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Luzio, W. 2010. Suelos de Chile

El documento proporciona una introducción al libro "Suelos de Chile" que describe y clasifica los suelos de Chile. El libro introduce el concepto de zonas edáficas y describe los principales factores de formación de suelos como materiales de partida, clima, organismos y relieve. Además, explica los procesos pedogénicos y los regímenes de humedad y temperatura que se utilizan para clasificar los suelos de Chile.

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Luzio, W. 2010. Suelos de Chile

El documento proporciona una introducción al libro "Suelos de Chile" que describe y clasifica los suelos de Chile. El libro introduce el concepto de zonas edáficas y describe los principales factores de formación de suelos como materiales de partida, clima, organismos y relieve. Además, explica los procesos pedogénicos y los regímenes de humedad y temperatura que se utilizan para clasificar los suelos de Chile.

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.

' 1

1
SUELOS DE CHILE

Walter Luzio Leighton


• (Ed.)

2010
SUELOS DE CHILE
Registro de Propiedad Intelectual N° 184959
ISBN N° 978-956-19-0648-8
Impreso MAVAL
San José N° 5862
Fono 944 3550
Santiago-Chile
Prólogo

� La idea de generar un texto en el cual pudieran converger los conocimientos acumulados por
O') mucho tiempo sobre las características y distribución de los suelos de .Chlle, tiene varias
décadas de maduración. Por diversas razones, tanto personales como profesionales, no había
sido posible concretar este anhelo hasta el presente donde se conjugaron factores tan
sobresalientes como l a acumulación de un importante bagaje de conocimientos, el tiempo
necesario no sólo para escribir, sino para investigar y ordenar información y finalmente y tal
vez el más trascendente, el contar con colaboradores de sólida formación edafológica,
'
asertivos y cuyos aportes enriquecieron notablemente el texto original.

Con conocimiento de la forma y el fondo del tema, el libro se llama Suelos de Chile y no Los

..
Suelos de Chile, pues se ha estimado que el segundo nombre habría significado la presunción
que se hace una revisión y descripción de todos los suelos que existen en el país, lo cual
podría llevar a engaño al lector. Aún cuando se hace una revisión tan comprehensiva como ha
sido posible, recurriendo tanto a información propia como externa, se tiene clara conciencia
que existen numerosas situaciones que no están documentadas, ya sea por falta de datos
. ,
publicados ya sea porque se trata de áreas que han sido inaccesibles a los reconocimientos
provenientes de los organismos públicos o privados.

El Libro introduce el concepto de Zona Edáfica que pudiere sugerir una uniformidad u
homogeneidad de los cuerpos suelos que se encuentran enmarcados dentro de ella. Sin
embargo, para una realidad geográfica y fisiográfica como la de Chile ello no ocurre. pues los
paisajes han sido remodelados por diferentes agentes tales como el agua, el hielo, el viento, el
volcanismo y, más recientemente, por el hombre. Teniendo presente la enorme variabilidad de
suelos que se puede encontrar en una misma Zona Edáfica, existen al menos, dos elementos
que pueden considerarse como relativamente constantes, que son, el contenido de agua y la
temperatura media en la sección de control de los suelos. Es en función de estos elementos que
se ha querido sistematizar la ctistribución de los suelos del país, con el fin de hacer más
comprehensiva la lectura tanto para el especialista como para el estudiante que busca
información.

El material fotográfico que complementa las descripciones y ctiscusiones sobre los suelos, es
...
único y original, salvo en aquellos casos donde se expresa claramente la autoría. Se estima
que este es un aporte verdaderamente significativo para la comprensión e identificación de los
cuerpos suelo del país.

Finalmente, es pertinente recordar las palabras de W. Bloom: El agua se bebe, el aire se


respira, pero el suelo no se come; sólo intuimos que nos alimenta indirectamente y, tal vez,

..
sea esta la razón por qué este recurso natural suelo continúa siendo el gran olvidado en las
mesas de discusión ambientales, en todos los aspectos legales y en lo que dice relación con su
protección. De esta manera, el suelo constituye un recurso que, además de ser irrecuperable es
extremadamente frágil, pues su deterioro o su degradación pueden ocurrir en tiempos

mensurables de semanas o meses y generalmente por efecto de acciones relacionadas con el
mal uso generado por el hombre.

Se espera que este libro contribuya a expandir y profundizar el conocimiento que se tiene de
los suelos de Chile, de tal manera que las nuevas promociones de profesionales puedan influir
en mejor forma y con un mayor grado de información a proteger este recurso natural para las
generaciones futuras.

El Editor.
SUELOS DE CHILE
INDICE

CAPITULO 1
Conceptos básicos de pedogénesis y clasificación 1
Luzio, W., Casanova, M., Seguel, O.

1.1. Fundamentos de pedogénesis 3


1.2. Factores de Formación de Suelos 4
1.2.1. Materiales de partida 5
1.2.2. Clima 9
1.2.3. Organismos 12
1.2.4. Relieve 15
1.2.5. Tiempo 2O
1.3. Procesos pedogénicos 22
Adiciones 24
Sustracciones 24
Transferencias/translocaciones 25
Transformaciones 25
1.4. Fundamentos de clasificación de suelos 27
1.4.1. Regimenes de humedad de los suelos 28
Régimen ácuico 28
Régimen aridico y tórrico 29
Régimen ústico 29
Régimen údico 29
Régimen xérico 29
1.4.2. Regfmeoes de temperatura de los suelos 30
Régimen críico (frígido, mésico, térmico, hipertérmico) 30

1.4.3. Regímenes de humedad de los suelos de Chile 30


Régimen aridico (tórrico) 30
Régimen xérico 31
Régimen ústico 31
Régimen údico 31
1.4.4. Regímenes de temperatura de los suelos de Chile 31
Régimen térmico 31
Régimen isotérmico 31
Régimen mésico 32
Régimen isomésico 32
1.4.5. Categorfas superiores de clasificación de suelos 32
1.5. Zonas Edáficas de Chile 35
Figuras Capítulo 1 36

CAPITULO 2
·� ____________
Suelos de la Zona Desértica (desde 18° LS hasta 29° LS) 39
Luzio, W., Casanova, M., Seguel, O.
2. 1 . Suelos del Sector Altiplánico 4 1
2. 1 . 1 . Reseña de la geología y geomorfología del área 41
2.1.2. Características de los suelos 44
Suelos esqueletales 4-1
Suelos con pedogénesis incipiente 45
Suelos formados en materiales volcánicos recientes -46
Suelos saturados en cuencas depresivas del paisaje 48
Suelos de los Valles Cordilleranos 51
2.2. Suelos de l a Depresión Intermedia 52
Suelos de llanuras depositacionales S2
Suelos con alto contenido de sales (salares) 53
2.3. Suelos del Sector Costero 57
2.4. Suelos del Valle d e Copiapó 59
2.5. Suelos del Valle de Ruasco 62
Suelos aluviales recientes e n terrazas de posición baja 62
Suelos de terrazas de posición alta 62
Suelos de terrazas intermedias del interior del valle 63
Suelos de Piedmont 63
Figuras Capítulo 2 66

CAPITULO 3
Suelos de la Zona Á rida Semiárida (desde 29° LS basta 32° LS) 81
Casanova, M., Segue/,0., LU2Ío, W.

3. 1 . Características generales de la Zona 83


3.2. Suelos de la zonas interiores 86
3.3 Suelos de Jos Valles 91
3.3. 1 . Valle del río Elqui 91
3.3.2. Valle del rio Liman 93
3.3.3. Valle del río Choapa 98
3.3.4. Valle del río Quilimari 101
3.4. Suelos del Sector Costero 102
3 . 4 . 1 . Suelos de la terrazas marinas 102
Suelos sin desarro l l o de perfil 103
Suelos con horizonte cálcico lOS
Suelos con Tertel 106
Suelos con horizonte nátrico 109
3.4.2. Suelos en posición de lomajes y cerros de la
Cordillera de la Costa 1 1O
Suelos delgados con escaso desarrolJo sobre roca 111
Suelos con horizonte B 11 1
Figuras Capítulo 3 1 13

CAPITULO 4
�uelos de la Zona Mediterránea Árida (desde 32°00'LS hasta 37°45.LS) 1 2 5
Luzío, W., SegueJ,O., Casanova, M.

4 . 1 . Características generales de l a Zona 1 27


4.2. Suelos de Jos sectores cordHieranos 128
4.3. Suelos de Jos sectores de la pre-cordillera de Los Andes 129
4.3 . 1 . Regiones de Valparaiso y Metropolitana (32°00' - 43°0 0 ' aprox.) 1 29
4.3.2. Regiones de O'Higgins y Maule (34°00'- 36°00' aprox.) 131
4.3.3. Región del Bio-Bio (36°00' - 37°45' aprox) 135
4.4. Suelos de l a Depresión Intermedia 137
4 . 4 . 1 . Regiones de Valparaíso y Metropolitana (32°00' - 43°00' aprox.) 137
Suelos e n tetrazas aluviales 13 7
Suelos en posición de cerros 140
Suelos e n posición de Piedmont 141
...
Suelos en cuencas de sedimentación lacustre 1 42
Suelos de origen volcánico 144
4.4.2. Regiones de O'Higgins y Maule (34°00' - 36°00' aprox.) 145
Suelos e n terrazas aluviales 145
Suelos en posición de Piedmont 1 47
Suelos en cuencas de sedimentación lacustre 149
Suelos so bre toba volcánica 151
Suelos sobre sedimentos fJuvioglaciales 152
Suelos de origen volcánico 154
4.4.3. Región del Bío-Bfo (36°00' - 37°45' aprox) 155
Suelos en terrazas aluviales 155
Suelos sobre toba volcánica 157
Suelos sobre sedimentos fluvioglaciales 159
Suelos derivados de materiales volcánicos 160
4.5. Suelos de l a Cordillera de l a Costa 163
4.5.1. Regiones de Valparaíso y Metropolitana (32°00' - 43°00' aprox.) 1 63
Suelos de cerros en la Cordillera de la Costa 163
Suelos en lomajes y Terrazas Costeras 164
4.5.2. Regiones de O'Higgins y Maule (34°00' - 36°00' aprox.) 166
Suelos de cerros en la Cordillera de l a Costa 166
Suelos e n Lo majes y Terrazas Costeras 169
4.5.3. Región del Bio-Bio (36°00' - 37°45' aprox) 171
Suelos de cerros e n l a Cordillera de l a Costa 171
Suelos e n Lomajes y Terrazas Costeras 171
Figuras Capítulo 4 1 74

CAPITULO 5
Suelos de la Zona Mediterránea Húmeda
(desde 37°45'LS hasta 43 º 00'LS} 195
Luzio, W., Segue/,0., Casanova, M.

