JOSELITO MONTERO OVIEDO

Nació en el municipio de El Cercado, Republica Dominicana, el 15 de Enero

de 1980. Es el número once de doce hermanos. Los primeros años de su
vida los vivió en el campo junto a sus padres y parte de sus hermanos. De
niño se caracterizaba por ser alegre, bondadoso, muy travieso y
extremadamente astuto.

En 1991 se fue a vivir con una de sus hermanas a la ciudad de Santo Domingo, pero a los pocos
días de estar en la ciudad entró en un estado depresivo, por lo que su hermana tuvo que
llevarlo de vuelta a su tierra natal.

A finales de 1993 muere su padre de un modo muy extraño. Esta inesperada muerte junto a
las amargas experiencias que vivió en Santo Domingo lo convirtieron en un adolescente
totalmente retraído.

Después de terminar la educación básica en la escuela rural de Derrumbadero, lo enviaron al

Municipio de San Juan de la Maguana, a casa de su abuela, para cursar allí sus estudios
secundarios. En aquel pueblo estuvo a punto de morir producto de otra depresión. Mientras
vivió en San Juan de la Maguana usó su tiempo libre para escribir poemas tristes y cuentos
trágicos, escritos que se perdieron cuando el huracán George azotó aquel pueblo.

Al terminar sus estudios secundarios se marchó para la ciudad de Santo Domingo a estudiar
Ingeniería Industrial, ya que fue premiado con una beca estudiantil por sus altas calificaciones.
En Santo Domingo se entera de que un empleado del gobierno se las había ingeniado para
transferirle su beca a uno de sus hijos. Aquella noticia lo entristeció mucho, pero se resignó e
ingresó a una universidad económica: la universidad O&M. Después de cursar el noveno
cuatrimestre en aquella universidad abandonó los estudios para dedicarse por completo a la
vida espiritual y al autoaprendizaje.

Estos son algunos de sus trabajos más leídos:

¿Por qué no soy religioso?

¿Cómo viajar fuera del cuerpo?
Amores de otro mundo
Te invito a despertar
Huyendo del egoísmo
Abre tu mente
Cuentos para reflexionar
Mis mejores viajes fuera del cuerpo
Un sureño en Nueva York
No te vayas de tu tierra
Experiencias Místicas
Lo que espero de ti
Título: Más allá de lo establecido
Autor: Joselito Montero
Potada: Joselito Montero
 ÍNDICE

PARTE- I
Introducción………………………………………….………...... 7
Existe una realidad superior………………………….………... 8
Del infierno a la gloria……………………………………...….. 12
Mis más grandes impresiones………………………….…….. 13
La luz al final del túnel…………………………………………. 16
Uno de mis últimos viajes extracorpóreos……………..….… 17

PARTE- II
Experimento o fase………………..………..……...…….….... 19
El verdadero infierno........................................................ 20
El poder de Dios…………………………………….……...….. 22
La oveja descarriada………………………….……………….. 23

PARTE- III
El peor de nuestros amos…………………………….………. 26
El secreto de la felicidad………………………………........… 28
El amor incondicional……………………………………….…. 32

PARTE- IV
El mundo es piramidal……………………………………….... 35
Ellos eran más sabios………………………………...…...….. 38
El peligro de la deforestación………………………...………. 42
La tierra sin humanos estaría mejor…………………………. 43

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PARTE- V
El sentido de la vida…………………………………………… 45
Atrapados en la ilusión………………………………………... 46
¿Quiénes somos?................................................................ 47
Somos más grandes de lo que creemos………..……….... 48
Todos somos hermanos…………………………………...…. 49

PARTE- VI
Las piedras misteriosas………………………………………. 51
Sólo pude ver dos de ellos……………………………...….... 54
El misterio de los vampiros……………………………….….. 56
El más grande de los misterios…………………………...…. 59

PARTE- VII
Soy un rebelde……………….…………………….………….. 64
El origen de mis dudas……………………………………….. 65
De ateo a creyente…………………..……………..….……... 67
No soy un solitario………………..…………………………… 68
La tierra donde nací…………………………………………... 72

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PARTE- I

INTRODUCCIÓN
Antes que nada debes saber que este trabajo no es para
incitarte a que te rebele en contra del orden establecido. La
rebeldía, sea del tipo que sea, acarrea severos castigos y no
quiero que después me culpes… Tu rebeldía es algo que debe
salir de tu interior, no del mío ni del de nadie.
Claro, si tú has decidido leer un trabajo tan diferente como lo es
este, es porque en algún momento tú has debido dudar de
muchas de las cosas establecidas. En pocas palabras, algo
dentro de ti te está incitando a la rebeldía.
No recuerdo la fecha, pero un día amanecí con los cables
cruzados y comencé a observar todo a mí alrededor incluyendo
el comportamiento de la gente. Un tiempo después comencé a
leer libros diferentes… Hoy tengo las repuestas a muchas
interrogantes que a través del tiempo me he venido planteando.
Imagina lo que este libro haría con alguien que ya esté
despertando como de seguro lo estás tú.
Los conocimientos que aquí encontrarás son muy simples, casi
insignificantes para un mundo tan materialista como lo es éste,
pero, al contrario de las mayorías de los conocimientos
establecidos, son poderosos. Lo digo porque estos
conocimientos tienen el poder suficiente para romper las
cadenas que mantienen a la conciencia atada a la ilusión.
A pesar de su gran valor, este trabajo es como un pequeño
estímulo… eres tú quien decidirás si te detienes o continúas
buscando la verdad que realmente libera.
Si decides buscar la verdad, y la encuentras, de seguro te
rebelarás en contra de muchas de las cosas que el hombre ha
establecido como verdades incuestionables sin importar las
consecuencias… al menos que no quieras hacerte cómplice de
la mentira.
Recuerda que Sócrates, Jesús y, posiblemente, algunos de los
mártires posteriores a ellos sabían perfectamente que en
cualquier momento los ciegos de aquellas épocas y los que se
negaban a ver la verdad, los matarían… pero ni eso los hizo
callar: ellos sabían que vivir sumergido en la ilusión no es vivir.
En fin… dormir es bueno, a veces es hasta placentero, pero
créeme, despertar es mucho mejor, porque la vida ilusoria,
aunque esté cargada de placeres, es algo insignificante si la
comparamos con la vida eterna.

EXISTE UNA REALIDAD SUPERIOR

Aquella tarde estaba yo contemplando el otro lado, sorprendido de

todas las cosas que veía a mí alrededor. Me sorprendía mucho al ver
aquellos hermosos seres de rostro alegre caminando de un lado a
otro sin preocupación ni prisa. Y más me sorprendía ver como a
muchos de ellos les brotaban alas en sus espaldas: muchos de
aquellos seres volaban y se desaparecían en el aire como por arte de
magia… Fue la primera vez que vi seres alados en una experiencia de
este tipo.

Aquel lugar era realmente bello, y el grado de libertad que yo sentía

allí era indescriptible. Allí la vida sí tenía sentido, al contrario de lo
que sucede acá en la tierra, que al parecer la vida carece de sentido
alguno.

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Yo me emocioné mucho al presenciar todo aquello, sobre todo aquel
inefable paisaje… Pero por una extraña razón sentí un fuerte deseo
de traer de vuelta mi conciencia a esta pesada dimensión
tridimensional en la que vivo, y lo hice.

Luego de meter mi conciencia en mi cuerpo, me levanté y respiré

profundo. Unos minutos más tarde me sentí un poco aburrido, por lo
que me recosté nuevamente en mi cama y me relajé. Ya relajado,
entré nuevamente en trance y volví a visitar aquel paradisiaco lugar…

Al leer los párrafos anteriores de seguro creíste que todo esto es

producto de mi imaginación, pero en verdad esto que acabas de
leer es más real que esta pesada realidad en que vivimos aquí
en la tierra: aquella es una realidad que está más allá del
entendimiento de la mayoría de la gente…
Si eres nuevo en esto, sé que los párrafos anteriores te han
sorprendido mucho; pero créeme, cuando alguien se atreve a
escribir cosas como éstas, o está loco de remate, o es un
charlatán o ha investigado cuidadosamente todo este asunto y
está totalmente convencido de que esto no es alucinación,
proyección mental o algo por el estilo.
En verdad no sé en qué lugar del universo se encuentran
aquellos inefables mundos a los que, sin saber cómo, viajo; lo
único que sé es que aquellos mundos existen, y son muchos los
humanos que logran viajar a ellos.
Esto, aunque puedo controlarlo, me pasa de forma natural cada
cierto tiempo, o cuando estoy en la cima de una alta montaña, y
como podrás imaginar yo aprovecho aquellos momentos de
extrema sensibilidad al máximo.
En escritos anteriores yo llamo este fenómeno con los mismos
nombres con los que los ocultistas y los investigadores
acostumbran a llamarlo, pero en este trabajo sólo trato de
describir mis experiencias.

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Este fenómeno, aunque se ha investigado mucho, es algo que
casi nadie conoce a la perfección, por lo extraño, por lo complejo
y por lo contradictorio que es.
Algunos incrédulos, al leer los primeros párrafos, dirán que yo
estuve bajo el efecto de alguna droga o algún alucinógeno; otros
dirán que soy un charlatán o, como dije antes, que estoy loco de
remate. Pero aunque se les haga difícil creerlo, yo nunca he
consumido ningún tipo de drogas: ya lo he dicho en escritos
anteriores. Tampoco creo que las drogas logren llevar la
conciencia de un ser humanos a un mundo ultra-real. Se lo digo
porque he visto documentales de drogadictos en los cuales ellos
cuentan cómo se sienten cuando están bajo el efecto de las
drogas, y lo que ellos cuentan no es ni sombra de lo que me
pasa.
No sé lo que tú piensas de mí, pero en varias ocasiones, por las
redes sociales, me han dicho que soy un charlatán de cuarta,
que estoy loco de remate y que soy un pobre iluso. Pero créeme:
yo no soy un charlatán, ni estoy loco ni soy un iluso; al contrario,
mi conciencia es extremadamente clara y precisa. Y si viajar a
los mundos superiores es estar loco, me siento orgulloso de
estarlo. ¡Cómo avergonzarme de algo así, si aquello es lo más
maravilloso que me ha pasado en este mundo!
Aunque las cosas que escribo parecen locuras, esto le servirá de
mucha ayuda a mucha gente en todo el mundo. Yo estoy seguro
que en toda parte del mundo existen personas sensibles como
yo, personas que se le hace muy fácil entrar a otras
dimensiones... Si por cosa del destino este libro llega a las
manos de esas personas, ellos cambiarán su vida para bien
como la cambié yo cuando un libro como este llegó a mis manos
por primera vez.
Yo no soy un charlatán… Yo simplemente soy uno que no tiene
miedo de expresar cosas que muy pocos se atreven a expresar.

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A mí, como dije, me han insultado mucho por escribir sobre
estos temas, pero siempre he sabido que este es el precio que
paga todo aquel que toca temas que están en contra de las
cosas establecidas. Créeme, por eso mataron a Jesús, a
Sócrates, a Gandy, a Giordano Bruno y a muchos otros más.
¡A mí ni siquiera empleo querían darme...! Un día quedé
desempleado y no fue cosa fácil conseguir otro empleo. ¡La
verdad es que no sé cómo mis escritos llegaban a las manos de
las personas que me hacían las entrevistas de trabajo! Mis
entrevistadores siempre terminaban tocando algún tema de mis
libros, quizás en forma de burla.
Los humanos somos tan extraños que les tememos a quienes
nunca nos harán el más leve daño. ¡Sospecho que a lo que la
gente realmente le teme es a enfrentarse cara a cara con la
verdad, no a seres inofensivos como yo!
Ya ves como es realmente el mundo en que vivimos. Ya ves
que en este mundo todo es ilusorios, incluyendo eso que le
llaman libertad de expresión. Lo digo porque he notado que si tú
expresas algo que contradiga los dogmas y muchas de las
absurdas leyes de este mundo; o si expresas algo que vaya en
contra de los intereses de los ¨poderosos¨, te cazarán como
cazaban a las brujas en la edad media, claro, utilizando otros
métodos de cacería.
En verdad no sé a ciencia cierta que son todas estas cosas que
me pasan, lo único que sé es que el universo, de un modo u
otro, me ha mostrado parte de su grandeza. No sé por qué él
universo, o lo que sea, no le muestra todos estos secretos a
gente que son realmente poderosas e influyentes en este
mundo. No entiendo nada… A lo mejor esos que supuestamente
son poderosos realmente no lo son. Quizás ese poder que ellos
tienen es una ilusión más... O talvez ellos saben de estas cosas
y las ocultan…

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Por ahí leí que mucha gente crea mundo mágico en su mente,
mundo donde todo es posible; leí que ellos hacen esto para
escapar de la dura realidad que les ha tocado vivir. Pero créeme,
los mundos a los que viajo, yo no los he creado con mi mente, al
contrario, al principio esto me provocaba miedo.
Creo que hay que investigar un poco más sobre este asunto.

