C,/C,, la relación de las capacidades caloríficas. Debe comprenderse que las ecuacionrs (55) y (56) no desplazan
a la ecuación de los gases ideales P1. = nRT sino únicamente la complementan. Aquélla es aplicable bajo todas las condiciones, pelo las (55) y
(56) únicamente en condiciones adiabiticas reversibles.
Las constantes Ci y C, dependcn de las cantidades de gas presente y
difieren numéricamente entre sí. Se eliminan en los cálculos teniendo en
cuenta la relación de las condiciones iniciales y finales. Así de la ecuación (56)
p,v:
=
p,v:
La ecuación (57) igual quc la ley de Boyle p e m i t e obtener los volúmenes a partir de las presioiics o viceversa. Sin embargo, durante la expansión adiabática la temperatura del gas no permanece constante. Las
temperaturas inicial y final se obtienen en cada caso al sustituir los valores
inicial y final de P y i ,junto con n, en la expresión P V = nRT.
El uso de cstas ecnaciones se ilustra con un ejcrri~~lo.
Dos moles de Iiid r ó ~ c n ocn coiidiciories normales se comprimen adiribáticainmte a un volumen de 10 litros. Para el hidrógeno y = 1.41, con cstos datos se busca la
pre&5n y tcinperatura final del gas. Las cantidades conocidas o inci~gnitas son
Inicial
Final
P, = 1 atmósfera
V , = Z(22.4) = 14.8 litros
T , = 273.2"K
P: = ?
V o= 10 litros
T?= ?
El efecto de Joule Thman 129
Usando la ecuación (57) tendremos para P,
=
8.30 a t m
De haberse realizado la expansión isotérmicamente, la nueva presión
Iiubiera sido de 4.5 atmósferas. Conociendo ahora P, y V,, el valor de T,
será:
Un caso de trabajo máximo obtenible bajo condiciones no isotémicas
es el realizado en la expansión adiabática reuersible de un gas ideal. La expresión en cuestión se logra así: La diferenciación de PV' = constante
nos da
+ V7dP = O
+ VdP = O
rPVr-'dV
rPdV
ó
VdP
=
-7PdP
de nuevo al diferenciar totalmente PV = n R T obtenemos
PdV
+ VdP = nRdT
que por sustitución del valor de V d P se trarnforma en
PdV
- rPdV
PdV
=
nRdT
nRdT
= --(1 - Y )
Al insertar este resultado de PdV en la ecuación (19) y variar los límites a las temperaturas correspondientes a los volúmenes, obtendremos
w m = \";PdV
=
Tg
nRdT
E)
En la ecuación (58) T , es la temperatura inicial de n moles de gas,
Tz es la final que resulta de la expansión adiabática reversible, mientras
que y es la relación C,/C,. Cuando T , > T,,w, es negativo y el trabajo
efectuado sobre el gas, y si T , < T,,ui, es positivo y el trabajo está reah a d o por aquél.
EL EFECTO DE JOULE-THOMSON
L
Un gas ideal no presenta atracción intermoleculiu; por eso el producto
PV es contante a una temperatura dada a cualquier presión. En consecurn-
130 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
cia cuando un gas se expande bajo condiciones adiabiticas en el vacío no se
absorbe ni desprende calor, ni se efectúa tampoco ningiin trabajo externo,
de manera que
Así la energía interna del gas permanece constante lo mismo que PJ',
y en consecuencia la temperatura es la misma antes y despubs de la expansión. L a condición adiabática se impone simplemente para impedir cualquier intercambio de energía entre los contornos y el gas, y así evitar un
incremento o decremento de la energia interna por absorción o desprendimiento de calor.
Con los gases reales la situación es diferente y fue investigada por
Joule y Thomson (Lord Kelvin). Su dispositivo experimental se ilustra
en la figura 3-3 esquemáticamente. L-n tubo, bien aislado para aproximarse a las condiciones adiabáticas, se ajustó con un tapón poroso, como
nos muestra la figura, a fin de permitir el paso de gas de un lado al otro del
mismo que se encuentran a distinta presión P , y P2 (P,> P Y ) .Al aplicar
la presión sobre el pistón del lado izquierdo muy lentamente de manera
que no se altere la presión P,, se obliga al gas a traspasar el tapón poroso un volumen V I y después expandirlo en la presión P, y volumen V , al
mover el pistón de la derecha hacia afuera.
Mientras se realiza la expansión se hacen lecturas precisas de la temperatura en las dos cámaras, para ver si la expansión fue acompaííada por
cambios de aquélla.
4 a p ó n poroso
Figura 3-3.
Experimento de Joule-Thomson
El trabajo hecho sobre el sistema en el lado izquierdo es - P,V, y el
efectuado por el sistema en el lado derecho es P217,, por lo tanto el trabajo
neto hecho por el sistema es
Como el proceso se condujo adiabáticamente, q = O, y de ahí:
El efecto de Joule Thomson 131
El proceso es por tanto a entalpia constante y se observó con todos los
gases salvo el hidrógeno, un descenso de temperatura durante la expansión,
mientras que en aquel cae se calentaba, e igual efecto se comprobó más
tarde con el helio al descubrirse éste. Se define al coeficiente de JouleT h o m s o n ~r.por medio de la ecuación
Puede considerarse como el número de grados que cambia la ternperatura por variación de la presión atmosférica a entalpía constante. La tabla 3-1 presenta los coeficientes de J-T del nitrógeno a diversas presiones
y temperaturas.
TABLA 3-1. Coeficientes de Joule-Thamron del nitrógeno
( p e n " C Atm-1)
P a
l
P
Atin
- 150°C
-100°C
~
0°C
100°C
200'c
300°C
~
La inspección de la misma revela que a una temperatura dada p disminuye con el incremento de la presión y se hace negativo cuando ésta es
suficientemente elevada. Esta conducta significa que a presiones bajas el nitrógeno enfría por expansión adiabitica, mientras que se calienta cuando
aquéllas son elevadas, y existe un punto donde p = O, denominado de
inner-riórz en el cual el gas no se calienta ni enfría por expansión y este
Punto varía con la temperatura. A una presión de unas 200 atmósferas el
nitrógeno sufre un efecto de calentamiento durante la expansión a - 15OoC,
de enfriamiento entre - 100 y 2CQ°C, y de calentamiento de nuevo a
300°C, es decir que a una presión constante encontramos dos temperaturas
de incersión, una superior y otra inferior, entre las cuales el gas se enfría, y
fuera de dicho intervalo experimenta efectos de calentamiento. La maycría de los gases al ambiente se encuentran debajo de la temperatura superior de inversión y de aqui que se enfrían en su expansión arlinbdiica.
pero el hidrógeno y el helio están aún Imr encima de aquEllz y dc ahí que
132 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
exhiben calentamiento. Cabe esperar de estos últimos que presenten un
efecto de enfriamiento si su temperatura desciende por debajo del punto
d e inversión superior a una presión dada, como sucede en realidad.
El efecto de Joule-Thomson es de gran importancia práctica en la licuefacción de los gases, y su utilidad se discutió en el capitulo primero.
El coeficiente de Joule-Thomson se relaciona fácilmente con otras cantidades termodinámicas. Si en la ecuación (40) imponemos la condición de
tal efecto, esto es, dH = 0, obtenemos:
Al dividir ambos lados de la ecuación por dP, con la condición anterior
resulta
Pero ( ¿ I H / ~ T=)C,,
~ y (íJT/aP)H= p. De aquí que
.,
y p se calcula a partir de (.3H/aP) o viceversa. De nuevo si sustituimos el
valor de ( a H / a P )T por el obtenido en la ecuación (41), resulta:
con lo cual evaluamos p a diferentes temperaturas y presiones con los datos
P-V-T de un gas.
EL CICLO DE CARNOT
La experiencia enseña que las máquinas térmicas que operan tomando
cierta cantidad de calor a una temperatura T , y lo ceden a otra menor T I ,
convierten únicamente una fracción del calor absorbido en trabajo, y se
deduce teóricamente que incluso una máquina ideal, en condiciones ideales,
no es capaz de convertir en trabajo más que una parte del calor absorbido, y esta fracción depende de las temperaturas de operación, pero es
independiente de la naturaleza de la máquina. En otras palabras, existe
una limitación natural de convertibilidad de calor en trabajo.
Para establecer las deducciones anteriores, supongamos la secuencia de
operación denominada ciclo de Carnot. Un ciclo es cualquier wrie de opcraciones rcali~adasde manera que al final el sistcma se ericuentra en las
I
El ciclo de Carnot 133
mismas condiciones iniciales. El de nuestro interés particular, consta de cuatro etapas, dos isotemas y dos adiabáticas, y su rendimiento es el máximo
alcanzable para cierta cantidad de calor absorbido a cierta temperatura y
~ e d i d oa otra inferior.
Figura 3 4 .
El ciclo de Camot.
w
Volumen
Iinaginen~osa un cilindro provisto de un pistón sin peso ni fricción que
contiene cierta cantidad de sustancia. Designemos por P,, V z y 8 2 su presión,
volumen y wmpratura iniciales con
una temperatura cuya naturaleza
no es necesario especificar por ahora. La dejamos expandir isothnica y
i-rvcrsiblemente mantenicndo constante la temperatura
hasta una presión
P, y un volumen V I , ion lo cual la sustancia absorbe cierta cantidad de
calor q, qnp incrementa su energía interna en LE,, y tambi6n realiza e1
trabajo w , . E5ta expansión está representada por la línea P,V2P,V, de la
figura 3-4. Según la primera ley termodinámica podemos escribir
i
AE, = q i - wi
IIagamos ahora que la sustancia expanda adiabática y rcveniblemente
dcsdc Pl. I', y O2 a un nuevo estado P., T7,. Como el cambio es adiabático,
4 = O, y todo el trabajo hecho U., debe ser a expensas del cambio de energía AE-, y de aquí que la temperatura descenderá desde O , a O, por lo cual
resulta
En la t ~ r c e r artapa dcl rii.10, la su~tanciaS? iornprirne isotÍ~rriiiay
reversihlrmcntr a la tcmpcratiira 8, desdc rl pinto P,, V , h i t a rl P,,V.,
134 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
durante ella se realiza el trabajo mj sobre el sistema y se desprende cierta
cantidad de calor a los alrededores; de aqui que:
Finalmente, la sustancia se comprime adiabática y reversiblemente desde
P,, V , y 8, a su estado inicial P2, V 2 y 82. De nuevo, q = O y por lo tanto
AE, = -
E,
El cambio total de energía interna para la totalidad del ciclo debe ser
+ AE, + AE, + AE,
w1) - w2 - (q, +m.) q,) + w , + w, + w , )
AE = AE,
(q2 - (q2 = (q2 -
ZE4
(E,
41) - w"
donde w,,, es el trabajo total realizado en el ciclo, que es máximo puesto
que todas sus etapas son reversibles. Además, como el sistema está d e nuevo
en sus condiciones iniciales, debe ser cero la variación de energía interna.
De aqui que:
w, = q2 - q i
(62)
y al dividir ambos miembros de la ecuación por q,
En la ecuación (63) e es la eficiencia termodinámica del proceso, ya
que nos da la fracción del calor total q, que fue absorbido a 8 , y convertido al trabajo máximo w,,.La ecuación enseña que E es independiente
de la naturaleza del trabajo de la sustancia utilizada en el ciclo y que depende totalmente de q, y q,.
Lord Kelvin fue el primero en utilizar la ecuación (63) para definir la
escala termodinámica de temperatura. Supongamos que se define las temperaturas O, y O, mencionadas anteriormente por la relación:
Podemos elegir ahora una sustancia y obligarla a operar bajo el ciclo
de Camot entre el punto de ebullición y el de congelación del asua, con
lo cual tendremos (O, - O,) = 100. Si queremos ahora detcrmiriar la eficiencia termodinámica del proceso podríamos encontrar 8, a partir de la
ecuación (64), y obtener la temperatura que corresponde al punto de ebu-
Ciclo de Carnot de los gases ideales
135
jlición del agua. El valor B1 fijaría t a m b i h a O,, que es el punto de congelación del agua según la escala tem~odinimica.
Realmente no es necesario evaluar B de la manera descrita porque se
Ilesa a la misma relación entre la temperatura termodinámica y la de un gas
ideal criando éste recorre un ciclo de Carnot. Como la ecuación (64) es
.Alida para cualquier sustancia, lo será también para los gases ideales, y
el rcsiiltado obtenido con Estos es idéntico al caso general.
CICLO DE CARNOT DE LOS GASES IDEALES
Si repetimos el ciclo de Carnot entre las temperaturas T , y T , correspondientes a 8 , y O,, pero empleamos en esta ocasión n moles de gas ideal
obtendremos de acuerdo con lo establecido en la figura 3-4 lo siguiente:
Etapa 1: Expansión isotérmica reversible a T,
Etapa-2: Expansión adiabática reversible desde T? a T ,
Etapa 3: Compresión isoténnica reversible a T ,
Etapa 4: Cornpre+5n adiabática reversible desde T,a T ,
Para un ciclo completo AE = O. De aquí que el trabajo total máximo realilado u.,, estará dado por zr, = q, - q,. Además
I>ucstoque las dos integrales se cancelan entre sí. Por lo tanto
"1
136 Capítulo 3: L a primera ley de termodinámica
Dc nilelo, como q , = nRT, ln ( V , / V , ) , al dividir la ecuación ( A ) por
q.: nos da:
1
La ecuación ( B ) se simplifica considerablemente. Como los puntos (P,,
y P V ) quedan en la misma adiabitica, entonces según la ecua1i
ción ( 5 5 ) ,
T:.IRV, = T:JRV,
1
An.ílogamente, tenemos para los puntos (P,, V,) y
encuentran -obre la misma adiabática,
( P V ) que se
Al dividir la primera d e estas ecuaciones por la segunda, obtenemos
y, en consecuencia:
Al sustituir este valor por ln (V,/V,) en la ecuación ( B ) obtenemos finalmente.
Al comparar las ecuaciones (64) y (65) tenemos que
Si comparamos cualquier sustancia y nn gas ideal quc operen según un ciclo
de Carnot entre O y 100°C, se cumplc que (OI - 8 , ) = ( T , - T,)=
IOO'C. y por lo tanto
= T1.De forma análoga ohtcndremos qiir 8 , = T I
\irnos pues. que las escalas tpnnodinámiras de tenipciatura y la de los
:.a\rs ideales son idhticas, con lo cual podernos est ribir para todas las sust m < ias que:
La eficiencia termodinámica 137
LA EFICIENCIA TERMODINAMICA
La ecuación (67b) establece que cuando un sistema, durante un pro=eso ciclic,) reiersible absorbe una cantidad de calor q, a la temperatura
T 1 y entonces tiene lugar un descenso de temperatura ( T e- T I ) ,el trabajo máximo lograble es iqual d1 caior absorbido a T 2 miiltiplicado por la
rrlación ( T ,- T , ) / T ZEs
. importante obqenar que la absorción tiene lugar
a la temperatura más ele\,ada y que desde ella el calor pasa a la menor.
La magnitud del trabajo in\olucrado está dado por el área de la figura 3-4.
Más aún, la eficfencia termodinámica debe stm la misma fiara todos los
firoccios que operan bajo condiciones de temperatura dadas. La necesidad
de esta consecuencia fue seiialada por Carnot, quien argüía que si una
miquina fuera más eficiente que aquélla que ejecutase un c d o tal, ambas
podrían acoplarse para ohtener en un ciclo completo una cantidad neta de
trabajo a ternperatuia más alta a expensas del calor de una temperatura
menor. Pero tal situación es contraria a nuestra experiencia de convertibilidad de calor en trabajo, y por lo tanto se concluye qiie no existe ninguna
miquina mis eficiente que la de Carnot.
De la ecuación (67b) puede verse que una eficiencia termodiriámica
de 100FC sólo podría alcanyarse haciendo T , = O, para lograrlo x r í a preciso
que ci contorno estuxicra por lo menos a una temperatura ligeramente
menor qiie ~1 cero absoluto, a fin de absorber el calor desprendido por el
siqtema a T , = O. Pero como esta última es la mínima posible, estamos
obligados a concluir que cl cero absoluto es aproximable pelo no alcan7able En la práctica se han logrado temperaturas de \arios milésimos de
grado por encima del crro absoluto, pero nunca O°K. En consecuencia la
Conversión del 100:ó de calor en trabajo es imposible de lograr en un proceso cíclico.
REFERENCIAS
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138 Capítulo 3: La primera ley de tennodinámica
7. F. T. JYall, Chemicol l'hernmdynamics, W. H. Freenian & Company, San Francisco, 1958.
PROBLEMAS
1. Cna solución conticne 50'h de agua, 3570 de alcohol etilico y 15% de ácido
acético cn peso. Calcular la fracción molar de cada componente en la mezcla.
Respuesta:
= 0 . i 3 3 ; N m , = 0.066; A'c,ii,ua = 0.?01.
2. Se hace una solución disolviendo 22.5 g de NaZCO, . 10 H _ O e n agua apregando esta última hasta quc el volumen total es de 200 cc. La densidad de la solución
resultante es 1.040 g/cc. Calcular la moluridad, norindidad y la fracción molar
del SalCO, en la solución.
Respuesta: 0.393 m ; 0.786 N; 0.00704 fracción molar.
3. Kna solución que contiene 1070 de NaCI en peso pasec una densidad de
1.011 g/cc. Calcular la molaridad y la molalidad del cloruro ródico en la solución.
4. C n a solución gaseosa después de analizada contenía un 15% de'H1, 10% dde
CO, y 75% de N, en volumen ;Cuál es la fracción molar y el porcentaje en peso
de cada gas en la mezcla?
5. Consideremos una solución compuesta de tres constituyentes. ( a ) ;Cuántas
variables independientes se requerirán para expresar la cnergia total de la solución?
( b ) ¿Cuántas variables indepgndimtes se n e r ~ s i t a npara expresar la densidad de la
solución?
6. En las ecuaciones ( 1 3 ) , (14) y (15) de este capítulo, ;cuál es el significado
de los parámetrus o, b y a/n,?
7. Conienzando con la ccuación ( 1 4 ) para V,, deducir la expresión de
emplear la ecuación (13) y canipararla c m la obtenida en (15).
V,
sin
8. Para cierta solución binaria a P y T constantes resulta
-
V2 =
a> j
2 a,ni
+ 3 =,m2
donde m es la molalidad y o,,, o, y o, son constantes. Deducir 1~ expresión del rolumen total de solución, V, como una función de m.
lar ccuacionei comprendidas eii el problema 8 en expresiones
-V , 9.y VTransformar
como lunciones de las iracciones molares dc los dos constituyentes.
de
10. Un peso de 1000 e, cae libremente sobrc una plataforma desde una altura
de 10 metros. (Cuál será 1.1 cantidad de calor drsprrndido cuando el peso golpea la
platniorma?
R e i p u s t a : 23.4 calorías.
1 1 . U n pistón cuya área ?S de 60 cm2 se dcsplaza una distancia de 20 cm contra
una presión de 3 atm. Calcular el trabajo hcchu, en ( a ) julios y ( b ) calorías.
12. C n gas se expande contra u n a presión de 2 atmbsieras desde 10 a ?O litros
y absorbe 300 calurías. ¿Cuál es el cambio en la energía interna del gas?
~ a r i a i i oponente
l~
dada por 1.i reldción
13. Cii g;is se expande contra una
1O
9 '-- atrii, donde ' F es el iolumm del gas en cad.i etapa de la expansión. Cuando
.,
-
A 100 litro\. el gas e ~ ~ e r i r n iin
~ ~caiiiliio
~ t . ~ de cripigia de >-\E = 100
caloriai. iCiiánto calor absorbe el gas durante el proceso?
&ira es desdi. 10
Rr,piieiio: q
6611 <aloriar.
,
: .
.
! Problemas 139
15. Dos litros de K, a 0 ° C y 5 atm de presión se expanden isotérmicamente
.,,ntra una presión de 1 atrn hasta que finalmente el gas se encuentra 1ambii.n a
última presión. Suponiendo q u e el gas es ideal, hallar los valores de w , AE, AH,
Rerpucsta: w = q = 194 cal; AE = AH = 0.
q en este proceso.
16. Calcular el trabajo realizado por 5 moles de u n gas ideal durante la cxpansión derde 5 atm a ?5"C a 2 atrn y 5 0 ° C \.enciendo una presión constante de 0.5
atm, Si para el gas C, = 5.0 cal mol-1 grado-', hállese AE, AH, y q en este
proceso.
17. Tres mriles de u n gas ideal a 1 atm de presión y 20-C se calientan a pre.
~ i ó nconstante hasta que la temperatura final es de 80°C. Para el gas C, = 7.50 f
T cal mol-1 grado-'. Calcúlese zo, LE, AH y q en este proceso.
3.2 x
18. Suponiendo quc el COZ es un gas idcal, calcular cl trabaja hecho por 10 g del
mismo en la expansión isotérmica y reversible desde u n volumen de 5 a otro de 10
litros, a 2i'C. iCuálea son los ralvres de q, AE, y AH, en este proceso?
Heipueitn: U; = q = 93.9 calorías; &E = AH = 0.
19. Calrular el trabajo niininio necesario para comprimir 20 g de O? desde 10
a 5 litros a O0C. ;Cuánto calor se desprenderá?
20. Dos litros de N, a O'C y 5 atm se expanden isorérmica y revcrsiblemente
hasta que la presión de confinamiento es 1 atni. Suponicndo que el gas er ideal,
calcúleir u>, q, AE, y AH en esta expansión.
21. Utilizando la ecuación de estado de van der Waals, hallar la expresión de la
expansión reversible isotérmica de n moles de gas d d e un rolumen V , a otro V,,
cuya temperatura es T.
22. Para cierto gas las constantes dc van der Waals son a = 6.69 atm-litro?/
molZ y b = 0.057 litros. ;Cuál es el trabajo máximo realimdo en la expmsión de
das moles de gas derde 4 a 40 litror a 3003K7
Reipuesta: 1 ~=, ?,640
~
cilorias.
23. Las constantes de van der \ V d s del dióxido de carbono son a = 3.59 atmlitro2/mo12 y b = 0.0427 litros. ( a ] Rallar el trabajo mínimo requerido para comprimir 1 m01 de gas desde u n volumen dc 10 litros a otro de 1 a 27°C. ( b ) Comparar
este trabajo con el obtenido en el supuesto dc que el gas es ideal.
24. Empleando la ecuacihn de estado de Beattie-Bridgeman explícita en volumen,
ecuación ( 5 6 ) del capitulo 1, dedúzcase la expresión dcl trabajo máximo realizado
en la expansión isotérrnica de n moles de u n gas dende una presión P, a otra P 2 a
Una temperatiira T.
25. Ocho gramos de O, a 27'12 bajo una presión dc 10 atm rc expanden adiabitira y revcrsiblrmente hasta la presión final de 1 a m . Hallar la temperatura final
Y el trabajo realizado en el proceso. Suponyamos que C, = í5 de H para el 0:.
Keipueila; t = - 1 1 7 7 ° C : ui = 179.6 caloriai.
26. Diez gramos de N? a 17°C se comprimen idiabática y reversibleincnte dcade
y el trabajo hecho sobre el gas. ;Cuál e i
el valor de AE y AH en cste prareso? Supongamos quc C, = :> I?.
a 5 liiius. Cakular la teniperatur.l final
27. Para cierto gas ideal C, = 8.58 cal mol-' grado-'. i C u á l será el volumen
Y tenl~eraturafinal de dos nioles de gas u 20°C y 15 atm, cuando i e dejan expandir
-
adiabática y revcriibleinen~e hasta una prrsión dc 5 atm?
I<eipueita: 'T
7.45 litros; t :
- %'C.
28. Encontrar u., q, AE, y AU para el proceso d d u en el prubl~rna27.
29. Cnnsideremos de nuevo el gas en el problema 27, p r c i suponimdo a h o r ~que
la exl>aniióii tiene luqar adiabáticamerite contra una prciibri tonitaiite de 5 atm.
¿Cuál s r r i el vuluiiien y troiperatura final del p s ?
R e , p u r r t a : V = 8 15 litros, t = - 25 0°C.
140 Capítulo 3: La primera ley de termodinámica
30. Hallar zi, q, AE, y A H p a r a el proceso en el problema 29.
31. Deducir lar exprcsionei U y AC, que acompaiian a la expansión de n moles
de un gas d c van der Waals desde el volumcn
V, al V ? a la temperatura T .
32. (a) Usando el gas descrito en el problema 22, calcular LE y AC, correspondientes al proccso dado. ( b ) ;Cuáles son los \alores de AE y AC, en r l proceso
cuando el gas es ideal?
33. U n gas o b c d e c ~la ccuación de \ a n der M'aals con a = 6 69 atm-litro'/molz
y b = 0.057 litros. En este caso C, = 7 00 cal mol-1 grado-1. ,Cuál es AE e n u n
proceso que comprende la compresión de 5 nioles desde un rolunien de 100 litros
a 300°K a otro de 10 a 4 0 0 ° K )
Rerpuefia: I E
3,140 calorías
-
34. ;Cuál es el rolor de A H para el proceso descrim en el problema 33?
35. Supongamos que un gas cibedece a bajas presioi.2~ la eruacibn
donde A y B son constantes independientes de la presión y temperatura, y V , es el
volumen molar. Ilallar l a exprebión p a t a cl cambio de enrnlpia que acompaña
a l a expansión de n molrr desde una presión P, a otra P, a l a tenqieratura T.
36. ;Cuál será la expresión para el cambio e n C, que acompaña al procero
dcsrrito en el problema 35"
37. ( a ) ;Qué expresionrr se obtienen a p r & m e s bajas en la ecuación de Berthelot p a r a las constantes A y B del prohlenia 35? ( b ) Vsando las mismas, hallar
A H q u e acompaña a l a expansión de un mol de CO? desde P = l a P = O a
300'K. Para el CO,, t ,
31.0°C y P, = 73.0 atm.
Respuerta: AM = - 10.2 calorias
38. Para el CO,(g) a 300CK y 1 atni de presión. C, = 8.919 calorías mol-'
erzdo-'. L-smdu la información dada y obrmida en el problrrna precedrnte, hallar
C, para un mal de gas a una presión cero.
-
39. Para el COl(g) a 300°K y l a t m de prpiión ( i l l / W ) , = - 10 2 cal mol-'
atm-1 y C, = 8 919 cal mul-' grado-'. Calcular los cueficientes de Joule-Thornsan
del gas a las condiciones de temperaturas y presión dadas.
40. Deducir con los datos de la tabla 3 1 l a presión a la cual N , ( g )
cabo la inversión de Juule-Thomson a 300-C.
a
41. De los datris establecidos en l a tabla 3-1 determinar el intervalo de teriiperaturv en el cual el N1 ( g ) sufre el efrcto de eniriarriimto en la expansión adiabática de Jade-Thoriison a LO0 atm.
42. A 300°C y presiones que varían entie O y 60 atni, el rneiicientr d e JouleTlii>rnson del S , ( g ) se rrpresenfa por la ccuacióii
p
= 0 0142 - 2 60 x
10-4 P
Siiponimdo que l a niiiina cs indcpendicnte dc l a terriperatiira ~ i las
i
proximidades
de los 3OOCC, hallar rl descenso de t c i n p r r a t ~ ~q.u~e cabe rsperar cn 1.i n p a n s i ó n
de Joulc-Thornson del gai desde 60 a 20 aim
Respueslo. 1 1 = - 0 15ZCC.
43. Cirrta c o m b u i t i b l ~ proporciona ¡O00 calorias por qrarno (a) Cnlciilar el
trabajo máximo quc se obticne de este calor en una riiáqiiina que opera con rnrrcurio,
entre su punta d e ebullición, 3 5 6 6 - C y 40°C. ( b ) L C i i n t o trabajo mdmrno se
obi;ene de este calor e n u n a mjquina qiir usa agua rntrc r i i punto de rhiillirión
v 40"C?
Problemas 141
44. ¿Cuáles son las eficiencias tennodinámicas del proceso descrito en
blema 43?
45. Compárese las eficiencias termodinámicas que cabe esperar: (a)
máquina opera entre 1000 y 300 ~ r a d o sK. ( b ) Cuando opera entre
600°K. y entonces el calor desperdiciado pasa a otra que opera entre 600 y
,,.,
el proCuando
1000 y
300°K.
46. ;Cuál será la cantidad mínima de trabajo necesaria para operar un refrigerador que extrae 1000 cal a O°C y lo expulsa a 5 0 D C ?
'.
La termoquímica es una rama de la física quiniica que trata de los
cambios térmicos asociados a las transformaciones químicas g físicas. Su
objetivo es la deterruinación de las cantidades de energía calorifica cedida
o captada en los distintos procesos y el desarrollo de métodos de cálcrilo de
dichos reajustes sin recurrir a la experimentación.
Desde un punto de vista prictico es esencial conocer si en una rcaccibn
específica hay absorción o desprendimiento de calor y en q u i proporción a
fin de ayudar su remoción o de suministrar el que sea necesario. Resulta
imperioso estudiar la determinación experimental de los calores de reacción, tanto como ios principios tennodinámicos para evaluar los cambios
sin recurrir a la experiencia.
Las unidades de energ-ía mis generales son la caloría, el julio y la
kilocaloría que vale ION calorías.
Para determinar directaniente la variación de calor comprendida en
una reacción, se usa el calorimctro, que consiste en un recipiente aislado
lleno de agua en la cual se sumerje la cámara d e rcactión. Cuando la
reacción rs exotirmica d calor producido se transfiere al agua cuyo asccnso
de temperatura se lee con precisión niediante un tcrrriórnetro surricigiclo en
~1la.Conociendo la cantidad de agria, su calor espccifiro y la \ariacióri
de tcmpcratura se calcula el calor dc rracción dcrpuCs dc tener cn ciirnta
tambicn algunas correcciones por radiación, velocidad dc enfriamiento del
144 Capítulo 4: Termoquímica
calorimetro, aumento de temperatura de las vasijas, agitadores, etc. Estas
correcciones se evitan al determinar la capacidad calorífica del calorímetro
por combustión de cierta cantidad conocida de sustancia, cuyo calor de
combustión se ha determinado con precisión. Con este fin, se eligen muestras de ácido benzoico, naftalcno o azíicar. U n procedimiento distinto de
evitar correcciones es el de reproducir por calefacción eléctrica el cambio
de temperatiira producido en el calorímetro, para el proceso que se estudia.
La cantidad de energía eléctrica para loyrarlo equivale al calor desprendido en el proceso.
U n aparato análogo sirve también para las reacciones endotérmicas,
pero en este caso se medirán descensos de temperatura en lugar de aumentos.
CALOR D E REACCION A
VOLUMEN O PRESION CONSTANTE
Hay dos condiciones generales bajo las cuales se efectúan las mediciones termoquímicas, una es ( a ) a volumen constante y la otra ( b ) a presión
constante. En la primera, se mantiene constante el volumen del sistema
cuyo cambio térmico se busca durante todo el curso de medición. En cambio
al operar a presión constante, se mantiene el sistema bien sea abierto a la
atmósfera, o confinado dentro de una vasija sobre la cual se ejerce una
presión constante. En estas condiciones puede tener lugar cualquier cambio
de volumen y el sistema es capaz de ajustane a la presión externa constante.
Las magnitudes de los cambios térmicos obtenidos en estas dos condiciones difieren en general. A volumen constante cualquier cambio térmico que
tiene lugar se debe únicamente a la diferencia entre la suma de las energías
internas de los productos y la correspondiente a los reactivos. A presión
constante, sin embargo, no sólo hay vaiiación de energía interna, sino
además un trabajo que modifica la proporción de calor observada en el
calorímetro a volumen constante.
El significado exacto de ambos tipos de medición se obtiene mejor, al
aplicar la primera ley termodinámica a la variación térmica que ocurre
dentro del calorínictro. De acuerdo a ella, cualquier calor q agregado al
sistema irá a incrementar la energía interna de éste, y a realizar un trabajo
externo, es decir
q = AE $- u: = 3 E
+
(1)
C o m o a volumen constante dV = O, no se realiza trabajo, por tanto
es decir, cualqukr cambio térmico que ocurre en el calorirnetro a voluinm
constante debc scr una variacih en la energía interna debida a la reacción
iI
Calor de reacción a volumen o presión constante
145
o transforniacibn física o química. Por otra parte, cuando la presión se
iiiantirne constante, y es la misma dentro y fuera del sistema, entonces
b=Pv
Por 10 tanto
De acuerdo con la ecuación ( 3 ) el cambio térmico observado en el
calorírnetro a presión constante comprende no sólo una variación de energía
interna sino también el trabajo de cualquier expansión o contracción del
sistema.
La ecuación (3) puede escribirse de nuevo asi:
( q ) p = ( E p -- E,)
= (E,
PV,)
+
+ P ( V D- V,)
-
(E,
+ PV,)
(4)
donde los subíndices p y r hacen referencia a los productoi y reactivos
respectivamente. Pero como H, la entalpía o contenido calorífico, está definida poi H = E I PL; H , = E,, Pl;,. H , = E ,
PV,, y la ecuación
(4) se transforma rn
+
+
( q )=
~ Hp - Hr
= 4H
1
~
(5)
Vemos pues, que el efecto térmico que a volumen constante mide el
cambio de energía interna, nos da a presión constante la variación de entalpía de los productos y reactivos. La ecuación ( 2 ) define el calor de reacción
a columen constante y muestra que es igual a la cantidad termodinámica
&E. Análogamente, la ecuación (5) define el calor de reacción a prcsión
constante y enseria que es igual a AH. La relación entre ambas es:
A H = 4.E
+ PAV
(6)
De acuerdo con las convenciones establecidas en el capítulo 3; un calor
lloiitico de 4H o &E muestra que el calor es absorbido durante el proceso,
inieritras que uno ncgatico ensefia que se cede calor.
(
ECU~~CIONES
TERMOQUIMICAS
El calor asociado con un proceso d q e n d e no sólo de si el cambio se
efectúa a rolumen o presión constante, sino también de las cantidades
de sustancia consiclcradas, so esradn físico, temperatura y presión Aquí
I
-
146 Capítulo 4: Termoquímica
consideraremos el efecto de las dos piimeras variables, mientras qiie la influencia de las restantes se estudiara al final del capítnlo.
La cantidad de calor obtenida en una reacción dcpcnde de la cantidad
de sustancia que inteiíino en ella. Así cuando dos gramos de hidiógeno
se queman en oxígeno para producir agua líqnida, s r drsprenden 68.320
calorías, mientras que cuando son cuatro gramos, el calor desprendido es
doble y así sucesi\amente. En vez de especificar la cantidad de calor producido por gramo de sustancia, es usual hacerlo para una reacción particular, es decir:
1
H, + - O , = H , O
2
4 H = - 68,320 cal
(7ai
A (7al se le denoiiiina i,cuación tcrmoquimica. Señala que cuarido un
mol de hidrógeno reacciona con 0.5 moles de oxígeno para producir un mol
de a s a se desprenden 68,320 calorías medidas a presión constante. Si se
desea indicar la interacción de dos moles de hidrógeno con el oxígeno pala
formar dos de agua, la ecuación (7a) se escribe así
2 H2 + O 2 = 2 H,O
AH = 2 ( - 68.320) = - 136,640 cal (7b)
.41 escribir una ecuación termoquímica es esencial balancerla y q ~ i clos
valores de SE o A H seiialados en la reacción corresporidan a las cantidades
dadas por la ecuación. Pero aún así (7a) cs incompleta r n do5 aspectos.
En primer lugar, el calor de reacción corrcsponde a una temperatuia definida, en este caso 2 5 T , lo cual drbe quedar establecido, y segundo, no nos
dice nada sobre el estado físico de los reactivos o productos. No hay mucha
duda respecto al hidrógeno u oxígeno porque ambos son gases a esta temperatura, pero el aaua puede encontrarse líquida o en forma de vapor. Para
la formación del agua líquida desde sns elcnientos a 2j°C, AH = -68.320
calorías por mol. Sin embargo, si se forma un m01 agua como vapor, también de sus elementos a igual temperatura AH = 57,800 calorias por
mol, los dos valores de A f I difieren entre sí en el calor de vaporización
de un m01 de agua a 25CC, es decir en 10,520 calorías. Por ese motivo pata
hacer mis completa la ecuación ternioqiiímica, escribircinos:
-
II1(g)
1
+ -2O , ( g )
= H.O(I)
AH2-,*c=
- 68.320 cal
(8)
Los símbolos ( 4 ) y (1) indican qne el hidrógeno y rl oxígeno son sases,
el agua es líquida iniciitras que el wbíndice de SH nos muestra quc el
calor de rracciún dado e? a 25'C. .\nálopmcnte Te e~tableceVI sinibolo ( 7 )
para desig-nar a la fase sólida, mientras cpie (ac) m la abreliatiiia de una
d u c i ó n acuosa diluida.
Cálculo de AE a partir de A?f y viceversa
147
Es muy impoitante que el estudiante aprecie el significado físico de
una ecuación termoquímica. Como en general AH = H~prodiictos)
- fI(Pe.lc.
,,,,,);
AH para la reacción dada en la ecuación (8) define la diferencia
de entalpía de 1 mol de agua líquida y la suma de las de un mol de liidiógeno gaseoso y 0.5 de oxígeno gas también
Como en este caso AH es nrgativo, la suma de los contenidos de calor
de los rcactivos debe exceder la d r los productos en 68,320 calorías, y en
consecuencia cuando se forma un m01 d r agua líquida a partir de los elementos la cantidad de calor es d<,s,brrndida. Por el contrario. si deseamos
invertir la reacción. es decir. si se busca la desco~riposiciónde un m01 de
aqua en sus constituyentes. la suma de los contenidos calorificos de los
productos rxcedc al de los reactivos en la misma cantidad y sería necesario
la absorc~ónde 68.320 calorías para efectuar dicha reacción. Es evidente,
por ese motivo. que una ve7 qur se conoce el valor de AH de una reacción
particular, se drdiice tamb1i.n rl del proceso contrario.
CALCULO DE AE A PARTIR DE AH y VICEVERSA
De acuerdo con la ecuación ( 6 ) ,la difereni,ia entre AH y AE está dada
por PAV, donde P es constante. El factor principal de la diferencia es por
10 tanto AV, el cambio de volumen que tiene lugar durante la reacción.
Para aquéllas que comprenden a sólidos y líquidos únicamente, las variaciones de volumen son ordinariamente muy ligeras y pueden despreciarse
si la presión no es muy elevada. En estos casos, AH es igual a AE, en
cambio en reacciones de gases, los cambios de volumen son grandes en geueral y deben tenerse en cuenta. Entonces la diferencia AH - AE se calcula
simplemente si suponemos que los gases son ideales. Si, en general tenemos
una reacción en la que toman parte n , moles de gas reactiuos y n, productos, entonces, PV, = n,RT, PVD= n,RT y como la presión es constante
PAV = P ( V P- V,)
= ( n , - n,)RT
= An,RT
donde An, = ( n , - n,), es decir, la diferencia entre el número de moicr
de productor y reactiuos caseosos. Si la ecuación (10) se inserta en la ( 6 )
obtiene
1
148 Capítulo 4: Tennoquímica
ciqa utilidad de conversión entre AH y AE, y viceversa se ilustra adecuadamente con un ejemplo.
La combustión de un mol de benceno líquido a presión constante viene
expresada por la reacción
en la cual hai una contracción de iolunim de 7.5 a 6 niriles de gas, y por
lo tanto, An, = 6 - 7.5 = -1.5. De la ccuación (11) obtencmos entonces
para AE
-
-
AHzjoc- An,RT
= -780,980 + l.5(1.99) (298.2)
- 780:980 + 89+
= - 780,090 cal
LEY DE HESS DE LA SUMA DE CALORES
Hemos visto en el último capitulo que E y H son fuucioiies del estado del
sistema, e igual es cierto de sus diferencias A E y AH. En consecuencia, el
calor desprendido o absorbido e n una reacción dada debe ser indcrendiente
de la manera particular en que se verifica. Es función de los estados inicial
y final del sistema pero no intervienen el número de etapas entre los reactivos y productos. Establecido de una manera distinta, si una reacción procede en varias etapas, el calor de reacción total será la suma al~ebraicade los
calores de las distintas etapas, y a su vei esta suma es idéntica a la que
tendría lugar por absorción o desprendimiento en una reacción que procediera en una sola etapa. A esta generalización se la conoce con el nombre de
L e y de Hess.
Este principio~hacefactible calcular los calores de muchas reacciones
cuya medición directa no es posible o deseable realizar. En estos cálculos
las ecuaciones ternioquímicas se manejan como si fueran ecuaciones algebraicas ordinarias, sumándose, restándose y multiplicando o dividiéndose.
La manera de realizarlo se ilustra con el siguiente ejemplo:
Supongamos que se busca AH de la reacción
.
que no sc puede determinar directamente. Pero se encuentran disponibles
las mediciones calorimétricas sisientes:
CH,COOH(i)
C(s)
+ 02(g)
1
+ 2 O&)
=
I f d d f 2 O&)
=
COz(g)
=
HsO(1)
2 C02(g)
+ 2 H,O(I)
AHzsoc= -208,340 cal
AHls.c = -94,050 cal
(128)
(12b)
AHZsnc= -68,320 cal
(1%)
Calores de formación 149
Si ahora multiplicamos las ecuaciones (12b) y (12c) por 2 y las suniamos,
obtendremos :
i
l1
-
- ,~,
AHzJ-c = -136,640 cal
2 H9(g) 02&
= 2 ffzO(1)
2 c(s)
2 H2(g)
3 Odg) = 2 C0&)
2 HdW)
AHZ,c = -324,740 cal
+
+
+
(12d)
por sustracción de la ecnaciíin (12a) de la (12d) resulta
2 C(s)
1
+
4- 2 H&)
+ O&)
=
CHzCOOH(1)
AHZFC= -116,400 cal
Este ei el calor de reacción a presión constante de la ecuación (12).
CALORES DE FORMACION
Una smtancia a una temperatura cualquiera se dice que se encuentra
en su a t a d o ti@, cuando su actividad es igual a uno. La actividad,' cnyo
símbolo es a puede mirarse termodinámicamente como una presión o conccntracibn corregida. En sólidos, líquidos o gases ideales el estado tipo
corresponde a sustancias a 1 atmidera de presibn. En gases reales ésta no
es 1 atm, pero la diferencia de la unidad no es considerable. E n el caso
de sustancias disueltas el estado tipo es la concentración para la cual
a = 1. Las entalpías de las sustancias en el estado tipo o de referencia se
designan usualmente por el símbolo Ho, mientras que AH de una reacción
donde todos los rcactkos y productos se encuentran a una actividad igial
a la unidad csti representada por el símbolo AHo.
El cambio térmico involucrado en la formación de 1 m01 rln una sustancia a partir de los elementos se llama calor de formación de la sustancia.
De nuevo, el calor tipo de formación es aquél en que todas las sustancias
comprendidas en la reacción se encuentran con una actividad igual a la
unidad. .4sí la ecuación termoquímica
C(s)
+ 2 Hdg)
=
Cff,(g)
A H I ~=. ~-17,890 cal
(13s)
nos d a el calor tipo de formación de un mol de metano a 25'C. Por defi- >
nicibn A H ' en la ecuación (13a) es i p a l a
AHZ,.~= -17,890
=
Hg,, ,,,, - (HE,.,
+ 2 ~k,,,,)
(13b)
donde los distintos xalorcs de H%n las entalpias de refercricia por mol.
Si se conocieran las entalpias dc 10s elementos, la información anterior
scrh s~ifirientcpara calciilar cl contenido absoluto de calor del nictnrio.
I
1.a artivi<bd se rldiiiirj m [orina más completa en el capitulu 6. Aqui basta
di,j.ir est.ihlcr-ido q w la activi<l.id cri el estado tipo es la unidad.
1
wri
150 Capítulo 4: Temoquímica
Sin embargo, no existe disponible tal información. Para evitar esta dificultad se hace la suposición de que la eritalpia d e tados los elementos en su
estado tipo a 25OC es igual a cero. Cuando un elemento existe en más de
una forma alotrópica bajo aquellas condiciones, se elige a la mis estable
con entalpia cero. Así se hace con el grafito en lugar del diamante y con el
azufre rómbico en vez del monoclínico, puesto que el azufre rómbico y
el grafito son las formas más estables. En este supuesto, las entalpías del
H,(g) y C ( s ) son c&roa 25OC con tal de que este último sea grafito. Por
ese motivo AHo,,., = AHo,,I,(,,; es decir, el calor de formación tipo del
compuesto debe considerarse a 2j°C.
Este se obtiene bien por medición de A H de la reacción que comprende
la formación directa del compuesto a partir de los elementos o por cálculo
desde los calores de reacción que comprenden el compuesto. Por ejemplo,
para hallar el calor tipo de formación del FeZO,(s),se dispone de las reacciones siguientes:
3 C(s)
+ 2 Fe203(s)
c(s) + odg)
=
=
4 Fe(s)
cok)
+ 3 COp(g)
AHZ,,
AH:,.,
+110,800 cal
= -94,050 cal
=
(14a)
(14b)
Si tenemos en cuenta las suposiciones anteriores, las entalpías del C ( s ) ,
Fe($ y O,(g) son iguales a cero. Por ese motivo
En la tabla 4-1 se dan los calores de formación de cierto número de
compuestos a 25%. Con su ayuda se obtienen fácilmente los de multitud
de reacciones. Así por ejemplo:
Sustituyendo ahora los valores correspondientes señalados en la tabla, obtenemos:
=
- 44,410 cal
Los compuestos formados a partir de los elementos con cesión de calor
se denominan exotérmicos y los que lo hacen con absr.-ción se llaman
endoténnicos. El primer tipo es mucho más común.
Calores de combustión
T ABL A 4-1.
Sustancia
151
Calores tipo de formación de compuestas a 25'C
AIIO
(cal msl-1)
Sustancia
Acetileno(%), C,H,
Bcnceno(l), C,H,
iXaftalcno(s), C,,H,
Metanol(l), CH,OH
Etanol(g), C,H,OH
Etanol(l), C , H 5 0 H
Acido acético. CH,COOH
AH"
(cal mol-l)
54,190
11,720
14,400
-57,020
-56,300
-66,360
- 116,400
CALORES DE COMBUSTION
Se han determinado cuidadosamente los calores desprendidos en la combustión completa con oxígeno de muchos compuestos orgánicos. El método
preferente consistc en quemar la sustancia en una bomba de combustión
Y medir el calor liberado. Como los de combustión se obtienen a volumen
constante, los valores de AE medidos se convierten y corrigen a AHo. El
t h n i n o calor de combustión, hace referencia a la cantidad liberada por m01
de sustancia quemada.
Por este procedimiento, se obtienen directamente muchos calores de
formación de compuestos orcinicos. Si éstos contienen solo carbono, hidrógeno y oxígeno, la información suplementaria necesaria es el calor de formación del dióxido de carbono y del agua liquida que son los productos finales
de oxidación de tales compuestos. El método de cálculo se ilustra con los
datos sobre la combustión del propano. Si &te es gas tenemos:
GH5(g)
+ 5Oi(g) = 3 C 0 2 ( g )+ 4 HD(1)
AH;s.o = -530,610 cal
(16)
152 Capítulo 4: Termoquímica
,
.
-.
Por esa razón
El calor de formación estindar drl propano a partir cle los elementos es
.-lsimiskno los calores de combustión Iian resultado de gran utilidad en el
estudio de las diferencias de energía de las formas alotrópicas de los clementos. El carbono existe en dos formas cristalinas, diamante y grafito; cuando
ambas entran en combustión se encuentra que los calores desprendidos son:
C (diamante)
C (grafito)
+ 0 2 ( g ) = CO,(g)
+ 03(g) = C02(g)
&H&
= -91.500cal
AH;,.,
= -91,050 cal
(18)
(19)
Por esa razón, el carbono en forma de diamante tiene mayor contenido
calorífico, y en la transición
C (grafito) = C (diamante)
AH",5., = 450cal
(20)
Una información posterior proporcionada por los calores de combustión
pertenece a la energía asociada con ciertos Srupos atómicos de la molÉcu1a.
Sc ha observado, por ejemplo, que el calor dc combustión en una serie
Iioiiióloga de compuestos varia de manera casi constante al parar de un
miembro al otro de la misma serie. Así, por la adición de un grupo CHz
TABLA 4-2.
Calores de conibustión de compuestos orgánicos
a 25'C
Sustancia
Metano(g)
E tano (S)
Propano (g)
n-Butano(g)
n-Pentano ( g )
Etilena(g)
Acetileno (g)
Bcnceno(g)
Benccno(1)
Tolueno(1)
Naftaleno ( S )
Sncirora(s)
Metanol(1)
Etanol(1)
Arido ac&ticr>(l)
Acido \>cr:oico(~)
Fórmula
CH,
C,H,
,CaH,
C+H,O
C A Z
C,H4
C2K2
Co%
c6%
C,Ha
C,oE1s
C12H2201,
CH,OII
C,H,OH
CH:,COOH
C,II,COOII
Alf"(cal/mol)
-212,800
-372,820
-530,600
-687,980
-845,160
-337,230
-310,620
-787,200
- 780,980
-934,500
-1,228,180
-1,348,900
-173,670
-326,700
-200,340
--771,200
Calores de solución y dilución
153
a la cadena normal de hidrocarburos saturados paralinicos, el incremento
en ANO de combustión es aproximadamente 15i,000 calorías. Regularidades
p ~ e c i d a se
s han ubscs\.aclo cii otros agrupamicntos y ligaduras, no sólo en
los calores de combustión sino tarnhih en los de formación. Como p~iedc
anticiparse, los incrementos tGrmicos varían con la naturaleza del griilio
y el cariícter del enlace.
En la tabla 4-2 se dan los calores de combiistióii de algurios compuestos
or&icos.
CALORES DE SOLUCION Y DILUCION
La solución de una sustancia en otra estií acompañada por absorcidn o
desprendimiento de calor, y este efecto térmico se denomina calor integro1 de
solucidn de la sustancia que para una temperatura y presión dadas, depende
de la cantidad de solvente que hay en la solución, como se observa en la
colurnna 2 de la tabla 4-3. Por esta razón es esencial especificar el núuiero
de moles dc solvente por mol de soluto en un calor de snliición dado, así:
H?SO,(l)
+ 10 H,O(l)
= H,SO,(10 H , O )
AH,pc = - 16,240 cal (21)
Sin embargo, cuando la cantidad de solvente por mol de sustancia es
grande, se encuentra ordinariamente que una dilución posterior no produce
un efecto térmico significativo, este hecho se indica mcdiante la notación ac.
Así el valor límite de los calorcs integrales de solución seiialados cii la
tabla 4-3 se representan por
H2S04(1) t ac = H,SO,(ac)
T ABL A 4-3.
.iN".-,",= - 22.990 ral
Calores de solución i n t e ~ r a ly difcreiicial para 1 inid
d e H$O, en acua a 25'C
(22)
9
151 Capítulo 4: Termoquíniica
Consideremos en general un proceso de solución a una temperatura y
presión dadas tal como
nlA2 + n,Al = n I A , ( n , A i )
(23)
El calor integral en este caso es
AH = H
-
(nlH;
+ n2H;j
(24)
donde H es la entalpia de solución y H;, H ; son las entalpías molares de
los dos constituyeutcs puros de la solución. Como H es una propicdad
extensiva de la solución, entonces según la ecuación (8) del últinio capítrilo
H = n,E., + n. H? y
AH = nlBi
+ n z H l - (nlH1 + n2H2)
- H,D)
+
n,(H, - H I ) f m ( H ,
= nlLi7,
nZm2
=
(25)
donde SI
= ( H , - H:) y A H ~= (Ha - H ; ) . La ecuación (25) es de
igual forma que la expresión para H. De aquí que AH es una propiedad
siendo los calores parciales o diferenciales molares
extensi\-a de la solución
-de la solución A H , y AH,. Estos últimos se evalúan fácilmente utilizando
los métodos descritos en el último capítulo a partir de AH. L a tabla 4-3
nos msciia en sus dos últimas columnas los \,alores de AH, y AH, en el
caso del ácido sulfúrico. Los subíndices 1 y 2 se refieren al agua y ácido
respectivamente.
La diferencia entre dos calores integrales de solución cualesquiera proporciona el inrolucrado en la dilución de una sustancia desde el estado
inicial al final, y se denomina calor intecral de dilución de la sustancia.
De acuerdo con la tabla 4-3, el calor recuperable al diluir con 8 moles de
agua nna solución que contiene 1 m01 de icido sulfúrico en dos de aquellas, PS:
-
H S 0 , ( 2 H,O)
?L
+ 8 H I O ( l ) = H,SO,(lO H'O)
AH,:.,
=
-
16'210 - (
9960) =
-
6280 cal
Anilogamente, el calor desprendido al diluir la misma solución con una
cantidad de agua muy grande es
H 2 S 0 , ( 2 HrO)
+ ac = H,SO,(ac!
'rH,,,, =
-
22:990
+ 9960 = - 13,030 cal
Este iiltinio valor representa el calor niáxinio obtenible por dilución
de la solución dada.
El calor diferencial de dilución dcl solvcnte es la diferencia entre los
valorci
para las dos concentracinncs distintas, es decir
a?,
(26)
-
Calores de formación en la solución
155
donde los subíndices 1 y 2 exteriores a los parenteiss, representan respectivamente las concentraciones inicial y final. Análogamente, el calor diferencial de dilución del soluto es
= ( S 2 ) ?- ( S 2 )
(27)
A partir de las ecuaciones (25), (26) y (27) el estudiante puede verificar
por si mismo que si no se agrega soluto a la solución, entonces:
AlId = AH? - A H l
-
-
-.
ni(AHl)d
+
nZ(=)d
f ~n,(=i),
(28)
cuando n, y n3 son los números de moles del solvente y soluto presentes en la
solución inicial y An, es el níimero de males de solvente agregados durante
la dilución. Aún más, la introducción de las definiciones de -A
y X H ~
en las ecuaciones (26) y (27) enseña que:
( B d d
(
I
I1
= ( 1 Í d 2 - (Hd1
(29)
CALORES DE FORhlACION EN LA SOLUCION
El calor de formación tipo del H,SOa(l) dado a partir de la tabla 4-1
+ S(s) + 2 Oz(g) = H2S0,(1)
IIr(g)
A H : =
~ -193,910
~ ~
cal
(31)
Cuando esta ecuación se agrega a la (21) obtenemos
K ( g ) 4- S(s)
+ 2 O,(g) + 10H,0(1) = H z S 0 , ( 1 0 H 2 0 )
A H 2 j o c= -210,150 cal
(32)
De forma semejante al sumar las ecuaciones (22) y (31) resulta
Hi(g)
+ S ( s ) + 2 O l ( g ) + ac = H,SO,(ac)
AH2Smo
= - 216,900 cal (33)
Las ecuaciones (32) y (33) dan ambas el calor de formación por m01
de ácido sulfúrico en la roiurió,~ ncuoia, la primera para un mol de
ácido en 10 de agua, la segunda para un mol de ácido a dilución infinita.
De estos ejemplos resulta evidente que el calor de formación de una sustaricia en solución es una función de la concentración y debe tenerse cn cuenta
este hecho. De otra fornia tales calores puedcn usarse de la misma manera
que aqiii.llos de las sustancias en todo tipo de cálculo temo-químico que
~ornprciidesolucionrs.
156 Capíhilo 4: Termoquímica
LA TERMONEUTRALIDL4DDE LAS
SOLUCIONES SALINAS
Como las sales dc los ácidos y bares fuertes se consideran totalmente i o n zadas: cabr esperar que si se mezclan soliicionec de tales salcs sin que se
produzca una interacción quiinica el efecto calorífico resultante debe ser
cero. Así, por ejemplo, cuando se mezcla una solución diluida de nitiato
de potaiio con otra de bromuro sádico resulta:
Que el iritrrcambio indicado en la ecuarión (34a) no comprende reacción
química alguna se obsena cuando la eciiacián se escribe en forina ióriica,
es decir
K + ( a c ) 4-NO;(acj
+ K a + ( a c ) t Hr-(acj
= K + (ac) L Br-(ac) i
Na+ (ac)
+ NO;
(ac)
AIf = O
(34b)
Como los productos y reactivos son idénticos, no cabe esperar un cambio
térmico y cualquier ligera variación debe relacionarse a la dilución dc la
mezcla.
Este principio según e1 cual las soluciones diluidas de las sales neutras
de los ákidos y baccs fuertes piicden merclarsc sin absorción o desprendimien10 ~alorifirose iolio<i. iorno priti<ij,io d e , la tcrrno-~ir,i<traIidad
lar rolucione* ralinai.
Cuando durante la mezcla tiene lugar una reacción química no tiene
validez el principio anterior. Así cuando una solución de cloruro de bario
sc mezcla con otra diluida de sulfato de sodio, sc precipita sulfato de bario,
y el calor dc reacción en lugar de ser cero, es
RnCl,(ac)
+ NazSO,(ac) = BaSO,(s) f 2 NaCl(ac)
A H ~ , .=~ -1630 cal
(3%)
L H , , C ~= -4630 cal
(35b)
o, en forma ióiiica:
Ha+ (ac)
+
+ SO 4 - ( a c ) = BaSO,(s)
CALORES DE NEC'TKALIZACION DE ACIDOS Y BASES
Calores de neutralización dc icidos y bases
157
complctarnentc en sns solu~ioriesdiluidas y qiic en coiisccueircia el proceso
de neutralización comprcride iinicarnente la combinación del ion hidró,rreno
e hidroxilo para formar agua no ioni7ada. Conio este pioceso es igual en
toda neutralización, el valor correspondiente de a H será constante para
cada mol de agua formada. El valor dc esta cantidad a 25'C, corregida
al estado tipo, es
Esta constancia del calor de neutralización no es aplicable cuando se
trata dc ácidos debiles y bases fuertes, de bases débilcs y ácidos fuertes
o cuando icidos y bases son dibiles. La conducta de las ieacciones niericionadas sc esplica tcniendo en cuenta que en tales neutralizaciones la coinbinación del ion hidrbgeno con el de hidrosilo para formar agua, no es la
única reacción que puede verificürsc. 'I'umese el caso del ácido hidrociánico
e liidróxido de sodio por ejeniplo. El primero de éstos, en a p a se encuentra
prácticamente no ionizado. Antes de que el ion hidrógeno del icido pueda
reaccionar'con el Iiiriroxilo de la base, debc verificarse una ionización, y
conlo ésta tiene lugar durante la neutralización, el cambio térmico obseivado es la suma del calor de ioni7acióri del ácido y el de rieutraliación
del ion Iiidrógeno ioriirado; es decir, después de la corrección al estado
tipo, la leacción totd resulta
HCK(a
=
1)
+ OH-(a = 1) = CN-(a
=
+
HzO(1)
A H : ~ . , = - 2460 cal
1)
(37a)
que en realidad csti constituida por dos rexciones, esto es
HCN(a
=
H+(a = 1)
1)
= H+(a =
+ OH-(a =
+
1)
CN- (a = 1)
A N ~ ,=
. ~AHP (37b)
AH,O,.~= -13,360 cal (37e)
1) = HzO(l)
La snnia de las ecuaciones (37h) y (37c) nos da ( ? ? a ) , y. por consignirrite
AHP $ (- 13,360) = -2460
AHP = +10,900 cal
(38)
AH:, cs el calor dc ionimribn di1 :lcid<iIiidrocihico por iiiol. Para nuestro
propíisito. la ligeia ionización en a p a de un ácido tan d&il como el liidro..
cinnico p~iededespreciarse.
Dc manera análoga sc explican los resultados sobre la neiitrali~ación
de las bases débiles y icido? fuertes y de las bases y ácidos dkbiies. En el
primer caso dehe considerarse el calor de ioniraci6n de la base débil y en
r.1 últiiiio los calores dc ioniiación tanto del ácido como de la base dtbil.
l
!
CALORES D E FORMACION DE LOS IOKES
Para presentar los datos t6rriii<oncolllplrtos dc los cli~cliólito~
cii wlucioncs ariius'ii sciiri ;ircesario r1.x loi c:il«i<'s d e f«rnia<ióri a. divcrsas < o ~ i r c n -
1
158 Capítulo 4: Termoquímica
traciones. El problen~ase simplifica enumerando solamente los calores tipo
de formación de los electrólitos: esto es, cuando todas las especies se encnentran a una actividad igual a la unidad. Sin embargo, sería mucho más
deseable tabular los calores tipo de formación de los iones mismos. Entonceq para cualqnicr ~lcctrólitodado en agua, el calor de formación tipo seria
la suma de los correspondientes a los iones individuales, Aún mis, éstos
podrían utilizarse para deducir los cambios térmicos para otras reacciones
en qne participan los iones.
La aproximación a este problema puedc hacerse por medio de la ecnación (36). Como el calor tipo de formación de nn mol de a p a a partir de
los iones hidróceno y oxhidrilo a 25'C involucra el desprendimiento de
13,360 calorías, debe proporcionarse esta cantidad a fin de disociar a un
mol de a p a en estos dos iones, por tanto:
H20(l) = H+(a = 1)
+ OH-(a = 1)
AH:~=
. ~ 13,360 cal (39)
Cuando la ecuación (39) se combina con la del calor tipo dc formación
de 1 mol de a,pa líquida, obtendremos los calores tipo de formación de los
iones hidrógeno e hidrovilo
H,(g)
+ 1 O,(g) = H+(a = 1) + OH-(a = 1)
AH&
=
-54,960 cal
(40)
Esta suma no puedc resolverse en la actualidad sin hacer alguna suposición con respecto al calor de formación de uno de estos iones. La convención
adoptada generalmente cs la de que el calor de formación del ion hidrógeno
e n solución acuosa es ccro a Zj3C y su actividad uno, es decir que
(hesta con\~en<.i<jn.
In eciixión (40 i <la dii-rctanimte el calor <le forma.
ri6n del ion hidií>\-¡lo
C n a vez que los calores de formación de estos dos iones se conocen, se
calculan los restantes ficilmente. Coino el calor tipo dc formación del HCI
en a s a a 25CC es AHo = 4 0 , 0 2 0 cal, y como AHo = O para el H C ,
1H"= -W,020 cal dcbc i-cpn.si.ritai-t.1 I alor cIc fuiiiiar i6ii dvl ion < lorui-o.
De nuevo en la reacción
Xa(s)
1
+ ,1..0 2 ( +
~ )% Flr(g) = S a t ( a = 1) + OH-(a
=
1)
~ l r ; , . ,= - i 12,240 cal
(43)
-,
:
.
Calores de formación de los iones 159
Al combinar esta ecuación con la (42), vemos que
-112,240
=
AH:,+
=
=
+
AH*.,+
AH:~,,A H ~ , +- 54,Y60
-57,280 cal a t 25°C
Por un procedimiento análogo, se evalúan los calores de formación de
muchos iones en la solución acuosa. Algunos de ellos se encuentran resumidos en la tabla 4 4 . El uso de ella en el c i l c d o dc lo$ calores de reacción
T ~ L 4-4.
A
Ion
Calores tipo de formación de iones a 25°C
AH"
c a i (ion g ) P i
Ion
AH"
cal (i<>ii5 1 - 1
que comprende a los ácidos y bases fuertes o sales en solución acuosa se
muestra con mayor claridad con un ejemplo. Supongamos que se desea
calcular AHQeii la reacción
como las entalpías del H,(g), Ag(s) y H+ son todas cero, .iHo estará dada
por
PH" = AHL,- - AH: h c , c s ,
Al colocar el valor dc &c,
de la tabla 4-t y el dc AHO,zciia,de la 4-1
rc~lllta:
AHV;,., = -10,020 - (-30,360)
- -9,660 cal
160 Capítulo 4: Termoquímica
OTROS CALORES DE REACCION
Hay niuchos ti~iosde calor de rcaccióii además de los mencionados. Así
por ejernpln, tenriiios cl de fusión, vaporización, sublimación, disociación,
hidrogcnación, polimeri~ación,etc. Todos ellos estin sujetos al mismo trataniicnto tcrmodin.íriiico discutido zn este capitulo.
CALORES DE REACCION A PARTIR
D E L.4S EKTALPIAS D E ENLACE
Se han propuesto \-arios métodos para evaluar los calores de rcacción de
un proceso para cl cual no existen datos térmicos disponibles. D e éstos, el
más popular es el que cstá basado en las entalpías de enlace. Este método,
ci aplirahlr a las >i,nr<ionei ,<raPoroi enir6 iu<funciaiquc t i m e n sólo e~ilacei
i - c i d r n t < ~yi ,esti basado en Ir15 snpuestos siguientes: (al que todas las entalpías de los enlaces de un tipo particular, como el metano C-H son idénticas, y ( b ) que las cntalpías de enlace son independientes de los compuestos
en que aparecen. Aunque ninguna sulmsición es válida estrictamente, sin
embargo el método ofrcce un procedimiento simple y bastante satisfactorio
para determinar las entalpías de rnuclias y variadas reacciones.
.41 establecer las entalpías de enlace a usar en los cálculos, aquéllas
para sustancias como el hidrógeno, nitrógeno, cloro, oxígeno, etc., se toman
como los valores obtenidos para la disociación de las moléculas por medio
tirmico o espcctroscópico. De nuevo, para hallar el valor de C-H se toma
el calor de formación del metano a partir del C ( s ) y H ? ( g ) , y este último
combinado con el de sublimación del carbono y disociación del H,(g) para
obtener el calor de disociación del metano en los átomos de gas. Este resultad o sc divide entonccs por cuatro, para hallar el valor del enlace C-H.
Al continuar este procrso con diversos tipos de compuestos y reacciones,
es posible establecer nn conjunto promedio de las entalpías de enlace y sus
mcjores valores como los qne se muestran en la tabla 4-5. Al utilizar estas
rntalpías un signo mis be adscribe a la entalpía de eiilace roto, porque para
ello se precisó absorción de calor, y el signo menos se utiliza cuando se
produce un ciilace y hay despreiidirriiriito calorífico.
Podenios ilustrar cl uso de las entalpías dc enlace con varios ejemplos.
Siipqgamos p r i n ~ e qur
~ . ~ se
~ busca el cambio eiitálpico a 25:C de la reacción
En e5tc caso los cuatro c i i l , ~ c iC:-H
cii cl C,H, estiii iiinlcctados y jrucderi
<Icsl>rv<iaisc.
Siii c~ribar~o:
i i i i dublc eiilacc sc ronipcn rii C,H, y iillo 11--H
i
Calores de reacción a partir de las entalpías de enlace
TABLA 4-5
Valores empíricos de las entalpías de enlace
a 25°C (kcal/mol)
AH
Enlace
H-H
H-F
H-CI
H-Br
0-0
o=o
o-H
C-H
C-o
C=O
C
CC=C
C=c
C-F
Enlace
AH
C-C1
C-Br
CS
C=S
C-N
C=N
C?EN
N
NN=N
N-N
N-H
F-F
CI-C1
Br-Br
79
66
62
114
70
147
210
38
100
226
93
37
58
46
172
C(s, grafito)
~
f61)
=
C(g)
~
en H?. A su vez, en el C2H, se produce un enlace CC y dos C-H;
consecucncia escribiremos para A H
AH,,.,=-(AH,+~AH,~,)+(AH,,,+~H,~,)
en
(45b)
Al colocar en la ecuación (45b) las entalpías de enlace de la tabla 4-5,
resulta
aHz,., = - (83 f 198)
(147 104)
- -30 kcal
+
+
El valor obsrn~adoexperimentalmente para la reacción en la ecuación
(45a) es
= - 33 kcal
Como un segundo ejemplo, consideremos la reacción
2 C(S)
+ 3 ~ , ( g +) f O&)
AH = AH,
= H,cO-CH,(g)
(46a)
Antes de que las entalpías se iitiliccn aquí el C(s) tiene que convertirse
a C ( g ) . Con este fin desdoblemos la ecuación (46a) en dos reacciones
2 C(g)
+ 3 H,(g) f f O z ( g )= H , , C O - C H , ( g )
2 C (S) = 2 C ( S )
Y
AH = AH,
AH, = 344 kcal
cuya suina es la ecuación (%a). Según (46b)tencmos
AH*
= - (2
=
+ (3 AHH-H+ 1 AHo-u)
+ j94) + (312 + 59)
+
A H ~ - , , 6 m,-,)
-(le8
= - 391 kcal
(46b)
(ase)
fi
162 Capítulo 4: Termoquímica
.
.,,
1
, '
> S
Al combinar este resultado con la ecuación ( 4 6 ~ 1 ,se obtiene AH, =
- 391 344 = - 47 kcal. El valor observado es 4Hlj,, = - 44 kcal.
+
VARIACION DEL CALOR DE REACCION
CON LA TEMPERATURA
En general AH de una reacción es función de la temperatura y presión
y AE lo es de la teniperatura y volumen. Sin embargo, aquí estudiaremos
únicamente los efectos de la temperatura en AH y aE.
El calor de una reacción obtenida calorimétiicamente o por cálculo
corresponde a alguna temperatura definida. A otras diferentes aquél frecuentemente varía. Como las reacciones se llevan a cabo a diversas temperaturas, es necesario con frecuencia conocer los calores de reacción a otras
diferentes de aquéllas en que fueron determinadas, por tanto es muy deseable un método de cálculo del calor de reacción a una temperatura a partir
de otra.
En tal caso juegan un papel muy importante las capacidades calorificas
de las cuales hemos visto que existen dos tipos C, y C,. Para los gases
C, - C, = R cal por mol. Por otra parte, como los cambios de volumen
que acompañan al calentamiento de los sólidos y líquidos son pequeños,
dichas capacidades son esencialmente iguales, pero además varían con la
temperatura. Esta variación se expresa generalmente mediante fórmulas
empíricas del tipo
C, = a
+ bT + cTZ+ dT
6
C , = a'
d
+ b'T + T'
3
cal mol-' grado-'
cal mol-' grado-'
(47)
(48)
donde a, b, c y d, ó a', b' y d, son constantes para una sustancia dada. Los
valores de estas constantes para diversas sustancias se dan en la tabla G 6 .
El intervalo de temperatura en el cual las constantes se mantienen está
indicado también.
La ecuación diferencial para la variación del calor de reacción con la
temperatura puede obtenerse de la manera siguiente. Como
la diferenciación de ambos miembros respecto a la temperatura absoluta
nos da
Variación del calor de reacción con la temperatura
TABLA 4-6.
Constantes de las ecuacianes de la capacidad calorifica molar
de diversas sustancias
I n t e n d o de
temperatura
Sustancia
%(S)
%(S)
O2k)
Cok)
HCl(3)
H.~(s)
H,S(S)
W ( S )
C~,(S)
C%(S)
CI%(3)
C2Hb(3)
c12(3)
NOk)
C(s, grafito)
C (S, diamante)
163
x 10'
("K)
a
b X 103
300-2500
300-2500
300-2500
300-2500
300-1500
30CL1500
300-1800
300-1000
300-1500
300-1500
300-1500
300-1000
6.62
6.76
6.76
6.60
6.70
7.219
6.955
6.189
5.166
3.422
2.706
1.375
0.81
0.606
0.606
1.2
0.84
2.374
3.675
7.887
15.177
17.845
29.160
41.852
2.67
7.40
- 7.28
- 95.78
- 41.65
- 90.59
- 138.27
á
b' x 103
6'
8.76
8.05
2.673
2.162
0.271
0.233
2.617
3.059
300-1500
300-2500
300-1400
300-1300
c
d x 10s
1.3
1.3
x
- 0.585
2.260
10-6
- 0.656
- 1.56
- 1.169
- 1.303
Pero el segundo y tercer términos son, respectivamente, Co(r,aduetosi
y
,,.,,,,, , . Por ese motivo
C,(
La ecuación (50) se conoce como de Kirchhoff. De igual forma se obtiene
la ecuación de variación de AE con la temperatura, es decir
L a integración de la ecuación (50) depende de si AC, es constante o función de la temperatura. Cuando es constante, la integración entre las dos
temperaturas, T , y T,, nos da
AH? - A H I
=
AC,(Ta
+
-
Ti)
-
AHt = AHi
A C ~ ( T * TI)
(52)
Aquí AH, es el calor de reacción a T , y AH, el correspondiente a T2.
Sin
i.inbaisi, < iiando M:,, varia, trncmm
d
1
164 Capíhdo 4: Termoquímica
donde AH, es una constante de integración. Para evaluar la integral en la
ecuación (53), AC, debe estar disponible como una función de la temperatura.
La utilidad de las ecuaciones (52) y (53) se ilustra bien con ejemplos.
Supongamos que se desea calcular AHUa 318°K para la reaccióri
Las capacidades caloríficas medias en este intervalo de temperatura son
HZ(g):
C, = 6.82 cal mol-' grado-'
Cl,(g):
C, = 7.71
HC!(g):
C,
,,
= 6.81 ,,
,,
,,
,,
a,
de lo cual obtendremos
Por esa razón
AHJ,,,,
=
=
+
-22,OW
(-0.46)(348
-22,080 cal
- 298)
Sin embargo, supongamos que se desea hallar el calor de formación del
amoníaco a l,OOO°K a partir de los datos siguientes:
N,(g): C, =6.76
+ 0.606 X
+
NZ(g): C, = 6.62 0.81 X
KH3(g): C , = 6.189 f 7.887 X
Ahora bien Cnpd
,,
=
T
+ 1.3 X lo-'
1'
cal mol-1 grado-'
1' cal mol-1 grado-'
T - 7.28 X lo-' T Z
cal mol-1 grado-'
C l>xH,. De nuevo C,,,,,,,
está dado por
(56a)
(56b)
(56c)
Variación del calor de reacción con l a temperatura 165
Restando la ecuación ( 5 i ) de la ( 5 6 ~ 1 ,obtenemos para AC,
ac,
= -
7.12
+ 6.364 x 10-dT - 7.93 x
lo-' T~
(58)
Al sustituir la ecuación (58) en la (53) e integrando resulta
A fin de determinar la constante de integración, se debe sustituir en la
ecuación (59) un valor conocido de AHQ a cierta temperatura y así hallar
el de AH,. Como hemos dado el de 298.Z°K que es AHo = - 11,NO cal,
entonces
-11,040
Y
=
+ 3.182 X 10-3(298.2)2- 2.64 X10-'(298.2)'
+ AHa
AHo = -11,040 + 2120 - 280 + 10
-7.12(298.2)
=
-9190 cal
Colocando el valor hallado para AH, en la ecuación (59j, la expresión de
AHo es
Esta ecuación nos d a AHo para la formación del amoníaco como una
función de la temperatura. Ecuaciones de este tipo son de gran utilidad,
porque permiten el cálculo del calor de reacción iimplcmente al colocar
la temperatura a la cual se busca AHo. Así tenemos que para el caso presente a l,0003K
AHu = - 9190 - 7.12(1000)
-
+ 3.182
X
10-~1000)2 2.64
x 10-~(1000)~
9190-7120-t3180-260
- 13,390 cal a 1000CK
-
De aquí que a 1000°K se desprenden 2350 calorías m i s que a 298'K.
La exactitud de estas ecuaciones está condicionada por la prrcisión
de medida de los calores específicos y de reacción. Debe cuidarse del intervalo dc temperatura en que se usan dichas ecuaciones que tienen validez
únicamente dentro de aquella variación en la cual se han dcteniiinada
los calores ~s~xcificos.
#
166 Capítulo 4: Termoquímica
REFERENCIAS
\'&se
las rrferencias del final del Capitulo 3. Además:
1. Hougen, Watsan y Ragatz. Chemical Proceir Princifiler, John Wiley & Sons,
Inc. riueva York. Parte 1, Parte 11, 1959.
2. K. K . Kelley, U. S. Bureau of Mines Bulletinr No. 324, 371, 383, 384, 393,
406 y 407.
3. L. Pauling-, The Nature of the Chemicol Bond, Coriiell Univerrity Press, Ithaca,
N. Y., 1960.
4. Rosrini, Pitzer, Taylor, Ebert, K~lpatrick,Beckett, Williams y Werner, Selected
Valuer of Propertiei of Hydrocarbons, Cir. Natl. Bur Standardr C 461, C S.
Government Printinp Office, Washington, D. C., 1947.
5. Rornini, Wagman, Evans, Levine, and Jaffe, Selected Voluer of Chenicol Thermodynomic Propeítier, Circ. Natl. Bur. Stmdars 500, U. S. Government Printing
Office, Washington, D. C., 1952.
6. R. R. Wenner, Therrnochemicnl Calculationr, McGraw-Hill Book Company, Inc.,
Nueva York, 1911.
7 . A Weissberger, Physicd Methods
Inc., Nueva
of
O r p n i c Chemiitry, Interscience Publishers,
York, 1959, Capitulo 10.
PROBLEMAS
1. El calar molar de combustión del naftaleno (P.M. = 128.17) es -1228.2
kcal/mol. Si se queman 0.3000 g del mismo en un calorímetro se produce un
aumento de temperatura de 2.050W. ¿Cuál es la capacidad calorífica total del
calorímetra?
Respuesta: 1402 caU0C.
2. Si 1.520 de un compuesto orgánico se queman en el calorímetro del problema anterior y dan un aumento de temperatura de 1.845"C. ;Cuál es el calor de
combustión del compuesto expresado en calorías por gramo?
3. Se quema una muestra de 0.500 g de n-heptana(1) en un cvlorirnetro a
volumen constante, produciéndose CO,(g) y H , O ( I ) y la temperatura se eleva
2.934"C. Si la capacidad calorífica del calorímetra y sus accesorios es de 1954 cal/'C,
y la temperatura media del mismo es 25"C, calcular:
( a ) El calor de combustión par mol de heptano a volumen constante.
( b ) El calor de combustión del heptano por m01 a presión constante
Respuesta: ( b ) AH = - 1151 Kcal.
4. Establecer si para las reacciones siguientes AH será muy distinto de AE así
Como los casos donde sea mayor o menor que AE. Supóng;?se q u e todos los reactivor y productos se encuentran en sus estados normales a 25'C.
( a ) La reacción completa de combusti6n de la sacarosa (C,,H,,O,,)
( b ) La oxidación del naftaleno sólido (C,,H,) con el O > para producir ácido
ftálico sólido, C,H,(COOH),
(c) La combustión total del alcohol etÍBco.
( d ) La oxidación del PbS con el O, a PbO y SO,.
5. Hallar el valor de AE" a ?5'C de la reacción
Problemas 167
6 . Los calores de las reacciones siguientes a 25'C ron
1
h'a(s)
H&)
+ 3 CI2(g) = NaCl(s)
+ S(s) + 2 O d g ) H?SO,(I)
+ + 2 0 2 ( g ) = Xa2SO4(s)
F
2 S=(.;) S(s)
1
3Hdd + + C I M
1
AHo = -98,230 cal
AHo = -193,910 cal
AHo = -330,500 cal
AH" = -22,060 cal
= HCl(g)
A partir de estos datos hallar el calor de reacción a volumen constante y 25-C
para el proceso
2 NaCl(s) H,SO,(I) = Na,SO,(s)
2 HCl(g)
Respuerto: 4Eo = 14,560 cal.
+
+
7. A partir de las ecuaciones y los calores de reacción siguientes, calcular el
calor molar tipo de formación del AgCl a 25°C.
AHo = -77,610 cal
Ag?O(s)
2 HCI(g) = 2 AgCI(s)
H20(1)
+
2 Ag(s)
+ 5 O d g ) = .kg20(s)
1
8. Para la reacción
+
AH"
=
-7310 cal
+
4H2,.c = 30,920 c a l
2 SaHCO,(s) = Ka,CO,(s) f CO,(g)
H,O(g)
Hallar el calor de formación tipo a 25'C del NaHO,(s) e n calorías por rnol.
9. De los datos de la tabla 4-1 calcular los calores de las reacciones siguientes
a 25°C:
(a) Fe103(s)
+ C o k ) = COt(g) + 2 F e o ( $ )
(b) 2 NO*(g) = 2 XO(g)
(c) 3 C>Hz(g) = CeHs(1)
+
O&)
10. A partir del calor de combustión del n-butano dado en la tabla 4-2 calcular
el calor de formación tipo de este compuesto por mol a 25'C.
Rerpueitn: - 29,820 cal/mol.
11. A partir de los datos de la tabla 4-1 calcular el calor de combustión del
C,H,OH(g) a 25°C.
12. A partir d e los datos señalados en la tabla 4-3 determinar a 25'C:
( a ) La cantidad de calor que se liberará cuando dos moles de ácida sulfúrico (1)
se disuelven e n 30 moles de H , 0 ( 1 )
( b ) Los calores diferen:ialer de solución del ácido y agua para la solución dada.
Respuesta: ( a ) - 33,980 calorias.
13. (a) ;Cuánto calor se desprenderá o absorberá cn la solución de dos moler
de ácido sulfúrico (1) e n un gran volumen de agua a 25*C? ( b ) cuál será la
diferencia de los calores de solución del ácido y agua bajo cstas condiciones?
1
14. U n a solución que contiene inicialmente 73.13% en peso de ácido sulfúrico,
se diluye hasta que el porcentaje de aquél en 35.25% en peso. (a) ;Cuál será el
calor integral de dilución cuando 100 g de la solución inicial se diluyen a 25-C.
( b ) ;Cuál será el calor dikrencial de dilución del ácido y -agua bajo aquellas condiciones?
Respuerto: ( a ) - 4680 caloriap.
15. S~ponqarnorq u e la solución inicial discrita en el problema 14 se diluye
en u n gran voiumen d e agua. ;Cuál será el valor de los c;ilorcs integrales y diferenciales de diliición e n el proceso?
n
168 Capitulo 4: Termoquímica
16. Por medio de la ccuadón (28) de este capítulo, calcular los calores integrales de dilución para el proceso dcscrito en los problemas 14 y 15. ;Cómo podemos
comparar estos resultados con los obtenidos previamente?
17. Na,CO,(si se disuelve en un gran exceso de agua con desprendimiento de
5500 calorías por mol a 25'C. Calcular el calor de formación por mal de Na,CO,
en una solución diluida.
Reipueito: - 275,800 cal/mol.
18. A partir de las siguientes reacciones y de los datos térmicos a 25°C siguientes.
+ 23- O&)
2 Fe(s)
+ 51 o & )
2 FeO(s)
~
'
= Fe&(s)
AIIO = - 196,500 cal
= FezOds)
AHO = - 67.900 cal
~ + 2( H+~ ( a =
1 1) = Fe++(a = 1)
Hdg)
2
1
+ HAg)
AHo = -21,000 cal
AHO = O cal
~ ~ ( =g H+
j (a = 1)
+5Odd
calcular AXo de la reacción.
FeO(s)
AHo = -68,320 cal
= HsO(1)
+ 2 H + ( a = 1)
= H ? O ( l ) + Fe++ (a = 1 )
19. Los compuestos siguientes orisinalrnente en soluciones
acuosas diluidas se
mezclan juntas en la forma que se señala:
+
-
(a) C H a C O O S a
HC1LIgSO, -t
(c) N H g C l
U B ( O H ) -*
~
(d) C a C L
li,CO,
,En qué casos debe esperarse un efecto térmico apreciable? Explicar la respuesta.
(b) KC1
+
+
+
20. A partir d e los datos de las tablas 4-1 y 4-4, calcular los calores de las reacciones siguientes a 25'C:
(a) Ca++
+ C0;-
(b) C O j
= CaC03(s)
+ 2 H + = H,O(l) + C02(g)
21. 150.00 cc de HCI 0.4 h' se neutralizan con un excrso de NI1,OH en una
íasija de Dcwar con un aumento de temperatura dc 2.36-C. Si la capacidad d o rifica del frasca de Dewar y su contenido después de la reacción es de 315 ~ n l , / ~ r a d u ,
calcular el calor de neutralización en calorías por mol.
22. A 18°C el calor de solución del CuSO, anhidro en un \.olumen grande de
agua es - 15,800 cal/mol, mientra q u e el del CuSO, .5H,O es 2750 cal/rnol.
Hallar a 18°C el calor de la reacción
CuSO,(s)
+ 5 H,0(1)
= CuSO,: 5 H > O ( s )
Respuerta: AH = - 18 550 cal.
23. Los calores integrales de solución a 18°C dc diiersar rnodifica~ionessólidai
de cloruro de calcio en las cantidades indicadas d c agua están dudan por
+
raCl,(s)
400 H?O(I) = CaC11(400 H ? 0 )
C a C l , . 2 HrO(s)
398 H D ( I ) = CaCI2(400 1 1 0 )
C'aC12. 4 H,O(i)
39(j HzO(l) = CaClo(400 H1O)
<:;iCI,. 6 II,O(\)
304 II,O(I) = C a ( M 4 0 0 H?O)
+
+
+
AH,
-
-I7,9!lO cal
311; = -10,0:30 m1
Alla = - 1 8 3 0 , al
13hO < :al
Alla
'
Problemas 169
A partir de estas datos hallar los ~ d l u r e sde hidratacibn de lar siguientes re,icciones:
+
( a ) CaCll(r)
2 H 2 0 ( l ) = CaCI,. 2 11-O(s)
( b ) CaCII ? H ; O ( s ) f 2 H , O ( l ) = CaCI?. 4 H,O(s)
( c ) C a C l i . 4 H,O(s)
2 H , O ( l ) = CaCI, - 6 H , O ( s )
( d ) CaCl,(s)
6 H,O(I) = CaCI, 6 H:O(s)
+
+
24. Utilizando las entalpias de cnlace, crtirnir a 25°C el calor de rcacción de
Comparar este resultado con el obscriado experimentalniente
Rerpueita: LVi,,, =
- 59
kcal.
25. Etilizaiido las entalpias de enlace, hallar cl calar de la reacción
a 25-C. ¿Cómo se compara este resultado con el valor obsrrv.xdo?
26. Los cálculos dc las entalpías de enlacc no son aplicables a molécul.is como
C O ( g ) y C 0 2 ( g ) , en el supuesto de que la estructura dcl primero sea C = O y
dcl segundo O = C = O . Hallar el porcentaje de crror que resultaría si deseáramos
calcular AH de la reacción
en el supuesto de que las estructuras de C O y COA fuesen las establecidir anteriormente.
27. Calcular a partir de las entalpias de enlace los calores de combustión del
metano a CO,(g) y H , O ( I ) en el supuesto de que Is estructura de la molicula
del COZ es O = C = O . Comparar este resultado con el valor observado.
28. Utilimndo las constantes de la capacidad calorifica de la tabla 4-6 hallar
la rmtidad de calor requerido para elevar la temperatura dc 200 g de CO,(g] desde
300 a 500'K ( a ) a presión constante y ( b ) a yoliimen conrtantc. Suponer que
C - C = R cal mol-' grado-'.
Respuesta- ( a ) 8880 cal; ( b ) 7080 cal.
29. U n mol de S i ( q ) y trcs de H,(g) a 25°C se calientan a 450°C y se someten a una prrrión que resulta en la conversión de 0.1 moles de N? en S H , ( g ) . Los
s.iscs se enfrían de nuevo rápidamente, a 25°C. Hallar particiido de los datos
llroporcionados en este capitulo, cuánto calor se cede o absorbe en el proceso.
30. Una mezcla de gas contiene 4070 de COA, 30% de CO, y 30% de N? par
b~lumcn.Hallar el calor necesario para elevar la temppratiira de 1000 p de la mer~ 1 . 1desde 300 a 500'K a presión constante.
31. I l a l l x el calor de vaporización del agua a 120" y 1 atrn de presión. La
Calmidad calorífica de H,O(I) puede tomarse como 1 0 ral/g-grado. C, para
I' \Ji>oicomo 0 4 5 cal/p-grado, y e1 calor de v~porizacibna 100°C como 510 caUg.
Kerpueita. 529 cal/g.
32. Se conderis.t a agua liquida u n inol de vapor en su punto de ebullición bajo
'"'a P r r i i h constante de 1 atni bajo i g u a l ~ scondiciones ,Cuáles son los ,alores de
lH,2' , u, y AL' en este pr-eso?
+
33. En la r e a c c i h Z n O ( r )
CO(5) = Z n ( g )
O69 T - 3 29 x 10-.i 1.2 + 1.25 x 10-0 7 3
+
C O - ( z ) ; AHO = 47,390 -
170 Capitulo 4: Termoquimica
34. Hallar AHO como una función de T para la reacción
CO,(g)
+ C(s, prafito)
= 2 CO(g)
,¡endo el valor de AHol,,,K = 41:400 calorías.
Reipuesto: AHo = 40,810
5,361 T - í.697
+
x 10-3 T" + 31.93
- 0.565 x 10-9
T I
X 10-7 T3
1.169 x 105
--
T
35. Hallar las expresiones de AHU coma una iunción dc la temperatura para la
reacción
N,(g)
O.(%) = ? N O ( s )
+
sabirndo que Alla,y,.,
= 43,000 cal
36. La expresión de AHo para la formación del COZ como función de la temperatura es
1.091 x l o 5
AHo = - 93,480 - 0.603 T - 0.675 x 1 0 1 T" T
Hallar ACO en esta reacción como función de T.
P
37. Para la reacción CaO(s)
+ CO,(g)
AHo = - 42,500 - 0.66 T
+
= CaCO,(s)
4.1 X 10'
2.155 x 10-3 T Z+ --T
Hallar AE', h ~ z y, AC; como funciones de T.
38. Supongamos q u e la reacción 2 4 ( g ) = .4,(g) procede muy rápidamente y de
manera total a 300'K con una liberación de 50.000 cal par mol de A, formado.
Bajo estas condiciones se considera que el proceso es erenciálmente adiabatico. Si
C , en el sistema es constante e igual a 8.00 cal n m - ' grado-' y A? es estable con
In temperatura. (Ciiál es la máxima temperatura iilcanzable como resultado de la
fr,rmación de 0.500 moler de A2?
LA SEGUNDA
TERCERA
LEY
Aunque la primera ley de la termodinámica establece la relación entre
el calor absorbido y el trabajo realizado por un sistema, no señala ninguna
restricción en la fuente de este calor o en la dirección de su flujo. Según
la primera ley, nada impide que sin ayuda externa, extraigamos calor del
hielo para calentar el agua, siendo la temperatura del primero menor que
la de esta última. Pero la experiencia nos enseña que tal transferencia
del calor de una temperatura más baja a otra mayor no se efectúa espontáneamente, en su lugar se encuentra siempre que el calor fluye en sentido
contrario, cs decir, el flujo d e calor es unidireccional desde la temperatura
más e l e ~ , a d aa otro menor, lo que rio impide la posibilidad de enfriar un
cuerpo por debajo de la temperatura de sus contornos, pero para ello es preciso realizar cierto trabajo.
C n cambio unidireccional xmejante, se obsema en todos los fenómenos
naturales. Así la electricidad tiende a fluir únicamente desde un punto de
Potencial elktrico más elevado a otro &S bajo, el agua se mucve de un
nivel más alto a otro menor, la difusión tiene lugar entre puntos de concentración distinta, y todas las reacciones +micas se llevan a cabo en la
dirección que les conduce a establecer un equilibrio. En efecto, las observacimies anteriores se resumen diciendo que todos los procesos de la naturo(era tienden a cambiar espontáncarnente e n u n a dirección que conduzca al
equilibrio.
Pero aún existe otra insuficiencia en la primera Icy termodinámica,
ccnser\-ación de energía en cualquicr transforPues auuque ésta exige
'nacióri, no aclara la facilidad de iriierconvcrsión de dichas energías. Tam-
172 Capítulo 5 : L a segunda y tercera ley de la temodinániica
bién es un hecho, que mientras que diferentes formas de encrgía pueden
convertirse fácil y totalmente en calor, el proceso contrario tiene lugar bajo
condiciones muy restringidas. Así, a temperatura constante, el calor se transforma en trabajo sólo a expensas de algún cambio permanente en el sistema
comprendido. Por ejemplo, el calor se transfonria en trabajo por expansión
isotérmica rever~ihlede un gas en cilindro. Para conservar este trabajo el
gas debe permanecer expandido. Si intentamos devolver el gas a su condición original; encontramos que el trabajo obtenido en la expansión debe
utilizarse en la compresión, y en consecuencia gastamos la cantidad de calor original. De nuevo, para lograr un trabajo por medio del calor, como
en una máquina térmica, es esencial que exista una caída de temperatura y
que el calor fluya desde una temperatura elevada a otra menor. Pero aún
bajo tales condiciones no todo el calor se convierte en trabajo, sino sólo una
fracción del mismo, determinado en condiciones ideales por las temperaturas de operación. Aún más, aunque el calor de la máquina permanezca
inalterado en tal operación, el que permaneció sin conversión es degradado
porque ha descendido de temperatura. De estos hechos puede verse que el
calor no se transjorma e n trabajo sin producir cambios permanentes bien
sea e n los sistemas comprendtdos o e n sus proximidades.
ENTROPIA
El párrafo anterior con letra cursiva no es sino la expresión de la secunda ley termodinámica, que se estableció gracias a los esfuerzos de Clausius
y Lord Kelvin. Para llegar a un enunciado general de la ley y expresarla
en forma matemática, definamos una nueva cantidad matemática S, denominada cntropia del sistema. Como veremos después, la entropia de un sistpma depende sólo de sus estados inicial y final, y como en el caso de E
y N, escribimos que el cambio entrópico AS, es
dcnde S? > S, son la< entropías de los rstadm final r inicial. Más aún,
especificamos que el camhio de S, dS, estA dado por
donde d q , es una cantidad infinitesimal del calor absorbido en un proceso
que tiene lugar bajo condiciones rtcernbles a una temperatura T. En el
c ~ s ode un cambio finito reversible a T = constante, dS se hace igiial a AS,
d q , es entonces q,, > la ecuación ( 2 ) toma la forma
1
Cambio entrópico en los sistemas aislados 173
Por ese motivo, para cualquier proceso isotérmico reversible en el cual
,e absorbe una cantidad de calor q, a la temperatura T,e1 cambio entrópico
inl-olucrado es simplemente el calor absorbido dividido por la temperatura
Cuando q, es positiva, es dctir hay absorcióii dr calor AS es positiva también. indicando un incremento cn la mtropia del sistema. Por otra
parte cuando hay desprendimiento de calor q, es negativa y lo es AS, y el
&ema experimenta un decrecimiento entrópico.
Las entropías y cambios entrópicos se expresan en calorías por grado
para una cantidad de sustancia dada. La cantidad caloría por grado se
denomina unidad entrópica (ue) .
CAMBIO ENTROPICO EN LOS SISTEMAS AISLADOS
Consideremos uu ciliudro, que contiene una sustancia cualquiera, provisto de un pistón sin fricción ni peso. Supongamos que el cilindro va encerrado en un recipiente grande de calor totalmente aislado de los alrededores de manera que no hay ninguna posibilidad de que el calor entre o
salga del recipiente. A este agrupamiento se le denomina sistema aislado.
Supongamos ahora que la temperatura en el sistema aislado es constante e
igual a T y que la sustancia en el cilindro realiza una expansión isotémica
y reversible desde el volumen VI al V 2 .Durante este proceso la sustancia
absorberi cierta cantidad de calor q,, de manera que el cambio entrópico
que experimenta dicha sustancia, que representamos por AS, valdri de
acuerdo con la ecuación ( 3 ) .
Al mismo tiempo el recipiente ~ i e r d euna cantidad de calor q,, y de aquí
que el cambio de entropia del recipiente, AS,, es
AS, =
4.
1
donde el signo barra subn q7, indica una pGrdida de calor. El cambio total
de entropia de la sustancia y recipiente, M,, es entonces
AS,
-
AS, + AS,
Si comprimimos la sustancia ahora dc manwa isotérmica y reversible
de nuevo a Vi,el calor drsprcndido por la sostan~inscrá q, y
di,&
1%
Capítulo 5: L a segunda y tercera ley de la termodinámica
también será el calor ganado por el recipiente. Los cambios de entropía
involucrados son
A,'$ = &
!
(54
As: =
(5b)
T
T
l
y el canibio total de entropia para la sustancia y recipiente, AS2, es
ASz = AS:
+ AS:
1
y el cambio total de entropía para el ciclo completo, &S, es la suma de
A s , y AS,,
AS = AS1
=o
+ AS2
(6)
Las consideraciones anteriores conducen a dos conclusiones muy importantes, la primera es, aunque las partes de un sistema aislado experimenten
un cambio en entropía la variación total de ésta para el sistema entero aislado cuando tiene lugar un cambio isotérmico reversible es cero. Seguiido,
el cambio total de entropia para un ciclo isottrmico reversible es cero, y de
aquí que al final, e1 sistema posee la misma entropía que inicialmente. Por
tanto la entropia se comporta entonces como una propiedad de estado
del sistema y este hecho justifica la ecuación (1). Estas conclusiones son
válidas para todos los tipos de procesos y ciclos realizados bajo condiciones
isoténnicas y reversibles en los sistemas aislados.
Consideremos de uuevo la expansión isoténnica de la sustancia desde
el volumen VI a 1'-, pero supongamos que el cambio es ahora irreversible.
Conio la expansión es irrevrrsible, el calor absorbido por la sustancia será
q, donde q < y,. Sin embargo, la variación de entropía debe ser la misma
que fue en la expansión reversible, porque esti determinada por el calor
reiicrsibie y no por cl absorbido rcalmcnlc. El valor actual de y en un
proceso irreversible depende de la manera de llevar a cabo dicho proceso
y puede variar desde y = O a q = g, cuando se obtiene la reversibilidad
cnmpleta. Por esa razón, para un procrm irreversible AS no puede ser igual
a q / T , puesto que si AS fuese igual a dicho valor en todos los casos obtendría una serie de diferentes valores de AS entre dos estados dados d d
sistema y como esto es imposible para una ~ r o p i e d a dcaracterística de 10s
cstados del sistema únicamente, debe llegarse a la conclusión de quc aím en
un proceso irrc\ersiblc AS debe estar dado por q , / T . Con estos ar,oumentos la variación de entropía para la expamión isotérmica irreversihlc de la
sustancia dcsde V I a V . está dada par la ecuación (4a). Sin rnibargo,
Cambio entrópico en los sistemas aislados 175
la pérdida de calor q por el recipiente puede considerarse que tiene lugar
reversiblemente y tambitn el cambio de entropia del recipiente es AS, =
y/T. El cambio total de entropía del sistema aislado es entonces
(1.
AS, = -
T
Pero, q,
>
y q,/T
> i / T , en
+ -T4
consecucncia
y por lo tanto un proceso irreversible que tiene l u ~ a risotérmicatnente en
u n sistema aislado conduce a u n incrrnwnto de la entropia total del sistema.
Si recomprimimos la sustancia desde su estado original isothnica y
rmersiblemente a una temperatura T , entonces el cambio de entropía del
proceso será dado de nuevo por la ecuación (5c), esto es AS, = O. Como
resultado el cambio total de entropía para un ciclo irreversible será la
suma de AS? = O y la ecuación (7b) es decir,
Por esa razón mientras que para un ciclo isotérmico y reversible completo realizado en un sistema aislado AS = O, en uno irreversible AS > O.
Esta conclusión es d l i d a de nuevo para todos los tipos de proceso irreversible.
El incremento de eritropia que tiene liigar en un ciclo irreversible es el
resultado de la conversión de trabajo en calor. Al finalilar el ciclo: la. sustancia que realiza el trabajo al regresar a su estado inicial, no experimenta
cambio de ninguna naturaleza. El depósito sin embargo, ha perdido una
cantidad de calor q y ganado otra q, con un balance neto de ganancia
97
q, y de aquí que su aumento de entropía es q,/T
q / T , cantidad
m!or que cero. Al mismo tiempo el trabajo sobre la sustancia fue z,c, mientras que el reali~adopor la sustancia fue u,.La diferencia u., - w es convertida en calor ganado por el depósito y originó el aumento dc entropia.
Cualquier proceso no iwitérmico puede coiisiderarse compuesto de una
serie sucesiva de etapas, cada una de ellas infinitcsimalmente distinta de la
aritrrior, y si tienen lugar revcrsiblcmentc el cambio dc entropía para cada
etapa estará dada por el calor absorbido en la etapa dq,, dividida por T,
temperatura a la cual hay absorción de calor. El cambio total de entropía
+
+
n
176 Capítulo 5: L a segunda y tercera ley de l a termodinámica
para un proceso que tiene lugar entre las temperatuias T , y T2,será entonces la suma de los pequeños cambios entrópicos, o
De cuanto se dijo antes resulta evidente que la ecuación (9) se aplica también a los procesos irreversibles no isotérmicos con tal de que los valores
de q no sean los calores obsemados realmente, sino los evaluados para el
proceso reversible correspondiente entre los dos rhismos estados.
Cuando sc aplica la ecuación (9) de manera análoga a la de antes, a
los cambios que suceden en un sistema aislado y en condiciones no isotérmicas, se encuentra que:
1. En cualquier proceso o ciclo reuer~ible
AS = O
2. En cualquier otro proceso o ciclo irrer,o-rtble A S > O
Estas conclusiones son idénticas a las obtenidas para un proceso isotérmico. Por ese motivo, ha!.o no incremento dc entropía según que el proceso
sea irreversible o reversible.
L a validez de este postdado se comprueba por el ciclo de Carnot, en
el cual tenemos:
42 - 91 - T>- T
i
--
l'?
?2
y también
9~ -4%
TI
T*
Pero q,/T, = AS, y q , / T 2 = AS?. De aquí
AS, = AS,
y para un ciclo completo A S = O
LA SEGUNDA LEY D E LA TERMODINAbIICA
Si en lugar de cambios finitos consideramos otros infinitesirnales, entonces el resultado de la sección anterior se resume mediante la concluiión
de que para un proceso cualquiera que tiene lugar en un sistema aislado la
variación de entropia está dada por
La igualdad se aplica en los procrms reversibles y la desigualdad en los
irreversibles. Los primeros, que compicndcn un balance entre las fucrras
impulsoras, deben, por necesidad, efectuarse muy lentamente. En efecto,
para llevar a cabo cualquier cambio de forma totalmente reversible exige un
tiempo infinito y por tanto aquel que se realiza en uno finito será irreversible
e irá acampa5ado de un aumento de entropía total de los cuerpos comprendidos. Esta última conclusión nos permite establecer la segunda ley termodinámica en su forma más general diciendo, que todo proceso natural
se verifica con un incremento entrópico y qlre la dirección del cambio es
que conduce a tal aumento. Las diversas formas de la segunda ley
dadas antes en el capítulo son casos particulares de esta ley.
Supongamos al universo entero como un sistema aislado, como imaginó
Clausius, y apliquemos a 61, la segunda ley. Como todos los procesos en la
naturaleza son irreversibles, la entropía del universo debe ser una propiedad
nnidireccional que incremente continuamente y tiende a un máximo. Por
otra parte la primera ley de la termodinámica establece que la energia del
universo permanezca constante. Estos hechos condujeron a que Clausius
enunciara estas dos primeras leyes de la termodinámica bajo la conclusión
de que "la energia del universo es constante y su entropía tiende a un
máximo".
J. W. Gibbs, una de las mentes científicas más grandes de AmErica, se
refiere a la entropía como una medida del "desorden" de iin sistema. Este
término resulta descriptivo e iluminador a la vez. Lo que significa es que la
energia en forma útil, como la eléctrica, mecánica, o química está organizada y dirigida, y puede usarse en realizar un trabajo. Por otro lado. ,el
calor es aquella forma de energía debida al libre movimiento d e los itomos
o moléculas en un cuerpo y es de carácter caótico. Por ese motivo, cuando
la energia organizada utilizable en la realización de un trabajo se convierte en calor, incrementa el caos o "desorden" de un sistema, y por tanto la
entropía, que es una medida de esa "confusión", debe aumentar. Esta idea
ha servido de base para poder establecer una conexión entre la entropía y
probabilidad que incumbe a un campo de la ciencia conocida como mecánica estadística.'
De la discusión anterior podemos resumir la esencia de la segunda ley
termodinámica diciendo qur nuestra provisión de energía disponible en el
universo decrecc continuamente y se La conviertiendo en energía desordenada que llamamos calor.
VARIACION ENTROPICA DE LOS
SISTEMAS UNICAMENTE
E1 proceso que tiene lugar en un sistema aislado nos da un panorama
de la condiicta de la entropía cuando w estudian los sistemas y sus cantorVci
el capitulo 18
t:
178 Capítulo 5: L a segunda y tercera ley de la termodinámica
nos. Bajo tales condiciones podemos seguir de cerca todos los cambios de
entropia que tienen lugar y llegamos a la conclusión de que aquélla puede
permanecer constante o aumentar. Sin embargo, con más frecuencia estamos interesados sólo en los sistemas en sí y no en sus alrededores. Entonces
es posible que la entropía permanezca constante, aumente o disminuya en
diversas situaciones, y por lo tanto AS puede ser cero, positiva o negativa.
El cambio diferencial entrópico experimentado por un sistema en si
durante un proceso, se deduce de la ecuación (10). En esta ecuación dSj
es una suma de las variaciones entrópicas del sistema únicamente dS, y del
depósito, dS,; esto es:
A su vez, dS, es la cantidad de calor cedida (o ganada) por el depósito dividida por T, y este calor es igual y de signo contrario al ganado ( o cedido)
por el sistema, dq. Así que podemos escribir dS, = - d q / T , y
+
Sin embargo, la primera ley nos dice que dq = dE dw. De nuevo dw
consta en general de trabajo P-V es decir pdV y también de otras formas
de trabajo las que designamos por dw'. Entonces
dq = dE
+ pdV + dwf
(13)
y por sustitución de la ecuación (13) en (12) obtenemos
En la ecuación (14) el signo de desigualdad se aplica a los procesos
irreversibles. Aún más, cuando únicamente existe trabajo P-V involucrado
dw' = O, y así obtenemos
T d S - dE - pdV
Pero para un procem reversible cualquiera
dad se mantiene. Ahora obtenemos:
>O
p
(15)
= P, dw' = d w k y la igual-
T d S - dE - PdV - dwm = O
(16)
T ~S d~ - P ~ V
=O
(17)
y cuando dwm = O
La manera cn quc sc utilizan estas rciiaciones en 10- cálculo^ de AS se
ilustra mejor con los do? cjcmplor 5igiiirnti.s:
Variación entrópica de los sistemas únicamente
179
E J EMPLO 1: Calcular la variación de entropía comprendida en la expansión isoténnica reversible de 5 moles de gas ideal a partir de un volumen
de 10 litros a otro de 100 a*3Q0°K. Aquí se aplica la ecuación (17) con la
condición dE = O, puesto que el proceso es isotérmico. Entonces tenemos
efectuando la sustitución P = nRT/V. En consecuencia por integra,ción
obtenemos
As = S, - S,
= 22.88 cal grado-' o ue
Deberá observarse que la expresión para AS es la de un trabajo máximo
di\.idido por T , es decir, w,/T, y esto es lo mismo que q , / T .
Si deseamos tratar el sistema y sus contornos como uno aislado, entonces el cambio entrópico de los alrededores es - q , / T , ó -22.88 unidades
entrópicas. La variación total de entropia para la combinación se convierte
entonces en: (22.88 - 22.88) = O de acuerdo con la ecuación (10).
E J E ~ P L2.O Hallar la variación entrópica comprendida en la expansión
isotérmica de 5 moles de gas ideal contra una presión constante de 1 atm
desde un volumen de 10 litros a otro de 100 a 300°K. La expansión resulta así irreversible pero isothnica de nuevo. Por esa razón, con dE = 0,
la ecuación predice que dS > p d V / T , o
Para este proceso w = q ; pero, puesto que w # w,, q # q,. Para hallar q,
debemos imaginar el mismo cambio realizado reversiblemente, y éste es el
9tic tiene lugar en el problema reced den te. En consecuencia, tenemos aquí
también AS = 22.88 ue, un valor mayor que el dado por p d Y / T .
Si ronsidrramos dc I I I I P I O el \i~teniay FUS rontprnos resulta para el
G
180 Capítulo 5: L a segunda y tercera ley de la termodinámica
Por ese motivo, el cambio total de entropia del sistema aislado cs
(22.88 - 7.27) = 15.61 ue. De acuerdo con la ecuación (10) este cambio
entrópico es mayor que cero.
DEPENDENCIA DE LA ENTROPIA DE LAS
VARIABLES DE UN SISTEMA
Como la entropía es una función de estado del sistema, su valor para
una sustancia pura dependerá d e cualquiera de dos de las tres variables
T, V y P. Comúnmente, se selecciona a T como una de las variables independientes y de aquí que la combinación de variables a considerar resulta
bien T y V o T y P.
Variables T y V. Si la eutropía de una sustancia es función de T y V,
entonces,
De nuevo, la primera ley establece para las condiciones reversibles
dE = dq, - dw,
Pero, dq, = T d S , y dw, = P d V . Por lo tanto,
dE = T d S - PdV
(20)
Sin embargo, E es también una función de T y V, de ahí que,
Por eliminación de dE entre las ecuaciones (20) y (21) resulta para dS
y por comparación de las ecuaciones (18) y (22) vemos que,
ti.
=-
?'
La ecuación (24) se simplifica así: Reordenándola tenemos
181
Dependencia de la entropía de las variables de un*que por diferenciación respecto a T y a V constante
De i p a l forma reagrupando a la ecuación (23a) obtenemos
que por diferenciación respccto a V a T conitante nos d a
Como no importa el orden de diferenciación, podemos igualar las ecuaciones (26) y (28) para obtener
Con las ecuaciones (23b) y (29) para las derivadu parciales, l a ecuación
(18) se transforma finalmente en
l
Varhbles T y P. Con las variables indeprndientes T y P, dS está dada
por
1
Como H = E
1
o
I
!
/
~
l
l
i
+ PV, la diferenciación total nos da
d H = dl? + PdL' + V d P
dE
+ PdV
= d l l - VdP
(32)
La sustitución de la r c n a ~ i ó n('32) en (20) nos da entonces
TdS = dH
-
VdP
(33)
Pero, H es t a m b i h una fuiicióii de T y P, de manera que
por eliminación dc d H entre lai ecuariancr (33) y (34) obtendremos
182
Capítulo 5: La segunda y tercera ley de la termodinámiqa
al establecer una comparación entre las ecuaciones (31) y (35) resulta:
De nuevo es posible simplificar la ecuación (37). Un reagrupamiento
de l a ecuación nos d a
y la diferenciación de (38) respecto a T, a P constante nos da
Una ordenación y diferenciación posterior de la ecuación (36a) respecto
a P, a T constante nos d a
y, p o r esa razón, la combinación de las ecuaciones (39) y (40) nos d a
Si a h o r a colocamos las ecuaciones (36b) y (41) en la (31), obtenemos
finalmente
L a s ecuaciones (30) y (42) son totalmente generales y se aplican lo
mismo a sólidos puros, que a líquidos o gases. Pero, antes de discutir
el u s o d e estas ecuaciones, haremos una disgresión para mostrar la validez
de l a s ecuaciones (38) y (41) del Capitulo 3, que se supusieron válidas
sujetas a demostración posterior. Si sustituimos la ecuación (29) en ( 2 5 ) ,
resulta
y, análogamente, la sustitución de (41) en (38) nos d a
($1
T
=
v-
T($)
P
Las ecuaciones (43) y (44) son idhticas a las (38) y (41) del capítulo 3.