5 . 1 . Resella geológica de l a región comprendida


entre Los Á ngeles y Cbiloé 197
5.2 Características y propiedades de los suelos del sector Ú dico-Mésico 197
5.2.1. Suelos de l a Cordillera de L o s Andes 197
5 . 2 . 2 . Suelos d e la pre-Cordillera d e Los Andes 199
5.2.3. Suelos de la Depresión Intermedia 201
Suelos con horizonte argílico ( B t) 201
Suelos con horizonte cámbico (B) 204
Andisols 207
Ñ adi s ( semi-ñadis) 21O
Suelos con alta saturación de bases (Mollisols) ll l
5.2.4. Suelos de la Cordillera de la Costa � 12
Suelos con horizonte Bt 2 13
Suelos c o n horizonte B 115
Andisols 2 J6
5.3. Características y propiedades de los suelos
del sector Ú dico-Isomésico 218
5 . 3 . 1 . Suelos de la Cordillera de Los Andes 21 8
5.3.2. Suelos de la pre-Cordillera de Los Andes 22 O
5.3.3. Suelos de la Depresión Intermedia 223
Aodisols típicos 223
Andisols con duripán y drenaje moderado 22 6
Andisols con régimen ácuico (Ñadis) 228
Suelos derivados d e cenizas volcánicas, no Andisols
...
230
Suelos derivados de cenizas volcánicas antiguas 231
5.3.4. Suelos de la Cordillera de la Costa 233
lnceptisols con propiedades ándicas 23 3
Ultisols con influencia volcánica 23 6
Figuras Capitulo S 23 9

CAPITULO 6
Suelos de l a Zona Húmeda (desde 43° LS hasta 50° LS) 263
Luzio, W., Seguel,O., Casanova, M.

6.1. Reseña GeomorfoJógica de la Región 265


6.2. Andisols del Sector Central (entre 71 °45' y 72°30') 268
6.3. Suelos c o n alta saturación d e bases (desde 71°45' hacia e l este) 271
6.4. Suelos en posición de terrazas con horizonte cámbico 274
Figuras Capítulo 6 277

CAPITULO 7
Suelos de la Zona de Magallanes (desde 50°LS hasta 55°LS) 291
Luzio W., M. Casanova, O. Seguel.

7 . 1 Antecedentes Generales 293


7.2 Regimenes de Humedad y Temperatura de l o s suelos 295
7.3 Suelos 295
7 . 3 . 1 Suelos de l a Provincia d e Última Esperanza 296
7.3.2 Suelos de la Provincia de Magallanes 298
7.3.3 Suelos de la Provincia de Tierra del Fuego 300
7.3.4 Suelos orgánicos 303
Figuras Capítulo 7 305
CAPITULO 8
Suelos de la Zona Antártica (entre 59°W y 61 °W hasta 6rS y 63°S) 309
Luzio W., M. Casanova, O. Seguel.

8.1Antecedentes generales 311


8.2Características generales de los suelos 314
8.3Suelos Minerales 315
8.4Suelos Omitogénicos 318
Figuras Capítulo 8 321

CAPITULO 9
Suelos de las lslas de Pascua v de Juan Femández 325
Luzio W., M. Casanova, O. Seguel.

9.1 Isla de Pascua 327


9.1.1 Antecedentes Generales 327
9.1.2 Características generales de los suelos 330
9. 1.3 Descripción de los suelos 332
9.1.4 Evolución histórica de los suelos 335
9.2 Isla de Juan Fernández 338
9.2.1 Antecedentes Generales 338
9.2.2 Descripción de los suelos 341
Suelos de Montaña de desarrollo incipiente derivados
de cenizas volcánicas 342
Suelos de Relieve Intermedio y Mayor Desarrollo Relativo 342
Suelos de Carácter Deposicional en Relieves
Semi-estabilizados 342

CAPITULO 10
Cartografía generalizada de suelos de Chile 343
Casanova M., W. Luzio, O. Seguel.

10.1 Antecedentes Generales 345


Figuras Capítulo 10 346

LITERATURA CITADA 353


CAPÍTULO 1
Conceptos básicos de pedogénesis y clasificación

Luzio, W., Casanova, M. Seguel, O. 2009. Conceptos básicos de pedogénesis y


clasificación. pp: 1-37 . In: Suelos de Chile. (Luzjo, W., Editor). Universidad de Chile.
1.1 Fundamentos de pedogénesis

El suelo es el resultado de la acción acumulada de los flujos de energía y materia a partir de un


material de origen, procesos que tienen como efecto (entre otras cosas) la transformación
progresiva de los materiales de partida en constituyentes secundarios (Buol et al.,1997).

La Pedología ha evolucionado a través del descubrimiento, análisis y racionalización de los


procesos pedogéoicos, cuyos resultados fundamentales provienen del ingreso, transformación y
pérdida de componentes en el suelo. Aunque es definida como el estudio del cuerpo suelo en su
posición natural, tradicionalmente ha sido subdividida en morfología de suelos, factores de
formación de suelos, procesos de formación de suelos, clasificación de suelos, geografia de
suelos y cartografia de suelos. Algunos autores consideran a la Pedología como descriptiva y
dependiente de las estructuras de los sistemas de clasificación de suelo; no obstante, Bockheim et
al. (2005) en una extensa revisión de la literatura, muestran una gran diversidad de conceptos
desarrollados por la Pedología, cuyos aportes científicos se han considerado como piedras
angulares para las Ciencias de la Tierra.

Los suelos no son controlados por genes, como podría entenderse a través del término génesis de
suelos, sino más bien su formación y dinámica está determinada por factores de formación (Buol
et al., 1997). El propósito fundamental de la Pedología es discriminar y cuantificar los impactos
de estos diferentes factores (el clima, los organismos vivos, el relieve, el material parental y el
tiempo) sobre los flujos de materia y energía; para esto, ha sido necesario desarrollar modelos de
formación y evolución de los suelos. Los primeros intentos en este sentido, los efectuaron
Dokuchaev, Marbut y Jenny (Figura 1-1 ).

Figura 1-l. Pioneros de la Ciencia del Suelo: Vasili V. Dokucbaev {Rusia: 184Crl903), Curtis F. Marbut (EUA:
1863-1935) y Hans Jenny (Suiza: 1899-1992).

La idea que los suelos se forman de manera predecible, en respuesta a los factores ambientales se
atribuye a Dokuchaev, quien creó el concepto de zonalidad y distribución zonal de Los suelos, que
expresó a través de la ecuación S= /(clima, organismos, material parental). Posteriormente Jenny
(1941), definió los factores como variables independientes y agregó el relieve (r) y el tiempo (l).
Esta transformación hacia una teoría cuantitativa que sigue principios fisicos y químicos, permitió
la caracterización del suelo como un sistema. No obstante, se consideró que la variable tiempo
tenía el status de ser el único factor de estado independiente (Jenny, 1961). Hasta el día de hoy.
numerosos estudios recurren a estos trabajos iniciales para la predicción de las propiedades del

3
suelo (Samoueliao and Comu, 2008). Es necesario considerar, eso sí, que aunque los modeh1� nás
recientes se hao basado en los modelos de los procesos pedogénicos, este enfoque se puede
considerar más bien complementario que competitivo con el de carácter factorial.

Cualquter combinación particular de los denominados factores de formación de suelos dará lugar
a uno (o varios) procesos de fol711ación de suelos, es decir un conjunto de eventos fisic0s.
químicos y biológicos que se conjugan para generar un suelo particular. Aun cuando se ha
establecido que, en la práctica, no es posible separar con certeza la influencia e incidencia de
cada proceso y cada factor de formación en una determinada pedogéoesis, solamente por motivos
prácticos se analizarán separadamente.

1 . 2 F,actores de formación de suelos

La conceptualización de más amplia aceptación del sistema suelo es la expresión axiomática de


los factores de estado de Jenny (1941 ), quien afrrma que el estado de desarrollo de un suelo es el
producto de cómo se han conjugado un detem1inado clima (el), una litología o material de origen
(p). unos organismos (o), un relieve (r) en un tiempo (t) determinado. Agrega además, unos
puntos suspensivos ( ...) para indicar otros factores no especificados, pero que pudieran ser
relevantes en determinadas circunstancias, tales como la innuencia del hombre.

S= f (cl, p, o, r, t, ... )

,
Dichos factores se consideran variables (factores de estado) que definen el estado de un sistema
de suelo (Cuadro 1-1). Los factores de estado no son sólo cualitativos sino también cuantitativos,
son independientes del sistema y pueden variar en el tiempo y en el espacio (Amundson and
Jenny, 1997). Con posterioridad a su proposición inicial, Jenny (1961. 1980) modificó su
ecuación con el fin de formalizar el concepto de ecosistema:

ec, s, v, a= f (cl, p, o, r, t, ...)

donde ec puede ser cualquier propiedad de un ecosistema (ej. producción primaria), s es una
propiedad del suelo, v de la vegetación y a de los animales.

Cuadro 1-1. Princi pales factores de formación de suelo y ecosistema (Jenny, 1941; Amundson and Jenny, 1997)

Factor de estado Defutición características


Condición atmosférica regional, comúnmente caracterizada por la temperatura y .la
Clima
precipitación media anual
Flujo potencial de componentes bióticos en el sistema (distinto de lo observado en
Orgamsmos
cualquier momento)
Relieve Gradiente, aspectoyconfiguración del paisaje al tiempo t- O
Material parental Características químicasyfísicas del sistema suelo al 1iempo t =O
Tiempo Tiempo transcurrido desde que el sistema se fonnó o rejuveneció
Un factor biótko de magnitud debido a la posesión de prácticas culturales y actitudes que
Hombre
alteran los aisa·es
1.2.1 Materiales de p a r tida

Al hacer referencia a los materiales de partida o parentJJles, es necesario considerar a los procesos
geológicos en su más amplia acepción, es decir, desde la tectónica de placas hasta el volcanismo
y desde la sedimentación de carbonatos en los océanos profundos hasta Las glaciaciones. Todos
estos procesos originan el material base, el material parental, que crea las condiciones adecuadas
para que, eventualmente, sirva de sustrato para la formación de un suelo. Así, la litología del
material parental determina la naturaleza fisica y mineralógica que tendrá el suelo.

En Chile, González-Bonorino y Aguirre ( 1970) describieron los principales tipos de rocas y


asociaciones minerales del basamento cristalino del territorio. Este basamento consiste
predominantemente de rocas metamórficas semipelíticas de bajo grado y de rocas graníticas,
expuestas de preferencia, a lo largo de la región costera de Chile Central y Austral, además de
áreas aisladas de Chile Septentrional. La edad de las rocas metamórficas y graníticas seria del
Neopaleozoico. En Chile Central, los autores definen tres series metamórficas, las que emplean

para una clasificación provisoria de las rocas de otras partes del país. Estas series corresponden a
condiciones de metamorfismo a presiones media-alta, media-baja y baja, respectivamente. En la
Figura 1-2, se presenta un mapa geológico simplificado de gran parte del país, de Cernbrano y
Lara (2009).

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Los suelos formados a partir de areniscas cuarcíferas o de granito meteorizado tenderán a ser
arenosos con algo de arcilla heredada, ya sea a partir de adiciones eólicas o bien de impurezas
que haya tenido inicialmente la roca original. Comúnmente Jos suelos son excesivamente
drenados, tienen una baja fertilidad y una baja capacidad de retención de agua.