DEL INFIERNO A LA GLORIA

Imagina que de repente, mientras disfruta de una siesta en tu cama,

el techo de tu casa te cae encima, y te inmoviliza de tal manera que
se te hace difícil mover un dedo por el peso del concreto sobre tu
cuerpo.

Imagina que un demonio del bajo astral viene a media noche y trata
de llevarse tu alma hacia aquel horroroso lugar.

Imagina que, mientras duermes, alguien que te odia sale debajo de

tu cama y te coloca una almohada en la cara para tratar de
asfixiarte.

Imagina la angustia que tú sentirías si algunas de las cosas descritas

anterior te llegara a pasar.

En verdad yo he sentido algo parecido a todo lo descrito anterior

y muchas otras cosas más, cosas que no las escribo porque no
podrás créelas:
Había noches que yo sentía que un ser vivo extremadamente
pesado se posaba sobre mí, y me inmovilizaba de tal modo que
se me hacía difícil mover uno de los dedos de mis manos.
En otras ocasiones sentía que una fuerza extraña trataba de
arrebatar el alma de mi cuerpo, y de vez en cuando sentía que
algo trataba de asfixiarme mientras dormía.

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Como has podido notar, mi vida no era nada placentera… Pero
un día todo cambió para bien. Incluso, el último día que sentí
que algo trataba de asfixiarme en mi cama no puse la más leve
resistencia y, al no resistirme, mi conciencia abandonó mi cuerpo
físico, y de ese modo mi malestar se disipó.
El fenómeno que más me atormentaba era aquel en el cual
sentía que una poderosa fuerza trataba de arrancar el alma de
mi cuerpo para llevársela sabe Dios para donde. Pero un día, por
consejo de un amigo, dejé que aquella poderosa fuerza se
llevara mi alma, y resultó que aquella fuerza no tenía la más leve
intención de hacerme daño, al contrario, aquel viaje fue uno de
los viajes extracorpóreo más maravillosos que he tenido.
Aquella fuerza arrebató el alma de mi cuerpo y se la llevó a otro
mundo, y cuando tuve deseo de regresar a mi cuerpo físico,
aquella potente fuerza retornó mi alma a mi cuerpo físico en un
santiamén.
Desde aquel día comencé a perderle el miedo a las sensaciones
nocturnas y a los fenómenos sobrenaturales; ahora son los
fenómenos naturales los que, de vez en cuando, me causan
espanto.

MIS MÁS GRANDES IMPRESIONES

Hay cosas que nos impresionan de tal modo que jamás las
olvidamos, como cuando vemos el mar por primera vez o cuando
vemos luces haciendo extraños movimientos en el cielo.
Por ejemplo: el día que vi un helicóptero por primera vez me
asusté tanto que corrí y me metí debajo de la cama temblando
del miedo.
Recuerdo que un día venía yo bajando de la montaña de mi
tierra natal, y mientras pasaba por en medio de un pinar un
potente rayo cayó sobre un pino que se encontraba a pocos

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metros de mí y lo incendió. Aun recuerdo como si fuera hoy
aquella intensa luminosidad combinada con aquel potente
sonido.
También recuerdo aquella fastidia madrugada, cuando las
fuertes crecidas de un río desaparecieron un barrio de la fa de la
tierra: recuerdo que cada vez que relampagueaba yo (unos de
los que huían de la fuerte crecida de aquel río) veía como las
furiosas aguas se tragaban las casitas de aquel barrio
marginado. Aquello era realmente espantoso.
Estos sucesos me impresionaron tanto, que nunca podré
borrarlos de mi mente. Pero créeme, esas no han sido mis
mayores impresiones. Aunque no lo creas, mis mayores
impresiones han sido de tipos espirituales. Es por eso que
escribo tanto sobre estas cosas:
Una de mis más grandes impresiones sucedió una noche en la
que mi alma se encontraba en medio de un extenso valle. ¡Dios
mío, estoy en otro mundo! -era lo único que pasaba por mi
mente en aquel instante mientras miraba aquella extrema belleza
natural y aquella intensa claridad. Aun no sé cómo mi alma llegó
allí, lo único que sé es que cuando estuve allí, en un instante mi
conciencia se elevó a un grado extremadamente superior, algo
que me impresionó bastante.
Otro suceso que me impresionó mucho fue una experiencia extra
corpórea en la cual llegué a un lugar muy extraño. En aquel viaje
vi cosas muy inusuales, como por ejemplo: el cielo de aquel
lugar tenía enormes y numerosas estrellas y tres lunas, y tanto
las luces que irradiaban las lunas y las estrellas mantenían aquel
lugar claro como el medio día aquí en la tierra. También vi un
bello rio de agua cristalina y aves de todos los colores y tamaño.
Pero eso no era nada, las cosas que realmente me
impresionaron fueron: ver mi cuerpo cristalino formado por
millones de minúsculas lucecitas de colores y sentir un grado de
libertad extrema. Aquel día imaginé los felices que seriamos los
humanos viviendo en aquel mundo, un mundo donde realmente

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todo es posible. Luego de aquella experiencia tuve otras más
maravillosas, pero como esta fue la primera de esta índole, fue la
que más me impresionó.
Por mi parte estoy seguro que yo no he sido el único que se ha
impresionado con tales experiencias. Sé que yo sólo soy uno de
muchos…
Por ejemplo, analiza el siguiente cuento:
En una época en la que la mayoría de la gente creía que la tierra era
el centro del universo, un filósofo tuvo un extraño sueño:

Aquel filósofo soñó que volaba verticalmente a una gran velocidad, y

mientras se alejaba veía que la tierra se hacía cada vez más pequeña,
tanto así que unos minutos más tarde se hizo pequeñita como la luna.

Aquel sueño impresionó tanto al filósofo, que despertó muy

sobresaltado.

Al día siguiente aquel filósofo decidió incluir parte de aquella

maravillosa experiencia en un libro que estaba escribiendo.

Él, sin entender por qué, supo que todo aquello era real, ya que el
grado de lucidez de aquella experiencia superaba todo lo que hasta
entonces había vivido. Por eso, aunque nunca habló del sueño en sí,
aquel filósofo afirmó en su libro que la tierra no era el centro del
universo, que era pequeñita y redonda como la luna, etc.

También aseguró que el universo era infinito y que la tierra era algo
prácticamente insignificante comparada con él.

Un tiempo después de haber publicado el libro, aquel filósofo fue

quemado vivo por la santa inquisición por atreverse a rebelarse
contra lo establecido.

15
LA LUZ AL FINAL DEL TÚNEL
Cuentan algunas de las personas que han tenido experiencias
cercanas a la muerte que aquellas experiencias son tan lúcidas,
que en la mayoría de los casos superan la realidad que han
vivido aquí en la tierra.
Una de las cosas que he notado es que muy pocos de los que
han tenido tales experiencias han logrado fusionarse con la
radiante luz que se encuentra al final del túnel por donde ellos se
desplazan. O sea, casi nadie sabe lo que hay al final de aquel
túnel…
Por mi parte, yo, aunque un día estuve a punto de morir, no he
tenido tal experiencia. Pero he tenido varias experiencias
extracorpóreas supra-reales, y en esas experiencias he tenido la
oportunidad de ver lo que hay después de la radiante luz que se
encuentra al final del túnel.
En fin… si no es mi cerebro el que me está engañando, la luz al
final del túnel no es otra cosa que la entrada hacia un mundo
superior; sobre todo, es la entrada hacia un mundo más
luminoso que el nuestro.

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UNO DE MIS ÚLTIMOS VIAJES EXTRACORPÓREOS
El viernes 23 de Abril del 2014 había yo despertado un poco
sobresaltado sin saber por qué, parece que había tenido una
pesadilla … Después de sentarme en la cama tomé mi teléfono
celular de la mesita que está al lado de mi cama, y al mirar la
pantalla vi que eran las 3:56AM, lo recuerdo perfectamente.
Luego de ver la hora, coloqué nuevamente el celular en la
mesita y me volví a recostar para tratar de dormir un poco más.
Ya recostado traté de relajarme mientras ponía mi mente en
blanco. Al permanecer un largo rato inmóvil comencé a ver
muchas estrellas en un firmamento gris, mientras sentía que
viajaba a toda velocidad sobre mi cama. Al principio creí que
todo aquello era una especie de alucinación, pero más luego
supe que no, ya que al mirar los lados supe que no estaba sobre
mi cama, sino que estaba viajando sobre una especie de
alfombra voladora.
A lo largo de mi viaje sobre aquella especie de alfombra vi como
atravesaba cúmulos de estrellas antes de llegar a un mundo
parecido a la tierra, con excepción de la intensa claridad que allí
había.
En aquel mundo atravesé un enorme lago a toda velocidad
sobre mi alfombra voladora, lo cual, sin razón aparente, me
provocó un poco de temor.
Después de atravesar el lago, me detuve un poco en el aire
parado sobre la superficie de la alfombra, y desde allí comencé a
mirar las verdes colinas de aquel mundo.
Un tiempo después, cuando ya estuve satisfecho, ordené
mentalmente a la alfombra voladora que descendiera a la
superficie, y cuando tocó la superficie, bajé y vi un árbol seco el
cual toqué varias veces para ver si todo aquello era real, y me
asombré mucho al notar aquel grado de realidad: fue la primera
vez que vi algo seco en un viaje extracorpóreo.

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Mas luego se apoderó de mí una inexplicable depresión y deseé
regresar a mi cuerpo físico, y mi deseo se hizo realidad, ya que
en un instante aparecí dentro de mi habitación con la misma
depresión que sentía en aquel mundo.

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PARTE- II

EXPERIMENTO O FASE
La vida es extremadamente compleja y misteriosa; más complejo
y misterioso aún es el universo, y la conciencia es más compleja
y misteriosa que ambos.
Jesús le dio a entender a la humanidad que el creador es tan
consciente, que sabe hasta el número de cabello que tiene cada
ser humano en su cabeza, y al ver lo complejo que somos los
seres vivos lo creo ciegamente.
Por mi parte, creo que los seres vivos somos el producto de una
inteligencia inimaginable para nuestra limitada mente. También
creo que aunque muchos adoran a un Dios equivocado, aquellos
que se burlan de un creyente, se burlan de sí mismo.
Aunque no estoy muy de acuerdo con el Génesis, creo que un
ser infinitamente inteligente creó todas las cosas, pero a veces
me asombro cuando veo en la TV a un depredador partiéndole el
gañote a su presa.
Sé que Dios es amoroso, pero aun no entiendo por qué tenemos
que comernos a otros seres vivos para poder sobrevivir. ¿Será la
vida un experimento que se salió de control o será la muerte una
especie de liberación?
Supongo que cuando un animal feroz mata a otro animal, libera
el alma de aquel animal de la prisión que representa su cuerpo

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físico. Esto lo supongo porque de lo contrario, si todo terminara
aquí, la vida sería el más grande de los desperdicios; sería como
una especie de experimento fuera de control; o peor aún, como
creen muchos, la vida sería obra de una misteriosa conciencia
que usa el más cruel de los métodos para controlar la
población…
Yo supongo que la muerte es la que nos libera de esta difícil
fase. Al menos así lo creo yo. Supongo que la muerte no es un
final, sino un glorioso comienzo. Supongo todas estas cosas
basándome en mis experiencias místicas.
Si un día la ciencia demuestra que las experiencias místicas son
alucinaciones, entonces, definitivamente, la vida es un
desperdicio o un experimento de seres superiores que se salió
de control; o peor aún, somos el producto de una conciencia
ciega.
Claro, yo creo que las experiencias místicas no son
alucinaciones o algo por el estilo, y que los seres vivos sólo
estamos de paso por este mundo. Lo creo porque las
experiencias místicas son demasiada reales para que no sean
ciertas.
Si un día la ciencia demuestra lo contrario, lo acepto: si las
ciencia demuestra que todo termina aquí, que lo único real es lo
palpable, no haré como hacen los fanáticos religiosos, que tú les
dices que la tierra tiene más de 6,000 años de edad y te acusan
de blasfemo.

EL VERDADERO INFIERNO
No sé si existe un lugar de tortura como ese que describen
algunos religiosos. Al menos yo no creo que exista tal lugar, ya
que no hay pecado, por grande sea este, que merezca un
castigo tan cruel como arder eternamente en un lago de fuego.

