Clasificación de las empresas a
nivel nacional.
Nombre del alumno:
Vilches Mendoza Jassiel Antonio
Expediente:
223220123
Materia:
Fundamentos de administración.
Nombre de maestra:
Celaya Muñoz Diana Sofia.
Plantel:
Unison caborca.
¿Cuál es la clasificación de las empresas?
Los diferentes criterios de clasificación de empresas
pueden resultarnos muy útiles a la hora de llevar a cabo
comparaciones en la actividad y en sus resultados, en la
forma de gestión y, además, nos facilitará crear las normas
reguladoras para cada caso.
La clasificación empresarial más habitual para establecer
una tipología de empresas es: su forma jurídica, su tamaño,
su capital, su sector económico y su actividad.
Clasificación de las empresas según su forma
jurídica
La forma jurídica de una empresa es la identidad que
asume legalmente una compañía teniendo en cuenta la
titularidad y la responsabilidad de sus propietarios.
Esta clasificación de las empresas según sus tipos de
forma jurídica
Persona física: en este caso el empresario individual es el
autónomo que desarrollará una actividad económica por
cuenta propia. Desde el 1 de enero del 2023 cotizará
mensualmente a la Seguridad Social en función de los
ingresos reales. Así lo establece el Real Decreto-ley
13/2022, de 26 de julio. Será el máximo responsable de
cualquier deuda de la compañía respondiendo con su
patrimonio profesional y personal, al igual, que también
será quien obtenga la totalidad de los beneficios
.
Varias personas: es la unión de varias personas que se
unen para desarrollar un negocio conjunto, en el caso de
personas físicas, podrán constituir sociedades civiles o
comunidades de bienes, las cuales, serán las responsables
de las deudas.
Unión Temporal de empresas: similar a la anterior, pero
en el caso de personas jurídicas, que se unen para llevar a
cabo una unidad productiva.
Persona jurídica o sociedad: su objeto es la realización
de una actividad comercial con ánimo de lucro, donde se
unen uno o más individuo para conseguir unos beneficios.
Los tipos de sociedades dependerá de la relación entre los
socios, la responsabilidad, el riesgo y el objeto social de la
misma. Los dos formatos más comunes y, por tanto, los
más conocidos son: la sociedad de responsabilidad
limitada y la sociedad anónima. La principal diferencia a la
hora de constituir una u otra es el capital social inicial, que
para el primer tipo es de 3.000€ mientras que para
constituir una sociedad anónima el capital social inicial
mínimo es de 60.000€.
Tipo de actividad: Algunos sectores empresariales
obligan a una forma jurídica determinada.
Número de fundadores: Para un solo fundador se
recomienda la unipersonal, en caso de más responsables,
cualquier forma jurídica anteriormente comentada.
Inversión inicial: La elección de la forma jurídica depende
de la inversión económica inicial.
Responsabilidad frente a terceros: Los socios deben
elegir el tipo de responsabilidad frente a deudas del
negocio.
Fiscalidad: Tributación en IRPF o en Impuesto sobre
Sociedades según marque la normativa para cada caso.
Por ejemplo, las sociedades anónimas y limitadas tienen
que tributar de forma obligatoria por el Impuesto sobre
sociedades.
Clasificación de las empresas según su tamaño
Grandes empresas: son las que manejan grandes
capitales, suelen tener propias instalaciones, su volúmen
de negocio anual es superior a 50 millones de euros y
tienes más de 250 trabajadores, tienen un sistema de
administración avanzado y préstamos importantes con
entidades financieras nacionales e internacionales.
Medianas empresas: su negocio es igual o inferior a 50
millones de euros con menos de doscientos cincuenta
trabajadores, tienen sus áreas definidas por funciones y sus
procedimientos estarán automatizados.
Pequeñas empresas: tienen un volumen de negocio
igual o inferior a 10 millones de euros y menos de cincuenta
trabajadores, son entidades independientes y rentables, las
cuales, no predominan en el sector de la industria.
Microempresas: con un volumen de negocio inferior a
dos millones de euros y con menos de diez trabajadores,
usan sistemas de fabricación artesanales, el propietario se
encarga de los asuntos administrativos, producción y
ventas.
Como hemos dicho esta es la clasificación según la Unión
Europea, sin embargo, a efectos tributarios, en España, la
cosa cambia bastante ya que tendrán la consideración de
gran empresa todas aquellas cuya facturación anual
superes los 6.010.121,04€.
Esta clasificación de empresas nos informa de las ayuda o
subvenciones a las que podemos acceder, facilita el
conocimiento sobre cómo interactuar con ellas y la
comparación con empresas de la misma tipología.
Clasificación de las empresas según su capital
Público: una empresa pública es aquella donde el estado
tiene la participación total o mayoritaria. Son creadas para
ofrecer bienes y servicios a la población, sobre todo de
primera necesidad.
Sus principales características son
Más del 50% del capital social pertenece al Estado o a
cualquier nivel de descentralización .
Suelen ofrecer servicios básicos y de primera necesidad.
Aparecen en sectores de comunicaciones para ofrecer
información de interés público.
Estas empresas pueden competir o no con empresas
privadas.
Privada: una empresa privada es aquella que el capital
proviene de personas particulares, es decir, de sociedades
mercantiles.
También son una alternativa a las entidades de crédito, ya
que, pueden ofrecer préstamos a todo tipo de clientes,
tanto negocios como particulares.
Existen muchas empresas públicas que finalmente
terminan convirtiéndose en mixtas debido a
Provienen de empresas públicas que se han ido
privatizando poco a poco, como, por ejemplo, Iberia.
Empresas de nueva creación que optan por la colaboración
del sector privado y el público, como, por ejemplo,
empresas de servicios del ayuntamiento.
Consulta aquí también los tipos de administradores de
empresas.
Ahora bien, una empresa privada puede convertirse en
pública, al igual que una pública se puede privatizar.
Un ejemplo de empresa pública privatizada es AENA, la
cual era pública al 100% y se ha privatizado en una parte.
Cuando una empresa privada se convierte en pública se
denomina nacionalización.
Dentro de esta clasificación de empresas
destacamos las siguientes
Sector primario: dedicados a obtener productos de la
naturaleza, es el sector agrario, ganadero, pesquero y
minero. Su fuente principal fuente de ingresos proviene de
la explotación de los recursos naturales.
Sector secundario: dedicados a la transformación de
las materias primas en productos manufacturados, es decir,
sector industrial, energético, construcción, etc.
Sector terciario: aquí se encuentran las actividades
económicas relacionadas con la prestación de servicos,
como transporte, comunicaciones, comercio, turismo, etc.
Industriales
Son las que producen bienes o servicios a partir de su
extracción o producción.
Servicios
Ofrecen servicios gracias al capital humano y a los medios
materiales.
Empresas de transporte, asesoramiento, enseñanza y
sanitaria.
Comerciales
No producen, se encargan de la venta de los bienes y
servicios.
Empresas locales.
Empresas insulares.
Empresas regionales.
Empresas nacionales.
Empresas multinacionales.
Esta última clasificación de las empresas te sirve para saber
en qué grupo colocar tu actividad económica. Si vas a
iniciar y dar de alta tu negocio tendrás que acudir a la
Clasificación Nacional de Actividades Económicas que
agrupa oficialmente, en España, los diferentes tipos de
actividades empresariales.
Si tienes dudas pone en contacto con nosotros o escribe tu
consulta en el apartado comentarios
Bibliografía:
https://www.billin.net/blog/clasificacion-
empresas/