Las rocas félsicas (claras) tienden a meteorizarse hacia una fracción coloidal dominada por
caolinita y eventualmente gibsita (Figura 1-3), con Jjberación de Ca y K que pueden ser usados
por el componente biológico. La caolinita y la gibsita proporcionan una baja Capacidad de
Intercambio Catiónico (CJC), resultando en una :rápida lixiviación de nutrientes. La presencia de
cuarzo en las rocas félsicas proporciona la trama esqueletal de granos de cuarzo resistentes que
ayudan a una rápida percolación del agua. Un ejemplo de esta situación (GIREN, 1997b) es la
Asociación Constitución (Rhodoxeralfs) constituida por suelos formados a partir de filitas muy
meteorizadas con matriz arcillosa.

Las rocas máficas (oscuras) generalmente se meteorizan hacia esmectitas (Figura 1-3) y una
fracción coloidal rica en óxidos de Fe, simultáneamente con la liberación de Ca y Mg, cationes
que pueden ser usados por la vegetación y los organismos del suelo. Las esmectitas proveen una
elevada CIC, la cual lógicamente proporciona un elevado intercambio de nutrientes. A partir de
las rocas máficas, los suelos pueden desarrollar horizontes con alto contenjdo de arcilla
(esmectitas) las que, al expandirse en húmedo, reducen el movimiento del agua debido al cierre
de los macroporos.

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Figura 1-3. Contenido relativo de minerales de arcilla (M: montmorrilloni� V: venniculita, K: caolinna, H:
haloisita,l: ilita, G: gibsita) en función de las precipita.ciones en muestras superficiales de suelos de California
(Birkcland, 1984).

7
Duchaufour (citado por Tan, 2000) postuló que Las arcillas producidas por meteorización de rocas
básicas difieren de aquellas provenientes de rocas ácidas, definiendo La hipótesis siguiente:

Roen básicas-minerales ferromagncslanos, feldespatos -esmectita -caollnita

Rocas ácidas -cuarzo, feldespatos -caollnita

Las cenizas volcánicas como materiales parentales edáficos, tienen una importancia trascendental
para Chile, tanto por la extensa distribución de sus depósitos como por la naturaleza de Jos suelos
originados. Esto es válido tanto para los Andisols alofánicos como los no alofánicos (Cuadro 1-
2).

Cuadro 1-2. Comparación de algunas propiedades de Andisols alofánicos y no alofánicos (Dablgren et al., 2004)

Propiedad Andisols alofánicos Andisols no atoránlcos


Mineralogía Alófana e
imogolita Hidróxido de Al, Minerales 2: 1
Fuente de Al activo AlófanayComplejos Al-humus Complejos Al-humus
Carga negativa constante Ninguna Alta
Carga positiva variable Algo Ninguna
Acidez del suelo Débilmente ácido Fuertemente ácido
Al cxtractable en KCI Alto
Toxicidad por Al Rara Común
límiles de Anerberg Altos Ba·os
Adhesividad Ninguna a ligera Moderada
Plastic1dad Ninguna a ligera Moderada
Potencial de compactación Ligero Moderado

En las condiciones de humedad adecuada, la meteorización de las cenizas se produce en forma


relativamente rápida, debido a la gran superficie específica y la rápida liberación de Si y Al desde
los vidrios volcánicos, cuyo resultado es una precipitación de aluminosilicatos no cristalinos
(Harsh. 2000). De acuerdo con Besoaín y González ( 1978) esta etapa primaria puede producirse
en 8.000 afios y la fase alofánica puede persistir basta los 18.000 años. Cientfficos japoneses
(Shoji et al., 1993) consideran que, bajo condiciones excelentes de drenaje, la desilicificación de
alófana produce imogolita, un mineral intermedio en la secuencia de meteorización. Si las
condiciones ambientales permiten una mayor desilicificación, la imogolita se convertirá en
haloisita y eventualmente en caolinita (Tan, 2000):

Vidrio volcánico - Hidratos de Al & SI amorfos - al6fana -imogolita - ba/oisit11-caolinita -


gibsita

Besoaín ( 1 985), de acuerdo a sus numerosos estudios en los suelos volcánicos de Chile, ha
propuesto la siguiente secuencia de meteorización para las cenizas volcánicas:

f 1
Cenizas volcáníCBS-a/6fsns-gibsita-metahalolsita-caoliníts
J
- clorita - vermiculitll

La fonnación de metabaloisita, ya sea directamente de la alófana o como producto de alteración


de la gibsita. indica una evolución hacia minerales cristalinos y, por lo tanto, la pérdida de Las
propiedades ándicas que caracterizan a los trumaos (Andisols).

8
Los aluminosilicatos no cristalinos se pueden encontrar en suelos derivados de materiales
diferentes a Los volcánicos, tales como arenisca, gneiss, granito y basalto. En este caso, la alófana
e imogolita pueden ir acompañadas de ferrihidrita, el cual es un óxido de hierro pobremente
cristalizado (Harsh, 2000). Para que se forme alófana e imogolita es esencial que exista suficiente
Si y A1 en la solución, de tal manera que abundantes Lluvias y bajo pH faciliten la meteorización
rápida de los minerales primarios. Tanto la imogolita como la alófana rica en Al, son dominantes
en pH bajo y con una relación Al/Si alta, mientras que la haloisita y/o La alófana rica en Si,
dominan cuando la sílice soluble es alta (op.cit.).

Una secuencia general de formación de minerales de arcilla ha sido descrita por Birkeland
(1984) como:

Biotita,
Muscovit111 - Vermiculita8 -Montmorrilloníta9 - 18Á lnter-grados
fllita7 pedogéaicos (1:1 a 1:1:1)9

�I/
C/orita4 -Clorita -+ 14Á Inter-grados - Clorita-A19 -+ ciliníta¡o - Gib.fitall
sccundarla8 pedogénícos (2:1 a 2:1:1)9 Haloisita1o

donde el subíndice de mayor valor indica mayor estabilidad a la meteorización. Otra secuencia
propuesta, se aprecia en la Figura 1-4.

1 . 2 . 2 Clima

Las condiciones climáticas regionales controlan los niveles de precipitación y los patrones de la
dinámica de evapotranspiración, de tal manera que es predecible la dirección del escurrimiento
hacia zonas de acumulación de agua. Se considera, por lo tanto, que el suelo constituye una etapa
en el ciclo hjdrológico que moviliza el agua desde los océanos hacia la atmósfera y que regresa
nuevamente al suelo a través de la lluvia. Esta última, además de la nieve fundida, proporciona
agua a los suelos a través de la infiltración por efecto de la gravedad y la succión.


La cantidad de precipitación y la disponibilidad de agua de una determinada zona han establecido
una primera subdivisión de los climas en húmedos y áridos. Generalmente los valores de
precipitación anual proporcionan una idea rápida de las características de disponibilidad de agua
de una región. Sin embargo, desde el punto de vista edáfico (formación de suelos) y agrícola
(disponibilidad de agua para los cultivos), los valores de las variaciones estacionales tienen una
mayor significación (Soil Survey Staff, 2006). Se considera que sólo una parte de la lluvia que cae
sobre la superficie infiltra a través del suelo. Una proporción importante se evapora directamente
desde la superficie del mismo o bien a través de la vegetación por transpiración. Otra porción
puede escurrir superficialmente, si el suelo posee un gradiente de pendiente significativo. En
regiones desérticas y áridas las recargas se producen en las partes bajas del relieve y las descargas
en sus partes altas. En regiones húmedas, tanto los niveles rreáticos como los flujos de
escurrimiento de agua siguen los rasgos de la topografia local, es decir, infiltrando (recargas) en
las partes elevadas del relieve, escurriendo y descargando en las partes bajas del relieve.

9
Mineral primllio Minml secundario

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Figura 1-4. Vías y condiciones generales de formación en mineralogía de suelos. EH1: Esmectita­
Hidróxido intcrestratificados, VHI: Vcrmiculita-Hidróxido interestratificados (Essington. 2005).

Las correlaciones entre las propiedades de los suelos y las precipitaciones, basadas sólo
en los valores de las precipitaciones sin tomar en consideración la topografía, omiten la
influencia del escurrimiento superficial, el cuál puede awnentar o disminuir la

efectividad de las precipitaciones como factor de formación de suelos. Además, se debe
reconocer que normalmente los datos de precipitación y temperatura están dados para
una región, es decir se refieren aJ macroclima; y éstas son cifras gruesas que sólo se
pueden utilizar para describir en forma general el clima de grandes regiones. Dentro de
éstas pueden existir microclimas que difieren considerablemente del macroclima. Por
ejemplo, en suelos con drenaje restringido el agua se acumula por un tiempo mayor al
que ocurre en condiciones de buen drenaje. Esta situación se origina por
discontinuidades en el perfil o por una posición baja en el paisaje; en este último caso
el factor predominante de la pedogénesis es el relieve.

Es necesario considerar además, que las relaciones de promedios anuales de


precipitación en función de determinadas propiedades de los suelos no tienen toda la
validez que se les quiso atribuir en el pasado, principalmente debido a que no es posible
explicar el comportamiento de un suelo a través de factores simples (Luzio ct al., 2006).

10
Dentro de los suelos, el agua es retenida por fuerzas adhesivas y cohesivas que se
oponen a la lixiviación que genera la fuerza de gravedad. Cuando la capacidad de
retención de agua que puede tener un suelo es excedida, este exceso de agua puede
movilizarse hacia abajo, hacia los niveles freáticos, o Lateralmente, hacia cursos de agua
superficiales. La remoción del agua requiere de energía solar para evaporar agua desde
la superficie del suelo o desde la vegetación (Hillel, 1998).

Las raíces de las plantas pueden absorber agua desde mayores profundidades a las que
puede actuar la energía de evaporación. Con este fenómeno se extiende el papel del
flujo de calor latente en las transferencias de agua - suelo - atmósfera. El flujo
favorecido por la mayor disponibilidad de precipitaciones favorece la meteorización del
material parental (Figura 1-5).

La temperatura también tiene una influencia en el comportamiento hidrológico, ya sea


en forma permanente o transitoria. Se considera, por ejemplo, que el permafrost impide
el movimiento del agua en el suelo; pero si el permafrost se funde (estacionalmente o en
forma inducida) deja de ser un impedimento para el flujo del agua. De esta forma el
movimiento de los flujos de agua puede ser muy diferente dependiendo de la estación
del año, para muchos suelos.

La temperatura media anual es una abstracción que, para numerosos propósitos, resulta
un índice inadecuado. A pesar de esta falencia, se han cuantificado numerosas
correlaciones entre propiedades de los suelos y la temperatura media anual, tratando de
establecer relaciones regionales. El papel de La temperatura en la pedogénesis se
manifiesta esencialmente a través de la aceleración de las reacciones químicas al
aumentar la temperatura, ya que por cada incremento de 10°C las reacciones se aceleran
por un factor de 2 ó 3 (Van Wambeke, 1992).

La meteorización química consiste esencialmente en la disociación hidrolítica de los


silicatos, la cual se ve incrementada por el aumento de la temperatura (Figura 1-5). Así,
cuando La temperatura es de 0°C existe una disociación relativa del agua de 1, en cambio
con temperaturas de 50°C esta disociación aumenta 8 veces. De esta manera en los
climas más cálidos los procesos de meteorización son más profundos y acelerados.

