6 - VIVA CON UNA
MENTALIDAD DE
FAVORECIDO
Dios quiere ayudarle en cada
área de su vida, no sólo en los
asuntos importantes. Cuando
viva con una mentalidad de ser
favorecido, comenzará a ver la
bondad de Dios en los detalles
ordinarios y cotidianos
- en el supermercado,
- en el juego de béisbol,
- en la tienda o en su casa.
Puede ser que se encuentre en
un embotellamiento, el carril de
al lado está fluyendo bien, pero
usted no puede meterse. LUEGO,
DE REPENTE Y SIN NINGUNA
RAZÓN OBVIA, ALGUIEN BAJA SU
VELOCIDAD Y LE DA LA SEÑAL
PARA ENTRAR; ESE ES EL FAVOR
DE DIOS.
Quizá se encuentre en el
supermercado y haya una fila
muy larga para pagar, y usted
tenga mucha prisa. Un cajero
llega y le dice: "Venga conmigo
que estoy abriendo otra caja por
acá". ESE ES EL FAVOR DE DIOS
BRINDÁNDOLE AYUDA.
El favor de Dios causa que otras
personas le extiendan un trato
preferente a usted.
Puede ser que usted sólo haya
salido a desayunar algo y "de
casualidad" se tope con alguien
que tenía muchas ganas de
conocer. Quizá sea una persona
que admira mucho o de quien
desee aprender, o posiblemente
él o ella sea alguien con quien
haya deseado tener algún trato
de negocios, pero no lograba
acercársele. ESA NO ES UNA
CASUALIDAD, ESO ES EL FAVOR
DE DIOS COLOCÁNDOLO EN EL
LUGAR CORRECTO EN EL
MOMENTO INDICADO.
CUANDO ESA CLASE DE COSA LE
SUCEDA, SEA AGRADECIDO.
NO DÉ POR SEGURO EL FAVOR
DE DIOS, MEJOR DIGA: "PADRE,
GRACIAS POR TU FAVOR,
GRACIAS POR AYUDARME".
No dé por seguro el favor
de Dios.
Eso es el favor de Dios.
Cuando está viviendo con una
mentalidad de ser favorecido, la
Biblia en Deuteronomio 28:2:
dice que las bendiciones de Dios
vendrán y nos alcanzarán.
“Y vendrán sobre ti todas estas
bendiciones y te alcanzarán, si
escuchas la voz de Jehová tu
Dios”.
En otras palabras, no podrá
correr más rápido que las
bendiciones de Dios.
Las cosas cambiarán a su favor,
en donde esté; cada vez que se
voltee, alguien querrá hacer algo
bueno por usted asistirle de
alguna manera. Ellos ni tendrán
que saber por qué lo hacen,
PERO ES EL FAVOR DE DIOS QUE
LO HACE SOBRESALIR ENTRE LA
MULTITUD.
Sabe vuestro Padre Celestial y
nos da un trato preferente, el
favor de Dios causa que
resaltemos entre la multitud.
Esas son las experiencias que
llegan "naturalmente" cuando
vivimos con la mentalidad de ser
favorecidos, POR ESO ES QUE
DEBEMOS TENER LA
COSTUMBRE DE HABLAR
CONSISTENTEMENTE EL FAVOR
DE DIOS SOBRE NUESTRA VIDA.
Y no sólo para nuestras propias
vidas, sino también para
nuestros negocios, nuestros
empleados, nuestros hijos y
nuestras familias.
Por ejemplo, si usted trabaja en
ventas, usted debería de
declarar que tendrá favor con
sus clientes. Debería de decir
todos los días: "Padre, gracias
que mis clientes me son fieles y
quieren hacer negocio conmigo",
Si usted trabaja en la venta de
bienes raíces, usted debería
declarar el favor de Dios sobre
las propiedades que tiene de
venta de esta manera: "Padre,
gracias que tengo esta
propiedad para vender. Te doy
gracias que tu favor me está
llevando a las personas
indicadas y está causando que
las personas quieran comprar
esta casa".
Aprenda a declarar el favor de
Dios sobre cada área de su vida.
Si no está gozando de tanto
favor como a usted le gustaría,
comience a declararlo más
seguido, sea más diligente en
hacerlo, y no lo tiene que hacer
en voz alta necesariamente; lo
puede murmurar. Lo puede
declarar cuando va camino al
trabajo, lo puede declarar justo
antes de una presentación
importante. RECUERDE QUE
ENTRE MÁS PIENSE COMO UNA
PERSONA FAVORECIDA, MÁS
EXPERIMENTARÁ EL FAVOR DE
DIOS EN SU VIDA,
Aprenda a declarar el
favor de Dios
para cada área de su vida.
