Interpretación Jurídica
Interpretación Jurídica
del
DERECHO
 Capitulo 6
Ábaco
Argentina
2019
              Este material se
              utlizacon fines
              exclusivamente
              didáctico.
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              ·.. ·.¡1 .. ·.
                    ..                                     LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA
                 .l                     pre existen normas para todos los casos de la vida; no pocas veces
                                        aquellas resultan claras; menos aún, los principios admiten una
                                        aplicación automática y, en fin, tampoco la realidad es a menudo
                                        sencilla de comprender, tal y como fue anticipado con fina exac-
                                        titud por Aristóteles hace ya casi 2500 años. En este contexto, el
                                        afán de una mera aplicación parece un noble sueño que bit·¡, puede
             ·:·:·:;;i·::__..
                                                                                               ··:~~'
                                                                                                /
  conducir a una pesadilla de incoherencias lógicás e injusticias ma-                                          la razón práctica y, sin duda; con la recién menCionada tradición de
  teriales. De ahí que parece ihevitable la interpretación; tanto de                                           la Hermenéutica filosófica, la que ha sabido acertadamente carac-
  los textos normativos cuanto de los textos de la realidad de la vida,                                        terizar el fenómeno ínterpretativo como un acto de "comprensión"
 .ya que, como ha sido puesto de relieve con particular agudeza por                                           ·.que, en su carácter de tal, engloba tanto la interpretación como la
  la Hermenéutica filosófi,ca, dicha realidad es también un ~~-texto" y,                                        aplicación.
. en tanto que tal, susceptible de lectura por parte del intérprete 1 • ·                                             Estas últimas corrientes, eri efecto, no solamente asumen la
       Supuesta entonces la inevitabilidad de la interpretación, con-                                           insoslayabilidad de la interpretación, sino su indudable extensión
  viene precisar su alcance. Conio explica WROBLEWSRI, "una tenden- ··                                          puesto que, ·además de abarcar las normas interpretadas, se. pro-
                                                                                                      1
  cia presenta la interpretación como el descubrimiento de signíficado                                          yecta sobre la realidad exterior al obrar humano. En este horizon-
 inherente a la regla legal interpretada y considera Ja actividad in~
  terpretativa como la reconstrucción de este signíficado"2 • Esta tesís,
                                                                                                      !         te, la interpretación ha dejado de pertenecer, como en la antigua
                                                                                                                Roina (en la Roma, si c_abe la expresión, "prejurídica") a:l ámbito
  a la que el autor denomina ''interpretación .sensu stricto" es, como·                               1         del "interpres", esto es, del adivino que juzgaba de 10 venidero por
                                                                                                                las entrañas de las víctimas, sino que concierne a la comprensión
  se verá más abajo, la defendida por Savigny y, como ya puede fá-
 cilmente ser intuido, correspo;nde al pensamiento positivista. Por el                                          de un.objeto cultural dentro del cual se halla esa porción conocida
                                                                                                                        .   I .
 contrario, el profesor polaco afirm·a que "la otra tenc;lencia presenta                                        como derecho, y este, en tanto que producto histórico-institucional,
 la interpretación como la atribución de un signíficado (determinada                                            requiere· ser racionalmente comprendido a. fin de servir a su ob-
 por varios factores) a la regla legal, y considera la interpretación                               .f          jetivo de favorecer la paz social, lo cual no es ajeno a la idea de
 como una actividad creadora similar o análoga a la del legislador"ª.
       Si:i:i ·que quepa concordar en un todo con la caracterización
                                                                                                      r         interpretar y de aplicar recién expuestas sino que, antes bien, la
                                                                                                          ~
  del derecho, Debate, Madrid, 1988, esp., p. Í42; RODRÍGUEZ MOLINERO; Ma:rcelino,                                adecuadamente, esto es, de acuerdo con las pretensiones que él
  "Hermenéutica y derecho. Orientaciones preliminares para un adecuado enfoque                                    mismo mantiene, debe ser comprendido en cada momento y en cada
  deÍ tema", en AA.VV., Filosofía Y· Derecho. Homenaje al Prof. José Corts Grau,                                 situación concreta de una manera nueva y distinta. CÜmprender
  Valencia, 1977; esp. p. 12; o VIOLA, F., y ZACCARIA, G., Diritto e interpretazione.
  Lineamenti di teoria ermeneutica del diritto, Laterza, Bari, 1999, esp. p. 254 (existe
                                                                                                                  es siempre también aplicar" 4 •
                                                                                                                       Dada la estructura y alcance de esta obra, no se profundizará
  versión casteliana de G. Robles Morchón, bajo el título Derecho e interpretación,
  Dykinson, Mac4id, 2007).
        2
                                                             ·
           WROBLEWSKI,. Jerzy, Constitución y teoría general de la interpretación jurí-
  dica, Civitas, Madrid, 19.84 (del inglés por Arantxa Azurza), p. 18.
                                                                                                      ¡   1
                                                                                                                  en el trascendental aporte que realiza a esta materia la pers-
        3                                                                                                           4   GADALvIER, Hans Georg, ob. cit. en nota 1, ps. 378, 379 y 380.
           Ibíd., respectivamente, ps. 22 y 18.
                                                                                           ··~\
 pectiva hermenéutica recién planteada brevemente 5 y que, como                                          real es caracterizar el horizonte de cuestiones en el campo elegi-
 resulta innecesario abuµdar, al igual que _las otras. dos grandes                                        do". Por el contrario, "cuando el énfasis recae en las respuestas,
 maneras de asumir el fenómeno interpretativo (la positivista y la                                        algunos_puntos de vista adoptados como respuestas quedan explí-
 iusnaturalista) no son riuevas, sino que se reiteran .a fo largo de lá:                                  citamente excluidos de toda discusión. Nci son cuestionados. Son
 historia. Así, en los puntos siguientes se procurará mostrar esta                              il        pensados como atemporales, coino absolutos. Consecuentemente,
 pervivencia~respecto de estas dos corrientes de pensamiento desde                                        ellos dominan todas las respuestas ulteriores. Estas últimas tienen
 uria triple perspectiva: en primer término, Una mirada histórica; de                                    .que demostrar ql¡le, de alguna manera aceptable, son compatibles
 seguido, -unacorisíderación sistemática más detallada de las gran-                                       cori las intangibles respuestas básicas". Y concluye el autor: "el pri-
 des maneras de asumir el fenómeno interpretativo y, por último, -                                        mer modelo es un asunto de investigación: se construye un campo
 una comprobación de tales aportes a partir de una referencia a la
 práctica -especial, peru no exclusivamente- de la'. Corte Suprema
                                                                                                l         de investigación en el que las opiniones (proposiciones) son puestas
                                                                                                          en duda y examinadas una y otra vez. Como la palabra griega
 de Justicia de la Nación.      -                                                                        para designar esto es zetein, este tipo de empresa intelectual puede
                                                                                                         ser llamada 'cetétíca'., El segundo modelo es una cuestión de fijar
                                                                                                         ciertas opiniones: se· construye un firme campo de opinión, cuya
      § 30. Una breve ojeada liistÓrica al tema.de la.interpre- -                                        validez es iµ:tangible y con el cual se prueba la validez de nuevas
 tación: la tensión entre "cetéiica'' (o "finalisrho") y "dogmá-                                         opiniones._. 'Como 'formar una opinión' se dice en griego dokein y
 tica" (o "formalismo"). - Siguiendo a Collingwood, para quien                                           'opinión' es dogma, hablamos aquí de 'dogmática"'ª.
 cada campo de conoCimiento -cada ciencia- se estructura como un                                               Como resulta claro, lo que acaba de denominarse "cetética"
 conjunto de preguntas y respuestas, VIEHWEG ha efectuado una                                            no es sino lo que LARENZ, a partir de las autoridades que cita (cfr.
 didáctica -caracterización del asunto que se tratará en este aparta-                            ¡       esp. cap. V, § 27, a) conoce ccimo "pensamiento problemático" lo
 do. A su juicio, "cuando el énfasis reside en las preguntas, hasta -                            r       cual reenvía a lo que aquí se llamó el sistema "abierto" propio de
 los puntos -de vista re¿tores que son adoptados -eorríO respuestas son                                  la_ tradición iusnaturalista, en tanto qlfe lo que se ha identificado
-siempre cuestionados, Son sugerencias vulnerables, ya que solo· son                                     más arriba como "dogmática" alude a lo que dicho autor conoce
                                                                                                         como "construcción sistemática" y que, en la terminología de esta
 intencionadas tentativamente. Permanecen _siendo preliminares e                               -l _-     obra, remite al sistema cerrado del· positivismo jurídico. Dicho
 inciertas. Su formulación tiene que facilitar la discusión, el desafío
 y hasta la refutación. No son· pensadas como definitivas y su tarea                            _J-- -
                                                                                                         de otro modo: uri operador jurídico que parte del problema que le
                                                                                                         plantea una situación vital no necesariamente tiene un resultado
                                                                                                i
                                                                                                 1       asegurado, sino que éste debe discernirse al hilo de las notas que
       5
         Me he ocupado de este a~unto -s~b:r:e el qu~ preparo un trabajo de conjunto-            1       aquella presenta; por el contrario, si su mirada se posa en primer
 en Precomprensión y jurispru,'denGia, Rev. "Persona y-Derecho", hº 4i, "Derecho,                1       lugar en el sistema, este ya le anticipa una determinada solución
 hist-0ricidad, lenguaje. Estudios en honor de Arthm:_ Kaufmann'', Pamplona, 2002,
 ps. 391 a.416; La Hermendutica filosófica y el dilema de las decisiones "objetiva-            - 1       que, en principio, no cabe sino aplicar al problema bajo examen.
                                                                                                f'
 mente correctas", "Anuario-de Filosofía Jurídica y Social'', Abeledo-Perrot, Buenos                          _.Con otros términos, este tema fue planteado por Hermann
 Aires,.nº 21, 2002; ps. 143 a 160; La teoría de la interpretación judicial en Cossio y                  ÉANTAROWICZ en su mencionado artículo de 1914 que RADBRUCH, al
 Betti: coincidencias y actualidad de dos perspectivas contemporáneas, LL, t: 2005-A,' -        _¡       insertarlo en su ya citada Introducción a la filosofía del derecho
 ps. 1148 a 1168 (reproducido en "Revista Chilena de Derecho",. vol. 32, nº 1, 2Ó05,                     convirtió, para solaz de los juristas, en un clásico. En efecto; el par
 ps. 139 a 168); .La determinación del r_f,e'recho e.n Arthur Kaufmann, "Anuario de
 Filosofía Jurídica y Social", Abeledo-Perrot, Buenos Aires, nº 25, 2006, ps. 43 a 80;
                                                                                                         "cetética-dogmática" es visto por el fundador de la "Escuela del De-
 "Eruace entre Hermenéutica filosófica y Derecho natural", en AA.VV., Una filo-                          recho Libre" como la permanente contraposición entre "formalismo"
 sofía del derecho -en acción .. -Homenaje al profesor Andrés Ollero, Congreso delos                     y "finalismo". Así, expresa, "la tendencia formalista, en la ciencia
-Diputados-Universidad Juan Carlos I, Madid, 2015, ps. 1473 a 1490; "Otra vez la
 relación entre-Hermenéutica y derecho n~tural: las lecciones de la'jurisprudencia",
                                                                                                               6
_en FLORES SALDAÑA,, Antonio (coord.), Eermenéutica'y derechos humanos, Guada-                                   VIEHWEG, Theodor, "Algunas consideraciones acerca del razonamiento jurídi-
 lajara, 2017, en prensa, y en- la conferenCia _de ingreso a la Academia Nacional                        co", en Tópica y Filosofía del Derecho, Gedisa, Barcelona, 1991 (del alemán por R.
 de Derecho- de_ cq_rdoba; "Pérspectiva hermenéutica de la decisión judicial'', 29 de                    Zimmerling, con observación preliminar de E. Garzón Valdés), p. 118 (el destacado
 junio dé 2015, todavía inédita.                                                                         corresponde al original).
                                                                                               ,r,,
                                                                                         .·~~.~.'"T
                                                                                           :
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 312
                                                                                     .--           .
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                              TEORÍA. DEL DERECHO                                                  i
                                                                                                                                  LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA                             313
 · del Derecho, parte de una norma jurídica formulada,· que es casi ·                .. •··
                                                                                     ·
                                                                                                         se procurará, bien que de manera sintética, observar a continuación
   siempre un texto legislativo y se pregunta '.¿cómü del;io interpretar                                 siempre a partir. de la perspectiva del· autor al que se sigue en este
   este texto, para ajustarme a la voluntad que en su día la formu-                                      tramo .del presente trabajo 10 •
  ló'? Partiendo de esta voluntad, .construye -por procedimientos al
   parecer lógicos- un sistema cerrado de conceptos y principi9s, de los                                      a) LA CÓMPILACIÓN DE JusTINMNO. El estudio de KANTAROWICZ
 . que se desprende necesariamente fa solución de todos y c.ada Uno
                                                                                                         principia con lo que él denomina la "gran compilación de Justinia-
   de los problemas jurídicos". For el contrario, añade, "la tendencia
                                                                                                         no", la cual, con su publicación hacia el 530 d. C., proponíase poner
   finalista parte -sépalo o no- del 'sentido' y no del libro;. parte de
                                                                                                         "término para siempre al desarrollo de la ciencia jurídica". Desde
   la realidad, de los fines y necesidades de la vida social, espiritual
                                                                                                         el punto de vista político, la consigna es categórica: "una concordia;
  y rrioral, conside~ados como valiosos" y, bajo talen premisas, se
                                                                                               1         una consequentid'. Para fa materia interpretativa, la conclusión
   pregunta "¿cómo debo manejar y modelar el Dereqho para dar sa-
   tisfacción alos fÍnes de tu vida?" 1 :   .             ·    .
                                                                                               l         nci es menos diáfana: "con aquel recelo con que el absolutismo de
                                                                                                         todas las épocas se enfrenta a la ciencia libre, se declara prohibida
        Corno es obvio, numerosas. son las corisecuencÍas .que cabe. co-
   legir de esta distinción capital. De manera sintética :__puesto que                                   y castigada (... ) toda elaboración de las fuentes que trascienda de
   se trata de tópiCos del pensamiento y, por tanto, de "'términos ( ... )                               la labor pu.ramente mecánica", en especial "en lo tocante a la parte
   cargados de. asoci.aciones de ideas que inducen fácilmente a error,                                   fundámer'Ítal de la compilación, o sea al Digesto". De ahí que el
   pero, a pesar de ello [son] los menos equívocos de todos"-, el autor                                  apotegma que se impone es "legum interpretationes, immo magis
  citado expresa: "el carácter de la tendencia formalista es siempre                                     perversiones" ("la interpretación legal es siempre la mayor perver-
   más verbalista, más teórico, más pasivo, más receptivo, más con- ·                                    sión"). Para KA.NTAROWICZ, "en este veto del absolutismo bizantino
  serv;:¡_dor; el carácter de la tendencia finalista, en cambio, es más                                  -y no, como tantas veces se afirma, en la fe de la Edad Media en
  realista, más práctico, más crítico, más progresivo y ·más creador.                                    fa autoridad- hay que buscar la verdadera raíz histórica de la que
  La primera gusta de proyectar la mirada hacia el pasado y de                                           brota, andando el tiempo, la concepción de la jurisprudencia como
  infundir a éste vida en .el presente; la segunda se orienta hacia el                                   Ja 'sierva del _legislador' " 11 •
  presente y trata de abrir paso en él a las aspiraciones que pugnan                           !¡             Con todo, en defensa de esta not,able compilación cabe apuntar,
                                                                                                         por de pronto, que permitió un conocimiento que, de haber quedado
  por hacer realidad un futuro vital. De aquí que el fo:pnalismo tome
  sus instrumentos y elementos. de trabajo de la filología, profundice                                   disperso, quizá habría entrañado la pérdida irreparable de buena
                                                                                               ¡
                                                                                               1
  en la investigación histórica y busque su prototipo metodológico en                                    parte de la producción jurídica romana. De ahí que, en definitiva,
  la teología. El finalismo, por el contrario, apóyase en la filosofía, .                                no puede perderse de vista que dicho anhelo compilatorio obede-
  como la intérprete de los .i.nás altos fines y valores, y toma sus ins-
  trumentos auxiliares má"s importantes de 1a psicología y la ciencia
                                                                                               ¡         cía a que no se estaba conservando cualquier opinión, sino la del
                                                                                                         conjunto de autoridades nacida y desarrollada algunos siglos antes
                                                                                               1
  social, 9- partir del momento en que esas disciplinas alcanzan el
. rango de cienc{as" 8 •                        .                                              ¡         sobre la base de la flexibilidad que proporcionó un pensamiento
                                                                                                         orientado al "problema" y a la elucidación de "regulae" (principios)
                                                                                                          que, justamente, constituyeron la estructura que Justiniano tan
        De cualquier modo, como añade. KANTAROWICZ, cualquiera que
  sea el nombre que se les otorgue, una cosa parece clara:. "es el                                       celosamente quiso preservar.
  juego cambiante de estas tendencias el que preside en general,
  desde hace casi mil años,. la trayectoria de la ciencia jurídica", de                        1
                                                                                               (             b) Los GLOSADORES. El segundo momento que el autor con-
  modo que "apareciendo representadas ambas tendencias en cada                                           sidera digno de mención ocurre durante los siglos XII y XIII y tiene
  época, tan pronto predomina la una como la otra" 9 • Es esto lo que
                                                                                                               10 Otra mirada histórica, igualmente sugerente, es la que ofr.ece el ya citado
       7
       KANTAROWICZ, Hermarm; "Las épocas en la ciencia del derecho'', en RADBRUCH,                       estudio de GUZMÁN BRITo (cfr. cap. IV, nota 17) y el de Rafael DOMINGO, en la misma
Gustav, Introducción a la filosofía del derecho, FCE, Madrid, 1974, ps. 96 y 97;                         obra, pero en el vol. 1, ps. 81 a llO.
     8
       Ibíd.; p. 97.                                                                                           11 Ibíd., p. 98. Cfr., en análogo sentido, con ejemplos, D'AGOSTINO, Francesco,
     9
       Ibíd., ps. 97 y 98 (el énfasis corresponde al original).                                          ob. cit., en nota 1, ps. 301 y 302.
                                                                                      .•,e·º'.-'
                                                                                                  '-.~
                                                                                      . --.·-j···. .._ _.
. ./ .
a los denominados "Glosadores" como protagonistas. Como se ha                                               · nuevas relaciones y necesidades y, sobre todo, a: adaptar el derecho
dicho ya, hacía fines del siglo xr, a raíz del incehdio de la villa de                                        romano, para poner a contribución su.sabiduría a estas concepcio-
Amalfi 12 tuvo lugar el fortuito encuentro .del Digesto, el cual, dice                                        nes, relaciones y necesidades de los nuevos tiempos" 16 •
KANTAROWICZ, "no lo encontramos citado ni una sola vez entre los                                                   Para el autor, "el consultor más famoso de todos (... ), es Bár-
años 603 y· l 076". Y, ·como agrega el autor, "otro azar parejo quiso                                         tolo da Sassoferrato, que vivió a mediados del siglo XIV y fue, sin
que una copia de este códice" fuese a parar a manos del filólogo-ju-                                          ningún género de dudas, el jurista más influyente de todos los tiem-
rista Irnerio, quien cotejó el texto '~con el de un extracto del Digesto                                      pos". Su obra acusa la influencia decisiva de "los juristas franceses,
procedente tal vez, de tiempos- del propio Justiniano y estableció,                                           de los doctores ultramontani o moderni, como a la sazón se les
a base de arnbos, (... ) un. nuevo- texto, la llámada 'Vulgata' del                                           liamaba" y entre· los que destaca Jacques de Revigny, considerado ..
Digesto," que habria de mantenerse en vigor hasta el siglo 4JX" 13 •                                          el introductor de la filosofía (o dialéctica, entonces sinónimas) en
      Como explica el autor, Irnerio y sus discípu]os tienen "por                                           ·la jurisprudencia 17 •
punto de parti.da _una obra formal, filol6gica:- el descubrimiento cie                                             A juicio de KANTAROWICZ, la importancia de la escuela de los
varios libr.os antiguos y lá corrección de su texto a base de otros                         l                "Consultores" se basa no solamente en haber sacado al derecho pri-
inauguran una ciencia que tiene por misión +a ordenación de la                                               vado romano "de las aulas y los cuartos de estudio al aíre libre de
vida presente''. La erudición de ·.estos hombres se 'observa en las                                         ·la vida( .. }bajo la inspiración del pensamiento jurídico germánico,
"innumerables glosas", .así como "en la· muchedumbre de conjeturas,                                          canónico :/neolatino", sino en que "adentrándose audazmente en
interpretadcines, distinciones e Íritentos de soluciones" hechas a los                                        este tesoro. del pensamiento jurídico, reestructuraron o crearon casi
textos ·y en "su sentído sistemático" que ''brilla en su afición a los                                       ex novo ramas como las del derecho internacional privado, la teoría
cuadros sinópticos y a las clasificaciones" 14 •                                             l               de las corporaciones, los rasgos fundamentales de la teoría del Es-
      Sin emhargo, para el autor, el talón de Aquiles de los Glosa-
dorés estriba en su ''E:~spíritu eminentemente formalista", pues· esa                -.. ·¡1                 tado, las teorías generales del Derecho penal y del procedimiento
                                                                                                             criminal, infundiendo a sus creaciones un aliento tan poderoso que
glosa se limitó a "interpretar las palabras de Jushniano y de los                                            ha.llegado hasta a nuestros propios dí¡rn".
juristas extractados por él", ignorando "en ábsoluto la vida propia                       -1                       Con todo, en el "debe" de este movimiento, el autor computa
                                                                                                             "la ausencia total de claridad metogológica y el enclaustramiento
de los nuevos tiempos: hacíase caso omiso de sus riormas jurídicas,
de sus necesidades, de sus instituciones. Tenemos: ante nosotros.                      - ¡
                                                                                             f               medieval en el dogma de la autoridad", de manera que "toda doc-
                                                                                          r
(... ) el prototipo acabado del historicismo ( ... ) revelando con ello,.                .1                  trina jurídica (... ) tiene que emanar forzosamente del único texto
                                                                                             1
congruentemente¡ una ausencia casi absoluta de séntido histórico" 15 •                       1               revestido de autoridad, que es el Corpus iuris", lo cual condujo a
                                                                                              ~              "toda una serie de forzados trastocamientos y descoyuntamientos
                                                                                            .1
                                                                                                             del texto de la ley, que no retrocedían ni ante las más grotescas y
     e) Los PosT-GLosL!ÍJoRES (o "CoNSríLTOirns'1. El t~rcer mo-
vimiento examinado por KANTAROWICZ acaece un siglo más tarde
y se corresponde con la tendencia "finalista". Pertenece a lo que
                                                                                             l.              risibles tergiversacíones" 18 •
tradicionalmente se conoce como "Postgfosadores", pero que el au~                                                d) EL HUMANISMO. El péndulo hacia el "formalismo" se ob-
tor prefiere denominar "Consultores", ya .que "lo que ahora sirve ·                                         serva, nuevamente, hacia fines del siglo XV y durante el siguiente,
de centro a la literatura jurídica y lo que constituye, al mismo
                                                                                            1               con la escuela "humanista", la que florece tanto en Francia como
tiempo, el punto bríllante de ésta son, en efecto, las-consultas, los                        1              en Alemania y que, como explica el autor, "desenterró o descubrió,
dictámenes". A su juicio, "esta actividad de dictaminadores obliga                                          editó y esclareció todo el tesoro del Derecho antejustinianeo", más
a los juristas a mantenerse continuamente en contacto(... ) con las                         J.              allá de que permanecieron "fieles almos italicus, es decir, al método
                                                                                                            de los consultores italianos". En el primer país, la figura central
      12
          Cfr. VILLEY, Michel, Le droit Ro,,;,airi; PUF, ·Paris, 8ª ed., p. 6.
      13                                                                                                         16
          KANTAROWICZ, Berma;nn, cib. cit. eri nota 7, p. 100.                                                        Ibíd., p. 103.
      14                                                                                                         17
         ·rbítl., ps. 100 y 101:                                                                                      Ibíd., ps. 103 y 104 (el énfasis es del original).
      15
         Tbíd., ps. io2 y 103.                                                                                   18
                                                                                                                      Ibíd., ps. 105 y 106.
                                                                                            -l .
                                                                                            .··~~F.
          las .relaeiones dé: la propia realic1ad", ·todo' lo cual, en fin, generó                                  Para KANTAROWICZ, su aporte es visible, entre otros aspectos, en .
          desde entonces uri. pertinaz encono hacia el derec:ho romano 19 • '                                  "haber servido de guía a legislaciones tan vitales o tan progresivas
11
1¡;            Sin embargo, como explica el autor, el claro '"formalismo" de                                   como la codificación del Derecho nacional prusiano, la francesa y,
1
¡¡i,
11~
          esta escuela se dife:bmcia d.el ya estudiado. con los "Glosadores" en ··                             sobre todo, la austríaca"~ De modo más particularizado, afirm~, "en
i"''l     un punto fundamental: mientras que estos últimos (lo que KAN-                                        la época del DerechÓ natural se da al traste, por fin, con el dogma
li        TAROWIC.z llama "formalismo escolástico a-histórico'.') "apenas si se                                según el cual todo fallo judicial debe derivarse de la ley o del De-
"
!1
          da[n] cuenta de lo que su tiempo tenía de antagóniq)" con el derecho                                 recho co~luetudinario: aparece en la práctica, por vez primera, al
         romano estudiado y enseñado, en el "Humanismo'~ (al que el autor                                      lado de e'stas dos, una tercera fuente, y con ella el primer sistema
          denomina "form~lismo humanístico-histórico"), tal antagonismo es                                     de ideas jurídicas axiológicas", siendo ese humus de lo racional "lo
          despreciado "para volver la vista, olímpicamente, 'a las fuentes' " 2 º.                             que permitía también ( ... ) servir al juez de fuente en la aplicación
                                                                                                      f
                                                                                                      1        e integración del derecho positivo" 24 • De igual modo, añade, a su
                                                                                                               empuje se debe la elaboración durante el siglo XVIII de las "Partes
               e) LA 'I:EORÍA MODERNA O RACIONALISTA.DEL DERECHO NATURAL. ·.
