Novena a Nuestra Señora de las Mercedes
Novena a Nuestra Señora de las Mercedes
DE LAS MERCEDES
La devoción a Nuestra Señora de las Mercedes, surge en el siglo XIII, cuado España estaba
en poder de los árabes. Los moros saqueaban las costas y se llevaban a los cristianos como
esclavos a África y muchos perdían la fe al pensar que Dios los había abandonado.
Pedro Nolasco, al ver esta situación, vendió hasta su patrimonio para liberar a los cautivos.
Formó un grupo para organizar expediciones y negociar redenciones. Cuando se les acabó el
dinero, pidieron limosnas. Sin embargo, las ayudas también se terminaron.
Entonces, Nolasco pide a Dios por los cautivos y su liberación. En respuesta, la Virgen se le
aparece y le solicita que funde una congregación para redimir
cautivos.
Ante este deseo, se funda la orden de los Mercedarios el 10 de
agosto de 1218 en Barcelona, España, y San Pedro Nolasco fue
nombrado, por el Papa Gregorio IX, como Superior General.
Los integrantes, aparte de los votos de pobreza, castidad y
obediencia, hacían un cuarto voto en el que se comprometían a
dedicar su vida a liberar esclavos y que se quedarían en lugar de
un cautivo que estuviese en peligro de perder la fe, cuando el
dinero no alcanzara para lograr su liberación.
Más adelante, en el año 1696, el Papa Inocencio XII fijó el 24 de
septiembre como la Fiesta de la Virgen de la Merced en toda la
Iglesia.
La palabra merced durante la Edad Media tenía un sentido de: misericordia, gracia, limosna,
caridad. En la actualidad, este concepto está más relacionado con: don, gracia, regalo,
aquello que gratuitamente se ofrece por amor para que hombres y mujeres puedan ser libres
y tener una vida plena.
Cuando los frailes mercedarios llegan a América, traen la devoción a la Virgen de la Merced.
En Argentina, en la mañana del 24 de septiembre de 1812, día del combate en la batalla de
Tucumán, el general Manuel Belgrano estuvo orando largo rato ante el altar de la Virgen. El
ejército argentino obtuvo la victoria. En el parte, que transmitió al Gobierno, Belgrano dice
textualmente: 'La patria puede gloriarse de la completa victoria que han tenido sus armas el
día 24 del corriente, día de Nuestra Señora de las Mercedes bajo cuya protección nos
pusimos ".
Primer día:
MARÍA SE HACE MADRE DE TODOS POR LA MERCED DE
NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
Y SU SÍ BONDADOSO
1. Introducción:
• Madre, fortalece nuestra fe, para que podamos permanecer de pie en medio de
las contradicciones.
• Madre, sé nuestro sostén en la esperanza para asumir los propios sufrimientos.
• Madre, acrecienta nuestra Caridad para estar junto a los que sufren.
2. Reflexionemos:
3. Oración Comunitaria:
A cada Intención respondemos: “Para lograr tener el corazón de Cristo Redentor”
- María, que fieles a tu Hijo Jesús, seamos verdaderamente instrumentos de liberación
para con los que se encuentran esclavos de tantas cautividades. Oremos
- María, que vivamos con alegría la vocación redentora, para ser signos de esperanza
de los oprimidos y de situaciones de injusticia. Oremos
- María, que, por la fuerza de la verdadera liberación de Cristo, seamos compasivos y
misericordiosos con los que sufren, o no son amados, ni escuchados, ni reconocidos.
Oremos
4. ORACIÓN FINAL:
Segundo día:
MARÍA ES MERCED QUE COBIJA Y DIGNIFICA
1. Introducción:
En este segundo día de la novena con que nos prepararnos para celebrar
la fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes, vamos a contemplar a María,
portadora del don más grande hecho por Dios a la humanidad: la Encarnación de su Hijo.
Ella se hace Merced, es decir regalo, para que Jesús, participando de la naturaleza humana,
se encarne y comprenda verdaderamente nuestra fragilidad, se identifique con nuestras
debilidades, conviva con las situaciones propias de nuestra humanidad herida: nos dignifique
y redima.
En profundo silencio contemplemos la cruz y acompañemos a María a quien le decimos:
• Porque tu amor, hizo posible la encarnación del Hijo de Dios para la redención.
“Salve, Nuestra Señora de las Mercedes”
• Porque tu aceptación hizo posible que Jesús, nos alcanzara la verdadera
libertad y dignidad.
“Salve, Nuestra Señora de las Mercedes”
• Porque tu misericordia hizo posible la liberación de todos los hombres y
mujeres.
2. Lectura de la Palabra: Lc. 1,31-32
3. Reflexionemos:
4. Oración Comunitaria:
5. ORACIÓN FINAL:
Madre, don de Dios para la humanidad herida por el pecado. Tú que engendraste al
Redentor, ayúdanos a renovar nuestra confianza en tu Hijo Jesús, que se compadece ante el
Padre Dios de nuestros males y presenta nuestras necesidades humanas.
