[go: up one dir, main page]

0% encontró este documento útil (0 votos)
24 vistas14 páginas

Génesis de La Gestión Ambiental

El documento aborda la evolución de la gestión ambiental desde la revolución industrial, destacando la Conferencia de Estocolmo de 1972 como un hito en la creación de conciencia sobre el desarrollo sostenible y la necesidad de mitigar el daño ambiental. Se analizan los problemas actuales como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, así como los compromisos globales establecidos en la Agenda 2030. Además, se enfatiza la importancia de la cooperación internacional y la implementación de políticas para lograr un equilibrio entre el desarrollo humano y la conservación del medio ambiente.
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
24 vistas14 páginas

Génesis de La Gestión Ambiental

El documento aborda la evolución de la gestión ambiental desde la revolución industrial, destacando la Conferencia de Estocolmo de 1972 como un hito en la creación de conciencia sobre el desarrollo sostenible y la necesidad de mitigar el daño ambiental. Se analizan los problemas actuales como el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, así como los compromisos globales establecidos en la Agenda 2030. Además, se enfatiza la importancia de la cooperación internacional y la implementación de políticas para lograr un equilibrio entre el desarrollo humano y la conservación del medio ambiente.
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 14

TECNOLÓGICO NACIONAL DE MÉXICO

INSTITUTO TECNOLÓGICO DE BOCA DEL RÍO

Materia

Gestión Ambiental

Tarea

Génesis de la Gestión Ambiental

Presenta

Ing. Silvia Alejandra Santos Escobar

04 de octubre de 2024
Resumen

Se dice que los errores del pasado son la sabiduría del futuro; alrededor del mundo en la revolución
industrial, el ser humano cometió el grave error de creer que los recursos naturales se encontraban a
su disposición sin que estos sufrieran un cambio caótico, lo que generó un problema que no conocía
de fronteras nacionales; la contaminación, la perdida de recursos naturales y biodiversidad, así como
el cambio climático fueron la razón de la unión de las Gobernanzas Mundiales para dar inicio a la
Genesis de la Gestión Ambiental. Estocolmo en el año 1972, fue la cuna del nacimiento del desarrollo
sustentable, el cual tenía como objetivo gestionar los recursos para llevar a cabo un desarrollo sin
poner en riesgo a las generaciones futuras, lo cual generó grandes controversias entre los países
desarrollados y aquellos que se encontraban en vías del desarrollo, sin embargo a pesar de las
diferencias, se consolidaron acuerdos donde el principal objetivo era mitigar y prevenir daños
ambientales, así como el control del uso de los recursos naturales. La Cumbre de Rio de Janeiro, fue
la oportunidad de palpar los cambios generados por la aplicación de los acuerdos de Estocolmo 72 y
de retomar nuevos objetivos haciendo uso de recursos como la Agenda 21 y el protocolo de Kioto
para seguir en el camino al cambio del desarrollo sustentable. Actualmente en la agenda 2023, no
solo el cambio climático y la contaminación de suelo, aire y agua son objetivos mundiales, sino
también la erradicación de la pobreza y el hambre, la generación de energías limpias y la paz. Por lo
que México, al ser uno de los países que ha ratificado los acuerdos mundiales a favor del desarrollo
sustentable, tiene grandes retos para llevar a cabo la erradicación de la contaminación del aire, agua
y suelo mexicano.

Genesis de la Gestión Ambiental

Implicaciones y conceptos

En el siglo XIX, la revolución industrial fue de gran importancia para llevar a cabo el desarrollo
tecnológico a nivel mundial, sin embargo a la par de dicho desarrollo, dio inicio la sobre explotación
de los ecosistemas, dejando a un lado la cultura ambiental (Ricardo et al., 2017). Los inicios de la
gestión ambiental se llevaron a cabo entre los años 70´s y 80´s con el fin de realizar un
replanteamiento del pensamiento ambiental; tiene la finalidad de ser utilizada como instrumento de
diagnóstico y planificación ambiental (Ricardo et al., 2017) (Darío Muriel R., 2006); con el paso del
tiempo se ha llevado a cabo la perfección de la gestión de gobierno la cual considera los planos social
y económico a corto, mediano y largo plazo (Ricardo et al., 2017).

