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INTRODUCCIÓN

En esta monografía haremos una aproximación a dos de los trastornos de alimentación más
comunes entre la población: la anorexia y la bulimia, con el fin de poder relacionarlo con los
contenidos sobre salud pública desarrollados en la materia Integración Áreal II del
Profesorado de Biología/Química del Instituto Superior de Formación Docente N°116.
Los trastornos alimenticios son enfermedades que, sumándose a factores personales,
culturales y sociales, dan como resultado conductas negativas en la alimentación que
repercuten directamente tanto en la salud física como en la salud mental.

Además, en el trabajo presentaremos actividades sobre el tema elegido para desarrollar en


clases de las materias de Biología, Química, Historia y Psicología.
DESARROLLO
Los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) son considerados enfermedades de la salud
mental que afectan con gravedad distintos aspectos físicos de los pacientes. Estos
trastornos implican una distorsión de la imagen corporal y los hábitos alimenticios que llevan
a afectar la capacidad de obtener la nutrición necesaria para el organismo provocando
enfermedades físicas, cambios en la personalidad o incluso la muerte.

A menudo, a los trastornos alimenticios se los denomina también como desórdenes


alimenticios, pero no está utilizados de la manera correcta. El término “desórdenes
alimenticios” se utiliza para reunir a todas aquellas conductas alimentarias anormales,
normalmente impulsadas por las emociones, que no se ajustan a los criterios que se deben
cumplir para un trastorno.

La mayoría de estos trastornos se dan a inicios de la adolescencia impulsados por los


estándares de belleza de turno que los jóvenes día a día observan en los diferentes medios
de comunicación, redes sociales y vida cotidiana.

Dos de los trastornos más comunes diagnosticados son la anorexia nerviosa y la bulimia
que, como síntoma en común, tienen la preocupación por el peso y la imagen corporal. Las
personas con estos trastornos llevan a cabo acciones con el único fin de mejorar su propia
imagen corporal, aunque ya está comienza a distorsionarse y allí comienzan los problemas.
Si no se tratan de manera eficaz, los trastornos alimentarios pueden convertirse en
problemas crónicos y, en algunos casos, pueden causar la muerte.

Las causas de estos trastornos alimenticios pueden deberse a distintos factores, o bien, a un
conjunto de ellos.

Desde el punto de vista biológico, si el paciente posee algún familiar cercano que haya
padecido algún TCA, esto aumentaría sus probabilidades de desarrollarlo debido a que
puede ser una indicación de que haya un patrón alimentario familiar inadecuado. Sin
embargo, esto no necesariamente significa que lo vaya a padecer.
Los factores psicológicos pueden aumentar la vulnerabilidad de las personas a desarrollar
estos trastornos, por ejemplo, aquellas personas que poseen rasgos obsesivos son más
propensas a padecer anorexia mientras que las personas que padecen ansiedad tienden
más hacia diagnósticos de bulimia.
La baja autoestima y la tendencia a perder el control también son propulsores de querer
recurrir a la comida como “compensación” de los problemas diarios. Al comer, el cerebro
libera neurotransmisores como la dopamina que provocan una sensación placentera dando
como resultado que las personas terminen usando los alimentos para controlar el estado de
ánimo.

Pero luego de esta satisfacción, los pacientes con estos trastornos pasan por un proceso de
culpa que “alimenta” su enfermedad llevándolos a comportamientos característicos como los
vómitos inducidos, el ejercicio excesivo o la utilización de laxantes.

A su vez, los estándares de belleza impuestos por la sociedad tienen un papel fundamental
en estos trastornos ya que, si una persona no llega a cumplirlos, siente gran disconformidad
con sus cuerpos y luego recurren a dietas restrictivas y no muy saludables, rutinas de
ejercicios estrictas e insostenibles que terminan afectando la salud física y mental.

Síntomas

● Actitudes y conductas indicadores de pérdida de peso.


● Muestra control excesivo en la alimentación.
● Saltarse comidas o esconderla.
● Uso de laxantes, diuréticos y pastillas para adelgazar.
● Interés repentino en cocinar platos elaborados, pero no comerlos.
● Informarse sobre la composición de los diferentes alimentos y contar sus calorías. ●
Cortar o partir la comida en trozos muy pequeños, masticar mucho o remover la comida
del plato.
● Masticar chicle constantemente y aumentar el consumo de bebidas dietéticas.
● Aumento de ejercicio.

Si bien no se puede obligar a ninguna persona a buscar atención profesional, lo que se


puede hacer es animar y apoyar para que la persona que se encuentre en esa situación
encuentre un profesional capacitado para atender su trastorno, además de estar atento
cuando las señales del TCA comienzan a aparecer.

Algunos puntos importantes para concientizar desde el hogar.


● Promover y reforzar una imagen corporal saludable para los niños y ayudarlos a crear
confianza en sí mismos.
● Disfrutar de las comidas familiares.
● No hablar acerca del físico de los demás en el hogar y en lugar de eso, tener un estilo
de vida saludable.
● Desalentar las dietas excesivas y poco saludables como el ayuno y el consumo de
suplementos o laxantes para bajar de peso.
● Hablar sobre estos problemas y educar en cuanto a ellos.

Con el tratamiento psicológico adecuado, se puede salir de estos trastornos y retornar a


hábitos alimentarios más saludables y aprender formas más sanas de pensar sobre la
comida y el cuerpo.

A continuación, detallaremos algunas características particulares de ambos trastornos.

Anorexia

La anorexia, o también denominada anorexia nerviosa, es un trastorno en donde la persona


posee una imagen corporal distorsionada, miedo excesivo a aumentar de peso causando una
autorrestricción en las calorías que se consumen para alcanzar un objetivo de peso que
nunca es saludable.

Según la relación con la comida y los comportamientos que el paciente tiene con ella, se
divide a la anorexia nerviosa en dos tipos:

● Anorexia nerviosa purgativa que se caracteriza por episodios recurrentes de sobre


ingesta donde la persona presenta deseos incontrolables por ingerir de manera
rápida y en grandes cantidades. Luego de ello, lleva a cabo distintas técnicas
purgativas como vómitos, diuréticos y laxantes. Según estudios, este tipo de
anorexia se presenta en personas con un perfil impulsivo y de bajo autocontrol.
● Anorexia nerviosa restrictiva, caracterizada por la bajada de peso debido a la
realización de fuertes dietas de restricción calórica, ayunos y exceso de ejercicio. La
persona tiene una fuerte resistencia al comer debido a que lo asocia con su miedo a
aumentar de peso. Según estudios, los pacientes con este tipo de anorexia nerviosa
son personas con alto grado de perfección, exigencia o autocontrol.

