CANTOS MARIANOS
1. Es el hermoso Mes de María,
mes de alegría, nuncio de paz.
Huye el invierno áspero y triste
sus galas viste la bella flor.
Los mansos vientos soplan suaves;
cantan las aves himnos de amor.
Del sol brillante al tibio rayo el
Mes de Mayo vuela fugaz.
2. Mientras recorres la vida,
tú nunca sólo estás:
contigo por el camino
Santa María va.
Ven con nosotros a caminar,
Santa María ven (bis)
Aunque te digan algunos que
nada puede cambiar, lucha
por un mundo nuevo, lucha
por la verdad.
Si por el mundo los hombres
sin conocerse van,
no niegues nunca tu mano
al que contigo está.
Aunque parezcan tus pasos
inútil caminar,
tú vas haciendo camino,
otros lo seguirán.
3. Dios te salve, María.
Llena eres de gracia.
El Señor es contigo. y
bendita Tú eres,
entre todas las mujeres, y
bendito es el fruto
de tu vientre, Jesús.
Santa María, Madre de Dios, ruega
por nosotros, los pecadores, ahora y
en la hora
de nuestra muerte. Amén.
4. A tu amor nos acogemos
María ruega por nos/
Salve, salve, cantaban, María
¿Quién más pura que tú?
¡Sólo Dios!
/y en cielo una voz repetía:
¡Más que Tú sólo Dios, sólo Dios!/.
Con torrentes de luz que te inundan
Los arcángeles besan tus pies,
/la estrellas tú frente circundan y
Hasta dios complacido te ve/.
Pues llamándote pura y sin mancha, De
rodillas los mundos están;
/Y tu Espíritu arroba y ensancha
Tanta fe, amor, tanto afán/
¡Ah!, Bendito el Señor que en la tierra,
Pura y limpia te pudo formar
/como forma el diamante la sierra
Como cuaja las perlas el mar/.
Y al mirarte entre el ser y la nada,
modelando tu cuerpo, exclamó:
/Desde el vientre será inmaculada, si
del suyo nacer debo yo/.
5. Cuántas veces siendo niño te recé,
con mis besos te decía que te amaba,
poco a poco con el tiempo olvidándome de ti, por
caminos que se alejan me perdí,
por caminos que se alejan me perdí.
Hoy he vuelto, Madre, a recordar.
cuántas cosas dije ante tu altar
y al rezarte puedo comprender
que una madre no se cansa de esperar que
una madre no se cansa de esperar.
Al regreso me encendías una luz,
sonriendo desde lejos me esperabas,
en la mesa la comida aún caliente y el mantel, y tu
abrazo en mi alegría de volver,
y tu abrazo en mi alegría de volver.
Aunque el hijo se alejara del hogar, una
madre siempre espera su regreso,
que el regalo más hermoso que a los hijos da el
Señor
es su madre y el milagro de su amor, es
su madre y el milagro de su amor.
6. El trece de mayo, la Virgen María
bajó de los cielos a Cova de Iría
Ave, ave, ave, María(bis)
A tres pastorcitos, la Madre de Dios
descubre el misterio de su corazón
Ave, ave, ave, María(bis)
Haced penitencia, haced oración por los
pecadores, implorad perdón. Ave, ave,
ave, María(bis)
El Santo Rosario, constantes rezad y la
paz del mundo el Señor dará.
Ave, ave, ave, María(bis)
7. Es María la Blanca Paloma (2)
que ha venido de América (3) a
traer la paz.
Y por eso los ecuatorianos (2) la
llamamos Madre (3)
Madre de bondad.
Pastorcillos humildes de Fátima(2) la
vieron muy triste (3)
por tanta maldad.
Les mandaste rezar el rosario (2) por
los pecadores (3)
para hallar la paz.
8. Del cielo ha bajado
la Madre de Dios;
cantemos el Ave
a su Concepción.
Ave, ave, ave, María(bis)
En Lourdes de Francia
su trono fijó
la Reina del Cielo,
la Madre de Dios.