20
Al contrario, creo que con el simple hecho de vivir aquí en la
tierra ya estamos pagando alguna especie de culpa. Yo creo que
un castigo extra sería una exageración...
En lo que sí creo es en el infierno interior o cargo de conciencia;
lo creo porque hace mucho tiempo yo estuve en él.
Yo estuve en el infierno aquí en la tierra porque de vez en
cuando surge de lo más profundo de mí una especie de buenos
sentimientos que me hace sentir culpable hasta de la más leve
de las injusticias que he cometido a lo largo de mi existencia. No
es que sienta temor a un castigo eterno… más que eso, como
dije, esto viene de mi interior.
Claro, yo estuve en otro tipo de infierno: el que he descrito en el
tema –del infierno a la gloria– pero el infierno de aquel tema, al
contratario de este… es una alegoría. Además, aquel malestar
era algo pasajero.
El infierno interior no es un castigo tan exagerado como el que
describen los religiosos; pero, al igual que el supuesto lago de
fuego y azufre, este castigo es casi insoportable para personas
muy sensibles.
En el temas –atrapados en la ilusión– he dicho que existen
mundos más reales y más perfecto que este mundo en que
vivimos. También he dicho que en aquellos mundos todo se
siente más intenso incluyendo los sentimientos. He ahí donde
está el misterio.
Por ejemplo, cuando los buenos sentimientos se apoderan de
nosotros, ya sea aquí en la tierra o en los mundos superiores,
sentimos culpa hasta del más leve mal que hemos cometido a lo
largo de nuestra existencia: cada recuerdo es una verdadera
tortura…
Aquí en la tierra, la mayoría de la gente ve una persona herida
en la calle y, en la mayoría de los casos, pasan de largo. Ni

21
siquiera les remuerde la conciencia… Pero en los cielos no será
así:
Aquí en la tierra, la mayoría, carecemos de buenos sentimientos,
y el poco amor que aún conservamos lo hemos reducimos a
nosotros mismos. Pero en los cielos todo será distinto incluyendo
las leyes.
El cielo es un lugar para vivir intensamente feliz, pero las culpas
que arrastremos de acá de la tierra interrumpirán nuestra
felicidad. Lo digo porque allí hasta los sicópatas, si es que logran
llegar a tal lugar, recuperarán la sensibilidad y sufrirán mucho
por todo el daño que han causado a sus prójimos y a la misma
naturaleza.
Créeme, son dichosos aquellos que antes de partir de este
mundo se arrepienten de todos los males que han hecho, porque
ellos partirán ligeros y sus penas serán mínimas.

EL PODER DE DIOS
Existe una poderosa fuerza que prolonga la vida de todas las
cosas incluyendo la vida de las minúsculas partículas que
forman la materia. Esta fuerza no es una fuerza ciega, y en caso
de que lo sea tiene que existir un ser consciente que se
encargue de controlarla.
Observa que todas las cosas necesitan de una fuente de energía
para funcionar. El universo también la necesita… y si esa fuente
de energía fuera bloqueada, todo se desvanecería como por arte
de magia.
Tú te preguntaras: ¿y de dónde viene la energía que alimenta
ese incesante flujo que le da vida a todas las cosas?
La verdad es que no tengo una repuesta precisa para esta
pregunta, pero sospecho que esa poderosa fuente podría ser

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algo así como el punto donde se concentra toda la energía que
contiene el espacio infinito; o al menos uno de los puntos…
¡Quien sabe…! De esto ser cierto, ese punto tendría que estar
ubicado en otra dimensión.
En pocas palabras, aquello sería semejante a un poderoso
sumidero de energía vibrante.

LA OVEJA DESCARRIADA
Aquella noche Daniel llegó al bar medio borracho. Yo me
sorprendí mucho al verlo en el bar, y más aún al verlo con
aquella facha: tenía un arete colgado en su oreja izquierda,
un extraño corte de cabello, un crucifijo colgando de su
cuello, un jeans pegado y una camiseta desmangada.
Daniel ya no era aquel joven que vestía como visten los
ejecutivos; más bien parecía un rockero de los 80s.
Luego de saludarnos sacó un cigarro y lo prendió. Yo,
sorprendido y mirándolo de pies a cabeza, le pregunté:
--¿Qué te pasó, Daniel; por qué abandonaste el evangelio?
Después de exhalar el humo que tenía en la boca, me miró
fijamente y me dijo:
--Créeme Joselo, no es mucha la diferencia entre un cristiano y
un impío. Bueno… sí existe una importante diferencia… por
ejemplo: --mientras los impíos buscan un modo de escapar de
esta horrible realidad que la loca humanidad ha forjado, los
cristianos la sufren en carne propia. Por lo demás todo es
prácticamente lo mismo. Creo que el verdadero cristianismo lo
practicaban los primeros cristianos…
--¡Santo Dios! Y lo peor de todo es que tú tienes toda la razón
–le digo.

23
Al decirle esto, fumó un poco, y después de exhalar el humo
hacia arriba, me miró fijamente a los ojos y continuó
desahogándose conmigo:
--Joselo, yo abandoné el evangelio porque el evangelio está
repleto de prepotentes, usureros, materialistas, sicópatas y de
toda las porquerías que tú te puedas imaginar.
Al terminar de decirme estas duras palabras fumó un poco
más. Luego tiró lo que le quedaba del cigarro en la calle, y
con su voz de borracho siguió contándome:
--Yo únicamente quería una esposa para formar una familia;
incluso, si yo hubiera conseguido una esposa de esas
presumidas que se congregan en las iglesias, hubiera soportado
la pesada carga del evangelio en mis hombros. Pero ni eso…
¡Como yo no tengo el cuerpo de atleta, y como yo no llegaba a la
iglesia en un lujoso auto, ninguna de las chicas se interesó en
mí! ¡Las fatales esas son más interesadas que las mujeres
impías! ¡Qué asco…! ¡Debí abandonar el evangelio mucho
antes!
--¡Caramba! Creo que descubriste que las religiones no fueron
creadas por Dios –fueron las únicas palabras que se me
ocurrieron decirles al escucharlo decir tales cosas.
Él, mirándome siempre fijamente, continúo desahogándose:
--Mi pastor siempre decía que todo aquel que se descarría le
entran siete demonios, pero créeme Joselo, en mí no ha entrado
ningún demonio. Yo sólo trato de mitigar mis penas con el
alcohol y con el tabaco, y a veces con un poco de mariguana.
También trato de buscar un poco de cariño en las chicas de las
calles. Quizás te sorprendes verme vestido así, pero no me
culpes, es que quiero atraer a las chicas: estoy tratando de
recuperar los años que perdí en la iglesia. Yo te aseguro, Joselo,
que si yo no hubiera abandono el evangelio nunca hubiera
conocido el verdadero amor.

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--Yo te admiro Daniel, porque has visto lo que muy pocos logran
ver: has visto la hipocresía que hay en el evangelio y has notado
que las religiones las inventaron los hombres con algún macabro
fin. Pero ten cuidado… todo en exceso es dañino. No tomes
alcohol todos los días, y ten precaución con las mujeres de las
calles, aunque no lo creas muchas de esas mujeres son muy
peligrosas –le dije.
--Pensaré en lo que me acabas de decir… Bueno, tengo que
irme: tengo que ir a fumarme un bate de mariguana que tengo
en casa. Nos vemos mañana, y si alguien se mete contigo esta
noche, avísame que mañana lo pico con mi machete de doble
filo –me dijo mientras se arreglaba el peinado con las manos.
--¡Cuídate Daniel, y piensa en lo que te he dicho! –le dije
mientras sonreía a carcajadas.
--Está bien, lo pensaré, hermano mío –me dijo mientras salía del
bar tambaleándose de la borrachera.

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PARTE- III

EL PEOR DE NUESTROS AMOS

Según el Génesis, ganarse el pan con el sudor de la frente fue
uno de los castigos que Dios le impuso a Adán por su
desobediencia. O sea, el trabajo es un castigo de Dios. Sin
embargo, la mayoría de la gente haría lo que sea necesario para
conservar su trabajo. Por ejemplo, un día en la empresa donde
yo trabajaba vi a uno de mis jefes temblando: el pobre hombre
creía que él era uno de los 500 empleados que iban a ser
despedidos aquel día.
Por otro parte, yo mismo he sido víctimas de ex-compañeros de
trabajo que me veían como una amenaza para la estabilidad en
sus empleos, y aunque en aquella época yo también era un
miedoso, aquellos jóvenes me provocaban profunda lastima.
En cuanto a las parejas amorosas: he visto hombres y mujeres
que si se les permitiera encadenarían a sus parejas con tal de
que ellas no se vayan de su lado.
En pocas palabras, el miedo ha sido y es el peor de nuestros
amos.
A veces sospecho que un día el planeta tierra será propiedad de
un grupo de miedosos. Sospecho que un día unos cuantos
descerebrados tratarán de controlar al resto de la gente así
como se controla el ganado en un hato. Ellos harán esto por
miedo a que un cambio repentino les quite la mayor parte de las

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riquezas materiales que han acumulado. Así que no te asombres
si un día tienes que pagar por el aire que respiras, por la lluvia y
por la luz del sol.
Yo conozco muchas historias de gente miedosa; tantas… que si
las escribiera ocuparía la mayor parte de este libro con ellas.
Tuve la tentación de escribir las más asombrosas de ellas, pero
decidí no hacerlo porque, aunque guardan grandes enseñanzas,
muchas de ellas no encajan en un libro como este. Además,
estas historias les causarían mucha vergüenza a sus
protagonistas… Incluso, creo que hasta me despedirían de mi
trabajo… Claro, no es que tenga miedo de perder mi empleo, es
que yo siempre trato de hacer las cosas bien hecha. Espero que
ellos recapaciten cuando lean este libro.
He leído que el apego viene del miedo a perder y que esto
desencadena una serie de cosas negativas incluyendo los celos.
Esto lo creo ciegamente porque lo he visto con mis propios ojos.
Además, en mi época de oscuridad, yo también llegué a sentir
celos o miedo a perder…
En todas partes he visto gente que vive con un extraño y
absurdo miedo de perder las cosas que han conseguido, sobre
todo la gente de clase media; y digo que este miedo es absurdo
porque un día hasta la misma vida la vamos a perder. Es ese
mismo miedo el que hace que mucha gente se vuelva insaciable
a todo tipo de cosas que le proporcione poder y seguridad.
Deberíamos cuidar las cosas que tenemos, pero sin sentir miedo
a que un día las vamos a perder. Incluso, ni siquiera deberíamos
entristecernos el día que aquellas cosas se nos vayan, o el día
que alguien nos las arrebate... Debes grabar en tu mente que en
esta vida nada es seguro.
Por eso te aconsejo que no te esclavices ante el miedo: acepta y
vive la realidad tal y como es. Si haces esto estarás a un paso
de la codiciada felicidad.

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Por ejemplo, si en los últimos años de mi vida yo no me hubiera
liberado del miedo, mi sufrimiento hubiera sido casi insoportable,
porque en los últimos años he ido perdiendo cosas que han sido
muy valiosas para mí. Además, soy una persona muy sensible.
Desde el día que me liberé del miedo, he ido rechazando cosas
casi irrechazables para un ser humano y he caminado por
caminos extremadamente difíciles, tan difíciles que parecen
intransitables...
Si tú supieras a los lugares donde he llegado y las hazañas que
he logrado realizar dirías que soy un ser de otro mundo, que soy
un brujo o que estoy loco de atar.
En estos últimos años he tenido muchas experiencias, tanto
terrenales como místicas, experiencias que jamás hubiera tenido
si no me hubiera liberado del miedo. Algunas de mis
experiencias, al menos las que están relacionadas con mi vida
espiritual, están relatadas en este libro. Pero tienes que leerlas
con la mente abierta.
Muchos de mis lectores dicen que soy un afortunado al poder
controlar algunas de mis experiencias místicas. Pero, aunque no
lo creas, todos los seres humanos tenemos los mismos dones…
Lo único que me hace un poco diferente a la mayoría es que yo
me he liberado de muchas cosas, sobre todo de ese cruel
torturador llamado miedo.

EL SECRETO DE LA FELICIDAD
Por ahí leí que ser feliz no es vivir en un estado permanente de
alegría, sino tener plena certeza de ir por el camino correcto.
Esto lo creo porque en un tiempo yo fui un joven muy alegre, y si
digo que fui plenamente feliz soy un mentiroso. Claro, yo no era
tan infeliz como aquellos que se molestaban cuando me veían
alegre.