Otros comportamientos que se observan en las personas que sufren este TCA son:
● Ir al baño inmediatamente después de las comidas.
● Negarse a comer en presencia de otras personas.
Debido al déficit nutricional que conlleva estos trastornos, una persona con anorexia puede
sufrir los siguientes problemas de salud:

● Piel amarillenta o manchada que está reseca y cubierta con un fino vello. ●
Pensamiento confuso o lento, junto con mala memoria o capacidad de discernimiento. ●
Depresión, ansiedad, baja autoestima.
● Aislamiento social y familiar.
● Boca seca.
● Sensibilidad extrema al frío (usar varias capas de ropa para permanecer caliente).
● Osteoporosis (adelgazamiento de los huesos).
● Atrofia muscular y pérdida de grasa corporal.
● Deshidratación severa que puede terminar en una falla renal.
● Pérdida de cabello.

Las pacientes con anorexia niegan su condición buscando tratamiento sólo cuando su
afección es grave. Entonces, para un correcto comienzo de un tratamiento, es importante
lograr que la persona reconozca su trastorno y tenga la voluntad de lograr el cambio.

Los principales objetivos de un tratamiento de anorexia es restaurar el peso corporal normal


por altura y edad del paciente, además de lograr buenos hábitos alimentarios. Las
hospitalizaciones se recomiendan solo en casos en extremo delicados donde la desnutrición
es potencialmente mortal, se presentan complicaciones de otros ámbitos de la salud, la
persona tiene depresión grave o piensa cometer suicidio.

Bulimia

La bulimia es un trastorno alimentario donde el enfermo se somete a episodios de atracones


con una misma o diversas comidas en los cuales siente una pérdida de control absoluta que
conduce a la angustia y temor al aumento de peso. La culpa generada por estos episodios
lleva a la persona con el trastorno a utilizar los vómitos como método para evitar el aumento
de peso y recuperar la sensación de control nuevamente.
La mayoría de los que padecen este TCA son personas que están constantemente por
encima de su peso e intentan compensar la ingesta excesiva de alimentos a través de la
inducción del vómito o el uso de medicamentos laxantes. Por ende, la bulimia se relaciona
con una carencia de nutrientes que no siempre está asociada a la pérdida de peso.

Este trastorno comparte muchos síntomas y comportamientos relacionados con la anorexia,


pero su diferencia radica en cómo se relacionan con la comida los pacientes. En la anorexia,
la pérdida de peso se debe tanto a la restricción calórica como también a las conductas
purgativas. Mientras que, en la bulimia, los pacientes poseen fases de atracones voluntarios
utilizando las conductas purgativas y la restricción alimentaria como compensación.

Así, si en una persona que padece bulimia se puede observar una gran disminución del peso
corporal sumado a la aparición de enfermedades que se relacionan a este suceso, se la
diagnosticaron con anorexia también.

Este TCA se puede dividir según dos criterios. Según el tipo de episodios compensatorios
que presenta el paciente, la bulimia se subdivide en:

● Bulimia purgativa: en este caso, el episodio compensatorio por los atracones es el


vómito inducido o la utilización de laxantes o sustancias diuréticas. Esto es
provocado por el sentimiento de culpa que se produce en la persona con la ingesta
incontrolada.
● Bulimia no purgativa: las actitudes compensatorias se relacionan con la práctica de
ejercicio físico en exceso o realizar ayunos durante largos períodos de tiempo.
Dichas conductas se relacionan debido a que la persona es consciente que no se
puede eliminar las calorías ingeridas por los alimentos.

También encontramos la subdivisión asociada al tipo de perfil que posee el paciente que
sufre el trastorno. Estas son:

● Bulimia asociada a la obesidad: la persona que sufre el TCA presenta sobrepeso en


mayor o menor grado generando sentimiento de culpa. Se relaciona con que la
identidad ya se encuentra ligada a esa apariencia física y, en consecuencia, su
autoestima es muy baja.
● Bulimia asociada al peso variable: el peso de los pacientes va subiendo y bajando. En
consecuencia, es el grupo de pacientes que más niegan la ayuda profesional porque
el hecho de verse con poco volumen y menos grasa los impulsan a seguir con esos
comportamientos sin necesitar ayuda terapéutica para llevar una vida sana.
Además de los atracones y vómitos autoinducidos, otros de las conductas que se pueden
observar en pacientes con este TCA son:

● Pasar mucho tiempo haciendo ejercicio.


● Comprar grandes cantidades de alimentos que desaparecen de inmediato.
● Ir al baño de manera regular inmediatamente después de las comidas.

De una manera general, se pueden encontrar las siguientes fases en la bulimia:


1. Intento de control de la alimentación: el paciente trata de planificar una alimentación
cada vez más restrictiva con el objetivo de perder peso.
2. Atracón: como respuesta a un estrés emocional, el paciente pierde el control y se
produce el atracón, normalmente con alimentos que se habían excluido de la dieta. 3.
Purga y rituales compensatorios: invadidos por el sentimiento de culpa, los pacientes
buscan recursos para evitar ganar peso.
4. Estado de vigilancia: la persona que sufre el trastorno se mantiene en un estado de
preocupación y vigilancia, relacionado con el sentimiento de malestar.

Este trastorno trae varias consecuencias en el futuro si no es tratado a tiempo:

● Latidos cardíacos irregulares causados por la deshidratación, pérdida de potasio,


sodio y cloro dando como resultado la posibilidad de falla cardíaca y muerte. ● Ruptura
gástrica durante los atracones.
● Inflamación y posible ruptura del esófago debido al vómito frecuente. ● Caries
dentales y destrucción de los dientes debido a los ácidos estomacales. ● Movimientos
intestinales irregulares y constipación resultado del uso de laxantes frecuentes.
● Úlceras pépticas y pancreatitis.