A mediados del año 1972, en Estocolmo, Suecia, se desarrolló la primera reunión de la Organización
de las Naciones Unidas en la cual se mencionaba los términos “medio ambiente”, donde si bien se
cuenta con un concepto especificó, se consideró por “medio ambiente” al conjunto de circunstancias
físicas, sociales y culturales que rodean a los seres vivos con los cuales tiene una interacción; en dicha
reunión se llevó a cabo la elaboración del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente
(PNUMA), el cual iba enfocado en la creación de la conciencia ambiental para el mundo (ONU,
2022).

Con el paso de los años, en 1987 “nace” el concepto de desarrollo sostenible el cual se entiende como
aquel desarrollo que satisface las necesidades presentes sin comprometer las necesidades de
generaciones futuras, entendiendo como necesidades: la alimentación, vestido, vivienda y salud. En
América Latina es común el uso del término “sustentable” en lugar de sostenible, esto debido a una
confusión de traducción del idioma ingles al español, sin embargo, se considera que el uso de ambos
términos es correcto (Ricalde et al., 2005).

Para comprender el término “gestión ambiental” primero se debe conocer el concepto gestión, el cual,
según la Real Academia Española, se entiende como el hecho de administrar u organizar algo; el
concepto de gestión ambiental si bien, puede tener diversos puntos de vista, según el autor que
interprete, éste se puede entender como la administración de políticas ambientales que establecen
objetivos y acciones que debe emprender la sociedad para coadyuvar y alcanzar el desarrollo
sustentable con la finalidad de amenorar aquellos impactos de las actividades que se llevan a cabo a
su alrededor (Darío Muriel R., 2006).

La gran riqueza en biodiversidad y suelos cultivables

Actualmente, la conservación de la biodiversidad se ha vuelto prioridad en las actividades humanas,


sin embargo, su concepto no ha sido comprendido, esto debido a que es un tema amplio; la
biodiversidad o diversidad biológica hace referencia a heterogeneidad, o dicho en otra palabra, la
cantidad de elementos biológicos que se encuentran en el sistema, la cual abarca todas las escalas de
organización en los seres vivos, desde los genes hasta comunidades, así como escalas de espacio y
tiempo, es la propiedad de ser diferentes entre sí, lo cual resulta de procesos y patrones evolutivos
irrepetibles (Halffter, G., 1995) (Núñez et al, 2003). Oberhuber, T et al., en el 2010 describen a la
biodiversidad como el conjunto de todos los seres vivos, el ambiente en el que estos se desenvuelven
y la relación que mantienen con otras especies.

Núñez & Barahona en el 2003 mencionan que la biodiversidad es quien provee de múltiples servicios
ambientales, así como las condiciones y procesos naturales en los ecosistemas, de los cuales los seres
humanos disfrutamos de diversos beneficios, que van desde la degradación de desechos orgánicos, la
formación de suelos cultivables, los ciclos biogeoquímicos, generación de alimentos, regularización
climática, entre otros. La diversidad biológica se encuentra conformada por microorganismos,
hongos, vegetales y animales, sin embargo, la gran mayoría de estos seres vivos no son conocidos,
llegando a considerar que se necesitarían alrededor de 200 años de estudio para conocer a profundidad
la diversidad real del planeta (Oberhuber, T et al.,2010).

Al paso de los años y de múltiples acontecimientos históricos, la humanidad ha influido en los


ecosistemas, y aunque esto no se considera del todo un punto negativo debido a que en algunos casos
la diversidad ha aumentado por la domesticación de especies animales y vegetales; la relación entre
las culturas y su entorno natural no han sido benéficas en la mayoría de los casos y las perturbaciones
ecológicas han sido muy agudas (Núñez et al, 2003).

Diversos investigadores, a lo largo de los años han alertado de la perdida de especies, sin embargo,
se ha considerado que, de manera natural la perdida de especies sin que se lleve a cabo algún
cataclismo, fue considerada como la extinción de una especie cada cuatro años, sin embargo, debido
a la intervención humana, esta cifra ha logrado acelerarse 1000 veces sobre el ritmo natural, a lo que
podría llamarse la sexta gran extinción. Los diferentes servicios que la diversidad proporciona a la
humanidad pueden ser divididos en cuatro grupos: servicios de bienes, los cuales benefician
directamente a las personas, servicios reguladores que son llevados a cabo por los ecosistemas, los
servicios culturales que son aquellos que tienen un peso espiritual y servicios de apoyo en los que
recaen el crecimiento de plantas y uso de suelos (Oberhuber, T et al.,2010).