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Hoy en día tengo plena certeza de que voy por el camino
correcto, pero ni aun así soy plenamente feliz, y una de las
razones por la que no lo soy es porque mucha de la gente que
me rodea me lo impide. Además, aunque no me lo impidiesen,
para ser plenamente feliz tendría que hacerme el ciego para no
ver mucha de las cosas horribles que pasan en el mundo.
Sé que no se debe culpar a nadie de nuestros males, pero
créeme, en este extraño mundo existen personas que no son
felices ni dejan que otros lo sean.
Sé que las modernas ciudades, los medios de comunicación y
los complejos aparatos eléctricos, electrónicos y mecánicos te
han hecho creer que la humanidad ha avanzado mucho. Esto lo
sé porque hasta yo que le busco la quinta pata al gato me he
quedado con la boca abierta ante muchos de los adelantos
tecnológicos. Pero créeme, aunque a simple vista todo parece
indicar que estamos muy bien, la humanidad no ha avanzado
mucho, porque la felicidad es lo primordial en la vida, y hoy en
día, a pesar de sus grandes logros, la humanidad es
extremadamente infeliz.
Lo peor de todo es que sabemos muy bien cuáles son las cosas
que nos elevan el grado de felicidad y no invertimos en ellas.
El hombre, en vez de enfocarse en las cosas esenciales para
hacer de este mundo un lugar más agradable, se ha enfocado
en las cosas materiales creyendo que lo material lo hará feliz.
Por eso, a pesar de los avances tecnológicos, yo veo el hombre
como un ser inconsciente; o mejor dicho, como una maquina
movida básicamente por un egoísmo extremo.
Créeme, no hay que volverse idiota para ser feliz. Freud quizás
sabía que existe otro modo de ser feliz. Lo digo porque sé que él
era un hombre muy inteligente. Yo creo que él no lo dijo
públicamente porque sabía perfectamente que esto lo arruinaría.

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Por ejemplo: yo he vivido en montañas, en zonas rurales y en
ciudades. En algunas de las ciudades donde viví pude disfrutar
de todas las comodidades que disfruta la gente de clase media,
y aunque no lo creas los momentos más felices de mi vida los
viví en la montaña de mi tierra natal. En aquella montaña
padecía de frio, de fatiga, tomaba agua turbia, dormía en pajas,
entre otros. Allí carecía de todas las comodidades que tenía en
la ciudad, pero nada de esas cosas pudieron borrar la sonrisa de
mi rostro. ¿Sabes por qué..?, porque en la montaña no existía la
envidia, ni el rencor, ni las riñas, ni la delincuencia, ni la vanidad,
ni el egoísmo, ni la preocupación ni nada de esas cosas que he
visto en las ciudades donde he vivido.
Recuerdo que en la montaña todos los atardeceres hacíamos
una enorme fogata como esas que hacen los indígenas en las
películas cinematográficas, luego contábamos historias chistosas
de la gente del pueblo y sonreímos hasta más no poder. Y
créeme, nuestras sonrisas no eran fingidas como sonríe la
mayoría de la gente en las ciudades.
En la montaña comíamos de un mismo plato, bebíamos de un
mismo envase y a veces compartíamos la misma cuchara:
nosotros éramos simples agricultores que al no ser influenciado
por las malas costumbres del mundo exterior vivíamos en
armonía... ¡Sólo imagina lo bello que hubiera sido el mundo si la
humanidad hubiera combinado los avances tecnológicos con las
cosas que realmente nos hacen felices!
Yo te aseguro que si los gobiernos hubieran invertido en elevar
el grado de conciencia de cada ser humano, o en fortalecer los
vínculos que nos unen, el mundo hubiera sido un lugar
maravilloso.
El tema de la felicidad es muy complejo pero te diré algo: si tú no
eres feliz, no te quejes, porque en este mundo casi nadie lo es;
ni siquiera yo he podido alcanzar tal hazaña. Yo tengo todas las
herramientas para ser feliz, pero existen personas que no me

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han dejado serlo, y créeme, yo no soy de esos que viven
culpando a los demás de mis males.
Aunque se te haga difícil creerlo, esos altos ejecutivos que has
visto en las empresas donde has trabajado, aunque los veas
sonreír de vez en cuando, y aunque los veas conduciendo
lujosos vehículos, no creas que son felices. Por ejemplo: mis ex-
compañeros de trabajo decían que un alto ejecutivo, me voy a
reservar el nombre, se metía en la nariz más de una libra de
cocaína al mes. Dicen que él se drogaba para poder soportar la
presión…
Seguramente tú crees que esas bellas bailarinas y
presentadoras de televisión que ves muy alegres en algunos
programas televisivos son felices. Pues yo te aseguro que no lo
son. Muchas de esas mujeres se hacen amantes de ancianos
millonarios, y algunas suelen casarse con estrellas del deporte,
pero aun así nunca logran alcanzar la anhelada felicidad. ¡Ya te
imaginas cuales son la razones...!
En fin… ni los grandes actores y actrices, ni los cantantes
famosos, ni las estrellas del beisbol, ni los militares de alto
rango, ni los líderes religiosos, ni los presidentes, ni los
monarcas son felices.
En pocas palabras, casi nadie es feliz en este mundo en que
vivimos; sólo los animales que no han sido esclavizados por el
hombre lo son.
La razón por la que no somos felices es porque los humanos
hemos hecho de este planeta un lugar de tortura.
Esto lo escribo basándome en mis propias experiencias y en mis
observaciones. Por ejemplo, yo he logrado conectar mi
conciencia con los árboles de la montaña de mi tierra natal y he
sentido su inmensa felicidad, sobre todo cuando la brisa los
acaricia.

31
Por otra parte he visto con mis propios ojos lo infelices que
suelen ser muchas personas exitosas económicamente
hablando.
Muchos creen que los poderosos son felices, pero créeme, la
felicidad es enemiga de la preocupación, del miedo, de la
envidia, del rencor, de los cargos de conciencias, de los celos y
de cosas afines, y hasta ahora no existe en este mundo un sólo
poderoso que esté libre de alguna de estas cosas.
Además, cuando tenemos comida de sobra, o nos volvemos
adictos a la comida o nos abandona el apetito, tan sólo por darte
un ejemplo.

EL AMOR INCONDICIONAL
Así como los asesinos sicópatas eligen una víctima al azar para
divertirse mientras la asesinan a sangre fría, así elegía yo de vez
en cuando una personas al azar, pero al contrario de lo que
hacían los asesinos sicópatas yo la elegía para agradarle la vida.
Yo no hacia esto para que la persona elegida me lo agradeciera,
era un extraño e irresistible deseo de hacer el bien que de vez
en cuando surgía de lo más profundo de mí.
En varios años practiqué el amor incondicional con humanos,
con plantas y con animales. Pero mi más alto potencial se lo
dediqué a varias chicas que se cruzaron en mi camino.
Recuerdo que una de ellas me dijo que no sabía cómo pagarme
todo lo que yo había hecho por ella... Nunca deje de sonreír
como lo haces, con eso basta para pagar tu deuda con migo
–fue lo único que se me ocurrió decirle.
Ojalas y esas jóvenes les transmitan el amor que yo les brindé a
las personas que Dios panga en sus caminos.
Debo aclarar que yo no me casé con una de esas chicas porque
no quise decirles que en el mundo no había muchos hombres

32
como yo: ya debes imaginarte por qué ellas se alejaron de mí.
Bueno… te lo diré: esas chicas se alejaron de mí porque
pensaban que iban a encontrar un hombre exactamente como
yo, pero que tuviera más dinero y más belleza física. Debí
decirles que yo era el producto de una nueva filosofía creada por
mí, para que no fueran por ahí en busca de algo que nunca
encontrarían. Pero algo me lo impidió. Pude hacerlo pero preferí
dejarlas volar… porque comprendí que a pesar de todo… ningún
bienestar en este mundo está por encima de la libertad.
Hubo un tiempo que dejé de practicar el amor incondicional con
seres humanos, ya que tuve la mala suerte de ser víctima de la
maldad humana en su más alto nivel. Incluso, hubo un tiempo
que llegué a ver a la gente como seres demoníacos…
Sé que el mal es producto, principalmente, de los celos, de la
envidia y del egoísmo, pero en aquel tiempo de confusión tuve
que decidir entre odiar a la gente o alejarme de ella. Por eso
permanecía casi siempre solo, para no tener la necesidad de
odiar a nadie. Pero hace poco conocí a una joven alegre y
simpática que volvió a despertar en mí aquel bello sentimiento
que una vez tuve por la gente. Las amigas de aquella joven me
dicen que ella no me merece, que esa joven, además de mal
parecida, se ha acostado con todos los hombres del barrio.
¡Como si a mí me importaran esas cosas! Pero esas que hablan
mal de ella se asombrarán cuando vean aquella joven mal
parecida transformada en una especie de princesa. Digo esto
porque es lo que haré con ella. Esas tontas no saben que lo que
realmente me gusta de ella es su sonrisa y su extrema sencillez.
Sé que la mayoría de los seres humanos se han vuelto egoístas.
Incluso, unos meses atrás creí que las personas bondadosas ya
se habían extinguido. Pero últimamente he conocidos personas
que me superan en cuanto a bondad se refiere: parece que
aquella joven trajo suerte a mi vida.
Últimamente Dios me ha dado la oportunidad de conocer gente
que con sus actos me han obligado a creer que el mundo aun no

33
está perdido. Ojalas y Dios bendiga a esa gente de una forma
especial por lo que son, para que el bien se siga expandiendo en
el mundo.

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PARTE- IV

EL MUNDO ES PIRAMIDAL

Las pirámides como estructuras físicas son muy estables, pero

como estructuras sociales son como castillos de naipe, que se
vienen abajo con el más leve viento.

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La gran fragilidad de los sistemas piramidales se debe a que sus
bases están cimentadas en la mentira, en el engaño y en la
manipulación.
En un sistema piramidal los de arriba usan el método de lavado
de cerebro para reclutar personas y para mantenerlos adheridos
al sistema. Su método es tan poderoso que muchos no dudarían
en dar sus vidas por defender la pirámide a la que pertenecen.
Un sistema piramidal está constituido, básicamente, por la
cúspide, el centro y la base:

La cúspide: está constituida por grandes sicópatas, gente que posee

incontables fortunas y poderes casi sobrehumano.
El centro: está constituido por una mezcla de psicópatas e
ignorantes con grandes potenciales. Los sicópatas del centro de
las pirámides tienen plena certeza de que el sistema se alimenta de
la gente incauta, pero como sicópatas al fin se vuelven cómplice o se
hacen los ciegos por miedo a perder sus privilegios. Y los
ignorantes con grandes potenciales son personas muy
disciplinadas y toman al pie de la letra todo lo que le dice la cúspide.
O sea, son semejantes a Robots: ellos creen que el sistema es lo
mejor que se ha inventado.
Base: está constituida por gente de fácil manejo… gente que trabaja
como bestia pensando que con su esfuerzo, un día, van a obtener los
grandes beneficios que el sistema les ofrece… Existen personas de las
bases que logran ascender… pero en su gran mayoría son sicópatas,
que por obtener una pequeña comisión son capaces de sacrificar
familiares y amigos.

Por ejemplo: ¿que tú harías si alguien con cara de gente

bondadosa, que vive en una mansión a orilla de la playa, se te
acerca y te dice que si entras a su organización en poco tiempo
tendrás una casa igual o mejor que la de él? De seguro tú
entrarías a su organización sin pensarlo mucho, y más aun si
eres una persona sin malicias. El problema es que todo esto es

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un vil engaño: a ellos sólo les interesa el dinero de la membrecía
y las posteriores cuotas que les vas a pagar.
Si tú entras a un sistema piramidal te matarás trabajando y
nunca verás los grandes beneficios que ellos te ofrecen. ¿Sabes
por qué no los verás? Porque aquellos jugosos beneficios son
sólo carnadas para que tú muerdas el anzuelo. Y si un día
descubres el engaño y les reclamas a los de arriba… ellos
simplemente te dirán que tú no conseguiste los beneficios
porque no te esforzaste lo suficiente. En pocas palabras, te
harán creer que eres un perdedor y prácticamente destruirán tu
vida.
Como he dicho, en un sistema piramidal los de arriba son
grandes sicópatas, o mejor dicho son lobos disfrazados de
corderos. Así que cuídate de no caer en sus trampas.
Aunque no lo creas, desde hace mucho tiempo, el mundo ha
estado gobernado por un sistema piramidal, y una de las
razones por la que esta pirámide no ha colapsado es porque el
método de lavado de cerebro que han venido usando los de
arriba ha sido y es extremadamente eficiente.
Pero el día menos pensado este gran sistema piramidal caerá,
porque un día la base despertará… y aunque la base no
despierte, llegará un día en que la cúspide no podrá mantener a
la gran mayoría de los de abajo ilusionados.
Los sistemas piramidales se saben camuflar muy bien, pero
existen algunos que son muy fáciles de reconocer, como por
ejemplo: Telefree, Órgano Gold, Jeunesse, etc.
Otros son más difíciles de identificar, como por ejemplo: las
religiones, los sistemas financieros, las grandes
corporaciones, etc.