Uno de los tratamientos que se recomienda para la bulimia es la psicoterapia donde el


paciente habla sobre el trastorno y los problemas que acarrea con un profesional de la salud
mental.

Hay distintos tipos de terapia para ayudar a mejorar los síntomas. Por un lado, la terapia
cognitivo-conductual que ayudan a normalizar los patrones de alimentación y la identificación
de las creencias y las conductas poco saludables y tratar de reemplazarlas por otras que
sean
saludables, y también, está la psicoterapia interpersonal que aborda las dificultades en los
vínculos estrechos del paciente ayudando a mejorar las habilidades de comunicación y la
resolución de conflictos.

Los tratamientos farmacológicos son otra alternativa para ayudar a las personas con este
trastorno. Los antidepresivos en conjunto con la psicoterapia buscan aliviar los síntomas de
la bulimia, utilizando fármacos que actúan como inhibidores selectivos de la recaptación de
serotonina.

La educación nutricional es de suma importancia en este proceso ya que se busca diseñar


un plan de alimentación para ayudar a que el paciente logre hábitos alimentarios saludables
para prevenir el hambre, los antojos y proporcionar una buena nutrición.
ANEXO
Anexo N° 1
Paper sobre Personalidad y trastornos de la conducta alimentaria (Siguiente página)
https://drive.google.com/file/d/1Kgpl1E81st9qkRTmrVbws4ea0adqfdBU/view

Anexo N° 2
Vídeo donde se explica la diferencia que radica entre anorexia y bulimia
https://youtu.be/1057P2YAoyY

Anexo N° 3
Charla dedicada a los trastornos de la conducta alimentaria. TV La Palma
https://www.youtube.com/watch?v=FnyvXzaTDnA

Anexo Nº4
Preguntas y respuestas de personas que sufrieron de TCA.
https://www.youtube.com/watch?v=ae9LqGsW5Ug
CONCLUSIÓN
A lo largo de toda la historia, los estándares de belleza impusieron en la sociedad metas
imposibles que siempre trataron de cumplirse por métodos que derivaban en problemas de
salud, aunque no siempre se los consideró así.

Hoy en día, dando una mirada holística a cada situación que afecta las condiciones de salud
de cada individuo de la sociedad, las prácticas que siempre se utilizaron para modificar los
cuerpos según el estándar de belleza de turno comenzaron a preocupar a la comunidad
científica. Con estas problemáticas, desde la medicina se comenzó a hablar sobre los
trastornos de la conducta alimentaria, principalmente los trastornos que llevaban a la pérdida
de peso y “mejora” de la imagen corporal: la bulimia y la anorexia nerviosa.

Pero, ¿qué cuestiones se tuvieron en cuenta para englobar a estas situaciones como
problemas de salud?

Según la Organización Mundial de la Salud, la salud es “el estado de completo bienestar


físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad”. Como ausencia de
enfermedad hace referencia a las patologías que normalmente la medicina trata, referidas a
los sistemas que componen el cuerpo humano.

Teniendo en cuenta lo “físico, mental y social” que dice la oración es que los trastornos de la
conducta alimentaria comenzaron a tener relevancia en la medicina actual. Se observa un
gran deterioro del cuerpo humano por patologías que derivan de la situación propia de los
TCA, como puede ser problemas dentales, anemias, ansiedad, aislamiento, pero, además,
también se comienza a tener en cuenta cómo todo ello influye en el círculo social y mental
de los pacientes.

El historiador de la medicina Henry Sigerist definió a la salud como “no es sólo la ausencia
de la enfermedad, sino que es algo positivo, una actitud gozosa ante la vida y una
aceptación alegre de las responsabilidades que la vida hace recaer sobre el individuo”. Las
personas con trastornos alimenticios desarrollan una alteración en el humor que se conjuga
con el exceso en la ingesta de comida, el miedo a engordar y la sensación de descontrol
intensificando los sentimientos de auto desprecio y baja autoestima, síntomas
característicos de la depresión.

Además de las patologías físicas que se pueden desencadenar como consecuencia de la


anorexia y bulimia, las secuelas mentales que el paso por estos trastornos deja son más
difíciles de reparar. Un estudio publicado en la revista “Neuropsychiatric Disease and
Treatment” que analizó las secuelas neuropsiquiátricas que producen los trastornos
alimenticios reveló que las personas que padecen el trastorno por varios años desarrollan
deterioros en los procesos cognitivos como la memoria, atención, flexibilidad cognitiva y la
resolución de problemas como consecuencia de la desnutrición.

La duración del trastorno en las personas está altamente ligada a la pérdida de confianza en
la recuperación, el tratamiento y los profesionales. A su vez, la recuperación puede verse
impedida por diferentes factores genéticos o la comorbilidad que se produce por otras
enfermedades. También se debe tener en cuenta el tipo de personalidad que posee el
paciente que, por lo general, se los relaciona con sujetos con patologías del control.
Todos estos los mecanismos síntomas que los pacientes utilizan son un intento erróneo de
reducir las probabilidades imprevisibles y la auto invalidación que poseen. El perfeccionismo
los lleva a perdurar en estos trastornos y también, se podrá utilizar con una buena terapia,
para llevarlos a una buena recuperación.

Por su lado, el entorno social del paciente también es de suma importancia para la
recuperación, sabiendo del poder de su influencia en la conducta humana pueden lograr
cambios positivos o perpetuar los síntomas. Aquí hablamos tanto del círculo social amistoso
y, principalmente, del entorno más estrecho a los pacientes que al tener un contacto más
directo con ellos, son los primeros que pueden interferir en los tratamientos. Las familias en
las que no existe una estructura estable y segura, o también en aquellas en las que la
comunicación y la dinámica familiar es excesivamente rígida, controladora y exigente
pueden influir en el desarrollo de un trastorno, sobre todo en personas con mayor
vulnerabilidad individual.