                                                                                                     1         generales" que han permanecido prácticamente inalteradas hasta
          Los siglos XVII y XVIII son testigos, quizá como consecuencia de la
                                                                                                               hoy, de manera que "fue modernizadb y adquirió, al mismo tiem-
          consolidación definitiva ,de la ruptu:ra rE)ligiosa, del advenimiento
          de una escuela que, como cuenta el autor,' "en lugar de un libro"'                         .l•       po, rango científico el Derecho priv;ado común o usus modernus
                                                                                                      l        pandectarum" 25 • Más todavía: en cuanto "al contenido", agrega el
          esto es, de "la ratio scripta de ley romana", pone eri el centro de la
          escena, como fundamento último de, lo jurídico, "la eterha legisla-                       't         autor, "combatió, en nombre del inalienable derecho humano de
          cióh d~ la razón humana, o lo que se tiene por tal". No comparto
          con KANTARowrcz que el puntapié de esta corriente sea la famosa ·
                                                                                                     ¡         libertad, la servidumbre a la gleba y el vasallaje de los campesinos,
                                                                                                               la sumisión de la mujer casada ( ... ), el cautiverio del hombre de
                                                                                                      1
                                                                                                    ' 1        la ciudad en la jaula de oro de los gremios; minó el absolutismo de
          obra de Hugo Grocio De/iure belli ac pacis de 1625 (tE;lngo para mí                        1,'
          que si algún éomienzo particularizado Cl:lbe mencionar, éste debe
                                                                                                                    22
        . ser Francisco de Vitoria y su Relectio (le Indis de 1532 21 ), pero sí                                       KANTAROWICZ, Hermann, ob. cit. en nota 7, p. 109.
                                                                                                                    23
          que la enorme influencia de esta corriente se adviert~ príinero que '                                        Ibíd., ps. 111 y 112. Para una interpretación análoga a partir de Weber,
                                                                                                               pero enseguida puntualizándo certeramente las diferencias observables entre el
          nada en "aquella rama del Der.echo en. que merios abundaba la                                        modelo weberiano de racionalización y el que sigue la Modernidad justamente
          materia positiva, que era la del Der~cho internacional o de gentes,                        1         a partir del planteamiento de la teoría del derecho natural, cfr. AYMERICH ÜJEA,
               19
                Ibíd., ps. 107 y 108.
                                                                                                     l
                                                                                                    ..¡
                                                                                                               Ignacio, Sociología de los derechos humanos. Un modelo weberiano contrastado
                                                                                                               con investigaciones empíricas, Tirant Lo Blanch, Valencia, 2001, ps. 93 a 104 y
                                                                                                               143 a 157, para lo primero, y ps. 118, 316 y ss., para lo segundo. Como escribe
             21
               2
                   º
                Ibíd., p. 109.                                                                                 AYMERICH en línea con lo que puntualiza KANTAROWICZ, por lo demás, contemporáneo
                Cfr. mis ya citados estudios Über die Herkunft der Menschenrechtstheorie:                      del autor de Economía y Sociedad, "lo que Weber.trata de poner de manifiesto es
        der Fall der "Relectio de Indis" des Francisco de Vitoria, en "Arbeitshefte des
        Lateinamerika-Zentrums", Universidad de Münster, Alemania, nº 10, 1994, ps. 2
                                                                                                     1         que sin la ideología racionalista de los siglos XVII y XVIII no habría tenido lugar
                                                                                                               un intento de legitimación del derecho basado en normas puramente racionales y
        a 22 y, más extens<imente, Francisco de Vitoria en el origen de la modernidad,                r        universales" (p. 94).
        "Publicaciones del Instituto de Estudios Iberoamericanos", Buenos Aires, vol. XI,
        1997, ps. 87 a 114.                                                                          l.             24
                                                                                                                       Ibíd., p. 111.
                                                                                                                    25 Ibíd., p. 112 (énfasis del original).
                                                                                                     l.
                                                                                                    '1
 318                             TEORÍA DEL DERECHO
                                                                                              'tt··   ..                             LA IN'.l'ERPRETACIÓN JURÍDICA                       319
  los gobiernos (... ); proclamó la idea del Estado de Derecho; corrigio                                   · sus dirigentes cómo los postulados de fa razón podían conducir, a
  fundamentalmente el Derecho penal, al combatir la jµsticia basa-                                           la postre, al desencadenamiento de las furias" 31 • De ahí que, con-
  da en la arbitrariedad y:'estaplecer determinados tipos de delito; ·                                       cluye, "las gentes empezaron a cansarse de sus afanes de mejorar
  eliminó, como incompatíbles con la dignidad humana, las· pehas                                             el mundo, para esforzarse por encontrar la razón, no en el futuro,
  corporales de mutilación, acabó (... ) con el tormento y persiguió a                                       sino en el pas·ádo". Por ello, "la era filosófica del Derecho natural"
  los perseguidores de br_uj as" 26 •. . ·      .
                                                                                                             cedió el paso "a un período histórico" 32 •
       A esta teoría se le impugnó -incluso en su día y, má$ tarde,
  pÜr Savigny ·e Ihering, entre otros- ei-desdén hacía la ley positiva.
  Sin embargo, para_, KANTAROWICZ "no es cierto que el derecho natural·                                            f) LA ESCUELA. HISTÓRICA. La primera mitad del siglo XIX se
  fuese e+1emigo de lá ley; lejos de ello, como hijo que'era del Estado                                       halla dominada por el pensamiento de Savígny y sus discípulos, · ·
  absoluto, cifraba toda la salvación precisamente en la legislación,                                         quienes dieron lugar a la "Escuela Histórica", en la que gravita el
  habiendo sido.precisamente en este terreno donde alcanzó sus ína-                                           espíritu de su época, esto es, el "romanticismo", aunque reconoce
. yores trl.unfos", tal y como fue bien vísto por HEGEL cuando, segÓ.n                                        antecedentes de importancia en la famosa obra de Montesquieu de
  yá fue dicho, escribíó que la llegada de la Revoh:¡.ció# Francesa mos-                                      1748, De l'esprit des lois (Sobre el espíritu de las leyes). En ésta, en
  tró el momento en que "los filósofos se hicieron legísladores"27 • Lo                                    . efecto, se pqstula que las normas "no debían ser consideradas como
  que sucedió fue que estos doctrinarios, apoyándose· "claro está, en                                         ordenaciones arbitrarias salidas de cabezas más o menos ingenio-
  razones de derecho natural", las que "constituían la lex legum, el                            .,            sas, sino (. .. ) como las relaciones necesarias que se derivan de la
                                                                                                              naturaleza de las cosas", las que se observan en "las condiciones
  principio inconmovible en medio del caos del Derecho común" 28 ,
  consideraron "como Derecho carente ya de vigencia Jas normas                                             . físicas de toda vida, en el clima y en la calidad de la tierra (... ),
  jurídicas de los viejos tiempos que contravenían a la, cultura de los                                       en el régimen económico, densidad de población (... ) régimen de
  tiempos actuaies, cuando el Estado no se· decidía a proclama:r- su                             1            gobierno, organización militar, religión, costumbres y espíritu del
  formal derogación". y si bien en ello, advierte el autor, "aplicaban                                        pueblo", sin que quepa, por cierto, desconocer "la repercusión del
 ·un criterio harto vago, no se diferencia, siri embargo, gran cosa del ·                      1.
                                                                                                1
                                                                                                            . Derecho sobre _todos estos factores" 33 • /
                                                                                                                   Según KANTAROWICZ, Savigny retiene de todos los elementos
  que hoy seguimos, al profesar la tesis de que las leyes pierden su                           .1 .
  vigencia no solo por obra de la ley, sino también por la acción del                                         señalados por Montesquieu "solamente uno, que es, además, el
                                                                                                l
  Derecho consuetudinario derogativo, por el desuso y por los cambios·                           j            único científicamente inservible, por ser inaprensible: el espfritu
  revolucionarios operados en elrégimen de gobierno" 29 •                                      .1¡            del pueblo. Según él, todo Derecho nace como emanación de este
       Con todo, reconoce ~NTARO,WICZ, esa preocupación por dotar                              .l             espíritu, a la manera del Derecho consuetudinario". Para el autor,
                                                                                                              "esta actitud trajo consigo, necesariamente, la hostilidad contra
  al ordenamiento jurídico/de una certeza y justicia inconmovibles                              lt            toda consideración finalista y valorativa y, por tanto, la recaída en
  rriuchas veces "lejos de acabar con la inseguridad jurídica, contri-
  búía a acentuarla", ta:l y como se vio con el famoso "Terror" en la
  Revolución Francesaªº, la que ·"vino a dewo~trar a los pueblos y a
                                                                                               r              el formalismo", más precisamente, en un "formalismo romántico" en
                                                                                                              el que se hizo patente "la ciega y obstinada repudiación del Derecho
                                                                                                              natural, con el que se rechazaba y desterraba( ... ) sin una solapa-
                                                                                                              labra de justificación, la filosofía del Derecho en su conjunto"34 : .Este
        26
             Ibíd., loe·. cit. Como es claro, nuest'ra Constitución nacional forma parte de     1             formalismo dividió sus aguas según se trate de los "romanistas",
  ese- espíritu de.época, tal y como surge del- art. 18 por el·que categóricamente se
  dispone que "quedan abolidos para ~iempre la pena de muerte po~ causas políticas,
  toda especie de tormento y los azotes". . .
        27
                                                                          .    .
           - HEGEL, G. W. F., Vorlesungen über die Philosophie der Geschichte, From-
                                                                                         .      l           nos. Un intento de armonización'', Humana Jura, Pamplona, vol. 1, 1991, ps. 299
                                                                                                            a 314.
 ·mann, Stuttgart, 1961, p. 556.           .                                                                     31
                                                                                                                    Ibíd., p. 114. Cfr., asimismo, CASTIGLIONE, Julio C., Filosofía jurídica,
        2.8 KANTAROWICZ,_ Hermann, ob. cit. E\n· nota 7, ps. 113 y 114 (el destacado es
                                                                                                            Universidad Católica de Santiago del Estero, Santiago del Estero, 1995, ps. 295
. del original).        .                      .                                                            a 297.                 ·
        29 TI.             '
             Ibíd., p. 113,          .           .                                                               32
                                                                                                                    Ibíd., p. 114.
        30
            ·cfr. a¡re_!>pecto; y entre una vasta bibliografía, RABBI-BALDI CABANILLAS,                          33
                                                                                                                    Ibíd., p. 115.
  Reriato;· "Las revoluciones francesa y norteámericana ante los derechos huma-                                  34
                                                                                                                    Ibíd., loe. cit.
                                                                                              .r
                                                                                               · I·
                                                                                              ·_¡_
                                                                                         ·;·~y           .
                                                                                              ../
 quienes concentraron sus investiga:ciones en. el texto del Corpus                                            "la enseñanza fundamental de la teoría romántica, o sea la del
 Iuris Civilis o de los "germanistas'\ quienes se aboq¡.ron a Ja exé- .                                       espíritu del pueblo" 38 •
 gesis de las leges barbarorum y el. derecho consuetudinario en la                                                 Con todo, KANTAROWICZ piensa que para bien de la ciencia
   medida en que este últirrio "se hallaba ya formulado, sie:O.do pcir                                       ·jurídica alemana, su porvenir no estuvo atado a los aclamados
   tanto asequible alrnétodo filológico .en vez de al método sociológico                                      desarrollos de la ciencia histórica. Por caso, los trabajos habidos en
 . y pudiendo, así, ser tr;:1.tado.como leyes" .. En .ambos casos, una cosa·.                                 el derecho comparado; en el derecho comercial; los planteamientos
   es segura: las fórmulas bajo estudio ''.eran vistas ahora menos con ·                                      en torno de. una! nueva legislación debidos a Thibeaut y Goenner
   ojos de jurista que con ojos de historiador, lo que era también otro                                       o, en fin, los estudios de Feuerbach. en derecho penal, "en uno u
   de los frutos del ;romanticismo, empeñado en concebir toda ciencia,                                        otro sentido (...·) representan una escondida. corriente finalista en.
   cualquiera que ella fuese, conio una ciencia históriCa" 35 •          ·
                                                                                                              plena marea alta del punto de vista histórico" 39 •
        Pero la influencia de Montesquieu fue· más pe'netrante todavía
   en otro.aspecto en el que, como se ha visto ya y volverá a insistirse
   en lo que sigue, tuvci una enorme fortuna posterior: Savigny tomó.                                              g) LA "NUEVA" ESCUELA HISTÓRICA: RUDOLF VON lHERING. En
   de él ia teoría de la división de los poderes en el punto en que "él                                      efecto, los desarrollos de esta corriente se hallan íntimamente
  juez debía atenerse estrictamente a aplicar las normas jurídicas.                                          vinculadoE\/tanto en su defensa corrio, incluso, en su crítica, a la
   estatuidas", lo cual entrañó considerar a "la actividad jurídica como                                     obra de este insigne jurista, en un primer momento discípulo de
   una actividad puramente cognoscitiva, de la que quedaba excluido                                          Savigny. A juicio de KANTAROWICZ, la "nueva" escuela echa a andar
  todo lo que fuese valoración y volunfad" 36 •        .                                                     a partir del célebre ensayo de Ihering de 1856-7, "Nuestra misión",
        Teniendo presente ese horizonte, KANTAROWICZ sintetiza: "tales.·                                     por la que pretende ser una mezcla de "elementos formalistas y
   son.los dos puntos fundamentales del programa que tanta influe:ri~                                        finalistas", en tanto "ha tomado de los ad._;.ersarios de los primeros
                                                                                                    1
   cia habrían de cobrar" y "que jamás habrían de ser. reneg~dos. En                                         historicistas la concepción de la ciencia del Derecho como una
  el campo de la dogmática, el formalismo histórico de los románticos                               l
                                                                                                    l
                                                                                                             disciplina 'creadora' y práctica peror coincidiendo con aquellos,
  condujo, de una parte, al purismo, es. d8cir, al victorioso intento de                                     busca el medio para alcanzar este fin única y exclusivamente en
  restituir el Derecho romano, en la medida de lo po~>ible, a su fase
  antigua, y el Derecho germánico a su fase medieval; y, de otra
                                                                                                    l
                                                                                                    .l
                                                                                                             la construcción de conceptos" 4 º.    .. '
                                                                                                                   Con todo, en el período conclusivo de su vida, el propio Ihering,
  parte, a un tipo de foterpretación aparentemente lógica; basada en
  'conceptos' e indiferente a todas las necesidades de la vida presente,                            l        en su no menos celebrada obra "En serio y en broma" 41 , dejó caer
                                                                                                             sus dardos apasionados en contra de su propia creación sentando
  método interpretativo ·que habría de forzar todavía más uno de los
  discípulos de Savigny, :f3iichta" 37 •                              ·  ·
                                                                                                    l!       las bases de un planteamiento "finalista", si cabe la expresión, ya
                                                                                                             maduro. Así, "e:n esta obra separa sus elementos históricos y jurí-
        Para el autor; en el "haber" de esta corriénte nd deben silen-
  ciarse ni "la rigurosa crítica de las fuentes" ni, tampoco, la "fina y
                                                                                                    ¡        dico-conceptuales de sus elementos realistas y finalistas, elevando
. sutil formación de los conceptos". Sin etnbargci, en el "debe" corres e                           ¡        sobre el pavés el factor 'interés' en el derecho subjetivo y el factor
                                                                                                             'fin' en el Derecho objetivo". Con lo expuesto -piensa KANTAROWICZ-
  ponde computar. el "completo divorcio entre teoría y práctica" ya                                          se arriba a "la forma metodológica del finalismo" y, de este. modo,
  que "este método puramente formalista, que venía ·a romper toda ·                                          se está en condiciones de preservarlo de la suerte que corri.eron sus
  cohesión entre el Derecho y la cultura y que, al mismo tiempo,                                             predecesores escolásticos y racionalistas "por_que le permite darse
  llevado de su tendencia arcaizante, se detenía ante todas las inno~ ·
  váciones del desarrollo posterior", habría de contradecir; incluso,
                                                                                                                  38
                                                                                                                     lbíd., p. 117.
                                                                                                                  39
       35
                                                                                                                     lbíd., p. 118.
          lbíd., p. 116.                                                                                          40
                                                                                                                     Ibíd., loe. cit.
       36
          lbíd., loe. cit. Cfr., en.análogo sentido, D'AGOSTINO, Francesco, "Hermenéu-               1            41 Tomo la cita del texto de KANTAROWICZ. El autor se refiere a la obra de
tica y derecho·natural .. :", en RABBI-BALDI CABANILLAS, Renato, Las razones .. .,                   1       Ihering, Scherz und Ernst in der Jurisprudenz de 1880, traducida por Tomás A.
ob. cit. en nota 1, ps. 346. y 347.                                                                          Banzhaf al castellano como Bromas y veras en la ciencia jurídica (Ridende dicere
      37
   .      Ibíd., ps. 116 y 117.                                                                              Verum), Civitas~ Madrid, 1987.
                                                                                                     1
                                                                                                     1
                                                                                                     1
                                                                                  ·:zlc·_
                                                                                   ,:=: .·::
                                                                                     ·t._:
                                                                                  /.--·
1
!    cuenta de los límites y los peligros del finalismo mientras conserva                          · casos que podrían llevarse ante los tribunales", de donde "basta-
     como una conquista definitiva su fecunda sustancia~' 42 •          ·                            ba que el juez supiera armar un silogismo deductivo para que el
                                                                                                     conflicto obtuviera mecánicamente la resolución establecida en la
                                                                                                     norma jurídica legaf' 44 . De ahí que, como completa este autor, el pa-
            § 31. La teoría. de la interpretación en.el po[Jitivismo                                 radigma bajo ·estudio "pretende y confía que el juez opere sometido
      jurídico. ~ a) INTRODUCCIÓN. Luego del sugestivo derrotero                                     a las exigencias propias" de una razón concebida de manera "teórica
      histórico trazado por KANTAROWICZ; la obra de RADBRUCH.se prolori-.                          .·o científica exacta", de modo que "con sencillez y certeza absoluta
      ga -ya mediante su pr9pia pluma- con el estudio del positivismo                                deduzca acr1tica.mente desde la ley la solución al caso, tal cual la
      jurídico y de lá ya citada escueÍa <lel "Derecho- libre". Es lo lógico,                        quiso el legislador" 45 • Dicho en otros términos, el juez nada tiene ..
      atento la fecha en que aquella fue editada por vez primera (1948)                              que interpretar sino, muy por el contrario, debe ceñirse a aplicar
      pero, como no puede sorprender, un tal plantea;miento histórico-                               sin· más los claros términos de la ley al caso concreto.
      sistemático quedaría huérfano si no se incluyera (algo que el propio
      RADBRUCH naturalmente ria podía entonces· prever) los desarrollos
      metodológicos más vigorosos e influyentes que, jUstamente, tienen                                  . b) CONFIGURACIÓN HISTÓRICA. La idea recién expuesta füe
                                                                                          1
      lugar a partir del fiffde la Segunda Guerra Mundi'al bajo el empuje                          · puesta de /relieve por las dos grandes manifestaciones teóricas
      de la teoría del derecho natural de cuño "clásico" (no "racionalista»)                         del paradigma positivista (o "dogmático") del siglo XIX, a saber,
      y que, conio ya señalé, prefiero denominar como pensamiento de la                              las ya mencionadas, de un lado, en Alemania, Escuela Histórica,
      "razón· práctica". Al ·examen de lo expuesto se destinan, entonces,                            con Savigny a la cabeza, artífice, además, de la famosa corriente
      las páginas siguientes.          .                                .                            denominada "Jurisprudencia de Conceptos" que lleva a su máxima
          . En primer término corresponde referirse al positivismo jurídico,
      corriente que ocupa .lil;l lugar Claramente dominante durante todó el
                                                                                         .¡          plenitud el ideario positivista en ese país y, de otro, en Francia,
                                                                                                     la Escuela de la Exégesis, surgida justamente como glosa de los
    · siglo :xix y hasta la mitad del pasado, y ello a pes.ar de lós distintos
      desarrollos de escuelas y tendencias contrarias.
                                                                                         .J         ·códigos aprobados en dicho país a partir de 1804, fecha en que se
                                                                                                     sanciona el famoso Code Napoléon.                     .
            En su oportunidad (cfr. supra cap. II, § 9) se definieron las·          ..
                                                                                          1
                                                                                          F
                                                                                                           Así, en. relación con este tópico,_afirma VIGO que, para Savigny,
      notas niás relevantes del positivismo jurídico y, entre ellas, distin-
      guí algunas que conciernen.-propiamente a la interpretación, tales.                J•1
                                                                                                     la interpretación no es sino "reconstrucción del pensamiento con-
                                                                                                     tenido en la ley" 46 • En efecto; como profundiza LACLAU, se trata de
      como la prohibici6n que pesa sobre el juez de "crear· derecho" y de                            "transportarnos mentalmente al punto de vista del autor de la ley
      "negarse a fallar", tesis .ámbas. que, como bien plantea RADBRUCH,
      "solo pueden conciliarqé entre sí" en la·,medida en que supongan
      una tercera, a saber, que "la ley caree~ de lagunas; no enCierra
      contradicciones, es ( ... ) clara", de suerte que, en última instancia,
     ."el orden jurídico forrria una unidad ce~ráda y completa" 43 • Bajó esté
                                                                                          l
                                                                                         ···r. -
                                                                                          l
                                                                                                     ("auf den Standpunkt des Gesetzgebers versetzen'', escribe el autor
                                                                                                     alemán), reproduciendo artificialmente las operaciones mentales
                                                                                                     llevadas a cabo por éste y engendrando nuevamente la ley dentro
                                                                                                     de su pensamiento" 47 •
                                                                                                           A su vez, en cuanto concierne a la propuesta exegética francesa,
      esquema, vistá la cuestión en los términos más arriba estudiados;.                             es claro que ésta trabajó sobre el campo ya abierto por MOl:\TTES-
      es· claro que se trata de una teoría orientada al "sistema" (y no al
      "problema") y, por tanto, básicq.mente "formalista" (y no "finalista").
                                                                                         ·J .        QUIEU, para quien "el juez no es sino la boca a través de la cual se
                                                                                 .-··· :·L-
                                                                                          :i<-·.
                                                                                                      {f"
../
  manifiestan las palabras de la ley" 48 • Como es obvio, a partir de                                          conocidas- ·se imponen de manera inevitable: las normas dictadas
  estas palabras la Dogmática configuró uno de sus postulados más                                              por tal legislador "ultrarracional" son claras, precisas, consistentes
  caros: la tesis .de que existe µn órgano productor de las no;rmas (el                                      · y económicas y el sistema jurídico estructurado en torno de aque-
  Poder Legislativo) y otro meramente reproductor de ellas (la Admi-                                         · llas es necesariamente completo. Sobre tales bases, la interpreta-
  nistración de JustiCia).' Bajo este horizorite, cuando el pern;;aml.erito                                    ción no solo no es necesaria sino, como lo ha señalado Francesco
. ''legalista" -que antes.denominé como "formalist!l" y "sistemático"-.                           1            D'AGOSTINO,. es una labor "peligrosa" y, más francamente, "ilícita"
  se cor.ona en el ya examinado proceso codificador, adquieren pleno                                        · a la que, por tanto, se debe combatir·52 •
  significado expresiones como las de Laurent, pa~a qu:len ~'los códigos                          1             .    Con lo dich9, no se ha innovado nada respecto de la tradición
  no dejan nada alarbitrio del intérprete" pues "éste no tiene ya por                                          "formalista" inaugurada con el Corpus Iuris Civilis. Si entonces, .
  misión hacer el derecho: el derecho está hecho.                No
                                                          existe incerÚ"                                       conforme se dijo, se acuñó el brocardo "in claris non fit interpreta-
  dumbre, pues el. derecho está escrito. en textos. Eiuténticos" 49 • Ya                                       tio", la Dogmática hizo de la directriz "gramatical" su lugar metó-
  partir de lo expuesto, resulta asimísmo comprensible la pretensión.                                          dico por excelencia. 'La prueba de que esta proposición no es cosa
  del también citado art. 4° del Code Napoléon, que, como tantas Veces                                         del pasado sino que goza, todavía, de hondo seguimiento está en su
  se señaló, Véle.z Sársfield reprodujo, a la letra, en nuestro art. 15                                        extendido empleo por parte de la jurisprudencia de los tribunales,
  <iel Código Civil.              ·                    ' .                                                     entre los qlÍe destaco a la Corte Suprema.
                                                                                                                    Esta; en efecto, ha dicho que "la primera fuente de interpreta-
       e) LA INTE/¡pRETACIÓN COMO "APLICACIÓN" (O.EL.CANON INTER-                                 ¡           ción de la ley es su letra, sin que sea admisible una: interpretación
 PRETATIVO POSITIVISTA POR ANTONOMASIA).       Como es sabido -por lo ·                                        que equivalga a prescindir del texto legal" 53 . De ahí que haya con-
                                                                                                  1            siderado que "la exégesis de las normas ]egales debe practicarse sin
  que no se abundará a este respecto-, la razón fundamºental que.
  avaló la pretensión iuspositivista fue la creencia in.discutida (y .de
  .ahí la palabra dogmática) en la "ultrarraCionalidad" del legisladór,
                                                                                                  ¡           violencia de su letra y de su espíritu, con el propósito de efectuar
                                                                                                              una interpretación que no resulte ajena a lo que la ley establece,
  es decir, la asunción de que "la imprevisióD;'', el "olvido" o la "in-                          l            desde que la primera fuente de hermenéutica de la ley es su letra" 54 ,
                                                                                                               cie suerte que, como elegantemente se.ha dicho en otra oportunidad,
  consecuencia'.' del legisfador no se presUmen 50 • Se trata, sin duda,
  de un momento histórico de euforia racional, en el que, como pedía.                              t           el primer artículo de la norma, con cita de Story, "debe ser la llave
  y quería Kant, era menester "sapere aude" ("atr@vete a pensar")                                 !1.         para abrir la mente del legislador" 55 • Por ello, en fin, "no cabe a la
  justamente porque las fuerzas de la Raz6n (con mayúsculas, esto                                 1
                                                                                                  1
                                                                                                               Corte apartarse del principio primario de sujeción de los jueces a la
  es, ya-maduras), permití.an llevar adelante dicha empresa 51 . De                                           ley ni atribuirse el rol de legislador para crear excepciones no admi-
                                                                                                  1           tidas por éste, pues de hacerlo así olvidaría que la primera fuente
. ahí que, admitidos tale~·postulados; las conclusiones -también ya
                                                                                                              de exégesis de la ley es su letra y cuando ésta no exige esfuerzo de
                                                                                                  1           interpretación debe ser aplicada directamente, con prescindencia
          Cfr. ·MONTESQUIE~, De l'esprit de lois, Garnier-Flamma:r;ion, París, 1979
       48
                                                                                                              de consideraciones que excedan las circunstancias del caso expresa-
 (presentaCión por V. Goldschmidt), XI, VI, p. 301. La misma idea puede leerse,
entre otros lugares, en VI, III; p. 203.    ·     .    . ..           ·         · ·     ·         1           mente contempladas por la norma. De otro modo, podría arribarse
      49
          Cfr. al respecto Vmo, Rodolfo L:, ob. cit: en nota 44, p. 206. ·                                    a una interpretación que, sin declarar la inconstitucionalidad de la
      5
       °  Cfr., a ese respecto, Fallos, 258:75.;_ 295:439; 297:218; 306:721; 307:518;                         disposición legal, equivaliese a prescindir de su texto" 56 .
316:2624 y muchos otros.          .      .                     .    .