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F'igura 1-S. Gráficos de Peltier adaptados, que relacionan tasas de meteorización fisica y química a
temperatura y precipitaciones medias anuales (Huggctt, 2007).

11
En Chile, el clima ha determinado la dirección de la pedogénesis en diversas
situaciones. El ejemplo más claro proviene nuevamente de las cenizas volcánicas. de
amplia distribución a lo largo y ancho del país. Es así como las tefras que se han
depositado en las regiones áridas del norte de Chile, no han tenido mayor evolución, de
tal modo que Jos suelos siguen evidenciando las características de los materiales
parentales, pues éstos no se han meteorizado lo suficiente para la formación de
complejos humus-Al conjuntamente con minerales secundarios de baja cristalinidad. En
las regiones de regímenes xéricos y arídicos, la baja cantidad de lluvia concentra la
süice, lo cual favorece la formación de haloisita a expensas de la alófana e imogolita
(Takahashi et al., 1993). Datos proporcionados por USDA, NRCS (Aburto et al., 2008)
señalan que en el suelo Pudahuel de La Región Metropolitana, formado a partir de
pómez y cenizas volcánicas ácidas, a la haloisita como primer mineral dominante y
mica como segundo mineral dominante en la fracción inferior a 2 micrones. En las
regiones húmedas del sur del pa(s (al sur de paralelo 37° LS), las tcfras han

...
evolucionado en otra dirección, y la meteorización ha llevado a la fonnación de
minerales de baja cristalinidad (alófana, imogolita y ferrihidrita) conjuntamente con
complejos humus-Al. La mayor disponibilidad de agua y el régimen adecuado de
temperaturas ha determinado una cubierta vegetal abundante, con lo cual se han
formado epipedones úmbricos y melánicos, llevando a la formación de Andisols típicos.

l .2.3 Organis mos

Las enormes cantidades de energía que moviliza la fotosíntesis, la descomposición de la


materia orgánica y la actividad de los microorganismos, proporcionan cambios drásticos
en la pedogénesis. Sin embargo, sin agua, nutrientes y una adecuada temperatura, las
reacciones biológicas no pueden actuar y sin ellas no se podrían generar
transformaciones pedogénicas específicas.

Los ácidos orgánicos tienden a bajar el pH de la solución suelo, incrementando así la


meteorización de los minerales; sin embargo la liberación de cationes que se produce
durante la meteorización tiende a neutralizar la acidez. La cantidad de agua que percola
y de cationes que son removidos determina el grado en que la meteorización tiene un
efecto tampón en contra de la acidificación y determina la naturaleza de los minerales
secundarios sintetizados (Chadwick and Graham, 2000).

Hasta una cierta cantidad, el aumento de precipitación lleva a una mayor producción
neta de C, el cual a su vez, lleva a w1a mayor producción de materia orgánica y a un
reciclaje más rápjdo de nutrientes (op. cit.). Así, los ecosistemas muy productivos
promueven elevados niveles de C(h, el que facilita la producción de ácidos orgánicos,
lo cual lleva a bajar el pH de la solución suelo. Estas - condiciones
.., promueven elevadas
tasas de meteorización que Uevan asociadas una considerable liberación de nutrientes
hasta que la reserva de minerales primarios se consume.

La temperatura controla tanto las tasas de los procesos biológicos como la síntesis de
minerales a través de la meteorización. A ooc o a temperaturas inferiores, existe muy
poca agua disponible para reacciones químicas. En medios muy fríos predomina la
desintegración fisica de las rocas y materiales parentales sobre las desintegraciones de
origen qufrnico.

i2
-
Por cada 1 ooc de incremento de temperatura, las reacciones biológicas se duplican hasta
que alcanzan el límite máximo de su función enzimática. Esto implica que, con todos

..
los demás factores iguales, los suelos de las regiones tropicales recibirán más energía al
.,.
año y se encontrarán más profundamente meteorizados que los suelos de regiones
árticas (Van Wambeke, 1992). En el Cuadro 1-3 se resume el impacto de algunos
organismos en las propiedades de Jos suelos.

13
Cuadro 1-3. Impactos potenciales de la biota en las propiedades y desarrollo de los suelos

Componentes bióticos Ejemplos seleccionados de impacto


Flora
Fonnaciones vegetacionales Contrastes en la secuencia de horizontes, profundidad del perfil, pH. mineralogía de
arcilla, capacidad de intercambio catiónico, contenidos de MO y sesquióKidos, color
y distribución de nutrientes en perfiles de interfases bosque-pradera o bosqu.:
conífero-bosque deciduo
Plantaciones de bosques Micromorfologia de hoyos y montículos resultante del volteo de árboles con
incremento del flujo hidrico y acumulación de MO en los hoyos
Copa de árboles Jncremento en el aporte de materia y agua que escurre. goteo desde la copa, flujo
cortical o caída de hojas, comparado con áreas abiertas; concentración de elementos
en horizontes superficiales a través de biocreciclaje; efecto paraguas y protección del
suelo contra el impacto de las gotas de lluvia
Raíces de árboles Acumulación de MO, acidificació!V'alcalinización, oxidación/reducción. liberactón
de co2 e incremento de la meteorización a nivel de la rizósfera; flujo preferencial y
lixiviación a lo largo de canales dejados por raíces; creación y estabilización de
agregados y protección del suelo superficial contra la erosión

Empastadas Secreción de sustancias minerales (fitolitos)


Lfquenes y musgos Rol en desintegración fisica y meteorización química de minerales y rocas en estados
pedogénicos iniciales: complejación de metales por ácidos orgánicos excretados;
atrapamiento de polvo atmosféricoyacumulación en superficies estériles
Hongos Descomposición de residuos orgánicos, mantillo y desechos ligni:ficad.os; quelación
de metales disueltos y disolución acelerada de minerales por exudados:
estabilización de agregados
Algas, diatomeas Fijación de N: desintegración de rocas y mineraJes; adición de sólidos en la forma de
paredes celulares ricas en Sí (suelos orgánicos)
Fauna
Mamíferos mayores Excavación de la superficie; compac
t ación por migración o past<>reo del rebaño con
(vacunos, equinos) una consecuente erosión acelerada por escorrentía

Mamíferos menores Excavación de grandes madrigueras con impactos en la infiltración, en el


(roedores) establecimiento de flujos preferenciales. en la formación de crotovinas y en el
incremento de movimientos en masa; transporte selectivo de materiales a la
superficie: disturbación de horizonte superficiales
Aves (pingüinos) Alteración de los ciclos de C. N y P en la superficie del suelo (fecas, cáscaras de
huevos y fragmentos de huesos); disturbación de horizontes superficiales por nidos;
acidificación del suelo
Reptiles. anfibios Disturbación de horizontes superficiales al cavar nidos; efecto de las redes de túneles
en la infiltración
Jnsectos (bom1igas, termitas)Mezcla y alteración de horizontes; creación de extensas redes de poros e incremento
de la conductividad hidráulica: cementación de materiales de suelo: incorporación de
MO; fragmentación de materiales del mantiUo; ordenamiento y segregación por
tamaño de partículas de suelo; transporte selectivo de materiales a Ja superficie;
creación de diversos tipos � rnicrorelieve e incremento en el contenido de
nutrientes (Ca, Mg, K, N, P) en éstos
Otros insectos (escarabajos) Fragmentación de mantillo o litera; formación de madrigueras y canales pobremente
y arácnidos conectados, resultando en vacíos en el suelo

Lombrices Mejoramiento de la estructura y fonnación de agregados; mezcla de materiales y


fonnación de horizontes A: creación de bioporos (infiltración y aireación);
incremento en los contenidos de nutrientes y partículas finas; descomposición de
mantillo fresco y desintegración de sustancias orgánicas; liberación de nódulos
calcáreos; transpone selectivo de material a la superficie; mineralización de N
Bacteria, Actinomicetes Descomposición de mantíllo y escombros orgánicos; meteorización; oxidación y
reducción de metales; recicla·e transformaciones de macronutrientes N, S, P)

14
Si se considera al hombre como un organismo más que puede intervenir en la
pedogénesis, no cabe duda que su acción es extraordinariamente relevante para la
trayectoria de formación y desarrollo de los suelos. El Cuadro 1-4 incluye algunos
efectos en los suelos ocasionados por el ser humano.

Cuadro 1-4. Ejemplos de modificaciones metapedogénicas o causadas por el hombre (Yaalon and Yaron,
1966; Bidwell and Hole, 1965)

Manipulación Proceso priocipaJ observado en el suelo


Rasgos topográfico.,
Terrazas o nivelación de suelos Reducción de la erosión; incremento en el contenido de
humus; rejuvenecinllento de procesos pedogénicos: alteración
de la diferenciación catenaria en laderas
Construcción de embalses Interrupción de la sedimentación y lixiviación; ascenso de
nivel freático: acumulación de sales
Dreñaje de humedalesyminería Subsidencia de superficies
Factores hidrológicos
Drenaje, disminución de nivel freático Oxidación mejorada; formación de estructura; cambio de la
pem1eabilidad
Plantación de cortavientos Cambio en el régimen de humedad; alteración de la saturación
básica, lixiviación de carbonatos
Dragado de bahlas, puertos y humedales Adición de materiales dragados a suelos no disturbados
Inundación de arrozales Régimen hidromórfico: ox1dación reducida; gleización
Cambio del ciclo hidrológico por siembra de Incremento potencial de lixiviación o translocación;
nubes rie o acumulación de sales solubles
Factores uímicos
Riego con agua sódica Adsorción de sodio; degradación estructural; decrecimiento de
la permeabilidad
Inundación deliberada de suelos (marling o Cambio textura! de horizontes superiores; cambio del régimen
warping) para depositar limo o arcilla desde de humedad; alteración de la saturación de bases
cauces
Factores de cultivo
Deforestación y aradura de zonas templadas Mezcla de horizontes supenort:s: cambios del pH: retardación de
procesos (podzoliación o dcspodzolización)
Deforestación y rotación de cultivos en trópicos Erosión; deshidratación de óxidos de hierro
Sobrcpasloreo Erosión de horizontes superficiales; reducción de infiltración

1.2.4 Relieve

En la formación y evolución de los suelos, el patrón de drenaje gobierna fuertemente el


nujo de masa y de energía de los sistemas. Cuando las redes de drenajes son cerradas,
tanto los componentes qulmicos como los productos de erosión se distribuyen hacia
áreas depresivas locales próximas. En cambio, en los drenajes abiertos la dispersión de
esos componentes se produce hacia otras áreas externas. Por lo 1anto, las diferencias en
las redes de drenaje (Figura 1-6) están directamente relacionadas con el paisaje (relieve)
y. de esta manera, definen el régimen de humedad y temperatura de los suelos.

Estos factores esenciales del relieve determinarán la dirección de la evolución


pt:dogénica que sigan materiales parentales de igual litologia. No solamente el clima
s1no además las condiciones del paisaje y el relieve en las que se encuentran los
materiales de origen, definirán las características y propiedades finales de los suelos.

15
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Figura 1-6. Patrones de drenaje más comunes y algunos ejemplos asociados a formaciones o suelos.