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Pero la más difícil de identificar es la gran pirámide de la cual
casi todos formamos parte: analiza la imagen de arriba y tendrás
una idea de cómo funciona el mundo en la actualidad.
Esto lo escribo porque desde un tiempo acá muchas
organizaciones piramidales han intentado lavarme el cerebro, sin
contar con los numerosos mensajes que llegan a diario a mi
facebook y a mi correo electrónico.
Saben porque yo los atraigo tanto, porque tengo cara de
ingenuo. Lo que ellos no saben es que yo sé identificar una
pirámide a leguas de distancia: sus trucos no les funcionará
conmigo.
En fin… tengan cuidado con esos demonios disfrazados de
ángeles.

ELLOS ERAN MÁS SABIOS

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Desde hace un poco más de quinientos años, la tierra estaba
dividida en dos mundos: lo que hoy conocemos como América y
el resto del planeta.
América era una especie de paraíso, pero no fue Dios quien la
hizo más bella que el resto del paneta, fueron sus habitantes los
que se encargaron de cuidarla como a una perla.
Cuentan las leyendas que los primeros en descubrir el nuevo
mundo fueron los fenicios, luego los vikingos y por último los
españoles. Pero de esto ser ciento, al parecer, tanto los fenicios
como los vikingos respetaron la cultura de aquella gente: parece
que las religiones de los fenicios y las de los vikingos eran más
tolerante que la de los españoles.
Yo creo que si los españoles no hubieran destruido la cultura de
los habitantes de América, y si no hubieran saqueado la mayor
parte de sus riquezas, hoy América hubiera sido una especie de
Atlántida.
Pero no es de historia de lo que quiero hablarte, de lo que
realmente quiero hablarte es de los nativos de América:
La mayor parte de aquella gente vivía prácticamente en paz y en
armonía con su entorno, por eso fueron sometidos tan fácil por
aquellos extranjeros carente de conciencia.
En pocas palabras, los nativos de América eran extremadamente
sabios y mucho más inteligentes que los invasores… pero se
descuidaron en el arte de hacer la guerra. Parece que el grado
de conciencia de aquella gente estaba tan elevado que ya
estaban alcanzando la paz absoluta entre ellos.
El modo de vivir de aquella gente superaba el de los invasores
en casi todos los aspectos de la vida. Además eran muy felices.
Y en cuanto a sus ciudades, estas eran más bellas que las
ciudades de donde venían los intrusos… incluyendo la ciudad de
Roma.

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Los nativos de lo que hoy es América, al contrario de los
invasores, sentían respeto por la vida, y como ellos creían que la
tierra estaba viva, la amaban y la respetaban como a su propia
madre.
Los invasores decían que los nativos de América eran salvajes,
que hacían sacrificios humano, que las tribus se mataban unas
con otras y muchas otras cosas más.
En la actualidad aun se siguen difundiendo estas mentiras y
mucha otras más, pero un día se sabrá la verdad absoluta…
La verdad es que nos han desinformado tanto que hasta yo
llegué a creer en todas esas mentiras; y aunque muchas de esas
mentiras fueran ciertas, aun así los nativos de América
superaban a los colonizadores en casi todas las cosas
esenciales de la vida.

Muchos de los nativos americanos tenían conocimientos

suficientes para construir algunas de las maquinas que existen

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en la actualidad, y si no la construyeron fue porque sabían
perfectamente que los daños iban a superar los beneficios, algo
que, por falta de conciencia y por un egoísmo extremo, no se
calcula hoy en día.
Aquella gente estaba tan avanzada, que cuando en el viejo
mundo creían que la tierra era plana, ellos ya conocían el
sistema solar a la perfección. Además, eran mejores
matemáticos y mejores constructores, ya que lograron construir
estructuras que aun hoy en día se nos haría difícil poder
construirlas.
Cuenta la gente que ha vivido junto a las tribus que aún quedan
en la selva de la Amazonía, que ellos nunca han visto a un
indígena pegándole a sus hijos; que ellos nunca han visto a un
indígena discutiendo con su esposa; que ellos nunca han visto a
jóvenes indígenas peleándose por tonterías... Dicen que aquella
gente no sabe robar, que son amables con los visitantes, que los
jóvenes respetan a los ancianos como a sus padres y que los
líderes son personas comunes.
¡Si las tribus que viven en las selvas se comportan de ese modo,
ya debes imaginarte cómo vivía la mayor parte de los nativos de
América antes de la llegada de los depredadores…!
Los colonizadores se hacían llamar cristianos, pero Cristo debió
llorar lágrimas vivas al presenciar desde el cielo como aquellos
invasores usaban su santo nombre para maltratar aquella
pacífica gente.
En fin… aunque hoy en día nosotros tengamos internet,
celulares, aeronaves, electricidad y todas esas cosas, ellos
estaban más avanzados que nosotros. Lo digo porque lo más
grande de un ser humano es la conciencia y ellos tenían el grado
de conciencia extremadamente amplio, mucho más amplio que
la actual generación.

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EL PELIGRO DE LA DEFORESTACIÓN
No recuerdo la fecha exacta, sólo sé que aquello sucedió a
finales de mayo de 1992. Yo era un niño en aquel entonces,
pero aquello lo recuerdo como si hubiera sucedido ayer.
Aquel suceso contradijo toda lógica. Resulta que en aquel mes
habían caído enormes aguaceros y no había sucedido nada
fuera de lo normal. Sin embargo, aquel día calló una ligera
llovizna y la montaña comenzó a despedazarse emitiendo un
extraño zumbido que aterrorizaba a cualquiera.

Recuerdo que mi padre, reconocido como un hombre sin miedo,

al escuchar aquel zumbido, miraba la montaña mientras
temblaba. Fue la única vez que vi a mi padre asustado.
Al día siguiente uno de mis hermanos y yo, acompañados de
otras cinco personas, decidimos subir a la montaña para ver qué
era lo que había pasado, y lo que vimos fue algo espantoso:
Aquel día grandes plantaciones fueron barridas; bosques
enteros fueron borrados; grandes extensiones de tierras

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cultivables fueron sepultadas por piedras, y en las cañadas se
formaron enormes cuencas.
En fin… aquel extraño fenómeno cambió la geografía de la
montaña y provocó una enorme crisis económica a los
agricultores. Y para colmo, lo poco que quedó de las cosechas
se vendió a un precio extremadamente bajo.
La gente asociaba aquel fenómeno con todo tipo de males.
Incluso, muchos de ellos creían que aquello era un castigo de
Dios… Pero yo sabía que Dios no tenía nada que ver con aquel
fenómeno; yo sabía que aquellos fue producto de la
deforestación…
Yo, cuando subí a la montaña junto a mi hermano, observé que
muchos montículos que estaban extremadamente inclinados no
habían sido afectados ni en lo más mínimo debido a la cantidad
de arboles que cubrían su superficie. Parece que las raíces de
los arboles evitaron que el suelo de aquellos montículos se
desplomara como sucedió en los lugares que estaban
deforestados.

LA TIERRA SIN HUMANOS ESTARÍA MEJOR

¿Cómo sería la tierra sin seres humanos?
Yo creo que la tierra sin humano sería un paraíso, donde la
mayoría de sus habitantes vivirían felices. Sabes por qué lo creo
así, porque veo los felices que viven los animales que habitan en
un bosque virgen que yo acostumbro a visitar.
Cuando voy al bosque sólo escucho cantos, tanto de insecto
como de aves, y quien canta es porque de un modo u otro se
siente feliz.

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Yo creo que los animales de los bosques no alterarían el
equilibrio del planeta. Creo que sólo los humanos tenemos la
debilidad de alterar las cosas, desgraciadamente para mal.
Los humanos creemos que estamos por encima de la
naturaleza, y con esta actitud lo único que estamos consiguiendo
es sumergirnos más aun en la ilusión en que vivimos.
No somos la última gaseosa del desierto, al contrario, sólo los
humanos violamos las sagradas leyes universales… si no me
crees, observa detenidamente la naturaleza y comprobarás lo
que te digo.
Sé que la especie a la que pertenezco no es una plaga, lo sé
porque tenemos la capacidad de rebelarnos en contra de las
cosas que nos incitan a destruir…Tampoco somos maquinas
que han sido programadas para que destruyamos el planeta; lo
sé porque si lo hubiéramos sido, nuestro creador, o nuestros
creadores, no hubieran puesto en nosotros la capacidad de
razonar.

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PARTE- V

EL SENTIDO DE LA VIDA
¿Por qué estamos aquí? Es una de las preguntas que más
pasan por mi cabeza…
La vida es un misterio. Hasta ahora casi nadie sabe cuál es
realmente el sentido de la vida: nadie sabe a ciencia cierta
quienes realmente somos, de dónde venimos y hacia dónde
iremos cuando nuestros corazones dejen de latir.
Los humanos no conocemos prácticamente nada de nosotros
mismos ni del universo; nuestros únicos refugios son las
creencias y las suposiciones.
Por ejemplo, basándome en mis numerosas experiencias
místicas, yo he llegado a la conclusión de que esta vida es una
de las muchas experiencias que tendremos a lo largo de nuestra
infinita existencia. Pero para otros todo comienza y termina aquí
en la tierra. Es como si el mismo universo se ajustara a nuestras
creencias; y si algo así resulta ser cierto, entonces, aquellos que
creen que todo termina aquí dormirán eternamente.
Yo creo que la tierra es una especie de universidad en la cual
nos preparamos para poder vivir en otros mundos más perfectos,
como esos mundos a los que yo suelo ir cuando mi alma se
desprende de mi cuerpo y lo abandona momentáneamente.

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Quizá, aquí en la tierra, las aves se entrenan para volar en un
mundo más perfecto. Quizás los cuadrúpedos se entrenan para
ser cuadrúpedos, los insectos se entrenan para ser insectos, los
humanos para ser ángeles y así por el estilo. Quizá, cuando
nuestros corazones dejen de latir, tomaremos la tierra como
modelo para crear nuestras realidades en otros planos de
existencia: por algo muchos onironautas logran crear paisajes en
sus sueños lucidos. ¿No creen...?
Hoy en día los humanos nos hemos desviado del verdadero
camino y, poco a poco, estamos aniquilando esta bella
universidad llamada tierra: hoy los humanos nos estamos
desgraciando y les estamos desgraciando el desarrollo a otras
especies. Pero a pesar de todo tengo la esperanza de que un
día retornemos al verdadero camino para, junto a las demás
especies, seguir avanzando…
La naturaleza guarda una gran sabiduría, y aquellos que han
logrado descifrarla saben quiénes son, de dónde han venido,
hacia donde irán y saben muchas otras cosas más.
Si a ti se te hace difícil escapar de la ilusión de los sentidos, o si
eres de aquellos que por más que lo intentan nunca logran
entrar al mundo espiritual, al menos observa la naturaleza y
aprende de ella, que ella te mostrará la verdad o te acercará a
ella.

ATRAPADOS EN LA ILUSIÓN
Seguramente, en alguna ocasión, has leído alguna de las
siguientes frases:
1- La vida es un sueño.
2- La realidad es una ilusión.
3- La vida no tiene sentido.
4- Para descansar, morir.

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Por ejemplo: cuando ves una roca los sentidos te hacen creer
que la roca es solida, pero en realidad la roca es algo muy
distinto a lo que percibimos.
Otra cosa que podríamos tomar como ejemplo es el firmamento:
Si en algún instante de tu vida has observado detenidamente los
astros que pueblan el firmamento, has debido notar que todos
parecen mágicos; pero todos, o casi todos los humanos,
sabemos la realidad que ellos esconden.
Ahora debes saber por qué no podemos ver a Dios:
En verdad, nadie sabe cómo es Dios ni donde habita; y una de
las razones por la que no lo sabemos es porque Dios es real y
los sentidos nunca nos muestran la realidad.
Si queremos ver la realidad tenemos que desconectarnos de los
sentidos por un instante. Y si esto se nos dificulta, debemos
arrepentirnos de los males que hemos hecho antes de que la
muerte nos sorprenda con tales cargas en nuestros hombros.
Estamos atrapados en la ilusión, pero la muerte, si nos
encuentra ligero, nos trasladará a otro plano de existencia meno
ilusorio que este plano tridimensional en que vivimos. En aquel
plano de existencia veremos las cosas como realmente son. Allí
todos seremos sabios, porque todas las cosas serán
exactamente como las percibiremos. Allí seremos realmente
libres y quizás veremos a Dios... Y si no se nos permite verlo, al
menos tendremos una mejor comprensión de él.