      51
         Como escribe paradigmáticamente KANT en ¿Qué es lallustración? (según                    1              52
la traducción de J. B. Llinales ya citada, Universitat de Valencia, Valencia, 1990,                                 D'AGOSTINO, Francesco, ob. cit. en nota 1, ps. 345 y 346.
                                                                                                                 53
p. 63), "Ilustración es la salida del ser humano de su minoría de edad, de la cual                1                 Fallos, 314:458; 314:1018; 314:1849; 315:727; 316:814; 318:198; 320:2131
él mismo es culpable. Minoría de edad es la incapacidad de servirse del propio
entendimiento sin dirección d~ 0 tro. Él mismo es culpable de esta minoría de edad                J         y muchos otros.
                                                                                                                 54
                                                                                                                    Fallos, 315:1256; 316:1732; 321:802, entre muchos otros.
                                                                                                  l
                                                                                                                 55
porque la causa. de la misma no radica en un defecto del entendimiento sino en la                                   Fallos, 300:805.
                                                                                                                 56
falta de la decisióh y del coraje de servirse del propio sin dirección de otro. ¡Sapere                             Fallos, 313:1007. Cfr., además, Fallos, 218:56; 299:167; 311:1042; 312:2078;
aude! ¡Ten el coraje de servirte de tu propio entendimiento! es, en consecuencia,                           316:1247; 319:2617; 320:61; 320:1962; 321:434 o 322:385, voto del juez Bossert,
                                                                                                  l
                                                                                                  ¡
la divisa de la Ilustración" (el destácado corresponde al original).                                        entre muchos otros. Para un ejemplo de esta directriz referido al alcance del
                                                                                                  J
                                                                                         .~'1f~             -
                                                                                         -./.
        d) LA' INTERPRETACIÓN "ADMITIDA" POR E_L POSITIVISMO JURÍ-                                               legál rio puede evitar la vaguedad -o lá contextualidad en razón de
 DICO.   Sin embargo, es también sabido que .la realidad de la vida_                                             pertenecer al género del lenguaje natural5 9 •
 no acompañó tales desE!os, de modo que al mismo tiempo_ que se                                                       Según se ha anticipado; dicha necesidad se s_istematiza con
 hicieron perceptibles la vaguedad, ambigüedad, contradictoriedad y                                              singular esmero a poco andar el siglo XIX, es decír, la época de defi-
 redundancia de las proposiciones normatlvas, a_sí como la existencia                                            nitiva consolidación del ideario positivista, a través de los trabajos
 de lagunas .hacia el interior del sistema jurídico, pronto se adVirti6                                          del fundador de la Escuela Histórica quien postula por intermedio
 la ineuitabilidad de la interpr~tación. Con todo, tal concesión de                                              de ciertos cánones exegéticos alcanzar el sentido auténtico del texto
 urfa de las banderas fondam:entales del positivismo nó fue irres-                                               normativo y, de_ tal modo, facilitar la tarea tanto del juez como de
                                                                  ,a
tricta, sino que s'e_ ciñó, corrw expresa D'AGOSTINO, las siguientes                       -J                    la doctrina y, eh última instancia, también del propio legislador:
 características:                                            -                                                        Pues bien: ¿cuáles fueron esos cánones exegéticos? A este
       1) el Íntérprete (fundamentalmente, eLjuezY solo interpreta                                               respecto es conocida la clasificación de SAVIGNY en torno de cuatro
 en los casos (excepcionales y despreciables) de. silencio normativo -                                           géneros o, como él los denominó, "elementos" de interpretación:
                 o
u oscuridad insuficiencia de l_a ley, y                                                                          "El elemento gramatical de la interpretación tiene por objeto las
       2) la interpretación así admitida únicamente               es
                                                         gnoseológica, -                                        _palabras d_e que el legislador se sirve para comunicarnos su pen-
                                                                                                                 samiento/es decir, el lenguaje de las leyes. El elemento lógico, la
esto es, no política, tod_a vez que solo está llamada a conocer el
sentido genuino' del texto, es decir, el espíritu del legislador. El                                             descomposición del pensamiento o las relaciones lógicas que unen
intérprete, en efect.o, apenas está autorizado a desentrañar el
alcance denominado "auténtico" de la norma, por lo que su exé-
gesis se produce ·hacia dentro del texto mismo~ Por el contrario, -
                                                                                          ·J                     a sus diferentes partes. El histórico tiene por objeto el estado del
                                                                                                                 derecho existente sobre la materia, eri la época en que la ley ha
                                                                                                                 sido dada; determina el modo de acción de la ley y el cambio por
                                                                                                                 ella introducido, que es precisamente lo que el elemento histórico
lJ,na' interpretación exterior a aquella, por ej.eniplo, que tenga en -                                          debe esclarecer. Por último, el elemento sistemático tiene por objeto
~lienta las "consecuencias" de la aplicación legal a una situación                              1                el lazo íntimo-que une las instituciodes y reglas del derecho en el
determinada, sería, en la terminología ~acaso un tanto ambigua
de D'AGOSTINO- una interpretación "política" 57 •                      -
                                                                                                ¡                seno de una vasta unidad" 60 •
                                                                                                l                     La influencia histórica de está clasificación es conocida, toda
      A este respecto, es interesante apuntar que el reconocimiento -                                            vez que a partir de ella los dogmáticos desarrollaron un importante
de tal necesidad de interpretación es una constante del pensamient~                         - 1
                                                                                                l                elenco de cánones (también denominados "directivas", "argumentos"
positivista y, por tanto, también abraza a sus autores más recientes.                               i            o "criterios" de .interpretación y que, en otro lugar, he llamado -
      Ejemplo de ello es e·f antiguo catedrático de Oxford; Herbert                             t                como prefiero- "directrices"), que todavía hoy conservan una notable
                                                                                                !
L~_A HART, para quien ~l lenguaje legal contiene términos delibe-
                            o
radamente generales vagos con el fin d~ a_barcar un n_úmero más                             -/I                       59
                                                                                                                         WROBLEWSKI, Jerzy, ob. cit. en nota 2, p. 41. Como es fácil de percibir,
amplio de casos particulares. se trata, ·según su conocida formula-                             -       -       la ·apertura al "contexto" señalada por el autor polaco refativiza en inmensa
ción, de la "textura abierta" (open teXture) de las normas 58 . De igual -_                                     medida el sentido propio de la norma (visto desde una perspectiva estrictamente
modo, y ~un cu_ando sea un autor que ha tomado ciettas.distancías                               1
                                                                                                                positivista), justamente porque aquella es "puesta en correspondencia"-, como
                                                                                                                expresa A. Kauimann, y se verá con más detalle enseguida, con las circunstancias
del estricto positivismo, Jerzy WRóBLEWSKI afirma que el lenguaje                                               de la vida a las que pretende regular.
                                                                                                !-
                                                                                                                      60
                                                                                                                         SAVIGNY, M. F. C. de, Sistema del derecho romano actual (del alemán por
                                                                                                                J. Mesía y M. Poley), Centro Editorial de Góngora, Madrid, s/f, 2º, t. I, ps. 187 y
art. 438, Código Procesal Penal, cfr. CFed. Salta, in re, "Ortíz, Horacio F.-Burgos,                            188. Sobre este autor, y entre una amplia bibliografía, cfr. el completo estudio de
Miguel A", sent. del 29/8/2012. -          -     _                            -                                 LACLAU, Martín, Interpretación ... , ob. cit. en nota 4 7, ps. 225 a 252; LARENZ, Kark
       5
      _ J D'AGOSTINO, Francesco, -0b. cit._ en. nota 1, ps. 346 y 34 7.
       58                                                                                                       Metodología de la ciencia del derecho (del alemán por M. Rodríguez Molinero), 2
          Cfr. liART, H. L. A., El concepto de derecho, Abe°ledo-Perrot, Buenos Aires,                          ed., Ariel, Barcelona, 2001, ps. 21 a 38; ÜLLERO, Andrés, "Savigny: el legalismo
1977 (é!el inglés por G. Car.rió),' ¡:is. 159 y ss. Sobre este punto, cfr. también:                             aplazado", en Interpretación del derecho y positivismo legalista, Edersa, Madrid,
RODRÍGUEZ MOLINERO, M"arcelino, Introducción a la ciencia del derecho, Cervantes,                               1982, ps. 97 a 112 y RODRÍGUEZ MOLINERO, Marcelino, Introducción . .. , cit. en nota
Salamanca, 1992, ps. 239 y siguientes.             -                                            L               58, ps. 224 y 225.
                                                                                                l -
                                                                                           1r
                                                                                           ~r
 328                            TEORÍA DEL DERECHO                                                                           LA. IN_J'ERPRETACIÓN JURÍDICA                         329
  vigencia y que, en rigor, no parece que pueda (o que incluso deba)                        r            A partir de la exégesis recién señalada, se observa una lectura
  declinar nunca 61 . De _ahí que convenga señalar que la impugnación                               más completa (comparada con la positivista al uso) de la realidad
  efectuada al pensamiento positivista en los capítulos precedentes                                 normativa que, si bien se mira, hace honor a los ya conocidos
  no se dirige a las pautas interpretativas creadas por _éste sino, por                           - elementos de que se nutre el pensamiento histórico savigniano,
  el contrario, a los presupuestos filosófico~jurídicos que pretendieron                            pero que, en su desarrollo ulterior, se halla acaso inexorablemente
. evítarlas y que, en lo sustancial, resultan desmentidos o, si _se .                               condenado a su trastocamiento, lo que, como es posible advertir
  prefiere, sumamente relativizados por el advenimiento. de tales                                  -·aún hoy, según se verá enseguida, ha resultado fuente de no pocos
  argú:m,entos.             ·       · . · · -     .      ·      ._                                  malentendidos en la labor interpretativa.                        .
      _En este pun,to conviene· narnar la atención respecto de dos                                       Como· quiera qú.e sea, la repercusión práctica de estos cánones
 aspectos frecuentemente olvidados (o quizás, hasta ignorados) del                                  ha sido inmensa. En cuanto concierne al "elemento gramatical",
  pensamiento de SAVIGNY y sobre los que con acierto se detiene LA~                                 más arriba se suministraron algunos ejemplos generados por. el Alto
  CLAU. El primero es que, para aquel, ''este proceso· de interpretación -                          Tribunal de nuestro' país. En lo que sigue, se mencionarán otras
  no es privativo dé las leyes que se presentan como obscuras, sino                                 aplicaciones de la Corte Suprema que responden al punto de vista
  que, por el contrario, el mismo se halla presente y opera frente a                                dogmático y que tienen en Savigny su génesis histórica.            ·
  cualquier texto legal". Como añade el profesor d~ .Buerios Aires,                                             ./
  esta perspectiva "es tributaria, indudáblemente, de las concepciones
 hermenéuticas que se debatían en su tiempo'', en especial a partir                                     e) EMPLEO DE LAS DIRECTRICES INTERPRETATIVAS DE CUÑO PO-
  de las elaboradas por Schleiermacher, su colega de la Universidad                                SITIVISTA POR PARTE DE LA JURISPRUDENCIA DE LA CORTE SUPRE-
  de Berlín, y que, como se vio al inicio de este capítulo, habrían de·                            MA. l. LA INTERPRETACIÓN DE LA ''vOLUNTAD DEL LEGISLADOR": Me-
  alcap.zar. honda repercusión posterior62 • Y el segundo -lógica conse-                            diante esta pauta -que puede vincularse con algunos aspectos del
                                                                                            1       referido elemento "lógico"-, se procura desentrañar la intención
 cuencia del anterior-, es que estos cuatro elementos; para Savigny,
 ·no son· diversos tipos de interpretación entre los cuales sea posible                             tenida en mira por aquel al redactar las normas, la cual suele pre-
 escoger, sino cuatro operaciones indi¡;;pehsables que necesariamente                       1-    . cl.sarse a través de los "trabajos prepa.1ratorios'', los debates parla-
 han de ser cumplidas pára lograr una interpretación válida de la                           L     . mentarios o las exposiciones de motivos que preceden a su sanción64 •
 ley''. Más aún: agrega LAcLÁu, "podrá, según los casos, prevalecer                         1·.          Al respecto, una constante jurisprudencia tiene dicho que "la
 un elemento sobre los ·otros; pero; en definitiva; todos ellos han de                              primera regla de interpretación de las leyes es dar pleno efecto a
                                                                                            l       la intención del legislador" 65 , ya que, "en definitiva, la misión de
 estar p:reserites", ·si es que se· ha de dar acabada cuenta del sentido
 del doéumento 63 •         -  ,_                                                           l
                                                                                            1
                                                                                                    los jueces es dar pleno efecto a las normas vigentes sin sustituir
                                                                                            l       al legislador ni juzgar sobre el mero acierto o conveniencia de
         61                                                                                 1       disposiciones adoptadas por aquél en el ejercicio de sus propias
            Además de los reciéh mencionados y que tie_nen lugar, en sentido éstricto,
- ante la "imperfección'' u "oscuridad" de las normas -(dentro de lo cual cabe mencio-
                                                                                                    facultades" 66 • Sobre tales bases, se ha profundizado que "nci pueden
                                                                                            1
  nar, también, a los argumentos "económico" y "apagÓgico" o reductio ad absurdum),                 descartarse los antecedentes parlamentarios, que resultan útiles
  debe añadirse los que acaecen ante el "síiencio" normativo, _aspecto inicialmente                 para conocer su sentido y alcance [de la ley]" 67 •
  difícil de aceptar para el positivismo clá~ico. Ejemplo de este úiti_mo lo constituyen
  las directrices "analógica"; "a fortiori"o "a contrario". Cfr. respecto de esta clasi-
  ficación mi estudio Sobre la fundamentación d~ las decisiones judiciales: .el para-                   64 Cfr., al respecto, entre otros, el clásico estudio de CAPITANT, Henri, Los
digma de la "DogTrtática JurídiCa" segl:m ia jurisprudencia· de la Corte Suprema,           1      trabajos preparatorios y la interpretación de las leyes, reproducido en LL, Buenos
JA, Buenos Aires, t. 2001-IV, ps. 1350 a 1364 y, de. _manera más detallada y con                   Aires, ejemplar del 117/2000, ps. 11 a 19.
                                                                                                         65 Fallos, 315:790; 322:752 o 322:2321, entre muchos otros.
un criterio clasificatorio no estrictamente coincidente, ZULETA PU'CEIRO, Enrique,
                                                                                                         66
Interpretación de la ley. Casos.y materiales p·ara su estudio, La Ley, Buenos Aires,                        Fallos, 318:1012, sus citas y muchos otros.
                                                                                                         67 Fallos, 313:1149; 321:2594 y muchos otros. El nuevo Código Civil y Co-
2003, esp. ps. 49 a 58 y 65 a 67. Cfr., asimismo, el clásico estudio de ÜST, Franc;ciis,
y VAN DER KERCHOVE, Michel, Entre la lettre el l'esprit. Les directives d'interpretation           mercial parece abandonar esta perspectiva. En efecto: al fundamentar el art. 2°
en droit, Bruylant, Bruxelles, 1989, passim.
     62
         LACLAU, Martín, ~'Interpretación  ... ", ob. cit. en nota 47, p. 237.
                                                                                            r      (interpretación de la ley), se escribe que "también incluimos sus finalidades, con lo
                                                                                                   cual dejamos de lado la referencia a la intención del legislador. De este modo, la
     63
         Ibíd., p. 238.
                                     .
                                                                                            1      tarea. no sé limita a la intención histórica u originalista, sino que se permite una
                                                                                            1
                                                                                            1
                                                                                            !
                                                                                                            _~;-~:~
                                                                                                            '-   ~    ',_:'
                                                                                                           /.
                                                                                                             l
    . ·      Una completa presentación de esta corriente se encuentra· en. CÁRCOVA,                                           que también resulta plenamente subsumible en el pensamiento del
  Carlos; "Notas acerca de la teoría ·crítica del derecho", en          Las teorías jurídicas
                                                                                                                              doctrinario alemán. Por una parte, desde el plano "formal", bajo el
  post-positivistas, 2ª.ed,, Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2009, ps. 109 a 126. Entre
  una vasta bibiiografía, cfr., asimismo -:en.el amplio marco de esta perspectiva- los                -     - ;._
. sugerentes estudios de LóPEZ CALERA, Nicolás; SAAVEDRÁ LóPEZ, Modesto, e IBÁÑEZ,                        ...        ·1 . ·        71
                                                                                                                                       Fallos, 305: 184 7 y muchos otros (el énfasis es añadido).
  Perfecto A, Sobre el. uso alternativo del derecho, F, Torres, Valencia, 1978, passim,                               ¡-           72
                                                                                                                                       Fallos, 306:1883 y muchos otros (el énfasis no pertenece al original).
  y de CALVO; José,.Lajusticia como relato. Ensayo de una semionarrativa sobre los
                                                                                                            .r.l·
                                                                                                                                    73
                                                                                                                                       Fallos, 149:137; 151:92; 155:42, entre muchos otros (el énfasis corresponde
 jueces, Hybris, Málaga, 2002, passim.
                                                                                                                              al original).
                                                                                                                      1
                                                                                                   -·
            que; como se ha estudiado en el capítulo anterior, se pretende que                                          Por su· parte, la segunda obliga -a concebir la totalidad del
            el sistema jurídico carece de contradicciones o de in.consistencias;                                   ordenamiento como una unidad conceptual carente de fisuras, aún
            lo cual, para seguir Ia distinción de N eíl MacCormick, se denomina                                    al precio de tener que silenciar oscuridades o defectos técnicos en
           ."consistencia". Y, por otra; desde el plano "material'', bajo el que se                               la redacción de las normas.          ·      ·
            procura atribuir .el significado más "coherente" a una ncirma          su    eri                            Pues bien, la Dogmática tradicional ha caracterizado a esta
          . relación con las dem~s; de modo de mostrar que entre todas. existe ·                                  pauta de interpretación desde una triple perspectiva, a saber:
            U:naarmoníao, mejor aún, una "unidad de sentido". Dicho eri otros                                           1) directriz 1"topográfica", también conocida como "argumento
            términos: se atribuye el significado de un texto en furición de su                                    de la sede mater.iae'.', según la cual el alcance de una norma puede
            contexto "siste~ático", esto es, a la luz del sentido inherente a las                                 obtenerse a partir de la identificación del lugar en el que ésta se
           restantes disposiciones que integran el sistema 'jurídico, noci6n                                      halla ubicada;
            ésta a la que el autor recién citado denomina "coherencia". Como
                                                                                                                        2) directriz de la "co.nstancia terminológica", por la que se pos-
            explica. MANASSERO, mientras la consistencia "exige que la premisa
                                                                                                                  tula que el intérprete debe atribuir a un término el significado que
            normativa no se encuentre en contradicción cori el resto de las re-
            glas válidas del sistema", lp. "coperencia (... ) irpplica que la premisa                             éste ha recibido tradicionalmente tanto por parte de la sociedad,
            pueda representar un caso de· un principio general que abarca a                                       como del legislador y de la doctrina, y
            un conjunto de normas, principio que responda a üna concepción                                              3). dir~ctriz "sistemática en sentido estricto", de acuerdo con
            de vida 'satisfactoria' " 74 •                                    ·                                   el cual ei ordenamiento jurídico debe ser interpretado como un
                                                                                                            l     todo armónico, en razón de hallarse integrado por un conjunto de
                 En ambas dimensiones, como es obvio, la tesis que late de-
           trás de este argumento es la de la racionalidad del legislador. De.                                    elementos que componen una unidad de significado 75 •
                                                                                                            1
           ahí. que si se advirtiera la existe.ncia de alguna "inconsistencia" o                                        Considero que los dos primeros supuestos responden a la idea
¡~   .
(          "incoherencia", ellas pueden ser suplidas mediante.el solo recurso                                     de "consistencia'', en tanto que el tercero lo hace respecto de la
           al sistema, esto es, a su lógica interna, ya que sü intrínseca racio-                                  n.o.ción dé "coherencia".                 /
           nalidad le permitiría superar los escollos que, de tal modo, nunca                               1           La jurisprudencia también ha sido pródiga en cuanto al em-
           fueron reales, esto es, solo revistieron el carácter de meramente.                                   . pleo de estas pautas interpretativas. En lo que hace a la Corte
           "aparentes". Sin embargo, mientras el camino para salvaguardar                                   1
                                                                                                            l     Suprema, como ejemplo de la aplicación del canon "topográfico"
           las inconsistencias ostenta l,lna virtualidad, si se. quiere, "negati-                                 puede mencionarse la causa "Arcana Orazio'', en la que deses.timó
           va" o auxiliar del sistema, el iter necesario para dotar a aquel de                                    el agravio de un particular originado a raíz de que la tasa de inte-
           "coher~ncia" ostenta U:na,significación "positiva".                                                    rés correspondiente a la devolución de lo pagado de más por parte
                 Eri efecto: la prime:i;:it consiste en salvar la aparente contradic-                             de los contribuyentes no es la misma que la que puede percibir el
           ción mediante. el recudo· a Ciertos tópicos previstos expresamente
           por el sistema. Entre ellos,. se destacan los ya ~encionados de "ley                             1     Estado de sus deudores morosos. Entre los argumentos brindados
                                                                                                                  por el Tribunal para resolver se señaló que "desde el punto de vista
         ·posterior derog-a ley anterior"; "ley superior deroga ley inferior" y
           "ley especial deroga ley general".                                                                     formal, el art. 42 integra el Título I, Capítulo VII, de la ley 11683
                                                                                                            1     (t.o. 1978) referente a 'intereses, ilícitos y sanciones', de manera
                                                                                                                  que legisla las consecuencias del incumplimiento de las obligaciones
                74
                   MANASSERO, María de los Ángeles,. "El argumento consecliencialista en la                 1
                                                                                                                  del contribuyente hacia el fisco; mientras que el art. 161 se halla
         teoría de Neil MacCormick: su función y límites", en AA.VV~, Argumentcu:iónjurídi-                 1
         ca; Universidad del Litoral, Santa Fe, 2003, p. 46. Al respecto, la autora ejemplifica·                  en el Título II, Cap. II, denominado 'De las acciones y recursos',
         con el caso de "una norma que regula la velocidad de los coches amarillos a 80 km                        que, por tanto, alude a las acciones del primero contra el segundo.
         por hora y la de los de otro color a 110 km''. ·A su juicio, "ambas normas no son
         contradictorias, no son inconsistentes, pero sí afectan a la coherencia del sistema,
                                                                                                                      75
         puesto que no es posible abarcarlas en un principio general que guarde relación                                 Cfr. sobre esto ZULETA PUCEIRO, Enrique; RABBI-BALDI CABANILLAS, Renato,
         con la regulación vehicular''. De ahí que concluya con la idea de Atienza, según la                    y MANASSERO, María de los Ángeles, Teoría y práctica de la interpretación en la
         cual "la coherencia normativa es un mecanismo de justificación, porque presupone                       jurisprudencia económica de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (1990-1998),
         la l.dea de que el Derecho es una empresa racional" (loe. cit.).                                       Universidad Católica de Santa Fe, 1999 (pro manuscrito), p. 51.
                                                                                                    ;'~'
                                                                                                                        ~.    -. ·.
                                                                                                        ;..-:
 334                              TEORÍA DEL DERECHO
                                                                                                                                                                   LA IN.'..PERPRETACIÓN JlJ!tÍDICA        335
 Es decir, que las normas están situadas en capítulos referentes a                                                                    · prema, luego de puntualizar que ésta és un corijunto armónico, ha
 temas muy distintos" 76 •                                  .          ·.
                                                                                                                                        afirmado reiteradamente que "los derechos fundados en cualquiera
      Por su parte, el argumento de la "constancia terminológica" se··                                                                  de sus cláusulas tienen igual jerarquía, y que la interpretación debe
 advierte en una amplia familia de fallos, como por ejemplo ·cuando                                                                     armonizarlas, ya se trate de derechos individuales o de atribuciones
 se expresa que "las palabras deben emplearse en su verdadero sen-                                                J                     estatales"ª 1 • D~ ahí que, a juicio del Alto Tribunal, ha de "recha-
 tido, en el que tienen e,n la vida diaria" 77 , y de modo más completo;                                                                zarse toda interpretación de la que resulte que un derecho de base
 pues se apela, además, al significado técnico de las normas1 en otros                                                                  constitucional -para tener vigencia- requiere, inevitablemente, la
 pronundamÍ\:!ntos.se ha dicho que la iñterpretación de la,Jey "debe                                                                    sustancial aniqupación de otro" 82 •                             .
 hacerse ~e acuerdo al sentido propio de las palabras empleadas sin.
 Violentar su significado específico, máxime cuando aquel cóncuerda
 con la acepción corriente en el entendimiento común y la técnica                                                 l                         . § 32. El aporte del movimiento del "Derecho Libre" al
 legal empleada en el ordenamiento jurídico vigente" 78 •                              ·                           l
                                                                                                                   ¡
                                                                                                                                        fenómeno interpretativo. - La apertura de la doctrina posi-
       A su turho, el argumento "sistemático en senti,do estricto" asu-                                                                 tivista a las directrices argumentativas recién estudiadas no fue
 me manifestaciones diversas.       Así, y a propósito' del~ interpretación                                                             sin implicancias para ia "pureza" de su concepción. Por de pronta,
                                                                                                                                        como observí3. .R.ADBRUCH, "entre estos métodos de interpretación, es
 de las leyes o te glas 1.nfraconstitucionales entr.e sí, se ha- dicho que
 "en la tarea de investigar las leyes debe evitarse darles un sentido                                                                   el juez el llamado a elegir'', con lo cual, se quiera Ó no, aquel acaba
 que ponga en pugna sus disposiciones destruyendo las unas por                                                                          por situarse en el centro de la escena, consecuencia que, según se
 las otras y adoptahdo como verdadero el que las concilie y deja a                                                                      ha puesto de relieve, es exactamente lo que el positivismo preten-
 todas con valor y efecto" 79 . A su vez, en relación con el par leyes
                                                                                                                   1                    día evitar. Y el tema se dificulta todavía más para esta postura si
 subc·onstitucl.onales-normas constitucionales, la .Corte ha dicho que                                   .. 1
                                                                                                                t                       se pondera, como añade agudamente el autor citado, que "no debe
                                                                                                                                        negarse que el jurista puede, a veces, sacar de la ley más de lo que
 "las' leyes deben inte~pretarse de manera que sé compadezcan' eón
 ios derechos, principl.os y garantías de la Constitución nacional, en
 tanto tal exégesis pueda practicarse             sÍh
                                               violencia de su letra o de su
 espíritl.¡."ª0 • Por su parte, en relación con las normas de la Ley Su-
                                                                                                                t
                                                                                                             . ¡r
                                                                                                                  1
                                                                                                                                      ·
                                                                                                                                        sµs autores pusieron conscientemente ~n ella", lo que ha llevado a
                                                                                                                                        decir que "la ley es más inteligente que el legislador"83 •
                                                                                                                                              Según se infiere fácilmente de 1o 1 dicho, y para seguir el razo-
                                                                                                                                        namiento de RAl:>BRUCH, parece claro· que el juez tiende a abando-
       76
            Fallos, 308:283.