La posición topográfica local puede modificar los ingresos de energía solar y de las
precipitaciones, en el caso de regiones de relieves pronunciados. El contenido de agua
en el suelo no es el mismo en las posiciones altas que en las posiciones bajas, lo cual
tiene impacto en el tipo de vegetación y en la productividad del sitio.

.,.
El relieve, como factor de formación de suelos, tiene su papel más importante en la
distribución del agua en el interior del suelo, de tal manera que Jos patrones de
distribución de los suelos en el paisaje seguirán una relación catenaria, lo cual permite
describir y predecir la ocurrencia de determinados suelos. Normahnente al referirse al
relieve y en particular la pendiente, se recurre a numerosos atributos (Cuadro 1-5), pero
principalmente se hace referencia a la gradiente, la exposición o aspecto, la forma
(curvatura), la complejidad. la posición en la pendiente y la posición geomorfológica.

16
Cuadro 1-S. Atributos primarios y secundarios del relieve (adaptado de Huggett and Cheesman, 2002)

Atributo Deli.nid6n Apl1C11ciones


Atributos rim11rios
Variables climáticas (ej. presión, temperatura), patrones
Altitud Allura sobre el nivel del mar
de vegetación y suelo, cálculos de volumen de materiales

Cota
Altura sobre un plano horizontal de (cortes y rellenos) y de visibilidad, determinación de
referencia arbitrario energía potencial
inclinación, tlujo superficial y subsuperficial. resistencia
Gradiente Tasa de cambio de la elevación al transporte en ascenso, gcomorfología, contenido de
agua del suelo
Orientación de la inclinación o
Aspecto vertiente (brújula), a7imut de la insolación e trradiación, evapotranspiracaón
vertiente
Aceleración del flujo, tasa y patrones de erosión 1
Curvatura de Tasa de cambio de la gradiente.
depositación. indicador de evaluación de suelos y tierras,
perfil Componente longirudinal de la ladera
clasificación de unidades de terreno
Curvatura de Tasa de cambio del aspecto. Flujo convergente y divergente. características del agua
plano Componente transversal de la ladera en el suelo, clasificación de unidades de terreno
Uniformidad o irregularidad relativa Simple o compleja, flujo superficial, contenido de agua
Complejidad
de la odientc del suelo
Atributos seamdarios
ln = Asltan b
Índice de
donde A.Y es especifico para cada Indicador de retención de agua.
humedad
cuenca b es la adiente
Cantidad de energla solar recibida por
Irradiaci6o Estudios de suelo y vegetación, evapotranspiración
unidad de área

La gradiente es una expresión de la energía potencial que estimula los flujos de masas y
La fuerza erosiva del escurrimiento superficial en una pendiente. La exposición o
aspecto determina la cantidad de rac:tiación solar que recibe la superficie del suelo y, por
lo tanto, afecta directamente a los organismos. La forma de la pendiente influencia el
movimiento Lateral del agua a través de la superficie y el movimiento del agua hacia el
interior del suelo. La complejidad se refiere a Las irregularidades que pueda tener una
pendiente. Así, una pendiente simple y suave tiene pocas obstrucciones al flujo del agua
y, por lo tanto, hay menos oportunidades para procesos de sedimentación, excepto en la
base de la pendiente.

Una pendiente se puede dividir en varios segmentos a través de una sección transversal
a lo largo de ella, lo cual identifica la posición. La posición que ocupa un suelo en una
detenninada pendiente, tiene influencia en las condiciones de drenaje de ese suelo y, por
lo tanto, en la mayor o menor disponibilidad de agua que puede afectar a los procesos
pedogénicos (Figura 1-7).

17
Edad-Erosión ····· ..·--�------..........._

.-___.,___........ , ..................,.. ..... :�11•..--

tfml
frtitlco

Figura 1-7. Visión bidimens1onal que muestra una secuencia hidrológica idealizada de suelos formados
bajo la influencia del relieve.

La subdivisión más aceptada en la actualidad. entre varias, es aquella que divide la


pendiente en: cumbre, hombrera, sector de transporte, pié de la pendÍente y punta de la
pendjeme (Figura l-8). Además de los elementos bidimensionales sei'ialados, es
necesario considerar también segmentos tridimensionales del paisaje, relacionados con
la geomorfología de los suelos, con lo cual se hace referencia a la posición
geomorfológica donde se ubican Jos suelos. En general, en Chile los agentes
modeladores del paisaje han sido principalmente la gravedad, el agua y el hielo,
determinando que el origen de los suelos sea principalmente coluvial, aluvial y glaciar.
Las figuras 1-9 y 1 - 1 O (Huggett, 2007; Huggett and Cheesman, 2002; Trenhaile, 1998)
constituyen ejemplos de posiciones geomorfológicas en que es posible encontrar los
suelos en el país.

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Figura 1-8. Visión tridimensional de los elementos de una ladera según varios autores (Huggett, 2007).

18
Figura 1-9. Fonnación de terrazas aluviales (Huggett and Cheesman. 2002).

Figura 1·10. Evolución de paisajes glaciares. (a) Antes del hielo. (b) El mismo paisaje con hielo. (e)
Después del hielo (Trenhaile, 1998).

19
1.2.5 Tiempo

La formación de un suelo muy rara vez corresponde a un conjunto de procesos


unidireccionales a través del tiempo. Las más insignificantes modificaciones en el
medio resultan en reajustes constantes del sistema. Mientras mayores sean las
modificaciones del medio, mayores serán los ajustes en Lodos los sistemas que guian la
pedogénesis, como por ejemplo cambios en el clima que implican cambios en el nivel
del mar, procesos tectónicos o volcánicos, o bien modificaciones de la biota. De esta
forma períodos de estabilidad pedogénica se alternan con periodos de inestabilidad
del paisaje (Yaalon, 1983).

En muchas circunstancias se producen eventos geológicos que entierran suelos. Este


proceso generalmente altera los rasgos de los suelos, sin embargo aquellos que se
conservan proporcionan las mejores evidencias de las condiciones pasadas del medio y
de las alteraciones que han sufrido Jos paisajes (Yaalon, 1983).

En cualquier región o paisaje el patrón de los suelos es siempre complejo. De esta


manera, el paisaje está compuesto por suelos que se aproximan a su eslJldo estable
conjuntamente con otros suelos que no tienden hacia ese estado. Por esta razón, es muy
frecuente que coexistan suelos monogenéticos aJ lado de suelos poligenéticos, siendo
estos últimos los que mayor infonnación entregan acerca de las condiciones anteriores
del medio, aun cuando las diferentes fases climáticas pueden no ser fácilmente
identificadas en ellos. Si bien no hay consenso respecto a dicha teoría del eslJldo
eslJlble, argumentándose que el suelo está en permanente evolución, parece claro que en
sus etapas linaJes el suelo evoluciona tan lentamente que sus cambios se pueden
considerar como poco signiñcativos.

Es evidente que ciertas propiedades alcanzan su equilibrio en periodos cortos de tiempo


(por ejemplo cientos de años para el contenido en materia orgánica y el lavado de
carbonatos), mientras que otras requieren de decenas de miles de años (la translocación
de arcilla). En este sentido Birkeland ( 1 984) precisa que los distintos horizontes
necesitan de tiempos muy diferentes para su formación (Figura 1- 1 1 ).

Tiempo (aftos)

Figura 1-Jl. Esquema de tiempo requerido por diversos horizontes para alcanzar un estado estable.

20
El suelo sufre modificaciones con el tiempo, aunque el cambio no es causado por el
tiempo. La variación temporal del suelo puede ser determinada a variadas escalas de
tiempo y es impulsada por factores naturales, de uso y manejo realizado por el hombre,
o por el impacto combinado de éstos. No obstante, la creciente influencia del hombre ha
alterado dramáticamente el tipo, intensidad y la tasa de cambio para muchos suelos, de
tal manera que se debe diferenciar las escalas de tiempo, como un factor de formación
de suelos, al momento de considerarle en la ecuación original de Jenny:

S = f( el, p, o, r, tp. tb)

donde tp es el tiempo a escala pedogénica y th es el tiempo a escala humana. Esta idea


ha sido confll'mada y precisada gráficamente por varios autores, tales como Tugel et al.
(2005) y Richter (2007), tal como se muestra en la Figura l-12.

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Cllma
Mat!idal pare�llll . Glima
· Material parental
IUiim
Orpnimo1 Relieve

..:
:.
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.:.
wrptl,ol Alftllll

l,1cala ddlempo J11!do1inko


.
..______________,_►.
Cambio del suelo
(ha,ta unot poco, mlllone1 dli llllol)
,• · 1
Cambio del suelo

Figura l-12. Ejemplo de escalas relativas de cambios en el suelo (Tugel et al., 2005).

Los factores convencionales son complementados por otros adicionales, en grupos que
están relacionados con los cuatro grandes reservorios de la superficie del planeta que
interactúan para producir el suelo o Pedósfera. La Figura 1-13 destaca claramente la
falta de independencia antes indicada de los diversos factores, y la importancia de la
retroalimentación entre ellos. El tiempo, que puede ser el único factor n
i dependiente, es
representado como una trayectoria a lo largo de La cual el marco tetraedral se mueve y
cambia.

21
Aporta exteruoe:
Enerefa solar, meteoritos.
BIOSFERA

D-lllll
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Mallorlol OI"JIIIIka.
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y lllocmad6a oklalftl I'M:tllm.
ltlllrolllltudmlo

Ccaa•rhiDifiL
tublno, ali'Vct-. JQo- Cul6""*

Figura 1-13. Factores atmosféncos, hidrosféricos, litosf


éncos y biosféricos que afectan la formación de
suelo (García Paz y Tabeada-Rodríguez, 2008).

Si bien la ecuación de Jenny considera al suelo como una caja negra susceptible de
formalizarse mediante el análisis de sus factores formadores, el sistema suelo también
puede conceptualizarse como un modelo de caja al menos gris. Para Simonson ( 1995),
los cambios que sufre un suelo durante su evolución son función de las adiciones,
sustracciones o pérdidas, transferencias o translocaciones, y transformaciones de
materia en el sistema, lo que en términos de una ecuación podría corresponder a:

S= f(adiciones, sustracciones, transferencias, transformaciones)

Se puede concluir que se trata de dos concepciones complementarias del sistema


edáñco. Así, los Factores de Formación del Suelo son los que controlan el accionar de
los Procesos Pedogéoicos, tanto en su tipo como en su intensidad.

1 .3 Procesos pedogénicos

Bock:beim and Geonadiyev (2000) en una extensa revisión de la literatura y de modelos


predictivos, relacionados a procesos de formación de suelos, reconocen la existencia de
tres niveles de generalización. EJ niveJ más alto considera los 4 procesos macros que
destacan a los suelos de otros subsistemas de la biosfera: adiciones o ganancias,
pérdidas o sustracciones, transferencias o translocaciones y transformaciones (Figura 1-
14). El segundo nivel es dependiente de los procesos anteriores, pero con referencia a
procesos específicos o secundarios. El tercer nivel enfatiza numerosos microprocesos
químicos, fisicos o biológicos taJes como fijación de nitrógeno, oxidación y reducción
de hierro y aluminio, sustituciones iónicas.

