Dios cuida de su creación 9
Les pusiste término, el cual no 18
Los montes altos para las cabras
traspasarán, monteses;
104 Bendice, alma mía, a Jehová. Ni volverán a cubrir la tierra. Las peñas, madrigueras para los
Jehová Dios mío, mucho te has conejos.
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engrandecido; Tú eres el que envía las fuentes 19
Hizo la luna para los tiempos;
Te has vestido de gloria y de por los arroyos;
El sol conoce su ocaso.
magnificencia. Van entre los montes; 20
11 Pones las tinieblas, y es la noche;
2
El que se cubre de luz como de Dan de beber a todas las bestias
En ella corretean todas las bestias
vestidura, del campo;
de la selva.
Que extiende los cielos como una Mitigan su sed los asnos monteses. 21
12 Los leoncillos rugen tras la presa,
cortina, A sus orillas habitan las aves de
Y para buscar de Dios su comida.
3
Que establece sus aposentos los cielos; 22
Sale el sol, se recogen,
entre las aguas, Cantan entre las ramas.
13 Y se echan en sus cuevas.
El que pone las nubes por su Él riega los montes desde sus 23
Sale el hombre a su labor,
carroza, aposentos;
Y a su labranza hasta la tarde.
El que anda sobre las alas del Del fruto de sus obras se sacia la
viento; tierra. 24
¡Cuán innumerables son tus
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El que hace a los vientos sus 14 obras, oh Jehová!
Él hace producir el heno para las
mensajeros, Hiciste todas ellas con sabiduría;
bestias,
Y a las flamas de fuego sus La tierra está llena de tus
Y la hierba para el servicio del
ministros. beneficios.
hombre, 25
He allí el grande y anchuroso
5
Él fundó la tierra sobre sus Sacando el pan de la tierra,
15 mar,
cimientos; Y el vino que alegra el corazón
En donde se mueven seres
No será jamás removida. del hombre,
innumerables,
6
Con el abismo, como con vestido, El aceite que hace brillar el rostro,
Seres pequeños y grandes.
la cubriste; Y el pan que sustenta la vida del 26
Allí andan las naves;
Sobre los montes estaban las hombre.
16 Allí este leviatán que hiciste para
aguas. Se llenan de savia los árboles de
que jugase en él.
7
A tu reprensión huyeron; Jehová,
Al sonido de tu trueno se Los cedros del Líbano que él 27
Todos ellos esperan en ti,
apresuraron; plantó. Para que les des su comida a su
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8
Subieron los montes, Allí anidan las aves; tiempo.
descendieron los valles, En las hayas hace su casa la 28
Les das, recogen;
Al lugar que tú les fundaste. cigüeña. Abres tu mano, se sacian de bien.
29
Escondes tu rostro, se turban;
Les quitas el hálito, dejan de ser,
Y vuelven al polvo.
30
Envías tu Espíritu, son creados,
Y renuevas la faz de la tierra.
31
Sea la gloria de Jehová para
siempre;
Alégrese Jehová en sus obras.
32
Él mira a la tierra, y ella tiembla;
Toca los montes, y humean.
33
A Jehová cantaré en mi vida;
A mi Dios cantaré salmos mientras
viva.
34
Dulce será mi meditación en él;
Yo me regocijaré en Jehová.
35
Sean consumidos de la tierra los
pecadores,
Y los impíos dejen de ser.
Bendice, alma mía, a Jehová.
Aleluya.