                                                                                                                t 1
                                                                                                                                        nar el método de la ratio legis, es decir, de la reconstrucción del
                                                                                                                                        pensamiento del legislador, para pasar al de la ratio iuris, esto es,
       77
            Fallos, 320:389, ~ntre ot.ros.                                                                    j                         a discernir el sentido de las leyes "a base del sistema", con lo cual,
         78                                                                                                       1
            Fallos, 318:595, entre 0'tr.os. El "énfasis se ha añadido.                  ·
         79
            Fállos, 1:300; 190:571/,.194:371; 211:1628; 320:1962, sus citas; .322:1699 y
                                                                                                                j                       añade en una sentencia de incuestionable raíz hermenéutica, "desde
                                                                                                                  .¡
  muchos otros.· Una aplicación de esta hermenéutica, en la CFed. Salta se advierte,                                                    el momento en que ningún orden jurídico se crea atendiendo a un
  entre otras, en ~'Rl.vera González, O. s/incid.", in r~; sent. del 2/11/2009.                                J                        solo fin unitario, es evidente que la aplicación de la raúo iuris deja
       ° 8
            Fallos, 261:36 y sus citas; 308:647; corisi_d. 8 y sus cita~, entre muchos
                                                                                                              .j
                                                                                                               i                        ya un margen a las valoraciones del juez". El autor concluye en
  ·otros. Cfr., en .esta- línea, CFed.· Salta, entre· otras, i7i re, "Fiscal ·Federal nº 2 de                                           estos términos: "la teqría interpretativa del positivismo señala ya
  Jujuy requiere orden de allanamiento", sent. del 5/3/2010; "Ortiz, Benancia (en·                                1
  rep. de su hija discapacitada) c/PAMI s/amparo", sent. del 26/12/2012. Sobre este                               i                     el camino para salirse de ella e ir más allá" 84 . Es eso, pues, io que
  tópico cfr. mi estudio La Corte Suprema como ."poder del Estado" y el desarrollo                                                      se verá a continuación a partir del examen de dos corrientes cuyos
                                                                                                        . . 1.
  de las ·garantía$ constitucionales, JA,. t. 2003-IV, fase. 9, esp. ps. 49 a 52. En la                                                 postulados ya han sido anticipados más arriba: la de la denoininada
  actualidad, la aplicación. de estos criterios observa un notable desarrollo a partir .de
  los estudios que,_en la doctrina comparada, se conqcen co_mo."neoconstitucionalisrno".                 ~¡                             escuela del "Derecho Libre" y la de las tesis "iusnaturalistas" que
                                                                                                                                        se remiten a la idea de la "razón práctica".
 -Para un examen general de estas .perspectivas,· cfr, por todos, Vmo, ·Rodolfo· Luis,
  Iusnaturalisrño y Neoconstitucionalismo_. ·coincidencias y diferencias, EDUCA,
. Buerios Aires, 201q. Cfr. asimismo mi estudio "Arguméntación jurídica y Estado                                                           81
                                                                                                                                                Fallos, 255:293; 264:94; 272:231, entre muchos otros.
  constitucional de derecho", en, ROJAS, Jorge A.:(dir.), y MORENO, Romina S. (coord.),                                                    82
                                                                                                                                                Fallos, ·251:87, s~s citas y muchos otros.
  Derecho procesal y Teoría -General del Derecho, Rubinzal-Culzoni, Santa Fe, 2015,.
  ps. 239 y 252.
                                                                                                         ·¡ ·-                             83 RADBRUCH,
                                                                                                                                           84
                                                                                                                                                              Gustav, ob. cit. en nota 7, p. 122.
                                                                                                                                                Ibíd., loe. cit.
                                                                                                    . -¡
                                                                                                      . .J.·
                                                                                                .   •    ~
                                                                                                             T
                                                                                                     c. ·.···1··
                                                                                                              •        >--.
                                                                                                        .....
                                                                                                        '"º~··
                                                                                                          ~.\ '•"7 .
 ,·,                                                                                                            . q \· ~
 '"·1:                                                                                                             t·
                                                                                                    .   /.
~
 ~
           336                            TEORÍA. DEL DERECHO                                                                                                  LA    Il'fl'ERPRETACIÓN JURÍDICA          337·
 ~
 ~
 ~r-                                                                                                              .
                   ·En cuanto conc"ierne a la prim~ra, refiere RÁDBRÚCH que ".el                                                     "formalista" y "lógico-deductiva" bajo la cual se ha tradicionalmente
1
!~
i!~¡
              movimiento del Derecho Líbre empezó a demostra7'., .con aJ-uda de ..
              medios lógicos y psic.olÓgicos" que la pretendida "unidad -cerrad~"
             .del ord.enamiento jurídico "era simplemerite un postulado 'ü, por.·
              mejor decir, una .ficción".. -En efec~o: .'fes C:Íerto que la interpretación
                                                                                                                                     estructµradQ el positivismo jurídico.
                                                                                                                                           En. ese contexto, RADBRUCH menciona -eri el ámbito de la teo-
                                                                                                                                   ·ría- al ya·citado Ihering y su objetivo de discernir el ~'fin en el de-
                                                                                                                                     recho"; a la "jurisprudencia de intereses" que tuvo a aquel autor ·y a
:~          . puede llegar a ente:p.!ier la ley. mejor que ~u n:iismo autor, pero : .                                                Heck entre sus principales valedores; a la propuesta de un "método
¡¡1:1.        no cape duda de que entramqs en el.ferrern;i de lo ficticio cuando.
::; i.
1• •
                                                                                                                                   · sociológico" para la ciencia jurídica, tal la defendida por Fuchs o
~~            consideramos a la ley, no ya·rriás inteligente que a quien la redactó:.                                                Sinzheimer; la formula de un "derecho vivo" acuñada: por Ehrlich;
,~¡.
i-1           sino mucho tná$ que eso, comq omnisciente,· es decir como capaz de·                                                  . el giro hacia la ctfor'mación teleológica o finalista de conceptos" del. .
~k-          resolver todos Y' cada uno de lo~ problemas jl!rídicos. qtie pueda:n                                                    mencionado Kantarowicz o·, "últimamente, con la terminología más
~
~~
              plante.arse" 85 • .              · .        ·            '  .       .        ·
                                                                                                                    1
                                                                                                                                     o menos equivalente de un pensamiento ordenador concreto, vuelve
                   Por ele pronto, el .movimiento del Derecho Líbre llamó la ate~- .
m
·~            ción ácerca.. de que tal aserción ni siquiera- fue postulada, en -pu- ·
                                                                                                                                     a insistirse, solo que COri otras palabras, en 1a necesidad de crear
                                                                                                                                     el Derecho inspirándo$e en la naturaleza de las cosas"ªª.
]~            ridad, por el propio positivis.mo, ya que "el mi'smo legislador se                                                          Y -en el ámbito' de la práctica- el autor concluye con el ejem-
 '!~
·,~_
              cuida de auforizar al juez, dentro de ciertos' límítes; para que, en
              caso nece.sario, descubra creadoram¡mte el :Derecho que ha de. ser
                                                                                                                                     plo, ya co~ócido, del Código Ci~il suizo; al que considera la "profe-
~;:!.
~.11
                                                                                                                                     sión de fo' de todos los partidarios del Derecho libre" 89 •
~            aplicado, por medio del empleo de cláusulas .generales incorporadas                                 .! .                    Su ·artículo 1º, como ya fue anticipado en el cap. IV, postula, de
~
:i:'
¡;.
              a la ley, tales como las de la 'equidad',· la 'buena fe', las 'b.uenas · ·                            ¡.-              entrada, la "aplicación" de la ley a las materias a las que se refieren
              costumbres' y otras por el estilo" 86 • . ·
¡11;
                                                                              ·
t'.          derivable de la ·segu.nd_a" ... De ahí qué -:eompleta RADBRUCH- "el rP.o-·
             viiniento del Derecho li,bre.no. se propone, pues, conferirle al juez
                                                                                                                   r!·
                                                                                                                    l'
                                                                                                                                    para lo cual ha de tener en cuenta -y aquí la influencia de Gény
                                                                                                                                    es obvia- lo pensado por la "doctrina" y la "jurisprudencia". El
                                                                                                                                    ejemplo de RADBRUCH guarda curiosa semejanza con los de nuestra
 tr
          . nuevas atribuciones, SlnQ. simplemente, llevar a ·su consciencia lo                                                     Corte Suprema de Justicia, que se verá al examinar el capítulo
             que; sin confesárselo y: tal vez sin darse siquiera cuenta de ello, ha                                                 siguiente. A su juicio, "ejemplos importantes de administración
·•:i-
   ~
           . he.cho siempre,- que 'es .venir en ayuda <J,e. la ley, complementando                                                  creadora de justicia por parte del Tribunal Supremo del Reich son
             sus normas por medio de la propia iriiciativa'; 87 •           ·
¡¡                                                                                                        '. -.r·
                                                                                                             t:
                                                                                                     ...   ,..
                                                                                                             ~       ...
                                                                                               - ---1·
                                                                                                   _____,_·--
                                                                                              .· - - ' .
                                                                                              .   --::_.
         338                           TEORÍA DEL DERECHO
i:
          todo en la dictadura del nacionalsocialismo, eri la cual fácticamen-                                   l         gesetzliches Recht", Süddeutschen Juristen-Zeitung, ps. 105 a 108 y que traduzco
                                                                                                                           como "Injusto legal· y derecho supralegal". Para una síntesis en _castellano de este
          te -se dictaron leyes corruptas, delictivas', infames, inmorales y se                                  l-        estudio, cfr. RADBRUCH, Gustav, ob. cit. en nota 7, ps. 178 a 180 con las que se cierrá
                                                                                                            1
          exigió Ia observancia de las mismas" 92 . •                           ·
                                                                                                                           su obra. La tesis de este autor ha tenido una muy reciente revalorización a raíz
                                                                                                                           de los casos fallados por la justicia alemana respecto de graves ilícitos cometidos
                Corno parece claro, la :mera promulgación de las· leyes a través                                           bajo el régimen legal de la entonces República Democrática de Alemania, previo a
         del procedimiento formal establecido por un sistema en- ll.ll país de- -                                          la reunificación de 1990 con la República Federal de Alemania. Para un estudio de
         terminado se tornó controvertible a fin de dotar dereconocímiento                                       1
                                                                                                                 1-        esos casos y la repercusión de dicha fórmula, cfr. los diversos trabajos publicados
         jurídico a tales normas. El su¡mesto de la "injusticia extrema))                          -- -1--                 bajo la coordinación de VIGO, Rodolfo L., La injusticia extrema no es derecho (de
                                                                                                                           Radbruch a Alexy), La Ley, 2004, passim y el estudio de SODERO, Eduardo, "Alema-
       - -para seguir las palabras de RADBRUCH, que conducen a negar rango                                                 nia: sobre el antipositivismo jurídico del Bundesverfassungsgericht", en RABBI-BALDI
         de derecho a un sistema legal "donde ni siquiera se pretende la -                        - _J _ -
                                                                                                                           CABANILLAS, Las razones ... , ob. cit., nota 1, ps. 387 a 410. La cita transcripta en
                                                                                                                           el cuerpo la he tomado del trabajo de Robert ALEXY citado en la nota 13 del cap. I.
                                                                                               :,·_-~ ::" - :- - .               94
                                                                                                                                    Sobre estos extremos cfr., por todos, VIGO, Rodolfo L., Interpretación jurí-
             ·
                 91
                  Ibíd., loe. cit. Cfr., asimismo, p. 127. -
                 92
                  KAUFMANN, -Arthur, "El renacimiento _del derecho natural de la posguerra
                                                                                              - .::i-.
                                                                                                      -'t                  dica (del modelo iuspositivista legalista decimonónico a las nuevas perspectivas),
                                                                                                                           Rubinzal-Culzoni, Santa Fe, 1999, esp. ps. 13 a 43.
        y lo que fue d_e é!", en RABBI-BALDI CABANILLAS, Renato (coord.), Las razones .. .,
        ob. cit. en nota 1, p. 360.                                                                          r                   95
                                                                                                                                    Cfr. KAuFMANN, Arthur, Analogía y naturaleza de la cosa. Hacia una teoría
                                                                                                                           de la comprensión jurídica, Jurídica de Chile, Santiago, 1976 (del alemán por E.
                                                                                                     -J -
                                                                                                               ·--
                                                                                                           -1--=···· -
                                                                                                           :r
                                                                                                           -<~.r·.·.·_
                                                                                                     . -.-::·1·   ·!"'·
.....::.· - ..
 ~
 ~
        340                             TEORÍA DEL DERECHO
                                                                                                        .l                                                     LA I1:fl'ERPRETACIÓN JURÍDICA                         341
t
1        un procedimiento "dialógico" o "dialéCtico'' puesta de relieve por Mi-                                                             Como parece previsible, los esfuerzos por parte de la doctrina
n        chel VILLEY96 , dentro del cual asumen un papel determinante tanto                                                             en orden a desarrollar las aristas recién expuestas no siempre han
i
1
 ~.
 ~
         la "argumentación retórica" subrayada por Chaim PERELMA.t!97 , como
         el pensamiento "tópicq" (o por principios) llevado a cabo por Theodor
         VIEHWEG 98 , se caracterizan por las siguientes notas: a) atención a.·
                                                                                                                                        coincidido en la totalidad de su desarrollo, todo lo cual motivó su-
                                                                                                                                      . gerentes contrapuntos que, en definitiva, contribuyeron a mostrar
                                                                                                                                        la vitalidad y actualidad de un cuerpo de ideas cuya influencia
 ¡                                                                                                                                      sobre la teoría de la interpretación ha sido inmensa, tal y como se
  f    · la realidad de las cosas o, si se prefiere; de las concretas ·circuns-
  ••
  ~      tancias que configurari los casos; b) imposibilidad de llevar a cabo                                                           observará en lo que sigue .
~:¡      una mera "aplicación" lógicocdedu~tiva del ordenamiento jurídico·
 .,     .a los supuestos de hecho considerados por aquel; ¡:;) ampliación del                                                             b) NOTAS CARACTERÍSTICAS DE LA TEORÍA DE LA RAZÓN PRÁCTICA .
t~!
         sistema jurídico, el que se concibe como integradp tanto por leyes
         (o reglas) cuanto por principios (o valores), y d) ccinsid.eración del
                                                                                                                                      SOBRE LA INTERPRETACIÓN. l. LA VALORACIÓN DE LA REALIDAD DE LAS
                                                                                                                                      COSAS: El primer aspecto que interesa resaltar por parte de esta
.~       relevante papei que ocupa e.l deeisor (árbitro; amigable componedor                                                          teoría es la relevancia de la realidad de las cosas, la que viene dada
:t       o juez) en el discernimiento del derecho de cada uno en la situación                                                         por su propio peso. En verdad, resulta difícil prescindir de ella, tal
,J;      llamada a resolver, lo que exig.e la conjunta valóración tanto del                                                           y como ha insistido sin fatiga Michel Villey a partir del célebre paso
'I'                                                                                                                                   romano atfibuido a Paulo, según el cual "regula est quae rem quae
f1~      horizonte normativo como de las citcunstancias del problema, de                                             1
¡::·
         suerte que la decisión judicial huye de un esquema. "subjetivista~                                                           est breviter enarrat. Non ex regula ius sumatur, sed ex iure quod
        voluntarista" (more kelseniano) y se encolumna en otro ~'objetivista                                        1                est regula fiat" 99 . Pero, como fácilmente se comprende, la enseñanza
                                                                                                                                      romana no es cosa antigua, sino que traspone las épocas y las
        prudencialista" (more aristotélico-romano), en el que se confía en·                                         1
1;.
~:r
        una "razón práctica" que es capaz de determinar modelos de virtud
        (por oposición a otros menos logrados) y, en definitiva, respuestas.
                                                                                                                    ¡.                fronteras, básicamente por revelar una verdad incontrastable. Un
                                                                                                                                      vcito del antiguo juez de la Corte Suprema Luis M. Boffi Boggero
                                                                                                                                      ilustra adecuadamente esta idea: "la revisión por los jueces no
·'      jurídicas justas (para distinguirlas de otra~ inicuas).
·i                                      .    .         ...   .                                                      .1                puede (... ) quedar reducida, tal com6 lo dispone el art. 14 de la
                                                                                                                                      ley 14236, al aspecto que se vincula,con la correcta aplicación de
         Barros Bourie), ps. 56 y 57. Para un estudio de co~j~nto de ~ste autor, cfr, RABBI- ·                       ll               las normas jurídicas por el organismo administrativo, sino que,
         BALDI CABANILLAS, Renato, "La determinación del derecho en Arthur Kaufmann",                                                 teniendo en cuenta que los procesos judiciales se integran, al menos
         Anuario de Filosofía Jurídica y Social, nº 25, Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2005,
         ps. 43 a 80.                   .                             .         .
                                                                                                                     ¡                en una instancia, con la faz 'de hecho' y con la 'de derecho', esa
               96                                                                                                    i                revisión ha de penetrar el examen de los hechos, aspecto esencial
                  ·cfr., por todos, su último trabajo: Questions de Saint Thomas sur le droit et .                   l
::
:;.      lapolitique, .PUF, París, 1987./Sobre este planteo, cfr. mi artículo: Una metodo,ogía                                        que no puede ventilarse solamente en la órbita administrativa". Lo
         jurídica realista desde Tomás de Aquino, "Rivista' Internazionale di Filosofia del                          1                contrario, añade; implicaría que "todo agravio legítimo al respecto
         Diritto", Milán, v~l. LXVIII, nº    3, 1991, ps. 494 a fil5 (reproducido en ED, Buenos                      1                [de la valoración de los hechos] quedaría fuera del examen judicial
       . Aires, t. 144·; ps. 771 a 781)..      ·      ·       . .,              .
               97
                   Cfr., por todos, La lógica jurídica y la nueva retórica, Civitas, Madrid, 1979                                     (.... ). Y es fácil concluir que una indebida fijación de los hechos
:·¡
         (del francés por L. Díez Picazo). Para uh. estudio· de este autor; cfr. MANASSERO,                          1.               no puede ser subsanada con una acertada selección de las normas
         María de los Ángel~s, De la argumentación al derecho razonable. La teoría de                                                 jurídicas porque sería equivocado el presupuesto de que entonces
         la argumentación de Chaim Perelman y s1L repercusión en el ·nerecho, EUNSA,                                                  se habría partido en el acto de juzgar" 1ºº.
                                                                                                                    ·~
         Pamplona, 1995.                   .       .     .                .   . .             .
               98
                  Su clásica· obra es Topik und Jurispruderiz, Beck, 1952, con permanentes
                                                                                                                                             Como surge de lo expuesto, no se trata, meramente, de con-
         reediciones ..Este libro. ha sido traducido al castellano por Luis Díez-Picazo bajo el                                       siderar los "hechos", puesto que tal procedimiento también viene
         título Tópica y Jurisprudencia (Taurus, Madrid, 1964, con prólogo de E. García de               .. -¡··
                                                                                                               .             .        dispuesto por el positivismo jurídico -teoría que, como se anticipó,
         Enterría). A su vez, Jorge M. Seña tradujo (revisión de Ernesto Garzón Valdés y
         Ruth Zimmerling) un importante conjunto de artículos del autor en relación a este                           ¡
                                                                                                                     l
                                                                                                                                           99
         asunto y que recibió el título de Tópica y Filosofía del Derecho, Gedisa, Barcelona,                                                 Digesto, 50, 17, 1 y que traduzco como: "La esencia de la regla es enunciar
         1991, con observación preliminar de E. Garzón Valdés. Para un estudio de conjunto                                            brevemente una cosa preexistente. El derecho no debe extraerse de la regla, sino
         de la obra de este autor, cfr. mi trabajo: La ciencia del derecho como saber retórico-                                       que del derecho que preexiste, debe extraerse la regla".
         tópico: el planteamiento de Theodor Viehweg, ED, t. 185, p. 1270.                                                                  °
                                                                                                                                           10
                                                                                                                                               Fallos, 244:548 (el énfasis es del original).
                                                                                                                     1
                                                                                                                    .1
                                                                                                                     1.
                                                                                                                     1
                                                                             ':·~~~···...
./.
                                                                                .r1-
                                                                                                  te, aquella se recrea en éste y, por otra; el caso es "comprendido"
  ep. el contexto de la cültura en la que se encuentra, dotándose. dé·                            por la norma, a la manera como un arj;esano prepara, por ejemplo,
. un sistema que facilita dicha búsque_da. Peto, de momento, tanto el ·                           un traje a medida. La norma, en efecto, es perfilada (recortada o
  texto romano como el dictum del juez Boffi Boggero procuran llamar .                             extendida, ·según corresponda) en furtción del caso, esto es, a la luz
  la atención acerca de que no es posible prescindir de esa realidad.                _J .          de sus datos propios y más característicos, en un camino "de ida y
                                                                               .·· f1             vuelta", como expresa Karl Engisch, en el que el resultado jamás
      2. DE LA APÓRÍA DE LA APLICACIÓN A LA INTERPRETACIÓN COMO                     l             puede ser una aplicación mecánica o meramente formal de la nor-
 "PUESTA EN CORRESPONDENCIA" DE NORMA y CASO: El segundo aspecto                          !       ma a la situación examinada, sino un ajustamiento recíproco entre
  qµe resulta central en ;ta 'teoría iUsnatu:i;-alista bajo !3Xamen es la·       . ¡l -.          ambos elementos como consecuencia de la prudente valoración o
 imposibilidad de_ llevar a ca.bo el planteamiento lógico-deductivo                               ponderación de ellos por parte del intérprete.
 prohijado por fa "Dogmática", lo cual es. debido no solo ala inmensa                                   El autor que quizá mejor ha descrito esta cuestión fue el anti-
 .variabilidad y creciénte complejidad de los hechos, sino a que                                  guo catedrático emérito de la Universidad de Munl.ch, Arthur K.Au-
 entre normas y realidad media un abismo conceptual que ha sido.                          1       FMANN. A su juicio, el derecho emerge como una "correspondencia
 bien caracterizado por Wiéland bajo el nombre de la "aporía de la                        j       entre el 'deber ser' de las normas y el 'ser' de la situación vital'', dé
 aplicación". · .    ·          . · .. ·              .   .     . .                               modo que "solo donde la norma y la situación concreta de la vida,
                                                                                          !
                                                                               -f
      A su juicio, existe entre las normas y la sl.tuación vital una                              'deber ser' y 'ser', uno y otro sean puestos en correspondencia, se
 heterogeneidad categorial que e$ problemática, ya qµe "en tanto                                  origina el derecho real ( ... ). El derecho es una correspondencia;
 lo universal puede ser des_crito por un número finito de notas                                   así la totalidad del derecho no es un complejo de artículos, ni una
 características, lo particular se resiste a d~cho tratamiento, tal             ··.l              unidad de normas, sino una unidad relacional. Unidad relacional,
·como ocurre én el Derecho: si bien fas normas jurídicas intentan
 captar y regular, bajo determinadas notas, el complejo ámbito de
                                                                              . -j'
                                                                                                    101 ZULETA PUCEIRO, Enrique; RABBI-BALDI
 las aceiones hümanas en sociedad, dicho ámbito se muestra remiso                -.,L           María de los Ángeles, ob. cit. en nota 74, p. 19 .
                                                                                                                                                     CABANILLAS,   Renato, y   MANASSERO,
..
                                                                                 _,¡.
                                                                                -·
                                                                                ·• ·1.···
                                                                                             .·:.~:'"
      105
          Cfr.; por todos, DwoRKIN, Ronald, Taking rights seriously, Duckworth,
Londres, 5ª ed., 1987, ps. 81 a 130.
          Cfr., al respecto, ATIENZA; Manuel, So.bre lo razonable en el derecho, "Re-
                                                                                                 ..l
                                                                                                  ¡·
                                                                                                  ¡·
                                                                                                         mayores de 18 años, es claro que aquellas que no tengan aún dicha
                                                                                                              106
                                                                                                                              Arthur, ob. cit. en nota 95, ps. 84 y 85.
                                                                                                                    KAUF!VIANN,
vista Española de Derecho Constitucional", 9, 27, septiembre-diciembre 1989, ps. 93                           107
                                                                                                                  CSJN, causa "M.D.H. c/M.B.M.F.", sent. del 29/04/08 (apart. V del dic-
a 110 y, del mismo autor, Los límites de la interpretación constitucional. De nuevo                      tamen de la procuradora Marta Beiró de Gonc;alvez, que el Tribunal hace suyo.
sobre los casos trágicos, ."Anuario de la Facultad de Derecho de la Universidad                          El destacado me pertenece), Fallos, 331:942. Cfr., más ampliamente sobre este
Autónoma de Madrid", Madrid, I, 1997, ps. 245 a 265.                                              1      supuesto, infra, nota 182.