El favor de Dios puede causar
que las personas hagan
excepciones y cambien su
política, o hagan algo poco usual,
aun lo que nunca se había hecho
antes.
El favor de Dios puede causar
excepciones.
El favor de Dios puede causar
que las personas se esfuercen
por ayudarle. El favor de Dios
puede provocar que las personas
hagan excepciones para usted.
Piense un momento. El favor de
Dios.
Dios me estaba dando ventajas
especiales, dándome un trato
preferente, no porque sea el hijo
de un predicador, ni porque sea
el hijo de un pastor conocido,
sino, ¡porque soy su hijo!
Una mujer joven contó sobre
algo que le sucedió cuando tuvo
que tener, de emergencia, una
intervención quirúrgica y, por
alguna razón, su seguro médico
no lo cubría. Como
consecuencia, le debía dólares al
hospital, que le ayudó a elaborar
un plan de pagos; ella estaba
pagando poco a poco su cuenta,
pero se le hacía muy difícil tener
que pagar ese dinero cada mes
debido a que era madre soltera y
no contaba con las entradas
suficientes para cubrirlo. Sin
embargo, no se desanimó, no se
anduvo quejando ni lamentando
qué difícil era su vida, ni cómo
se había atrevido el hospital a
cobrarle semejante cantidad de
dinero. AL CONTRARIO, SE
MANTUVO EN UNA ACTITUD DE
FE Y EXPECTACIÓN,
DECLARANDO EL FAVOR DE DIOS
SOBRE SU VIDA.
Ella estaba al acecho de la
bondad de Dios.
Unos días antes de Navidad,
recibió una carta del hospital. La
correspondencia decía
básicamente esto: "Cada año
nos gusta escoger algunas
cuantas familias y hacer algo
especial para ellas, y este año la
escogimos a usted. Queremos
informarle que hemos perdonado
su deuda de S27,000 dólares".
La carta seguía: "No tan sólo
estamos perdonando su deuda,
sino también vamos a regresarle
los miles de dólares que ya nos
ha pagado" Eso es el favor de
Dios.
Usted puede decir: "Juan Manuel,
eso suena muy bonito, pero tú
no sabes qué pésima es mi
suerte. No conoces los errores
que he cometido, he hecho
muchas cosas mal y jamás
podría imaginarme que Dios me
quisiera bendecir de esa
manera"
TIENE RAZÓN, NUNCA
SUCEDERÁ, AL MENOS QUE
CAMBIE SU MANERA DE PENSAR.
- Tiene que tener una
mentalidad de ser favorecido.
- Tiene que comenzar a esperar
que las bendiciones de Dios le
alcancen, esperando que la
bondad de Dios se manifieste
en su vida de una manera
nueva.
Todos hemos cometido errores y
tenemos que pedir perdón. UNA
VEZ QUE HAYA HECHO ESO, SIGA
ADELANTE CON LA SEGURIDAD
QUE DIOS TODAVÍA DESEA
DERRAMAR SU FAVOR EN SU
VIDA, Y HACER GRANDES COSAS
EN, A TRAVÉS DE, Y POR USTED.
UN NUEVO COMIENZO
El segundo rey de Israel, el rey
David, cometió muchos errores.
Cometió adulterio y aún mandó
matar a un hombre, pero cuando
él se arrepintió y buscó el
perdón, Dios le perdonó y le dio
un nuevo comienzo, El Señor le
da un cumplido a David con
estas palabras en 1 Samuel
13:14:
- varón conforme a mi corazón...
-".
Mas ahora tu reino no será
duradero. Jehová se ha
buscado un varón conforme a
su corazón, al cual Jehová ha
designado para que sea
príncipe sobre su pueblo, por
cuanto tú no has guardado lo
que Jehová te mandó
David no se fijó en sus faltas o
en las cosas que había hecho
mal. No, él vivía con una
mentalidad de ser favorecido.
Fue David el autor de las
palabras Salmo 23:6:
Ciertamente el bien y la
misericordia me seguirán todos
los días de mi vida...".
Fíjese que él estaba esperando el
bien y la misericordia todos los
días de su vida, no sólo una
parte de sus días. La actitud que
demostraba David era: "¡No me
puedo escapar de lo bueno de
Dios!"
En lugar de siempre esperar
recibir algo malo, ¿por qué no
esperar que las bendiciones de
Dios lo persigan? En lugar de
esperar que muy apenas la vaya
a hacer en la vida, espere que la
bondad de Dios lo alcance.