La existencia de páginas web que hacen apología de la anorexia y la bulimia como formas
de vida en vez de llamarlas como lo que son, enfermedades mentales. Son aquellas páginas
dirigidas por personas que sufren de TCA en las que las personas se ponen en contacto con
el objetivo de intercambiar trucos para adelgazar y reforzar las conductas patológicas propias
de la enfermedad, además de cómo engañar a los familiares, amigos y personas cercanas.
El acceso a este tipo de páginas es muy fácil y dado que aún no existe una legislación
concreta al respecto, no tenemos al alcance las herramientas necesarias para acabar con
este factor que ejerce una influencia tan negativa, sobre todo, entre los chicos y chicas más
jóvenes.
En materia de prevención es fundamental el papel de las instituciones educativas en el
desarrollo desde niños. No sólo para concientizar sobre estas problemáticas, sino que
también se les enseñe a los niños y adolescentes a auto respetarse y respetar a las
personas que los rodean, además de crear un ambiente en las aulas que sea un espacio de
acompañamiento educativo y emocional, y así evitar cualquier posible situación que llegue a
desencadenar uno de estos trastornos.
BIBLIOGRAFÍA

Páginas web utilizadas para esta monografía:


Clínica Mayo. May 12, 2023. Trastornos alimenticios.
https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/eating-disorders/symptoms-causes/syc
20353603

MedlinePlus. 18 noviembre de 2021. Trastornos de la alimentación


https://medlineplus.gov/spanish/eatingdisorders.html
Clínica Pérez-Espinoza Salud mental. Tipos de trastornos alimenticios.
https://clinicaperezespinosa.com/blog/enfermedades-alimenticias
comunes/#:~:text=Las%20enfermedades%20alimenticias%20son%20patolog%C3%ADas,y
%20relaci%C3%B3n%20con%20la%20comida.

El prado psicólogos. Los trastornos alimenticios: síntomas, tipos, causas y tratamiento de los
desórdenes alimentarios.
https://www.elpradopsicologos.es/trastornos-alimenticios/

Clínica Barcelona. 14 de enero de 2019. Síntomas de los Trastornos de la Conducta


Alimentaria.
https://www.clinicbarcelona.org/asistencia/enfermedades/trastornos-de-la-conducta
alimentaria/sintomas-y-signos

Quirón Salud. 30 de abril de 2018. La perversa relación entre la depresión y los trastornos de
conducta alimentaria del adulto.
https://www.quironsalud.com/blogs/es/trastornos-alimentacion/perversa-relacion-depresion
trastornos-conducta-alimentaria
Unidad didáctica: Historia
Duración: 2 horas

Material necesario para la clase: Se solicitará el permiso de la institución para utilizar las
computadoras que se disponen en biblioteca y así realizar búsqueda de información y
trabajar en clase. En el caso de no contar con ellas, se utilizará material bibliográfico.

Momento de inicio: (20-25 minutos) El docente presentará un video a la clase (13 minutos)
en el cual se les pide a los alumnos tomar nota para luego utilizar esas ideas en una
actividad. Luego de ver el video, se hace una breve puesta en común sobre lo que los
alumnos anotaron como importante del video visto.

Video propuesto: https://www.youtube.com/watch?v=mcrVBSZigE0

Momento de desarrollo (40-45 minutos): En esta parte, se tratarán las imposiciones sociales
sobre la vestimenta. El docente iniciará con una explicación sobre el contexto social, la
jerarquía y la desigualdad de la época victoriana para contextualizar a los alumnos (10-15
minutos). Luego, se les entrega a los alumnos un material impreso con el que podrán
responder al siguiente cuestionario:
● ¿Cuál era el ideal de belleza de la época?
● ¿Cuál era la importancia del corset en la sociedad?
● ¿Qué consecuencias traía en la salud de las mujeres el uso de esta prenda? ● ¿Una
imagen de una mujer refinada era más propicia a un matrimonio? Explicar brevemente.
● ¿Qué relación encuentras entre esta época y la nuestra en cuanto a los ideales de
belleza?
Material bibliográfico:
https://docs.google.com/document/d/1BVqblqTKP2qJC9B4xdCB38o2hiw4vG9Bv86KjibDM5
s/edit “El uso del corset y su visión en la sociedad antigua”

Momento de cierre (30-35 minutos): Luego de la entrega de las preguntas de la actividad de


desarrollo, los alumnos utilizarán una nueva bibliografía para realizar una línea de tiempo en
las computadoras sobre “Los trastornos alimenticios a lo largo del tiempo”.
Recursos para la actividad: computadoras disponibles en la institución; les otorgaremos
distintas páginas webs para realizar las líneas de tiempo de manera colorida y entretenida
(Canva; Venngage). Luego se les pide a los alumnos que envíen la misma al email del
docente para su revisión y evaluación.

Material bibliográfico que se propone:


https://docs.google.com/document/d/1UYGXUyOsjG61ttgfGVyqabkHgy
79WpJy4ItCBpOmG0/edit “Trastornos alimenticios en la historia”
El uso del corset y su visión en la sociedad antigua.

Son incontables las veces que las personas usan la famosa frase “la belleza cuesta” pero en
realidad lo que cuesta no es la belleza, sino el esfuerzo que hacen las personas por encajar
en estereotipos creados por nuestra sociedad basados en ideas erróneas sobre lo que
significa ser femenina. Es por esto que, a lo largo de la historia se han creado artefactos
que, dejando a un lado lo práctico y en muchos casos, la salud, buscan moldear a la mujer
para conseguir el punto estético que se considera atractivo en el cuerpo femenino. Uno de
estos artefactos es el corset, el cual traía graves consecuencias en las mujeres que lo
utilizaban a menudo. Las mujeres de la corte francesa veían este corsé como
«indispensable para la belleza de la figura femenina. Los corsés de esta época se llevaban
a menudo con un verdugado que sostenía las faldas en un cono rígido. Los corsés
convertían la parte superior del torso en una forma de cono invertido que hacía juego. Estos
corsés tenían tirantes y terminaban en solapas en la cintura. Aplanaban el busto, y al
hacerlo, empujaban los pechos hacia arriba.