Cambios de entropia en los gases ideales 183
CAMBIOS DE ENTROPIA EN LOS GASES IDEALES
En la ecuación (30) C, se refiere a la capacidad calorífica de cualquier
cantidad de sustancia que se considere. Si tratamos con n moles de gas,
es más conveniente escribir para ellos nC,, donde C, es ahora la capacidad
calorifica por mol. De nuevo, para los gases ideales, P V = nRT, y la diferenciación de ésta nos da
De aquí que para gasa ideales la ecuación (30) nos d a
dS =
+,-nC,dT
T -
nRdV
V
y por integración entre los límites señalados nos da para OS
Cuando C, es constante en un intervalo amplio de temperaturas la ecuación (47) se reduce a
Pero si C, no fuera constante habría de reemplazarse como función de T .
entre los limites TI y T?.
El primer término de la derecha en las ecuacionm (47) o (48) nos da
el cambio entrópico de n moles de un gas ideal por variación de temperatura a volumen constante. A su hez, el segundo término nos da el cambio de
AS por cambio de volumen a temperatura constante.
Cuando T es constante desaparece el primer término y sólo se aplica
el segundo. De nueto, a V constante el segundo término es cero, y sólo se
usa ~1 primero para obtener AS.
En cl caso de T y P coma variables independientes, podemos sustituir
nC, por C, en la ecuación (42) donde C, es ahora la capacidad calorifica
por m01 de gas. De nuevo por diferenciación de P V = nRT resulta
184 Capítulo 5: L a segunda y tercera ley de la termodinámica
Al reemplazar ésta en la ecuación (421, dS para n moles de un gas ideal se
transforma en
de aquí que por integración entre los límites señalados
Si C, es o se considera constante, entonces la ecuación (51) da
Estas relaciones se manipulan ipal que las dadas para las variables
7' y L. E1 primer término en la ecuación (51) o (52) d a el cambio entrópico que experimentan n moles de'gai ideal por variación de temperatura
a presión constante, mientras que el segundo d a AS resultante por cambio
de presión a temperatura constante.
Las ecuaciones (30) y (42) se utilizan para calcular las variaciones
de entropía de gases no ideales con tal de que las ecuaciones de e ~ t a d oo
datos se hallen disponibles para proporcionar las expresiones necesarias de
[?P/?Ti,, como funrión del volumen o (?T'/aT),.corno función de la presión. Con los >alores disponibles de estas derivadas, las ecuaciones (30) y
(42 j se usan análogamente como en los gases ideales.
ENTROPIA DE MEZCLA PARA GASES IDEALES
La mezcla de gases va acompaiiada generalmente por un cambio de
cntropia. Esta entropia de mezcla, AS,, se calcula fácilmente para los gases
id~alesasí: Suponqamos que se ine~clann, molcs de ?as a una presión ir111 ial
P; y n, de un segundo gas a presión Pq, y que las presiones parciales dc los
do? gases en la mezcla son P, y P,. A temperatura constante, el cambio de
cntiopía que acompaña una variación de presión está dado por el segundo
término de la ccuación ( 5 2 ) . Utilizando esta expresión, obtenemos para
i.1 c a n ~ h ~rntiópiro
o
qur experimenta e1 prmicr gas con10 r r d t a d o de la
iiip,rla
P
AS,= -niR In -!
PO
Cambios de entropía en las transform9tioo.a facas 185
Análogamente, para el s r ~ i i u d oqas
t
>'
,
1'.
y de aquí que la entropía total de mezcla es
= N,Pt y P, =
Pero, según la ley de Dalton de las presiones parciales, PP,
h',P, donde A', y N? son las fracciones riiolares de los dos gases y Pt cs la
presión total de la mezcla. Introduciendo estas identidades en la ecuación
(54) resulta
En el caso especial de que P; = P: = Pt la ecuación (55) se reduce a
AS, =
- (n,R In A', + nzR ln N,)
(56)
La ecuación (56) enseña que AS,,, es independiente de la temperatura.
Además, como N, y A'? ~ o r imenores que la unidad, entonces para las condiciones especificas AS,,,es positiva, y de aquí que el proceso de mezcla va
acompañada de un aumento de entropía.
CAMBIO DE ENTROPIA EN LAS
TRANSFORMACIO~VESFISICM
Se producen no sólo por variación de teiriperatura, preqión o volumen
de un sistema, sino por transformaciones físicas tales como fusión, iaporización o tran~formaciónde una forma c~istalinaa otra. En tales procesos
]a Lariación de entropía es
donde S2 y SIes la entropía dc 1x3 formas final e ini~ial
Las transfomiaciones cniinieiadas tienen l u p r relersiblemente a 2' y
i' constantes y \ a n acampafiadas con una evolucih o absorción de calor de
Aff calorías para una cantidad dc sii3tancia dada. Por eso en tal proceso
requlta
es decir, el cambio de entropia está dado por el de calor necesario para
~ f e c t u a la
r transición dividida por la temperatura a que se realiza aquClla.
186 Capítulo 5 : L a segunda y tercera ley de la termodinámica
La ecuación (58) es válida únicamente cuando se obtienen condiciones reversible~durante la transformación, es decir, cuando existe equilibrio entre
las dos formas.
Como una ilustración del uso de la ecuación (58) consideremos el
problema de encontrar la diferencia de entropía para la transición
H,O(I, 1 atm) = H,O(g, 1 atm)
AH,,,
,.,
= 5717 calmol-'
Como a 373.2OK y 1 atm de praión el punto normal de ebullición del
agua H,O(i) está en equilibrio con el H,O(g), entonces
Los cambios entrópicos también pueden calcularse para transiciones
irreversibles pero no por.medio de l a ecuación (58). Consideremos primero el proceso
H,O(I, 1 atm) = H,O(g, 0.1 atm)
a 373.Z°K. Como el cambp de entropia no depende de la manera de efectuar la variación, podemos vaporizar primero el agua isotérmica y reversiblemente a vapor a una atmósfera y luego expandirlo isotérmicamente desde
1 a 0.1 atm. La variación entrópica total será entonces:
9717
--
373.2
1
+ 4.58 log --
0.1
Supongamos de nuevo que sc desea calcular la variación de entropía
comprendida en Iin proceso irre\rrqible tal romo la conversión de un m01
dc a p a a hielo a - 15'C y 1 atm. A esta presión el agua. y el hielo se
hallan en equilibrio únicamente a O°C, y de aquí que la ecuación (58)
no proporcionará el cambio de entropia a - 15OC. Sin embargo, si determinamos los cambios entrópicos inrolucrados en las siguientes etapas:
1 El Calentamiento de un m01 de agua dcsde - l j Oa OCC.
2. I,a conversión reversible de un mol de agua a uno de hielo a O°C.
3. E1 enfriamiento de un moi de hielo desde O a - 15".
El c a m b 5 entrópiw en las reacciones químicas 187
~ntoncesla suma de los cambios entrópicos debería ser igual al que tiene
lugar en el proceso irreversible H 2 0 ( I ) = H,O(s) a - 15% puesto que el
proceso neto es igual en ambos casos.
EL CAMBIO ENTROPICO EN LAS
RE ACCIONES QUIMICAS
El cambio de entropía que acompaña a una reacción química está definido como la diferencia entre la suma de entropías de todos los productos y
la suma de la de los reactivos. Para una reacción cualquiera tal como
el cambio entrópico está dado por
donde SA, Ssr etc., son las entropías por mol de las diversas especies.
Cuando las entropías de las sustancias individuales corresponden a un
estado de actividad unidad se denominan entropías tipo y se designan por
el símbolo So. De nuevo en una reacción donde todas las sustancias involucradas se hallan con una actividad unidad AS se escribe ASo y esta Última
es el cambio de entropia tipo de la reacción.
Los cambios entrópicos de las reacciones químicas son evaluadas a temperatura y presión constantes. Para cualquier reacción dada a cierta temperatura y presión la variación de entropia es fija y característica, de igual
manera que lo es el cambio de energía interna o entalpía. L a forma en que el
cambio de entropia de una reacción depende de la temperatura a presión
constánte se deduce fácilmente desde las ecuacioncs (59) y (36b). Si diferenciamos la ecuación (59) respecto a la temperatura a una presión cnnstante, entonces:
Pero, de acuerdo con la ecuación (36b) (aS/aT)p = C J T . De aquí
AC, es la diferencia entre los valores de 10s C , de los productos y reactivos.
188 Capítulo 5 : L a segunda y tercera ley de la termodinámica
'"1
Por integración de la ecuación (60) entre los límites T , y T , resulta
AS;.es el cambio de entropia a T 2 mientras que AS, es el cambio de entropia a T I . La diferencia entre los dos tiene dada por la integral de la
ecuación (61). Cuando AC, se supone constante en el intervalo dc temperatura en cuestión, entonces (61) se hace igual a
Sin embargo, si AC, no es constante, entonces la expresión AC, como una
función de T debe obtenerse de igual manera que la descrita en el capítulo
precedente, y la integración debe efectriarse término a término entre los
límitrs de temperatura establecidos.
El cambio isotérmico de entropía de una reacción se calcula mediante
la ecuación (59), o, más comúnmente, a partir de AH y A F de la reacción.
AF, el cambio de energía libre, se discutirá en el capítulo siguiente.
Para obtener AS con ayuda de la ecuación (59) deben tenerse las entropias de las sustancias individualrs a la temperatura en cuestión. Una
forma de lograrlo es por medio de la tercera lcy termodinámica.
TERCERA LEY TERMODINAMICA
Como resultado de las investigaciones de T. \V. Richards, Walter Nerst,
Max Planck y otros, se estableció otro principio fundamental de termodinámica que trata de la entropia de las sustancias cristalinas puras en el
cero absoluto de temperatiira. Este principio, llamado tercera ley terrnodinámica, establece que la entropia de todos los sólidos cristalinos puros drbe
m n i i d ( rarse cero e n ( 1 cero absoluto dt tenpcratura. Lo anterior es válido
con sólidos cristalinos puros porque la e~idenciaexperimental y los atgumentos teóricos demuestran que la entropía de las soluciones o líquidos
sobreenfriados no es cero a 03K. Con sólidos cristalinos puros la ley se ha
comprobado rrpetidamente y existe poco lugar a duda sobre su validez senerai cn este caso.
La importancia de la trrcera Icy reside en que permite el cálciilo de los
valorr3 abcolutos de entropia de las sustancias puras a partir de los datos
t&rrnicosÚnicarriente. La variación de entropia con la teinpcratura a presiún
,
Evaluación de las entropías absolutas 189
constante está dada por la ecuación (36b). Además, como la tercera ley
establece que para cualquier sustancia cristalina pura S = O a T = O, entonces la ecuación puede ser integrada entre este limite inferior y otra tempera tura cualquiera T para obtener
Sr, conocida como la entropia absoluta del sólido, es una cantidad positiva
siempre. Todo lo que es necesario para integrar esta ecuación es un conocimiento de las capacidades caloríficas del sólido desde T = O a cualquier
valor deseado de la T .
EVALUACION DE LAS ENTROPIAS ABSOLUTAS
La integral de la ecuación (63) se evalúa gráficamente al establecer
bien C, contra ln T o CJ1' contra T y determinar el área bajo la curva
entre T = O y nna temperatura cualquiera. Esta área es entonccs el valor de
la integral y por tanto de STi En la práctica las capacidades caloríficas
se miden usualmente a partir de unos 20°K Imsta T y se extrapola desde
cerca de los 20°K hasta T = O. Tales extrapolaciones se hacen generalmente
utili7ando la ley de la tercera potencia de Debyc para la capacidad calorifica de los sólidos a temperaturas bajas, es decir,
Esta expresión sustituida en (36b) nos d a
Y de aquí que por integración entre T = O y T I , el límite inferior de los
datos de la capacidad de calor, resulta
Piirsto que C, = a T 9 , entonces r.1 valor d~ ST1 es i p a l a un tercio del
valor de C , a la temperatura 7 ' 1 .
190 Capítulo 5: La segunda y tercera ley de la termodinámica
Una gráfica de C, contra log,, T para el sulfato sódico anhidro se
muestra en la figura 5-1. El área bajo la curva entre T = 14" y 298.15OK
es 15.490, mientras que la correspondiente entre T = O a T = 14' es
0.026. De aquí que la entropía absoluta por mol de sulfato sódico a
298.15'K es
Las entropías absolutas de las sustancias que qon líquidas o gaseosas a
la temperatura ambiente pueden obtenerse con la tercera ley. La entropia
total absoluta de cualquier sustancia en un estado particular será la suma de
Figura 5-1.
Capacidad caloriiica del NauSO<a diversas temperaturas. [Según Pitzer
Coulter, J. Am. Chem. Soc., 60, 1310 (1938).]
y
todos los cambios entrópicos que la sustancia lleva a cabo con el fin de alcanzar dicho estado a partir del sólido cristalino en el cero absoluto. Así, si
una sustancia es gas a 1 atm y 25W, su entropía debe ser la suma de las
entropías comprendidas en ( a ) el calentamiento del diido cristalino desde
T = O a T = T,, el punto de fusión; ( b ) la entropía de fusión AH,/T,;
( c ) la entropía de calentamiento del líquido desde Tf a T,, el punto de
ebullición normal; (d) la entropia de vaporización AH,,ITa; y ( e ) la entropía de calentamiento del gas desde Ta a 298°K. Estos cambios y sus correspondientes entropías se muestran en el siguiente esquema
.
Ana
AS.=~a
Líquido---T = Ta
.. /Yh8'cIzd
AS,
Gas
T=Ta
-
~n T
Gas
T-2Q8.15DI<
Se sigue, por lo tanto, que la entropia absoluta de una sustancia Ciialrliiiera
Evaluación de las entropías absolutas 191
a una temperatura T puede escribirse así
Si una sustancia es sólida a una temperatura T, únicamente sc aplica
]a primera integral con Tf= T ; cuando es liquida, se usan los tres primeros
términos con Ta = T y cuando es gaseosa debe utilizarse la ecuacijn total.
L a ecuación (66) puede complicarse, aún más, si el sólido lleva a cabo
una modificación cristalina entre T = O y T = Ti.En este, caaso deben
agregarse la entropía o entropías de transición a las anteriores de la
ecuación (66).
Las etapas correspondientes en e! cálculo de la entropía absoluta de
una sustancia que es gaseosa a 25OC se ilustran con el ejemplo siguiente:
Messerly y Aston han mostrado que a 1 atm de presión el cloruro de metilo es sólido entre O y 175.44'K, liquido entre 175.44 y 248,94OK, y gas
desde esta Última temperatura. Más aún, encontraron que el calor de fusión
a 175.44OK valía 1537 cal por mol, y el de vaporización a 248.94OK era de
5147 cal por mol. Los cambios de entropía comprendidos en el calentamiento
de la sustancia desde T = O a T = 298.15'K y una actividad igual a la
unidad, se presentan resumidos en la tabla 5.1. Hay dos puntos de la tabla
T ABLA 5-1.
Entropia absoluta del cloruro de metilo a 25°C
y actividad unidad
Itcm
Cambio de entropía
(udmd)
Sólido: 0-10.00"K, extrapolación de Debye
10.0D-175.44-K gráfica
Fusión: AS,: A H I / T I = 1537/175.44
Líquido: 175.44-248.94"K, método gráfico
Vaporización: M. = I H J T ~ = 5147/248.94
0.075
18.402
8.760
6.239
20.677
Entropía real del gas a 218.94-K
Corrección por imperiección del pas
54.153
0.119
Gas idcal a 248.91"K
Gas: 248 94-298.15'K:
54.27
1.67
S" del
gas a a
eipectioscópico
= 1 y 238.15 ° K
55.94
.
* 0.15
* 0.15
que exiccn una aclaración. Primcro, la entropía obtenida para el gas real
a 248.9-1"K no corresponde a una actividad unidad. Esta, (a = 1 ) es, coma
Veremos en el capitulo siguiente, equivalente a una presión de 1 atm en un
Messerly y Aston,
1. Am.
Chcm. Soc., 62, 889 (1940)
192 Capítulo 5 : La segunda y tercera ley de la termodinámica
gas ideal. En consecuencia dcbe hacerse una correcriln a los gases reales
para consertirlos a ideales a la misma presión. Esta coiiección se hace generalmente utilizando la forma de bajas piesiones de la ecuación de Berthelot, y está dada por
donde T,y P, son respectivainerite, la temperatura y presión críticas de la
sustancia. Para el cloruro de metilo 1', = 416.4"K y P, = 65.7 atm.
El segundo punto de interés en la tabla es la evaluación de AS para el
gm entre 248.94 y 298.15°K a partir d e los datos espectroscópicos en v a
d e las mediciones de capacidad calorífica. Este método de obtener cambios
entrópicos se discutirá en el capítulo 18.
USO DE LAS ENTROPIAS ABSOLUTAS
Las entropías absolutas se calcula~iusualmente y tabulan a 25'C y una
actividad unidad. Los valores de estas cantidades termodinámicas en el
estado tipo se encuentran disponibles actualmente para la mayoría de los
elementos y muchos compwstos. Algunos de ellos cstin en la tabla 5-2. Estos
valores de So puede usarse como sigue para calcular las variaciones entrepiTABLA 5-2.
Entropías absolutas tipo de los elementos y compuestos a 25'C
(ue por átomo gramo o mal)
Sustancia
Sustancia
SS
&(E)
C (diamante)
C (prafito)
31.21
0.583
1.36
45.77
49.00
12.2
7.77
752
HsO(l)
HoOk)
Cok)
CO%(%)
HgCl?(s)
HgCl (S)
7.78
53.29
AgI(s)
F@01(s)
k(g)
6.49
7.97
58.64
10.21
27.9
62.29
k(Ij
Ik(r)
41.80
MsO(s)
NaCl(s)
C:Hs(%)
CH,OH (1)
CIHIOH(l)
CsHoíI)
C,H>OH(U
CEIGOOHU)
Nís)
os(&
W s )
hkb)
S (rómbico)
S (monoelínico)
CUd
Fe(s)
Cu(s)
Br*(g)
Ads)
Ids)
18.5
CuI(s)
AsCI(s)
9
16.72
45.11
47.30
51.06
34.6
23.5
23.1
22.97
27.6
21.5
6.55
17.3
54.85
30.3
38.4
41.30
34.0
38.2
1\
,
.,
S,
'
Uso de las entropías absolutas 193
que acompañan a las reacciones químicas. Supongamos que se busca el
de entropia necesario para la reacción
~mpleandolas entropias molares dadas en la tabla 5-2, obtenemos
De igual manera se calcula ASo de otras reacciones a 25'C con tal de que
se conozcan las entropias absolutas necesarias. Para obtener los cambios
entrópicos necesarios a otras temperaturas diferentes de 25OC se necesita
únicamente aplicar la ecuación (61). En función de esta ecuación la variacion de entropía para cualquier reacción a una temperatura T respecto
a ASo a 298.15°K estará dada por
La evaluación de la integral se ha discutido ya anteriormente.
REFERENCIAS
Ver las señaladas al final de 10s capítulos 3 y 4.
PROBLEMAS
1. Cicrta cantidad de un gas ideal en un sistema aislado se expande isoténnica
Y rcversiblemente a 400°K desde un volumen V, al V2. Durante la expansión, el
g;U absorbe 200 cal del depósito que se encuentra en contacto con él. Hallar (a)
cambio de entropia del gas, ( b ) el cambio entrópico del depósito, y (c) la variación de entropia dc todo el sistema.
Respuesta: ( a ) 0.50 ue; (b) - 0.50 ue; (c) cero.
2. Si el gas del problema 1 se expande desde V , a V , isotémicamente pero de
manera irrciersible n 400°K con una absorción de 100 c a l o r h . ?Cuál será la vana'&de entropia (a) dcl gas, ( b ) del depósito y ( c ) de todo el sistema?
i
3. Supongamos que el gas re expande libremente, en el caso del problema 1,
V I a V 2 a 400'K. ¿cuáles son los cambios de entropía (a] del gas, ( b ) del
de&ito y ( c ) de todo d sirtema?
4. Considerar dc nuevo el proceso descrito en los
1 al 3, y hallar:
( a ) El trabajo realizado por el gas en estos procesos
( b ) Los cambios de AH y A E para el gas comprendido en estos procesos
194 Capítulo 5: La segunda y tercera ley de la termodinámica
( c ) La relación cualitativa entre el trabajo realizado por el gas y el cambio de
entropia que experimenta el sistema aislado
( d ) La relación cualitativa entre el grado de revcrsibilidad del pMceso y el
cambio dc entropia del risterni aislado.
5. Comerizaiido can la ecuación (17) de este capítulo, deducir la expresión
para el cambio de entropia que ncompiiia al calcntamienta de n moler de gas ideal
desde un volumen V. a la temperatura T. al V , a la temperatura T.,.
6, Comenzando can la ecuación ( 1 7) de cste capítulo, deducir la expresión del
c m b i o d e cntropia que acompaña al calentamiento de n moles de gas ideal desde
una presión P, a l a temperatura T , hasta la presión P, a T,.
7.
Comenzando con el hecho de que el volumen de una sustancia es función de
a
T y P, demostrar que (aS/oV)i. = -, donde a es el coeficiente de expansión ttrmica
B
el factor de compresiblidad de la smtancia. Las definiciones de cu y 13 se dan
en el problema 40 del capítulo 1.
y
p
8. Demostrar que (aS/aP), = - aV.
9. En el caso del C,HB(I) a = 1.24 X 10-8 grado-' y B = 9 . 3 0 ~10-5 atm-'
a 20°C y u n a atinósieia de presión. Suponiendo que a y /3 sean constantes, hállese
el cambio en el volumen molar necesario para producir una variación de entropía de
Rerpueita: 1.55 cc.
0.500 ue por mal a 20°C.
10. La densidad del C,H,(I) er 0.8790 g c c - ' a 20'C. Suponiendo que cu y el
volumen molar sean independientes d e la presión, hallar el cambio entrópico 4ue
acompaña a la compresión de u n m01 de sustancia desdc 1 a 11 atmósferas.
11. Hallar la identidad de las ecuaciones (48) y (52) para un cambio que
tiene lugar en un gas ideal.
12. Para cierto gai ideal C, = !b R cal mol-' grado-'. Calcular el cambio
de entropia que experimentó el gas, 3 moles del cual fueron d e n t a d o s desde 300
a 600°K a ( a ) presión constante y (b) a volumeri constante.
Reipuerta: ( a ) 10.33 ue; ( b ) 6.20 ue.
13. Si suponemos que C, para el N Z ( g ) ?S ili R ral mol-' grado-' hallar la
variación de entropia que experimentó el gas, 10 g del cual se enfriaron desde 100
a 0°C a ( a ) presión constante y ( b ) volumen constante.
14.
La capacidad calorifica atóniica del Mo sólido está dado por la ecuación
C, = 5.69 i- 1.88 x
T -
0.503 x 10".
T*
Hállese el cambio de entropia q u e acompaña al calentamiento del peso atómico de
Mo desde O'C a su punto dc fusión, 2620°C.
Rerpueiin: AS = 18.6 iie.
15. Ktilizando la ecuación de C, del CH.,(g), dada en el último capítulo, en la
que se expresa la capacidad calorifica como funcion de la ternprratiira, calcúlese la
variación de entropía que resulta al calentar 2 moler de un gas desde 300 a 600°K
a presión constante.
-
16. Sursoniendo que para el CH,(g) C, - C , R , hallar el cambio de entmpía que resulta al calentar 2 moles de gas desde 300 a 601°K a volumen constante.
17. Si consideramos que el %as n i c r b n o fuese ideal, hallar AS e n la compresión
de 200 g del rnisrrio desde una prcrión d e 1 a 5 atm a 25°C.
I l r r P u c i i C A S -= -22.85 "e.
18. Se
10 litros de
,antidid de
.Cuál es la
permite la expansión de un g i s perfecto contenido e n un recipiente de
capacidad a 27°C de forma. que su volumen fina! sea 20 litros. ¿ Q u é
trabajo se ciectuó y qué cantidiid de calor se absorbió en este proceso?
variación de entropía que acompaña al cambio?
19. Calcular el cambio de entropia que experimentan dos moles de gas idcal
al calentarse desde 100 litros a 50°C. hasta un volumen de 150 litros a 150'C. Para
,! gas C , = 7.88 calorías mol-'grado-'.
Resprieitn: AS = 5.88 "e.
20.
i C u á l es la diferencia de entropia entre un rnol de N? en condicioncr tipo
y un mol de N,? a 200°C cuando el volumen molar es de 50 litros? Suponer que Cp
,S $
: K y que el X, se comporta idealmente.
21. Calcular el cambio dc entropia que experimentan dos moles de un gas
idral al calentarse desde una presión inirial de 5 atm a una final de 10 atm, con
]a variación de temperatura de 50'C a 100°C. En este gas, C, = 9.88 cnlorias m&'
pmdor1.
Respueita: A S = 0.08 ue.
22. Para cierto gas C , = 12.0 cal mul-1 grado-'. ;Cuál será el camhiu entrópico de 10 moles de gas ciiando éste se expande desde u n coliirnen de ?M1 litros
y 3 atmósferas a otro de 400 litros y 1 atmósfera?
23. Para rl CHC13(g) Cp = i.05 + 35.60 x 10-3 T - 216.9 x 10-7 TZ cal
mol-' grado-'. Si suponenros que el s a i es ideal: calcular la variación de entropía
comprendida al calentar 2 moles de gas desde un volumen de 100 litros a 50O'K a
otro de 70 litros a 700'K.
24. Una máquina térmica opera en un ciclo reversible que consta de las etapas
siguientes:
Una compresión adiabática desde un volumer. V , a T, a otro V , a TZ.
Calentamiento a V2 constante desde una temperatura de T,, a T8.
Expansión adiabática desde un voiurnen V, a la temperatura T Jal volumen
temperatura T,.
i d / Enfriamiento a V, constante desde la temperatura T, a la T,.
(al
íbi
(cl
:1 Y la
Si tomamos n moles de sustancia de trabajo que consideraremos como un gas
ideal para sl cual C , es constante, demostrar que en un ciclo completo SS = 0.
25. Trca moles de N,(%) originalmente a la presión de una atmósfera se me=isotCnnicamente con 5 de EIl(g), tamhiCn a igual presión con lo cual la presión
total resultante permanece sin alterjción. Si suponemos que los gases son ideales,
( a ) la entropia total de mezcla, y ( b ) la entropia de mezcla por mol de gas.
Respuesta: (a) lO.j? ue.
da
26. Repetir el problcma anterior sobre la base de que la presión total de la mer10 atm.
PS
27. Un mol de gas ideal a 0°C y 1 atm de presión, se mezcla adiabáticamente
otro mol del mismo gas, a IOO'C y 1 atm y la mezcla conserva esa misma presión.
Si Cm de! gas cs $5 R cal mol-1 grada-', icuá! es el valor de bS para el proceso?
'On
Respuerta:
"
AS
=
2.87 "e.
En mol dc gas idcal, originalmcntc a u n volumen de 8.21 litros y 1,000"K,
expandir adiabáticarnente hasta un voliirnen final de 16.4? litros. El vdor
de C, en este par es de 3- R cal mul-' grada-'. Calcular los valores de A S en este
'ejzi
cuando:
196 Capítulo 5: La segnnda y t e r c e r a ley de la termodinámica
q9
( b ) La expansión tiene lugar contra una presión constante de 3 atm.
(ci
El cambio de volumen ~ornprendeuna expansión libre.
29. Derivar la expresión de la variación de pntropía que experimentan n moles
d e gas del tipo de van der Wads al expandir desde el volumen V , al V , a la temperatura T.
30. En la transfomación reversible AgI ( a ) + A g I ( P ) a 1 atni y 116 5 C, el
calor de transición es 1,530 caUmol. ;Cuál cs rl camhio de entrapia imolucrado
en la transformación de dos moles de las forma /3 a la forma a?
Rerpueito: 'St= - 7.29 ue
31. En el punto triple del agua, están en equilibrio el hielo, el agua liquida y
su vapor bajo una presión de 4.58 mm dc H g y una temperatura de 0.01"C. En esta
temperatura el calor de fusión del hielo er 1,436 cal/mol y el calor de vaporización
es 10,767 cal/mol. Partiendo de e s t a datos hallar:
( a ) El calor de sublimación del hielo.
( 6 ) Las entropían de fusión, vaporización y sublimación por m01 de sustancia.
32. Se añade un gramo d e hielo a 0°C a 10 de agua en su punta de ebullición.
¿Cuál será la temperatura final, y la variación de entropia que acompaña al proceso?
Suponer que el calor de fusión del H,O es 80 calf'g y el calor específico 1 cil/g grado.
Respuesta: t = 83 6'C; AS = 0.11 ue.
33. ¿Cuál es la variscion d e entropía en la transformación de 1 g dc hielo
a 0 ° C y una presión de una atm a la fase de vapor a 150°C y 0 1 atm de
presión? Suponer que los calores erpecíiicos del agua gaseosa y liquida son 0.45
y 1 0 cal/g grado.
34. Las capacidades calorificas de las formas sólida y liquida de un compuesto A son 10 3 y 25.2 cal mol-1 grado-'. El compuesto funde bajo una presión de una atmósfera a la temperatura de 160°C con un calor de fusión de
A(s) a
2460 calorías/inul. ,Cuál ~ e r áel cambio de mtropia del proceso A ( 1 )
130G?
+
35. Eastman y McGavock [l. Am. Ckem. Soc., 50, 145 (1937)l reportan las
capacidades calorificas atómicas del S rómbico rri el intervalo d e temperaturas comprendido entre 15-K y 360DK A partir de los datos de la tabla 11 de este articulo
determinar gráficamente la entropia por mol del S rómbico a 298 2°K.
u.
36. Kemp y Egan
Am. Chem. Soc., M), 1521 (1938)l encontraron que para
el propano a la presión atmosiérica AH, = 842.2 cai/mol en cl punto de fusión
que es de 85.45"K, y AH, = 4487 cal/mol en el punto de ebullición, 231.04'K.
Además encuentran que al calentar el sólido dcsde 0°K harta 85.45-K AS = 9.92 ue,
y al calentar el liquido de 85.45"K hasta el punto de ebullición A S = 21.06 u?. Para
el propano T , = 368.8-K y P, = 43 aun Con estor datos hallar la entropía tipo de!
propano en estado de gas, a 231.04'K.
Rerpiiecta: A S O = 60.42 ue.
37. Con los datos de la tabla 5-1 hallar los cambios de entropía tipo que acompañan a las reacciones siguientes a 25°C:
(a) CO(gj
2H,(g) = CHLOH(I)
(b) 2 HsCljs) = 2 H g ( l j
Cl,(g)
( c ) MgO(6)
HZ(g) = H P í l )
Ms(s)
38. Para cierta rcacción A S O . = - 59.20 ue.
. .Y
+
+
+
+
>lis I " K
AC,
=
- 7 50 + 17.42 X
Hallar con estos datos el valor de
ASO
T
-
3 985 X 105
--
de la reacrdn a 400°K.
TZ
LA ENERGIA LIBRE
Y EL EQUILIBRIO
Todos los cambios de la naturaleza se deben a la tendencia d e los
sisternas por alcanzar iina condición de máxima estabilidad, esto es, el equilibrio. En este momento desaparece la propensión a otro cambio posterior
y decimos que el sistcma es estable. Conforme nos alejamos de la condición
de estabilidad, la tendencia hacia el equilibrio, es tanto mayor cuanto lo es la
srparaiión del sistcma de dicho estado. Adcmis, se efectúa un trabajo
cuando existe aparejada una oposición al locro del equilibrio y en esta última condición ninsiin sistema puede reali~ar un trabajo, pero S; lo hay
cuando dicho sistema se aproxima al equilihrio. La cantidad de trabajo
útil recuperable, depende tanto de la naturalma como de la forma en que
cl sistema realiza el cambio. Sin embargo, para cada proceso particular
hay una cmtidad máxima dc trabajo que el sistema puede llevar a cabo,
y éste sr. torna como una medida de la tcndrncia drl sistema en cuestión a
Teabar rl cambio.
Para que el trabajo aiociado a estas variaciones sea máximo es iiccesaque se efectúrn relersiblemcnte; si no es así, la cantidad de trabajo
Ilroducido rs siempre menor que la misima alcan7able, y la diferencia rntie
anih.1~se tranifoniia en cakii. Sin embargo, la fuerza impulsara detris de la
\a1iüción cs la diferencia entre los trabajos máx:mos de los estados inicial
final. pumto que reprcccnta la malor encrgía posible que ticnde a aparecr'I' 1'11 forma utiliiahle. como resultnclo del proceso Si dicfia energía aparccc
'1 no, ilependc d o <le la manera cn qiic sc conduce cl prncrm, y de n i n ~ u n a
forrnn ali,ctn la <nncliisii>iide que el trahajo rn:i.;imo quc un ~ ~ O C P Cpuede
O
198 Capítulo 6: L a energía libre y el equilibrio
realizar, si se lleva a cabo adecuadamente, es la medida de la tendencia
impulsora subyacente en el proceso.
LA ENERGIA LIBRE DE HELMHOLTZ
Aunque es posible emplear la entropia, como una medida de la tendencia de un sistema para llevar a cabo un cambio, en las condiciones mJs
habituales, su uso no es tan conveniente, como el de las funciones de energía libre A y F. La primera de ellas, conocida como energía libre de
Helmholtz de un sistema es:
donde E y S son respectivamente, la enerqía interna y la entropia de un
sistema. Puesto que E, T y S, son funciones de estado, A también lo es. En
consecuencia, cuando el sistema experimenta una modificación, la variación
de A es
La ecuación ( 2 ) nos da la definición más <eneral de AA. En rondiciones isotérniicas cuando Tr = Ti = T. tznemos
La ecuación ( 3 ) nos permite una interpretación física de AA, y como
en estas condiciones TAS = q,, resulta
AA=IE-q,
= - (q, - AE)
- - a',,,
De aquí que, a temperatura constante, el trabajo miximo hecbo rior
un sistema se realiza a expensas de un decremcnto en la ~ n r r g i alibre de
Helmholtz. Esta es la r a h i por la cual se designa a A conlo contenido
de trabajo miximo de un sistema.
Para una sustancia pura A se expresa más adecuadamente en función
de T y V como variables independientes. Así tenemos
La energía libre de Helmholtz 199
Si, ahora, diferenciamos totalmente la ecuación ( l ) , raulta
puesto que T d S = dq,. Pero d q , = d E t Pdl.', de aquí se deduce
dA=dE-SdTdEPdV
= - SdT - PdV
(7)
Al c q p a r a r las ecuaciones (5) y ( 7 ) vemos
Otra ecuación de la variación de A respecto a T se obtiene como sigue:
La diferenciación de A I T con relación a T manteniendo a V constante
nos da:
Pero A
+ TS = E. De manera que
La ecuación ( 7 ) enseiía la dependencia de A con la temperatura y el
volumen, para iina sustancia pura, y los efectos particulares de aquella4
variables rstin dados por las ecuaciones (8) o (10) en el caso de T , y por
la rcuación (9) para V . A cualquier temperatura constante, la relación
entre AA los cambios correspondirntes en E y S e s t h dados por la ecuación ( 3 ) .
A.4 EN LAS REACCIONES
En iina reacción cualqiii~racomo
a A + b B + - . = c C f d D + ..
(11)
AA está dada por la wrua dc los distintos valores de A dp los prodiirtos
mrnos una suma aniloga corre\pondicnte a los rrarti~as,es decir,
AA = ( = A ,
+ ~ A +B
.
) -
(aAA
+ bA,, + . . .)
(12)
200 Capítulo 6: L a energía libre y el equilibrio
donde AA, AB, etc., son las energías libres de Helmholtz de varias especies
por m01 de sustancia. En tal reacción, a cualquier temperatura i', la relación entre AA, AE y 3,se obtiene al sustituir para cada A en la ecuación
( 1 2 ) su valor obtenido en ( 1 ) . Al hacerlo y sumar los valores de E y S
de los productos y de los reactivos, se obtiene una ecuación idtntica en
forma con la ecuación ( 3 ) , es decir,
AA = ( E , - E,)
-
T ( S , - S,)
=U-TAS
(13)
donde los subíndices p y r se refieren a los productos y reactivos. La ecuación (13) nos permite calcular AA, AE, o A 3 cuando de éstas se conocen
dos cantidades cualesquiera.
La variación de AA con la temperatura, a volumen constante se deduce
fácilmente a partir de la ecuación (12).
Si sustituimos la ecuación ( 1 4 ) en la ( 1 3 ) obtendremos
AA
=
AE'
+ T [a("'--]v
Otra expresión, de la variación de AA respecto a T se obtiene al dividir
la ecuación ( 1 2 ) por esta última variable y difercnciar el resultado respecto
a la misma, manteniendo a V constante. La introducción de la ecuación
(10) para las derivadas individuales nos da:
LA ENERGIA LIBRE DE GIBBS
El trabajo máximo que un proceso puede proporcionar, no es necesariamente igual a la cantidad de energía disponible para realizar un trabajo
útil, aunque el proceso se efectúe reversiblemente. De la cantidad total de
trabajo disponible, una parte se emplea en realizar uno de presión-volumen,
bien sea debido a una contracción o expansión del sistema durante el proceso. Cuando éste tienc lugar reversiblementc a ~ r c s i ó ny temperatura ronstante y comprenden un cambio de volumen dcsdc Vi a V A ,el trabajo
realizado contra la atmósfera es P ( V z - V x )= PAV y c111no sc cfcctúa a
expensas dcl rnáxinio proporcionado por el proceso, la cantidad neta de cnm-
La energía libre de Gibbs 201
disponible, para efectuar otro trabajo distinto al de variación de
soluineii contra la prcsión atmosférica de crinfinamicnto, debe ser
Energía neta disponible en T y P = m, - PAV
(17)
para obtener con mayor precisión el máximo de energía disponible en
un proceso, definimos otra función de estado F, denominada energia libre
dc Gibbs, mediante la relación
F=H-TS
(18)
El cambio de F entre dos estados del sistema será por tanto
1 F = F? - F,
= ( H , - T,S2) - ( H ,- T J , )
= ( H 2- Hi) - (TS?
- Tal)
= AH - (T,SI - T,S,)
(1%
y cuando la temperatura es conjtante
AF = AH - TAS
(20)
Otro camino diferente de dcfinir F, es mcdiante la relación
F
=
A
+ PV
(21)
donde A es la energía libre de IIelmholtz, \ P y V son la presión y volumen del sistema. De la ecuación ( 2 1 ) , se deduce que AF valc
a F = AA
+ P2V2- P,VL
(22)
que, a presión coristante se transforma en
AF = A.4 f PAl'
(23)
La equivalencia de las dos definiciones se demuestra al insertar la ecuación ~ I Jde) AA en la ( 2 2 ) . Así obtendremor
AF = ( L E
+ P1V.: - P,V,) - (TISI- T,Si)
= Al{ -- ( T J ? - T I S I )
Esta última expresión ei idCntica con la ccuación (19).
1:) significado fiiico de AF a T y P conitantes se obtiene así: A temPe'atuia constante T 1 S = q , . De nue\.o. cuando la presión es también cons'""tr, AH = AE
PAV. .II colocar estas cantidades en la ecuación ( 2 0 )
L('sulta.
AF = AE
PAt- - q r
= - f
- A - PAT.)
+
+
Pero, según la primera Iry de tviinoc1iri:iniica q , - A E = m,, y, por
esa razón
nl; = - ( w , - I J I V )
(24)
1
202 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
Al comparar las ecuaciones (241 y ( 1 7 ) vcmos que. a T y P constantes,
- S representa el máximo de energa neta disponible para realizar un
trabajo útil: es decir, la energía neta disponible bajo las condiciones especificadas, que r.esulta al dcrreccr el contcnido de energía libre del sistema,
cuando éste pasa de un estado inicial a otro final.
Es costumbre desiznar a la enersía lihre de Gibhs, simplemente como
a la energía libre: y cn lo siiccsivo seguiren~osesta convención, señalando si
se trata de la dc Helmlioltr o Gibbs, cuando por razones de claridad sea
necesario.
.knálogamente, que H, F se expresa muy adecuadamente en función
de T y P como variables independientes. Si lo hacenios así resulta:
La diferenciación total de la ecuación (18) nos da:
dF = d H - T d S - S d T
+
+
(26)
+
Pero, T d S = d E
PdV. Además: de H = E PT7 obtenemos d H = d E
PdV
V d P . Al reemplazar estas identidades en la ecuación (26), se ob,
tiene
+
dF=dE+Pdr+ VdP-dE-PdV-SdT
- SdT
VdP
+
(27)
L a comparación de las ecuaciones (25) y (27) nos muestra que
Otra expresión de dependincia entrc F y T ; se obtiene al diferenciar
F I T con relación a T,si P r s constante:
Pri-o, F f T S = H. Po,- lo tanio
I
I
m
AF en las reacciones 203
J F E N LAS REACCIONES
En una reacción cualquiera AF = F, - F,, donde F, es la suma total
de las energías libris de todos los productos y F, es la correspondiente a
los reactixos. Al colocar la ccuación ( l a ) , que nos proporciona el valor de la
energía libre de rada cspecie, resulta que a una temperatura cualquiera T
,
AF = ( H , - TS,) - ( H , - TS,)
= (H, - H,) - T ( S , - S , )
= AH - TAS
(31)
dondi AH y AS son respecti\.aniente la variación de la entalpía y entropía
de la reacción.
se espresa la variación de energía libre como función de
En
T y P, es decir:
(32)
La primera de estas derivadas puede obtcnerse al diferenciar la ecuación (31) respecto a T cuando P es constante, es decir:
-
Pero la primera dericada del lado derecho es AC,, y la segunda vale
AC,/T. En consecuencia
= AC,
TACP - A s
- --T
= - AS
(33)
..A su vez, la segunda derivada en la ecuación (32) se obtiene de la definición de AF, ad:
Sin embargo, rnediantc la ecuación
( ? F , l J P ) , = V,. En consecuenria:
(29) resulta (aF,/aP)T = V , y
donde A l . es el cambio dc volumen rn la reacción. Al colocar las ecuacio"es (331 y (34.) rn la ( 3 2 ) . tcneriios:
En la ecuación (35), el primer término dcl lado derecho nos da el cfcrto
d<.la t ~ , , , ~ , . , ~ t ~sohrc
l r a >F cuando
presión cs constante, mientras quc el
1
204 Capitulo 6: L a energía libre y el equilibrio
segundo muestra el efecto del cambio de la presión a tempeiatuia constante.
Si ahora sustituimos la ecuación (33) que nos d a &S, en la ( 3 1 ) , se obtiene la ecuación de Gibbs-H~.lm/zoltz
Otra relación m i s convenirnte para la dependencia entre F y T, se
obtiene al diferenciar AFIT respecto a la temperatura, manteniendo constante la presión
T [ d ( A F ) / a T ] p- AF
F2-
Pero segím la ec~inción(36)
Por lo tanto
T2
PROPIEDADES Y SIGNIFICADO DE A F
El cambio de eiiersía libre en nn proceso cualquiera, como es una
función de los estados inicial y final del sistcrna únicamente. es una cantidad definida a tina temperatura y presión cualquiera dadas, y varía con el
cambio de estas dos lariables. Corrio en el caso del contenido de calor
y la energía los \alores absolutos de las encrgias libres de las sustancias se
desconocen, y de aquí que tratemos únicaniente con difireiicilis. Los cambios de energía libre dc un proceso se eupresm en ecuaciones anilo,vas a
las termoquímicas y de manera a n á l o p se suman y restan Arí, por
ejemplo, las ~ariacioncsdadas a continuación son
S02(g)
+ CMg)
=
S(rómb.) f 02(g)
sozc1z(g)
A F Z a 8 *=~ -2270 cal
= -74,060 cal
+ C l z ( g ) = S02C12(g) AFZmw
(38a)
(38b)
Cuando se resta de la ecuación (38b) la eciiución ( 3 % ) hallarnos que:
En ~onsecuenciala formación del dióxido de azufre a paitir del amire
rómbico y del ouícmo gaseoro procede con un deciccimicnto d~ ~rier:.ía
lihre de 71,XO caloiíaq cs decir, el contenido dc cneigiz Iibrr drl iS f O )
m mayor que cl dcl SO1 en erta í d t i n ~cantidad
El siyrio del camhio <Ir encrqía lihic cic un piorcro rc miiv ini1,ort.intc. Cuando la tendrriciu impulsara de u n a reacciin ir.i
de i,q~~icirl.ia
I
Propiedades y significado de A F
205
derecha se emite energía en la rcacción. ) el signo de AF es negativo. C n
s,:no menos denota. por esa razón que la reacción procede e~pontáneamente.
liando la tendencia es de derecha a izquierda, sin embargo, un trabajo
"cto equivalente a A F tiene que ser absorbido a fin de que la reacción
proceda en la dirección indicada y entonces A F es positivo. Este siqno significa que la reacción cn la dirección dada no es espontánea. Finalmente,
cuando el sistenia esti en equilibrio no hay ninguna tendencia en cualquiera
de las direcciones anteriores; no puede realizarse por el sistema nin&n
trabajo. y de aquí que AF es igual a cero. Estas trcs condiciones posibles
cambio de energía libre en un proceso a prrsión y temjeratura const a n t r i se resumen así:
A+B+C+D
A BcC +D
A f B SC
D
+
+
AF=AF =
AF = O
+
(espontáneo)
(no espontáneo)
(equilibrio)
(39a)
(39b)
(390)
Las flechas indican las direcciones que tienen las reacciones a seguir
de una manera espontánea para el s i p o dado del cambio de energía libre.
LTnsigno ncgativo no indica forzosamente que se verificará un proceso,
sino simplemente que el mismo puede tener lugar en condiciones apropiadas. Así, el oxígeno e hidrógeno coexisten indefinidamente a la temperatura ambiente sin combinación, aunque AF de la reacción a 25'C sea
- 56.690 calorías por m01 de agua. Cuando un c a t a h d o r como el asbesto
platinizado se introduce, la reacción procede con violencia explosiva. Tncluco con un catalizador resultaría imposible que la reacción se verificase
si potencialmente no existiera posibilidad de realización. Es el signo del
camhio de energía cl que detrrmina la potencialidad de una reacción, y es
la magnitud del cambio de enerqía libre el que nos dice cuan grande es tal
potencialidad.
El significado físico de la ecuación (31) o (36) se ilustra con un ejcmlo. Consideremos la reacción:
Zn(s)
+ CaSO, (solución) = ZnSO, (solución) f Cii(s)
3
Criando ésta tiene lugar en Laso abierto por adición de linc, a una solución de srilfato de cobre, se obtiene un calor de reacción, A H . Si por otra
pait? la misma rcacción se I l e ~ aa cabo reiersiblemente permitiendo que el
I>r»c?co proceda en una celda electroquímica y obligando que el voltaje
establecido realice un trabajo contra otro infinite~imalmentemenor que el de
la celda, entonces en lugar dc todo el calor se obteridd un trabajo cquivalente a AF. La difeiencia entre el trabajo así obtenido y la cantidad de
calor que debiera haberse liberado dc llevarse a rabo la reacción m fonna
totalirirnte irreversible como cn un vaso abierto, está dada por la eciiarión
de Glhhs-Helmholtz, y es igual tanto a - 7'AS o T [ a ( A F )/aT],.
$
206 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
1
El término - T A S = T [ i - ( A F p) T ] , . representa el intercambio de calor
entrc el sistema y sus alrededores cuando el proceso se conduce isotérmica
y remrsiblimcnte
Cuando AH es ma)or que AF, q , es positi~oy la energia cs absoibida
como calor de los alredrdores. Por otra parte. cuando ' i F ~s mayor que AH,
q, es ne:ati\a y hay desprendiniirnto de calor a los alrddedores. Finalmente,
en el caso especial que AH sea igual a iF el calor no es absorbido ni desprendido por el sistema, y no hay variación dc entropía.
;'
1
1
ig
!
CALCULO DE LOS CAMBIOS DE ENERGIA LIBRE
Ni la ecuación (30) ni la (28) permiten en sí, un cálciilo fácil del
cambio de cnergia libic que acompuiia a la variación de temperatura con la
presión coristantr. En cl primer caso, los valores requeridos de H de una
sustancia se desconocen, mientras que en el segundo caso los valores absolutos de S como función dc T no se encuentran generalmrntc disponibles.
Sin embarco. los cilculo~de la variación de F con la presión a ternperaura
constante sc realizan ficilmente. De la ecuación (29) el cambio dc energia
libre que tiene i u p en una variación en la presión total que existe sobre
una sustancia, desde P, a P1 con una temperatura constante T. se deduce
que es
Para rvaluar la. intesral rntrc loc líniitrí dados, debcrnoa espresai 1 .
como una fumión de P. Corno para ,i m d r ~dc un gas idcal 1. ri igual a
x R T / P obtenemos
AF =
=
y;*'y
L-dP
p,
= n R T Iu -
(42)
P,
E n los gases rrales tanto V como dP obtenidoi p r t i r d r eciiacioncs
de estado \(ilidai, debcn 5ubstituirsc en la ecuación (-II', y la intrcracióri se rcaliza clitonccs bien analítica o gr'íficarnciite.
Como los sólidos y los líquidos son sólo comlirt~sibles!iyciaincntc, su
.
Cálculo de los cambios de energía libre
207
.&unen se considera esencialmente constante, en un interxalo aniplio de
presiones. Entonccs la ecuación (41\ se integi-a simplemente así:
A,
=
V ( P , - P,)
(43)
dondc AF cs la variación de energía libre del sólido o líquido debida al
cambio de presión desde P, a P,. Tales variaciones de energía libre con
la presión, sor1 usualmente pcqiieiías comparadas con los cambios de energía
libre en p s e s y pueden frecuenteimeiite dcscartarsc; es decir las energías
libres de los sólidos y líquidos puros son práctica~nenteconstantes en un
intervalo amplio de presiones para cualquier temperatura duda.
La ecuación (37) da la variación de AF de una reacción con la ternpcratUrJ a una presión constante en función de Si del proceso y se utiliza para
calcular AF a cierta temperatura desde otra diferente.
Para hacer esto debemos conocer a I H como funcióri de la tempeiatura,
deducida por e! método descrito en el capítulo 4, así como también un
valor de AF a una temperatura conocida. Con tal información a In mano,
es posible integrar la ecuación ( 3 7 ) en la forma que se ilustra a continuación.
I
I
Vd.
=
E J ~ M P L O :Supongamos que se busca AF a l,OOO°K de la reacción
-
-
1
N,(g)
2
+ 3 H,(g) = NH,(g)
A F 7 J e . r ~=n - 3,980 cal
(14)
En este caso como sc señaló en la pigina 169, AH esta dada por
1
Al sustituir este valor de
1
Al integrar esta expresión resulta
1
donde I es una constante de integración. De aquí
l
Al ~olocarahora el
de AF = - 3.980 cal a T
cióil (14)y de~pcjarI Iiallanios que
AH en la ecuación ( 3 7 ) , obtenenios:
= 298.Z5K de la rcua-
208 Capitulo 6: La energía libre y el equilibrio
En consecuencia AF queda exqxesada como una funrión de la temperatura
asi
y de aquí AF a T = 1000°K es
AF
= -9,190 + 7.12(1M)O)In (1000) - 3.182 x 10-3(1000)2
+ 1.32 x 10-7(1000)3- 21.61(1000)
- f 15,340 cal
Vemos por lo tanto, que, aunque la formación del amoníaco debe proceder e.;pontáneamente a 298.2°K, pues corresponde a un valor negativo
de AF, el mismo proceso a 1000°K no será espontáneo.
El método descrito para calcular AF a una temperatura a partir de otra,
es termodinámicamente exacto y condicionado sólo a la seguridad de los
datos empleados. Como en el caso d e los calores de reacción, debe tenerse
cuidado de hacer cálculos dentro del intervalo para el cual se han determinado los datos térmicos. Sólo con datos precisos, y con el cuidado debido
de los limites de validez, es posible tener gran confianza en los resultados
de tales cálculos.
Las ecuaciones de AF tales como la (45) son útiles no sólo para calcular
el cambio de energía libre a cierta temperatura T , sino también para evaluar AS y Alf. AS se obtiene fácilmente por diferenciación respecto a la
temperatura a presión constante de la expresión AF, de conformidad con
la ecuación (33). A su vez, es posible obtener AH bien sea por diferenciación de A F / T con respecto a T utilizando la ecuación (37), o al evaluar
rimero a AF y AS y usar después la ecuación (31).
E J EMPLO : Supongamos que se desea calcular los valores de AS y AH
a 1000°K para la síntesis del amoníaco, por medio de la ecuación (44). Para
obtener AS diferenciamos primero la ecuación (45) respecto a T. Entonces
Al sustituir T = 1000°K encontramos que AS,oo,.x = -28.74 ue. Corno
tenemos ahora aF y AS a lCOO°K, la ecuación (31) nos da para AH
+
AH = T A S
AF
= (1000)(-20.74)
15,3@
- -13,400 cal a 1000°K
+
Los conceptos de fugacidad y actividad
209
Este resultado es idéntico con aquel encontrado para el calor de esta reacción a 1000°K en cl capítulo 4.
LOS CONCEPTOS DE FUGACIDAD Y ACTII'IDAD
Cuando se aplica la ecuación (42) a los gases reales, en particular a eletadas presiones, se encueritra que el cambio de energía libre, no está repro<lucidopor esta simple relación. La dificultad reside en que en los casos no
ideales 1' no viene dada por la relación nRT/P, sino por otra expresión
más complicada, que es preciso conocer antes de que podamos integrar
la ecuación (41). Como esta depcudencia del volumen, es con frecuencia
muy particular, el valor de AF vendrá dado por una ecuación de diferentp
forma en cada caso, y la simplicidad y generalidad de la ecuación (42)
desaparecerá.
G. N. Lewis mostró primero. cómo trabajar con sistemas no ideales,
desechando las ecuacionts simples de energía libre, deducidas para los
sistemas ideales. Para lograrlo introduce dos cantidades termodinámicas
nuevas, la fugacidad y la actiuidad.
Para comprenderlas bien, consideremos primero un sistema compuesto
de agua y su vapor. A temperatura constante, hay una presión definida de
vapor de agua sobre el líquido, que proviene de la fase líquida y representa una tendencia de éste a pasar a la fase de vapor. A su vez, el vapor
tiende a escapar de la fase de gas por condensxión. Cuando se igualan
estas tendencias de escape, obtenemos el equilibrio, es decir, la presión
de vapor se hace constante a temperatura constante. Podemos decir entonces, que un estado de equilibrio es el punto en que la tendencia a escape
de un constituyente, es el mismo en todas las partes del sistema.
La idea de que una sustancia, en un estado particular tiene una tendencia de escape, es muy general. Lewis señaló que esta propensión puede
medirse por una cantidad f llamada fu g acidad, que está relacionada con
el contenido de energía libre de la sustancia por mol, F, mediante la exPresión:
/
donde B es u n a constante que depende sólo de la temperatura y naturaleza de la sustancia. Como no se conocen los valores absolutos de la energía libre, no podemos evaluar B. Sin embargo, esta dificultad queda
vencida, al referir todas las mediciones de una sustancia a un punto de
referencia. Si designamos por F' a la energía libre y por f o a la fugacidad
un estado tipo, entonces F' está dada por
210 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
y la diferencia de energia libre entre un estado para el cual es F y el
estado tipo, viene dada por
En consecuencia, el contenido de energía libre de una sustancia en un
estado cualquiera en función de la de un estado tipo, es igual a
Si ahora escribimos
f --a
Y-
(50)
La ecuación (49) se convierte en
F=P-ORTTna
(51)
La cantidad a se llama acticidad. De la ecuación (51) deducimos que
la energia libre por ni01 dc cualquier sustancia, a una temperatura T,
puede escribirse en función df la energia libre tipo, y del término R T In a.
En el estado tipo F = P.R T In a = O y de aquí a = 1, es decir, la actividad debe ser igual a la unidad. En cualquier otro estado, el v a h r de
la actkidad dependerá de la diferencia (F - P),o en otras palabras,
de la distancia de nuestro estado particular al estado tipo. Esta relación
entre F y Fn puede comprmderse bien por medio dc la figura 6-1. Si
desiparnos a la linea xrtical por CI ejr de cnergia libre, sohre este eje
A representa al punto elcgido arbitrariamentr como un estado tipo. niirntras que B reprmenta a otro pinto para el cual la mergia libre rs F..
Entonces, la ecuación (51) establec~que la difeipncia de energías de una
~iistancia,rritre los puntoi B y A cs R T In al.Anilogamintr, )>.iralos pur1ti)s
C y A di<h a difcrimci,~CF i ~ i i a la R I ' In o,.
Eii Iiiii<-i6ndr 1.i r.r.ii.riÍm ( 5 1 ) , 1.i d i f r r c n c i n de rnirxía Iiliri [><irr m , l ,
El estado tipo de los gases 211
por el paso de un estado donde la energía libre F,, y la actividad
.,, a otro para el cual la energía libre es F, y la actividad a,debe ser igual a
ó para n moles
La gran analogía entre (52b) y (42), sugiere que podemos considerar a la actividad como contra-partida de la presión del gas, y también
como veremos en los capítulos siguientes, de la concentración en el caso
de los constituyentes de una solución. Cuando las actividades de los gases,
y los constitu)entes de una solución reemplazan a las presiones y concentraciones, cs posible realizar cálculos exactos de la energía libre. La razón
de esta exactitud es que las actividades, a diferencia de las concentraciones
o presiones, toman en cuenta no sólo las relaciones estequiométricas, sino
también las atracciones mutuas entre las moléculas, interacciones entre e1
soluto y el solvente en una solución, y la ionización. Estos efectos complican
la conducta ideal y son los factores responsables de las fallas de las ecuaciones termodinámicas en sistemas ideales cuando se aplican a sustancias
reales.
Antes de evaluar las actividades, debe elegirse el estado tipo particular
de cada sustancia. Esta definición resulta arbitraria, pero se han establecido ciertas convenciones que son de uso general en la actualidad. Nosotros discutiremos aquí únicamente aquellas convenciones que pertenecen
a los gases puroq sólidos y líquidos, mientras que las de mezcla de gases o
constituyentes e n solución se considerarán en los capítulos siguientes.
EL ESTADO TIPO D E LOS GASES
Para un gas, se toma conlo estado tipo a una temperatura dada, aquél
cuya fugacidad es la unidad, esto es, f 0 = 1. En base a esta definición,
'a actividad de un gas cualquiera iguala a la fugacidad
.=f = f
f"
,
1
=f
(53)
Y de aquí que para un gas la ecuación (51) se escribirá así
F=F"+RTlnf
(54)
En un gas ideal la fugacidad es igual a la presión. Puesto que cualquier
puede llrvanc a esa conrlición al reducir su presión a cero, cornple-
212 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
tamos la dcfinición de fugacidad de un gas cualquieta 11 establecer que,
en general
f = P cuando P -+ O
( 55a)
Es decir, cuando un gas es ideal la relación f / P vale la unidad, y al apartarse de la idcalidad f ya no es nunca igual a P y el cociente f / P es
distinto de uno, tanto más, cuanto mayor es la separación de la conducta
ideal. Por tanto, esta razón, llamada coeficiente de actioidad del gas, y
representada por el símbolo y, nos da una medida directa de la magnitud
de la desviación de la idealidad para cualquier presión y temperatura
dadas.
DETERMINACION DE LOS COEFICIENTES
DE ACTIVIDAD DE LOS GASES
La determinación de los mismos a cierta temperatura 7; se basa en la
ecuación (29), vale decir, d F = VdP. Como P es una constante a cierta
temperatura, la diferenciación de la ecuación (54) nos dará: d F =
RTd In f, y de aquí:
v
dIn{=---dP
RT
' (56)
Si definimos ahora una nueva cantidad a como
Al colocar ( 5 8 ) en (56) resulta:
a
dlnf =dlnP+-dP
RT
La ecuación (59) puede integrarse entre los límites P = O, donde y = 1
y P para cierto valor de y. Con lo cual obtenemos:
Determinación de los coeficiente3 de actividad de los gases 213
La ecuación (60) es la expresión utilizada para obtener y. Así cuando
&ponemos d e una ecuación de estado para a m o gas, se sustituye a en
función de P y se efectúa la inte,oración rntre P = O y una presión dada.
Sin embargo, si disponemos íinicamente de datos P - V a cierta temperatuiil, se grafica a contra P y la integración se realiza gráficamente.
Las conclusiones genera!es deducidas de tales cilculos se resumen así:
e,l todos los cases a presionr~relativamente bajas, es posible reemplazar
1,s fuzacidades por las presiones sin introducir un error apreciable. No
podemos señalar con exactitud dónde está el límite de tal reemplazamiento
porque depende de la naturaleza del gas problema, la temperatura y precisión requerida. A presiones elevadas, sin embargo, tal sustitución introduce
un serio error e incluso uno muy grande, como se p e d e juzgar por la
tabla 6-1 :
T ABLA 6-1.
Relacióii entre la fugiicidad y la presión de algunos gases
Una idea del error que puede hallarse involucrado en la sustitución
de la presión por la fugacidad en los cálculos de M, se muestra con
claridad en el rjempio siguiente:
E J ~ I P L O :Calcular el cambio de energía libre que acompaña la mpresión de 1 m01 de CO, a 60CC desde 25 a 300 atm. Si usamos primero
las presiones, obtenemos:
= 1.640 cal
Y si cn su lugar se utilizan las fugacidades dadas en la tabla G1 y la
ecuación (52b)
214 Capitulo 6: La energía libre y el equilibrio
,
,
:"! .'
:
= 1,040 cal
El cálculo aproximado nos da aquí, por esa razón, un resultado por exceso
del 57.7%.
ESTADOS TIPOS PARA SOLIDOS Y LIQUIDOS
C o m o el estado tipo d e u n sólido o liquido puros se toma el de éstos
a 1 @m, e n cada temperatura. En este estado a = 1 y F = P. Como
hemos visto, las energías libres de sólido y líquido no dependen mucho
de la presión y la actividad vale, muy aproximadamente, la unidad, a = 1
en cualquier intervalo de temperaturas y presiones.
LA ISOTERMA DE REACCION
Definida la energía libre de una sustancia en función de la energía libre
en el estado tipo, procederemos ahora a deducir la ecuación de la variación de aquella energía en cualquier tipo de transformación, bien sea
física o química. Consideremos en general la reacción:
d + b B
t ...
=cC+dD+
...
(61)
Si las actividades de A y B al comienzo son a.4 y aa y las de C y D al finalizar la reacción, uo y a,; entonces las energías libres de cada una de
estas sustancias por m01 a la temperatura T están dadas por las expresiones
FA= F i R T l n a r
(62d
Fs = FO, R T I n a s
(6%)
FC = Fs R T ln ac
(6%)
F D = F ; + R T ~ ~ D
(62d)
donde cada FO particular, representa las energías libres a la actividad unidad de las especies respectivas. Por definición, AF es igual a
+
+
+
A F = (cF,
y, de aquí
+ dF, + . . . ) - (& + bFe + . . . )
AF=(&+cRTInac+dF~+dRTIna~+ ...)
-(aFI,+uRTlnan+bF0,+6RTlnas+
= [(&
dpD
. .) - (aF: b%
. . .)1
[(cRT ln ac
dRT In a,
. .)
+
= [(cFC
+.
+
+
+ - (&T
++
ln ar
.
.
+ bRT ln ae + .
+ dFI, + . . .) - (aFI, + bFI, + . . .)1
+ RT
ln---a;&
...
...
*
')
')j
(63)
Las energías libres tipo de formación 215
El prirrier término del lado derecho de la ecuación (63) nos da el
de c n q í a libre de la reacción en e1 estado tipo, es decir, el que
tieiie lugar cuando los materiales en su actividad unidad reaccionan formando productos cu!a actividad es también uno. Si designamos por AFo
,,te cambio, la ecuación (63) nos da
La ecuación (64) nos d a la variación de energía libre de la reacción
en función del cambio en el estado tipo y de las actividades iniciales y
finales a una temperatura conrtantc cualquiera T .
Por esta razón se conoce a esta ecuación, de sumo interés, w m o la
irotcrma de reacción. Cuando las actividades de los materiales del comienzo y fin son todas iguales a la unidad, el segundo término de la ecuacióñ (64) vale cero, y AF = AFo.
Si dichas actividades no valen la unidad, AF viene dada por la ecuación completa (61).
Para cualquier reacción AFo es u n a constante a u n a temperatura dada j
y es independiente dc la presión. La variación de AFo wn la temperatura,
lo mismo que para AF, está dada por las ecuaciones (33) ó (37) pero,
en este raso, en cada valor particular en vez de AS y AH tendremos los
correspondientes ASo y AHO;es decir, los cambios de calor y entropia están
1
referidos a las reacciones en los estados tipo. Fuera de estas diferencias ,
cualquicr cálculo de AFo se maneja lo mismo que otro de AF.
'''A A
1
LAS ENERGIAS LIBRES TIPO DE FORMACION
A causa de la relación directa cntre AF" y las condiciones que pretalecen en equilibrio, que se discutirán en el capítulo siguiente, la evaluación
del cambio de energía libre tipo de una reacción i s un problema capital
y'S>
de físico-química. Las variaciones de mergía libre se obtienen de AH"
de una rcacción a una temppratura particular por medio de la ecuación (31) y poi otros procedimientos que se darán más adelante en este
h t o . En este momcnto, presrntarenios un esquciria utilizado para calcihr
energías libres de formación de coriipiiestos a ~ a r t i rde los cuales se puedcn
calcular las variaciones de dichas energías: en cualquier clase de reaccioni3.
La enc,rqía libre t i j u <IP /orn~aciijn de u n compuesto se define cor~!o
ci cambio qur acompafia la formnción dpl mismo con una actiuidad unid a d dcrdc rus e l ~ m c n t o scon igual a c t i ~ i d n d .La ecuación:
H,(g)
+ + O,(g) = IIzO(1)
= -56,690 cal
(65)
nos da el ranibio dt- rnergía libre de formación de 1 m01 de H,O(I) ron
Una actividad unidad a partir del H,(s) y f O,(g-), ambos con una artixidad igual a la unidad. Si suponemos ahora arbitrariamente, como e n los
216 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
calores de formación, que las energías libres de formación de loi le mento^
en sus estados tipo a 25°C son cero, el valor de AF:,,,., anterior es la
energía libre tipo de formación del agua líquida desde los elenientos, y
podemos escribir simplemente que
La tabla G2.señala las energías libres tipo de formación por cada m01
de un número de compuestos a 2j°C. Estas energías de formación pueden
TABLA 6-2.
Energías libres tipo de formación, a 25°C
AP
Am
Sustancia
(cal/mol)
Sustancia
(cal/mol)
HCl(g)
HzO(l)
H,O(g)
-22,770
-56,690
-54,640
-32,810
-94,260
20,720
12,390
23,400
-7,890
-71,790
-3,980
-91,790
-26,220
Ag,O(s)
HpO(s)
PbSO,(s)
CH, ( S )
C2He(g)
C,%(S)
CzHz(g)
C&k)
C&(I)
CH,OH(I)
C,H,OH(I)
HCOOH(1)
CH,COOH (1)
-2,590
13,940
-193,890
-12,140
-7,860
16,280
50,000
30.990
29,760
-39,730'
-41.770
-82,700
-93,800
cok)
co,(g)
NOk)
NOz(s)
N@*(g)
%S(S)
so,(S)
NHsk)
NaCI(s)
AgCl (S)
-
usarse para calcular A P de las reacciones en forma análoga a los calores
de formación empleados en el cálculo de los calores de reacción. Así, por
ejemplo, al tomar los datos de la tabla, hallamos el cambio de energía
libre tipo a 25°C correspondiente a la reacción
= 12,390 - 20,720 =
8330 cal
-
O
CRITERIOS DE EQUILIBKiO
Aunque el establecimiento de equilibrio en los sistemas se ha menciw
nado en numerosas ocasiones no se ha especificado aún ningún criterio
termodinámico para el mismo. En realidad, es posible deducir buen número de criterios en témirios de varias funciones temiodinámiras y de las
condiciones bajo las cuales se estableciá el equilibrio. Nos limitaremos
Criterios de equilibrio
217
disentir aquí trcs cnterios que son de máximo interts y utilidad al trabajar con roblema mas químicos.
U n sistema en equilibrio representa un balance de las fuerzas impul~ o r a sy de oposición, es decir, una condición dc re\ersihilidad. Además,
no se obtiene ningíin trabajo de iin sistriiia en este estado. Bajo estas
la ecuación ( 1 7 ) del último capitulo nos da
a
TdS - d E - Pd17 = O
(67)
El volumen y la rnercía son aqiii ionstantes, entonces rlE = d l = 0:
y rarnbién dS = O. Por iai~to,podemos escrihir pasa un iistcma en equilibrio cuando E y V son constantes, que en un cambio iniinitesimal
y en un c.mbio finito
(as),,.
=o
(AS)E,V= O
Las ecuaciones (68a) y (68b) corresponden a un niiximo en la entropía
del sistema por la razón siguiente. El proceso espontjneo tiende 3 proceder con un incremento de entropía, es decir, con dS positivo. A su vez un
proceso no espontáneo realizado con F y V constantes debe poieer dS
negativa. De aquí que en el equilibrio dS = O, la entropia debe ser un
máximo.
El criterio de equilibrio cuando T y l', son constantes se expresa e n
función de la energía libre de Helmholtz. Al diferenciar la ecuación ( 1 )
obtenemos
d A = dE - S d T - TdS
ó
TdS - dE = -dA - S d T
Al sustituir la última expresión en la ecuación (61) obtenemos
Si T y V son constantes
(aA)r,=
~ O
(Toa)
en un cambio infiniteiimal, y para u n cambio finito
Las ecuaciones (70a) y (7Ob) corresponden a un mínimo en A para el
"tema, puesto que AA es negativa para un cambio espontáneo y positiva
Para uno no espontáneo.
Al diferenciar la ecuación (21) resulta
dF = d A + PdV
+ VdP
d A i PdV = dF - VdP
218 Capítulo 6: L a energía libre y el equilibrio
La iriserción de esta íiltima cn (69) nos d a
dF i
SdT - V d P = O
(71)
y cuando T y P son con5tantcs
en un cambio infinitesimal,
J-
para un cambio finito
Por iguales razones a las establecidas para la energia libre de Hclmholtz, la enersia libre de Gibbs resulta un mínimo en un sistema en
equilibrio.
Los t1-es critetios de equilibrio desarrollados antcs son igualmente importantes excepto que difieren entre si en las restricciones impuestas, es
decir, en las variables que se mantienen constantes. De los tres criterios
dados, el que se expresa en función de F es el de mayor aplicación en
química, puesto que las variables independientes con que se trabaja más
frecucntemente son la temperatura y la presión.
EQUILIBRIOS FISICOS QUE COMPRENDEN SUSTANCIASPURAS
Para una sustancia pura en una sola fase, tal como el agua líquida
o gaseoca, la variación de energía libre viene dada por la ecuación ( 2 7 )
Para que exista equilibrio en la fase, d F debe ser O cuando T y P
son constantes LOII lo cual dT = dt' = O; lo cual nos dice que la fase
está en equilibrio cuando la presión y tPmperatura son constantes y uniformrs en toda ella.
Con\idcremos una sitiiacibn más interesante, la tiarisición de una sustancia pura desde una fase a otra. Por cjemplo, el paso de una sustancia
de una fonria cristalina a otra. cl cambio de sólido a líquido, la sublimaciGn de un sólido > la vapori~arión dr un líqnido. Todos estos cainbios
s i representan por la ccuación
A, = A,
o bien, por
AF
= F,
- F,
(73)
donde F, y F , son las energ-ias lihres molarcs dc la sustancia en los estados final e inicial, rrspectivamente. Todas mtas transformaciories alcanzarin equilibrio cuando AF = O il teinpcratura y presión constantes. ImJ>iiesta rsta condición en la ecuación ( 7 3 ) , nos da Fz = F i ; o en otras
Equilibrios puros que comprenden sustancias puras
219
palabras, todas estas transformaczones eitarán e n equilibrio a pesirín y
trrnpcratura constantes cuando la energia libre molar d~ la sustancia sea
q u a l e n ambai fases.
Supongamos que existen dos fases en equilibrio y que varía la presión
del sistema en dP. La temperatura del sistema cambiará en d T a fin de
preservar el equilibrio. En tal situación, dP y d T se relacionan así: Como
F~ es igual a F, tendremos también dF, = dF,. Pero por la ecuación (27)
dF2 = -S,dT
V,dP y dF, = -S,dT f V,dP. Al igualar estas cxpresienes, resulta:
+
donde AS = S, - S , es el cambio de entropía y AV = V , - 17, es la
variación en volumen del proceso. Además la ecuación (20) con AF = 0,
nos da AS = A H I T , donde A H es la variación de entalpia en la transformación revenible que orurre a la temperatura 1'. Al sustituir eqte valor de
AS en la ecuación (74) resulta
d P - AH
dT
TAV
La ecuación (75) conocida como ecuación de Clapeyron relaciona el
cambio de temperatura que debe acompañar al de presión en un sistrrna
de dos fases de una sustancia pura en equilibrio. De nue\o, la ecuación
e n s ~ ñ aque d P / d T está relacionada directamente con la entalpía de transición e inversamerite con la temperatura y cambio de voluincn que acoinPañan a la transformación.
Para integrar la ecuación (75), AH y A V dcben conocerse coioo funciones de la temperatura o presión. Como t d información, ordinaiiamintc
"O esti disponible, la ecuación (75) se usa en forma diferencial, erto es:
P, - P , AH
.- T 2- T I T A V
donde T es el
entre T , y T,, o bien, se integra la ecuación bajo
supuesto de que M y AV son constantes. Entonces obtenemos:
220 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
'
i
'
ecuación algo más exacta que la (76) y preferible en cálculos que comprendan cambios apreciable? de temperatura.
USO DE LA ECUACION DE CLAPEYRON
En la forma antrrior se utiliza principalmente para calcular el equilibrio en fases condensadas, esto es: equilibrios que coniprenden sólido^ y
líquidos. Su iiso se ilustra mejor en la discusión sipientc: Se demostró
en el capitulo 2 que la fusión de un sólido puro ocurre a una temperatura
fija para una presión establecida, y va acompañada por una absorción de
calor i ~ a al M , = Hz - H,, donde el valor de &Yr es el calor molar
de fusión, y Hl y H , son respectivamrnte las entalpías molares del liquido
y sólido. Al mismo tiempo, el proceso va acompañado de un cambio de
. - V,, donde Vz )- I.J son los volúmenes molares del
volumen AJ7, = 111
líquido y sólido. Si ahora cambiamos la prciión total del sistema de P, a
P2,entonces la temperatura de equilibrio varia de T , a T,. Para calcular
la extensión del cambio por medio de la ecusción de Clapeyron, consideremos cspecíficamente el siguiente ejemplo. En el icido acético el punto de
fusión a 1 atm de presión es 16.61CC,AH, = 2.800 cal/mol, y AV, = 9.614
cc/inol. ¿Cuál será sri punto de fusión a 11 s t m de piesión? D e la eciiación (76) deducimos
donde el factor 41.29 coiivirrte las calorías a cc-atm. Al colocar los datos
del icido acético obteiiemos
y de aquí
+
t2 = 16.61
0.24
= l6.8joC
Se observará que el efecto dc la presióii sobre el punto de fusión iio es
grande, y con pequeñas variaciones de presión piiedc descartarse.
El agua es un ejemplo interesante de sustancia que posee V, mayor que
)
V t y por lo tanto su punto de fusión disminuye al aplicar la presión.
La temperatura a la cual una modificación de la fase sólida de una
sustancia lleva a cabo una transformación a otra forma, es como cn la fusión, una función de la presión, y también en este caso, viene de nuevo
-
L a presión de vapor de los líquidos 221
dada, por la ecuación d e Clape).ron, pero AH y AV son ahora el cambio
de entalpia y de volunien que acompaiiari a la transformación, es drcir las
representaremos por AHt y AVt. Para estas tra~isicionesA H t es siempre
psitivo si ia transformación es desde una forma estable a temperaturas
bajas a otra que es estable a temperaturas mis altas, y necativo para las
transformaciones inversas.
i
!
LA PRESION DE VAPOR DE LOS L I Q U I D O S
Se ha puesto la atención en el hcclio dc que un líquido colocado en
una vasija se evaporará parcialmeiite para estab!ecer iinzi presión de vapotencima del liquido que depende de la naturalr7d de este, y cs: en el cquilibrio, constante a cualquier temperatura establecida. E ~ t apresión es coriorida como firerión suturada de vapor del liquido corrrspondirnte. En
tanto se inantienc ésta, el líquido no exhibe más trndencia a evaporarse,
pero a una presión menor hay una iiiieva transfr>rmación hacia la fase de
gas, y a otra más elevada se verifica una condensación, hasia rcstablecer
la presión de equilibrio.
Para un líquido cualquiera la vaporilación va acompañada (le absorcitn
de calor y la cantidad de éste, para una tcinpei-atura y presión dadas: requerida para ralentar cierto pcso d r liqiiido s? conoce con el nombre de
c a l o ~de ~'apori:oción y es la dilerencia de entali~íadc vapor y liquido, esto
es, AH, = H , - Hi:donde AH, cs el calor de vaporización y H , y H1 las
rntalpias de \.apor y d r liquido.
En una evaporación AH, es po~itivasiempre. micntras que cn una condensación es negativa y nnméricamente igual a1 calor ahrciiido en la vaporización. Como cabe csperar d e la definirión de A H ; AH,. cs la diferencia
entre la energía interna dcl vapor y del liqiiido AE,, = E, - E , y el trabajo
de expansión en el cambio d r faw: r\ dccii
donde P es la presión de vapor y AV, = V , - 1'1.
Hay varios psocediinieritos dc medir la presión de vapor de un líquido
que sc clasifican en estáticos y dinámicos En los prinieros se deja que
4 líquido establezca su ~xesióri dr vapor sin que haya ningím disturbio,
mientras que cn los diri:imicos i.1 líquido hierve o se hace pasar una corriente inerte de ga3 a través di1 inisiiio.
L a línea de separarión cntrc esos rribtodos no cs muy clara siempre, y
uri procrdiiniriito particular cs a irres, una coinbinacióri de los dos.
El m i i o d o iiotpniscúfiiro dc hlrnzies y Smith cs preciso, flexible y coiiveniente para la medición dv h r prrsioncs de vapor rlc iiria sustancia cii un
intervalo ainplio de tcmpei-atmar. En la figura 6-2 sc iiiiirsira un' dispositivo
222 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
simple de laboratorio. El bulbo B se llena aproximadamente en su mitad
o tres cuartas partes con el líquido problema, y en la porción en forma de
U del tubo C, se colocan 2 ó 3 cm de altura de dicho líquido: entonces el
isotcniscopio se conrcta al resto del aparato y se sumerge m iin baño María A, cuya temppratiira se midc con un termómetro D. El aparato va provisto de un tubo barométrico para medir la presión, mientras que G es un
frasco grande que atenúa las fluctuaciones de presión del sistema. Esta
botella se conecta bien a una bomba de succión o de aire. En la operación
se evacúa el sistema hasta que hierve el liquido vigorosamente en B, a
fin de expulsar todo el aire de BC.
Al aire
A la bomba
Fisura 6 2 .
Disposición del isotcniscopio en la drterminación dc la presión de vapor.
Se ajusta el bario A a la temperatura deseada y se admite aiie lentamente
al sistfrna hasta que los ni~elesde liquido en el tubo C en forma de G son
exactamente igualcs. En eitar condicionfs. las presionrs en ambos lados
del tubo en U deben s u iguales. Es e\identc que entonces, la presión de
vapor en B debe ser igual al resto del aparato y puede ohterieise de la lectura del barómetro y de la columna de niercuiio en E. La diferencia entre
la presión barométrica y la de E, es la presión de vapor del líquido e11 B
a la temperatura del baño. Las lecturas a diferente tcriipcratura se obtiene11
cuando las cambiarnos en el bario A y iepetimos la operación.
C n método dinimico siniple se priccnta en la figiira 6-3. El liqiiido
problema B se h i e n e dirpu& de eliminar el aire que contiene bajo iina
presión externa medida y se lee la terripcratiira de condcnsarión del vapor
con un termómetro T. La presión barom6trica menos la presión P er aqucila
en que el líquido hierve, y es la de vapor del líquido a la temperatura T .
Si cambiamos de presión P, el líquido hierve a distintas tcmpcraturas y se obtiene la presión de vapor correspondiente. 1.2 función del matraz C cí la dr
Variaciún de la presión de vapor con la temperatura
223
condensar cualquier escape de vapor y evirar la destilacióii del liquido
en el manómetro de mercurio.
Walker propuso uri n16todo dinámico más elaborado que coiisiste en la
saturación de alcíin gas inerte como el nitrógeno. con vapor al burbujear
una cantidad medida de gas por el liquido a temprratura constante y condensándolo o absorbiéiidolo después para pesar dc esta manera el vapor
del Iíquido. Si Pt es la presión en el aparato en roiidicioiies de saturación,
n, los moles de gas que pasan por él, y 71, = W,JM, cl núniero dc moles de
Figura 6 3 .
híétodo del punto de ebullición para 13 determinación de la presión
de vapor.
vapor colectado, entonces la prrsión parcial del vapor P que es igual a la
de vapor del líquido en la condición de saiuración es:
Este procedimiento, e5 por regla ~ e n c r a lmucho m i i tedioso que los
Otros mencionados, pero I>eirnitcexcelentes resultados. Se usa especialmente
en la determinación de las presiones de vapor parcial dc ine~clasde líquidos.
VARIACION DE LA PKESIOR. DE VAPOR
CON LA TEXIPERATUR.4
La presión de vapor de un líquido, es coristantc a una temperatura
d~cla,pero aumenta si lo hace la tcinperatiira I m t a cl punto c~iticodel
liquido. Por encima dc I,i ternpcratura crítica. no ruste l a liquido, y por
tanto iio tiene validez ~1 conrrpto de preiión d c \-y>or ~atiirada.
Es fácil de cornprendcr ~1 auininto d c la pr<,rlóri dc vapor tcriieiido r n
cuenta la tcorin cin6tica. .Al nilrncntar la ternpciatiiia es may0r.h porción
de moltciilai <liic adquivrvtl
cncrgin silficicntc para escapar dc la fasc
iI
221 Capítulo G: L a energía libre y el equilibrio
liquida, y en consecuencia se precisa mayor presión para establecer un
equilibrio entre cl vapor y el líquido. Por encima dc la tcmperatiii-a critica
la tendencia de escape de las mol&culas es tan elevada quc niiiguna presión aplicada cs suficiente para mantenerlas unidas cn el cstddo liquido, y
toda la masa persiste como gas.
I,a figura 6-4 nos muestra la forma rn que varía la presión de vapor
con la temperatura. Hay un ascenso lento a bajas temperaturas, y luego uno
muy rápido como p u d e observarse por aumento de la pendiente de las
!O
Figura M. Variación dc la presión de vapor can la temperatura
curvas. Esta variación de la presión de vapor con la temperatura se expresa
matemáticamente con la ecuación de Clausius-Clapey~on.Para la transición de líquidos a vapor P es la presión a la temperatura T , A H =
el calor de vaporización de un peso dado de liquido, y V , = V Lel volumen
del liquido, mientra que 1.: = V, es el volumen del mismo peso de vapor.
E n consecuencia, para la vaporización la ecuación de Clausius-Clapeyron
puede escribirse así:
~
dP dT
H
U"
T ( V ,- V i )
A temperatura no muy próxima a la critica Vi es muy pequeiia comparada
con V, y puede despreciarse. Así a 100°C, V , del acua es 1,671 cc por
gramo, mientras que V I es sólo 1.04 cc por gramo. Además si suponemos
que el vapor se comporta esenciaimentc como un gas ideal, entonces V, por
,
Variación de la presión de vapor con k temperahua 225
m01 viene dada por V , = RTIP y la ecuación (80) se transforma en:
dP
=
1 dP
AH, - AHS
m
- RTZ
AH.
P ; 1 T = RT'
d InP
AH.
dír=m
La ecuación (81) se conoce como ecuación de Clausius-Clapeyron. Para
poder integ~arlaes necesario que A H , calor de vaporización molar, se
conozca como una función de la temperatura. Si suponemos como una aproximación, sin embargo, que en todo el intervalo problema LVI, permanece
constante, la integración conduce a:
donde C' y C son constantes de integración. La ecuación (82) predice que
el logaritmo de la presión de vapor debe ser una función del recíproco de la
temperatura absoluta. Además, la comparación de la ecuación con la de una
línea recta, esto es, y = rnx
b, sugiere que si log,, P para un líquido, se
grafica contra 1/T, la gráfica debe ser una línea recta con una pendiente
m = ( - AHV/2.303R), e y - intersección b = C lo que va de acuerdo
con los hechos que se ú'.servan en la figura 6-5, donde los datos mostrados
en la figura 6-4 se grafican ahora como log,, P contra 1/T. De las pendientes de las líneas, se deducen los calores de vaporización de diversos
líquidos, así
+
-m.
pendiente = m = ---
2.303R
Y por lo tanto
AH, = - 2.303 Rm = - 4.576 m cal mol-'
El calor de vaporización se obtiene en calorías por mol cuando el valor de
R se usa en calorías por mol y por grado, es decir: R = 1.987, y así obtene-
mos un valor promedio del calor de vaporización en el intervalo de temperaturas consideradas.
Para obtener C en (8%) lo mejor es sustituir en esa ecuación el valor
calculado de M, y un valor de log,, P y IIT que corresponde a un punto
de la línea y así hallar C . Una vez que conocemos AHH. y C se calcula fá-
226 Capítulo 6 La energía libre y el equilibrio
cilmente la presión de vapor del líquido a cualquier temperatura por simple
sustitución del valor deseado de T.
sobrc las unidades de los diversos términos de la
Diremos unas
ecuación (82b). Como AH, y R estin dadas en calorías, el primer término
del lado derecho de la ecuación es independiente de las unidades en que se
expresa P. Sin embargo la magnitud de C depende de las unidades en
que expresamos la pesión. En consecuencia, al establecer una ecuación
Figura 6 5 .
Gráfica del log,. P contra 1/T en diversos liquidos
para la presión de vapor es esencial establecer con claridad si P se expresa
en atmósferas, milímetros de H , u otra unidad. Análogamente, si usamos
una ecuación procedente de alguna fuente de información debemos cuidar
de las unidades en que esté expresada.
Otra forma de (82b) se obtiene por integración de (81) entre los límites
P, y P, que corresponden a las temperaturas TIy T?.Entonces
C d I n P
=LH~/I$
R
PI= -AH.
T z- Ti
log,, F'I
2.303 E
T.Tz
[
1
El punto de ebullición de los líquidos 227
La ecuación (83) permite calcular AH, de los valores de la presión de
vapor a dos temperaturas, o, cuando se conoce M,,se puede calcular P
a cierta temperatura deseada a partir de una simple presión de vapor disponible a cierta temperatura dada.
EJEXPLO: A 373.6% y 372.6OK la presión de vapor de H 2 0 ( l ) es
1.018 y 0.982 atmósferas respectivamente. ¿Cuál es el calor de vaporización
del agua? Por medio de la ecuación (83) tenemos:
[
]
PZ
AH,
Tz - T i
lag,, - = ,
Pi 2JOJ
R
T,T,
1.018 log - AH.
[373.6 - 372.61
0.982
2.303 X 1.YS7 373.6 X 372.6
A H , = 9790 cal/mol
= 540 caljg
El valor observado experimentalmenre a 373.21°K es 538.7 calorías por
gramo.
Los calores de vaporización de los líquidos son medibles también directamente en un calorímetro, por condensación de un peso definido de vapor,
y observando el ascenso de temperatura del calorímetro, o proporcionando
al líquido una cantidad definida de energía eléctrica y midiendo el peso de
líquido vaporizado. El calor d e vaporización de un líquido, disminuye en general con el aumento de temperatura y se hace cero en la temperatura
crítica. Para el ácido acético, sin embargo AH, Zlumenta al comienzo, alcanza un máximo a unos 120°C, y luego disminuye para valores crecientes
de temperatura. Los calores de vaporización de algunos líquidos difieren
ampliamente, así sucede con el del agua que es anormalmente alto; hecho
que habla de la complejidad de este líquido.
La ecuación (82b) no es estrictamente válida en un intervalo amplio
de temperatura a causa de la supuesta constancia de nH,. Cuando hay datos
disponibles de la variación de A H , con la temperatura, es posible integrar
(81) para hallar una mayor concordancia con la experiencia y en un intervalo de temperatura mucho más amplio. Cuando no hay disponibles tales
datos los de presión de \.apor-temperatura van correlacionados en ecuaciones empíricas de forma
donde A, B, C y D son constantes
EL PUNTO DE EBULLICION DE LOS LIQUIDOS
E1 punto de ebullición normal de un líquido, cs la temperatura a la
cual su presión de vapor es igual a 760 mm Hs 6 1 atm. Sin embaqo,
un liquido pucde hcmir a cualwier temperatura que varia entre su punto de
228 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
congelación y la temperatura critica simplemente al elevar o hacer descender la presión externa que actúa sobre el mismo. Por esa razón, es posible
establecer en general que el punto de ebullición de un liquido. es la temperatura a la cual su presión de vapor iguala la externa ejercida sobre su
superficie. El punto de ebullición, se caracteriza por la formación de burbujas
de vapor dentro del líquido, que se elevan y escapan a la fase de vapor.
El cambio en el punto de ebullición producido por una variación de
presión se calcula con ayuda de la ecuación de Clausius-Clapeyron. Si se
conoce AH. de un liquido y si T, es su punto de ebullición a la presión
P,; T, el punto de ebullición a la presión P,, se deduce inmediatamente a
partir de la ecuación (83). Si no conocemos AH, puede evaluarse con
la regla de Trouton que establece
m"- constante
Ta
es decir la relación del calor molar de vaporización de un liquido al de su
jmnto normal de ebullición en la escala absoluta, es la misma para todos los
liquidas.
TABLA
6 3 . Las constantes de Trouton de los liquidas
AH, en el punto
Liquido
Nitrógeno
Oúgem
Amoníaco
Eter etílico
Acetona
Acetato metilico
Cloroformo
n-heuano
Tetadaruro de carbono
Benceno
Nitrobenceno
Mercurio
Zinc
Hidrógeno
Aúdo fómico
Acido acético
Agua
Alcohol propílieo-n
Alcohol etilico
Biamuto
Esta60
de ebullición
(cal mol-1)
P. ebullición
normal
("K)
Constante
de
Trouton
Presión de sublimación de los sólidos 229
Otra fomia de establecer la regla es que la entropía de vaporización
de todos los líquidos en sus puntos nomales de ebullición es una constante.
Cuando se expresa AHU en calorías por m01 y T en grados K se obtiene
que el valor de la constante es 21. Esta regla es aproximada como se observa en la tabla 6-3. Se mantiene bastante bien para los líquidos mostrados
en la primera sección de la tabla, pero las constantes son bajas para e;
hidrógeno y los ácidos, y elevadas para el agua, los alcoholes y algunos
metales.
PRESION DE SUBLIMACION DE LOS SOLIDOS
Muchos sólidos presentan una presión de vapor discernible y medible.
La presión de vapor de equilibrio de un sólido, conocida como presión de
sublimación, es totahnente análoga a la de vapor saturado de un líquido.
Para cualquier sólido dado la presión de vapor es constante a cierta temperatura establecida, y el proceso va acompañado de una absorción de calor
llamada de sublimación AH,,y por un cambio de volumen AV8 = V DV,, donde V , es el volumen molar del sólido, que si lo suponemos despreciable en relación con V , y también que el vapor se comporta como un
gas ideal, entonces la variación de la presión de sublimación de un sólido
con la temperatura está dada de nuevo por la ecuación de Clausius Clapeyron. Ahora T es la temperatura de sublimación y AH. es el cambio
térmico. En las sublimaciones esta ecuación se maneja lo mismo que en las
vaporizaciones, e iguales tipos de información se obtienen a partir de
las ecuaciones como para los procesos de vaporización.
A una temperatura dada, la sublimación de un sólido es equivalente
a la fus?ón del sólido y la vaporización del liquido que resulta. Como AH
en un proceso es independiente del camino, encontraremos que a una temperatura T
AH. = AH, AH.
(86)
+
de aqui, cuando cualquiera de estas dos cantidades se conocen, es posible
calcular la tercera mediante la ecuación (86).
Véase las señaladas al final de los Capítulos 3 y 4. Tambi6n 1. A. Weisberger,
%sicoi
Methods of Organic Chcmirtry, Interscience Publuhen, Inc, Nueva York,
19%. ~ a ~ í t u i o7,s 8 y 9.
1. El volumen molar del C,H,(I] es 88.9 cc a 20°C y una atm de presión.
Suponiendo que el volumen es constante hallar AF y AA en la wmpresiln de un
mol de liquido desde una a cien atmósferas.
Rsrpucrto: AF
213 cal mol-'; M
0.
-
-
I
230 Capítulo 6: La energia libre y el equilibrio
2. Dos moles de u n gas ideal se comprimen isotérmica y reversiblemente a 100°C
desde una presión de 10 a 25 atm. ( a ) Hállesc los valores de AF y AA en este proceso. (b) ¿Cuáles son los valores de AE, AII, AS, q y w para este proceso?
Respuesta: ( a ) AF = 1,359 cal.
3. Tres moles de un gas ideal se expanden libremente a 300rK desde un volumen de 100 a otro de 1,000 litros. ( a ) ;Cuáles son los valores de AF y AA en este
proceso. ( b ) ;Cuáles sbn los valores de AE,AH, AS, q y w?
4. Cierto gas obedece a la ecuación
PV, = R T + a,P + a.P2
donde V,,, es el valumen molar y al y a, son constantes dependientes únicamente de
la temperatura. i C u á l será la expresión de AF y AA cuando un m01 de gas se
comprime desde P1 a P, a la temperatura T ?
5. Calcular la diferencia en calarias entre AF y AA a 25°C de la reacción
H, (g, 1 atm)
1
+ -O,(g,
2
1 atrn)
=
H,O(I)
Respuesta: 1F - AA = - 888 cal.
6 . En cierto proceso AF = - 12,000 cal y AH = - 17,500 a 400°K. Hallar para
este proceso a esta temperatura AS, [2(i1F)/aTlr y [2(AA)/iTIV.
7. Suponiendo que el proceso mencionado en el problema 6 se lleva a cabo
reverniblemente. ¿Cuánto calor se desprende e n el mismo?
8. En cierta reacción AF = 13,580 + 16.1 T Iog-,, T - 72.59 T. Hallar AS y
; = 11,490 cal.
Respuesta: AS = 2 5 . 7 4 ~ ~AH
AH de la reacción a 25°C.
9. En la reacción H,O(I) = H,O(g, 23.76 mm Hg) AF,,,c = O. Suponiendo
que el vapor de agua se comporta como un gas ideal, hállese AF a 25-C en la
reacción
H,O(I) = H,O(g, 1 a m i )
Respuesta: AF = 2,050 cal.
10. En la reacción H,(g, 1 atm) t Cl,(g, 1 atrn) = 2 HCl(g, 1 atm)
25°C es - 45,400 cal. Hállese 4F del proceso siguiente:
H,(g,
2 atm)
+ Cl,(g,
1 atm)
=
AF a
2 H C l ( s , 0.1 atrn)
11. Para cierto gas el cambio de volumen como una función de la presión, está
a,P, donde a, y a, son constantes que dependen sólo de la
dado por AV = a,
temperatura. i C u á l será el cambio de energia libre, cuando a T constante varia
la presión desde P, a P,?
+
12. A - 50°C los volúmenes molares del N,(%) a diversas presiones son los
siguientes:
P (atm)
V(l/mol)
1
20
40
60
100
200
300
400
500
18.28
0.890
0.434
0.284
0.167
0.0879
0.0671
0.0579
0.0526
Deteminar los coeficientes de actividad del gas a 100, 200 Y 500 atm.
Problemas 231
13. Usando la tabla 6-1, hallar AF en la compresión isotérmica de L mol de
U 2 ( g ) desde 50 a 500 atm a 100CC.Comparar el resultado can el valor obtenido
al suponer que H z ( g ) se comporta como un gar ideal.
+
BP
14. Cierto gas a una temperatura T obedece la relación P V = R T
Deducir la expresión In y del gas como función de P a dicha temperatura.
+ CPZ
y C = 1.79 X
15. Si en cl problema 14, T = 223.20°K, B = - 3.69 X
l o - * para u n volumen dado cn litros y la presión en atmósfcrar ;Cuál s e r á e l cae(iciente de actividad del gas a un ralor d e la presión de P = 100 atm?
Reipueita: y = 0.858.
16. De los datos señalados en el problema 1, calcular la actividad del C,H,(I)
a 20°C y 100 atm de presión.
17. Derivar la expresión de la variación de actividad con la temperatura a presión constante.
18. La energia libre de formación tipo del H 2 0 ( 1 ) a 25°C es - 56,690 calorias.
Hallar l a energía libre d e formación de S - O a 25'C a partir del H, a la presión
de 0.01 atm y O , a la presión parcial de 0.25 atm.
Respuesta: AF = -53,550 cal.
19. En la formación del C,H,OH(I) lF:ioc
=
-
41,770 cal. Hallar AF a 25'C
para la reacción
20. Deducir el criterio de equilibrio bajo las siguientes condiciones:
( a ) Cuando son constantes H y P
( b ) Cuando son constantes S y V
( c ) Cuando son constantes S y P
21. Hallar el criterio de equilibrio en las condiciones siguientes:
,.'
E son constantes
( b ) Cuando son constantes S y H
( a ) Cuando S y
22. Teniendo en cuenta los Latos de la tabla 6-2, calcular AF"
reacciones siguientes:
( a ) C,H,OH(I)
+ O,(g)
( b ) 2 CO,(g) = 2 C o k )
=
CH,COOH(I)
+ O,(g)
25°C de las
+ H,O(I)
<Cuál de ellas es espontánea en la forma en que se encuentra escrita, en el estado
tipo?
Respuesta: ( a ) AFO = - 108,720 cal.
23. Utilizando las cntropias absolutas de la tabla 5-2, calcular el valor de AHO
a 25'C corrc~~ondiente
a las reacciones del problema precedente.
24. Teniendo cn cuenta la serie de reacciones que se dan a continuación, hallar la enerpia libre de formación del N,O,(g) a 25°C:
1
5 X'í"d
+ +1 O&)
=
NO@
A F ~ o , o , = 20,720 cal
232 Capítulo 6: La energía libre y el equilibrio
25. A partir de las entropías absolutas y los calores de formación correspondientes, hallar la variación de energía libre a 25°C de la reacción:
+HP(C
Cok)
=
En k+ sublimación del Au(s)
26.
COl(g)
=
+ H,k)
Au(g)
AH;ss
2 ~ K=
90,500 eal/rnol
y
AF2pgZ.K= 81,000 cal/mol. Además,
Au(g) :
A"($):
C, = 5.00 cal mol-1 grado-'
Cp = 5.61
1 4 4 x 10-3Tcalmol-'grada-'
+
Can eston datos hallar l a expresión de AFQ en función de T.
Respuerta: AFo = 90,740 + 1.40 T log,, T - 36.23 T
+
TZ.
X
+ 2 H,S(S)
27. En la reacción ~ o ~ , ( s )2 ~ , ( g =
) MO(S)
faldas,
+ 0.72
=
46,670
Mi5.0= 38,460ca1, y AC, está dada por
AC,
=
-12.95
+ 3.75 X
0.503 X lo5
T-
TZ
Deducir la expresión de fl como una función de T
28.
En l a reacción C u ( r )
=
Cu(g)
Hallar una expresión de AFo como función de T.
29. En la reacción FeCO,(r)
=
FeO(s)
+ CO,(g)
AFo = 18,660 - 14.42 Tlog,, T - 6.07 T i 8.24
X
IOW3 T1
Hallar AHo y A S de esta reacción a 25'C.
Respuesta: AHU = 19,790 cal/mol; ASo = 43.1 ue.
30. Para la reacción C(s, grafito)
+ S,(g)
=
CSZ(g)
Además,
C(s, grafito) :
Cp = 2.673
CS,(g) : C, = 13.75
+ 2.617
+ 0.49
X
X 10-3
T-
10-J T
-
1.169 X 10"
T'
3.38 X lo5
TZ
cal mol-' grado-'
cal mol-' grado-'
Con estos datas hállese la ecuación Cp para S ? ( g ) en función de la temperatura.
31. En la reacción &(g)
+ 2B(s)
@ = A
Hallar las expresiones de
( a ) AAO,
en función de la temperatura.
=
2AB(g), AFo
está dada Por
+BTInT+ CT+DTZ
(b) AHO, ( c ) AE", ( d ) AS% ((e ACo y ( f ) AC;
Problemas 233
32. Las densidades del H q liquido y sólido son 13 70 y 14 19 g/cc respectivamente en el punto de fusión, - 3887°C. El calor dc furión es 566 cal/átomo g. Hallar
cambio del punto de fusión por variación de la presión.
Reipuesta. 0.0051"C/atm.
33. El m-dinitrobencena funde a 8 9 3 ° C bajo una presión de 1 atm, y a 114.8"C
bajo una presión de 968 atm. Si el calor de furión es 24.7 cal/g. ¿Cuál es el
~ a m b i ode volumen en la fusión?
34. El calor de fusión del hielo es de 79.7 cal/g a 0°C. Las densidades del hielo
y del agua a esa temperatura son 0.9168 y 0.9999 g/cc, respectivamente. Calcular el
punto de fusión del hielo a 325 atm de presión, y comparar la respuesta con el valor observado que es de -2.5-C.
35. El nitrato de ainonio sufre una tranrfomación a 125 5'C y 1 atm, y otra
a 135.0"C y 1,000 atm de presión. La forma estable a temperaturas elevadas, tiene
un volumen pmmedio de 0.0126 c c / ~ mayor que la otra modificación para el inter\a10 de presión estudiado. A partir de estos datos calcular el calor de transición.
Reipueito: 1,040 cal/mal.
36. El AgI existe en dos formas a y /3, que están en equilibrio a 146.5"C y
1 atm de presión. En el cambio de a a ,ü A H , = 1,530 cal/mol, mientras que
AV = -2.2 cc/mol. Hallar la presión a la cual la temperatura de transición es
145.0°C.
37. En la medición de la
de vapor de un liquido, por medio del isoteniscopio, se encontró que la altura del H g en el manómetro es de 53.32 cm a 40°C
y 39.40 cm a 55°C. La presión barométrica fue de 741 mm. jCuál es la presión de
vapor del líquido a las dos temperaturas?
38. En la medición de la presión de vapor del etai-01, por el método de saturación del gas, se obtuvieron los datos siguientes:
-
Volumen del N, a 740 rnm y 30°C = 5.6 litros
740 mm
Presión barométrica
Temperatura = 30°C
Pérdida de peso del alcohol = 1.193 g
Hallar la presión de vapor del et-"al a 30'C.
R ~ i p u e i t a : 78.2 rnm de Hg.
39. En el punto normal de ebullición, 61.5'C, el calor de \aporización del CHCI,
eS 59.0 cal/g. Suponiendo que el \apor se comporta camo un gas ideal, y que el
"olumen del liquido es derpreciable comparado con el del iapor, jcuál es el valor
de AE por m01 en el proceso de vaporización?
40. La presión de vapor del etanol es de 135.3 mm a 40°C y 542.5 mm a 70°C.
Calcular el calor molar de vaporización y la presión de vapor del etanol a 50°C.
Rerpueita. AH, = 9,880 cal/mol, P,,.c = 221 O mm.
41. El calor de vaporización dcl éter etilico es 83.9 cal/% mientras que su presión de vapor a 30'C es 647.3 rnm ;Cuál será la presión de vapor a O'C?
42. La presión de vapor del CH,CI entre -47 y - 10°C se representa por la
ecuación:
¿Cuál es el calor dc vapo"zacibn de este liquido e n calorí*r por gramo?
Rirpucrtn: 104.1 cal/g.
1
234 Capitulo 6: La energía libre y el equilibrio
43. Un liquido hierve a 120CCbajo tina presión de 725 mm Su calor de vaporización molar es de 8,?00 cal/niol. Calcular el punto normal de ebullición del
liquido.
44. El punto normal de ebullición del C,HaBr es 156.15'C. Utilizando la regla
de Trouton, hallar la presión de T a p r a 100 C, > coinpararli con la obsenada que
es de 141 1 mm.
45. El CCI, exhibe Ins siguientes prciiones de
Tapar
a las temperaturas indicadas.
Establecer una ccuación que nos de el log,, P como una iunciún de la trmperatura.
46. Beattie y Marple [J. Am. Chem. Soc., 72, 1450 (1950)l dan la ecuacion
de xapor del bureno-1 como una iunciún de la temperatura
siguiente de la
entre -75 y 125 C
1343 516
lec,, P ( a t m ) = 5 1 i 5 t 6 2 - - 167.515
T
X 10Wd T
Hallar. (a) La cxpresióo de AHv en función de la tcmpcratura, ( b ) W, a 300°K,
( c ) el punto normal de ebullicion del liquido.
Rerpueito ( c ) 267'K.
47. El calor de \aporiractón de cierto liquido como función dc la temperatura
esta dado por la relaciou
AH, = a T bT
T
cT?
dondc o, b y c son constantes. <Cuál scrá la enprcsiún de I n P como función de T ?
48. Para medir el calor de \apr>rizaciún de un Iiquidq calorirnétricamente se
pasaron 13.5200 g de Tapar dcsde su estado liquido, inicialmente a 45.35'C al mterior de un calorimetro y se condensaron aquí. Durante el proceso, la temperatura
del calorimetro se eleró desde 25.015 a 26 525°C. Si la capacidad calorifica del
calorimetro es 453 25 cai/grado, y el calor especifico del \=por es de 0.180 d o ria gramo-' grado-'. ,Cual es cl calor de iaporización del liquido en calorías
gramo?
Respuesto 47 1 calorias/gramo.
49. La presion de Tapar del C o i solido es de 76 7 mm a - 103 C, y 1 atm
a -78 5 C Calcular cl calor de sublimación del CO,
Respuerta 6,160 caYmol
50. A 630°K el calor de sublimación del ZrBr, es 25,800 cal/mol, mientras que
la presiún de Xapor es de 1 atm ,Cuál es la presión de sublimación a 700YK7
51. .4 0°C el calor de sublimición del hielo es de 675.7 cal/% rmentras qii- rl
calor de iaporizaciún del agua es 595 9 caVg. Calcular la velocidad del cambio de
la presión de vapor con la trmperatura del agua y del hielo a 0 C A esta temperatura la preriún de \=por del agua es de 4 58 mrn de Hg.
52. El hielo está en erliiilibno con el agua liquida exenta dc aire a O 0023'C
b a ~ ouna prerion de 1 atin, mientras que balo la ~ r e s i ó nde s u prol>io vapor, cl
punto de furiún es O 0075°C más elevado Utilizando los datos dador en la tnbla
del problema 34, hallar la p r ~ s i ú nde s~bliniaciundcl hielo.
1
Problemas 235
53. La pwilón de rub1im;iciÓn del N,O \ l e n e dada por la relación
Hallar la expresión del calor de rublimación de dicho compuesta en función de
temperatura.
54. La presión de \apor del arsénico liquido
lee,, P,
-2,460
Time
= -- f
T
Ir
dada por la ecuación
669
y la del arsénico sólido por
Hallar la temperatura a la cual las dos formas del As ttenen igual presión de vapor
,Cuál es el \alar de dicha presión?
55. Para cierto liquido, el calor de ~ a ~ o r i z a c i óes
n AH, = 13,500 - 10 0 T c a lorias,mol mientras que el punto dc ebullición normal es 400°K Suponiendo que el
vapor se comporta como un gas ideal, hallar en el proceso de vaporización a 4001K
( a ) AH, (b) AS, í c ) AF, ( d ) m', ( e ) s, í f ) w , (S) AE, ( h j A , (1) ACp Y
( j ) AC,
EQUILIBRIO QUlMlCO
Es un hecho familiar bien establecido, que muchas reacciones no finalizan, sino que proceden hasta cierto punto y se detienen, dejando con
frecuencia cantidades considerables de reactivos inalte-ados. Bajo un conjunto de condiciones dadas de temperatura, presión y concentración, el
punto en el cual una reacción particular parece detenerse es siempre el
mismo; es decir, existe en este punto entre las concentraciones de los diversos reactivos y productos una relación fija definida.
Cuando una reacción alcanza e\te estado, se dice que se encuentra en
equilibrio, que no debe considerarse como aquél en que cesa todo movimiento, sino que es más provechoso considerarlo como un estado en el
cual la velocidad con que desaparecen los reactivos originando productos
es exactamente igual a la de interacción de los productos que restablecen las
sustancias reaccionantes. '
Bajo estas condiciones no hay una transformación perceptible en el
sistema, y el resultado final es un estado aparente de reposo completo. Este
equilibrio se designa como dinámico, en contraste con el estático donde
no hay movimiento alguno. Todos los equilibrios físicos y químicos entre
estados se consideran de naturaleza dinimica.
Los equilibrios
se clasifican en dos grupos, esto es, a) los
'1ornogé1zeos y b) heterogéneor. Los primeros son los que sc establecen en
un sistema en el cual 610 existe una fasc, romo por ejemplo, aquellos
sistemas que contienen gasrs únicarncnte, o una sola fase liquida o sólida.
Por otro lado, uii eqiiililirio h e t ~ l o ~ i . ~ i m
e o aqiid
,
vst,hlei ido en un siqtc-
238 Capitulo 7: Equilibrio químico
ma con más de una fa$e, corno el que existen entre un sólido y un gas,
líquido y gas, o sólido y sólido.
LA CONSTANTE DE EQUILIBRIO TERMODIKAMICO
En una reacción, tal como
el cambio de energía libre, AF, a cualquier temperatura J , está dada por
la isoterma de reacción, ecuación (61); que se cstable&ó en el íiltimo
capitulo, es decir,
Las actividades señaladas son las de los productos al final de la reacción y las de los reactivos al con~ienzode la misma. Sin embargq hemos
visto en el último capitulo que el criterio de equilibrio es que A F = O a
presión y temperatura constante. De aquí, que en el equilibrio la ecuación ( 2 ) se transforma'en
Las actividades son ahora las de los reactivos y productos en equilibrio.