                                                                                                  1
                                                                                                  J
                                                                                                e:~-
/--
 edad escapan al marco de posibilidades previsto por la norma,                                                    los variado"s y virtuosistas métodos de la interpretación jurídica
 por lo que tal supuesto_ de hecho no resulta aplical;>le a la regla                                              que tiene por objeto el lenguaje del legislador. En las formulacio-
 en cuestión 108 • Como expresa el autor recién citado, "si el _derecho                                           nes de principios -hay poco que interpretar de este modo. Por lo
 solo estuviese compuesto de reglas no sería insensato pensar en la:                                              general, su significado lingüístico es aú.toevidente y no hay nada
 'maquinización' de su aplicación por medio de autómatas pensantes,                                               que deba ser ·sacado a la luz razonando sobre las palabras". De
 a los que se-le proporcionaría el hecho y nos darían la respuesta" 1º9 • -                                       ahí que, como añade el profesor de Turín, es relevante comprender
    - Por el contrario, en relación con los principios (piénsese; por                                           - "el mundo de vafores, las grandes opciones de cultura jurídica de
 ejemplo,- en ''.nadie puede alegar su propia torpeza"; "nadie puede                                              las que forma_ p_art_e y a las que las palabras no hacen sino una
 contradecir sus propios actos"; ":rio se admite- el enriquecimiento -                                            simple alusión:" 112 • Estos, en efecto, y aquí está lo decisivo, carecen
 ilícito',;- ¡'nadie- púede estar obligado a cumplir lo 'imposible"; "los                         -1
                                                                                                                  de un supuesto de hecho, es decir, no imponen una acción confor-
 contratos deben cumplirse de buena fe"), que aparecen tanto eh                                                   me con el supuesto normativo, como en las reglas, por lo qu_e su
 las circunstancias de la vida como en los textos positivos (consti- -                                            significado no puede_ determinarse en abstracto, "sino solo en los
 tucionales -o infraconsti tuéionales)' se les "presta adhesión"' por lo                                          casos concretos" 113 • De ahí que "la aplicación de los principios es
 que asumen la modalidad de "razones para el obr~r''. por parte de                                                completamente distillta y requiere que, cuando la realidad exija de
 la sociedad, de donde "no puede -existir una cienc_ia sobre su arti-                                          - nosotros uha 'reacción', se tome posición ante ésta de conformidad
 culación,- sino una prudencia en su ponderación" 11 º.      -                                                    con ellos"ü 4 •
       En: tazón de lo_ dicho, ¿cómo cabe resolver un supuesto de                                                      De modo semejante, para Robert ALEXY la "ponderación" es
 tensión o de conflicto entre, por ejemplo, la libertad de prensa y el                                            uno de los conceptos decisivos de su teoría sobre el constituciona-
 derecho al honor; el derecho de propiedad y el interés general de                                                lismo discursivo, aunque "forma parte de un principio más amplio:
 la c?munídad en una situación de emergencia; la libertad religiosa                                               el principio de proporcionalidad", el que "se conforma por tres
 y el derecho a la vida? 111 •                                       ·
                                                                                                                  s~b-principios: el de idoneidad, el de :pecesidad y el de proporcio-
--     Como parece claro (y ello es avalado por el examen de la juris- -                                          nalidad en sentido estricto. Estos principios expresan la idea de
 prudencia de los tribunales, en especial, de lo's constitucionales), la
 dilucidación de la precedencia de un principio sobre. otro en un caso -
                                                                                                      1
                                                                                                      l
                                                                                                                  optimización. Interpretar los derechós fundamentales de acuerdo
                                                                                                      1-          al principio de proporcionalidad es--tratar a éstos como requisitos
 determinado no puede llevarse a cabo según los cánones de unp_ -
 interpretación lógico-deductiva, sino a través de una ponderación
 de los principios en juego, en las peculiares circunstancias en la:s
                                                                                                   ¡  l
                                                                                                                  de optimización, es decir, como principios y no simplemente como
                                                                                                                  reglas. Los principios, como requisitos de optimización, son normas
                                                                                                      ¡           que requieren que algo se realice con la mayor amplitud posible
 que éstos se dan cita. 1¡6 .efect.o, ."solo a las reglas se le$ aplican
                                                                                                      1           dentro de las posibilidades jurídicas y fácticas" 115 • En ese contexto,
                                                                                                                  los dos primeros- sub-principios aluden a esta última optimización,
     -
         108
            Cfr. alrespe~to lo resuelto en la causa de Fallos, 302:1284.                                          en tanto que el tercero, a la jurídica. La "idoneidad" alude a los
         109
                          Gustavo, El derecho dúctil, Trotta, Madrid, 1995 (del italiano
               ZAGREBELSKI,
                                                                                                                  medios más adecuados "para la promoción u obtención" de un fin
 por M. Gascón.Ábellán), p. 111.
      -
        110
            Ibíd., ps. 110 y 124.           , _
                                                        -
                                                                     .
                                                                       ·     -
                                                                                                      r           determinado a través de un principio, en tanto que la "necesidad"
        111
            No entrar_é aquí a la discusión acerca del acierto de aludir a un "conflicto"
 entre principios o derechos, el que,- a __ mi juicio, en ciertos supuestos es inevita·
 ble. Acerca de la inconveniencia de tal planteo, cfr. SERNA, Pedro; "Derechos fun-               -!>
                                                                                                      l           al "mandato del medio más benigno" o, como ha dicho el Tribunal
                                                                                                                  Constitucional Federal alemán, "el fin no puede alcanzarse de
 damentales: el mito de los confll.ctos de derechos. Reflexiones teóricas a partir de
 un supuesto jurisprudencia! sobre intimidad e información", Humana Jura, 4, 1994,
 Pamplona, ps. 197 a 234, y TOLLERJ Fernarido, "Propuestas para un·nuevo modelo
                                                                                                ·:·:¡-j   --
                                                                                                                     112 ZAGREBELSKI,
                                                                                                                     113
                                                                                                                          Ibíd., p. 118.
                                                                                                                                         Gustavo, ob. cit. en nota 108, p. 110.
 de interpretación en la resolución de co:qffictos entre derechos constitucionales",                                 114
                                                                                                                          Ibíd., p. 111.
                                                                                                  J
.Anuario de Derech,o, Universidad Austral, vol. 4, 1998, Abeledo-Perrot, Buenos                                       115 ALEXY, Robert, Ponderación, control de constitucionalidad y representación,
 Aires, ps. 225 a 252, y con posterioridad,· SERNA, .Pedro, y TOLLER, Fernando, La                              LL, t. 2008-F, p. 785 (del inglés por R. González de la Vega). Cfr., asimismo, de
 interpretación con,stitucional de los derechos fundamentales. Una alternativa a los                            este autor, Sistema jurídico, principios jurídicos y razón práctica, Rev. "Doxa", nº 5,
 conflictos de derechos, La Ley, Buenos Aires, -2000, passim.                                                   1988 (del alemán por M. Atienza), esp. p. 147.
                                                                                                      1
                                                                                                      i
                                                                                            ~   ·.J--
                                                                                                       ~·
                                                                                                         •:I.e"·
,,
L¡
 ~
l            348                            TEORÍA DEL DERECHO                                                                                        LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA                             349
 ,,
 .!11                                                                                                        'l       .•
 !1)
 r            otra manera que afecte menos al i_ndividuo" 116 • Por su parte, las
              "posibilidades jurídicas están esencialmente definidas· por princi~
                                                                                                                                  Afirma este autor que todo proceso de ponderación comienza
                                                                                                                             con una "subsunción" ya que, para seguir con el supuesto de la liber-
~
~
 •            pios contrapuestos'', de 1modo que "la ponderación no es más que la                                            tad de expresión, de un lado, y de la protección de la personalidad,
~             optimización relativa a p:rincipiQs contrapuestós" 117 • En efeCto: como                                     · de otro, corresponde primariamente examinar qué se entiende por
:¡i:          exi_sten "muchos conflíctos de principios'', tales como, por ejemplo,                                          "expresión" y- si, por ejemplo, los insultos quedan captados dentro
            · "la libertad de expresión y la protección de la personalidad" O ''el                                           de ese concepto. De seguido, procede ponderar el alcance de tales
'i!·¡.j .                                                                                                                    principios en relación con el caso, a fin de determinar si aquellos "se
.¡1           derecho a lá vida del nasciturus yel derecho a la personalidad de
I •
              la mujer", "la optimización significa ericontrar mediante la pon-                                   1          acomodan" a éste. Por último, es dable obtener "la regla espeéífica
1
             deración la mejO;r solución para estos conflictos" 1,18 • Por ello, este                                        del caso, que coneCta la ponderación y el balanceo con la certeza
I1~
                                                                                                                             legal'', ya que "si urio tiene la práctica jurisprudencial, con el correr
              tercer sub-principio puede formularse, ·a través de lo que se conoce                            1
I~
              como ''ley   de
                            l:;i. ponderación", del modo sigµiente: "cuanto mayor
                                                                                                                             del tiempo obtiene reglas jurisprudenciales específicas basadas en
                                                                                                                             el balanceo que pueden luego continuar desarrollándose" 120 •
~             sea el grado de insatisfacción o de detrimento de un derecho o de                                                   Entre los numerosos casos que ejemplifican su postura, escojo
i~
              un principio, mayor debe ser fa importancia de satisfacer el otro" 119 •
~                                                                                                                            U:no en el que el Tribunal Constitucional Federal alemán analizó
                                                                                                                             la r~alizadÓn o no de una audiencia oral en contra de un acusado,
                   116
                         ALEXY; Robert, Teoría de los derechos fundamentales, Madríd, Centro de                              debido al grave malestar que tales actos le producían, al punto
               Estudios Constituci6nales, 2014 (2º edición en español, trad: y estudio introductorio                         que corría el riesgo de sufrir un infarto y en el que advierte la
               de Carlos Bernal Pulido), ps. 91, 92 y 94.
                     117
                         ALEXY, Robert, ob. cit. en nota 115, p. 785. ·
                     118
:];
                         ALEXY, Robert, Sobre reglas y principios, LL, Suplemento Actualidad,                               de excarcelación de Saravia, Daniela A.", sent. del 4/11/2015), o la denegatoria de
               Buenos Aires, diario del 30110/2008, p. 1 (del inglés por Pilar Zambrano). .                                 la afiliación del actor (in re, L., M. H. c/OSPE s/amparo", sent. del 26/11/2015).
j.'..--
i!:                  119
                         ALEXY, Robert, ob. cit. en nota il5, p. 785. Una ap1icáción de estos sub~           1                    120 ALEXY, Robert, ob. cit: en nota 118, p. 2. De ahí que, en el mismo sitio,
iJ:
i1:
!'·
               principios puede encontrarse, entre muchos ejemplos, en la" jurisprudencia de la              ¡              añade que la técnica del ''balanceo" no significa que uno "puede hacer lo que quiere",
!!             Corte Suprema de Justicia de la Nación en..las ya mencionadas causas "Hooft" y                 1             pues "tenemos una estructura racional de ponderación para todo, que podemos
              "Gottschau'', Fallos, 327:5118 y 329:2986, respecti.vamente, en las que se señala-a_
1:
¡
1
              propósito de la tensión entre el interés colectivo y el derecho de 'igualdad- que este         !              transformar ·en un problema matemático y 'al final tenemos la regla específica
                                                                                                                            del caso". Sobre este último aspecto el autor ha insistido de modo particularizado
                                                                                                          1¡
              último debe alcanzarse por _el "medio menos restrictivo y no soló uno de los medios                           en el discurso de recepción del título de doctor honoris causa de la Universidad
,.:l'·! .     posibles para alcanzar.dicha finalidad". En. análogo sentido, ·1a Cámara Federal                              de Buenos Aires, el 7 de octubre de 2008, bajo el título "Die Konstruktion der
•'            de Apelaciones de Salta -t<ttnbién a propósÍto de la disputa entre interés general                            Grundrechte" (pro manuscrito), esp. ps. 6 a 8 (existe traducción castellana en
~ 1!          y libertad- ha señalado (entre otros, in re, ".Cisneros, Miguel A. y ot. s/excarcela-                         ALEXY, Robert, La construcción de los derechos fundamentales (del alemán por
              ción", sent. del 14/12/2012, o:"Inc .. de excarcelación.de Polo, Nelson J.", sent. del                        L. Clérico/J. Sieckmann), Ad,Hoc, Buenos Aires, 2012, ps. 20 a 37. Sobre este
              9/11/2012) que "ei argumentó de la severidad de la.sanción penal no.puede ser el                              sugerente aspecto del pensamiento de Alexy, enlazan en lo esencial con su punto
 \'           único a tener en cuenta a la hora de evaluar sobre la prbcedencia del dictado de                l             de vista los estudios de LóPEZ RuF, Pablo, "El sub principio de proporcionalidad
            . una niedida·cautelar de coerción personal", en tanto "existen elementos objeÜvos                              en sentido estricto y los juicios de empate" y de RABBI-BALDI CABANILLAS, Renato,
 11-
              que neutralizan el riesgo· procesal. invocado por el Señor Fiscal, toda vez que el .                          "El principio de proporcionalidad, la dignidad humana y la jurisprudencia de
·¡{           encartado carece. de _antecedentes penale·s computables'' y "cuenta con un domici-                            la Corte Suprema. Un análisis desde la perspectiva de Robert Alexy", en tanto
¡¡.           lio". Otras aplicacio_nes de estos sub principios por· parte de la Cámara salteña se                          que son críticos de aquei los de GurBOURG, Ricardo A., "Alexy y su fórmula de
              aprecian en el examen de la razonabilidad (o no) de las siguientes circunstancias:                            peso"; SPECTOR, Ezequiel, "Algunas reflexiones en torno a la teoría de los derechos
              la remoción cautelar de una antena di= telefonía en un ejido ur]Ja:rio (in re "Actua-                         fundamentales de Robert Alexy", y CIANCIARDO, Juan, "Doctrina del doble efecto
              ciones relativas Telecom Argentina S.A. e/Municipalidad de General Güemes si                        1         y fundamentación de los derechos humanos. Una aproximación desde el principio
                                                                                                       . .    ~
11
¡;
              medida cautelar", sent. del 4/4/2011); la detención de una persona "sospechosa" (!n
              re "Guanuco, Mariana s/infracc. Ley 23737", sent. del 4/9/2015); la expulsión del
                                                                                                        :.¡                 de proporcionalidad", todos los cuales fueron expuestos en el debate organizado
                                                                                                                            por la Asociación Argentina de Filosofía del Derecho en torno de las ideas del
u             país de una condenada extranjera con familia asentada en nuestro territorio (in                               profesor alemán y con su presencia en la Universidad de Buenos Aires en 2015 y
              re "Cerruto Baleriano e/Ministerio del Interior de la Nación s/amparo", sent. del                             2016, compilado por ALEXY, Robert; ALONSO, Juan Pablo, y RABBI-BALDI CABANILLAS,
              13/3/2015); la índole de la caución como medio alternativo menos restrictivo para                             Renato, Argumentación, derechos humanos y justicia, Astrea, Buenos Aires, 2017.
             los derechos del obligado (in re, "Quispe, Diego D. y ot. s/infrac. Ley 23737", sent.                          En contra de la perspectiva de ALEXY, cfr., también, el breve estudio de GORRA,
              del 5/5/2015); el encarcelamiento preventivo cuando los fines del proceso pueden                              Daniel G., Argumentación y ponderación de principios, LL, Suplemento Actualidad,
             obtenerse por medidas menos gravosas para la libertad del encartado (in re "Inc.                               Buenos Aires, diario del 30/10/12, ps. 1 a 3.
                                                                                                              1
                                                                                                                                                                                                     ~~;~\
                                                                                                              r-r·
11!
l.'
        existencia de una "relación de tensión" en tanto existe, por una                                                          Cómo surge de lo hasta aqm éxpuesto, lo determinante no e~=·--
li      parte, "la obligación de mantener el mayor grado posible de apli-                                                    (como sucedía con las reglas) la validez o invalidez del príncipio,
J!      cación del derecho penal''. y, por otra, "la obligación de afectar lo                                                sino, como expresa DwoRKIN; la "dimensión de peso" de éste 123 , el
1!
1:      menos posible la vida y la i~tegridad física del acusado". ·Erí tales                                              · cual, bajo ciertas condiciones, prevalecerá sobre btro y viceversa. De
u
        condiciones, la solución del conflicto no se obtiene "declarando que                                                 ahí que, como reflexiona ZAGREBELSKI, se advierte entonces cónio
        uno de ambos principios no es v<Ílido y eliminándolo del sistema
ji:                                                                                                                          el leit motiV de una interpretación "por principios" se emparenta
        jurídico. Tampoco se soluciona introduciendo .una excepción en tino.
                                                                                                                             con la tradición 1 de la razón práctica; pues. también aquí se apela,
        delos principios de forma tál que en-todos los casos futuros este
        principio tenga, que ser considerado como una regla Satisfecha o·                                                    a fin de resolver la aplicación de un principio o la precedencia
        no. La solución. de la colisión consiste más bien en' que, teniendo en                                               entre éstos, a la teleología de aquellos, a su razonabilidad o pro-
        cuenta las .circunstancias del caso, se establece e:b.fre los principios                                             porcionalidad. Como puntualiza paradigmáticamente el autor,
        una relación de precedencia condicionada. -La determiriacióri de                                                     "desde el punto de vista dé un sistema jurídico, cuando en él rijan
        la relación de precedencia condicionada consi$te. en que, tomando                                                    principios la situación es completamente análoga a la del derecho
        en cuenta el caso; se indican las cohdiciones bí;i.jo las cuales un                                                  natural (... ) Por eso, puede decirse con fundamento que la ciencia
      . principio precede al otro. Bajo ·otras condiciones, 'la cuestión.de la                                               del dereclfÓ positivo en un ordenamiento jurídico por principios
                                                                                                           1
        precedencia pu~de ser solucionada foversamente" 121 • De tal suerte,                                                 debe considerarse una ciencia práctica, porque del ser -iluminado
        como ha expresado el tribunal, la aplicación de un principio y no
                                                                                                          !                  por los principios- nace el deber ser'. Sobre esto -las connotaciones
        de otro no es debida a un desplazamiento en términos generales                                   _,· ....._·
                                                                                                                             objetivas de valor provenientes de una realidad de hecho, una vez
        de uno respecto de otro, sino, por el contrario, a un. "problema de                                                  puesta en contacto con principios- puede trabajar la razón; sobre
        desplazamiento del derecho fundamental en cuestiones singulares",                                 1
                                                                                                          1
                                                                                                                             esto puede haber un enfrentamiento mediante argumentos. que no
        lo cual, en definitiva y como ya había señalado ALÉXY, genera una                                 1
                                                                                                                           · sean meros disfraces de la voluntad, sino auténticos llamamientos
        regla jurisprudencial que vale para casos semejantes 122 •             .
                                                                                                                             a una comunidad de razón" 124 •
             121
                    ALEXY, Robert, T~oría dé' los derechos fundamental~s, ·centro de Es~dios
         Políticos y Constitucionales, 2" ed., Madrid, 2014 (traducción y estudio introductorio                            incluso utilizando para ello a uno de sus hijos". Asimismo, en la causa "Guzmán,
         de Carlos Bernal Pulido), ·ps. 71 y 73. Se trata de la llamada "ley de la colisión",                              J. C./Guzmán, C. E';, sent. del 14/4/2015, dicho Tribunal mantuvo la excarcelación
         la que se formula como sigue:. "las cohdiciones en las cuales un principio ti~ne                                  concedida en primera instancia a quien gozaba de prisión domiciliaria con sus-
         precedencia sobre otro constituyen el supuesto de hecho de una regla que expresa                                  tento en que ''los peligros procesales van disminuyendo con (... ) el avance de la
        la consec~encia jurídica. del pi-incipio precedente". (ibíd., p. 75).       .    .   .                             instrucción, la que se encuentra con proceºsamiento firme", sin que se adviertan
               122
                   ·una implementación de_ los criterios expuestos se advierte, v. gr., en la                              "medidas pendient~s por realizar en las que la imputada pueda entorpecer su
         Cámara Federal de Apelaciones de Salta, entre 9tras, en la causa "Incidente de                                    producción'', máxime si acaba de dar a luz un hijo, posee domicilio fijo dentro. de
         prisión domiciliaria de Sánchez", sent. del 16/6/2016, .en la que tras ponderar, de un          1                 la jurisdicción, arraigo y se mantuvo a derecho durante el cumplimiento de dicha
                                                                                                                           medida de coerción atenuada, por lo que la "presunción de elusión de la justicia",
        lado, "los fines del proceso·y la actuaCión dé la ley penal" y, cíe otro, "los derechos
        y garantías del imputado" "a partir. de un análisis integral dé los elementos de                  l                en las actuales circunstancias, "ha dejado de ser tal".
                                                                                                          l
                                                                                                                                 123
        juicio", tales como la edad del requirente (73 años); su precario. estado de salud; la:·                                     DwoRKIN, Ronald; ob. cit. en nota 104, p. 41.
                                                                                                                                 124
        detención por uri 1;3.pso superior ·a tres años; la conducta evidenciada durante ese                                         ZAGREBELSKI, Gustavo, ob. cit. en nota 109, p. 121. Como expresa PRIETO
        período; su arrai_go y contención socio,ambiental, dispuso su pri,sión domiciliaria en                             SANCHÍS, Luis, "El constitucionalismo de principios ¿entre el positivismo y el ius·
        lüs términos del Programa de Asistencl.a de Personas bajo Vigilancia Electrónica.                 1-               naturalismo? (A propósito de El derecho dúctil de Gustavo Zagrebelski)", Anuario
                                                                                                                           de Filosofía del Derecho, XIII, 1996, p. 138 -y el ejemplo es válido para todo el
        Por el contrario, en la (:ausa "Incidente .de prisión domiciliaria de Vargas Ríos,
        Deisy", sent. del 26/6/2015, tras considerar, por un lado, el principio de libertad         ·.. ·-1-               derecho constitucional comparado- "cuando la Constitución proclama la igualdad
        que rige en todo proceso y, por·ot:ro, ·el del "superior interés del niño", denegó la                              no establece cuándo una determinada circunstancia fáctica puede ser tomada en
        requerida prisión domiciliaria de la mad:r:e ·pues más allá de que formalmente re·                                 consideración para operar una diferenciación normativa; esto es algo que hace
      . úne el requisito del ai:t. 32, inc. f de la ley 24660, se· considera que "existen serias                           el Tribunal Constitucional pero no con base en la Constitución, que nada dice
        sospechas de riesgo hacia los.menóres que· allí residen", teniendo en cuenta que la                                de forma concluyente, sino a partir de su· propio razonamiento acerca de lo que
        Sra. Vargas, proc_esada ·por· un delito agravado "por servirse y cometerse en per·                                 merece ser tratado de manera igual o desigual". De ahí que, completa esta autor,
        juicio de menores", había empleado la vivienda "como lugar para guardar droga,_                                    "lo importante es que se hace del razonamiento una exigencia constitucional y, por
                                                                                                         ·1·           .
                                                                                                         r·
                                                                              :·::;r.r·
                                                                              /
       4. LA CENTRALIDAD. DEL INTÉRPRETE EN LA DETERMINACIÓN DEL ..                       · al ámbito de la norma) y otras coino '"intranormativas" (en tanto
  DERECJIO: De lo dicho se advierte la singular consec.uencia: a que ..                     suponen un examen que tiene preponderante, pero no exclusiva-
  arriba el pensamiento iusnaturalista con base en la "razón prácti-                        mente en cuenta, a aquellas). Por último; algunos cánones parecen
  ca": situar al intérpret~ (llámese éste jue¡?;, amigable componedor                      ·reunir ambas caracterizaciones cuanto menos por un doble orden
  u operador del derecho) en el centro de la escena. No,ces, pues,                          de razones: pór una parte, porque si bien tienen su origen en una
. un mero aplicador de la ley, es decir, su simple "boca"; es, por el .                     dimensión extraña al sistema, finalmente este concluye receptán-
  contrario, el intermediario entre las normas y la concreta· realidad·                     dolo (es el caso de las directrices aquí denominadas del "derecho
  de las cosas, las que no siempre (o mejor, casi nunca) s.oli cómo                         natural" y de .lo.s "principios") y, por otra, porque sus elementos
  abstracfamente :füerort pensadas por el legislador a fin de que re-                       reciben inspiración tanto en la realidad de la vida como en la del
  sulten captadas pÜr las primeras .. Y esa intermediación exige dar                        sistema jurídico de que se ·trate (es el caso de la directriz llamada
  razones acerca del genuino sentido de fa riorma eri la peculiaridad              I·       de la "totalidad").
  del problema, es decir, reclama argumentos en pro o eri contra de.
  una determinada significación de los hechos y de las disposic::iones:                          2. PAUTAS DE INTERPRETACIÓN INTRANORMATIVAS: I. DIRECTRIZ DE
  no vale cualquier respuesta y, más todavía, no toda .solución "da.                       LA "EPIKEIA" GRIEGA.    Como ya se ha comentado en el capítulo II, la
  igual", sino que las hay mejores y peores y ello no,es indiferente a ·                    gran sínte~is de esta directriz se debe a ARISTÓTELES, para quien
  quien deba á,sun:;tirlas y, obviamente, a sus destinatarios.           .                  "la ley es' siempre un enunciado general'', por lo que "solo toma en
       Lo expuesto,' pues, abrió paso a un plural recurso a directrices·.                   consideración los casos que suceden con más frecuencia, sin igno-
  interpretativas que tanto tuvieron en cuenta el sentido último de                j        rar, empero, los posibles errores que ello pueda entrañar". Ahora
 la norma (en relación con el caso), cuanto el. de la realidad (en                         bien: para el Estagirita estos errores son debidos a "la naturaleza
  cont-acto con el sistema). A esos argumentos, a partir de su empleo                       dé las cosa$, ya que, por su misma esencia, la materia de las cosas
 pqr parte principal, pero no exclusiva, de la jurisprudenCia de la·                        de orden práctico reviste un carácter de irregularidad". En este
  Corte Suprema; se hará referencl.a en lo ql.ie sigue.                           1         contexto, concl_uye el autor, si se plant'eara un caso que no alcanza
                                                                                   1
                                                                                   1
                                                                                         -~,,,~F
                                                                                              -'F-.
                                                                                          /
     -El recurso a la epikeia es constante tanto en los tribunales in- ·                                       -tivamente (Fallos, 302:1284). Por ello, ·parece plausible realizar al
feriores 127 como en_ la Corte Suprema 1 ~ • ·En lo que concierne a esta
                                                  8
                                                                                                                sub lite una aplicación equitativa de ese aspecto del precepto, en
última, el mencionado caso "Vera Barros" ofrece una interesante                                                 aplicación del criterio de esta- Corte según el cual no es siempre mé~
muestra del funcionamiento de esta directriz.
-
                                                                ·
      Así, la ley 19101; relativa al régimende jubilaciones.y pensio-
nes del personal de la _Fuerzas Armadas, había sido reformada en
                                                                                              J                 todo recomendable el atenerse estrictamente a las palabras de la ley,
                                                                                                                ya que el espíritu que las nutre es lo que debe rastrearse en procura
                                                                                                                de una aplicación racional, que avente el riesgo de un formalismo
razón de que la inserción de la mujer en el mercado laboral tornaba                                            -paralizante"-(comsid. 11; énfasis añadido). -De esta manera, en la
innecesaria una protección norm;;¡_tiva como la prevista con anterio-                                           inteligencia de la Corte, la epikeia traspasa la ley, erigiéndose en
ridad. Exigió, a f~n de conceder el acceso. a la pensión, dos recaudos:                                         más justa que ésta en el caso concreto.
convivencia con elcausante durante.los ultimas diez años y al me-
nos cincuenta años de edad. A este respecto~ y dado que el ·acierto                                                 . II. DIRECTRIZ DEL CONTROL DE CONSTITUCIONALIDAD DE LAS LE-
de la voluntas legislatoris no fue puesto en duda por las partes, la                                            YES. La función mediante la que se declara la inconstitucionalidad
"justicia" de la ley parece· a salvo de· cualquier reparo. Como dice                                             de las leyes constituye una de las dimensiones más relevantes -si
Aristóteles y -se profundizará en el_ capítulo sigui~nte, se está en                                             nó la de mayor trascendencia- del Poder Judicial. Al contrario de
presencia de un típico supuesto de justicia "legal".' · _ . _                                                  - lo que ·sucede con la epíkeia, en la que, corno se dijo, se corrige el
  - Ahora bien: ¿puede la ley conteºmplar todas 1as particulari-                                                 tenor literal de la ley para que abarque ciertos hechos no contem-
dades de la vida? Para el Tribunal (cito en lo que sigue algunos -                                               plados por ésta, en este caso se la declara inviable para resolver el
extractos del voto concurrente que, a mi juicio, reflejan de modo                                                supuesto bajo estudio, aunque mediante la remisión a otra norma,
más acabado la noción aquí estudiada), "concurre en_ el casó una                                                 de rango superior, que, obviamente, comprende a aquel. A este
circunstancia especial, no contemplada específicam_ente por la ley                                               respecto, si bien se advierte una inaplicación del texto examinado,
pero que no escapa al sentido último que anima a ésta: la actora no                                              ésta no se realiza en virtud de una valoración de factores "extra-
solo se limitó a conviVir .con el causante por "un período superior aJ
                                                                                              t
                                                                                                                 norrnativos", sino a partir de una "puesta en correspondencia" entre
mínimo exigido por la ley, sino que, .desde 1970, cuidó a éste de la -                                         _aquella norma "y un texto constitucional, naturalmente, siempre en
enfermedad que padecía (arterioesclerósis cerebral), a la cual debe
sumarse la pérdida progresiva de la visión (... ). Di_cha conducta,_                           _¡- -
                                                                                                                 conexión co"n las circunstancias de      Ja
                                                                                                                                                         causa. De ahí que tanto en
                                                                                                                 esta directriz como en la anterior se está en un horizonte netamen-
a la que debe agregarse (.. .} que, con anterioridad, y a raíz del                             lj                te "intranormativo'', a diferencia de lo que más adelante se verá
fallecimiento de su madre, la peticionante debió abocarse al cuida~·                                             respecto de las restantes tradiciones de la equidad.