Existen diversos temas que amenazan la pérdida de diversidad, sin embargo, la de mayor importancia
es derivada del crecimiento poblacional y la sobreexplotación de los recursos naturales, hasta inicios
del año 2002, se tuvo una gran pérdida biológica, esto a la par de un crecimiento poblacional de 6.2
billones de personas, se estima que para el año 2050, el crecimiento sea de 10 billones. Aunque en
algunos países desarrollados, el crecimiento poblacional se ha detenido, no es el caso de África o
países latinos, donde se encuentra la mayor riqueza biológica del mundo. El aumento industrial, así
como el uso ineficiente de recursos ha sido una de las principales causas de la pérdida biológica, esto
a que la población de países desarrollados consume tres cuartas partes de los recursos naturales del
mundo (Monroy Vilchis, O. 2005).

Monroy Vilchis, O. (2005) menciona que la contaminación es un factor que no afecta directamente a
las especies dominantes, sin embargo, es latente en la reducción de la diversidad biológica, esto
debido al contacto con plaguicidas, químicos, emisiones atmosféricas, aguas residuales, entre otros,
que afectan en la calidad del suelo, agua y aire. Si bien la introducción de especies exóticas, el
comercio de especies y algunas enfermedades, también influyen en el proceso de la reducción de la
diversidad biológica, una de las más importantes es la fragmentación de hábitats naturales, debido a
que un gran hábitat es reducido en área y dividido en dos o más fragmentos, debido a la urbanización
construcción de caminos o implementación de actividades antrópicas, generan una modificación del
paisaje generando discontinuidad y un desequilibrio ecológico.

A pesar de ser uno de los servicios más importantes para las actividades humanas, este no ha recibido
el cuidado y la importancia que merece. La calidad del suelo se interpreta como la utilidad del mismo
para un fin en específico en una escala del tiempo, mientras que las propiedades del suelo como la
materia orgánica y la diversidad biológica representan la salud del mismo. Un suelo cultivable es
aquel que presenta la calidad y la salud necesaria para llevar a cabo la maximización de la producción
y minimizar la erosión; por lo que un suelo con calidad se obtiene al tener una productividad biológica
sostenible sin perder sus propiedades fisicoquímicas y biológicas y una calidad ambiental al atenuar
contaminantes y patógenos (Cruz A. et al., 2004).

Problemas ambientales

Desde junio del año 1972, en la reunión de Estocolmo, Suecia, se ha advertido la importancia de la
conciencia ambiental para llevar a cabo cambios en los comportamientos humanos, ya que el
crecimiento económico desmedido que se llevaba a cabo generó un deterioro ambiental que podría
ser irremediable y podría poner en riesgo la vida humana tal y como la conocemos ahora: dentro de
los macro problemas que enmarcaban la reunión antes mencionada, resaltaban la contaminación, la
perdida de diversidad, cambio climático, sobre explotación de los recursos naturales, la destrucción
de la capa de ozono y la explosión demográfica (Estenssoro, 2022). En dicha reunión se consolidaron
26 principios en donde se antepone la seguridad ambiental y se consolida el vínculo existente entre
el crecimiento económico, la contaminación del agua, aire océanos y el bienestar humano. Dentro de
los temas que fueron considerados para llevar a cabo en la agenda ambiental de trabajo, fue el control
de los asentamientos humanos generando una planificación y ordenamiento ambientalmente
responsable; la difusión de la conciencia ambiental de manera educativa, social y cultural; el control
de los recursos naturales; el desarrollo responsable con el medio; la definición de los agentes
contaminantes y las consecuencias institucionales (ONU, 2012).

La situación actual en el ambiente, se encuentra muy lejana a ser la que se espera, ya que los procesos
como el cambio climático, la deforestación, el deshielo y crecimiento de los mares, la contaminación
y la perdida de la biodiversidad, tienen resultados catastróficos (UNESCO, 2017). Actualmente, se
cuenta con la agenta 2030 para llevar a cabo el desarrollo sostenible a nivel global; esta cuenta con
17 objetivos 169 metas que los participantes se comprometieron a cumplir entre los años 2016 y 2030;
dichos objetivos no solo van enfocados en el desarrollo sostenible, sino a la calidad humana, la paz y
la justicia: fin de la pobreza; hambre cero; salud y bienestar; educación de calidad; igualdad de género;
agua limpia y saneamiento; energía asequible y no contaminante; trabajo decente y crecimiento
económico; industria, innovación e infraestructura; reducción de las desigualdades; ciudades y
comunidades sostenibles; producción y consumo responsable; acción por el clima; vida submarina;
vida de ecosistemas terrestres; paz, justicia e instituciones sólidas y alianzas para lograr los objetivos
(ONU, 2015).