Como a cierta temperatura AFn, el cambio de energía libre en el estado tipo
es una constante para una reacción dada, se sigue que la relación de actividades en la ecuación ( 3 ) debe ser también constante, es decir,
y la ecuación (3'1 puede escribirse así:
+
La ecuación (4) define a K,, la constante de equilibrio termodinámico
de ia reacción. TambiCn nos enseña que la relación de actividades indicada
dc productos y r~activosen el equilibrio debe ser constnntc e independiente
d<-todos los factorcs excepto de la temfxvatura."De nuevo, la ecuación ( 5 )
relaciona directamente la constante de equilibrio termodinimico de la rei
acción a una temperatura T con el cambio de energía libre en el estado
tipo para la reacrión, y por esa r a ~ ó n ,permite cl cálculo de K , a ~ a r t i r
a,
el cálciide AF" y viceversa. Esta ecuación de gran i n ~ ~ o r t a n c isimplifica
1
l
K , y K , en las reacciones gaseosas 239
lo de la variación de energía libre, y permite la predicción de conducta
de las reacciones químicas bajo diferentes condiciones sin recurrir a la
experimentación dirccta. Así hemos ~ i s t oen el último capitulo que para
la reacción
por medio d e la ecuación ( 5 ) , hallamos para la constante de equilibrio
a 298.15'K, que
AFo
2.303 RT
3980
2.303 X 1.987 X 298.15
= 2.917
K. = 826.1
log,, K , = -
Al escribir la expresión de la constante de equilibrio las actic,idadcs de
los p r o d u ~ t o sdebcn colocarse siempre e n el numerador y l a di: los wactiuos e n el denominador. La inversión de la relación nos da la constante
de la reacción inversa; asi, por ejemplo, como puede verse en la ecuación ( 4 ) , las dos constantes están relacionadas recíprocamente entre sí,
es decir,
K , Y K , EN LAS REACCIONES GASEOSAS
Antes de segiiir es necesario relacionar las constante? de equilibiio terinodinámico con las cantidades medibles experimentalmente, como son las
presiones parciale: de los reacti\.os y productos en el equilibrio en el caso
de las reacciones gaseosas, y concentraciones para las rearciones en solución. Aquí discutiremos las reacciones que involucran a los gases únicamente, o gases y fases puras condensadas. Los equilibrios en las soluciones
no electrolíticas se estudiarán en el sipiente capítulo y los iónicos en el
capítulo 11.
Vimos en el último capítulo que la actividad de un gas puro es idéntica
con la fugacidad y está dada por a = P., donde P cs la presibn del gas
Y su coeficiente de actividad. ILa relación correspondiente para un gas
en una mezcla de ellos está dada por la resla de la fugacidad de Lewis,
que establece que la actividad de u n gas cualquiera e n una mezcla es igual
a su presión parcial rnuliiplicada por el corficiente de actiuidad del gac
puro a la presión total de la rn~scla.(De acuerdo con esta regia, para una
especie gaseosa cualquiera i cn una mezcla se cumple
-,
a,
i
-
P,y,
i7a)
= NJ'IY,
í7b)
240 Capítulo 7: Equilibrio químico
donde N, es la fracción molar de i, P, es la presión total del gas de la
mezcla y y, es el coeficiente de actividad del componente i puro a la presión Pt.
Cuando la ecuación (7a) se introduce en la (4),resulta entonces para
K , de una reacción gaseosa en equilibrio
El primer término de la derecha en la ecuación (8) se puede representar
por K,, es decir:
y el segundo término por K , donde
Con estas definiciones, la ecuacióa (8j resulta:
K , es la conrtante de presiones de equilibrio d e una reacción; para evaluarla, podemos usar cualquier unidad de presión. Sin embargo, para la
sustitución en las ecuaciones ( 11 ) y ( 5 ) , las presiones deben expresarse
en atmósferas.
En la ecuación (11), K , es una constante verdadera para una reacción
a una temperatura dada. Por otra parte, K7 es una cantidad cuya magnitud depende de los gases involucrados y de la presión. En gases ideales, o
en los reales a presión cero, y = 1 y, de aquí, K y = l. Bajo estas condiciones, K, = K,, es decir, ambas constantes son iguales. En gases no ideales, a presiones mayores que cero, los valores de y se desvían de la unidad
y lo mismo sucede con Ki;de hecho, para una reacción dada, el valor de
K , está determinado por la presión total del sistema y variará a medida
que cambie esta última. Por lo tanto, se sigue de la ecuación (11) que,
mientras que para una reacción y temperatura dadas K, es una ~erdadera
constante, K , puede no serlo sino una función de la presión total de equilibrio.
Los límites dentro de los cuales las presiones son reemplazables por las
actividades, se han discutido en el capítulo precedente. En general, es p0sible establecer que Kp es aproximadamente igual que K , a presiones totales bajas. Como la mayoría de los ejemplos de equilibrio que citaremos
romprcnden gases en las condicionrs acabadas de señalar, procederemos
bajo la suposición de que K , cs sinónimo de Kv.
Propiedades de las constantes de equilibrio
241
Aunque los equilibrios que comprenden gases se formulan más frecuentemente en función de las presiones parciales para dar K,, también se
con frecuencia en término de las concentraciones, de esta manera:
donde,K, es la constante de equilibrio de las concentraciones. Los valores
de K p y Ke así obtenidas para una reacción dada son generalmente distintas numéricamente; pero es fácil lograr una relación entre ellas a cualquier temperatura T si consideramos que los gases involucrados se comportan de manera ideal. En este caso se cumple que P = ( n / V ) R T= CRT,
y al sustituir esta relación en la ecuación (9),
+ +
+ +
Pero ( c d . - .) - (a b . . ) representa el cambio en el númem
total de moles de los productos Taseosos y de los reactivos durante la reacción. Si designamos a esta diferencia por An,, obtendremos la siguiente
relación entre las dos constantes:
Resulta claro, de la ecuación (11), que K , = K,, sólo cuando An, = 0;
es decir, cuando no hay cambio de volumen en la reacción, y cuan60 lo
hay, K,+ K,. Cuando hay un incremento de volumen en la reacción,
Ano es positivo y K, es numéricamente mayor que K,. Si An, es negativo,
hay una disminución de volumen y K , es menor que K,. Usando la ecuación (14), R debe expresarse en las mismas unidades en que lo están las
Presiones y volúmenes involucrados en K, y K,.
A causa de la importancia fundamental de los cálculos del equilibrio,
está de más recapitular y recalcar las propiedades dc la consiante de
equilibrio de una reacción. En la si-guiente discusión supondremos que K ,
k', son verdaderas ronrtantes en una reacción.
Primero, el principio de la constante es válido sólo en este punto de
equililwio. No se aplica a las concentraciones posibles de hallar en un sistema cn rcarrióii sino íinicamcnte cn el equilibrio verdadero, y a mcnos
que sc rcciriIilacrn cri las ~cuacioiici(9) 6 (12) las concentraciones co"0
242 Capítulo 7: Equilibrio químico
rrespndientes al punto de equilibrio, no cabe esperar obtener valores de
las constantes.
Repetimos que la constante de equilibrio de una reacción a una temperatura fija, es independiente de la concentración o presión para todas
las concentraciones o presiones. Además, su variación respecto a la teniperatura es predecible termodinámicamente
L a magnitud de la constante determina la extensión a la cual procedeiá
una reacción particular bajo condiciones establecidas. Un valor grande
de K, ó K,señala que el numerador de la expresión de la constante lo es
en comparación con e1 denominador, es decir, que las concentracion~sde
lo? productos son ma!oreF que la de los rractibos, y que la reacción fa\-orece la formación de los productos. Por otra parte, cuando k', ó K, son peweñas, las conccritraciones de los reactivoi son grandec en coinparación
chn las de los productos y todo indica que la reacción no proceder.í en
cantidad apreciable bajo las condicione^ señaladas.
Además, la constante de equilibrio define cuantitatiuamente el efccto
de las concentraciones de los reactivos y productos sobre la extensih de la
reacción. La manera de calcular tales efectos, se discutiri despuGs eu este
capítulo. Por ahora deduciremos cualitativamente algunas conclusiories de
validez general. Con este propósito consideremos la reacción siguienti.:
cuya comtante de equilibrio viene dada por:
Como K, no varía con la presión, la relación entre los valores parciales de
las presiones del H2, 61, y HCI, en la ecuación (16), deben permanecer
constantes bajo cualquier condición a una temperatura establecida. Si añadiinos ahora hidrógeno a una mezcla de los tres pases, la presión de este gac
se incrementa, y la rtlación entre las presiones parciales dada por la ecuación (16) se modifica. Para acomodar el hidrJqeno añadido ~ i nalterar
la constancia de K,, debe disminuir la prcsión del gas cloro, mientras qiir la
del cloruro de hidrógeno debe aumrntar, lo cual debr \erificarsr por una
nueva interacción del hidrógeno y cloro para formar cloruro de hidrógeno,
y el p r o c ~ s acontinuará hasta que se restablece el valor dc K, y los gases
se encuentran de nuevo en equilibrio. Igual efecto se produce al a%re%ar
cloro. Por el contrario, la adición de cloruro dc hidr6geno aumenta el
numerador y, por lo tanto, el denominador debe también aumentar, si se
prescrrn la constancia. de K,. Esta vez. el ajuhtc se 1Wl.a P o r disw iüiión
dvl HCI en H Ay C1, h a ~ t ael ratablecimieiito dcl cquilihrio ) K,, i y r v s a
a su valor ioniiantr.
,
J + i
-
'J.
El equilibrio del amoníaco 243
De esta conducta de una mezcla en equilibrio, cuando se adiciona a la
misma un exceso de reactivos o productos, es posible sacar las dos conclu&mes siguientes:
1. La presencia de un exceso de alguno de los reactivos tiende a
desplazar una reacción hacia una eliminación más completa d e
aquéllos que no se encuentran en exceso.
2. La presencia inicial de los productos disminuye la proporción de
conversión de reactivos a productos.
EL EQUILIBRIO EN SISTEMAS D E GASES
Se han realizado muchos estudios experimentales directos de equilibrios
de gases, y a continuación se discuten con detalle algunos ejemplos indicando los métodos utilizados, así como la aplicación de las constantes de
equilibrio.
EL EQUILIBRIO DEL AMONIACO
El equilibrio
ha sido estudiado muy extensamente por Haber y sus colaboradores; Nernst
Y Jellinek y mis recicntemerite por Larson y Dodge.' Este último investigador hacia pasar una mezcla de nitrbgcno e hidrógeno, en la relación
de volumen de 1 : 3 por una espiral de hierro sumergida en un baño a
temperatura constante. Para acelerar el logro drl equilibrio, la espiral era
recubierta con lhierro muy dividido, que actuaba corno un catalizador, es
dccir, esa sustancia aceleraba la consrcución del estado de equilibrio sin modificarlo. Se analimba, a continuación los gases de salida, es decir el nitrógeno, hidrógeno y amoriíaco, a fin dr diterminar la composición de la mezcla. Para comprobar sus resultados y tener la s~guridadde haber alcanzado
el verdadero equilibrio, Larson y Dodge procedieron a obtenerlo a partir del
ainoniaco, que hacían pasar por ia espiral metálica junto con mezclas
de iiitiógeno e Iiidrógeiio. La tabla 7-1 mucstra algunos de sus resultados.
La priiiicra columna mis da la prrsióri total de equilibrio, la segunda el
Por<.rntaje de amoníaco hallado en la mezrla de equilibrio a cada presión
total y 350°C, mientras que la tercera proporciona el valor de K , calculado
Por la ecuación:
' Larron y
Dodge, J . Am. C h r m
Soc,
45, 2918 (1923)
244 Capítulo 7: Equilibrio químico
Constantes de equilibrio para la formación del amoníaco
TABLA 7-1.
Presión
total en
atmósferas
t
=
350°C
-
--
% NH,
K,
--
t
=
% NH,
400°C
Kp
-
t = 450°C
% KH,
K,
Las restantes columnas nos dan a 400°C y 450°C, una información semejante. A partir del porcentaje del amoníaco en equilibrio a una presión
total P, se calcula K , con ayuda de la Ley de Dalton de las presiones parciales. Si tomamos como datos una presión de 30 atm y 400°C vemos que el
porcentaje de amoníaco en el equilibrio es de 10.09, y por lo tanto la presión parcial de este gas es
P N H=
~ 30
X 0.1009 = 3.03 atm
La presión del hidrógeno más la del nitrógeno es por tanto
PH1
+ PNI= 30.00 - 3.03 = 26.97 atm
Como el nitrógeno e hidrógeno están presentes en la relación de 1 : 3,
tendremos :
PH,= -3 X 26.97 = 20.22 a t m
4
PN,= -41 X 26.97 = 6.75 atm
La tabla 7-1 nos da una clara muestra de que se cumple la ecuación
(18). Aunque la variación en la presión total es muy grande, de 10 a 50
atm incluso así K, a cualquier tcnzperatura dada es esencialmente constante. La presión total determina simplemente los porcentajes relativos del
hidrógeno, nitrógeno y amoníaco presentes en el equilibrio pero no altera
la constancia de K,. Por otra parte, la variación de temperatura ~ r o d u c e
cambios significativos tanto en el porcrntaje de arrioníaco, como pn la constante de equilibrio. A todas las pcsiones dadas, el incremento de temperatura actúa disminuyendo el rendimiento de amoniaco Y de ahí que disminuye K,.
El equilibrio del fosgeno 245
EL PRINCIPIO DE LE CHATELIER-BRAUN
Para predecir cualitativamente el efecto de la variación de presión o
de la temperatura sobre un,sistema en equilibrio se hace uso del principio de Le Chatelier-Braun, que establece que siempre que actúa una fuerza
&re un n'stcma e n el estado de equilibrio, éste reaccionará e n una dirección que tiendv a contrarrestar la fuerza aylicuda. Así, si aplicamos presión
a un sistema, la tcndencia de la fuerza será la de disminuir el volumen,
por tanto se produce una reacción en el sistema que favorece al volum m menor. En el equilibrio del amoníaco la combinación del nitrógeno e
hidrógeno para formarlo se alcanza con una disminuición de volumen de
tres a uno, y de aquí que según el principio de Le Chatelier-Braun podemos
esperar que la formación del amoníaco se vea favorecida por un incremento
de la presión total. Esto es lo que acontece en realidad como se ve en la
tabla 7-1.
De nuevo cuando una reacción es endotérmica, es decir absorbe calor,
la adición de éste la favorece y la reacción tendrá lugar más fácilmente a
temperaturas elevadas. Por el contrario si es exotérmica, debemos esperar
que la adición de calor tienda a inhibirla, y de aquí que a altas temperaturas
tiende a proceder en sentido inverso.
Esta última forma de conducta se muestra en la reacción de síntmis
del amoníaco. La tabla 7-1 señala, de acuerdo con la predicción de Le
Chatclier-Braun, que la formación de amoníaco es mayor a temperatura
más baja.
EL EQUILIBRIO DEL FOSGENO
,
~,
La formación del fosgeno
se ha estudiado detalladamente por hfax Bodenstein y Heinrich Plaut que
usaron un método estático, a diferencia del flujo dinámico seguido por
k s o n y Dodge en el equilibrio del amoníaco. El aparato usado consta
de un bulbo de reacción de vidrio, colocado en un cilindro calentado por un
horno elgctrico, que se mantiene a temperatura constante. La parte superior del bulbo de vidrio, se conectó por un tubo capilar a los tanques de
alniacenarniento de los gases y a un manómetro de cuarzo especial. Toda.
las mediciones de presión se hicieron con este manómetro. Al comenzar el
eypcrimento se dejó entrar cloro, después monóxido de carbono y se anotó
la p r ~ ~ de
i ócada
~ uno dc ellos, e igual se hi7o al establecerse el equilibrio.
' Bodenrtein
Y Plaut, Z. Physik. Chcm 110, 399 (1924)
246 Capítulo 7: Equilibrio químico
A partir de estas lecturas es fácil calcular K,. En un experimento típico
Bodenstein y Plaut hallaron que a 394.8'C para una presión inicial del
gas cloro de 351.4 mm y una del dióxido de carbono de 342.0 mm, se obtendrá una presión total de equilibrio de 439.5 rrim. Coino el volumcn durante
toda la experiencia era constante, las presiones parciales cran directamente
proporcionales al número de moles de cada constituyente presente, y de
aquí, que podemos tratar directamente con estos datos. Si designa~nosahora
por x, el descenso de la presión parcial del cloro durante la experiencia,
igual valor corresponde al del monórido de carbono y la presión parcial
del fosgeno formado será x también. Esta relación es clara teniendo en
cuenta la ecuación (19), donde los dos gases reaccionan entre si en la relación de uno a uno y producen un m01 de fosgeno. De manera, que con las
presiones parciales de los tres gases podemos escribir:
L a presibn total en equilibrio debe ser l a suma de estas presiones parciales y vale 439.5 mm como se halló en la experiencia. Por lo tanto
P = Pm2
+ Pco I Pcoci, = 439.5 rnm
= (351.4 - x) i- (342.0 - x )
= 693.4 - x = 439.5 rnm
x = 693.4 - 439.5 = 253.9 mm
+ x = 439.5 mm
Al sustituir este valor de x en las expresiones de las presiones parciales encontramos:
Pci, = 351.4 - 253.9
= 97.5 mm = 0.128 atrn
P c o = 342.0 - 253.9
= 88.1 mm = 0.116 atrn
Poooi2= 253.9 mm = 0.334 atm
D e aquí, que a 394.8OC
pcoci,
K, = P,,?Pc0
-
0.334
(O 128) (O. 116)
22.5
Cuando se conoce la constante de equilibrio dc una reacción, queda
determinada sirndtáneam~ntela de la reacción inversa mediante la ecuación ( 6 ) . Así, como la cnnstante de equilibrio de lornlación drl losgeno, a
El equilibrio del fosgeno 247
partir del cloro y del monóxido de carbono es K , = 22.5 a 394.8'C, la de
disociación del fosgeno en monóxido de carbono y cloro, es decir
COCI,<g) = C O ( g ) f Cl,(g)
debe ser
.K'
pcopci,
1
Pcocl,
Kzr
P
(20)
(21)
Esta nueva constante se utiliza en calcular la proporción en que se
disocia el fosgeno, en los productos dados a 394.E1°C y una presión establecida. Si partimos de n moles de fosgeno, y designamos por a el grado de
disociación, en condiciones de equilibrio, es decir, la fracción de cada mol
qiie se disocia; el número de moles de fosgeno sin disociar será igual a
n ( 1 - a),mientras que los de cloro y dióxido de carbono formados son n a
en cada caso. De aquí, que el número total de moles de gas presentes en el
equilibrio es
nt=n(l-e) +na+na
= (n
no)
= n(1 a )
+
+
Si la presión total de equilibrio es P, las presiones parciales de los tres gases,
teniendo en cuenta la Ley de Dalton, deben ser:
Y por lo tanto
Al sustituir K; = 0.0444 y suponiendo que P = 1 atm tenemos
&do siguiente:
a2
--
1 - a2
-
0.0444
a = 0.206
8
248 Capítulo 7: Equilibrio químico
En consecuencia, el fosgeno puro se disocia en cloro y monóxido de
carbono un 20.6% cuando la presión es de 1 atm, y la temperatura es
394.8'C.
Este cálculo típico ilustra el procedimiento general seguido para establecer expresiones de la constante de equilibrio en función de la presión
total y del grado de disociación.
LA DISOCIACION DEL SULFURO DE HIDROGENO
Cuando se calienta el H2S, se disocia en hidrógeno y azufre según la
ecuación
2 H S ( g ) = 2 Hz(g)
+ S2(g)
(23)
Para determinar el grado de disociación Preuner y Schupp S utilizaron un
método muy novedoso. Se hacía pasar sulfuro de hidrógeno bajo una presión
definida a un tubo de porcelana, donde se disociaba a una temperatura
constante. En cl centro de este tubo se colocó un pcquriio bulbo de platino
que actuaba conlo una membrana permrable al hidróqeno, c impermeable
al sulfuro de hidrógeno y al amfre. Se evacuaba el bulbo antes de cada experiencia. A medida que disociaba el sulfuro de hidrógeno, difundía el hidrógeno rápidaniente dentro del bulbo hasta que se establecía una presión
igual a la del hidrógeno en equilibrio. Esta presión se determinó con un
manómetro conectado directamente al bulbo, y sirvió para calcular el
grado de disociación del sulfuro de hidrógeno. Los valores de or obtenidos
de esta manera a divenas temperaturas para una presión total d e equilibrio de una atmósfera se muestran en la tabla 7-2.
T AB LA 7-2.
Disociación del H,S a
una atm6sfera de presión
Para calcular K , con estos valores de a procederemos así: Por cada mol
inicial de sulfuro de hidrógeno encontramos en el equilibrio (1 a ) y si
hubiera n moles obtendríamos n(1 - a). Como cada mol de sulfuro de hidrógeno que disocia nos da 1 de hidrógeno y 0.5 de azufre, entonces del
-
' Pmunu
y Schupp,
Z . phyik. Chem., 68, 157 (1909)
L a disociación del sulfuro de hidrógeno 249
número total de moles disociados, na, sc producirán na moles de hidrógeno
y ne/2 niolm de azufre. Por esta razón r n condiciones de equilibrio tendremos
y, en vez de n moles iniciales de gas, se encuentran presentes en equilibrio
- n ( 2 + a ) moles
2
Para una presión total de equilibrio P las presiones parciales respectivas son:
y por tanto
Los valores de K , obtenidos cuando P = 1 y se usan los de a de la tabla
7-2, se hallan en la columna 3 de la tabla.
Las expresiones de K, dadas en las ecuaciones ( 2 2 ) o (24) se aplican
$10 en las condiciones de equilibrio en que fueron derivadas. Cuando las
Condiciones bajo las cuales se estableció el equilibrio varían, por ejemplo
cuando productos y reactixos se hallan presentes inicialmente, las expresiones aludidas son ni& coniplicadas y de forma diferente. Así, consideremos
el equilibrio del sulfiiro de hidrógrno para n~ moles del mismo na, moles
de hidrógmo, y n,, de azufre, juntos a 1 , 1 3 2 ~La
~ . ~ r e s i ó ntotal de equilibrio es P. Si designarrios por x el núrriero de molrs de sulfuro dc hidrógmo
que se di90cian formando liidr6geno y azufrc, el número de rriolcs dc cada
250 Capíiulo 7: Equilibrio químico
especie será entonces
2 H,S
=
2 H2
+
S2
E n consecuencia las presiones parciales son
..,
En cl caso especial de que n , , ~ = nx, = ns, = 1 y P = 1 atm, la expresión de la constante de cquilihrio a 1,13Z°C, se reduce a
La solución de esta ecuación nos d a para r el valor x = - 0.526. El
sicpo - indica que el sulfuro de hidrógmo no se disocia bajo las condiciones especificadas, sino que el hidrógeno y el azufre deben combinase
para formar aquél antes de que el equilibrio se establezca en una mezcla
que contiene inicialmente un inol de cada uno de los participantes y una
presión total dc equilibrio de una atmósfera. En estas condiciones debcn existir prcscntes:
n , ~, ~x = 1
nir, 4- x
.n
X
+
0.526 = 1.526 moles de HAS
1 - 0.526 = 0.474 moles de H?
$- - = 1 -
2
O 263 = 0 737 moles de S,
Efecto de los gases sobre el equlibno 251
y las presiones parciales son, rcspecti\amentc
P
.,
1.526
~ = ,y,x
~ X 1
--
= 0.558 a t m
Pn2 =
ig
Ps,=
0.737
X 1 = 0.269 a t m
2.r37
X1
i
=
0.173 a t m
EFE CTO D E LOS GASES INERTES SOBRE EL EQUILIBRIO
Todos los ejemplos de equilibrio considerados hasta aquí comprenden
solariicnte los gases que participan directamente en la reacción. Frecuentemente. sin embargo, se encuentran mezclas cn cquilibrio donde hay gases
prevxitr5 qur no interienen en la reacción. La pregunta es: ;Cuál es el
cfecto de estos gasps que no reaccionan en la r~xtensiónde la reacción?
Es obvio que su presencia no altera la constante termodinámica de
equilibrio, pero si modifica los xalorcs de los cocficicntes de actividad y, y
por lo tanto también a K y . En consecuencia varía tambitn K,. Aún en
cl caso de despreciar este efecto en K,, la presencia de los gases inertes
altera las firrsiones fiarcides de los rcactivos y productos a una presión total
de equilibrio dada. de aquí quc podemos rsperar un rorriinirnto en la
txtensión de la reacriiin para permitir una rdi&hucióri de las presiones
parciales, de acuerdo rori lo que exige la corstaiite de equilibrio.
A fin de ilustrar cuantitativamente este efecto que nos ocupa, consideremos de nuevo la reacción
Hemos v i ~ t oque a 391.8T y a una presión total de equilibrio de una
atinósfrm, cl grado de disociación del fosgeno es u = 0.206. Supongamos
ahora, que e1 equilibrio se establece en presencia del riitrógvno con una presión parcial de 0.40 atm cn iina total de 1 atrn. La suma de las presiones
Parciales del fosgeno: cloro y iiinníixido de rarbono no es entonces P = 1,
sin0 1 - 0.40 = 0.60 atrn, y a partir de la ecuación (22), se deduce que
1.a adición de nitrógeno bajo las condiciones especificadas conduce entonces a un incremento del 5.6% en la disociación dcl fosgeno.
252 Capítulo 7: Equilibrio químico
Cualitativamente, el efecto de los gases inertes, sobre la extensión de
una reacción se predice con ayuda del principio de Le Chatelirr-Braun.
Como para una presión total dada, la presencia de gases inertes disminuye
las presionrs
de los productos y reactivos, el efecto sustantivo es el
mismo que si los gases en equilibrio estuvieran sujetos a una presión total
rnrnor.
O, establecido de manera diferente, el efecto de un gas inerte es el de
diluir las concentraciones de reactivos y productos. En consecuencia, según
el principio de Le Chatelier-Braun la presencia de gases inertes favorece la
reacción que conduce a un aunwnto de volumen. Así, cuando el volumen
de los reactivos es mayor que el de los productos, la reaccibn se desplaza en
favor de aquéllos, en caso contrario se favorece la formación de productos
como quedó deniostrado en el cálculo anterior. Si no hay cambio de volumen en la reacción, el equilibrio no se altera con la introducción de gases
inertes.
LAS CONSTAKTES DE EQUILIBRIO
EN LAS REACCIONES HETEROGENEAS
Consideremos la reacción
CuO(s)
+ Hz(g) = C U ( ~f) HaO(g)
(27)
La constante termodiriámica de equilibrio K , cn esta reacción es:
Sin enibargo se drmostró en el capitulo 6 que fa actividad de un sólido o
liquido puro puede tomarse corno la unidad a t o d a las temperaturas incluso a prcrioncs relati~.an~ente
altas.
Entoncrs, en tanto que las presiones no sean demasiado elevadas ac, =
a c m = 1, y
Además cuando los gases comprendidos se consideran ideales, la actividad es igual a la presión, y la ecuación (29) se expresa así
Por esa razón, en las condicionis especificadas la constante dc equilibrio
de una reacción debe contener sólo las actividades o presiones de los constitulentes %aseososy no incluyen términos para los sólidos o líquidos puras;
cs decir, 14 presencia de fases líquida o rólidus p u r a puede discartarse
totalmente al escribir 20 expresión d e la constante de equilibrio. LOS valores
.
La disociación del óxido cúpnco 253
de K , en las reacciones heterogéneas se conocen generalmente como constantes de equilibrio condensado.
A continuación se dan algunos ejemplos típicos de equilibrios hetercgéneos a fin de ilustrar los métodos típicos utilizados en su estudio y el
tratamiento matemático.
LA DISOCIACION DEL OXIDO CUPRICO
A temperaturas elevadas se disocia en óxido cuproso y oxígeno de acuerdo con la reacción:
Como el oxígeno es el único constituyente g;aseoso en este equilibrio, la constante K, de esta reacción debe ser igual
es decir la presión del oxígeno encima de la mezcla de óxidos es constante
para cada temperatura establecida. Esta conclusión fue verificada experimentalmente por F. IIastings Smith )- H. R. Robirt." Estos investigadores
colocaron una carga de óxido cúprico en un tubo de sílice, evacuaron el
sistcina y calentaron el tubo en un horno eléctrico a la temperatura deseada.
La presión de equilibrio del oxígeno formado como resultado de la disociación se medía con un maiiónietro acoplado al trbo de sílice. Para asrgurarse de que las presiones liidas correspondían a un equilibrio verdadero, se
alcaiizó ésta tanto a partir d r temprraturas bajas como altas, y en cada una
de ellas se extrajo gas y se permitió quc el equilibrio se restableciera por sí
mismo. Dr esta manera los ini.i.;tig;idorrs mencionados dciiiostraron que cn
cada temperatura la presión del oxígcno es constante de acuerdo con la
ecuación (32). E n la tabla 7-3 se dan algunos de los resultados obtenidos
a divews temperaturas
TABLA 7-3.
Presiones de diaoriación
del CoO a diacrias temperaturas
K,
= Po,
(mm Hg)
I
6
F
ti^^^ Smith Y II. R. Rohcrt, 1, A m Chem.
S o c , 42,
2582 (1920)
254 Capítulo 7: Equilibrio químico
EQUILIBRIO DEL DISULFURO DE CARBONO
Cuando se hace pasar azufre gaseoso sobie carbón a temperaturas elehadas, se produce disulfuro de carbono de acuerdo con la e~uación.
En esta reacción, la constante de equilibrio condensado es
Para estudiar estr equilibrio F. Koref h s ó un método dinámico. Se hacía
pasar nitrógeno saturado con tapar d e azufre sobre carbón finamente dividido que se mantenía en un horno eléctrico a la temperatura deseada. Los
gases se enfriaban a la salida iápidamente, a firi de prevenir el alza del equilibrio, con lo cual couderisaban el anifie y el disulfuro de carbono, mientras
que el nitrógeno se recocía en un gasómetio, y las cantidades de disulfuro
de carbono y azufre se determinaban por gialimetría.
TABLA
7-4.
Iíy
reacción C(s1
a 1009°C para la
+ S,:g)
=
CSl(si
Con loi datos aíí obtenidos ie clalúa la constante de equilibrio de la
manera si:uiente: Si suponenios que los vapores de azufre y el disi~lfiiro
de caibono se comportan idealmente. el tolumen de cada uuo de ello? en el
equilibrio a la tpmprratura T y la presión total P, ei
donde ns2 y ncs, soii el número dr rrioics de cstss sustancias prtsmte? rn IOS
condemadoc desde 1) nietcla de eqiiililii:o Si designamos por V el volunien
total d r los gases en cquilihrio, es decir, la \urna de los voiúmencs del a7ufre, disulfuro de carbono y nitrócciio. pntonces las fracciones rnol.iic? de las
La disociación del carbamato de arnonio 255
dos primeras sustancias son 1YSi= - V X - / l 7y ,V,s,
con la ley de Dalton
-
Vcs,/I
y de acurrdo
Al sustituir estas expresiones en la ecuación (34), encontramos que
es decir la constante de equilibrio drhe ser igual a la relación dc los volúmenes de las dos sustancias en el equilibrio. La tabla 7-1muestra a l p n o s
datos de Koref a 1,009CC y los valores de K v obtenidos a partir de ellos.
La constancia que presenta K , es satisfactoria.
LA DISOCIACION DEL CARBAMATO DE AMONIO
Este compuesto se disocia incluso a la temperatura ambirnte. según la
ecuación :
NH.COONH,Is) = 2 NH,(g, f CO,(g)
(36)
La constante de equilibrio condensado en esta reacción es, por lo tanto
Al estudiar este equilibrio por el método estitico, T. R. Briggs y V.
Migidichian introducían rarba~natode amonio sólido junto con cantidades
fija? de amoníaco y dióxido de carbono, en una vasija de vidrio evacuada
~~rovista
de un manórnetro. Se ,iimergía el aparato en un termostato de
aqua, y se dejaba que la m e d a aicanzaia el equilibrio. leyéndoce en el
manGmetro la presión total.
Si consideramos los euperimentos en que inicialmeute st. introducía
amoniaco junto con el carbamato de amonio, y si designamos por e,, la presión inicial del amoníaco y P la total m el equilibrio. entonces, VI aiimcnto
la presión ocasionado por la disociación del sólido es ( P - e , , ) 1)e la
e~tequiometriade la reacción sc sigue que de este aumirito, dos tercios son
dchicioc a IJ formación de amoníaco y uno a la del dióxido de carbono.
Pr>i lo tanto:
2
PNH,
= j( P - e , )
+ e, =
l
256 Capítulo 7: Equilibrio químico
y la ecuación (37) se transforma en:
La tabla 7-5 presenta algunos datos típicos obtenidos durante una serie
de experiencias a 30°C, así como las constantes de equilibrio calculadas
TABLA 7-5
Disociación del carbiirnato de amonio a 30°C
(P en mrn de Hg)
ei
P
PNB,
Pco,
KJ
por medio de la ecuación ( 3 8 ) . Todas las presiones se dan en mm de Hg.
De la última ecuación es evidente que cuando e , = O es decir, cuando no
hay amoníaco inicialmente, la expresión de K , se reduce a :
Existen otros ejemplos de equilibrios heterogéneos que se manejan de
igual manera que la descrita como la disociación témica de los carbonatos
metálicos, haluros, sulfuros, la oxidación del carbono a monóxido y dióxido
y la reducción de los óxidos metilicos por el monóxido de carbono.
EFECTO DE LA PRESION
SOBRE EL EQUILIBRIO HETEROGENEO
Análogamente al equilibrio homogéneo, cn el hcterogéneo es posible
predecir la influencia de la presión mediante el principio de Le Chatelier.
Al corisidcrar cl ranibio de volumen que aconipaiia a una reaccibn, los
viilíimrnes de todas las fascs r o n d ~ n ~ a d aps c d r n d~scartarse, ya que
rcsultan despreciables cn comparación con los de 10s gases involucrados.
Efecto de la presión sobre el equilibrio heterogéneo
257
Para ilustrar la aplicación del principio de Le Chatelier a un equilibrio
heterogéneo, consideren~osde nuevo la reacción
i.
P' b
.'
4 CuO(s) = 2 Cu,O(s)
+ 02(g)
Como esta reacción procede con incremento de volumen, cualquier
aii~nentoen la presión del oxígeno por encima de su valor de equilibrio, provoca un desplazamiento del equilibrio hacia la izquierda; es decir, el óxido
cuproso y el oxígeno reaccionan entre sí para formar óxido cúprico, hasta
que la presión del oxígeno \uelta a alcanzar su valor de equilibrio. Si por
el contrario, se reduce la presión, el óxido cúprico se disocia, y el proceso
sigue hasta que el requisito de la presión de oxígeno se restablezca.
Estos reajustes son solamente posibles cuando todas las fases condensadas participantes e n el equilibrio se hallan presentes. De acuerdo con la
ecuación (321, la presión del oxígeno en equilibrio, en este sistema debe
permanecer constante a cualquier temperatura. Cuando nos acercamos al
equilibrio desde el lado del óxido cúprico, y éste se halla en cantidad suficiente para propor~ionarla presión de gas adecuada al volumen involuciado, se encuentran presentes todas las fases y pueden satisfacerse todas las
exigencias de la constante de equilibrio. Supongamos sin embargo, que nos
aproximamos al equilibrio por el otro lado, y que la presión inicial del oxígeno se encuentra muy por encima de la presión de equilibrio. Entonces el
óxido cuproso interactúa con el oxigeno para foimar óxido cúprico, y esta
reacción procede hasta que la presión del gas se reduce a la de equilibrio
coirespondiente. Pero esta reacción puede realizarse únicamente si hay suficiente óxido cuproso, capaz de reaccionar con todo el exceso de oxígeno.
Si no es así, todo el óxido cuproso se convierte en cúprico. y aún quedará
cierto exceso de oxígeno para dar una presión mayor que la exigida por la
constante de equilibrio. Bajo estas condiciones no es posible que aquél sea
alcanzado, puesto que no hay óxido cuproso presente, y la presión de oxígeno puede tomar un valor cualquiera, según su cantidad presente.
Estas conclusiones son válidas a todos los equilibras heterogéneos. Por
esa rarón, debe r e c o r d a ~ eque es necesario que existan cantidades suficientes de las fases sólidas para permitir la regulación y ajuste de las condiciones del sistema, indispensables para que se establezca el equilibrio de
'0 contrario, no es posible lograrlo y no se aplica el principio.
VARIACION DE K , Y K , C O N LA TEMPERATURA
Aunque en una reacción dada K , cr constante para cierto valor de T,
Su ilia:,.riitud laría considcrablernente ron los cambios de temperatura y la
Iriaiicra con quC\"ría con icjuélla, cn cualquier clase dp. reacción se deduce
.
258 Capítulo 7: Equilibrio quúnico
,
fácilmente: A p r t i r de la ecuación ( 5 ) de este capítulo tenemos:
y por ese motiva
y en consecuencia
d- =
ln K,
dT
AHo
RT?
En las ecuaciones anteriores las derivadas parciales se convierten en
totales, puesto que tanto K , como AFQ son independientes de la presión.
La ecuación (40) define al coeficiente de temperatura de K . en función
del calor de reacción nHo y T. En reacciones que comprenden %asesy cuando K, = K, la ecuación (40) nos d a
Para integrar con exactitud la ecuación (41) debemos conocer a 3 H o
como una función de T. Sin embargo, cuando el intervalo de temperatura
considerado no es grande, podemos suponer que AHQno varia en el mismo, y
La ecuación (42) permite calcular K p 2a T , cuando se conocen AHo y K,,
a Ti; o, cuando se conocen las constantes de equilibrio a dos temperaturas
distintas, se usa aquella ecuación para obtener el calor de reacción promedio
en el intervalo Ti a T,.
En lugar de integrar la ecuación (41) entre los límites, es posible lograr
una solución bajo iguales condiciones de L\Ho constante, de la manera siguiente:
\'ariaciones de K , y K , con la temperatura
259
C es iina constante de integración que se detcmina, para una reacción
cualquiera. 31 sustituir rrii valor crmocido de K, a cicrta temperat~iradada.
~ n a n d ose disponen diversos \alores dc K , a distintas temperaturas y se
busca No,es preferible determinarlo grificamente que mediaiite el uso
de la ecuacibn (42).
De acncrdo con la eriiación (-13) una gráfica dcl log,, K , contra 1/T
debe ser iina línea recta con nna pendiente igual a - AH0/2.303R, y de
aquí se deduce que AH0
&Yo = - 2.303 R x pendiente
= - 4.576 X pendiente
(44)
La figura 7-1 muestra una gráfica de la reacción homogénea
entre 800 y 1,170°K. En concordancia con la ecuación (43) la gráfica es
!.i:/
-
xQ
$0 0.40
d
000 -
.
-040 -
-
-0.80L
8.00
10 00
I/T
12.00
14.00
x '01
Gráfica del log,~K , contra 1/1' de la reacción SO2(%)
Una línea recta con una pendiente igual a 4,930. En consecuencia en este
intervalo de temperatura
AH" = - 4.576 x 4,930
- - 22,600 cal
En la figura 7-2 se muestra una grifica a n i l o , ~
d? los datos dados en la
tabla 7-3 para la disociación hcterogCnca drl C u O ( s ) . Aquí de niievo
S' obtiene una línea recta Para temperaturas comprendidas entre 900 y
260 Capítulo 7: Equilibrio químico
-
i
figura 7-2. Grafica del log,, K , contra 1/T correspondiente a la reacción 4 CiiO(s)
2 Cu,O(s)
<X(g).
+
1,080°C, pero esta vez la pendiente es negati1.a e igual a - 13,200. En consecuencia AHn = 4.576(13,200) = 60,400 cal.
VARIACION DE K , CON LA TEMPERATURA
Una ecuación análoga a la (41) se obtiene para la cariación de K c
correspondiente a una reacción gaseosa, cuando se modifica la temperatura
donde AEO es el calor de reacción a volumen constante. Esta ecuación se
integra y maneja de igual forma que la ecuación (41). Por regla general,
las ecuaciones (45) y (41) darán diferentes resultados y serán idénticos
solamente cuando K , = K , y AHo = AE O es decir cuando An, = O y no hay
cambio de volumen en la reacción.
EQUILIBRIO EN HIDRATOS
L'n tipo interesante de equilibrio heterogéneo es el ql.e exhiben los
hidratos, o en general los solvatos de diversas sustanciar. Rajo condiciones
adecuadas dichos hidratos disocian en otros inferiores o en sustancias anhidras y en vapor de agua que establece una presión sobre las fases sólida
Así el NazHPO, . 12H20se disocia en Na,HPO, 7 1 1 x 0 ;* . rri Na,EIPOa.
Equilibrio en hidratos
261
2U.O y el dihidrato en NaZHPO,. Los equilibrios que tienen lugar en estas
d,sociaciones son:
Estos equilibrios hctero~éneosse tratan según métodos descritos. Las
constantes de equilibrio de todas estas disociaciones se dan simplemente
por la relación
donde x es el número de moles de vapor que resulte de la disociación del
Iiidiato, cs decir 5 en las ecuaciones (46) y (47) y 2 en la ecuación (48),
niientras que P es la presión de vapor sobre el par de fases sólidas. Desde
la ecuación (49) se deduce que, como PEes constante para una disociación
particular, P debe scr también otra constante, y por esa razón a cualquier
temperatura dada la presión de vapor sobre cualquier par de hidratos debe
ser constante en tanto ambas fases se hallen presentes. Esta conclusión está
de acuerdo con la obsenación. En presencia de un hidrato y su producto
inferior de disociación se encuentra que la presión es definida y característica del par de hidratos. Pero, cuanto se expuso no tiene validez cuando
solamente existe una fase sólida, puesto que bajo tales condiciones la presión de vapor puede variar dentro de ciertos limites. Es erróneo, por esa
r a z h hablar d e la presión de vapor del hidrato. Esta presión es constante
solaniente cuando existe un par de hidratos o un hidrato y su anhidrido.
T ABLA 7-6.
Presiones del Iapor acuwo en los pares de hidrato a 25'C
P
Par de hidratas
CuSO, . 5 H,O - CuSO, 3 H,O
3 H,O - H,O
H,O - CuSO,
fmm H a )
',
262 Capítulo 7: Equilibrio químico
En la tabla 7-6 se dan las presiones de vapor a 25CC de parcs de hidratos de diversas sales. Se ohserxari que la piesión de xapor es inixirna
con el par más rico en agua y divriinuye cuando cl contenido dc ésta: de la
fase sólida, disminu)-e. C n a aprcciacibn m:is clara de la lela<ióii entre las
presiones de las diversas formas de liidratos dc una sustancia a iiiia temperatura particular, se obtiene al graficar la presión contra el núriicro de moles
n de a p a en la fase sólida. En la fig~iia7-3 se presenta una gdfica así, del
fosfato disódico: las porciones iiorimntales indican 10s valores de n durante
los cuales las presioiie~del \apor particular permanecen con5taiites, esto es
0
2
6
8
1
0
1
2
Moles de agua por mol
de Na,HPO,(n)
entre n = O y 2, n = 2 y 7 y n = 7 y i2. Las líneas berticales, por otra
parte, dan los intervalos da presión de a a j a r en los cuales son estables las
fases de sólidos puros (sal anhidra, 2 H,O, 7 H 2 0 y 12 H,O 1 . Así desde
cero a 9.80 mm de H g de la presión de vapor de agua el fosfato disódico
anhidro, no se combina con el vapor de agua. Pero tan pronto como alcarizamos este último valor se forma algo de Na,HPO, . 2 H ? O y la presión
permanece constante en tanto exista sal anhidra presente sin transformar.
En este momento se encuentra que la tensión acuosa puede variar desde
9.80 a 14.51 nim de Hg sin formación del heptahidrato; es decir, el intcrralo de estabilidad del dihidrato varia desde 9.80 a 14.51 nim de H.: Con
esta última presión de vapor comienza a formarse la fase heptahidratada,
y la presión permanece de nuevo constante, hasta que el dihidrato se ha
convertido en heptahidrato. A su vrz esta última forma permanece estable
en el intervalo dc presiones comprendido entre 14.51 mrn y 19.13 mm de
Hg, y en éste último punto comienza la transformación a la fornia 12 H,O.
Una vez que la fase sólida se ha transformado a la de 12 H1O la presión
puede clevaise hasta la de una solución saturada de fosfato disódico en
Equilibrio en hidratos
263
agua. Cuando se alcanza esta última presión se disolverá algo del sólido para
formar u n a solución en equilibrio con la fase Na;HPO,. 12 HzO.
Por deshidratación los fenbmenos descritos tienen lugar en sentido inIerso. D e esta discusión resulta claro que un hidrato particular se presenta
sólo si la tensión acuosa queda entre los límites de estabilidad que exhibe
el hidrato a la temperatura dada. Fuera de estos limites, el hidrato se disocia o d a origen a otro menos hidratado o a una sal anhidra, o bien toma
agua, para formar una fase más rica en ésta, según que la presión de vapor esté debajo o encima de los limites prescritos.
Esta conducta de los hidratos del fosfato disódico a diversas tensiones
acuosas es típica de la que exhiben todos los hidratos a una temperatura
prticular, e igual sucede para algunos solvatos como los alcoholatos y amoníaco~de diversas sales.
T\BLA
7-7.
Prcsionea de vapor de algunos pares de hidrato a diversas temperaturas
(P en mm H g )
Par de hidrato
0°C
15°C
20°C
25°C
30°C
Na,HPO,. 12 HzO- 7 H,O*
SrCI, . 6 H_O- 2 H,Oi
Nn,SO,. 10 H20- S a 2 S 0 , i
2.66
1.23
2.77
8.93
3.99
9.21
12.93
8.37
19.20
19 18
27 05
-
*
-
1. Chem. Soc., 132, 635 ( 1 9 3 0 ) ; Baxter y Cooper,
46, 927 ( 1 9 2 4 ) .
Baxter y Lansing-, l. Am. Chem. Soc., 42, 419 ( 1 9 ? 0 ) .
Partington y Winterton,
1 Am. Chem.
t
-
Soc.,
Las presiones de vapor del hidrato y otros pares d e solvatos aumenta cuando se eleva la temperatura, como puede verse e n la tabla 7-7, de una
manera muy simple de deducir desde la ecuación (49). Como K , = P,
entonces
d In PZ - aHo
RT2
dT
Y por lo tanto
dInP
dT
-
Mio
xRT Z
Por integración, si suponemos que AHo es constante, resulta
La ecuación (52) es idéntica a la de Clausius-Clapeyron excepto que la
Pendiente del log,, P contra 1/T, en lugar de scr ( - A H 0 / 2 . 3 0 3 R),e s t i
264 Capítulo 7: Equilibrio químico
dada por ( - AH0/2.303 x R ) . De aquí se deduce quc el calor de disociación
de un hidrato o solvato es igual a
AH"
= - 2.303 xR (pendiente)
(53)
REFERENCIAS.
Véase la lista de r e f e r c n c i ~al final de los Capítulos 3 y 4. Además:
1. K. G Kenbigh, T h e Prinriplcr of Chrmtcol Equilibrtum, Camlmdge L'niwrrity
Press, Cambridge, 1955.
2. K. Jellinck, Lchrbuch dcr Physikalirchcn Chernie, Ferdinand Enkc, Stuttgart,
1930, Vol. 111.
PROBLEMAS.
1. Establecer cuál de los equilibrios siguientes es homogéneo y cual es heteragéneo:
( a ) S (rómbico) = S (monoclínico)
( b ) FeO,(s)
C O ( g ) = COi(s)
2FeO!s)
( c ) 2 SOl(8)
O&) = 2 S O ~ S )
( d ) CaCO,(s)
H + (aq) = HCO; ( a q )
C a + + (aq)
+
+
+
+
+
2. Formular las constantes de equilibrio de K. y K,, para cada una de lar reacciones siguientes:
C?H,(g) f H.(g)
O*(s) = 2 N G f s )
( c ) NOafs)
SOx(g) = SO>(g)
(d) 3 02(g) = 2 03(s)
( a ) CIHa(g)
=
(b) 2 N O f g )
+
+
+
NO(g)
3. Vna mezcla de tres pares, cuya presión total cr 90 itm. a 300' K, contiene
tres moles de cada gas. Los coeficientes de actividad de enton gases cuando están
rolos a 90 atm de prcsión son respectivamente y <= 0.760, y. = O920 y y, = 1.16.
¿Cuáles ron las fug-acidades de los gases en la mezcla?
Respuesta: fr == 22 5 atm.
4. La energía libre tipo de formación del HCl(g-) a 25°C es 2 2 , 7 7 0 cal/mol.
Calcular la constante de equilibrio termodinámico de la disociación del HCI en
su elementos a 25°C.
5. En la síntesis de un m01 dc N H s ( g ) a partir de sus elementos a 600°K, el
lag,, K y , como función de la presión total de equilibrio P en atmósferas está dada
por la relación (Maran y Turnbull, I n d . Eng. Chpm. 33, 69 (1941).
los,. K y
=
4 360 X lo-' P - 10484
x lo-' Po
+
1.750
x lo-'"
Determinar la relación K J K . cuando ( a ) la presión total dc equilibrio es 100 atm,
Respuerto. ( a ) K d K . = 1 16
( b ) 300 atm y (c) 500 atni.
6. En la reaccibn SO,(g)
+
f Ol(g)
=
SO3 (g) K.
=
6 5 5 a 90r)"K. all lar
&Fa de la reacción a esta temperatura
7. Calcular la relación K J K . a 300°K
en el problema 2
cada una de lar reacciones dadas
Kripucrta. f a ) 24 6
i
Problemas 265
8. En cada una de las reacciones siguientes predecir cualitativamente el efecto
del incremento de la presión total en el prcentaje de productos presentes en el
equilibrio:
(a) 2 SOa(g)
+
calor
=
+
+
2 SOz(g)
+
O=(%)
(b) 2 H I ( g ) = R ( g )
1 2 ( g ) calor
( c ) 2 NOl(g) = h-%O.(g)
calor
(d) CO(g)
+ H,Oís)
=
+
+ % ( g ) + calor
Col(%)
9. En el problema anterior jcuál es cl efecto de la disminución de temperatura
en el porcentaje del producto presente en el equilibrio?
10.
A 248°C y 1 atm. de presión a = 0.718, en la disociación
SbCl.(g)
SbCI,(g)
=
+ CL(g)
Calcular K , cn esta reacción
11.
Reipueita: K ,
= 107
.4 una temperatura T, el compuesto A&(g) se disocia según la reacción
2 AB,(x)
2 AB(s)
=
+ &(g)
c m un g a d o de disociación, n, despreciable frente a la unidad
sión de <r en función de K , y la presión total P.
Deducir la expre-
12. A 2155°C y 1 atmósfera. el HiO(g) se halla descompuesta 1.18% en H x ~ E )
la ecuación
y O,(g) se&
2 K,O(g)
=
2Wg)
+ Os(g)
Hallar K , en este proceso
13.
Reipueita: K ,
En la reacción
2 NO,(g) = 2 N O ( g )
= 8.38 X lo-'
+ 02(g)
para la presión en atm. Hallar el grado de disociación
del N 0 2 ( g ) , a la presión total de 1 atrn.
a 184°C K , = 6 76 x lo-'
14.
El PC15(g) se dipocia dc acuerdo con la reacción
PCl.(s)
=
PCL(s)
+ Clz(g)
A 250°C IC, = 1.78 cuando se expresa P en ami. Hallar la densidad de una mezcla
en equilibrio, en gramos por litro a una presión total de 1 atrn.
5 . .4 3000°K y 1 atrn. CO* se disocia un 40%, en COZ y OS (a) ;Cuál es
el grado de disociación si se d e i s la presión a 2 atrn? ( b ) ¿Cuál es el grado de
disouación cuando una mezcla de 50% de CO2 y 50% de O2 se calientan a 3000°K,
Y 1% presión es 1 atrn.?
Respueito: (a) 0.335; ( b ) 0271.
16. Del valor promedio de K , en la tabla 7-1 calcular el porcentaje molar de
N& presente en el equilibrio a 450nC cuando l a presión total es de 100 atm y la
relación molar H J S . es de 3 a 1.
17. R ~ p e t i rel cálculo del problema prccedcnte, asumiendo que la relación molar
total de equilibrio c i 10 atm.
del H, al N2es 1 a 1 y l a
18.
1
.4 30"C, K , en atiiibsferas vale 2 9 X lo-' en la dirncincibn
sO.Ch(g)
=
SOI!s)
+ Cl:!g)
Calcular ~l 5rado de disociación cuando la prrribn total dc eq<iilil>rioer 1 atm.
Capitulo 7: Equilibrio químico
2&
A 25"C, el valor de l F D de la reacción
19
es
es
S:O.(g)
+
=
2 NO'(%)
1380 cal. ¿Cuál es el grado de disociación a 25"C, cuando la presión total
de 10 atm
Rerpurria. a = 0 0494.
20. En rl problema precedrnte calcular rl s r d u de diraciarión cuando la presión total se mantiene a 10 a t m . pcro la parcial del CO? es de 5 atm. en el equilibrio.
En NHiHS se disocia asi
21.
NHiHS(5)
=
hH,(q)
+ H:S(p)
A 25°C la presión de disociación del sólido puro es 500 p i n de Hg- Calcular ( a ) K ,
y ( b ) la presión total de equilibrio cuando 300 mm. de NH, se introducm en u n
frasco NHiHS sólido
R e ~ p u e i t a .(a) 6.23 X IO'mni?;
( b ) 583 0 nim
22.
Para el equilibrio
C(sralito)
+ Col(%)
=
2 CO(p)
a 1123°K el porcentaje molar de C O en fase de vapor es de 93 77% a una atmósfer.1 de prrrión. ~n el equilibrio. ¿Cuál es ( a ) el valor de K,, ( b ) el porcentaje molar
de C O presente e n el equilibrio cuando la prcsión total c i de 10 atm?
23. E n dos enperimcntos se introdujo NHIC02PiH, a 30°C en un frasco que
contenía ( a ) una presión parcial de 200 mm. de amoníaco y ( b ) una presión parcial
de 200 mm de COo. Csando el valor promedio de K, dado en la tabla 7-5, hallar
cuál será 13 presión total de equilibrio en cada caso.
Para la reacción
24.
IhS(g)
+ L ( s ) = 2 H I ( g ) + S(s, rómbico)
tin= 1 3 3 X l0W5 atin. a 60°C iCuál será la fracción molar de 1-11 en el vapor
a 60°C cuando la presión total es de 1 atm?
Respuesta. 0 00365
25. A 713°K el ialor de K , en la reacción
SbS,(s)
+ 3 &(S)
=
2 Sb(s)
+ 3 H,S(g)
es 0.429. ;Cuál rr la fracción molar de H I en cl vapor a 713'K? iDepende el resultado de la presión total? Dar ramncs de la respuesta.
26.
En la reacción
2 CaSO,(r)
=
2 CaO(s)
T
2 SOl(g)
+ 02(g)
el ialor de K , = 1.45 X 1 0 - h t i n . ' a 1625OK ,Cuál es la presión de disociación del
C a s o i en mrn de Hg a esa temperatura?
27. U n mol de H: y otro de S h S j f s i se introducen en una vasija de reacción
y rr calientan a 713°K. Con los datos dados en el problema 25 hallar el númem de
n~olcsde S b formados y el número de inoks dc 1%:sin transformación.
28.
-
La constante de equilibrio en lu disociación
2 H'S(d
=
2 H.(c)
T
S(%)
0 0118 a 3063 C, mientras que el wlor de disociación es -iliD= 42,400 cal.
Encontrar la c o n r t a t e de equilibrio de la rracción a 1200°C
Rerpuerto: K, = 0,0507
es
h.,
'
29.
En la reacuón
S O i ( g ) -t %O,(p) = SO,(g)
K p = 6.55 a 900.K y K ,
= 1 8 6 a 1000°K Calcular el calor de reacción
en ese
,nten.do de iernperatura.
30. En IJ reacción.
¿SO,
2 so?:^)
+ o.:%)
= 46.980 cal y AF" = 33.460 cal a 25°C. Si suponemos que A W es indepen1
diente de la temperatura, calcular ( a ) AFn y ( b ) rl grado de di\ociación a, del
SO,(g) i 600°K v 0 5 atrn de prerióri total
R e i p u e i t a ( b ) , = 6 3 X lo-'
31. .i paitir de los calores > energías libres dados en las tablar de los capitulas
preccdentei. eniontrar el grado de disociación del N O z ( g ) en X O ( g ) y O a ( g ) a
200'C y una atmósfera de presdn Suponer que b H " ps independiente de la temperatura.
se dan Iur ialorcr absolutos de 1.1s entro~ias,S', y los calores de fomiacibn
a 25- C :
S')(ur)
AH" (cal)
CO
47.30
45.11
51 06
51.21
&O
LO:
H:
Si ioiisidrrarnui ~otiitnntea 1H' rrsjrecto
33.
i
-26,420
-57,800
-94.050
-
T, calcular K , de la reacción a 600'K.
En la reacción
2 ZaHSO,
-
-
-
AHo
Sa,S20;(s)
+ H:O(g)
Afl'
19.800 <d. y AFO
9,000 ral. a 25 C Considerando constante a A H " ,
d c u l a r 1.1 picsión de disociación del NaHSO, a iOOCK
Reipueita: 55 3 atm.
li*
34.
Ctmirnzando con la erua<ióii ( 1 4 ) de este capitulo, d r r i ~ a rla ( 4 2 ) .
35.
E n la rr.~ciióri
- 50
H.(g,
a 448 L
)
h,
2 HI(SJ
I.(gl
16.9 a 3jiJ'C 1i.illar AE
y AH" e n ella reacción
36. L-n qrnrno de s~.HPO. i H.(> sc ioluca en un rii.itr.iz de ? litros a LJ'C.
pcso dc agua debe añadirsr a fin dc ~urivrrtir totalmente cste hidrato en
N ' i - f l p ~ 1s2 H.0 v t ~ t a b l e ~ euii.i
r <ondirióii de equilibrio rn el rrcipirnte? Ctilizar
los datos d e 1.i r.ibla 7.7
R e i p u e , t ~ : U 3 i ? g.
37.
E n l., ,caciiiiri
C&04 3 1
-S
H.Olal 4 2 II.O(g)
,'
disoci.iriori J 2% 2 K r r 7 17 x 10 atiii y IIIU2,,. = 27,000c.il.
" <fm$idrrarrias .i l l i " < m i l m t c < < m 1.i \ . i r i , w i i r i d<, triiiperdtur.i, t c i i á l s i ~ ila
liri r i i r i de disuciaci&, <." , i i i i i ~ 1 < . I I > ? .I 1 tlo c:
la Iirciión
tic
J
268 Capítulo 7: Equilibrio qiiíiiiico
38.
E n la rezi c
iYii
~ c I r ~ ) . c : H o 1 I , q-) ( c l L . C o , g ) 4-I L i g )
K, a 457.4' es 0.36, AC,, =- 4.0, y 111'2.~1 1; = 14,700 cal. ( a ) deriiar u n a e ~ p r r i i ó n
para el lag," K , conio tina fiiiirión de T , y (1,) ralrular ti, a 5005K.
Respuesta: ( a ) log-,,K p -
39.
E n la reacción 2 H:(g-)
AFO
=
29jo
--T-
+ S.(%)
=
- 38,810 + 15 41 Tlog-,,T
+ 0656;
t 2.01 loa, 7'
i b i k', - 1.42.
2 H.S(g)
-
? 063
x 10 ' T z - ?jO? T
Deducir las expresionrs de In K,, AH", A S " y AC', d r la rcacción cn iiinción de la
temperatura.
40.
En la reacción
+
S:(g)
2 O > ( %=
) 2 S O l ( g ) iH':s ,, = - 172,900 cal,
y 1Cz cn función de la temperatura está d.id,i por
0336 X 10:
1.424 X 10
1C?= - l . 4 9 +
- 3 3 67 u,,
c =
7'-
De crtar datos hallar cl valor de ti, de la reacción a l.OOOCK
41.
IwiaK ,
En la reacción S ? ( % )= 2 S ( g )
lHO= 102,600 -!- 2 47 T
-
-
- 16 735'1(, n 1.00OCl<,y
0.414 X
To
Encontrar la extensión en que se disociará el S:(g) en átomos a IJ teriiprratiirn de
4,000"K y una atm. de preribri.
42.
En la reacción 2 NaHCO,(s)
=
NaCO,(s)
-'-C O z ( s ) + H . 0
,,,,
AHo = 29,320 1-9.15 T - 12 i 3 x 10-3 T-, y So
-
g)
7.080 cal
;Cuál será la presión parcial del H,O(e) a 400°K sobre una mezcla de los dos sólidos
a la cuál se ag-rega C o z a una presión inicial de 100 mni dc H q 7
Kerpueita 1 U9 atril
43.
En la reacción MnCOJ(s)
AP
=
=
MnO(s)
+ CO.13)
27,660 - 1 + . 1 6 T l o g - , , T + 1 0 7 X 10-'7'-
-
10 19 T
Determinar la temperatura a la cual la presión de disociación del CO.(g-) es 0 5 atm.
+
44. E n la reacción 2Mo(s)
C I I , ( g ) = M.IRC(S) - 2 H 2 ( g ) A-, = 3 55
a 973°K.
;Cuál será la presión inicial de metano a fin de producir I12,g) con un2 Vesión de equilibrio de 0 75 atm.?
45. El calor integral de solución de M s C I * ( ~ )a 18°C es -35,900 cal y el de
MsCl,. 6 K O ( s ) es -2,950 cal, y el calur dc ~ a ~ o r i z a c i ódel
n agua e l 507 cal's.
Hallar AH a 18'C en la reacción
MgCI, 6 H z O ( s ) = MgCL(s)
+ 6HD(c)
Reipueitu: 96,330 cal
46.
En la transición
HsS ( ~ j o =
) HsS (negro)
fl = 4,100 - 6 09 T. :Cuál r s la rnodificacción estable de IfgS a 100IC? : C U ~ '
de 1 atm?
es la tem p eratura dc transición a In
SOLUCIONES
,
l
Cuando se dispersan íntiiziamente \alias su\t~ririaique no rca<rionaii
entre 5 í . se ubtienrn tres tipos de nirrrla: a ) g o m a i coi110 uria de sal
a7úrar. ii) coloidal, por ejeiiililo la de arcilla fina qui. sr asita en agua:
C) una solución ~ r i d a d c r a ,que sr obtivnr <iiarido una sustancia con10 r l
azíicar se disuelve en el a p a . En rl raso U ) ,lai paitírulac indkiduales, son
discernibles ficilinente y separables por algún ~irocrdiinirntoriiecinico. En
la dispersión coloidal, aunque las partículas con ~iiutho ni& finas la hetriogeneidad no es tan clara, la dispersión, sin riiibarso no t.\ Romoc6nea. Por
otra parte, en una solución verdadera, los ronstitu)enteb n o piicdrn separarse por procedimientos mecánicos y cada parte d r la solución es idcntica
a otra; es decir, una solución \rr<latlria con\titii!c. iiiia f a x horriog&rira.
Conviene refrrirse a la susiancia qur sr disuel\? ~ o i i i oal ~ i d u t o), aqiiEIla en la que tirnc lugar la solución corrio al i u h ntc. En la solribilidad d c
sólidos en líquidos, cuando éstos sc encuentran r n gran exceso con r c l a r i h
a 10s primeros, no existi arrihigüc~iaclm i e\tris ti.iniirios, rs drrir, q I sólid<>
es el soluto ! el Iíqiiiclo rl solíente. Pero, citando tratariios con solubilidades
de h u i d o s , como aietona en a p a o dio\arir> cri agua, que se disurlxe entre
Sí en cualquier pioporiión, cs dificil difrrrriciar al soluto del solimte.
términos se usan cuando no hay ariibi&edad de sigriifira<lris.
Una solución que contiene a una t~~mi>eraiura
dada tanto suluto corno
Puede disolver se dice que es zaturada. Cualquier solriiión que tirni uria
Qntidad menor que aquella se drnoniina no saturada
ai <cmtii.iic una
Qntidad mayor sc llama lobreraturai/a Este últinio tipo de soliic~órirsirte
270 Capítulo 8: Solucion~s
iini<airiente en deficiencia de sol\cnte y es sumamente inestable, pues la
simple agitación de una diminuta cantidad de soluto basta sieiripre para
provocar la precipitación del exceso de éste. Para conocer cl estado de una
solución con respecto a la saturación basta agregar a aqu6fla un poco de
soluto, si &te se disuelve, la solución es no saturada: si no se disuelve más,
es saturada y si hay precipitación, la solución original estaba sobrrsaturada.
FACTORES QUE MODIFICAN LA SOLUBII.IDAD
La cantidad de una sustancia que se disuelve en otra depende de la
naturaleza del soluto y dcl solvente, de la temperatura y la presión. En
general, el efecto de la temperatura es muy pronunciado ? su dirección
depende del calor de solución. Si una sustancia se disuelve I i a ~ t ala saturación con de~prendimientade calor, la solubilidad disimiiiu>e con el aurnrnto de la teniperatura. Por otra parte, si una siistancja se disuelve con
absoríióri de calor, la srilubilidad se increriirnta cuando se elcva la teniperatura.
En general, los compuestos de caracter químico análoqo, son niás fácilmente solubles entre sí que los de carácter diferentr. Cuando entre dos
sustancias existe semejante química, la solución de arribos suarda un agrupamiento no iiiiiy distinto d r aquél de las sustancias pura$. !-ambas se
toleran entre sí en solución. Por otra parte, cuando la naturaleza química
de las dos sustancias es considerablemente diferente, no se toleran. y hay
poca teiidencia a la disolución. Entre estos dos casos extremos hay un
número coiiciderable de estados intcmedioí. lo cual euplira el amplio intervalo de solubilidad entrc si de las diversas slitancia5.
Estos puntos se ilustran con los fenómenos hallados en la soliibilidad
mutua de los líquidos. Cuando el alcohol y el agua, muy próximos químicamente, se mezclan, se disuelven entre sí en todas las proporciones, es
decir, no hay límite de saturación, y se dice que tales snstancias son misc i b h completamente. A diferencia de ellas, dos líquidos como el agua Y
el mercurio no se disuelven entre sí y son totalmente inmiscibles. EntE
ectos dos tipos límite, Iiay pares como el Etcr y el a,mia. que se disuelven
uno en otro en pequeña proporción. Así, el éter puro disuelve cierta cantidad de agua para formar una solución saturada de agua en éter, mientras que e1 agua disuelve una cantidad liniitada de éter dando una solurión saturada di. &ter e11 aqua. En consecuencia, con proporciones el~vadas
de uno u otro de estos líquidos se puede obtener una solución totalmente
miscible. Sin embargo, cuando se toman proporcion~sfuera de estos límites
de rat~iración, se forman dos capas, una constituida dc una solución de
pter cn apua. y otra de agua pn éter. Los pares líquidos de esta clase son
fiorcialmmtr mircib1r.r.
Tipos de soluciones 271
TIPOS DE SOLGCIONES
Aunque es posible preparar soluciones con muchos componentes, nuestra
atención se centrará en las binarias. es decir, aquéllas que contienen únicamente dos componentes. Como el solvente y soluto pueden ser tanto gases,
como líquidos o sólidos, el número de tipos posibles de soluciones binarias
que cabe esperar es nueve, y son:
1. Solución d e un gas en otro gas.
2. Solución de u n Iíquido en un gas.
3. Solución
4.Solución
5 . Solución
6. Solución
7. Solución
8. Solución
9. Solución
de
de
de
de
de
de
de
un
un
un
un
un
un
un
sólido en un gas.
gas en un sólido.
líquido en un sólido.
sólido en un sólido.
gas en un liquido.
sólido en un liquido.
liquido en otro Iíquido
De estos tipos, los tres últimos son los m i s comunes y familiares. Lo%demás exigen algún comentario.
Todos los gases son miscibles en todas las proporciones y dan soluciones
cuyas propiedades son casi aditivas si la presión total a que se hallan sometidos no es muy grande. Bajo estas últimas condicione? la presión total y
parcial está regida por la Ley de Dalton, y su volumen total por la ley de
Amagat. Ambos principios se han discutido ya.
La vaporización de un líquido y la sublimación de un sólido en una fase
gaseosa se pueden considerar como una solución de aquellas sustancias en
un gas. Estos procesos comprenden primero la conversión del liquido o 6lido en vapor, y la solución siguiente del vapor en gas. Puesto que las presiones de vaporización y sublimación de una sustancia son fijas a cierta
temperatura, las cantidades de Iíquido y sólido que vaporizan e11un volumen
dado de gas, estin limitadas por la cantidad necesaria para establecer las
Presiones de eqiiilibrio.
Los gases y los líquidos se disuelven en los sólidos para formar aparentemente soluciones homogéneas verdaderas. Así hay ejcmplos como la solubilidad del hidrógeno en el paladio y la del henceno Iíquido en iodo sólido.
solucione? son sólidas.
Cuando dos sólidos sc disuelven entre sí, las soiuciones formadas pueden
ser completa o parcialmente miscibles, según la naturaleza de las sustancias
Comprendidas y la temperatura. Así tenemos por ejemplo a los sulfatos dobles de potasio y amonio, de cobre y hierro, y los alumbres de potasio y
amonio. También Iiay muchos pares metálicos quc f o m a n soluciones sólid a ~ por
, ejemplo, el oro y platino; el oro y e1 paladio; la plata y el paladio,
1
272 Capítulo 8: Soluciones
y el cobre y el níquel. Como la formación de una solución sólida tendría
lugar de una forma muy lenta cuando los materiales se encuentran en esa
fase, es necesario recurrir a la cristalización, bien desde la solución en el
caso de las sales o a partir de materiales fundidos en el caso de metales, si
queremos obtener dichas soluciones sólidas.
La temperatura no ejerce influencia en la solubilidad, cuando las sustancias comprendidas en la formación de una solución sólida son totalmente
miscibles en estado sólido, en cambio, sí la ejerce cuando la miscibilidad
es parcial. Algunas sustancias son completamente miscibles cn estado sólido
a temperaturas elevadas y parcialmente a otras más bajas. También hay
otras posibilidades, pero se discutirin con mayor detalle en el capitulo de la
Regla de las Fases.
PROPIEDADES TERMODINAMICAS DE LAS SOLUCIONES
La energía libre total de una solución, F, viene dada por la ecuación (8)
del capítulo 3; esto es
P = Elni
+ E2n, + . . .
(1)
donde F,, F?, etc., son las energías libres molares parciales de los constitu)eiitrs de la solución y n,, n?, etc., son los números de moles de los diversos
coiistituyentes, presentes. .4nilogamente, la entropía y la entalpía total están
d a d ~ por
s las ielacioncs
C ' c i ~ i i uF
3
L
:
H
-
TS, se deduce en seguida desde las ecuaciones ( l ) , (2)
que
l vilido para los divenos constituyentes de una solución. De niievo,
e i ~ i i n rs
la5 ciiinciones ( 2 8 ) , (29) y (30) del capítulo 6 se aplican a los constituyentes
de l,i soliición. y así resulta para cada uno de ellos
Propiedades tennodinámicas de las soluciones 273
En estas ecuacioiies, n indica la constancia de la concentración de la
es decir, se mantivnen constantes n,, n,, etc.
Por medio de la ecuación (51) del capitulo 6, podemos escribir que la
energía libre molar parcial de cada constituyente de una solxión es igual a :
donde Ft es la energía libre molar parcial del constituyente i, en un estado
estándar conveniente, y a,: es su actividad en la solución a una concentraclln dada. El estado particular elegido como tipo es arbitrario. Al tratar
con soluciones de sustancias totalmente misrible~,es usual tomar como estado
tipo el de los componentes de la solución en estado puro. Bajo estas condiciones, Fy es idéntico a y: de la sustancia pura; es decir,
= F: , y de
aquí que los estados tipo son los mismos que los definidos en el capitulo 6.
De nuevo, si empleamos fracciones molares para expresar las conceiitraciones, ai puede relacionarse con N, mediante la ecuación:
donde -/',es un coeficiente de actividad que permite convertir Ni en a,. Sobre
esta base la eciiación (9) de E, se transforma en
Otro método usado irecuentemente para definir los estados tipo emplea
la definición anterior iíiiicamcnte para el solvente, es decir,
P,y
a, '.VI = y: = 1, cuando S:-+ 1 . Al mismo tiempo, para un soluto que no
se disocia, se tiene que:
e=
nz = .b-,y:
(12)
donde y: es el coeficiente de actividad del soluto y la definición se completa
diciendo quc
.4qui se toma como punto de referencia una solución cuyo so1i;to esta
diluido a infinito de solvente, y en este estado tenemos que a, = N? = O y
.tI = l. Por lo tanto, la concentración de la solución que tiene a, = N2y:
1 se cnn~ierteen el estado tipo para el soluto y, cn este estado, F2 = q.
Las definiciones de los estados tipo y referen, ia para solutos que se disocian
se discutirin en el capíriilo 11.
Ecuacioni.~aiiilogas a :121 y (13) sc iissn para relacionar o, con las
C0ncrmtr:iciones e.rpiesnu:~-ien otras iiriidades distintas a las fracciones mo-
-
274 Capítulo 8: Soluciones
lares. Así, si deseamos expresar C en moles por litro, tendremos:
Y
cuando C,
+O
(15)
Aquí f, es el coeficiente de actividad del soluto para la concentración C
en moles por litro. De nuevo, si deseamos usar la molalidad m y el coeficiente de actividad y2: entonces
I
y ?---
az
m-
- 1; cuando m,
4
O
(17)
En base a estas definiciones y'2 = f, = y , = 1 en soluciones diluidas a
infinito pero, para otras concentraciones, los diversos coeficientes de actividad en general tendrán valores diferentes para una solución de concentración dada.
EL PROCESO DE SOLUCIOX
Consideremos el proceso
en el cual se mezclan n, moles de sustancia pura A, con nz de A, también
pura y forman una solución binaria. El cambio de AG, en cualquier propiedad termodinámica extensiva de un sistema a una temperatura y presión
dadas es entonces
AC, = G
-
(n,Gy
+ noG:)
(19)
donde C es la propiedad de la solución, y Gi y G y o s valores de la propiedad
por mol para los dos constituyentes puros. De nuevo, como G está dada por
+
G = n , ~ , n,G,
entonces la inserción de la ecuación (20) en la ( 19) nos da
(20)
El proceso de solución 275
En estas ecuaciones AG, representa el cambio integral de alguna propiedad termodinámica
corno resultado de un proceso de mezcla, mientras
que AG, y AG, representan las variaciones en las cantidades molares parciales correspondientes a la propiedad involucrada.
L a ecuación (21) al aplicarse al cambio de energía libre que acompaña
al proceso de mezcla nos da:
.4nálogamente obtenemos para los cambios de calor, entropia y volumen de
mezcla
Además, a una temperatura T , la enerSia libre, entropia y calor de mezcla
están relacionadas entre si mediante la ecuación
La ecuación (24) se puede escribir de otra manera al tener en cuenta la
ecuación (9). En base a considerar a los constituyentes puros como estados
tipo, la ecuación (9) nos d a
F5 = F:
+ RT In a;
(29)
y de aquí tendremw, para los constituyentes de una 'solución binaria, que
Y
F- , - F: = RT In a,
F1 - Fo = RT ln a,
(30)
(31)
Al sustituir &as expresiones cn la ecuación (241, resulta que AF,
AF,,, = n,RT In a,
+ n,RT ln a?
(32)
En la siguiente sección se ver5 como mediante la ecuación ( 3 2 ) , es posible
hallar el valor de AF,.
CONDICION DE EQUILIBRIO ENTRE FASES
FIeirios visto, en la p:icina ? l 9 , quc la condición de equilibrio rntri las
fases de una sustancia pura, a temperatura y presión constantes, es que la
enercía libre molar de la sustancia sea igual en todas las fases.
La prczunta ahora sc formulará así: ;Ciiil es la condición de eqiiihbi.io
entre las fases cuando éstas no son puras, es decir, cuando hay soluciones?
Para contestar esta pregunta, consideremos un sistema compuesto de varias
fases, rada una de las ciiales contiene cierto número de componentes. La
energía libre total de cada fase cstari dada, en gyneral, por la ecuación (1)
de este capitulo.
276 Capítulo 8: Soluciones
Prestemos ahora atención a dos cualesquiera de las fases presentes, y supongamos que dn,, dnr, etc., moles de los divenos constituyentes se transfieran de una fase a otra, manteniendo constantes la T y P. La disminución
de energía libre de una de ellas será entonces
mientras que el incremento de energia libre en la s e p n d a será
El cambio neto de dicha energía debida a esa transferencia, dF, es
dF = dF' - dF =
(E- % ) d n ,
+ (F',- F,) dn2 + . . .
Sin embargo, cuando hay equilibrio entre las dos fases, tendremos
( d F j , , = 0, ó
-
-
(F', - F,) dn1
+ ( E- F:)
dn? + . .
=O
(33)
De nuevo, como la transferencia de cada constituyente de una fase a otra
puede hacerse independientemente, se sigue también que cada término de la
ecuación ( 3 3 ) debe ser cero, esto es:
Además, como dn,, dn, etc., no son cero, deben serlo los otros términos y
de aquí que: F', = F,; F', = F,, y así sucesivamente. Finalmente, como
el mismo argumento puede repetirse para un par de fasis cualquiera que
se elija, el resultado anterior es válido para todos, es decir, que para las
fases de un sistema en equilibrio resulta
o, en general
E , = P:
E? = F:
=
=
P:'
etc.
F;' etc.
F, = E:
= F:' etc.
La ecuación ( 3 5 ) establece que para el equilibrio a T y P constantes
en un sistema multicomponente con numerosas fases, la energía libre molar
parcial de cada constituyente debe ser igual en todas las fases. Si una de
ellas es una sustancia pura, las deducciones anteriores se aplican aún, excepto que ahora F ; para esta sustancia en la fase pura se hace igual a Foi.
EQUILIBRIO ENTRE UNA SOLUCION Y SU FASE D E VAPOR
Consideremos una solución que contiene componentes volátile\. Si se
coloca en un espacio evacuado, se producirá una fase de vapor que contiene los constitu)rntcs de :u solución. Las condiciones que deben rccir en el
Equilibrio entre una solución y su fase de vapor 277
sistema para que exista equilibrio entre la solución y la fase de vapor se
obtienen así.
L a energía libre molar del constituyente i en la fase de gas está dada
por la ecuación (54) del capitulo 6, esto es,
F ; c ~=I FgCplf RT ln / , W I
(36)
donde el subíndice g se refiere al gas. De nuevo la energia libre molar
parcial del mismo cr>nstiruyenteen solución está dada por la ecuación (29)
en este capítulo
Fi = Fg RT In a;
(37)
+
Para el equilibrio entre la solución y la fase gaseosa tendremos F i r O J = F i
En consecuencia, de las ecuaciones (36) y ( 3 7 ) resulta:
F<,,,
+ RT In j,(,>= FP + RT In a.
Como a una temperatura dada el lado derecho de la ecuación (38)
es constante la cantidad que abarca el logaritmo debe ser constante tambibn, y así resulta
-/ i=i gK~
ai
(39)
Para evaluar K, se utiliza el hecho de que, para un constituyente puro i, ai = l y f((,, = jo(#! donde este último valor representa la fugacidad
del vapor sobre el constituyente puro. Al colocar estas cantidades en la
ecuación (39) vemos que K = /giDI, y de aquí que la ecuación se convierte en
La ecuación (40) muestra que la actividad de un constituyente volátil
dc una solución está dada por la relación de la fugacidad del vapor del
constituyente en equilibrio con la solución dividida por la fugacidad del
vapor en equilibrio con el constituyente puro. De nuevo, fii,, = Piyiio,,
donde Pi es la presión de vapor de un constituyente dado sobre la solución y y i r o l es su coeficiente de actividad. Análogamente /:,, = PPuicgi,
donde Pg es la presión de vapor del constituyente puro y y¡,,, su roefifiente de actividad. Al colocar estas identidades en la ecuación (40) resulta
Finalmente, si los vapores se comportan como gases ideales, entonces
o
= 1, y la ecuación (41) es simplemente
Y i f o ~= Y%,,,
278 Capítulo 8: Soluciones
t .
Así a , se obtiene de las presiones de vapor del constituyente sobre la solución y cuando es puro.
La sustitución de la ecuación (41) en la (32) nos da para la energía
libre de mezcla de una solución binana
Cuando los gases se comportan idealmente, los valores de las y se hacen
la unidad, y la ecuación (43) se simplifica.
+
n,RT ln P
2
P,
1.;
A F , = n l K T 111,P1
Aquí, todas las cantidades son directamente medibles y por lo tanto AF,
se obtiene fácilmente a partir de los datos de la presión de vapor.
SOLUCIONES IDEALES
De igual f o m a que fue conveniente colocar un gas ideal como criterio
de conducta de un gas cualquiera, resulta aconsejable tambih, definir
una solución ideal en funrión de cuyas propiedades predecibles pueda evaluarse la conducta de las soluciones rrales.
Con este propósito definiremos una solución ideal como aquélla en
que la actiuidad de cada constituyente es igual a su fracción molar bajo
todas las condiciones de t<mperatura, presión y concentración; es decir,
a, = N , , a, = N,, etc. Sobre esta base, la ecuación (32) para una solución binaria ideal nos d a
AF,
=
n , R T ln N, f n , R T lri N ,
(45)
Como el miembro derecho de la ecuación (43) es independiente de la
presión, obtendremos por diferenciación de AF, con respecto a la presión
a temperatura constante
Este multado significa que en la mezcla de dos constituyentes para
formar una solución ideal no hay cambio de volumen asociado al proceso,
y de aquí que los volúmenes molares parciales de los constitu)entes de la
solución son idknticos con los volúmenes molares de los constituyentes
puros. De nuevo, si dividimos la ecuarión (45) por T y diferenciamos
A F m / T respecto a T a P constante, obtendremos
AH,
=O
Soluciones ideales 279
En consecuencia una solución ideal se forma sin desprendimiento o absorción de calor. Al colocar
ecuación (47) en (28) nos muestra que en
una solución ideal AF, = -T AS,, y de aqui que teniendo en cuenta la
ecuación (45) resulta
9
La ecuación (48) predice que para una solución ideal AS, es una
función de la concentración y cantidad de los constituyentes presentes. A
su vez, la ecuación (45) enseña que AF, es una función de estas variables
así como la temperatura. Además ninguna ecuación contiene factores específicos de la naturaleza de la sustancia comprendida. En este sentido,
estas ecuaciones son análogas a la ley de los gases ideales, que predicen
la conducta del gas de manera independiente de las características especificas, naturaleza o estructura de las moléculas del gas.
Las figuras 8-1 y 8-2 muestran una comparación entre las predicciones
de las soluciones ideales y la conducta real observada para AF,, AH, y
T A S , de las soluciones binarias de líquidos. Los cálculos dados son por
rnol de solución, es decir n, = Ni y n, = N , Además, los datos de la
presión de Lapor se han corregido para condiciones de no idealidad de
CCI,
N>
C6H12
Figura 8-1. Energía libre. c . h r y entropia de mezcla del sistema tetracloruro de
<drbr>no-ciclohexunoa 40°C. [Basadas en los cálculos de Maro", Wvng y N a k a j i i
1. Polpnier Sci., 46, 33'3 (1960) 1
280 Capítulo 8: Soluciones
gases. La inspección de la figura 8-1 muestra que el sistema tetracloruro
d e carbono-ciclohexano se aproxima muy estrechamente a una solución
ideal. Sin embargo no sucede lo mismo con el sistema acetona-cloroformo,
donde todas las propiedades termodinámicas de la solución prrsentan grandes diferencias de la idealidad.
I
ketona
N,
Cloroformo
Figura 8-2. Energía libre, calor y entropia de mezcla del sistema acetona-cloroformo a 25'C. [Se$"
cálculos de Maron, V a n g y Nakajirna, J . Polyrner Sci., 46,
353 (1960).]
Una simple descripción de la conducta de las soluiiones, se obtiene por
un examen de las presiones de vapor, más que a partir de las propiedades
de mezcla. Por esta razón debemos considerar de nue\o las presiones de
vapor de las soluciones ideales y reales.
PRFSION DE VAPOR DE UNA SOLUCION IDEAL
Supongamos que dos liquidas, A , y A: son \olátiies Y completamente
niiscibles, y supansamos atlcntás que los dos líquidos se disuelven entre sí
Presión de vapor de una solución ideal 281
para formar soluciones ideales. En este caso al = Xi y a, = N,. Al colocar estas identidades en la ecuación (42) resulta
p1 = N ~ P H
Pt = N9P2
(49)
(50)
Y
Las ecuaciones (49) y (50) son expresiones de la Ley de Raoult, que establece que la presión de vaflor parcial del constituyente volátil de una soluclón es igual a la presión del vapor del constituyente puro multiplicada por
la fracción molar de tal constituyente en la solución. De estas ecuaciones la
p s i ó n total de vapor P sobre tal solución cs
P
Y como N, = 1
-
=
=
+
Pl P2
P:Ni
P?Nn
+
N? la ecuación (51) nos da
y Po, xm constantes, y una
Para cualquier sistema y temperatura dados
gráfica de P contra N z deberá ser una linpa incta ,.m P == P" a S' =: O
y P = c a Nz=l.
Tal gráfica, dada por la línea coiitinua de la fipi,.a 8-3, muestra que
las presiones totales de las soluciones ideaics quedan sobre una línea recta
y Pi. A su vez, las líneas de trazos nos dan las gráficas de las
que une
ecuaciones (49) y (50) de las presiones parciales de los componentes individuales de la solución.
y
A,
F i p r i SS. Presiones
N1
A,
d e vapor total y parci.4 de las soluciones ideales
282 Capitulo 8: Soluciones
-,
.:
Estas varían linealmente desde P, = P; y P.,= O a "J, = O hasta
P, = O y P, = P: a S, = 1. En todas las concentraciones intennedias la
presión total es la suma de las presiones parciales. Así, a N , = x, P, es
igual a la distancia de b,x, P, = b2x, y P = b~
bnx = bx.
Las relaciones anteriores exigen que se cumpla la Ley de liaoult para
las presiones totales y parciales como una función de las fracciones molares
d e los constituyentes in soluciún. Para obtener una relación entre la composición de una solución y la composición del vapor sobre el mismo, designamos a YIcomo la fracción molar de A. en r l capor sobre una solución
de composición ,V?. Entonceq de acuerdo con la Ley de Dalton de las presiones
P,
Y , =(53)
P
+
Pero P 2 = PIh',, mientras que P está dada por la ecuación (52). En consecuencia :
Esta ecuación muestra que hay una composición definida del vapor
que corresponde a cada composición de la solución y que Y ? y N, no son
isuales salvo cuando P; = P:.
Con a p d a de la ecuación (54) se puede construir una curva de presiones de vapor-composición del vapor para soluciones que siguen la ley
de Raoult que muestran la composición del vapor correspondiente a una
composición particular de la solución. Una curva tal, calculada a una temperatura constante para P: = 147 mm y PZ = 396 mm de Hg se muestra en la f i p r a 8-4.La línea recta nos da la presión total de i,apor sobre
Fipura 8-4. C u n a s de ~orriposición del líquido y vapor, de una
soiución ideal.
Presión de vapor de los pares liquidos reales 283
como una función de la fracción molar A'>, mientras que la
la
,,.a
que queda debajo de aquella recta representa la presión del vapor
total corno un función de la fracción niolar de A , en el vapor, Y>.Para
.),tener
la composición del vapor correspondiente por ejemplo a una so],&n para la cual S2= 0.2, nos movernos verticalmente hasta el punto C para obtener la presión de vapor total de la solución. Esta misma
p s i ó n se establece también en la curva de composición de vapor por el
punto D, que corresponde a la composición Y. = 0.402, y de aquí que
,,ara los liquidos en cuestión cuando ,\", = 0.2, Y ? = 0.402. Análogamente,
cuando X: = 0.6, Y', = 0.803. Se observará que el vapor es siempre más
rico en A? que la solución, es decir: el vapor es más rico en el cornponente más volátil.
PRESION DE VAPOR DE LOS PARES LIQUIDOS REALES
Unos pocos sistemas líquidos miscibles binarios obedecen la ley de
Raoult en todo el intervalo de concentraciones. U n o de ellos, el par dibromo etileno-dibromo propileno a 85.0j°C, se muestra en la figura 8-3. Otros
ejemplos los constituyrn los pares benceno-dicloro etileno, el tetraclo-
Figura 8-5.
Prcsioms dc
vapor
del ri~trma dibromo etileiio-dibromo propileno
a 85.05'C.
284 Capítulo 8: Soluciones
ruro de carbono-cloruro estánnico y el cloro benceno-bromo bcnceno. La
mayoría de los sistemas sin embargo, se desvían de la ley de Raoult en
mayor o menor grado, dependiendo de la naturaleza de los líquidos y la tem.
peratura.
El carácter de las desviaciones de la ley de Raoult puede juzgarse en
las figuras 8-6, 8-7 y 8-8, que muestran las presiones totales y parciales de
algunos sistemas en su dependencia con la fracción molar. Con el par
tetraclnruro de carbono-ciclohexano, que se muestra en la figura 8-6,
la presión total así como las parciales presentan desviaciones positivas de
Ciclohexano
Fracción molar
1I
Tetracloruro
de carbono
Figura 8-6. Presiones de vapor del sistcrna ciclohexano-tetradoruro de carbono
a 40°C. [Según Scatchard, Wood y Mochelr, 1. A m . Chem. Soc., 61, 3208 (1939),1
la ley de Ranult pero la presión total es siempre intermedia entre las de
vapor de los dos componentes puros. Análogamente con el sistema disulfum
de carbono-aldehído metilico, figura 8-7, las desviaciones de la ley de Raoult
son positivas, pero 1 a riirvas
~
de pre~iónd~ vapor total tienden a un máximo
que está por encima de la presión de vapor de cada constituyente. Po'
otra parte, el par cloroformo-acetona, figura 8-8, exhibe desviaciones negativas de la lev de Raoult que conducen a un mínimo en la presión de
\apor total del sistema, es decir, las presiones de vapor de ciertas concentraciones de la solución se hallan por debajo de las de cualquiera de los
constituyentes puros.
Presión de vapor de los pares líquidos reales 285
Figura 8-7.
Presiones de vapor del sistema metilal-disulfuro de carbono
Acetona
Fracción molar
Cioi
m a
a 55.1'C.
Figura &l. presiones de vapor del ~ i ~ t ~acetonv-cloroformo
286 Capítulo 8: Soluciones
Las curvas de presión dadas en las figuras 8-6, 8-7 y 8-8 son típicas
de la conducta de la presión d e vapor de los pares líquidos volátiles. En
base a estos diagramas, todos los pares líquidos miscibles se clasifican en
tres tipos yenerales que son:
TIPO1. Siste~nascuya presión total de vapor es intermedio entre aquellos de los componentes puros. Ejemplo: tetracloruro de carbono-ciclohesano, tetracloruro de carbono-henceno, benceno-toliieno. agua-alcohol
metílico.
TIPO11. Sistemas que exhiben un múximo en la curva de presión
total d r ~ a p o r Ejrrriplo:
.
Disulfuro de carbono-aJdchído iiietílico, disulfuio
de carhono-acetona, benceno-ciclohcxano, benceno-alcohol etílico: cloroformo-alcohol etílico. y agua y alcohol etilico o n-propílicri.
TIPO111. Sistemas que exhiben un minimo en la curva de presión
de l a p o r total. Ejeiriplo: Cloroformo-acetona, étir n~etílico-clorurode hid r ó ~ c n o ,piridina-ácido acético, y agua y ácido fórmico; nítrico, clorhídrico
o bromhidrico.
Las curvas de presión de va1)or-coiiif>osición del liquido dc estos diversos tipos, junto con las correspondientes de presión de vapor-composición de uapor se ilustran en la fisura 8-9. Todas estas c u n a s corresponden a una temperatura constante.
1
1
1
1
1
1
1
1
1
lb lb'
1
1
1
I
1
1
1
1
I
Figura 8-9. Tipos d r diagr.imas
I
lc' Ic
Fracción molar
Tipo 1
,
1
Tipo II
biriarios de
constantei
B
A
Fracción molar
Tipo III
presión d e vapor (temperatura
Se observará que en todos los tipos las c u n a s de composición de vapor
quedan debajo de las de composición d e liquido, y que eri los tipo5 11 Y
111 las dos curvas se tocan en los punto? de presión de vapor riiáximo Y
mininio respectivaniente. En ellos por esta razón, las composiciones de la
solución y vapor son idtnticas, y los diagraiiias de los tipos 11 y 111 pueden
considerarsc como cnn~p~icstos
clc dos c u n a s del tipo 1, una para A puro
y una \oliz<ión < m i tina presión iiiixinia o rninima de ""Por C o D, y la
Diagramar de puntos de ebullición de inezclas binarias miscibles 287
otra de una solución de una presión máxima o mínima de vapor C o D
y componente puro B. L a posición de las curvas de composición de lapor
respecto a las del liquido se deduce del hecho de que a partir de una
constituida por dos sustancia? volátiles r n solución. aqui.l!a que
posea una presión de vapor más alta se volatili7ará más qiie aquélla de
presión de vapor baja, dando una composición de vapor más iica en el
constituyente más volátil que la solución.
.4si, en el par liquido del tipo 1 que se muestra en la figura 8-9: B es
más volitil que A, y en consecuencia el vapor sobre todas las concentraciones de la solución debe ser más rico en B que lo es la solución. De aquí,
la composición de vapor que corresponde al punto a en el diagrama debe
quedar más próximo a B que el punto a, y esto es posible sólo si la c i m a
de composición de vapor está debajo de la cun-a de composición dcl líquido. Como el diagrama muestra, la composición del vapor que corresponde a a es a', una mezcla considerablemente más rica en B que lo es a.
Por la misma razón todas las mezclas comprendidas entre A y C en el
tipo 11 deben tener vapores más ricos en B que la solución, mientias que
todas las mezclas entre C y B deben scr más ricas en A, que la solución.
Estas condiciones se satisfacen, en el diagrama dibujado pues el punto b'
de composición de vapor que corresponde a un punto como el b es más
rico en B, mientras que la composición que corresponde a c es c', roás
rica en A.
De manera análoga, las composiciones de vapor en el tipo 111 deben
ser más ricas en A que las soluciones entre A y D y más ricas en B entre
D y B. Estas condiciones se satisfacen dc nuevo por el diagrama dibujado
como puede verificarse por los dos puntos indicados, d con una composición de vapor d' y e con una e'.
Como a una temperatura dada el vapor sobre una solución es mis
rico en el componente más volátil que la solución, ésta se despla~a en
composición hacia el constituyente menos volátil, eliminando su vapor. Si
condensamos los vapores y removemos los nuevos vapores fonnados sobre
el condensado, los nuevos vapores serán mucho más ricos en el constitu)ente más Lolátil que las soluciones de las cuales procede. .il rcprtir este
Proc~soes posible obtener una concentración del constituyente más volátil
'n 1.1 vapor y una concentración del constituyente menos volátil en la soluc ión. Este proceso de concentrar los constituyentes se conoce c mo dectilación fraccionada; y como el proceso descrito se verifica a temperatura
constante, puede desiparsc como una destilación fraccionada isotérmica.
En la prictica es más conveniente llevar a cabo una destilación a presi6n constante qiie a temperatura constante. A una presión de confina-
Y
288 Capítulo 8: Soluciones
,
rnicnto dada una solución de composición definida hervirá a una temperatura a la cual su presión de vapor total es la misma que la presión de
confinamiento. Si designamos por P a esta última presión, la condición
PB. Así a una presión atmosfépara ebullición se escribirá así P = PA
rica una solución henrirá a la temperatura en que la presión total de
vapor se hace igual a 760 mm de mercurio. Como distintas composiciones
de una solución tienen presiones de vapor diferentes, se sigue que distintas
soluciones no alcanzarán una presión de vapor total equivalente a la de
confinamiento a la misma temperatura y por lo tanto, hervirán a temperaturas distintas. En general, las soluciones de presión baja de vapor hervirán a temperaturas mayores que aquéllas cuya presión de vapor es alta.
Este último hecho permite la construcción de varios tipos de diagrama
de composición-temperatura que corresponden a tres tipos generales de
diagrama de composición-presión-vapor ya discutidos. Estos se muestran
en la figura 8-10. En el tipo 1 la presión de vapor de A es la mínima del
sistema y la de B es la máxima, mientras que la presión de vapor de
todas las composiciones posibles entre A y B son intermedias entre las dos.
En consecuencia a presión constante el punto de ebullición de A será el
máximo del sistema y el de B el mínimo, mientras que todos los debidos
a distintas composiciones de A y B serán intermedios y estarán dados por
la curva de composición del liquido en la figura. Como el vapor que se
libera de un3 composición particular de la solución dcbe ser más rico en
el constituyente más volátil B, la composición de vapor a una temperatura
dada estará más próxima a B que la composición del líquido correspondiente, y de aquí que la curva de composición de vapor debe quedar ahora
sobre la curva de composición de liquido, como se mostró. Las mismas
consideraciones se aplican a los otros dos tipos. En el tipo 11 la presión
de vapor del sistema es un máximo para la c~miposiciónC, y de aquí tal
solución hervirá a la temperatura mínima, que conduce a un mínimo en
la c u n a de puntos de ebullición. De nuevo como en el tipo 111 la solución
de composición D presenta la presión mínima del vapor del sistema, hervirá
a la máxima trmperatura, y en conseciiencia la curva de puntos de ebullición presenta un máximo. En todos los casos las curvas de composición
de n p o r quedan por arriba de las de composición de líquido por las
razones dadas. Por esa razón vemos, que en un sistema cualquiera cuyas
presiones de vapor son intermedias entre aquéllas de los constituyentes
puros tendrán u n diagrama de destilación con puntos de cbullición intermedios tales como el tipo 1. Po; otra parte, un sistema del tipo de presión
de vapor máxima dará un diagrama d e destilación con un punto de ebullición mínimo mientras que cualquier sistema del tipo de presión de vapor
mínimo dará un diagrama de destilación con un máximo en la curva de
puntos de ebullición.
Las concentraciones de los puntos C y D cn los d i a c r a m ~de ~ r e s i ó n
+
Destilación de las soluciones binarias miscibles 289
.
de vapor y temperatura no son generalmente idénticos. Con el cambio de
,,,l~peratura hay una tendencia para las composiciones correspondientes
los máximos o mínimos de la presión de vapor a correrse hacia A o B,
dependiendo del sistema en cuestión.
T = constante
A
-
P = constante
Fracción molar B
A Fracción molar
B
Tipo I
T = constante
P = constante
A F;acción molar B
A Fraccian molar B
Tipo II
T = constante
m
P
+a
D
A
Q
,o
TM
P = constante
m
A Fracción molar B
Fracción molar B
Tipo I I I
h u r a 8-10.
Tipos de diagramas de destilación que corresponden a diversos dia-
grnrnas dc presiones de vapor
A causa de las diferencias en los diagramas de destilación de los tres
tipos clr soluciones, diferirá la conducta de &as a presión constante de
destilación. Consideremos prirncro un sistema del tipo 1 (figura 8-11). Si
alentamos una solución de co~Tlp<>siciln
a, la ebul:ición no canlienza hasta
3%l Capítulo 8: Soluciones
que se alcanza la temperatura T,. Entonces el vapor que se desprende de
a tendrá la composición d. Como esta última es la más rica en B que la
primera, la composición del residuo deberá ser más rico en A, por ejemplo b. La nueva composición del residuo b no hierve hasta que se alcanza
la temperatura Ta,que es más elevada que Te. A su vez el vapor que se
desprende de b tendrá la composición b: de nuevo más rica en B, y en
consecuencia la composición del residuo será de nuevo más rico en A, y la
temperatura ascenderá antes de que el residuo hierva otra vez. Vemos por
tanto, que si el proceso descrito continúa, el punto de ebullición de la
solución aumenta desde el punto de ebullición T , hacia el punto T , de
A pro.
Al mismo tiempo la composición del residuo se hace más rico en A que
la solución original, y si el proceso se prolonga suficiente tiempo, se obtiene
un residuo final de A puro.
Consideremos ahora, qué puede hacerse con los vapores. Si los obtenidos inicialmente de la solución, esto es a', se condensan y destilan de nuevo, el punto de ebullición de la nueva solución será Tra,y la composición
del destilado será al'.Este es otra vez más rico en A que el original. Si el
proceso de condensación y redestilación continúa, se obtiene eventualmente
un vapor compuesto esencialmente de B puro. Por esa razón, por destilación de una mezcla del tipo 1 es posible separar los constituyentes en un
residuo del constituyente menos volátil A y un destilado del componente
más volátil B. Es decir, los dos constituyentes que fornzan u n a solución del
tipo I pueden separarse por destilación fraccionada e n sus cornponenter
puros.
Tal separación es imposible, sin cmbar~qo,ron solurionrs drl tipo 11 o
111. Consideremos la destilación de una solución del ti110 11, fisura 8-12,
1
Destilación de las soluciones binarias miscibles 291
de la cual el sistema ( A ) agua-(E) alcohol etílico es un ejemplo destacado.
Si destilamos una solución de composición comprendida entre A y C, tal
como a, el vapor que se desprende tendrá la composición a' y será más
rica en B que el residuo. Por este motivo la composición del residuo se
desplaza hacia A, y tenderá a hervir a una temperatura más elevada que
la solución original a. Si continúa la destilación, argumentos análogos a
los usados con las soluciones del tipo 1 indican que se obtiene un residuo
de. A puro, por ebullición a la temperatura TA. Por otra parte, si los vapores de la solución original a: se condensan y redestilan repetidamente,
se obtiene un vapor de composición C. Tal vapor cuando se condensa y
Figura 8-12. Comportamiento de
la destilación de las soluciones del
tipo 11.
destila, produce otra vez vapor de esa composición C; es decir, los vapores
guc proceden de la solución tendrán igual composición que la misma, y
de aqui en adelante no hay posterior separación posible por destilación.
En consecuencia, u n a mercIa que tiene u n a composición entre A y C se
Pueden separar por destilación fraccionada solamente e n u n residuo de
A puro y u n deitilado final de composición C. No se puede recuperar
B puro.
Por otra parte, si se destila una solución de composición entre C y B,
Por ejemplo, b, el vapor que se desprende b', será más rico en A que la
Solución original, y de aqui por destilación repetida el residuo tenderá hacia 8 puro, mientras que el destilado tenderá hacia C . Tales soluciones
Por destilación total nos darán B puro en el residuo y una mezcla de punto
ebullición constante C en el destilado. No se puede recuperar A por
destilación.
El comportamiento de las soluciones del tipo 111 por destilación será
análogo a las de tipo 11, con la excepción de que el residuo tiende hacia
la mezcla de punto m á x i m o de ebullición, mientras que lor destilados ticndm a íos con~tituyentesPuros (fig. 8-13).
1
292 Capitulo 8: Soluciones
Si la mezcla de partida tiene una composición entre A y D, por ejemplo a, el vapor obtenido por destilación a', será más rico en A que la solución. De aquí, que la composición del residuo tiende hacia D y alcanzará
el punto eventualmente. Una redestilación del vapor, nos dará finalmente
un destilado de A puro. Una mezcla entre D y B, como b, nos dará por
destilación un vapor de composición b: más rico en B que la solución. Aquí
de nuevo el residuo se desplaza hacia D, mientras que la redestilación de
10s vapores tenderá hacia B. puro.
En consecuencia, una destilación completa de una mezcla tal como b
dará un residuo de composición D y un destilado de B puro.
P = constante
Comportamiento de
la destilación de las soluciones del
tipo 111.
Figura 8-13.
I
A
1
Fracción molar
1
B
Vemos por esa razón, que cualquier sistema binario de este tipo puede
separarse por destilación fracciona1 completa en su residuo de composición D, la mezcla de máximo punto de ebullición constante, y un destilado bien sea de A o B puro, dependiendo de la composición de partida si
se encuentra entre A y D o entre D y B. Pero una mezcla de composición
D no es separable por ulterior destilación.
AZEOTROPOS
Las mezclas de punto de ebullición constante descritas con anteriondad se llaman azeótropos. La composición de éstos es marcadameute constante para una presión de confinamiento dada.
Sin embargo, cuando la presión total cambia, varían también el punto
de ebullición y la composición del azeotropo, como puedc verse en la
tabla 8-1. En consecuencia estas mezclas no son compuestos definidos,
cuya composición debe permanecer constante en un amplio intervalo de
presiones y temperaturas, sino qric son niczclas quc rcsdtan dc la iiiteracción de las fuerzas intennoleculares de la solucibn.
La c o l u m n a de fraccionamiento
293
T ABLA 8-1. Efecto de la presión en la composición
del azeótropo en el sistema H,O-HCI
Presión
(mm de Hg)
% en peso del HCI en una mezcla de
punto de ebullición constante
L a tabla 8-2 presenta los puntos d e ebullición y composiciones d e algunos azeótropos, todos a u n a presión total d e 760 m m . d e mercurio.
T ABLA 8-2.
Tipo
Punta
mínimo de
ebullición
Ponto
niánimo de
ebullición
Puntas de ebullición y composiciones de las mezclas areotrópicas
( P = 760 mm de Hg)
A
B
Asua
Alcohol etilico
Awa
Alcohal propilico-n
Alcohol etilico
Benceno
Benceno
Acido acético
Disulfuro de carbono Acetato de etilo
Asa
Piridina
Agua
Asua
Asua
Asua
Agua
Awa
Clorofumo
Piridina
Punto de
ebullición
("c)
% en peso
78.15
88.10
67.8
80.05
46.10
92.60
95.57
71.80
67.60
98.00
de B, cn
el azeótropo
3.00
43.00
Acido nítrico
Acido clorhidr¡co
Acido bromidrico
Acido yodhidrico
Acido fluorhidrico
Arido fórmico
Acetona
Acido fómico
LA COLUMNA DE F R A C C I ONAMIENTO
E1 tipo d e destilación descrito hasta aquí, e n el cual el v a p o r q u e se
elimina está en equilibrio con l a m a s a total del liquido q u e hien-c, se
denomina destilación en equilibrio. E l proceso d e separar mezclas p o r destilación resultaría e x t r e r n a d a m n t e corriplicado y tedioso d e realizarse p o r
294 Capitulo 8: Soluciones
repetidas destilaciones y condensaciones de una manera discontinua. En su
lugar esta separación se efectúa continuamente y se conoce como destilación fraccionada, empleando aparatos de destilación conocidos como columnas de fraccionamiento, figura 8-14.
Una columna de fraccionamiento consta esencialmente de tres partes:
de un alambique calentador A ; de una columna D, compuesta de una serie
de platos cuya construcción se muestra en la figura; y un condensador F.
La mezcla precaliente a destilar, se admite por E a uno de estos platos y
fluye por 2 al plato inferior.
Figura 8-14. Diagrama esquemático de la columna de fraccionamiento.
calefactor
Sobre éste, el líquido entra en contacto con el vapor que se desplaza
hacia arriba del alambique a través de las "cápsulas de paso de burbujas"
(bubble caps) 3' y 4'. Se denominan así porque cl \.apor debe burbujear
a través de la capa del Iíquido de cada plato antes de su escape. Al hacerlo
se condensa parte del contituyente menos volátil, y parte del más volátil
se vaporiza del líquido. El vapor que asciende a los siguientes platos PO'
3 y 4 a más rico en el constituyente más volátil que el vapor del plato
inferior mientras que el liquido que rebasa al plato inferior más próximo
por 1' es más rico en el constituyente menos volátil que el líquido que
alcanzó el lato de arriba. El resultado neto de estas interacciones es por
tanto, una redistribución en favor del constituyente más volátil en el vapor
y del menos volátil en el liquido, es decir que esenciahente cada plato
actúa como un niinúsculo alambique.
Relación del destilado a residuo 295
Como este proceso se repite en cada plato, es posible, con suficiente
.;,mero de ellos, separar la mezcla en dos fracciones finales, una del re,;duo menos volátil que se desplaza hacia el alambique A, de doiide se
,mae y un vapor que para de la parte superior de la columna que contiene esencialmente el constituyente más volátil. Este vapor alimenta un
F donde se licúa. Parte de este liquido se extrae por H y parte
~ u ~ l av ecircular por reflujo a la columna a través de G a fin de mantener
la provisión del destilado esencialmente puro en los platos superiores.
RELACION DEL DESTILADO A RESIDUO
En diversos chlculos se precisa conocer la relación entre el peso del destilado y el del residuo en cada etapa de una destilación en equilibrio. Para
una mezcla binaria esta información se obtiene fácilmente del diagrama de
destilación.
Consideremos el diagrama dado en la figura 8-15. La abxisa se expresa ahora en porcentaje de peso en vez de fracción molar.
Figura E L 1 5 Relación de destilado a residuo en la destilación.
Si comenzamos con una mezcla cuyo peso por ciento es x, el sistema será
totalmente liquido hasta alcanzar la temperatura Ti.
Entonces la solución
'Omienza a hervir, y como el liquido se hace menos concentrado en B,
el punto de ebullición asciende gradualmente' conforme procede la destilación. A una temperatura T,, si no eliminamos el vapor del sistema, este
ílltimo tendrá todavía igual composición g-lobal que la mezcla del comienO
'
X , pero ahora estará constituido por liquido de composición xl y vapor
de composición x2. Bajo talrs condiciones el peso del liquido presente,
I
296 Capítulo 8: Soluciones
W,, es proporcional a la distancia lineal 66, mientras que el peso de vapor
presente, W,, lo es a la distancia ab; es decir:
El argumento que conduce a la ecuación ( 5 5 ) es el siguiente: Si designamos por W el peso total de la mezcla de composición x, entonces
De nuevo, el balance de material del constituyente B nos d a
g de aquí obtenemos por sustitución para W
Pero (x, - x ) = b c ; ( S - S,) = ab. Por lo tanto, la ecuación ( 5 5 ) se
deduce inmediatamente. Esta relación entre pesos y distancias es perfectamente general y se aplica en todas las temperaturas a cualquier porción
del diagrama. Debe recordarse sin embargo, cuando la abscisa no es porcentaje en peso sino fracción molar, la relación de las distancias representa
las de los números de moles de liquido y vapor más bien que sus pesos.
SOLUBILIDAD DE PARES
LIQUIDOS PARCIALMENTE MISCIBLES
Temperatura máxima característica de solución. Cuando una pequeña cantidad de anilina se agrega al agua a la temperatura ambiente y se
agita la mezcla se disuelve aquélla, formando una sola fase. Sin embargo,
cuando se adicionan cantidades nialores de anilina se producen dos capas
de liquido. Una de ellas, la inferior, consiste de una pequeña cantidad de
agua disuelta en la anilina, mientras que la superior está constituida de
una pequeiia cantidad de anilina disuelta en agua. Si agregamos de nuevo
anilina al sistema, la capa rica en agua disminuye en tamaño y finalmente
desaparece dejando sólo una fase líquida compuesta de agua en anilina.
Si este experimento se hace a temperatura constante, se encuentra que las
composiciones de las dos rapas, aunque diferentes entre si, permanecen
constantes cn tanto las dos fases se hallen presentes. La .idición de pequeñas cantidades tanto de anilina o ag-us cambia siinplcm~ntelos volúmenes
Solubilidad de pares líquidos parcialmente miscibles 297
de las dos capas, no su composición. 4 medida que se eleva la
temperatura, se cncuentra que esta conducta persiste excepto que incrementa la solubilidad mutua de los dos liquidos. A 168" C, la coinposición
de las dos capas se hace idéntica, y de aquí que los dos líquidos son completamente miscibles. E n otras palabras, a 16ai C., o por encima de esta
temperatura, la anilina y el agua se disuelven entre sí en todas las proporciones y dan, al mezclarse, una sola capa líquida.