Que, como tú, Madre, podamos reconocer a Jesús, el Hijo de Dios, el Salvador que se hizo
uno de nosotros para redimirnos. Amén
Tercer día:
MARÍA ES MERCED QUE SE HACE VISITA Y PRESENCIA
1. Introducción:
En este tercer día de la novena con que nos prepararnos para celebrar la fiesta de Nuestra
Señora de las Mercedes, vamos a contemplar la generosa actitud de María que se hace
Merced, es decir, sale y visita a su prima Isabel que también esperaba un hijo y necesita
ayuda.
La gracia de la Encarnación que recibe María, la lleva a levantarse, ponerse en movimiento,
a partir, a visitar, a ayudar en la casa de Isabel, gesto de gratuidad que es anuncio de la
salvación que el Hijo vino a traer.
En profundo silencio contemplemos la cruz y acompañemos a María que, movida por la
Caridad, sale presurosa a prestarle ayuda a su prima Isabel, actitud propia del redimido:
• Contigo vamos Virgen pura y en tu poder confiados, porque es de tu mano que
ayudamos al necesitado.
• Dulce Madre no te alejes. No apartes tu vista de nosotros. Ven y nunca nos dejes
solos. Visítanos como a Isabel.
• Y, ya que nos proteges tanto, como verdadera Madre, haz que nos bendiga El
Padre, El Hijo, y el Espíritu Santo, amén.
39 En aquellos días, María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de Judá.
40 Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel.
41 Apenas esta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su seno, e Isabel, llena del
Espíritu Santo,
42 exclamó: «¡Tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre!
43 ¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a visitarme?
3. Reflexionemos
4. Oración Comunitaria:
A cada Intención respondemos: “Para ser presencia de redención”
- Madre, que tengamos una actitud disponible para salir, visitar y estar junto a los que
están solos, tristes, enfermos y abandonados. Oremos.
- Madre, que nuestra ayuda a los que necesitan sea desinteresada, sin mirar nuestras
propias comodidades o dificultades. Oremos.
- Madre, que nuestra “visita” sea el medio que anuncie y ayude a muchos hermanos y
hermanas a reconocer al Redentor. Oremos
5. ORACIÓN FINAL:
Madre de la Mercedes, que llevas en tu seno al Hijo de Dios, portador de liberación y
redención, enséñanos a salir ante las necesidades de los demás, como Vos, sin demora.
Danos un corazón generoso para ayudar, cuidar, acompañar y estar presente donde la vida,
el amor y la libertad están amenazadas. Amén.
Cuarto día:
MARÍA ES MERCED QUE ENGENDRA Y ENTREGA VIDA
1. Introducción:
Nos encontramos en el cuarto día de la novena con que nos prepararnos para
celebrar la fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes. Vamos a orar sobre el
acontecimiento que convierte a María, en la Madre que engendra y da a luz a Jesús para la
redención.
María es Madre nuestra por haber entregado al mundo la Vida misma, a Jesús, quien con su
nacimiento da sentido y renueva todas las cosas, según la promesa de Salvación.
En profundo silencio contemplemos la cruz y acompañemos a María, que se convierte en la
Madre universal de todos los hombres, porque es portadora de la Vida Nueva para todos los
que esperan la redención:
• Ave María purísima, sin pecado concebido que, por obra y gracia del Espíritu
Santo, nació de tu vientre el Hijo de Dios, permítenos que, por tu santa intercesión,
lleguemos al Padre.
• Ahora que ves en tus brazos a ese bello Niño, no te olvides de tus siervos y,
aunque sea por compasión, ayúdanos a preparar un cálido pesebre para que los
necesitados, puedan pasar las noches de frío.
• Santa Madre, prepara nuestros corazones para que sean albergue de tu Divino
Hijo.
3. Reflexionemos
4. Oración Comunitaria:
A cada Intención respondemos: “Para hacer que Jesús nazca en cada corazón”
- María, renueva y fortalece nuestra fe, para poder engendrar a Jesús en el corazón de
los hermanos. Oremos.
- María, danos la gracia de acoger a cada hermano necesitado, con el mismo amor con
que tú nos entregas a Jesús. Oremos.
- María, anima nuestros esfuerzos y sostiene nuestra esperanza de vida Nueva que nos
trae Jesús. Oremos
5. ORACIÓN FINAL:
María, Madre de la Mercedes, que aceptaste con corazón libre, ser la Madre de Jesús, el
Salvador, en tu seno fecundo de Virgen, enséñanos a dejar nuestros egoísmos,
desconfianzas y prejuicios para abrirnos a Dios que nos llama a propagar a Jesús, darlo a
conocer y ser sus testigos creíbles de la Buena Noticia de la Salvación. Amén.