Aspectos críticos

Ha quedado claro que los seres humanos dependemos del medio que habitamos por lo que, para llevar
a cabo su propia supervivencia, debe mantener un equilibrio, sin embargo, dicha relación dista mucho
de ser la correcta, ya que procesos globales tales como el cambio climático, la contaminación, la
creciente en el nivel del mar y la perdida de diversidad biológica, han empeorado por razones
antrópicas. El 8% de las especies animales que conocemos se han extinguido y el 22% de estas se
encuentran en constante peligro. La deforestación masiva ha generado desertificación, sin considerar
que estos son el hogar del 80% de las especies terrestres y que alrededor de 1.6 millones de personas
dependen de ellos (UNESCO, 2017).

Algunos de los problemas críticos que enmarca la ONU posterior a la publicación de la agenda 2030
son: la adaptación y mitigación del cambio climático, ya que las emisiones de gases contaminantes
han ido en aumento hasta un 50% desde los años 90´s, produciendo alrededor del mundo eventos
meteorológicos extremos; la contaminación de aire y agua representa un riesgo latente a la salud
humana; los mares han sido los grandes basureros mundiales ya que en ellos llegan contaminantes
como los plásticos, químicos y aguas residuales, afectando el equilibrio en los ecosistemas marinos;
el cambio en las energías no renovables a las ahora llamadas, energías verdes, evitarían la generación
del efecto invernadero debido al uso de energías limpias; un modelo sostenible de alimentación ya
que la producción excesiva de alimentos genera empobrecimiento del suelo y sobreexplotación de los
recursos naturales y el desarrollo urbano planificado. (UNESCO, 2017) (ONU, 2015).

Antecedentes históricos: tratados de Estocolmo 1972 y Rio 1992

Se dice que, la reunión de Estocolmo, Suecia en el año 1972 y la conferencia llevada a cabo en Rio
de Janeiro celebrada en el año 1992, son el parte aguas para el nacimiento de la gestión ambiental.
En Estocolmo 72, se realizó el primer balance de los efectos provocados por la revolución industrial
que se llevó a cabo en los países del primer mundo, sin embargo, los problemas ambientales no eran
los únicos retos que en dicha reunión debía enfrentar, sino la falta de cooperatividad que presentaban
los países subdesarrollados, ya que estos culpaban directamente a los países desarrollados del
problema ambiental, ya que los macro problemas ambientales eran producto de una industrialización
desmedida de los países del norte (Estenssoro, 2022).

Sin embargo, los problemas ambientales no reconocían de fronteras y era un tema de gran importancia
para todos, por lo que, en dicha reunión, se promulgaron metas y objetivos en temas político
ambientales y, posteriormente, dieron inicio las actividades legisladoras en materia de derecho
ambiental internacional. La declaración de Estocolmo, se encuentra conformada por 26 principios
que tienen como objetivo la gestión ambiental, donde se considera primordial los temas ambientales
y a su vez marcó un vínculo entre los países industrializados y en desarrollo sobre los temas
ambientales que estos procesos enmarcan (ONU, 2012).

Posterior a Estocolmo, en los años 80´s, la ONU promueve la creación de la Comisión Mundial sobre
el Medio Ambiente y Desarrollo, el cual era liderado por la primer ministro Noruega Go Brundtland,
quien emite el “informe Brundtland”, en donde se encontraba la definición mas asertiva del desarrollo
sostenible en cual indica que se define como desarrollo sostenible a aquel que se lleva a cabo
satisfaciendo las necesidades presentes sin poner en riesgo las necesidades de generaciones futuras;
aunado a la difusión del desarrollo sostenible, “nace” el desarrollo sustentable, el cual no es más que
una confusión al traducir del idioma ingles al español, sin embargo, tienen el mismo significado.
Entre estas necesidades básicas de la humanidad se considera la alimentación, la vivienda, la salud y
la vestimenta y el control del desarrollo sin impactar en los recursos naturales y la capacidad de la
biosfera para absorber los impactos generados (Ricalde et al., 2005).

