Cenicienta
ACTO 1: La casa de Cenicienta
(Cenicienta está limpiando la casa. Gus y Jaq, dos ratones, corren a su alrededor.)
Cenicienta: [suspirando] Oh, desearía que las cosas fueran diferentes… ¿Por qué mi vida
es tan dura?
Gus: ¡Ánimo, Cenicienta! ¡Nosotros te ayudamos!
Jaq: ¡Sí, sí! ¡Te cuidamos, Ceni!
Cenicienta: Gracias, chicos. Siempre me hacen sentir mejor. [les acaricia suavemente]
Pero me temo que tengo tanto trabajo que hacer…
(Entra la madrastra con las hermanastras.)
Madrastra: ¡Cenicienta! ¿Por qué no has terminado aún?
Anastasia: [con desdén] ¡Mi vestido todavía no está planchado!
Drizella: ¡Y mis zapatos necesitan ser lustrados! ¡Apresúrate!
Cenicienta: Lo siento, trabajaré más rápido…
Madrastra: No quiero excusas. Esta noche hay un baile en el palacio. El príncipe busca
esposa, y mis hijas estarán listas para impresionar. Tú, Cenicienta, quédate en casa.
Alguien debe mantener todo limpio.
Gus: ¡Qué malvada! ¡No es justo!
Jaq: ¡Cenicienta merece ir!
Cenicienta: No pasa nada, chicos…Estoy acostumbrada.
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ACTO 2: Preparativos para el baile
(Las hermanastras están arreglándose para el baile, mientras Cenicienta observa desde el
fondo.)
Anastasia: [vanidosa] ¿No soy la más hermosa? El príncipe caerá rendido a mis pies.
Drizella: ¡Ja! El príncipe no tendrá ojos para nadie más que para mí.
Cenicienta: [soñadora] Me pregunto cómo será estar en el baile…
Madrastra: [interrumpiendo] Cenicienta, deja de soñar despierta y termina tu trabajo. Nos
vamos al baile.
(La madrastra y las hermanastras salen de escena. Cenicienta se sienta sola, triste.)
Cenicienta: Oh, si tan solo pudiera ir también…
Gus y Jaq corren y se acercan a Cenicienta.
Jaq: Cenicienta!, nosotros te ayudaremos a ir al baile!
Gus: si, confía en nosotros!
Gus y Jaq corren y sacan de un cajón unos hilos y agujas para comenzar a hacer el vestido,
pero de pronto Lucifer aparece y comienza a perseguirlos, Lucifer logra tomar a Gus de la
camisa, pero milagrosamente Cenicienta aparece y saca a Lucifer de la habitación.
Cenicienta: ¡Ahora estás a salvo!
Cenicienta sonríe y Gus y Jaq comienzan a hacer el vestido para Cenicienta mientras
cantan.
El vestido ya está hecho y Cenicienta se ve hermosa, ella sola da media vuelta y sonríe
Pero de repente las hermanastras entran a escena.
Drizella: oh que horrible vestido!!!
Drizella comienza a jalonear el vestido de Cenicienta.
Anastasia: ¡qué fea te ves!
Anastasia y Drizella comienzan a romper el vestido de Cenicienta. La madrastra entra y
habla molesta.
Madrastra: Cenicienta!!, ¿cómo te atreves a querer ir al baile?
Cenicienta ya en el suelo se encoge de hombros y suspira.
Cenicienta: lo siento....
La madrastra se ríe malvadamente, al igual que las hermanastras, ellas salen de escena y
se van directo al baile.
Cenicienta está en el suelo llorando, ella tiene el vestido roto y se siente completamente
triste y desconsolada, sin embargo Gus y Jaq se acercan y abrazan a Cenicienta en forma
de consuelo.
Jaq: Cenicienta.....
Gus: hmm…
De pronto se queda todo en silencio…
(Aparece un destello de luz. Entra el Hada Madrina.)