Quinto día:
MARÍA ES MERCED FIEL Y SE COMPROMETE
1. Introducción:
Nos encontramos en el quinto día de la novena con que nos prepararnos para celebrar la
fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes. Hoy vamos a contemplar el momento en que
María y José como fieles creyentes, cumplen con su deber religioso y presentan a Jesús en
el templo de Jerusalén.
Según la costumbre todo varón Primogénito debía ser consagrado al Señor, ser entregado
de manera especial a Dios para lo cual había que presentar una ofrenda como rescate,
mediante un sacrificio según lo prescribía la antigua ley.
En profundo silencio contemplemos la cruz y acompañemos a María, a José y a Simeón en
sus palabras:
“Ahora, Señor, puedes, según tu palabra, dejar que tu siervo se vaya en paz; porque han
visto mis ojos tu salvación, la que has preparado a la vista de todos los pueblos, Luz para
iluminar a las gentes y Gloria de tu pueblo Israel.”
Señora y Madre Nuestra, muéstranos como a Simeón, la Salvación que
preparó Nuestro Padre.
Señora y Madre Nuestra, muéstranos la Luz y la Gloria preparadas para el
pueblo de Dios y haz que pertenezcamos a él.
Señora y Madre Nuestra, acompáñanos para que nuestra partida al Seno
Celestial sea en paz y de tu mano.
22 Cuando llegó el día fijado por la Ley de Moisés para la purificación, llevaron al niño a
Jerusalén para presentarlo al Señor,
23 como está escrito en la Ley: "Todo varón primogénito será consagrado al Señor".
24 También debían ofrecer un sacrificio un par de tórtolas o de pichones de paloma, como
ordena la Ley del Señor.
3. Reflexionemos
4. Oración Comunitaria:
5. ORACIÓN FINAL:
María, Madre de las Mercedes, que junto a José presentaste a tu Hijo Jesús en el templo
para ser ofrecido y consagrado a Dios. Enséñanos a tener un corazón fiel y agradecido por el
don de la vida y la gracia de la salvación. Que el gesto humilde de la presentación nos ayude
a renovar nuestro compromiso bautismal de vivir la alegría de la redención.
Amén
Sexto día:
MARÍA ES MERCED QUE ACEPTA LA VOLUNTAD DE DIOS
1. Introducción:
Nos encontramos en el sexto día de la novena con que nos prepararnos para celebrar la
fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes. En este día acompañamos a María y a José que,
como padres, viven la situación de perder a Jesús, su Hijo, en el templo.
Con este episodio en que aparece María como Madre angustiada, Jesús la introduce en el
misterio del sufrimiento y del dolor que la prepara para el misterio de la Redención.
Jesús, en este acontecimiento, da otra dimensión a la presencia de María, y la introduce a
la misión salvífica a la que está asociada.
María guarda todo en su corazón y en el silencio de la contemplación, ahonda lo que va
sucediendo y comprende progresivamente, su llamado a ponerse al servicio de la misión
redentora de su Hijo
Jesús revela en esta ocasión su plena conciencia de la misión que el Padre Dios le
tiene preparado para la redención del mundo.
Ante la pregunta de su Madre: "Hijo, ¿por qué nos has hecho esto? Mira, tu padre y
yo, angustiados, te andábamos buscando". Jesús con otra pregunta les abre otros aspectos
sobre su futuro: ¿No sabías que debía ocuparme de las cosas de mi Padre?
En definitiva, Jesús hace referencia a la entrega total al proyecto de Dios y reafirma
que sólo cumple su misión: hacer la Voluntad del Padre.
4. Oración Comunitaria:
5. ORACIÓN FINAL:
Séptimo día:
MARÍA ES MERCED QUE SE HACE COMPASIÓN Y
PROVIDENCIA
1. Introducción:
Nos encontramos en el séptimo día de la novena con que nos preparamos
para celebrar la fiesta de Nuestra Señora de las Mercedes. En este séptimo
día vamos a contemplar la presencia de María y Jesús en las bodas de Caná.
Este hecho manifiesta la primera intervención de María en la vida pública de
Jesús con un gesto muy particular, ayudar a solucionar una dificultad para que no falte
alegría a la fiesta.
Pone en relieve su expresa colaboración en la misión redentora de su Hijo.
María es la gran intercesora que tenemos ante Dios. Ella se hace Merced, don, mediadora y
atiende todas nuestras peticiones.
Contemplamos la cruz y la debilidad de Jesús por complacer a su amada Madre.
María haz que Jesús llene nuestros cántaros cuando nos falte el vino de la
libertad y la esperanza
María, ayúdanos a creer que Jesús hace milagros cada día, aún en los
corazones más duros.