Esta variación de la solubilidad mutua del a p a y anilina con la temperatura se ilustra en la figura 8-16. .4 100' C. el punto A representa la
composición de la capa rica en ayoa y el punto A , la composición de la
0
ina
Figura 8-16.
Solubilidad
mutua
del agua y anilina a diversas temperaturas
capa rica en anilina en equilibrio con A. Entre estos puntos todas las niezd a s dan capas de composiciones A y A , . Fuera de tstas, los dos líquidos
son mutuamente solubles a 100°C; es dccir, todas las composiciones entrc el
agua pura y A dan una solución de anilina en agua, y aquéllas comprendidas
entre A , y anilina pura, dan una solución de ag-ua en anilina. Como iguales
arsmentos son válidos a otras temperaturas, se deduce que el área en forma
cúpula representa el dominio dc eui3tcncia de las dos fases líquidas, el
k a exlerna el dc una sola capa liquida. La temperatura que correq>onde
al punto B, es decir, aquélla en que la solubilidad es total, se denomina
ten~perntul-acrítica d e solución o bicn, tcmpcratura de consoluto.
Teniperatura míninla caracteristica de solución. La figura 8 - l i nuestra
el rfecto d c la tempesatum rn la solubilidad mutua dc la trictilarriina y ei
1
298 Capítulo 8: Soluciones
agua. Los dos líquidos son completamente miscibles a 18.5"C, o una temperatuia menor. Así a 30°C, por ejemplo, una solución del 5.6 por ciento
de trietilamina en agua está en equilibrio con una que contiene el 4% de
agua en trietilamina. La temperatura en la cual los dos líquidos son comple-
l.
Agua
Figura 8-17.
Fracción en peso
Trietilamina
Solubilidad de la trietilamina cn agua a varias temperaturas
tamente miscibles se denomina la mínima crítica de solución, puesto que
la c u n a que confina el área de miscibilidad parcial e.xhibe un minimo.
Temperatura máxima o mínima característica de solución. El sistema
nicotina-agua prescnta dos temperaturas criticas de solución, una superior
y otra inferior, como se ve en la figura 8-18. Dentro del área encerrada
los líquidos son sólo paicialinente rniscibles, mientras que fuera de ella
10 son completamente.
El punto C que es la tempeiatura máxima de solución se encuentra a
208"C, mientras que la minima. punto C', está a 60.8'C. Las composiciones
correspondientes a C y C' son iguales: 34 por ciento de nicotina. En el punto A que se encuentra entre 'N0 y 95OC, la solubilidad de la nicotina en
agua es mínima como lo es la del a s a en nicotina entre 129' y 130°C,
punto B. Se ha encontrado que al aplicar una presión externa al sistema
!as dos temperaturas critiras dc que hemos hablado se aproximan entre sí,
hasta que finalmente sc alcanza tina
para la cual 10s dos líquidos
SI: hacen miscibles complctamentc.
Solubilidad de pares líquidos parcialmente miscibles 299
Tipo sin temperatura crítica de solución. Una variación final de estos
tipos la presenta el sistema &ter etilico-agua, que no posee una temperatura superior o inferior critica de solución. Los dos líquidos son por esa razón
1
Agua
Figura 8-18.
Fracción en peso
Nii ina
Solubilidad de la nicotina en agua a diversas temperaturas.
parcialmente solubles entre si a todas las temperaturas en las cuales existe
la solución.
Siempre es posible deducir de los diigramas d e solubilidad como 10s
dados en las figuras 8-16, 8-17 y 8-18 las proporciones en peso de las dos
capas presentes en cl equilibrio a diversas temperaturas. Consideremos esPecíficamente un sistema compuesto de 60 g de trictilamina y 40 g de
agua presente en equilibrio a 20°C. Como el porcentaje de amina en
Peso es de 60 por ciento, la composición global está representada en la figura 8-17 por el punto a. Pero el sistema está constituido de soluciones de
coriiposición b y c, p por lo tanto según el método usado con anterioridad
Peso capa de amina
Peso capa de agua
-
distancia ca
distancia a b
60
- 13.5
73 - 60
= 3.42
'
300 Capítulo 8: Soluciones
. .-
>,
DIAGRAMAS D E PRESION D E VAPOR Y DESTILACION
DE PARES LIQUIDOS PARCIALMENTE MISCIBLES
Aunque son posibles tres tipos de diagramas de presión de vapor y destilación, sólo uno de ellos se discutirá aquí.
En la figura 8-19 ( a ) se muestra un diagrama de presión de vapor
total-composición del par liquido parcialmente miscible, alcohol butilico-nagua. Comenzando con alcohol butílico puro, cuya presión de vapor es D',
observamos un aumento en la presión total del sistema al añadir agua. Este
-
=
01
O
Agua
Agua
Figura W 9 .
20
40
60
Porcentaje en peso
80
1
100
Alcohol
(4
n - butilicc
Porcentaje en peso
Alcohol
n~ butiiico
Diagrarnas de vapor y destilación del sirtcrna acua-alcohol n-butilico,
incremento continúa hasta la presión que corresponde a C', que tiene lugar
r n una solución saturada de agua en alcohol butilico. Análogarnente, si
comeniamos con agua pura de una presión de vapor A', la adición de
alcohol butilico eleva la presión de vapor hasta que se alcanza la saturación
dcl alcohol butilico en agua, punto B', es decir, la solución saturada de
alcohol butilico en agua tiene exactarricnte la misma presión de vapor que
una solución saturada de agua en alcohol butílico. Y, además la presión
Diagrama de presión de vapor y destilación
301
total de vapor sobre el sistema en la región de miscibilidad parcial, entre
B' y C' donde hay dos capas presentes, cs constante e igual a cualquiera de
una dc las dos capas y no a la suma de las dos. Este estado de cosas es una
consecuencia directa de las condiciones terniodinámicas de equilibrio en tal
sistema. Para que exista equilibrio en un sistema que comprende la distribución de un componente particular entre las dos fases, tal como el alcoliol
butilico entre las capas superior e inferior, la presión de vapor del constituyente particular sobre cada capa debe ser la misma, y la presión de vapor
sobre ambas debe ser una cualquiera de las dos. Por lo tanto, la presión de
vapor del alcohol butílico sobre B' debe ser igual al de C', y la total la misma que la de B' O C'. Iguales consideraciones se aplican al agua en las dos
fases; la presión total sobre ambas capas es la misma que la de B' o C' y es
constante en tanto ambos se hallan presentes.
Las curvas A'H' y D'H' dan las composiciones de vapor en equilibrio
con A'B' y D'C respectivamente. Para todas las composiciones del líquido
entre B' y C la composición del vapor es constante e igual a H'.
La figura 8-19 ( b ) nos muestra un diagrama de destilación que corsesponde a un sistema que exhibe una conducta análoga al alcohol butílicoagua. La curva CD nos d a los puntos de ebullición de todas las soluciones
de agua en alcohol butílico, mientras HD da la composición de vapor que
corresponde a diversas composiciones de la fase líquida. Análogamente, AB
da los puntos de ebullición de todas las soluciones de alcohol butilico en
agua, mientras que Al1 d a las composiciones de vapor correspondiente. Los
11untos de ebullirión de todas las composiciones globales que originan dos
capas, esto es, entre B y C , están dadas por BC, en tanto que la corriposición del vapor que corresponde a BC está dada por el plinto H; cs decir en
la medida que están presentes dos capas saturadas, el punto de bullición
del sistema es constante y la composición del vapor que se desprende es
tairibiki constante e independiente de la comfiosición global.
Las líneas de trazo que parten de B y C, en la figura 8-19 ( b ) indican
1~ variación de la solubilidad mutua de los dos líquidos con la temperatura
Y forman parte del diagrama de solubilidad.
Otros ejemplos de sistemas que exhiben comportamiciito a~iilogoal del
alcohol butílico y el agua son: anilina-agua, alcotiol isobutílico-agua, y acetato de etilo-agua.
PRESION DE VAPOR Y DESTILACION DE LIQUIDOS
INMISCIBLES
Puesto que son inmiscibles son mutuamente insolubles, y la a d i c i h de
"no al otro no afecta las propiedades de nin:urio de ellos. De aquí, que
cada cual se comportará romo si el otro no cstuvicra ]>resente. P;n conseciicncia, en una mezcla de dos líquidos inniiscibles, cada uno de ellos ejcr-
302 Capítulo 8: Soluciones
ceri la presión de Lapor que corresponde a un líquido puro a una temperatura dada y la presión de vapor total sobre la mezcla, será la suma de las
presiones dc vapor de los dos constituyentes puros, es decir
donde P es la presión de vapor total, y Pq i'; son las presiones de vapor de
los liquidos piiros A y B.
El punto de ebnllir.ión de cualquier sistema es la temperatura a la cual
la presión total de vapor iguala la de confinamiento. Como los dos líquidos juntos alcanzan una presión total dada a una temperatura más baja
que la de cualquiera de ellos sólo debe concluirse que cualquier mezcla de
dos líquidos hervirá a una temperatura menor que la de cualquiera de
los dos liquidos. Ademis, como a una temperatura dada no hay cambio en
la presión de vapor total con la variación de la composición global, el
punto de ebullición de todas las mezclas posibles de los dos, debe p e m a necer constante, en tanto ambos liquidos estén presentes. Cuando uno de
los liquidos ha sido expulsado por ebullición, la temperatura ascenderá
bruscamente desde la de la mezcla hasta T Ao T B dependiendo de cuál de
ellos ha sido eliminado primero.
A cualquier temperatura de ebullición de la mezcla, T , las presiones
parciales de vapor de las dos constitu)entes son PO, y Pb que corresponden a la temperatura dada. Si desiparnos por N> y NrDa las fracciones
molares de los dos constituyentes en elvapor, .entonces P' = <P, PO, = NLP,
y de aquí:
+
Pero
=n.,/(n,
n,), y X',=.n,/(n.,
f nB), donde n, y n~ son el
níimero de moles de A y B en cualquier volumen dado de vapor. En consecuencia:
y como la relación de las presione parciales a T es constante. n , / n , debe
ser constante también, es decir, la composición del vapor es siempre constante en tanto que ambos liquidos están presentes. Además como n~ =
M'.,/,!&
y n,, = lV,/M,, donde W,, W , son los pesos en un volumen
dado y M,, M B son los pesos m u l e c ~ ~ l a rde
c ~A y B respectivos, la ecuación
158) se transforma en
Solubilidad de los gases en líquidos
303
La ecuación (59) relaciona directamente los pesos de los dos constitii,entes destilados desde una mezcla de dos líquidos inmiscibles a sus pesos
~olecularesy las presiones de los dos constituyentes puros. Se observará
que el peso de cualquier constituyente destilado depende tanto de su presión de vapor como de su peso moleciilar~y de aquí que el efecto de una
presión de vapor baja está contrarrestada por un peso molecular elevado.
La destilación de líquidos inmiscibles se emplea industrialmente y en
el laboratorio para purificar Iíquidos orgánicos que, o bien hierven a elevada temperatura, o tienden a descomponerse cuando se calientan a su
punto de ebullición normal. El otro líquido frecuentemente es agua, y el
proceso total se denomina destilación de vapor. La mezcla inmiscible del
líquido y el agua se calienta bien directamcntc o por inyección de vapor,
y los vapores que se desprenden se condensan y separan. D e esta manera
es posible destilar muchos líquidos de elevado punto dc ebullición a temperaturas más bajas de 100°C, punto de ebullición del agua.
La destilación de líquidos inmiscibles se puede utilizar también en la
determinación de pesos nioleculares aproxiinados de uno de los líquidos
involucrados. Cuando las presiones de vapor y las relaciones en peso de
los destilados de los dos líquidos se han determinado, y se conocc el peso
molecular de uno de los líquidos, es posible calcular el peso molecular del
otro fácilmente por mcdio de la ecuación (59). La forma en la cual se
obtienen los datos necesarios se explica mejor por medio de un ejemplo.
Cuando los dos líquidos inmiscibles, clorobenceno y agua, se hierven a una
presión de 734.4 mm de Hg: el purito de ebullicih es 90°C, mientras que
la relación del peso de clorobenceno al de agua recogida en el destilado es
2.47. Como a 90°C la presión de vapor del agua es 526.0 mm de Hg la del
clorobenccno será 734.4 - 526.0 = 208.4 mm de Hg. Por esa razón, designando por A al clorobenceno y B al agua, al aplicar la ecuación (59)
(a:)(2)
lo::
M - - - 'tfB
A
-
=
,,
2.47 X -- X 18.02
El peso nioiecular del clorobenccno calculado a partir de los pesos
atómicos es llZ.6.
SOLUBILIDAD DE LOS GASES EN LIQUIDOS
Los gases se disuelven en los Iíquidos para fomiar soluciones verdaderas. El grado de soluhilidad depende de la naturale7a del gas y del solvente, la presión y la temperatura. Los ~ S S P Scomo cl n i t r 1 ~ ~ n 0hidrógeno,
,
oxígeno y helio, se disuelvrn en el agua sólo en ligera proporción, mientras
304 Capítulo 8: Soluciones
que los gases como el cloruro de hidrógeno y el amoníaco son muy solubles.
La gran solubilidad en los últimos casos se explica por la reacción química de estos gascs con el sol\.ente para formar ácido clorhídrico e hidróxido de amonio respectivamente. De me\-o; el nitrógeno, oxígeno, y diúxido de carbono son mucho más solubles en alcohol etílico que en el agua
a la misma presión y temperatura, mientras que el sulfuro de hidrógeno y
el amoníaco son más solubles en agua que en alcohol etílico. Frecuentemente, la semejanza entre el soluto y el solvente conduce a una solubilidad
más alta, como lo evidencia el hecho de que lo$ vapores de hidrocarburo
se disuelven más fácilmente en hidrocarburos y otros solventes orgánicos
que en el agua. Sin embargo, la semejanza química no constituye aún un
criterio infalible de solubilidad. Así el acetileno, que es niuy distinto en sus
características químicas del agua, se disuelve en mayor propbrción en ella
a 0°C que el oxígeno.
El efecto de la presión en la solubilidad de un gas dado, en un líquido
particular, a temperatura constante, se puede obtener fácilmente invirtiendo el proceso; en efecto, consideremos el gas como un soluto que vaporiza
hasta establecer una preskn de vapor sobre la solución. En estas condiciones se aplica la ecuación (59) es decir, que
Donde f,,,,
es la fugacidad del gas sobre la solución y a , es la actividad de
dicho gas en solución. Si la fase de gas y la solución se comportan idealmente, entonces fZi,, = PZ,a? = A'? y la ecuación (60) sc transforma en:
L a ecnación (61) conocida como L e y de H c n r y establece que a temperatura constante la solubilidad de u n gar e n u n liquido es directamente
proporcional a la presión del gas solirc el liquido. El factor de proporcionalidad K' se llama constante de la ley de IIenry. Su ~nagnituddepende
de la naturaleza del gas y el solvente, temperatura y unidades en que se
expresa P,.
Cuando varios gases se disuclven simultáneamente en un solvente, la
rcuación (61) es válida para cada gas independientemente, con tal que
NI sea la conccntraciún y P1 la presión parcial de cada gas. Por lo tanto es
psible establecer que la solubilidad de cada gas e n u n a mezcla de ellos
es directamente proporcional a su presión parcial <m la mf,zcla.
La validez de la ley dc Ileriry se ilustra ron los datos dados en la
tabla 0-3 rrlativos a la solutiilidad del oxiyno rn agua a 25%. Si la ley
Solubilidad de los gases en líquidos 305
cs válida, K' debe ser una constante independiente de la presión. Esto es lo
que sucede, como se observa en la columna 3 de la tabla.
T ABLA 8-3.
Solubilidad del oxígeno en aqua 3 25-C
La estricta aplicación de la ley de IIenry se limita a las presiones bajas.
A presiones elevadas la ley es menos exacta, y las constantes de proporcionalidad presentan una variación considerable. Generalmente, cuanto mayor
es la temperatura y menor la presión, más exactamente se cumple. Además la
ley establecida antes no es aplicable cuando los gases disueltos reaccionan
con el solvente, o bien se ionizan. Ouando la ionización es completa, la ley
no se cumple de ninguna manera. Las desviaciones en el caso de reacción
química y de disociación parcial se comprenden y corrigen fácilmente si
tenemos en cuenta que la ley de Heniy es aplicable a la concentración
en solución de las mismas especies moleculnres, como existen en la fase de
gas y no a la concentración total en solución. Así, cuando el amoníaco
se disuelve en el agua, parte del gas disuelto reacciona fonnando hidróxido de amonio, que a su vez se disocia parcialmente en NH: I- OH- .
Las reacciones que nos ocupan son las siguientes
NH, (gas) = NH, (disuelto)
NI-I,(disuilto)
+ H 2 0 = NH,OH
NH,OH = NH: Jr O H 'reniendo cn cuenta las lirnitaciows anteriores, para que la ley de Henry
resulte aplicable a la solución del amoníaco en agua, no podrcmos establecer
'Iue h',,,,,/P,,,,
= K', sino N'iir,/Pxw, = K', donde NXH3es la fracción
molar del amoníaco preyente en la solución como NH,.
La solubilidad de la mayoría de los gases en los líquidos disminuye con
aumento de temperatura y en consecuencia las constantes de la ley de
H e n ~timen valores menores a temperaturas mas elevadas, como puede
verse en la tabla 8-4. .4causa de la disminución de solubilidad a temperaturas más rlevadas los Líquidos que contienen muchos tipos de gascs disuel'OS Purden purgarse de ellos por ebullicibn. No siempre sucede así. Algunos
Wscs son más solubl~sa triiipcratiira alta que a baja, de aquí qiie r.0 sc
306 Capítulo 8: Soluciones
eliminen por calentamiento. En efecto, las soluciones diluidas del cloruro
de hidrógeno en agua se concentran por ebullición hasta que alcanzan
una concentración del 20 por ciento de aquel gas.
TABLA
8 4 . Constantes de la ley de Henry para la solubilidad
de los gases en agua
Gas
0°C
20PC
40'C
60°C
80PC
LEY DE DISTRiBUCION DE NERNST
El yodo es soluble en agua y en tetraclomro de carbono. Cuando una
solución de yodo en agua se agita con tetracloruro de carbono que es inmiscible con agua, se encuentra que el yodo se distribuye entre las capas
de agua y tetraclomro de carbono de manera que en equilibrio la relación de
concentraciones del yodo en dichas capas es constante a cualquier temperatura dada. Esta distribución de un soluto entre dos solventes inmiscibles
o ligeramente miscibles puede realizarse con cualquier soluto para el cual se
encuentre el par de solventes inmiscibles adecuado.
L a conducta anterior es una consecuencia dc los requisitos termodinámicos de equilibrio. Para verlo más claramente, consideremos un par tal
de solventes en contacto, A y B que contienen la misma sustancia en solución. La energía libre molar parcial del soluto en el líquido A, F,, se representa así
S,=?
RTlnar
(62)
+
donde
es la energía libre estándar y a,, es la actividad del soluto en el
solvente A. En forma análoga, la energía libre molar parcial del soluto
en el segundo líquido, F, se escribe así
donde todas las cantidades tienen el mismo significado que en la ecuación
(62) con la excepción de que ahora se refieren-al líquido B. Como para
el equilibrio entre las capas debemos tener
= Fn a temperatura y ~resión
constantes, se deduce
Fi + RT In aa = pi + R T ln a*
ae
lna"
P1 - F e
-0
=
RT
Ley de distribución de Nernst 307
-
Sin embargo, a una temperatura dada F; y F ; , son constantes para una
,ustancia en un solvente particular. De aquí
In - = constante
a.4
por eso
La ecuación (65) constituye la forrnulación matemática de la Ley de la
diitribución de hTernsí, que establece que una sustancia se distribuye entre
dos solventes hasta que en el equilibrio se alcanza una relación constante
de las actividades de la sustancia en las dos capas, para una temperatura
establecida. Cuando las soluciones diluidas, o el soluto se comportan idealmente, la actividad es prácticamente igual a la concentración C, y la ecuación (65) se reduce a
La constante K se llama cocficiente de distribución o de reparto.
La aplicación de esta ley simplificada, ecuación ( 6 6 ) , se aprecia con
los datos presentes en la tabla 8-5. La constancia esencial de los coeficientes
de distribución para concentraciones bajas, nos muestra la validez de la ecuación (66), pero los dos últimos valores del yodo y el último del ácido bórico
muestran que deben utilizarse las actividades en lugar de las concentraciones
T ABLA 8-5.
It entre el
H?O y el CCI,
Coeficientes de distribución a 25°C
(C, en moles/iitro)
!
H,BO, entre el H,O y
el alcohol arnilico
para obtener una constante verdadera por cocficiente de rcparto en soluciones más concentradas. Además, K depende de la naturaleza del soluto
Y de los líquidos comprendidos.
Otrm factores que modifican la magriitud de esta constante son la lemPcratura y la [orina en que aquélla se expresa, es decir, C,/CB ó CB/CA.
308 Capítulo 8: Soluciones
Otros ejemplos de distribución dignos de citarse son los del yodo en
agua y disulfuro de carbono, cloroforrno o etilenglicol; Bramo en agua y
disulfuro de carbono o bromofonno, peróxido de hidrógeno en agua y diversos solventes orgánicos, y fenol en agua y alcohol amílico.
\Valter Nernst ' hizo notar que el enunciado anterior de la ley de distribución es válido sólo cuando el soluto no lleva a cabo cambios, tales como
disociación y asociación. Si un soluto disocia en iones o moléculas más
simples o si se asocia en moléculas más complejas, no se aplica la ley a
las concentraciones totales de las dos fases, sino únicamente a las concentraciones de Ia especie particular común de ambas. Así, si una sustancia
A se disuelve en un solvente sin ningún cambio en la forma molecular, y en
otra lo hace con una asociación particular por ejemplo A,, el coeficiente
de reparto en la distribución no estará dado por la relación de las concentraciones totales en las dos fases, sino por la concentración total en el
primer solvente dividida por la concentración de las moléculas no asociadas del segundo; o, lo que es igual, por la relación de las conceotraciones
de las moléculas de idéntico peso molecular en los dos sohentes. Las limitaciones de aplicación de esta ley se señalaron relacionadas con la de H e n q
relativa a gases que forman especies moleculares o iónicas nuevas en solución.
Para ilustrar cómo la ley de distribución se maneja en casos más complicados, consideremos la distribución del ácido berizoico en agua y cloroformo, cuyos datos se encuentran en la tabla 8-6.
TABLA 8 6 . Distribución del ácido benzoico entre el agua y el cloroformo
(C, en mdesAitro)
a 40DC
La columna 1 da la concentración total de k i d o benzoico en la capa
de agua, la columna 2 proporciona los mismos datos correspondientes al
cloroformo y la 3 presenta la relación de las dos concentraciones. Es bien
claro, que no existe ninguna analogía en la relación de las concentraciones
totales del ácido benzoico en los dos solventes. Sin embargo, los resultados
obneirados son explicables en base a la dirociuci4n parcial de los ácidos en
agua, originando ioncs de bcnfoato e hidrógerio y ojociándore en rnolécula~
dobles en el cloroformo (CGH,COOH). Corno la ley de la distribución
4
Ley de distribución de Nernst
309
se aplica únicamente a especies comunes presentes en dos fases, es decir,
monomoléculas de ácido, debe efectuarse una corrección por disociación
del ácido en la fase acuosa y por su asociación en la del cloroformo. Si lo
hacemos así, obtenemos las concentraciones de las moléculas simples dadas
en las columnas 4 y 5 de la tabla, y ellas conducen a un valor constante de
K como nos muestra la última columna.
Existen otros sistemas en los cuales este análisis se ha aplicado con
éxito, como son la distribución del ácido benzoico en el agua y el benceno,
el ácido salicílico entre el agua y benceno o cloroformo, y el ácido acético
entre el agua y algunos disolventes orgánicos.
Los coeficientes de distribución, lo mismo que otras constantes de equilibrio, varían con la temperatura. Así en la distribución del .ácido benzoico
entre el agua y cloroformo a 10% K es 0.5ó4, y 0.442 a 40°C. La variación de estas constantes está dada por la ecuación (401, capítulo 7,
donde AH es ahora la transferencia de calor por mol de soluto desde una
solución a la otra.
La ley de la distribución se ha aplicado al estudio de problemas de
interés tcórico y práctico, tales como la extracción, análisis y determinación
de las constantes de equilibrio. La extracción es un tópico de gran importancia en el laboratorio e industria. En el primer caso, está relacionado
con frecuencia a la remoción de una sustancia disuelta a partir de una
solución de agua, con solventes como el éter, cloroformo, tetraclomro de
carbono, o benceno. De nuevo, en la extracción industrial se emplea para
eliminar algunos constituyentes no deseables, que acompañan a un producto,
tales como los ingredientes nocivos de los aceites de petróleo, tratando estos
con un solvente inmiscible, en el cual es soluble la impureza. En tal proceso
es importante conocer cuanto solvente se precisa y qué número de tratallli~ntoses necesario efectuar para el logro de un grado particular de
separación.
Cuando una sustancia se distribuye entre dos solventes sin complicaciones de asociación y disociación o reacción, es posible calcular el peso de
Sustancia que se remueve en una serie de extracciones. Supongamos que
una solución contiene W g de una sustancia en VI cc de solución, y que se
aqita repetidamente con V 2cc. de un solbente puro inmiscible hasta lograr
el equilibrio. Después de n extracciones cl peso W., del soluto que permanece sin extraer, será
=
Y por esa razón el extraído, es
KV,
"( K V ,
V 3
+
310 Capítulo 8: Soluciones
,
'
Donde K = C,/C,. Cuando se conoce K, es posible utilizar la ecuación
(67) para estimar el número de extracciones necesarias para reducir W,
hasta un valor dado, W,. Otra importante consecuencia que se deduce
de la ecuación (67), es que si disponemos de un cierto volumen de solvente, se obtiene mayor eficiencia en la extracción si lo emplea en cierto
número de extracciones separadas, en lugar de usarlo todo de una vez.
En otras palabras, la eficiencia de extracción máxima se logra manteniendo
valores pequeños de V 2 y grandes de n, iguales conclusiones se aplican
al lavado de precipitados, en cuyo caso el proceso se considera como la
distribución de una impureza entre el liquido de lavado y el precipitado.
En el análisis se aplica de nuevo los coeficientes de distribución. Supon.
gamos que una sustancia se halla presente en el solvente A, donde es dificil
de investigar, pero que es más fácil de realizarlo en otro solvente B.
Entonces es posible efectuar una distribución de la sustancia entre los dos
solventes y realizar el análisis en B. Efectuado éste, conocidos los volúmenes
de solventes y el coeficiente de reparto, K, de la sustancia en aquéllos, se
deduce fácilmente el peso original de sustancia en A.
SOLUCIONES DE SOLIDOS EN LIQUIDOS
El grado de disolución de sólidos en líquidos varía considerablemente
con la naturaleza del sólido y liquido, la temperatura, y en grado menor
con la presión del sistema. En todos los casos el límite de solubilidad es la
saturación. En un solvente y soluto particulares la concentración de saturación a una temperatura y presión dadas, es constante y no depende de la
manera en que se prepara la solución.
Las concentraciones de diversos solutos en un solvente necesarias para
lograr la saturación varían ampliamente. Así, a 20°C, 100 g de agua disuelven 192 de nitrato de amonio, 6.5 de cloruro de mercurio, y únicamente
8.4 1 P g de bromuro de plata. Por otra parte, en alcohol etilico, la solubilidad del cloruro de mercurio y nitrato amónico se invierten en relación
al caso del agua, y son de 47.6 y 3.8 g. respectivamente para 100 g. de
solvente. Por regla general, las sustancias inorgánicas son más solubles
en agua que en los solventes orgánicos, y lo contrario sucede con las sustancias orgánicas. No obstante, hay muchas excepciones.
La influencia de la temperatura sobre la solubilidad de un soluto en
u n solvente particular es, casi siempre, muy pronunciado como puede
verse en la tabla 8-7. Como la mayoría de las sustancias absorben calor al
disolverse, son más solubles a temperatura elevada. Por otra parte, cuando
el proceso es exotérmico, debe esperarse lo contrario, como sucede con el
sulfato de sodio. Sin embargo algunas sustancias no tienen una conducta
regular, así por ejemplo, la solubilidad de CaSO, - 2 IT,O se incrementa
hasta los 40°C, pasa por un máximo, y luego decr~cea tcrnprraturas mis
elevadas
Soluciones de sólidos en Líquidos 311
TABLA 8-7. Solubilidad de los sólidos en agua a divenas temperaturas
(Gramos de sal anhidraJlO0 g de H,O)
-
Sólido
NH,CI
Caso,. 2 H,O
0°C
20°C
40°C
60°C
10O'C
29.4
0.176
37.2
-
45.8
0.210
55.2
0.205
77.3
0.162
Cuando la solubilidad de una sustancia se grafica contra la temperatura,
se obtiene una curva continua en tanto no hay cambio en la naturaleza
de la fase sólida de saturación. Cuando ésta tiene lugar, aparece un punto
doble en la curva de solubilidad que nos da otra nueva, la de la nueva
fase sólida formada, en función de la temperatura. En sustancias que
presentan tales csnibios, las temperaturas en que aparecen los puntos de
doblez son definidos y característicos de las sustancias involucradas y representan aquellas en que la nueva fase y la antigua están en equilibrio con
la misma solución. En otras palabras, el punto que nos ocupa tiene lugar
a una temperatura a la cual la solución está saturada con relación a
ambas fases sólidas.
El camhio particular en la naturaleza de la fase sólida comprendida
puede ser una transformación de forma cristalina, un cambio de una sal
hidratada a otra anhidra, o una transformación de un hidrato a otro. Estos
cambios se discutirán detalladamente en el capítulo 10. Ahora daremos
sólo un ejemplo, tal como la transformación del nitrato de amonio rómbico al y rómbico que origina una discontinuidad en la curva de solubilidad
en agua a 3Z°C. Cada una de estas formas tiene su propia curva, pero son
estables en diferentes intervalos de temperatura. Debajo de 3Z°C es estable
la forma j3 y es la fase que satura, mientras que por encima de aquella
temperatura la forma estable es la y. A 3Z°C, la temperatura de transición,
ambas lo son. De aquí que las curvas de solubilidad intersectan, y la
solución se halla saturada respecto a las dos. En consecuencia, cualquier
discontinuidad de la cuma de solubilidad, puede considerarse como intersección de otras dos distintas, cada una de las cuales corresponde a una
fase de saturación particular.
El efecto de la presión en la solubilidad de los sólidos en líquidos es
generalmente muy pequeño. Un cambio de 500 atm. en la presión aumenta
la solubilidad del cloruro de sodio en el agua solamente 2.3 por ciento y
disminuye la solubilidad del cloruro amoníaco en 5.1 por ciento. También
se ha observado que la sdubilidad de un sólido en un liquido aumenta
P
312 Capítulo 8: Soluciones
cuando el tamaño de partícula de la fase de saturación se hace muy pequeña. Por ejemplo, con el sulfato de calcio cuando varía de 2 a 0.3 micras, la
solubilidad en el agua a 25'C cambia desde 2.085 a 2.476 g por litro.
Este hecho explica por qué es necesario, en los procedimientos analíticos
digerir los precipitados a fin de aumentar el tamaño de partícula y por
tanto disminuir la solubilidad. Cualquier solución saturada respecto a
sus particulas finas, resultará sobresaturada con relación a otras más gruesas. El resultado es que las partículas más finas desaparecen y se incremcnta
el tamaño del cristal de las partículas más gruesas.
EQUILIBRIOS QUIMICOS EN SOLUCION
Hemos visto en el último capítulo que en una reacción cualquiera tal
como
aA+bB+-.=cC+dD+.-.
(69)
la constante de equilibrio termodinámico, K,, esti dada por
La ecuación (70) es aplicable también a los equilibrios químicos que
acontecen en solución, excepto que ahora las actividades se refieren a los
constituyentes de la solución. Si expresamos la concentración de las especies
comprendidas en moles por litro, C,entonces a = Cf,según la ecuación
(14) y l a ~ ( 7 0 )nos da
SIescribimos
CaC; . . .
La ecuación (72) define K,, la constante de equilibrio d c concentraciones de una reacción.
En la ecuación (74) K,,, es una constante para una reacción y temperatura dadas, mientras de K , es un factor que depende de la naturaleza
de las sustancias disueltas y sus concentracionei. En soluciones idcales o
rcales a bajas concentracionrs, f = 1, K ,
1, y por lo tanto Kn K,. Sin
c n i h a r p , en soluciones no ideales a concentraciones elevadas K , p e d e
-
Equilibrios químicos en solución 313
no ser igual a la unidad, y de aquí que K , no será idéntico a K,. Entonces,
como K j es función de la concentración, K , varía con la concentración de
la solución en equilibrio. Generalmente tales desviaciones no son gandes
en las soluciones no electrolíticas. Si lo son; entonces es posible obtener K , a
partir de los valores correspondientes de K,, bien por introducción de los
coeficientes de actividad, o al graficar los observados dc K , contra la concentración de una de las especies que reaccionan y extraplando la concentración a cero. En este limite K , se hace igual a K,.
Como ejemplo de equilibrio en una solución liquida podemos elegir la
disociación del éster amilico del ácido dicloroacético en icido y amileno,
es decir,
La constante de equilibrio K,, viene dada por
Al investigar este equilibrio Nrrnst y Hohmann2 mezclaban diversas proporciones de amileno y ácido dicloroacético, sellaban las mezclas en tubo
de vidrio, y mantenían los tubos a 100°C hasta que se establecía el equilibrio, entonces sc enfriaban aquellos para "congelar" el equilibrio, se abrían,
y se analizaba la cantidad de &ter presente.
T ABLA 8-8. Descomposición del
dicloroacético a 100°C
b
(moles)
&ter amila
(a =
de ácido
1 mol)
V
(litros)
x
Kc
Si designamos por m la cantidad inicial dr inolrs de árido, por b el
n h e r o inicial t a m h i n , de moles de ainileno, .r rl corresponrlicnte de éstcr
en el equilibrio Y 1' el volumen total de- la m ~ z c l aexpresado en litros,
2
~,,,,,~t
lIuhinan?, %. f i l w i k Chem., 11, 3 5 2 (1893).
314 Capítulo 8: Soluciones
L
entonces las concentraciones de las diversas sustancias en el equilibrio dadas en moles por litro son:
y por lo tanto
K, =
(y)
(")
En tcdos los experi~nentosde Nernst y Hohmann a era un mol, mientras que b variaba. La tabla 8-8 nos muestra los distintos valores de b, V
y x en una serie de experiencias, así como los valores de K , obtenidos a
partir de estos datos por medio de la ecuación ( 7 7 ) . La constancia de K,,
es suficientemente satisfactoria.
REFERENCIAS
1.
2.
3.
4.
5.
Véase lar referencias del final del capitulo 3. También:
Hala, Pick, Fried y Vilim, Vapor-Liguid Equilibrium, Pergamon Press, Xueva
York, 1958.
Hildebrand y Scott, Solubility of Non-Electroljtes, Reinhold Publishing Corporation, Nueva York, 1950.
Robinson y Gilliland, Elemenfr o/ Fractional Distillation, McGraw-Hill Baok
Company, Inc., Nueva York, 1950.
A. Weissberger, Phyrical Methods of O r p n i c Chenisfry, Interrcience Publishers,
Inc., Xueva York, 1959, Vol. 1, Capítulos 9 y 11.
A. Wrissberger, Dirtillation, Interscicnce Publishers, Inc., Nueva York, 1951.
PROBLEMAS
1. A 20°C el éter dietílico tiene una presión de vapor de 442.2 mm de Hg.
A la misma temperatura una solución de un soluto no volátil en dicho éter, nos da una
presión de vapor de 413.5 mm de Hg. Si suponemos que los vapores se comportan
de manera ideal, hallar (a) la actividad del solvente en la solución dada, y ( b ) su
energía libre molar parcial de mezcla.
Reipueitn: ( a ) 0.935; ( b ) - 39.17 cal m&'.
2. A 300°K el liquido A tiene una presión de vapor de 280.0 rnm de H g y el
liquido B una de 170.0 rnm de Hg. Cuando se prepara una solución que contiene
2 moles de cada uno de los líquidos, la presión de vapor sobre la solución es
380.0mm de Hg, y el vapor contiene 60.0 moles por ciento de A. suponiendo
que los vapores se comportan de manera ideal, hallar:
Las actividades de A y B en la solución.
a)
b ) Los coeficientes de actividad de A y B en la solución.
La energía libre d e mmcla de la solución.
c)
d ) La energía. libre de mezcla que cabe esperar en la soluci6n ideal corredpondiente.
Problemas 315
3. Demostrar que, en base a una solución muy diluida como u n punto de
,,fercncia para un soluto, l a relación entre el coeficiente de actividad molar f 2 y
de actividad molal y, está dada por la relación
el
donde m, es la molalidad de una solución dada, C, la rnolaridad, y p , la densidad
drl solvente puro.
4.
En las mismas condiciones q u e las del problema 3, demostrar que
donde y*' es el coeficiente de actividad de la solución para la concentración eipresada en fracción molar, y M, es el pero molecular dcl solvente.
5. Adcock y McGlashan [Pror. Roy. Soc. (London), A226, 266 (1954)l encontraron que e n el sistema tetradamro de carbono-ciclohexano AH, entre 10 y 55'C
se representa por medio de la relación
AH, = (281 - 0.468 T)N,N2 cal m - '
donde T es la temperatura absoluta, N,, la fracción molar del tetracloniro de
carbono, y N, la fracción molar de ciclohexano. Deducir de esta ecuación los calores
molares
de mezcla de los dos constituyentes.
Respueita:
G,= (281 - 0.468 T ) N ; .
-
6. A partir de las ecuaciones del problema 5, deducir las capacidades calorificaa
parciales y totales del proceso de mezcla, esto es, AC,,, AC,, y AC,,.
7. Una mezcla de C,H,CH, y C,H, contiene 30% e n peso de C,,H,CH,. A
30°C la presión de vapor de este último compuesto es 36.7 mm Hg, mientras que
el del C,H, es 118.2 mm. Suponienda que los dos líquidos forman una solución
ideal, calcular la presión total y parcial de cada constituyente encima de la solución
a 30°C.
Respueita: P ce,6 = 86.7 mm; P
= 96.5mm
,,,, ,
8. A 60°C la presión de vapor del alcohol etilico es 352.7 mm H g y la del
alcohol metilico 625 mm. Una mezcla de ambos, que suponemos que se comporta
idealmente, contiene u n 50% en peso dde cada constituyente. 2Cuál es la composición del capar sobre l a solución a 6 0 ° C ?
9. A l l 0 ' C la presión dc vapor del C,H,CI es 939.4 mm y la del C,H,Br es
495.8 m. Suponiendo que estos dos liquidos forman una solución ideal, ;Cuál
Será la composición de la mezcla de los dos, que hierve a 140°C bajo una presión
de una atmósfera? i c u á l será la composición del vapor a esta temperatura?
10. Lar soluciones de dos líquidos volátiles, A y B. obedecen l a ley de Raoult.
A cierta temperatura re encuentra que la presión total sobre una solución dada er
400 mm de H g ; la fraccibn molar de A en el vapor, es dc 0.45, y en cl liquido, 0.65.
iCuáles son lar presiones de vapor de los dos líquidos puros a la temprratura dada?
11.
Krestschmer Y Wiebe
u. Am. Chcm. Soc.,
71, 3176 (1949)l dan los valorea
316 Capítulo 8: Soluciones
siguientes del equilibrio liquida-vapor para las soluciones etanol-metilciclohexano
a 55'C:
Fracción molar dc etanal
Presión total de vapor
en el
Líquido
Vapor
( m m de H g )
0 . 0000
0.0528
0.1251
0.2205
0.3621
0.5071
0.6832
0.7792
0.9347
1.0000
0 . O000
0.4835
0.5375
0.5615
0.5846
0.5988
0.6244
0.6528
0.7879
1.0000
168.1
319.8
352.8
368.0
376.3
379.8
380.1
375.8
337.5
279.9
Preparar una gráfica que proporcione las presiones totales y parciales de Ion constituyentes como u n a función de la fracción molar de etanol en la fase liquida, y
determinar aquella en la cual es máxima la prcsión de vapor. Suponer que éste
re comporta idealmente.
12. Utilizando los datas establecidos en el problema anterior, graficar las fracrioner molares de la fase liquida contra lar del vapor en equilibrio De ella deducir
la fracción molar de liquido que corresponde al punto de presión máxima de vapor.
13. :Qué peso de areótmpo HCI-H.0 preparado a 740 mm H g habrá que
adicionarse al a s a a fin de preparar 2 litros de solución de HCI 0.50 molar?
14. A 30°C una mezcla de C , , H , O H y acua contiene u n 60% en peso de
&a, y se desdobla e n dos capar, la de C,H,OH que contiene el 70% en peso
de C,H,OH y la de agua que pasee 92% de peso en agua. Calcular los pems
Rerpueita: W,,,dW,, = 0.934
relatkor de las dos capas
15. Una mezcla contiene un 30% de anilina en agua, (en peso). A partir
de la fieura 8-16 determinar gráficamente los pesos relativos de las don capas que se
f u m a n y la proporción de anilina contenida en cada capa a 40°C.
16. Utilizando datos adecuados dp u n manual, qrafíquense aimultán~nnientelas
presiones de vapor del H1O, C,H, y la presión total de la mezcla contra la temperatura entrc 40 y 80iC, hallándose después el punto de ebullición del sistema inniisrible C,H,,-H,O bajo una presibn de una atmósfera.
17. Un sistema liquido totalmente inmiicible de agua y u n liquido orgánico
hirriw a 9OSC, cuando el barómetro señala una presión de 734 mm de Hg. El
producto destilado contime un 7370 en peso de liquido orgánico. ¿Cuál es el peso
molecular y la pr~aiónde tapar a 90'C del liquida orgánico?
Reipueito: 122 9 ~ / m o l ;208.2 mm Hs18. El nnftaleno se arrastra con \apur a 99 3'C bajo la ~ r e s i ó natmosférica.
, Q u é peso de \apor re precisará para arrastrar 2 lb de naftaieno en el destilada
a la citada pr~sión'
y el de vaporización del
19. Si el calor especifico del \ a p m es 0 5
calcular la cantidad total de calor y la
liquido c n cl problema 17 es 78
niiriima <le vapor cntrqados a 99"C, neierarim para destilar 500 q de liquido
a 530°C
.
20. Por medio de la tabla 8-4 calcular el peso de etileno que disuelve en
l ~ ~ de
O gagiis bajo u n a presión de etilenn de 2 atmósferas a 20'C.
R e s p u e s t o : 0 314 g .
21. El aire seco contiene 21 moles por ciento de O, y 79 de N,. ¿Cuál será
la composición de aquél e n agua, cuando se establece el equilibrio a u n a temperatu ra de 20°C y 1 atm?
22. Una mezcla de H, y N, se halla en equilibrio con 100 g. de agua a 40DC,
una presión total, de la fase dc gas, de 790.0 mm Hg. Analizada después de su
contiene un 40.0% de H,, en volumen. Si suponemos que la presión de vapor
del agua sobre la solución es la misma que l a del agua pura, es decir, 55 3 mm de
Hg a 40"C, calcular los pesos disueltos de N, y N,.
a
23. A 20'C se
de H,O Cuando se
SO, y la de agua
el H Z O y el CHCI,
dejó que el SO, se distribuyera entre 200 cc de CHCI, y 75 cc
establece el equilibrio, la capa de CHCI, contenia 0.14 moles de
0.05. ;Cuál es el coeficiente de distribución del SO, entre
a 20°C?
R e s p u e s t o : CH,,,/CCHCld = 0.953.
24. Esando un ialor promedio de los coeticientcs de dirtribusión dados en la
tabla 8-5, calcular el número de moles de H,BO, que pueden extraerse de 50 cc de
una solución acuosa 0.2 molar. Por, ( a ) una extracción simple can 150 cc dc alcohol
amilico, y ( b ) por triple extracción con porciones de alcuhol amilico de 50 cc
cada una.
25. ( a ) Demostrar que los datos siguientes de la distribución del ácida benzoico
cntre H 2 0 y C:,H, a 20"C, obedecen bien la relacibn C?Hz,y'CO,He = K.
( b ) Demostrar que esta relación se obtiene con las suposiciones siguientes: ( 1 ) que la
disociación del ácido benzoico en a s a es ligera, y ( 2 ) que el ácido está prácticamente asociado en mollcula~doblesen el C,H6.
26. Usando los resdtados del pr<il>lrma anterior, calcular el número d r
moles de ácido benzoico que pueden extraerse de 100 cc de una solución acuosa
0 2 molar mediante 10 cc de benceno a 20°C.
27. A 25°C el coeficiente de distribución del H,S entre el H,O y el benceno,
dcflnido por l a relación (H,S)ald(H,S),.,H,,
vale 0.167. <Cuál es el volumen
minimo de C,H, nccerario a 25'C para extraer de una sola i e z el 90% del H,S
desde un litro de soiución acuosa 0.1 molar de H,S?
K e r p u e i t n . 1 50 litros.
l
28. Utilizando los datos del problema aiiterior hallar el volumen total de C,H,
que serían necesarios para remover 90% del 11,s de la soluctón dad* en tres entraccienes separadar utilizando volúmenes iguales de C,H, en cada entracciún.
29. A 25°C el corficieiat~de distribuci6n del C,H,OH entre d CCI, y el
= ( C , H , 0 1 1 ) o l , / ( C 2 H , 0 H ) H o , cs de 00244. .Cómo se distribuirá
dc <:JI,OH critre 2 0 ic de iI,O y 5 0 C L dc C U ,
%U,K
1 4
318 Capítulo 8: Soluciones
30. Lar dubilidades del MnSO, .5H,O y MnSO, . 4HIO expresadas en 5a
mos de sal anhidra por 100 g de H _ O , en función de la temperatura son:
t0C
1o
20
30
40
50
Solubilidad
MnSO,, . 5 H I 0
MnSO, .4H,O
59.5
62.9
64.5
67.8
66.41
68,8
72.6
De u n a gráfica de solubilidades contra temperaturi, deducir la de transición de
MnSO, . 5 H 2 0 a MnSO,. 4H,O. ;Cuál de estas fases es estable a 2 j C C ?
31.
E n la reacción
designamos por u al número de moles de alcohol prescnte inicialmente, por cada
mol de ácido, y par x al número de males de ácido erterificado al establecerse el
equilibrio. De estos datos
a ) Calcular K , en cada caso, y b) desde el valor medio de
0.1 moles.
K, hallar
x cuando a es
PROPIEDADES COLIGATIVAS
DE LAS SOLUCIONES
En este capítulo estudiaremos cuatro propiedades de las soluciones
que contienen solutos no volátiles, que son: ( a ) el descenso de la presión
de vapor del solvente, (b) el descenso del punto de congelación, ( c ) el
auniento del punto de ehullición, y ( d ) la presión osmótira. Estas propiedades se denominan colicatiuas. Dependen Únicalnente del número de partículas en solución y de ninguna manera de la naturaleza de las mismas.
Como veremos, éste es el atributo esencial de los cuatro fenómenos mencionados antes, al menos en soluciones diluidas.
Teóricamente es conveniente subdividir las soluciones en: ( a ) de no electrólitos y ( h ) de rlictrólitos. En el prirricr caso, rl soluto disuclto permanecr
en forma molecular s?n carga, y no presenta tendencia a la disociación en
iones con carxa el6ctrica. En tales soluciones, se establecieron ciertas leyes
generales que se discutirin en seguida. Por otra parte, en las electrolíticas,
el soluto se disocia en mayor o menor proporción en iones, incrementando así el número de particulas en solución. El comportamiento dc ésta,
re5pecto a ciertas propiedades, por ese motivo, cambia y exige la modificación de las leyes simples deducidas para las soluciones no electroliticas.
Por esta razón, dircutiremos estas dos clases de soluciones en dos secciones
dirtintas de este capitulo.
Las propiedades coli~ativasde lar soluciones no electroliticas merecen
una seria consideración porque nos proporcionan m6todos valiosos de
rlctcminación del peso molecular dt- la5 su%tanciasdisuelta; y la posibili-
320 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
!
dad de cvaluar cierto número de cantidades termodinámicas de gran
importancia. Aquí, nos proponemos principalmente presentar los principios
básicos comprendidos, y su uso para la determinación de los pesos moleculares de los solutos.
DESCENSO DE LA PRESION DE VAPOR DEL SOLVENTE
E n soluto disuelto hace descender la presión de vapor del liquido
solvente en que se encuentra. Este descenso se comprende fácilmente, si
tenemos en cuenta la ley de Raoult demostrada en el capitulo anterior.
Si designamos por N, a la fracción molar de solvente, N, la del soluto, P o la
presión de vapor del solvente puro y P la del vapor del solvente sobre una
solución dada resulta entonces, según la ley de Raoult que P viene dada
por
Como N, en una solución es sicmpre menor que la unidad, P debe ser
menor que Po. En consecuencia, la solución de u n soluto e n u n solvente
hace descender l a presión de vapor de' este último ríspecto a la del solvente puro. Además, cuando el soluto no es volátil no contribuye a la
presión total de vapor, y por tanto la ecuación (1) nos d a también
la presión de vapor sobre la solución, que en este caso es debida al solvente
solo y es siempre menor que Po.
La magnitud de este descenso, AP, es
De acuerdo con la ccuación ( Z ) , la disminución de presión de vapor
del solvente drpcnde tanto dc la presión de vapor de éste como de la
fracción molar de soluto. Con otras palabras, es función de la naturaleza
del solvente y de la concentración del soluto, pero no de la naturaleza de
este ÚItimo. Sin embargo, si consideramos el descenso relativo d e presión
de oapor, es decir, la relación APJP"; cntonccs de la ecuación ( 2 )
dcpende solamente de la fracción niolar de soluto y es completamente
independiente tanto de la naturaleza del soluto como del solvente. La ecuarión ( 3 ) , una forma de la ley de Raoult, para soluciones de soliitos no
volátiles, nos muestra que la disminución que nos ocupa, es una l>ro~>icdad
coligativn, porque depende únicamente de la coiiccritración del soluto.
Descenso de la presión de vapor del solvente 321
La validez de la aplicación de la ley de Raoult en este caso puede
juzgarse por los datos de la tabla 9-1, correspondientes a soluciones de
manita a 2O0C. Teniendo en cuenta las dificultades de medir pequeñas
diferencias de presión de vapor, la concordancia entre la teoría y la exper;encia es satisfactoria.
TULA 9-1.
Descenso de la presión de vapor d e las
a 20'C
soluciones acuosas de manita
(P= 17.51 rnm Hg)
Moler de manita
por 1000 g de H,O
1P observado
(mm Hg)
9 calculado
Hg)
(mm de
Tanto la ecuación ( 2 ) como la ( 3 ) pueden emplearse para calcular
el descenso de presión de vapor de las soluciones de solutos no volátiles; o
bien, conociendo aquél se emplean para determinar el peso molecular
de la sustancia disuelta.
Consideremos el problema de calcular la presión de vapor del solvente
sobre la solución que contiene 53.94 g. de manita (peso molecular = 182.11)
Por 1000 g. de agua a 20°C. A esta temperatura la presión de vapor del
agua es 17.51 mm de Hg. De acuerdo con la ecuación (2).
donde W z y M, son el peso y peso molecular del soluto, mientras que W,
Y M, 10s correspondientes al solvente. Al sustituir los datos señalados
e" la ecuación ( 4 ) , obtendremos
La presión dc vapor dc 1s solución es, por lo tanto:
522 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
Si conocemos el descenso de presión de vapor, podemos proceder a la
Además, en soluciones muy diluiinversa en la ecuación (4) y calcular M 2 .
das W J M , es muy pequeño comparado con W , / M , , y la ecuación (4) se
reduce a
AUMENTO DEL PUNTO DE EBULLICION DE
LAS SOLUCIONES
Las soluciones que contienen solutos no volátiles hierven a temperaturas más eleuadas que las del solvente puro. La diferencia entre los puntos
de ebullición de la solución y del solvente para una presión constante
establecida, se conoce como eleuaczón del punto de ebullición, que depende
de la naturaleza del solvente y la concentración del soluto, pero es independiente, por lo menos en soluciones diluidas, de la naturaleza del soluto
en tanto &te no se ionice.
Este aumento es fácil de comprender en función de la disminución
de la presión de vapor y es una consecuencia directa de ella. Consideremos el diagrama presión de vapor-temperatura de la figura 9-1. La curva AB representa la preión de vapor del solvente puro como función de la
Figura 9-1. Ascenso d f l punto ilr
ebullición debida .i lo- solutos
10
1
Temperatura
temperatura. Como la pcsión de vapor de la solución es, para todas
las temperatura?, nicrior que la del solvente, la curva dr. ~ir<siónde vaportemperatura de la solución debe quedar debajo de l a dci ~olvcnte ~ , u c
Aumento del punto de ebullición de las soluciones 323
de aqui que quedará representada por otra tal como CD en la figura.
A fin de alcanzar el punto de ebullición correspondiente a cierta presión
,*terna que se ejerce sobré la solución Po, debe calentarse a temperaturas
a las cuales las presiones de vapor respectivas igualan la de confinamiento.
Como lo señala el diagrama, el saliente puede alcanzar la presión PO a la
temperatura T,, pero la solución debe elevarse a T mayor que T,, antes
de que se alcance la misma presión. En consecuencia para la misma presión
externa. la solución debe hervir a una temperatura más elevada que la
del solbente puro; y, el ascenso del punto de ebullición de la solución, ATa,
está dado por ATa = T - T,. Estas consideraciones son completamente
p e r a l e s v se aplican a cualquier solución de soluto no volátil.
Al aplicar la ecuación de Clausius-Clapeyron y la ley de Raoult a las
condiciones descritas en la figura 9-1, es posible deducir una rilación
entre el ascenso del punto de ebullición de la solución y su concentración.
Como los puntos E y F quedan sobre la curva de presión de vapor de la
solución, ambos están dados por la ecuación de Clausius-Clapeyron.
Po
=.nl
AH, T
- To
K ( X )
donde P y Po son las presiones de vapor de la solución a las temperaturas
T , y T respectivamente. AH, es el calor de vaporización por m01 de solvente desde la solución. Si ésta es diluida, aquel calor equivale esencialmente al de vaporización por mol de solvente ~ u r o .De nuevo, cuando
la solución es diluida, T no es muy diferente de T o ,y de aquí q i i ~pndemos
escribir T T o= T i . En consecuencia, la ecuación (6) se tranforma en
En la ecuación ( 7 ) ,Pes la presión de vapor de la solución a Tomientras que Po es también la del solvente puro a la misma temperatura.
Cuando la ley de Raoult es aplicable a la solución, resulta
l
l
donde N, es la fracción molar de soluto en solución. De aquí, la ecuación
( 7 ) se convierte en
Además, el desarrollo de In(1 - N * ) en serie de potencias, d a la expre-
sión siguiente
324 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
y como se especificó que la solución era diluida, N , debe ser pequeño;
con lo cual todos los términos del desarrollo después del primero, deben
considcrarse despreciables, y podemos escribir - N , en vez de ln(1 - N z )
en la ecuación ( 9 ) ,
y por tanto:
L a ecuación ( 1 0 ) nos da el aumento del punto de ebullición de una
solución en función del punto de ebullición y calor de vaporización del
solvente, y de la fracción molar de soluto en la solución. Como para un
solvente dado T,y &Y, son constantes, el aumento del punto de ebullición
en soluciones diluidas es proporcional a la fracción molar de soluto Únicamente y no es dependiente de la naturaleza del soluto, por tanto, es una
propiedad coligativa.
Es práctica común en el estudio de esta propiedad, expresar la concentración no en fracción molar sino en moles de soluto por IODO g de solvente, es decir, molalidad m. Si ahora designamos con n , el número de
moles de solvente en 1000 g, entonces,
puesto que en soluciones diluidas m es pequeño en relación con ni y puede
despreciarse. Por lo tanto:
Para un solvente dado, todas las cantidades en el paréntesis de la
ecuación (11) son constantes, y el término total. Escribiendo
la ecuación (11) se reduce finalmente a
De acuerdo con la ecuación (13) el ascenso del punto de ebullición
de una solución diluida es directamente proporcional a la molalidad de la
solución. La constante de proporcionalidad Kb se deiiomina comtnnte
rnolal de rleuación del punto de ebullición o constante ebulloscópicn, y
significa el incremento del punto de ebullición de una solución 1 molal
Aumento del punto de ebullición de las soluciones 325
dc un soluto en un sol~entecuando son aplicables las leyes de las soluciones diluidas a dichas concentraciones.
La validez de la ecuación (13) se comprueba d e varias formas. E n
+ n e r lugar, la ccuaciln cxige que para un solvente dado, el ascenso
di1 punto de ebullición sra proporcional a la molalidad independientemmte de su naturaleza, y además que la constante de proporcionalidad
resulte indepcridicrite tambiín de la naturaleza o concentración del soluto.
En ambos casos, dicha ecuación se muestra de acuerdo con los resultados
qperimcntales de las soluciones diluidas. Aún es posible realizar una pmeha inás critica. al comparar los valores observados de Ka con los predichos
por la ecuación (12). Si ésta es válida, debe ser factible calculai. la constante de ascenso del punto de ebullición por m01 por un conocimiento
del punto de ebullición normal y del calor de vaporización del solvente. Por
ejeniplo, T , = 373.ZoK en el caso del agua, y 539 calorías por gramo
es el calor de vaporización. Al aplicar la ecuación (12) resulta
RT;
KV>
= --
m,n1
1.987 x (373.2)2
(18 02 x 539) (1000/18.02)
= 0.51 3O
Este \alar es muy hrieiio en relación con el observado experimentalmente
de Kb = 0.52".
La tabla 9-2 muestra los puntos de ebullición normales y las constantes
ebulloscópicas observadas d? buen número de solventes, y así mismo se
incluyen las de asccimo molar calculadas de la ecuación ( 1 2 ) , p i r a facilitar
la comparaciiin. La concordancia entre los valores calculados y observados es muy satisfactorio, si tenemos en cuenta la incertidumbre de algunas
TABLA
9-2. Constantes de ascenso del punto de ebullición malal
-
Punto de ebullición
Solvente
K,(calc.)
1.72
5.0
2.57
3.88
1.20
2.11
O. 80
0.52
1.73
5.02
2.61
3.85
1.19
2.16
0.83
0.51
\ L.1
Acetona
Tetraclorum
K,(obs)
,""\
de
Benceno
Cloroformo
4lrohol etilico
Cter etilico
.'Icohol metilico
carbono
56.5
76.R
80.1
61.2
70.4
34 6
64.7
100.0
deterniin3sionps de los puntos de ebullición: en vista de lo cual, se utili~a
la ecuación (12) al calcular calorcs de vapori7aciÓn dcl mlvente, a partir
de los valores experimentales dc K*.
1
326 Capíhdo 9: Propiedades coligativa~de las soluciones
CALCULO DE LOS PESOS MOLECULARES A PARTIR
DEL ASCFNSO DEL PUNTO DE EBULLICION
Si designamos por ATa al aumento del punto de ebullición para una
solución que contiene W , g de soluto, cuyo peso molecular es M 1 disuelto
en W , g de solvente, entonces el peso de soluto por l000g de solvente es
y de aquí que m, la rnolalidad de la solución, es
La ecuación (13) en función de la (14) nos da
Si conocemos la constante ebulloscópica de un solvente, es suficiente
determinar el aumento del punto de ebullición de una solució~i por un
soluto desconocido en cierta cantidad dada, para poder hallar el peso
molecular de dicho soluto. Cuando por el contrario se desconoce la constante se hace una determinación independiente de ATa con un soluto de
peso molecular conocido. Los cálculos involucrados se comprenderán mejor
mediante un ejemplo. Una solución que posee 0.1526g de naftaleno
(cuyo peso rnolecular es 128.17) en 50.00 g de tetracloruro de carbono
crigina un aumento del punto de ebullición de 0.40Z°C, mientras que
ot-a con 0.6216g de soluto desconocido en el mismo peso de solvente
da un aumento de 0.647OC. Hallar el peso molecular del soluto desconocido.
Para hallar el valor de Ka del tetraclomro de carbono tenemos 10s
datos siguientes:
Al sustituirlos en la ecuación (15) obtendremos:
Descenso del punto de congelación en las soluciones 327
utilizando ahora el valor hallado de Ka, junto con la información de la
sustancia no conocida,
J , ~ecuación
(15) nos d a para M?, el siguiente valor
DESCENSO DEL P U N T O DE CONGELACION
DE LAS SOLUCIONES
41 enfriar una solución diluida, se alcanza eventualmente una temperatura en la cual el soloente sólido comienza a separarse. La temperatura
en que comienza tal separación se conoce como punto de congelación de la
solución, que de una manera más general se define como aquella temperatura en la cual una solución particular se halla en equilibrio con el
solvente sólido.
Las soluciones se congelan a temperaturas menores que el solvente puro.
El descenso del punto de congelación de una solución es, otra vez, una
consecuencia directa de la disminución de la presión de vapor del solvente
por el soluto disuelto. Para darnos cuenta de este hecho, consideremos el
diagrama de presión de vapor-temperatura de la figura 9-2, en el cual
AB es la curva de sublimación del solvente sólido, mientras que CD es de
presión de vapor del liquido solvente puro. En el punto de congelación
de este último. se hallan en equilibrio la fase sólida y la liquida y en consecuencia ambas deben poseer idéntica presión de vapor. El único punto
del diagrama en el cual ambas formas del solvente puro tienen igual presión de vapor es en B, intersección de AB y CD, y por tanto T,,que corresPonde a B, debe ser el punto de congelación del solvente puro. Cuando
en éste se disuelvr un soluto, hay un descenso de la presión de vapor de
este último, y ya no hay equilibrio a To, sino que se alcanza de nuevo
cmndo la curva de presión de vapor de la solución, corta la dc sublimación, y entonces tendremos el punto de congelación de la solución. Como
la cuma de presión dc vapor de la solución, EF, queda debajo de la del
Solxente puro, la intersección de EF y AB tiene lugar solamente en un
Punto tal como E para el cual la temperatura es menor que Te. De aquí
que cualquier soliición debe tener un punto de ccngelación T, menor que
la del solvente To.
La depresión del piinto de conqrlación dc una ~oliición,viene definido
por AT, = T o- T y r"llr"Ccnta el nfirnero dc grados, en que aqiicl punto
328 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
es menor que el del solvente puro. L a magnitud de A T , depende tanto de la
naturaleza del solvente como de la concentración de la solución. Cuando
éstas son diluidas, el valor de AT, varía linealmente con la concentración,
sin depender de la naturaleza del soluto. La constante de proporciona.
lidad de esta variación de concentración, es sin embargo una función del
solvente y cambia considerablemente para los diferentes solventes.
Para establecer una relación matemática entre el descenso del punto
de congelación de una solución con los factores mencionados, considere.
mos de nuevo la figura 9-2. Designemos por P. a la presión de vapor del
sólido y del solvente líquido puro a T,, y por P la del solvente sólido y
Temperatura
Figura 9-2.
Depresión del punto de congelación par adición de soluto.
solución a la temperatura T. De nuevo, sea P la presión de vapor del
solvente líquido sobreenfriado a S,punto C . Puesto que los puntos G y
B quedan en la misma línea de presión de vapor, están relacionados
entre sí por la ecuación de Clausius-Clapeyron
donde M, es el calor de vaporización del solvente puro. Análogamente,
como' los puntos E y B se encuentran sobre la misma curva de sublimación podemos establecer que
donde M , es el calor de sublirnación del solvente sólido. Restando ahora
Descenso del punto de congelación en las soluciones 329
la ecuación (17) de la (16), resulta:
In P.
- In Po- In P, + In P =
Pero ( A H , - VI,)
-
4H,(T0 - T)
A H ~ T o T)
RToT
RToT
(4Hs - AHn)(To - T)
I n P - I n P O = -RToT
P
(4H8 - AHm)(To- T)
111- = P
O
RToT
= AH,,
(18)
calor de fusión del solvente. Por esa razón
La ecuación (19) relaciona la presión de vapor del solvente sólido a la
temperatura T, con la del solvente liquido puro a la misma ternpcratura,
en la cual las presiones de vapor de este último y de la solución son iguales
(punto de congelación de la solución), por lo tanto la ecuación (19) establece también una relación entre la presión de vapor de la solución y
la del solvente puro en T. Si suponemos ahora, que la ley dc Raoult es aplicable, tendremos: PIPO = N, = (1 - N,), donde A', y N? son las lracciones molares del solvente y soluto en la solución, y la ecuación (19) se
transforma en
Cuando N, es pequeño, es decir, cuando la solución es diluida, In(1 - N,)
es esencialmente igual que - S,: y ToT vale T:.
Finalmente designemos por m la molalidad de la solución y por ni el
número de moles del solvente en 1000 g: S, = m / n , (aproximadamente),
donde
La ecuación (22) es 13 rclación fiindamental de crioscopia y es macfamente análoga a (13) que corresponde al aumento del punto de rbullici6n. K,, denominada constante criorcLipico o dc descenso del punto de
330 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
congelación molal del solvente, se define en función de las cantidades carac.
teristicas del solvente solo, sin depender de la concentración o naturaleza del
soluto. Como para un solvente dado K f es una constante, la depresión
del punto de congelación está determinado por la concentración del soluto
únicamente y es una propiedad coligativa.
Una prueba importante de la ecuación (22) es la constancia de K,
con la concentración, para un solvente dado. La tabla 9-3 muestra algunos
datos experimentales del descenso del punto de congelación en soluciones
Depresiones del punto de
congelación de soluciones de urca e; agua
TADLA
9-3.
(-1
m
AT,
K,
= AT,/nz
de urea en agua y el valor de Kt = aT,/m calculado a partir de los
mismos. Como nos lo muestra la última columna, K r , es una constante
a lo largo de todo el intervalo de concentraciones y vale 1.85. Se han
ohtcnido valores esencialmente idénticos para la constante crioscópica del
agua con otros solutos. Además, el valor de la misma está de acuerdo
con el valor predicho para el agua como solvente según la ecuación (23).
En efecto, T,= 273.2, aH, = 79.71 x 18.02, y n , = 1000/18.02. Por 10
tanto
Análoga concordancia entre la teoría y la experiencia se h a obtenido
con otros muchos solventes. La tabla 9-4 srñala algunos de ellos, sus
puntos de congelación y sus constantes crioscópicas. Como se puede observar, la constante crioscópica mínima señalada es la del a s a , de aquí que,
para una concentración dada de soluto, se logran depresiones del punto
de congelación más pronunciados en otros solventes, hecho de gran importancia en el uso de &tos para la determinación dc pesos molcciilares.
A causa de las suposiciones hechas pn su derivación, la ecuación ( 2 2 )
es v5lida sólo en soluciones diluidas; cn concrntracioncs Irlayores, K , se
Descenso del punto de congelación en las soluciones 331
T ABLA 9-4.
Constantes crioscópicas de algunos
dvente~
Punto de
congelación
i"C)
Solvente
Kf
Acido acético
Benceno
Bromofomo
Alcanfor
Ciclohexano
1,4-Dioxano
Naftaleno
Fenol
Tribramofenol
Trifenilfosfato
Agua
desvía considerablemente de la constancia, y la desviación es tanto mayor
cuanto lo es l a concentración. Así, la constante crioscópica del benceno
evaluada a partir de determinaciones del punto de congelación es 5.0g°C
por m01 en una solución 0.1185 rnolal y sólo 4.8ZCC por m01 en otra
1.166 molal.
En vista de la facilidad con que se obtienen datos suficientemente precisos de puntos de congelación resultan muy convenientes y seguros en la
determinación de pesos moleculares de solutos en solución. Los cálculos
comprendidos son exactamente análogos a los efectuados en conexión con
el aumento del punto de ebullición, lo mismo que sus ecuaciones y otros
datos necesarios. Si la expresión de m obtenida a partir de la ecuación
(14) se sustituye en 16 ecuación (22) resulta:
desde ia cual, se sigue que el peso moiecular es
1000
= KI
w2
(m)
Por esa razón, para calcular el peso molecular debe conocerse Kt del
solvente y medirse AT,, W , y W 2 .Si no se conoce K , se calcula por medio
de la ecuación (23) o se determina mediante los puntos de congelación
con una solución que contiene soluto de peso rnolecular conocido en el
mismo solvente.
332 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
-
SEPARACION D E SOLUCIONES SOLIDAS POR CONGELACION
Las consideraciones y ecuaciones de la depresión del punto de conce.
lación son vilidas sólo cuando cl sólido que sc separa d r tales soluciones
es el solvente puro, pero en ocasiones, como sucedc con soluciones de
yodo o tiofeno en benccno, el sólido que cri3taliza contiene el sduto
disuelto en forma de solución sólida. E n estc caso, la ecuación (22) y
otras basadas en &a, no son aplicables. Consideracionrs teóricas nos mues.
tran, que, entonces, es preciso reemplalar la e c u a c i h ( 2 2 ) por
donde los símbolos tienen el mismo siznificado que antes, y k es la rplación
de la fracción molar de soluto en el sólido a la fiacción niolar dt. soluto en
solución. Sin embarg-o, cuando la fase sólida no es pura, deben distinguirse
dos condiciones. Si rl soluto es más soluhle en el solvente liquido que en
el sólido, k i.3 una fracción positiva, v por tanto (1 - k ) es menor que la
unidad. El efecto es, por tanto, producir una depresión del punto de congelación menor que el que cabría anticipar por la separación del solvente
sólido puro. Si, por otra parte, el soloto es más soluble en la fase sólida
que en el liquido, k > 1 y ( 1 - k ) es negativo, en estas condiciones, lo
es también ATr; es decir se ohsena un ascenso en vez de un dc,sccnso
en el punto de congelación de la solución. Esta conducta se presenta rara
vez en circiinstancias normales, pero no sucede así con los metales y
sales que forman soluciona sólidas.
3
OSMOSIS Y PRESION OSMOTICA
I
1
Cuando una solución de soluto se separa de un solvente puro mediante
una membrana semipenneable, es decir, que permite el paso dcl solvente
pero no del soluto, se observa que aquél tiende a pasar a tracés de la
membrana a la solución, y de ahí a diluirlo. El fenómeno, llamado ósmosis, fue observado por vez primera por Abbé Nollet en 1748. Para solutos
acuosos de bajo peso molecular, la niejor membrana scmipermeahle conocida rs lina película de feirociariiiro de cobre, Cu,Fr(CN),, prcparado por contacto de una solución de una sal cúprica con una de ferrocianiiro de potasio. Con soliitos de elevado peso molecular en solventes
orshicos las membranas más usuales son películas finas de celulosa o
nitrato de celulosa.
Antes de continuar, cs necesario definir una cantidad llamada ~ r e s i ó n
osmótira. n.Con rstr fin considerenios PI diasrama mostrado pn la fi,gura
9 - 3 . A es una cámara abierta en un cxtrcnio y cerrada en el otro con un
pistbn móvil B. 1.a cimara se divide por medio de una membrana senii-
Osmosis y presión osmótica 333
Presión ormótica de
soluciones.
Figura 9-3.
las
I,emcable C en dos secciones, de las cuales la de la derecha está llena con
iin soliente puro, y la otra con solucijn que contiene algún soluto. A
c a i i i ~de la ósniosis, el solbente tiende a pasar a través de la membrana
hacia la solución y desplaza el pistón hacia arriba. El movimiento del
pistón y la ósrnosis se detienen al aplicar una presibn sobre aquél a fin de
l~~mteni.rlo
en su po~iciónoriyiual: se llama presión osmótira de la solución
a la presión mecánica que drbc aplicarse sobre la solución para impedir la
ósmosis del sol~entehacia la solución a través de una membrana semipermeable. Conio xeremos, depcnde de muchos factores, pero no es función
dc la naturalen de la membrana en tanto ésta sea semipermeable. De
aquí que la presión osmótica, debe considerarse como una medida de alguna
diferencia real, expresable en unidades de presión. entre la naturaleza del
solvente y solución rn& bien que un fenómeno para el cual es responsable
la memhrana. En realidad ésta constituye un sirnplc artificio por el cual se
pone de manifiesto una diferencia existente.
La serie dc mediciones más rxtensa sobre presiones osmóticas dc soluciones acuosas la rcalimron Earl dc Berke!ey )- Hartley (1906-1909) en
In;laterr~.. y Framr. Morse v sus colaboradores (1901-1923) i n E. U. La
fisura 9.4 presenta un diagrama esquemático del aparato usado por Berke-
Fisura 9-4. Aparato de presión
osmótica de Berkeley y Hartley.
ley y H a r t l q . A es un tubo poroso sobre cuya cara externa, se ha deposi-
t a d ~por una técnica especial nna capa dc frrrocianuro de cobre. Este
fue montado por medio dc juntas a prneba de agua dentro de una
camisa metálica B, que lirva un ajuste C con el cual se aplica presión.
Por D se llena A con agua pura hasta una scíial fija sobre el c ~ p i l a rE,
Y en B se coloca la solución problema, entonces se sumerze el aparato
en un termostato. Como resultado de la ósmosis, el nivel del líquido en E
tiende a descender Al aplicar presión por C el nivel en E se restablece
es necesario aplicar para lograr dicha restauración es una
la prcsión
medida de la presión osmótica dc la solución. Con este procedimiento
%? establece pronto el equilibrio Y no varia la concentración de la solución.
334 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
""1
La tabla 9-5 nos presenta datos exactos de las presiones osmóticas de
soluciones de sacarosa en agua a diferentes temperaturas, según mediciones
realizadas por Berkeley, Hartley y Morse, Frazer y colaboradores, y son
muy características de las soluciones acuosas obtenidas con sustancias no
.:lectmlíticas.
TABLA 9-5.
Presiones orrnóticas de las soluciones acuosas de la sacarosa
Presión asmótica íutm)
RELACION ENTRE LA PRESION OSMOTICA Y LA DE VAPOR
Partiendo de consideraciones puramente termodinámicas es posible
obtener una relación entre la presión osmótica y el descenso de la presión
de vapor de una solución. A una temperatura constante y la presión externa de una atmósfera, la transferencia de solvente a la solución tiene
lugar porque la energía libre molar del solvente puro, $, es mayor que
entre
la correspondiente de la solución, F,: Para alcanzar el equilibrio
ambos y detener la ósmosis, es necesario incrementar el valor de F, a F,'
elevando la presión externa de la solución desde 1 atm a la presión P.
Si este incremento en la energía libre es M, entonces la condición de
equilibrio osmótico se establece cuando
Fy
y de aquí
=
PI + AF
- Fy = - A F
= RT
Pero, según las ecuaciones (30) y (42) del capítulo anterior F, In a, = RT In P , / q cuando la fase de vapor del solvente se comporta de
manera ideal, y de aqui que la ecuación ( 2 7 ) se transforma en
Relación entre la presión osmótica y la de vapor 335
para encontrar A F utilizamos la ecuación (7) del capitulo 8, que conduce
,la expresión
dF,
= P,dP
es el volumen molar parcial
del- solvente en solución. Si integradonde
,,,os esta ecuación entre los limites F, = F, cuando P = 1 atm, y Fi= F,'
la presión P, obtcncmos
.
Pero Kf- E = M. Además, si suponemos que
la presión, la ecuación (29) se convierte en
es independiente de
donde ii = (P - 1) es la presión que debe aplicarse para detener el proceso osmótico, es decir la presión osmótica. Al sustituir l a ecuación (30)
en (28) resulta:
RT
n = ,lnvi
PO,
p1
que es la relación buscada entre el descenso de la presión de vapor y la
presión osmótica. Cuando las soluciones involucradas no son demasiado
concentradas, VI se toma idéntica con V ; que es el volumen molar del
solvente, y entonces
T A B L A 9-6. Comparación de los cálculos de la presión osmótica
con los observades en las soluciones de sacarosa. a 30°C
m
0. 100
1.000
2.000
3.000
Ls.
atm
2.47
2i.?2
58.37
95.16
la ecuacibn (31) nos da
n,.,,,
Ec. ( 3 2 )
2.41
27.0
58.5
96.2
Ec. (331
2.40
20.4
35.1
45.5
336 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
L a ecuación (32) permite el cálculo de la presión osmótica de una
solución a partir de su presión de vapor y el del solvente puro, a cualquier
temperatura constante T. Además reproduce las presiones osmóticas observadas incluso cuando las concentraciones son bastante elevadas, como se
observa en las columnas segunda y tercera de la tabla 9-6.
ECUACION DE VAN'T HOFF DE LA PRESION OSMOTICA
L a ecuación (32) se reduce a una forma más simple en el caso de
soluciones diluidas que obedecen la ley de Kaoult. Entonces P J P : = N , =
1 -hr,, y de aquí que
Si desarrollamos ln ( 1 - A',) en serie de potencias como se realizó con
anterioridad, todos los términos después del primero resultan despreciables en soluciones diluidas, y por tanto In ( 1 - NZ) es igual que - N ,
= - nz/n,, donde n2 es el número de moles de soluto en ni d e solvente.
De aauí aue
Pero Vyn, es el volumen total de solverite que contiene n2 moles de soluto, que para soluciones diluidas es esencialmente el volumen V de la
solución. E n consecuencia
I I V = n,XT
o, de otra manera
n = CRT
donde C es la molaridad de la solución
L a ecuación (33) se conoce como ley de Van't Hoffde las soluciones
ideales. Esta ecuación es idéntica en su forma con la ley de los gases ideales, donde ii rremplaza la presión del gas, P. Su validez pupde juwarse
de los datos dados en la tabla 9-7 y la columna final de la 9-6. Como cabe
esperar, la ecuación se aplica sólo a soluciones diluidas, esto es, para molaridades menores que 0.2.
La ecuación de Van't Hoff se puede utilizar para encontrar los pesos
moleculares de solutos disueltos, de igual manera que la ley d e los gases
ideales se utiliza para hallar los de los gases. Sin embargo, este método
rara vez se utiliza excepto en el trabajo con polimeros de cadena larga,
a causa de la qran dificultad de obtener datos precisos de las presiones
osmótiras para snluciones diluidas.
Soluciones de los e l d l i t o a
337
TABLA 9-7. Presión osrnótica d e las soluciones
acuosas de la sacarora a 14-C
C
Obr.
Ec.(34)
La misma información deseada se logra por determinación del descenso
del punto de congelación, pero con una exactitud que rara vez se alcanza
en las mediciones de la presión osmótica.
SOLUCIONES D E LOS ELECTROLITOS
;
1
1
l
i
Las soluciones de los no electrólitos en agua y otros solventes no conducen la electricidad, presentando las propiedades coligativas descritas en
las secciones anteriores. Las relaciones establecidas en aquellos casos, se cumplen también por las soluciones que dan para las sustancias disueltas Femoleculares normales, o múltiplos sencillos de los mismos. Por otra parte,
existen sustancias, especialmente sales, ácidos inorgánicos y bases, que al
disolverse en agua o un solvente apropiado originan soluciones que conducen la electricidad en mayor o menor proporción, y se denominan electrólitos. los cuales también presentan propiedades coligativas de descenso de presión de vapor, aumento del punto de ebullición, descenso del punto de
cancelación y presión osmótica, pero no obedecen las relaciones simples
deducidas para los no electrólitos. Los efectos coligativos observados son
siempre mayores que los que'cabría esperar de la concentración wrrespondiente. Podemos establecer lo dicho de otra manera, las soluciones de el=trólitos se comportan romo si el soluto tuviira un piso molrcular menor
que el correspondiente a ia fórmula más simple de la sustancia. El resto del
C ~ i t u l o ,a dedica a la discusión de las propiedades coligativas de las uihriones de electrólitos v a una exposición de algunas teorías que se han
a d e h t a d o para explicar su comportamiento, otms aspectos del cual se
elaborarán en los capítulos siguientes.
Corno sc indicó antes, ~l desrpnso d ~ punto
l
dr rongrlación, aummto
del punto de cbullición, disminución de la prcsión de vapor, y la ~resión
Osmótica de los elcctrólitos es siernprr mayor ~ U Pla que corrcspondc a
las soluciones no electroliticas de igual concentración total. Los datos
338 Capítulo 9: Propiedadcs coligativas de las soluciones
mostrados en la tabla 9-8 son una muestra típica de la naturaleza de las
desviaciones. Esa tabla presenta las relaciones del descenso del plinto
de congelación observado A S f , con la molalidad, m, a distintas concentraciones para buen número de electrólitos en solución acuosa. De acuerdo
con los argumentos eupiiestos antes, esta relación debe aproximarse para
soluciones acuosas diluidas al valor de K i del agua, esto es 1.86O por mol
en 1000 g de solvente. La inspección de la tabla revela, sin embargo,
q u i los valores límite obtenidos en varios electrólitos discrepan considerablemente de 1.8ti0, siendo muclio mayores. Aun más, el límite que se
T ABLA 9-8
Valores de AT,/rn de las soluciones acuosas de los electrólitos
obtiene no es siempre el mismo sino que varía desde aproximadamente
2 x 1.86 = 3.72' para sustancias como el ácido clorhídrico y C ~ O N ~ Ode
amonio, a 3 x 1.86 = 5.58O en el caso del cloruro de cobalto y 4 X 1.86
= 7.44' para el ferricianuro de potasio.
Para representar las propiedadrs rolizativas dr los eiectrólitos por
medio de relaciones obtenidas con los no electrólitos, Van't IIoff sugirió
el uso de un factor i, que se define como la razón del efecto coligativo
Producido por una concentración ni de electrólito diuidida por el efecto
obserundo jara la m i i m a concentrac~ónde u n n o electrólito. Al utilizar
esta definición de i para la depresión del punto de congelación de las ~ 0 1 ~ ciones no electrolíticas. se deduce que
dondi A T , rs ~1 dcsccnso drl punto dc ronSrlación del el~rtrólitoy ( A T , ) o
el correspondirnte a un no elertiólito clc la misma concentración. Como, de
Propiedades coligativas de los electrólitos 339
&cuerdo con la ecuación (22) ( A T , ) , Kim, entonces:
Los íalores de i deben calcularse de los datos experimentales para cada
electrólito a varias concentracionrs. Se ha encontrado, sin embargo, que
una vez que se conoce i para una concentración particular de un electrólito
en una de sus propiedades coligativas, ese mismo valor con una pequeña
por temperatura, es esencialmente válido para otras propiedades
a igual concentración. En consecuencia escribiremos:
donde las cantidadcs sin subíndices se refieren al electrólito y las que los
poseen son no electiólitos de la mis~naconcentración. Al sustituir las eruaciones ( 2 ) , (13) y (33) en la (371, las expresiones del descenso de presión
de vapor, aumento del punto de ebullición. y presión osmótica de las
soluciones de los electrólitos son:
AP = i(AP)o= iPONt
ATs = i ( A T s j o = tKam
(38)
Estas ecuaciones son aplicables únicamente a soluciones diluidas.
La tabla 9-9 seíiala los valores de i calculados a partir de la tabla 9-8
mediante la ecuación (36). La lectura cuidadosa de esta tabla revela que
en solucioIles diluidas i incrementa cuando disminuye la molalidad, y se
aproxima a un limite de dos en electrólitos como el ácido clortiídrico,
TABLA 9-9
11L
HCI
Factors
HN08
1,
de Van't Hoif de diversos electrólitos
NHXI
CuSO,
H804
C6C14 KsSO, K3Fc(CN)s
340 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
nítrico, cloruro de amonio y sulfato de cobre, un limite de tres para elcctrólitos del tipo del ácido sulfúrico, cloruro de cobalto, y sulfato de potasio,
y finalmente un limite de cuatro para el ferricianuro de potasio. En soluciones más concentradas, por otra parte, i pasa por un mínimo y entonces
se incrementa, con frecuencia hasta un valor que excede los límites establecidos en soluciones diluidas.
LA TEORIA D E ARRHENIUS D E
LA DISOCIACION ELECTROLITICA
Las propiedades coligativas de los electrólitos y el hecho que sus soluciones conducen la electricidad, condujeron a que Svante Arrhenius propusiera en 1887 su célebre teoría de la disociación electroiitica, cuyos puntos
esenciales son familiares ya al estudiante. Arrhenius postuló, que los electrólitos en solución se disocian en partículas cargadas eléctricamente, Ilamadas iones, de manera que la carga total de los iones positivos es igual a
la carga total de i o n a negativos. El resultado final es, por lo tanto, que la
solución m conjunto resulta neutra a pesar de la presencia de partículas
cargadas eléctricamente. La presencia de estos iones es responsable de la
conductividad eléctrica de las soluciones.
Arrhenius señaló además. que un electrólito en solución no se encuentra forzosamente disociado en su totalidad; en su lugar, lo hace parcialmente encontrándose en equilibrio con moléculas no disociadas de sustancia. Por tanto, puede anticiparse teniendo en cuenta las leyes del equilibrio
químico, que la proporción de la disociación varia con la concentración,
siendo mayor cuando ésta disminuye. En vista de lo cual, cabe esperar
una disociación total en soluciones diluidas a infinito. En las demis ocasiones, sin emhargo, el electrólito sc halla disociado parcialmente rn un
grado que depende de la naturaleza de la sustancia y su concentración.
Esta idea de la disociación parcial la usó Arrhenius para explicar el
comportamiento coligativo de las sustancias elrctrolíticas. Las propiedades
coligativas de una solución diluida, dependen del número de partículas,
sin que importe su especie, presentes en cicrta cantidad de solvente.
Cuando una sustancia se disocia rn sus iones, incrementa el número de
partículas de la solución. Si suponemos ahora, que cada ion actúa con
respecto a las propiedades coligativas dc igual manera que una molécula
no ionilada, el aumento en el número total de partículas en solución debe
originar un incremento en los efectos coligativos. Así como la depresión
del punto de congelación molal de un no electrólito en agua es 1.86'G
cabe esperar quc un elcctrólito que se disorir totalmente produciendo dos
iones ~r cada molécula, producirá un d~scensodel ],unto de congclación
dos v c ~ c smayor, cs decir, 3.72OC. Análogamcntv, si el elrctrólito produce
tres ior,es, la dvpresión del punto de congelaci6n molnl si 1 5 5.5E0(1. rtc.
L a teoría Arrhenius de la diiciación electrolítica 341
Estos descensos corresponderán a iin grado total de disociación en los diferentes tipos de electrólitos, cuando las soluciones son extremadamente
diluidas y la tabla 9-8 nos muestra que así sucede en realidad.
De acuerdo con esta teoría, cualquier valor observado en los descensos
de los puntos de congelación molales mayores que 1.86"C y menores que
los que podría alcanzarse con la disociación total, corresponden a una ionizarión parcial del electrólito. Si el caso es éste, es posible calcular el grado
de ionización a partir de los datos coligativos observados o de los valores de
i calculados a partir de ellos. Consideremos un electrólito A& que se disocia rn x iones de A, cada uno con una carga z,, e y de B, con 2-, según
la ecuación
A,B, = xAL+ yBz(41)
+
Si la molalidad original del electrólito es m, y el grado de disociación
A,B, que disocia es ma, y el número
de moles que permanece no ionizado en m - mu = m ( 1 - u ) . Pero por
cada mol de A,B, que disocia, se obtienen x moles de iones positivos e y
negativos. En consecuencia, cuando se disocian ma, se obtendrán x(ma)
moles de As+ y y(ma) de Bz-.Entonces, el número total de moles, mt, de
las sustancias de todos los tipos presentes en solución, es
a, entonces el número de moles de
Si designamos por v al número total de iones producidos por una molécula
de electrólito, v = x + y , y la ecuación (42) nos da:
Ahora para una molalidad total mt la depresión del punto de congelación, estará expresada por ÁTl = Klmt, y de aquí, que en función de la
ecuación (43)
4 T 1 = Krm[l a ( v - l ) ]
(44)
+
Despejando el valor de a, resulta
Una relación más r n c r a l de u se deduce al comparar la ecuación
(44) con la ( 3 6 ) . Como ATI = i Ktm, el valor de i está dado por
342 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
y por lo tanto
La ecuación (47) es aplicable a cualquier propiedad coligativa y puede
obtcncrse por consideraciones del aumento del punto de ebullición, descenso
de la presión de vapor, o de la presión osmótica. Proporciona el grado de
disociación de un electrólito, si conocemos i y el tipo de electrólito en cuestión.
CLASIFICACION DE LOS ELECTROLITOS
Los cálculos del grado de disociación de diversos electrólitos en solución
acuosa muestran que prácticamente todas las sales se encucntran muy disociadas en iones. Lo mismo es cierto con los ácidos y bases. Como cabe
esperar de su elevado grado d e disociación, las soluciones acuosa? de estas
sustancias son buenas conductoras de ia electricidad, pero por otra parte,
hay muchas sustancia? también, cuyas soluciones acuosas exhiben relativamente poca conductividad, y cuya conducta coligativa indica que están solo
ligeramente disociadas, aún en concentraciones bastante bajas. Entre ellas
se incluye un gran número de ácidos orgánicos como el acético, propiónico, y benzoico; ácidos inorgánicos como el carbónico, hidrosuifúrico,
hidrociánico, orto-arsénico, %rico, y ácido hipocloroso; y bases como el
hidróxido de amonio, de cinc, y plomo. Las soluciones de las sustancias
que presentan buena conductancia e indican un alto grado de disociación
en su solución se denominan electrólitos fuertes, y por rl contrario las que
muestran una conductancia pobre y un grado bajo de disociación. se llaman
electrólitos débiles.
Pero no todos los electrólitos se clasifican claramente en débilrs O
fuertes. Hay algunos que en solución acuosa: como los ácidos o-clorobenzoico, o-nitrobenzoico, 3.5-dinitrobenzoico, y cianoacético, tienen una conducta tal que se clasifica en un gnipo intermedio. Su número no es grande,
y, de ahí que no se estudien con más detenimiento.
Con frecuencia, es conveniente subdividir los electrólitos fuertes, de
acuerdo con la carga de los ioncs que producen. Así un rlectrólito
que origina dos iones con una sola carga, se le conoce corno un electrólito del tipo 1-1, aquél que produce innes positivor univalentes y negativos
divalentes, como el sulfato de potasio o el ácido sulfúrico, se llama electrólito dcl tipo 1-2, riii~ntrasquc si ocasiona iones positivos uivaientcs Y
univalqtes negativoi, como el cloruro de bario o el nitrato de magnesiO,
se dpnomina electrólito del tipo 2-1. An.ílosamcnte el Sulfato dc colirc es
un electrblito del tipo 2-2, rnirntras que el ferricianuro dc llotasio rs un
1!
Crítica de la teoría de h h e n i u s 343
e~ectrólito del tipo 1-3. En este método de clasificación de electrólitos
fuertes, se designa primero la carga de los iones positivos y a continuación
1, de los negativos.
CRITICA DE LA TEORIA DE ARRHENIUS
Las aplicaciones de la teoria de Arrhenius al comportamiento de coligación, conductancia eléctrica, y equilibrio iónico de los electrólitos débiles
muestran que la teoría es satisfactoria en dichos casos. Sin embargo cuando
se trata de aplicarla a los electrólitos fuertes, se encuentran tantas anomalías e inconsistencias que sursen senas dudas de la validez de alguno de
los postulados de Arrhenius en relación a la naturaleza de los electrólitos
fuertes.
El grado de disociación de un electrólito se determina no sólo por sus
propiedades coligativas, sino también por conductimetría como se verá
en el capítulo 11. Por ambos procedimientos, los valores de a obtenidos
concuerdan muy bien en el caso dc los electrólitos débiles, pero no sucede
lo mismo con los fuertes cu!a concordancia no es la que cabría esperar
por la exactitud de las mediciones. De nuevo, la aplicación de las leyes
de equilibrio a la disociación parcial postulada para las soluciones de electrólitos por Arrhenius, nos muestra que éstas son obedecidas muy bien por
los electrólitos débiles pero dc ninguna manera por los fuertes.
Otro factor que se pronuncia contra la simrle teoria de disociación
al aplicarla a los electrólitos fuertes, es el hecho que Arrhenius consideraba
que las soluciones iónicas tenían un comportamiento ideal, equivalente al
de soluciones que tuvieran el mismo número de moléculas neutras, pero
tal suposición es difícil de mantener. Mientras las fuerzas entre las moléculas neutras en soluciones bastante débiles, son relativamente pequeñas, las
atracciones elcctrostáticas entre las partículas cargadas eléctricamentc pued m ejercer un efecto importante cn el movimiento y distribución de los
iones. Por lo tanto es bien dudoso que tales soluciones se comporten en
fornia ideal, y tampoco cabe esperar que los iones actúen como las moléciilas neutras e ideales. El efccto producido por interacciones iónicas pueden
resultar muy pequeños en las soluciones de electrólitos débiles, donde el número de iones no es muy gande, y en consecuencia su comportamiento
irá de acuerdo con las predicciones de Arrhenius, pero en los electrólitos
fuerteí, donde el número de iones es grande, el efecto de las atracciones intcriónicas debe ser apreciable, tanto mis cuanto mayor cs la concentración
! la xalencia de los iones.
Estas y otras consideraciones: nos llevan a la conclusión que la teoría
de Arrhenius, aunquc es cseiicialmcnte vilida con los elertrólitns dbbilrs,
no irl>resrnta la situación real rlv los fucrtes. Es opinión gencral quc las
344 Capítulo 9: Propiedades colígativas de las soluciones
soluciones de electrólitos fuertes se encuentran totalmente ionizados incluso en concentraciones moderadas, y que los valores de a calculados dan
simplemente una indicación de las fuerzas interiónicas que operan en ellas.
LA TEORIA DE LAS ATRACCIONES
INTERIONICAS DE DEBYE-HOCKEL
En 1923 P. Debye y E. HUckell publicaron una teoría de la atracción
interiónica en soluciones diluidas de electrólitos, que ocupa un puesto importante en todas las consideraciones que comprenden a éstos, así como su
Ahora, nuestra atención se concentra
conducta cinética y term~dinámica.~
en la presentación de los detalles cualitativos de más relieve, de la teoría,
sin intentar su formulación matemática. Lo mismo que Arrhenius, Debye
y Hückel establecen que los electrólitos fuertes existen en solución como
iones de los tipos mencionados pero, creen ellos que los electrólitos fuertes al menos en soluciones diluidas se hallan totalmente ionizados y que
los efectos observados se deben a una distribución desigual de los iones
como resultado de una atracción. Debye y Hückel mostraron que a causa
de estas atracciones electrostáticas cada ion positivo de la solución debe
estar rodeado con un promedio mayor de iones negativos que de iones positivos; e inversamente debe suceder a cada ion negativo. En otras palabras,
cada ion de la solución se rodea por una atmósfera iónica cuya carga neta
es opuesta a la del ion central. Además demostraron, que las propiedades
de los electrólitos están determinadas por la interacción del ion central
y su atmósfera. Como la naturaleza de ésta depende de la valencia de los
iones, su concentración, la temperatura, y la constante dieléctrica del medio, se deduce que éstos son también los factores que controlan las propiedades termodinámicas de los electrólitos.
A una temperatura y solvente dados la constante dieléctrica tiene un
valor fijo, y de ahí que las propiedades de los electrólitos dcbrn depmder
sólo de las cargas iónicas y su concentración y de ninguna manera de la
naturaleza específica de cada electrólito. Estas conrlusir nes son ~strictamente válidas para soluciones muy diluidas. Las limitaciones surgen del
hecho de que Debye y Hückel se vieron obligados a efectuar simplificaciones matemáticas que en definitiva reducen la aplicabilidad de sus ecuaciones a tales soluciones.
En la teoría de Debye y Hückel el efecto de la concentración de los
iones se introduce por medio de una cantidad conorida por jortalrza
Debye y Hückel, P h y r i k d i i c h e Zcitrchriff, 24, 185, ( 1 9 2 3 ) .
Aueque esta teoría se discutirá b r e w m m t e aquí y en otras partrs del texto,
no se hará una exposición rigurosa de la misma, porque n o c o r r e s p o n d ~ h a r e r tal
cosa en un texto elemental. El esnidiante que lo d ~ r e epuede completar deta1k.s en
2
las relerencias mencionadan al final del capítulo.
!
L a teoría de las atracciones interiónicas de Debye Hückel 345
;ónica de la solución, que constituye una medida del medio elí.ctfico en solución y juega en esta teoría un papel análogo al de concentración en la
de Arrhenius. Se define así
donde p es la fortaleza iónica de la solución, C,, C,, Ca, . . . son las concentraciones de los diversos iones en gramos por litro, mientras que z,,
z2, z3, . . . son las valencias iónicas respectivas. La fortaleza iónica de una
solución es igual a la molaridad sólo en el caso de electrólitos 1-1. En
todos los c s o s restantes no son iguales las dos. Podemos ilustrar lo anterior,
con los cálculos de la fortaleza iónica de las soluciones C molares de cioruro de potasio, cloruro de bario, y sufato de lantano. En el cloruro de potasio, C+= C. = C, z+ = r = 1, y, por lo tanto
En el caso del c l o ~ u r ode bario, C+
aquí:
= C, C. = 2C,
z+
= 2, r = 1. De
Finalmente, para el sulfato de lantano, C, = 2 C, C. = 3 C, r, = 3, z- = 2,
Y por lo tanto
Estos ejemplos rnseiian que la fortalem iónica dr una solución esti deteminada no sólo por la concmtración estquiométrica del plectrólito sino
también por las \alcncias de los iones. Debr recalcarse, que en los cálcidos
de la fortaleza iónica d c Iina solurión la wrnatoria dc la muación (48)
'Wluye todas las espccies ibniras prcsentri, sin dktinrión de origen. Así la
fortalria iónica de una soliirión que contivni cloruro de potasio ron con-
346 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
. 4
centración C = 0.10, en presencia de cloruro de bario a otra C
es igual que
= 0.01
En este libro se hacen diversas indicaciones en distintas etapas acerca de
la validez de la teoría de Debye y Hückel para explicar la conducta de las
soluciones diluidas de los electrólitos fuertes, por ahora es suficiente seíialar
que esta teoría explica los valores de i observados en las soluciones diluidas
d e aqutllos, ya que predice que a O°C están dados por la relación
donde v es el número de iones producido por una molécula dada de electrólito. L d t a b l a 9-10 nos muestra la exactitud de las predicciones comparadas
con los valores obsen.ados. La concordancia es excelente en soluciones muy
diluidas, pero más allá de m = 0.01 las d~sviacionesson, pronto, significativas. Estas des\iaciones son menores en el caso drl HCll 1-1, y más acentuadas con el electrólito del tipo 2-2 de sulfato de cobre, vale decir que son
función de la m a p i t u d del producto 23..
T a n r 9-10.
Comparación de
los valores calculados y
de los factores de Van't Hoff a O'C
HCI
na
ioiii
',j~I
K,SO,
-~' ~ i ~ ~'CSIC.
.
observados
CuSO,
'r,iis.
'rrlc.
En resumen. el estado actual dcl problema es el siviente: L a teoría de
Arrlienius es adecuada para explicar el comportamiento de los elictrólitos
dí.biles cuando se modifica l i ~ e r a m m t e pero
,
no es satisfactoria con los fuertes donde la? atracciones iiiteriónicas son el factor dominante. Desde el
punto de xista teórico y cuantitativo la teoría de Dcbye-Hückcl proporciona
la explicación de las propiedades termodinániicas dc las soluciones muy Y,
modrvadanientr diluidas, pero no sc ha ampliado aún a las concentradas.
En este caso, es probablc qiic la troria rcsiilte dc~nasiadosimple, pues
;t fin dt: rnirnclrr las pl-opiidadr~dc las soluciones concentradas cs prcciso
-
.
-.
.:..,
s..,.
.
:,
.,.
. ..
,,
Problemas
347
considerar no sólo las atracciones interiónicas, sino tambitn las interaccioDes entre los iones que originan asociaciones, acciones con el solvente Y
modificaciones de éste como consecuencia de las partículas cargadas presentes. Aunque la importancia de los factores es apreciable, y alguno cie
ellos se ha investigado teórica y experimentalmente; no se ha hecho aún
un análisis completo de los problemas complejos involucrados.
REFERENCIAS
Véase las referencias del final del capitulo 3 y también:
1. H. Falkenhagen,Electrolyter, Oxfurd Cniveraily Press, Nucva York, 1934.
2. Ilirned y Owen, T h e Phyricni Chemiitry of Eiectroiytic Solutiont, Reinhold
Publishing Corporation, Nueva York, 1950.
3. C. Scatchard, Chem. Reo., 13, 7 (1933)
4. Shedlovsky, Brown y MacInnes, T r n w . A m . Electrochern. Soc., 66, 237(1934)
5. A. h'eissberger, Phyiical Methodi of Orgnnic Chemrstry, Interscience Publishers, Inc.; Nueva York, 1959, Vol. 1, rapitulos 7, 8, 9, 11 y 15.
PROBLEMAS
1. Cria solución contiene 5 g de urca (M, = 60.05) por 100 g de agua. ¿Cuál
scrá la presión de vapor de esta solución a 25"C? La presión de vapor dcl agua
a esta tcmpcratura es 23.756 m.
Respuesta: 23.40 m p .
2. A 25'C: 10 50 litros de K, puro, medidos a 760 mrn de Hg, pasan par una
solución acuosa dc un soluto no volátil, y la solución pierde 0.2455 g en peso. Si
la presión total sobre la solución es también 760 mm, ¿cuál es la presión de vapor
de la solución y la fracción molar del saluto?
3. A 50'C la prcsión de vapor del agua pura y del alcohol etílico son 92.5 mm
Y 219.9 mm R g rcipcctivamente. Si se disuel\en 6 g de un solulo no volátil, cuyo
peso molerular es 120 en 150 p de cada uno de aquellos solvrntei. ¿Cuál scrá la
disminución dc prcsión de vapor en los dos rolveritcs?
a
4. Una solución compuesta de 10 g dc saluto orginico no volátil en 100 g de
&ter dietilico tiene uiia presión de vapor de 426Omm a 20CC.Si la presión de vapor
del éter puro es de 442.2 mni a la misma temperatura. ;Cu&l es el peso molrcular
d d soluto?
5. Derivar la ecuación ( 1 2 ) de este capitulo cuinrnzanilo con la condición de
ewrgin libre para el equilibrio eiitrc el vapor y solución en el punto de ebullición
normal. Suponer que cl vapor y la solución son ideales.
6. Si 30 g de difcnilo se disuclien en 250 g de benccno. i C u á l será el punto
Reipueita: 82.1°C.
de ebullición resultante bajo la presiiin atmosférica?
7 . U n a solución contiene 5.00 g de u n svluto orgánico por 25.00 g de CCI, y
h i w r a 8 1 5 ° C a la presión atinoifirira. ¿Cuál es el peso rnolecular del soluto?
8. Con los datos dc la tabla 9-2 ralcular el calor m d a r de vaporización del
alc<,hol ~ t i l i ~ < ~ .
Respuerta: 9420 cal/inol.
9. Cierta cantidad de soliito no volátil disuelto en cloroformo d a una elevación
dcl punto dc cl>ulli<ibnde 3.00°C a 760 rnm de presi6n. Si suponmios que la ro-
348 Capítulo 9: Propiedades coligativas de las soluciones
lución es ideal, calcular la fracción molar de soluto en la solución mediante las
ecuaciones ( 9 ) . (10) y ( 1 3 ) . <Qué resultado se aproxima más al valor correcto?
10. Al deriíar la ecuación ( 9 ) se supone q u e AH, es una constante. Supongamos sin embargo que A H , en caloríadmol no es constante, sino que varia según
la eruac.iin
AH, = A
A 7 + C?'?
DT3
+
+
donde A , B, C y D son wnrtanter, comenzando can la ecuación de Clasiur-Clapeyron, y sin hacer otra suposición que la ley de Raoult es válida, derivar una relación
entre In(1 - N , ) ,T, y 7,.
11. Para el agua, las constantes de la ecuación del calor de vaporización dadas
en el problema 10 son: A = 13,422, B = - 9.81, C -7.5 x 10-2, y D = 4.46 X
lo-'. Ltilirando estas constantes y la ecuación obtenida en el problema 10, calcular l a fracción molar del soluto en solución cuando la elevación del punto de ebullición er 0.50'C. Comparar el resultado con aquéllos dados por las ecuaciones ( 9 ) .
( 1 0 ) Y (131.
12. Derivar la ecuación (22) de este capítulo comenzando ron la condición de
la energia libre para el equilibrio entre el solvente sólido puro y la solución. Suponer
que la solución es ideal.
13. ¿Que peso de glicerina debe agregarse a 1,000 g de agva a fin de hacer
descender su punto de ron&lación 1OCC?
Respuerto. 495 g.
14. Vna solución acuosa contiene 5% en peso de urea y 10% de glucasa. ¿Cuál
en su punto de congelación?
15. Comparar los pesos de metano1 y glicerina que se precisan para hacer descender cl piiiiio de congelación de 1,000 g de agua 1°C.
16. Con los datos de la tabla 9-4, calcular el calor de fusión por m01 de fenol.
17. Una mucrtra de CH,COOII congela a 16 4°C. Si suponemos que no se forma una solución sólida. (Cuál es la concentración de impurezas de la muestra?
18. Una mezcla que contiene 0.550 g de alcanfor y 0.015 de soluto orgánico conqela a 157 0°C El solutu tiene 93.46% de C y 6 5 4 % en peso de H ;Cuál es la
fórmula de éste?
Respuesto: C,,H,,.
19. Cuando se han disuelto 0.5550 g de un soluto de peso niolecular 110.1 en
100 g de solvente cuyo pero molecular es 94 10 y su punto de congelación 45 O°C,
hay una depresión del punto de solidificación de 0.382-C. Be nuevo, cimado 0.4372 g
de soluto de peso molecular desconocid<i se disuelven en 96 50 g dcl mismo solvente,
el descenso del punto de congelación es 0467'C. De estos datos hallar: ( a ) el pPS0
rnolecular del soluto problema; ( b ) la constante criorcópica del solrente, y ( c ) el
calor de fiisiún de este Último por mul.
20. E n la derivación de la ecuación ( 2 0 ) se rupurie que AH, y A l i s ron constantes. Supongamos, sin embargo, que ambos dependm dc la temperatura, y están
dadas por l i s relaciones
AFI.
AHI
+
=
A
=
a i
AT
bT
+
+
+
CT'
D
cT2 b d i 3
P
d i , t i d e h B. C, D , a, b , c, y d ron constantes Partiendo de la ciuarión dc ClauriiiiC:lapeyron, d < ~ i v u la
r relación m t r e l n ( l - N,), i', y T , , FIaccr ú n i < m ~ n tla
r supi,ririón quc r s váltda la ley de Rvoult
'
Problemas 349
21. Para el agua, las constantes A , B, C y D se dan e n el problema 11, y
= 7.66, c = -15.6 x 10-3 y d = 4.46 x 10-7. Utilizando estas
,,,,stantes y la ecuación derivada en el problema 20, calcular la fracción molar del
soluto en soIuciÓn cuando la disminución del punto de congelación e i l,OOO°C. Com+ese
cl resultado con los dadas por las ecuacioner ( 2 0 ) . (21) y ( 2 2 )
,,11,260, b
22. Derivar la ecuación (26) en el supuesto de que tanto las soluciones sólidas
las liquidas se comportan idealmente.
23. Vna solución acuosa contiene 20 g de glucosa por litro. Suponiendo que la
Respuerta: 2.72 atm
,olución es ideal, calcular la presión osmótica a 25°C
24. La prcrión osmótica de una solución acuosa que contiene 45 0 g dc sacarosa
por litro de solución es 2 97 atm a 0°C Hallar el valor de l a constante del gas y
~"rnpararel resultado con el valor aceptado
25. Una solución de 1.00 g de antipirina (C,,H,,N,O) en 100 cc de salución
acuora dio una prcsión osmótica de 1 18 atm a 0°C Calcular el peso molecular del
compuesto y comparar el resultado con el que cabe esperar d e la fórmula dada.
26. L-na solución acuosa solidifica a - 1.50°C. Calcular ( a ) el punto normal de
ebullición, ( b ) la prcsión de vapor a 23'C y ( c ) la presión osmótica a 25°C de la
solución dada.
27. La presión osmótica promedio de la sangre es 7.7 atm a 40°C. (a) ¿Cuál
es la concentración total de solutos en la sangre? ( b ) Suponiendo que la conrentra~ión es igual a la molalidad, hallar el punto de congelación de la sangrc
28. La presión de vapor en una solución acuosa a 25'C es 23.45 mm. LTsiindo
la ecuación ( 3 0 ) , calcular su presión osmótira dado que la presión de vapor del H,O
pura es 23.756 mm a 25°C.
29. Una solución acuosn 0.2 molal de KCI solidifica a -0.680"C. Calcular i y
la presión osmótica a O°C Supóngase que el valumen es el del asua pura.
Respuerta: i = 1 8 3 ; ii = 8.2 atm.
30. Una solución acuosa 0 4 molal de K,SO, solidifica a - 1 52'C Siiporiiendo
cs constante ron la trmperatura, calcular 12 presión de xapor a 25°C y el
punto normal de ebullición de la solución
~ U P
i
31. U n i solución de HCI, de una roiiientrarión de O 7210 en peso, srilidifica a
-0.706"C Calcular la molalidah-aparente y el peso rnolecular aparente del HCI.
32. Cm solurión 0 1 molal de un electrólito d6bil se ioniza dando dos ionrr y
K t i p u i i t i i . 0 118
cOnsela a - O208°C. Calcular el grado de disociación.
33. Una solución 0 01 malal de fwricianuro potdsico congela a - 0.062"C ¿Cuál
I l e i p u e r t a - 78%
es el porcentaje de disociación aparente7
34. Una solución 2.00 malal de HCI ~ o n g e l ai 8 . 8 G ° C Cnlculdr el porcrntaje
3Parcntc de disociación y pxplirar la reiput b r a
35. A 25°C una sulución 0.1 r n o l ~ lde C H , C O O H está disociado 1 3 5 % Calcolar el punto de congelación y la presión osniótica de Id solución. Coniparir los rcsultados c m los que cabe eqxrar bajo condicion~sdr no disociaci6n.
36. Coriiparar la fortaleza iónira de Ins solurinnes 0.1 A' del HCI. SrCl?, 41CI,,
ZnSO, y F e , ( S O , ) ,
37. C n a solución cs 0.5 riiular en h.lqSO,, 0.1 en .2lCI,, y 0 2 cn (NH,),SO,
? S la fortaleza i6nica total?