                                                                                               l
do de s:us hermanos menores, imposibilitó a ésta el desarrollo de                              1-
                                                                                                                       Entiendo que esta idea puede ilustrarse en cualquier caso
actividades laborales aj<:jhas a las espeÜíficas del hogar, -lo que; a                         l                 en el que se acu!la a la declaración de inconstitucionalidad de un
la postre, derivó en la irriposibilidad de contar con una preparación                          i                 texto. Como es obvio, su número es surnarneiite amplio, por lo que, ·
adecuada para acceder al mercado de tra:Bajo y en la· dependencia                                                a fin de simplificar, mencionaré los aspectos pertinentes a este
económica respecto de su padre y hermanos" (corisid. 8; destacado                                                tóp'ico del ya mencionado caso "Iachernet" (cfr. cap. III, § 16, b, 4) 129 •
añadido).                                                                                                              En este pronunciamiento, la ley impugnada era la 23982, de
   - Sobre tales bases, si bien la ac-tora no cumple uno de los requi-
                                          0
                                                                                                                 conformidad con la cual se consolidaron las obligaciones del Estado
sitos exigidos por la ley (tiene casi 49 años), dicho incumpiimiento                                             Nacional vencidas o de causa o título anterior al 1º de abril de
"acontece por un margen mínimo que no puede, en el caso, y en -                                                  1991 que consistieran en el pago de sumas de dinero cuando -en
virtud de las razones anteriormente expuestas, ser valorado restric-                                             lo que al caso interesa- el crédito hubiera sido reconocido por
                                                                                                                 un pronunciamiento judicial (art. 10). Al respecto, la ley previó
       127
           Cfr. causas ''Dalera, Juan -Manuel'' (CNCiv., Sala F, 17/8/95 y su remisión                           dos posibilidades de pago de dichos créditos: la primera consistía
_al dictamen del Fi¡qcal ante la Cámara, Dr. éarlos R. Sánz), LL, t. 1997-E, p. 569,
 o "T., J. A. s/adop. pléha" (CCiv. ·y Coro. Santa Fe, 21112/95, confirmatoria de la
 resolucion del jue~ de prímera instancia Carlos A González), LL, t. 1997-F, p. 145.                                 129 "Iachemet, María Luisa e/Armada Argentina", sent. del 29/4/93 (Fallos,
       128
           Cfr., entre muchos otros, Fallos, 302:1284; 316:1025 o 318:371.                                      316:779).
                                                                                              -f-
                                                                                               -1-
                                                                                  -~§1r·
'/
        en que los acreedorés suscribieran,. por .el importe total o parcial                  de la Constitución, corresponde resolver que resulta acertado el
        de sus créditos, bonos de consolidación en moneda µacional o en                       pronunciamiento de cámara en cuanto declara su inconstituciona-
        dólares, los que se emitían a 16 años de plazo (conf. arts. 1.0 y 11);                lidad" (consid. 11, 6° párr.) (el énfasis me corresponde).
       la segunda; que cobraran en efectivo por el "equivalente a up año
        de haberes mínimo$, por persona y por Única vez". De esta forma,                           m. DIRECTRIZ TELEOLÓGICA .. Mediante esta directriz se procura
        y siempre en lo que al.caso interesa, se obse_rva que la actora; que ·                desentrañar el "fin" de la norma, esto es, su sentido, ratio o los
        poseía un crédito de $ 35.195,20, o b_ien podía co1;:>rar en. efectivo,               intereses que busca lograr, de donde la doctrina también la ha
        en un plazo inferior a 16 años, una suma máxima de $ 1.560 (que                       denominado directriz "teleológica-objetiva" 130 . Al respecto, cabe· pon-
        era el equivalente a un año. de sus haberes), o, de fo contrario,                     derar qué si bien los fines de la ley "vienen dados" por el legislador
        debería aguardar hasta esa fecha para hacerse del total, lo que                       histórico, no resulta menos contrastable que las normas ostentan.
        representaba, a su respecto, que al tener la edad de 91 años en el                    su propia racionalidad y que ésta, con el transcurso del tiempo y la
        momento de resolver la causa solo.pudiera contar con ese dinero a .                   inevitable mudanza del contexto· que la vio nacer, como expresaba
        los 106 años, a menos que optara por venderlos anticipadamen:te,                      Sebastián SüLEii., "cobra vida propia y autónoma" y, de tal modo,
        decisión· que, en el momento de la discusión de los hechos, resultaba                 la norma deviene, según palabras de RADBRUCH, "más inteligente
        notoriamente perjudicial, pués el valor de venta de los bonos· en el ·                que el legislador" 131 . En definitiva, como ya fue puesto de resalto
        mercado era muy inferior al nominal.                                                  por Mars'hali, el antiguo Chie! Justice de la Suprema Corte de
            Al respecto, ;el razonamiento del Alto Tribunal distinguió dos.            ¡      Justicia de los Estados Unidos, a propósito de la Carta Magna de
        etapas: en primer lugar, indaga si la ley en cuestión preveía excep-                  ese país, "no debemos olvidar jamás que es una Constitución la que
       ciones en favor de las personas que se hallaran en la situación de la ·         1      estamos interpretando; una Constitución destinada a resistir épocas
        señora Iachemet; en segundo término, y ante la ausencia de ellas,              !      futuras y consiguientemente a ser adaptable a las variadas crisis
¡-      se preguntó si dicha.norma resistía o no el.test de .constitucionali-          1
                                                                                              de los asuntos humanos" 132 , por lo que, en contacto con realidades
!       dad, frente. a -repárese una vez más- no cualquie'r problema de la             ¡-     disímiles (y de ahí la presencia de e,sta directriz en el horizonte
       vida, sino uno de "especialísima" natµraieza, y respecto del cual es                   del iusnaturalismo que aquí se estudia), el texto puede tener una
       probable (mido mis palabras), que el legislador no lo hubiera podido
       prever obrando con diligencia. La respuesta fue negativa pues, tras
                                                                                       l!'    virtualidad diversa de la querida por el legislador histórico.
                                                                                       L.·         El contenido de la "finalidad" de la norma varía, según se tenga
       ubicar a la norma en el círculo de las disposiciones dictadas como              !      presente, cuanto menos, un cuádruple orden de consideraciones:
       consecuencia de una situación de emergencia económica (cOnsid. 11,
       2° párr.), recordó su d·octrina sobre esta materia, según la cual si            ¡¡     a) el fin concreto del precepto; b) el fin general de la materia o
                                                                                              institución regulada; c) el fin genérico del derecho, y d) el fin de la
       bien ante tales circunstáncias el goce y ejercicio de los derechos              1      sociedad. en que .el pre~epto se aplica 133 •
       constitucionales puede éer válidamente restr1rigido, dicha restric-             ¡           Como es obvio, el empleo de este canon por parte de la Corte
       ción solo se reputa constitucional si es "temporal", de forrria de no           !
     . cercenar la "sustancia" de aquellos derechos (conf. consid. 10). Sen-           ¡      Suprema es fecundo. Teniendo en cuenta la clasificación doctrinaria
                                                                                              recién expuesta, he agrupado la jurisprudencia del Alto Tribunal
       tado lo anterior, el Tribunal afirmó que fa norma impugnada no                  !
                                                                                              como sigue:
       respetaba la suspensión "temporal" deJOs derechos, ya que "resulta                          a) En relación con la estricta finalidad del precepto, el Tribu-
       virtualmente imposible' que la señora Iachemet; conforme el des-                       nal ha señalado que "es principio de hermenéutica jurídica que,
       envolvimiento natural ci.e los hechos, llegue a percibir la totalidad                  en los casos no expresamente contemplados, debe preferirse la
       del crédito reconocido" (consid. 11, 4° párr.). En tales condiciones,
       concluyó que '1a aplicación al caso de autos de la ley 23982 llevaría,
      no a una modificación del modo de cumplimiento. de la sentencia                              13
                                                                                                   131
                                                                                                        º Así, RODRÍGUEZ MOLINERO, Marcelino, ob. cit. en nota 58, p. 230.
      pasada en autoridad de cosa juzgada, sino al desconocimiento sus-                                 Cfr. SOLER, Sebastián, La interpretación de la ley, Abeledo-Perrot, Buenos
                                                                                              Aires, 1962, p. 123, y RADBRUCH, Gustav, ob. cit. en nota 7, p. 122.
      tancial de ésta. En consecuencia al no ser posible -sin forzar la                            132 Cfr. Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos, causa "Me Culloch
       letra ni eZ. espíritu de la ley citada- efectuar una interpretación de          1      v. Maryland", 4 Wheat 314, 407.
      ella que la haga compatible en el sub lite con la garantía del art. 17           l            133 RODRÍGUEZ MOLINERO, Marcelino, ob. cit. en nota 58, ps. 230 y 231.
                                                                                       1
                                                                                       I
                                                                                       1
                                                                                                 -,r,
 358                             TEORÍA DEL DERECHO
                                                                                                 /l                                    LÁ INTERPRETACIÓN JURÍDICA                             359
 interpretación que favorece y no la que dificulta los fines perse~                                                 c) 'Bajo la idea ciertamente más genérica que procura indagar
 guidos por la norma, !?Vitando darles aquel sentiO.o que ponga                                                acerca de la "finalidad del derecho", es bien perceptible en los
 en pugna sus disposiciones, destruyendo las unas por lal'! otras y                                            fallos de la Corte Suprema la nota, a contraria, de "razonabilidad".
 adoptando, como verdadero, el que las coneilie y deje a todas cori                                           -Así, constantemente se ha escrito que "las leyes son susceptibles
 valor y efecto" 134 ; Asimismo, "cuando· la expresión literal presenta                                        de cuestionan:iiento constitucional cuando resultan irrazonables,
 imperfecciones técnicas, duda13 o ambigüedades jurídicas, o admite                                            o sea, cuando los medios que arbitran no se adecuan a los fines
 razonables distinciones", la misión judicial "consiste en recurrir a                                         •cuya realizaciÓlíl procuran o cuando consagran una manifiesta
 la ratio legis-, porque no es el espíritu-de la ley el que debe subor-                                        iniquidad" 137 •
 dinarse _a las pa¡abras sino estas a aquel, máxime cuando aquella                                                  d) Por último; la todavía más amplia finalidad -que es la .
 ratio se vihcufa cbri principios constitucionales qué siempre han de                                          tenida in mente por Marshall en el célebre dictum antes citado- que
 pr-evalecer- en la interpretación de las leyes" 135 • ;      _ . - -   _                                      anima la vida social es un referente ineludible para el adecuado
      b) En relación con la finalidad de la materia en la que el texto                                         desentrañamiento de los objetivos de la norma. A mi juicio, esta
 se halla, a propósito de la recta inteligencia del art. 3º, incs. a- y b                                      idea puede encontrarse adecuadamente reflejada en uno de los más
 de la ley de MarcaiJ 22362 y del debido resguardq del principio de                                            emblemáticos precedentes del Alto Tribunal -la ya citada causa
 "especialidad" -que gobierna en esta materia, el Tribunal ha dicho                                         -- "Kot"-, cuarido el Tribunal señala, desde luego a propósito del texto
 que "dentro _de _ese espíritu; parece razonable la ·conclusión del a                                          constitucional, que su interpretación debe realizarse de manera que
 qua de estimar que cuando la ley expresa 'los mismos productos' se                                            "mejor asegure los grandes objetivos para los que fue dictada" 138 •
 refiere' a productos notoriamente 'vinculados entre sí por su función,
 aplicación o destino conforme a lci que se desprende de las notas                                               3. PAUTAS DE INTERPRETACIÓN EXTRANORMATIVAS: L DIRECTRIZ DE
 explicativas ( ... ) del decreto_ 558/81 (... ) pues tal ihterpretación
 (...) tiende a alcanzar una aplicación racional d_el precepto ade-                                    l     AUTORIDAD. El recurso a las autoridades es un canon de- larga data:
                                                                                                              ensalzado en la Antigüedad y, en lo sustancial, en el Medioevo, y
 éuada a su ratio legis" 136 •                     -   ·
                                                                                                       i
                                                                                                       l
                                                                                                              despreciado por la Modernidad, ha v;uelto a ocupar, en especial
                                                                                                              cbmo consecuencia de los planteos de la Hermenéutica filosófica,
          134
              Fallos, 312:112 y sus cítas; 321:1124; 330:2093 y muchos otros. Cfr.,
  asimismo, la causa "Ortiz, Benanci:;i", citada en la nota 80. '
                                                                                                  ll        · un lugar de· relevancia dentro del ehm'co de argumentos que emplea
                                                                                                              el intérprete a fin de ilustrar tanto el sentido de una norma como
          135
              Fallos, 322:1699, su cita y muchos otros.                  _                _                   la respuesta a un entuerto. Mediante esta directriz se procura
          136
              Fallos, 307:696 y otros .. Cfr., asimismo, Fallos, 307:871 y su cita; 315:929
  y su cita,_ 315:942, su cita y muchos otros. En análogo sentido, la Cámara Federal
                                                                                                       l!     mantener el significado de un texto o de una determinada relación
                                                                                                              jurídica de conformidad con lo que fuera fijado en un anterior
  de Apelaci_ones de Salta, in re/'Villafa:rie, Mónica L. (en repr. de su hijo) dOSMIT",                      precedente (interpretación judicial), o por parte de la doctrina
  sent .. del 1/12/2011, expresa que si J:¡ien el certific~do de discapacidad previsto por
  el art. 3º de la ley:22431 (ref. por ley 25504) no prevé la "indicaci6n de transporte
  especial", sí alude a las "posibilidades de rehabilitación del afectado", por lo que
  aquel se impone si se t1enen eri _cuerita la "patología del menor", la "solicitud". de
                                                                                                       l
                                                                                                       !
                                                                                                              (interpretación doctrinaria).
                                                                                                                   Este argumento constituye un recurso que remite a una tra-
                                                                                                              dición de ideas qüe se reputan verdaderas o, cuanto menos, per-
 ·1a médica, el anterior cértificado y el "superior interés del niño". ·ne igual modo,
  dicho Tribunal, en "Segovia, Guillermo D. s/incidente de prisi\)n domiciliaria", in    re, -
  sent. del 12/5/2016, concedió la prisión domiciliaria prevista por el inc. f del art. 32             1     ponderar que las leyes 244 76 y 25994 posibilitaron a quienes hubieran alcanzado
  de la ley- 24660 al hijo de una: perscin,a discapacitada il consid,erar que. reduci:i:- el                 la edad para acceder a una jubilación pero carecieran de los pertinentes aportes
  benefieio exclusivamente a la "madre" o, en- definitiva,_ a la "mujer", conduciría a                       que la obtuvieran a través de un plan de pago, dejó sin efecto la resol. ANSeS
  una conclusión contradictoria con lo estatuido por el estándar de igualdad que                             884/06 por la que obliga a que aquellos que gocen de otro beneficio, -en orden a
  dimana de la Constitución Federal; tratados internacionales y los principios pro                           obtener el peticionado, deban proceder "a la cancelación total de la deuda", pues
  homine e in bonam pa_rtem, puestos' en c9rrespondencia con las circunstancias                              "ello significa, en los hechos, una denegación definitiva, pues es difícil pensar que
  del caso, de las que surgía que la mujer del_ detenido, por razones laborales y de                         con la suma que percibe por el otro beneficio pueda hacer frente a las cuotas de
- deberes hacia sus hijos, hallaba dificultad en ocuparse de su suegro. Semejante fue                        la moratoria y obtener en el corto plazo [se trataba de una persona de 78 años] el
 la respl!-esta de la Cámara Federal de Casación Penal, Sala III, causa "Bagnato,                            haber jubilatorio pretendido".
 Adolfo H. s/recm:so de cas.", -sent. del 15/9/2009. Asimismo, en la causa "Cruz,                  -¡--
                                                                                                  --               137
                                                                                                                       Fallos, 307:862 y otros.
                                                                                                                   138
 Reina cÍANSeS s/reajustes varios", sent. del li/5/2015, la citada Cámara salteña, al.                                 Fallos, 241:291, entre otros.
                                                                                                       l
                                                                                                       ¡-
                                                                                         ··:-:·;,,¡,     ~i
                                                                                            ·:·~·~:;:~ :.'.;~· ·.
                                                                                                     ~¡       .. •
./ ·:
   suasivas. Como señala VrnHWEG a própósito de su aplicación en ia ·                                                  terprefació'n de aquel convenio debe "guiarse" por la jurisprudencia
   Antigi.iedad y durante el Medioevo; "con la cita de µn hombre se.                                                   de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, .pues uno de los
   hace referencia a un complejo de experiencias y de conocimientos                                                    objetivos de esta última es, justamente, la exégesis de dicho Con ve-
   humanos reconocidos, que no contiene solo una vaga creencia, sino                                                 . nio 146 , razón por la que también ha señaiado que el análisis de dicho
   que garantiza   un  saber en el sentido :rI{á8 exigente';. D.e ahí que .                                            tribunal interamericano de las normas del Pacto constituye una
 . "la referencia al saber de los mejores y.más famosos se encuentra ..                                                "insoslayable pauta de interpretación para los poderes constituidos
   también llena de sentido" 139 • • ·. . .. .      . . ...                                                            argentinos en el ámbito de su competencia 147 • Asimismo, bien que
        Nµestra Corte Suprema lo ha empleado de dos maneras prin-.                                                     con menor frecuencia, la Corte. Suprema tiene dicho que "a fín de
   cipales: mediante el recurso a ciertos autores y a través de la cita                                                interpretar el alcance de [en el caso, la garantía de la imparcialidad
   de algunos tribunales. En ambos casos no se trata.de una relación
   extensa, sino más bien a la inversa, en especial :durante los pri-
                                                                                                       l  1
                                                                                                                       de juicio] consagrada de igual forma en la Convención Europea de
                                                                                                                       Derechos Humanos (art. 6) resulta útil recurrir a la jurisprudencia
   meros cien años de vida del tribunal. La razón es obvia: la Corte ·                                    1            de la Corte Europea de Derechos Humanos que constituye una
   desde antiguo ha sido muy consciente de su impor~ancia dentro de                                                    pauta valiosa de hetmenéutica de los tratados internacionales de
   la estructura del poder del Estado y, por ende, h:¡i. prócurado cÓn                                                 la materia .en examen" 148 •
   extremo celo cuidar su prestigio. De ahí que no haya abusado de                                                          .Por sú: parte, en relación con las "recomendaciones" de la "Co-
   las citas y, menos aún, de cualquier cita, en la inteligencia -para                                                 misión Interamericana de Derechos Humanos" -órgano de exis-
   decirlo como se acaba de anticipar- de que estas sólo deben garan-                                  l               tencia anterior al citado Pacto de San José de Costa Rica pero que
   tizar "un saber en el sentido más exigente" 140 •.
        Así, ·en lo que concierne a los autores, los nombres han sido,
                                                                                                      ¡                ha sido ratificado por éste como instancia inicial y obligatoria de
                                                                                                                       todo reclamo que se origine como consecuencia de aquel-, en la
   en líneas generales, de notables cónstitucionalistas argentinos o                                      j            citada causa de Fallos: 321:3555 los ministros Boggiano y Bossert
   del derecho comparado, en especial, norteamerica,nós. Entre ellos, ·.
  .el más citado ha sido -y aún lo es- Joaquín V .. González y su
   célebre Manual de la Constitución 'A.rgentinh 141 , aunque .también
  son frecuentes las remisiones a José M: de Estrada 142 y, más re-
                                                                                                      l1                     146 Cfr. causa "Ekmekdjián'', Fallos, 315:1492, consid. 21 voto de la mayoría,
                                                                                                                      criterio reiterado en las causas "Giroldi" (1995), Fallos, 318:514; "Acosta, Beatriz"
                                                                                                                      (1998), Fallos, 321:3555, voto de los jueces Boggiano y Bossert; "Napoli" (1998),
  cientemente, Juan A. Gonzáléz Calderón 143 , en tanto que, entre los
   doctrinarios del derecho comparado, se destacan Marshall, Story,
                                                                                                      l               Fallos, 321:3630, voto de mayoría y voto del juez Fayt, consid. 8º; "Alianza Frente
                                                                                                                      para la Unidad" (2001), Fallos, 324:3143, voto de mayoría, consid. 8º, 4º párr.;
   Cociley., Madison, Willoug}iby y, en los últimos años, Tribe 144 .                                                 voto concurrente de los jueces Fayt y Vázquez (consid. 12); voto concurrente de los
                                                                                                      1               jueces Belluscio y Bossert, consids. 8º, 4º párr. y voto del juez Boggiano, consid. 18
        Por su parte, en lo/relativo a·los tribunales, elcuerpo por                                                   o, más recientemente, "Aparicio, Ana Beatriz y otros e/EN -CSJN Consejo de la
  antononiasi!l al que la Co~te
                            .      ha acudido foe
                                               .   la Suprema. Corte de.                                              Magistratura-art. l10 s/empleo público", sent. del 21/4/2015, Fallos, 333:234.
  Justicia de los Estados Unidos, toda vez que' su jurisprudencia                                                            147 Cfr. causas "lVIazzeo", Fallos, 330:3248, voto de la mayoría (jueces Loren-
· "basada .en el derecho federal americano,· que es nuestro propio                                    1               zetti, Highton, Maqueda y Lorenzetti) y ''Videla", Fallos, 333:1657. Tal y como pro·
                                                                                                                      curé mostrarlo en diversos trabajos a partir del examen tanto de la jurisprudencia
  derecho constitucional, tiene importancia decisiva entre noscitros" 145 •
        Sin embargo, desde la incorporaéión del "Pacto. de San José de
                                                                                                      1               del Alto Tribunal como de la propia Corte Interamericana de Derechos Humanos
                                                                                                      1               (cfr. nota 14 7 del cap. I), ~ontrariamente a lo que considera un importante sector
  Costa Rica" a nuestro ordenamiento, la Corte ha dicho que la in-                                                    de la doctrina -cfr., por todos, SAGÜÉS, Néstor P., Los conjueces de la Corte Supre-
                                                                                                                      ma de Justicia de la Nación (A propósito del caso "Aparicio, Ana Beatriz"), LL, t.
                                                                                                                      2015-B, p. 1113, AR/DOC/1422/2015- no advierto diferencias conceptuales en la
       139
        VIEHWEG, Theodor, ob. cit: en nota 98, p. 67,                                                 1               consideración del Alto Tribunal de la jurisprudencia interamericana, según se trate
       140
        Ibíd.; loe. cit.                                                                                              de una "guía" o de una "insoslayable pauta" de interpretación, por lo que no cabe
    141
        Cfr. Fallos, 186:170; 205:614; 320:619 y su cita; 329:1092, sus.citas y otros.                                inferir que de este último giro se siga, como afirma el autor citado, la obligatoriedad
    142
        Cfr., entre otros, Fallar;, 186:170; 205:614 y muchos otros.                                                  erga omnes de las decisiones del tribunal interamericano en los países en los que
    143
        Cfr. Fa,llos, 323:2256, entre otros.                                                                          se ha aceptado su jurisdicción.
    144
        Cfr., entre otros, Fallos, 205:614; 247:646 y sus citas; 324:5 y muchos otros.                                       148 Causa "Llerena" (2005), Fallos, 328: 1491 (el énfasis no corresponde al
    145
        Así; Fallos, 33:1.62. Cfr., asimismo, Fallos, 313:1513; 329:1092, sus citas                                   original). Cfr., también, entre otras, la causa "Microómnibus Barrancas de Belgrano
y muchos otros.                                                                                                       S.A." (Fallos, 312:2490).
 362                             TEORÍA DEL DERECHO
  no están obligados a ceñir sus decisiones a lo establecido en lo~                                    (regulae) que integran el ordenamiento jurídico; en el otro se está
 informes emitidos por ;la Comisión Intera.mericana de Derechos                                        frente a un estándar metodológico merced al cual se obtiene el
 Humanos, existe el deber de tomar en consideración su contenido"                                      derecho. De ahí que, mientras este último responde a una matriz
  (énfasis añadido). Este temperamento no se alteró con lo resuelto                                    "intranormativa"; el segundo remite a una "extranormativa".
  en la causa- "Carranza Latrubesse", contrariamente a lo. conside-                                         El empleo de la noción de equidad definida en clave romana
 rado por alguna doctrina, si se pondera que solo dos de los cúatro                                   ·es por demás vasto en la jurisprudencia de la Corte Suprema de
 ministros q11e coriformaron la-mayoría Gueces Fayt rZaffaroni)                                        Justicia de la Nación 152 • En lo que sigue se ejemplificará con el caso
 concluyeron (consid. 6°) que "la voz recomendaCión ( ... ) no excluye·                                "Melgarejo, Roberto René c/Chacar, Alberto César y otro" 153 , en el ..
 un contenido obligacional". Por el contrario, los jueces Petracchi                                    que se puso en tela de juicio las pautas con las que se actualizó el
 y Maqueda acompañaron la decisión mayoritaria de condenar al                                          saldo de precio que debían abonar los demandados por la adquisi-
 Estado Nacional al pago de la indemnizació;rracohsejada por la Co-                                    ción a plazo de un inmueble. Según surge de los hechos de la cáusa,
 misión con sustento en que aquel "rio realizó los esfuerzos exigidos                                  la operación debía cÚrnplirse mediante el pago de un cierto número
 por el principio de. büena fe que rige la actuación de los Estados.                                   de cuotas qµe se actualizarían conforme el incremento del salario
 (. .. ) ni alegó la exisfencia de razones de orden púplico interno que                                básico deLpeón industrial. La operación se cumplió con normalidad
 justificaran su conducta" (consid. 14 del voto del juez Petracchi y                                   hasta qué el aumento de dicho salario en un 100 % por medio del
 11 del voto del ]uez .Maque da), ni as en modo alguno suscribieron                                    decreto 439/82 "vino a causar el desequilibrio de las prestaciones
 que "las recomendaciones formuladas por la Comisión" tuvieran
 "un valor obligatorio· equivalente al de las sentencias de la Corte                             l     y dio lugar a sucesivas e infructuosas tratativas" a fin de llevar a
                                                                                                       buen término el acuerdo previamente concluido.