Tal vez usted diga: "Eso está muy
bien, pero yo tengo muchos
problemas; estoy enfrentando
unos momentos muy difíciles y
estoy viviendo muchas
experiencias negativas ahora".
El favor de Dios puede sacarle de
sus dificultades y cambiar sus
adversidades en algo bueno.
David dijo: "El favor de Dios
hace que mis enemigos no
triunfen sobre mí".
La Biblia está repleta de
ejemplos de personas que se
veían en grandes necesidades,
pero cuando el favor de Dios
llegó a ellas en una manera
diferente y nueva, sus
situaciones cambiaron.
- Piense en Noé enfrentando el
reto más grande de su vida. El
mundo entero estaba a punto
de ser destruido por una
inundación, y Dios le encargó
la enorme tarea de construir
un enorme barco, sin hablar de
tener que reunir los animales.
Sin duda, Noe fue tentado a
desanimarse. Sin embargo,
sorprendentemente, la Biblia
dice en Genesis 6:8: "Pero
Noé halló gracia ante los ojos
de Jehová".
En otras palabras, Dios se
complació con Noé, así que el
favor de Dios llegó a él de una
manera fresca y nueva,
dándole una habilidad única.
Dios le prestó ayuda, y pudo
construir el arca para salvar a
su familia, a los animales y a sí
mismo.
- Considere a Rut. Su esposo
había fallecido, la tierra había
sufrido gran hambre y ella,
junto a su suegra, Noemí,
habían salido de Moab de
regreso a Israel, pero no tenían
nada. Para no morir de
hambre, Rut salía cada
mañana a los campos para
recoger lo que dejaban los
segadores, y la Biblia nos da a
entender que, en medio de
esta adversidad, Rut halló
favor ante el dueño del campo.
Ruth 2:10: Ella entonces
bajando su rostro se inclinó a
tierra, y le dijo: ¿Por qué he
hallado gracia en tus ojos para
que me reconozcas, siendo yo
extranjera?
El dueño les dio instrucciones
a sus trabajadores de dejarle
más grano a Rut. Fíjese cómo
llegó nuevamente el favor de
Dios durante una crisis, y no
pasó mucho tiempo para que
las circunstancias de Noemí y
Rut fueran cambiadas y sus
necesidades fueran suplidas
en abundancia.
- José es otro ejemplo bíblico
de alguien que halló el
favor de Dios en medio de la
adversidad.
o Fue vendido como esclavo
a Egipto,
o sufrió maltrato
o y tomaron ventaja de él,
pero la Biblia dice en
Genesis 39:5, 21, 23:
"Jehová estaba con José".
No importó lo que otras
personas le hicieran,
ni importó dónde lo
pusieran,
José continuaba prosperando.
Aun cuando la esposa de
Potifar mintió acerca de él,
acusándolo injustamente de
violación, y lo metieron en la
cárcel, ÉL CONTINUÓ
PROSPERANDO.
El favor de Dios fue lo que
causó, eventualmente, su
liberación, y pusieron bajo su
cargo todos los asuntos
agrícolas de Egipto.
En cada uno de estos ejemplos,
el favor de Dios llegó en medio
de la prueba
- El favor llegó en un diluvio.
- El favor llegó durante la falta
económica.
- El favor llegó cuando a alguien
se le estaba maltratando.
En otras palabras, el favor llegó
en medio de los retos de la vida,
de los desafíos. Cuando usted
esté pasando por tiempos
difíciles (cuando alguien le haya
maltratado, como a José, o esté
en problemas financieros, como
Rut, o su mundo entero se esté
desmoronando, como Noé)
TIENE QUE MANTENERSE FIRME
en la decisión de que ahora, más
que nunca, escogerá tener una
mentalidad de ser favorecido y
no se desanimará ni tomará una
actitud amarga. COMIENCE A
DECLARAR EL FAVOR DE DIOS,
COMIENCE A ESPERARLO.
VIVA CON UNA ACTITUD DE
FE
- ¿Está usted sufriendo hoy el
maltrato de parte de alguien?
Comience a decir: "Padre,
gracias que tu favor viene
hacia mí de una forma nueva,
y cambiará esta situación,
causará que estas personas
me traten bien".
- Igualmente, si usted está
luchando en sus finanzas, diga
algo como: "Padre; te doy
gracias que Tú me colocarás
en el lugar indicado en el
momento indicado, y que
estás trayendo maravillosas
oportunidades financieras
hacia mí",
SI USTED PUEDE VIVIR EN UNA
ACTITUD DE FE, entonces, igual
que a los santos del pasado,
pronto llegará el favor de Dios, y
esa situación cambiará a favor
suyo.
