COLE PORTER
El compositor estadounidense Cole Albert Porter (1891-1964) escribió canciones (tanto letra como
música) para más de 30 musicales teatrales y cinematográficos. Sus mejores obras establecieron
estándares de sofisticación e ingenio que rara vez se igualan en el teatro musical popular.
Cole Porter nació en Peru, Indiana, el 9 de junio de 1891, hijo de un farmacéutico. Su madre estaba
tan decidida a que su único hijo se convirtiera en un artista creativo como su abuelo, un pionero
adinerado del medio oeste, a que se dedicara al comercio o a la agricultura. La influencia de Kate
Cole resultó más fuerte y Porter recibió una formación musical considerable cuando era niño. En 1901
ya había compuesto una opereta de una sola canción titulada The Song of the Birds; luego produjo
una pieza para piano, The Bobolink Waltz, que su madre publicó en Chicago.
Porter asistió a la Academia de Worcester, donde compuso la canción de la clase de 1909. En Yale
(1909-1913) escribió música y colaboró en las letras de las partituras de varios espectáculos
amateurs presentados por su fraternidad y la Asociación Dramática de Yale. Porter luego ingresó en
la Facultad de Derecho de Harvard; sin embargo, casi de inmediato cambió su carrera de estudios y
se dedicó a la música. Antes de dejar Harvard colaboró en una opereta cómica, “See America First”
(1916), que se convirtió en su primer espectáculo producido en Broadway 1917, Fue un completo
desastre.
Porter estuvo en Francia y durante algunos meses, entre 1918 y 1919, sirvió en la Legión Extranjera
Francesa. Después de esto, estudió composición brevemente con el compositor Vincent d'Indy en
París. De regreso a Nueva York, colaboró con canciones para la producción de Broadway “Hitchy-Koo
of 1919”, su primer éxito, y se casó con la adinerada socialité Linda Lee. Los Porter comenzaron una
vida de viajes a gran escala; se hicieron famosos por sus fastuosas fiestas y el círculo de
celebridades en el que se movían. Porter contribuyó con canciones a varios espectáculos teatrales y
películas y en 1923 compuso un ballet, “Within the Quota”, que se representó en París y Nueva York.
Canciones como “Let's Do It” (1928), “What Is This Thing Called Love” (1929), “You Do Something to
Me” (1929) y “Love for Sale” (1930) lo establecieron como un creador de letras mundanas, ingeniosas
y, en ocasiones, atrevidas, con líneas melódicas inusuales a juego.
En las décadas de 1930 y 1940, Porter proporcionó partituras completas para una serie de brillantes
producciones de Broadway y Hollywood, entre ellas “Anything Goes” (1934), “Jubilee” (1935),
“Rosalie” (1937), “Panama Hattie” (1940) y “Kiss Me, Kate” (1948). Estas partituras y otras de la
época abundan con sus canciones características: “Night and Day”, “I Get a Kick out of You”, “You're
the Top”, “Anything Goes”, “Begin the Beguine”, “Just One of Those Things”, “Don't Fence Me In”, “In
the Still of the Night” y “So in Love”.
Las graves lesiones que sufrió en un accidente de equitación en 1937 afectaron a Porter durante el
resto de su vida. Una serie de operaciones condujeron, en 1958, a la amputación de su pierna
derecha. En sus últimos años produjo un gran éxito en Broadway (“Can-Can”, 1953). Murió el 15 de
octubre de 1964 en Santa Mónica, California.
Las canciones de Porter muestran una elegancia expresiva y un desapego sereno que parecen
personificar una especie de sofisticación peculiar de la década de 1930. También fue un creador de
melodías originales con auténtico talento. Al igual que George Gershwin, con frecuencia hizo caso
omiso de las fórmulas aceptadas de la canción popular convencional (normalmente un marco rígido
de 32 compases) y produjo piezas de encanto y distinción.