Respuerta- 3 2
38. Utilimndo la ecuación di. Dcbyc-lIiiikrl, c a l ~ u l a rlos valores dc t a O'C para
1% \oluciunes acuosas 0.0005 mr>larrs de IICI, BaCI,, II,SO,, CuSO, y I.a(NO,),.
i
(hil
REGLA DE LAS FASES
Hasta aquí hemos considerado dibersos tipos dc equilibrios heteiogtneos
des& diferenter puntar de bista. Así, por ejemplo, la >aporizacióri, sublimación, fusión, transición de una fa?e sólida a otra, solubilidad de sólidos,
líquidos y gases entre sí. presiones de vapor de las solucion~s,reacción qnímica entre sólidos y líquidos o gases, y distribución de solutos entre fases,
han sido t d o s estudiados con método? adecuados a cada tipo particular
de equilibrio. Estos comprendían las ecuacioncs dc Clapeyron y ClausiiisClapeyron, la de Raoult, Henry, la de las constante? de equilibrio, y la
de distribución. Sin embargo. es posible tratar todos los equilibrios Iictcrogéneos deide un punto de >ista unificado,por medio del principio conocido
como r e ~ l ad r las jnscs, con cl cual el número de variables a que se riicurntra sometido un eqiiilibrio heterogénro cnalqiiicra: qucda definido bajo
ciertas condiciones experimentales definida5 Esto no quiere decir quc se
invalidr alguno de lo-, inEtodos descritos antrs para e! estudio cnantitativo
de tales equilibrios. La regla de las fase5 fija qimplemente el númcro de
"ariahles involucrado, pero las relacionps cuaiititati~as entre ellas. dphrn
estahler~rsemediante eupresionrs compiementaria~como las que sr. menC1onaron.E! sipifirado dc &a afirmación, ?e rnmtrará más claro tan
Pronto como tratemos la naturaleza de dicha regla y su forma de utili~arla.
"07
Antes di. continuar, es necesario definir y explicar con algún detalle algutbminos que sc emplean frecucnterriciite. Estos son: el equilibrio ver-
352 Capítulo 10: Regla de las fases
dadero, metastable e instable, el número de componentes, y el grado de
libertad de un sistema. El significado de sistema y fase se establecieron en
el capítulo 3.
Se alcanza un estado de equilibrio verdadero, cuando puede obtenerse
en cualquier dirección. Termodinámicamente hablando, aquél se logra cuand o el contenido de energía libre del sistema se encuentra en un mínimo,
para e1 conjunto de variables dado. Así sucede, por ejemplo, con el hielo
y agua a 1 atm de presión y 0%. A esa presión la temperatura a que se
encuentran en equilibrio las dos fases es la misma tanto si se alcanza por
fusión parcial del hielo o por congelación parcial del agua.
Por otra parte. el agua a -5°C se obtiene por enfriamiento cuidadoso
del liquido, pero no por fusión del hielo, es decir, que ahora estamos frente
a un equilibrio metastable. Este se logra sólo en una dirección y se mantiene
si el sistema no se somete a una variación repentina, agitación o siembra
de una fase sólida. En cuanto se introduce un cristal de hielo, la solidificación procede rápidamente, y la temperatura se eleva a 0%.
Se dice que existe estado inestnble cuando la aproximación al equilibrio
es tan lento que el sistema parece no llevar a cabo cambio alguno con el
tiempo. Un ejemplo de esta situación se ofrece en la disolución del cloruro
de sodio en las proximidades de la saturación. La insuficiencia del tiempo
de observación puede hacer creer que se h a alcan~adoel equilibrio, mientras
que en realidad el proceso continúa todavía muy lentamente hacia la saturación real. Dcbe tenerse en cuenta que, aunque un estado de equilibrio
metastable representa al menos uuo de estabilidad parcial, el inestable no
lleva en si ninguno sino únicamente un proceso de cambio mu)- lento.
El número de com$onentes de un sistinia es el menor n ú m ~ r ode variables independientes, en función de cnyas fórmulas se pueden escribir ecuaciones que expresan la composición de cada fase presente. L a cantidad
deseada aquí es el número rninimo y no importa qué conrtituyente particular se elige para expresar las composiciones de las diversas fases. Lo veremos
más claro con los ejemplos siguientes. En el sistema "agua" las fases presentes son: hielo, agua líquida y capor. La composición de cada fase se
purde expresar en términos del constituyente único: agua, y de aquí que
éste sea un sistema de un solo wmponente. La variable podía ser también
el hidrógeno o el oxígeno, porque la especificación de uno de éstos fija
automáticamente el otro poi medio de la fórmula H1O. Consideraciones
anilogar enseñan que cl número mínimo de conrtituyentcs necesario para
describir la coniposicibn de todas las fases en el ristema sulfato de sodio-agua,
ri dos Fl si\tenia cs dc dos iomporirntes. Las fases que piicdcn prcscntarse
son Na:SO,, Na,SO,. 7H,O, NiSO, . 101-LO, soluciones de Na,SO, en
agua, Iiielo y vapor de agua. La composición de rada una de d a s en función
Definiciones 353
de los dos componentes sulfato de sodio y agua queda establecida así
Na,SO, :
Na2S0, , 7 H,O:
N a S O , . 10 H,O:
Ka,SO, (ac.):
H 2 0 ( s ) , H,O(l), H,O(g) :
+
+
+
Na,SO,
0 H,O
Na,SO,
7 H,O
Na,SO,
10 H,O
Na,SOn
x H,O
ONaZSO, 4- H,O
+
Se observará que la composición de ciertas fases queda establecida en
función de sólo uno de estos constituyentes, mientras que otras necesitan un
conocimiento de las cantidades presentes de ambos a fin de especificar sin
ambigüedad la composición de la fase. Como en este caso dos componentes
es el número mínimo con el cual se definen t o d a las fases, el sistema sulfato
de sodio y agua es de dos componentes.
El hecho esencial que conviene recordar al decidir el número de componentes de un sistema, es que no importa qué constituyentes particulares
fueron elegidos como variables independientes, pero si su número que debe
ser mínimo. Si no es así, alguno no será independiente de los restantes. De
nuevo, al escribir la composición de una fase en función de los componentes
elegidos, se permite usar los coeficientes más, menos y cero, frente a cada
componente. Así, en un sistema producido por la disociación del carbonato
de magnesio, según la ecuación
las comIjosicio~iesde las diversas fases pueden representarse en función
del carbonato y del óxido de magnesio, de la manera siguiente:
Finalmente, con el nombre de grados d e libertad o variancia'de un sistema queremos significar el número mínimo de variables independientes
[taks como la presión, temperatura, concentración) que deben especificarse a fin de definir completamente las restantes del sistema. El significado de los grados de libertad de un sistema se colige de los ejemplos siCuientes: Para especificar sin ambigüedad la densidad del agua líquida,
es necesario establecer la temperatura y presión a que corresponde esta
detisidad; así, 0.99973 g por milímetro a lO0C y 1 atm de presión. Una
"finnación de la densidad a 10°C sin mencionar la presión, no define
el cstado del agua, porque sobre ésta pueden existir todas las
Presiones de vapor posibles. En este caso por lo tanto, es necesario espccik a r dos variables, y esta fase cuando se encuentra presente sola en un
354 Capítulo 10: Regla de las fases
sistema tiene dos grados de libertad, es decir es biuariantc. Cuando se
encuentran en equilibrio el agua líquida y el hielo, la temperatura y las
densidades de las fases están determinadas sólo por la presión, y si se
conoce ésta quedan definidas las restantes. Por ejemplo, si conocemos que
el agua y el hielo están en equilibrio a la presión de una atmósfera, la
temperatura phede ser Únicamente O°C y quedan establecidas también las
densidades. Análogo razonamiento se aplica a la temperatura como variable independiente. En cada temperatura de equilibrio arbitrariamente
elegida (dentro del intervalo de existencia de las dos fases) corresponde
sólo una presión determinada, y así, una vez más, el sistema queda definido en función de una sola variable. Bajo estas condiciones, el sistema
sólo tiene un grado de libertad, es decir, es monovariante.
LA REGLA D E LAS FASES DE GIBBS
J. Willard Gibbs en 1876 estableció por vez primera que hay una relación fija entre el número de grados de libertad, de componentes y de
a fases, es un prinfases presentes. Esta relación conocida como regla de l
cipio muy general, y su validez no depende de la constitución atómica o
molecular en consideración. Hay que abonar en favor de Ost~vald:Roozeboom, Van't Hoff y otros por mostrar cómo esta generalización es utilizable en el estudio de los problemas de equilibrio heterogéneo.
Para formular esta regla, consideremos en general a un sistema de C
componentes en el que existen P fases presentes. El problema ahora está
en determinar el número total de variables del sistema. Este depende de
la presión y temperatura. De nuevo, a fin de definir la composición de
cada fase es necesario especificar la concentración de los ( C - 1 ) constituyentes puesto que el otro restante, queda determinado por diferencia.
Como hay P fases, el número total de variables de concentración será
P ( C - l ) , que junto con la temperatura y presión constituyen un total de
[P(C - 1 )
21.
El estudiante recordará del álgebra que cuando existe una ecuación
con n variables independientes, es necesario n ecuaciones a fin de encontrar los valores de cada variable. Análogamente, para definir las
[ P ( C - 1)
21 variables del sistema, debemos disponer de este número
de ecuaciones. La siguiente cuestión que se plantea es entonces: 2Cuántas ecuaciones que comprenden aquellas variables, es posible establecer?
Para contestar esta pregunta debemos recurrir a la termodinámica. Esta nos
dice que el equilibrio entre las diversas fases de una sistema es posible
sólo si la energía libre molal parcial de cada ronstituyente de una fase,
es i w l a la del mismo constituyente en cada una de las re5tantps. Como
la energía libre molal parcial de un constituyente de una f a x es una
función de la ~resión,temperatura, y hay ( C - 1 ) variables de la con-
+
+
Sistemas de un solo componente 355
centraciónj se sigue inmediatamente que la condición de equilibrio permite
escribir una ecuación entre las de cada constituyente distribuido entre dos
fases cualesquiera. Cuando existen P fases dispondremos de (P - 1) ecua,iones para cada constituyente, y para C constituyentes habrá C(P - 1)
ecuaciones.
Si este número es igual al número de variables, el sistema queda comletamente
definido. Sin embargo, no es el caso general, y el número de
p
variables excederá al de ecuaciones en F, donde
F = Número de variables - Número de ecuaciones
= [P(C- 1) -t 21 - [C(P - l ) ]
=C-Pf2
(1)
La ecuación (1) constituye la celebrada regla de lar fases de Gibbs.
F es el número de grados de libertad del sistema y d a el número de variables cuyo valor debe especificarse arbitrariamente antes de que el estado del
sistema quede caracterizado sin ambigüedad. Según esta regla, el número
de grados de libertad de un sistema está determinado por la diferencia
en el número de componentes y el de fases presente, esto es, por (C - P).
Al hacer esta derivación se h a supuesto que cada componente se encuentra en cada una de las fases, de no ser así, y si faltase en una de ellas
el número dc variables de concentración disminuye en uno, pero a la vez
lo hace también el número posible de ecuaciones, de aqui que el valor
( C - P ) , y por lo tanto F permanece sin modificación, tanto si cada constitqente se halla presente o no, en todas las fases. Esto quiere decir que
la reg]; de las fases no presenta restricciones por suposiciones hechas, y que
su validez es absolutamente general bajo todas las condiciones de distribución, con tal que exista equilibrio en el sistema.
El valor principal de la ecuación (1) está en la comprobación de los
divenos tipos de gráficas para lá representación de las condiciones de
equilibrio existentes en los sistemas heterogéneos. Antes de proceder a discutir algunos sistemas específicos y la aplicación a ellos de la regla de las
fases, es conveniente clasificar todos los sistemas de acuerdo con el número
de componentes presente. Existen sistemas de uno, dos, tres, etc., compo"entes. L a ventaja de este tratamiento aparecerá enseguida.
SISTEMAS DE UN SOLO COMPONENTE
La complejidad de los sistemas de un componente depende del número
de fases sólidas que existen en el sistema. El caso más simple es aquél
en que existe una sola fase sólida presente. Cuando hay más de una,
el nilrnero de equilibrios posibles se inrrementa considerablemente, y de aqui
1' diagrama de fascs, o la gr:ifica q u e muestra los divenos equilibrios, se
"Wlve más complicado. Las ~iodbilidadesen talcs sistemas y las relaciones
356 Capítulo 10: Regla de las fases
l!
entre sus fases se ven con mayor claridad al tratar varios ejemplos particulares.
El sistema agua. Por encima de - 20°C y debajo de 2,000 atm
de presión hay sólo una fase en el sistema, esto es, hielo. Esta fase sólida,
el agua líquida,, y el vapor acuoso constituyen las tres posibilidades del
sistema. Aquellas pueden estar involucradas en tres equilibrios bifásicos que
son, líquido-vapor, sólido-vapor y sólido-liquido, y un equilibrio trifásico,
sólido-líquido-vapor. Al aplicar la regla de las fases al sistema cuando sólo
hay una presente, vemos que F=2, y por tanto en este caso existen dos
grados de libertad. Si se eligen la temperatura y la presión como variables
independientes, la regla predice que ambas deben quedar establecidas para definir la condición de la fase. Como son necesarias dos variables inde.
pendientes para localizar un punto cualquiera en un área, se sigue que
cada fase del diagrama P - T ocupa una superficie; y, como son posibles
tres únicas en este sistema, se deduce que existen tres áreas en la gráfica,
una para cada fase.
Cuando existen dos de éstas en equilibrio la regla predice que F = l.
Como una sola variable determina una línea, cabe esperar para el equilibrio bifásico una linea sobre la gráfica P - T. Como son posibles tres
equilibrios tales, el diagrama se caracterkará por la existencia de tres 1íneas de separación de las distintas superficies. Finalmente para el equilibrio trifásico F = O, es decir, no se necesita especificar ninguna %ariable,
lo que significa que cuando las tres fases coexisten la temperatura y la
presión son fijas, y la posición de este equilibrio en el diagrama se caracteriza por la intersección de las tres líneas en un punto común.
Aunque la regla de las fases hace posible la predicción del diagrama,
la posición exacta de todas las lineas y puntos se determinan sólo experimentalmente. Una inspección de los posibles equilibrios en este sistema
enseña que los datos necesarios para la construcción de un diagrama P - T
son: ( a ) la curva de presión de vapor del agua (equilibrio líquido-vapor),
(b) la curva de sublimación del hielo (equilibrio sólido-vapor), ( c ) la
curva de los puntos de fusión del hielo en función de la presión (equilibrio sólido-líquido), y ( d ) la posición del punto de equilibrio sólido-liquido-vapor.
Estos datos experimentales del sistema agua, se muestran en la figura
1&1. En este diagrama de fase, la línea O A da la curva de subliación
del hielo, la OB es la de presión de vapor del agua líquida, y OC la línea
a lo largo de la cual tienen lugar los equilibrios entre el hielo y el agua
líquida a diferentes presiones. O es el punto triple del hielo, agua y vapor
acuoso en equilibrio. Este es posible sólo a O.OIO°C y 4.58 mm dc presión.
Co%o lo predice la regla de las fases, en el diagrama hay trrs Areas dispuestas
como se muestran y cada una de ellas corresponde a una sola fase.
Sistemas de un solo componente 357
La curva de presión de vapor del agua, linea OB, se extiende desde
el {)unto O hasta el B (critico), que corresponde a 374'C y 220 atm. Sin
embargo, bajo ciertas condiciones es posible sobreenfriar el agua debajo del
punto O para dar equilibrios metastables liquido-vapor mostrados por la
línea de puntos OD. El hecho de que OD queda encima de A 0 enseña
Fip-ora 10-1.
siones
El sistema agua a premoderadas (esquemático).
que a temperaturas debajo del punto triple, el agua líquida tiene una presión de vapor más alto que la presión de sublimación del hielo. La cunra
de sublirnación de este, A 0 se extiende desde el cero absoluto hasta O.
Nunca se ha logrado sobrecalentar el hielo más allá de O. La línea CO
corre desde O basta un punto que correponde a 2.000 atm de presión y
-20°C; en este punto el hielo ordinario, tipo 1, en equilibrio con el
agua efectúa una transformación en otra modificación sólida, tipo 111
en equilibrio con el líquido. La pendiente de esta linea indica que el
punto de fuyión del hielo ha descendido al aumentar la presión, de acuerdo con el principio de Le Chatelier y el hecho de que el hielo posee un volumen especifico mayor que el agua líquida. Las pendientes de las líneas$
AO, OB y OC estin determinajs en cada punto por la ecuación de
Clapeyron o una de sus modificaciones aplicables en cada caso. Con las
Pendientes y esta ecuación es posible evaluar los calores de vaporización
a paltir de OB, los de sublimación de& AO, ) los de fusión OC. Como
no existe liquido sobre la tcniperatura crítica, la linea de trazos BE se ha
introducido en el diagrama para separar al líquido de las áreas de vapor
sobre la tempeiatura critica. En consecuencia el área de Xapor queda
debajo y a la derccha de AOBE, la del liquido sobre OB entre las líneas
OC y BE, mientras que el área de sólido se extiende a la i~quierdade
OC y sobre AO.
La forma en que un diagrama tal como el de la Figura 10-1 puede
Uarse para 5 ~ g ~ los
i r c a r n b ~ ~que
s tienrn lugar cn el sistema con una
iariación de las bariables se observa bicn ron VI ~jemplosigiiicnte: SuPonganios que se desea conocer el comportamiento del sistcnia al c a l d a r
el b i t h a una
de 760 mm y una trrnperatura T,corr~spondientval
358 Capítulo 10: Regla de las fases
punto X en el diagrama hasta el punto Y a igual presión pero a una temperatura T,. Comenzando con hielo en X y calentado lentamente a una
presión constante el sistema sigue la línea XN al aumentar la temperatura
del hielo. Sin embargo, una vez que se alcanza el punto N el hielo comienza a fundirse y la temperatura permanece constante hasta la fusión total, y
14,WO
--
2o.ooo
a,
B
E
ü
1
r;
16.000
I2.WO
o",
2
liquida
8.000
4,OW
- 60
-30
O
30
Temperatura -
Figura 1&2.
60
PO
O C
El sistema del agua a presiones elevadas
sólo entonces comienza a elevarse según .VM. Entre N y M el único cambio que existe es un incremento de temperatura del liquido, pero en M
comienza la vaporización y la temperatura permanece constante de nuevo
hasta que todo el líquido se h a convertido en vapor. Cuando se h a efectuado la transformación completa del líquido en .r.apor, cualquier posterior
adición de calor origina simplemente un incremento de la temperatura del
vapor según MY hasta alcanzar este último punto. De igual manera es
posible con ayuda de la figura 10-1 predecir de algún modo los cambios
que tienen lugar en el sistema con una variación de la temperatura, presión o ambas.
A presiones elevadas se han observado una serie de modificaciones además de las comunes.' La figura 10-2 presenta el diagrama de fases del sistema bajo estas condiciones. Las figuras 10-1 y 10-2 son partes del mismo
diagrama, siendo la última la que corresponde a la porción de presiones
elevadas. L a manera en que los dos diagramas enlazan puede juzgarse
por la linea OC, la misma en ambas gráficas. Resulta de interés observar
en la figura 10-2 que a presiones muy elevadas el hielo de formas V I Y
VI1 existe a temperaturas mayores de O0C. De hecho a una presión de
40,000 atm el hielo VI1 es estable a 190°C.
L
1 T.irnrnann, Z e i l . phyhik. Cheni.,
Sci., 47, 441 ( 1 9 1 2 ) ; 1. Chern. Phyi.,
Am.
Sistemas de un solo componente 359
El sistema azufre. Este elemento existe en dos modificaciones sólidas,
]a rómbica estable a la temperatura ordinaria, y la monoclinica variedad
&able a temperaturas más elevadas. Estas dos fases sólidas junto con la
liquida y vapor dan la posibilidad de existencia de cuatro fases Únicas, que
a su vez conducen a los equilibrios siguientes:
Equilibrio trifánco
Equilibrio bifásico
l. S ( r ) - S(vapor)
2. S(rn). - S(vapor)
3. S ( r ) - S(1íquido)
4. S ( m ) - S(1íquido)
5. S(líquido) - S(vapor)
6. S ( r ) - S ( m )
l. S ( r ) - S ( m ) - S(1íquido)
- S(1iquido) - S(vapor)
3. S ( m ) - S(1iquido) - S(vapor)
4. S ( r ) - S ( m ) - S(vaporj
2. S ( r )
Equilibrio tetrafásico
1 S ( r ) - S ( u ) S (líquido) - S (vapor)
Al aplicar la regla de las fases a estos equilibrios, podemos anticipar
la existencia de cuatro áreas di\.ariantes monofásicas, seis líneas monovariantes bifásicas, y cuatro puntos de equilibrio invariantes trifásicos. Como
el número máximo de fases que se encuentran presentes en equilibrio está
dado cuando F = O, se deduce que es P = 3 para un sistema de un solo
componmte. Por lo tanto no puede existir equilibrio tetrafásico en éste
ni en ningún otro sistcma de un componente.
La figura 10-3 muestra el diagrama de fases esquemático, del sistema.
Las cuatro áreas monofásicas se hallan dispuestas como se indica. Las 1íneas OP y PK son las curvas de sublimación del azufre rómbico y mono-
Figuia 1W3.
El sintema azufre (esquema).
-
360 Capítulo 10: Regla de las fases
clínico, mientras KV es la cunra de presión de vapor del azufre líquido.
En el punto P hay transición de azufre rómbico a azufre monoclinico, y
por lo tanto es un punto invariante que corresponde al equilibrio S ( r )
- S ( m ) - Sjvapor). El azufre monoclínico funde en K. y así este punto
corresponde al equilibrio trifásico S ( m ) - S(líquido) - S(vapor). La línea PS enseña la variación del punto de transición con la presión, mientras
la K S muestra, de igual manera, la variación del punto de fusión del azufre
monoclinico con la misma variable. Estas dos líneas intenectan en S dando el equilibrio S ( r ) - S ( m ) - S(líquido). Finalmente, la linea SW nos
da el punto de fusión del azufre rómbico. Estos son todos los equilibrios
estables que tienen lugar. El área del azufre monoclinico está encerrado por
las líneas PS, PK, y KS, y por esa razón no puede existir azufre monoclínico en condición estable fuera de la misma, ni además, lo está el vapor
a presiones mayores que las dadas por las curvas OP, PK y KU debajo
de la temperatura del punto crítico U. Por encima de esta temperatura no
hay líquido posible. De aquí que el área líquida está determinada por la
vertical de puntos que pasa por U y desde aquí existe vapor a presiones
elevadas.
'Los equilibrios restantes en este sistema son todos metastables. Por un
calentamiento rápido es posible sobrecalentar el azufre rómbico a lo largo
de OP, la linea PR, que es la de equilibrio de sobrecalentamiento del S ( r j
con S(vapor). Análogamente, es posible sobreenfriar el azufre líquido en
todo el intervalo U K hasta R . En este punto la Iínea de metastabilidad
S ( r ) - S(vapor) intersecta otra metastable también, la S(1íquida) - S(vapor) originando el punto invariante metastable S ( r ) - S(1íquido) - S
(vapor). La linea RS muestra la variación de este punto metastable con la
presión y es; por esa razón, la línea de los puntos de fusión del azufre
rómbico corno una función de la presión. Esta línea es una extensión de
la estable W S en cl intervalo de metastabilidad. Debe quedar bien claro
que, cuando tienen lugar varios equilibrios metastables, no aparece el azufre monoclinico; en su lugar, el azufre rómbico se transforma directamente
en líquido según RS, o en vapor según PR sin pasar por la etapa monoclínica.
-
Otros sistemas de un solo componente. El sistema dióxido de carbono
es muy parecido al del agua como lo muestra la figura 10-1, excepto que
el punto triple tiene lugar a -56.4'C y una presión de unas 5 atm. Además,
la pendiente de la línea sólido-líquido es hacia la derecha en lugar de ser
hacia la izquierda, como en el diagrama del agua. Como la línea de una
atmósfera en este sistema corta sólo la cuwa de sublirnación del sólido, el
dióxzo de carbono sólido debe cambiar directamente a vapor a esta presión sin pasar por el estado líquido. La licuefacción del sólido sc logra
sólo bajo prcsiones de unas 5 atrn o mayores.
Sistemas de dos componentes 361
El fósforo y la benzofenona son otros ejemplos dc sistema? de un solo
Para mayores detalles ver Findlay: Campbell y Srnith.'
SISTEMAS D E DOS COMPON ENTES
Cuando en un sistema de dos componentes está presente una sola fase
el número de grados de libertad es F = 2 - 1
2 = 3. Esto significa que
debemos cspecificar tres variables a fin de describir la condición de la fase,
la presión, la temperatura y la concentración de uno de los componentes.
Para representar gráficamente estas relaciones, sería necesario trazar tres
ejes de coordenadas en ángulo recto entre si, y el diagrama resultante será
la figura de un sólido. Como estas gráficas tridimensionales son difíciles
de construir y de usar, en la practica se prefiere bien sea una proyección
de dicho diagrama del sólido en un plano, o una sección transversal plana
de la figura para un valor constante dado de una de las variables. De esta
manera, es posible presentar las divenas relaciona de los sistemas de dos
componentes en una gráfica bidimensional, de dos de las tres variables
mencionadas.
La discusión de los sistemas de dos cornponcntes se simplifica aún más,
al considerar separadamente los diversos tipos posibles de equilibrio. Así,
la práctica común es la de estudiar el de líquido-gas, sólido-gas, liquido-líquido y sólido-líquido individualmente y, cuando es necesario, se combinan sus diagramas. Como los tres primeros tipos de equilibrios se han
considerado ya en diversas ocasiones, prestarem,x atención exclusivamente
a una aplicación muy importante de la regla de las fases corno cs la de
los equilibrios sólido-líquido.
Estos son de gran importancia por su conexión con los problemas de
cristalización, y se caracterizan generalmente por la ausencia de una fase
gaseosa, y por el hecho de que resultan poco afectados por liccros cambios
de prcsión. Los sistemas donde esti auscntc la farc gaseosa se llaman condeniados, y swá los que trataremos ahora.
Las mediciones en los equilibrios sólido-liquido dc los sistemas condensados se llevan a cabo a la presión atmosférica. A causa de su relativa insensibilidad a las pequeñas variacionrs de presión, esta última se considerará constante, y entonces resulta
+
En sistemas de dos componentes
donde las únicas variablcs c p c penrianecrn son la temperatura y la concen?
Firdlay, caiiipl>cll Y S l ~ i i i h , T h r Phnxe
Pul>lications,xiieva Y&
1951
I?it/c
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Dc~rr
362 Capítulo 10: Regla de las fases
tración de uno de los constituyentes. Los equilibrios sólido-líquido se representan por lo tanto, en los diasramas de temperatura-composición. Para
intervalos limitados de concentración cualquier expresión de las concentraciones resulta vilido, pero cuando a q u d se extiende desde un 100%
de un constituyente, a un 100% de otro, es prcferible usar como eje de
abscisas el porcentaje en peso o molar, como en los diagramas de destilación.
DETERMINACION DE L O S
EQUILIBRIOS SOLIDO-LIQCIDO
De los muchos procedimientos experimentales empleados en la determinación de las condiciones de equilibrio entre las fases sólida y liquida las
dos más ampliamente utilizadas y de aplicación son el análiris térmico y los
métodos d e saturación o solubilidad, los cuales complementados cuando es
necesario por una investigación de la naturaleza de las fases sóiidas que
tienen lugar en un sistema, cubren el estudio de cualqiiier sistema que se
presente.
El mbtodo de análisis t¿rmico comprende un estudio de las velocidades
de enfriamiento, es dccir, de las curvas temperatura-tiempo: de las diversas
coniposiciones de un sistema durante la solidificación. De tales c u n a s es
posible deducir la temperatura inicial y final de solidificación de la mezcla,
y deteiminar aquéllas a que tienen lugar las trarisformaciones y transiciones.
Aunque el análisis térmico es aplicable bajo cualquier condición de temperatura, es particularmente adecuado en las investigaciones de equilibrio en
aquéllas que se hallan muy por encima o m u y por debajo del ambiente.
A fin de ilustrar los pasos experinientales involucrados en este procedimiento, la interpretación de las curvas, y la grifica del diagrama final, consideremos específicamente el problema de determinar el diagrama de fases
condensadas del sistema binario bismuto-cadrriio. La primera etapa comprende la preparación de cierto número de mezclas de los dos metales variando r n composición desde biimuto puro a cadmio puro.
Estas mezclas piiidcn espaciarse en intervalos de un 107; y de preferencia deben scr todas de igual peso. Cada una de ellas se coloca en un
crisol inerte, es dccir, de porcelana o grafito y se fundcn en un horno eléctrico. A fin de prevenir la oxidación de los metales es aconsejable mantener
una atinósfcra inerte o seductora sobrr ellos, hacicndo pasar una corriente de
hidrógcno, nitrógeno, o dióxido de carbono a travk del horno. Como una
precaución adicional se einpleari para cubrir la carga un flujo fundido, tal
conio el bórax, o una capa de grafito en polvo. Después de la fusión y una
agitación intensa se introduce un termopar en el fundido y se deja que 10s
contenidos se enfrícn lentamente. Se toman lcrturas de temperatura y tiempo
hasta we la carga del crisol h a solidificado complctarnente. Finalmente, se
p a f i r a n las terripratoras así obtenidas contra el tie~nl~o.
Si Se despa comprobar la composición se remuevcn y analizan las aleaciones solidificadas.
Determinación de los equilibrios sólido-líquido
363
La figura l a nos muestra una serie de curvas de solidificación, obte.idas en diferentes mezclas de bismuto y cadmio. Su explicación es la siguiente. Cuando un cuerpo se enfría lenta y uniformemente, se obtiene una curva
suave de enfriamiento y la temperatura del cuerpo se aproxima a la del
ambiente, pero cuando tiene lugar alguna transformación que libera calor
durante el enfriamiento, la pendiente de la c u n a se modifica sustancialmente. La naturaleza de esta variación depende de los grados de libertad
del sistema. Una sola fase con F = 2 presenta una curva de enfriamiento
continua. Cuando aparece una nueva fase, la variancia del sistema se reduce
una unidad, y el calor generado por la formación de esta nueva fase origina una discontinuidad en la curva, debido al cambio de pendiente por el enfriamiento de una fase a una inclinación menor, que corresponde al enfriamiento de las dos fases. De nuevo, cuando aparece una tercera, F = 0;y la
temperatura del sistema permanece constante hasta que desaparece una de
las fases. El resultado es una porción plana de la curva. Finalmente, cuando
la solidificación es completa, el sistema vuelve a ganar un grado de libcrtad:
y las curvas de enfriainir~ntovuelven a exhibir una variación continua de la
temperatura con el tiempo. A la luz de estos hechos una "rotura" o arrcsto
en la cuma de enfriamiento indica la aparición de una segunda fase, ordinariamente la separación de un sólido desde el fundido, mientras que la
porción horizontal indica la coexistencia de tres fases. La tercera puede
resultar de la separación de dos sólidos desde la sustancia fundida, de la
interacciún de éste con un sólido para formar otro nuevo, o de la separación
de un sólido desde dos fases líquidas. La naturaleza del cambio particular
que se produce se alcanza por simple inspecciún del diagrama final de fases
y un análisis de los sólidos del sistema.
Con esta consideración en mente, concluimos desde las curias de enfriamiento de la figura 10-4 que los arrestos indicados por t i significan la aparición de una segunda fase en el sistema, mientras que las porciones horizontales resultan de ia caexistencia de tr& fases. En este sistema las únicas fases
sólidas son el bisrnuto y el cadmio puros, y de aquí que las porciones horizontales son el resultado de la presencia simultánea de aquéllos y de sustancia fundida. Sin embargo, en las curvas ( a ) y ( h ) las porciones horizontales
Son debidas a las dos fases, puesto que éstos son sistemas de uri solo componente.
Para construir e1 diag-rama de equilibrio se trazan las distintas c u n a s de
Solidificación correspondientes a diversas concentraciones con sus valores
iniciales y finales t , y t , de solidifiración y se llevan a una grifica de tpmpe'atura frente a composición. Se dibujan curvas d? pendiente ligera que
Pasan por las temperaturas t i y t, de cada caso, formindose así el diagrama
Presentado en la i i p r a 10-5. La curva AB indica las temperaturas cn las
cuales comien,a a separarse el bisrnuto del fundido se,qín las diferentes
concentracionr.;, mientras quc BC nos d a la misma iniomarión para la
364 Capítulo 10: Regla de las fases
f
separación inicial del cadmio. L a línea DE indica la temperatura a la cual
todas las mezclas se hacen sólidas. Discutire~nosm i s adelante más detalles
sobre este tipo de diagramas.
En la figura 10-5 la línea AB puede considerarse no sólo como la curva
de puntos de enfriamiento inicial del bismuto, sino también como la curva
Tiempo
Tiempo
Tiempo
Tiempo
Tiempo
Tiempo
100% Cd
Fiwra 10-4.
Tiempo
Tiempo
Curvas de enfriamiento del sistema cadmio-bismuto
de solubilidad del bismuto en cadinio fundido. Los puntos sobre esta curva representan entonces las solubilidades drl bismuto en el cadmio fundido a
diversas temperaturas. Análogamente, la c u r a BC nos d a las solubilidades
a diversas temperaturas del cadmio en bisniuto fundido, rriientras que en B
la soluciún se halla saturada con relaciún a ambos sólidos.
En el método de saturación las solubilidades de una sustancia en otra se
detenriinan a varias temperaturas constantes, gráficándoqe en función de
ellas. Para obtener la composición de una solución de cadmio saturada con
bismuto a 200°C, punto F en la figura 10-5, debe agregarse un exceso de
bismuto en polvo al cadmio fundido, la mezcla se lleva a 200°C y la masa
se agita hasta alcanzar el equilibrio. El exceso de bismuto se filtra y se
analiza la solución saturada en ambos constituyentes. Si se repite esta operación a diversas temperaturas comprendidas entre 144 y 2 i l ° C , se puede
trazar la curva AB. Por un procedimiento similar, prro usando ahora bismuto
fundido y un exccso de cadmio sólido se obtiene la curva BC entre 1 G Y
321°X. Aunquc ertc método se emplea rara vrz al estudio de los sistemas
rnetilicos, es el principal medio empleado en los sisteriias qiic contienen agua
y solventes parecidos.
Determinación de la nahiraleza de las fases sólidas 365
4W
Puntos iniciales
Figura 1%5. Diagrama de fases
del sistema bismuto-cadmia.
o
u
O
20
40
M)
en pero de Cd.
80
100
Cd
Fuera de las temperaturas de -503C a 2003C este método va acompañado de dificultades experimentales y en consecuencia se prefiere el procedimiento de análisis tirmico.
DETERMINACION DE LA
NATURALEZA DE LAS FASES SOLIDAS
Para una interpretación completa del diagrama de fases es esencial conocer la naturaleza y composición de las fases sólidas que aparecen durante
la cristalización y en el sólido final. Estas pueden ser:
1. Componentes puros, tales como el bismuto o cadmio en el sistema discutido antes.
2. Compuestos formados por la reacción entre los constituyentes puros, por
ejemplo, el MgZn,, del sistema hlg-Zn; el Na,SO,. 10 H 2 0 , en el sistema
NaS0,-HZO, y el FeCI, . 6 HZO,en el sistema FeC1,-H,O. Tales compuestos tienen composición definida, son estables en un intenzalo de temperaturas y concentración, poseen temperatura de fusión o de transición
definida,. .v tienen una estructura cristalina definida.
3. Soluciones sólidas, homogéneas cuya composición varia dentro de intervalos de concentración y está determinada por la composición de la solución desde la cual cristalizan. Tal variabilidad de composición establece
una diferencia entre la solución sólida y un compuesto.
4. Mczclas de sólidos que puedcn ser componentes puros, compuestos o soliicioncs sólidas.
Frecuentemente es posible deducir la naturaleza de las fases sólidas del
aspecto del diagrama de las mismas pero otras veces es necesario someter
a un escrutinio más cuidadoso los sólidos. Para hacerlo se inspeccionan por
microscopia para ver su número y, si es posible, su identidad. Otra posibilidad es el uso dc los rayos X. La separación desde una solución y cl análisis
siguiente tambikri puc& emplcanc, pero este procedimierito va acoiripaíiado
366 Capítulo 10: Regla de las fases
,
'íl
de incertidumbre a causa de la dificultad en lograr un sólido libre de
contaminación de una solución saturada. Esta dificultad puede ob~iarse
por el uso de una "telltale" que es una sustancia soluble en solución pero
no en la fase sólida. Al adicionar una cantidad definida pequeña de esta
sustancia a la solución y determinar su cantidad presente en el sólido húmedo, es posible deducir la cantidad de solución adherida al sólido y, por
lo tanto, llegar a la composición de la fase sólida pura.
CLASIFICACION DE LOS EQUILIBRIOS
SOLIDO-LIQUIDO DE DOS COMPONENTES
Cada diagrama de fase condensado se puede considerar compuesto de una
combinación de cierto número de otros tipos simples y este tipo es el Único
que tiene lugar en ciertos sistemas: en otros hay una combinación de los
mismos, dando un diagrama completo más complejo. En cualquier caso el
significado de las relaciones de fase en un sistema es fácil de entender
cuando se dispone de los tipos de diagrama elemental.
Los sistemas de dos componentes condensados se clasifican primero según
la miscibilidad de las fases líquidas, y éstas a su vez de acuerdo con la naturaleza de las fases sólidas que cristalizan desde la solución. Sobre esta base
los tipos elementales son:
Clase A. Los dos componentes son completamente miscibles en el estado
liquido.
Tipo 1. Los componentes puros sólo cristalizan desde la solución.
Tipo 11. Los dos constituyentes forman un compuesto sólido estable hasta su punto de fusión.
Tipo 111. Los dos componentes forman un compuesto sólido que
se descompone antes de alcanmr su punto de fusión.
Tipo IV. Los dos constituyentes son completamente miscibles en
el estado sólido y por esa razón dan una serie completa
de soluciones sólidas.
Tipo V. Los dos constituyentes son parcialmente miscibles en el
estado sólido y forman soluciones sólidas estables.
Tipo VI. Los dos constituyentes forman soluciones sólidas que
son estables únicamente hasta la temperatura de transición.
Clase B. Los dos componentes son parcialmente miscibles en el estado liquido.
Tipo 1. Los componentes puros sólo cristalizan desde la solución.
Clase C. Los dos componentes son inmiscibles en el estado liquido.
Tipo 1. Los componentes puros cristalizan sólo desde la solución.
Clase A: Tipo 1. Diagrama eutéctico simple 367
CLASE A: TIPO 1. DIAGRAMA EUTECTICO SIMPLE
Los sistemas condensados de dos componentes quc pertenecen a esta clase
tienen un diagrama general cuyo aspecto se muestra en la figura 10-6.
caracterizan por el hecho de que los constituyentes A y B soii complctamente misribles en el estado líquido: y tales soluciones dan sólo fases sólidas
puras A y B. En esta figura los puntos D y E son los de fusión de A y B puros
respectivamente. La línea D G d a las concentraciones de las soliicioncs saturadas con A a temperaturas comprendidas cntre D y F, o los puntos de
congelación de las soluciones que dan una fase sólida A. Anilogamcnte, la
línea E G da las concentraciones de las soluciones saturadas con el sólido
B a temperaturas comprendidas cntre E y F. En G la solución es saturada
en A y B, esto es, las tres fases se hallan en equilibrio. Sc deduce, por lo
Figura 1W6. Diagrama eutéctico
simple.
% de Composición
tanto, que las líneas DG y E G repreientan equilibrios bifásiros monovariantes, mientras que G es un punto invariante, e n el cual la temperatura F
Y la composición C de la solución debe permanecer constante en tanto coexistan las tres fases. La temperatura puede hacerse descender dcbajo de F
sólo cuando una de las fases h a desaparecido y por enfriamiento ulterior la
~oluciónse encuentra saturada. En otras palabras, en F la solución G debe
solidificar completamente, y es por tanto la tempcratura mínima en la cual
existe una fase líquida e n el sistema A-B; debajo de ésta, el sistema es completamente sólido. La temperatura F es la rutéctica y C y G son la composic i ón y el junto eutécticos.
Encinia. de 13s líneas DG y GE se encuentra el i r e a en la cual la solución
hhaa no saturada o existe el fundido. En ella sólo hay una fase presente
Y el sistema es divariante. A fin de definir un punto cualquiera en esta
<ireadeben especificarse tanto la tcmprratura romo la composirión. El significado de las porciones rrstantes dcl diagrama puede hacerse más claro
368 Capítulo 10: Kegla de las fases
7-
a l considerar la conducta por enfriamiento de varias mezclas de A y B. Tomenios primero una mezcla de composición global a, si se calienta hasta el
punto a"' se obtiene una solución no saturada. Al enfriar esta solución hasta
el punto a" se obtiene x". En este punto la solución está saturada con A ; o en
otras palabras, a" es el punto de congelación de la solución a la temperatura x". A medida que continúa el enfriamiento sigue separándose A, y la
composición de la solución saturada cambia según la línea a"G. Así, a una
temperatura tal como la x' el sólido A está en equilibrio con la solución
saturada de composición y', y así sucesivamente. Puede verse, por esa razón,
que para una composición global que queda en el área DFG el sólido A
está en equilibrio con diversas composiciones de la solución dada por la curva DG en cada temperatura. Sin embargo, a la temperatura F aparece otra
fase sólida, B, y el sistema se vuelve invariante. Al extraer calor A y B cristalizan desde la solución saturada en la relación fija, C, y la cristalización
continúa hasta que la solución ha solidificado completamente. Una vez que
este proceso esti completo y no queda sino una mezcla sólida de A y B,
el sistema se vuelve monovariante, y el enfriamiento sigue debajo de F en el
área FACG de coexistencia de los dos sólidos A y B.
La inspección del área sólida FACG en el microscopio revelaría que
está constituida por cristales relativamente grandes de A que han tenido
una oportunidad para crecer, desde la temperatura x", a una menor de F,
y hay también una mezcla íntima de cristales más finos de A y B que cristalizan en la proporción C definida a una temperatura F. Los cristales mayores
d e A, se llaman primarios, porque son los primeros en aparecer. El área
FACG debe marcarse por esa razón como conteniendo cristales primarios
de A en una mezcla de eutéctico íntima de cristales de A y B.
Análogas consideraciones aplicadas a las composiciones globales que
quedan entre C y B, tal como b, por cjeniplo, muestran que un área EFG
del sólido B está en equilibrio con las soluciones saturadas a lo largo de EG.
A la temperatura F aparece el sólido B, el sistema se hace invariante, y así
permanece hasta que la solución solidifica en G. Una vez que la solidificación es completa, la mezcla pasa dentro del área FBCG donde el constituyente primario B y la mezcla eutéctica de composición global C se hallan
presentes. Finalmente, enfriando una mezcla de composición C no obtendremos ningún sólido hasta llegar al punto G, en el cual aparecen simultáneamente A y B, y el sistema solidifica a temperatura constante para producir únicamente la mezcla eutéctica. En este sentido, la composición C se
comporta como una sustancia pura durante la solidificación. Sin embargo,
el resultado no es un solo sólido sino una mezcla de dos.
Una vez que disponemos del diagrama de fases tal como el de la figura
1 6 6 , para un sistema binario, es posible especificar las condiciones bajo
las cuales se obtienen las fases sólidas particulares y describir el comportamiento de una mezcla global dada al rrilriarsc. Así se puede ver que la s q a -
Clase A: Tipo 11 369
,,ción de A puro tiene sólo lugar en las mezclas que quedan dentro del área
DFG entre las temperaturas D y F. Análogamente, B puro se obtiene sólo
en el área EFG a partir de composiciones globales que quedan entre C y B,
y únicamente entre las temperaturas E y F. La proporción de sólido en la
solución saturada para cada temperatura se estima desde el diagrama. Para
una composición global a a la temperatura d,la distancia .Vd es una medida de la cantidad de solución saturada de composición y', mientras que la
distancia dy' nos da la cantidad de sólido A presente en la mezcla. Por lo
tanto, la relación a'd/dy' es también la r a d n en peso $,'A, si la composición se expresa en porcentaje en peso, o molar si así viene expresado la composición de A y y'. Con estas relaciones y cualquier peso global es posible
calcular el rendimiento de la fase sólida que se desea para una temperatura
dada.
En la figura 10-6 se muestran los diagramas eutécticos simples del aluminio-estaño, bismuto-cadmio, cloruro de potasio-cloruro de plata, sulfato
de sodio-cloruro de sodio, y benceno-cloruro de metilo. El comportamiento
de estos sistemas al enfriar es análogo al del bismuto-cadmio ya descrito.
CLASE A: TIPO 11. FORMACION DE UN
COMPUESTO CON PUNTO DE FUSION CONGRUENTE
Cuando reaccionan dos componentes puros para formar un compuesto
estable hasta su punto de fusión, el diagrama de fases torna la forma típica
mostrada en la figura 1&7 para el sistema cloruro cuproso-cloniro férrico. Si
el compuesto, en este caso CuCl . FeCI,, se considera como un componente
aparte, todo el sistema puede pensarse como constituido de dos diagramas
del tipo eutéctico sencillo, uno por CuCI-CuCI . FeCI,, y el otro por CuCl .
FeC1,-FeCI,. La discusión de los diagramas del tipo 1 se aplica a cada porción con el resultado mostrado en la figura.
Un compuesto tal como el CuCl . FeCI, que funde a temperatura constante para dar un liquido de igual composición que el compuesto sólido se
dice que tiene un punto de fusión congruente. Compuestos de esta naturaleza aparecen también en los sistemas binanos del oro-teluro (AuTe,), aluminio-selenio (Al,Se,), cloruro de calcio-clomro de potasio (CaCI, . KCI),
urca-fenol (1: 1 ) y otros muchos. Cuando varios compuestos con puntos de
fusión congruente se forman en un sistema se obtiene un máximo para cada
Uno de ellos, y el diagrama tiene la forma de la figura 10.8 correspondiente
al sistema Fe,CI,-H20,3 en el que se obscrvan cuatro compuestos estables,
es, Fe,CI,. 12 H,O, Fe,Cl,. 7 H,O, Fe,CI,. 5 H,O, y Fe,CI, . 4 H20.
presencia de estoi compiiestos aumcnta el número de áreas y puntos
eutkticos pero por otro lado no agrega nada nuevo al problema ge~eral.
370 Capítulo 10: Regla de las fases
Fundido
Figura
10-7.
Formación de un compuesto ron punto de fusión congruente.
10
15
20
% en moler de Fe&
Figura 10-8.
El sistema Fe,CIaH,O.
25
30
Clase A: Tipo 111 371
s i usamos el artificio de considerar cada compuesto como un constituyente,
el significado de las diversas áreas, líneas y puntos se deduce fácilmente
conlo se señaló con anterioridad.
CLASE A: T I P O 111. FORMACION DE U N COMPUESTO
COMO RESULTADO DE UNA REACCION PERITECTICA
En muchos sistemas se forman compuestos cuya estabilidad no alcanza
hasta el punto de fusión, sino que al calentar se encuentra que en lugar de
fundir congruentemente en un punto se descomponen para dar una nueva
fase sólida y una solución de composición diferente de la de las fases sólidas.
Cuando esto sucede, se dice que el compuesto lleva a cabo una transición,
o reacción peritéctica o una fusión incongruente.
En general una reacción peritéctica se representa mediante la ecuación
C,
F='Ci
+ solución (o fundido)
(4)
donde C? es el compuesto, y C, la nueva fase sólida que puede ser tanto
un compuesto como un constituyente puro. Como lo indica la ecuación (4),
la reacción peritéctica es reversible, es decir, al calentar tendrá lugar un
cambio de izquierda a derecha, y al enfriar lo contrario. Como durante la
reacción peritéctica existen tres fases en equilibrio, el sistema es invariante,
y de aqui que tanto la temperatura como la composición son fijas, y cambiarán sólo cuando desaparece una de las faser; o en otras palabras, cuando
la reacción peritéctica se ha efectuado totalmente. La temperatura constante
a la cual tiene lugar la reacción se llama peritéctica o de transición, y para
esta temperatura se obtendrá una porción horizontal en las curvas de enfriamiento análogas a la porción eutéctica.
Las relaciones en un sistema en el que tiene lugar una reacción peritktica se ilustran con el diagrama para el sistema condensado binario
del fluoruro de calcio-cloruro de calcio que se muestra en la figura 1&9.
La línea AB da las concentraciones de fundido en equilibrio con el fluoruro
de calcio sólido. Cuando se alcanza el punto B, a 73joC, se produce una
reacción peritéctica entre la sustancia fundida de composición B y el fluoruro
de calcio sólido para formar el compuesto CaF,. CaCl,, según la ecuación
CaF,(s)
+ fundido (B) = CaF, . CaCl,(s)
(5)
Esta reacción pocede isothnicamente al formar el compuesto C hasta
que se consumen totalmente, bien sea, el fluomro de calcio o el fundido,
dependiendo esto último, de la composición global de la mezcla. Si la composición global queda entre la de cl fluoruro dc calcio y C , por ejemplo
en la figura, hay mayor proporción de estc último compuesto del que es
necesario para reaccionar con la sustancia fundida B, y de aqui que al
Q
372 Capítulo 10: Regla de 1% fases
101
CoFl
% en moles de
CaCI,
CaC'z
Figura 1CL9. Diagrama de fases del sistema CaF, CaCI,.
agotarse el fundido, éste se habrá transformado todo en CaF, . CaCI,, mientras que el exceso de fluoruro de calcio quedará como tal. En consecuencia,
dentro del área comprendida entre el eje de aquel fluoruro y C debajo de
737"C, sólo existen dos fases sólidas: CaF, y CaF2. CaCl,. Si por el contrario, la composición de la mezcla queda entre C y B, por ejemplo d , existe mayor cantidad de fundido que el necesario para reaccionar con todo el fluoruro de calcio sólido, y de aquí que los productos de la reacción peritéctica
serán C y fundido sin reaccionar. Al pasar al área situada inmediatamente
debajo de C B tendremos, sólido C y fundido en equilibrio con las concentraciones de las soluciones saturadas dadas por la línea BD. Debe observarse
que las líneas A B y BD no son continuas sino que presentan una rotura
en B. Esto significa que las fases sólidas del fluoruro de calcio y el CaF2.
CaCl, tienen cada una sus propias curvas de solubilidad que interscctan
en B, la concentración de la solución saturada con ambas fases. Finalmente,
si la composición global fuese b, que corresponde exactamente a C , existe suficiente fluoruro de calcio para reaccionar con todo el fundido, y el
resultado de la reacción peritéctica es ahora compuesto puro C, Únicamente.
El resto del diagrama no introduce nada nuevo. CBDE es simplemente
un diag~amaeutéctico sencillo que comprende los constituyentes C y cloruro
de calcio. Con esta interpretación del diagrama, las designaciones de las áreas
mostradas se deducen fácilmentc. Se observará que la mezcla eutktica está
compuesta de cloruro de calcio, CaF, CaClz y fundido, sin qiir ap.irezca
fluoruro dc calcio puro.
Clase A:
Al
Figura 10-10.
% en pesa de Ca
'J'iiiW 373
Co
Diagrama de fases del sistema aluminio-calcio.
Se han observado reacciones peritécticas binarias en muchos sistemas.
Como ejemplos podemos señalar los siguientes, junto con los compuestos
producidos: oro-antimonio ( A u S b ) , cloruro de potasio-cloruro cúprico
(2KC1. CuCI,), ácido pícrico-benceno ( 1: l ) , clomro de sodio-agua (NaC1.
2 H,O), sulfato de sodio-agua (Na2S0, . 10 I Z O ) . En algunos sistemas se
presentan diversos compuestos, unos con punto de fusión congruente y otros
no. Así en el sistema aluminio-calcio el compuesto A1,Ca tiene punto de
fusión congruente mientras que el compuesto A1,Ca se forma por una reacción peQtéctica. El diagrama de fases para este sistema, mostrado en la
figura 10-10, se considera típico de las relaciones encontradas bajo tales
condiciones. Finalmente, en muchos sistemas se forman diversos compuestos, ninguno de los cuales tiene puntos de fusión congruentes. Son ejemplos
de este tipo el sulfato de potasio-sulf$to de cadmio(K?SO, 2 CdSO,, K 3 0 ,
3 CdSOI) y sulfato de magnesia-agua (MgSO, . HzO, MgSO, .6&O,
MgSO, . 7 HzO, MgSO, . 12 H,O) . La porción cercana al agua pura del
diagrama en este último sistema se puede observar en la figura 10-11. Un
estudio del mismo revela que su interpretación comprende simplemente una
extensión de los principios empleados para interpretar el diagrama simple
mostrado en la figura 1G9.
CLASE A: TIPO IV. MISCIBILIDAD
TOTAL EN EL ESTADO SOLIDO
De la misma manera que dos líquidos se disuelven entre si, lo hacen los
sólidos dando una solución sólida. Estas, como las líquidas, son homogéneas
Y pueden variar en composición dentro de limites muy amplios, diferenciindose así de los compuestos sólidos cuya composición es fija siempre. El exa-
874 G@&
16: Regla de las fases
90
30
-
-
4
8
% Molar de
Figura 10-11.
12
MoSO,. H,O
lb
20
~g SO, MgS04-
Diagramas de fase del sistema MgSOÍH,O
men por rayos X de las redes de las soluciones sólidas enseña que un constituyente entra en la red de otro y se distribuye uniformemente en todo él.
Esta uniformidad de distribución establece una diferencia de la solución sólida con la de una mezcla de sólidos, pues en este Último caso, cada constituyente conserva su estructura cristalina característica.
Los diagrama de fase condensada de los sistemas binarios donde las
fases sólidas y liquidas son completamente miscibles, se clasifican en tres
grupos:
l. Los puntos de fusión de todas las soluciones son intermedias mire los
de los componentes puros.
2. L a curva de puntos de fusión presenta un mínimo.
3. L a curva de puntos de fusión presenta un máximo.
Estos diferentes casos se discutirán ahora.
7
Tipo intermedio de diagrama. La figura 1CL12 presenta el diagrama
de fases del sistema tiocianatos de arnonio-potasio, donde los dos constituyentes son completamente miscibles en ambos estados súlido y líquido. En este
diagrama la cuma superior, curva de l i q u i d o ~ ,da la temperatura de solidificación inicial, es decir, las composiciones del fundido saturado con soluciones sólidas a diversas temperaturas, mientras que la c u i ~ ainferior, O de
sólidos, d a la temperatura a que tiene lugar la solidificaciiin final. Para seguir
los cambio. involucrados en la solidificacióri de una composición dada del
fundido, consideremos un punto tal coino a en la fase líquida. Al enfriar
esta solución, no se scparará ninguna fase sólida hasta aican7ar la tempera-
,
Clase A: Tipo IV 375
Figura 1lL12. Diagrarnas de fase
del sistema NH,CNS-KCNS.
O
10
NH4CNS
40
60
80
% molar d e KCNS K'
tura que corresponde al punto 6, entonces se producirá una pequeña cantidad de solución sólida de composición c y cambia también la composición
de la sustancia fundida hacia, por ejemplo, d. Por enfriamiento posterior,
d comenzará a solidificar en e, y la composición de la fase sólida se reajustará
a :al solubilizarse algo de tiocianato de amonio desde el fundido. En toda
ocasión la composición de las soluciones líquidas y sólidas en equilibrio
estin dadas por las intersecciones de las líneas horizontales isotérmicas con
las cun-as de líquidos y sólidos. Conforme prosigue el enfriamiento la composición del fundido se mueve a lo largo de la curva de liquidus hacia el
tiocianato de amonio, mientras que la solución siilida se moverá en la misma
dirección a lo largo de la línea de solidus. Cuando se obtiene el punto h,
la solución sólida en equilibrio junto con la pequeña cantidad de fundido
que resta tiene la composición global de la mezcla, y de aquí que en este
punto la mezcla solidifica completamente, dando una solución sólida de
composición i igual a la original del fundido. U n enfriamiento posterior
conduce a un simple dcscenso d e la tcpperatura de i .
Las mismas consideraciones se aplican al enfriamiento de cualquier
composición global en el diagrama. Aunque el proceso de enfriamiento dcscrito arriba ha sido considerado en etapas; realmente los cambios de coniposición del sólido y fundido involucran un ajuste continuo de las conceiitra(iones a los talores de equilibrio exigidos por las curvas de liquidus y solididus
en cada teniperatura. Dehe recalcarse, sin embargo, que este modo de
~olidificaciónse obtiene sólo cuando el enfriamiento es suficientemente lento
Y hay buen contacto entre las fases para alcanzar el cquilibrio pero cuando
el enfriamiento es rápido y hay poca agitación se separan soluciones sólidas
de composición variable, y la temperatura final de congelamiento es menor
que hi.
Como en cste sistema no existen más que dos fases presentes en cualquier
situación de equilibrio, no hay puntos invariantcs, y de aquí que no existen
porciones horiLoritales en las corvas de cnltiarniento. Las únicas discontinui-
376 Capítulo 10: Regla de las fases
dades son un arresto cuando se alcanza la cuma de liquidus y comienza a
separar el sólido, y otro cuando la línea de composición global atraviesa la
curva de solidus y desaparece el fundido, es decir, para una composición
tal como a se observan arrestos a temperaturas que corresponden a los
puntos b e i.
La formación de manera continua de una solución sólida del tipo des.
crito es bastante común. Entre los sistemas discutidos se encuentran los del
cloruro de plomo-bromuro de plomo, cloruro de plata-cloruro de sodio,
cobre-níquel, plata-oro y naftalenwp-naftol.
Tipo con mínimo en el diagrama. El diagrama de la figura 10-13 del
sistema fi-iodoclorobenceno (A)-p-diclorobenceno (B) constituye una variación de la figura 1&12. Aquí, como antes, A y B forman una serie completa
de soluciones sólidas, pero la curva de puntos de fusión presenta ahora un
mínimo. De nuevo, la curva superior es el liquidus mientras que la inferior
es el solidus. Excepto por el hecho que la composición del fundido corres-
35
-
O
p-C,H,ICI
20
80
100
p-Cd%CI,
% molar de p-CaH4 CI1
40
60
Figura 1CL13. Diagrama de fases del sistema p-C,H,lCI-p-C,,H,CI?
pondiente al mínimo, solidifica a temperatura constante para dar una solución sólida, las relaciones en este sistema son parecidas a aquéllas descritas
en el caso del tiocianato de amonio-tiocianato de potasio.
Otros sistemas que quedan dentro de esta categoría son: carbonato de
potasio-carbonato de sodio, cloruro de potasio-bromuro de potasio, bromuro
mercúrico-yoduro mercúrico, nitrato de potasia-nitrato de sodio, plata-antimonio, y cobre-oro.
Clase A: Tipo V 377
Tipo con máximo en el diagrama. Aunque se presenta pocas veces, este
tercer tipo de diagrama presenta un máximo en la curva de puntas de fu~ión.La figura 10-14 muestra un diagrama de esta clase correspondiente al
sistema d-carvoxima-1-carvoxima (C,,H,,NOH). De nuevo el liquidus es
]a curva superior y el solidus la inferior. Como en el caso precedente, existe
sólo una composición del fundido que solidifica a temperatura constante,
y es la que corresponde al máximo. Las restantes composiciones se comportan
de la manera descrita.
95
Fundido
Figura 10-14. Diagrama de fases
del sistema d-eaivoxima-1-carvoxima,
Fundido
70
Solución sólida
O
20
40
60
80
100
dcarboxima
1-carboxima
% molar de I -carboxima
CLASE A: TIPO V. MISCIBILIDAD PARCIAL
EN EL ESTADO SOLIDO CON EUTECTICO
Cuando dos sólidos son solubles entre sí en un grado limitado únicamente, A disolverá una cantidad dada de B pzra dar una solución saturada
de B en A, mientras que B disolverá algo de A para dar una solución saturada de A en B. En tanto estas concentraciones límites no se sobrepasan, la
fase sólida es homogénea y constituye una solución sólida única. Si se sobrePasa el intervalo de miscibilidad, resultan dos fases sólidas, cada una de ellas
compuesta de una solución saturada de un constituyente en el otro. Se deduce de la regla de las fases, que para equilibrios comprendidos entrc una
solución sólida única y el fundido el sistcma será monovariante, mientras
que los de dos soluciones sólidar 9 un fundido resultari invariante. Cualquier proceso que involucra la coexistencia de dos soluciones sólidas y un
fundido se realizari isotémicamcnte.
Los sistemas con una misicibilidad parcial presentan dos tipos de diagrama. E n el primero de los mismos, tipo V, el enfriamiento del fundido
dentro de cierto lúnite origina un euttctico contenicndo sustancia fundida
Y dos soluciones sólidas. La otra posibilidad, tipo VI, sc prcsenta cuando
las dos soluciones sólidas no son establcs dentro de ciertos intervalos de
378 Capítulo 10: Regla de las fases
concentración, y una de ellas sc transforma en otra por una reacción peritéctica.
L a figura 10-13 nos muestra un diagrama típico de un sistema en el
cual la miscibilidad parcial en el estado sólido conduce a un cutéctico B.
La línea AB es la cnrva de iiquidus para las soluciones sólidas de yoduro
de plata en yoduro de mercurio ( 1 ) , mientras que la línea AX es la de
solidus para las mismas soiiiciones. Análocamente, la línea BC es la curva
de Iíqnidus para las soluciones sólidas del >-oduro mercúrico en yoduro de
plata ( I I ) , mientras que la línea Y C es l a curva de sólidus para estas solucione~.El irea encerrada por las líneas A X , X B y B A contiene entonces las
7
Fundido
C
Fieura 10-15. Diagrama de fases
del sistema yaduro rnercúrico-pduro de plata.
% 330
Y
300
A
Solución
250
0
20
40
60
sólida
80
I C,o
soluciones sólidas 1 y el fnndido, J- el área comprendida por las líneas BY,
Y C y CB soluciones sólidas II y fundido. Debajo de A X Y C no hay sustancia
fundida presentr, sino únicamente soluciones sólidas. A la derecha dc Y Z
y debajo de CY la fase sólida presente es solución sólida 11, mientras que
a la izquierda de M J X y debajo de .4X la fase sólida es la solución 1. El área
dcbajo de XY y entre las líneas W'X y YZ es el intervalo de miscibilidad
parcial de las soluciones sólidas. En esta área coexisten 1 y 11, con las líneas
W X y YZ mostrando las coinposiciones para cada temperatura. De las direcciones de estas líneas rcsulta claro que la miscibilidad parcial de los
yodiiros sólidos decrece conforme dismiiiuje la temperatura. El eutéctico
en R comprende a dos soliiciones sblidas con las composiciones fijadas dadas
por X y Y.
Otros sistemas que presentan diagramas de este tipo son ci cloruro de
plata-cloruro ruproso, el nitrato dc potasio-nitrato de talio, azobencenoazoxihrnceno, naftaleno-ácido monticloroac&tico, y los pares metilicos: plo~no-;~~~tirnonio,
plata-cohrc v < adinio-cinc.
-
Clase A: Tipo VI
379
CLACE A: TIPO VI. MISCIBILIDAD PARCIAL
EN ESTADO SOLIDO CON PERITECTICO
En lugar de presentar un eutéctico, dos soluciones sólidas pueden llevar
a cabo una reacción peritéctica en la cual una solución sólida de un tipo
se transforma en la de otro a una temperatura definida. Cuando así sucedc,
el diagrama de fases tiene la forma general presentada cn la figura 1&16.
En este diagrama ID y JF son las curvas de liquidus y sólidus, respectivamente, de las soluciones sólidas de B en A, mientras DE y CE son las correspondientes a las de A en B. Como puede verse en el diagrama, cualquier
composición global que quede entre A puro y el punto F d a d o soliiciones 1;
Figura 10-16.
Diagrama de fases de soluciones sólidas parcialmente miscibles con
peritéctico.
aqu4llas que estin entre B puro y el punto D dan solamente soluciones sólidas 11. Sin emhargo, las fases sólidas que resultan de mezclas comprendidas
entre F y D deprndcn de si la composición ylobal queda m t r e F y C, ó
Y D. Enfriando una mercla cualquiera entre F y C, tal como a , nos dará
rimero una solnción sólida 1 de cornposicióri f cuando se alcanza el piinto b.
E n enfriamiento mayor produce nneva sep?.ración de 1 de cornposiciories
fF, mientras que cl ajuste de la composición del fundido procederá
W n bD. Pero cuando se alcanza la temperatura que corresponde a la lí"ea FD, piinto d, la solución sólida 1 dc composición F se hace inestable
Y Cornienn a r~accionarcon cl fundido de composición D para formar una
Solución sólida 11 dc coiiipoiii.ii>n C . Como esta reacción peritlctica entre
dos soliiciones sólidas y rl fundido lleva apareada la cocxistcncia dc tres
fases, cl Iiroccso ticnc lugar isoii:nnicarnente hasta que cl fundido se con-
i
380 Capítulo 10: Regla de las fases
sume totalmente y permanecen sólo dos fases. L n a vez que ha desaparecido
la sustancia fundida empieza a abatirse la temperatura y pasamos dentro
del área de miscibilidad parcial de las dos soluciones sólidas. Las lineas FG
y CH dan las composiciones de 1 y 11 respectivamente a diversas temperaturas debajo del peritéctico.
Para una composición cualquiera que varía entre C y D, tal como g,
el comportamiento por enfriamiento será análogo al de a hasta el punto i,
la temperatura peritéctica. En i, la solución sólida F y el fundido D reaccionan otra vez para dar una solución sólida 11 de composición C ; pero
como ahora, hay mayor proporción de sustancia fundida de la que se necesita para reaccionar con todo el de F para formar C , debe desaparecer F,
y al final de la reacción peritéctica debe resultar una presencia de la solución sólida 11 y del fundido. Esta mezcla llegará a solidificar en j y producir
únicamente una solución sólida 11.
En el diacrama bajo discusión la solución sólida de composición j será
estable sólo entre las temperaturas que corresponden a j y k. Cuando alcanzamos esta última temperatura, j pasa dentro del intewalo de miscibilidad
parcial y se desdobla en dos soluciones sólidas.
La aparición del ~eritécticoque involucra las soluciones sólidas se encuentra en sistemas binarios como el cloruro de plata-cloruro de litio, nitrato
de plata-nitrato de sodio, cobalto-hierro, indio-talio y fi-yodo-clorobencenw
p-diyodobenceno.
CLASE B: MISCIBILIDAD
PARCIAL EN ESTADO LIQUIDO
Aunque se ha centrado la discusión en los sistemas que presentan una
sola fase liquida, los hay con sustancia fundida parcialmente miscible sólo
en cierto intervalo de temperatura y concentración. Cuando hay una separación de un liquido en dos capas, aumenta el número de fases y la relación
entre ellas se modifica. El caso que consideraremos ahora es aquél en que
la sustancia fundida es parcialmente miscible pero las fases sólidas son con+
tituyentes puros, figura 10-17. Este es esencialmcnte el diagrama de un
eutéctico simple con un área de miscibilidad parcial de la siistancia fundida
superpuesta sobre el mismo. Fuera del área de domo y sobre las líneas de
sólido existe únicamente una fase liquida. Dentro del área de domo y sobre
la linea DE coexisten dos fases líquidas cuyas composiciones en cada temperatura están dadas por las lineas de unión horimntales como bJ o kL.Como
las relaciones debajo de la linea DE se han discutido, necesitamos elaborar
sólo la conducta en y sobre dicha línea.
Con este fin consideremos especificamente un fundido de composición a
que está comprendida entre D y E. El enfriamiento no produce nuevas
fases hasta que cn b aparece una pequeña cantidad de una segunda capa
Clase B: Miscibilidad parjal en estado iíquido 381
Fundida
Figura 10-17. Diagrama de fases
del sistema de sustancia fundida
parcialmente miscible.
\
,
P*k
Composición
A
.
7
,
--u
;i %
!,p+dn
0
de líquido J. Un enfriamiento posterior de cstas dos capas hasta alcanzar
el punto d modifica simplemente sus cantidades relativas de las dos capas
y trae consigo un ajuste de las concentraciones a lo largo de bk y ]L. Sin
embargo, cuando las composiciones de las capas alcanzan D y E, que coiresponden a la composición del punto f, la capa D queda saturada de A,
y esta última comienza a depositar según el esquema
Líquido
D -+ A (sólido)
+ Líquido E
(6)
Durantc esta cristalización de A y transformación de la capa líquida D
en E, se encuentran presentes tres fases en cquilihrio y el sistema es invariante, permaneciendo constante la temperatura hasta que todo el constituyente D ha desaparecido, y entonces el sistema recupera un grado de libertad, y la temperatura se abate hasta obtener A en equilibrio con un fundido
simple de composición dada por EF. La solidificación final tiene lugar en F
originando una mezcla eutktica de A y B.
Para composiciones comprendidas entre C y D la conducta es algo diferente. El enfriamiento de tal mezcla ocasionará una separación de A cuando
se cruza la línea CD, el enfriamiento posterior desplata la composición del
fundido hacia D; cn este punto tiene lugar una separación de la sustancia
fundida en D y E. A partir dc aquí, la separación de A se verifica bajo condiciones isotérmicas hasta la desaparición total de D, y desde aquí la mezcla
de A y fundido a lo largo de EF enfría de la manera descrita. Como a la
derecha de E sólo hay presentc una fase líquida, el comportamiento ser;
el descrito en un sistema eutéctico simple.
Muchas veces la línea CD cs sumamente corta o no existe. En estc último
coinciden los puntos D y C; es decir, en el punto de fusión dc A la capa
mis rica r n ese constituyente es
A puro. De nuevo, el punto
eiitktico F puede desf~la7arsetan cerca del eje B que borra la Iínca F G
Y el jrea ( B fundido). Rjim1,los de todas a t a s niodificaciones de la
figura 10-1 7 la presc~ltail102 L>a!<.abinarios condensados litio-sodio, bistiluto-
+
382 Capítulo 10: Regla de las fases
.
t.i
.,
..;,
cinc, bismuto-cobalto, cromo-cobre, cobre-plomo, fenol-agua y ácido ben.
mico-agua.
CLASE C: INMISCIBILIDAD EN
LOS ESTADOS SOLIDO Y L I Q U I D O
Cuando dos constituyentes son completamente inmiscibles tanto en el
estado sólido como en el liquido, cada una de estas sustancias fundirá y
congelara independientemente de la otra. La figura 1G18 nos presenta
un ejemplo de tal conducta del sistema vanadio-plata. Debajo de 960%
(das capas)
a 1710°C funde el V
+
V sólida
Ag liquida
Figura 10-18. Diagrama de fases
del sistema vanadio-plata.
1100
Ag sólida
~00.t
400
O
V
+
V sblido
20
40
60
80
x molar de Ag
100
Ag
los dos elementos existen en fase sólida. A 960°C la plata funde claramente
coexistiendo en forma liquida con el vanadio sólido, hasta el punto de fusión de éste, que es 1710"C, y desde aquí el sistema contiene sólo dos
líquidos puros en dos capas.
AnÁlo~aconducta se obsema t a m h i h con los pares metilicos bisinutocromo, cromo-hicrro, aluminio-sodio, aluminio-plomo, galio-niercurio, potasio-maqesio, y otros. En la prictica, en todos kis casos las sustancias fundidas
se hacen parcialmente miscibles por encima del punto d e fusión del constituyente de punto de fusión m & elevado.
DIAGRAMAS COMPUESTOS
Como regla general, los diagramjs binarios sólido-líquido no son de 10s
tipos más sencillos descritos, sino que tienen elementos de varios tipos combinados en un solo diagrama. En la f i p r a 112-19 se muestra una relación
de fases ni& compiicacla del magnesio-cinc. Al aplicar los principios generales desarrollados para los tipos más simples, es factible interpretar los equilibrios más coniplicados que tienen lugar en este sistema como una combinación de la formación dc solución sóiida, formación de COq>ue$tos,amhos
Diagramas compuestos
Mg
Figura 10-19.
% d e peso Zn
383
Zn
Diagrama de fases del sistema rnapesio-cinc.
estables (MgZn,) e inestables (MgZn y MgZn,), y eutécticos. El estudiante
podrá comprobar por sí mismo de la validez de las inscripciones dc las diferentes áreas y debería dibujar las curvas de enfriamiento para las diferentes
composiciones globales en el sistema.
SISTEMAS DE TRES COMPONENTES
En este caso una sola fase posee cuatro grados de libertad, que son, la
temperatura, presión y las composiciones de dos de los tres cornpoiientes."
Este número de variables plantea una gran dificultad al rrpresentar las
relaciones de fase. 'Por esa razón los datoren los sistemas ternarios se presentan grneralmente a cierto valor fijo de la presión, tal como la atmosférica,
Y a diversas temperaturas constantes?En estas condiciones, es posihle mostrar
las relaciones de concmtración entrc los tres componentes a cualquier temperatura, sobre un diagrama plano, y al combinar este tipo de diagrainas
obtenido? a distintas tem1,eraturas sc logra coristruir un modelo sólido que
tiene representadas las concentraciones en ia base y la tcrrip?ratura en rl eje
vertical.
Para un sistcma de tres componentes la regla de las fases tiene la forma
F = 5 - P. A una presión y teniperatrira fijas el número de grados de librrtad sc reduce en dos, así que F = 3 - P, y 'cl nútiiero máximo de fases que
Pueden presentarse simultáneamente es tres, que es el mismo número posible
Para los sistemas de dos componenter bajo una presión constante únicamente?
Por r,sa razón, bajo las condiciones especificadas i i t i área indica dc nuevo
divariancia, una lírica monovarianria, y un punto invariancia.
384 Capítulo 10: Regla de las fases
METODO DE REPRESENTACION GRAFICA
Se han propuesto divcrsos esquemas para representar bidimensionalmente
los diagramas de equilibrio de los sistemas ternarios. De ellos el método del
triángulo equilátero sugerido por Stokes y Roozeboom es el más general
y el que se utilizará ahora. En este método las concentraciones de los tres
componentes a una presión y temperatura dadas se grafican sobre un trián.
gulo cquilátero tal como se mucstra en la figura 1C-20. Cada vértice del
triángulo se toma como punto de referencia para un 100% del componente
con que se designa. Para obtener otros porcentajes de A, se dividen los
lados AB y AC en 10 ( o a veces 100) partes iguales, y se dibujan líneas
paralelas a BC. Cada una de ellas representa entonces un porcentaje de A
que varía desde cero sobre la línea BC a 100 en A. Análogamente, las lineas
que dividen los lados BA y BC y son paralelas a AC nos dan diversos porcentajes de B, mientras que las trazadas a lo largo de los lados C A y CB y
paralelas a AB representan los diversos porcentajes de C. Para graficar un
punto cualquiera sobre el diagrama tal como el D, que tiene un 30% de A,
Figura
fica de
20% de B, y 507; de C , localizamos primero la línea de 30% de A, esto es,
ab; luego la de 20% de B, es drcir, c d . La intersección de aquellas dos rectas
nos da el punto buscado. Este debe quedar también sobre la línea de 50%
de C, o e f , y este hecho se utiliza para comprobar la exactitud de la localización.
De la naturaleza dcl diagrama es fácil de comprobar que los lados del
triángulo representan diferentes proporciories de los constituyentes en los
sistemas de dos componentes. Así las rectas AB, BC y AC dan las relaciones
de concentración en los sistemas binsrios A-B, B-C y A-C, respectivamente,
y cua1quie.r punto sobre cstas líneas se refiere d l o a cstos sistemas binariosPor otra parte, crinlquicr inc~clacoiiipuerta dc A, D y C debe quedar dcntro
Sistemas de tres líquidos parcialmente miscibles 385
del diagrama. De hecho, el argumento puede ampliarse para mostrar que
,,;logas
relaciones se aplican también a cualquier línea o triángulo menor
dentro del diagrama. Así todas las mezclas que pueden prepararse desde D
y E quedarán sobre DE, las preparadas desde E y F sobre EF y las compuestas de F y D sobre FD; y todas las composiciones posibles que puedan
prepararse de D, E y F quedarán dentro del triángulo menor DEF. Por
consideraciones se deduce que si un punto cualquiera como G queda
sobre la recta que une D y A, entonces D debe encontrarse sobre una extensión de la recta que pasa por los puntos G y A enlazándolos.
Otra relación que conviene recordar es ésta: Cualquier mezcla tal como
G, compuesta de A y D, contendrá a éstos en la proporción en peso DG: AG,
si graficamos el porcentaje en peso, o en moles, si el porcentaje es molar.
Conociendo la cantidad total de cualquier mezcla presente, es posible
calcular los pesos (o moles) de diversas fases presentes en un sistema dado.
Tales cálculos encuentran amplia aplicación en todos los tipos de problemas
de separación que comprenden tres componentes.
SISTEMAS DE TRES LIQUIDOS
PARCIALMENTE MISCIBLES
Aunque son posibles muchas categorías de sistema de tres componentes
se dedicará la atención principal sólo a dos de ellos; esto es, ( a ) sistenias
compuestos de tres componentes líquidos que presentan una miscibilidad
parcial, y (b) sistemas compuestos de dos componentes sólidos y uno líquido. Los sistemas compuestos de tres líquidos que presentan una miscibilidad parcial se clasifican así:
Tipo 1. Formación de un par de líquidos parcialmente miscibles.
Tipo 11. Formación de dos pares de líquidos parcialmente miscibles.
Tipo 111. Formación de tres pares delíquidos parcialmente miscibles.
Cada uno de estos tipos se discutirá por turno.
TIPO 1. UN PAR MISCIBLE PARCIALMENTE
Consideremos a un par de líquidos, B y C, que son parcialmente solubles entre si a una temperatura dada. Si mezclamos cantidades relativas
de los dos, de manera que se exceda los límites de solubilidad mutua, se obtendrán dos capas, una compuesta de una solución de B en C, la otra de
C en B. Supongamos que ahora se agrega a la mezcla anterior un tercer
líquido A, que es completamente miscible tanto en B como en C . La experiencia ~nseiiaque A se distribuirá entre dos capas y promueve una mayor
rniscibilidad de B y C. Este incremento depende de la cantidad adicionada
Y de las cantidades de B y C presentes. Si se añade suficiente A, las dos capas
386 Capítulo 10: Regla de las fases
9
,.r
'
'
pueden resultar modificadas dando una solución única compuesta de los
tres líquidos.
Los cambios de miscibilidad producidos por adiciones progresi\.as de A
a las mezclas de B y C pueden seguirse en el diagrama mostrado en la figura 1&21. Los puntos a y b designan las composiciones de las dos capas
liquidas que resultan de la mezcla de B y C en alguna proporción global
arbitraria tal como c, mientras que la línea Ac muestra la manera en que
dicha composición cambia por adición de A. Cuando se añade suficiente A
para cambiar c a c,, las composiciones de las dos capas se desplazan desde
Figura 10-21.
Tres liquidas con
un par parcialmente miscible.
a y b hasta a, y b,. La línea a,b, a través de c, conecta las composiciones
de las dos capas en equilibrio, y se denomina l i m a de unión. De manera
análoga se modifican las composiciones a as,a8 y bz, b,, cuando las composiciones globales alcanzan los valores c2 y c,. Finalmente, en el punto b, se
ha agregado suficiente cantidad de A para formar una sola capa de esta
composición, y de aquí que se obtiene sólo una composición única.
La línea de unión para b, enseña que la composición de la capa más
rica en B en el punto de completa miscibilidad no es idéntica a b, sino a a,.
Este hecho indica que la miscibilidad total se logra no por coalescencia
de las dos capas en una sola, sino por desaparición de la más rica en B. Esta
miscibilidad completa por coalescencia de las dos capas tiene lugar únicamente en un punto del diagrama, D. En él las composiciones se hacen
idénticas, y las dos soluciones se unen en una sola fase líquida de composición constante. Al punto D se le denomina punto crítico isoti'rniico del sistema, o punto de doblez, y puede obtenerse sólo agregando A a la mezcla
única de B y C, esto es, d.
De'la discusión precedente se sigue que cualquier mezcla de A, B y C
de una composición global que se encuentra dentro del irea de domo dará
dos capas líquidas de composiciones dadas por la línea de unión apropiada
por la composición de la mezcla. Por otra parte, cuando dicha composición
global queda fuera de aquella área, se producid únicamente una sola
Tipo 11. Dos pares parcialmente miscibles 387
&ción homogénea de los tres liquidos. La c u r a uDb se conoce como bi.,dal.
E n general, el punto de doblez D quedará fuera del máximo de la
,,Pa binodal. Además, puesto que por regla general el componente A no
(e distribuye en forma igual entre las dos capas a y b, las lineas de unión
no son paralelas entre sí, ni a BC.
Son ejemplos del tipo discutido el sistema ácido acético-clorofomo-agua
(A-B-C) , y la acetona-agua-fenol (A-B-C) .
TIPO 11. DOS PARES PARCIALMENTE MISCIBLES
Cn sistema compuesto de tres líquidos tales que A y B, y A y C son parcialmente miscibles, mientras que B y C lo son totalmente, exhibirá un
diagrama de fases con dos c u r a s binodales como se muestra en la figura 10-22. La curva aDb d a el intervalo de composiciones en que la mezcla
A y B conteniendo C son parcialmente miscihles. De nuevo la curva binodal
cFd d a el área dentro de la cual C y A que contiene B se separa en dos
pD\
Figura 10-22.
Líquidos parcialmente miscibles con dos cuma, bi-
nodales.
B
C
4
capas. Fuera de estas áreas los tres componentes son completamente misci&s. D y F son los puntos de doblez respectivos de las dos regiones heterogtneas, mientras que las dos líneas de enlace muestran las composiciones
de las diversas capas en equilibrio.
Este tipo de diasrama lo presrntan los liquidos nitnlo succinico-aguaalcohol etilico (A-B-C) entre 18.5 y 31°C.
Aunque algunos sistemas líquidos ternarios exhiben este tipo de diagrama
a temperaturas elevadas, a otras inferiores, cuando la miscibilidad decrece,
las dos curvas binodales pueden intersectar para formar la banda típica del
diagrama mostrado en la figura 1C-23. Aquí el área de la miscibilidad parcial abdc se extiende en toda la amplitud del diagrama, dando bd la comPosición de una capa y ac la de la otra. Las líneas de enlace indicadas unen
388 Capitulo 10: Regla de las fases
las soluciones en equilibrio. Ejemplos de la formación de bandas se encuentran en los sistemas de agua-fenol-anilina (A-B-C) y agua-acetato d e
etilo-alcohol butílico-n (A-&C) .
Figura 10-23. Líquidos parcialmente rniscibles con curvas binodales que intersectan.
TIPO 111. TRES PARES PARCIALMENTE MISCIBLES
Cuando los tres líquidos son parcialmente solubles entre si, se producen
tres curvas binodales (figura 10-24), con tal que la temperatura sea suficientemente elevada para prevenir intersecciones. Aquí de nuevo las áreas
en forma de domo indican regiones Liquidas bifásicas, mientras que en las
externas sólo existe una fase presente. Sin embargo, cuando intersectan las
Figura 10-24. Líquidos parcialmente miscibles con tres curvas
binodales.
2
curvas binodales, como puede suceder a temperaturas más bajas, el diagrama toma la apariencia de la figura 10-25. Aquí en las áreas designadas
por 1 sólo cxiste una fase, mientras que en las señaladas con 2 coexisten dos
fases liquidas con las concentraciones de equilibrio dadas por las líneas de
enlace que las unen. El área señalada con trcs, posee ahora tres fases Iíqui-
Sistemas compuestos de dos sólidos y un líquido 389
das en equilibrio. Entonces el sistema debe ser invariante a temperatura
y pesión constante, y las composiciones de las tres capas resultan fijas e
independientes de la composición global en tanto ésta queda dentro de
dicha área. Estas composiciones constantes para las tres capas líquidas en
equilibrio están dadas por los puntos D, E y F .
Figura 1&25. Intersección de tres
curvas binodaler.
./'
~/
Un ejemplo de un sistema que d a tres fases liquidas en equilibrio es el
nitrilo succinico-agua-éter. A temperaturas más elevadas este sistema se
clasifica dentro del tipo mostrado en la figura 10-2.1.
'APLICACION DE LOS DIAGRAMAS LIQUIDOS TERNARIOS
Los diasramas líquidos ternarios son de valor considerable en diversos
tipos de problemas de srparación y extracción con solventes. En algunas
mezclas binarias donde se busca la separación de los componentes individuales, la extracción de un componente por iin tercer solvente con frecuencia
ofrece ventajas sobre la destilación, cristalización, u otros métodos de separaci~n.~A
estudiar
l
los diasramas de los componentes en cuestión en diversos
solventes, es posible deducir si la separación buscada puede realizarse y definir las mejores condiciones de operación para lograr resultados óptinios.
En esta importante clase de sistemas de tres componentes, se estudia
la cristalización de diversas fases sólidas de los dos componentes sólidos en
un solvente liquido.lAunque éste puede ser uno cualquiera adecuado, en
el cual los sólidos componentrs pueden ser solubles, la atención se centrará
principalmente e n las soluciones en a w a , que constituye el medio mh importante de cristalización. Pero las relaciones halladas se aplicarán lo
mismo a cualquier otro sistema del tipo gcncral cn discusión.
I
390 Capítulo 10: Regla de las fases
Todos los sistemas que se describirán a continuación presentan sólo una
fase líquida y en este caso la conducta de las fases sólidas se puede clasificar así:
Tipo 1. Cristalización de los componentes puros únicamente.
Tipo 11. Formación de compuestos binarios.
Tipo 111. Formación de compuestos ternarios.
Tipo IV. Formación de series completas de soluciones sólidas.
Tipo V. Miscibilidad parcial de fases sólidas.
TIPO 1. CRISTALIZACION
DE COMPONENTES PUROS UNICAMENTE
Cuando en un sistema constituido de agua y dos componentes sólidos
únicamente B y C sólo aparecen dos componentes sólidos puros en la cristalización, el diagrama de fases isotkrmico tiene la forma general mostrada
en la figura 1 k 2 6 . En él, los puntos D y E son las solubilidades en agua
de B y C puros respectivamente a la temperatura dada. Conforme se adiciona C a la solución saturada con B, la concentración de este último cambia
>
Figura 1626. Cristalización de dos componentes sólidos desde la solución.
y sigue la línea DF. Análogamente, cuando B se disuclve en la solución
saturada de agua con C, la composición de la solución varia a lo largo
de la línea EF. Por esa razón, la DF es la curua de satuíación de B en a p a
conteniendo C, mientras que EF es la de solubilidad de C en agua que
contiene B. En F, el punto de intersección de las dos curvas de solubilidad,
la solución se hace saturada tanto con B como con C. Como el sistema contiene ahora tres fases en equilibrio, B, C y la solución saturada cuya composición es F, no hay ningún grado de libertad, y de aquí que la composición
en este punto debe ser constante y por esta razón se denomina a F el punto
iiotérmico imariante.
El área sobie la5 líneas DF y FE contiene únicamente ~oluciónno saturada, pero DFB es una rcgión bifásica en la cual el sólido B se encuentra
Cristalización de componentes puros Únicamente
391
en equilibrio con las soluciones saturadas de composiciones que varían según DF. L a concentración particular de la solución saturada que resulta
de una global dada G, puede determinarse a partir del diagrama. Cualquier
mezcla G de B, C y agua deritro del drea indicada nos dará en el equilibrio
sólido puro 8 y solución saturada en alguna parte de l a línea DF. De las
relaciones del triLngulo equilátero se deduce que la concentración de la
~oluciónbuscada debe quedar sobre una linea recta trazada desde B que
pasa por G, por ejemplo, G,. Por la misma prueba, una mezcla cualquiera
como por ejemplo H tendrá a H , como solución saturada. Las líneas tales
como G;B y H,B que conectan las concentraciones de las soluciones saturadas con las fases sólidas en equilibrio se denominan líneas de unión. Los
puntos de convergencia de los diversos conjuntos dc estas lineas de enlace
sobre el diagrama determinan la naturaleza de las fases sólidas con las
-cuales se hallan saturadas las diversas soluciones.
El área correspondiente a DFB es EFC en la cual la fase saturada es C.
Cualquier mezcla que queda dentro de esta área, tal como 1 o J, d a en el
equilibrio C sólido y soluciones saturadas a lo largo de EF. Por otra parte,
el área BFC es una región trifásica, dentro de la cual se encontrará B y C
sólidos en equilibrio con la solución saturada de composición F. U n alza
en la composición global desde un punto K a L o M en esta área modifica
simplemente las proporciones relativas de B y C presentes desde N a O
o P, pcro la composición de F permanece inafectada. Como ejemplos de los
diagramas del tipo en discusión podemos señalar los sistemas cloruro de
amonio-nitrato de amonio-agua, cloruro de sodio-nitrato de sodio-aya, y
cloruro de amonio-sulfato de amonio-agua.
La manera en que se puede utilizar un diagrama tal como el de la fiTura 1G26 para resolver un problema de cristalización se ilustra con el ejemplo siguiente. Supongamos una mezcla de dos sólidos B y C de una composición global Q y se desea separar a B puro de dicha mezcla. A fin de recuperar este sólido es necesario llevar la composición global dentro del área
DFB. Esto puede llevarse a cabo por adición de agua, que cambiar5 la
~omposición según la línea Q-H,O. Cuando adicionamos agua entramos
en el área BFC en la cual B y C se encuentran en equilibrio con la solución F. Sin embargo tan pronto como se cruza la linra BF hasta un punto
tal como R, se disuelve todo el constituyente C , y se obtiene una solución
saturada R , con un sólido B que p u d e filtrarse, lavarse y secase para obtenerlo puro. L a cantidad dc a y a necesaria para disolver todo el constituyente C, y producir B, se calcula con ayuda del diagrama. A partir de las
distancias QR y R - H 2 0 se sigue quc la relación del peso de Q al del agua
que hay que adicionar para alcanzar R es
Pcso de Q - R-H.0
--P. - Pcso dc agua
RQ
Capitulo 10: Regla de las fases
Conociendo el peso original de Q, es posible determinar el del agua
que hay que adicionar y el peso total de la mezcla en R . Además, como R
está constituido por B y R , hallamos de igual manera que
Peso de B _ R R ,
-Peso de R ,
BR
Usando esta relación y el peso total de la mezcla en R, se puede predecir
el peso recuperable de B.
La cantidad máxima recuperada de B es muy próxima a la línea BF.
Más adelante, a lo largo de la línea R-H,O, la proporción de la solución
saturada al de B es mayor, y de aquí que el rendimiento de B sea menor.
Otro hecho significativo es la posibilidad de recuperar B por adición de
agua pura Únicamente cuando la mezcla de B y C no excede la composición S. Si se excede entramos en el área de saturación d e C,y en consecuencia sólo esta sustancia es recuperable desde la mezcla.
EL METODO DEL "RESIDUO
HUMEDO" DE SCHREINEMAKERS
Los métodos experimentales usados en la determinación de los diagramas
de fase de los sistemas ternarios que contienen fases sólidas y liquidas son en
general análogos a los descritos en los sistemas binarios. El análisis térmico
ordinariamente proporciona curvas más difíciles de interpretar que las halladas en las mezclas binarias. Por esta razón, se emplea el método de saturación casi exclusivamente al estudiar los equilibrios a temperaturas cerca del
ambiente. El procedimiento consiste, brevemente, en lo siguiente: Se preparan mezclas de distinta proporción de los componentes sólidos con agua y
se separa la fase liquida de los cristales húmedos y se pesan y analizan ambos cuidadosamente. Las composiciones así obtenidas dc la solución saturada y el residuo húmedo se grafican finalmente en un diagrama triangular.
La figura 1 k 2 7 muestra una serie de puntos obtenidos de esta manera:
Sr, S,, etc., son las composiciones de las soluciones saturadas, mientras
que R I , R,, etc., son las correspondientes a los residuos hiimedos. Para &veriguar la naturaleza de las fases sólidas en equilibrio con las diversas soluciones prnentes en los residuos, se usa un esquema gráfico conocido como
método de los residuos húmedos de Schreinemakers, basado en el hecho que
cualquier residuo húmedo compuesto de una fase sólida dada y una solución
saturada debe quedar sobre una línea que une la composición de la fase
d i d a y la de la solución saturada. En consecuencia una línea de unión trazada entrc cualquier par de puntos R y S corrcspondientc~debe pasar por
la composición d e la fase sólida. Además, corno divenas soluciones pueden
tencr igual fase sólida, todas las líneas dc unión dc dichas soliicioncs deben
Formación de compuestos binarios
393
H10
B
C
Figura 1W27. El método de los residuos húmedos de Schreinemakers
.
intersectarse en un punto común, que es la composición de la fase sólida
común. Por este razonamiento deducimos que la fase sólida de todas las soluciones comprendidas entre D y F es B, para las que e s t h entre F y E
es C, mientras que F esti satuiada con divcrsas proporciones dc B y C.
TIPO 11. FORMACION D E COMPUESTOS BINARIOS
,
N
1
En muchos sistemas formados por dos sales y a p a se forman a una tcinperatura dada, compuestos entre las sales y el agua, o sea, hidratos, o compuestos entre las dos salcs sólidas. Aunque es posihlr prever cierto riúniero
de combinaciones, sólo discutiremos ciertos casos típicos para indicar la
naturalera de los diagramas obtenidos bajo estas condiciones.
Formación de hidratos. L a figura 1&28 muestra el diagrama de fases de un sistema en el cual uno de los componentes, B, forma un hidrato.
Como éste está constituido de B y agua, su composición debe quedar sobre
la linca B-H:O y esti dada por D. E es la solnbilidad del hidrato en agua
pura a una temperatura dada, mientras que la línea EF d a la solubilidad
del hidrato en soluciones que contieneti C. Dentro del área DEF el hidrato D coexiste con las solucioiics saturadas dadas por la línea EF. El área
FGc contiene de nuevo C puro en equilibrio con las soluciones saturadas
a 10 largo de FG. Sin embargo, en F, punto isotéimico invariante, la solución está saturada con D y C. Como todas las mezclas porihles de lo3 dos
"tinios qiicdan a lo largo de la l i n ~ aDC, las de rrilacc dcntro riel área DFC
flnaiimn sobre esta línea, como se dcrnoitró. Como dcraparecrn todas lar
fases liquiclas cuando sc alcanza DC, debajo dc la línea sólo puede csictir
una
de sólidos D, B y C. E1 sirtema. sulfato de soclio-cloruro dc:
;91
394 Capítulo 10: Regla de las fases
sodio-agua a 15'C es iin ejemplo de este comportamiento donde se forma
el hidrato Na2S0,. 10 H,O.
U n sistema en el cual los dos sólidos que lo constituyen forman un hidrato
tendrá un diagrama análogo al de la figura 1C-28 excepto que las líneas
de unión en vez de intersectar en C,lo harán sobre C-H,O en algún punto
comprendido entre G y C. Análogamente la línea DC se elevará sobre C.
Figura 1 W 9 . Aparición del hidrato y componentes puras.
Un ejerriplo de un sistema tal l r i constitu).en el-cloruro de magnesia-cloruro
de calcio-agua a 03C, donde están presentes los hidratos McC12 . 6 H z 0
y CaC12.6 HIO.
Bajo ciertas condicioncs de teinpeiatura aparecen cn algunos sistemas no
sólo los hidratos de un coinponcnte sino las sales anhidras. El diagrama
de fases tiene entonces la apariencia de la figura 1C-29. Ahora se obtienen
tres curvas de saturación, una para cada fase, y dos puntos iniariantes F
y G. La solución del punto invariarite F está en equilibrio con D y B, Y
cualquier mezcla dentro del árca DFB dará las tres fases. Por otra parte,
cualquier mezcla quc qiirda dentro dc BGC tiene a B y C eri equilibrio con
la soiuci6n en el punto invariarite isothnico G . Un diagrama análogo a la
Formación de compuestos binarios
395
figura 10-29 lo presenta el sistema sulfato de sodio-cloruro de sodio-apa,
a 25OC. A esta temperatura aparecen como fases de saturación tanto NaSO,
como el KalSO,. 10 H?O.
Formación de sales dobles. Dos sales B y C , en vez de formar hidratos
p e d e n reaccionar entre sí formando una sal doble de fórmula general B,C,,,.
Cuando así sucede la composición de ésta, quedará sobre la linea BC, y la
curva de saturación de la nueva fase sólida aparecerá en el triángulo de
fases. En la figura 1&30 se muestra el diagrama correspondiente. El punto
'\_,''
Figura 1&30.
sal doble.
/
Formación de una
D indica la composición de la sal doble, y la linea FG las composiciones
saturadas de las soluciones con este compuesto. F y G son los dos puntos
invariante.4 isothnicos. L a primera de estas soluciones está saturada con B
y D, la segunda con D y C.
L a estabilidad de la sal doble en ~resenciade agua depende de donde
cae la composición de la sal a lo largo de BC. Si el punto D queda entre
I y J, es posible preparar soluciones estables de la sal doble aiiadiéndole
agua, como lo indica la línea D-H20, entonces se dice que la sal es de saturación congruente. Por otro lado, si la composición de dicha sal queda, bicn
sea a la izquierda de I o a la derecha de J , n imposible preparar inia solución saturada de la sal en agua aíiadiendo ésta a D. C n a línea trazada de
D que queda entre B e 1 y va hasta el vértice de II,O no tocará la cuma
FG y nos da inia mezcla, bicn sea dentro de las áreas BDF o BEF. Análoga'ilente, para D entre J y C una linea hasta el punto del agua no toca FG
Y se fonnará bien sea una mezcla de D, C y una solución saturada G, o una
Inezcla de C y una solución satiiiada. En cualquier caso la sal doble lleva
a cabo una descomposición total o parcial. Las sales que se comportan de
esta manera se dice que son de saturocidn incongruente. Corno un ejcrriplo
de sal doble de saturación congriicnte se p e d e nicncionar al NH,NO,.
ASNO, cn el sistcina dcl nitrato de plata-riitratc dc anionio-agua a 30%
1;
11
¡
1
11' 1
llI
396 Capítulo 10: Regla de las fases
Pero cn el sistema nitrato de potasio-nitrato de plata-a@a a la niisma temperatura, la sal doble formada, KNO, AgKO,, se descompone por adición
de agna y es, por lo tanto, de saturación incongruente.
T I P O 111. FORMACION DE COMPUESTOS TERNARIOS
E n ciertos sistemas no sólo se forman compuestos binarios, sino también
los ternarios que comprenden los tres componentes. La figura 1G31 muestra
el diagrama de fases en el cual aparece un compuesto binario, el hidrato E,
y el compuesto ternario D, constituido por B, E, y a p a . Dentro del área
GHD el compuesto D se halla en equilibrio con las soluciones saturadas a
lo largo de GH, y puede recuperarse de éstas. G y H son los puntos inva-
Figura 10-31.
Formación de un
compuesto ternario.
riantes isotérmicos. G está saturado con las mezclas de B y D, H con los
sólidos D y E. Todas las mezclas son completamente dlidas debajo de las
líneas BD y DE. Dentro del t r i á n p l o BDE las fases sólidas son B, D y E ;
pero una vez cruzada la línea BE para entrar en el área BEC, las fases
sólidas son B, E y C.
E! compuesto ternario D mostrado en la figura 10-31 evidentemente es
del tipo de separación incongruente y se descompone por adición de acua.
Podenios seiialar como ejemplos de tales compuestos al CaCl, . hfgCl?. 12H@
(tachidrita) en el sistema cloruro de calcio-cloruro de magxsio-agua a 25%
y MgSO, . Na,SO,. H1O en el sistema sulfato de magneso-sulfato de sodioagna a la misma temperatura. Por otra parte, los compuestos ternarios tales
corno los alurnbrcs cuya fórmula general es BZSO.,- CI(SO,), . 24 H,O, forman sales de saturación congruente que son estables en prescncia de agua.
T I P O IV. FORMACION DE SOLUCIONES SOLIDAS
Cuando dos componentes s<ilidosB y C son com]~let;imcritcsolubles entre
si, cn la fasc sólida sc obtiene una $cric de soluciones sólidas que varían en
Formación de soluciones sólidas
397
composición desde B puro a C puro desde una solución de &tos en agua.
Corno bajo estas condiciones sólo aparecen dos fases en el sistema, la solución
&]ida y la liquida saturada, no se observa un punto de invariancia. L a figura 1G32 muestra el diagrama de fases para tal sistema. En él la línea DE
da las composicionrs de las soluciones saturadas en equilibrio con las só-
saturada
Figura 10-32. Formación de una
solución sólida.
',
soluciones saturadas \
a traves de DE
\\
,
\
8
C
--
,
-
lidas de B y C de las composiciones mostradas por las diversas líneas de
unión. En el área sobre DE sólo se obtienen soluciones no saturadas, debajo
de esta línea se presentan dos fases, las soluciones saturadas a lo largo de DE
y las sólidas en equilibrio con aqu6llas.
T I P O V. MISCIBILIDAD PARCIAL DE LAS FASES SOLIDAS
Finalmente, la figura l b 3 3 muestra el diagrama de fases de un sistema
en el cuaf las fascs sólidas B y C son parcialmente solubles entre si. Bajo
estas condiciones resultan dos conjuntos de soluciones sólidas, el uno de C
en B, oscilando entre los puntos B y D, y el otro de B en C, comprendido
entre E y C . La línea FG da las composiciones de las saluciones saturadas
<m equilibrio con ]a
scrie y la G H las en equilibrio con la segunda.
398 Capítulo 10: Regla de las fases
Entre los puntos D y E las mezclas de B y C dan dos fases sólidas de las
cuales una tiene la composición D, la otra E. G es un punto invariante
isothnico tal que cualquier composición global que queda dentro del área
DGE produce esta solución, y dos sólidas D y E en equilibrio con ella.
"EL DIAGRAMA DE FASES TRIDIMENSIONAL
Los diversos diagrama triangulares descritos hasta aquí son realmente
secciones isotérmicas de una figura sólida que consiste de una base triangular equilátera, a lo largo de la cual se grafican las concentraciones, y el
eje vertical da las temperaturas. Tal diagrama se construye por estudio de
un sistema temario dado a diversas temperaturas y adaptación posterior
de las secciones isoténnicas en un modelo tridimensional? El resultado de
esta clase de estudio para el sistema hismuto-estaño-plomo, se muestra esquemáticamente en la figura 1CL34.Las relaciones en este sistema son las más
simples encontradas, porque aquí sólo aparecen los componentes puros como
fases sólidas.
En la fisura 1&34 A, B, C dan los puntos de fusión del bismuto, estaíio y plomo, respectivamente. Cada cara del prisma indica a su vez el
comportamiento de un sistema de dos componentes. Así la cara ADB-Sn-Bi
muestra que el par binario bismuto-estaño da un diagrama del tipo eutéctico
sencillo con el punto eutéctico en D. Análogamente, los puntos E y F muestran los eutécticos de los sistemas estaño-plomo y bismuto-plomo. Cuando
el plomo se agrega al par binario bismuto-estaño, la posición del punto D
cambia a lo largo de la linra DG de acuerdo con la cantidad de plomo &adido. De igual manera la adición de estaño a F cambia su posición según
FG, y la adición de bismuto a E cambia cste punto según la línea EG. Todas
rstss líneas intrrscctan eventualmrnte en G.
l
.I
Problemas 399
Las líneas FG, DG y GE dividen ia superficie total del prisma en tres
,,artes distintas H, 1 y J. A todas las temperaturas por encima de estas superficies existe solamente sustancia fundida. T a n pronto como se alcanza una
,,,pcrficie, sin embargo, comienza a separarse una fase sólida. Sobre H la
fase sólida es el bismuto; sobre 1, plomo; sobre J, estaño. Estas superficies
representan, por esa razón, equilibrios bifásicos que comprenden a un compuro y sustancia fundida. Como FG es la línea de intersección de la
H, que comprende un equilibrio entre el bismuto sólido y fundido, y la superficie 1, que involucra plomo sólido y fundido, esta línea
debe representar tres fases en equilibrio, que son: el bismuto, el plomo y
la sustancia fundida. Por análogo razonamiento, se encuentran en equilibrio
a lo largo de la línea GE, el estaíio, el plomo y el fundido, y a lo largo de DG
el bismuto, estaño y l a sustancia fundida. Cuando estas líneas se juntan
eventualmente en G, coexisten cuatro fases, tres sólidas y el fundido. Como
para cuatro fases en equilibrio un sistema de tres componentes a presión
constante posee cero grados de libertad, el punto G debe ser el punto invariante absoluto del sistema, que tiene lugar sólo a una temperatura fija y
debe corresponder a una composición constante~delos tres componentes.
Para el sistema bismuto-estaño-plomo las cwrdenadas de G son 97OC y
aproximadamente 51 por ciento de bismuto, 16 de estaño y 33 de plomo.
Debajo de 97'C no hay fundido en el sistema y, por lo tanto, sólo coexisten
tres fases sólidas.
REFERENCIAS
1. S. T. Bowden, t'haie Rule and ?hose Reactioni, The Macrnillan Cornpany, Nueva
York, 1939.
2. Findlay, bampbcll y Smith, T h e Phose Rule and Zti Applicotions, Daver Publications, Piueva York, 1951.
3. M. Hansen, Der Aufbau dar Zweiitofflegierunpn, Julius Springer, Berlin, 1936.
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L'ol. 11.
5 . J. S. Marih, Principlrr of Phose Diagrams, McGraw-Hill Book Company, Inc.,
Nueva Yark, 1935.
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Londres, 1946.
J. E. Ricci, T h e P h u e Rule and Heterogenecus Epuilibriurn, D . Van Pjostrand
Ci.mPany, Inc., Princeton, 1951.
'.
1. Señalar cuántos cornponentca hay en cada uno de los sistemas siguientes:
,.
Una rr>lución de Ca(NO,)z en agua.
d ) Una solución acuosa de NaCl + r*a?so,.
e) Una solii<:ión acuosa de KCI i Ka-so,.
c)
Respuerta: a) dos; b ) uno.
1
1
400 Capítulo 10: Regla de las fases
2. ;Cuántos grados de libertad poseerá cada uno de los sistemas enumerados e n
el problema 1 ?
3. ;Cuántos grados de libertad tienen cada uno de los sistemas siguientes?:
o)
EL NaCl(s) en equilibrio con su solución saturada a 25°C y 1 atm de presión.
6 ) I,(s) en equilibrio con su vapor.
c ) I , ( s ) en equilibrio con su wapor a 50°C.
d) H C l ( g ) y NH,(g) en equilibrio con XH,Cl(s) cuando el equilibrio se alcan-
za principiando con los gases Únicamente.
e) HCI(3) y iYH,(g) en equilibrio con NH,Cl(s) cuando el equilibrio se obtiene
comenzando únicamente con el sólido.
4. a ) En relación con l a figura 10-3, describanse todos los cambios que tendrán
lugar cuando el azufre se calienta lentamente a la presión P, desde el punto X a la
temperatura T, al Y a la temperatura T,.¿Cuáles de los equilibrios hallados serán
estables?
b) Describir los cambios que tiencn lugar en el sistema cuando se p a s desde
el punto X al Y si el azufre se calienta rripidarnente. ¿Qué equilibrios de los que re
establecen son estables?
5. De l a información si-miente dibujar y rotular el diagrama de fases del
CH,COOH. a) El punto de fusión del sólido es 16.6"C bajo su propia presión de
vapor de 9.1 mm; b) el CH,COOH sólido exirte en dos modificaciones, 1 y 11, siendo
ambas más densas que el liquido, y 1 es la modificación estable a presión baja; c j las
fases 1, 11 y el líquido se encuentran en equilibrio a 55.2-C bajo una presión de
2,000 atm; d) la temperatura de transición de 1 a 11 disminuye a medida que decrece
la presión.
6. Supongrimos que un sistema de un componente presenta una fase de gas, una
de liquido y tres modificaciones sólidas. ¿Cuántos equilibrios de una, dos, tres y
cuatro fases ron posibles e n el sistema?
7. Andrervi {l.P h p Chem., 29, 1041 (19?5)] da los datos siguientes para el
ristcina o-dinitrobencen-p-dinitrubenceno:
?o
mal del compuesto para
1 00
90
80
70
60
50
40
30
20
1O
O
Punto inicial de fusión, " C
173.5
167.7
161.2
154.5
146.1
136.6
125.2
111.7
104.0
110.6
116.9
Construir el diagrama de temperatura-composición del sistema, y detcminar de ahi la
temperatura euttctica y composición.
anterior, hallar el porcentaje
8. Crando la g á f i r a construida e n el
rnáxirno de p-dinitrobenceno puro que re obtrndrá por crirtalhación de las mezclY
de [ , , S d<,s < < > i i i p i i < . wq
s i~r
<<>i>trr>ian
<irixiii.ilitiente95'/r, 75'V Y 4554 del compiicrro pard.
~ ? ~ ~ p ~ r98.4%
< l o . para el primero-
Problemas 401
9. Del diagrama de fases del sistema Cd-Bi dado en el texto, estimar la solubi]¡dad del Cd en Bi a 200°C.
Rcspucsta: 110.5 g/100 g de Bi.
10. El sistema n-heptano y 2,2,4-trimetilpentano presenta un punto eutéctico simple a -114.4"C que corresponde al 24% molar de n-heptano. [Smittenberg, Hoog
Henkes, J. Am. Chern. Soc., 60, 17 (19381.1
. Determinar analíticamente el portentaje molar máxinio del ÚItimo compuesto que se recupera por cristalización de
mezclas de los dos compuestos que contienen 80, 90 y 95% de n-heptano.
~
11. En el sistema NaCI-H,O se observa un eutéctico simple a -21.I0C para
,,m solución que contiene el 23.3% en peso de cloruro de sadio, donde el NaCI. 2 H,O
y el hielo cristalizan de la mezcla. A una composición del 27% en peso de NaCl y
a - 9°C existe un punto peritéctico donde el hidrato se descompone para formar
cloruro de sodio anhidro. El coeficiente de temperatura de solubilidad del NaCl
anhidro es muy pequeño y positivo. Hacer un esquema aproximado del sistema mostrando claramente las fases en equilibrio en las diversas áreas, y a lo largo de las
diversas curvas del diagrama.
12. Usando la figura 10-7, dibujar e interpretar las curvas de enfriamiento que
resultarían cuando se enfrían las sustancias fundidas que corresponden a los porcentajes molares de u n 20, 40 y 60 dc cloruro férrico.
13. Teniendo en cuenta la figura 10-9, establecer las condiciones de temperatura
y composición que deben reunirse a fin de cústalizr en estado de pureza el comPuesto CaF', . CaCI, a partir del sistema CaF,-CaCI,.
14. Teniendo en cuenta la figura 10-11, explicar cómo se procedería para obtener
una cantidad óptima de cristales puros de MgSO, 6 H,O desde u n a solución acuosa
diluida de MgSO,.
.
15. El sistema SOcIE,O exhibe puntos de fusiói? congruentes en las camposiciones en peso de 68.96%, 81.63% y 89.89% de SO,. ;Cuáles son las fórmulas de los
compuesto$ correspondientes?
Respuesta: H,SO,. H,O en el primer caso.
16. Cokpletar e interpretar el diagrama de fases de la figura 1&35, del sistema
Al-Ni, explicando cuáles se encuentran en equilibrio bajo las diversas condiciones
representadas por las áreas y curvas.
Fisura 1S35.