Ave, ave, ave, María(bis)
Son siempre los niños
imán de su amor;
y allí a Bernardita
su gloria mostró.
Ave, ave, ave, María(bis)
9. Oh María, Madre mía,
Oh consuelo del mortal,
amparadme y guiadme
a la patria celestial.
Con el ángel de María sus
grandezas predicad,
transportados de alegría
sus finezas celebrad.
Oh María, Madre mía, Oh
consuelo del mortal,
amparadme y guiadme a
la patria celestial.
10. Madre mía que estás en los cielos
envía consuelo a mi corazón.
Cuando triste llorando te llama tu
mano derrame feliz bendición.
Luna bella de eternos fulgores, manojo
de flores, de aroma inmortal.
Embálsame mi pecho tu ambiente,
y alumbre mi mente tu luz celestial.
11. María, Tú que velas junto a mí
y ves el fuego de mi inquietud María,
Madre, enséñame a vivir con ritmo
alegre de juventud (2)
Ven, Señora a nuestra soledad, ven
a nuestro corazón;
a tantas esperanzas que se han muerto, a
nuestro caminar sin ilusión.
Ven y danos la alegría,
que nace de la fe y el amor,
el gozo de las almas que confían, en
medio del esfuerzo y del dolor.
Ven y danos tu esperanza,
para sonreír en la aflicción.
La mano que del suelo nos levante la
gracia de la paz en el perdón.
Ven y danos confianza,
sonrisa que en tu pena floreció; sabiendo que
en la duda y las tormentas, jamás nos
abandona nuestro Dios.
12. Venid y vamos todos
con flores a porfía,
con flores a María
que Madre nuestra es.
De nuevo aquí nos tienes
purísima doncella,
más que la luna bella,
postrados a tus pies.
Venid y vamos todos...
Venimos a ofrecerte las
flores de este suelo
con cuánto amor y anhelo,
Señora, Tú lo ves.
Venid y vamos todos...
También te presentamos,
como más gratos dones,
rendidos corazones
que Tú ya los posees.
Venid y vamos todos...
13. Madre, óyeme, mi plegaria es un grito en
la noche.
Madre, mírame, en la noche de mi juventud.
Madre, sálvame, mil peligros acechan mi vida.
Madre, lléname, de esperanza, de amor y de fe.
Madre, guíame, en la sombra no encuentro el
camino.
Madre, llévame, que a tu lado feliz cantaré.
Madre, una flor, una flor con espinas es bella.
Madre, un amor, un amor que ha empezado a
nacer.
Madre, sonreír, sonreír aunque llore en el alma.
Madre, construir, caminar aunque vuelva a caer.
Madre, sólo soy, el anhelo y la carne que lucha.
Madre, tuyo soy, en tus manos me vengo a poner.
14. Virgen morenita, Virgen
milagrosa,2 Virgen morenita, te elevo mi
cantar.
Son todos en el valle devotos de tus ruegos, son
todos peregrinos, Señora del lugar. (bis)
Virgen morenita, india fue tu cuna,
porque india tú naciste por la gracia de Dios. Así
somos esclavos de tu bondad divina,
así somos esclavos de tu infinito amor. (bis)
Así será, Virgen mía,
mereces el respeto y la veneración.
Por eso yo te canto, te elevo mis plegarias y
pido que escuches mis ruegos, por favor. (bis)
Virgen morenita, Santa Inmaculada,
oh Virgen de este valle, Señora del lugar, tú
gozas del respeto y cariño de tus hijos
y así los peregrinos te rezan en tu altar. (bis)
Virgen morenita, india fue tu cuna,
porque india tú naciste por la gracia de Dios. Así
somos esclavos de tu bondad divina,
así somos esclavos de tu infinito amor. (bis)
Himno del Mes de Mayo de Juan León Mera
(Todos rezan o cantan la estrofa, y uno recita el verso.