22
--
OEl'DllrAQOII
POR Vll:NlOY

AGUA

ADICIONEll
o
o TRAHSF0AMAQONES

Cl TRANSFERSIICIAS

PERDIDAS
o
Figura 1-14. Expresión gráfica de los procesos pedogénicos o de formación de suelos.

Es así como cada taxón, horizonte diagnóstico, propiedad de diagnóstico o material


diagnóstico puede ser descrito por un proceso de formación de suelo dominante y
específico, el que puede ser definido a través de rasgos objetivos y mensurables, cuyos

..
limites son ampliamente aceptados.

Desde el punto de vista de la pedogénesis, las condiciones contrastantes de exceso de


agua y sequía favorecen a los procesos de translocaciones en el suelo. En medios
húmedos bien drenados, las soluciones suelo muy diluidas llevan a gradientes químicos
muy fuertes, meteorización intensa, lixiviación muy efectiva de los componentes
solubles (cationes básicos y ácido silícico) y una síntesis de minerales secundarios que
involucra a los componentes menos solubles (óxidos e hidróxidos de Fe y Al y
minerales kanditicos). En condiciones de humedad permanente, sin saturación, se
favorecen las transformaciones y las pérdidas con lo cual se afectan los procesos
.•

relacionados a La fracción orgánica y biótica del suelo. Esta situación caracteriza a la


mayor parte de los suelos que se encuentran al sur de paralelo 38° LS, particularmente a
los suelos derivados de materiales Pleistocénicos, sean éstos tefras muy antiguas o
depósitos nuvioglaciales. Como ejemplo, se puede mencionar La Serie Cudico (X
Región) cuya mineralogía está dominada por haloisita y caolinita y cuya saturación de
bases no es superior a 6,5% (Luzio et al., 2003).

En un medio árido, la solución suelo frecuentemente contiene gran concentración de


iones, derivando en gradientes químicos pequeños asociados a pequeñas distancias de
lixiviación y sólo para los iones más solubles. De esta manera, al existir una solución
suelo más concentrada en los iones provenientes de la meteorización de los materiales
parentales, existe la posibilidad de formación de minerales secundarios más complejos,
pero al mismo tiempo, puede producirse una síntesis de minerales secundarios
dominados por sales, tales como calcita, yeso o haHta. Luzio et al. (2002a), en
investigaciones realizadas en regiones áridas, encontraron suelos con bajas

23
concentraciones de iones, aún cuando con altas saturaciones de bases. Los suelos que no
son salinos y no sódicos pueden tener saturaciones de bases tan bajas como 50%. Estos
resultados demuestran que en las regiones áridas, las características de los suelos pueden
ser variables. pues están sujetas a las condiciones locales de topografla, materiales de
origen o las redes de drenaje, que pueden modificar profundamente sus propiedades.

,
Se analizan, a continuación, las cuatro clases de procesos que influencian la fonnación
de los suelos y que definen las propiedades morfológicas, químicas y físico-químicas
que ellos exhiben.

Adiciones: La principal adición normal a los suelos la constituyen los residuos


orgánicos, cuya fuente primaria son las plantas por medio de las hojas, las ramas y las
partes florales que se adicionan a la superficie del suelo y se incorporan a su masa.
También las raíces constituyen una fuente importante de materia orgánica, Las cuales se
adicionan directamente dentro del suelo a medida que van creciendo. Este tipo de
procesos son minimos en las zonas desérticas y áridas. En cambio, los solutos y el
material particulado que pasa a incorporarse a los suelos directamente desde la
atmósfera (Simonson, 1995) o bien por movimientos superficiales desde sitios más
elevados de la topografía (Paton et al., 1995), pueden llegar a ser significativos en esta
clase de suelos. Cuando las adiciones son de importancia y se producen en forma rápida
(tiempo pedogénico), los suelos preexistentes pueden quedar enterrados y, a partir de
los nuevos materiales adicionados, se desarrolla un nuevo suelo.

Sustracciones: Las pérdidas de masa en los suelos se pueden producir por erosión
eólica o hídrica en la superficie o por lixiviación de componentes solubles y en estado
coloidal, ya sea en profundidad o lateralmente, a causa del movimiento del agua en el
perfil. Como el concepto de sustracciones supone la pérdida completa de un
componente del sistema suelo, proceso generalmente conocido como lixiviación, sólo
ocurre cuando existe un exceso de agua y un flujo neto vertical a través del espacio
poroso. Este exceso de agua traslada el o los componentes hacia abajo en el perfil, o los
elimina completamente del suelo. Los cationes que están sujetos a este proceso son Na+,
Ca++, K+ y Mg+-+-, de tal manera que la acidez del suelo se incrementa. Entre los aniones
que se lixivian el más importante es HC03' y en menor proporción N03" y S04-. En
condiciones aeróbicas, se pueden lixiviar cantidades muy pequeñas de Fe, de tal forma
que tiende a existir un enriquecimiento residual de Fe y Al en el suelo a causa de la
lixiviación de los demás componentes. En condiciones anaeróbicas. el Fe y el Mn se
pueden lixiviar debido a que sus formas reducidas son más solubles. Es evidente que en
suelos de regiones áridas no existe este tipo de flujo, por Jo tanto tiende a existir una
mayor acumulación o concentración de sus componentes, de tal manera que cationes
básicos se acumulan en la parte inferior de los perfiles en forma de sales solubles o
semisolubles. El balance entre los procesos de adiciones y de sustracciones para esta
clase de suelos es positivo, en el sentido que la acumulación es mayor que la pérdida de
componentes, a causa de l a lixiviación restringida o nula para estas regiones. Este
proceso determina que exista una mayor cantidad de componentes disponibles para la
formación de estructuras secundarias más complejas. Sin embargo, la formación de
mineraJes secundarios complejos requiere, además del balance positivo señalado, la
presencia de los otros factores que intervienen en Ja pedogénesis en cantidad e
intensidad precisas, tales como los materiales parentales adecuados, los regímenes de
temperatura o la combinación de ellos, Las condiciones del relieve, a nivel general y
local. además del tiempo necesario para que se produzcan las interacciones necesarias.

:24

Transferencias/translocaciones: En los procesos de translocación. el agua es el
agente principal y el proceso puede ser considerado como una Lixiviación restringida o
más lenta. Esta restricción puede deberse a precipitaciones marcadamente estacionales o
de bajo monto, o a la presencia de algún impedimento que reduce la velocidad de
percolación del agua. Las translocaciones en ambientes húmedos normalmente ocurren

por el flujo neto del agua hacia abajo en el perfil del suelo. En ambientes áridos el t1ujo
puede ser descendente, pero también las sales pueden ser llevadas a la superficie por
capilaridad, en respuesta a la evaporación. De acuerdo a varios autores (Díaz y Wright,
1965; Luzio et al., 1978; Luzio y Vera, 1 982; Sociedad Agrícola CORFO - Universidad
de Chile, 1982a y 1982b; Flores, 1 983; Luzio, 1990) estos procesos llevan a la
generación de zonas de empobrecimiento en coloides dentro del perfil, tal como ocurre
con la formación de los horizontes E; también conducen a formar zonas de
enriquecimiento en coloides, como sucede con la formación de diferentes tipos de
horizonte B: de acumulación de arcilla silicatadas (Bt. argílico), con acumulación de
carbonatos (Bk, cálcico, Bkm, petrocálcico) y con acumulación y endurecimiento de
sílice (Bqm, duripán).

La presencia de horizontes de iluviación de componentes (B¡, Bk, Bkn�> Bqm) en suelos de


zonas áridas, debería estar relacionada con la existencia de paleoclimas cuaternarios, los
cuales han sido estudiados y datados en diferentes continentes (Flores, 1983). Incluso se
han descrito procesos pedogénicos más intensos, tales como los de rubefacción en
regiones desérticas (Fauck, 1 978). De acuerdo con Wysocki et al. (2000), un paleosuelo
relicto debiera haber resistido una o más modificaciones en el clima regional o en las
condiciones ambientales locales, de tal manera que ya no se encuentra en equilibrio con
las condiciones existentes en la actualidad. Este concepto requiere conocer la edad de los
paisajes o bien, que ésta se pueda inferir, con el fin de poder explicar con claridad las
características morfológicas actuales (Chadwick and Graham, 2000). A este nivel, sólo
se puede presuponer que las condiciones climáticas holocénicas no permitirían la
generación de rasgos de iluviación que deriven en una morfología de suelos de mayor
desarrollo pedogénico.

Transformaciones: La materia orgánica que se adiciona a los suelos sufre grandes


transformaciones por efecto de los microorganismos del suelo, cuyo resultado lo
constituye la formación de humus, considerado como un componente estable en el suelo.
La meteorización de los minerales de las rocas parentales proporciona no sólo nutrientes
para la actividad biológica, sino también constituyen los cimientos para la síntesis de
minerales secundarios. En climas húmedos y condiciones de suelos bien drenados,
donde la lixiviación es máxima, la formación de minerales secundarios está
caracterizada por la síntesis de arcilla silicatadas y óxidos e hldróxidos de Fe y Al. En
medios áridos, la lixiviación es despreciable de tal manera que cationes básicos se
acumulan en la parte inferior de los perfiles en forma de sales solubles o semi solubles.

Algunas transformaciones que ocurren en la mayoría de los suelos afectan


principalmente a los minerales del suelo, los cuales son susceptibles de sufrir hidrólisis,
proceso que los transforma in situ en diversas clases de minerales secundarios.

La Figura 1 15,
- vincula esquemáticamente los procesos de formación antes señalados
con los 12 órdenes de la Taxonomía de Suelos (Soil Survey Staff, 2006), en términos de
los cambios en la entropía (óS sos. La pedoturbación en Yertisols.
--�

: 929 �
1,... *
por ejemplo, debido a la contracción-dilatación de las arcillas, incrementa la
aleatoriedad espacial de Jos componentes del sistema suelo y consecuentemente se le
asigna un óS positivo (entropía agregada). En cambio, en Ultisols, los procesos de
iluviación-eluviación que tienden a ordenar los componentes se les asigna un óS
negativo (entropía sustraída). Así. la contribución relativa de los procesos de formación
de suelo en fonna ponderada, resulta en un óS neto de los suelos de cada orden
individua] (Smeck et al.. 1983 ).

PIOCESOSDt
fOlllACIÓN DE SllELO

T,...io-lalioiu.U
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T-rudi•M
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(lrlll·--Uoonl)
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Figura 1-15. Procesos de formación de suelos asociados a Jos órdenes de Soil Taxonomy (Schaetzl y
Anderson. 2005).

Se puede concluir que la pedogénesis resulta en una reducción de la entropía. en


distintos grados, para la mayoria de los suelos (excepto Vertisols), debido al desarrollo
de procesos de hori;wnación.

Con relación a procesos específicos de formación de suelos, Bock:beim and Gennadiyev


(2000) y Targulian (2005) identifican al menos 1 7 de ellos (Cuadro 1 -6), vinculándolos
con horizontes de diagnóstico, propiedades y materiales a1 más alto nivel de
clasificación, tanto para la Taxonomía de Suelos (Soil Survey Staff, 2006) como para la
Base de Referencia Mundial (IUSS Working Group WRB, 2006).