La Cumbre Mundial sobre el Medio Ambiente y Desarrollo se llevó a cabo 20 años después de
Estocolmo, en junio de 1992, tuvo lugar en Rio de Janeiro, Brasil; en dicha reunión, la cual contó con
un vasto arribo de dirigentes mundiales; fue adoptado el concepto de desarrollo sostenible y el
compromiso de la lucha contra el cambio climático; de igual forma se impulsa la Agenda 21 donde
impulsa a los gobiernos al desarrollo sostenible y al trabajo en conjunto con las tres ordenes de
gobierno, así como las asociaciones civiles para llevar a un futuro mas prospero y seguro para todas
las naciones (Ricalde et al., 2005).

De la declaración de Rio resultaron 27 principios universales de los cuales los objetivos principales
de Rio 92 fueron producir una agenda limpia y un plan de acción internacional en temas ambientales
y desarrollo la cual ayudaría a aumentar la cooperatividad; sin embargo, otro resultado de esta reunión
fue el programa 21 el cual solicita estrategias diferentes para lograr un desarrollo sostenible y en el
que se solicita inversiones económicas sostenibles y nuevos planes educativos para observar a los
recursos naturales de una forma diferente (ONU, 1992).

Tratados ambientales internacionales

Si bien para llevar a cabo un desarrollo sostenible, es importante el bienestar económico y social; el
pilar de las políticas ambientales es de vital importancia. Alrededor de los países Latinoamericanos,
México es un de los grandes líderes en el impulso de los temas ambientales ya que ha ratificado en
su totalidad a los tratados ambientales relevantes y cuenta con un 84% de las medidas concretadas en
la agenda 21, mientras que Haití se cuenta solo con cinco tratados y el 11% de las medidas de la
agenda 21. También se debe considerar que el adoptar todos o casi todos los tratados, no es reflejo de
una preocupación ambiental, tal como es el caso de Argentina o Panamá, quienes han firmado 10 de
los 11 tratados ambientales, sin embargo, solo han adoptado el 26% de los objetivos de la agenda 21.
Existe la aceptación de los tratados internacionales debido al apoyo de alimentos entre países
desarrollados y los países tercermundistas o por Tratados Internacionales, como tal es el caso de
México y el Tratado de Libre Comercio en América (Conte Grand & D´Elia, 2008).

Si bien, a lo largo de la historia del Genesis ambiental se han presentado distintos convenios, no todos
han tenido el mismo impacto; tal es el vaso del Protocolo de Kioto, el cual fue resultado de la Cumbre
Rio 92; es un acuerdo donde los países industrializados se ven “obligados” a bajar las emisiones de
gases de efecto invernadero hasta en un 5%, sin embargo, grandes potencias como Estados Unidos y
Australia, no fueron participes (Palafox, 2019). El objetivo principal del Protocolo de Kioto es
establecer las obligaciones de las gobernanzas que ayudaran a detener el cambio climático esto antes
del año 2012 (Gómez M. M., 2012).

Posterior al Protocolo de Kioto, se forma el Acuerdo de París, el cual se adoptó en el 2015 y entró en
vigor en el año 2016; el cual es considerado, hasta el momento, el instrumento jurídico de mayor
importancia que se encuentra en vigor para la lucha contra el cambio climático; el objetivo principal
del acuerdo es mantener el aumento de la temperatura media global por debajo de los 2°C y proseguir
para limitarlo al 1.5°C; de igual forma se concentra en la reducción de las emisiones de los gases de
efecto invernadero (Gómez M. M., 2012).

Russi D. & Muradian R. en el 2019 mencionan que la seguridad ambiental no solo se enfoca en la
contaminación atmosférica, sino también en temas del agua como el Convenio Internacional sobre
Responsabilidad Civil por Daños Causados por la Contaminación de las Aguas del Mar por
Hidrocarburo, el cual entró en vigor en el año 1996, en donde los dueños de embarcaciones petroleras,
se hacen estrictamente responsables de los daños que pudieran causar sus barcos en su travesía
marítima.