*
402 Capítulo 10: Regla de las fases
17. En el problema precedente dibujar las curvas de enfriamiento que muestran
la solidificación de las sustancias fundidas que tienen las composiciones a, b y c.
18. ¿Puede la adición de una pequeña cantidad de impureza a un compuesto puro
disminuir siempre su punto de fusión? Explicar la respuesta.
19. El yodo se disuelve tanto en agua como en CCI,, pero estos últimos son prác.
ticamente inmiscibles entre si. Aplicar l a repla de las fases al sistema HZO-CC1,-I,,
y explicar qué variables deben especificarse a fin de determinar el estado del sistema.
20. Se dan los siguientes datos para el sistema agua-alcohol-benceno a 25°C. Las
dos primeras columnas dan los porcentajes en peso del alcohol y benceno en una
capa, mientras que la tercera columna da el porcentaje en pero de agua en la capa
conjugada de éstas.
% C,H,
Capa 1
1.3
9.2
20.0
30.0
40.0
60.0
80.0
95.0
'3 CC,H,OH
38.7
50.8
52.3
49.5
44.8
33.9
17.7
4.8
Capa 11
% H_O
3.2
5.0
6.5
13.5
34.0
65.5
Construir el diagrama de fases del sistema, y trazar las líneas de unión.
21. Una solución acuosa contiene el 46% en pcso del alcohol etilico. Usando
el diagrama del problema precedente, hallar cuánto alcohol podría extraerse de 25 g
Reipueito: 5.05 s.
de aquella solución con 100 g de C,H,.
22. A. W. Francis [J. Am. Chem. Soc., 76, 393 (1954)l obtuvo los datos siguientes de los ~istemasternarios nitrobenceno-metanol-iswctanoa 20°C:
% en peso
Imactano
Metanol
% en peso
Isooctano
Metano1
-
30.4
36.5
40.0
48.7
50.3
59.5
84.4
92.5
Punto de doblez.
Graficar estos datos e interpretar los resultados del diagrama de fases.
23. !dediante el diagrama obtenido en el problema anterior, describir los efectos
q u e se producirh cuando:
a) Se agrrpa progresivamente isooctano a una mezcla 1 : 1 e n pcro de mctanol
y nitrobenceno.
b ) Se adiciona nitrobenrenn a una mezcla 1 : 1 rn pcro de nitrobencmo e isooctano.
. ,
Problemas 403
L ) Se adiciona mctanol a una mezcla 1: 1 en peso de nitrobencena e isooctano.
d) Se adiciona una mezcla de 1 : 1 de nitrobenceno e isooctano a otra 1: 1 de
,,,ctunol e iraoctano.
24. Se dan par Pruttori, Brosheer y Maron [J. Am. Chem. Soc., 57, 1656 (1935)]
los dator siguientes del sistema NH,CI-NH,KO,-H,O
a 25°C:
Soluciún saturada
% SH4CI
% NH,NO,
7c
Residuo húmedo
NH,NO,
% hH4CI
Construir e interpretar el diagrama de fases del sistema, y determinar la composición
ternaria. ¿Hay alguna evidencia de formación de hidrato o de una sal doble en este
sistema?
25. Por medio de la gráfica comtruida-en el problema anterior, determinar la
recuperación teórica máxima de NH,CI de una mezcla de sal seca de NH,C\NH,SO,
que contiene el 80% en peso de NH,CI.
Respuerta: 96.1%
26. En el sistema KK0,-&SO,-H,O
existe un punto temario a 5'C cn el cual
las dos sales anhidras se encuentran en equiiibrio con una soiución saturada que
contiene kl 9.04% en peso de KNO, y e1 41.01% de NaKO,. Determinar analíticameqte el peso máximo de KNO, puro que puede recogerse desde una mezcla salina
que contiene 70 g de KNO, y 30 g de NaNO, por cristalización desde una solución
acuosa al 5°C
Respuesta: 90.5%
Figura 10-36.
27. Completar e intev'ctar el diasrama de faaea, figura 1W36, del sistema
(NH,)2S0,-Li,S0,-H,0 a 25°C.
404 Capítulo 10: Regla de las fases
28. ¿En el diagrama del problema anterior, cuál será la composición de los primeros cristales formados por la evaporación del a s a de soluciones de composición
x, y, r a 2j°C?
29. En condiciones adecuadas se forman a partir del sistema Ba(OH),-NaOHH,O los hidratos siguientes a 30'C: Ba(OH), . 8 H,O, Ba(OH), . 3 H,O, B a ( O H ) 2 .
H?O y NaOH . H,O. Dibujar e interpretar el diag-rama de fase de este sistema.
CONDUCTANCIA
Y EQUILIBRIO IONlCO
-
\
.
-
.
La electroquímica es una rama de la físico-química que trata de la interrelación de los fenómenos químicos y eléctricos, así como del estudio de las
propiedades eléctricas de las soluciones de los eiectrólitos estableciendo una
relación entre la acción química y eléctrica de tales sistemas.
Los fenómenos encontrados en electroquímica son de tal importancia
teórica y 'práctica que tanto éste como el siguiente capitulo se dedicarán
a una exposición de los diversos aspectos del problema.
LA LEY DE OHM Y LAS UNIDADES ELECTRICAS
La intensidad de una corriente eléctrica que pasa por un conductor, esto
es, la cantidad de electricidad que fluye por segundo, viene determinada por
la diferencia de potencial aplicado a través del mismo, y por la mistencia
ofrecida por el conductor a la corriente. De acuerdo con la ley de Ohm,
la relación entre estas cantidades está dada por
donde I e5 la intensidad de la corriente que fluye por una resistencia R bajo
un potencial aplicado E. De esta ecuación resulta cvidentc que I es directamente proporcional a la diferencia de potencial e inversamente a la resistencia. Por una elección de unidades adecuada, la constante de proporcionalidad se hace igual a la unidad.
406 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Las cantidades eléctricas se pueden expresar en unidades electromagnéticas (uem) del sistema cgs, que se basan en la ley de atracción o repulsión
de los imanes; en unidades electrostáticas (ues), basadas en la ley de Coulomb sobre la fuerza de atracción de cargas eléctricas o bien en unidades
absolutas detivadas de las uem. Desde el primero de enero de 1948, el Bureau
of Standards de los Estados Unidos ha adoptado el últinio sistema como
oficial en ese país.' Antes de esta fecha, el utilizado se conocía como sistema
de unidades internacional.
En el sistema de unidades absoluto las de intensidad, potencial y resistencia respectivamente son el amperio, uoltio y ohmio absolutos respectivamente. Los correspondientes en el sistema internacional son el amperio,
uoltio y ohmio internacionales. En este Último sistema se define el amperio
como la intensidad de una corriente tal que al pasar por una solución acuosa
de nitrato de plata deposita 0.00111800 cr de plata por segundo. El ohmio
?
internacional se definió como la resistencia a 03C de una columna de mercurio de sección transversal uniforme de 106.300 cm de longitud que contiene 14.4521 g de mercurio. De estas dos unidades y la ley de Ohm, se deduce inmediatamente que el voltio internacional es la diferencia de potencial requerida para hacer pasar una corriente de un amperio a través de
una resistencia de 1 ohmio.
Según el sistema de elección, la unidad de cantidad de electricidad que
resulta, bien es el culombio absoluto o internacional, que es la transportada
por una corriente de un amperio en un segundo. Como la cantidad de
electricidad que lleva una corriente debe ser igual a la velocidad de transporte multiplicada por el tiempo, la carga Q transportada por la corriente 1
en t segundos debe ser igual a
Q = It
(2)
culombios. Otra unidad de cantidad de electricidad que se emplea con frecuencia es el faradio, 3, que vale 96,490 culombios absolutos.
El trabajo eléctrico w efectuado cuando una corriente de intensidad 1
pasa durante t segundos por una resistencia a través de la cual existe una
diferencia de potencial E, está dado por la ley de Joule,
w = &It = EQ
(3)
donde w se expresa en julios. Este es la unidad de energía eléctrica definida
como la cantidad de trabajo realizado por una corriente de 1 amperio circulando durante un segundo bajo una diferencia de potencial de 1 voltio. El
trabajo en julios es fácilmente convertible en otras unidades de energía
mediante las relaciones
1 julio (abr.) = 1
1
National Burcau
x
10' ergios = 0.2390 cal
of Staiidars Circular
C 459 (1947)
(4)
Conducción electrolítica
(
407
Finalmente, la velocidad a la cual se realiza un trabajo por una corriente
elictrica se expresa en uatios, siendo éste el trabajo producido por un julio
en un segundo, y es obviamente una unidad de potencia eléctrica. De la
ecuación ( S ) , la potencia en vatios p de una corriente es
Una unidad mayor de potencia es el kilovatio, que vale 1000 vatios.
La tabla 11-1 señala relaciones de magnitud entre las unidades eléctricas
en los diversos sistemas. Como la diferencia entre los valores de las unidades
para una cantidad dada en los sistemas internacional y absoluto, generalmente es despreciable a nuestros fines, no se hará ninguna distinción de
ellos excepto cuando sea necesario.
TABLA 11-1.
Comparación de las unidades eléctricas en varios sistemas
(Cada cantidad en la primera columna cs igual a todas las restantes situadas
sobre la misma línea)
Internacional
Absoluto
1
1
1
l
voltio
amperio
ohmio
culombia
1 aatio
1 julio
/
0.999670
1.000165
0.999505
1.000165
0.999835
0.999835
voltios
amperios
ohmios
culombios
vatios
julios
Ekhomagnético
(uem cgs)
.
Electrostático
(ues cgs)
Y300
x 100
36 x lo-'1
2.9978
2.9978 x 108
0.9993 X 10:
0.9993 x 10'
CONDUCCION ELECTROLITICA
El flujo de electricidad por un conductor involucra una transferencia
de electrones desde un punto de potencial más negativo a otro de menor
negatividad. Sin embargo, el mecanismo de transferencia no es siempre
igual. En los conductores electrónicos, como los metales sólidos o fundidos
y ciertas sales sólidas (sulfuro cúprico, sulfuro de cadmio), la conducción
tiene lugar por emigración directa de los electrones a través del conductor
bajo la influencia de un potencial aplicado. Aquí los átomos o iones que
Componen al conductor no intervienen en el proceso y, excepto por la vibración respecto de sus posiciones medias de equilibrio, permanecen en sus
lugares. Por otra parte, en los conductores electroliticos, que incluyen soluciones de electrólit~~
f u e r t c r y débiles, sales fundidas, y tambiCn algunas
sales sólidas tales como el cloruro de sodio y el nitrato dc plata, la transferencia electrónica tiene luxar por migración iónica, positiva y negativa, hacia
408 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
los electrodos. Esa migración involucra no sólo una transferencia de electri.
cidad sino también el transporte de materia de una parte a otra del con.
ductor. Además, el flujo de comente en los conductores electrolíticos va
siempre acompañada de cambios químicos en los electrodos que son muy
característicos y específicos de las sustancias que componen el conductor y
los electrodos. Finalmente, mientras la resistencia de los conductoius electrónicos se incrementa con la temperatura, la de los elcctrolíticos disminuye
siempre que aumenta aquélla.
El mecanismo por el cual una corriente eléctrica pasa por una solución
se comprende mejor con un ejemplo específico. Con este fin consideremos
una celda, figura 11-1, compuesta de electrodos inertes, en este caso platino,
conectados a una fuente de corriente B y sumergidos en una solución acuosa
de clomro de sodio. El electrodo C,conectado al lado negativo de B, se
denomina cátodo, y es aquél por el cual entran los electrones a la solución
Figura 11-1. Conducción electrolitica.
procedentes de B, por ejemplo, una batería. Al mismo tiempo, el electrodo A, conectado al lado positivo de la batería se denomina ánodo, por el
cual salen los electrodos de la solución y regresan a B. En la solución tenemos
iones cloro y sodio, y también alguno de hidrógeno y oxhidrilo debidos a la
ionización muy ligera del agua. Ahora bien, cuando el circuito se cierra Y
pasa la corriente por la solución, se encuentra que el gas cloro escapa
en el á n d o y el hidrógeno en el cátodo, mientras que se forma hidroxido de
sodio en la solución inmediatamente próxima al cátodo. La explicacibn
de todos estos cambios es la siguiente: Los electrones entran en la solución
por el cátodo C y al combinarse con los iones hidrógeno forman el elememo
monoatómico. Entonces se combinan dos átomos de hidrógeno formando
una molécula de gas que escapa del electrodo. Las reacciones que tienen
lugar pueden representarse así:
2 H+ f 2 0 (elcctrones) = 2 H
2 H = H2k)
Conducción electrolítica
409
Los electrones abandonan la solución en el ánodo, por descarga de los
jones cloro y cada uno de éstos produce un electrón convirtiéndose en un
átomo de cloro. Los electrones liberados de esta manera fluyen por el circuito
,,terno desde el electrodo a la fuente de potencial, mientras que los átomos
de cloro se combinan entre si para formar cloro gaseoso que escapa. Aquí
las reacciones son :
Vemos, pues, que los electrones desaparecen en el cátodo para formar
una molécula de hidrógeno, y simultáneamente otros dos se forman en el
ánodo por los iones cloro al formar una molécula de cloro. El resultado
neto es una transferencia de dos electrones desde el cátodo al ánodo.
Al cerrar el circuito, los iones negativos o uniones, emigran hacia el ánodo, mientras que los positivos o cationes van hacia el cátodo. Como estas
partículas están cargadas, su movimiento constituye una corriente eléctrica.
Los aniones se mueven hacia e l i d d o y de aquí que los electrones son
transportados por estos iones desde el cátodo. De nuevo, como el transporte
de electricidad positiva hacia la izquierda puede considerarse un flujo de
electricidad negativa hacia la derucl~a,la migración de los cationes hacia
el cátodo es equivalente al flujo de electrones en dirección opuesta. En
consecuencia, el resultado neto de la migracióii es un desplazamiento de
los electrones por la solución en la dirección de la corriente, y cada ion
transporta una parte de la corriente total de electricidad a través de la
solución.
La formación del hidróxido de sodio en la porción catódica de la celda
se comprende cuando recordamos que dc esta parte de la solución los iones
hidrógeno han sido removidos por descarga en los electrodos, dejando en
solución un exceso de iones oxhidrilo. Como éstos no tienen existencia indePendiente de los positivos, los iones de sodio emigran al compartimiento
catódiro en cantidad suficiente para dar una solución eléctricamente neutra.
Cuando esta soliirión de i o n c de sodio y oxhidrilos se evapora, se obtiene
hidróxido de sodio.
El proceso del paso de coiriente por un condurtor dectrolitico con todos
los cambios químicos y migratorios asociados, se denomina clectróliiir.
De la discusión anterior se deduce que el mecanismo de la electrólisis
Se resume estableciendo que : a ) los electrones entran ) salen de la solución
a consecuencia de los cambios q~iiinicos~ U se
P efectúan en los electrodos,
b ) los
pasan Por la solución dehido a la emigración ióiiica, y lo
Iiaccn de maiiera que entran tantos como salen.
410 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
LEYES D E FARADAY DE LA ELECTROLISIS
L a reacción química durante la electrólisis en el ánodo no es siempre una
deposición iónica, sino que a veces es una rcacción de oxidación tal como
el paso de los iones ferrosos a f h i c o s . De manera similar, la reacción en el
cátodo puede ser de reducción, según las circunstancias como acontece
con el yodo que se transforma en iones yodo: o ei ion estánnico al reducirse
a estannoso. De todas formas, Michaei Faraday encontró que la m m a de
una sustancia inuolucrada e n la reacción de cualquier electrodo es dircctn.
mente proporcional a la cantidad d e electricidad que pasa por la solución,
enunciado que constituye la primera ley de Faraday de la electrólisis, y que
experimentalmente se cumple con toda exactitnd con tal que el paso de
corriente tenga lugar sólo por conducción. Se aplica tanto a electrólitos
fundidos, como a soluciones de éstos y es independiente de la temperatura,
presión, o naturaleza del solvente si éste es capaz de promover la ionización
del soluto.
De la primera iey se calcula fácilmente la cantidad de electricidad necesaria para d e p i t a r un peso equivalente de plata. U n culombio absoluto
deposita 0.00111797 g de plata, cantidad proporcional a la de la electricidad;
por tanto, el número de culombios necesarios para depositar el peso atómico
de la plata, será:
107.870
= 96,487 culombios absolutos
0.00111797
-
L a pregunta que surge inmediatamente es: i Q u 6 masa de otras sustancias
depositará esta cantidad de electricidad? Si se conectan dos celdas,-una
compuesta de ekctrodos de plata en nitrato de plata, y la otra de electrodos
de cobre en sulfato de cobre y se conectan en serie, toda la corriente que
pasa por la primera lo hace también por la segunda. Con este dispositivo
se obsema que el peso de cobre depositado es 0.0003293 g. Por esa r u ó n
la cantidad de electricidad necesaiia para depositar el peso atómico del cobre,
63.51 g, es
63'54
= 193;000 = Z(96.500) culombios
0.00113293
Sin embargo, el cobre es divalente y su equivalente es 63.5412 g. En
consecuencia, depositar u n equiualcnte de cobre exige sólo la mitad de la
cantidad senalada antes; es decir, 96,500 culombios.
A p r t i r de una srrie de exprrimentos Faraday estableció su segunda ley
de la clertrólisis, según la cual lar m a s a de dilcrcnter surtanciar producidas
por el paso rlc una corrjentc ,on dirr,ctarnentc p r o p o ~ ~ i o n a l ear sus peros
Leyes de Faraday de la electrólisis 411
equi~alentes.También se puede establecer esta ley de otra manera diciendo
que la mirma cantidad de electricidad producirá cantidades equiualentes
quimicamt'nte de todas las sustancia que resultan de este proceso. Más aún,
como 96,487 culombios dan un equivalente de plata, una consecuencia
directa de la scgunda ley de Faraday es que durante la electrólisis, 96,487
culon~biosde electricidad darán un peso rquicalerite de cualquier sustancia,
cantidad que se conoce como faradio (símbolo, 3 ) y que en los cálculos
ordinarios se considera igual a 96,500 culombiw.
Es esencial tener en cuenta que un faradio prodncirá un equivalente
de cada uno de los productos primarios de la electrólisis, es decir, de uno de
los formados directamente por la corriente y no por subsecuente acción
química, pues en este último caso no tienen \.igencia las leyes de Faraday.
Por ejemplo, 1 faradio que pasa por una celda de cloruro sódico produce
un equivalente de cloro, hidrógeno e hidróxido de sodio. Estos son los
productos primarios de la electrólisis. Sin embargo, puede suceder que el
cloro se difunda en el compartimiento catódico y reaccione con el hidróxido
de sodio formando así hipoclorito y clorato sádico, entonces las cantidades
de éstos no dependerán de la de electricidad que h a circulado por la celda,
sino de las condiciones de operación. D e hecho, es posible evitar la formación de estos productos~sécundariossi se pone el debido cuidado, pero no
sucede así con los primarios.
Al aplicar las leyes de ~araday,%lpeso de los productos primarios formados por cualquier proceso electrolitico se calcula fácilmente conociendo la
intensidad de la corriente y su tiempo de circulación. Así, supongamos que
se electroliza una solución de nitrato de plata entre dos electrodos de plata
con una corriente de 0.20 amperios fluyendo durante 30 minutos. La cantidad de electricidad que pasa por la celda es 0.2 x 30 x 60 = 360 culombios, y de aquí que el p s o de plata depositada es 360/96,500 equivalentes, o
De igual manera que la primera ley de la electrólisis, la segunda se mantiene muy rígidamente para electrólitos, tanto fundidos como en solución.
Su valide^ es de nuevo indepcndicnte de la temperatura, presión y naturaleza del solvente. La razón para la exactitud de estas leyes, así como una
apreciación de su significado se obtiene mediante un cálculo sencillo. La
Carga de un electrón es igual a 1.602 X lo-'" culornbios absolutos de electricidad. En consecuencia, el número de electrones por faradio es
96,487
-. -- 6.023
1.602 x lo-'"
x
electrones
exactamente el número de Avocadro. De aquí quc un faradio está asociado
ron 6.023 X 1 0 ' ~
di. carga unitaria, o, cn gcncrai, con un equiva-
412 Capíhilo 11: Conductancia y equilibrio iónim
lente de una sustancia. U n equivalente de iones positivos tiene una deficien.
cia de este número de electrones, mientras que uno de iones negativos lo
tiene en exceso. Cuando pasa 1 faradio por una solución, se remueve ,l
número de Avogadro de electrones del cátodo por reducción de un $uiva.
lente de sustancia, y se donan al ánodo ese mismo número como consecuencia de alguna oxidación. El equivalente al número de Avogadro de electrones
se transporta por migración de iones positivos y negativos a sus respectivos
electrodos a través de la solución. Por este procedimiento, el proceso entero
de electrólisis se convierte en si mismo a uno de transporte de un número
dado de electrones a través del electrólito conductor. Puesto que un número
de electrones no depende de la presión, temperatura, u otros factores, tam.
poco lo deberá hacer el proceso electrolítico, como.en efecto sucede.
Puesto que las leyes de Faraday se obedecen tan rígidamente, pueden
emplearse para determinar la cantidad de electricidad que pasa por un conductor al observar los canibios químicos producidos por el paso de una
misma corriente por una celda electrolítica, y cuando ésta se construye con
dicho propósito, se denomina culombimetro. Este se coloca en el circuito
en serie con otro aparato cualquiera y se deja trabajar tanto tiempo como
la corriente está pasando, luego se remueve, y los cambios producidos
por la corriente se determinan por algún procedimiento adecuado.
El culombímetro de lata se emplea comúnmente en trabajos de precisión, y consta de una cápsula que sime de cátodo y recipiente y su ánodo
es de plata. El electrólito es una solución acuosa de nitrato de plata purificada. Antes de la operación se pesa la cápsula y monta Ia celda. Después
de realizada la electrólisis se decanta el electrólito cuidadosamente, se lava
asimismo el precipitado de plata sobre la cápsula con agua destilada y ambos
se pesan juntos después de secos. Del aumento de peso se deduce, entonces, la
cantidad de electricidad que pasa por el culombímctro. Si se tiene cuidado,
estos aparatos proporcionan una exactitud mejor que 0.05 por ciento en
sus mediciones.
El culombímetro de yodo 2 también da una gran precisión; en él, se
desprende yodo desde una solución de ~ o d u r ode potasio al pasar una corriente que se valora por titulación con tiosulfato sódico o ácido arseniom
Cuando no se necesita mayor precisión se emplean los culombímetros de
cobre que consisten de electrodos de cobre en una solución úe sulfato
de cobre, donde este elemento se determina por peso.
TRANSFERENCIA Y NUMEROS D E TRANSFERENCIA
Aunque la corriente se transporta a través de una solución por migración de iones positivos y negativos, la fracción de corrientc total transportada
Transferencia y número de transferencia 413
por
cada uno no es necesariamente igual. Así, en soluciones diluidas de sul-
fato de magnesio, este ion lleva aproximadamente un 0.38 de la corriente
total, mientras que el ion sulfato acarrea el resto, esto es, 0.62. Análogamente, en las soluciones diluidas de ácido nítrico el ion nitrato transporta
sólo 0.16 de la carga total y el ion hidrógeno el 0.84 restante. Los iones
&to e hidrógeno transportan la fracción mayor de corriente porque se
,,,ueven con mayor velocidad que los restantes iones presentes. Si lo hicieran
igual velocidad transportarían la misma cantidad total de electricidad.
general no sucede así y, en un cierto período, el más veloz pasará por
un plano determinado cualquiera en una mayor proporción y realizará
también un porcentaje mayor de trabajo en el transporte de corriente.
La relación cuantitativa entre la fracciái de corriente conducida por
.n ion y su velocidad se establece de la manera siguiente. Consideremos
dos placas paralelas con una separación de d cm, figura 11-2, a través de
,,,
Figura 11-2. Relación entre la corriente y las velocidades iónicas.
las cuales se aplica un potencial &, y entre ellas existe un volumen de electrólito dado. Designamos a la velocidad prornrdio del ratibii rn esta
Solución por u+ cmlseg, la car,oa del ion por r, y el número de iones d e
esta naturaleza por n,. De manera análoga, sean u., z. y n. la velocidad, carga Y número de aniones. Entonces la cantidad de electricidad transportada
por el catión en 1 seg, es decir, la corriente debida al catión, será toda la electricidad poseída por los cationes situados a una distancia menor que u+
plato ncgativo o, con otras palabras, todos aquellos contenidos en el
Volunen ABCDEFGH. El número de ellos está dado por la fracción u + / d
de un total n+u,/d.
Corno la carga dc cada ion cs z,, y la cantidad de electricidad asociada
Por unidad de carga es e, la corriente transportada por los iones positivos
dehe ser
n,z~,z+e
d
I+ = --
(6)
414 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
De manera análoga, la corriente que Ilexan los aniones a la placa positiva,
es la que corresponde a toda l a electricidad que poseen los aniones en el
volumen A'B'C'D'E'F'G'H';
esto es,
En consecuencia, la corrientc total transportada por ambos iones es
Pero la condición de electroneutralidad de la solución exige que la carga
total de los cationes debe ser igual a la de los aniones, o sea
(9)
n.z+ = n-z.
Por esa razón,
I =
+
n+z7ea+ n+z+ead
De las ecuaciones (6) y ( l o ) , la fracción de corriente total transportada
por los cationes t,, se deduce que vale
mientras que la fracción de corriente conducida por los aniones, t., se deduce
de las ecnaciones (7) y (10) que, es
donde t+ y t. son los números de tranrporfe o transferencia del catión y
anión, respectivamente. Estos números dan la fracción de corriente total
transportada por un ion dado en una solución. Al dividir la ecuación (11)
por (12) vemos que
dc aquí quc los números de transporte dc los iones, Y las finctiones d e la
corriente total quc llevan, son directamcntc proporcior~alein ciii velocidades
>,
Regla de Hittorf
415
absolutas, que cuando se igualan, t+ = t., ambos iones contribuyen lo mismo
la conducción. Cuando no son iguales t+ y t., ambos iones transportan
proporciones diferentes de la corriente total. De cualquier manera, como
,ntre los dos iones se conduce toda corriente, la suma de los dos números
de transferencia debe ser la unidad; esto es,
REGLA DE HITTORF
Como resultado del paso de la corriente por una solución, los cambios
de concentración relacionados con la velocidad de los iones suceden en la
poximidad de los electrodos. Para comprender la naturaleza de estos rambios y su dependencia con las velocidades iónicas, consideremos la celda
rotulada 1 en la figura 11-3. Consideremos que esta celda está dividida
por los planos imaginarios AA' y BB' en tres compartimientos: el h o d o ,
centro y cátodo, y s u p o n g v n s además que cada compartimiento contiene
Figura 11-3. Cambios de concentración debidos a la transferencia.
cinco equi~alentesde iones poiiti\os e igual número de ncgati\os, y que
las velocidades de los dos ione5 son iguales. Ahora bicri, si se hace pasar
cI.atro faradios de electricidad por la celda, cuatro equivalcntes de iones
Positivos en el compartimiento catódico aceptarán electrones dcpositándose.
De igual manera cuatro equivalcntes de iones negatkos en el compartimiento
anódico cederán sus electrones al ;nodo y sc depositarán tanibien. El resultado de estos cambios sc encuentra icsumido en 11, p r o mientras succdcn
estos cambios en los electrorlus, los iones miqraii a trav6s de la solución, y
como en este caso se mueven con 1u rnisrna vcioridad, cada uno de ellos
416 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio ióniw
transportará la mitad de la corriente; es decir, los cationes deben transportar
2 faradios de electricidad de izquierda a derecha y los aniones esa misma
cantidad en sentido contrario. En consecuencia, dos equivalentes de iones
positivos deben movene del compartimiento anódico hacia el centro, y el
mismo número desde el centro al catódico. Simultáneamente, dos equivalentes de iones negativos se desplazarán del compartimiento catódico hacia
el centro, y también dos de ellos desde el centro al interior del anódico. Si
adicionamos estas migraciones a los cambios en los electrodos, el resultado
final es 111, de donde es evidente que la concentración en la división central
quedó inafectada por el paso de la corriente. Por otro lado, las concentraciones en el compartimiento catódico y anódico han disminuido, pero el decrecimiento que es de dos equivalentes, es el mismo para ambos.
Sin embargo, la situación es diferente cuando las velocidades de los
iones no son ig-iiaks. Las partes 1'. II', 111' de la figura 11-3 ilustran
lo que sucede cuando la velocidad del catión es tres veces la del anión
siendo de nuevo la cantidad de electricidad de 4 faradios. Como antes, se
depositan en los electrodos 4 equivalentes, pero como cada catión lleva
tres veces la corriente de un anión, deben emigrar tres equivalentes de
iones positivos desde el ánodo basta el centro, y desde el centro a la divi- '
sión catódica. Al mismo tiempo, sólo un equivalente de los aniones abandona
la sección catódica, y únicamente un equivalente t a m b i h deja el centro
por el compartimiento anódico. De III', donde se da el estado final de la
celda, se o b s e r a que no hay cambio de nuevo en la concentración en
la división central. Más aún, como antes, existen variaciones de concentración en los dos electrodos, pero en esta ocasión no son iguales. En efecto,
el compartimiento anódico ha experimentado una variación de concentración igual a tres veces el del cátodo. Si repetimos el argumento anterior,
para las diversas velocidades iónicas, se observa que los cambios de concentración en los electrodos como resultado de la electrólisis serán iguales únicamente cuando las velocidades iónicas son iguales. Cuando son diferentes,
también lo son las variaciones de concentración en los electrodos.
Una inspección de la figura 11-3 revela, además, que en el caso de
velocidades icuales, la pérdida de concentración catiónica a causa de la
emigración desde el compartimiento anódico es la misma que la de la concentración aniónica por emigración desde la región catódica. Por otra parte,
cuando v+:u. = 3: 1, la disminución de concentración de cationes desde el
compartimiento anódico, a causa de la emigración, es tres veces al de 10s
aniones a partir de la sección catódica. Este paralelismo entre la disminución
de la concentración debida a la emigración y la velocidad del ion responsable
de la misma conduce a la regla de Hittorf; esto es,
Pérdrda de eaoivaleiites catiónicos
en el ánodo por migraciónPérdida de equiv. nniónicos en cl c á t d o por migración
u+
-
-- -
u-
--
t,
t.
(15)
Determinación de números de transferencia
417
Como la corriente total que cruza la celda, expre~adaen equivalentes, es
proporcional a t+ t. = 1, las consecuencias directas de esta res.la son las
proposiciones siguientes:
+
pérdida de equiv. catiónicos en el ánodo por emigración - t+
- - - t+
Equivalentes de corriente circulada
1
(16)
pérdida de equiv. aniónicos en el cátodo por emigración - t.
- - - t.
Equivalentes de corriente circulada
1
(17)
--
p
DETERMINACION D E NUMEROS DE TRANSFERENCIA
Experimentalmente se determinan por tres procedimientos distintos:
a) el método de Hittorf, basado en la observación de los camb:os de concentración alrededor de los electrodos por migración; b) el método de la
frontera móvd, y c) por medición de fuerzas electromotrices. Aquí descnbiremos los dos primeros procedimientos. La figura 11-4 nos muestra un dispositivo típico para la determinación de números de transferencia por el
método de Hittorf. El aparato consta de una celda de transporte A, en serie
con un culombímetro de plata C, pónectados ambos en serie a una batería B
mediante una resistencia vanabIe R. El miliamperímetro M en el circuito
Permite el ajuste de la corriente a un valor cualquiera drseado y hace posible
una estimación burda de la cantidad de electricidad que ha circulado por
la celda. Esta se llena con el electrólito a investigar y se hace pasar la corriente suficiente tiempo para producir un cambio apreciable de concentración alrededor de 10s electrodos. Se detiene el paso de corriente, se extrae
la solución desde uno 0 ambos rompartimientos electródicos, se pesan y
analizan, L~ cantidad de electricidad que pasa por la celda se obtiene a
d
P
418
Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
partir del incremento de peso del cátodo en el culombímetro. Si conocemos
la concentración original: podemos olvidar la solución del compartimiento
central o analizarlo para ver si ha tenido lugar alguna difusión. Si se desconoce, hay que analizar la sección central después de su drenaje y peso, a
fin de hallar la composición original de la solución. El ejemplo siguiente
ilustra las etapas de un cálculo típico de los números de transporte a partir
de los datos observados, y está basado en la suposición usual de considrrar
que emigran únicamente los iones, pero no el agua.
E JEMPLO : Para determinar los números de transporte de los iones en
una solución 0.200 molal de sulfato de cobre, se llenó la celda con la solu.
ción y electrolizó entre dos electrodos de cobre durante algún tiempo. La
solución catódica de la celda pesaba 36.4340 g y contenía 0.4415 g de cobre.
Además, el cátodo en el culombímetro mostró un incremento de peso de
0.0405 g debidos al depósito de plata. De estos datos se desea calcular los
números de transferencia de los iones cobre y sulfato.
Los 36.4340 g de la solución final catódica contenían 0.4415 g de cobre,
que corresponden a 0.4415 x CuSO,/Cu = 1.1090 g de sulfato de cobre. El
peso del agua de esta solución era de 36.4340 - 1.1090 = 35.3250 g. Ahora
bien, como antes de la electrólisis la solución era 0.2000 molal, cada gramo
de agua estaba asociado con 0.2000 x CuS0,/1 000 g de sal. Por lo tanto,
los 35.3250 g de agua tenían asociados con ellos inicialmente
La pérdida de peso de sulfato de cobre en cl compartimiento catódico es
igual a 1.1276 - 1.1090 = 0.0186 g, o sea, 2 x 0.0186/159.60 = 0.000233
equivalentes.
La corriente total que ha circulado por la celda viene dada por los
0.0405 g de plata depositados, esto es, 0.0-IO5/107.87 = 0.000375 equivalentes. En consecuencia, la pérdida de sulfato de cobre debida a la deposición
del cobre en el cátodo debía contener este número de equivalentes. Pero la
pérdida fue 0.000233, y la diferencia 0.000375 - 0.000233 = 0.000142 equivalentes han emigrado dentro de esta división. Como el ion que se dirige
hacia el cátodo es el Cu+ +,este número de equivalentes deben haber sido
conducidos por este ion y, en consecuencia, su número de transporte es
mientras que el del SO,-- vale
&O,--
= 1 - 0.379 = 0.621
,-
Determinación de números de transferencia 419
Podría haberse obtenido una comprobación de estos valores al analizar
la solución anódica y calcular después los números de transporte a partir
de aquélla. En relación a esto se recordará que el cobre se disuelve en el
ánodo y, por lo tanto, debería haberse observado un incremento real en la
concentración de dicho elemento. Sin embargo, a causa de la migración
iónica fuera del compartimiento, el incremento no resultará tan grande
como cabe anticipar de la electricidad que ha circulado por la celda.
En el método de frontera móvil el moíimiento de los iones bajo la iniluericia de un potencial aplicado se observa directamente en vez de proceder
a calcularlo a partir de los cambios en los electrodos. Paraqomprender el
pincipio de este método, consideremos específicamente la determinación
de 10s números de transferencia de los innes hidrógeno en ácido clorhídrico.
El aparato requerido, figura 11-5, es análogo al del método de Hittorf si se
Números de transferencia
por el método de !a frontera móvil.
Figura 11-5.
exceptúa la celda. Esta vez, la celda consta de un tubo dispuesto verticalmente y lleno con cloruro de cadmio y ácido en la forma mostrada, de
manera que hay entre ambos una frontera muy marcada. El cátodo, inserto
en la parte superior, es un alambre de platino, mientras que el ánodo en el
fondo es una barrita de cadmio metálico. Cuando se hace pasar corriente,
iories hidrógeno
emig-ran
hacia arriba a través de la celda,~.y los de
.
cadmio reemplazan su lugar, con lo cual, la frontera entre las dos soluciones
se desplaza hacia la Darte s u ~ e r i o también.
r
Si tenemos en cuenta el volumen
el ~adrriiose diwelvc en el ánodo, el hidrógeno se desprende en el rátodo,
recorrido por la frontera móvil para cierta cantidad de electricidad que ha
Pasado por la celda, es posiblr calcular el número de transporte del ion hidrógeno de la siguiente manera:
Y
420 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Supongamos que el volumen recorrido por la frontera en movimiento
es V cc, cuando pasa de m' hasta bb' al circular Q faradios de electricidad
medidos con un culombímetro. Entonces, si la concentración del ácido es
de C equivalentes por litro, el número de equivalentes de ácido transporta.
dos hacia el cátodo por la corriente es V x C/1,000 y este transporte lo ha.
cen los iones hidrógeno, y como la corriente total conducida es de Q equiva.
lentes, el número de transporte del ion hidrógeno, t,, está dado por
Aunque así como se describe este método parece simple, en realidad
deben cumplirse ciertas condiciones al elegir las soluciones a emplear en
conexión con lo que se estudia, siendo necesario aplicar algunas correcciones.
El estudiante encontrará una discusjón detallada de este procedimiento en
las obras de MacInnes? que junto con Longsworth, han hecho valiosas
contribuciones en la técnica y precisión de este método.
En la tabla 11-2 se dan los números de transferencia de los cationes
T ABLA 11-2.
Temp.
Números de transferencia de los cationes
( ' C ) 0.005
Concentración (equivalentes por litro)
0.01
0.02
0.05
0.10
0.20
0.50
1.00
HCI
NaCl
NaOH
NaC,H,O,
CaCI,
CdSO,
cuso,
de algunos electrólitos en solución acuosa, que en la medida en que se
han estudiado no se ven afectados por la intensidad de la corriente. VaríYi
algo con la concentración, pero la modificación no es grande. Como regla
3
Veanne las referencias al final de estc capiiulo
1
,,
Conductancia electrolitica
,
421
podemos establecer que los números de transferencia que son grandes en las
soluciones diluidas se incrementan con el aumento de la concentración,
mientras que aquéllos que son pequeños disminuyen, pero hay muchas ex,,pciones a esta regla. Con el incremento en temperatura los números de
transporte del catión y anión tienden a igualarse aproximándose a un
valor de 0.5. De aquí que los números de transferencia mayores que 0.5
dicminuyen cuando se eleva la temperatura mientras que los menores de
aquel valor aumentan. Esta variación se ilustra en los datos del ácido clorhídrico y cloruro de potasio dados en tabla.
CONDUCTANCIA ELECTROLlTICA
*
La resistencia de un conductor electrolitico al paso de la corriente se
puede determinar mediante la ley de Ohm, pero es costumbre en vez de
hablar de resistencia hacerlo de la conductancia, que es simplemente el
recífiroco de la resistencia eléctrica.
Sabemos que la resistencia de un conductor cualquiera es directamente
proporcional a su longitud e inversamente al área de su sección transversal,
esto es
/"
donde R es la r&tetici&l
olnnios, 1 la longitud en centímetros, A el área
en centímetros cuadrados, y p la resisticidad o resistencia específica cuyo
valor depende de las caracteristicas y naturaleza del conductor. De la ecuación (19) se deduce que la expresión de la conductancia correspondiente es
donde L, = I l p es la conductancia especifica del conductor. Esta cantidad
puede considerarse como la conductancia de 1 cubo de 1 cm de arista de
cierto material, y se expresa en recíprocos de ohmios o mhos por centimetro.
Aunque la conductancia específica es una propiedad del medio, al tratar
Con soluciones de electrólitos existe otra cantidad de mayor significado que
es la conductancia cquivalentc, A, que en un electrólito está definida como
'a de un volumen dc solución que contiene un peso equivalente de la sustancia disuelta cuando se coloca entre dos electrodos paralelos entre sí a
una distancia de 1 cm y suficientemente grandes para contener entre ellos
toda la solucióir. No se determina nunca directamente, sino que se calcula
desde la conductancia especifica. Si C es la concentración de una solución
eri equivalentes gramo por litro, entonces la concentración por centímetro
422 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
cúbico es CJ1000, y el volumen que contiene un equivalente de soluto es,
por esa razón, 1000/Ccc. Como L, es la conductancia de un centímetro
cúbico, la de 1000/Ccc, y por tanto A, ser5
La ecuación (21) es la expresión que define la conductancia equivalente.
Debe recordarse que C en esta ecuación se expresa en equivalentes de soluto
por cada litro de solución.
DETERMINACION DE LA CONDUCTANCIA
El problema de obtener A se reduce en sí a la determinación de la conductancia especifica del electrólito, y ésta a su vez a una medición de la
resistencia de la solución y uso de la ecuación (20). Al medir resistencias
de las soluciones electrolíticas se emplea el método del puente de Wheatstone,
cuyo diagrama esquemático se presenta en la figura 11-6. La resistencia
desconocida, R,, que se busca, se coloca en una rama del puente, y una
resistencia variable conocida, R,,en la otra. AB es un alambre uniforme
de deslizamiento sobre el que se mueve el punto de contacto C. Para balancear el puente se mueve el cursor a lo largo de esta resistencia hasta que
no haya paso de corriente de la batería a través del galvanómetro G. Al
alcanmr esta situación se leen loi valore? de Id? rr~iqtcnciaiR., la quc Corrrsponde desde A a C, R,. y R? que corresponde a CB, ron lo c ~ a l5"
calrula el valor de R , teniendo en cuenta la5 siguicntcs consid~raciones.
Cuando la corriente I dc la batería alcanza el punto B, se divide en dos
caminos paralelos según las intensidades 1, c I d . Estas produrcn una caída
Determinación de la wnductancia 423
de potencial a lo largo de las resistencias que atraviesan. El propósito de
balancear el puente es hallar un punto a lo largo de AB, esto es C , tal que
la caída de potencial desde B a C sea igual a la de B a D. Cuando se halla
punto, D y C se encuentran en el mismo potencial y no hay ningún
flujo de corriente por la rama que contiene el galvanómetro. La condición
de balance es entonces:
pero, cuando estas caídas de potencial I R son iguales, las de DA y C A deben
también. De aquí
Al dividir ahora la segunda de estas igualdades por lb primera, resulta
y por lo tanto
'
io
de Wheatstone es el mismo en diferentes
Aunque el ~ r i n c i ~ delpuente
casos, se han introducido di~ersasmodificaciones en la técnica antes de que
las resistencias electroliticas sean determinables por este procedimiento. En
primer lugar no es posible utilizar una corriente directa, puesto que la misnia
originaría electrólisis y cambios de concentración en los electrodos. Para evitarlo, se usa una corriente alterna, ordinariamente de una frecuencia de 500
a 2000 ciclos por segundo, proporcionada por un tubo oscilador de vacío.
Esta corrieqte debe poseer una onda lo mis próxima posible a la senoidal.
Corno una corriente de tal frecuencia esti dentro del intenalo del oído humano, el galvanómetro puede reemplazarse por ulos audífonos, cuando
rircula la corriente se produce un zumbido que disminuye de intensidad
cuando nos acercamos al balance siendo mínimo este punto. Teóricamente
el sonido debe ser mínimo entonces, pero a causa de la capacitancia intro[lucida en la cclda no se logra tal estado ideal. Sin embargo, colocando un
<oudensador variable a través de la resistencia tipo, es posible agudizar el
Iialaiicco ajustando el condensador a la capacitancia de la celda. Un dispos i t i ~ odiferente que se emplea hoy día es el osciloscopio de rayos catódicos,
llirdiante el cual se logra el halance de la resistencia y capacitancia.
Las celdas usadas cn cl trabajo de conductancia son dc diferentes tipos
Y formas, según el fin y srguiidad exigida. Se construyen de \idrio, con
ele~trodosde platino o d e oro. Para eliminar las imperfecciones dc la coriierite y otrur cfcctos en los rlw troclos, sc rerubren &tos clc~trolíticamente
424 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
a partir de una solución de ácido cloroplatinico con una ligera capa de platino finamente dividido, llamado negro platino a causa de su color. La distancia de separación de los electrodos de una solución se determina por
conductancia. En soluciones de conductancia elevada los electrodos se encuentran muy espaciados, mientras que en las que son poco conductoras
los electrodos se hallan muy próximos entre si.
Figura 11-7.
Tipos de celdas de conductividad.
De acuerdo con la ecuación (20), la conductancia específica de un
conductor electrolitico cualquiera está dada por
La=
L=
(i)
(i)k
-
- -
y de aquí antes de que L, sea calculable a partir de la resistencia medida
se necesita conocer la relación ( l / A ) . Para una celda cualquiera dada esta
relación es fija y se denomina constante de la celda, K. Para obtener este
valor no es preciso determinar 1 y A. En su lugar se coloca una solución
cuyo L, es conocido en la celda, se mide la resistencia, y se calcula K. Una
vez conocido éste, la conductancia especifica de cualquier otra solución cuya
resistencia se determinó en la misma celda se deduce de la relación:
Para determinar las constantes de la celda se usan, bien sea soluciones
1, 0.1 Ó 0.01 demal de clomro potásico. Una solución demal es aquélla que
contiene un m01 gramo de sal por decímetro cúbico de solución a a°C,
76.6276 g de cloruro potásico en 1000 g de agua, pesados ambos en aire.
Las soluciones 0.1 y 0.01 demal contienen respectivamente 7.47896 y 0.74625
gramos de clomro potásico por 1000 g de agua. La3 conduct.mciac de estas
solucionec se han mrdido con gran precisión en celdas con electrodos muy
Determinación de la conductancia
425
distantes, las otras dos con electrodos muy próximos o medianamente separados. La tabla 11-3 da las conductancias especificas de estas soluciones a
El cálculo de las consdiversas temperaturas conforme Jones y Brad~haw.~
tantes de celda, y las conductancias especificas y equivalentes pueden ilustrarse mediante el siguiente ejemplo.
TABLA 11-3.
Conc.
Demal
Gramos KCI
por 1000 g
de H20
(en aire)
Conductancias especifica^ de las soluciones de KCI
( E n ohmios-1 cm-' internacionales)
Gramos KCI
por 1000 g
de solución
(en aire)
--
Conductancia erpecifica
0'C
18°C
25°C
EJEMPLO: En una celda particular, una solución 0.01 demal de cloruro
potásico dio una resistencia de 150.00 ohmios a 25"C, mientras que una de
ácido clorhídrico 0.01 N dio unqíesistencia de 51.40 ohmios a la misma
temperatura. A 25'C la condiictancia especifica del cloruro potásico 0.01 demal es 0.0014088, y de aquí que la constante de cdda es
Con este calor de K y la resistencia de la solución del ácido clorhídrico, la
conductancia específica del último resulta
= 0.00-1111 mho cm-'
Y
conductancia equivalente es
+'
1000L,
=C
x 1000
0.01
= 41 1.1 mho cmz equiv-'
- 0.004111
' Jones y Bradshaw, J. Am.
C h m i S o c , 55, 1700 ( 1 9 1 3 )
426 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
VARIACION DE LA CONDUCTANCIA
C O N LA CONCENTRACION
Tanto la conductancia específica como la equivalente de una solución
varían con la concentración. Para electrólitos fuertes a concentraciones hasta
de varios equivalentes por litro, la conductancia específica aumenta marcadaniente con el incremento de concentración. En contraste, las conductan.
cias especificas de los electrólitos débiles comienzan con valores más bajos
en soluciones diluidas y se incrementan mucho mis cradualmente. En ambos
casos el incremento en la conductancia con la concentración se debe al incremento en el número de iones por unidad de volumen de l a solución. En los
electrólitos fuertes el número de iones por centímetro cúbico se incrementa
en proporrión a la concentración. En los débiles, sin embargo, el aumento
puede ser nienos pronunciado a causa del cainbio de la ionización parcial del
soluto, y en consecuencia la conductancia no varía tan rápidamente como
en los electrólitos fuertes.
TABLA11-4.
C
Equiv.
DOI It
Canductanciar equivalentes de los electrólitos en solución acuosa
a 25°C
KCI
HCl
.4sNO,
'/2 H,SO,
BaC12
HC,H,O,
De manera contraria a lo que sucede con la conductancia especifica, la
equivalente de los electrólitos fuertes y d6biirs aumenta con la dilución.
La razón de todo esto es que el decremento en la conductancia especifica
es mayor que e1 compensado por el increm~ntoen el valor de 1/C por dilución, y por \o tanto, A asciende. La manera en que A vaiía con la concentración pucdc juzprse de la tabla 11-1 y la gáfica de la f i s r a 11-8. Se
o t x r n a quc 10s valores de .k corr~s~ondicntcs
a elccti-ólitos fucrtes y d6biles
sc comportan &: manera distinta al disminuir la roncrntra<ióri.Por dilurión
i4
Conductancias equivalentes a dilución infinita 427
de un electrólito fuerte la conductancia eqiiivaiente se aproxima rápidamente, incluso en soluciones 0.001 ó 0.0001 N, al valor Iímite de la conductancia a la concentración cero, .b.Por otra parte, aunque la conductancia
de los electrólitos d6biles aumenta rápidamente por dilución,
en las concentraciones mencionadas está muy lejos de su límite. Por ejemplo,
a 25°C para el cLoruro sódico 0.001 h' e\ valor de h es 123.1 frente a 126.5
que corresponde a A,. A la misma roncentración y temperatura A para el
jcido acético es 19.2, mientras que ;h vale 390.7. A causa de esta diferencia
fundamental de comportamiento de las conductaneias equivalentes por diiución de electrólitos fuertes y débiles, se han usado diversos procedimientos
para obtener las conductancias eqiiivaleiites límites.
*
ü
I
I
U
1 Y
110 170
100 Iba
80 150
A
60 160
40
1N
10 I Z O
Figura 11-8.
Gráfica de .1 contra
\'¿. d e elcctrólitos fuertes
y débiles
Kohlrausch fue el primero en sellalar que cuando .t para elcclrólitos
\/y
la curva obtenida se aproxima a la línea recta
soluciones diluidas, es decir. quc
h w r r sc grafica contra
donde 6 cs una íonrtante. La validez de este hallazgo puede verse de las
Sráficas del &ido clorhídrico y cloruro potdsico en la figura 11-8. En consecuencia, para obtener .loen tales electrólitos la curva puede extrapolarse
a V C = O y se lee el valor de la intersección, o bicn se obtiene la pcridiente
de la porción lineal de la ri1n.a desde la figura, y sc rmuelve cl valor de A,
partir dc la ~cuación ( 2 5 ) . En La tabla 11-4 se dan algunos valorcs dc
A,, en la ,xin,cra col,,mna hi>ri;.oritnl.
428 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
El método anterior de evaluación de .lono puede usarse con los clectró.
litos débiles. Como se observa en la figura 11-8, la gráfica de .
I
contra V?
en el caso de los electrólitos débiles, como el jcido acético, no se aproxima
a la linealidad en soluciones tan diluidas como 0.0001 A', sino qne en su
I
presenta un incremento niiiy rápido con el decrecimiento en la
lugar .
concentración. De nnevo, no es practicable llevar a cabo la medición con las
concentraciones tan bajas corno 0.0001 N, puesto que cn tales soluciones
diluidas la ronductanria del agua llega a ser una parte apreciable del
total. Aunque la conductancia del agua puede restarse de la específica de la
solución para dar la del electrólito, tales correcciones no son satisfactorias
siempre e introducen incerteza en el resultado final.
Las conductancias equivalentes a dilución infinita de los electrólitos
débiles se obtienen por aplicación de la ley de Kohlrausch de la migración
indepndiente de los iones, que establece que a dilución infinita, donde la
disociación de todos los electrólitos es completa y donde desaparecen todos
los efectos interiónicos, cada ion emigra independientemente de su co-ion,
y contribuye a la conductancia total equivalente de un electrólito una definida coparticipación que depende sólo de su propia naturaleza y es totalmente independiente del ion con el cual se encuentra asociado. Si éste es el
caso, entonces el valor de A, de un electrólito deber5 ser la suma de las
conductancias equivalentes de los iones que lo componen, con tal que el
solvente y la temperatura sean iguales. La evidencia de la validez de esta
hipótesis está dada en la tabla 11-5. De acuerdo con esta ley, la diferencia
entre los valores de h, de los distintos electrólitos que contienen un ion
Tanra 11-5.
Ley de Kohlrausch de la migración independiente de los iones
A0
(25°C)
Diferencia
KCI
LiCl
149.9
115.0
34.9
KNO,
145.0
1101
34.9
271.5
236.7
34.8
Electrólito
LiKO,
K OH
LiOH
A0
(25°C)
Diferencia
426.2
421.3
49
KNO,
149.9
143.0
4.9
LiCl
LiNO,
115.0
110.1
Electrólito
HCI
'
4.9
común deberá ser constantemente igual a la diferencia de las conductancias
equivalentes de los iones no comunes. De acuerdo con este requisito vemos
que, independientemente de la naturaleza del co-ion, la dilcrencia entre
las conductancias de K + y Li+ es constante, lo cual ES válido para la diferencia de conductancia entre los iones CI- y NO;. La ley se ha comprobado
cn otros iones tnmbien, con los mismos resultados.
Conductancias equivalentes a dilución infinita 429
A partir de la ley de la migración indqcndiente de los iones se deduce
que .loen cualquier electrólito puede escribirse así
dollde 10, y 1: con las conductancias iónicas equicdcnter a dilución infinita
del catióri y anión respectivammte. Más aún, como la fracción de la corriente total transportada por un ion cualquiera está dada por s u números
de transporte, éstos deben representar tariibirh la fracción de la conductanestán relacionadas con
total debida al ión. En ronsecuencia, 1: y
.,,, por las eruaciones
1: = t
:
~
(27)
~
10 = LOA^
(28)
donde tO, y :6 son los números de transferencia a dil%ión infinita obtenidos
por extrapolación. Estas ecuaciones permiten calcular fácilmente los números de transferencia y los valores de A, de los electrólitos fuertes. Así, por
ejemplo, el valor de A. del ácido clorhídrico a 25'C es de 426.16, mientras
que t: del ion hidrógeno es 0.821. Por esa razón,
/
Las conductancias iónicas equivalentes de otros iones se han evaluado de
manera análoga y se presentan brevemente en la tabla 11-6. Las conductancias iónicas de los ácidos o bases débiles se dedujeron a partir de los valores
de b, de sus sales, que son electrólitos fuertes.
Por medio de la ecuación (26) se obtienen los valores de A, de los electrólitos fuertes y débiles a partir de la tabla 11-6 por adición de las conductancias iónicas de los aniones y cationes correspondientes. Así hallamos el
valor de A, del ácido acético que es un electrólito débil,
A@,,,., =
C* t G,-
+
= 349.8
40.9
= 390.7 inhos cma equiv-1
Para obtener las conductancias equivalentes iónicas dadas en la tabla
11-6 y desde ellas los valores de A, de los electrólitos, se usaron los números de transferencia. Sin embargo, es posible obtener los valores de '10
de 10s electrólitos por suma y sustracción directa de los valores adecuados de
o'.
sin emplear los números de transporte. Así, si adicionamos el valor de '10
del ácido clorhid~cocon el del acetato de sodio y restamos el del cloruro
de sodio, el resultado nos da el del ácido acético,
o , " ,+ A 0
-o
.
,
= 1
=
l",
+ , + 1;,* + l&
+ 1:"-
- ¡N,*
- 1p.i
*
430 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Análogamente, -1, del ácido nítrico se obtiene dc los del nitrato de potasio, cloruro potásico y ácido clorhídrico. El método de calciilar esta conductancia es particularmente valiosa con los electrólitos débiles para cuyas soluciones salinas no disponemos de números de transporte, ni existen tampoco
las conductancias equivalentes iónicas a dilución infinita para ambos iones.
Del ejemplo citado es evidente que todo lo que se precisa para obtener A,
en el caso de los ácidos dCbiles para los cuales no existen datos, es el valor
de .Y, de su sal sódica. Como la ?al es un electrólito fuerte, su .i, se evalúa
por medición de las condnctancias equivalentes sin ninguna dificultad en
especial. Al combinar este valor con el del ácido clorhídrico y el cloruro
TABLA11-6.
Conductancias iónicas equivalentes
infinita ( a 25°C)
Aniones
u
dilución
10
C1-
BrI-
NO,HCO, OHAcetatu-
Claracetato
CI0,-
de sodio, como se muestra arriba, el valor de Aa del ácido se deduce inmediatamente. Anilo~amente,el valor de "LO para una base débil como el
hidróxido dc amonio se calcula a partir de los correspondientes del cloruro
de amonio, hidróxido de sodio y cloruro sódico.
E F E C T O DE O T R O S FACTORES SOBRE LA CONDUCTANCIA
L a ronductancia de todos los electrólitos se inrrrriienta con la temperatura. Esta \,ariación puede expresarse ~nediantcla ecuación
donde A o , , , es la conductancia equivalente límite a t°C, .\o,2,.,,
la correspondiente a 25'C, y P una constantr, que en el caso de las sales ordinariamente vale de 0.022 a 0.025, y de los k i d o s 0.016 a 0.019. Análoga conducta
es exhibida por la? condiictaricia~cqiiivakirtrs d r los electrólitos fuertes en
concentraciones finitas. Sin crnhar~o,con los dkhiies la ~ a t i a c i ó nde A
Teoría de la atracción interiónica de la conductancia 431
,on la temperatura no es tan regirlar. porque en ellos no sólo cambian las
velocidades de los iones y las fuerzas interiónicas, sino también el grado de
disociación.
El comportamiento de la conduc:ancia observada en los solventes no
acuosos depende extraordinariamente de la constante dieléctrica del medio.
La constante dieléctrica del agua es elevada, 78.6 a 25'C, mientras qiie la
de la mayoría de los restante? solventes es considerablemente más baja. Así
]as constantes dieléctricas a 2j°C para el alcohol metílico, etílico y dioxano
son 31.5, 24.3 y 2.2 respectivamente. Cuando la constante dieléctrica de un
solvente disminuye, la conductancia de un electrólito en el medio decrece
también. Fuera de este abatimiento y del hecho que algunos electrólitos qiie
son fuertes en el agua pueden ser débiles en otros solventes, el comportamiento de la conductancia de estas sustancias no es muy distinta en los sol\,entes no acuosos que en el asna, con tal que la constante dieléctrica se
haluros y nitratos alcalinos,
encuentre por encima de 25. Por ejemplo,
los tiocianatos alcalinos y alcalino térreos y las sales tetralquilamónicas son
electrólitos fuertes en los alcoholes etilico y metílico y se comportan de
manera muy aniloga a como lo hacen los electrólitos fuertes en agua. De
nuevo, el ácido picrico, diversos ácidos acéticos sustituidos y los fenoles son
electrólitos débiles en el alcohol metílico, como lo son tambifn el ácido clorhídrico, brombidrico y yodhi#ko en alcohol etilico.
En los solventes de constante dieléctrica menor que 25, la dependencia
de la conductancia equivalente sobre la concentración es compleja. Las gráficas de log .4 contra 10% C , en lugar de ser lineales o ligeramente curvas
como en el caso de los solventes de constante dieléctrica elevada, contienen
mínimos que aparecen a concentraciones tanto más bajas cuanto menor es
la constante dieléctnca. Para explicar estos mínimos y las curvas en general
se ha sugerido j que en estos solventes los iones ~xhíbenuna tendencia a la
asociación en complejos tales como A t B - , A + B - A + , y B - A + B - , que disrninuye el número de iones disponibles para transportar la corriente, y de
a ¶ d la conductancia. Estas teorías parecen dar cuenta bastante bien de los
fenómenos observados.
10s
TEORIA DE LA ATRACCION
INTERIONICA DE LA CONDUCTANCIA
La disminución de la conductancia equivalente con el incremento en la
concentración para electrólitos debiles se explica como debida csencial"ente a un decremento en el grado de ionizacion. Sin embargo, esta espliración no se puede aplicar a los electrólitos fuertcs porque en las soluciones mi? diluidas están completamente disociados. En consecuencia,
5
Kraus y Fuuss,
( 1 9 3 3 ) ; 57, 1 ( 1 9 3 5 ) .
1- * m
Chern. Soc., 55, 21
( 1 9 3 3 ) ; 55, 476, 1019, 2387
432 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
para dar cuenta de la variación de A con la concentración en los electrólitos fuertes debe buscarse alguna otra explicación, como lo hace la teoría
d e la conductancia de Debye-Hückel-Onsager.
De acuerdo con la teoría de Uebye-Hückel sobre la atracción interióni.
ca, como se desarrolló brevemente en el capítulo 9, cada ion se halla
rodeado por una atmósfera de otros ionei cuya carga neta es opuesto a la
del ion rentral. Cuando sobre los iones no ha)- una fuerza cxtirna aplicada, esta atmósfera está esferica y simétricamente distribuida alrededor
del ion. Sin embargo, cuando se aplica una fuerza externa, lo mismo
que cuando sr apilca un potincial a través de dos electrodos sumergidos en la solución durante la conductancia, se ponen en movimiento los
electrones, y como consecuencia de ciertos efectos y cambios en la atmósfera
iónica se produce una disminución de la velocidad de los iones. Debye y
Hückel fueron los primeros en señalar que estos efectos son dobles, esto
es, ( a ) la relajación de la atmósfera iónica a causa del potencial aplicado,
y ( b ) el efecto electroforético. El primero surge del hecho de que cualquier ion central y su atmósfera se hallan con carga opuesta, es decir,
cuando el ion central está cargado positivamente la atmósfera es negativa,
y viceversa. A causa de esta diferencia de signo entre la atmósfera y ef ion
central un ~otencialaplicado a través de la combinación producirá 21
movimiento del ion central en una dirección, y de la atmósfera en otra.
Así, si el primero es positivo tiende hacia el cátodo y su atmósfera iónica
hacia el inodo. La simetría de la atmósfera alrededor de un ion se destruye por estas tendencias opuestas, y se altera. En este estado, la fuerza
ejercida por la atmósfera sobre el ion no permanece uniforme en todas
las direcciones, sino que es mayor detrás que en el frente del mismo, y en
consecuencia, experimenta una fuerza de oposición que es retardadora
de su movimiento, y el ion se mueve con mayor lentitud por estas atracciones interiónicas.
El efecto electroforético surge del hecho de que un ion, en movimiento
a travis de la solución, no viaja por un medio estacionario, sino por uno
en oposición al del ion. Estos es& generalmente solvatados, y cuando se
mueven arrastran consigo al solvente. Cualquier ion positivo que migra
hacia el cátodo tiene, entonces, que desafiar en su camino al medio en ',
\
movimiento con los negativos dirigiéndose hacia el ánodo. Análogamente,
los iones negativos tienen que migrar a través de las moléculas de solvente
transportadas por los iones positivos que se desplazan en dirección apunta.
Estas contracorrientes hacen más difícil que el ion se mueva en la solu~ión,
y se origina en el mismo un descenso d e velocidad de la misma manera
que la natación en contracorriente en un río lo haría en un nadador.
Debye y Hückel demostraron que ambos efectos retardadores sobre
el ion producen un decremento en la conductancia equivalente que deo
P. Debye y E. IIückel, P h ~ ~ i Zk r. i f . , 24, 185, 305 ( 1 9 2 3 ) .
A
Teoría de la atracción interiónica de la conductancia
433
p d e de la concentración. Su tratamiento matemático fue ampliado por
Lars Onsager ' para incluir no sólo la relajación y efectos electroforéticos
,ino también el movimiento browniano de los iones. Onsager obtuvo la
&+ente ecuación de dependencia de la conductancia equivalente de un
electrólito binario fuerte con la concentración
En esta ecuación A, A,, C , 1" y lo_ tienen el mismo significado de antes,
r+ y r son las cargas de los dos io& T es la temperatura absoluta, D y
q son la constante dieléctrica y la viscosidad del solvente respectivamente.
A causa de las simplificaciones hechas en la derivación de esta ecuación,
resulta aplicable sólo a las soluciones uy diluidas, y debe considerarse
. . Para el caso especial de
como una ecuación límite para la con uctancia
los electrólitos 1- 1 en agua a 2j°C, para los cuales r: = z- = 1, D =
78.55 y q = 0.008949 poise, la ecuación (30) se reduce a
f'
donde O y <r son constantes con los valores de 0 = 0.2273 y o = 59.78.
Como la cantidad entre paréntesis es una constante, la ecuación (31) es
de igual forma que la (25) empírica, propuesta por Kohlrausch. La ecuación (31) tiene la foima correcta de dependencia de A con VT. La cuestión que resta es, si la pendiente experimental va de acuerdo con la predicha por la ecuación de Onsager, esto es, tangente = (8.bf o). Las
p~uehasexhaustivas de Shedlovsky, MacInnes y otros, indican que en las
soluciones muy diluidas la ecuación de Onsager está de acuerdo con la
obsemación no ú>lo para los electrólitos fucrtcs 1-1, sino para otros de ma?or valencia, tales como el rloruro de calcio, y el de lantano. La concordancia obtenida puede juzgarse del hecho que para el cloruro de potasio
el valor de .Lo rncontrado por extrapolación grifica es 149.86, micntra
We el calculado por la ecuación (31) s c ~ l i nlos datos experimentales es
1-19.98.
La ecuación de Onsager es no sólo aplicable a las soluciones acuosas,
sino tambitn a 10s electrólitos fuertes en otros solventes. Sin embargo, la
'oncordanria usualmente no es tan buena corno en el agua. En algunas
Wasiones las pendientes pridichas por las gi-ificas dc A contra
se
desvían de la experiencia muy npreciablemcnte y alcanzan discrepancias
vc
L. Onrager, Phyrik. Z e i f . 27,
3BU ( 1 9 2 6 ) ; 28, 277 (1927)
434 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
mayores que el 100%, como sucede con el nitrato d e plata en alcohol
etilico a 25'C donde la desiiación es dc 126%.
VELOCIDADES ABSOLUTAS DE LOS IONES
La velocidad absoluta con que se mue\en los iones a través de una
solución depende de la naturaleza de los iones, la concentración de la solución, la temperatura y la caída de potencial por centímetro de camino
conductor. Tales velocidades pueden medirse directamente por aplicación
del método de frontera móvil. Sin embargo, las velocidades se calculan
también por mediciones de conductancia, y a este fin encaminamos nuestra
atención.
Consideremos un par de electrodos paralelos situados a una distancia
entre si de d cm., tales como los de la figura 11-2, a través de los cuales
se aplica una diferencia de potencial E y entre los cuales se halla contenido
1 mol de un electrólito A,BV Para ma)or generalización consideremos que
el electrólito se encuentra ionizado en una relación rr d e acuerdo con la
ecuación
A,B,
= x A + f yBz-
l(1-a)
xu
ya
(32)
donde z+ y z- son las valencias de los iones, mientras que x y y son 10s
números de éstos obtenidos a partir de una molécula de A,& Las cantidades de las diversas especies, estin dadas entonces por la ecuación (32),
y el número de iones positiyos presente entre los dos electrodos es n+=
xaN, donde N = el número de Avogadro. Ahora, de acuerdo con la ecua
ción (10) de este capítulo, la iutensidad de la corriente que circula entre
las placas vendrá dada por
=
n+z+e( u ,
+ u-)
d
Al sustituir n+ por su equivalente x a Y , resulta
donde F, el valor de nn faradio, ha reemplazado a Xe.
Un mol de A&, coiresponde a a xr, equivalentes dc sustancia, esto es,
el número de iones positi\os por iriolkrila multililicados par la valencia.
Por csa ra7ón, si la conrentiación dc Ia solucióri es de C equivalentes
por 1IX)O ic de soliición rl \dumpn ~ i o i .equi\alcntc e5 1000/C, y por
iiiol ( x r , 1 0 0 0 ) / C c c . Estc iiltirno voliiinrn rs también igual a Ad, donde
i.
Velocidades absolutas de los iones 435
>
A es el área de una de las placas paralelas. En consecuencia
Ahora bien, la conductancia de la solución está dada por la ecuación (ZO),
esto es, L = L,A/d. De nueLo, teniendo en cuenta la ecuación (21),
L, = CA/1000. De aquí que podemos escribir para L
en vista de la ecuación (34). Además, por la ley d e Ohm &IR = EL = 1,
y tomando en cuenta la ecuación ( 3 5 ) y- la (33) resulta
Si ahora tenemos en cu$a
que & I d = E'; r a = o+/&', y
ces la ecuación (36) se convierte en
A =
&(u+
+ u-)
S-.
= v./&' enton(37)
La cantidad &' es el grodicnte de ~.oltajc,esto es; la caída de potencial
por centímetro dr camino entre los electrodos. Las cantidades + y y-,
se denominan mobilidades i d n i c a ~y representan las vclocidadcs de los
ionci en centímetros por segundo cuando el gradiente de potencial es
1 xoltio por centím~tro.
.,
.4 dilución infinita a = 1. .i = ,j,, ,L+ = p+' y + = p0 y la ecuaclon
(37) para estas diluciones nos da
+
Ao = sp:
S*!.
(38)
Y en este caso de dilución infinita, la ley de Kohlrausch para la migración
independiente de ionrs nos da
A, =
r; + lo
(26)
y de aquí que pdcinor conseguir por comparación de las dos expresiones
w
436 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
esto es, a dilución infinita la velocidad de cualquier ion en centimetros por
segundo, bajo una caída de potencial de 1 ~ o l t i opor centímetro, está dada
por la conductancia limite equivalente del ion dividida fior el tsalor del
faradio.
Las mobilidades limite de cierto número de iones calculadas con ayuda
de las ecuaciones (39) y (40) desde las conductancias iónicas equivalentes
se dan en la tabla 11-7. Se observará que las velocidades son inusitadamente
bajas. Además, con la excepción de los iones hidrógeno y oxhidrilo, las vela
cidades para los diversos iones no son muy diferentes; los iones hidrógeno
y oxhidrilo tienen alta mobilidad y este hecho constituye la base de las
diversas aplicaciones de la medición de conductancias.
TABLA 11-7.
K+
Ha+
Li+
NH:
Ht
Ag+
TI+
Cat+
Bui+
Srt+
ME++
La+++
Mobilidades iónicas absolutas a 25°C
(cm2 voltio-' seg-1)
0 .000762
0.000520
0.000388
0 .000760
0 .O03620
0 . 000642
0 . 000774
0.000616
0 . 000659
0 .000616
O . 000550
0.000721
CIBrr
1SO;
HCO;
OHC2HsO;
CaHaOi
CIO;
SO;Fe(CN);-Fc(CN);---
0 000791
O . 000812
O . 000i!Iíi
O . 000740
0.000961
0.002050
O . 000424
O000411
0 . 000711.5
U . 000827
fl .O01040
0.001140
Si volvemos a escribir la ecuación (37)
esta nueva forma sugiere que A a concentración finita se representa por
donde 1, y L son ahora las conductancias iónicas equivalentes para la concentración correspondiente. Análogamente a las ecuaciones (27) y (28)
estas conductancias equivaIentes de los iones pueden evaluarse desde A Y
10s números de transporte mediante las relaciones
Al establecer una comparación de las ccu:icioncs ( V a ) Y (41),r dcduce
Grado de ionización y conductancia 437
que las mobilidades de los iones a una concentración dada son:
,'para electrólitos débiles, y
1-
=u5
(45)
para electrólitos fuertes, puesto que se encuentran totalmente ionizados.
GRADO DE IONIZACION Y CONDUCTAlVCIA
Arrhenius atribuía el decremento de .l con el aumento de concentración
sólo a la variación del grado de disociación del electrólito. Si asi fuere,
es fácil demostrar que el grado de disociación estará dado por la relación I / A , . D e las ecuaciones (37) y (38) el valor de A/A, para cualquier
electrólito se deduce que es
Si suponemos aún más, esto es, que las mobilidadm de los iones a cualquier
concentración finita son iguales que a dilución infinita, entonces (p,,
p.)
= (p:
a!) y , de ahí
+
+
U=-
A
-10
(49)
Según esto, el grado de disociación de un electrólito es la unidad a dilución infinita. Por otro lado, cuando se incrementa la concentración, A disminuye y también lo hace u.
La ecuación (49) no se aplica a los eiectrólitos fuertes, porque en ellos
el decremento de A con la concentración se debe a la atracción interiónica
? 110 a la disociación parcial. Sin embargo, con pequeña correcciones, A/Ao
"0s da el grado de disociación de los electrólitos débiles. En éstos la variación de 11 con la concentración es debida a dos factores, que son, ( a ) la
disociación parcial del electrólito y ( b ) las atracciones interiónicas presentes.
A causa dcl grado de disociación relativamente bajo de estos electrólitos,
las concentraciones de los iones presentes en solución son muy pequeñas,
Y 10 son también los efectos interiónicos. En consecuencia, la mayor parte del
h e m e n t o en ia conductancia equivalente se debe a la disminución de a,
? la ecuación (49) se iumplc con bastante exactitud.
En 1," electrólito débil como el ácido acético a una concentración C y
grado de disociación 4 la concentración del ácido disociado vale Cm. A causa
1
il
3
438 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
de esta concentración existen fuerzas interiónicas presentes que tienden a
hacer disminuir el valor de .1 desde A, a A,, donde este Último \a101 es
la conductancia equivalente del ácido completamente disociado a una concentración Ca. En consecuencia, para lograr el grado de disociación del
electrólito habiendo hecho las correcciones por los efectos interiónicos
sería más correcto calcular a no como A/Aa, sino por
es decir, como la relación de la conductancia actual equivalente a la conductancia equivalente del misnm electrólito cuando está completamente
disociado a la misma concenrración iónica en que se encuentra en la solución. La evaluación de A, para su uso en la ecuación (50) se ilustra con
el ejemplo siguiente. Cuando C = 0.1000, el valor de A para cl ácido acético a 25OC es 5.201, mientras que A, = 390.71. De estos datos hallarnos que
y, por lo tanto, Ca = 0.00133 equivalentes por litro. Ahora, con la suposición de que el ácido se halle completamente disociado, y sea aplicable la
ley de Kohlrausch, se puede calcular a partir de los valores de A del acctato
sódico, cloruro sódico y ácido clorhídrico, todos para C = 0.00133, que el
valor de A, del ácido acético resulta 385.40 en vez de 390.71. Al dividir
1 observado, por el calculado A,, hallamos para el verahora el valor de '
dadero valor del grado de disociación
En consecuencia, el grado real de disociación cs 1.35% en vez de 1.33 obtenido a partir de la relación AlA,.
Aunque estas ligeras correcciones son necesarias cuando se trabajan con
cálculos precisos, para nuestro propósito basta la ecuación mis simple, (191,
que se empleará de aquí en adelante.
APLICACION DE LAS MEDICIONES DE CONDUCTANCIA
Las mediciones de conductancia encuentran una amplia aplicación en
química e industria química para obtencr información concerniente a la
conducta de los electrólitos, en el análisis, y en el control de la concentración. A continuación se discuten algunas de estas aplicaciones.
Solubilidad de las sales poco solubles. La conductancia ofrece un procedirnicnto, simple y conveniente, para detrminar la soliibilidad de las
sales poco solubles como el sulfato de bario o el cloruro de plata. El p m e -
Aplicación de las mediciones de conductancia 439
dimiento consiste en preparar una solución de sal cn a L p ade conductancia
L s w Z o ) ,conocida. Dcspu6s se mide la de la solución saturada, L..
Esta es dcbida a la sal y agua, y de aqui qne la conductancia específica de la
sal únicamente, Lataal,,es
A p r t i r de la c o n d ~ t a n c i aequivalente Lsri,il, se deduce que
dondc C es la concentración de la sal expresada en equivalentes por litro, es
decir, la solubilidad. Como la solución es, en el mejor de los casos muy diluida, y se trata de electrólitos fuertes, A es esencialmente igual que ,?O.
Haciendo esta sustitución, C resulta igual que
Al encontrar el \alar de A, en una tabla de conductancias equivalentes
limite, C se calcula fácilmente mediante la conductancia especifica de la
solución saturada.
Determinación del grado de,ionización. Esta determinación en el caso
de electrólitos débiles es un problema de importancia en fisicoquímica y en
química analítica, porque desde esa información se calculan las constantes
de ionización de los electrólitos. Más tarde se dará una referencia más amplia del problema, ahora nuestra atención se concentra sólo en la estimación del grado d e ionización del agua.
Conductancia específica del agua muy pura
TABLA 11-8.
1°C
L. (mho cm-')
Kolilrausch y Heydweiller hallaron quc a pesar de lograr, agua de una
gran purern en calidad, ésta eidiibia aún una pequeiia conductancia a distintas temperaturas, como se observa en los datos de la tabla 11-8. Dc istos
440 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
resultados se concluye que el agua es un electrólito débil y que se ioniza
según la ecuación
H,O = H + OH(53)
+
Para hallar el grado de ionización a a una temperatura, por ejemplo 2j°C,
se precisa conFer A. Como A = L, x V e ,donde V , es el volumen en centimetros cúbicos que contiene un equivalente de agua, V e debe ser el peso molecular del agua dividida por la densidad del agua a 25OC. Por esa razón
3
A, para el agua es la suma de las conductancias iónicas equivalentes de los
iones H+ y OH-, ó .?O = 349.8 4- 198 = 547.8. En consecuencia
esto es, el agua está ionizada el 1.9 x lo-' por ciento a 25°C. Este grado '
de ionización, aunque es extremadamente pequeño, resulta suficiente para
dar cuenta de los muchos fenómenos encontrados en las soluciones acuosas.
Titulaciones conductimétricas. Las mediciones conductimétricas pueden emplearse para determinar los puntos finales de varias titulaciones.
Consideremos la valoración de un ácido fuerte como el clorhídrico con una
base fuerte como el hidróxido de sodio. Antes de agreg-ar una base, la solución ácida tiene un elevado contenido de iones hidrógeno, y por lo tanto
una elevada conductancia. Cuando se añade álcali se eliminan los iones.
hidrógeno porque se forma agua, y su lugar la ocupan los cationes de la
base mucho más lentos. En consecuencia, la conductancia de la solución
disminuye y sigue disminuyendo por adición de más base hasta que se
alcanza el punto de equivalencia. Si ahora se sigue agregando más álcali
habrá un exceso de iones oxhidrilo más veloces, lo que origina un incremento de la conductancia otra vez. Cuando se grafica esta variación contra
el volumen del álcali añadido, resulta la curva ABC de la figura 11-9,
donde la rama descendente nos da las conductancias dc las mezclas de ácido
y sal, y la porción ascendente la de la sal y un exceso de base. En el punto
mínimo, B, no existe ningún exceso ni de ácido, ni de base, y de aquí que
resulta el punto final.
Las curvas de titulación del tipo descrito se obtiencn sólo por neutralización de los ácidos y bases fuertes. Cuando un ácido es dkhil, por ejemplo
el acético, y la base es fuerte, la cuma de titulación tiene la loma general
A'B'C' de la figura 11-9. Como el ácido es débil, su conductancia es baja.
Cuando se adiciona una hasc, el ácido d6hilmente conductor se convierte
Actividades y coeficientes de actividad de los electrólitos fuertes
441
.n sal muy ionizada, y en consecuencia la conductancia se eleva según A'B'.
Una vez que se neutraliza el ácido, la adición de un exceso de base ocasiona
otro incremento rápido de la conductancia, y la cuma asciende según B'C'.
El punto de equivalencia es de nuevo la intersección de las dos líneas rectas.
En este caso la intersección de A'B' y B'C' no está tan marcada como nos lo
Figura 11-9.
Titulación conduc-
timétrica de los ácidos con una
base fuerte.
l
.
,
ml de base agregados
l
muestra la figura, sino que tiene la forma indicada por las líneas punteadas.
Erta redondez en la intersección se debe a la electrólisis de la sal formada
durante la reacción de neutralización que, sin rmbargo, no introduce una
dificultad especial, puesto que las porciones rectas pueden prolongarse,
como en la figura para darnos el punto final correcto.
Las curvas de titulación conductimétrica descritas se aplican sólo a las
condiciones anteriores especificadas. Cuando las fortalezas relativas del
ácido y base cambian, también lo hacen, a veces, las curvas de titulación.
Es suficiente señalar que se pueden realizar muchas titulaciones conductimetricamente en agua o solventrs mixios que resultarían difíciles o imposihks con indicadores, y que el método se aplica a mezclas de ácidos débiles
? fuertes, bases débiles y fuertes, precipitación, oxidación-reducción, y otros
til>osde reacciones.
ACTIVIDADES Y COEFICIENTES DE ACTIVIDAD DE LOS
ELECTROLITOS FUERTES
. , La? conctantes de equilibrio para los equilibrios gaseosos y reacciones no
lonicas en solución se expresan en función de las concentraciones con sufiexactitud a presioiirs y concentraciones relativamente bajas. Sin embargo, al tratar con equilibrios ióniros, con ciertos aspectos cin6ticos de las
'<'lucirmes, y con e~tudiosde lar f i m m rlectr»motricri no es posiblc surtitiiir
""irha5 vrcrs, La, artividadi.~poi las conirnt,aiories. Por c b t a ruón es
442 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
esencial considerar cómo las concentraciones pueden convertirse a activida.
des, y cómo, tales actividades, se evalúan.
A fin de introducir alzunas definiciones empleadas con frecuencia
cuando tratamos con las actividades de los elcctrólitos fuertes, consideremos
un electrólito A,B, que se ioniza de acuerdo con
donde z, y z. son las caigas de los dos iones. L a actividad del elcctrólito
conio un todo, a?, rsti definida en función de las actividades de los dos
ionts o+ y o- de la siguiente manera
Si ahora desiynanios por
= x f y el níimero total de iones que resultan
desde una molécula de clectrólito, la acticidad media geomt!trica del clcctróliro o más simplciriente la acfiz,iilad media, cscrita a!, cstá definida por
i,
Para relacionar las actividades de los iones con sus concetitraciones escribiinos
a, = C+!+
(57N
a. = c-!(53))
donde C+ y C son los pexls gramo por litro de cada uno de los dos iones
en solucióri, mientras que f+ y f. son los coqficientcr de articidad dc los dos
iones. Estos coelicientes de actil-idad son factores apropiados que cuando
se multiplican por las concentraciones de los iones respectivos dan su actividad. Introduciendo las ecuaciones (57a) y (57b) en la (55) obtendremos
para a?
a, = (C+f+)"(C-f-)"
= (c;c9(f;r-)
(58)
y para el coeficiente de actividad media desde la ecuación (56)
El factor (/:f!)"'
es decir,
se llama coeficiente de articidnd media del electrólito
f
=
(EK)".
f~
(60)
Análogamente, al factor (CYC)"' sc conoce como rnolaridad media dcl electrólito, C * ; 6
C, = (C;C:)''*
(61)
Actividades y coeficientes de actividad de los electrólitos fuertes 443
En función de la molaridad media y de los coeficientes de acti,,idad, las
ecuaciones (58) y (59) pueden escribirse simplemente así
Finalmente, como para cualquier electrólito de molaridad C tenemos que
C+ :,= x C y C- = yC, las ecuaciones (62) y (63) se convierten en
Las ecuaciones (64) y (65) son las expresiones necesarias para convertir
las actividades en molaridades y vice~ersa.Aiinqiie estas exprrsioiics pueden
parec2r complicadas, no lo son cuando se aplican a casos específicos. Así
para un electrólito 1 -1, tal como el cloruro de sodio, de molaridad C, tenemos x = 1, y y = 1 y v = 2, y por esa razón
De nuevo, para u n electrólito del tipo 2-1, tal como el cloruro de bario,
obtenemos x = 1, y = 2 y v = 3, y de aquí que
En la tabla 11-9 se resumen l a relaciones entre C, f, a, y a, para cierto
níimero de electrólitos de diferente tipo. Se observar:\ que las expresiones
que derivan de las ecuaciones (64) y (65) dependen del tipo de eikctrólito
Y son idénticas para los 1-1, 2-2, 3-3; para los 1-2 y 2-1; para los 1-3 y 3-1
Y para los tipos 2 3 p 3-2.
T A B LA 11-9.
Tipo de
electrblito
!
i
i
i
l
.
Relación de a* y az con C y f en algunos electrólitos
Ejemplo
x
y
a* = C-f
Ct
1-1
NaCl
1
1
2
C
2-2
3-3 i:
1-2
2-1
1-3
3-1
2-3
3-2
cuso,
AIPO,
Na,SO,
RaClo
Xa,PO,,
La(NO,),
Ca,(P0,)2
La,(SO,),
1
1
1
1
1
2
1
2
2
3
3
4
C
3
2
3
4
2
1
3
1
3
2
5
S
C
6 4 C
6 4 C
V 2 i C
427 C
V708C
Vi08C
a,
=
u
Cf
Cf
C
f
C
f
V~ZiCf
V27 Cf
6108Cf
vi38 cf
a:'
c2iz
C?fl
Cyfz
4
~
3
4 C3f"
27 C4f4
27 C4/*
108C5/6
i o n c.f.
3
444
Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Las definiciones para los coeficientes de actividad media y iónica han
sido expresadas en función de la concentración en moles por litro de solución. En el trabajo electroquímico con mucha frpcuencia las concentraciones se expresan en base a la molalidad. m. Entonces, las actividades de los
iones se definen de manera análoga a la ecuación (57) por
Al repetir los argumentos anteriores con estas nuevas definiciones, se demuestra fácilmente que ahora
donde y es el coeficiente d e actividad media del electrólito para la concentración en molalidades, y está dado por
Con las ecuaciones (67) y (68) las expresiones de la molalidad media, m,,
esto es
m== (mfm!)"'
(70)
y a, tienen en la tabla 11-9 análoga forma que para las molaridades, excepto
que ahora C y f se hallan reemplazadas por m y y. Como C y m no son idénticas, tampoco lo serán en general, f y y. De hecho los dos coeficientes de
actividad están relacionados entre si por la expresión
,f
= 7
(y)
.
.
donde p, es la densidad del solvente puro, y m / C esti dado por
Aquí M ? es el peso molecular del elertrólito, mientras p es la densidad de la
solución. Desde las ecuaciones (71) y (72) se puede demostrar que para
soluciones acuosas diluidas f es esencialmente análoga a y ; sin embargo,
cuando las soluciones son más concentradas los dos tienen valor diferente.
i
DETERMLNACION D E LOS COEFICIENTES D E ACTIVIDAD
Las ecuaciones ( M ) y (65) ó (67) y (68) indican que para convertir
las molaridades o molalidades en actividades debcn conocerse los coeficientes
de actividad media en las diversas eoncentracioncs de un electrólito Dichos
cocficj~ntcsse detmrninan a partir de la prcsión de vapor, descenio del
punto de congelación, aumento del punto dc ebullición, presión osrnótica,
1
1
Determinación de los coeficientes de actividad 445
-
TABLA 11-10. Coeficientes de actividad media, y, de los electrólitos a 2 j ° C
~lolalidad
m
0.000
0.001
0.005
0.01
0.02
0.05
0. 10
0.20
0.50
1.00
1.50
2.00
3.00
4.00
Figura 11-10.
HCI
KCI
NaOH
CaC1,
-SO,
ZnSO,
1.000
0.966
0.929
O . 905
0.876
0.830
0.796
0.767
0.757
0.809
0.896
1.009
1.316
1.762
1.000
0 . 965
0.927
0.902
0.869
0.817
0. 769
0.719
0.651
0.606
0.585
0.576
0.571
0.579
1.000
1.000
O . 888
0.789
0.732
0.669
O . 584
0.531
O. 482
0.457
0.509
0.628
0.807
-
1.000
0.830
0.639
O . 544
0.453
O . 340
0.265
0.209
0 . 154
0.131
0.124
0.124
0.141
0.171
1.000
0.734
0.477
0 . 387
0.298
0.202
O . 148
0.104
0.063
0 . 044
0.037
0.035
0.041
-
0.899
0.860
0.818
0.766
0.719
0 . 693
0.679
0.683
0.698
0.774
O.888
-
Coeficientes dc nciiiid.id media de diversos ~lcctrólitos, a 25°C.
446 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
distribución, solubilidad y medición de las fuenas electroinotrices por mé.
todos termodinámicos bien conocidos. Aunque en este libro se explican los
mbtodos de solubilidad y de fuerza electromotriz para la evaluación de 1%
coeficientes de actividad. los restantes procedimiento^ de determinación
quedan fuera de nuestro alcance, remitiéndose al lector a diversos tratados
sobre el tema.
Todas las evaluaciones de los coeficientes de acti~idadse hacen en el
supiiesto de que en una solución de dilución infinita y = 1 ó f = 1, según
la escala de concentración utilizada, es decir, que
m* -
-y
a=
= l
a,
-- f = i
o que
c*
+O
(73)
cuando C + O
(74)
cuando m
Estas definicione? son equivalentes a la aseveración de que la actividad
de un ion es igual a su concentración en las soluciones diluidas a infinito.
Sobre esta base, los coeficientes de actividad de todos los electrólitos son
la unidad a una concentración igual a cero. Cuando la concentración
aumenta, dichos coeficientes disminuyen pasando por un mínimo y volviendo a incrementarse de nuevo considerablemente por encima de uno. En
la tabla 11-10 se hallan los valores d e y para cierto ntímero de electrólitos
a ?5"C, mientras que la figura 11-10 muestra una grifica dc algunos en
función de
Aunque a concentraciones mis elevadas, la coiiducta de Y
está muy iiidividuali7ada, a concentracioner más bajas las curTas convergen
de una manera que depende del tipo de electrólito. Este hecho es de gran
significado teórico en la explicación de la conducta teirnodinimica de las
solucione? diluidas de los electrólitos fuertes.
\/m.
LA TEORIA DE DEBYE-HCCKEL SOBRE LOS
COEFICIENTES DE ACTIVIDAD
La teoría de Dehye-Hückel intenta explicar los ioeficientes de actividad
de lo? elrctrólitos en función dc las atracciones electrostáticas que operan
entie los ioncs en una solución. Los autores comienzan suponiendo que las
partículas en solución se hallan cargadas elGctricamente y sometidas a la
ley de Coulomb, esto es, que las f u c r ~ a sde atracción o repulsión entre
las cargas varían directamente como el producto de las caigas q, y q!, e inversaniente al cuadrado de las distancias r cntrt ellas.
L a conrtante de proporcionalidad D, Ilnniada co~irlanle dicl¿ctrica, depende del rricdio en el cual se encuentr.iri las c'irgai, cn nocstro caso el
3
.
La teoría de Debye Hückel sobre los coeficientes de actividad 447
solvente. Como un resultado de estas fiienar, la distribución de los iones
5 travts de la soliición no está dispuesta al azar, sino que cualquier ion
central positivo se encuentra rodeado de una atmósfera de otros iones diferentes, cuya carga neta es negativa, y lo inverso sucede con un ion ne:ati\o.
Debido a la presencia de una atmósfera alrededor de un ion, existe un potencial que se establece en su superficie, cuya magnitud demostraron Debye
y Hiickel que \ d í a
En esta ecuación z , es la ralencia del ion central, e la carga del electrón,
a, el diámetro iónico, y x es
donde X es la constante del gas por molécula, esto es. Rt.V, T la temperatura absoluta, y n, el núniero de iones de ciialquier naturaloa por centímetro
ciibico de soliición. La sumatoria en la ecuación ( 7 7 ) debe efectuarse con
todos los iones presentes cn una solución dada. K tiene las dimcnsioncs del
recíproco de la longitud y debe considerarse como el recíproco del espesor
promedio de la atmósfera iónica 'alrededor de un ion.
La presrncia de iin potencio E , en la superficic de un ion debida a la
atmósfera iónica da a la soluciáh una energía libre eltctrica Fe
en exceso sobre la que la solución tendría si la atmósfera iónica que resulta
de las atracciones electroitáticas no estu~ieranpresentes. Este exccso FI se
encuentra tennodinámicamcntc relacionado con cl coefi:ientc de actiiidad
del ion f , por la relacibn
F, = XT Iii f,
(79)
Y de aquí que, a paitir de las ecuaciones (78)
y ( 7 9 ) , se obtiene
Al introducir en la ccuación (80) el valor de K de la ( 7 7 ) ; ) la coiicetitiación de los iones C , en pesos ióriicos gramo por litro desde la igiialdad
la ecuación (80) se transforma cn
448 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Para una temperatura y solvente dados, A y B en esta ecuación son cons.
tantes definidas por
mientras que ,u es la fortaleza iónica de la solución (véase la pág. 345),
esto es
La ecuación (81) da el coeficiente de actividad de u n ion como una
función de la fortaleza iónica de la solución. Como experimentalmente lo
que se evalúa es el coeficiente de actividad media del electrólito, f , la ecuación (81) debe transformarse con ayuda de la ecuación (60) al logaritmo
del coeficiente de actividad media. El resultado es
donde a: es ahora un diámetro iónico promedio. En la tabla 11-11 se dan
las constantes A y B de esta ecuación en el caso del a p a como solvente a
diversas temperaturas. Se supone que el diámetro ióilico medio ni satisface
TABL 11-11.
Constantes de Dcbye-Hückel,
A y B, para el agua como salvente
los datos. Sin embaryo. para las soluciones m u y diluidas B ~ { V es
; pequeño
comparado con la unidad y puede despreciarse. Entonc~sobtenemos
de los electrólitos fucrter.
3
La teoria de Debye Hückel sobre los coeficientes de actividad
M9
A causa de la necesidad de hacer ciertas simplificaciones por la complejidad matemática de la derivación, la teoría de Debye-Hückel, y alguna
de sus t-cuaciones como la (85), es aplicable sólo a las soluciones diluidas.
.4dernás, la ecuación (86) de& verse como una ley limite para la conducta
de los coeficientes de actividad en las solucionez m u y diluidas. De acuerdo
con la ecuación (86) los coeficientes de actividad de todos los eiectrólitos
fuertes a dilución elevada deberían estar determinados para un solvente y
una temperatura dadas, sólo por la fortaleza iónica de la solución y el tipo
de valencia (23.) del electrólito, y de ninguria manera por la naturaleza de
aqull. C n a gráfica de - log f contra VT en todos los clectrólitos debe dar
lineas rectas que pasan por el origen, y la pendiente de las mismas será una
función de 2 4 . Para los electrólitos 1-1 esta pendiente sería A; para los 1-2
ó 2-1, 2 A ; para los 1-3 ó 3-1. 3A, etc. En la figura 11-11 se comprueba
que estos requisitos se cumplen por los datos experimentales en soluciones
JT x 10'
Figura 11-11.
Prueba de la ley limite de Debye-Hückel a 15°C.
mu). diluidas. En b t a se encuentran graficados los valores de - log f de
los diversos complejos amínicos de cobalto en solución acuosa como una fun-
ción d e la raíz cuadrada de la fortaleza iónica. Los puntos son los valores
dc - log f experimentalmente obsenridos por Br6risted y LaMer" par'" de las mediciones de solubiiidad, mientras quc las líneas sólidas dan las
@&as predichas por la teoria. Al considerar las dificultades involucradas
"a'
detrrminación de las solubilidades en tales soluciones diluidas, la
Concordancia entre la teoría y la experiencia dcbe considerarse satisfactoria.
S' han llevado a cabo prurbas anUogas para otras riistancias; por esa r z ó n ,
450 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
.)!
sucede que para los electrólitos fuertes en las soluciones sumamente diluidas
la ley limite de Debye y Huckel representa la conducta de los coeficientes de
;/\
0.1 o menores para electrólitos con r + z hasta un valor
actividad hasta =
de tres. Con tipos de valencia mayorcs que z.2. = 3 la concordancia no llega
hasta \/; = 0.1.
para
Para reproducir los coeficientes de actividad en función de la
fortalezas iónicas ma)ores que \/; = 0.1, debe usarse la ecuación (85) que
es más completa. Con una elccción más apropiada de j ,que debe ser del
orden del diámetro atómico, esto es, varios angstroms, los coeficientes
de actividad de los electrólitos 1-1 piieden reproducirse incluso cuando
C = 0.1, y en los de tipo 2-1 en las proximidades de C = 0.05. Húckel y
otros han señalado que la ecuación (85) puede ampliarse más: por introducción de otro término linear en f i , pero para nuestro propósito esta modificación no es necesaria y no se discutirá.
Aunque la ley de Debye-Hückel fue propuesta originalmente para los
electrólitos fuertes, nada impide su aplicación a los débiles. Esta ampliación
se ilustrará más tarde en el capítulo.
\/y
CONSTANTES D E IONIZACION D E LOS ACIDOS DEBILES
El principio de la constante de equilibrio no es aplicable a la ionización
de 10s electrólitos fuertes porque, como hemos visto, se hallan disociados
totalmente. En consecuencia, nos concierne tratar sólo con los equilibrios
de ionización de los electrólitos débiles, esto es, la ioninción de ácidos y
bases débiles.
El equilibrio de ionización de cualquier ácido monobásico débil, tal
como el acético, puede representarse mediante la ecuación
,
cuya constante termodinámica de ionización K , está dada por
Introduciendo los coeficientes de actividad y concentraciones en lugar de las
actividades, la ecuación (87) resulta
.
.
.
(88)
Ahora bicn, para una conccntrarión total dc icido C con un grado dc ionización n la roricentracióri de H A scri <:,,A = C(1 - a), rnicntra~que la
3
Constantes de ionización de los ácidos débiles 451
de los iones será CH+= CA-= Ca. Al sustituir estos valores en la ecuación (88), tenemos
donde
es la constante de ionización del ácido en función de las concentraciones,
mientras que
es la relación de los coeficientes de actividad. En soluciones diluidas K I seri
muy próxima a la unidad, y K , será esencialmente igual a Ki. Sin embargo, en soluciones más concentradas es necesario introducir una corrección a
K: para las desviaciones de los coeficientes de actividad respecto a la unidad.
El uso de las ecuaciones anteriores para calcular Ká y K , se ilustra con
los datos de la ionización del ácido acético obtenidos de mediciones de la
conductancia realizadas por MapInnes y Shedlov~ky.'~
La primera columna
T AB L A 1 1 - 1 2 . La constante de ionización del ácido acético
0 . 05000
0 . 10000
-
0 01905
0.01350
1.85
1 85
a
25°C
1.72
1 70
en la tabla 11-12 señala las concentraciones del ácido, mientras que la
Se9inda da el ~ r a d ode ionización del ácido evaluado de la ecuación (50).
esto es, e = ,\/.le.
Las con\iarites de concentración dc ioni~acióri calciiladas d ~ s d eC y a por medio de la ecuación (90), sc dan en la tercria
432 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
al:
columna. Se observará que aunque los valores de KL muestran una cons.
tancia relativamente satisfactoria, hay un incremento consistente d e KL con
la concentración. Esta alza se debe a no tomar en cuenta Kt e n la ecuación (89). Para tomarlo procedemos así. Al tomar logaritmos de esta
ecuación resulta
log K , = log K:
log K f
+
HA
como
es el coeficiente de actividad de una molécula no disociada, no
puede hallarse muy distante de la unidad. Pero f,+ . f , = fz, y entonces
log f,* . f,- = 2 log f
e introduciendo la ley límite de Debye y Hückel, ecuación (86), hallamos
para 2 los f a 25OC con z+= r. = 1
2 log f = - 2 Azs-VT
-
= -1.018~p
(93)
La fortaleza iónica de la solución es en este caso la mitad de la concentración iónica total, esto es, p = Cm. Al insertar este valor de p e n la ecuación (93), y sustituir la ecuación (93) en ( 9 2 ) , obtenemos finalmente para
el 10s K,
log K. = log KL - 1.018
194)
v z
Los valores de K , calculados mediante la ecuación (94) se muestran
en la última columna de la tabla 11-12. Se observará que dentro del intervalo de validez de la ley limite de Debye-Hückel los valores de K , son ahora
constantes y no presentan el alza mostrado por K:. En consecuencia, la
constante termodinámica de ionización del ácido acético a 25'C es 1.75 X
10-5.
Aunque estrictamente hablando las constantes de ionización deberían
expresarse siempre en actividades, para muchos fines no se introduce un
error apreciable al usan Ii, en vez de KL o viceversa. De aquí, que e n lo sucesivo seguiremos la práctica de expresar las constantes de iorii~aciónen función de las concentraciones en lugar de las actividadcs en nuestros cálculos.
Los ácidos que poseen más de un hidrógeno ionizable, no se ionizan en
una sola etapa, sino en varias. Así el sulfúrico ioniza en dos etapas que son
H,SO, = H +
HSO; = H +
+ HSO;
+ SO;-
mientras que el ácido fosfórico disocia en tres pasos
+
H,PO, = H + H,PO;
H,PO; = H + H P 0 ; H P O ; = H + f PO;--
+
,
Constante de ionización de la bases débilcs 453
En cualquier ácido dibásico la ionización primaria es r , i s completa
que la segunda, mientras que en los tribásicos la disociación primaria ei
ma)or que la segunda, y ésta mayor que la tercera. Cada estado constituye
un equilibrio verdadero con una constante de ionización. En el caso del
ácido sulfúrico el primer grado de disociación es total, por ser un ácido
fuerte, pero el segundo es incompleto, y de aquí que para este estado resulta
la constante
En el ácido fosfórico los tres grados involucran una ionización parcial,
y así resultan tres constantes, una para cada caso, cuya magnitud a 2 j C C
K,? = 6.2 X
y K,,= 4.8 x lo-':
indicando
es K,,= 7.5 x
que para una cierta concentracióii de ácido, la extensión de disociacióii de
cada estado disminuye marcadamente del primero al tercero. En efecto,
calculemos a partir de las constantes anteriores las concentraciories de las
diferentes especies iónicas y moleculares en una solución 0.0233 molar de
ácido fosfórico donde la concentración de los iones hidrógeno es 0.01 aproximadamente, y encontraremos
Estas cifras muestran que aún las soluciones diluidas del ácido fosfórico
puro constan esencialmente de H,PO,, H+ y H,FO; y que en ellas no existen prácticamente iones PO; - - .
CONSTANTES DE IONIZACION DE LAS BASES DEBILES
Cualquier basc débil, tal como el hidróxido de amonio, se disocia según
la ecuación
BOH = B+
OH(95)
+
En este proceso la constante termodinámica de ionización de la base es Ka
Como en los ácidos débiles, las dos constantes Ka y Ka son idénticas sólo
en soluciones diluidas. De otra maiicra se cumple
donde K , es de nuevo la relación del coeficiente de actividad de las diveisas
454 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
especies. Emplearemos K; expresada en unidades de concentración corno
una aproximación suficiente a K b .
DETERMINACION DE LAS CONSTANTES DE IONIZACION
Las constantes de ionización de los ácidos y bases débiles pueden deter.
minarse a partir de los datos de conductancia, y de las mediciones de la
conceptración de los iones hidrógeno de una solución dada de los ácidos
o bases en presencia de sus sales. El método conductimétrico fue explicado
ai hablar de la constante de ionización del ácido acético. Ahora, nuestra
atención se concentra en la evaluación de las constantes de ionización a partir
de las mediciones de la concentración del ion hidrógeno.
Con este fin consideremos específicamente una solución de ácido acético
de concentración C que contiene también acetato sódico de concentra.
ción C'. Si la de los iones hidrógeno es CHA,la de ácido sin disociar es
Cxn = C - Cn+, mientras que la de los iones de acetato es la debida a la
ionización más la proporcionada por la sal totalmente disociada. Como
en la disociación del ácido resultan cantidades equivalentes de hidrógeno y
ion acético, la concentración de éste será CH+, y CA-= (CH* C'). En
función de estas cantidades, la constante de ionización de los ácidos se con-
+
TABLA
11-13. Constantes de ionización dc los ácidas débiles a 25'C
Arsénico
Bórico
Carbónico
Hidrociánico
Yódico
Fosfórico
Fusforoao
Sulfúrico
Sulfuroso
Fórmico
Acético
Propiónico
Cloracético
Dicloracético
Bcnzoico
Oxálico
Frnol
H;CO~
HCN
HIO,
H P ,
VP?,
H,SO,
H,SO,
HCOOH
1.6 x 10-2
fuerte
1.72 x lo-?
1.77 x 10-4
1.75 x
1.34 x l o - "
1.38 X
5 X
fi.29 x 10-S
5.02 x lo->
1.20 x IO-'O
x 10-7
1.01 X
6.21 x 10-8
7
5.18 x 10-5
Cálculos que involucran a las constantes de ionización
455
Por esa razón si conocemos C y C', todo lo que se precisa es medir CH+
para hallar K',.
Consideraciones análogas se aplican a la determinación de las constantes
de ionización de las bases. Así con el hidróxido de amonio cuando su con,entración es C en presencia de otra C' de cloruro de amonio, la constante
de ionización KI toma la forma
Como se demostrará erisegida, la concentración de los iones hidrógeno
y oxhidrilo en solución acuosa se Iiallan relacionados en forma fija, de manera que al conocer CI,+,
CaH-queda determinada. I>e aquí que por medición de la concentración del ion hidróceno en la solución de la base y su sal,
y K; se deduce a partir de la ecuación (100).
resulta determinada COH-,
En la tabla 11-13 se seiialan las constantes de ionización de algunos ácidos débiles a 2jUC, mientras que en la tabla 11-14 se dan las constantes
de ionización de algunas bares débiles a la misma temperatura.
T ABLA 11-14. Constantes de ionización de las bases débiles
a 25°C
Base
Amoniaco
Hidróxido de plata
M&-amina
Dimetilamina
Trimetilamina
Etilarnina
Anilina
Hidracina
Piridina
Urea
Fórmula
NH,OH
AgOH
(CII,)h'H,
(CH.,),NH
(C%),N
(C,H,)NH,
(C&)NH,
.
NH, NH,
C,H,N
CO(NH2)
Ks
1.81 x 10-5
1.1 x 10-4
4.38 x lo-'
5.12 x 10-4
5.21 x
5.6 x 10-4
3.83 x 10-10
3 x lo-e
1.4 x 10-9
1.5 x 10-14
CALCULOS QUE INVOLUCRAN A LAS
CONSTANTES DE IONIZACION
Cuando se conoce la constante de ionbación de un ácido o base, es posible calcular fácilmente el grado de ioniración y la concentración de las
especies presentes en la solución bajo diversas condiciones dadas. Daremos
dos ejemplos del procedimicnto.
Cálculo de grado de ionización de ácidos y bases puros. S u ~ m n g m o s
qiir se drscn calcular el grado de ionización y las concentraciones dc: las divcrsas cspeciei en solución de un k i d o monobásico a una concentración C .
456 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
'
Si a es el grado de ionización, entonces de acuerdo con la ecuación (90)
de la cual se deduce que
ol
=
K ; +
v(Ká)2+4K"C
2C
(101)
Cuando K
U cs pequeña lo será también a, y el denominador en la ecua.
ción (90) será esencialmente la unidad. Bajo estas condiciones la ~cnación
de a se reduce a
i
F
a=
vIc
(102)
Conocida a, se obtienen fácilmente CH.%,CH+y C n - De una manera
totalmente análoga se puede calciilar a y las concentraciones en la ionización de las bases.
Grado de ionización en presencia de un ion común. Cuando la solución de un ácido o base débiles contiene también una sustancia que posee
un ion común con el electrólito dkbil, se reduce el grado de ioni~aciónde
este último. La generalidad de esta afirmación se ilustra con el ejemplo
siguiente: supongamos que existe una solución C molar de ácido propiónico,
junto con propionato de sodio cuya concentración es C'. Si a es, de nuevo,
el grado de ionización, resulta C,, = C ( l - a), y CH+= Col. Pero la
concentración del ion propiónico cs ahora la debida a la ionización, Coi,
más la proporcionada por la sal, C', csto es, Ch. = (Ca f C'). Al colocar
estas concentraciones :n la expresión de KL tenemos
- (Ca) (Ca f C')
C ( l- a )
y de aquí
ol
=
-(Cr+K:)
+ V(C'+KA)'+4KLC2C
(104)
Cuando podemos hacer (1 - a) = 1, la ecuación (104) sc trandoiiiia el'
Además, con valores pequeños dc K: no se illtrodu<c error significati\»
Producto iónico del agua 457
,lo sólo criando se descarta u en cl denominador de la ecuación (103), sino
también C a comparada con C' en el numerador, y cntonces resulta
Ii', = C'a
La compaiación de las ecuacion~s(102) y (106) muestra que a es menor
en el Último caso.
PRODUCTO IONICO DEL AGUA
Mediciones de la conductancia y otras evidencias inilican definiti~amrnte que cl agua se ioniza dc acuerdo con la ecuacibn
H I O ( l ) = H+ t O H -
(107)
En esta disociación, la constante dc equilibrio es
Sin embargo, puesto que la ioni~acióiies muy ligera, la actividad del agua
rn cualquier solución acuosa permanece constante y puede incluirse en K.
La ecuación (108) resulta entonces
K," = I
( Q ~=
, ~
an-aoii-
(109)
a Km se le denomina producto iónico del agua, e indica que en cualquier
solución acuosa los iones hidrógeno y oxhidrilo deben encontrarse presentes
y que el producto de sus actividades es constante. Esta, en función de las
couccntraciones, sc describe así
<
K C = C1,-COI,-
(110)
donde
difiere de K,, por el pioducto de los coeficientes dc actividad
de los iones. En lai solurioncs dc baja fortaleza iónica K:" cs esencialmente
igual a IC,,.
El valor de K:,, puede encontiai5e en la tabla 11-8 que contiene :os
datos de la conductancia dcl a s i a pura según fueron establecidos por Koblm s c h y He>d\vciller. Estos datos dan el grado de ioni~acióridel agua a
2jaC, a = 1.9 x
Ahora bien, como un litro dc agua a 25°C: pcsa
997.07 g, y como cl limo irioleciilar del aSiu es 18.016, la concentración
molar C dcl agua ?s C = 997.07/18.016
53.34 molar. Coriocimdo C
Y a se dcduce quc las conceritracioiirs ióuicas son
-
CH.= <,,",,~
= (;O
= %.:4-$ x l.<) y 10-"
= 1.05 x 10-7
458 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
y por esa razón K:< a 25°C es
En la tabla 11-15 se dan los mejores valores actuales de K, a ciertas
temperaturas. Un punto de interés en esta tabla es que el producto iónico de]
agua cs 1 x 10-'' a 2 5 T A otras temperaturas la constante tiene distintos
i,alores, y cri coiisecuencia la concentración de los iones hidrógeno y oxhi.
drilo en agua pura a estas temperaturas no serán iguales que a 2 5 T , esto
es, 1 x lo-' g de peso iónico por litro.
T ABLA 11-15. Producto iónico del asua,
K,, a diversas temperaturas
Temperatura "C
K,
o
Olll
10
25
40
60
0.292
X lo-"
1.008
2.919
9.614
Como el principio del producto iónico se mantiene en cualquier solución
donde haya agua presente, esta constante se emplea para calcular las concentraciones de los iones hidrógeno y odiidrilo presentes en tales soluciones.
Por ejemplo, e n una solucióri acuosa 0.001 molar de hidróxido sódico a
25"C, Coll- 0.001, y por lo tanto, la concentración de los iones hidró-geno debe ser
Anilocamente se calcula la concentración de los iones hidroxilo en cual.
quier solución ácida.
.41 pasar dc soluciones ácidas a alcalinas la concentración del ion hiddgeno varía muy ampliamrnte. Para dar un medio conveniente de expresió"
a la concentración de los iones Iiidrógcno sin tener quC utilizar exponc!~ter
negativos, sugirió Sorensen el iiso de la m a l a 1iH (11oder de hidrógeno),
.