El corset es considerado hoy en día como una de las modas más peligrosas del pasado (y
que seguimos reproduciendo), pues su objetivo, de hacer lucir más delgadas las cinturas de
las mujeres pasando por alto, incluso, la necesidad de respirar, poniendo en peligro la salud
física de las damas que, forzadas por las normas sociales, debían utilizarlo sin lugar a
dudas. Y es que el uso del corset, que alcanzó su punto de más popularidad en la época
victoriana, en el siglo XIX, en donde fue llevada a los extremos con la creencia de que, entre
más apretado fuera usado, más respetable era la mujer, lo que por supuesto, conlleva
grandes problemas físicos a las mujeres de la época. Su uso era casi obligatorio, pues la
reina había prohibido las cinturas anchas. Históricamente, el corsé ha sido un símbolo tanto
de belleza como de opresión. Mientras que ha sido utilizado para moldear la figura
femenina, también se le utilizó como medio de castidad. Entre más apretado se usaba el
corset, más pura y diga era la mujer, era un símbolo de opresión.

Según cuenta Summer Strevens, en su libro Fashionably Fatal, el uso del corset y su
significado para la sociedad dio origen incluso para las expresiones "strait-laced" que
literalmente se traduce como mujer amarrada muy fuerte pero que es empleada como
sinónimo de "puritana", "loose women" y "mujeres de nudo suelto" para referirse a las
mujeres "fáciles". Esto pone en evidencia la importancia de lo apretado del corset en esa
sociedad. Esto, explica la autora del libro, dio origen al fenómeno del pecho jadeante de la
época victoriana, en la que a todas las mujeres respetables les faltaba la respiración. Una
escena de la película de Tim Burton, El Cadaver de la Novia se hace referencia a esto,
cuando la
madre de Victoria pide al ama de llaves que ajuste bien el Corset a la señorita pues "no quiere que hable sin
jadear" cuando va a conocer a su futuro prometido, Víctor. Aunque suene a algo que podría resultar cómico, de
hecho, no tiene nada de gracioso, pues las afectaciones físicas a los cuerpos de las mujeres eran una
realidad.

Según Strevens, la revista The Lancet dedicó al menos un artículo al año, entre 1860 hasta 1890, sobre los
problemas médicos que podría ocasionar su uso tan ajustado y en 1874, se publicó un listado oficial en Reino
Unido sobre las 97 enfermedades atribuidas al uso de esta prenda, entre las que se incluían la histeria y la
melancolía. Para finales del siglo XIX, el corset ya era considerado una prenda perjudicial para la salud.

Las mujeres que apretaban demasiado sus lazos para lograr la llamada cintura de avispa, corrían el riesgo de
morir atravesadas por la varilla de la prenda. En 1903, una mujer de 43 años, llamada Mary Halliday murió
repentinamente sin otro síntoma aparente que el de un ataque de convulsiones.

Sin embargo, la autopsia, publicada en el New York Times, demostró que se habían encontrado "dos pedazos
de acero de corsé en su corazón, con una longitud total de ocho pulgadas y tres cuartos (22.2cm)", según
recoge la BBC de aquel periódico, que además aseguraba que las varillas se habían convertido en filos de
navajas por el movimiento de su cuerpo.
Al ser una prenda que comprime la cintura y parte del abdomen buscando darle una forma
más esbelta, al estilo reloj de arena, provoca que órganos como los intestinos se den vuelta
y eso no solo es dañino a largo plazo, sino que también apenas comienzas a usarlos. La
mala posición del intestino complica su funcionamiento: Hay menor tolerancia a ciertas
comidas, lo que hace que la cantidad e intensidad de los gases sea mayor. Además, la
presión genera reflujo y acidez estomacal.

Todos los estereotipos de esa época, además de causar una moda en común, terminaban
en enfermedades y trastornos que en ese entonces no eran nombrados ni señalados como
tal, pero lo eran. Este tipo de modas en donde se busca ser lo más delgada posible,
inevitablemente conducen a trastornos alimenticios por la búsqueda de una figura delgada
con largas piernas y cintura estrecha.

Material utilizado para esta adaptación:


https://www.harpersbazaar.mx/moda/historia-del-corset-cuando-donde-surge-que-simboliza
corse
https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_del_cors%C3%A9
Trastornos alimenticios en la historia

Aunque la anorexia nerviosa era rara hasta la segunda mitad del siglo XX, ciertamente
existió antes de ese momento. Las primeras descripciones de la anorexia nerviosa en el
mundo occidental datan de los siglos XII y XIII. El caso más famoso, Santa Catalina de
Siena, se dejó de comer como parte de una negación espiritual de sí misma.

En el siglo XVI, las ascetas eran consideradas brujas y las quemaban en la hoguera. Existen
varias descripciones clínicas de la “enfermedad de pérdida” en el siglo XVII a XIX, y a
principios del siglo XX, la anorexia se empezó a considerar como un trastorno endocrino y a
tratar con hormonas pituitarias.

También existen descripciones, a partir de la Edad Media, donde se habla de mujeres y


hombres entregados a la práctica del ayuno, sin embargo, lo que movía a la mayoría de
estas personas para practicar una restricción alimentaria era de índole religiosa, lo que se
conoce como “anorexia santa”. En esta las personas no presentaban las características de
la anorexia nerviosa actual en la que la práctica del ayuno se encuentra en función de la
belleza corporal.

Es en el siglo XVII cuando se empieza a hablar de anorexia nerviosa como de un hecho


puramente médico. Alrededor del 85% de los pacientes con Trastornos de la Conducta
Alimentaria (TCA) experimentan un intenso impulso para adelgazar, y en parte, su
diagnóstico se confirma en función de la intensidad de dicho impulso.

En 1874 William Gull describió en la Real Academia de Medicina londinense un curioso


trastorno al que denominó anorexia nerviosa, presentando a una serie de pacientes a las
que había tratado con éxito. Un mes después, en París, Charles Lasègue hacía lo propio
bautizando el trastorno en cuestión como anorexia histérica, calificativo que ya empezaba a
constituirse en la tradición francesa. De esta forma se introdujo en la arena médica el más
conocido y alarmante de los trastornos de la conducta alimentaria.

En 1973, Hilde Bruch publicó un libro con una serie de estudios de caso, llamado Trastornos
alimenticios: Obesidad, anorexia nerviosa y la persona dentro. A medida que el trastorno
llegó al conocimiento público en la década de los setenta, los casos reportados aumentaron
y se extendieron más allá de la clase alta.

