Alabanzas
Salgan, salgan, salgan
  Animas de penas,
Que el Rosario Santo
 Rompe sus cadenas.
 Miren, consideren,
Que también vendrán
y estas tristes penas
   Las padecerán.
   No olvides allá
 En que con anhelo
  Alivian sus penas
 Amantes y tiernas
Con un Padrenuestro,
  Y un Avemaría
 Tenemos descanso
  En tanta agonía.
  Hijo muy amado
Pariente y compadre
 Padrecito y madre
¿Nos han olvidado?
 Oigan nuestra voz
Que estamos pidiendo
 Por amor de Dios
 Nos estén oyendo.
 Con triste lamento
 Nos están pidiendo
 Alivio en las penas
Que están padeciendo.
Nos piden, hermanos,
 En llamas hundidos
 Que los socorramos
 Por verse afligidos.
 Pedid pues, a dios
Que nos lleve al cielo.
 Y que todas juntas
 Cantemos al Verbo.
 Oigan nuestro llanto
  Y nuestra agonía;
  El Rosario Santo
   Recen a María.
  Al profundo seno
Hoy con gran contento
 Suben los confrades
De María en su reino.
  Gocen de la vista
 Del Dios verdadero;
  Sus misericordias
  Aquí cantaremos.
 Tenemos descanso
  El día de finados
  Y así todo el año
  Somos olvidados
Salgan, salgan, salgan
  Animas de nenas,
que el Rosario Santo
 rompe sus cadenas.