Según la Suprema Corte de Justicia de la Nación, en México, los tratados ambientales tomaron fuerza
desde el año 1936, con la firma del tratado entre Estados Unidos y México “Convención entre los
Estados Unidos Mexicanos y los Estados Unidos de América para la protección de Aves migratorias
y de Mamíferos Cinegéticos”; actualmente, el país mexicano cuenta con diversos tratados
internaciones en temas ambientales en los que se reconocen los derechos humanos, los cuales se
puede dividir en: Agua con nueve convenios en donde destaca la prevención de la contaminación por
derrame de hidrocarburos y el cuidado de los humedales; biodiversidad con nueve convenios de los
cuales los de mayor importancia son el cuidado de especies amenazadas de flora y fauna, así como el
convenio de la diversidad biológica firmada en Rio 92; Cambio climático donde se encuentra el
Protocolo de Kioto y el Acuerdo de Paris; en Productos Químicos y Desechos se cuenta con 7
acuerdos firmados donde se encuentra el Convenio de Estocolmo 72 y el Convenio de Minamata
sobre el mercurio; en el tema de Tierra y Agricultura solo se cuenta con un convenio firmado desde
el año 1995 el cual se llevó a cabo en la Convención de las Naciones Unidas de lucha contra la
desertificación en los países afectados por sequia grave o desertificación en particular en África; de
igual forma, en el tema de la Gobernanza Medioambiental, solo se cuenta con el Acuerdo Regional
sobre el Acceso a la Información, la Participación Pública y el Acceso a la Justicia en Asuntos
Ambientales en América Latina y el Caribe, hecho en Escazú, Costa Rica, el cuatro de marzo de dos
mil dieciocho, firmado en abril del año 2021.

Actualmente, la Asamblea General de la ONU, cuenta con la Agenda 2023 para el desarrollo
sostenible, donde los Estados miembros de la Organización reconocen que el mayor desafío mundial
es la erradicación de la pobreza. La agenda cuenta con 17 objetivos donde los principales objetivos
son la erradicación de la pobreza, cero hambre y salud y bienestar.

Políticas ambientales desde la perspectiva global y nacional

A raíz del impacto que tuvieron las acciones humanas en los años 60´s y del inicio del cambio
climático, problemas en la calidad del aire, lluvia acida entre otros, la humanidad ha sido capaz de
cooperar en materia ambiental mediante tres vías, la primera son las consolidaciones de instituciones
científicas que mantienen informados a los Estados de las condiciones y los problemas ambientales;
la segunda vía es la creación de instancias de intercambio de dialogo y coordinación política y por
último la elaboración de mecanismos normativos universales legalmente vinculantes (Franchini et al.,
2017).
Las políticas globales varían a nivel mundial, debido a que la política ambiental sigue siendo del
dominio exclusivo de cada estado, sin embargo, la gobernanza ambiental es encaminada a responder
sobre las preocupaciones y procesos de tomas de decisiones a nivel global; para llevar a cabo este
proceso, la gobernanza ambiental esta constituida por diversos instrumentos de derecho internacional
tales como: la Declaración de Estocolmo de 1972, la Carta Mundial para la Naturaleza, el Informe
Brudtland, la Declaración de Rio 92 y la Agenda 21; por lo que los Estados que se promulgaron a
favor de dichos acuerdos, son más responsables a nivel global (Fontaine et al., 2016).

Se considera como regímenes al conjunto sistemático de reglas explicitadas en un tratado


internacional donde un grupo de gobernanzas se encontró de acuerdo; los principales regímenes
ambientales internaciones son los siguientes: Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el
Cambio Climático, el Protocolo de Kioto, el Acuerdo de París, el Convenio de Viena para la
Protección de la Capa de Ozono, el Protocolo de Montreal, la Convención sobre el Comercio
Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestre, Convenio sobre la diversidad
Biológica, Protocolo de Nagoya, Convenio de las Naciones Unidas para la Lucha contra la
Desertificación, Convenio de Estocolmo sobre Compuestos Orgánicos Volátiles, Convenio de
Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su
eliminación y Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Fontaine et al., 2016).

Política ambiental nacional

La política ambiental en nuestro país, podría ser dividida en tres etapas, la primera dio inicio en el
año 1841, con la creación del Consejo Superior de Salubridad del Departamento de México; dicha
etapa tenia un enfoque sanitario para mejorar el estado salubre del ambiente natural de los habitantes
mexicanos, sin embargo, no fue hasta el año 1971 que se generó la primera Ley Federal para Prevenir
y Controlar la Contaminación Ambiental, con el objetivo de prevenir y controlar la contaminación de
suelo, aire y agua (Calderón J. P., 2010).