 Interamericána" (consid. 12 del voto del juez Petracchi y 7 y 11 del
 '{oto del juez Maqueda) 149 •                                                                   1
                                                                                                 1
                                                                                                            En cuanto aquí interesa, el Alto Tribunal recuerda, con apoyo
                                                                                                       en otros pronunciamientos anteriores, que "los índices oficiales
                                                                                                       solo constituy~n un arbitrio tendiente 1 a obtener un resultado que
   . II. DIRECTRIZ DE LA ''AEQUITAS" ROMANA. En Roma, la equidad                                       pondere objetivamente, en la mejor medida posible, una realidad
(aéquitas) es sinónimo de derecho (ius). Como expresa DE LOS·                                    1
                                                                                                 l     económica; Empero, cuando el resultado al que se llega se vuelve
Mozos con cita de Max Kaser, "iustum, aequum y legitimum son                                           objetivamente injusto, aquellos índices deben dejarse de lado en
simples matices del concepto unitario de lo que es conforme a
derecho" 15º y que, como enseña Álvaro D'ORs, es formulado "por los                              l     tanto dicha realidad debe prevalecer sobre abstractas fórmulas ma-
                                                                                                       temáticas" (consid. 5, énfasis añadido). En el caso, la "injusticia" de
que saben de lo justo: por los iuris prudentes" 151 • De lo hasta aquí
expuesto, es patente la ;diferencia: conceptual que existe entre esta                        . ¡l      la solución se funda en que "el contenido sustancial de la condena
                                                                                                       eleva el saldo adeudado a valores tales que (... ) resultan absurdos
nocíón y la de la epikeía, ya que mientr.as la aequitas romana es                                      con relación al precio actual del inmueble en cuestión" (consid. 8;
equivalente al derecho inteligido en el caso concreto por parte de la                            l     el destacado me pertenece; cfr. también consid. 6, principio). Sobre
Jurisprudencia, la epikeia griega constituye un criterio corrector de                                  tales bases, la Corte concluye que "el superior tribunal de la causa .
las leyes en Orden a discernir el _derecho: en el primer caso se está·                           1     dio una solución que se desentiende de las consecuencias inequita-
frente al derecho mismo, el que brota de las circunstancias de 1a                                l     tívas que ocasiona, a la par que transforma. el saldo adeudado en
                                                                                                       una fuente injustificada de lucro" (consid. 6, in fine; el destacado
       149
             Causa "Carranza Latrubesse, Gustavo e/Estado NaCionai",. sent. del                        me corresponde).
  6/8/2013, Fallos, 336:1024. Semejante es el criterio de quienes conformaron la mino-
  ría, los jueces Argibay.(consids. S Y. sigllientesYy Highton y Lorenzetti (corisid. 7º).
                                                                                                            152 Cfr., entre muchos otros, Fallos, 307:862; 311:767; 312:659; 313:946;
  Comparte mi percepción del voto de los mi:riistros en esta causa TRucco, Marcelo,
. "Efectos de las recqmendaciohes de la CIDH"·, LL, t.' 2014cB, p. 73.                                315:2980; 316:1025; 318:369; 320:2330, voto del juez Vázquez; 320:2829, entre
         150                                                                                          otras. Cfr. asimismo, el voto en disidencia de los jueces Barra y Cavagna Martínez
             DE LOS Mozos, José L., "Derecho ·y equidad", en Metodología y ciencia en
  el derecho priqadg, Edersa,.Madrid, 1977, p. 327.                                                   en Fallos, 316:729.
                                                                                                            153
      · in. D'ORS, Álvaro, Derecho privado romano, Eunsa, Pamplona, 1986, p. 43.                                Fallos, 316:1972.
                                                                                             ··¡.
                                                                                                                  . <l:l~-
1
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,¡:'.
1
              .364                                 TEORÍA. DEL DERECHO                                                                                  LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA                              365
¡;
¡,               .. Como es obvio, la equidad e~ eq\livalenté a io '.'justo", de donde.                                         una verdadera sustitución) se realiza a la luz de ciertas reglas
h
              en ei caso la pretensi<)n actualizadora examinada desde la perspec··                                              provenientes de la· moral judea-cristiana, las qué n:o solo justifican
¡,
              tiva de la "realidad". (y de ahí lo "extrari.ormativo") resulta c_ontraria                                        el abandono de las formalidades propias del ius clásicb 156 , sino que,
!:            a lo "justo"· y, po_r tanto, como dice· el Tribunal, "ineqµitativ[a)" 154 •.                                      con el paso del tiempo, concluyen por impregnar la concepción .del
:·:
                                                                                                                                ius 6 aequitas de la época.          ·
                    m..DIRECTR;z ~E            u
                                          ''AE~UITAé iunE.o-c~ISTIANA. Co~ ·.el adve- ·                                              Es probablemente Javier HERVADA quien con mayor precisión
 '.
!¡-.!:        nl.mie.nto en Roma de la: tradi.ción judea-cristiana,. se advierte una                                            ha sistema:tizado el alcance de la equidad judea-cristiana. A su
i             progresiva pérdida de· autonn.mía de la jurisprudetrcia,. como conc                                              juicio, la equidad radica en "una relación de justicia cuyo deber
:,       .                                                                                                                      atempera y cuyo derecho acomoda, en consideración a lo postu:.
              secuencia, entre·,otras razones, de la creciente morE!.lización d·e1 ·ius
.¡
{             o a~quitas debida", de forma             no
                                                e~~lusiva aunque ºsí prepo~derante;                                            .lado por las circunstancias del caso, a causa del bien común o
              a la influencia. de dicha tradición:                  '                ..                                         de- las leyes generales que regulan las relaciones humanas"." En
:[                  Este- fenómeno s.e ap~ecia a través de diversos factores; Por de·                                           esta perspectiva, expresa que "la atemperación ·de lo· debidó pue-
              pronto,. y e.n lo que concierne a· la vida social de la "época, se asi~te                                         de tener diversas causas. Unas veces procede de la benignidad o
              a una e:x:altadón de la humanitas, de la pietas o de la benignitas,.                                              de la misericordia,' como ocurre cuando las penas que· en justiCia
              virtudes que no tardarán en: interfei-ír en la depl).rada conceptua~                                              son debid,a's se alivian o se perdonan (v. gr., indulto); otras veces
                                                                                                                                su éaUsa· es ia solidaridad humana (moratoria ·en los pagos, por
              lización del derecho elaborado por la jurisprudencia romana 155 • En                                      1.      ejemplo); otras procede de la moderación necesaria para que el rigor
              este contexto, laº equidad muta de contenido, pues emerge como la
                                                                                                                                de la justicia no dañe otros valores no menos importantes (v. gr.,
              corieccl.ón; ya no de la ley -segun se vio. que ·ocurría en Grecia-, · ·                                          Ínembargabilidad del patrimonio familiár), etc." 157 • Asimismo, aña-
              sirio. de(ius. Ahora bien: dicha correcCión (que es, en definitiva, ..
                                                                                                                        1
                                                                                                                        l
                                                                                                                                de el autor que existen otros casos en los que "no siendo posible
                           .               .                .                                  .         .   ~
                                                                                                                        t .     satisfacer el derecho, la equidad lo· acomoda a las circunstancias
                     154
                           La Cámara Federal de Apelaciones de Salta. exhibe .. dÍvers~~ ejemplos ·de
                esta directriz. Cfr.; entre ·otros,  in re, ''Ríos,. Ricardo y. ot: ·c/E)éi:cito Argentino s/
                                                                                                                        f:     particulares, dándose una cierta sati~facción, que cancela la deuda
                                                                                                                               ·c"orrectiva. Aquí la deuda no es atemperada, porque la deuda de
               ordinario", sent. del 22/5/2012; "Montes, Norberto GIEstado Nacional", sent .. c).el .                           estricta justicia queda de suyo en suspenso por la imposibilidad de
                3117/2012, en las que, en lo relativo a las costas; se lee que "en r.azón de la compleji- ·             ¡.·     satisfacer el derecho (nadie está oblígado a hacer lo imposible). Lo
               dad de la cuestión; su n.aturaleza ali!'rientaria y la existencia de.resoluciones encon-
               tradas a nivel nacional (... )°se juzga equitativo imponerlas por ·su o:,den". Tambi~n                   :¡.     que ocurre es que siendo insatisfecho el derecho en sí, se le da una
                                                                                                                                satisfacción equitativa, de modo que deja viva la deuda, de suyo
                                                                                                                       ·. l.
               sobre esta materia·-aunque vincµlado ·a las contiendas por daños y perjuicids-, cfl:.                    l
               in re "García, Liliana cfUNJu _sidaños..y perjuicios", ~ent. del 26/9/2011. De igual                             suspendida por la imposibilidad de satisfacción" 158 •
               'modo, e:iJ. relación con el conq{pto" de astreintes· -con cita de jurisprudencia nacio-
               nal-, cfr, in re, "Glorio.so, Matía O.' e/Estado Nacional s/medida cautefar", sent. del
               26/12/2012. En. o"tro ámbito (in re "Tabes S.A. slip.fracción ley .19511",. sent. del
             . 17/5/2012, ya citada) ·se señala que "si bien ha .q~edado reconocida la falta y el
               monto de la sanción está dentro de los límites vigentes al de su ·comisión, éste se
                                                                                                                        ¡           156
                                                                                                                                    157
                                                                                                                                         Cfr. D'ORS, Álvaro, ob. cit. en nota 150, p. 97 .
                                                                                                                                         HERVADA, Javier, Introducción crítica al derecho natural, Eunsa, Pam-
                                                                                                                               plona, 6ª ed., p. 70 (el énfasis es mío). Cfr. del mismo autor, más sintéticamente,
               presenta como excesivo", pues "la firma no tiene ante~edentes",. ni·se "Vislumbra un ·                          Lecciones propedéuticas d_e Filosofía del Derecho, Eunsa, Pamplona, 1992, ps. 248 a
               perjuicio concreto" por lo que se torna "equita~iva'" su· i:educdón,. Por el contrario,                         250. Otro ejemplo clásico de esta atemperación lo constituye, por directa aplicación
               en la también meriCionada causa "Egani $).i..L. s/inftacción ley 195.11", sent. del                             de la virtud de la solidaridad para con los habitantes" de escasos recursos econó-
               15/10/2009, se consideró que •!resul~a·equitativa" la multa impuesfa "si se pondera·                            micos, el denominado "beneficio de litigar sin gastos'', para quienes demuestren
               que para la- determinación de la sanción se ha to rilado" un monto en Cierta manera                             fehaciente la imposibilidad de abonar la tasa judicial que, como se anticipó en el
               ba]o dentro de lo· permitido por el -art. 33 de la ley 19511". Cfr., respecto de otros·                         cap. III (§ 16, b, 1), constituye el precio que se ha de abonar por el aºcceso de todo
               tribunales, eºntre tantos ejemplos, CNCiv., Sala B, "Silvestri, Hilda R.", sent. del                            ciudadano a la prestación del servicio de justicia.
               28/6/2011, LL, t. 2011-E, p. 177, con nota de.URE, Carlos Ernesto, Honorarios del                                     158 Ibíd., p. 71. El autor ilustra el punto con el siguiente· ejemplo: "quien
               abogado. MínÍmos de equidad; CNCiv., Sala G, "G., M. E. el P., R. P. y ot. si daños                             mata injustamente a un hombre produce un daño a la esposa e hijos de la víctima
               y perjuicios", sep.t. del 23/6/2014, LL, t. 2014-E, p. 584, con nota de FIDELIBUS, José                         (la privación del esposo y padre); pero este daño no es, de ningún modo, evaluable
              María, Equidad: primer parámetro para el juez del Estado de Derecho.                                             en dinero (... ); sin embargo, no cabe duda de que se ha cometido una injusticia
                     155
                          Cfr: por todos, :OE LOS Mozos, José L., ob. cit. en nota 149, p. 324, y D'ORs,                       con la esposa y con los hijos -además, claro está, de la cometida con la víctima-
              Álvaro, ob. cit. en nota 150, ps. 96 y 97.                                                                       al privarles de un bien ( ... ) y esa injusticia clama r_eparación. La imposible
                                                                                                                        i.
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                                                                                                 ~'f       .\-
                                                                                                 ".
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                                                                                                           ·•.
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                                                                                                    i
                                                                                                .. ,l.
                                                                                                  .·~e
      _368                           TEORÍA. DEL DERECHO                                                                                LA IN-TERPRETACIÓN JURÍDICA                         369·
                                                                                                      .al.•:'
                Como se· advierte de lo transcriptb, se trata de.una-directriz 9.e.                                Viao, "al hablar P.e consecii.encias derivadas dé los distintos resul-
        carácter "extra-normativ:o", eíi tanto el empleo del pr~cept6 de que~                                   . tados interpretativos" se quiere significar que no solo "pesa sobre
        se trate depende del exame:µ de consecuencias de divers?: índole                                           el intérprete la responsabilidad de buscar fa justicia en el caso"
        (morales, políticas, económicas; etc.) que graVitan influyendo .sobre                                    . sino. que, además, "en esta dilucidación no pueden quedar afuera
        su uso; bien que; como ?e observar_á a partir del exte.ndido empleo                                        las exigencias· de toda· la sociedad".· De ahí que, "en definitiva, se
      . dado por los tribunales, dicha ponderación. tampoco es (ni. puede . ·                                      requiere del intérprete esa inteligencia previsora y omnicompren-
        serlo) _ajena al sistema jurídico al que pertenece _aquella disposición ...                              . siva dispuesta i:j. medir simultáneamente las proyecciones sociales
               Esta directriz se conoce también bajo la denomin.ación de "argu."                                   globales y las p:roy~cciones para los casos judiciales -los presentes
        mento pragmátic;o''. Así, en ·sµ clásico tratado, PERELMAN y ÜLBRE-                                        y los futl,lYos-" 166 , en línea con lo expuesto por Oliver W. HoLMES (y.
       ·cHTS-TYTECA escriben que dicho canon.es .el "que· permite apreciar                                         que la Corte Suprema recoge en algún precedente), "es un deber del
        un acto o uri aco;ntecimiento cqn arreglo a las corisecuencias favó~                                       juez pensar ·en las consecuencias sociales de su decisión" 167 •    ·
1    · rables o .desfavorables" y que, pqr:- desempeñar "u:P. papel esencial.                                           Por ello, completa el profesor argentino, ''La Corte nacional ha
        (... ) algunps hari· querido ver en ello el esquema :único. que p·o$ee                                     dispuesto la apertura de recursos. extraordinarios en razón de la
        la lógica de los. juicios de _valor; para apreciar uri. acontecir'nientó                                   proyección .social de ciertas causas, llegando para ello a sosten~r
1       es preciso reinitirse a los efectos!'. Ycompletan: ''las consecuencias ..                                  criterios t¿les como: 'el asunto conmueve a la comunidad entera ·en
        ( ... ) puetj.en. obs~rvarse o simplemente preverse, p\ieden estar ase-                                    sus valores más sustanciales y profundos' (Fallos, 257:134); 'la litis
        guradas- o ser puramente hipotéticas" 162 • · ·         ·            ·     ·
                                                                                                                   acredita un serio interés comunitario en juego' (Fallos, 306:250);
               El propio PERELMAN, en otro. también célebre trabajo_ ya cita-                                      'el consenso colectivo en la vigencia y. eficacia de la ley penal es
        do, matiza, empero, su alcance, al· señalar que "no es tan fácil· d.e ·                                    recaudo de la paz y el orden público, que en definitiva reposan en el
       aplicar",. pues "e;n caso de desacuerdo .sobre el valor de las conse-
¡-     cuencias ¿de qué ·parecer hay que. fiarse:? ¿Hay que segUir la o.pi-. ·                        l            imperio de la justicia' (Fallos, 260:114); 'es trascendente la cuestión
                                                                                                    J
                                                                                                                   por las proyecciones que para el futuro puede tener la decisión que
       nión de la mayoría? ¿Quiénes s·on los que tienen VOZ y voto en este
1
       capítulo? ¿Hay ·que seguir, como sugería. J. Stuart Mill, la· opinión
                                                                                                                 en    definitiva recaiga' (Fallos, 285:279)" 168 •
                                                                                                                        De lo expuesto se infiere que e:Xiste un sentido, esto es, una
       de los hombres más compet!'nites o más ca:lificados?" 16ª.. Acaso con.
       base. en esta observación· deba· comprern;l.erse la reluctancia de algún
       precedente de la Corte Supre-ina de Justicia de la NaCión al empleo
                                                                                                     Jr
                                                                                                      1.
                                                                                                      1 :·
                                                                                                                   razón sustantiva, que justifica, en el casd y, además, con la mirada
                                                                                                                   puesta en el todo social, la consideración de las consecuencias en la
                                                                                                                   exégesis y empleo de una determinada disposición. Semejante es
       de esta directriz,. cuan9.o señala que· "el estudio de la razonabílidad
                                                                                                                   la perspectiva que parece asumir MacCormick, para quien, como
       de ·las ·leyes en punto a si,{ validez constitucional no puede llevar~e                        1
     · a· cabo. sino en el ámbitc/de. las prevision~s en ella cont"enidas y de                                     refiere MANA$SERO, "el término 'consecuencias' no hace referencia
       modo alguno. sobre la hase de los resultados posibles de aplicación, ·
                                                            a
     . lo:que importa.ría" valo.rarlas en ·mérito. factores extraños a sus
                                                                                                    l 1
                                                                                                                   a las consecuencias fácticas que pueda tener la decisión judicial
                                                                                                                   para los implicados en el litigio. Es decir, las modificaciones que
       normas" 164 •                                ··     ·                                                       'de hecho' produce el fallo, sino las implicaciones jurídicas de la
               Con todo, la práctic~· jurídica parece encaminarse por un apren-                                    decisión. Con ello quiere decir las acciones permitidas y prohibidas
       dizaje (eso que GADAMER, bella y_·gráficamente, deno·iniria "el saber                         1             que se desprenden de la decisión tomada. Dicho de otra manera,
                                                                                                      1            por 'consecuencias' se comprende a las implicaciones deónticas de
       de la calle" 165) que permite razonable.mente desentrañar las mejore.s
       o _más plausibles consecuencias de .una decisión. "Según explica                             -.1
                                                                                                                   la decisión", de modo que "si lo que evalúa un juez para considerar
                                                                                                                   la racionalidad de su decisión son las implicaciones jurídicas en
           162
                                                                                                                   términos de prohibición y permisión, siempre que se presenten las
               PERELMAN, Chaim, y 0LBRECHTS-TYTECA, Lucien, Tratado de la argumen-
     tación. La nueva retórica, Gredos,.Madrid, 1989, p. 409.                 ·
           163
               PERELJ.\1A.i.'I, Chaim, La. lógica jurídica y la nueva retórica (del francés por                       166  Vmo, Rodolfo, ob. cit. en nota 44, p. 152.
     Luis Díez-Picazo); Civitas, Madrid, 1988, ps. 167 y 168.                                                         167  HoLMES, Oliver W., The path of the law, "Harvard Law Review", vol. 10,
           164
               Fallos, 322:278Q.                                                                                 p. 457, citado también en Fallos, 313:1232.
           165
               GADANIER, Hans Georg, ob. cit. en nota 1, p. 399.                                                       168 VIGO, Rodolfo, ob. cit. en nota 44, p. 158.
 ¡1·
 ..                                                                                                              >.'~
if,:·1                                                                                                       /
 l.
 {:.          370                              TEORÍA DEL DERECHO                                                                                            LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA                             371
 ~·! i .
¡,¡           mismas características en casos similares debe aplicarse el criterio
:¡,;¡:
                                                                                                                                    posible·s ho· debe prescindirse de las consecuencias que derivan de
              adoptado, porque las consecuencias serían semejantes" 169 • ·         ·                                               la adopción de cada uno, pues ellas constituyen uno de los índices
11.¡11             En este horizonte/ como explica DEHESA DÁVILA, esta. directriz.                                                  más seguros para verificar su razonabilidad y su coherencia· con
              "guarda afinidad con. otro tipo· de argumentos", como son el de la:                                                  ·el sistema en que está engarzada la norma" 172 , Por ello, en otros
j·1li                                                                                                                               precedentes s€ requiere acudir, .junto a otras directrices, a la pre-
i!            "no redundancia" y él "apagógico" o de la "reductio al absurdo",
 1
: il1        pues en ambos "la consecuencia obstruye en forma directa el buen                                                       sente: "en la tarea· de interpretar las leyes, además de dar pleno
 11:
                                                                                                                                    efecto a la intención del legislador, no debe prescindirse de las
 J!:1
             que resulta inútil, sea por las éonsecuencias absurdas 'que se pu~                                                    consecuencias que derivan de cada criterio, pues ellas constituyen
             den desprender de. Una interpretación determinq..da" 170 , Y, añade·                                                   uno de los índices más seguros para verificar su razonabilidad y .
             este a·utor, cabe' distinguir "cinco principios fun,damental~s a los                                                   su coherencia con el sistema en que está engarzada la norma 173 •
             qÜe se asocia" este argumento, a saber, el ''pro 'actione''; el de la                                                     · Asimismo, en otra extendida familia de fallos la Corte Supre-
             "seguridad jurídica"; el "favor libertatis"; el "in dubio pro reo" y ei                                                ma apela a estf,l directriz en orden a desentrañar el sentido de las
             de. la "presunción de ~nocencia" 171 •  · .   ·  .               ·
                                                                                                                                    normas. Al respecto¡ escribe que "los jueces, en la tarea de razo-
                                                                                                                                    namiento que ejercitan para indagar el sentido que corresponde
             ·    Sobre tales bases, en Úen de efectuar uria sfatematización d~l                                         i          acordar a }ás normas, deben atender a las consecuencias que nor-
           · empleo de. esta directriz por parfe del Alto Tribunal, cabe recono-
             cer, cuanto menos, una triple distinción. Por de pronto, la Corte
                                                                                                                      ~!       .    malmente derivan de sus fallos, lo que constituye uno de los índices
                                                                                                                                    más seguros para verificar la razonabilidad de su interpretación y
             Supren:'ia la vincula con los restantes cánones argumentativos. Así                                                    su congruencia con todo el ordenamiento jurídico" 174 •
             señala, de manera general, que "entre los criterios de interpretación                                                       Por último, en otros pronunciamientos, el Tribunal cimero pre-
                                                                                                                      1             cisa que los precedentes no son de aplicación automática si es que
                             ~ASSERO, María de los Á., oh. cit. en nota 74, ps.47 y 48.
                      169
¡¡,               '                                                                                                                 no consultan, también, la directriz bajo examen. Así, se ha dicho
                      170
fl'                          DEHESA DÁVILÁ, Gerardo, Introducción. a la retórica y a la argumentación,                1             que "no es posible trasladar la doctri:µ.a de un caso a otras situa-
             · 4ª E;Jd.,171Editorial de la Suprema Corte de Justicia de fa Nación, México, 2007, p. 538.                            Ciones, si ello conduce a dejar .de lado ,pautas interpretativas según
                             !bid., ps. 538 a 541. Un ejemplo de la aplicaéión de las consecuencias enla-.                          las cuales no cabe prescindir de las consecuencias que derivan de
               zado con el principio pro actione puede hallarse en CFed. Salta~ "Fiscal Federal de
               Orán interpone recurs.o de queja en la causa P.697/07", in re, sent. del 17/11/09, .en                 1             cada criterio pues ellas constituyen. uno de los índices más seguros
              la que se hizo lugar al recurso intetpuesto respecto de la excarcelación dispuesta en                                 para verificar la razonabilidad de la solución y su coherencia con
              tina resolución en la que también se había ordenado el procesamiento de una personá                                   el sistema en que está engarzada la norma" 175 .
              ya que, "en tales circunstancias/y puc!Íendo considerarse que se trata de un supuesto
              dudoso sobre el plazo que regí:;/para ap~lar los diveJ::sos aspectos de la reso~ución, debe             1                  De todo   lo dicho, interesa puntualizar -a fin de evitar un
              estarse por una interpretación amplia a favor del ejercicio del derecho de defensa".                    !.            empleo arbitrario del argumento- que el recurso a esta directriz
                                                                                                                                    no acaece de manera aislada o en "vacío". Por el contrario,· el
                                                                                                                      ¡i
                     .Lo expuesto .permitiría desmentir la afirmación de' PERELMAN y ÜLBRECHTS·
              TYT:EcA (ob. cit. en nota 162, loe. cit.), según l.a cual.esta directriz. "no requiere,                               haz de precedentes recién mencionados insisten en· vincular su
¡·.           para que lo admita el sentido común;]ustificación.alguna", temp·eramento seguido                                     concurso tanto con la "razonabilidad" de la normá (expresión que,
             también, v. gr.,. por EsQUlAGA GANuZAS, Francisco J., La argumentación en lajU$ticia
              constitucional española,.Oñati, HAAEIIVAP, 1987, p. 276, con sustento en que en el.                     1
              contexto social eh el que actúa, se observaría un acuerdo respecto de Ía evaluación                                        172
                                                                                                                                             Fallos, 311:1925; 313:664; 317:856; 318:79. Y, en análogo sentido, se
              de las consecuencias, és. decir; existiría cierto consenso a la luz del cual el decisor             .1               lee que "en la labor de interpretación de la ley cobran singular trascendencia las
             se inclina por una interpretación dejando a un lado otra u otras. En mi opinión;                                      consecuencias que derivan de cada criterio, pues ellas constituyen uno de los índices
             si la necesidad de justificación .es un elE;Jmento ínsito a toda decisión judicial, a
             fortiori· lo .es cuando se introduce el elemento ajeno ?-1 ordenamiento jurídico, tal el
                                                                                                                      j~           más seguros para verificar la razonabilidad y coherencia con el sistema en que está
                                                                                                                                   engarzada la norma" (Fallos, 317:874).
             de las "consecuencias". Esta es; según·creci, la manera como, de hecho, procede la                                          173
                                                                                                                                             Fallos, 317:1505 y muchos otros.
             jurisprudencia. Entre tantos ejemplos, pu!'!de consultarse con provecho el dictamen                                         174
                                                                                                                                             Fallos, 315:158, entre muchos otros. De modo semejan.te, en Fallos,
           . del Procurador Ger¡eral de la Nación, ap. III, in fine; en·la·causa ''Menéndez, L. B.                                 310:267 expresa que "uno de los índices más seguros para verificar la razonabilidad
             s/causa 12.942", sen t. del 101_7/2012, que fa Corte. hace suyo (Fallos, 335: 1305), o                                de la inteligencia de una norma y su congruencia con el resto del sistema del que
             CFed. Salta, ".Act~a~ionés relativas Fabersani, Ana M. dIOSE s/amparo", sent. del                                     forma ~arte, es la consideración de sus consecuencias".
