1.
Comentario de texto
Biografía:
Karl Marx pertenece a la etapa de la filosofía contemporánea. Nació el 5 de mayo de 1818
en Tréveris, Prusia, y falleció el 14 de marzo de 1883 en Londres, Reino Unido. Su ideología
principal fue el socialismo científico y es conocido por ser el padre del comunismo moderno.
Su impacto se extiende a múltiples disciplinas, incluyendo la política, la economía y la
sociología, influyendo en movimientos políticos y sociales en todo el mundo.
Infraestructura:
En el marxismo, la infraestructura se refiere a la base material de la sociedad, que
comprende las fuerzas productivas y las relaciones de producción. Las fuerzas productivas
engloban los recursos humanos y materiales utilizados en la producción, mientras que las
relaciones de producción son las formas en que se organizan los individuos para producir
bienes y servicios, incluyendo las relaciones de propiedad y de trabajo. Esta infraestructura
económica y material constituye la base sobre la cual se construye la superestructura de la
sociedad, que incluye instituciones políticas, culturales y jurídicas.
Superestructura:
En el marxismo, la superestructura se refiere al conjunto de ideas, creencias, instituciones y
normas que surgen a partir de la base material de la sociedad. Estas ideas y creencias
forman las formas ideológicas que reflejan la conciencia social, es decir, representan las
percepciones y concepciones que las personas tienen sobre su realidad social y económica.
La superestructura incluye instituciones políticas, culturales, educativas, religiosas y legales,
así como las normas y valores que rigen la vida social. Estas instituciones y normas son
moldeadas por las relaciones de producción y las fuerzas productivas de la infraestructura, y
sirven para mantener y reproducir las relaciones de poder y dominación existentes en la
sociedad.
Texto:
Pero esto no sólo encierra consecuencias eminentemente revolucionarias para la teoría,
sino también para la práctica: «Al llegar a una determinada fase de desarrollo, las fuerzas
productivas materiales de la sociedad entran en contradicción con las relaciones de
producción existentes, o, lo que no es más que la expresión jurídica de esto, con las
relaciones de propiedad dentro de las cuales se han desenvuelto hasta allí.
Análisis:
El fragmento presenta la tesis de que, en un determinado punto del desarrollo de una
sociedad, las fuerzas productivas materiales entran en contradicción con las relaciones de
producción existentes, o las relaciones de propiedad dentro de las cuales se han
desenvuelto hasta ese momento. Esta tesis sugiere que el progreso social está impulsado
por las contradicciones internas entre las fuerzas productivas y las relaciones de
producción, una idea central del materialismo dialéctico.
En términos del materialismo dialéctico, esta contradicción entre las fuerzas productivas y
las relaciones de producción refleja la ley de unidad y lucha de contrarios. Según esta ley,
estas contradicciones internas son impulsoras del cambio y el desarrollo en la sociedad.
Además, la idea de llegar a una "determinada fase de desarrollo" implica un proceso
evolutivo que se ajusta a la ley de transformación de cantidad en calidad y viceversa. Esto
sugiere que los cambios graduales en las fuerzas productivas y las relaciones de
producción pueden dar lugar a cambios cualitativos en la estructura económica y social de
una sociedad.
En el marco del materialismo histórico, esta contradicción entre las fuerzas productivas y las
relaciones de producción tiene implicaciones para el desarrollo social. Las fuerzas
productivas que entran en contradicción con las relaciones de producción existentes reflejan
la dinámica histórica de cómo las condiciones materiales impulsan el cambio social. La
referencia a la "expresión jurídica" de esta contradicción destaca cómo las relaciones de
propiedad (parte de la infraestructura) se reflejan en las estructuras legales y normativas de
la sociedad (parte de la superestructura). Esto muestra cómo los cambios en la
infraestructura pueden tener un impacto en la superestructura, y viceversa, en un proceso
dialéctico de influencia
2.Términos
Alienación:
-Para Hegel, la alienación es el sentimiento de desgarro y separación del individuo
respecto a su esencia y a la realidad.
-Marx, en el contexto de la sociedad capitalista, entiende la alienación como la separación
del individuo de los frutos de su trabajo, así como la dominación de la economía y la
ideología sobre las personas.
-Se considera la alienación como una pérdida esencial en la persona, donde esta se siente
desconectada de su verdadera naturaleza y potencial.
- Alienación Económica: Se refiere a la despersonalización del trabajador, quien se ve
reducido a un mero factor de producción. Marx propone la eliminación de la propiedad
privada como solución.
- Alienación Social: Surge de la división en clases, donde los capitalistas y proletarios están
en constante conflicto por intereses opuestos.
- Alienación Política: El Estado, en este contexto, opera al servicio de la clase dominante,
perpetuando así la alienación de las masas.
- Alienación Religiosa: La religión se percibe como un instrumento de evasión de la realidad
y control social, siendo el "opio del pueblo" según Marx
- Se plantea que la desaparición de la alienación económica conlleva a la eliminación de las
otras formas de alienación. Esto sugiere que al erradicar la despersonalización del
trabajador y la dominación económica, también se eliminarían las divisiones sociales,
políticas y religiosas que perpetúan la alienación en la sociedad.
Trabajo:
El trabajo, en su esencia, representa la actividad productiva fundamental que define la
condición humana. Más allá de simplemente realizar tareas, el trabajo implica una
capacidad creativa que se proyecta sobre los productos que creamos y en nuestro propio
desarrollo como individuos y como sociedad.
Sin embargo, bajo el sistema capitalista, esta actividad productiva es transformada en una
forma de explotación. La alienación del fruto del trabajo se convierte en una característica
central, donde los trabajadores son despojados de la propiedad de lo que producen. En las
cadenas de producción, esta desposesión se vuelve sistemática, convirtiendo al trabajador
en una simple pieza de una máquina más grande.
Esta alienación no se limita solo al ámbito económico, sino que se extiende a lo social,
político y espiritual. El trabajador, bajo el capitalismo, no solo pierde el control sobre su
producto y su valor, sino también sobre su entorno, su voz política y, en muchos casos, su
sentido de identidad y propósito espiritual. La alienación, entonces, se manifiesta como una
desconexión profunda entre el individuo y el trabajo que realiza, transformando una
actividad que debería ser fuente de realización y desarrollo en una experiencia de
explotación y pérdida de autonomía.
3.Relación Marx-Hegel
En la teoría de Marx, la noción central de alienación, inspirada por Hegel, se manifiesta de
manera diferente en cada autor. Para Hegel, la alienación se encuentra en la idea pensada,
reflejando un desfase en el desarrollo del Espíritu en la Historia. En contraste, Marx sitúa la
alienación en el ámbito del trabajo, señalando una enajenación económica que resulta en la
pérdida de autonomía del individuo. Para Marx, esta alienación está vinculada a causas
infraestructurales, mientras que Hegel también la relaciona con la propiedad privada,
aunque no se limita a este aspecto.
Hegel concibe el desarrollo del Espíritu en la Historia a través de un proceso dialéctico de
tesis, antítesis y síntesis. Por otro lado, Marx presenta la Historia como un despliegue
dialéctico impulsado por la lucha de clases y las contradicciones presentes en las fuerzas y
relaciones productivas.
Marx se formó en un ambiente hegeliano que estaba dividido entre la derecha conservadora
y la izquierda progresista. En sus primeros años, Marx se alineó inicialmente con la
izquierda hegeliana debido a sus críticas y reivindicaciones, especialmente en temas como
la corporeidad y la alienación religiosa.