En los años 80´s inicia la segunda etapa, la cual incitaba a la prevención y restauración del equilibrio
ecológico, con la creación de autoridades como la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, la
Comisión Nacional de Ecología, la Comisión Nacional del Agua, entre otros. La política ambiental
mexicana fue atendida de forma creciente y con el paso de los años fueron creadas organizaciones de
carácter ambiental como el Instituto Nacional de Ecología el cual se encarga de generar normas y
definir políticas y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, quien es el encargado de vigilar
y fiscalizar que las normas y leyes se cumplan; posteriormente en 1988, se crea la Ley General del
Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, la cual materializa las obligaciones de la acción
ecológica ante los tres órdenes de gobierno, así como los particulares (Micheli J., 2002).

La ultima etapa, se lleva a cabo con el objetivo de alcanzar un Desarrollo Sustentable, para ello se
iniciaron planes de manejo de recursos naturales y políticas ambientales uniendo los rubros
económicos, sociales y ambientales. En 1995 fue creada la Secretaría del Medio Ambiente, Recursos
Naturales y Pesca y con ella, el Programa del Medio Ambiente, no fue hasta el año 2000 que se
establece el ámbito pesquero seria separado, siendo renombrada como Secretaría del Medio Ambiente
y Recursos Naturales; la cual cuenta con tres sub secretarías, las cuales están enfocadas en la
planeación y políticas ambientales, la gestión para la protección ambiental y fomento normativo
ambiental (Calderón J. P., 2010).

Actualmente, la SEMARNAT es quien regula y gestiona los recursos naturales de nuestro país, con
el apoyo de Leyes Federales tales como la Ley de Desarrollo Forestal Sustentable la cual fue generada
en el año 2003, al año siguiente en el 2004 se expidió la Ley de Aguas Nacionales y, por último, en
el 2005 la Ley General de la Vida Silvestre y la Ley de Biodiversidad (Calderón J. P., 2010).

Los retos de la política ambiental en México

Según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la población nacional hasta el
primer sexenio del año 2023, es de 129 millones de habitantes en una superficie de 2 millones de
kilómetros cuadrados (INEGI, 2023), lo cual indica que a pesar de ser una nación con una vasta
extensión territorial, esta se ve afectada por un crecimiento poblacional que ha ido incrementando al
paso de los años, lo que implica un aumento en la demanda de los recursos naturales; dicha población
se encuentra en una distribución desequilibrada, por lo que las necesidades de recursos naturales y la
contaminación ambiental se encuentra desfavorecida para zonas puntuales de sobrepoblación
(Sanguinés, A. G. 2005). Alrededor del país y al paso de los años, la abundancia en los ecosistemas
naturales se ha visto afecta, siendo las zonas tropicales las que cuentan con una mayor afectación; por
lo que México cuenta con grandes retos que combatir.

La contaminación atmosférica encabeza la lista de objetivos ambientales a nivel nacional ya que esta
provoca más de 1000 muertes al año en la zona del valle de México, sin embargo, no es un problema
únicamente de esa zona metropolitana, este se ha extendido a ciudades como Monterrey y
Guadalajara. Algunos métodos de Gestión Ambiental que han sido considerados son la reducción del
numero de contingencias ambientales y los días por encima de los máximos permisibles. Los
problemas de salud generados por gases contaminantes en intramuros en zonas rurales, se suman en
la lista de retos para la Gobernanza Mexicana, esto debido a la pobreza e ideologías culturales de
algunas zonas rurales, el uso de leña para la elaboración de sus alimentos y para mantener el calor de
sus hogares, son actividades difíciles de erradicar del día a día de la población (Riojas-Rodríguez et
al., 2013).

Los problemas de agua generados por la escasez y la contaminación de la misma es uno mas de los
retos del Gobierno Mexicano, ya que se muestra de múltiples formas según las actividades que sean
desarrolladas alrededor de la superficie nacional, por ejemplo, en la zona donde se llevan a cabo
actividades mineras, la contaminación de los mantos freáticos se encuentra afectada por metales
pesados, arsénico y flúor, así como la escasez de los mismos; mientras que en zonas petroleras la
amenaza es la contaminación por hidrocarburos; sin embargo las actividades antrópicas no son la
única amenaza, la generación de vectores también se considera un problema, al igual que las
inundaciones generadas por fenómenos naturales como los huracanes (Riojas-Rodríguez et al., 2013).