            20/12/2012.                                                                                                                  1 5
                                                                                                                                             Fallos, 314: 1764, y muchos otros .
                                                                                                                   _,.
                                                                                                                  .
                                                                                                                  .. 1,    ~
                                                                                                                      1·
                                                                                                ,.·: . -:-,.·-:'
                                                                                               ..      '· - °
                                                                                                         -!·        -
                                                                                                  .·.   ·. .
                                                                                                   .
                                                                                                   /.
       372                             TEORÍA. DEL DERECHO                                                                                    LA INTERPRETACIÓN JURÍDICA                   373
:¡
I,
        a la luz de un examen atento de los casos eri los que se emplea, se                                              jurídica coh sustento en el examen: de -las cosas en sí mismas consi-
        emparenta netamente con el argumento "teleológico") cuanto con                                                    deradas o de éstas con las personas .. A su vez, la segunda procura
11      la "coherencia del sistema"; lo cual, según ya se ha dicho supra                                                  desentrañar esa dimensión de objetividad a partir de las exigencias
I¡     .(§ 31, e, 3), reenvía a un horizonte de se.ntido respecto del cual el                                             básicas o fundamentales de la persona.
        juez no puede sustraerse y que, para decirlo .nuevamente con las .                                                    En lo concerniente al primer aspecto -"naturaleza de las co-
      . palabras de MacCormick empleadas eh dicho lugar, remiten a una .                                                  sas"-, los ejemplos jurisprudenciales son numerosos y han sido
        "concepción de vida satisfactoria".                                                                               examinados con algún detalle en el capítulo III, a donde se remite
                                                                                                                         a fin de evitar innecesarias repeticiones. Sin perjuicio de ello, en
           4. PAUTAS DE INTERPRETACIÓN EXTRA E INTRANORMATNAS: I. DI-                                                     los más arriba Citados casos "Iachemet" y "Melgarejo" es claramente
       RECTRIZ DEL DERECHO NATURAL. Como. se ha visto  extensamente, Y.ª                                                  perceptible la influencia, respectivamente, de los factores "tiempo",
                                                                                                                          "cualidad" y "cantidad" en la determinación de lo justo, d.e modo
        bajo esta dfrectriz se suele apelar a "ciertos crit'erios de indispd-
      . nibilidad que es posible discernir en el contexto de las concretas                                                que las relaciones jurídicas allí imbricadas quedan ajustadas por
        relaciones. de índole jurídica en las que se hallan .inmersas· ias                                                remisión a elementos extranormativos que se originan en la "na-
¡''     personas en la.vida sociar' 176 y que, como raZ;ona:µ BALLESTEROS y                                               turaleza d~ las cosas".
'I
        COTTA, procuran discernir esos· "datos permanen_tes y constantes                                                       ComQ,·se ha señalado, si una solución de este tipo se incorpo-
1
        del fenómeno jurídico" que hacen al resguardo de las "condiciones                                                 ra al. sistema, el argumento en cuestión pasa de ser "productivo"
        naturales del viVir humano" 177 •                                                                   1             a "interpretativo", tal lo acontecido, por ejemplo, con el estándar
             La búsqueda, pues, de la solución justa del caso concreto hace                                               del "equilibrio en las prestaciones", el que, de clara fuente en la
        de este éanon un típico ejérnplo de los argumentos -para seguir                                                 · "naturaleza de las cosas" en tanto se basa en el sentido objetivo de
        con- la feliz clasificación de Giovanni TAAELL0 178- , de "producción"                                            que una relación jurídica no puede fundarse sobre la manifiesta
                                                                                                           1              desigualdad de sus términos, pasó '-a raíz de la sanción de la ley
        normativa, esto es, se trata de una diredriz por cuyo conducto se                                  ¡
                                                                                                                         ,17711- a integrar el Código Civil his~órico a través de los artículos
        ."crea" una solución ad casum ante la inconveniencia.o injusticia de
        la existente. Sin embargo, como sucede asimismo con ei argumento                                   !             ·954, 1071 o 1i98, entre otros., habiendo sido dichos criterios recep-
        por los "prinCipios", según se verá a continuación, es por demás
        frecuente que la gran mayoría de tales soluciones resulten final-
                                                                                                            l
                                                                                                            l
                                                                                                                          tados en él Digesto vigente, respectivamente, en los arts. 332, 10
                                                                                                                        y 1091.                             ..
        mente incorporadas al ordenamiento jurídico, en· cuyo caso estos                                    ¡  1
                                                                                                                             A su vez, otro tanto cabe decir en lo relativo al segundo aspecto
                                                                                                                        -"naturaleza humana"-. Aquí también los ejemplos son numerosos,
        argumentos se.transformah en un canon de naturaleza "interpre-
        tativa", ya que la "positiyación"·del criterio previamente discernido
                                                                                                            ¡
                                                                                                               i        tal y como se examinó en el citado capítulo y el argumento admite
                                                                                                                        asimismo una consideración tanto "productiva" como "interpre-
        por la doctr_ina o, espec,íal'mente, pür la jurisprudencia~ d.eviene el
                                                                                                            l           tativa". Lo primero, porque en su oportunidad la jurisprudencia
        purito de partída desde el cual el exégeta puede interpretar aquel.
             Según se anticipó, el argumento por el f'derecho natural" puede                                !           discernió ciertos bienes o derechos como naturales a las personas
                                                                                                                        (tal el caso, entre otros, del derecho humano al "ambiente", al am-
        ser comprendido desde una doble.perspectiva: desde la "naturaleza                                      l        paro, a la identidad, etc.). Y, lo segundo, porque dichos derechos
1
        de las cosas" y desde la "naturaleza humana". La primera apunta
I·      a discernir la dimensión de objetiviqad que anida              en
                                                                 cada reiación
                                                                                                                        naturales fueron incorporados al sistema jurídico, v. gr., a través
1                                                                                                                       de los derechos "no enumerados" o "implícitos" (art. 33, texto de la
                                                                                                               1        Constitución nacional según la reforma de 1860), o por conducto de
             176
                   Cfr. RABBÍ-BALDI CABANILLAS, Renato, "Estuciio int~oductorio a la segundá
      edición", en ídem (coord.), Las razones ... , ob. cit. en nota 1, p. 25.            .
                                                                                                               ¡        leyes o de nuevos artículos de la Ley Fundamental y de los tratados
                                                                                                                        internacionales de protección de los derechos humanos (luego de la
            177
                Cfr., respectivamente, BALLESTEROS; Jesús, Sobre el sentido del derecho,
      Tecnos, Madrid, 1984, p. 106, y COTTA, Sergio, ¿Qué es el derecho?, Rialp, Madrid,
                                                                                                               ¡,       reforma constitucional de 1994).
      1993, p. 54 (trad. del italiano- por J. J. Blasco).
            178
                TARELLo; Giovanni, Interpretazione della Legge, Giuffre, Milano, 1980;
      p. 378 (existe traducción. castellana de Diego Dei Vecchi, prólogo de R. Guastini;
                                                                                                               l
                                                                                                               t
                                                                                                                             II. DIRECTRIZ DE LOS PRINCIPIOS. Según se anticipó, la presencia
                                                                                                                         de "principios" en el ordenamiento jurídico -cuyo alcance ha sido
      La interpretación de la ley, Palestra, Lima, 2013).                                                      !         precisado con anterioridad (cfr. § 27, d)- genera una interpretación
                                                                                                               1
                                                                                                               ¡
                                                                                           /
  que se estructura "a partir de ellos" y que, como también se puso                                             A su véz, respecto del Segundo supuesto -él carácter interpre-
  de relieve, asume un doble qirácter: "productivo" e "interpretativo';.                                   tativo-, "el recurso a los principios ayuda a despejar dudas entre
       En el primer supuesto -:el carácter ''productivo"- los principios                                   varias interpretaciones posibles escogiendo aquella que mejor se
  actúan bajo una doble perspectiva: a) ante una "laguna" normativa;                                      ·.ajuste al principio en juego" 182 • En efecto, maridatos ·como los del
  en cuyo supuesto un determinado principio concurre a suplirla, caso
                                                                                                           art. 11 de la ley 2556l, por el qUe se procura "compartir de modo
  en el cual esta directriz, como se había dicho supra:, cap. V, § 27,
  d, in fine, "amplía la capacidad de-respuesta" de un ordenamiento                                     .. equitativo los
                                                                                                                        • .
                                                                                                                            efeetos
                                                                                                                             . 1
                                                                                                                                    de . la ~odifi~ación
                                                                                                                                              .        .
                                                                                                                                                         de la. relación
                                                                                                                                                                  .
                                                                                                                                                                         de cambio"
                                                                                                                                                                               . .
                                                                                                                                                                                    (ál
  jurídico -al crear una solución de especie o "ad hoc", y .b) a fin de                                    que se aludirá infra, cap. VII, § 41), o como el del art. 3°, apart.1 de
  no aplicar det'e:tminadas normas que resultan contrarias a una·                                          "Convención sob're los Derechos del Niño" (art. 75, inc. 22, 2° párr ...
  soluci6r;1.de justicia, es decir, que son opuestas a una práctica social,                                de la Constitución nacional), que dispone que "en todas las medi-
 a una costumbre del foro o a ciertos criterios de' objetividad que,                                       das concernientes a los niños (... ) una condición primordi~l a que
  ciertamente, e·mparentan esta .directriz con la- del ''<lerecho natural"                                 se atenderá será el 1nterés superior del niño", constituyen firmes
  recién examinada 179 • ·       ·     ·     · ·.   ·. · .    . .      ·
                                                                                                           criterios interpr~tativos en orde~ a resolver :;i.suntos o a dilucidar
       É(primel; casó es, quizá, meno¡:; frecuente pero su. relevancia                                     la exégesis de reglas' en que se den cita opiniones o planteamientos
  no es menor. El ejemplo mencionado en el capítul'o I relativo a los
  ovocitos pronucleados .da cuenta,' según creo, de esta idea cuando,                                      contradictó'rios 183 •
 frente a la ausencia legislativa respecto de su estatus -que se                                 l1
  hallan· en un estadio· anterior al delos embriones'-, el Tribunal les                                   para garantizar el tráfico de moneda extranjera en los actos jurídicos, sin que ello
  otorgó la condición de persona por remisión al prinCipio pro homine,                                    suponga -que es lo que aquí interesa- que resulte alterado el equilibrio objetivo de
  es decir, '.'a favor del hombre" ante la duda científica y la omisión
  jurídica de esclarecer tal hecho 1 ªº. · .         .     . ·.
       El segundo caso 'es.muy empleado por los tribunales. Así, 81
                                                                     ·                           rl
                                                                                                         ·aquellos. Ál fundamentar el cambio, la Comisión añade, en línea con lo expuesto,
                                                                                                           qUe "Se propone, al mismo tiempo, derogar los artículos 7, 10 y 11 de la ley 23928,
                                                                                                          lo cual permite a nuestro sistema salir de un régimen de nominalismo absoluto
                                                                                                          (absolutamente insostenible y de muy dudosa co;ilstitucionalidad en- la hora actual),
. advenimiento jurisprudencial de lª ya mÉmcionada "teoría de la                                 l      · y pasar a otro de nominalismo relativo, que admite la validez de las cláusulas de
  imprevisión"' como se ilustró más arriba, supuso que los jueces .se
  apartaran de una norma expresa (el principio nomü1.alista contem-
                                                                                                'l        estabilización·y luce más acorde con la realidad económica".
                                                                                                                Precisamente en función de dicha realidad es interesante lo dispuesto por la
  plado por Vélez Sársfield en. el art. 619 del Código Civil, también                            l        CNCiv., Sala H, "C;, M. A el F. G. S. si alimentos", sent. del 30/6/17, LL, dÍario
                                                                                                          del 31/10/17, que, al ordenar la actualización semestral de la cuota alimentaria en
  previsto en el Digesto actu::i.l en los arts. 765 y 766), a fin de qlie                                 favor del hijo de hs partes con sustento en la "situación económica vigente" y la
 la equivalencia en las prestaciones .no resultara alterada. Por su                                       "mayor edad de aquel", todo lo cual consulta "el interés superior del niño", expresa
  parte, l~ también referida configuración.del principio de "no actua-                           1
 lización de las deudas'~· entrañó que los 'jueces se alejaran de las                            ¡.       (con inocultable incomodidad, que es lo que la reforma procura evitar) que ello
                                                                                                          "no implica contrariar la prohibición" de la ley 23928 de aétualizar la moneda e
  leyes indexatorias con el objeto, una vez más,' de no desequilibrar                          . :l·      indexar precios "sino tan solo comprender estimativamente las reales necesidades
                                                                                                          del menor de acuerdo con cada época y reconocer el efecto inflacionario que padeció
 la necesaria -igualdad que debe caracterí'zar a las relaciones int.er-                                   y aún Eªdece e1 país".                                              ·
  subjetivas 1ª1. ·                      ··.      ·                                                             1 2
                                                                                                                    ZULETA PUCEIRO, Enrique; RABBI-BALDI CABANILLAS, Renato, y MA.NASSERO,
                                                                                                         María de los Ángeles, ob. cít. en nota 75, p. 55, a partir de lo expuesto por el citado
                                                                                                         TARELLO, ob. cit. en nota 178, esp. p. 382.
        179                                                                                                     183
            La enunciación remite, genéricamente habland6, al ya citado DwoRKrN,                                    La Corte Suprema, en la ya mencionada causa de Fallos, 331:942 (cfr.
  Ronald, ob. cit. en nota 104, esp. ps. 22 a 24. Sobre la diversa interpretación que                     supra, nota 107), parece asumir ambas facetas del argumento de los principios a
  estos criterios o estándares han· merecido a Jos comenta<;iores del antiguo profesor                    propósito de la citada directriz del "interés superior del niño". Sobre el particular,
  de Oxford, me remito, sin entrar ex profeso en la disGusión, a los autores y las tesis                 tras considerar que la sentencia de la anterior instancia es arbitraria por disponer
  defendidas en la nota .60 del capítµlo·V.          ·                                                   la tenencia provisoria de una niña -que venía ejerciendo el padre- a favor de su
        °
        18
         .  CNCiv., Sala i, "R. R. s/medidaf? precautorias", sent. del 3/12/1999, ED,                    madre sin razones respaldatorias, afirmó, a propósito de la exégesis del anterior
. t. 185, ps. 407 y sigui~ntes (el énfasis se ha añadido). Cfr: respecto de este tópico                  art. 206, 2º párr., 1° parte del Cód. Civil, que "los textos positivos deben contrastarse
  lo que se expone en_eI·cap. I,_§ 6, b; II Y.§.7;c, 1, I.                                               con los antecedentes de hecho, máxime en estos asuntos en los que, tal como lo
        181                                                                                              apunta la doctrina, el interés del niño -de rango superior-, opera imperativamente
            El- menc;.ionadci Ailteproyecto de reformas al Código Civil y Comercial
  propicia n;10difÍcar los citados arts. 765 y 766, a mi juicio y fundamentalmente                       en un papel integrador, que llena los eventuales vacíos de la ley y prevalece sobre
                                                                                                l,
                                                                                               ... .
                                                                                                -1 .
                                                                                                . l..
                                                                                                          -
                                                                                                          .
                                                                                                          /
                                                                                                              ,,
                                                                                                          ... ..
                                                                                                              '
                                                                                                                   ,   ..
                                                                                                                   ::.':~ ~.
                                                                                                                           . :
                                                                                                                                ,··
11                Finalmente, resulta de interés ~:xaminar otra faceta de la in-.                                                          En efocto: existen casos en que ambas partes invocan "prin-
 ~~1         terprE)tación "por principiosi•:· se trata de los sUpuestos, •. ¿ada vez
             más frecuentes, en que ios principios "se enfrentan" a otros.o, acaso
                                                                                                                                      cipios" que, al cabo del examen de las circunstancias de la causa,
                                                                                                                                      deben y pueden ser atendidos por igual. El tantas veces menciona-
             con mayor precisión, cuando las partes de un conflicto invocan.ante                                                      do precedente "Saguir y Dib" ilustr.a este supuesto si se recuerda
             un juez principios contradictorios. en defensa de sus respectivas .                                                      que concurríán dos principios a debate: de un lado, el derecho a la
           . posturas.                                           ·                 ·· ·                                               vida y, de otro, el derecho a la integridad física. Así, en un caso
  ¡:
                  Como se anticipó (cfr. supra; § 33; h, 3) la idea de ponderaóón ·                                                   ciertamente· "difícil" como el mencionado, la sentencia cree haber
:l·1'11·     -intrínseca a toda argumeritacióri "por principios"-, éxcluye, de                                                        protegido exitos.amente tanto uno como otro derecho 185 •
             suyo, la tesis de fa jerarquía de éstos e invita a examinar la virtua-                                                        A este último respecto, es posible, siguiendo a ATIENZA, dis-
J           lidad de cada mio de ellos a partir de un análisii:¡ '.circunstanciado                                                    tinguir según que las sentencias garanticen tanto las exigencias
                                                                                                                                      "esenciales" como las "no esenciales" de los principios en juego, en
 f           en todo casci concreto. Ahora bien: desentrañar los principios del
             caso -'-para seguir ia terminología alexiana, "en la mayor medida                                                        cuyo caso se está ante un supuesto de "equilibrio Óptimo"; o que solo
1
'
             posible" (cfr. supra, cap. V, § 27, d)- no es uha tarea sencilla y, por
             tanto, su éxito ho siempre se .er.icuentra garantizádo 184 •
              los preceptos cuya frnplementaciÓn se revele contraria a los derechos de aquél" (el                          l
                                                                                                                                      satisfagan los primeros recaudos de los derechos en juego y no los
                                                                                                                                      segundos, hipótesis en la que se está ante una situación de "equi-
                                                                                                                                      librio mínimo" 186 . Tengo para mí que esto último es lo que sucede
                                                                                                                                      de ordinário en la praxis jurisprudencial, ya que es difícil (por no
              destacado me pertenece).
                                                                                                                                      decir imposible) que los derechos invocados por las partes puedan
                     Una v~riada aplicación de la faceta "interpretativa;' la ofrece la CFed. Sal-.·                                  resguardarse de modo completo o absoluto, pues por imperio de la
              ta. Así, in re, "Lenis, Ana M. s/prisión .domiciliaria", sent. del 27/6/2011 y "Pichotti,                               coexistencia social se exigen acuerdos y reglamentaciones que, en el
              Josefina S. -inc. prisión domiciliaria-:'', sent. del 21/6/2011, donde señala que "si                        1
             bien es cierto·que la causante acreditó ser madre de ·una niña mimor ·a cinco años·                           !
             de edad, también se obser.;a (... ) que el domicilio fijado e; justamente el lugar                                       Antonio-Luis, La garantía del contenido esencial de los derechos fundamentales,
              donde se comprobó la persecución ·del delito~ y ·en el cual venía desempeñando la                            1          Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1997, passim; CIANCIARDO, Juan, El
              "detención morigerada", por lci que· sumado a los "fu¡;rtes indicios que la vincul¡¡.n                                  cotiflictivismo en los derechos fundamentales, Eunsa, Pamplona, 2000, passim y,
              con la comercialización del material tóxico", se. concluye· que eniergeri "circunstan,.                      1          del mismo autor, El principio de razonabiüdad. Del debido proceso sustantivo al
              cías que obstan la conc.esión del beneficio en función de los 'mejores intereses del                     .   ·~         moderno juicio de proporcionalidad, Ábaco, Buenos Aires, 2004, passim, además
bibliografía cada vez más extensa, los sugerentes estudios de MARTÍNEZ PUJALTE, 1 a 101.
                                                                                                                           l
                                                                                                                           l
                                                                                                '>:~\?
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 mejor de los supuestos, solo permiten respetar el contenido esencial                                                  § 34. Un ejemplo integrador de -las pautas interpretativas
 de los principios o .derechos invocados. Así, en el reci.én citado cas~                                          examinadas: la directriz de la "totalidad". --,.- Los ejemplos
 de Fallos, 324:975, ni el particular actor, ni la prensa dem_andada:                                             que han ilustrado las pautas de interpretación referidas preceden-
 resultaron enteramente satisfechas con la resolución, ya que ni                                                . teniente muestran que, en una cantidad nada despreciable, tales
 todas las dimensiones' del derecho de intimidad (esenciales y no                                                 directrices· no, se presentan de modo aislado, sino que actúan en
 esenciales),-ni. todas l;rn manifestaciones del derecho a libertad de                                            forma conjunta. Cabe hablar, entonces, de un modo de argumen-
 prensa (esenciales y no) fueron acogidas por la sentencia; ;mnque                                                tar que tiene enr cuenta varias maneras o vías a fin de resolver un
 sí -según estimo-; lo esencial de amb-as:                                                                        problema. Se trata, pues, de una interpretación "totalizante" en la
       Sin embargQ, cabe, a partir de esta precisión, .deeír algo más,·                                           medida en que emplea un número plural de las pautas preceden- '
 pues e:X;isten casos en que si bien ambas partes invocan principios o                                            temente estudiadas.
 derechos en defensa de sus posiciones, a la postre de un análisis de                                                  Ahora bien, y este es, acaso, el aspecto que más interesa resal-
 los presupuestos de hecho que los originan se advierte que alguno                                                tar aquí, el fenómeno recién descrito supone el empleo, al mismo
 de ellos no podrá- ser resguardado ni siquiera ell' su faceta "esen-                                             tiempo, tanto de pautas de origen positivista, cuanto de la raíz ius-
 cial". Tal es el supuesto, creo, de los denominadod "casos trágicos~'.                                           naturalista clásica. De ahí que se la ubica bajo esta última mafr1z
 Según explica ATIENZA, "un caso puede calificarse como trágico                                                   porque, si.bien se mira, la directriz de la "totalidad" no se opone a
 cuando, en relación con el mismo,' no 'existe ninguna solución que se                                            la primera sino que la supone y, de tal modo, a mi juicio, la supe-
 sitúe por éneíma del equilibrio mínimo. Por ejemplo, cualesquiera
 de los casos (... ) serían trágicos si (... ) fueran incompatibles en~                                l
                                                                                                      ' 1'
                                                                                                                  ra. No procura, en efecto, únicamente dar cuenta del sentido de la
                                                                                                                  norma y con ello agotar su misión, sino que, teniendo presente sus
tre sí; si así ocurriera entonces no habría forma de encontrar Una                                                alcances, busca abrirse a la n:ialidad del problema a fin de obtener
 sohJ,ción que no sacrificara lo esencial de alguno de los dos valores                                           la decisión justa del caso.
 e ..). Ahora no nos encontramos ya frente a una simple alternativa,                                   1'
                                                                                                                      Su empleo por parte de la Corte Suprema es profuso y ello se
 sino frente a un dilema" 187 •                                                                                   manifiesta a través de remisiones implícitas o explícitas .
     . Por desgracia, la realidad rnuestr::i. que no son pocos los supues-··
tos de casos "trágicos" como, por ejemplo, el del aborto terapéutico:.
aquí se halla en juego el derecho a la vida del nasciturus a expensas
                                                                                                      11          la norma permisiva y prospectivas desde una filosofía del derecho constitucional,
del de la rriadre y el derecho. a la vida de la madre a costa dei que                                  '
                                                                                                     ·.C-         a partir del caso 'F.' de la Corte .Suprema, "Pensar en Derecho", núm. O, afio 1,
ostenta el hijo de modo que la defensa de un principio entrañ&,                                        1          2012, Facultad de Derecho, Universidad de Buenos Aires), es interesante apuntar
                                                                                                                  que la precedente proposición (que ubica al caso. en el horizonte de los "trágicos"),
de suyo, la cancelación del otro y viceversa. Como es sabido, ante                                                no es conclusiva, ya que ambos votos reprochan a la parte recurrente -defensora
la imposibilidad de gar.intizar ·ambos derechos, ni siquiera en la                                                de la. vida del fetcr- que "omitiera desarrollar (y a ello la obligaba su propia cons-
"mayor medida posible1', el· Código Penal argentino optó por sen-                                     1¡ '        trucción argumental) un análisis exhaustivo tendiente a determinar si someterla
                                                                                                                  a continuar forzosamente el embarazo (... ) no pudiera derivar en un perjuicio de
tar- una "regla de excepción" al principio· del d~recho ala vida del                                   l
nasciturus, favoreciendo el de la madre,' con lo cual el objetivo de                                  ·¡          una severidad" mayor que la de evitarlo a través de "medidas alternativas" que
                                                                                                                  aqúella parte había propuesto (v. gr., asistencia psicológica a 'ia niña y su entorno
·salvaguardar ambos derechos en el caso concreto ná se verifica isa ..                                            familiar) (consid. 13, últ. párr. y 11, respectivamente). A contrario, tal proposición
                                                                                                                  entraña reconocer que si dicha "construcción argumental" hubiera sido conducente
                                                                                                                  o persuasiva la interrupción del embarazo podría haberse evitado, transformando
       187
       188
                     o
            Ibíd., p. 1 l. '        '       ' '      '       '            ''      ' '
            Cfr., en ·análogo sentido, la citada causa "F.A.L.'' (Fallos, 335: 197) en la que
                                                                                                     '1
                                                                                                       1
                                                                                                                · de tal modo el caso en "difícil", lo que implica satisfacer los aspectos cuanto menos
                                                                                                                  esenciales de ambos derechos.
  los votos concurrentes de los jueces Argibay y Petracchi -no así, según estimo, el de
  mayoría- dan cuenta que, entre el derecho de la persona por nacer y el de la madre
 ·embarazada como consecuencia de .una ·violación, "se está en presencia de uh severo ·
  conflicto de intereses (. : .) que el le'gisladqr 'consideró no evitable de otro modo que
                                                                                                 -11                    Otros posibles ejemplos de casos "trágicos" los constituyen las citadas causas
                                                                                                                  "Bahamondez" (Fallos, 316:479) y "Albarracini" (Fallos, 335:799), en las que se
                                                                                                                  hallaban en juego los derechos a la "vida" y a la "libertad religiosa" de los nom-
                                                                                                                  brados, miembros del grupo religioso "Testigos de Jehová". En ambas, la opción
. afectando los derecj:ios del ncisciturus" (consici.s. 13 y •14,'1 ºy último párrs. del voto                     del Tribunal de resguardar la libertad religiosa y, en definitiva, el modo de vida
  de la jueza Argibayf9º y 10 del voto del juez Petracchi). Con prescindencia del                                 escogido por una persona en ejercicio de su aut()nomía de la voluntad, puede con-
          o
  acierto no de la,, exégesis dada a la norma aplicable (cfr., al respecto, mi citado
                                                                                                      ·l·
                                                                                                       .   '
                                                                                                                  llevar, inexorablemente, la cancelación de la vida de la persona, con lo que uno de
  estudio 'El aborto no punible en la Argentina: consideraciones sobre el sentido de                              los derechos en juego no puede ser siquiera mínimamente salvaguardado .
                                                                                                      .t~.·..
                                                                                                      j'
                                                                                                 ~   - l. .
                                                                                                     ·f