Las primeras descripciones fiables de la bulimia (atracarse y luego purgar mediante


ejercicio, vómitos o laxantes) se encuentran entre personas ricas de la Edad Media, que
vomitaban
durante las comidas para poder consumir más. Aparentemente, a pesar de la creencia
popular, este comportamiento no ocurría en la antigua Roma. El primer artículo clínico sobre
la bulimia se publicó en 1979. La bulimia nerviosa es una variante ominosa de la anorexia
nerviosa.

Existen informes que evidencian que ya desde el siglo XIX había personas que se
provocaban el vómito, después de comer en forma excesiva. En 1940 este trastorno se
consideró un síndrome y en 1980 la Sociedad Estadounidense de Psiquiatría incluyó la
bulimia en el manual de psiquiatría como una enfermedad diferente a la anorexia.
Los casos de anorexia y bulimia aumentaron en las décadas de los setenta y ochenta y,
aunque algunos dirán que alcanzaron su punto máximo en ese tiempo, los datos de una
encuesta nacional en Estados Unidos sugieren que la bulimia, particularmente, va en
aumento. Si bien la mayoría de los académicos tienden a señalar presiones culturales que
exigen estar delgados, el aumento de la depresión y el comportamiento obsesivo
compulsivo, y el incremento en los comportamientos de dieta como precipitantes para los
trastornos alimenticios, es imposible ignorar el hecho de que en las décadas de los setenta
y ochenta fue cuando las tasas de obesidad en los Estados Unidos comenzaron a aumentar
a un ritmo sin precedentes, y la alimentación baja en grasa comenzó su progresión popular
debido a una tendencia dominante.

Bibliografía virtual utilizada para este texto:


https://es.wikipedia.org/wiki/Trastornos_de_la_conducta_alimentaria
https://www.psychologytoday.com/ar/blog/antecedentes-de-trastornos-alimenticios
Unidad didáctica: Psicología
Duración: 2 horas

Material necesario: Se les pide a los alumnos llevar afiches y marcadores para la actividad
final.

Momento de inicio (20- 25 minutos): La clase comienza con la proyección de un video para
visualizar en conjunto con el fin de introducir a los alumnos en el significado del trastorno.
Además, se les pide a los alumnos que tomen nota de conceptos o ideas importantes para
realizar un breve debate sobre lo observado en el video y sus ideas personales para dejar
algunos conceptos y cuestiones que se consideren pertinentes plasmadas en el pizarrón.

Video utilizado: https://www.youtube.com/watch?v=W_XVXQfW6Nk

Momento de desarrollo (45 minutos): En el desarrollo se volverá a ver otro video, pero en
este caso se visualizará un caso particular en donde se cuentan experiencias en primera
persona sobre lo que significa vivir con el trastorno, el video será utilizado para responder
unas preguntas luego, por lo cual se pide prestar mucha atención.

Video utilizado: https://www.youtube.com/watch?v=PNejnzYU6Kw

Preguntas para la actividad:

● ¿Cuáles son los síntomas de trastorno que plantea la mujer entrevistada? ●


¿Cómo describe su relación con su entorno familiar al sufrir esta enfermedad? ●
¿Qué opina sobre los factores disparadores de este trastorno?
● ¿Consideras que esos factores pueden influir en esta enfermedad? ¿Qué otro factor
que no se menciona en la entrevista consideras que puede tener el mismo efecto? ●
Comparando ambos videos vistos, uno desde el lado analítico y el otro desde una
experiencia personal, ¿Qué papel juega la salud mental en este tipo de
enfermedades? ¿Y el entorno?

Con estas preguntas se busca tanto las opiniones personales como la observación. Una vez
terminada esta actividad se procede a una puesta en común de las mismas para comparar
las respuestas dando por finalizado el desarrollo.
Momento de cierre (40 minutos): Se utilizará el material que los alumnos han llevado a clase
para hacer afiches que luego quedarán en el mismo salón de clases. Para eso se divide a
los alumnos en grupos y se proponen los siguientes temas para trabajar en los afiches,
aunque también los alumnos pueden usar algún tema que consideren pertinente que no se
encuentre entre los mencionados por el docente.

Temas propuestos:

● Factores determinantes del trastorno.


● Imposiciones sociales sobre la belleza.
● Tratamiento del trastorno.
● Consecuencias sociales del trastorno.
Unidad didáctica: Química
Duración: 2 horas

Material utilizado para la clase: Computadoras de la institución para la actividad final.

Momento de inicio (20-25 minutos): En esta clase se tratarán las terribles consecuencias del
vómito recurrente en el organismo. En este momento de la clase, se expondrán diferentes
definiciones que son clave para la comprensión del tema como, por ejemplo, qué es un
ácido, de que está compuesto, qué es el ácido gástrico y cómo funciona el sistema
digestivo, entre otras. Con éstas explicaciones se busca indagar en saberes previos y
establecer una base de conocimientos para el desarrollo del tema.

Momento de desarrollo (40-45 minutos): Una vez concluida la explicación del inicio, el
docente les entrega a los alumnos material bibliográfico para su lectura y utilización en el
siguiente cuestionario.

Con estas preguntas se busca una mayor comprensión del tema y la elaboración de
respuestas propias de los estudiantes para luego comparar respuestas entre todos los
estudiantes.

● ¿Qué podría causar la falta de potasio en los pacientes con TCA? ●


¿Cuáles son las complicaciones cardiovasculares que provoca este acto? ●
¿Por qué el vómito aumenta la posibilidad de tener caries?
● ¿Qué propiedades crees que tiene el ácido clorhídrico que lo vuelve tan problemático?
● ¿Cuál es la diferencia entre alteraciones cardiovasculares funcionales y estructurales?

Material bibliográfico que se propone para la actividad de desarrollo:


https://docs.google.com/document/d/1LmW_80dRFKHDCiD4A3J6RfBdpPjhDeJoodlZS
zd6D8/edit “Efectos del vómito en la salud.”

