“¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento?
Por tanto,
yo hablaba lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para
mí, que yo no comprendía. Oye, te ruego, y hablaré; Te preguntaré,
y tú me enseñarás. De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos te
ven. Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y
ceniza», Job 42:3-6
3. Reflexiona
La Biblia dice que Job era “perfecto y recto, temeroso de Dios y
apartado del mal”, (Job 1:1) por tanto su arrepentimiento no era por
sus pecados secretos u ocultos, sino por haber hablado con
ignorancia al decir que Dios le había sido injusto, por poner en duda
la soberanía y la justicia de Dios. Ahora que ha visto a Dios, que
conoce a Dios, Job quiere retractar los desafíos que presentó ante
Él. El polvo y la ceniza son símbolos apropiados para el
arrepentimiento y el remordimiento en tiempos de Job. En particular,
la palabra “cenizas” connota humildad, inutilidad, o arrepentimiento.
Pecamos cuando dudamos del carácter de Dios. A veces somos
necios al preguntarle a Dios con enojo ¿por qué permite que esto o
aquello nos suceda si según nuestro propio concepto somos
buenos? Pues no vemos más allá del día de hoy, porque sólo de
oídas hemos oído de Dios, no conocemos cómo realmente Él es, no
percibimos el propósito que tiene en cada problema que nos
acontece. Pues Dios pudo haber evitado que José, el hijo preferido
de Jacob, fuera metido en la cárcel, pudo haber evitado que
Jeremías fuera lanzado en el pozo cenagoso, pudo haber evitado
que Pablo naufragará tres veces, pero no lo hizo y estos problemas
hicieron que ellos terminaran en intimidad con Él y con una profunda
fe.
La actitud de Job cambió extraordinariamente, aún cuando su
situación era igual, pues los problemas nos obligan a poner los ojos
en Dios, depender de él, y poder decir como Job, “más ahora mis
ojos te ven”. Job ve distinto a Dios porque se le ha revelado
personalmente, como lo hará con nosotros.
Job 42:5 es una parte poderosa del capítulo final del libro de Job. En este versículo, Job dice: **"De
oídas te había oído; mas ahora mis ojos te ven."** Estas palabras reflejan un cambio profundo en
la comprensión de Job sobre Dios.
A lo largo del libro, Job experimenta sufrimientos extremos y lucha con preguntas profundas sobre
la justicia y el propósito de Dios. Anteriormente, Job conocía a Dios de manera indirecta, basado
en lo que otros le habían contado o enseñado. Sin embargo, después de su experiencia de
sufrimiento, y especialmente tras el encuentro directo con la presencia y sabiduría de Dios en los
capítulos anteriores, Job llega a una revelación más personal e íntima de quién es Dios.
Este versículo marca un momento de humillación y reconocimiento: Job admite que sus ideas
anteriores sobre Dios eran limitadas y que, ahora, ha tenido una experiencia directa que
transforma su perspectiva. Es un recordatorio de cómo las pruebas pueden acercar a una persona
a una relación más profunda y significativa con Dios.
Si te interesa, puedo ayudarte a explorar más sobre cómo este versículo se conecta con el tema
general del libro o su relevancia en la vida diaria. ¿Qué opinas?
Job 42:5 nos desafía a reflexionar sobre la profundidad de nuestra relación con Dios y cómo
podemos pasar de un conocimiento superficial a una experiencia personal y transformadora. Aquí
tienes algunas formas en las que puedes aplicar este versículo en tu vida diaria:
1. **Busca una relación genuina con Dios**: Así como Job pasó de "oír de Dios" a "verlo", puedes
buscar una relación más personal y directa a través de la oración, la meditación y el estudio de la
Biblia. No te conformes con conocer a Dios solo por lo que otros dicen; busca conocerlo por ti
mismo.
2. **Acepta el aprendizaje en las pruebas**: Job llegó a esta revelación después de un tiempo de
sufrimiento. En tu vida, cuando enfrentes desafíos, puedes intentar verlos como oportunidades
para profundizar tu fe y obtener una nueva perspectiva sobre el propósito de Dios.
3. **Desarrolla humildad**: Job reconoció que su visión de Dios era limitada. Este versículo nos
recuerda mantenernos humildes, reconociendo que siempre hay más por aprender sobre Dios y su
plan para nosotros.
4. **Adopta gratitud y asombro**: Al igual que Job vio a Dios con nuevos ojos, puedes buscar
momentos en tu vida diaria para observar la grandeza y bondad de Dios en las cosas pequeñas y
grandes, desarrollando un corazón lleno de gratitud.
5. **Comparte tu experiencia**: Una vez que experimentas un encuentro más profundo con Dios,
compártelo con los demás. Tu testimonio puede inspirar y animar a otros a buscar una relación
más cercana con Él.
Este versículo nos anima a crecer espiritualmente y a buscar una relación más auténtica y
transformadora con Dios. ¿Cómo te sientes al respecto o en qué área te gustaría profundizar?