26
Cuadro 1-ó. Procesos específicos de for ación de suelos

Proceso Descripción
lc�s1vage o Argiluviación Translocación descendente de arcilla hacia hori7ontcs subsuperficiales
Reciclaje biogeoquímico Enriquecimiento biológico del suelo en cationes básicos o por fertili.tación
Aodisolitación Formación de productos de meteorización amorfos fértiles. de baja densidad y elevada
porosidad, a partir de cenizas volcánicas vítreas
Paludiación o Formación Acumulación de desechos orgánicos pobremente descompuestos en la superficie del
de turba (peat) suelo en condiciones aeróbi cas
Glem1ción o Alteraciones redoximórticas: particularmente reducción química de Fe y Mn como
hidromorfismo resultado de un anegamiento
Mdanit.ación Oscurecúniento del suelo como resultado de un incremento en el contenido de
compuestos húmico)
Ferralitización Transfor ación de material suelo in situ, con fuerte desilicatación, for ación de arcillas
1 : 1 e incremento de la dominancia de sesquió:>.ido de FeyAl
fersialiti.tación Transformación de material suelo in situ, con moderada desilicatación, formación de
arcillas 2: 1
Pod¿olitación Lavado en condiciones ácidas de Fe, Al y humus disueltos, más cierta destrucción de
arcilla con una consecuenteprecipitación en horizontes subsuperficiales
..-
lixiviación Lavado de cationes básicos (Ca , Mg�. Na·. 1\)
Yerti7aci6n o Agrietamiento profundo de suelos arcillosos como resultado de humedecimiento­
.o:rtisolización desecamiento
Po:doturbación Alteración del suelo por acción del hielo (criotu rbación), de agentes bióticos
(bioturbación) o arc11las ex.pandibles (venimrbación)
Salínizac1ón Acumulación de sales solubles
Calcificación Acumulación de carbonatos como dolomitaycalcita baja en Mg
Solonización Acumulación de sodio otros álcalis en arcillas, a menudo for ando estructura columnar
Solod1zac1ón Acumulación subsuperficial de sodio y otros álcalis en arcillas, con acidificac ión
superficial, formando columnas blanquecinasytruncadas
Cementación Consolidación de material suelto con sflice. tal como calcedonia y ópalo (silicificación), u
otro compuesto (Fe. Ca}
.\ntrosolitación Alteración del suelo or actividad humana

1 .4 Fundamentos de cl asificación de suelos

Para estos propósitos, se describen solamente, en términos generales, los dos sistemas
más empleados, la Taxonomía de Suelos (Soil Survey St:aff, 2006) y la Base Referencial
de Suelos del Mundo (lUSS Working Group WRB, 2006). información más detallada
se puede encontrar en Luzio y Casanova (2006), o bien en los textos originales
mencionados.

Un sistema de clasificación de suelos tiene que basarse en las propiedades químicas,


fisicas y morfológicas de los suelos, además de los principios de la génesis de ellos, de
tal manera que sea capaz de proporcionar predicciones acerca del comportamiento y de
las respuestas al manejo y a las manipulaciones que pueda sufrir. Se considera que los
principios de la génesis de suelos son básicos para las extrapolaciones espaciales y un
complemento para la interpretación que pueda hacerse sobre los usos de los suelos,
debido a que esta disciplina establece relaciones de causa-efecto y no identifica,
exclusivamente, relaciones empíricas.

fl sistema debe ser aplicado de una manera uniforme por edafólogos competentes. Debe
o;;er lo suficientemente objetivo, de tal manera que sólo se base en las propiedades de los
<:uelos y no en las percepciones del especialista. Cada taxa debe ser definida o
1�-conocida a través de propiedades seleccionadas que agrupen a suelos de génesis

27
similar, pero también esas taxa deben proporcionar grupos con propiedades similares
aun cuando su génesis sea incierta o desconocida. La génesis del suelo deberla ayudar a
seleccionar aquellas propiedades que pueden proporcionar grupos de suelos útiles y
coherentes. Sin embargo, las propiedades de los suelos, en si mismas, deben constituir
el criterio básico para la clasificación.

1.4.1 Regímenes de humedad de los suelos

El término regímenes de humedad de Jos suelos se refiere a la presencia o ausencia de


nivel freático o de agua retenida a una tensión inferior a 1 .500 kPa en el suelo o en un
,. El agua retenida a tensiones
horizonte específico durante algunos períodos del afio.
superiores a 1 .500 kPa no está disponible para la mayoóa de las plantas mesofiticas.
Puede suceder que un suelo esté saturado y además sea salino, de tal manera que el agua
no está disponible para las plantas; en este caso se considera como salino y no como
seco. Por lo tanto un horizonte se considera como seco cuando el agua está retenida a
tensiones de 1 .500 kPa o más, y se considera húmedo cuando el agua está retenida a
tensiones inferiores a 1 .500 kPa, pero superiores a O. Un suelo puede estar húmedo
continuamente, en uno o más horizontes, a través del año o en alguna parte del año.
Puede estar húmedo en invierno y seco en verano y viceversa.

A través de los tiempos geológicos han existido cambios significativos en el clima, de tal
manera que suelos que se pudieron haber formado en climas húmedos, en la actualidad
se encuentran en climas áridos y preservan rasgos relictos que reflejan el régimen de
humedad anterior, conjuntamente con rasgos que responden al régimen actual. EL
régimen de humedad del suelo es sólo parcialmente función del clima. Suelos de
regiones áridas no son necesariamente secos; pueden ser secos, húmedos o saturados,
dependiendo de la posición en el paisaje, debido a que pueden recibir agua desde fuentes
diferentes a la lluvia directa, tales como escurrimiento superficial, derretimiento de
nieve, niveles ITeáticos o incluso fuentes artesianas.

Las definiciones resumidas de los regímenes de humedad que se dan a continuación,


corresponden a las definidas por Soil Survey Staff{2006).

Régimen ácuico. El régimen de humedad ácuico es un régimen de reducción, en el


cual prácticamente no hay oxígeno disuelto a causa de la saturación con agua. Se
considera que algunos suelos no tienen régimen ácuico, aun cuando se encuentren
saturados con agua, debido a que el agua se encuentra en movimiento o debido a que el
medio no es favorable para los microorganismos (ej.: si las temperaturas son inferiores
j a
1 ° C). No se ha determinado cuanto tiempo el suelo debe estar saturado para que se Le
considere que tiene régimen ácuico, pero se estima que debe ser de algunos dias, debido
a que está implícito en el concepto que no hay oxígeno disuelto. Algunos suelos con
régimen de humedad ácuico pueden tener también régimen de humedad xérico, ústico o
arídico. En la Taxonomía el elemento formativo aqu se refiere a las condiciones ácuicas
y no al régimen de humedad ácuico (Soil Survey Staff, 2006).

28
Régimen arídico y tórrico. En el régimen arídico (tórrico), la Sección de Control de
Humedad (SCH) en años normales requiere las siguientes condiciones:

Debe estar seca por más de la mitad de Jos dias acumulativos en que la temperatura del suelo
se encuentra sobre 5"C; y

Debe estar húmeda en alguna parte por menos de 90 días consecutivos cuando la temperatura
del suelo está por sobre 8°C.

Estos suelos se presentan en climas áridos; algunos se encuentran en regiones semiáridas


y poseen ciertas características que los mantienen secos. En este régimen no hay
lixiviación y, si existe una fuente de sales solubles, ella se acumula en el suelo. Los
,.
límites de temperatura del suelo excluyen al régimen arídico de las regiones polares muy
frías y a las áreas de gran elevación. Se considera que esos suelos tienen condiciones
..
anhidras.

Régimen ústico. El régimen de humedad ústico es intermedio entre el arídico y el


údico. El concepto de ústico requiere un régimen con humedad limitada, pero que está
presente en los momentos adecuados para el crecimiento de los cultivos. El concepto de
ústico no se aplica a suelos que tienen permafrost o un régimen de temperatura críico.

Si la Temperatura Media Anual del Suelo (TMAS) es� 22°C, o si la Temperatura Media
del Verano (TMV) y la Temperatura Media del Invierno (TMI) difieren en menos de
6°C, la SCH está seca en alguna parte por 90 días o más acumulativos en años normales.
Está húmeda por más de 1 80 días acumulativos por afio o por 90 días consecutivos o
más. Si la TMAS es inferior a 22°C y la TMV y la TMI difieren en 6°C o más, la sección
de control está seca por 90 días acumulativos o más, pero no está seca por más de la
mitad de los días acumulativos, cuando la temperatura del suelo es superior a 5°C. En
años normales, la SCH está húmeda por 45 días consecutivos o más durante los 4 meses
siguientes al solsticio de invierno (22 de junio), y está seca por menos de 45 días durante
los cuatro meses siguientes al solsticio de verano (21 de diciembre).

Régimen údico. En el régimen de humedad údico, la SCH no está seca en ninguna


parte por 90 dias acumulativos en años normales. Si la TMAS es < 22°C y la TMI y la
TMV difieren en 6°C o más, la SCH está seca por menos de 45 días consecutivos en los
cuatro meses siguientes al solsticio de verano. El régimen údico es característico de
suelos de zonas húmedas con lluvias bien distribuidas, con suficiente lluvia en verano,
de manera tal que el agua disponible iguala o excede la evapotranspiración. En años
normales el agua se mueve en profundidad a través del suelo.

Régimen xérico. El régimen de humedad xérico caracteriza a áreas con clima de tipo
mediterráneo, es decir, inviernos fríos y húmedos y veranos cálidos y secos. La lluvia
que cae en invierno, cuando el potencial de evapotranspiración se encuentra en su
mínimo, es muy efectiva para lixiviar. La SCH se encuentra seca por 45 días
consecutivos o más durante los 4 meses siguientes al solsticio de verano; y está húmeda
por 45 días consecutivos o más durante los cuatro meses siguientes al solsticio de
invierno (22 de junio). La TMAS e s < 22°C, y la TMV y la TMI difieren en 6°C o más.

29
J .4.2 Regímenes de temperatura de los suelos

Dentro de ciertos límites, la temperatura controla el crecimiento de las plantas y también


la formación de los suelos. Bajo el punto de congelación no hay actividad biológica y el
agua no se mueve como liquido. Entre los 0°C y los 5°C, tanto la germinación de
muchas semillas como el crecimiento de raíces son imposibles. La temperatura varia en
el suelo de un horizonte a otro. Cerca de la superficie la temperatura varía con las horas
del día y con las estaciones del año. Para frnes prácticos, el régimen de temperatura se
puede describir por la TMAS, por e l promedio de las fluctuaciones estacionales, y por la
gradiente entre la temperatura media de la estación más cálida y la temperatura media
de la estación más fría.

Régime n críico. Los suelos tienen una TMAS inferior a 8°C, pero no tienen
penna!Tost.

a) En suelos minerales, la TMV:


Si el suelo no está saturado:
Sin horizonte O, es < I 5°C; ó
Con horizonte O. es < 8°C; ó
Si el suelo está saturado:
Sin horizonte O, < l3°C; ó
Con horizonte O ó epipedón hístico, < 6°C.
b) En suelos orgánicos, la TMAS es< 6°C.

En el Cuadro 1-7, se sintetiza el resto de los regímenes de temperatura de tos suelos.