Piense en Job, él pasó por uno de
los tiempos de más prueba que
jamás haya pasado una persona.
En menos de un año, perdió su
familia, su negocio y su salud.
Tenía llagas por todo su cuerpo y
sin duda vivía con constante
dolor, pero en medio de esa hora
tan oscura, Job dijo en Job
10:12: "Vida y misericordia me
concediste... "
Ahora, esta es la parte
asombrosa de la historia: El libro
de Job tiene cuarentidós
capítulos. Job habló estas
palabras de fe en el capítulo
diez, pero, ¡no recibió su
liberación, ni su sanidad hasta el
capítulo cuarentidós! Sin
embargo, al principio, cuando
sus circunstancias parecían estar
más oscuras y sin esperanza,
Job miró hacia arriba y
declaró: "Señor, yo sé que Tú
me has mostrado favor".
¡increíble! Esa es fe
verdadera. Job estaba
diciendo: "Dios, no me importa
cómo se ve la circunstancia. No
me importa qué tan mal me
siento. Yo sé que tú eres un Dios
bueno, y tu favor causará que
esta situación cambie".
Con razón Dios restauró a Job
con el doble de lo que había
perdido y sus enemigos no
pudieron vencerle,
Amigo, si usted puede aprender
a mantenerse en una actitud de
fe, y declarar confiadamente el
favor de Dios en su hora más
oscura, entonces nada podrá
echarle abajo. Pudiera estar hoy
en una situación que pareciera
ser imposible, PERO NO SE
OLVIDE DEL FAVOR DE DIOS. Un
toque del favor de Dios puede
cambiar todo en su vida.
Nada podrá reprimirle.
La Biblia nos enseña que la
esperanza es un ingrediente
importante en nuestra vida
cristiana. Romanos 5:5: y la
esperanza no avergüenza;
porque el amor de Dios ha sido
derramado en nuestros
corazones por el Espíritu Santo
que nos fue dado.
Romanos 8:24: Porque en
esperanza fuimos salvos; pero la
esperanza que se ve, no es
esperanza; porque lo que alguno
ve, ¿a qué esperarlo?
En otras palabras, no se dé por
vencido, Siga viviendo y
creyendo y declarando el favor
de Dios, pues Él promete que
cosas buenas vendrán a usted. Si
pone su esperanza en el Señor,
Dios dice que el favor divino
llegará, y aunque no lo pueda
ver en este momento porque en
lo natural las cosas no lucen tan
bien, las buenas nuevas son que
el favor de Dios sí llegará si
sigue esperándolo y
declarándolo. Y cuando llega el
favor de Dios, las cosas cambian
porque es su favor lo que causa
que uno se eleve por encima de
sus problemas. El favor de Dios
le dará la victoria sobre sus
enemigos, así que, sin importar
sus circunstancias, siga
declarando con confianza: "Dios,
yo sé que tu favor viene hacia
mi"
pues la Biblia en Santiago 4:2
dice: que no tenemos porque no
pedimos.
Orar de la siguiente manera:
"Está bien, seguiremos pidiendo
y creyendo en el favor de Dios".
Cada día, declarar: "Padre, te
doy gracias por el favor que
viene a manifestarse de una
nueva manera. Tú favor está
abriendo puertas que será
imposible que los hombres
abran, te doy gracias por tu
favor que está causando nos den
un trato especial".
No desanimarnos, y no darnos
vencido.
Sólo seguir esperando en fe
porque sabemos que, si no nos
damos por vencido, el favor
divino que Dios prometió,
vendría.
Creer que viene en camino.
"nosotros contamos con el favor
de Dios. Dios está abriendo
puertas que ningún hombre
puede cerrar. Tener confianza,
audacia, sabiendo que el favor
de Dios está sobre ti"
Seguir creyendo porque sabemos
que el favor de Dios viene.
Sé que, si no me rindo, el favor
divino abrirá camino".
Amigo, eso es el favor de Dios.
Nunca pierda la confianza en
Dios. La Biblia dice: "...esperad
por completo en la gracia que se
os traerá " 1 Pedro 1:13: Por
tanto, ceñid los lomos de vuestro
entendimiento, sed sobrios, y
esperad por completo en la
gracia que se os traerá cuando
Jesucristo sea manifestado;
Cuando realmente reconoce que
tiene disponible esta gracia o
favor, vivir con confianza se
hace más fácil porque se puede
atrever a ser audaz. Pedirá cosas
que normalmente no pediría, y
verá a sus adversarios de una
manera muy diferente. En su
interior, sabrá que tiene la
ventaja en la vida; TIENE EL
FAVOR DE DIOS.