,
, :
Soluciones reguladoras
459
y en base a ella tenemos
pH =
-
(111)
log,, a,.
fito es, la actividad del ion hidrógeno de una solución es igual a 10-DH.
Así, para una solución de p H = 4, a,+ =
y para otra de pH = 12,
nE+ = lo-''.
Análogamente la actividad de los iones oxhidrilo pueden cxpresarse en escala pOH mediante la definición
Coniü para cualquier solución acuosa air+aon= K,,, tenemos
- lag,, a=+ y por csa razón
pH
logro%H- = - lag,, K ,
+ p O H = - log,, K,,
(113)
De esta ecuación se deduce que l a suma del pH y p O H para cualquicr
solución acuosa debe ser siempre una constante igual a - log,, K , y de aquí
que cuando el p H de la solución asciende el p O H debe disminuir, y viceversa.
La condicihn de neutralidad se establece cuando las concentraciones iónicas
de hidrógeno y oxhidrilo sean iguales, y deberán serlo también el pH y el
pOH. Entonces
Cualquier solución que tiene un p H mcnor que -1/Z IoglOK , será
ácida, mientras que otra cuyo p H sea mayor a aquel valor será alcalina.
En el caso específico de las soluciones acuosas a W C , K , = 1 x 10-14,
p O H = 14, y la
y - log,, K,, = 14. A esta tcrnperatura, tendremos p H
solución neutra tiene un p H de siete. Los valores menores de este númcro
indican acidez y los mayores del mismo basicidad.
+
SOLUCIONES REGULADORAS
Son las constituidas de un ácido o una base y una de sus sales, poseen
capacidad para resistir a las variaciones en mayor o menor grado del pH,
cuando 'se adiciona algo de ácido o base y por este hecho se denominan
"hciones reguladoras o simplemente reguladores. Son particularmente efect i v a las mczclas en las cuales el icido o base involucrado es débil.
La acción reguladora dc una solucibn de ácido d6bil HA en presencia
de una de sus sales se explica de la manera siguiente: en cualquier niezcla
de ácido y sal el equilibrio de ionización del ácido dctermina la coriccntración del ion hidróceno de la solución. Cuando sc añaden ioncs hidrógeno
por adición de ácido, el equilibrio se altera y para rcstablecersr de nuevo
los iones hidrógeno en exceso se recombinan con los aniones de la sal para
f u m a r 1nol6culas de ácido sin disociar HA, y por lo tanto el 1111de la solu-
460 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
ción se invierte a un valor no muy distinto del original. Si por el contrario
se adiciona alguna base a la mezcla de ácido y sal, el exccso de iones oxhi.
drilo altera el equilibrio de ionización del a p a . Para restablecerlo otra vez,
los iones hidrógeno y oxhidrilo se combinan para dar agua. Como esta reacción provoca una disminución de iones hidrógeno, se modifica también
el equilibrio de ionización del ácido y para su restablecimiento se disocia
algo de este H A para darnos de nuevo los iones hidrógeno necesarios. El
resultado de todos estos cambios es que el exceso de iones hidrógeno está
neutralizado esencialmente, y la solución se invierte a un p H muy próximo
a su valor original. Estas consideraciones se aplican sólo cuando la cantidad
de ácido o base agregadas a la solución reguladora no es lo suficientemente
grande como para alterar la relación de ácido a sal.
D e una manera similar sc explica la acción reguladora de las soluciones
de una base dkbil y una de sus sales. El pH particular para el cual es efectiva
una solución reguladora está determinado por la relación del ácido o base
a su sal presente y por la magnitud de la constante de ionización del ácido o
base. Así, para un ácido débil la actividad del ion hidrógeno está determinada desde la constante dc ionilación por
mientras que para una basc dtbil la actividad del ion oxhidrilo está go.
bernada por
, ~BUH
aoli- = ka-(116)
a ~ .
Cuando las relaciones de actividad del ácido o basc a la sal son la unidad, estas ecuaciones se reducen a a,+ = K , y a,,,. = Ka. Cuando no son la,
unidad, a,+ y a o i 1deben evaluarse de las ecuaciones (115) ó (116).
Los r ~ p l a d o r e sse cmplcari siempre que se desean soluciones de pH
conocido, o cuando es neccsario mantenerlo constante. .MacII\.aine ha descrito la forma de prrparar soluciones reguladoras de un intemalo de pH
definido que oscila entre 3.4 y 8.0 con intervalos de ~ariaciúiide 0.2 unidades, mediante el uso del fosfato disódico y el ácido cítrico en diversas proporciones. Otro &tema para el cual el pII varía desde 1 a 10 también con
intervalos de 0.2 fuc propuesto por Clark y Lubs. Los detalles de esta preparación se encuentran cri el manual de Lünye."~
CONCEPTO GENERALIZADO DE ACIDOS Y BASES
EL t t r ~ n i n o&ido se usa ~eneralrnentcpara significar cualquier sustancia
que en solución da ioncs hidrúgcno, y bnsc aquélla que producc iones oxhi-
Concepto generalizado de ácidos y bases 461
drilo. Aunque estas definiciones estrechas de &ido y base son satisfactorias
algunos fines de soluciones acuosas, son insuficientes para describir
todos los fenómenos observados bien sea en agua, o en solventes no acuosos.
Hasta ahora hemos considerado al ion hidrógeno como constituido por
un átomo de hidrógeno con el electrón removido, esto es, un firotún. Sin
demostrado que el cambio de energía libre de la
embargo, Bronsted "'a
reacción H + H I O ( l i = H,,O+ es extremadamentr grande y negativa. y
dc aquí que la constante de equilibrio de esta reacción debe ser iiiuy ~ r a n d r .
Los iones H + como talrs, son práctica~nenteinexistentes en medio acuoso y
lo que consideramos como un hidrogeriión en realidad es el protón hidratado H,Of que se conoce con los nombres de hidronio, hidroxoniu 0 ion
oronio. De igual manera, ciertos estudios realizados por Dole "' sobrr el electrodo de vidrio, así como sobre la cin6tica de las reacciones somptidas a la
acción catalítica de los ácidos han llevado a la conclusión de qur r l protón
K mcuentra solvatado.
Estas y otras consideraciones condujeron a Bronsted l 4 y Loiny lS a
redefinir el concepto de ácido y base. Definieron al ácido como una sustancia cafial d e dar u n protón a otra, y a una base como cualquier sustancia
que acepta u n protón de u n ácido. En otras palabras, un ácido es una
sustancia tal que, con carga o sin ella, actúa como donadora de protoncs,
y es una base cuando es aceptara. Inherente a estas nuevas definiciones de
ácido y base está el hecho de que cuando un ácido cede protones debe
existir una base capaz de recibirlos; y viceversa.
Las diferencias entre este concepto ceneralizado de ácidos y bases y el
mis antiguo se comprenderá mejor con algunos ejemplos. Según ambos
Puntos de vista el ácido acético es un ácido. Sin embargo, mientras que el
concepto antiguo representa la ionización según el proceso
CH,COOH = H + CH,COO(117a)
el concepto generalizado lo representa así
ara
+
+
En esta última ecuación el ácido acético dona un protón a una moltcula de
agua que actúa como base, para formar un ion hidronio y uno de acetato.
Además: como el H,O+ puede ceder un protón al ion acetato para formar
ácido acktico y asna, debe ser por si mismo un ácido, mientras que el
CHZCOO- se comportará corno una base. En consecuencia, cualquier intcracción de un ácido y una base debe siernpri conducir a la for~naciónde otro
ácido y base diferentes; es dccir
Acido, f Base, = Acido, .t Base,
(118)
462 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
La base, que se origina del ácido, es la base conjugada del ácido,. Análo.
gamente, el ácido, qur resulta de la base, sc llama conjugado de esta base.
Al ampliar este argumento, obtcnemos la formulación siguiente para la
ionización en el agua de un número de ácidos generalizados:
Acido,
HCI
HCOOW
HSO;
NH:
C.H,NH?
H,O~ "
H,O
HPSO~
HSO;
+
+
+
+
+
+
+
+
+
Base,
-
HIO
HzO =
H20
H ~ O=
H,O =
H,O =
H?O =
H;O =
H70 =
Acido2
H30+
HrO+
H1O+
HIO+
HsO+
H,O+
HiO+
H,O+
H30+
+
+
+
+
+
+
+
+
+
Base,
C1-
HCOOSO;NH~
C6HsNH2
HnO
OHHSO;
SO;-
A partir de estos ejemplos se obsen-a que al lado de las sustancias consideradas ordinariamente como ácidos, también lo son otras como el H,,O+,
H,O, NH:, C,H,NH: y otras donadoras de protones. Tampoco las bases
son únicamente las que poseen iones oxhidrilo, sino también loi aniones
de los icidos, agua: arnoniaco, anilina, H S 0 ; y otros aceptores de protones. Se observará que el agua puede actuar tanto como ácido o como base,
dependiendo de las condiciories de la reacción, es deci- es anfótcra. Además
un ion como el HSO; es anfótero también puesto que actúa unas veces
como ácido y otras como base, según las circunstancias.
La fortaleza de un ácido dado, en la nueva teoría se mide por su capacidad para donar protones al solvente y es expresable mediante la constante
de ionización del ácido. Por otra parte, la de nna base K B esti definida por
donde K , es la constante de ionización del ácido conjugado de la base. Para
las soluciones acuosas se puede demostrar que
donde Ka es la constante de ionización de una base definida mediante la
ecuación (96).
El concepto generalizado de los ácidos y bases no contradice los antigiios
puntos de vista de aquellas sustancias, sino que los amplía. Aunque las ideas
irivolucradas ~ r a r e x a nsorprcndent~sa aquél no acostumbrado a pensar en
función dc ellas, veremos en u n capítulo posterior que son riiiiy fructíferas
y permiten l a correlación y explicación de ciertos fenómenos cn las soluciones
acuosas que de otra manera aparrccriari muy enipáticos.
C. N. Lewis ha propuesto una teoría de ácidos y bases aún m i ? anililia
,,, sus propósitos que la anterior, así para Le~vis,una base es u n a suito~iria
qric cede u n par de electrones para formar un enlace de coordinación. A su
un úcido es una sustancia cualquiera que acepta u n par d e clcctroncs
para formar tal enlace. Esta teoría no sólo comprende a los ácidos y h a m
establece la teoria de Bronsted-Lowry, sino a otras muchas sustancias qiie
de ordinario no están clasificadas en esa categoría. Para mayorcs detalles
el estudiante debe ver la literatura.16
La reacción entre un ácido y una base en solución acuosa produce siempre agua y una sal. Si la reacción es completa, la neutrali7ación exacta dará
una solución exactamente neutra; es decir, sin exceso de ioiies hidrógeno
u oxhidrilo. Casi, así sucede cuando un ácido fuerte como el clorhídrico se
neutraliza por una base fuerte como el hidróxido de sodio. Sin embzrgo,
cuando un ácido débil como el acttico se neutraliza con una base fuerte
corno el hidróxido de sodio, se encuentra que la solución final no es neutra
sino básica, y cuando iina base débil se neutraliza con un ácido fuerte, la
soliición final es ácida. La basicidad de la soliición final en un caso y la acidrz en otro se deben a la tendencia de la sal formada por neutralización
a reaccionar con el agua y de ahí a invertir la reacción. Esta tendencia de
las sales cuando se hallan disueltas en agua a reaccionar con el solvente y
por esa razón a invertir el proceso de neutralización se denomina hidróiisir.
Al considerar la condiicta de hidrólisis de varias sales, podemos distinguir
cuatro casos, que son, ( a ) sales de ácidos y bases fuertes; ( b ) sales de ácidos
déhiles y bases fuertes; ( c ) sales dc ácidos fuertes y bases débiles, y ( d ) sales
de ácidos y bases débiles. Cada una de estas categorías se discutiri a continuación.
Sales de ácidos y bases fuertes. El cloruro de sodio puede tomarse
como iin ejemplo de la conducta hidrolítica de una sal de ácido y base
fuertes. Esta sal existe en soliición acuosa con sus iones cloro y sodio, si
reaccionaran con el agua darían ácido clorhídrico e hidrúxido de sodio,
Pero puesto qiie estos compuestos son electrólitcs fuertcs, los productos
S&n de nuevo ioiies cloro y sodio, y el ion hidrógeno y oxhidrilo recombi"arían dando agua. En otras palabras, los productos de la hidrólisis serían
idérlticos con los reactivos, y no habría cambio en la naturaleza dc las especies
'n solución. Por esta razón, podernos drcir que una sal de un ácido y base
fllei-te~,no hidrolizaii, y que la solución de dicha sal es esencialmente neutra.
Sales de ácidos débiles y bases fuertes. Cuando iina sal de un icido
d@hily una hasir fii~rtc.tal romo f.1 acetato de sodio, se disuelve en agua,
", Véase Luder y Zuffanti. T h e Electronic Therlry of A c i d ~ <ind Bniei, Juhn
'vilcy & SWS, In<-.,Nueva York, 1916.
464 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
,u
el catión de la base, es decir, el ion sodio no llevará a cabo Iiidrólisis por la
razón dada antcriormente. Sin embargo, el anión del ácido d(.bil, esto es
el ion acetato, reaccionará con el ayua para formar suficiente ácido acético
no disociado a fin de qne la constante de ioni~aciónsi mantenga invariable.
El resiiltado es que el ion acetato efectúa la reacción hidrolitica
que conduce taiiibién a la formación de iones oxhidrilo, y la solución se
hace alcalina.
En general, la hidrólisis de cualquier sal BA de un ácido dkbil HA y una
base fucrtc BOH se debe a la hidrólisis del anión del ácido, que se representa
mediante la ecuación
A
H,O = H 4 O H (121)
+
+
para la cual la constante de equilibrio Kh incluyendo de nuevo la actividad
del agua en la constante, está dada por
La constante Kh, llamada de Iiidrólisis del ion A- , determina el grado en
que este último ion reaccionará con el agua para formar HA y O H - . La
magnitud de esta constante depende, a su vez, de la de ionización del ácido HA, K,, y del producto iónico del agua K,, como se demuestra a continuación. Si el numerador y el denominador del lado derecho de la ecuación f 122) se multiplica por a ~ . ,resulta
1
pera
(2)
=
y K~
= an-aoi-.
y por tanto
y la constarite Ue hidrólisis se deduce del producto iónico del a p a , Y la
constante de ionbación del ácido débil.
Sales de ácidos fuertes y bases débiles. En sales de esta naturaleza, de
las que el cloruro de amonio es un ejemplo, el anión del ácido fuerte no
sufrirá hidrólisis. Pero el catión BC de la base débil BOH llevará a cabo
la hidrólisis de acuerdo con la reacción
B+ C H 2 0 = I 3 O H + H +
Esta vei la Iiidrólisis da niolkulas de la base no ionizada e l i i d r o ~ ~ ' ~
ncs, y de aquí quc la solucióri d r la sal en agua cs ácida.
lu
L a constante hidrolitica viene dada ahora por
s i el numerador y denominador de esta expresión se multiplican por aoH-,
Kh se convierte en
P e r o la primera cantidad en el parhtesis es l / K b y K b es la constante de
ionización d e rla base débil BOH. Pero K , = a=+ - noH-. Por esa razón
y l a constante hidrolitica de la sal de un ácido fuerte y base débil se calcula
a p a r t i r del p oducto iónko del agua y la constante de ionización de la base
débil B O H .
S a l e s d e ácidos y bases débiles. Cuando la sal BA es el producto de la
interacción de un ácido débil HA y una base débil BOH, tal como sucede
en el caso d e l acetato de amonio, tanto el catión como el anión de la sal
d e b e n llevar a cabo la hidrólisis. La reacción es
Y si la solución de la sal en agua es ácida o bisica queda determinada pdr la
fortaleza relativa del ácido o base. En este caso, la coqstante de hidrólisis
q u e d a definida por
Si a h o r a el numerador y denominador de la ecuación (128) se multiplican
'Or
a,, . =O=-, Kh se transforma en
Kh =
"u
(
0
)
~ B + ~ o H -
=
,
(
(
z
(z)
)
(a~+aon-)
a~-aon-
)
-,
= 1
a ~ + a ~ - K.
iaH.aoH., = K.. y por tanto
L-ez las constantes de ioriización, tanto del ácido corno de la base débiles,
b;illn,i comprendidas cn la cxpresi6ri dc In constante hidrolitica dc la sal.
466 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
CALCULOS Q U E COMPRENDEN LAS
CONSTANTES HIDROLITICAS
r los valores
Las constantes hidrolíticas de las sales se calculan a ~ a r t i de
conocidos de K,, K a y K , por medio de las ecuaciones (1231, (126) Ó
(129), o bien se determinan experimentalmente. En este último caso es una
práctica usual disolver una cantidad dada de sal en agua, y medir la concentración del ion hidrógeno en la solución. Una vez conocida esta cantidad
y la concentración original de la sal, es posible calcular la constante de hidrólisis. En todos los cálculos que siguen se supone que las actividades son
reemplazables por las concentraciones. Para ilustrar el cálculo de Kh de
las mediciones de la concentración del ion hidrógeno de una sal en agua,
consideremos el ejemplo siguiente.
E J E M P L O : Se encuentra que una solución de acetato de sodio, en agua
a 25'C, 0.02 molar tiene una concentración iónica de pesos iónicos gramo
por litro 3.0 x
;Cuál es la constante de hidrólisis de la sal? La reacción que tiene lugar en este caso es
Puesto que Cn* = 3.0 x
y K , = 1.01 x
centración de los iones oxhidrilo será
= C+, . Con-, la con-
Esta es también la concentración del ácido acético, puesto que se produce en
cantidad equix-alente a los iones oxhidrilo durante la hidrólisis. Finalmente,
la concentración de los iones acetatos en el equilibrio hidrolitico debe ser la
concentración original de la sal menos la cantidad que ha reaccionado,
esto es
C
= 0.02 - 3.37 x 10-O
= 0.02
valor muy próximo al real. Por lo tanto,
El valor de Kh calculado tcniendo cn cuenta que K,, = 1.01 x 10-Id y
K , = 1.71 x
para cl ácido a d t i r o a 2 5 T , es K ,
5.77 x 10-'O.
.ti
ir
:%,
Producto de solubilidad
S
467
L n a vez conocido Kh, se emplea para estimar el grado de hidrólisis de la
sal bajo otras condiciones. Así, supongamos que se desea conocer el grado
de hidrólisis del acetato de sodio en una solución 0.01 molar a 25% Si
designamos por u el grado de ionización del ion acético, entonces C , , =
0.01 ( 1 - a), y CH.,c = Con- = 0.01 a. En consecuencia,
Como Kh es pequeíia, lo será también a, y podemos escribir entonces 1 - rr
= 1, con lo cual resulta:
es decir, el ion acetato se hidroliza un 0.024% en una solución 0.01 molar
a 25%.
P R O D U C T O DE SOLUBILIDAD
Un tipo de particular importancia de equilibrio iónico heterogéneo es
el comprendido en la solubilidad de sales poco solubles en agua. Cuando
una sal de esta naturaleza, por ejemplo el sulfato báríco, se agita en agua
hasta saturación, se establece el equilibrio entre la fase sólida y la sal totalmente disociada, es decir, se tiene
BaSOp(s) = B a + + t SO--
t
(130)
En este proceso la constante de equilibrio es
que podemos expresar así, en cualquier solución saturada con sulfato de
bario: C I p o d u c t o de las actiuidades de los iones bario y sulfato es constante
e igual a K,. A ésta se la denomina constante de producto de solubilidad, O
simplemente jroducto de solubilidad, de la sal, que es característico dc cada
Sustancia.
d a n d o una sal d a sólo dos iones, como por ejemplo el sulfato de bario
o cloruro de plata, el producto de solubilidad es simplemente el de las actividades de los dos iones, pero para aquellas sales que dan más de dos iones
dicha producto tiene una expresión más complicada. El equilibrio de solubilidad de u n a sal cualquiera A,B, que d a x iones positivos de A, y y negativos de B, está dado por
A,B,(s) = X A
YB
(132)
+
y de aquí que la expresióii más gencral del producto de solubilidad es
K. = a l a ;
(133)
468 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
Así para una sal tal como el carbonato de plata, para el cual x = 2 y y = !,
K. = n i 9 + . %,--mientras q u e para el fluoruro de calcio x = 1, y = 2 y
K , = ac,-- . ni..
Los productos d e soluhilidad se evalúan fácilmente a partir de las solubilidades de saturación de las sales en agua pura. Estas se obtienen por análisis directo de las soluciones saturadas, por mediciones de conductancia
como se describen en este capitulo, o bien por mediciones de las fuerzas
electromotrices. A 25'C la solubilidad del carbonato de plata en agua es
1.16 x lo-" moles por litro. De aquí que la concentración de los iones de
carbonato en una solución saturada es Ceo,-- = 1.16 x
mientras
=
que la de los iones de plata es doble de la del carbonato, esto es, CAg+
2.32 x lo-* iones gramo por litro. Para el carbonato de plata K, vale
Si suponemos ahora que los coeficientes de actividad son iguales a la unidad
en soluciones muy diluidas, entonces K , se reduce a KL producto de solubilidad estequiométrico. Por lo tanto,
TABLA11-16.
Sustancia
Productos de solubilidad de diversas sustancia
a 25'C
Sustancia
HsL
AgBr
AgCl
AgI
As2C0,
Ag,CrO,
As3
SrCO,
TIC1
K,
3 . 2 x 10P2S
7 . 7 x 10W13
1.56 x 10-la
1.5 x 10-'u
6.15 x 10-12
9 x lo-'"
1.6 x 10-*e
1.6
x
2.02 x 10-4
En la tabla 11-16 se señalan los productos de solubilidad a 25'C de
cierto núniero de sales e hidróxidos a los que es aplicable también el mismo
principio. A partir de estas constantes la solubilidad de Estas siistancias en
agua se obtienen ficilmcntr al invcrtir los cálculos del producto de soliibilidad dados arriba.
,
Efecto salino y solubidad 469
..,
(
EFECTO SALINO Y SOLUEILIDAü
!::Ey,
,i
Con la formulación del producto de solubilidad en función de la concentración cabe esperar que la adición de sales que poseen un ion común
con la sal que se disuelve debería disminuir su solubilidad, y esto es lo que
sucede, como lo muestra la figura 11-12, en la cual se observan los efectos
que el TINO, y KCI ejercen en la solubilidad del TlCl a 25OC, que, sin
embargo, son menores a los que se obtienen desde la relación
K: = CT,+Col-
para el efecto del ion común (curva de la base). Además, las tres c u m s
superiores de la fiLpra muestran que los electrólitos sin un ion común incrementan su solubilidad.
WOd
znso,
- 16
NaC2H,02
A
w
-
9
+
v
w
i
r 1 - 1 2 Efecto salino en
la rolubilidaq del TIC1 a 25°C.
12
Calculada para
el ion común
v a
E
.-
=
v,
a
TINO,
4
0
o
O
O05
0.10
015
0.20
0.25
Molaridad de la sal afiadida
Aunque inexplicablemente desde la aproximación de la concentración,
este incremento marcado en la solubilidad con la concentración del electrólito es lo que cabe esperar si se tiene en cuenta la formulación más exacta del
producto de solubilidad en base a las actividades que según la termodinámica
está dado por
K. = a~l+acl= (CTI*CCI-)(~TI*~CI-)
= K:f2
'
(134)
donde f es el coeficiente de actividad media de la sal y Ki el producto de
solubilidad de las concentraciones. Desde la ecuación (134) se deduce que,
como K. debe ser una constante, K: no puedc ser otra e igual a K. a menos
que f = l. Sin embargo f no es igual a 1 excepto cuando la fortaleza
470 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
iónica es cero y varía con dicha fortaleza. En consecuencia, K: debe ser tarnbién una función de dicha fortaleza y variará con ella según la relación
Ahora bien, con fortalezas iónicas no demasiado grandes los coeficientes de
actividad son menores de la unidad, y por lo tanto entonces K: debe ser
mayor que K,. Como la solubilidad es igual a
cuando hay una sal
presente será más elevada. Podemos ver, por lo tanto, que mientras el proproducto de solubilidad K , permanece constante, la teoría predicc que K;
aumentará con el incremento de la fortaleza iónica, lo mismo que la solubilidad lo que concuerda con los hechos. Estos argumentos dan cuenta del
hecho que las solubilidades obsemadas en presencia de un ion común son
mayores que las predichas cuando no se hace ninguna concesión a los coeficientes de actkidad. Esta variación de la solubilidad con la concentración
de los electrólitos añadidos s'e emplea para evaluar los coeficientes de actividad de la sal que se disuelue a diversas fortalezas iónicas. El procedimiento
se ilustrará otra vez con el cloruro talioso. Si representamos la solubilidad de
esta a l en agua pura por S, y por S en presencia del electrólito añadido sin
ion común, fo y f los corficientes medios de actividad de la sal en las dos
soluciones, entonces, en vista de la constancia de K,, tenemos la relación
\/Kd
K. =
= ST
y, de aquí,
Sf
=
Sdo
Al tomar logantmos, tendremos
log S = log
Sojo -
log f
(138)
Según esta expresión, f se evalúa a partir de las solubilidades en cuanto
se conoce el producto S,f,. Para obtenerlo sr grafica logS frente a la raíz
cuadrada de la fortaleza iónica total de la solución, es decir, de la sal disuelta
y el electrólito añadido, extrapolando después a
p = O. Como para una
fortaleza i p a l a cero f = 1, la intersección en el eje log S da inmediatamente
1% Sofa.Conocida esta cantidad, la sustracción al 1og S el valor log S o f o
nos da - log f, y de aquí que se obtiene f a diversas fortalezas iónicas. O bien,
al evaluar Sofo,
se deduce f a partir de la ecuación (137) al d i ~ i d i Sofo
r
por S.
En la tabla 11-17 se señalan datos ilustrativos del procedimiento de
evaluación de f, para la solubilidad del cloruro talioso a 25°C en agua en
presencia de diversas concentraciones de nitrato de potasio La columna
da la concentración C de sal añadida, la 2 la solubilidad observada S del
c~orilrotalioso en moles por litro, y la tercera columna p = ( C i- S).
'
El equilibrio iónico y la temperahira
TABLA11-17,
Conc. KNO,
agregado
C
471
Solubilidad del TIC1 en presencia de KNO, a 25'C
Salubilidad
del TIC1
S
p=
+
(C
Coeficiente dc actividad
media del TIC1
S)
f
K,
=
S?fz
\/y
De una grafica del log S contra
se encuentra que Sofo= 0.01422.
Al dividir ahora S,f, por S a diversas fortalezas iónicas, se obtienen los coeficientes de actividad de la columna 4. La última de éstas da el producto de
solubilidad del cloruro talioso calculado a partir de K , = S'f.Como cabria
esperar, K , es constante.
EL EQUILIBRIO IONICO Y LA TEMPERATURA
Las constantes de equilibrio d e las reacciones iónicas, de análoga manera
a las demás, varían con la temperatura. También como antes, esta variación
está dada nor
csta expresióii se "tiliza para evaluar los calores de diversas reacciones iónicas
o para estimar K a ~ i n atemperatura desde otra cuando se conoce AHo. .
REFERENCIAS
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m d Sonr, Inc., Nueva York, 1943, Vol. 1.
2. P. ~ e i a h a y ,A d ~ a n c e rin Electrochernirtry, John Wiley 8: Sons, Inc., Nueva York,
1961-1963, Vols. 1 y 111
3. S Glasitone, Introductlon to ~ l e c t r o c h e r n i s t r y ,D . Van Nortrand Company, Inc.,
Prin~eton,Nueva Jersey, 1942.
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'. Robirison y Stokes, Elecirui~leS o l u t t o n i , Acadenii~Press, N u n a York, 1959
A. Weiasbergcr, Phyricnl M e t h o d s o f Organic Cherniitvy, Intcrsciencc Publishen,
Inc., Nueva York, 1960, Vol I V , capitulus 45 y 46.
'
472 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
PROBLEMAS
Nota: En problemas donde se da un número insuficiente de datas para evaluar
las actividades de los iones de los electrólitos fuertes, considérese que las actividades
iónicas son iguales que las concentraciones.
1. Una corriente continua de 0.5 amperios internacionales pasa a través de un
circuito durante 10 min cuando se aplica una diferencia de potencial de 30 voltios int.
Hallar la cantidad de electricidad transportada por la corriente: ( a ) en culombios int.; ( b ) culombios absolutos; ( c ) uem, y ( d ) "es.
Rcrpuesta: ( a ) 300.0 culombios internacionales.
2. ¿Cuál es la velocidad de disipación de energía por la corriente mencionada
en el problema precedente, en: ( a ) vatios int.; ( b ) vatios absolutos; (c) ergioi s e - ' ;
( d ) calznrías s e g - l ?
3. Cuando un potencial de 110 voltios de corriente continua se aplica a las terminales de una lámpara eléctrica, fluye una corriente de dos amperios. ( a ) ;Cuál
es la resistencia de la lámpara, y cuántas calorías de calor se disipan por hora?
Rerpuesto: (a) 55 ohmios; ( b ) 189,300cal.
4. Una corriente continua constante pasa par un culombimetro de yodo durante
un período de dos horas. Al final de este tiempo se han liberado 0.0020 equivalentes
Rerpuerta: 0.027 amperios.
de 1,. ¿ Q u é corriente ha pasado por el culombimetro?
'
5. El crisol de platino usado en un culombimetro de plata aumentó su peso
0.5000 g durante la electrólisis. ?Cuál será la ganancia en peso de un cátodo de cobre
en una celda llena con cuprocianuro de potasio [KCu(CN),] colocada e n el mismo
circuito?
6. ¿Qué volumen de O, se liberará desde una solución de NaOH por una corriente de dos amperios que fluye durante If horas? La temperatura es de 27°C
Respuesta: 688.8 cc.
y la presión total es de 1 atmósfera.
7. ( a ) ¿Cuánto tiempo tardará una corriente de 1 amperio para reducir 80 cc .
una solución 0.1 molar de Fe,(SO,), a FeSO,? ( b ) ¿Cuántos cc de K,Cr,O, 0.1 molares podrían reducirse a sulfato crómico, Cr,(SO,), por la misma cantidad de electricidad?
8. ¿ Q u é cantidad de electricidad re requerirá para reducir 10 g de nitrobenceno,
C,H,NO,, completamente a anilina, C,H,NH,? Si la caída de potencial a través
de la celda es de 2 voltios, ¿cuánta energía en calorías, se consume en el proceso?
Respuesta: 47,070 cubmbios; 22,510 calorías.
9. Una solución de AgNO, que contiene 0.00739 g de ASNO, por gramo de H,O
se electrolira entre electrodos de plata. Durante la experiencia se depositan 0.078 &!
de Ag en el cátodo. Al final del experimento la ~ o r c i ó nmódica contiene 23.14 g de
agua y 0.236 g de AgNO,. ¿Cuáles son los números de transporte de l a iones AS+
Rerpueito: t+ = 0.47.
y NO;?
10. Una solución 4 rnolal de FeCI, se electroliza entre electrodos de platino. Desde la electrólisis la porción catódica, que pesa 30 g en 3.15 molal en FeC13
y 1.00 molal en FeC12. (Cuálm son los números de transporte de los iones F c + + +
y CI-?
11. Los números de tranrfrr~ncinde los iomr en u n í solución de KCI 1.000N
procedimiento dr Lzi frontrrzi inbvil u s m h BaCI, 0.80 N. Con
se detemiinaron por el
'
'
...,
Problemas 473
una corriente de 0.0142 amperior, el tiempo requerido por la frontera para barrer un
volumen de 0.1205 cc fue 1,675 segundos. :Cuáles son los números de transporte
de los iones K r y CI-?
Rerpuerto: t , = 0.49.
12. Los compartimientos catódico, central y
contienen cada uno 10 miliequivalcntes de HC1
número de miliequivalentes después de pasar 5
través de la celda? Considerar que t+ vale 0.8 y
y C1, en el ánodo.
anódico de una celda electrolitica
en solución acuosa. ¿Cuál será el
rniliequiralentes de electricidad a
que rc desprende H, en el cátodo
13. Una celda de conductividad se llena con una solución de cloruro de patasio
0.10 demal que a 25'C presenta una resistencia de 910 ohmios. ¿Cuál será la resistencia de esta celda cuando se llena con una solución cuya conductancia específica
a 25°C es 0.00532 rnhos?
14. Una celda de conductividad llena con una solución de KC1 0.01 demal da
una resistencia a 0°C de 11,210 ohmior. La distancia entre los electrodos e n la celda
es 6 m. Hallar: (a) la constante de la celda, y ( b ) el área promedio transversal de
Respuesta: (a) 8.673.
los electrodos.
15. A 25°C l a conductancias equivalentes de las d u c i o n e s diluidas de NaI son
las siguientes:
Encontrar A, de NaI a 25°C
16. A 25°C una celda llena con una solución KCI 0.01 demal ofrecía una resistencia de 484.0 ohmios. En la misma celda con soluciones dc NaCl se obtuvieron
a 25°C los datos siguientes:
Normalidad
Resistencia (ohmios)
0.0005
0.0010
0.0020
0.0050
10,910
5,494
2,772
1,129
( a ) Calcular h para el NaCl en cada concentración, y ( b ) evaluar A, graficando
A contra V C y entrapolando a dilución infinita.
17. A partir de las conducciones equivalentes a dilución infinita sisuientrr tornadas a 18"C, encontrar el valor de A, para el NH,OH:
Ea(OH),:
BaCL,:
NH,CI:
A,
A,
A,
=
=
=
228.8
120.3
129.8
18. En la medición de la mobilidad del H + por el procedimiento de frontera
móvil, re observó que la frontera se desplazaba una distancia de 4.0 cm en 12.52 minutos. La caída dc potencial a través de la celda antes de la formacibn de dicha
frontera es 16.0 voltios. L a distancia entre Ion electrodos es 9.6 cm. Calcular a partir
de
datos la mobilidad y la conductancia equivalente iónica de los iones hidróRerpucrio: p+ = 0.0032 c m 2 voltios-' seg-l.
geno.
474 Capitulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
19. A 25-C la r ~ ~ i i u c t a n c equi\alente
ia
dc una solución 0 020 molar de A g S o 3
es 0.477. Calcular
la conduct.incia iónica equivalente y las mobilidades iónicar de la A s + y NO;
una solución de ApNO, 0 020 molar.
e s de 178.7, mientras que el número de transporte del ion Ag
,"
20. A 18 C la mohlidad a dilución infinita dcl ion amoniu es 0.00066 mientras
que la del clorato cs 0.00057 cmZ~oltiOs-'seg-l. Calcular pl valor de A, del dorato
dc amonio Y los números de transporte de las dos iones.
21, Para una solución acuosa de .ASNO,, ."L=
,
133.36 a 25°C Csando la ecua.
.ió, de Onsager, hallar el valor de .1 para una solución 0.0010 molar a la misma
temperatura, y comparar el resultado con el \alar observado experimentalmente de
h = 130.5.
22. A 25°C la reristcniia de una celda llena con una solucióii de KCI 0.01 demal
La resistencia de la m s m a cclda llena con KH,OH 0.1 N es de 2,030
es 525 ohmios.
ohmios. ¿Cuál es el grado de disociación dcl NH,OH en esta soluiidn?
Respuesta. a
se
=
0.0134.
23. ;Cuál será la resistencia de la celda usada en el problenia anterior cuando
llena con Il,O cuya conductancia especifica es de 2.00 x 10-6 mhoscm-l?
24. La conductancia especifica a 25°C de una solución acuosa saturada de SrSO,
1.182 x 10-1, mientras que la del asua usada es 1.5 x 10-"has cm-'. De-
e s de
ternimar a 25°C la solubilidad en g a m o s por litro del SrSO, en q u a .
Respuesto. O 0967 g/litro.
25, En la titulación de 25.0 cc (diluidos a 300) de una solución de NaC,H,O,
con otra de HCI 0.0972 A' sc encontraron los datos siguientes:
Volumen usado de HCI
Conductancia x 104
10.0
15.0
20.0
45.0
50.0
55.0
3.32
3 38
3.46
4 64
5.85
7.10
,('uál es la concentrarión del NaC,H,30, en moles por litro?
26. Trazar una gráfica de la conductmcia contra el ~ u l u m e nde rcactiro para las
titulacionei de: ( a ) C,HdOH con N a O H ; (b) CuSO, con NaOH; ( c ) K2Cfl,
ion AgSO ,.
27. Para cada una dc las solucionm siguientes e>aluar la mobilidad media, la
actiiidad iónira, y la actitidid de la sil:
K-Fe(CN),
CdCI,
H,SO,
Molalidad
Coeficicntr de
actnidad inedia
0.010
0.100
O 571
0 219
O 050
O 797
28. La. densidad de u n a ~ o l u c i i i n1 190 molar dr CaCl, e n ;igiia ei 1.100 g/cc
a 2 0 ' ~ . < c u á l I A molalidad d e la a o l u ~ i ó nY la r c l ~ c hde 1 a Y?
Rer.burrla: 1.228 riioldl, fly
1.029.
V
..
Problemas
475
29. Csando la ley limite de Debye-Hlickel, calcular el coeficiente de actiiidad
media a 25-C dc una solución 0.001 molar de K,Fe(CN),, y compararlo con el ralar
observado de 0.808.
30. C n a solución es 0.002 molar tanto en CoC', como en ZnSO,. Calcular el
coeficiente de actividad del Z n + + en la solución utilizando la ley limite de DebyeHückel.
31. Observar si la ecuación (85) de este capitulo predice máximos o mininios
en la \ariación del log,, j con
Vz
32. Una solución de un electrólito fuerte ABUtiene una molalidad m, icti\idad a,
del soluto, y coeficiente de actividad media y, a la temperatura T. ( a ) Escribir la
expresión de la energía libre molal parcial del soluto en esta solución. ( b ) Por medio
de esta expresión, derkar la ecuación para la variación de a, con la temperatura a
m constante. ( c ) Desde la expresión obtenida en ( b ) , deducir la ecuación para la
variación de y, con la temperatura a m constante.
33. La conductancia e q u i r ~ l e n t ede una solución de ácido cloroacético 0.0140 N
es 109.0 a 25-C. ;Si A, es 389.5, cuál es la constante de ionización del ácido cloroRespuesta 1.52 X
acético?
34. Suponiendo que las nicdiciones de conductancia dan los valorcs verdaderos del
grado de disociación del problema 33, usar la ley limite de Debye-HUckel para
calcular la constante de disociación del ácido cloroac6tico.
35. Para el ácido propiónico K , = 1.34 X 10-% 25'C. Hallar para una solución 0.01 molar de ácido, ( a ) el grado de disociación, ( b ) la concentración del ion
Respuerta. ( a ) a = 0.0361.
hidrógeno, y ( c ) el p H de la solución.
36. Una solución acuosa a 25°C es 0.01 moiar t n ácido propiónico y 0.02 en
pmpionato de s d i o . Hallar para esta solución: ( a ) el grado de ionizición del L i d o ;
( b ) la concentración del ion hidrógeno, y (c) el pH.
37. Una solución a 25'C contiene ácido propiónico 0.01 molar y clorhidrico
0.03 molar. Hallar en esta solución: ( a ) el grado dc ionización del ácido débil;
( b ) la concentración del ion hidrógeno, y ( c ) el pH.
38. Una solución compuerta de ácido benmico 0.05 molar y de benroato de
Sodio 0.10 molar da un p H de 4.50 a 25°C. Hallar la constante de ionización del ácido.
39. Calcuiar el p H y p O H de cada una de las sicuientcs soluciones a 25-C:
( a ) 0 0 0 1 niolir de H2S0,; ( b ) 0.001 molar de NaHSO,, y ( c ) 0.01 molar de
XH,OK
R e ~ p u e r l a .( a ) p H
40. Calcular las roncentracioiies de H + , H,PO,,
una soluiióii 0 10 molar de H,PO, a 25'C.
Respuerta
H 2 P O - , HPO--
=
y PO;
2.73.
--,
CH+= O 0239, CHdpa,= U 0761.
41. Si el volumen final debe ser un litro, ,cuántas rnolrs de HCI deben añadirse
a 500 cc de una solución 0 1 molar de Xa,CO, a fin de ajustar el p H a 10.0?
42. Dar las fórniulas de los ácidus conliigados del ( a ) alcohol rnetilico, ( b ) anilirid, ( c ) éter dimrtilico, y las bases conjucadas del ( a ) alcohol rnetilico, y ( b ) feiiol.
43. Calcular lar constantes hidralíticiis de cada una de lar sales siguientes a 25°C:
( a ) cloruro de u r c a ; !bl carliunato dc arrionio; ( c ) fosfato disódico, y ( c ) bkart.onato sódico.
Rcr.z?ucita: (a) 0.672; ( b ) 11.9.
476 Capítulo 11: Conductancia y equilibrio iónico
en
44. Calcular el grado de hidrolisis y la cancentración tónica del O H - a 25'C
( a ) una solución O 50 molar de KCN, y ( b ) en otra O 01 molar de Na,CO,
45. Suponiendo que loa grados de hidrólisis son iguales para ambos iones,
calcular la proporwón a la cual una solución 0 10 molar de acetato de anilina,
C,H,NH,C,H,O,,
se hidrolizará a 25-C <Cuál será el pH de la solución?
46. ( a ) Calcular la concentracion del ion hidrógeno a 25'C en una solucion
O 05 molar de CH,COOH tomando como base que K , = Ka
( b ) Usando la ley limite de Dcbye-Huckel para obtener Ka, hallar el valor
mas preciso de la concentración del ion hidrógeno en la solución
47. ( a ) Comenzando con la ecuación (123) de este capítulo, deducir la relación entre los cambios de energía libre estandar de las reacciones representadas por
los tres equilibrios involucradoo
( b ) *Cuál es la relación entre los calores tipo de estas reacciones?
( c ) ,Cuál es la relación entre las entropias tipo de estas reacciones7
48. Formular las constantes de equilibria de los equilibrios siguientes
+ 2 NH,OH Ag(NH,) a + Br- + 2 H,O(I)
+ 5 1- + 6 H + = 3 H,O(l) + 3 I,(s)
( a ) AgBr(s)
( b ) 10;
(c) H +
+ HCO;
=
= H20(l)
49. Para la reacción S n ( r )
datos siguientes a 25°C
+ CO,(g)
+ Pb+
+
= Pb(s)
+ S n t +,
se han obtenido los
Concentración de equilibrio
(moles/litro)
cm*+
O 0233
O 0235
O 0275
cm++
O 0704
0 0692
O 0821
,
Calcular la constante de equilibrio de la reacción
+
50. A 23°C la constante de equilibrio de la reacción Ag(CN); = A s +
2 CNes 4 0 X 10-'9 Calcular la concentracion del ion plata en una solución que originalmente era 0 10 molar de KCK y O 03 molar de AgNO,
Respuesta 7 5 x 10-'6 equiv /iitro
51. La aolubilidad dei CaF, cn agua a 18°C es 2 04 x 10-6 moler/litro Calcular (a) la constante del p r ~ d u c t ode rolubilidad, v ( b ) la solubilidad en una solucion de NaF 0 01 molar
Respuesto ( a ) 3 4 x 10-11, ( b ) 3 4 x l o - - mol/litro
52. Calcular la solubilidad del PbI. en
( a ) agua pura, (b) O 0-1 molar de
K1,
y ( c ) 0 0 4 molar de Pb(NO,), a 25°C
Usando la
53. A 25°C el producto de solubilidad del AgBrO, es 5 77 x
ley limite de Deb>e-Huckcl, calcular su solubilidad en ( a ) agua pura, y ( b ) en
Rerpue~ta (a) 0 0084, ( b ) O 0051 mules/l~tr"
KBrO, 0 01 molar
usando
54. A 25'C el producto dp mlubilidad del FeC,O, es 2 1 x LO-.
la ley limite de Ikbyc-Huckcl, calcular la sulubilidad de este compuesto en (a) una
solución de O 002 molar deMgSO, y O 005 molar de KNO,, ( b ) agua pura
Problemas 477
55. Usando los datos dados en el problema 50, predecir si el AgCl precipitaria
de una solución que e$ 0 02 molar en NaCl y 0 05 molar en K A g ( C N ) ,
56. El producto de solub~lidad del CaF2 a 18'C es 3 4 x 10-1I mientras que
el del C a c o j fr 9 5 x
.Cuál será la naturaleza del primer precipitado cuando
se apresa CaClZ a una solución quc es 0 05 molar en NaF y O 02 molar en N a z c o , ?
,En una solución 0 02 molar de N a z c o , cuál es la concentración minima a la cual
el CaF, y el CaCO, precipitan simultáneamente?
57. El producto de solubilidad del Pbl, es 7 4 7 x
a 15°C y 1 3 9 x 10-8
n 25°C Calcular ( a ) el calor molar de solución del PbI,, y (b) la salubhdad en
moles por litro a 75'C
Respuesta ( a ) 10,600 cal/mol, (b) O 00357 moVlitro
CELDAS ELECTROQUIMICAS
Las celdas electroquímicas se usan principalmente con dos fines: ( a ) convertir la energía química en eléctrica, y (b) convertir la energía eléctrica en
química. En las pilas secas comunes y en el acumulador de plomo tenemos
convertidores de energía química en eléctrica, mientras que cn la carga
de la batería de almacenamiento y en la purificación electrolitica del cobre
se utiliza la energía eléctrica para realizar una acción química. Dividiremos
nuestra discusión de acuerdo con estai direcciones funcionales.
Antes de proseguir hemos de seiialar una distinción entre los términos
celda y bateria. Aqutlla es un dispositi\o simple de dos electrodos y un
electrólito capaz de dar electricidad por la acción química dentro de la
celda, o de producir una acción química por el paso de electricidad a su tra\&s. Una batería, por otra parte, es una combinación de dos o más celdas
dispuestas en serie o en paralelo. Así el acumulador de plomo es una batería
constituida por tres celdas conectadas en serie.
,
Al tratar con las relaciones de eriersia de las celdas, los principios termodinámicos encuentran una aplicación muy extensa. Sin embargo, el uso
de estos principios se encuentra sometido a una restricción muy importante,
esto cs, son aplicables a los procesos r c u e r i i b b i . Se tendrá en cuenta que
las condiciones de re\ersibilidad temiodinbnica son: (a) que las fuerzas
matrices y de oposición sc difercncicn infinitrsimalrncnte entre si, y ( b ) que
dehe ser posible invertir cualquier r;unhio por aplicaciún de una f u c r ~ a
480 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
infinitesimalmente mayor que la que está actuando. Satisfechos estos dos
requisitos, la celda es reversible, y la diferencia de potencial medido bajo
condiciones adecuadas puede reemplazarse en las ecuaciones termodinámicas fundamentales. Si las condiciones anteriores no se satisfacen, la celda
es irreuersible, y no se aplican las ecuaciones termodinámicas.
La diferencia entre las celdas reversibles e irreversibles se ilustra con los
dos ejemplos siguientes: consideremos primero una celda compuesta de un
electrodo de cinc y otro de plata-cloruro de plata sumer$ios ambos en una
solución de cloruro de cinc. Cuando se conectan externamente los dos
electrodos mediante un conductor, los electrones fluyen por el circuito externo
desde el cinc a la plata-cloruro de plata. Durante este paso de corriente
se disuelve el cinc formándose iones cinc, mientras que en el otro electrodo se
verifica la reacción siguiente
El efecto neto de la reacción en la celda es, por lo tanto,
y este proceso continúa en tanto el potencial externo de oposición es infinitesimalmente menor que el de la celda. Sin embargo, en cuanto el potencial
de oposición se hace ligeramente mayor, la dirección del flujo de corriente se
invierte, y también la reacción en la celda. Ahora, los iones cinc salen para
formar cinc en un electrodo, y se produce cloruro de plata a partir de los
iones de plata y cloro, por lo cual, la reacción global es entonces:
De esta descripción, resulta evidente que la celda en cuestión reúne la segund a condición de reversibilidad. También de nuevo puede satisfacerse la primera al hacer pasar una pequeñísima corriente a través de la celda, y puesto
que ésta es reversible puede tratarse por los procedimientos termodinámicos
sin ambigüedad.
Consideremos ahora una celda constituida por electrodos de cinc y plata
sumergidos en una solución de ácido sulfúrico. Cuando los dos electrodos
se unen por un alambre externo conductor, el cinc se disuelve con dcsprendimiento de liidrógeno y formación de sulidto de cinc, de acuerdo con el
csquema
Zn(s)
HISO, = ZnSO, t H,(g)
(4)
+
Sin embargo, cuando se conecta la celda con una fuente de potencial ligeramcnte mayor que el propio, la plata se disuelve en un electrodo y el
tiidrógcrio se desprende en el otro, 1lev:induse a cabo la reacción siguiente:
Fuerzas electromotrices y su medición 481
Desde las ecuaciones (4) y (5) es evidente que esta celda satisface la
primera de las condiciones de reversibilidad pero no la segunda. El potencial de tal celda no tiene el significado definido que puede asignarse a las
celdas reversibles.
Existen otros muchos tipos de irreversibilidad a los cuales nos referiremor más tarde. Por ahora basta con señalar que en el estudio teórico del
potencial de las celdas, son de importancia las celdas reversibles y a ellas
dedicaremos nuestra atención.
FUERZAS ELECTROMOTRICES Y SU MEDICION
Cuando se conecta un g.alvanómetro en serie con una celda y se cierra
el circuito, aquél sufre una deflexión que indica que la corriente pasa por el
circuito, y este paso es una evidencia de que existe una diferencia de potencial entre los electrodos, porque sin ella no es posible que circule electricidad
entre dos puntos. Esta diferencia de fiotencial que origina el flujo d e corriente desde u n electrodo de potencial más elemdo a otro menor se denomina fuerza electromotriz de la celda, abreviadamente f.e.m., y se expresa
en voltios.
El método más común de determinar la diferencia de potencial entre
dos puntos cualesquiera en un circuito eléctrico es el de conectar un voltimetro entre aquéllos, leyéndose directamente el voltaje con el instrumento.
Una seria objeción al uso del voltímetro para la medición exacta de los
potenciales de la celda, es que este aparato consume alguna corriente, provocando así un cambio en la f.e.m. a causa de la formación de produftos de
reacción en los electrodos y cambios en la concentración del electrólito alrededor de los electrodos. De nuevo, con un flujo de corriente apreciable, parte
de la fuerza electromotriz tendrá que utilizarse para vencer la resistencia
interna de la celda y, por lo tanto, el potencial medido con el voltímetro
no será el total de la celda. Por estas razones la medición precisa de las
f.e.m. no se realiza con voltimetros, sino con potenciómetros que requieren
corrientes de compensación extremadamente bajas.
Los potenciómetros operan según el principio de compensación de Poggendorfi. En este método, la f.e.m. desconocida se contrapone con otra
conocida hasta que ambas se igualan. El dispositivo y condiciones de tal
balance se comprende mejor con el diagrama de la figura 12-1. En este
diagrama, A es una celda de f.e.m. conocida, EA, cuyo potencial se imprime
a través de una resistencia uniforme ab. La fuente X de potencial desconocido, Ex, se conecta con A de manera quc las fuerzas electromotrices de ambas
se hallan opuestas. Para encontrar E, se desp!aza el cursor C a lo largo de
ab hasta que se encuentra una posición S en la cual el galvanómetro G
no da ninguna deflexión. A partir de En y las distancias ab y oS, se encuentra
de la manera sisuente: Como se aplica E,, a tudo lo largo de ab, la
48'2
Capítulo 12: Celdas electroquíniicas
a
b
Figura 12-1. Método de comprnración de Poggendorff para
la medición de la f.e.m.
resistencia debe ser proporcional a dicha longitud, y de la misma manera
como se aplica E x sólo entre aS es proporcional también a esta longitud.
En consecuencia, al dividir Ex por E, resulta
y por lo tanto
Los Únicos requisitos que se necesitan cumplir son que E, sea mayor que
Ex, que el alambre ab posea una sección uniforme, y que el gakanómetro
resulte suficientemente sensible para permitir un balance de potenciales
sin un flujo apreciable de corriente. Satisfechas estas exigencias se calcula
la f.e.m. por medio de la ecuación (6) con la condición de que la celda no
sufra disturbios por el paso de la corriente y que su conducta sea muy
próxima a la reversibilidad verdadera.
Para permitir la lectura directa del voltaje y conservar la fuente tipo de
potencial A, se modifica en la prictica el dispositivo presentado en la figura 12-1 por el de la 12-2. E n este diagrama, W es la celda de trabajo cuyo
f.e.m. puede aplicarse a travbs de ab, calibrada en voltios, por medio de 1%
resistencia variable R. Contra esta celda es posible aplicar tanto una f . e m
desconocida X o la celda patrón S.C. por medio del interrumptor D. Antes
de poder medir la f.e.m. de X, hay que estandarizar el alambre para obtener
lecturas de la f.e.m. de la manera siguiente: primero sc coloca el cursor C
en el punto S' a lo 1arg.o de a b que corresponde al valor de la f.e.m. de la
celda tipo, esto es, 1.0183 voltios. Después se conccta el interruptor hacia
el lado de S.C. y se mueve F a lo largo de la resistencia R hasta que el gahanómetro no presenta ninguna deflexión; en este momento, el paso de
cnrricntc por a b es suficiente para hacer que la caida de potencial entre
a y S' sea exactamente 1.0183 voltios y la caída d c roltajc en ~ ~ ~ l ~ i i i
Celdas tipo 483
otra parte a lo largo de ab sea idéntica con los trazos de voltajes hechos en
el alambre de deslizamiento. Con otras palabras, el potenciómetro se encuentra estandarizado para leer directamente el potencial.
Figura 12-2.
Principio potenciométrico dc lectura directa.
Sin modificar la posición de R, el interruptor D se coloca del lado de la
f.e.m. desconocida, y se mueve C a lo largo de ab hasta que se encuentra
un punto S en el cual el galvanómetro no sufre ninguna deflexión. La lectura
del alambre de deslizamiento en S nos da entonces directamente el voltaje de X.
En los potenciómetros de laboratorio el alambre deslizante ab no es uno
solo sino que consta de una serie de enrollamientos de un valor nominal
de 0.1 voltios y un alambre extendido de deslizamiento que cubre en total
0.1 voltioq. Por este procedimiento estos aparatos pueden usarse para medir
potenciales de 1.6 voltios hasta 1 x lo-" voltios. E n potenciómetros más
voltios y para pequeíios valosensibles la precisión alcanza hasta 1 x
res de f.e.m. la precisión es de 1 x lo-' voltios. En este último caso se precisan galvanómetros muy sensibles.
CELDAS TIPO
Es esencial disponer de celdas tipo cuyo5 potenciales son reproducibles,
conocidos y constantes con cl ticmpo. T a r n b i h es necesario que sean reversible~,que no sufran efcctos permanentes por paso de corriente a su través
484 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
y que posean coeficientes de temperatura bajas para la f.e.m. Las celdas que
más se acercan a reunir todas estas propiedades son lar celdas tipo de Weston
no raturadas y saturadas.
La forma de la celda tipo de Weston saturada se muestra en la figu.
ra 12-3. Consiste de una vasija de vidrio en forma de H que contiene en
cada rama uno de los electrodos, y está totalmente llena con electrólito. El
Lacre
Figura 12-3. Celda tipo de Weston saturada.
contacto con el material activo se hace por medio de alambres cortos de
platino sellados en los fondos de las ramas. El electrodo positivo consiste
de mercurio cubierto de una pasta de sulfato mercurioso y mercurio. El
electrodo negativo, a su vez ccnsta de una amalgama de cadmio que contiene
del 12 al 14 por ciento de cadmio en peso. Sobre ambos electrodos se hallan
dispersos algunos cristales de CdSO, . 9'3 H,O, y la celda total se llena con
una solución saturada de sulfato de cadmio, que se sella con corcho o cera.
El propósito de los cristales sólidos de sulfato de cadmio es mantener
saturada la solución electrolítica a todas las temperaturas.
La operación de la celda tipo de Weston saturada depende de la reversibilidad de la reacción
Cd(s)
+ Hg,SO,(s) + 8-3 H,0(1) = CdSO, . -83 H,O(s) + 2 Hg(1)
(7)
La reacción está escrita como tiene lugar como fuente de corriente, en sentido
contrario señala el paso de la misma por la celda.
La celda no saturada de Weston es análoga a la saturada con excepción
de los cristales de sulfato de cadmio que no existen, y el eloctrólito es una
solución saturada únicamente a P C . A todas las temperaturas mayores que
ésta, el electrólito se encuentra no saturada respecto al CdSO, . $5 HnO.
Las celdas de Weston cuando se preparan convenientriricnte y no se
someten a ningún abuso conservan sus potenciales durante muchos años. La
Celda de la reacción y fuerza electromotriz 485
celda saturada de Weston, o como se conoce ordinariamente la celda normal
de Weston, se emplea usualmente en los laboratorios como un patrón de
fuerza electromotriz. Su potencial a cualquier temperatura t°C, en voltios
internacionales,' está dado por la ecuación
El potencial de la celda saturada es de esta manera 1.01830 voltios a 20°C
y 1.01807 a 25'C. La no saturada se emplea únicamente como un estándar
secundario, posee un coeficiente de temperatura menor que la saturada, y
tiene un potencial próximo a 1.0186 voltios a 20°C.
REACCION EN LA CELDA Y FUERZA ELECTROMOTRIZ
Al estudiar celdas es necesario determinar no sólo la f.e.m., sino también
la reacción que las produce. La naturaleza de la reacción que procede en
una celda se deduce de la manera en que se deben conectar sus electrodos
con la estándar a fin de losrar el balance del potenciómetro. Como este
balance se losra sólo cuando están en oposición entre sí, se deduce que e1
electrodo conectado al lado negativo de la celda estándar es negatiuo, miuntras que el conectado al positivo es positi~,o.Y como el electrodo negativo
contiene un exceso de electrones respecto al presente en el positivo, los
electrones tienen que fluir por el circuito externo desde el electrodo necatiuo
al positiuo.
Una vez que se conoce el sentido de ese flujo, el proceso responsable de
la emisión de electrones en el electrodo negativo y de la toma de aquéllos
en el electrodo positivo se obtiene un panorama acerca de la naturaleza de
los materiales electródicos en base a nuestros conceptos ordinarios de la oxidación y reducción. El estudiante conoce que cualquier reacción que cede
electrones es de oxidación, mientras que cualquier otra que los capte con
la disminución consiguiente de la valencia positiva es una reacción de reducción. De aquí, que en el electrodo negativo tiene lugar la oxidación y la
reducción se verifica cn el electrodo positiuo. Al sumar las reacciones de oxidación y reducción resulta la de la celda.
La miincra de obtener ésta la ilustraremos mediante un ejemplo. Considcreinos una celda compuesta de un electrodo de cinc sumergido en una
solución de sus iones cuya actividad es la unidad y otro de cadmio en sus
iones, cuya acti~idades la unidad también; o de otra manera,
Como aún los datos de la literatura química dan l a fuerza electrornotriz en
voltios intcrnacionalcs, no haremos ningún intento d e convertir los valores dados
en este libro en voltios absolutos.
486 Capítuio 12: Celdas electroquímicas
,
L<!,i
A 25OC se encuentra, con la ayuda de un potenciómetro, que esta celda posee
una f.e.m. de Ezsoc= 0.3590 voltios y que el electrodo de cinc es negativo.
De aquí que el flujo de electrones por el circuito externo debe proceder
del electrodo cinc al de cadmio, y en consecuencia tiene lugar una oxidación
en el de cinc y una reducción en el de cadmio. Es obvio que el único proceso
de oxidación posible en el electrodo de cinc es
y la reducción en el electrodo de cadmio es
La reacción total de la celda es, entonces
Zn(s) f C d + + ( a = 1 ) = Z n + + ( a = 1) f Cd(s)
(10)
y esta reacción da una fuerza electromotriz de & = 0.3590 voltios a 25'C.
Es importante tener en cuenta que designar una fuerza electromotriz sin
la reacción que la origina no tiene significado, lo mismo que ocurre con la
edad cuando no se especifica el individuo que la posee. Para claridad total
cada f.e.m. debe ir acompañada de la reacción a que se refiere, así como
del establecimiento de la naturaleza de las fases, sus concentraciones, y
temperatura.
CONVENCION RESPECTO AL SIGNO DE LA F.E.M.
El trabajo eléctrico realizado por la reacción que produce una fuerza
electromotriz y proporciona cierta cantidad de electricidad Q, es QE. Por
cada equivalente que reacciona, Q es igual a un faradio, 7, y de aquí que
cuando son n los que participan, resultará Q = n?. Por lo tanto, el trabajo
eléctrico obtenido de una reacción cualquiera que produce n7 culombiar de
electricidad bajo un potencial E es
Trabajo eléctrico neto = n3,E
Pero cualquier trabajo realizado por una celda va acomparíado forzosamente
de una disminución de la ener,nia libre que tiene lugar dentro de la celda.
Además, cuando el trabajo eléctrico cs nadximo, como ocurre cuando la
celda opera reuersiblemente, éste y la disminución en energía libre, -AF,
deben ser iguales. Obtenemos por tanto:
de donde vemos que la f.e.m. reversible de cualquier celda está determinada
por la variación de energia libre de la reacción que tiene lugar en la misma
celda. La ecuación (11) es un "puente" entre la termdinámica y la electror*
Convención con respecto al signo de la f.e.m.
487
+mica, y gracias a ella es posible la evaluación de diversas propiedades
termodinámicas si se miden las fuerzas electromotrices.
En el capítulo 6 seíialamos que cualquier reacción espontánea a temperatura y presión constante tiene un valor negativo de energía libre, para
una no espontánea 3 F es positiva, y en el equilibrio AF = O. En vista de lo
cual, se deduce a partir de la ecuación (11) que para cualquier reacción
espontánea E será positiva; negativa para una no esponthea, y cero en el
equilibrio. En la tabla 12-1 se presentan brevemente todas estas relaciones,
las cuales indican que para que haya conformidad entre la f.e.m. y aF es
preciso prefijar el signo apropiado a la espontaneidad de cada proceso.
T ABLA 12-1. Relación entre Iw signos
~
Y
E
Reacción
AF
E
Espontánea
No espontánea
+
-
+
O
O
Equilibrio
Los valores de las fuerzas electromotrices de todas las celdas bajo discusión corresponden a reacciones espontáneas, y por lo tanto para todas ellas
consideramos que es positivo. Sin embargo, no siempre se puede a priori
decir cuál de dos procesos posibles de una reacción es espontáneo, sino que
es necesario tener algún medio de predecir cuándo la f.e.m. medida es positiva. Con este fin estableceremos la regla siguiente: S i describimos una celda
de manera que el electrodo ne g ativo se encuentre e n el lado izquierdo y el
positim en la derecha, o de otra manera, que el flujo de electrones uaya de
izquierda a derecha por el circuito externo, la reacción deducida e n b m
a la oxidación-reducción descrita antes es espontánea, y la f.e.m. de la celda
es positiva.
Podemos ilustrar la aplicación de esta regla con la celda dada en la ccuación (9) la cual se ha escrito con el electrodo negativo en el lado izquierdo,
Y de aquí que la reacción deducida para la misma, ecuación 10, es espontinra. En estc raso ti,",
0.3590 voltios, y por tanto r1 proceso interso, esto es la reacción
-+
no es espontánea, y el valor de la fuerza electromotriz a 25°C será E,,ec =
- 0.3590voltios. Esto s i , ~ i f i c qiie
a a fin de llevar a cabo la reacción de la
e<uación ( 1 2 ) es prcciso aplicar a la celda una difcrencia de potencial no
mriror de 0.3390 voltio? y en lugar de obtener un trabajo eléctrico, debemos
s~iiiiinistrarlopara qiie proceda la rcacción.
488 Capitulo 12: Celdas electroquímicas
POTENCIALES ELECTRODICOS SIMPLES
Cualquier reacción electroquímica simple es suma de otras dos, una es
de oxidación, y la otra de reducción. Análogamente cabe pensar que la
fuerza electromotriz de cualquier celda está constituida por los potenciales
electródicos s i m j h s , cuya suma algebraica es la f.e.m. total de dicha celda.
Sólo las diferencias de potencial entre los dos electrodos son medibles
experimentalmente. Para determinar directamente los potenciales de los
electrodos simples sería preciso acoplarlos con uno de valor cero. Pero,
como n o se conoce a ninguno con tal potencial debemos establecer arbitrariamente un electrodo tipo al cual podamos referir los demás. Por esta
razón definimos como fuerza electromotriz de referencia la del electrodo
tipo de hidrógeno cuyo potencial es cero a cualquier t e m p e ~ a t u r a .Este se
halla constituido por una pieza de platino rodeada por gas hidrógeno a la
presión atmosférica y sumergido en una solución de sus iones cuya actividad es la unidad. Más adelante se dan detalles de la teoría y operación
de este electrodo.
A causa de las dificultades experimentales involucradas en la preparación y uso del electrodo tipo de hidrógeno, los secundarios de referencia
han sido comparados con los primeros y se utilizan ampliamente. Entre ellos
tenemos a los tres de calomel, cuya f.e.m. depende del proceso espontáneo
con respecto a la reacción del electrodo de hidrógeno.
Aquí x es 0.1 y 1 N de cloruro potásico en el caso de electrodos de calomel 0.1 y 1 N, y es una solución saturada de dicho cloruro en el caso del
electrodo saturado de calomel. La figura 12-4 muestra a una forma de
éstos constituido de una vasija de vidrio A con una rama lateral B para facilitar el contacto eléctrico y la rama C de inserción m una solución cualquiera. En el fondo de A se encuentra sellado un alambre de platino sobre
Figura 12-4.
lornrl.
Electrodo de ca-
,
Potenciales electrolíticos simples
489
el cual a su vez se coloca una capa de mercurio puro, una pasta de mercurio
v calomel, y finalmente una solución adecuada de clornro potisico con
calomel de manera que alcance a llenar la rama C. Las concentraciones
de cloruro potásico en los electrodos de calomel 0.1 y 1 N y saturados tienen
estos mismos valores según el caso correspondiente.
En este último electrodo se colocan también algunos cristales de cloruro
potásico sobre el mercurio y la pasta de cloruro de mercurio a fin de preservar la solución saturada a todas las temperaturas.
Los potenciales de los diversos electrodos de calomel dependen en cada
temperatura de la concentración del clomro potásico con que se llenan. En
la tabla 12-2 se dan los potenciales de estos electrodos como una función
T ABLA 12-2.
Electrodo
Símbolo
Potenciales de los electrodos dc calomelano
F.E.M.
Calomel 0.1 N Hg 1 Hg,Cl,(s), E = 0.3338 7 x 1 0 - s ( t - 25)
KCI(O.1 N )
F21~0
Reacción
+
0.3338 Hg,Cl,(s)
2 4=
2 C1- (O 1 N )
2 Hg(1)
+
+ 2 8=
Calomel 1 N
Hg 1 HsICl,(s), E = 0.2800 0.2800 Hg,Cl,(s)
2 4 x 10-'(t - 2 5 )
KCI(1 N )
2 Hs(l)
Calomelano
saturado
Hg 1 Hg,Cl,(s), F = 0.2415 0.2415 Hs,Cl,(s) + 2
=
KCI (sat'd )
7 6 x l O - 4 ( t - 25)
2 Hg(1) + 2 C1- (satd.)
+ 2 C l ( 1N)
e
de la temperatura, la f.e m. a 25'C, y las reacciones correspondientes. La
k m . máxima se alcanza con el calomel 0.1 N y disminuye con el incremento
de concentración. Además posee el coeficiente temperatura de fuerza electromotriz mínimo, y el máximo corresponde al electrodo de calomel saturado.
La figura 12-5 nos muestra la manera de acoplar estos auxiliares de
referencia con otros elcctrodos para formar celdas. Aquí A es el electrodo
490 Capítulo 12: Celdas electroquírtúcas
de calomel de referencia, B otro simple desconocido, y C un puente salino
que permite el contacto cl&ctrico entre A y B. El puente salino consta
usualmente de un vaso lleno con una solución saturada de cloruro potásico
ó 1 S, en la cual se hallan sumer~idoslos brazos de los electrodos. El contacto eléctrico en el potenciómetro se hace mediante los alambres D y D'.
CALCULOS DE LOS POTENCIALES
DE ELECTRODOS SIMPLES
De las k m . de las celdas que comprenden varios electrodos en combinación con los de referencia se calculan fácilmente los potenciales de los electrodos simples. Para ilustrar el procedimiento consideremos primero la celda
que consta de un electrodo de cadmio-ion cadrnio y calomel 1 N. En esta
celda se encuentra que a 25'C & = 0.6830 voltios y que el electrodo de
cadmio es necativo. En consecuencia, el electrodo de cadmio efectúa la reacción de oxidación
Cd(s) = C d + + ( a = l ) + 2 0
mientras el de calomel lleva a cabo la reducción
Hg,Cl,(s) f 2 8 = 2 Hg(1)
+ 2 C1-(1 N )
Para este último p m e s o la tabla 12-2 enseña que la f u e n a electromotriz
= 4-0.2800 voltios. De aquí
a 25'C, es de
+
& = Eca E c
0.6830 = ECd i0.2800
EcCi= 0.4030 voltios
,
Por lo tanto la reacción 1 la f.e.m. correspondiente a 25'C en el caso
del electrodo Cd/Cd+ ( a = 1) es
+
Como segundo ejemplo cousideremos la celda
que consta de calomel 1 N y un electrodo dc cobre sumergido en una s0Iución de iones cúpricos cuya actibidad es la unidad. A 25°C la f.e.m. de esta
celda es E = 0.0570 voltios, el electrodo de calomel es negatiuo, y en consecuencia en él debe tener lugar una owidació~l,es decir,
2 Hg(l)
+ 2 ('1#
.
( 1 N) = lIg.Cll(s) -1- 2 O
,
Cálculo de las f.e.m. 491
y la fuerza electromotriz de oxidación será E, = -0.2800 voltios. La reducción correspondiente en el electrodo de cobre involucra la reacción siguiente:
con un potencial de electrodo simple Ecu. Entonces resulta,
y para el electrodo C u / C u + +( a = 1)
CALCULO DE LAS F.E.M. DE LAS CELDAS A PARTIR DE LOS
POTENCIALES DE ELECTRODOS SIMPLES
Si disponemos de los potenciales electródicos simples, así como de sus
reacciones, los cálculos pueden hacerse a la inversa para predecir las f.e.m.
y las reacciones de las celdas. Así, supongamos que se desea conocer la reacción y la f.e.m. a 25OC de la celda
C d [ C d + + ( a = l )j C u + + ( a = l ) I C u
(16)
y que la hemos descrito correctamente, es decir, el electrodo de cadmio es
negativo. Entonces, para la oxidación del electrodo de cadmio tenemos
Cd(s) = C d + +( a = 1)
+2 8
= 0.4030 voltios
De nuevo, para la reducción del electrodo de cobre resulta:
Al sumar las reacciones de los electrodos simples y sus potenciales, encontramos
Cd(s1
C u + + ( a = 1 ) = C d + + ( a = 1)
Cu(s)
(1%)
+
+
Y para la f.e.m.
Eceiaa
+
= EC<I Ecu
= 0.4030
0.3370
= f0.7400 voltios a 25%
+
(lyb)
Como la f.e.m. calculada es positiva, la suposición hecha con respecto
a la polaridad de los electiodos es correcta, y la reacción de la celda como
esti dada es espontinea.
Por otro lado, dc hahcr siipursto que el electrodo dc cobre de la ccuación (16) era negatibo, &te Iiubiera llevado a cabo una reacciúii de oxidación
C u ( s ) :C u + + ( a 1)
2O
-
+
w
492 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
con una f.e.m. i p a l a E?,, = -0.3370 voltios; el electrodo de cadmio sufnría entonces la reducción
con una f.e.m. ECd-0.4030 voltios; y entonces encontraríamos para la celda,
la reacción y la f.e.m.
Cu(s) + C d + + ( a = l ) = C u + + ( a = l ) + C d ( s )
E,.Piaa
= -0.7400 voltios a 25'C
(18)
La ecuación (18) revela que como E r p i n es
r negativa, la reacción en la forma
escrita no es espontánea, y en consecuencia fue hecha una suposición errónea respecto a la polaridad de los electrodos. Todo lo que se precisa para
rectificar la situación es invertir la reacción escrita en la ecuación (18) y
cambiar el signo de EFeiaa Entonces tenemos una reacción espontánea y su
fuerza electromotriz la dan las ecuaciones (17a) y (17b).
RESUMEN DE REGLAS
Antes de proseguir, resumiremos las diversas rcglas introducidas con
respecto a las reacciones y fuerzas electroniotrices de las celdas. Estas son:
1. Cualquier rpacción de una celda es la .suma de las de los electrodos sirnples como tienen lugar e n ellos.
( a ) E n el electrodo ncgatiao la reacción es una oxidación.
( b ) En el electrodo positiuo la reacción es una reducción.
2. La f.e.m. total de la celda es la suma algebraica de los potenciales electródicos simples con tal que cada f.e.m. vaya con el signo correspondiente
a la reacción, en la forma que tiene lugar en cada electrodo.
3. Si se escribe una celda cualquiera con el electrodo negatiuo c n e1 lado
izquierdo, de manera que los electrones fluyen por el circuito externo
dcsdc la izquierda a la derecha, la reacción de la celda deducida por la
regla ( 1 ) scrá la de un proceso espontáneo, y la f.e.m. deducida por la regla ( 2 ) para la celda scrá y o s i t i a .
4. Si hacemos una stiposición falsa respecto a la polaridad dc los electrodos,
la regla (3) dará una f.e.m. negatiua que corresponde a una r~acciónno
'
espontánea. Para obtener la reacción espontánea su f.e.m., todo lo que
se precisa hacer es invertir la reacción y carnhiar el signo de la f.e.m. sin
cambiar su magnitud.
Siguiendo fielrnentc estas reslas cl estudiante witarli coiifiisioric~en rela.
ción a los sicnos v reacciones.
,
Termodinámica y f.e.m. 493
TERMODINAMICA Y F.E.M.: AH Y AS
DE LOS DATOS DE LA F.E.M.
De acuerdo con la ecuación ( 3 6 ) del capítulo 6, el cambio de energía
libre, AF, está relacionado con la variación de entalpía, AH, por la ecuación de Gibbs-Helmholtz,
AF
- AH
= T
a(AF)
P
(19)
De nuevo, la relación fundamental entre la f.c.m. y AF es
AF
=
-n5&
(11)
que por diferenciación respecto a la temperatura nos da
Si ahora sustituimos las ecuaciones ( 2 0 ) y ( 1 1 ) en la (19) hallarnos para
La ecuación (21) permite el cálculo del calor de reacción a partir de la
f.e.m. medida y del coeficiente de temperatura de la f.e.m. de la reacción,
o ( d & / a T ) pa partir de AH y E. Usando esta ecuación, AH sigue en julios
cuando E y 3 se dan en voltios y culombios respectivamente, mientras que
AH debe reemplazarse en julios para obtener & cn voltios, ó ( a & / a T )en
~
voltios por 'K.
Al sustituir la ecuación ( 2 0 ) en la ( 1 9 ) nos da
Por lo tanto, para cualquier reacción electroqiiimica AF puede igualar a
AH sólo cua~:do (3&/OlT)p= O. Además, como
la comparación de las ecuaciones ( 2 2 ) y ( 2 3 ) enscña que
494 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
Con la ayuda de la ecuación (24) el cambio de entropía de una reacción se
calcula fácilmente a partir del coeficiente de temperatura de la fuerza eiectromotriz.
TERMODINAA~ICA D E LOS POTEXCIALES ELECTRODICOS
Los potenciales de los electrodos simples y de las celdas están detcrrni.
nados no sólo por la naturaleza dc los constituyentes electródicos sino también por la temperatura y las actividades de las soluciones empleadas. La
dependencia d e las fuerzas electromotrices de las últimas variables mencionadas es deducible tennodinámicamente. En una reacció~~
cualquiera tal
como
a A + b B f ... = c C + d D f . . .
(25)
el cambio de energía libre, AF, como función de las actividades iniciales de
10s reactivos, y la final de los productos, viene dada por la ecuación (64)
del capitulo 6, que en este caso es
~ q u í los
, valores de a del numerador son las actividades de los productos, y
los del denominador de los reactivos; AFo, el cambio de energía libre tipo,
es la variación que acompaña a la reacción cuando las actividades de los
productos y reactivos son todos iguales a la unidad. Si sustituimos en la
ecuación (26) A F = -nFE, y definimos &O por
= -n5&O
(27)
donde &O es el valor de & correspondiente a AF", la ecuación (26) se transforma en
AFO
L a ecuación (28) da el potencial de un electrodo cualquiera o celda
como una funci6n de las actividades iniciales y finales. Ello demuestra que
la f.e.m. esti determinada por las actividades de las especies a reacción, la
t~mperaturay por & O . Puesto que AF' es una constante dc la reacción a
cicrta temperatura, Eo debe serlo tambiCn y característica del electrodo
o celda. Es en cfccto la f.e.m. del electrodo o cclda cuando todas las activirlarles son la unidad, Eo se denomina el potencial estándar o t i f m del electrodo o cclda cn cucstiún.
,
Tennodinámica de los potenciales electródicos
495
Los potenciales dc los electrodos tipo a 2jCC para cierto número de
ellos evaluados por los métodos a que haremos rcfercncia más tardc, sc dan
en la tabla 12-3. Se incluyen también las reacciones de los electrodos. En
cada caso el s i p o de la f.e.m. se refiere a la rcacción de oxidación. Antes
de usar estos valores de Eo es necesario primero avcricuar si la rcacción
del electrodo tal como acontece e n la celda particular es de oxidación o
reducción.
Los valores de &O tabulados corresponden directamente a una oxidación
y para los de reducción debe invertirse el signo. Así, para un proceso tal
T ABLA 12-3,
Potenciales de electrodos estándar a 25'C en las reaccioncr de oxidación
Eléetrado
Reacción dcl electrodo
+
G" i v o i , i n < ~
+
~ g ( s ) 1- = A ~ I ( S ) e
Sn(s) = Sni+ + 2 e
Pb(2) = ~ b ++
' 2e
H d g , 1 a t m ) = 2 H+ 2 e
Ag(s) Br- = AgBr(s) e
+
+
+
+
Fe++=Fe+'+ + e
A ~ ( s=
) ~ g ++ e
+
2 1- = L(S)
2e
2 Hg(1) S O ; = Hg,SO.(s)
2 Br- = Br2(l)
+2 e
+2 8
496 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
+
+
como K ( s ) = K +
6, E;,,, = +2.9241 voltios, pero si K + 8 = K ( s )
= -2.9241 voltios. Análogamente, para Cu(s) = C u + + 2 8 , E:,.,
- -0.337
voltios, mientras que para C u + + 2 8 = C u ( s ) , &O,,~c =
+0.337 voltios.
En la ecuación (28) el factor (2.3026 R T ) 13 es una constante para
una temperatura dada. Para evaluarlo, R debe tomarse en julios, es decir,
&o,.
+
+
En la tabla 1 2 4 se dan los valores de esta cantidad para ciertas temperaturas.
Una vez que dispone~nosde los distintos valores de Ea, éstos se utilizan
para calcular los potenciales de electrodos simples. Específicamente, supongamos que se busca el valor de la f.e.m. del electrodo de cinc
a 25OC en una solución donde la actividad iónica es 0.1.
Para la reacción de oxidación en este caso tenemos
y de aquí que por aplicación de la ecuación (28) obtendremos para el potencial del electrodo simple EZ,,
Para esta reacción n = 2, ai,-+ = 0.1 y ai, = 1, puesto que el cinc es un
sólido.
TABLA 12-4. Valores de (2.3026 R T ) / 7
a diversas temperaturas
I
-+
CC
(2.3076 R T ) /7
O
1O
15
0.054195
0.056180
0.057172
Ahora a 25"C, (2.3026 Ri')/Y = 0.05916 y eri cl ~iruccsode oxidación
0.7618 voltios. .4l sustit~iircrtas cantidades
la expresiún de &m
Elrn
eiechomotrices de las celdas 497
La ecuación (28) y las fuehallamos que
= +0.7618
En.
-
+
0.05916
0.1
logm 1
2
= 0.7618 0.0296
= 0.7914 voltios
Sin embargo, cuando la reacción es de reducción
la ecuación da para Ez.
En el caso de reducción
E i n = -0.7618, y por lo tanto,
Ez, = -0.7618 - 0.0296
= -0.7914 voltios
es decir, el potencial es el misnm que antes pero de sigilo opuesto.
LA ECUACION (28) Y LAS FUERZAS ELECTROMOTRICES
DE LAS CELDAS
Consideremos ahora la celda
Zn ! Zn++(az,++)II C]-(%I-), HgXL(s) I Hg
(29)
en la cual el electrodo de cinc es negativo, y efectúa la reacción de oxidación
Zn(s) = Z n + +(aZ,,*)
+2O
(304
Para la cual la f.e.m. del electrodo vale
La reacción de reducción en el electrodo de calomel es
Hs,Cl2(s)
+ 2 O = 2 Hg(l) + 2 C1- ( a c , - )
Y rl potencial del electrodo simplc
cs
í3W
498 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
m*
Por suma de las ecuaciones (30a) y (31a) hallamos que la reacción de la
celda es
Zn(s)
+ Hg,Cl,(s)
= 2 Hg(1)
+ Z n + +(azn++)+ 2 C1- (aci-)
(32a)
y de forma análoga por adición de las ecuaciones (30b) y (31b) se deduce
que la f.e.m. de la celda es
En vez de aproximarnos a la f.e.m. de la celda por medio de los potenciales de electrodos simples, es posible aplicar la ecuación (28) directamente
a la reacción de la celda dada en la ecuación (32a). Si lo hacemos asi,
hallamos
E = E:,,,
RT
- - 1n (a~,++a;,.)
(33)
donde E:,,,,
es el potencial tipo de la celda. Al comparar las ecuaciones
(32b) y (33), que deben ser idénticas, encontramos E:,,,, =E;" f Cc;
esto es, que el t'alor d e Eo de la celda es la suma de los ualores de Eo de los
electrodos que la componen. Esta relación,
se aplica a una celda cualquiera. En consecuencia, en cuanto conozcamos
las f.e.m. de los electrodos conoceremos también la de la celda, y la ecua-,
ción (28) puede aplicarse directamente a la reacción global de aquélla.
Al usar la ecuación (34) a cada electrodo estándar debe prefijarse el
signo correspondiente a la reacción de la manera en que se verifica en la
celda. Así, la del electrodo de cinc en la ecuación (29) es una oxidación, Y
por 10 tanto
= f 0.7618 voltios a 25% La reacción en e1 electrodo de
calomel es de reducción, y por lo tanto EC, = +0.2680 voltios. En consecuencia, E:,,,,
es
E:,,,, = 0.7618 f 0.2680
= 1.0298 voltios
POTENCIALES ESTANDAR Y CONSTANTES DE EQUILIBRIO
Las f.e.m. de los electrodos tipo y de las celdas pueden ntilizarse para
obtener las constantes de equilibrio. En efecto, de acuerdo con la ecuación (27),
en cualquier proceso electroquímico vienc dada por
Potenciales estándar y constantes de equilibrio 499
I
l
Pero aFO está relacionada con la constante de equilibrio K. del proceso
mediante la ecuación
AFO = - RT ln K,
Al igualar estas dos expresiones, resulta
-n?EO = - RT ln K,
y de aquí
RT
Ea=-InK,
n?
(35)
Por medio de la ecuación (33) podemos evaluar K, a partir de E",
o viceversa si conocemos el valor de K,. Así, en la reducción de los ianes
estannoso por el talio, Ea = 0.196 voltios a 25°C. Para este proceso la constante de eauilibrio es:
/
Como K, en este caso vale
donde las actividades son las de equilibrio; esto significa que si adicionamos
talio a una solución de iones estannosos, la reacción procederá alcanzándose
el equilibrio cuando la actividad de los iones taliosos se hace igual a
=
=
1
K. a;:++
2.0 X lo"::++
y en estas condiciones ya no se verifica ninguna acción química posterior.
CLASIFICACION DE LOS ELECTRODOS
En 'el trabajo electroquímico las celdas de que se dispone comprenden
diversos electrodos según el propósito que se pretende. Los grupos más importantes son cinco:
1.
2.
3.
4.
5.
Electrodos dc metal-ion metálico.
Electrodos de amalgama.
Electrodos de gas.
Electrodos de metal-sal insoluble.
Electrodos de oxidación-reducción.
Ahora procederemos a discutir cada uno de cllos.
I
500 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
<,I
ELECTRODOS DE METAL-ION METAL
En este grupo se clasifican aquellos electrodos de un metal en equilibrio
con una solución de sus iones, y se han descrito en detalle con anterioridad.
Como ejemplos podemos señalar a los de cobre, cinc, cadmio y sodio. Todos
ellos operan según la reacción general siguiente:
(36)
M=M+"+n€?
para los cuales la ecuación del potencial electródico está dada por
Cada uno de estos electrodos es reuersible respecto a sus propios iones,
es decir, su potencial es sensible y condicionado a las actividades de sus
iones en solución donde se encuentran inmersos. Así, el electrodo de cinc es
re\ersible a los iones cinc, el de hierro a los ferrosos, el estaño a los estannosos, etcétera.
ELECTRODOS DE AMALGAMA
Es práctica usual sustituir a los metales puros por sus amalgamas, es
decir, soluciones del metal en mercurio, en el caso de los electrodos de metal-ion metálico. Las amalgamas de los metales más activos que el mercurio
se comportan esencialmente como lo hacen los metales puros, su única
diferencia es que la actividad del metal disminuye por la dilución del mercurio. Estos electrodos de amalgama se prefieren con frecuencia porque el
equilibrio se establece más rápidamente que cuando se utilizan los metales
puros, y porque ademis son más fácilmente reversibles. Con metales como
el sodio, potasio, o calcio la actividad en las soluciones acuosas es demasiado
grande para usarlos directamente. Sin embargo, al amalgamar estos metales,
la actividad disminuye tanto que permite mediciones aún en presencia de
agua. Existe todavía otro factor que favorece el empleo de amalgamas Y
es que las impurezas causan una conducta impredecible en el caso de 10s
metales puros incluso cuando se encuentran en cantidades muy pequeñas,
se diluyen con frecuencia por la amalgamación para dar resultados satisfactonos y reproducibles.
Como un ejemplo de los electrodos de esta naturaleza podcmos señalar
a la amalgama de plomo, constituida. por amalgama de este elmento que
representamos en la escritura por P b ( H g ) , sumergida en una solución
de iones plumboso, esto es, Pb(Hg) 1 P b + + (a,,..).
En estc electrodo la
reacción es
~ b ( 1 1 g )= P b + +( a p w ) 2 O
(38)
-
+
P
P
Electrodos de amaigama 501
y de aquí el potencial electródico E, está dado por
donde &O,, es el potencial electródico estándar correspondiente al plomo puro,
apb- es la actividad de los iones plumboso, y apb es la actividad del plomo
metálico en la amalgama. En general, apbno vale la unidad. El procedimiento usual es el de escribir la ecuación (39) así
donde E: es í:1 potencial tipo de la amalgama dada, a evaluar primero. Después, a fin de convertir ED, en &
,; , la f.e.m. de la amalgama se mide contra
el plomo puro cuando ambos se sumergen en una soiución de iones plumboso
de la misma concentración. Como en el caso del plomo puro la ecuación
del potencial de electrodo simple es
mientras que en el caso de la amalgama su valor está dado por la ecuación (40), la diferencia de potencial & entre los electrodos de plomo y amalgamados vale
En consecuencia, conocidos & y E: se evalúa E:,, y los datos de la f.e.m.
obtenidos con la amalgama se reducen a los de los metales puros. Así Carmody ericontró que para una amalgama de plomo particular que él utilizó
en sus estudios, el potencial del electrodo estándar de Pb(Hg) 1 Pb++ era
de 0.1207 voltios a 2 5 T , mientras que la f.e.m. de una celda constituida de
esta amalgama y plomo puro en una solución de iones plumboso era 0.0058
voltios. El potencial tipo del Pb 1 Pb+ + a 25'C resulta entonces
+
E;, = E
E:
= 0.0058
0.1207
= 0.1265 volt
2
Camody,
1. Am.
+
Chrm. Soc.. 51, 2905 (1929).
502 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
'
r
I.
.,
-
t .
0
ELECTRODOS D E GAS
Estos consisten de un gas que burbujea alrededor de un alambre u hoja
de metal inerte en una solución que contiene iones, a los cuales el gas es
revenible. La función de este metal que ordinariamente es platino platinado,
es facilitar el establecimiento del equilibrio entre el gas y sus iones, y servir de contacto eléctrico del electrodo.
En este tipo de electrodos se encuentra el del gas hidrógeno reversible
a los iones hidrógeno, el de cloro reversible a sus iones, y el electrodo de
oxígeno, cuya fuerza electromotriz depende de la actividad de los iones
oxhidrilo. Sin embargo, aunque los dos primeros electrodos pueden hacerse
reversibles, no se h a encontrado un material suficientemente adecuado para
que catalice satisfactoriamente el establecimiento del equilibrio entre oxígeno
y los iones oxhidrilo. Cualquier información precisa disponible del último
electrodo se h a obtenido no por mediciones directas, sino mediante cálculos
de las energías libres obtenidas de diversas fuentes.
La reacción fundamental del electrodo de hidrógeno es
Como la actividad del gas hidrógeno es igual a su presión, P,,, en atmósferas, cuando ésta es baja, el potencial del electrodo simple de este elemento
está determinado tanto por su presión alrededor del electrodo, como por la
actividad de los iones hidrógeno en la solución, es decir,
Pero E:., esto es, la f.e.m. del electrodo de hidrógeno a la presión de 1 atmósfera y actividad unidad de sus iones sirve de referencia en las mediciones
de la f.e.m. de todos los electrodos simples y se hace por definición igual a
cero a cualquier temperdtura. En consecuencia, la ecuación (43) nos da:
Además, cuando la presión del hidró~enoes 1 atmósfera, InP$:
tonces:
Ex? = -
RT
ln a=+
3
= O. En(45)
y el electrodo de hidrógeno se vuelve solo estrictamente dependiente de la
actividad de los iones hidrógeno en la solución, es decir, del pH. Este uso del
electrodo de hidrogeno para las mediciones del pH sc discutirá más tarde.
Electrodos de metal-sal insoluble 503
El de cloro presenta un comportamiento similar. En este caso la reacción
de reducción es
t Ci,(g, Pc,,)
f
8=C~-(~CI-)
y por lo tanto la f.e.m. vendrá dada por
Sin embargo,
(46)
I
no es cero, sino igual a 1.3595 voltios a 25%
ELECTRODOS DE METAL-SAL INSOLUBLE
Son cic una importancia extraordinaria en electroquímica y de gran uso.
En esta categoría se incluyen a los de calomel, plata-cloruro de plata, plomosulfato de plomo, plata-bromuro de plata y otros.
La característica común de estos electrodos es que todos ellos constan
de un metal en contacto con una de sus sales difícilmente solubles y una
solución que contiene el ion presente en la sal que n o es el ion metálico.
Por ejemplo, el electrodo de plata-cloruro de plata y sumergido en una
solución de iones cloro. De igual manera, e! electrodo de plomo-sulfato de
pLomo hien es plomo puro o amalgama de este último metal recubierto
con cristales de sulfato de plomo y rodeados por soluciones de sulfatos. En
todos los casos, estos electrodos son reuersibles a los demús iones dütintos
al n ~ e t a lfirescnte e n la sal imoluble. Así los electrodos de calomel y de platacloruro de plata son reversibles a los iones cloro, el de plomo-sulfato de
plomo a los iones sulfato, el de p!ata-bromiiro de plata a los iones bromo, etc.
La razón de todo esto puede verse en la discusión siguiente sobre el electrodo
de plata-cloruro de plata, que es muy típico dentro de este grupo.
Consideremos un electrodo de lata sumergido en una solución que contiene iones cloro saturada con C ~ O N ~ Ode plata. Si imaginamos que este
electrodo actúa como uno ordinario de metal-ion metálico, los iones plata
pasarán del electrodo a la solución según la reacción
Sin embargo, como la solución está saturada con cloruro de plata, la
introducción de ioncs de este metal trastornará los requisitos del producto
de solubilidad de esta sal. En consecuencia, a fin d e restablecer el equilibrio de solubilidad, los iones de plata tendrin que combinarse con los de
cloro para precipitar el cloruro de plata sólido de acuerdo con la relación
504 Capituio 12: Celdas electroquímicas
Además, como la reacción global es la suma de todos los procesos que acon.
tecen en el electrodo, será la suma de ( a ) y ( b ) , es decir,
Ag (S) f Cl- = AgCl(s)
+8
(40
En esta reacción la ecuación del potencial electródico es
y de aquí que este electrodo resulte revenible a los iones cloro.
De manera análoga se deducen las reacciones de los otros tipos de elecrrodos. Así hallamos para el de calomel
2 Hg(1) i2 CI- = Hg.C12(s)
+28
(50)
para el de plomo-sulfato de plomo
Pb(s)
+ SO; - = PbSO, (S) + 2 8
y para el electrodo de plata-bromuro de plata
Ag(s) f Br- = AgBr(s)
+8
(51)
(52)
ELECTRODOS D E OXIDACION-REDUCCION
Aunque toda reacción electmdica comprende una oxidación o reducción,
el término electrodos d e oxidación-reducción se emplea para designar aquéllos en los cuales la f.e.m. resulta de la presencia de iones de una sustancia
en dos estados diferentes de oxidación. Cuando se inserta un alambre de
platino en una solución que contiene los iones ferroso y férrico se encuentra que el alambre adquiere un potencial. Lo mismo ocurre con las soluciones de iones ceroso y cérico, estannoso-estánnico, manganoso-permangánico, etc. Las f.e.m. de estos electrodos surgen de la tendencia de los iones
en un estado d e oxidación, a pasar a otro segundo más estable. La función
del alambre de platino es simplemente "restablecer" el potencial correspondiente a esta tendencia 'hacia la disminución de energía libre, y servir
de contacto elktrico del electrodo.
La reacción general para todos los electrodos del tipo de oxidación-reducción se escribe así:
donde n, es la valencia en el estado superior de oxidación, n, en el inferior,
mientras que n = n , - n, es el cambio de ualencia que acompaña al proceso. A partir de la ecuación (53) se deduce que la ecuación de la f.e.m. es:
Celdas electroquímicas 505
es decir, que la f.e.m. de los electrodos de oxidación-reducción depende de
la relación de l a actividades de los dos iones. Así, para el electrodo férrico[erroso, designado simbólicamente por Pt 1 F e + ++, F e + + , la reacción es
y la f.e.m. del electrodo está dada por
En la tabla 12-3 se muestran los valores de
de este tipo a 25OC.
&O
para diferentes electrodos
CELDAS ELECTROQUIMICAS
Cuando se combinan varios electrodos, resultan dos clases de celdas, a
saber: ( a ) químicas, en las cuales la f.e.m. se debe a una reacción quimica
que ocurre en la celda, y ( b ) celdas de concentración, en que la f.e.m. es
debida al decremento de energía libre que acompaña a la transferencia de
materia desde una parte de la celda a otra. Además, cada uno de estos
tipos involucra unas veces y otras no de una junta liquida; o como usualmenté se dice, se trata de celdas con o sin transferencia. Con esta base Ilegamos a la clasificación siguiente de las celdas electroquímicas:
Celdas electroquímicas
*
Celdas químicas
Sin
transferencia
Con
transferencia
-
Celdas de concentración
Sin
transferencia
Con
transferencia
CELDAS QUIMICAS SIN TRANSFERENCIA
Para construir una celda química sin unión líquida o transferencia, deben
~eleccionarsedos electrodos y un electrólito de manera que uno de los electrodos resulte reversible al catión y el otro al unión del electrólito. Por ejemplo, si deseamos una celda sin transferencia y empleamos ácido clorliidrico
corno electrólito, debemos utilizar un electrodo reversible a los iones hidrógeno, es decir, el de hidrógeno, y otro reversible a los iones cloro, que puede
Ser tanto: la plata-cloniro de plata, el mercurio-cloruro mercurioso, o el
electrodo de cloro, todos los cuales son reversibles a este ion. Para un electrólito como el bromuro de cinc debemos emplear bien sea el bromo, merCiirio-bromuro mercurioso, o plata-bromuro de plata como electrodo para
los iones broma, y cinc para el otro electrodo.
506 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
Cuando es posible, se selecciona el electrodo más adecuado; si bien esta
elección determina la rcacción global de la celda y el valor de E', es carac.
terístico de todas las posibiiidades tales que dan la misma dependencia de
la f.e.m. de la celda con la actixidad del electrólito.
Como un ejemplo típico de las celdas químicas sin transferencia, ele$.
rrmos:
K í g , Pii,) HCl(airci), AgCi(s) 1 Ag
(57)
que consta de los electrodos de hidrógeno y plata-cloruro de plata en un
medio de ácido clorhídrico. Como estos electrodos son reversibles a los iones
del electrólito, pueden sumergirse directamente en el ácido para dar una
celda sin líquido de unión. La fuerza electromotri~total se compone entonces de las existentes en las interfases electrodo-solución.
E n la celda (57) el electrodo de hidrógeno es negativo, y obtenemos
para la oxidación en él:
De nuevo, para la reducción en el electrodo de plata-cloruro de plata tenemos
Al sumar ahora las ecuaciones (58a) y (59a) se deduce que la reacción de
la celda es:
mientras que la combinación de las ecuaciones (58b) y (59b) nos da su
f.e.m.. esto es.
En esta Última ecuación aaci, la a c t i ~ i d a ddel electrólito como un todo, ha
sido sustituido por su equivalente aH+ac,-.
La ecuación (60a) indica que la f.e.m. de esta celda resulta de una reacción química, esto es; la rcducción del cloruro de plata por el gas hidrD.
C1-) en solución.
geno para formar plata sólida y ácido clorliídrico ( H f
Como esta celda no posce ningún puente de iiniún liqiiida, constituye una
celda sin traiisfercncia. Adcrnás, la rciiacióri (60b) miirstra qric la f.e.m.
+
Celdas químicas sin transíerencia 507
de la misma depende de la actividad del ácido en solución y de la piesióu del
gas hidrógeno. Cuando este último es de 1 atm, como acontece usrialmerite
bajo las condiciones experimentales, la ecuación (60b) se reduce a
y la f.e.m. depende únicamente de la actividad del ácido clorhídrico en solución.
Por el procedimiento descrito antes se verifica fácilmente que
son las celdas químicas sin transferencia cuyas reacciones son
Finalmente, la f.e.m. en (62b) cuando la presión de hidrógeno es de
1 atm, vale
mientras que para (63b) & es
donde &:e,,
es la suma de los potenciales electródicos tipo del cadmio y
mercurio-sulfato mercurioso.
Las celdas químicas sin transferencia poseen una extensa aplicación en la
evaluación de los potenciales de los electrodos tipo de las celdas y elcctrdos
y en la determinación de los coeficientes de actividad de diversos electrólitos
a partir de las f.e.m. Para ilustrar el método, consideremos específicamente
a la celda representada en la ecuación (57), en la cual la f.e.in. cuando la
presión del hidrógeno es de 1 atmósfera, está dada por la ecuación ( 6 1 ) . El
~iroblemaes en estc caso el siguiente: ~ C ó r n oevaluar E ~ E ~ , s ,y, los coeficientes de actividad de las soluciones de ácido clorhídrico de diversas rnolaridades con una serie de medicioiies dc f.e.m., hechas en celdas como la de
la ecuación (571, cuando varia la concentración del ácido?
En ~xirnerlugar, la actibidad del ácido clorhídrico a una niolaridad m
coeficiente de actividad media y viene dada por la rxprcsión a,rc, =
con
508 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
mzr2. Al sustituir este valor de a~,1 en la ecuación (61) y ordenar los términos, resulta
Todas las cantidades del lado izquierdo de la ecuación (64) son determinable~experimentalmente, y por tanto y se calcula cuando se conoce
+
Para determinar esta última cantidad se grafica [Eceiaa (2 RT/
5,
esto es, la raíz cuadrada de la fortaleza ióniy la gráfica se extraca de la solución que en este caso es idéntica con
pola a
= 0. Para efectuar con seguridad esta extrapolación, se precisa ccnocer los datos de las f.em. de las soluciones diluidas. Así cuando m = 0,
y = 1, el último término del lado derecho de la ecuación (64) se hace
igual a cero, y el valor de la ordenada al extrapolar nos da inmediatamente
EA,.,,,,.
Conocida esta constante, la diferencia entre [&,,iaa ( 2 RTI3)
In m] y &irAECi
para cada valor de m nos da ( 2 RTIF) ln y, y por lo tanto y.
En la tabla 12-5 la columna 1 nos proporciona las molalidades de cierto
número de soluciones diluidas de ácido clorhídrico, y la columna 2 las f.e.m.
a 25'C obtenidas de aquéllas con las celdas en discusión. De aquí que la
cantidad [Eeeia. ( 2 R T / 3 ) In m] se obtiene por cálculo, y al graficar estos
valores contra Vm se encuentra uno de,,.,U&
a 2S°C igual a 0.2225 voltios cuando se hace la extrapolación d% = O. Usando este valor de &O,.,
&*,-A,C,.
7 ) ln m], contra
\/m,
~7
+
+
T ABLA 12-5.
Coeficientes de actividad del HCl a partir de las
f.e.m. de la celda H, 1 HCI, AgCl(s) 1 Ag a 25'C
&I,I~
'"HCI
(voltios)
Coeficiente de actividad
Y
SegGn D. A. Machnei, Principler of E l e c t r o c ~ e m i i t r y ,Reinhold Publishing Corporation, Nueva York, 1939, P g . 187.
P
,
Celdas químicac con transferencia
509
y los de Eielda y m en la ecuación ( 6 4 ) , se encueritran los coeficientes de
actividad del ácido clorhídrico señalados en la columna 3 de la tabla.
CELDAS QUIMICAS CON TRANSFERENCIA
Aunque también en este caso la f.e.m. resulta de una reacción química,
sin embargo su dispositivo electródico posee una unión líquida entre las
soluciones de los diferentes electrólitos. Las celdas de este tipo son muy
comunes; así citamos, por ejemplo, a las
que pertenecen a esta categoría. Al tratarlas hemos supuesto que la f.e.m.
total es la suma de los potenciales de los dos electrodos, lo cual aunque es
válido con cierto grado de aproximación no lo es exactamente, y en consecuencia se requiere una consideración mayor.
El contacto entre soluciones de concentración distinta, o de iones diferentes, o ambos, conduce a un potencial de unión Ej. Este surge de la difusión de los iones a través de la frontera entre las dos soluciones. Por causa
del gradiente de concentración que existe a través de dicha frontera, los
iones se difunden del lado de mayor concentración al de menor. Si ambos
migran con igual velocidad, tal difusión no producirá mayores complicaciones. Sin embargo, éste no es el caso general, sino que los más rápidos cruzan
la frontera a la cabeza de los más lentos y se origina una separación de
cargas que a su vez produce un potencial de unión que se mide experimentalmente y que junto con los potenciales de los dos electrodos aparece'en la
f.e.m. total de la celda. Con otras palabras, siempre que existe un potencial
de unión E,, la fuerza electromotriz no está dada por la relación E = El
E?, donde tiy E2 son los potenciales electródicos, sino que en su lugar vale
+
En lh mayoría de los casos los potenciales de unión no se pueden medir
separadamente. Por tanto, se han hecho diversos intentos para calcularlo^,^
Y llegar de ahí por medio de la ecuación ( 6 5 ) a la suma de los potenciales
de los electrodos correspondientes a la reacción de la celda. Sin embargo,
el progreso realizado en este sentido no es suficiente para permitir sin arnbi~üedadesel cálculo de El
Ez a partir de E. Por esta r a h n las celdas quíniicas con transferencia no son seguras para la evaluacibn e x a c t a de sus
propiedades termodiiiirriicas. No obstante, en condiciones experimentales
+
3 Veare D. A. M a ~ I n n e s , Pmtcipler of Electroche~iiiriry, I¿i,inhold I'ubliihing
C:orporatian, Nueva York, 1939, cnpitulu X I I I .
510 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
adecuadas, proporcionan una información valiosa, y se emplean con profu.
sión en las mediciones de pH, titulaciones conductimétricas, etc.
El medio más simple de formar una unión líquida entre dos soluciones es
ponerlas en contacto en un tubo sin causar una mezcla indebida. Aunque
cuando se preparan con meticulosidad estas uniones estáticas permanecen
bien marcadas y dan potenciales reproducibles, el dispositivo de unión fluida
es más satisfactorio. En este último caso las dos soluciones se ponen en
contacto como dos corrientes que emergen en un tubo común y fluyen
hacia fuera. Por este procedimiento el límite entre las dos soluciones se
puede mantener continuamente renovado y marcado.
Sin embargo, el tipo de unión más frecuente es el puente saiino. En
este caso, como se seiiala en la figura 12-5, se interpone entre las dos soluciones a otra ba5tante concentrada, usualmente de cloruro de potasio 1 N
o saturada. Con este puente salino se reduce o minimiza el potencial de
unión. La forma rn que esto se lleva a cabo, no aparece claro, pero se supone asociado con el hecho de que los dos iones en el cloruro de potasio
poFeen igval velocidad, y operan para dar potenciales de unión entre las dos
soluciones y el puente que son de signo opuesto, y de ahí que se cancelan en '
cierto grado. Que ocurra una reducción de los potenciales de unión con
ayuda de los puentes salinos parece problemático y aún más si lo hacen
de manera que dicho? potenciales resulten despreciables. No obstante, efectivos o no, permanece el hecho de su extensa aplicación en los diversos
dispositivos electroquímicos.
En los cálculos que comprenden estas celdas se supone que un puente
salino elimina completamente el potencial de unión y que la f.e.m. medida
es simplemente la suma de los dos potenciales electródicos. Cuando se hace
caso omiso de E, es costumbre escribir dos líneas verticales entre las dossoluciones, de esta manera
Zn Z n + + ' 1 C d + + Cd
Por otra parte, cuando reconocemos la presencia de una unión líquida, se
coloca una sola línea, dc esta forma
Zn 1 Z n + + C d + + Cd
1,a característica de las celdas quí~nicascon transferencia es que involucran en sus ecuaciones de f.e.~n.la octirmidad de lo! ioxes en lugar de las
actividades del electrólito como un todo. Esto S U $ C I ~ que tales celdas Son
adeciiadas para la e~~sluación
de las actividades y coeficientes de actividad
de los iones particulares, pero no es exactamente el caso a causa de la incertidumbre del potencial de unión. En efecto, es conscnso ene eral qiie no
existe un mttodo termodinámico conocido q i r pfrnlita a k o m:is que ]a declcctrólito. Por CSa
terminación drl coeficiente de acti\idad mcdia dc
rarón, cuando se usan las fuerzas electromotrices <le 1:'s ~ c l d a sqiiimicas con
P
Celdas de concentración
51 1
transferencia para evaluar los coeficientes de actividad media de los iones
se sobreentiende que las cantidades evaluadas poseen sólo un significado
casi termodinámico. De nuevo al calcular las f.e.m. de dichas celdas a
partir de las molalidades y coeficientes de actividad, es prictica usual suponer que el coeficiente de actividad de un ion cualquiera es esencialmente
@al al de actividad media geométrica del electrólito y se emplea este
último. Con estas consideraciones en mente procederemos ahora a realizar
un cálculo específico.
EIEI.~PLO:Supongamos que se desea evaluar a 2j°C la f.e.m. de la
celda
Zn ZnCl,(m = 0.5) 1 CdSO,(m = 0.1) 1 Cd
donde los valores de m son las molalidades de las dos soluciones. En estc caso
,,-.
.
Como a,,,, = m,,++ . y,,+; y a
=m,,+,
y,,,,,, donde y es el coeficiente de actividad de los iones respectivos, la ecuación anterior puede escribirse así:
Ahora bien, a 2 5 T &O = 0.359 voltios r n esta celda. De nuevo para el
ZnC1, 0.5m, y = 0.376, mientras que para el CdSO, O.lrn, y = 0.137. Si
suponemos que los coeficientes dc actividad tienen los mismos valores
de y, encontramos
= 0.359 - 0.034
= 0.325 voltios a 25'C
CELDAS DE CONCENTRACION
De manera distinta que las celdas químicas; cuya f.e.m. surge de una
reacción, las de conccntraczón proccdr-n de u n a transferencia de materia
desde u n electrodo n otro c o m o consecuencia dc u n a diferencia dc c o n c m [raciún entre los d u i . Diferencia que surge a veces del hecho de que dos
electrodos iguales sumergidos en la misma solución pueden estar a una
concentración distinta, como en el caso de dos electrodos de h i d r ó ~ m oa
Presiones desi&es siimergidos en una misma soliición de sus iones, esto es:
o dos
amalgamados de diferente coiiccntracióii siiiiwigidos en
512 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
una solución de iones metálicos, así
La diferencia de concentración puede también encontrarse no en los electrodos sino en las soluciones con las cuales se hallan en contacto. Así sucede
con
H,(g, 1 atm) 1 H + ( a , ) 1 H + (a,) 1 H,(g, 1 atm)
A s I A s + ( 4 I A g + ( a 2 )l Ag
En las dos primeras celdas mencionadas no hay líquido de unión presente,
y son por lo tanto sin transferencia. Por otra parte, las dos últimas comprenden un líquido de unión entre las dos soluciones de la misma especie
pero de concentración desigual, y por eso, se denominan celda con transferencia.
CELDAS D E CONCENTRACION SIN
TRANSFERENCIA
Para ver cómo surge una f.e.m. donde se encuentran dos electrodos iguales en concentraciones diferentes, pero el electrólito es el mismo para ambos, consideremos primero el caso siguiente:
En el electrodo de la i7quierda, la reacción de oxidación da
y, por 10 tanto; como
ELs = O
Análogamcnt~,para la rrducción en el electrodo del lado derecho, el Proceso es
&o = -
KT
P:"
I n 5
aH+
Al sumar las ecuaciones (67a) y (68a), sc drduce que la reacción dc la
celda es
Celdas de concentración sin transferencia
513
mientras que la f.e.m. de la celda que se obtiene por suma de las ecuaciones (67b) y (68b) es,
La ecuación (69a) muestra que la reacción de la celda comprende simplemente la transferencia de 0.5 moles de hidrógeno desde una presión P,
a otra de P, atm; es decir, que la reacción de la celda en un proceso espontáneo es una expansión del gas hidrjgeno. La ecuación (69b) enseña que
la f.e.m. que resulta de esta expansión depende sólo de las dos presiones y es
independiente de la actiuidad de los iones hidrógeno en que se encuentran
sumergidos los electrodos.
Corisidcremos ahora otra celda de este tipo, esto es,
Zn(Hg) (az, = a,)
1 Z n + +(a,,++) 1 Z n ( H g ) (aZ. = a,)
(70)
que consta de dos amalgamas de cinc con actividades a, y a2 inmrrsos en
una solución de aquel metal cuya actividad es az.*+. Análogamente a las
ecuaciones (38) y (39), la reacción del electrodo izquierdo es
Zn(Hg)(ai) = Zn++(az.**)
+20
(714
donde E, está dado por
Para la reducción en el lado derecho, tenemos
+
Zn++(az,,++) 2 @ = Zn(Hg)(a,)
donde
&O,> = -E;,.