¿QUIENES SOMOS?
No somos nuestros cuerpos físicos, nuestros cuerpos físicos son
sólo los vehículos de nuestras conciencias.

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Somos conciencia, y con esto estoy diciendo que nuestras
conciencias están fuera de nuestros cuerpos físicos.
Nosotros no pertenecemos a este mundo tridimensional aunque
los sentidos nos obliguen a creerlo: nosotros somos más
grandes de lo que imaginamos.
Tampoco somos seres individuales aunque aparentemos serlo;
somos parte de una conciencia gigantesca, así como nuestros
cuerpos son parte integral de este universo tridimensional.
Así como nuestras conciencias dominan nuestros cuerpos, de
ese mismo modo existe una gigantesca conciencia que domina
el universo físico.
En pocas palabras, todo lo pequeño es una copia en miniatura
de lo inmenso:
Nuestras conciencias forman parte de la conciencia que
mantiene las estrellas en orden y nuestros cuerpos forman parte
integral de este universo físico, y así todos somos uno.

SOMOS MÁS GRANDES DE LO QUE CREEMOS

Sé que las aves y los reptiles nacieron para algo más importante
que la simple tarea de controlar la población de insectos en la
tierra, tan sólo por darte un ejemplo de muchos. Sé que tales
maravillas tienen objetivos superiores… Por algo el universo es
tan inmenso.
Sé que hoy sólo somos la sombra de lo que un día seremos: un
día viviremos en algunos de los mundos inefables que esconde
este infinito universo.
Sé que el camino hacia aquellos mundos es recto y que los
humanos estamos caminando en círculo, pero tengo la

48
esperanza de que un día despertaremos y caminaremos por el
camino que conduce hacia la verdadera libertad.
Sé que al final del camino no terminaremos en el estomago del
creador. Sé que antes de que nos haya creado, él ya se
alimentaba de algo.
Creo que en verdad somos hijos del creador, no su ganado o
algo por el estilo. También sé que un día, al igual que él,
crearemos con nuestras mentes, si es que en la actualidad no lo
estamos haciendo inconscientemente.
En pocas palabras, los seres vivos somos más grandes de lo
que creemos.

TODOS SOMOS HERMANOS

¡Una de las muchas cosas que no logro entender en este mundo
es el por qué los humanos nos peleamos unos con otros, si
tenemos tantos enemigos con quienes pelear!
Sé que no somos seres individualistas; somos parte de lo que ha
existido desde siempre. Somos como una medalla que cuelga de
una cadena, que si nos deprendemos de la cadena, nos
perderemos.
Como todas las especies del planeta, los humanos somos
importantes. Por algo existimos. Pero no somos especiales, al
contrario, la tierra estaría mejor sin nosotros: yo estoy seguro
que si la tierra fuera consciente… amaría más a una abeja que al
más noble de los humanos.
Quien inventó el individualismo no fue un hombre sabio aunque
hoy mucho adoren su imagen. ¿Sabes por qué no lo fue? porque
hasta un ciego puede ver que todos somos hermanos; y más
que hermanos, como dije, todos formamos parte de algo…

49
Quien inventó el individualismo, en vez de sabio, estaba
enfermo: sufría de un egoísmo extremo, y su enfermedad no le
permitió ver que somos seres dependientes.

50
PARTE- VI

LAS PIEDRAS MISTERIOSAS

Cuando yo era un niño acostumbraba a bañarme en un enorme

charco que había alrededor de esas piedras que ves en la
imagen de abajo.
Hace unos meses pasé por ese lugar, y al ver las piedras me
detuve y comencé a recordar cuando, en mi niñez, yo solía
sentarme sobre ellas desnudo para tomar el sol.

51
Luego de mirar fijamente las piedras, noté varias cosas, como
por ejemplo: noté que estas piedras encajan muy bien unas con
otras; noté que la mayor parte de ellas están sepultadas bajo el
sedimento que ha sido arrastrado por el riachuelo desde la
montaña; noté que muchas de ellas fueron removidas de sus
lugares y arrastradas por las crecidas del riachuelo; noté que la
superficie de ellas están pulidas y que las parte deformadas
están colocadas hacia abajo.
En pocas palabras, estas piedras podrían haber sido una de las
mucha ruinas de construcciones milenarias que se encuentran
dispersas por todo el mundo, y de esto ser cierto, esto no fue
obra de los indígenas que habitaban en esta isla ni mucho
menos de los colonizadores españoles: esto podría ser obra de
una civilización que seguramente habitó en esta tierra miles o
ciento de miles de años antes de ellos.
A simple vista estas piedras son insignificantes; el problema es
que el lugar donde están las hace misteriosas, debido a que,
según la historia, esta isla fue habitada en una época
relativamente reciente, y los indígenas que la habitaban a pena
sabían construir chozas para refugiarse.
El día que noté que estas piedras podrían ser obra de una
civilización que posiblemente habitó en esta isla antes de los
tainos, viajé mentalmente miles de años en el pasado. En aquel
viaje imaginario retiré el sedimento que se ha acumulado en
aquel lugar y coloqué las piedras que han sido removidas por las
fuertes crecidas del riachuelo. Después de colocar todo en sus
respetivos lugares, vi un hermoso rio de agua cristalina que
corría en medio de los gigantescos arboles que adornaban aquel
lugar, vi aves de todo tipo y tamaño volando de un árbol a otro y
vi un hermoso estanque del cual formaban parte estas piedras.
En la actualidad este lugar da asco, incluso, aquel día tuve
miedo hasta de lavarme las manos en el riachuelo por lo
contaminadas que están sus aguas, pero miles de años atrás, de

52
seguro, aquel lugar era una especie de edén como el que
describe la biblia en Génesis.
Seguramente fue la belleza de aquel lugar la que inspiró a
aquella gente, o a los extraterrestres… a adornar aquel lugar con
estas piedras, en caso de que yo esté en lo cierto.
Después de ver estas piedras, mis ojos se abrieron y comencé a
notar que estas mismas formaciones están presentes en muchos
otros lugares de mi tierra natal, en su mayor parte en los lugares
donde emerge agua de la tierra, en bosques frondosos y hasta
en la cima de algunos cerros.
El objetivo de este tema no es crear conflicto con la ciencia
establecida, lo que realmente busco es que mis lectores
despierten el hábito de observar…

53
El joven de la imagen soy yo, y el que está en el fondo es uno de
los cuatro jóvenes que me acompañaban en aquella expedición.
Aquel día, mientras ellos se divertían, yo observaba las piedras
de aquel lugar para compararlas con las piedras misteriosas de
la imagen de arriba: allí nace uno de los ríos más importantes de
mi tierra natal.
Aquel día, a pesar de todos los inconvenientes que tuve, fue uno
de los días más felices de mi vida: fue como tener una
experiencia extracorpórea.
Recuerdo que, después de observar las piedras, me pasé horas
sentado sobre una de ellas mirando las blanquecinas y ruidosas
aguas que emergían y se precipitaban sobre uno de los verdes
acantilados de aquel lugar.

SÓLO PUDE VER DOS DE ELLOS

En una de mis visitas a mi tierra natal uno de mis hermanos me
había dicho que fuera el día próximo a la montaña para que le
ayude a plantar cebolla.
Aquella propuesta no me gustó mucho, ya que desde hace
mucho tiempo yo había dejado de trabajar agricultura. Aquello
iba a ser una tortura para mí, pero no quise negarme por el
respeto que siempre les he tenido a mis hermanos mayores:
Aprovecharé este viaje a la montaña para ver si logro divisar
algunas de las estrellas danzantes –pensé.
Luego de reflexionar un poco le dije: ¡Allá me encuentras!
Esa noche me acosté temprano y programé mi teléfono celular
para que me despertara a las 3:30AM, dos horas y media antes

54
de las 6:00PM, la hora a la que los campesinos acostumbran a
levantarse cuando les toca subir a la montaña.
Cuando la alarma sonó, me vestí y emprendí mi viaje hacia la
montaña alumbrando el camino con la linterna de mi teléfono
celular.
Al subir el primer montículo me detuve un rato para quitarme las
molestosas telarañas de mi cara. Luego de quitarme las
telarañas, fui a la parte más elevada de aquel montículo, me
senté sobre una piedra y comencé a mirar el cielo fijamente.
Pero lo único que pude ver fueron las luces de dos aviones
silenciosos que siempre acostumbran a fumigar el cielo en la
madrugada (Chemtrail). También, de vez en cuando, veía
estrellas fugaces que atravesaban aquel despejado cielo de
aquella hermosa noche sin luna.
¡Qué bello está el cielo esta noche! ¡Aunque no logre ver Ovnis,
este viaje ya es un éxito! –pensaba yo, mientras miraba las
incontables estrellas.
¡La verdad es que no sé por qué me agradan tanto estas cosas!
Yo estaba emocionado mirando el cielo, pero al no ver objetos
voladores de importancia seguí mi camino cuesta arriba. De vez
en cuando me detenía y daba una ojeadita en el cielo con la
esperanza de ver algo inusual, y en una de esas ojeadas vi que
una enorme estrella emitía pulsos de luz, por lo que me detuve
para observarla fijamente. Después de unos minutos de mirar
fijamente el cumulo de estrella donde se encontraba la enorme
estrella pulsante, aquella estrella comenzó a desplazarse hasta
ocultarse detrás de la montaña. Según mis cálculos, aquella
estrella pulsante se movía a más de cuatro mil kilómetros por
hora.
¡Santo Dios!, deben haber más de esas cosas camufladas por
ahí –pensé. Por lo que me senté y comencé a observar el cielo
nuevamente.

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Unos pocos minutos más tarde salió otra luz como de la nada y
comenzó a desplazarse con un movimiento ondulatorio, luego se
detuvo y se apagó.
Parece que los tripulantes de aquellos objetos voladores son
más listos de los que nos imaginamos: seguramente ellos saben
que yo los estoy viendo –pensé.
Después de observar aquella última luz en el cielo, me levanté y
seguí mi camino cuesta arriba sin detenerme en ningún lado; y
mientras subía la montaña, sólo un pensamiento ocupaba mi
mente: ¡si los tripulantes de aquellos objetos voladores no son
de este mundo, la humanidad ha avanzado más de lo que nos
han hecho creer!

