Los Personajes en el plano
narrativo
En el plano narrativo, los personajes se pueden clasificar según varios criterios, tales como
su desarrollo, su función en la historia y su importancia en la narrativa. Aquí tienes una
clasificación común de los tipos de personajes en la literatura:
1. Según su desarrollo
• Personaje dinámico: Experimenta un cambio o evolución a lo largo de la historia, ya
sea en sus valores, emociones o forma de pensar. Ejemplo: Ebenezer Scrooge en Cuento de
Navidad.
• Personaje estático: Permanece igual durante toda la historia, sin experimentar
cambios significativos. Ejemplo: Sherlock Holmes en la mayoría de las obras de Arthur
Conan Doyle.
2. Según su complejidad
• Personaje redondo o complejo: Posee una personalidad compleja, con múltiples
facetas, emociones y conflictos internos. Es impredecible y realista. Ejemplo: Hamlet en
Hamlet de Shakespeare.
• Personaje plano: Tiene características limitadas y una personalidad simple;
generalmente representa un solo rasgo o idea y no presenta complejidad emocional.
Ejemplo: los hermanos Dalton en Los viajes de Gulliver de Swift.
3. Según su función en la historia
• Protagonista: Es el personaje principal, alrededor del cual gira la historia. Suele
enfrentar conflictos o desafíos importantes. Ejemplo: Don Quijote en Don Quijote de la
Mancha.
• Antagonista: Se opone al protagonista, creando conflicto y obstaculizando sus
objetivos. Puede ser una persona, una fuerza o una situación. Ejemplo: el Capitán Ahab en
Moby-Dick.
• Personaje secundario: Apoya la trama o al protagonista, pero no es el centro de la
narrativa. Puede ser un amigo, compañero o mentor. Ejemplo: Sancho Panza en Don
Quijote de la Mancha.
• Personaje incidental: Tiene una aparición breve o limitada en la historia y no influye
significativamente en la trama, pero puede aportar detalles o contexto.
4. Según su función simbólica
• Arquetipo: Representa un tipo de personaje universal o modelo reconocido en
muchas culturas y mitologías. Ejemplo: el héroe, el mentor, el villano, el sabio. Ejemplo: el
“héroe” en las historias épicas como Aquiles en La Ilíada.
• Estereotipo: Es un personaje que sigue un conjunto de características rígidas y
superficiales, a menudo basadas en clichés. Ejemplo: el “policía corrupto” o la “madre
amorosa”.
5. Según su relación con el conflicto
• Personaje aliado: Apoya al protagonista en su objetivo o causa. Puede brindar ayuda,
consejo o respaldo moral. Ejemplo: Samwise Gamgee en El Señor de los Anillos.
• Personaje antagonista secundario: No es el antagonista principal, pero representa
un obstáculo o conflicto secundario. Ejemplo: Draco Malfoy en Harry Potter.
6. Según su perspectiva
• Narrador personaje: Es quien narra la historia desde su propia perspectiva y
participa en la trama. Puede ser el protagonista o un personaje secundario. Ejemplo: Nick
Carraway en El Gran Gatsby.
• Narrador testigo: Observa y narra los eventos sin intervenir significativamente en
ellos. Ejemplo: el narrador en Matar a un ruiseñor que observa y relata los eventos.
Estos tipos de personajes ayudan a construir el mundo narrativo y definen la dinámica de
la historia, enriqueciendo la experiencia del lector y ofreciendo distintas perspectivas y
niveles de profundidad en la trama.