Por último, el cambio climático; ya que con el se han generado problemas de salud a nivel mundial y
México no es la excepción; algunos problemas que destacan son aquellas enfermedades que son
desarrolladas por vectores, los contaminantes atmosféricos, diarreicos y golpes de calor, por ultimo
las afectaciones generadas por fenómenos hidrometeorológicos como inundaciones, huracanes y
sequias (Riojas-Rodríguez et al., 2013).

Bibliografía

Calderón, J. P. (2010). La política ambiental en México: Gestión e instrumentos económicos. El


cotidiano, (162), 91-97.

Conte Grand, M., & D'Elia, V. (2008). La política ambiental en América Latina y el
Caribe. Problemas del desarrollo, 39(154), 111-134.

Cruz, A. B., Barra, J. E., del Castillo, R. F., & Gutiérrez, C. (2004). La calidad del suelo y sus
indicadores. Ecosistemas, 13(2).

Darío Muriel, R. (2006). La gestión ambiental. Ide@ Sostenible. 2006, any 3, núm. 13.

Estenssoro, F. HISTORIA DE AMÉRICA LATINA EN LA POLÍTICA AMBIENTAL MUNDIAL.

Fontaine, G., Van Vliet, G., & Pasquis, R. (2006). Experiencias recientes y retos para las políticas
ambientales en América Latina. Políticas ambientales y gobernabilidad en América Latina. Quito:
Flacso.
Franchini, M., Viola, E., & Barros-Platiau, A. F. (2017). Los desafíos del antropoceno: de la política
ambiental internacional hacia la gobernanza global. Ambiente & sociedade, 20, 177-202.

Gómez, M. M. (2022). El Acuerdo de París: nuevo paradigma en la arquitectura de los tratados


ambientales internacionales. Sociedad global y Derecho Público.

Halffter, G. (1995). ¿ Qué es la biodiversidad?. Butlletí de la Institució Catalana d'Història Natural,


5-14.

Micheli, J. (2002). Política ambiental en México y su dimensión regional. Región y sociedad, 14(23),
129-170.

Monroy Vilchis, O. (2005). Causas de pérdida de diversidad biológica. Cuadernos de biodiversidad,


nº 17 (mayo 2005); pp. 3-9.

Núñez, I., González-Gaudiano, É., & Barahona, A. (2003). La biodiversidad: historia y contexto de
un concepto. Interciencia, 28(7), 387-393.

Oberhuber, T., Lomas, P. L., Duch, G., & Reyes, M. G. (2010). El papel de la
biodiversidad. Madrid: Centro de Investigación para la Paz.

ONU (1992) Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y Desarrollo, Rio de
Janeiro, Brasil, 3 a 14 de junio de 1992 obtenido de:
https://www.un.org/es/conferences/environment/rio1992

ONU (2012) Historia de la declaración de Estocolmo obtenido de:


https://www.un.org/es/conferences/environment/stockholm1972

ONU (2022) El PNUMA a los 50 años. Obtenido de https://www.unep.org/es/el-pnuma-los-50

Palafox, K. H. O. (2019). Sustentabilidad global: Principios y acuerdos internacionales. Revista de


Ciencias Sociales (Ve), 25(4), 75-86.

Ricalde, C. D. L., López-Hernández, E. S., & Peniche, I. A. (2005). Desarrollo sustentable o


sostenible: una definición conceptual. Horizonte sanitario, 4(2).

Ricardo, J. E., Hernández, N. B., Vargas, R. J. T., Suntaxi, A. V. T., & Castro, F. N. O. (2017). La
perspectiva ambiental en el desarrollo local. Dilemas contemporáneos: Educación, Política y
Valores.

Riojas-Rodríguez, H., Schilmann, A., López-Carrillo, L., & Finkelman, J. (2013). La salud ambiental
en México: situación actual y perspectivas futuras. Salud pública de México, 55, 638-649.
Russi, D., & Muradian, R. (2002). Gobernanza global y responsabilidad ambiental. Ecología política,
(24), 95-106.

Sanginés, A. G. (2005). Política ambiental en México: Génesis, desarrollo y perspectivas. ICE,


Revista de Economía, (821).

UNESCO (2017). El derecho humano al medio ambiente Agenda 2023.

También podría gustarte