También pueden hacerse dos coros, que van alternando)
Cantemos, María. Conjunto admirable
tu nombre divino, de toda belleza,
tu excelso destino, de santa pureza, de
tu gloria inmortal. amor inefable.
ni en cuerpo ni en alma
Antes de creada tuviste rival.
la luz esplendente, de
Dios en Su Mente ya Cantemos, María…
fuiste formada
a ser para el hombre ¡Portento inaudito!:
del Bien manantial.3 Tu seno concibe su
Fruto Bendito,
Cantemos, María… quedando cual siempre tu
ser virginal5.
En humano seno
concebida fuiste; mas, Cantemos, María…
libre te viste del
mortal veneno que Por salvar a tu Hijo de
inyectó en Evala un tirano huíste;6
Sierpe infernal.4 después le perdiste;
mas, con regocijo,
Cantemos, María… le hallaste enseñando
Su ley celestial.7
Cantemos, María… Cantemos, María…
De Cristo las huellas Elévase al cielo
constante seguías, e Jesús. Extasiada le
imitar solías ves: tu mirada,
a tu Hijo y Maestro, que sigue su vuelo,
brindando a tu hijos contempla en la altura
modelo ejemplar. Su gloria triunfal.
Cantemos, María… Cantemos, María…
Jesús a Su lado Llegado tu día
te vio hasta la muerte, postrero, dejaste la
partiendo la suerte cruel tierra y volaste
que el pecado también ¡oh María! a
le trajo del frágil e la alta y gloriosa
ingrato mortal.8 Mansión eternal.10
Cantemos, María… Cantemos, María…
Después que la losa Allí estás circuída
cubrió Sus despojos, de luz y ventura;
mostróse a tus ojos con mas no tu ternura
frente radiosa, vencida del hombre se olvida,
dejando que gime en el mundo
la muerte fatal.9 so el peso del mal.
Cantemos, María…
2 https://www.youtube.com/watch?v=oLSQYxJ68jI
3 “Dios eligió desde el principio y antes de los tiempos, una Madre, para que su
Unigénito Hijo, hecho de carne de ella, naciese, en la dichosa plenitud de los
tiempos”. (Bula Ineffabilis Deus, 8.12.1854).
4 “La Virgen María fue preservada de toda mancha de la culpa original en el
primer instante de su concepción por singular gracia y privilegio de Dios
omnipotente, en atención a los méritos de Cristo Jesús Salvador "
(idem).
5 El Verbo Eterno engendrado en el seno del Padre Eterno (“Dios de Dios, Luz
de Luz, engendrado no creado, de la misma naturaleza del Padre”), se hizo
hombre, tomando un cuerpo y un alma humanos en el seno virginal de María,
por obra del Espíritu Santo: “El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros”. El
Misterio de la Encarnación celebramos el 25 de marzo, Día de la Anunciación.
El 25 de diciembre, 9 meses después, celebramos Su Nacimiento en Belén.
6 La huida a Egipto: Mt 2, 13-15
7 La Pérdida y encuentro de Jesús en el templo (Lc 2,41-50)
8 “Junto a la cruz de Jesús estaba su Madre” (Jn 19,25)
9 Cristo Jesús es nuestra esperanza (1 Tim 1,1). Vino a mostrarnos el Amor del
Padre, venciendo a la muerte. Venció a las tinieblas, a la mentira, al odio, al
miedo. Triunfó del pecado. Y ahora, resucitado, “está en presencia de Dios, a
favor nuestro” (Heb 9,24). De la fe firme en él brota una esperanza
inquebrantable, incapaz de desengañarnos (Rom 5,4). Con la victoria de
nuestro hermano Jesús, se nos abre “un consuelo eterno y una esperanza feliz”
(2 Tes 2,16-17).
10 Dogma de la Asunción: ”Declaramos y definimos ser dogma divinamente
revelado, que la Inmaculada Madre de Dios, siempre Virgen María, terminado
el curso de su vida terrena fue asunta en cuerpo y alma a la gloria celestial”
(Pío XII. Bula Munificentissimus Deus: 1.11.1950)