Cuando una hemorragia interna como resultado de un embarazo complicado hizo que Maria Becerra tuviera que ser operada de urgencia, la cantante argentina se enfrentó a una recuperación con forma de montaña rusa. Todas esas emociones quedaron plasmadas en QUIMERA, su tercer álbum: 17 canciones producidas por XROSS, que incluyen colaboraciones con El Alfa, Paulo Londra, TINI, Taichu y Jay Wheeler. Al igual que la quimera en la mitología griega, Maria Becerra descubrió que también estaba hecha de varias partes, que en el disco se presentan como alter egos: abre con Jojo, el león, y todo su poder. Sigue con Shanina, el fuego del dragón. Continúa con Maite, el águila que eleva su vuelo en busca de libertad. Y después está Gladys, la cabra sintonizada con lo terrenal. Todas estas partes se sintetizan en las últimas cinco canciones. Ya no hay alter egos, tenemos a Maria Becerra, compuesta de una fusión tan diversa (del dembow de “HACE CALOR” a la balada de “TATÚ”) como poderosa en su intimidad: en “MI AMOR” se reconcilia con sus cicatrices y encuentra en un abrazo la luz que buscaba.