Momento de cierre (35-40 minutos): En esta etapa los alumnos utilizarán las computadoras
de la institución para realizar un mapa conceptual sobre las consecuencias del vómito en las
personas con TCA, con el fin de explorar la habilidad de cada estudiante en cuanto a la
creatividad y la comprensión del tema. Para la elaboración se podrán utilizar sitios digitales
como Paint, Word, Canva, etc.
Ácidos estomacales perjudiciales para las personas con trastornos alimenticios

El vómito es el resultado de la expulsión violenta y espasmódica del contenido del estómago


a través de la boca. El contenido gástrico expulsado es fuertemente ácido ya que contiene
ácido clorhídrico (HCl), también conteniendo restos de comida. Si se vomita de forma
continuada, los niveles corporales de agua y electrolitos disminuyen y pierden el equilibrio.
Esto puede provocar situaciones muy diversas y de distinta gravedad según el grado de la
alteración. La deshidratación y los desequilibrios electrolíticos son más frecuentes en niños y
ancianos.

Efectos del vómito en la salud.

El ácido clorhídrico en la boca produce pérdida del esmalte dental en la cara interna de los
dientes. Por tanto, aumento en la producción de caries. Daños en las encías, el paladar y la
garganta, produciendo inflamación de los mismos. Las manos u otros elementos
introducidos para estimular el vómito pueden provocar heridas en la garganta y el paladar,
que en ocasiones llegan al sangrado.

En las glándulas salivares: Suelen aumentar de tamaño, en especial las parótidas, como
consecuencia de la acción de devolver. El resultado es un rostro de aspecto regordete.

Alteraciones hidroelectrolíticas
 Potasio (K): La pérdida del mismo en sangre se produce a través de la emesis porque
el jugo gástrico que se pierde es muy rico en potasio. La disminución del potasio en
la sangre afecta el funcionamiento del corazón.
 Sodio (Na): Por el uso de vómitos y laxantes. Así como por una mala alimentación.
La reducción de sodio en sangre produce disminución de la presión arterial y mareos. 
Magnesio (Mg): Por utilizar laxantes, diuréticos o ambos combinados, así como por
devolver. Su pérdida en sangre ocasiona debilidad muscular, hormigueos y calambres.
 Agua (H2O): Se pierde agua a través de los vómitos y como consecuencia del uso de
laxantes y diuréticos solos o combinados. Se hace evidente, especialmente cuando
la ingesta de líquidos es reducida. La pérdida de agua y electrolitos genera
deshidratación.
En el aparato digestivo el esófago se puede irritar (esofagitis) como consecuencia del paso
del ácido clorhídrico en forma reiterada. Ruptura esofágica si la frecuencia del vómito es muy
alta. También reflujo gastro-esofágico, o lo que es lo mismo el pasaje espontáneo del
contenido gástrico hacia el esófago.

En el estómago se produce gastritis, debido a la pérdida del moco que protege la mucosa
gástrica del ácido clorhídrico. Como consecuencia pueden producir vómitos de sangre.
También podría haber protrusión de la parte superior del estómago por encima del diafragma
dando origen a una hernia hiatal.

Dentro de las consecuencias cardiovasculares, aunque algunas veces pueden ser


asintomáticas, son muy importantes porque son las más peligrosas y las que pueden
ocasionar muerte súbita. Dentro de estas complicaciones encontramos que el corazón no es
capaz de satisfacer a las demandas de energía que se encuentran aumentadas durante del
ejercicio. Las complicaciones cardiovasculares podemos clasificarlas en estructurales o
funcionales. Con respecto a las alteraciones estructurales encontramos una reducción del
tamaño del ventrículo izquierdo y pérdida de masa miocárdica y del gasto cardíaco lo que
puede desembocar en dolor torácico y palpitaciones. Además, también puede aparecer
fibrosis miocárdica y derrame pericárdico. En relación con las alteraciones funcionales, se
puede dar una insuficiencia cardíaca caracterizada por trastornos del ritmo como arritmias,
bradicardia, bajadas de tensión y ortostatismo.

En el aparato respiratorio se producen bronquitis por micro aspiración o neumonías


aspirativas, especialmente si el vómito se provoca en estado de alteración de la conciencia.

El aparato urinario sufre daños en el funcionamiento de los riñones como consecuencia de la


deshidratación. Haciendo frecuentes las infecciones urinarias y la producción de cálculos o
arenilla.

Las manos sufren callosidades y erosiones, o lastimaduras en los nudillos de los dedos, o en
el sitio de roce contra los dientes, cuando se utiliza la mano para provocar el devuelto.

Dependiendo de la conducta purgativa que caracteriza a la persona se pueden producir


efectos diferentes a nivel de electrolitos. Tanto el uso de diuréticos, laxantes o el vómito
autoinducido generan hiponatremia e hipopotasemia. Los vómitos recurrentes provocan
deshidratación de tal forma que el organismo para intentar compensar la falta de agua
intenta retenerla. De esta manera se intenta favorecer la absorción a nivel renal de sodio y
bicarbonato generando alcalosis metabólica e hipopotasemia que se conoce como síndrome
de pseudo Bartter. Sin embargo, a nivel del cloro y bicarbonato el abuso de laxantes genera
acidosis metabólica hiperclorémica y una bajada del pH diferenciándose del uso de
diuréticos y los vómitos que generan un aumento del pH.

Bibliografía utilizada:

https://idus.us.es/bitstream/handle/11441/132505/BENITEZ%20VIDAL%20LORENA.pdf?se
quence=1&isAllowed=y

https://es.wikipedia.org/wiki/V%C3%B3mito#:~:text=Es%C3%B3fago%3A%20Se%20puede
%20irritar%20
Unidad didáctica: Biología
Duración: 2 horas

Material utilizado para la clase: Fotocopia con el material para la actividad, hojas A4,
colores, marcadores, cinta adhesiva, televisión o proyector para el video.

Momento de inicio (15- 20 minutos): El docente da comienzo a la clase explicando


brevemente cómo se desarrollará la clase de día. Se propone ver un video (4 minutos) para
introducir a los alumnos en el tema, además se les aconseja a los alumnos tomar nota de los
conceptos importantes ya que serán utilizados luego.

Luego de ver el video, se les hace una serie de preguntas a los alumnos en busca de un
diálogo sobre lo que se pudo observar en el video entre todos los alumnos.

Posibles preguntas:

● ¿Qué sucede con la glucosa que ingresa al cuerpo?