EL MISTERIO DE LOS VAMPIROS

Antes que nada debes saber que desde muchos de los
empresarios que nos emplean hasta las más horrendas criaturas
del bajo astral podrían catalogarse como vampiros, ya que todos
ellos se hacen fuertes con la energía de otros…
No creo que los vampiros que le muerden el cuello a sus
víctimas para succionarles la sangre existan en la vida real; creo
que esto es un mito; y en caso de que existan, serían como
mansos corderos comparados con otros de los cuales trataré en
este tema.
Las películas cinematográficas nos han dado a entender,
principalmente, que los vampiros son criaturas nocturnas que se
alimentan de sangre, siendo la sangre humana una de la más
apetecible para ellos.
…antes de hablarte de los verdaderos vampiros debes saber
algo muy importante, algo que te ayudará a entender mejor este
asunto:

56
Vista desde otra perspectiva, la tierra es una especie de infierno
en el cual los más fuertes cazan a los más débiles para
alimentarse de ellos. En esta casería la mayoría de los seres
vivos nos basamos principalmente en el engaño para atrapar a
nuestras presas. Sólo basta con observar un poco a tú alrededor
para darte cuenta del infierno en que viven muchos animales.
Por ejemplo: un día vi a una pequeña serpiente tragándose a
una rana viva y eso me afligió mucho. Aun recuerdo el penoso
llanto de aquella rana…
Supongo que han sido las limitaciones las que han creado a los
vampiros. Lo digo porque hasta ahora no he escuchado decir
que un ser vivo ha matado a otro para robarle el aire que
respira: yo creo que si únicamente dependiéramos del aire para
vivir, no existieran los conflictos, ni mucho menos los vampiros.
Observa tú alrededor: mira como las arañas tejen sus telas con
hilos casi transparentes para que los demás insectos queden
atrapados en ellas. Observa como los lagartos se camuflan para
que sus presas no los vean llegar... Observa como los
pescadores engañan a los peces con irresistibles gusanos e
insectos enganchados en garfios.
Nosotros los humanos a simple vista representamos la cúspide
de la pirámide en cuanto a cacería se refiere. Pero el hecho de
que algo no nos devore físicamente no quiere decir que estemos
libres de depredadores. Al contrario, la tierra podría ser la granja
ideal y los humanos el ganado perfecto.
Por ejemplo: así como nosotros nos alimentamos de otros
animales para poder vivir, del mismo modo otros seres invisibles
podrían estar alimentándose de nosotros:
Seguramente en algún momento tú has debido escuchar decir
que existen entidades malas que se alimentan de nuestros
miedos y de nuestros odios, y entidades buenas que se

57
alimentan de nuestro amor. Ya debes entender a que me refiero
cuando digo que algo podría estar alimentándose de nosotros.
No sé si realmente existen entidades que nos despojan de
nuestras energías vitales para prolongar sus vidas, lo único que
sé es que tanto ellas como los vampiros chupasangre que salen
en las películas cinematográficas serían insignificantes
comparados con otros, sobre todo con aquellos demonios que
usan el ocultismo como anzuelo para atrapar a sus presas.
Por ahí existen libros extraños que te muestran todo tipo de
ejercicios, básicamente ejercicios de visualizaciones. Ellos, en
sus libros, te aseguran que con dichos ejercicios tú podrás lograr
grandes beneficios para tu cuerpo, pero la verdad es otra:
Al realizar dichos ejercicios, en vez de conseguir beneficios, tú le
cedes tu energía vital al vampiro que creó dichos ejercicios.
Para mí esos son los vampiros más horrorosos del universo,
porque en vez de matarte rápidamente, te dejan como un
vegetal andante; y lo peor de todo es que casi nadie logra
escapar de sus redes, ya que saben disfrazarse muy bien.
No olvides que en este mundo nada es gratis: observa que hasta
los bondadosos árboles que te regalan sus frutos lo hacen a
cambio de que tú distribuyas sus semillas. Tú seguramente no lo
sabes, pero los árboles, de un modo u otro, lo saben muy bien.
En mi tierra existían personas con grandes conocimientos sobre
ocultismo. Ellos elegían a uno de sus hijos para pasarle los
conocimientos de boca a oído. De este modo escapaban del
peligro… Pero aquellos que practicaban ocultismo por sí sólo, o
morían en la miseria o enloquecían.
Por eso, si un día decides sumergirte en el ocultismo, te
aconsejo que tengas mucho cuidado.

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EL MÁS GRANDE DE LOS MISTERIOS
Casi todos los seres humanos, y quién sabe si otras especies,
en algún momento de sus vida, han tenido aunque sea una
pequeña experiencia extracorpórea.
Nadie sabe a ciencia cierta que es realmente este fenómeno por
lo difícil que resulta poder controlarlo y, muchas veces, hasta
explicarlo; y si alguien lo sabe, de seguro se lo ha revelado un
ser de otro mundo, ya sea directa o indirectamente.
Muchos expertos han recibido grandes revelaciones de seres
que se les aparecen en plenas experiencias, pero esto es tan
extraño que hasta a mi mismo se me hace difícil creerlo. ¡Y si
todas estas cosas están dentro de nuestras cabezas…! –es lo
que siempre ronda por mi mente…
Como dije, nadie sabe a ciencia cierta qué es lo que sale de
nuestros cuerpos y se va a otro mundo:
A eso que sale del cuerpo muchos le llaman de diferente
manera, como por ejemplo: espíritu, alma, cuerpo astral,
conciencia, entre otros.

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Otras cosas que nadie sabe a ciencia cierta es el lugar exacto
donde están ubicados aquellos mágicos mundos a donde vamos
cuando salimos fuera de nuestros cuerpos y qué es la potente
fuerza que, en un instante, nos traslada hasta allí.
A esos mundos mágicos donde aparecemos como por arte de
magia, como nadie sabe qué es lo que realmente son, les llaman
cielo, paraíso, plano astral, mundo espiritual, gloria, entre otros.
A decir verdad nada parece tener sentido, debido a que la
mayoría de estas experiencias contradice todo lo que
conocemos hasta hoy. Pero a pesar de todo, estas experiencias
provocan un gran cambio en las vidas de aquellos que las han
tenido.
Creo que el cambio lo provoca la extrema lucidez de las mismas.
Por ejemplo: cuando el viajante está sumergido en dicha
experiencia, él sabe perfectamente que ha salido de su cuerpo y
que está viajando por una especie de túnel luminoso; él sabe
que una potente fuerza lo transporta, porque lo siente... El
viajante sabe que aquel mundo no es la tierra porque aquellos
inefables paisajes no existen acá. En pocas palabras, en un viaje
extracorpóreo el viajante es consciente de todo el proceso del
viaje.
Otra de las cosas que el viajante sabe es que puede volar y
desplazarse a alta velocidad; no sé cómo, pero lo sabe.
Sea del modo que sea estos viajes son reales, pero es algo que
ni los más inteligentes logran entender. Existen muchas teorías
pero son sólo eso: teorías…
Los religiosos, los ocultistas y los científicos tienen repuestas
para este fenómeno, pero son sólo suposiciones porque esto es
muy difícil de controlar en laboratorios.
Existe un tipo de experiencia extracorpórea en la cual el viajante
se resiste a la fuerza que se lo lleva al otro mundo. Por ejemplo:
cuando el viajante no se deja llevar, se queda aquí en la tierra y
puede desplazarse a cualquier punto de la tierra en cuestión de
segundos. Este tipo de experiencia es muy difícil de controlar, al
menos para mí, pero un día sacaré tiempo para practicarla,
porque si un día yo logro controlar este tipo de experiencia,
podría demostrarles a muchos incrédulos que estos viajes son
reales.
El día que yo logre controlar este tipo de experiencia, le pediré a
muchos de mis lectores que me den sus direcciones. Y cuando
ya tenga sus direcciones saldré de mi cuerpo, viajaré a sus
casas y memorizaré todo lo que vea. Y cuando regrese del viaje,
les envió un mensaje por la Internet describiéndole todo lo que vi
dentro de sus casas.
Otra cosa que haré es viajar y entrar a lugares donde personas
comunes como yo jamás entrarían físicamente, para luego
publicar lo que vea en algunos de mis futuros trabajos.
Una experiencia extracorpórea es difícil hasta de describir con
palabras. O sea, todas las cosas que contamos y los dibujos
que pintamos son sólo aproximaciones…
Lee atentamente el siguiente cuento y comienza a familiarizarte
con este extraño fenómeno:
Pavel vivía en el tercer cielo, un mundo donde sus deseos eran
órdenes. Llegó allí graduado con honores desde el segundo cielo. En
aquel esplendido plano de existencia se le dio a elegir entre dos
oficios: ser guardián al servicio de un poderoso arcángel o pintar con
la mente, optando por este último oficio.

Todo te será permitido aquí en el tercer cielo, Pavel: aquí serás como
un Dios; sólo tendrás que guardar celosamente las sagradas leyes
universales –le dijeron los ancianos barbudos que rodeaban uno de
los enormes salones donde llevan a las personas especiales.

Después de recibir aquel importante mensaje de los ancianos, un

bello ser alado le entregó un pequeño librito dorado en el cual

61
estaban escritas las sagradas leyes universales y las consecuencias
que acarreaban la violación de cada una de ellas.

Los primeros miles de años, Pavel vivió extremadamente feliz en el

tercer cielo, y su único trabajo consistía en pintar mentalmente un
enorme jardín, que los Ángeles le habían asignado: podría decirse
que Pavel era una especie de jardinero celestial.

Cada cierto tiempo, Pavel cambiaba la forma de su jardín. Por

ejemplo: él, mentalmente, les ordenaba a las plantas que cambiasen
la forma, los colores de sus flores y el brillo de sus hojas, y las plantas
le obedecían instantáneamente. Luego volaba por encima del jardín
para, desde arriba, deleitarse mientras contemplaba su maravilloso
trabajo y la alegría de quienes se recreaban.

Hubo un tiempo que Pavel se cansó de pintar mentalmente, y en vez

de ir al consejo para que le asignaran otra tarea, optó por callar y
sufrir en silencio: ¡el pobre ya no encontraba nuevas combinaciones
para su jardín, y eso le causaba un gran malestar!

Un día repitió una pintura que había hecho cien años atrás, y se sintió
tan frustrado que decidió violar una de las leyes que mantenían el
universo en equilibrio, posiblemente para llamar la atención del
consejo: ¡grave error…!

Al instante de violar la ley se apareció un poderoso Ángel ante él y lo

encadenó.

¡Pavel serás jugado por el consejo! –le dijo el Ángel pocos segundos
antes de teletransportarlo al gran salón donde juzgan a los que
violan las sagradas leyes universales.

Pavel fue sentenciado a 65 años en un planeta prisión llamado Tierra,

y aunque era un ser muy admirado en el tercer cielo, al igual que a
los demás prisioneros, se le borró el recuerdo, quizás, para que sus
penas en prisión fueran más llevaderas.

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En sus primeros años de vida, en aquella prisión, Pavel no sufrió
tanto, pero después de los veinte años comenzó a sentirse incómodo,
y aunque nunca pudo recordar nada de su glorioso pasado, siempre
sospechó que él había descendido de un mundo superior.

En varias ocasiones Pavel pensó escapar de la tierra usando el

método del suicidio, pero su poderosa intuición le decía que si se
escapaba sería capturado y devuelto al planeta.

Después de buscar y rebuscar, Pavel encontró el modo de visitar su

patria aunque sea por unos cuantos minutos, y allí le revelaron
muchas cosas, incluyendo parte de su glorioso pasado. Y fueron
aquellas revelaciones las que lo animaron a permanecer en aquel
planeta prisión hasta el día en que la muerte lo liberó y lo llevó de
vuelta a su hogar.

63
PARTE- VII

SOY UN REBELDE
No hace mucho me puse a teclear mi teléfono celular y, en vez
de alegrarme… me entristecí mucho: ¡Cómo es posible que la
humanidad no haya sido capaz de crear un sistema de
organización social más justo que el que se ha establecido en
casi todo el mundo en la actualidad, si tiene capacidad de sobra
para crearlo! ¿A caso no es mucho más difícil crear una maquina
como esta? ¿Qué es lo que impide que la humanidad eleve su
grado de conciencia? –fueron algunas de las interrogantes que
pasaron por mi mente aquel día.
A través del tiempo, mis meticulosas observaciones y mi
poderoso razonamiento me han impulsado a sospechar que
quizás el mundo y el mismo universo no eran como aparentaban
ser y, en estos últimos años, mis numerosas experiencias, tanto
terrenales como místicas, me han confirmado muchas de las
cosas que había sospechosos…
Cuando mis ojos se abrieron pude ver que las cosas no eran
como aparentaban ser. Desde aquel día comencé a alejarme de
todo aquello que veía como autenticas cárceles para mí. Cuando
mis ojos se abrieron, también, vi claramente que la vida es una
eterna batalla, y casi al mismo instante comprendí que las
experiencias vividas, tanto dolorosas como placenteras, son
parte de lo muchos caminos que nos conducen hacia la

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sabiduría. Por eso y por muchas otras cosas más nunca me
arrepentiré de ser como soy.
Hoy en día soy un rebelde, no como esos que queman
neumáticos en las calles o como esos que se alzan en arma
contra tal o cual sistema. Al contrario, mi rebeldía consiste en no
guardar muchos de los dogmas y preceptos que se han
establecido en el mundo como verdades incuestionables. Por
ejemplo, las cosas que yo sé que no están correctas,
simplemente las aparto de mí aunque aquello sea una práctica
común en la gente. Y las cosas por las cuales el hombre se mata
trabajando para obtenerlas, simplemente yo las desprecios, no
porque no sean buenas, sino porque existen cosas mucho
mejores… y no hay que matarse tanto para conseguirlas.
El precio que he tenido que pagar por mi rebeldía interna ha sido
muy elevado, pero aun así no me arrepiento de ser un rebelde ni
creo que me arrepentiré mientras viva.