(72b)
Entonces, para la reacción de la celda resulta
A partir de la ecuación (73a) resulta evidente que la f.e.m. de esta celda
se debe a la transferencia. del cinc desde la amalgama donde su actividad es
a, a aquélla cuya actividad cs a,. Adcmás, la ecuación (73b) muestra que
esta f.e.m. depende sdo de la relacibn de las actividades del cinc en las
514 Capíhilo 12: Celdas electroquímicas
dos amalgamas, y no interviene rn absoluto la actividad de los iones cinc
de la solución. En la ecuación de la f.e.rn. de la celda final no aparece &O.
Esto rs válido en todas las celdas de concentración. Por esta razón, podemos
concluir, que en este tipo de celdas E' es cero, y la ecuación de la f.e.m.
toma la forma simplificada siguiente
CELD.4S DE CONCENTRACIONES ELECTROLITICAS
SIN TRANSFERENCIA
Consideremos a una celda química sin transferencia, tal como
H 2(g, 1 atm) HCl(a,), AgCl(s) 1 Ag
(75a)
En este caso, la reacción que tiene lugar es
:H2(g, 1 atm)
4- AgCl(s) = Ag(s) 4- HCl(al)
(7jb)
.
y la f.e.m. de la celda, según la ecuación (61) vale
Para la misma celda pero con una actividad del ácido clorhídrico diferente,
esto es,
H,(c, 1 atm) 1 HCl(a,), AgCl(s) 1 Ag
la nacción es
t H?(g, 1 atm)
+ AgCl(s) = A%(s) f HCl(a,)
Si conectamos estas dos celdas en forma oput-ita entre sí, esto es,
la reacción global de la combinación será la diferencia entre las eciiacioncs
(73h) y (76b), esto es,
f H2(g, 1 atm)
+ AgCl(s)
-
f Hl (g, 1 atm)
Ag(s)
- AgCl ( S ) =
+ HCl(a,) - Ag(s) - HCl(a;)
HCl(a,) = HCl(a,)
í77b)
4
Celdas de concentraciones electrolíticas sin transferencia 515
De manera análoga la f.e.m. de (77a) seri la diferencia entre las ecuaciones (75c) y ( 7 6 ~ )De
. aquí
De acuerdo con la ecuación (77b) la reacción global que resulta de la
coiubinación dada en la ecuación (77a) es una transfercncia de un m01 de
&ido clorhidico de la solución por cada faradio arrastrado desde la celda,
donde la actividad es as a la solución donde la actividad es a,. En consecuencia, mientras que cada una de las celdas individuales que constituyen
la ecuación (77a) es una celda quimica, la combinación de las dos es una
de concentración sin transferencia en la cual la ,f.e.m. surfe de lar diferentes
concentraciones del electrólito. Para que esta f.e.m. sea positiva, la ecuación (77c) nos enseña que un debe ser mayor que a,; es decir, el proceso
de transferencia es espontáneo por el paso de electrólito de una solución
más a otra menos concentrada.
Las celdas de concentración de este tipo pueden disponerse a partir de
las de cualquier tipo químico sin transferencia. Por ejemplo, una de cloruro
de sodio resulta de la combinación
Na(Hg) / NaCl(a,), AgCl(s) 1 Ag-Ag ( AgCl(s), NaCl(a,)
/ Na(Hg)
? otra de sulfato de cinc de la siguiente
Talm celdas son con~enientespara la determinación de los coeficientes
de actividad de los electrólitos involucrados. Con este fin es práctica usual
mantener constante la concentración de uno de los electrólitos, y medir la
f.e.in. de las celdas de la segunda solución cuya concentración varía. Si
Para a, y\ a? en la ecuación (77c) hacemos las sustituciones a, = nl:y:
Y a2 = m%;, la expresión de E nos da
Como conocemos las molalidadcs, la mxación (78) ~ e r r n i t cla c\aluación
de la relación de los coeficicntc's dc actividad a una molalidad ciialqiiicrii m:
516 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
respecto al de referencia m,. De aquí que cuando disponemos de y, corres.
pondiente a m,, se deducen a partir de estas relaciones los diversos coefi.
cientes de actividad.
CELDAS DE CONCENTRACION CON
TRANFERENCIA
Como ejemplo típico de este grupo señalaremos
H2(%,1 atm) / HCl(a,) 1 HCl(a,)
1 H,(g, 1 atm)
(79)
que consta de dos electrodos de hidrógeno idénticos sumergidos en dos soluciones de ácido clorhídrico de diferente concentración. En este caso, la f.e.m.
total se compone de dos potenciales electródicos simples y el de unión E,.
Además, la reacción global es la suma de los dos procesos electródicos y
cualquier transferencia de material se hace a través de la unión. En un caso
como éste, donde los electrólitos que constituyen dicha unión son idénticos,
salvo en su concentración, es posible analizar los diversos procesos y obtener
una ecuación de la celda que tenga en cuenta el potencial de unión.
Para comprender cómo es posible todo esto, supongamos que el electrodo
del lado izquierdo de la ecuación (79) sea negativo, que será cierto si
a, > a,. Para un faradio de electricidad obtenido desde esta celda, la reacción en el electrodo negativo vale
y en el positivo
k H?(g, 1atm) = H+(a,) + 8
H+(a?)
+ 8 = f H,(g, 1 atm)
y de aquí que la suma de las reacciones de los dos electrodos es
,
Sin embargo, cuando los electrones fluyen externamente de i~quierda
a derecha, completarán el circuito al pasar a trau6s de la celda de derecha a
izquierda; esto es, cruzan el líquido de unión de derecha a iqiiicrda. La
corriente en la celda, está compuesta, desde luego, no por electrones libres,
sino de iones negativos, esto es CI-, que se despla~andesde la derecha hacm
la izquierda, y positivos, o H + , que se muei.en a traiés de la unión de irquierda a derecha. Si t. es el número de transferencia dc los iunes cloro^
entonces por cada faradio que cruza la celda se transportarán t. equivalentes
de ion cloro desde la solución de actividad a, a la de actividad a,; esto e%
tC1- (a,) = t.Cl(a,)
(SOb)
De nuevo, t+ = 1 - t. equivalentes de ion hidrógeno se transfieren de ]a
solución de actividad a, a la dc actiiidad a,, esto es,
( 1 - t.)H+(a,) = ( 1 - t.)H+(a,)
(804
4
Celdas de concentración con transferencia 517
Por esta r a ~ ó n a, fin de obtener la transferencia ncta de material debemos
sumar las ecuaciones (80b) y (80c) a la (80a). Así obtenemos para el proceso total de la celda
La ecuación (81) enseña que en la celda de concentración con transferencia pasan t. equivalentes de ácido clorhídrico desde la solución de actividad a2 a la de actividad a, por cada faradio de electricidad. Este resultado
contrasta con el mismo proceso en una celda de concentración sin transferencia, ecuación (77b), donde por cada faradio hay una transferencia de
un equivalente de clectrólito.
La aplicación de la ecuación de la f.e.m. al proceso establecido por la
ecuación (81) nos da
Por inserción de los coeficientes de actividad y molalidad, obtenemos
y de aquí que la f.e.m. de tal celda se calcule a ~ a r t i del
r conocimiento de
las molalidade?, coeficientes de actividad, y los números de trans$orte del
ion distinto de aquél $ara el cual los electrodos son reuersibles.
~cuacionesanálogas a las (81), (82a) y (82b) se aplican a cualquier
celda de concentración en la cual los electrodos son reversibles al catión.
Sin embargo, cuando los electrodos son rebersibles al unión, como en el
caso de la celda
la repetición del rawnamierito anterior nos enseña que la reacción dc la
celda es
tJICi(a,) = t+IIC(a,)
(84)
518 C a p í t d o 12: Celdas electroquímicas
Ahora bien, para que la reacción sea espontánea, a, debe ser mayor
que a,.
Como las celdas de concentración anteriores con transferencia involucran números de transporte en las ecuaciones de su f.e.m., si conocemos
éstas podemos calcular aquellas otras cantidades. Las ecuaciones (82b) y
(85) indican que lo que precisamos saber para este fin son las f.e.m. de las
celdas y los coeficientes de acti\.idad de los electrólitos comprendidos. Sin
embargo, en la determinación precisa de los números de transferencia a
partir de mediciones de la f.e.m. se tienen que hacer correcciones en la variación de dichos números por efecto de la concentración. Se han desarrollado medios de hacer tales correcciones, y entonces se obtienen concordancias excelentes con las dadas por otros procedimientos.
EL POTENCIAL DE UNION
La f.e.m. dada por la ecuación (82b) para la celda (79) es la suma
de los dos potenciales electródicos y E,. Es d e interés determinar qué parte
de esta fuerza electromotriz total corresponde a los electrodos y cuál a la
unión liquida. Según la ecuación (80a), la suma de las reacciones electródica~es
N+( a Z )= H+(a,)
y de aquí, que la suma de los potenciales de los dos electrodos, vale
Si restamos la ecuación (86) de la (82b), el resultado es E), es decir.
Pero (mrr-)2= m l y :mrr+) = m,. Además, si tomamos los coeficientes de
actividad de un ion igual al de actividad media del electrólito,
= ya
l
y (yu+)i = yi, E j se deduce que
+
Puesto que ( t , t - ) = 1. ( 2 t - 1 ) = (t- - t,), la ecuación (87a) puede
c~cribirsctambién así:
Vemos, por lo tanto, que E, está detenninado no s d o por las actividades
de las dos soluciones constitu)entes de la unión, sino tamhien por la diferencia entre los dos números de transporte del elcctrólito. Cuando Cstos
son ipales, (t. - t,' = O y lo es también el potencial de unión. Este hecho
constituye la base de la utilización del cloruro dc potasio como un puente
en las mediciones de celda que comprenden unión líquida. pues en este
caso los númcrns de transferencia son muy próximos entre sí. A sil xez,
E?. micntras
cuando t. es mayor que t,; E, es po,itixo y se suma a El
que si t. cs menor que t,. E, es negativo y reduce el valor del potcn~ial
de la celda.
Consideraciones anilogas, cuando $c aplican a las celdas dc concentración con transferencia que contiencn electrodos re\eriiblcs al anión, dan
+
Aq" m, es la solución más concentrada. Dc la ecuación (88b) resulta claro
que E, = 0 cuando t+ = t., pero esta X C L E, es positiva para t* > t., y iiegativo cuando t+< t-.
PRODUCTOS DE SOLUBILIDAD Y F.E.M.
La soliibilidad dc saturación de cualquier sal difícil de disolver como el
hroniuro de plata \iene dada por la ecndción
donde el producto dc las acti\idadcs dr lo5 dos iones nos da cl de solubilidad, K,. Como K , es uria coristaritc de equilibrio, debc e ~ t a relacionada
r
con
cl valor dc E' de la cddd cn la cual tirric luxar la reacción aritcrior. De
aquí, quc hallando dos rlmrod«s siiiipics cii!ns rw~cionesdcn el proceso
global dado cn la ecuacih ( 8 9 ) , y por coinhiiiati6n adecuada d r riis xalorcs E", es factible calcular c1 prnducto dv solubilidd.
520 Capitulo 12: Celdas elechoquímicas
La inspección de la ecuación (89) sugiere que el requisito de combina.
ción en este caso lo forman los electrodos de plata y plata-bromuro de plata.
En el primer electrodo, la reacción es
para el electrodo plata-bromuro de plata se tiene
y por tanto, la suma de los dos, nos d a
que es idéntica con la ecuación ( 8 9 ) . De la tabla 12-3, se observa que para
el electrodo de plata a 25'C EA, = -0.7991 voltios, Eo del electrodo platab r h u r o de plata en un proceso de reducción E4,,,
= +0.0711 voltios,
y de aquí que según ( 8 9 ) ,
Ea = El,,
+ E:,,,,,+
- -0.7991
0.0711
- -0.7280 voltios
Al sustituir este valor de &O en la ecuación (35), obtenemos para el producto
de solubilidad del bromuro de plata
Este valor cs comparable con K , = 7.7 x 10-l3 dado en la tabla 11-16
del capitulo 11. De igiial manera se calculan los productos de solubilidad
de otras sales dificilmcnte solublrs.
U n método menos exacto para evaluar el producto de solubilidad de las
sales poco solubles comprende la medición del potencial electródico simple
de un electrodo reversible a uno de loc iones de la sal y sumergido en una
solución saturada con esta sal. Para explicar este procedimiento consideremos
específicamente la determinación del producto de solubilidad del cloruro
de plata. Con este fin se toma una solución de un cloruro, por ejemplo de
potasio 0.1 m, y otra saturada con cloruro de plata obtenida por adición
de unas gotas de nitrato de plata. Se inserta un alambre de plata d ~ n t r o
de esta solución y el electrodo así constituido se combina ron uno dc calomel
de referencia para f o m n r la celda.
Ag 1 KCI(O.l
m,
saturado con AgCl)
1 Electrodo de calomel
Determinación potenciométrica del pH 521
Cuando el electrodo de referencia es calomel 0.1 X, la f.e.m. de esta celda a
25°C es 0.01_94 voltios y como el calomel 0.1 N en un proceso de reducción
tiene Ec = 0.3338 voltios a 25=C, tenemos
E = Ea, i
Ec
+
0.0449 = E , ,
0.3338
Enp = -0.2844 voltios
Pero E,, viene dada también por
y de aquí que la actividad de los ioiies de plata en esta solución están dados
Por
-0.2844 = -0.7991 - 0.03916 lag,, a,,+
Ahora bien, por actibidad de los ioues cloro podemos tomar el producto de
la molalidad, 0.1, y el coeficiente de actividad media del cloruro de potasio
a esta concentración, 0.769. Así obtenemos para K , del cloruro de plata a
25' centígrados
Ks= a,~~+a,,= (2.00 x 1 0 - 9 (0.1 x 0.769)
= 1.54 x lo-'"
El valor termodinámico de K , en las condiciones señaladas es 1.76
)<
lo-''.
Una de las aplicaciones mis extcnsas de las mcdiciories de la f.e.m. cs
la dricrrninari¿m drl pH dr &\-erras soluciones. En todo i1 trabajo potciiciométrico el procedimiento s e p i d o es muy similar. Primero se disponr una
celda en la cual uno de los electrodo^ sea retcrsihlc a los iones iiidró:i~iio
Y Sr sumerge en una solución cuyo p H se buxa, mientras qur el otro clcct r d o ordinariairicnte es de calomel. La ~iriiórientre ambos, se hace bien por
medio de un puente salino o sumergiendo el electrodo de iefcrencin diiectamente en una solución. A continuaci6n se mide la f.c.m. de la combinación, E, con un buen potcncióiiietro. De este valor se resta la f.e.m. del
electrodo de caloincl para dar el potencial simple del clectrodo rcrersible
a los iones hidróge~io,y <le cstc últinio a su \e,, sc calcula el pH incdiante 1.1
ecuación de la f.e.m. al~licableal electrodo prticii1.m utili,aclo.
De los rlivcrms elcctroclus mis o menos adrcuarlos para la dt,ti.rrriinación
potenciométrica del pH, discutiremos dos, esto es, ( a ) el dc liidrúgeno y
r
522 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
( b ; el de xidrio. El electrodo de Iiidrógcno es el estándar de todas las medi.
cioiiei de p H y contra C1 se controlan los restantes. De a c u d o con la ecua.
ciíin (14):la f.e.ni. de cstc electrodo está dada por
Como por definición el p H = -lag,, a,<+,la ecuación (44) en función
del pH valdii
Cuando Pli, rs exactaniente 1 atm. la rciiarióri (91) se reduce a
y de aquí que bajo estas condiciones la f.t,.ni. del elcctrodo de liidró~eno
rf'sulta linealmente funcional del pH d~ la solución.
Ya se mencionó qiie el electrodo de liidrógeno consta de una Iioja de
platino platinado sumergida en la soliicibn problema alrededor de la cual
se hace burbujear aquel sas. Para una opcración satisfactoria el recubrimiento platinado debe ser fresco y se deposita desde tina soliición de i d o
cloroplatínico, purificándose bien el gas hidrógmo que en particular debe
hallarse exento de oxig-erio. Si se cuidan todos los detalleq, este electrodo
puede dar risiiltados muy exactos en todo el intervalo de pH. con tal que la
solución no contenga agentcs oxidantes capaces de reaccionar con el hidró,
de la facilidad con qiie este electrodo ,
geno o los metales. Sin e r n b r i r , ~a~causa
se cnvcneiia incluso con el oxígeno del aire, y porque el dispositi\o reqiierido
en las determinaciones cs complicado, su uio se ha confinado al laboratorio,
casi exdiisivamente.
Para ilustrar los cilculos del p H con los datos obtenidos del electrodo
de hidiOgeno, veamos el siguiente ejemplo. S~ipongamosque la f.e.m. de
la cclda
H' 1 solriciíin ( p H = x ) 1 1 ,?'calomel
es E = 0.5161 voltios a 25% ciiaiido la presión barométrica corregida es
de 731.1 inm de Hg. Al ri.,tar de esta f.e.m. el potencial del electrodo de
calomel. obtenemor
Eii, = E - Ec
= O 5164 - 0.2800
= 0.236-1-~oltios
Esta fuerza electromotriz se dpbc al 1i11 dc la solución y a la presión del
gas hidrógeno. La presión barom&tiicaa la que escapa el gas desde la s o b
,
Determinación potenciométrica del p H
523
ción se comporic de la del hidrógeno y la del vapor de a p a con la cual
éstc se encuentra saturado al burbujear a través de la solucióri; esto es
Para PI<?opodernos tomar sin un error apreciable la presión de vapor del
agua a 25°C; 23.8 mm. Entonces,
P i ~ A
= Pbaruinitrira - P i i ? ~
= 754.1 - 23.8
= 730.3 rnm Hg = 0.961 atm
Al sustituir ahora Eii, = 0.2361 y PIIZ= 0.961 atm en la ecuación (91) el
valor del p H dc la solución es igual a
Se obserrará que la corrección dc la prcsión en la f.e.m. es pequeña y que
aícicnde en este caso a sólo 0.01 de una unidad de pH.
Fritz Haber y Z. Klemrnensiewicz ' fueron los prinirros en mostrar que,
cuando dos soluciones de pH diferentes se separan por una membrana de
vidrio; se establece un potencial a través de la ~nisma cuya m a p i t u d
dcpcnde de la diferencia de pH en las dos soluciones. Si el p H de uno de
dlas se mantiene constante mientras varia el segundo, la f.e.rn. del elect r o d o de ridrio obedece la ecuación
\
donde &; es una constante deterininada por la rnagriitud del pH fijo ); el
dispositivo de agrupariiicmto particular utilimdo. La ecuación (93) scñala
que el electrodo de xidrio parece adecuado para las medicione5 de pH. La
f i w r a 12-6 muestra cl dislxxitivo de un electrodo de vidrio usado frecuentemente en la det~iminacióiidcl pH. A es el electrodo de vidrio, B la solución problema y C el electrodo de calomel "Fado para completar el dispositivo. E1 electrodo de vidrio, sumcr@do directamente en la solución cuyo
PH se busca, consta dc un bulho rc~nitruidode u n vidrio cspecial ert cuya
iJ24 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
C
Figura 12-6. Disposición
do de \idno para el pH.
parte interior se coloca, por ejemplo, ácido clorhídrico 0.1 N y un electrodo
de plata-cloruro de plata. La combinación
Ag / AgCl(s) ,0.1 A' HC1 1 vidrio
1
constituye el electrodo de vidrio. Cuando se combina con calomel la celda
que resulta es
As
AgCl(s), 0.1 N HCl 1 vidrio solución ( p H = .Y)
; calomel
(94)
de cuya f.e.m. medida se deduce el potencial electródico simple del electrodo de vidrio, y de ahí el pH. A cauía de la elevada resistencia interna
del electrodo de vidrio, que puede ascender a 100 millones de ohmios, los
potenciómetros ordinarios no se emplean para medir la f.e.m. de la celda (94). Deben emplearse bien spa electrómetros de cuadrante o voltímetros
de tubo vacío que no exigen prácticamente corrientc para su operación.
Con este fin se han desarrollado circiiitos de tubo vacío que son sensibles
a variaciones de pH menores de 0.01 unidades, y además son portátiles Y
soportan el mal trato.
4 causa de un '.potencial asimétrico" no todos los electrodos de vidrio
en un dispositivo particular tienen el mismo valor de &O,. Por esta razón es
preferible determinar Ea para cada electrodo antes de usarlo. Esto se logra
colocando nna solución de p H definido en B, midiendo la f.e.m. dc la celda,
y evaliiando después
Entonces se descarta la primera solución y se Sustituye por la del problema, se repite la medición, y calcnla el p H con el
valor de t.: encontrado antes. De esta manera "cualquier potencial a s i d
trico" sc incorpoia al electrodo, y sc eliminan errores.
Con fieciiencia se usa una soliición de ftalato ácido ~>ot:isico
0.03 molar
para la calibración del electrodo de tidrio. Esta solución tiene un pH de
4.00 en rl intervalo de tcrnpmaturai de 10 a 30% y un<, de 4 02 a 38°C.
El electrodo de vidrio constitiiyc la mejor aliroximación que se rurioce
al electrodo de pH uriivcrsal. No se envenena con facilidad ~ i se
i afcctü por
&t.
Titulaciones potenciométricas 525
agentes oxidantes o reductores o por compuestos orgánicos. Adeiriás, puede
~isarseen cantidades tan pequeñas como una fracción de centímetro cíibico
de solución. Su única limitación surge en las soluciones muy alcalinas donde
el vidrio es atacado, y en soluciones de pH = 9 o mayorps donde la presencia de diversos cationes, en especial el sodio, ocasionan serios errores. Sin
embargo, hoy día existen vidrios adecuados para resistir un p H de 13 ó 11,
Iográndose buenos resultados.
TITULACIONES
POTENCIOMETRICAS
En la figura 12-7(a) se muestra una gráfica característica de la variación del p H con el volumen de base añadido durante la titulación de un
Jcido como el clorhídrico con un álcali como el hidróxido de sodio. Se
observará que el p H de la solución aumenta gradualmente al principio,
después más rápidamente, y que en el punto de equivalencia e! incremento
del p H es muy pronunciado para una adición muy pequeña de la base.
Pasado el punto de equivalencia la cuma declina de nuevo, señalando ligeros
incrementos de pH por adición de un exceso de álcali.
Todos estos cambios de p H durante la titulación pueden seguirse potenciombtricamente al sumergir en la solución que se valora, un electrodo reversible a los iones hidrógeno, y acoplándolo con otro de referencia adecuado.
Punto de
Punto de
cc de baseFigura 12-7.
equivalencia
cc de baselb)
Titulación patenciométrica de
u n ácido ron una basc
Como el potencial de este último permanece constante, la f.e.m. de tal celda
varia sólo con el p H de la solución. Ademis, como la fuerza electromotriz
de cualqnier elcctrodo reversible a los iones hidrógeno es proporcional al
PI*, la f.e.m. de la celda presenta un curso paralelo a la c u n a mostrada
en la figura 12-7ja). En consecuencia, si medimos esta f.e.m. en cada etapa
de la titulación, al graficarla contra el volumen de la base, encontramos
fácilmente el punto de equivalencia. Este es el principio de todas las valoraciones potenriométricas.
Un proccdirnicrito más sensihle y satisfactorio dc deducir el punto final
consiste, no en graficar 6 de la celda contra el volumrn, sino la pendiente
I
526 Capítulo 12: Celdas electroquíniicas
de la curra, es decir, A&/Acc contra cc, como se observa en la figura 12-7(b).
Como la pendiente es máxima en el punto de equivalencia, la última grifica
presenta un máximo para el volumen que corresponde al punto final de la
titulación. En la práctica se coloca un volumen conocido de ácido en un
vaso, se insertan los electrodos, y se adiciona la base con agitación en pro.
porciones mayores al comenzar la operación. Se Ice la f.e.in. después de cada
adición y cuando aquélla comienza a presentar una tendencia de aumrntar
rápidamente, las cantidades nuevas qiie se agreFan se hacen cada ver me.
nores hasta que al acercarnos al punto final añadimos solamente 0.1 cc o
una cantidad menor en cada adición. Por este procedimiento es posible
obtener un máximo agudo y de aquí se toma el volumen de ha% equivalente
al de ácido dentro de límites muy estrechos.
Las titulaciones potenciom6tricas poseen cierto número de ventajas sobre
los métodos ordinarios que comprenden indicadores: puesto que éstos no
pueden emplcarce cuando las soluciones tienen colocación intensa propia,
además los indicadore? a utilizar en las titulaciones de ácido-base se eligen
de manera que su pH cambie de color muy aproximadamente en el punto
equivalente de la solución. De aquí que se precisa alguna información
a priori concerniente a la fortaleza relativa del ácido y base involucrados.
Esto no ocurre en las titulaciones potenciométricas, puesto que dan siempre
correctamente el punto de equivalencia, tanto cuando éste queda exactamente en el punto neutro o del lado ácido o básico.
Aún tiene otra ventaja este procedimiento cuando se trata de titular
ácidos polibásicos o de mezclas de ácido fuerte y débil con un álcali. Vsando
indicadores es casi imposible o muy difícil valorar un ácido polibásico en
grados que corresponden a los diferentes estados de neutralización, e igual ,
sucede con las mezclas de ácidos fuertes y dtbiles a menos qiie se ericuentre
un indicador que cambie su coloración cuando se neutraliza el á5ido fuerte
y otro que cambie con rl ácido d6bil. Sin embargo. cuando las constantes de
ioniración de las diferentes etapas de un ácido polibásico o de los distintos
áridos de una mczcla difieren en un factor no menor de 1:000, la titulación
potenciométrica proporciona directamente los diversos grados de neutralización como se observa en la figura 12-8, donde se encuentra la g i f i c a
de la valoración potenciométrica del ácido fosfórico con hidróxido de sodio.
El punto A indica la neutralización del Primer hidrógeno ionizable, y B el
del segundo. El tercero no se obtiene por este p~-ocedimiento,puesto que
la solución es demasiado alcalina para que el hidróxido de sodio pueda Producir un cambio significativo de pH. Para obviar esta dificultad se agrega
cloruro de calcio en un p ~ ~ n tal
t o como el C, el cual reacciona con el fosfato
disódico presvnte para precipitar el fosfato dc calcio y producir una cantidad
de ácidro rlnrliídriro cxactamcnte igual a la del ácido contenido en el
foslato disódico. A raiisa de la aparición de un ácido fuprtr, el P H dc la solii&ti
descieridc dc C a D, y así hacc posible cualqui~rtitulación psterior
Titulaciones potenciométricas 527
I
le
Figura 1211. Pasos de la raloricibn potenciornétric.l dcl H,PO, con el S a O H
desde D hasta el tercer punto de inflexión E, que corresponde a la ncutralización total.
Mediante este procedimiento es posible analizar mezclas, como por ejemplo k i d o fosfórico, fosfato sódico diácido, y fosfato disódico, que anilogamente a otras combinaciones se titulan por pasos. Pero esta neutralización
por pasos no se obtiene con ácido sulfúrico. En este caso, la neutralización parcial del primer hidrósino conduce a una ionización apreciable del
segundo, y ambos se valoran como si el ácido sulfúrico fuera monobásico.
Las titulaciones de ouidacián-reducción se llevan a cabo de manera
similar a las de neutralización de ácido-base, para Lo cual basta con sustituir
el electrodo reversible a los iones hidrógeno con un metal inerte, tal como
un alambre de
que actúa como un electrodo de oxidación-reducción
con una f.e.m. condicionada por la relación de actividad de la sustancia que
se oxida o reduce. La variación de la f.e.m. de la celda con el volumen de
reactivo agregado sigue esencialnieiite una curva similar a la de la f i p ra 12-7 ( a ) . La f.e.m. tiene un cambio marcado cn el punto de equivalencia.
De esta manera se valoran algunos agentes reductores con oxidantes, o viceversa, sin depender del camhio de color de los indicadores de oxidaciónreducción. .4demis, en ciirtos casos se estiman diversas sustancias en la
misma so/ción, por una sola titulación.
Igual tipo de comportamiento se observa r n muchas reacciones de precipitación, cuando se usa un electrodo reversible a uno de los iones del
Problema. Así, en la titulación del nitrato de plata con cloruro sódico, un
electrodo dc plata presentasi al precipitarse &a en su totalidad, un camhio
marcado de f.e.m. De manera a n á l o ~ aun electrodo de plata indicará la
Precipitación de todo el cloruro cuando este último se determina con nitrato
de plata. La facultad y rapidez dcl mttodo potenciométrico se demuestra en
Particular corn la determinación de haliiror mixtoi. El análisis <le las sdiiciones constituidas de cloruros, broniiiro~y yoduros por los iriCtodos ordinarios es largo, complica<lo Y tedioso, micntras que ~iotenciométricaincritc
4
528 Capítulo 12: Celdas electroquímica
bajo adecuadas condiciones se analiian tales mezclas en una sola titulación
con nitrato de plata en presencia de un electrodo de este metal. Las tres
"inflexiones" obtenidas dan: primero, la precipitación dcl p d u r o de plata
que es el menos soluble, después la del bromuro y finalmente la del cloru.
ro que es el más soluble. A partir de los volúmenes de nitrato de plata
requeridos para ~ ~ r o d u c estas
ir
inflexiones se calcula fácilniente la cantidad
de cada haluro presente cn ia mezcla.
ELECTROLISIS Y POLARIZACION
Cuando se emplea una celda electroquímica para convertir la energia
química en eléctrica, se obtendn esta Última clase de energia como consecuencia de la disminución de la energia libre asociada a la reacción espontánea dentro de la celda. Bajo condiciones reversibles el trabajo eléctrico
es igual al decremento de energía libre. Sin embargo, si la celda opera irreversiblemente, la energia eléctrica disponible para realizar trabajo es menor
que la disminución de energía libre y la diferencia se disipa en forma de
calor.
Se deduce forzosamente que las reaccionrs que van acompañadas de un
aumento de energía libre no pueden utilizarse para hacer trabajo. Para
hacer posibles tales reacciones debe proporcionarse energía a fin de elevar
el contenido de energía libre de los productos sobre el de los reactivos. Electroquímicamente esta adición de energia va acompañada por el paso de
electricidad bajo un potencial aplicado a la celda en la cual se verifica
la reacción particular. Por medio de la electrólisis tienen lugar cambios químicos en los electrodos, y hay una acción química a expensas de la energia,
eléctrica.
D~ consideraciones termodinimicas podemos anticipar qne l a energía
eléctrica ,,,inima requerida para realizar una reacción no espontánea deberá
ser igual al incremento de energia libre qne acompaña al cambio; y este
aF es igiial a su vez, pero de sig-no contrario, a la variación de energia libre
que acompaña el proceso espontáneo in~erso.Esto seri cierto cuando la
electrólisis se efectúa re~ersiblemente,es decir, cuando los electrodos son
totalmente reversibles y cuando sólo pasa a travi-s de la celda una corriente
I,equríia. Cuando no se satisfacen rstas condiciont-S, la energía requeid
será
la niiniina trórica m i s la necesaria para sobrepasar la irreversir a
bilidad, Esto significa que en prcsericia de cualquier irrevrrsibilidad el
l,otencia~apl~cadopara la rlectrólizis time que ser iiia)or que Ia f.c.m.
rcversiule dc la celda. C n a crlda tal, quc exija un sobrr voltajc respecto
al tróriro, se mcuentra polarizada. El exceso d r potencial sc llama coltajc
d P p,,[ariia~ión, mirntras q u e el fenórncrio en general S r ionocc con el
rioriit>rv & plarirarií>ri.
Potencial aplicado y clectr6lisis 529
POTENCIAL APLICADO Y ELECTROLISIS
Para comprender qué sucede cuando se aplica un potencial externo a
una celda, consideremos la celda
para la cual, la reacción espontánea es
con un potencial de 0.155 voltios a 25OC. Para invertir esta reacción se
aplica un potencial externo a la celda de magnitud suficiente para sobrepasar
la f.e.m. de la celda misma. Con este fiI3 debemos conectar a ésta una fuerza
electromotriz tal que los electrones entren por el electrodo de talio y salgan
por el de estaño; esto es, el polo negativo de la fuente, externa debe conectane
al negativo de la celda y el positivo al de este signo. Entonces los electiones
fluyen externamente desde el talio al estaño si el potencial aplicado es menor
que 0.155 voltios. En este valor hay un balance de fuerzas electromotrices
y no hay flujo de corriente en ninguna dirección. Finalmente, cuando el
potencial aplicado excede al de la celda, los electrones de la batería externa
entran en el electrodo de talio y salen por el de estaño. Como ahora la dirección de la corriente que fluye es opuesta a la de acción espontánea de la
celda, la reacción en los electrodos se invierte también, y obtenemos así un
proceso opuesto al establecido en la ecuación (95).
De esta descripción resulta evidente que no toda la f.e.m. aplicada es
efectiva en la corriente de paso por la celda. Parte de ella, en este caso
0.155 boltios a 25OC, se emplea para sobrepasar la fuerza electromotriz de
la celda en si. En general, si designamos por E al potencial aplicado y por
Ea al potencial ejercido por la celda misma, el voltaje operativo en el paso de
corriente es E - &a Con este voltaje neto, la corriente 1 que resulta en una
celda cuya resistencia interna es R, se deduce de la ley de Ohm que vale
donde a Eb se le conoce como la fuerza ~ o n t r a e l e c t r ~ r n o t de
r i ~la celda en
cuestión. En condiciones de reversibilidad no es otra cosa que la f.e.m.
de la celda. Sin embargo, cuando hay polarización, E b es mayor que la f.e.m.
reversible y se necesita un potencial mayor para proporcionar una corriente
dada.
Ordinariamente las celdas utilimdas en la electrólisis no son del tipo
descnto antes. Mis bien involucran un electrólito simple en el cual S? sumergen un par de electrodos. Por ejemplo, en la electrólisis del agua la celda
consta de un par de electrodos de platino sumergidos en una solucih de
530 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
ácido o base. Una celda así no tiene inicialmente fuerza contraelectromotriz. Cabe suponer que en una celda así toda la f.e.m. aplicada producirá
un paso de electricidad sin que se precise sobrepasar la fuerza contraelec.
tromotriz, pero experimentalmente se encuentra que esto no es cierto,
necesitándose un potencial de 1.7 voltios aproxidamadente antes que comience a desprenderse oxígeno e hidrógeno en forma continua. Con un potencial
menor que aquel valor se observa que la corriente inicial decae rápidamente hasta alcanzar un valor casi nulo y ahí permanece. La razón de este
comportamiento es que, debido a la corriente inicial se desprenden ligeras
cantidades de oxígeno e hidrógeno en los electrodos respectivos que se adhieren a ellos y genera7 fuerzas contraelectromotrices que se oponen al
potencial aplicado. Con potenciales menores que 1.7 voltios las cantidades
de los dos gases formados en los electrodos son suficientes para hacer la
fuerza contraelectromotriz igual al potencial aplicado, y de aquí que la corriente inicial se reduce pronto a cero. Pero, una vez que el potencial que
se aplica sobrepasa 1.7 voltios, se produce suficiente hidrógeno y oxígeno
para permitir que estos gases escapen de los electrodos venciendo la presión
atmosférica de confinamiento, y es posible una electrólisis continua. Al
incrementar el voltaje por encima de 1.7 voltios se obtienen cada vez mayores intensidades de corriente.
El hecho significativo de la descripción anterior es que los productos
de la electrólisis convierten incluso a los electrodos inertes en activos que
crean una fuerza contraelectromotriz. Esto es cierto no sólo con los gases
sino con otras sustancias también. Así, tan pronto como se deposita cinc en
una pieza de platino, este último se transforma en un electrodo activo. En
consecuencia, aun cuando no exista inicialmente una fuerza contraelectromotriz presente, se genera una como consecuencia de la electrólisis inicial ,
de la celda que comprende la formación de productos.
POTENCIALES DE DESCOMPOSICION
Como incluso los electrodos inertes se convierten en activos originando
una f.e.m., se hace necesario determinar el voltaje mínimo requerido para
producir una electrólisis continua de un electrólito. Este voltaje mínimo,
llamado fiotenckl de descomposición se determina mediante el esquema
ilustrado en la figura 12-9. En este diagrama, A es la celda electroiítica que
contiene el electrólito objeto de estudio, los dos electrodos E y E', y el
agitador S. Conectados a estos electrodos por una resistencia variable, C,
se encuen5ra una fuente externa de f.e.m., B, y un niiliamperírnctro, M,
para la medición del paso de corriente por el circuito. Mediante la resistencia variable C , es posible regular el voltaje aplicado a la celda y éste se mide
con u n voltímetro V insertado entre los dos electrodos. Mcdiante un voltimetro de gran resistencia, toda la corricrite que señala el miliamperímetro
'
Potenciales de descomposición 531
Figura 12-9.
Determinación de los potenciales de descomposición
se considera que pasa por la celda. De otra manera la lectura de este último
aparato debe corregirse tomando en cuenta la corriente que circula por el
mismo. Esta última corriente está dada m r la lectura del voltímetro dividida por la resistencia interna del instrumento.
Figura 12-10.
Potfncides dc dcscomposición a partir de las
de 1 contra E.
532 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
Para medir el voltaje de descomposición se toma una serie de lecturas
de intensidad contra voltaje por encima y debajo del potencial de descompe
sición. Al comienzo se coloca una resistencia suficientemente elevada en c
para proporcionar sólo un potencial pequeño. Después de leer el miliamped.
metro y el voltipetro, se disminuye la resistencia en C y se efectúan nueva
lecturas. Este procedimiento continúa hasta que pasa una apreciable canti.
dad de corriente por el circuito y la electrólisis procede libremente. Si grafi.
camos las lecturas de corriente contra las de voltaje correspondientes, obte.
nemF la figura 12-10. A lo largo de la rama AB, que se encuentra debajo
del voltaje de descomposición, la corriente que circula es muy pequeña.
Pasado B, sin embisgo, la curva asciende rápidamente y pronto se observa
la electrólisis en forma continua. Como la curva AB queda debajo del voltaje de descomposición mientras que EC se encuentra encima del mismo, el
voltaje de descomposición deberá encontrarse en la intersección de las dos
curvas. Para hallar este punto es práctica usual prolongar las líneas AB y
CE hasta su intersección D. y ~1 ioltaje en esta intersección E d , se toma
como el de descomposición.
TABLA 12-6.
1
ElectAlito
¡
1
I
HPÍO,
CH,CICOOH
H,SO,
Potenciales de descomposición en soluciones 1 N
(Electrodos de Pt)
Potencial de
desmmposición
Ea (voltios)
Potencial de
dercomposición
reversible E,
&a - &r
- 1.23
- 1.23
- 1.23
- 1.23
- 0.46
-0.49
- 0.44
- 0.47
- 1.23
- 1.23
- 1.23
- 0.46
- 0.44
- 0.51
H> + I2
- 1.37
- 1.08
- 0.55
+0.06
+0.14
+0.03
Co + C12
Ni
C1,
Zn + Br,
- 1.69
- 1.64
- 1.87
- 0.09
-0.21
- 1.25
- 1.14
- 0.51
- 0.96
- 1.10
- 0.04
- 1.60
-0.73
Productos
de la
electrólisis
O,
O,
Os
H2
f
Hz
Hz
f
He,
- 1.69
- 1.72
- 1.67
- 1.70
NaOH
KOH
NH,OH
- 1.69
- 1.67
- 1.74
HZ
H,
0,
++ O,
HCI
HBr
HI
- 1.31
- 0.94
- 0.52
H,
H,
+ Cl,
+ Br,
CoCI,
N q
ZnBr,
- 1.78
- 1.85
- 1.80
Cd(NO,),
COSO,
CuSO,
Pb(N03),
NiSO,
%
. !NO3
ZnSO,
- 1.98
- 1.92
- 1.49
- 1.52
+
+ O,
Hz
H, f O?
+
Cd
Co
Cu
+ O,
+ O>
+ O2
+ O,
+ O2
- 2.09
Pb
Ni
- 0.70
- 2.55
Zn 4 O,
.4g i O 1
+o.o~
-0.78
-0.98
-0.56
-0.99
-0.66
- 0.95
I
Cálculo de los potenciales reversibles de descomposición
533
La aparición de corriente debajo del potencial de descomposición surge
del hecho de que los productos de electrólisis depositados sobre los electrodos
rienden a difundirse lentamente en la solución. Para compensar esta pérdida
debe pasar una pequeíia corriente por la celda a fin de regenerar el material
p d i d o . Como la difusión es continua, la corriente debe ser proporcionada
también continuamente, y esto explica la pequeña cantidad de corriente
estacionaria ohservada debajo del potencial de descomposición.
En la columna 2 de la tabla 12-6 se dan los potenciales de descomposición obtenidos con electrodos de platino en soluciones 1 N de diversos electrólitos a la temperatura ambiente. E n cada caso se dan los productos de
electrólisis, así como los potenciales de descomposición reversibles para los
distintos electrólitos. La forma de obtenerlos y el significado de los resultados
observados se explicarán ahora.
CALCULO D E LOS POTENCIALES REVERSIBLES
DE DESCOMPOSICION
El potencial reversible de descomposición de un electrólito es la suma
de las f.e.m. reversibles establecidas en los electrodos por los productos de la
electrólisis. En consecuencia, tan pronto como se conocen los productos
de la electrólisis, la concentración del electrólito, y la dirección de las reacciones electródicas, es decir, de oxidación o reducción, se puede calcular
el potencial de descomposición por los procedimientos descritos anteriormente.
La dirección de una reacción electródica en una celda electrolítica se
determina fkilmente por la polaridad de los electrodos. En una celda electrolítica cualquiera, los electrones entran por el electrodo conectado al lado
negatiuo de la fuente externa de f.e.m. En este electrodo denominado cátodo,
la reacción será siempre de reducción. Por otra parte, los electrones abandonan la celda por el electrodo conectado al lado positivo de la batería
externa y de aquí que este electrodo conocido como ánodo efectúe siempre
'eacciones de oxidación.
A fin de calcular los potenciales reversibles de descomposición en los
electrólitos donde se desprende oxígeno se precisa conocer el valor de Ea
del electrodo oxígeno-ióri oxhidnlo. Como el de oxígeno es muy irreversible,
esta cantidad no se obtiene directamente de las mediciones de f.e.m., sino
que debe calcularse desde los datos de energía libre de otras fuentes. Con este
fin tenemos el cambio de energía libre de la reacción
"(g)
+ t O,(g) + HdJ(1)
= 2H+
+ 2 OHAFPi.c =
se
- 18,600cal
(96)
dos faradios para realilar la reaccibn, cl valor de Eo que
534 Capitulo 12: Celdas electroquímicas
.,!:a,
ti
corresponde a @ en este proceso es,
AFo = -n7E0
- 18,600
x 4.184 = 2 x 96,500 Ea
EQ = 0.403 voltios
Sin embaigo, para la reacción H,(g) = 2 H + , Ea = O que al restarla de la
ecuación (96), nos da el potencial electródico tipo para la solución del 05.
geno y la formación de los iones oxhidrilo, es decir,
f o,(gj
+ H,0(1) + 2 8 = 2 O H -
E;,., = 0.403 voltios (97)
Para el proceso inverso, es decir, la deposición del oxígeno a 1 atm de presión
desde una solución que contiene iones oxhidrilo con una actividad unidad,
el potencial tipo del electrodo oxígeno se deduce que es
2 O H - = f O,(g)
+ H,O(lj + 2 8
E:$., = -0.403 voltios (98)
Con el valor de E0 del electrodo de oxígeno así obtenido, se calculan los
potenciales reversibles de descomposición de los electrólitos que comprenden
cualquier desprendimiento de oxígeno. Como un ejemplo inicial consideremos la electrólisis del nitrato de plata 1 N, que nos da plata en el cátodo
Y oxígeno en el ánodo. Para la reducción del electrodo de plata así formado
8 = Ag(s). De aquí
en el cátodo, tenemos la reacción Agf ( N = 1)
que la f.e.m. correspondiente es
+
=
0.78 voltios
En el ánodo para el proceso de oxidación en el electrodo de oxígeno tenemos
2 O H - = f O,(g)
+ H,O(I) + 2 8
donde, como esta solución es esencialmente neutra, la concentración de 10s
iones oxhidrilo puede tomane igual a lo-: iones gramo por litro. Entonces,
el potencial del electrodo de oxígeno es
=
-0.82 voltios
Por suma de los dos, el voltaje reversible de descomposición del nitrato de
plata se deduce que es
E = E*.
&o,
= 0.78 - 0.82
= -0.04 voltios
+
.
Significado de los potenciales de descomposición observados 535
Este simple ejemplo muestra que los potenciales de descomposición dependen de la concentración del electrólito. Sin embargo, esto no es válido cuando
el agua está electrolizada para dar hidrógeno y oxígeno. En este último
caso la reacción total de la celda está dada por la i n v e m de la ecuación (96), para la cual la f.e.m. se deduce que es
Pero, en u z a solución acuosa cudquiera el producto an+aorr- es una constante igual a 1 x 10-Id a 25°C. De aquí,
+
E = -0.403
0.059 logio(1
= -0.403 - 0.826
= - 1.23 voltios
X lo-")
y éste deberá ser el potencial reversible de descomposición de una celda
cualquiera en la cual el proceso esencial es la electrólisis del agua. Además,
este potencial resulta independiente de la concentración del electrólito o su
naturaleza. Esta deducción da cuenta del hecho de que los potenciales reversible~de descomposición en la tabla 1 2 4 de todos los ácidos y bases que
dan oxígeno e hidrógeno son iguales.
SIGNIFICADO D E LOS POTENCIALES DE
DESCOMPOSICION OBSERVADOS
Con esta explicación del cálculo de los potenciales reversibles de descomposición, estamos en condiciones de considerar el significado de los resultados
experimentales dados en la tabla 1 2 4 . Primero, una comparación dk los
potenciales dados en las columnas 2 y 4 de la tabla para los electrólitos
revelan que los potenciales de descomposición no son muy diferentes de
aqu6llos calculados teóricamente. De lo cual se concluye que los iones
en estas sustancias, es decir, el hidrógeno, los metales, y los halógenos, se
deposith sobre los electrodos de platino bajo condiciones que se aproximan
más o menos a la reversibilidad. Más aún, como los metales y el hidrógeno
se depositan reversiblemente sobre el platino. esta discrepancia indica que la
reversibilidad observada tiene lugar principalmente en el desprendimiento
de oxigeno en las superficies de platino. En otras palabras, los electrodos de
oxígeno, aun en las superficies de platino, se encuentran polarizados apreciahlementc. En el caso de los ácidos y bases el grado dc polarización, que
por el mommto pueden estar adxritos al oxigeno, asciende a unos 0.45 voltios. Sin embargo, en la deposición de oxigeno de sus soluciones salinas la
polarización cs nlayor y alcan,a a un voltio.
536 Capítuio 12: Celdas eiectroquímicas
Otro punto interesante de la tabla 1 2 4 es que los ácidos y bases que
dan oxígeno e hidrógeno tienen los mismos potenciales de descomposición,
E
S decir, aproximadamente - 1.7 voltios. Además, mientras que el poten.
cial de descomposición del ácido clorhídrico 1 N es - 1.31 voltios, ese valor
aumenta con la dilución del ácido, alcanzando eventualmente el valor de
- 1.7 voltios. De todo esto se concluye, que aunque en las soluciones más
concentradas los productos de la electrólisis son hidrógeno y cloro, en las
soluciones diluidas son hidrógeno y oxígeno. Entre estos casos extremos se
desprenden tanto el cloro como el oxígeno en el ánodo en proporciones variables, dando este electrodo un potencial intermedio entre el del oxígeno
y el del cloro.
TIPOS DE POLARIZACION
Las medidas de los potenciales de descomposición no son adecuadas para
los estudios de polarización. Primero, tales datos dan información de la
suma de los voltajes de polarización en los dos electrodos más bien que el
de uno en particular. De nuevo también, los resultados se aplican sólo en
condiciones que se obtienen cuando existe una electrólisis continua, y no nos
dicen nada sobre lo que ocurre con densidades mayores de corriente. En consecuencia, a fin de conocer el grado de polarización de cada electrodo en
particular a diversas densidades de corriente, se necesitan métodos más
adecuados.
Pero, antes de pasar a ellos es necesario señalar que cualquier polarización observada es de dos tipos, es decir, (a) de concentración y (b) de sobrevoltaje. La primera surge del hecho que, con los cambios de concentración
del electrólito alrededor de los electrodos durante la electrólisis, pueden
formarse celdas que desarrollen una f.e.m. opuesta a la aplicada. Por otra
parte, el'sobrewoltaje es un potencial de polarización cuya fuente queda en
algún proceso en el electrodo que tiene lugar irreversiblemente, y es un fenómeno íntimamente asociado con la naturaleza del electrodo y con los procesos que tienen lugar en su superficie. Bajo estas condiciones ordinarias la
polarización total observada será la suma de ambos efectos. Pero como
el sobrevoltaje es de un interés electroquímico particular, es importante
minimizar o eliminar la polarización de concentración para lograrlo. A menos
que los cambios de concentración en los electrodos lleguen a ser muy grandes,
las polarizaciones desarrolladas en ellos son en el mejor de los casos pequeñas y no es posible atribuirles los grandes potenciales de polarización observados en muchas celdas. Además, algunas fuerzas que operan en solución,
tales como la conducción electrolítica por la corriente y la difusión térmica,
tienden a igualar las diferencias de concentración. Como un incremento en
la temperatura favorece la conducción elcctrolitica Y la difusión, esta igualación se promueve por ascenso de temperatura. S1n embargo, un método
Medición del sobrevoltaje
537
aún mucho más efectivo de eliminar la polarización de concentración es
por una agitación eficiente del electrólito. E n las celdas electrovticas donde
el electrólito se agita bien se elimina prácticamente la polarización por concentración, y de aquí que cualquier voltaje de polarización observado bajo
estas condiciones debe ser esencialmente un sobrevoltaje debido a la irreversibilidad en el proceso electródico.
MEDICION DEL SOBREVOLTAJE
Las mediciones directas del sobrevoltaje que acompañan a la deposición
de los productos electroliticos en los diversos electrodos se hacen observando
los potenciales electródicos cuando pasa la corriente, y bajo condiciones en
que no existe polarización de concentración, es decir, en soluciones agitadas.
El dispositivo usual con este propósito se muestra en la figura 12-1 1. La celda
electrolítica A, que contiene electrodos de área transversal conocida, el elec-
\
Figura 12-11.
Detenninación del sobrevoltaje.
trólito y agitador, está conectada en serie con una batería externa B por
Iliedio de una resistencia variable C un amperímetro M, y un interruptor.
Cualquier intensidad de corriente deseada puede así ser enviada a través de
circuito de electrólisis variando la resistencia en C. Para obtener ahora el
potencial del electrodo E, por ejemplo, se usa &te como mitad de una
nueva celda, la otra mitad de la cual es un electrodo de referencia adccuado, tal como uno de calomel, y ambos se conectan a un potenciómetro.
Con el fin de eliminar la introducción de una caída de potcncial apreciable,
I R , por la solución en las mediciones de potcncial de E contra el electrodo
538 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
de referencia, el brazo de este último va estirado en una extremidad fina y
colocado junto al electrodo.
Para hacer una medición se hace mover el agitador, se cierra el circuito
y se ajusta la corriente a través del circuito de electrólisis, como lo indica M,
para cualquier valor que se desea por medio de la resistencia variable C,
Cuando la corriente ha llegado a un estado estacionario se mide la f.e.rn,
de E contra un electrodo de referencia por medio de un potenciómetro, así
como la intensidad por medio de M. Esta última se reajusta entonces a
otro valor, repitiéndose la operación total. De esta manera se obtiene una
serie de lecturas de las f.e.m. para diversos valores de la corriente que pasa
a través de la celda. Al dividir la intensidad de corriente en cada punto
por el área del electrodo, se deduce la densidad de corriente, mientras que
la f.e.m. de E en cada etapa se ohtiene al restar desde la f.e.m. el potencial
del electrodo de referencia. Finalmente para deducir el valor del sobrevoltaje
debemos restar de los potenciales electródicos observados el potencial reversible de E. Estas f.e.m. reversibles se pueden calcular o medir, tomando el
potencial de E contra un electrodo de referencia cuando no hay flujo
de corriente por la celda. En este último caso debe usarse un electrodo
para el cual es reversible la reacción particular.
EL SOBREVOLTAJE EN LA DEPOSICION
CATODICA DE LOS METALES
Los estudios de sobrevoltaje sobre la deposición catódica de metales indican que esta deposición se logra con sobrevoltajes relativamente pequeños.
De acuerdo con los requisitos teóricos, los metales no comienzan a depositarse en el cátodo hasta que se excede el potencial del metal dado en la
solución particular. De aqut cn adelante el potencial del metal se eleva
lentamente con la densidad de corriente, lo que señala que existe cierta
polari7ación, pero el sobrevoltaje escasamente excede unas décimas de voltio
con las densidades de corriente más elevadas. Los metales como el cinc,
cobre y cadmio presentan un sobrevoltaje particularmente bajo, mientras
que los del grupo del hierro, es decir, el hierro, cobalto y níquel muestra
sobreroltajes ni6s eleimlos. La causa del sobre\-oltaje no aparece clara: Se
han propueyto diversas teorías, pero en la actualidad disponemos de poca
información para hacer una elección entre ellas.
El sobrevoltaje de un metal particular no es el mismo para todas sus
soluciones salinas pero varía ligeramente con la naturaleza del cu-ion. También queda afectado por la presencia de ácidos, coloides y otros asregados.
Finalmrnte el sobrevoltaje de los metales aumenta cuando éstos se depositan
a partir de soluciones en las cuales el metal particular cxiste cn forma cornpleja, como en cl caso dc la plata en soluciones dc cianuro
Sobrevoltaje del hidrógeno 539
SOBREVOLTAJE DEL HIDROGENO
Es de una importancia especial en los casos de su deposición sobre diversas superficies catódicas. Sobre el platino platinado y con u n a densidad de
corriente cero, el sobreooltaje del hidrógeno es cero, puesto que bajo estas
condiciones el electrodo de este elemento es reverrible. Pero, cuando se
aumenta la densidad de corriente el sobrevoltaje aumenta también; sin
embargo, nunca es grande. En efecto, para una densidad de corriente de
1.5 amperios por centímetro cuadrado sólo vale 0.05 voltios a 25°C. Por
otro lado, sobre otras superficies catódicas el sobrevoltaje es mucho mayor
como puede verse en la figura 12-12. Estos datos obtenidos en el ácido
sulfúrico 2 X, indican que el sobrevoltaje de hidrógeno es bajo solamente
con platino platinado, pues con superficies lisas de aquel metal es bajo con
pequeñas densidades de corriente, pero se incrementa gradualmente hasta alc a n u r un valor límite con densidades de corriente elevadas. Así sucede
también con los cátodos de oro, grafito, teluro, y paladio. Sin embargo,
sobre las superficies de plata, mercurio, bismuto, cadmio, estaño, hierro,
cinc, níquel y plomo, el sobrevoltaje del hidrógeno es muy grande con densidades de corriente cero. Estos electrodos por esa razón, no funcionan
reversiblemente bajo n i n p n a condición, y no es posible depositar hidrógeno
o
1
platino platinizado
O
2 W 400 600 800 IWC)
densidad de corriente -miliamperioslcn n2
Figura 12-12.
Sobrevoltaje del hidrógeno en diversos metales (H2SO, 2 N a 2 5 ° C ) .
en ellos en las proximidades de los potenciales reversibles. Otra característica dc estos metales cuando cxiste un sobrcvoltaje de hidrógeno muy elevado, es que con densidades de corriente bajas prcscntan un ripido incrcmento en sobreten~iónhasta alcanzar valores que pcrmanccen esenciaimcnte
roiist;intes a densidades más clcvadas.
540 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
La variación del sobrevoltaje de hidrógeno con la densidad de corriente
a temperatura constante se representa con frecuencia por medio de la
ecuación
E, = a
+ b log,, I
(99)
donde E, es el sobrevoltaje, J la densidad de corriente, y a y b son constantes.
De acuerdo con esta ecuación, la gráfica de E, contra el logaritmo decimal de I debe ser lineal. Esta relación se cumple muchas veces, en un intervalo relativamente amplio de densidades de corriente. Además, muchos
metales dan aproximadamente una pendiente, b, que corresponde muy
aproximadamente al valor de ( 2 x 2.303 R T ) / T . U n estudio del efecto
de la temperatura en el sobrevoltaje muestra que la pendiente de las curvas de E, - log,, 1 se incrementa linealmente con la temperatura absoluta de
acuerdo con la relación
&,=a+
(2
x
2.303 RT)
logm
T
El incremento de temperatura produce un decrecimiento en el sobrevoltaje del hidrógeno, aunque como hemos visto, la pendiente de la curva de
sobretensión-densidad de corriente es más pronunciada a temperaturas más
elevadas. Las mediciones del sobrevoltaje a diversas presiones, por encima
y debajo de la presión atmosfirica, indican que aquél varia poco con las
presiones elevadas pero cuando éstas son bajas, el sobrevoltaje se eleva
agudamente en los cátodos de cobre, níquel y mercurio. La sobretensión se
ve influida también por la presencia de impurezas en las materiales catódicos.
Los datos disponibles enseñan que la composición y el p H de la solución
ejercen poco efecto en el sohrevoltaje del hidrógeno. Por otra parte, la naturaleza de la superficie catódica es de gran importancia. En superficies brillantes y pulidas la sobretensión es invariablemente mayor que en las bastas,
con hoyuelos o grabadas. Esta diferencia se ilustra bien con la sobretensión
del hidrógeno en el platino platinado. Análogas diferencias, si bien no tan
considerables sc han observado en otros metales.
E L SOBREVOLTAJE EN LOS PROCESOS ANODICOS
Los escasos datos de la dcposición anódica indican que el desprendimiento de 10s haluros en los electrodos tales como el platino y grafito tienen lugar
con sobretensiones relativamente bajas. Así, con 1,000 miliamperios por centímetro cuadrado a 2 5 T , el sobrevoltaje del cloro es de unos 0.07 voltios
en el platino platinado; 0.24 en platino brillante, y 0.5 en el grafito. Con
densidades de corriente bajas, el sobrevaltaje es despreciablc pricticamente,
y, por esa razón, la deposición de los halógenos se efectúa de manera reversihle.
Teorías del sobrevoltaje 541
Sin embargo, esto no es válido en el caso de desprendimiento de oxígeno.
Aunque los sobrevoltajes precisos de este elemento son a causa del ataque
de los electrodos por dicho elemento, los datos disponibles indican que son
altos invariablemente, incluso con densidades de corrientes muy bajas. Esto
se observa en la tabla 12-7, donde se muestran los sobrevoltajes del oxígeno
en diversos metales y distintas densidades de corriente. Otro factor impor-
T ABLA 12-7.
Densidad de
cornente
(ma/cmZ)
Sobrevoltajes del oxígeno a 25'C
Sobrevoltaje (voltios)
Pt
Pt
platinado brillante
Au
Grafito
Cu
A8
Xi
tante que revela la tabla es que los sobrevoltajes del oxígeno alcanzan valores mayores en metales, como el platino y oro, que en otros, como el cobre
y dquel, que es lo opuesto a la conducta del hidrógeno en dichas sustancias.
De otro modo el oxígeno se comporta esencialmente igual al hidrógeno. En
soluciones ácidas el sobrevoltaje aparece ser independiente del pH, el incremento de la temperatura conduce a un decrecimiento en el sobrevoltaje,
y la dependencia de éste con la densidad de corriente se puede representar
mediante la ecuación (100) con una expresión igual para la pendiente
de la cuma. En las soluciones alcalinas, sin embargo, el sobrevoltaje parece
variar con la concentración de los iones hidroxilo.
T E O R I W DEL SOBREVOLTAJE
Cuando los diversos grados comprendidos en una reacción global cualquiera proceden rápidamente, se puede establecer un equilibrio entre los
iunes en solución y el electrodo, con lo cual este último se comporta reversiblemenre y exhibe su potcnrial de equilibrio. Por otro lado, si cualquier
proceso intermedio por una razón u otra es lento, o si tiencn lugar reacciones
complejas entre el electrodo y alguna de las sustancias que aparccrn cn la
reacción electródica, no es posible establecer el equilibrio y, por lo tanto,
cl electrodo no se comporta rcvcrsiblementc. Usando esta idca se han propuesto muchas teorías que dan cuenta de la sobretensión, en crpccinl dcl
512 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
hidrógeno. Pero ninguna de ellas da cuenta de todos los fenómenos observados. Bockris ha dado una revisión de todas estas teorías.
DEPOSICION METALICA Y SOBRET'OLTAJE
HlDROGENO
DE
La deposición de la mayoría de los metales de su solución acuosa tiene
lugar con poco sobrevoltaje y, por tanto, a potenciales esencialmente reversible~.Si existieran únicamente iones metálicos, sólo sus potenciales determinarían la deposición. Sin embargo, en cualquier solución acuosa existen
iones de hidrógeno presentes y, en consecuencia, son posibles dos reacciones
catódicas: la deposición del metal y el desprendimiento del hidrógeno. Por
lo tanto, surge la pregunta: ;Bajo quí. condiciones se depositará un metal
de una solución acuosa antes de que haya desprendimiento de hidrógeno?
La respuesta a esta pregunta es simplemente la siguiente: Si el potencial
requerido para la deposición metálica es menor que la del hidrógeno, el
producto de electrólisis en el cátodo será el metal. Si es cierto lo contrario,
tendrá lugar una liberación catódica de hidrógeno. Sin embargo, mientras
que la deposición catódica de los metales comprende esencialmente sólo el
potencial reversible del electrodo del metal, la liberación del hidrógeno comprende no sólo al potencial reversible del electrodo de hidrózeno en la solución particular, sino también el sobrevoltaje de este último elemento en el
material que compone el cátodo. De hecho, por esta causa se depositan
muchos metales de las soluciones acuosas bajo condiciones que en ausencia
de sobrevoltaje darían invariablemente hidrógeno.
Para ilustrar los puntos anteriores, consideremos primero la electrólisis
de una solución acuosa de nitrato de plata en la cual la actividad de la
sal es la unidad. En esta solución el potencial de deposición de la plata
será el potencial electródico tipo del metal, es decir, &O,,= -t0.80 voltios
a 25CC. En la misma solución la actividad de los iones hidrógeno es
y por lo tanto el potencial para el desprendimiento reversible de este elemento sería
- -0.41 voltios
Como la deposición de plata exige menor gaito de energía que el desprendimiento de hidrógeno, como el primero procede espontáneamente mientras
que el Último no, se depositará la plata en luxar d~ liberarse el hidrógeno.
En e t o s casos tendremos plata en el cátodo si no hay sobretensión de hidrógeno. Lo mismo es cierto en cl caso de la deposición de cobre. Además,
aunque la difcrcncia entre los potenciales de plata o cobrc y el de hidrógeno
6
J. Bockris, C h c m . Reu., 43, 525 (1918)
Deposición metálica y sobrevoltaje de hidrógeno 543
se reduzcan en soluciones ácidas, aun este último no se hace menor que el de
los mencionados metales, y se depositarán tanto si la solución es ácida o
neutra.
Por otra parte, la deposición de la mayoría de los metales situados por
encima del hidrógeno en la serie electromotriz sería imposible de realizar
de no ser por el sobrevoltaje. Para una solución de iones cadmio cuya
actividad sea la unidad, su potencial vale 0.40 voltios, y el requerido para
la deposición es -0.40 voltios. Este potencial está tan próximo al del electrodo de hidrógeno en solución neutra, -0.41 voltios, que cabe esperar la
deposición simultánea de ambos elementos. Si la solución es ácida, el potencial del electrodo de hidrógeno sería mcnos neaativo, y parecería imposible
depositar cadmio. No obstante, no suceden así las cosas porque no hay
desprendimiento de hidrógeno reversiblemente en el, cátodo de cadmio;
en efecto, con una densidad de corriente tan baja como un miliamperio por
centímetro cuadrado, la sobretensión del hidrógeno en el cadmio es de
casi un voltio. En consecuencia: a fin de lograr la deposición del hidrógeno
en una solución neutra, se precisa un potencial de - 1.4 voltios, mientras
que las soluciones fuertemente ácidas, requieren otro de - 1.0 voltio. Como
ambos son considerablemente mayores que el necesario para lograr un cadmirado, -0.40 voltios, el último proceso es el que se verifica en vez de desprenderse hidrógeno.
De esta manera se explica la separación elcctrolítica de los metales cinc,
hierro, níquel, estaño y plomo de sus soluciones acuosas. Si no fuera por la
presencia de un sobrevoltaje de hidrógeno, la deposición de estos metales
se complicaría por la aparición de dicho gas, mientras que en otras ocasiones, como en el cinc, el hidrógeno sería el producto exclusivo. Resulta particularmente ilustrativo el hecho de que incluso el sodio es capaz de depositarse en un cátodo de mercurio en lugar del hidrógeno. Con un sobrevoltaje
de aproximadamente un voltio, se requiere un potencial de nnos - 1.4 voltios para liberar hidrógeno de este metal. Por otro lado, la deposición del
sodio requiere un potencial mayor que 2 voltios. Sin embargo, cnando se
deposita el sodio sobre el mercurio, se disuelve el primero en el último
formando una amalgama en la cual la actividad del sodio queda moderada.
Cuando se diluye la amalgama, el poteEcial del sodio es súlo de 1.2 voltios,
Y de aquí que la deposición de este elemento en la amalgama pueda realim s e a -1.2 voltios. Como este potencial es menor que -1.4 voltios para
que haya desprendimiento de hidrógeno sobre el mercurio, el sodio puede
recuperarse de soluciones acuosas en f o m a de amalgama. Este hecho se utiliza comercialmente en la celda de Castner para la cicctrólisis del cloruro
sódico, donde el sodo se deposita primero catódlcamente como una amalgama y luego se deja reaccionar con cl aqiia para fonnar hiclrógcno c hiclróxido de sodio.
544 Capitulo 12: Celdas electroquímicas
SEPARACION ELECTROLITICA DE METALES
h'o sólo muchos metales se separan elertrolíticamente de los iones hidrógeno cuando existe una diferencia de potencial adrcuada, sino que diversos
metales pueden separarse entre sí: para ello. si se busca una separación clara,
es deseable que la diferencia de potencial sea de 0.2 voltios aproximadamente entre el potencial de un metal y el del elrmento más próximo al
mismo. Entonces se realiza una deposición diferencial con suficientr seguridad para el análisis. De esta manera se separan el cobre de la plata, el
cobre del cadmio, y el cadmio del cinc. En una solurión que contiene todos
los metales mencionados, el procedimiento consiste en ajustar el potencial
electrolitiro primero en el punto ligeramente más elevado que el requerido
para depositar la plata, y luego la corriente decae hasta un xalor más bajo
en cuanto aquélla se ha depositado totalmente. Entonces se remueve el cátodo, se inserta uno nuevo. se ajusta de nuevo el potencial a un valor intermedio entre el del cobre y cadmio, y se inicia de nuevo la electrólisis. Al
repetir esta secuencia se remuexe c1 cobre, luego el cadmio y finalmrnte el
rinc.
Ocasionalmente, a fin de evitar la formación de gases en el cátodo
especialmente hidrógeno, se requiere el ajuste de la acidez antes de lograr
la separación de los metales que ocupan una posición más elevada en la
serie. Frecuentemente se obtiene una mayor diferencia de potenciales de separación al convertir algunos de los iones a complejos, o cambiando la temperatura. Hay diversos artificios y otros detalles experimentales descritos
en los libros de electroanálisis cuantitativo para lograr modificar el potencial de separación.
DEPOSICION SIMULTANEA D E METALES
A fin de depositar simultineamentc dos metales en el cátodo, es necesario que ambos posean el mismo potencial. Esto quiere decir, que las concentraciones de los dos iones en la solución deben ajustarse para que sus
potenciales de ordinario diferentes, adquieran un valor común. Este ajuste
no es posible realizarlo con las sales simples de los metales, sino que deben
ir acompañados de una conversión de los iones metálicos en complejos.
Así, un ejemplo destacado de tal comportamiento lo ofrecen la formación
directa de los latones por deposición simultinea de cobre y cinc. En las
soluciones acuosas, las sales simples de estos metales tienen potenciales de
deposición que difieren entre sí más de un voltio. Sin embargo, cuando Sus
cationes se convierten en cianuros complejos, la diferencia de potencial
entre los mismos se reduce considerableniente hasta que a una concentración dada d~ cianuro su5 potenciales se igualan. De tales soluciones, ambos
mctales se depositan a la \ C L corno si se tratara de un latón, y si variamos
las proporciones de cinc, cotxe > cianuro cn el rlcctrólito, así como la dcn-
.
Celdas comerciales 545
1
sidad de corriente, se logran depósitos metálicos que varían desde el cobre
al cinc puros, pasando por toda la gama intermedia de latones. Además, la
adición de agentes y la temperatura modifican la composición del depósito.
Así, el incremento de temperatura aumenta invariablemente el contenido
de cobre. de forma ~ U aP temperatura suficientemente elevada el producto
es exciusivamente este metal.
CELDAS COMERCIALES
Concluimos este capitulo con una descripción de las celdas electroquímicas m i ? comunes usadas como fuente de energía eléctrica. Son de dos
tipos. En las primarias la energía eléctrica se obtiene a expensas d e la reactividad química sólo en tanto se hallen presentes los materiales activos. Una
vez consumidos éstos, se descartan porque no sirven para ningún fin. Por
otra parte, las secundarias o de almacenamiento una vez usadas son susceptibles de recarga por el paso de corriente a través de las mismas. Una celda
del primer tipo es la de Leclanché, mientras que al segundo pertenece la de
plomo ácido. Ambas se describirán por turno a continuación.
La pila seca o de Leclanché. Consta de un electrodo negativo de cinc,
uno positivo de carbón circundado por dióxido de manganeso, y el electrólito
lo constituyen una pasta de clomros de arnonio y cinc. La reacción en el
electrodo negativo es la solución de cinc que produce iones de este metal,
mientras que en el positivo aparece así:
1
Por lo tanto, el proceso total de la celda es
Los iones oxhidrilo formados por la acción de la celda liberan amoniaco
a partir del cloruro de amonio, que a su vez se combina con los iones de cinc
para precipitar la sal poco soluble Zn(NH,),CL; es decir,
+
+
+
2 NH,CI
2 O H - = 2 NH,
2 C12 NH,
2 C l = Zn(NH,) ,CI,
Zn+ +
+
+ 2 H,O
(loza)
(loza)
Sin embargo, estas últimas reacciones son un proceso secundario no involucrado directamente en las electródicas, y por lo tanto no contribuyen al
Potencial de la celda.
Esta desarrolla un potencial de 1.5 voltios aproximadamente, en circuito
abierto. Con el uso decae este voltaje, hasta que la celda debe descartarse.
Este tipo de pilas tiene poca capacidad y no son apropiadas para un trabajo
Considerable.
546 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
Batería de plomo. En este caro el electrodo negativo es de plomo, el
positivo plomo imprepado de dióxido de este metal, y el electrólito es una
solución de ácido sulfúrico al 20% con un peso especifico de 1.15 a la tem.
peratura ambiente. Cuando la corriente sale de la celda, se disuelve el plomo
en el electrodo negativo dando iones, que se combinan con los de sulfato en
solución y forman un precipitado de sulfato de plomo. El proceso total es,
por lo tanto,
Pb(s)
SO;- = PbSO,(s)
28
+
+
que muestra su reversibilidad respccto a los iones de sulfato. La acción del
electrodo positivo, a su vez, queda descrita por el proceso
del cual vemos que es esencialmente de oxidación-reducción y su potencial
depende de los iones hidrógeno y sulfato. De las ecuaciones anteriores. se
deduce la total siguiente de descarga
De acuerdo con esta ecuación, el potencial de la batería de plomo dependerá
únicamente de la actividad del ácido sulfúrico en solución. Este es el caso
en realidad. Así a 25'C y una concentración de 7.4% de ácido sulfúrico, el
potencial es 1.90 voltios, a 21.4% es 2.00, y a 39.2% es 2.14 voltios. Ademjs, como se consume dicho ácido en la opeiación, el peso especifico del
electrólito disminuye con la descarga. Finalmente, los calores de la reacción (103) para distintas concentraciones de ácido sulfúrico obtenidos electroqnimicamente se hallan muy acordes con los resultados térmicos, y
confirman. si no el mecanismo del proceso electródico, por lo menos la
validez de la reacción total.
La reacción (103) de recarga de la batería es inversa de la de carga.
Con este fin, debe aplicarse externamente un potencial mayor que el de la
celda. Durante esta electrólisis se deposita plomo en el cátodo, dióxido de
plorno en el ánodo y se regenera ácido sulfúrico. Debido a este incremento
en la concentiación ácida, se eleva el potencial de la celda. En tanto existan
iones plomo prrsentes, no hay ninguna formación de gas en la carga, pero
si desaparecen totalmente hay producción dc hidrógeno con peligro de estr*
pear los electrodos. Por esa razón las baterías deben cargarse hasta que el
ácido adquiera un peso especifico característico, sin pasar el mismo.
El voltaje de una batería no depende de su tamaño o el de sus electrodos. Su potencial es siempre el mismo para una concentración de ácido dada.
La única ventaja de los electrodos grandes es su mayor capacidad para
suministrar energía elktnca. Finalmente, la celda de plomo es muy eficiente
en su operación, y da durante la descarga un 90 6 95% dc la energía eléctrica
acumulada en la carga.
,
,
..
Problemas 547
Véase la lista del final del capitulo 11. También:
I R. G. Bates, Eelectrornefric pH Determinationr, John W i k y & Sons, I n c , Kuera
York, 1954
? Kortum y Bockrir, Textbook of Eiectrochemiitry, Elsevier Publishing Company,
Nueva York, 1951.
3. W. M. Latimer, T h e Oxidation Stoter o/ the Eiementr nnd Their Potentialr in
Aqueour Solutionr, Prentice-Hall, Inc., Englewood Cliffs, Nueva Jersey, 1952.
4. A. Weissberger, Physical Methodi of Organic Chemiitry, Intemcience Publishers,
Inc., Nueva York, 1960, vol. IV, capitulas 44, 48 y 49.
PROBLEMAS
Nota: En los problemas siguientes, a menos quc sr señale lo contraria, la temperatura se toma a 25'C.
1. U n
25°C Este
<ión de la
Respuesta:
electrodo de plata-ion plata re mide contra el normal de calomel a
es negativo, y se observa una f.p.m. de 0.2360 voltios. Escribir la reaccelda y calcular el potencial del electrodo que nos ocupa.
E = O 5160 voltios.
2. U n electrodo de plomo-ion plomo se mide contra uno de calomelanos 0 1 N
a 25°C. Se encuentra que el de plomo es negativo, y la f.e.m. hallada es de 0.4603
voltios. Escribir la reacción de la celda y calcular el potencial del electrodo de plomoion plomo.
3. Supongamos que el electrodo de plomo del problema 2 se acopla con el de
plata del problema 1. ( a ) ¿Cuál es la reacción de la celda?; (b) ;cuál es el electrodo
negativo?; (c) ¿cuál es la f.e.m. de la celda?
4. Escribir las reacciones electródicas individuales y la reacción total de la celda
para cada una de las celdas siguientes. El electrodo negativo se halla en la izquierda,
(4 P b I P b S O d s ) , SOL- I/ CU++ 1 C U
(b) Cd I Cd++ /I H+ I H d g )
(c) Zn 1 Zn++ 11 Fe+++, Fe++ 1 Pt
5. Suponiendo que las sustancias presentes e n cada celda del problema 4 se encucntren en el estado estándar, calcular la f.e.rn. de cada una y el cambio de energía
libre que acompaña a la reacción de dichas celdas.
6. E? cada una de las celdas siguientes escribir la reacción correspondiente, y
dcsipnar qué reacciones escritas son espontáneas.
(a) A g I AgCKs), C1- 11 1-, A g I W I A g
(b) K 1 K+ ll C1-, H g G l d s ) 1 H g
(e) Pt 1 TI+, TI+++ 1 Cu++ l C u
(d) Ni ( Ni
/I P b n I P b
Cf
E,.,,
= 1.015 voltios, iriientras
M ,m y
M en esta reaccinn.
Signo iem
-
++
( a t / W ) p= -4.02 x 10-+voltios
Rcrpuwta:
por grado. Hállese
(c) AS = -18.55 u e.
548 Capitulo 12: Celdas electroquímicas
8. A partir de la ecuación ( 8 ) de este capitulo que nos da la f.e.m. de la celda
saturada de Weston en función de la temperatura calcular AF, A H 7 A S para la reacción de la celda a 25°C.
9. A 25°C la energia libre de formación del H,0(11 es -56,700 cavmol, mientras que la de ionimción es 19,050 cal/mol. ¿Cuál es la f.e.m. reversible de la celda
a 25°C
H,(g, 1 atm) 1 H + 1 O H - 1 O,(g, 1 atm) ?
Reipueita: ( a ) 0.403 voltios.
10. El calor de formación a 25°C del H,0(1) es -68,320 cal/mol, mientras que
su calor de ionización es 13,600 cal/mol. Calcular el coeficiente de temperatura de la
f.e.m. a 25°C de la celda dada en el problema 9.
11. Calcular los potenciales de oxidación de cada uno de los electrodos siguientes:
(a) Ag 1 AgCl(s), CI- ( a = 0.0001)
, - ( o = 1.5)
( b ) Pt 1 L ( s ) 1
( c ) Sn 1 S n + + ( o = 0.01)
(d1 H,(g, 1 atm) 1 H + ( a = 15)
12. Calcular los potenciales, y especificar la polaridad electródica de l a reacción
espontánea, para las celdas obtenidas al combinar ( o ) - ( d ) , ( b ) - ( d ) y (a)- (c) del
Respuesta: 0.3897 voltios en la primera celda.
problema 11.
13. Calcular el potencial de la celda
Fe 1 F e + + ( = = 0.6)
11 C d + + ( a = 0.001) 1 Cd
¿Cuál es la polaridad del electrodo de Cd, a fin de que la celda pueda suministrar
energía eléctrica?
14. Idear una celda en la cual tenga lugar la reacción siguiente:
tBr,(l)
+ F e + + = Br- + F e + + +
¿Cuál es l a f.e.m. tipo de dicha celda y el cambio de energia libre en calorias que
acompaña a la reacción? Es ésta, en la forma que se escribió, espontánea?
15. En la celda
Ag 1 AgBr(s),Br- ( a = 0.10)
1
Cl-(a
=
O.Ol), AgCl(s) 1 Ag
escribir la reacción, y calcular el potencial a 25-C de ella. ;La reacción escrita de
esta manera es espontánea?
16. Calcular el potencial a 25'C de
&(P
=
1 atm) 1 HBr(a* = 0.21, Hg,Br,(s)
1 Hg
Rerpuerto: 0.2212 voltia.
17. Escribir la reacción y calcular el potencial de la celda
H,(g, 0.4atm) 1 HCl(a,
=
3.0), AgCl(s) 1 Ag
18. Escribir la reacción y calcular el potencial de la celda siguiente.
Z n I Z n + + ( a = 0 0 1 ) ; J F e + + ( a =O . O O l ) , F e + + + ( a = 0.1)
1 Pt
19. El potencial de la celda
Cd I CdI,(o,), AgIís) I Ag
es 0.2860voltios a 25-C. Calcular la actividad iónica media de los iones en la
aolución y la actividad del electrólito.
Rcrpucrfa: o= = 0.403, YDd12 = 0.0656.
20. El potencial de la celda
Zn(s) 1 ZnCL,(m = 0.01021),AgCl(s) 1 Ag
es 1.1566 voltios. ?Cuál es el coeficiente de actividad iBnica media del ZnCI, en
esta solución?
~ e r ~ u > s t a0.105.
:
21. Escribir la reacción de la celda y su potencial
Hg,(s, 1 atm) 1 H,SO,(rn
=
0.05, y
=
0.340), H g 2 S 0 4 ( s ) 1 Hg
22. Indicar la cclda en la cual la constante de equilibrio de la reacción sipuiente
puede medirse:
f H,(g. 1 atm) AgI(s) = H + + 1- Ag(s)
+
+
,Cuál es la constante de equililxio de esta reacción a 25"C?
Respuesta: K
=
2.67
x
23. A partir de los resultados del problema anterior, calcular la actividad del H I
en equilibrio con el AgI(s), Ag(r) y H,(g, l atm) a 25'C.
24. Se agrega Ni finamente dividido a una solución cuya molalidad es 0.1 de
Sn+ +. ¿Cuáles son las actividades del Ni+ + y S n + + cuando se establece el equilibrio? Suponer que la molalidad es igual a la actividad en los cálculos.
Rerpuesta: ex,+. = 0.1; as,.. = 5.7 X 10-j.
25. Se añade un exceso de AgCl a una solución 0.1 N de iones Br- . Suponiendo
que la actividad sea igual a la concentración, calcular la de los iones C I y Bren el equilibrio.
26. Explicar qué celda puede emplearse para medir los coeficientes de actividad
iónica mcdia del CdC1,. Derivar una expresión de la f.e.m. de dicha celda.
27. Se desea determinar cl valor de €0 del electrodo Cu/Cu+ + y el coeficiente
de actividad iónica media del CuSO,, y derivar una expresión de la f.em. de las
celdas elegidas, explicando qué celdas pueden agruparse, y qué mediciones es posible
efectuar. Suponer que el valor de €0 del segundo electrodo usado es conocido.
28. E n las celdas
10s potenciales son 0.8453 y 2.1582 voltios respectivamente. Escribir la reacción de
cada una de ellas, y encontrar los datos de € 0 para el electrodo de sodio.
29. Keston [J. Am. Chern. Soc., 57, 1671 (1935)l encontró que para las celdas
1 q ( s ) , las f.e in para diversai mularidel tipu H : ( ~ , 1 atm) 1 H B r ( m ) B
d.ideq de HBr son.
m 00003198 0.0004042 0.000&t44 0.001355 0.001850 0.002396 0.003719
0.38383
0.36173
0.39667
0.43636
0.41243
€ 0.48169
0.47381
Ot~tcner€ 0 para la celda por el mitodo práfico, y entonces calcular los coeficientes de
actividad de cada molalidad.
30. El p t e n ~ i a de
l la celda
Hg 1 Hg2Cl,(s), KCI (saturado) 1 Cl,(P
era 1.0758 ~ ~ l t i o Usando
s.
el valor de
texto,
&O
€0
del electrodo del cloro.
=
0.283 atm)
del electrodo de calomelanos dado en el
550 Capítulo 12: Celdas electroquímicas
31. Para la celda
Z n ( H g ) 1 ZnSO, PbSO,(s)
..
1 Pb(Hs)
con € 0 igual a 0.4109 voltios, se dan los datos siguientes obtenidos por Cowperthwaite
y La Mer [J. Am. Chern. Soc., 53, 4133 (1991)l:
Molalidad del ZnSO,
F.e.m.
0.0005
0.002
0.01
0.05
0.61144
0.58319
0.55353
0.52867
Calcular el coeficiente de actividad iónica media del ZnSO, en cada una d e estas
soluciones.
32. Escribir la reacción de la celda y calcular su potencial
CL,(P = 0.9 atm) 1 NaCl (solución) 1 C12(P = 0.1 atrn)
¿Será espontánea la reacción de la celda tal como se encuentra escrita?
Respirerla: E = -0.0282 voltios.
33. Dadas las celdas:
H,(P 7 1 atrn) 1 HBr(a. = 0.001), AgBr(s) 1 Ag
( b ) igual que ( a ) con o* = 2.5
( c ) igual que ( a ) con a= = 0.01
(a)
mostrar cómo la celda (a) puede combinarse con ( b ) o ( c ) para dar una f.e.m. POsitiva y calcular el valor de ésta en cada caso.
34. ;Cuál será la reacción de la celda y el potencial de
Z n ( s ) ! ZnCl,(rn
=
0.02. y
=
:
0.642), AgCl(s) 1 Ag-Ag AgCl(s),
ZnCl,(rn = 1.50,y = 0.290)
1 Zn(s)
?
Rerpueiia: 0.1359 voltios.
35. Hallar la reacción de la celda y calcular su potencial
C d ( r ) 1 CdSO,(m
=
0.01, y
=
0.383), PbSO,(a) 1 Pb-Pb 1 PbSO,(s),
CdSO,(m = 1.00, y = 0.042)
1 Cd(s)
36. Hallar la reacción y calcular el potencial de la celda con transferencia
siguiente:
Pbis) ' PbSO,(s),CuSO,(rn =O.?, y
=
0.110) 1 CuSO,(m
=
y
0.02,
o . s o ) , pbso,(s) I Pb
=
El número de transporte del C u + + es 0.370. ,Es espontánea la reacción de la celda
en la forma escrita?
Rerpuesta: 0.0117 voltios; si.
37. La celda de transferencia
H,(P
=
1 i t m ) 1 H,SO,(m
=
0.005, y
=
0.643)
1 H,SO,(rn
y
2 00,
0.125) 1 H,(P
=
=
=
1 atm)
tiene E = 0.0300 voltios a 25OC. Encontrar l a reac~iónde la celda y el númem de
transporte de los iones hidrógeno.
.
.,
,
,
..
38. La f e.m. de la celda siguiente
Ag(s) 1 AgCI (saturado),KCl(m
=
0.05, y
Problemas 531
8
=
0 817) 1 KNO,
S
1 AgNO,(rn
= 0.1,
7 = 0.723) .4g(r)
es 0.4312 voltios. Calculu a partir de estos datos el producto de rolubilidad del .4gCI.
Respuesto: 1.52 x 10-'O.
39. Mostrar cómo se usan los valores de Ea dados en la tabla 12-3 para calcular
cl producto de solubilidad del PbSO,.
40. Mediante los valores de Eo señalados en la tabla 12-3, calcular
el proceso electródico
Fe=Fe+r+
3 0
&O
y L\Fo para
+
Respuesta:
€0
= 0.037 voltios; AFo = -2,560 cal.
41. La f.e.m. de la celda
H,(s)
repulador
11 electrodo
normal de calomel
es 0.6885 voltios a 40°C cuando la presión bammétrica es 725 mm. ¿Cuál es el pH
de la solución?
Respuesta: 6.60.
42. La solución reguladora de la relda del problema precedente se reemplaza
con otra estándar de p H = 4.023, mientras las restantes condiciones permanecen invariables. ?Cuál sera el potencial de la celda?
43. La celda
Ag(s) ( AgCl(s), HCl(0.1 N ) 1 vidrio sol. reguladora
( 1 electrodo
de calomel sat.
dio una f.e.m. de 0.1120 voltios cuando el p H de la solución reguladora era 4.00. Si
se usa una de éstas con p H desconocido, el potencial encontrado cs de 0.3865 voltios.
,Cuál es el pH problema?
44. ;Cuál seria el potencial de la celda usada en el problcma antcrior si se usa
Reipueitn: 0.0232 voltios.
una solución rcguladora cuyo p H = 2.50?
45. 100 r c de una solución de IICI, por titulación con KaOH 0.1000.V, prcsentaron los valores de pH siguientes al adicionar diversos volúmenes de base:
ccNaOH
PH
ee NaOH
PH
9 O0
9 50
9.75
9.90
3.00
3.27
3.66
4 15
10.00
10.10
10.25
10.50
7.00
9.70
10.40
10.76
Determinar ( a ) el punto de equivalencia de la titulación: ( b ) el p H de la solución
en cste punto, y ( c ) la normalidad de la solución de HCI original.
46. Cien cc de ácido acético 0.0100N re valoran con NaOH 0.1000 hl.(a) (Cuál
es rl volumen de base requerida para alcanzar el punto de equivalencia? ( b ) ;Cuál es
el pH de la solución m m e punto?
47. Cien cc de KCI 0.0100 N se titulan con AgSO, 0.1000 h'. Calcular el potencial del electrodo de plata m la solución en el punto equivalente bajo el supuesto de
que la actividad iónic* es igual a la conrentración. El producto de solubilidad del
AgCl r s 1.56 X 10-'O.
48. i ~ u á lde las celdas siguientes. en la forma escrita, es clectrolitica y cuál una
cclda primaria:
552 Capitulo 12: Celdas electroquúnicas
(a)
(b)
(c)
(d)
(e)
Cd(s) 1 CdS0,(3 = l ) , PbSO,(s) 1 Pb(s)
Au(s) 1 H,SO,(solución) 1 P t ( s )
Pt(s) 1 Na,SO, solución 1 Pt(s)
Ag(s) 1 AgNO,(m = 0 5 ) / I AgNO,(m = 0.005) 1 As(s)
Pb(sj 1 P b + + ( a = 1 ) 4 g + ( o = 1 ) jAg(s)
49. Escribir las reacciones electródicas y de celda que tendrán lugar en las ante.
riares cuando se hace pasar una corriente a través de las mismas.
50. Se emplea una batería de 2.00 voltios en una electrólisis cuya f.e.m. es de
1.45 voltios. Si la resistencia del circuito total es de 10 ohmios, ( a ) jcuál es la
magnitud de la corriente, y ( b ) qué cantidad de calor se libera cuando fluye un fa=.
dio de electricidad?
Respuesto: ( a ) 0.055 amperios; ( b ) 12,690 cal.
51. Bajo condiciones reversibles, jcuál será el potencial aplicado necesario para
iniciar la electrólisis en cada una de las celdas siguientes?
(a)
(b)
(c)
(d)
Pb(s) 1 PbSO,(s), H,SO,, PbSO,(r) ( Pb(s)
Pt(s) I F e + + ( a = l ) , F e + + + ( a = 1 ) 1 B r ( o = l ) , A g B r ( r ) 1 Ag(s)
Ni(s) INiSOo(a = l ) , PbSO+(s) 1 Pb(Hg)
Ag(s) 1 AgClts), ZnCl,(a = 1 ) / Zn(s)
EL valor de
voltios.
E0
para el electrodo d e Pb(Hg) 1 PbSO,(s), S 0 4 - (a = 1 ) es 0.3505
52. Repetir el problema anterior en cada una de las celdas si&ntes:
1
1 Pt(s)
(b) Pt(s) ) CdCL,(a = 1) 1 Pt(r)
( c ) Pt(s) 1 NiSO,(a = 1 ) 1 P t ( s )
(a) Pt(s) H I ( a = 1 )
53. Calcular los potenciales reversibles de descomposición de las celdas siguientes:
( a ) Pt(s) 1 HBr(m = 0.05, y = 0 860) 1 Pt(s)
( b ) Ag(s) 1 AgNO,(rn = 0.5, y = 0.526) 1 Ag?iO,(m
I
=
0.01,
y
=
0.902) ! As(s)
Reipuerto: (a) - 1.2269 voltios.
54. En la celda
CdC&(my= 1)
I
NiSO,(rny
=
1)
jcuKl es la reacción y el potencial reversible de dercompasición cuando se inicia la
electrólisis?
55. El sobrevoltaje del H, sobre el plomo se determinó en una solución 0.1 malal
del cátodo de
d e H,SO, (y = 0.265) al medir durante la electrólisis el
plomo contra uno normal de calomel. Se obtuvo un potencial de 1.0685 voltios
¿Cuál er el sobrevaltaje del H, sobre el Pb?
Raspuerto: 0.713 voltios.
56. Los sobrevoltajes del H 2 y OZ en la Ag para una densidad de corriente de
0.1 amp/cms son 0.87 y 0.98 voltios respectiuamente. i C u á l es el potencial de d ~ s composición de una solución diluida de KaOH entre electrodoi de Ag para esta densidad de corriente?
57. (=) Usando los datos de la tabla 12-7, p d i c a r el sobrevoltaje contra el
losaritmo de la drnsidvd de corriente de la Ag, y evaluar las constantes de a y b
Problemas 553
la ecuación ( 9 9 ) . ( b ) < A qué densidad de corriente el sobrevoltajc será de
0.80 voltios?
58. El sobrevoltaje dcl H, sobre Pt pulido es 0.24 voltios cuando la densidnd
de corriente es 1 mliampe~o/cm?. i C u á l sera el potencial de deposición del H,
sobre este electrodo en una rolución cuyo p H = 3 ?
Respuesto: 0.42 voltios.
59. El sobrevoltaje del H, sobre el Zn es 0.72 voltios. Si se desea depositar Z n + +
de manera que la concentración de Cste sea menor de 1 0 P 4 moles/litro, icuál será el
valor mínimo de p H en la solución?
60. El sobrevoltaje del H, sobre el Fe es 0.40 voltios para una densidad de corriente de l rndcm2. En una solución que contiene F e + + con una actividad igual
a la unidad. (Cuál es el valor mínimo del p H en el cual es posible lograr la deposición dcl F e bajo estas condiciones?
61. Una solución contiene Fe+ + y Zn+ + y su actividad es la unidad. Si el sobrevoltaje del H, en el Fe es de 0.40 voltios (cuál será el p H máximo dc la solución a
fin de depositar Fe pera con producción de gas en el cátodo antes de la deposición
del Zn? (Cuál es la actividad de los iones F e + + cuando comienza este desprendimiento gaseoso?
Reipueita: p H = 6.11, aFeff = 1.41 X 10-Ir.
62. Una solución contiene A s + (a = 0.05), Fe+ + (a = 0.01), Cd+ + ( a = 0.001),
Ni+ + ( a = 0.1) y H + ( a = 0.001). El s o b r e d t a j e del H, en la Ag es 0.20 voltios,
ruhre el Xi vale O 2 1 xdtios, solxe el hicrro O 18, y s o l m el Cd 0 30 \i>ltii,s Predecir
qué suceder& en un cátodo sumergido en esta solución cuando el potencial aplicado
se aumenta gradualmente desde cero.
63. Una solución contiene iones F e + + a una actividad unidad. ( a ) ¿Bajo condiciones reversibler cuál es la actividad del C d + + en la misma solución a fin de lograr
la deposición simultánea del Fe y C d ? (b) (Cuál será La actividad de los ioiics NI-+
para lograr simultáneamente Ni y F e ?
64. El sobrevoltaje del O, en el ánodo dc Pt es 0.72 voltios. ( Q u é ion se depositará primero desde una soluciSn cuyo p H = 7 conteniendo CI-, si su actividad
es 0.1?
65. Lno. solución quc contiene Z n + + , K a + y H + con una actividad igual a la
unidad, se electroliza con un citodo de Hg. Explicar quC sucederá en el cátodo
cuando el potencial aumenta gradualrnente.
66. Se hace una solución 0.1 molar d e As+ y 0.25 molar de KCN. Si 13 comtante de disouación del Ag(CN);, K = [ ( A g + ) (CN)2]/[Ag(CN;], es 3.8 X lo-".
¿Cuál será la concentración de los iones Ag en esta solución, y cuál el potencial de
dcposicicip de la AS? Supóngase que las actividades son iguales a lis concentraciones.
Reipueifa: 1.52 x 10P1í; -0.196 voltios.
67. Una solución es 0.1 molar d e Au+ y 0.1 molar en A s t . El potcncid estándar
de reducción del A"+ es 1.68 voltios, mientras que la constante de disociación del
Au(CN);, K = [(Au+)(CN-)z]/[Au(CK):], es 5 x 10-a'J. ¿Cuál es la conccntración de NaCN que debe añadirse para depositar Au y Ag sirnultáneamcnte?
ClNETlCA DE LAS REACCIONES
HOMOGENEAS
La cinética química es aquella rama de la físico-química que estudia
la velocidad de las reacciones y sus mecanismos.
Una pre,wnta de importancia que la termodinámica no plantea, es:
¿Con qué rapidez y cuál es el mecanismo de una reaccidn? L a termodinámica considera únicamente las relaciones de energía entre los reactivos
! lo? productos de una rcaccióii, w i intentar scñalnr la5 etapas d? paso,
ni la rapidez con que se alcanza el equilibrio. La cinética complementa a la
termodinámica al proporcionar información de la velocidad y mecanismo
de transformación de reactivos en productos.
Xo todas las reacciones se prestan a un estudio cinético. Así, las iónicas
Proceden con tanta rapidez que parecen instantáneas. Las explosiones y
otras, de las cuales N,O, --t 2 NO: constituye un ejemplo, tambitn proceden tan rápidamente, lo cual imposibilita determinar su >elocidad. o se
requieren procedimientos especiales para determinarla. Por otra parte,
al9na.s reackiones son tan lmtas que para observar un cambio perceptible
en ellas. es necesario el transcurso de meses o aún años, a la temperatura
ordinaria. Entre ambos extremos quedan las reacciones cuyas velocidades
resultan \alorables. A esta categoría corrrsponden las gaseosas, i y a l que
murhas otras en solución que co~nprerideritanto las sustancias ors'
wnicas
como las inorb'
ranicas.
La velocidad de una reacción depende de la naturaleza de las sustancias, temperatura, y concentración de los reactivos. Un incremento de
temperatura produce casi invariablement~un aumento dr: velocidad; en
efecto, en muchas reaccionrs un asccnao de 10°C d u p l i ~ adicha velocidad,
556
Capítulo 13: Cinética de las reacciones homogénea
y a veces el efecto es aún mayor. De igual manera, con excepción de alpu.
nay reacciones (de orden cero), en las cuales no ejerce efecto la concentra.
ción, el aumento de la concentración inicial origina una aceleración en la
velocidad. Esta no permanece constante durante el proceso de transforma.
ción, sino que es máxima al comienzo y decrece a medida que se consumen
los reactivos. Teóricamente, es necesario un tiempo infinito para que esa
velocidad se haga cero. En la práctica, consideramos que aqutlla procede
con tal lentitud, después de un cierto tiempo, que se lleva a cabo en un
intervalo finito de tiempo.
Además, muchas reacciones se ven influidas por la presencia de sustan.
cias con capacidad de acelerar o disminuir la velocidad, y que se conocen
con el nombre de catalizadorcs, y las reacciones afectadas se dice que son
cataliradas. Las reacciones influidas por la luz se denominan fotoquimicas,
y se encuentran muy estimuladas cuando la luz de frecuencia apropiada
pasa por la mezcla reaccionante.
Cinéticamente las reacciones se clasifican en homocéneas o heterogéneas. Las primeras tienen lugar en una sola fase. Si hay dos o más de éstas
en un proceso, como sucede en la reacción de un gas en la superficie de un
catalizador sólido o en las paredes de un recipiente, se dice que la reacción
es heterogénea. Los principios que rigen la cinética de algunas reacciones
heterogéneas se discutirán en el capítulo 20. Ahora dedicaremos atención
a tres tipos de reacciones homog&neas, que son: ( a ) sin catalizar, ( b ) reacciones en cadena, y ( c ) catalizadas. Las fotoquímicas se discutirán en el
capitulo 19.
MEDICION DE LA VELOCIDAD DE REACCION
LOS estudios cin6ticos se llevan a cabo a temperatura constante. Se
prepara la mezcla de reacción de composición conocida y se termostatiza,
midihdose la disminución de concentración de los reactivos y aparición de
productos en función del tirmpo, por un procedimiento adccuado. A partir
de los datos de conccntración-tiempo se deduce el comportamiento del
proceso, con ayuda de ciertos principios que se darán a continuación.
La dependencia de la velocidad con la temperatura se obtiene al repetir
este proccdi~nicntocn cierto número adccuado de tempcraturas.
La forma más conveniente de se@ los cambios de concentración que
tienen lugar en una reacción, es remoier muestras de un sistema en distintos
intervalos dc tiempo, detener la reacción y analizar las muestras para determinar la concentración del reactivo y producto. Sin embargo, si es posible,
se prefiere seguir los cambios de concentración en un sistema que reacciona
usando alguna ~ r o p i e d a dfísica que vana con el tiempo, y desde la cual
se pueden deducir las concentraciones necesarias. En las reacciones gaseosas
que involucran cn cambio de volumen, la ~ropiedadmis comúnmente ob-
Orden y grado molecular de las reacciones
557
servada es la variación de prcsión manteniendo constante el volumen, o el
cambio de éste cuando aquélla es constante. Este último método, que se
utiliza a veces en los sistemas líquidos, se llama dilatometría. Otros métodos
físicos que se emplean en condiciones adecuadas son la conductividad, variación de índice de refracción, desprendimiento de gas, espectroecopía y
colorimetría, dispersión de luz, polarografía, susceptibilidad magnética, y es-
ORDEN Y GRADO MOLECULAR DE LAS REACCIONES
L a velocidad de una reacción química es aquélla a la que las concentraciones de las sustancias reaccionantes varían con el tiempo, es decir, -dC/dt,
donde C es la concentración del reactivo y t el tiempo. El signo menos usado
indica que la concentración disminuye con el tiempo. Esta dependencia de
las sustancias que reaccionan viene dada por la ley de acción de mara,
que se expresa de la forma siguiente: la velocidad de una reacción en cado
instante es proporcional a la concentración de los reactivos con cada concentración eleuada a una potencia igual al número de moléculas de cada
esjecie participe en el proceso. Así, por ejemplo:
,4 -+ Productos
(a)
la vclocidad es proporcional a CA,en
2 A -+ Productos
A
+ B -+
Productos
a C: y GAGB,respectivamente, mientras que en el caso
+
A 2 B -+ Productos
2 A t B -+ Productos
a CAP, y CiC,. Estas proporcionalidades indican las diferentes funciones
con la concentración obtenidas a una temperatura constante para las diversas reacciones, y para distinguirlas se usa el término: orden de reacción,
que significh la suma de todos los expouentes a que se encueutran elevadas
las concentraciones en la ecuación de uelocidad. Así, cuando la velocidad de
una reacción está dada por
donde k es una constante, los órdenes de reacción de los constituyentes individuales son nl, 712, ns,etc., y el orden total, n, es
558 Capítulo 13: Cinética de las reacciones homogéneas
En 10s ejemplos incluidos desde ( a ) a ( e ) el orden de la reacción es
idéntico al número de las moléculas reaccionantes que participan en el pro.
ceso. Así, la reacción de primer orden ( a ) es también unimolecular, las de
segundo orden ( b ) y ( c ) son bimoleculares, mientra3 que las de tercero
( d ) y ( e ) son trinzolcculares. Aunque esta identidad del orden de una reac.
ción con el número de moléculas que reaccionan como se encuentra esta.
blecida en la ecuación estequiométrica se obseria en muchas ocasiones, no
se cumple siempre. En las reacciones
+
CH,CHO -+ CH,
CO
3 KClO -+ KCIO,
2 KCI
+
podríamos anticipar a pnori que la primera es de primer orden, y la segunda
de tercero. En realidad ambas reacciones son de segundo orden. Por estas
consideraciones, debe hacerse una dktinción entrc el número de moléculas
que participan en una reacción o el grado molecular, es decir, el número
de moléculas comprendidas en la etapa conducente a la reacción, y el
orden de ésta. Según la primera, las reacciones son unimoleculares, bimoleculares, etc., dependiendo de si una, dos o más moléculas están involucradas en la velocidad de la etapa determinante. Por otra parte, el término
orden de reacción se aplica a la dependencia de la velocidad observada
con las concentraciones de los reactiios.
Es evidente que el orden, o con este fin el grado molecular, de una
reacción no son predecibles siempi-e a partir de las ecuaciones estequiométricas de una reacción sino que cada una de ellas debe investigarse cinéticamente para conocer el orden y grado molccular. Además, hay que tener
un cuidado especial en la interpretación del orden de una reacción observada,
y en inferir del mismo el grado molecular y el mecanismo del proceso.
Cuando el orden de una reacción concuerda con la ecuación de la velocidad
obtenida mediante la aplicación de la ley de masas a la ecuación estequiomCtrica de la reacción, es bastante seguro suponer que la reacción procede
según la ecuación química. Si no es así, hay que idear un mecanismo acorde
con el orden de la reacción obserada y con la ecuación total del proceso.
Al desarrollar las ecuaciones de velocidad en las reacciones de diversos
órdenes procederemos con el supuesto de que el grado molecular y el orden
-son idénticos y cuando sea necesario haremos distinción entre los dos.
REACCIONES DE PRIMER ORDEN
Según la ley de acción de masas la velocidad de cualquier reacción
monornolecular
A -+ Productos
(3)
del= ser en ciialquier instante t proporcional a la concentración de A, CA,
presente en ese momento, es decir,
Reacciones de primer orden 559
El factor de proporcionalidad k , se denomina velocidad csjxci/ica o constante dc ~ e l o c i d a d específica de la reacción dc primer orden. Al hacer
C, = 1 en la ecuación (4) se deduce que su sipificado es la v~locidadde
la reacción cuando la concentración de A es constante e igual a la unidad.
Las dimensiones de k , se deducen de la ecuación k , = ( - l/Cn) ( d C , / d t L
que son el recíproco del tiempo, esto es, la frecuencia. Para cualquier reacción de primer orden, k , debe ser una constante característica de la reacción, independiente de la concentración y función únicamente de la temperatura.
Antes de proceder a integrar esta ecuación diferencial? es aconsejable
transformarla. Para hacerlo designemos por a la concentración inicial de A,
y por x el decremento de A durante el tiempo t . Entonces C A = a - x en el
instante t,
- 1 - -d(a - x) -dx
-dt
dt
dt
y la ecuación (4) se convierte en
que nos d a la velocidad de una reacción de primer orden. en función de la
concentración inicial y de la cantidad de sustancia que h a reaccionado. Al
integrar la ecuación (5) teniendo en cuenta que al cornencar la reacción
t = O y x = O, y que después de un tiempo t, x = x. resulta:
[- ln
(o
-
z)]ó
-
[ k i t ] 'o
Cudlquier reacción de primer orden debe satisfacer la cciiación ( 6 ) .
para <ono<er<i una paiti<ulai la ohedere, rxisteri di\ersos m t t d o r . El primrio PS dirponrr de la c o n r ~ n t r a r i hinicial otras, a ciertos i n t ~ n a l o dc
i
tiernFo. t del icactivo, a , ( n - x ) , etc., las cualrs ~t reempltizm rn la eruación p r ~ ~ ~ o r c i o n a neld ovalor de k,. Si la reacción es de primcr orden, sc
obtienen tina serie de lalores de k, que son igiialcs dentro del margen de
error de ]a cxpericncia. Sin embargo, si aqucllos valorcs prcsrmt,in un alla
560 Capítulo 13: Cinética de las reacciones homogéneas
apreciable, la reacción no es de primer orden y, entonces, deben probarse
otras para encontrar la que satisfaga los datos observados.
La ecuación ( 6 ) puede comprobarse también gráficamente. Reordenán.
dola resulta
Como para cualquier experimento a es una constante, una gráfica de
log ( a - x ) contra t nos da una línea recta, en la cual la intersección en el
eje y será el log,, a y la pendiente es: (-k,/2.303). Por lo tanto, cuando
se construye una gráfica a partir de los datos experimentales y se obtiene
una relación lineal, tenemos una reacción de primer orden; y, de su pendiente, se deduce que k, vale
kl
= -2.303 (pendiente)
(8)
Existe un tercer procedimiento de probar las reacciones de primer orden
conocido como método de vida fraccional, en el cual el tiempo necesario
para descomponer una fracción definida de reactivo, ordinariamente la
mitad se determina para cierto número de valores diferentes de a. Cuando
la mitad del reactivo se ha descompuesto, a - x = a/2, y el tiempo, t , ,,
necesario para llevar a cabo esta descomposición vale según la ecuación (6)
La cantidad t,,, es el periodo de vida media de la reacción. De acuerdo
con la ecuación (9) el periodo de uida media de una reacción de primer
orden es indejendiente de la concentración inicial. Con otras palabras, en
reacción de primer orden se tarda el mismo tiempo para llegar a la mitad
de la concentración inicial, tanto si ésta es elevada o baja. La tabla 13-1
nos enseña que este requisito lo cumplen las reacciones de primer orden,
como en el caso de la descomposición térmica de la acctona gaseosa a
601°C. Aunque la concentración inicial de la acetona varía unas cuatro
veces, el período de vida media permanece sin embargo constante dentro
de los límites de medición experimental. Al tomar un promedio de ti/* =
81 segundos, hallamos para la constante de velocidad de esta reacción,
Ejemplos de reacciones de primu orden 561
Al calcular las constantes de velocidad es práctica común expresar el
tiempo en minutos o segundos. Sin embargo, en ocasiones se expresa también en horas o, incluso, días. Las concentraciones deben expresarse en
moles por litro invariablemente, cuando las reacciones son en soluci6n;
O, en estas unidades u otras adecuadas de presión, cuando se trata de gases.
T ABLA 13-1. Periodo de vida media
de la descompasición térmica de la
acetona a 601°C
a
t%
íw)
(mm Hg)
Hinshelwood y Hutchiron, Proc.
Roy. Soc., 111A, 345 (1926).
En cualquier caso, para claridad total, deben establecerse las unidades
de tiempo y concentración que determinan a k, lo mismo que su temperatura. Sin embargo, en el caso de las reacciones de primer orden, y sólo en
éstas, no importan las unidades en que se expresa la concentración, puesto
que k, depende de la relación de las dos concentraciones. En consecuencia,
en tanto a y a - x se expresen en las mismas uriidades, el valor de la relación permanece invariable, y pueden emplearse cualesquiera unidades.
EJEMPLOS DE REACCIONES DE PRIMER ORDEN
En este grupo sc encuentran las disociaciones térmicas del óxido nitroso,
pentóxido de nitrógeno, acetona, aldehído propiónico, algunos éteres alifáticos, compuestos azo, minas, bromuro etílico, y la isomerización del
d-pineno al dipenteno. Como ejemplo típico de estas descomposiciones térmicas se encuentrah las del azoisopropano a hexano y nitrógeno
investigado por Ramsperger' en el intervalo de presión de 0.0025 a 46 mm
de Hg y de temperatura entre 250 y 290°C. La velocidad de reacción fue
estudiada por mediciones de presión realizadas con un instmmento McLeod.
Los únicos datos necesarios son la presión inicial del reactivo y las totales
a diversos grados de d~omposición.De estas presiones se calcula la wnsRamsperger,
l. A".
Cham.
Soc.,
50, 714 (1928)
562 Capítulo 13: Cinética de las reacciones homogéneas
tante de velocidad del proceso de la manera siguiente: Si designamos por
Pi a la presión inicial del azoisopropano, P a la total, PA y x la presión y
descenso de la misma en el instante t, entonces en cada etapa de la reacción
se verifica, P, = P; - x, Px, = P,,,,, = x, y la presión total del sistema
será
P = P*
PY, Pcaxin
+
+
=(P;-x) + s + x
=P;f x
D e esta ecuación hi~llamosx = P - P;: y al sustituir este valor de x en
P., = P; - x, obtendremos
Como a en la ecuación (6) es proporcional a Pi, y ( a expresión de k, vale,
S)
lo es a P.,, la
Las constantes así calculadas a partir de los datos experimentales en una
serie típica de mediciones a 270°C se muestran en la tabla 13-2. La columna 1 d a el tiempo en segundo