● ¿Qué sucede en el organismo luego de las 7hs sin ingerir alimentos?
● ¿Qué le pasa al cerebro cuando no recibe suficiente glucosa?

Las preguntas tienen como finalidad que los alumnos entiendan la importancia de los
alimentos para el cuerpo.

Video utilizado: https://www.youtube.com/watch?v=W_xpJrlRUqI

Momento de desarrollo (45-50 minutos): En esta parte de la clase, el docente expondrá


brevemente algunos conceptos importantes para la comprensión del tema, como lo son el
funcionamiento del sistema digestivo, la importancia de los nutrientes, su clasificación (10-15
minutos).

En la segunda parte del desarrollo, se les dará a los alumnos un texto con el cual van a
responder una serie de preguntas.

● ¿Cómo afecta la falta de nutrientes al organismo?


● ¿Qué necesita el organismo para estar sano?
● ¿Qué importancia tienen los nutrientes en el cuerpo?
● ¿Cómo afecta al cerebro la desnutrición?
● Hacer un breve mapa conceptual sobre las consecuencias del trastorno en el
organismo.

Material bibliográfico propuesto:


https://docs.google.com/document/d/1QchbMY4BRkozxb8ZP3BZC678h
Ep3XJUj_Hc2TENQDo/edit “Falta de nutrientes en los TCA”

Momento de cierre (40-45 minutos): En esta etapa se les pide a los alumnos que utilicen las
hojas A4 para hacer folletos de concientización en cuanto a la comida saludable, hábitos
saludables sobre la alimentación y la importancia de la comida para la vida saludable. Con
esta actividad se busca dar un cierre del tema y también permitir que los alumnos hagan sus
propias creaciones que luego serán colgadas en los pasillos de la institución.
La falta de nutrientes en los TCA

Para que nuestro cuerpo funcione de manera óptima y nos sintamos bien, necesitamos una
serie de sustancias que deben proceder de los alimentos, pues no las podemos producir. Se
dividen en macro y micro nutrientes. Dentro de los macronutrientes encontramos aquellos
que aportan energía (calorías) y “materiales de construcción” para los tejidos corporales: los
hidratos de carbono, las grasas y las proteínas. Se necesitan en grandes cantidades. Los
micronutrientes intervienen en los procesos fisiológicos, pero son necesarios en cantidades
más pequeñas. Son minerales y vitaminas. Los nutrientes cumplen básicamente con tres
funciones en el organismo: aportan energía, reparan y renuevan el organismo y regulan las
reacciones químicas que se producen en las células, además de que proporcionan energía
para el funcionamiento celular.

Las personas que suelen vivir con trastornos de la conducta alimentaria tienen
comportamientos alterados que se relacionan con la inadecuada ingesta de alimentos ya sea
por una restricción o hay negativa de la ingesta acompañado de una distorsión de la imagen
corporal que manifiestan efectos fisiológicos y complicaciones médicas las cuales pueden
prevenirse.

Dado el papel que juegan algunos nutrientes en síntomas habituales en las personas con
diagnóstico de Trastornos de Conducta Alimenticia, es importante señalar cuales son las
principales carencias nutricionales que se pueden encontrar en las personas.

 Deficiencia de riboflavina y otras vitaminas hidrosolubles: presencia de lesiones


húmedas y escoriaciones con fisuras de los ángulos de la boca o presencia de sebo
naso labial.
 Deficiencia de vitamina C: mediante la presencia de inflamación y sangrado de la
encía.
 Deficiencia de vitamina A o retinol: representado por placas delimitadas y superficiales
de color blanco grisáceo en la córnea (manchas de Bitot).
 Deficiencia de vitamina E y K: aparecen puntos redondos y pequeños de color
púrpura o marrón debido al sangrado debajo de la piel.
 Deficiencia de folatos: observando uñas anormalmente delgadas, pueden verse
planas o incluso cóncavas.
 Deficiencia de vitamina B1 o tiamina: relacionada con síntomas de depresión.
 Deficiencia de vitamina D y Calcio: la anorexia nerviosa se asocia con pérdida de
músculo masa ósea e hipocalcemia.
 Alteraciones electrolíticas: el vómito puede causar hipocalemia como consecuencia
de vómitos frecuentes (conductas purgativas).
 Deficiencia de ácidos grasos: Afección que provoca zonas ásperas en la piel y
pequeñas protuberancias similares al acné.

La lista de nutrientes que debemos incorporar, cada uno en una dosis determinada, es larga:
más de 40. Esta cantidad considerable es una de las razones por las que las deficiencias
pueden afectar a buena parte de la población.
Asimismo, estar severamente desnutrido puede causar cambios en el cerebro, muchos de
los cuales vuelven a la normalidad después de que una persona es realimentada, aunque
puede ser difícil saber si ciertas diferencias cerebrales son consecuencia de algún trastorno.
Lo más probable es que algunas características preexistentes del cerebro pongan a una
persona en riesgo de desarrollar esta enfermedad, mientras que otros cambios se
desarrollan en respuesta a los hábitos alimentarios y el entorno de la persona.

Las conductas alimentarias desordenadas afectan negativamente a la absorción adecuada


de la nutrición; así, el cerebro no recibe los nutrientes que necesita para funcionar
correctamente. Esto es especialmente preocupante en los adolescentes, ya que el desarrollo
del cerebro tiene lugar hasta los primeros años de la edad adulta, lo que significa que
podrían interrumpir importantes períodos de crecimiento

Para desarrollar hábitos de alimentación saludable y comportamientos de un estilo de vida


saludable:

● Elige una dieta saludable rica en granos o cereales integrales, frutas y verduras. ●
Limita el consumo de sal, azúcar, alcohol, grasas saturadas y grasas trans. ● Evita las
dietas extremas. Si debes perder peso, habla con el proveedor de atención
médica o con un dietista para crear un plan que satisfaga tus necesidades. ● No uses
suplementos alimenticios, laxantes ni productos herbarios para bajar de peso. ● Haz
suficiente actividad física. Cada semana, haz al menos 150 minutos de actividad
aeróbica, como caminar a paso ligero. Elige actividades que disfrutes para que sea
más probable que las hagas.
● Busca ayuda para los problemas de salud mental, como depresión, ansiedad o
problemas con la autoestima y la imagen corporal.

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