EL ORIGEN DE MIS DUDAS

Yo, como casi todos los niños… creía que mi padre era el
hombre más inteligente del mundo. No sé a ciencia cierta en qué
se basan los niños para creer tales cosas, lo único que sé es que
yo no estaba tan equivocado al creer que mi padre era especial.
Desde muy pequeño, en mi tierra natal, observé que las
personas bondadosas, las honradas y las derrochadoras eran
las que menos tierra tenían, y mi padre, a pesar de tener todas
las características anteriores, logró comprar mucha tierra, tan
sólo por darte un pequeño ejemplo de las muchas hazañas que
logró realizar…
Incluso, yo estoy seguro que mi padre era uno de esos que hoy
les llaman –contactados– pero, al contrario de los demás, él
guardó aquello en secreto. Además, en mi tierra no se conocía la

65
palabra –extraterrestre-. La gente de mi tierra, incluyendo a mi
padre, creía que aquellos seres venían del cielo o del infierno,
dependiendo del aspecto que mostraban. De esto hablaré en
otro trabajo.
Mi amor y mi respeto hacia mi padre eran casi infinitos. Pero,
aunque nunca aparté mi amor hacia él, el respeto mental que yo
le tenía comenzó a desplomarse un día, que lo escuché decirle a
mi madre que me iba casi a matar de una golpiza porque yo
había quebrado más de diez matas de plátano practicando
karate.
Recuerdo que aquel día me acerqué a él para decirle que no
había sido yo quien había quebrado las matas de plátano. Pero
todo fue inútil, ya que sin perder el tiempo me echó manos, se
desató la correa y me propinó como diez correazos en la
espalda.
Desde aquel día comencé a sospechar que seguramente mi
padre no era el hombre más inteligente del mundo, no por los
correazos que me había propinado, sino por no haber sido capaz
de notar que yo le decía la verdad.
En verdad, ya él me había propinado otras golpizas, una de ellas
por haberles sacado todas las bolitas a cuatro cartuchos de
escopetas con un clavo y otra por trepar por unas gigantescas
matas de mango.
¡La verdad es que no sé como sobreviví a tantas travesuras!
Tanto mi padre como yo actuamos injustamente aquel día, él por
haberme pegado sin razón y yo por no haber sido capaz de
comprender que en algún momento hasta el más listo de los
seres humano se equivoca. Pero de todo modo agradezco que
esto haya sucedido, porque aquel día fue el día en que surgió en
mí un extraño hábito de dudar de la veracidad de casi todas las
cosas.

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Mas luego, cuando vi por primera vez las abismales
desigualdades sociales de Santo Domingo, algo que no existía
en mi tierra natal, comencé a ver a la gente como seres extraños
de los cuales quería alejarme.
Ahora debes entender por qué entré en estado depresivo
cuando visité la ciudad de Santo Domingo por primera vez y por
qué me convertí en un adolescente retraído... claro, si leíste mi
biografía.

DE ATEO A CREYENTE
Una noche, mientras mi madre y yo nos calentábamos en un
anafe, aproveché y le pregunté: mamá, ¿tú has visto a Dios?
No, nunca lo he visto, pero la gente dice que él es barbudo…
–me respondió.
Luego me dijo tantas cosas acerca de Dios, que aún conservo
en mi mente la imagen mental que forjé aquella fría y húmeda
noche de diciembre.
Por mucho tiempo el Dios que adoraba mi madre fue mi ídolo.
Pero un día descubrí que el cielo, la morada de de Dios, no
existía. Aquel descubrimiento dio lugar al inicio de mi primera
etapa de confusión y dudas.
Más luego, los libros de ciencia naturales se encargaron de
disipar mis dudas. O sea, aquellos libros me convirtieron en un
perfecto ateo. Claro, nunca le dije a nadie que yo era ateo.
Tampoco me burlaba de los creyentes como hacen muchos de
los comentaristas del la página web -RT en español-.
Pero por cosas que aun no sé explicar, fue justamente en mis
años de ateísmo cuando, involuntariamente, tuve las más
intensas de mis experiencias místicas, las cuales dieron paso a
la segunda etapa de confusión y dudas.

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En esta nueva etapa, aproveché para investigar cuidadosamente
las experiencias místicas, sobre todo las experiencias
extracorpóreas. También quería saber si en otra parte del mundo
existía gente como yo.
En mis investigaciones supe que lo que me pasaba era algo
insignificante comparado con lo que le pasaba a otros jóvenes
en otras partes del mundo.
Incluso, un joven colombiano
mbiano me contó que una niña mexicana
mex
le describió con lujo de detalles todos los objetos que había en
su habitación. O sea, la niña abandonó su cuerpo, viajó a
Colombia y entró
ntró a la habitación del joven; luego regresó a su
cuerpo, fue al ordenador y, por el chat, comenzó a contarle todo
lo que había visto.
Hoy en día creo en Dios hasta que el método científico
demuestre su no existencia. También creo en muchas de las
experiencias místicas que he tenido…

NO SOY UN SOLITARIO

De vez en cuando yo acostumbro a escaparme a un lugar ultra

secreto; un lugar casi impenetrable para un ser humano. Pero el

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hecho de que yo acostumbre a refugiarme en aquel apartado
lugar no quiere decir que yo soy un amante de la soledad
extrema. Al contrario, esto lo hago porque, además de usar
aquel lugar para otros asuntos, allí se me hace muy fácil salir de
mi cuerpo físico y entrar a otros mundos:
Cuando yo estoy en aquel lugar logro desconectarme de este
mundo sin mucho esfuerzo. Allí tengo todo el tiempo necesario
para entrar en estado de relajación total, sin miedo a que alguien
pueda interrumpirme. Allí logro sacar la conciencia de mi cuerpo
físico y llevarla a un mundo perfecto, donde sus seres vivos
viven en armonía como viven las aves de aquel hermoso
bosque. Supongo que es la altura de aquel lugar la que hace
que el grado de mi sensibilidad se eleve…
Desde hace mucho tiempo soñaba con refugiarme de vez en
cuando en un lugar donde nada ni nadie pudiera interrumpir mis
éxtasis, y no descansé hasta encontrarlo. Al principio creí que
encontrar un lugar así era imposible, ya que a dondequiera que
iba siempre encontraba gente… pero aquel lugar es más de lo
que yo soñaba.
Aquella meseta es más que ideal para mis asuntos espirituales y
para curar las penas que de vez en cuando me provocan las
necedades de mucha de la gente que me rodea.
Debo reconocer que aquel lugar es un poco incómodo, pero yo
no busco comodidad para mi cuerpo, sino paz para mí alma, por
eso la incomodidad de aquel lugar no me afecta ni en lo más
mínimo.
A veces sospecho que fue el mismo Dios quien me guió hasta
allí…
Al principio creí que una fiera salvaje me iba a devorar, pero más
tarde noté que aquel lugar es tan puro que hasta las arañas
venenosas parecen inofensivas.

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Recuerdo que en uno de mis primeros viajes hacia aquel lugar
me perdí en el bosque y fue algo espantoso para mí. Aquel día
yo estaba tan asustado que estuve a punto de entrar en pánico.
¡Hasta se me quitaron las ganas de seguir visitando aquella
meseta! Creo que nunca se me habían clavado tantas espinitas
en mi cuerpo como aquel día; ni cuando jugaba a las escondidas
en los cañaverales de mi tierra natal… Pero en mi posterior viaje
dejé marcas para que no me vuelva a pasar lo mismo.
No es que me guste la soledad, yo simplemente quiero ver y
sentir lo inefable cuando me llegan aquellas épocas de extrema
sensibilidad. Siento que es una fuerza invisible la que me
impulsa a ser como soy, y mientras esa fuerza no me provoque
daño, no me resistiré a ese impulso.
¡Si tan sólo imaginaras la emoción que siento cuando salgo cada
mañana de mí campamente y miro aquel esplendido paisaje que
me rodea…!
Para un siquiatra yo soy un trastornado. Lo digo porque ellos
tienen un nombre para todo tipo de conducta. He leído que las
personas que están vinculadas con las cosas espirituales les
importa un bledo el mundo físico. También he leído que las
creencias están ubicadas en la parte frontal del lóbulo derecho
del cerebro. Pero créeme, hasta los más grandes escépticos
cambian cuando logran entrar en contacto con una realidad
superior a esta pesada realidad en que vivimos.
Por eso te pido que no creas que soy un solitario empedernido,
yo sólo soy uno que tiene el grado de conciencia muy elevado, y
por tal razón siempre hago cosas que muy pocos logran
entender, porque para entenderme se necesita algo superior a la
razón. Por eso siempre me aseguré de que nadie supiera de mis
actividades. Incluso, si yo no hubiera escrito este trabajo y otro
trabajo titulado –Huyendo del egoísmo– nadie se hubiera
enterado de mis escapes hacia aquella montaña; ni siquiera mis
mejores amigos…

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Con este tema no busco persuadirte para que vayas a una
montaña a estar solo, lo que realmente quiero que entiendas es
que por una razón que aun desconozco, estar solo, aunque sea
un día cada equis tiempos, es bueno para el espíritu; y si el lugar
es como el de la imagen de abajo, es mucho mejor…

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LA TIERRA DONDE NACÍ

La tierra donde nací era muy bella: estaba llena de vida, de

paisajes coloridos y de todo tipo de árboles frutales, que servían
de alimentos a los animales, sobre todo a la multitud de aves
tanto domesticas como silvestres.
Recuerdo que una hora antes de llover el cielo de mi tierra natal
se volvía negro y ruidoso de tantas golondrinas, que volaban en
forma de torbellinos, emitiendo chillidos.
Recuerdo que todos los días, a las seis de la tarde, pasaban
multitudes de garzas blancas volando en formación por encima
de mi casa.
Recuerdo que los jardines que adornaban las casas hervían de
colibríes y mariposas.
Recuerdo cuando los muchachos nos bañábamos en el río de
agua cristalina que pasaba detrás del pequeño poblado.
Ya nada de esas cosas existen en la actualidad; y pena de aquel
que se bañe en las contaminadas aguas del río, o de lo que
queda de él.

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Yo, al no conocer otras zonas rurales creía que todos los lugares
de mi país eran exactamente iguales a mi tierra, pero al crecer
se me hizo fácil visitar otras zonas rurales, y al compararlo con
mi tierra pude ver que el lugar donde nací era especial.
En mi país visité zonas rurales que contaban con tierras muy
fértiles irrigadas con modernos canales, y aun así sus habitantes
carecían de lo que nosotros teníamos de sobra; nosotros que, al
contrario de ellos, dependíamos totalmente de las lluvias.
En una ocacion mi padre me contó que unos cincuenta hombres,
dentro de los cuales se encontraba su abuelo paterno, se
encargaron de hacer de Derrumbadero una especie de paraíso:
me contó que aquellos hombres fueron los que plantaron todos
los árboles frutales, los cafetales y la mayor parte de las
palmeras…
Hoy en día mi tierra no es ni sombra de lo que fue décadas
atrás: todavía podemos disfrutar de los pocos árboles frutales
que aun están en pies y de los pocos ríos que aun no se han
secado, pero ya todo está arruinado; hasta la gente se ha vuelto
extraña.
Lo único que ha quedado intacto es su agradable clima. Claro,
incómodo para otros…
Por lo que he visto, los primeros habitantes de mi tierra natal, en
su juventud, eran jóvenes muy trabajadores y muy sensatos, y
escuchaban los sabios consejos de sus padres. Seguramente en
aquella época no existían jóvenes drogadictos, ni malcriados ni
delincuentes como los de hoy. Seguramente en aquella época
los jóvenes no se enojaban cuando sus padres les decían que
no hicieran tal o cual cosa, que eso les traería problemas en el
futuro. Seguramente en aquella época existían jóvenes con los
pies sobre la tierra.
Hoy en día la mayoría de los jóvenes de mi tierra sólo piensan
en sexo drogas y alcohol; las demás cosas no les interesan. Muy

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pocas veces he visto a un joven de mi tierra natal plantar un
árbol o sentirse orgulloso de tener una hermosa montaña como
la que rodea nuestro pequeño valle, la montaña que nos da el
agua que tomamos. Al contrario, en vez de plantar árboles
estamos aniquilando los pocos que quedan en pies.
Todo el rededor de la imagen que coloqué abajo, el lugar donde
nace un importante río de mi tierra, está pelado; y de cinco
fuentes como la que ves, a dura pena quedan tres…
Parece que una sombra maligna se apoderó de la tierra donde
nací, o quizás del mundo entero. Seguramente esas es la razón
por la cual ya mi tierra no es la misma de antes. Seguramente
esa es la razón por la que los árboles frutales prácticamente se
han extinguido. Seguramente esa es la razón por la que las aves
se han ido sabe Dios para donde. Seguramente esa es la razón
por la que muchos de los ríos se han secado y por la que otros
han reducido su caudal a la mitad.
La verdad es que no sé a ciencia cierta por qué están
sucediendo estas cosas; lo único que sé es que si en el resto del
mundo están sucediendo las cosas que suceden en mi tierra
natal, la tierra está en peligro.

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