Hada Madrina: No estés triste, querida. ¡Tú también irás al baile!
Cenicienta: ¿Quién eres?
Hada Madrina: Soy tu Hada Madrina, y estoy aquí para hacer realidad tu deseo.
¡Bibisibsbidu!
(El Hada Madrina mueve su varita, y los ratones Gus y Jaq se transforman en caballos.
Aparece un carruaje brillante, y Cenicienta lleva un vestido deslumbrante.)
Gus: ¡Oh, vaya! ¡Mira qué guapo soy!
Jaq: ¡Y qué grande! ¡Es increíble!
Cenicienta: ¡Esto es un milagro! ¡Gracias, Hada Madrina!
Hada Madrina: Recuerda, Cenicienta, la magia solo durará hasta la medianoche. Debes
regresar antes de que el hechizo se rompa.
Cenicienta: ¡Lo recordaré! ¡Gracias, gracias!
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ACTO 3: El baile en el palacio
(El príncipe está en el gran salón, rodeado de damas, pero parece aburrido. Entra
Cenicienta, y todos la observan maravillados.)
Príncipe: [al verla] ¿Quién es esa encantadora joven?
Príncipe: ¡Debo bailar con ella!
(El príncipe se acerca a Cenicienta.)
Príncipe: ¿Me concedes este baile?
Cenicienta: [nerviosa pero feliz] Por supuesto, su alteza.
(Empiezan a bailar. La música suena, y ambos se pierden en el baile. Las hermanastras
miran celosas.)
Anastasia: ¡Esa chica! ¡El príncipe debería estar bailando conmigo!
Drizella: ¡No es justo! ¡No sé ni quién es!
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ACTO 4: Medianoche y la huida
(Cenicienta está disfrutando del baile, pero el reloj comienza a dar las campanadas de
medianoche.)
Cenicienta: [preocupada] ¡Oh, no! ¡Es medianoche!
Príncipe: ¿Qué sucede? ¿Te vas tan pronto?
Cenicienta: [corriendo] Lo siento, debo irme. ¡Gracias por el baile!
(Cenicienta sale corriendo del palacio, perdiendo uno de sus zapatos de cristal en las
escaleras. El príncipe lo recoge.)
Príncipe: ¡Espera! ¡No sé ni tu nombre!
(Las campanadas del reloj siguen sonando. Cenicienta desaparece en la noche.)
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ACTO 5: El zapato de cristal
(El príncipe ha ordenado que todas las mujeres del reino prueben el zapato de cristal para
encontrar a su misteriosa bailarina.)
Príncipe: Quien sea capaz de usar este zapato será mi esposa.
(Las hermanastras intentan forzar el zapato en sus pies sin éxito.)
Anastasia: ¡Debo ser yo! ¡Aprieta más!
Drizella: ¡No encaja! ¡No es justo!
Cenicienta: [suavemente] ¿Puedo probarlo yo?
Madrastra: ¡Tú! ¡Ni lo pienses!
Príncipe: ¡Dejad que lo intente!
(Cenicienta se sienta, y el zapato encaja perfectamente en su pie. Todos se quedan
asombrados.)
Príncipe: ¡Es ella! ¡Es mi amada del baile!
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ACTO 6: El final feliz
(Cenicienta y el príncipe están juntos en el palacio. Gus y Jaq, en su forma original,
celebran con ella.)
Gus: ¡Lo hicimos, Ceni!
Jaq: ¡Sabíamos que lo conseguirías!
Cenicienta: [sonriendo] No lo habría logrado sin todos ustedes.
Príncipe: Y yo no habría encontrado la felicidad sin ti. ¿Te casarás conmigo?
Cenicienta: Sí, con todo mi corazón.
(El Hada Madrina aparece nuevamente.)
Hada Madrina: Felices para siempre, querida.
(Todos celebran mientras cae el telón.)
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FIN