María enséñanos a estar atentos para ayudar a quienes están en situaciones
de necesidad, opresión, debilidad y sufrimiento.
1 En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara
un censo en todo el mundo.
2 Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria.
3 Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.
4 José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió
a Belén de Judea, la ciudad de David,
5 para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.
6 Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre;
7 y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre,
porque no había lugar para ellos en el albergue.
8 En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la
noche.
9 De pronto, se les apareció el Angel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz.
Ellos sintieron un gran temor,
10 pero el Angel les dijo: «No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría
para todo el pueblo:
11 Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.
3. Reflexionemos
No era el tiempo en que Jesús debía intervenir realizando un milagro para solucionar
la dificultad de falta de vino en las bodas, sin embargo, el pedido de María, su Madre, lo
llevar a responder.
El milagro obrado por Jesús manifestó su gloria y su poder, revelación que lleva y
provoca en los discípulos una dimensión más profunda de fe.
El consejo de María, “Haced lo que Él os diga”, invita a los discípulos a tener confianza
y abandonarse en la fe.
4. Oración Comunitaria:
A cada Intención respondemos: “Para hacer todo lo que Él nos diga”
- María, fortalece, nuestra fe para confiar plenamente que Jesús está siempre dispuesto
a escuchar y resolver las dificultades cuando se lo pedimos. Oremos
- María, enséñanos a obedecer con docilidad, como los sirvientes de Caná, para dejar
que Jesús cumpla la Voluntad del Padre. Oremos
- María, aumenta nuestra confianza en la presencia transformadora de Jesús y en la
fuerza redentora y purificadora de la Salvación. Oremos
5. ORACIÓN FINAL.
María, Madre de la Mercedes, te damos gracias por tu mediación ante tu Hijo Jesús cuando
descubres nuestras necesidades. Gracias por tu presencia, tu compasión y tu providencia
que es signo de redención y que hace siempre presente a Jesús, El único capaz de dar vida
nueva. Amén
Octavo día:
MARÍA ES MERCED QUE SE HACE CONSUELO Y COMPAÑÍA
1. Introducción:
34 Simeón, después de bendecirlos, dijo a María, la madre: «Este niño será causa de caída y
de elevación para muchos en Israel; será signo de contradicción,
35 y a ti misma una espada te atravesará el corazón. Así se manifestarán claramente los
pensamientos íntimos de muchos».
3. Reflexionemos
María había recibido el anuncio de que su Hijo iba a ser signo de contradicción para
muchos. El camino de la cruz conduce a la redención.
En todo momento María está junto a su Hijo para ofrecer consuelo y compañía; una
mirada de amor y de comprensión que lo alienta para seguir la misión.
En ese encuentro los corazones de Jesús redentor y de María, la Madre asociada a la
obra salvadora, dialogan en el más profundo de los silencios con el único lenguaje de amor y
de dolor.
4. Oración Comunitaria:
5. ORACIÓN FINAL:
María, Madre de la Mercedes, que seguiste de cerca a tu Hijo Jesús en el camino al calvario,
aceptando con fortaleza el cumplimiento de la Voluntad de Dios, la pasión y muerte de tu
Hijo, camina junto a nosotros y acompáñanos por tu misión corredentora, como lo hiciste con
Jesús. Amén
Noveno día:
MARÍA: MERCED QUE TRANSFORMA Y LIBERA
1. Introducción:
36 Había también allí una profetisa llamada Ana, hija de Fanuel, de la familia de Aser, mujer
ya entrada en años, que, casa en su juventud, había vivido siete años con su marido.
37 Desde entonces había permanecido viuda, y tenía ochenta y cuatro años. No se apartaba
del Templo, sirviendo a Dios noche y día con ayunos y oraciones.
38 Se presentó en ese mismo momento y se puso a dar gracias a Dios. Y hablaba acerca del
niño a todos los que esperaban la redención de Jerusalén.
3. Reflexionemos
4. Oración Comunitaria:
- María, despierta nuestra fe para estar junto a los que no creen, los que se alejaron, los
que viven en la ignorancia o indiferencia, al margen de la vida cristiana y necesitan un gesto
de diálogos, de respeto.
- María, ábrenos a los excluidos socialmente. Que sepamos descubrir sus necesidades
y nos acerquemos y ofrezcamos una acción concreta.
- María, llévanos hacia los que viven culturas opresoras y se los excluye de la
posibilidad de desarrollarse, para que podamos ofrecer un ambiente en el que se respete y
promueva en libertad, las diferencias culturales.
5. ORACION FINAL:
María, Madre de la Merced renueva en cada uno de nosotros, la presencia viva tu Hijo y su
espíritu Redentor para que, animadas por la Caridad, vivamos con gozo la redención y
seamos presencia de Misericordia para los oprimidos a causa de las nuevas cautividades de
hoy.