Cuadro 1-7. Regímenes de tempemtura de los suelos (excluido régimen críico)

TMAS Si (TMV-TMIJ > 6°C Si ITMV-TMfl < 6°C


{con estaciooalidad) estacionaJidad)
< 8°C lsofrílrido
8 a < l5°C Mésico rsomésico
1 5 a < 22°C Ténruco lsorénnico
� 22°C Hipertc!rmico lsohipertérmico

Si bien para Gelisols el régimen de temperatura no se calcula, debido a que por


definición poseen un permafrost dentro de 1 00 cm, para ellos y los grandes grupos Gelic
con TMAS � - 1 0°C, de -4 a >-1 0°C y de+ 1 a >-4°C, se defmen (a nivel de familia) las
clases llípergélico, pergélico y subgélico, respectivamente.

1 .4.3 Re g i m e ne s de humedad de los suelos de Chile

Tomando como base el trabajo realizado por Van Wambeke ( 1 9 8 1 ) y Van Wambeke y
Luzio ( 1 982), además de los reconocimientos de suelos realizados desde la Región Arica
- Parinacota hasta 1a Región Antártica, se propone la siguiente distribución de los
regímenes de humedad para los suelos en Chile {figura 1 - 1 6, al final del Capítulo).

Régimen arfdico (tórrico). Se extiende desde el límite politico con Perú hasta los
32° LS, y desde los sectores cordílleranos hasta el borde costero, considerándose como
un régimen extremo a causa de la inexistencia de precipitaciones en todos los meses del
año, en la mayoria de los años. Es probable que al aproximarse hacia el límite sur se

30
..
haga transicional con el régimen xérico, que domina en la Región Central de Chile
(Regiones Semiáridas y Subhúmedas). También es probable que en los sectores
altiplánicos sobre los 4.000 msnm se transforme más bien, en un régimen ústico, debido
a que en esa zona hay precipitaciones que se producen en los meses de verano. Sin
embargo, la escasez de datos climáticos, la mayoría de los cuales proviene de centros
poblados, no permite obtener una mayor precisión en la distribución y delimitación de
los regímenes de humedad. Además, los datos sobre el clima del suelo son
• •
completamente
9
...
inexistentes. El ümite sur coincide aproximadamente con el límite
político entre la Región de Coquimbo y la Región de Valparaíso.

Régimen xérico. Se extiende desde el paralelo 32°LS hacia el sur, aproximadamente


- 4
..
hasta 3r30'-37°45' LS, abarcando los sectores de Precordillera de Los Andes y de la
..,. hasta una línea imaginaria que pasa por Santa Bárbara, Quilaco,
Depresión Intermedia

Mulchén, Collipulli, Los Sauces, Cañete, Curani
l ahue.

.. .... .. ..
....�
Régimen ústico. Queda reducido a una franja costera que incluye el sector de
terrazas costeras y cuyo limite sur lo constituye el río ltata y que sigue una línea

.:
imaginaria que une las localidades de Navidad, Lituecbe, Picbilemu, Paredones,
Vichuquén, Curepto, Constitución, Chanco, Curanipe, Cobquecura y el río !tata.

Régimen údico. Se extiende al sur del río !tata, Cañete, Los Sauces, Collipulli,
Mulchén, Quilaco hasta Santa Bárbara. Este régimen se extiende desde esta línea hacia
el sur, desde la Cordillera de Los Andes hasta el Océano Pacífico por la Región de los
Ríos, Región de los Lagos, Región de Aysén y parte de la Región de Magallanes. En la
Región de Aysén, hacia el límite con la República Argentina, se aproxima a un régimen
xérico, como sucede en las cercanías de Chile Chico, o bien hacia un régimen arídico,
como pudiera ser en sectores de La Tapera y Balmaceda. Se supone que muchos
sectores del Archipiélago de Los Cbonos así como en la mayor
-r parte del territorio
insular de esta Región, el régimen podría ser perúdico. En la Región de Magallanes, los
suelos de la mayor parte de Tierra del Fuego podrían tener Lm régimen arídico. La
inexistencia de datos acerca de las condiciones hídricas de los suelos sólo pennite
suponer estas tendencias.

1 . 4 . 4 Regímenes de temperatura de los suelos de Chile

Al igual que en los regímenes de humedad de los suelos, se propone la siguiente


distribución de los regímenes de temperatura para los suelos en Chile (Figura 1 - 16, al
final del Capítulo).

Régimen térmico. Se extiende desde el limite político con Perú basta la línea
imaginaria que pasa por Santa Bárbara, Quilaco, Mulchén, Collipulli, Los Sauces,
Cañete hasta Curanilabue. Se puede estimar que se encuentra desde la precordillera de
Los Andes hasta el Océano Pacífico. De esta manera se superpone sobre los regímenes
de humedad arídico y xérico. De acuerdo con Van Wambeke y Luzio (1 982), sólo se
habría detectado una sola estación con régimen hipertérmico en la región desértica del
país.

Régimen isotérmico. Se extiende desde el límite político con Perú, siguiendo la


línea de la Cordillera de la Costa en su vertiente poniente, hasta el río !tata. Es decir se

31
superpone sobre el régimen de humedad arídico hasta el paralelo 32°LS y desde aJlí
hasta el río !tata, se superpone sobre el régimen de humedad ústico.

Régimen mésico. Se distribuye entre una línea imaginaria que va desde Santa
Bárbara, Quilaco, Mulchén, Collipulli, Los Sauces, Cañete hasta Curanilahue, desde la
Cordillera de Los Andes hasta otra línea imaginaria que va desde Curanilahue hacia el
sur pasando por Contulmo, Carahue, Lanco hasta Calafquén.

Régimen isomésico. Se ubica a partir de una Unea imaginaria, que comienza


aproximadamente en Coelemu, hacia el oeste y hacia el sur, por las localidades de
Concepción, San Rosendo, Curanilahue, Cañete, Carahue, Lanco hasta Calafquén. Este
régimen se extiende hacia el sur, desde la Cordillera de Los Andes hasta el Océano
Pacífico por la Región de los Rios, Región de los Lagos, Región de Aysén y la Región
de Magallanes. En la Región de Aysén, hacia el limite con la República Argentina, se
aproxima a un régimen térmico, como sucede en las cercanías de Chile Chico, La
Tapera y Balmaceda. La inexistencia de datos acerca de las condiciones térmicas de los
suelos también sólo permite suponer estas últimas tendencias.

1 .4.5 Categorías superiores de clasificación de suelos

Una categoría es un agregado de clases, formada por la diferenciación simple dentro de


una población. Una categoría incluye a la población completa; incluye todas las clases
diferenciadas en función de una base simple. La clasificación de suelos es un sistema
jerárquico, en que las categorías más altas tienen pocas clases y son más generales que
las clases de las categorías inferiores, las cuales han acumulado los atributos de todas
las categorías superiores. De esta manera, los niveles más altos están asociados a una
mayor generalización o abstracción. Estas abstracciones son las que se han utilizado
como bases de la diferenciación (cuadros 1-8 y 1 -9).

Cuadro 1-8. Características principales de los Órdenes en la Taxono ía de Suelos (Soi/ TBAonomy)

Suelos con p rm
e fa o materiales
ros l gélico s dentro de 1 m de profundidad Gelisol
Otros suelos con materiales flbricos, hérnicos o sápr icso en >40 cm s per
u ficiales Histosol
Otros suelos con un horizontespódico
e de más de 1 O cm de espe rs o Spodoso/
Otros suelos con propiedad es ándicas en má del 60% de los 0,6 m superficale i s Andi ol
Otros suelos con un horizonte óxico dentro de los 1,5 m de la superficie o contienen > 40"/o de arcilla en 0 .
nso1
los os m un horizonte ká dico
rimer0,18
Otros suelosquecontiene> 30% de arcilla en todos los horiz.onl
yesgriet s activas
a penódicamente Verti
sol
l ún horizontediagnóstics
Otros suelos con ag o ubsuperficiayl un régim n de humedad
e arídico Aridi
sol
Otros suelos con un horizonte argflico o kándico y una saturación básica (a pH 8,2) i ferior a 35% a una U/t
i501
i de
rofundd a 1,8 m
d
Otros suelos con un epipedón mólico y una saturación básica (a pH 7) de al menos SO% en todas las
Mollisol
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p f
o undid a d sobre es 1,8 m
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32
Cuadro 1-9. Características principales de los Grandes Grupos de la Base Referencial de Suelos del
\�tundo (WRB)

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Otr_o s_ _ suelos _ _ . _ _co n 2 > 0% _ _ _ de _ ma t_ eri a les - manufa _ _ _ . . c
tu _ rados por _ el_ hombre
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________ Tei:ooso/
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Otro s sue los con un H. vértico (rico en arc iT l as expandibles) y > 30% de arcilla en todas sus partes
despu s de mezclar sus 0 2 m superficiales; > 0,5 m de espesor y desarrollo de grietas dura te la Vcrtisol
mayorpa r te de los años
..::Ot
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_O_t r_ o_s _ su_ e_ l _ o_s _ c_ o_ n _ u_n_H_.n_ á_ tn_ ·c_ o �(�r ic _ o_c_n_ ac_ r_ ill _ a _ il_uv_ _ia_ l_y�N_a i_ n_ te_rca _ _m
_ b_ _ _ia_ bl e)� d _ en
_ tr _ _o_ d
__ _
e m
l______ So/ooetz
Otros suel os con un H. sáli co(rico en sales sol ubles)dentro de 0,5 mysin un H. tiónico (muy ác ido) Soloncbak
..:O;..:t r:..::..:osc..: s:..:: ue..:: l:..:os:..: --'co=-='- n-'u :::n .:..pa tr::...ó:..:n::...d.::. e;;....;;.co""l :..:o..;..r..,
._.:..: y..::ic.:..:o;;...::.den
s"""lé'-" :..: tr.:..: .:..:o;;...::.de ..:: 0..:: "" , m
5 '- =---------------G/eyso/s
: -
..:Otro
;.::..::..:sc...:s :.: u..::e.:..: lo:..:sc..:c:..:o.:..:n-':::un ;;...;:.: Hc...=án =d o..;;o'-v'-'i=1n
ic..::.
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..:.. ..::.:..: en:..:::.: tro:...d ;:.e ;;...::. 0:;;; , :..:...;m
2 5 _________ _____ __
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Andoso/s
n H_._espód�·_ en co_ mp_ i al es_1 -
_tro_s_
_O su _ e_ _
_lo _ s_ _ co_un_ i_ co_í (
_ _ �r _ c_ o_ _ l e_s j_ _ o_ _v i l_ u_ _ A_ _ _u _m_ h us_ d_ _lI
-)_n e _d_ _ 2_m
o_e _____ _ PodLo/s
Otros suel os con un H. pl in ti co(rico en Fe.pobre en h mus, u muy meteorizado) dentro de 0, 5m Piiotoso/
""'O_t r-s'o_ s--' u_ e_ l_ o_s _c;..:o_n_u_ n_H_ . _fer ._ _ rál_ _ic _ o_a_a_l_..gc... un_ _._ a p_ro_fu_i n _ d_ ...; i__ a_d_d_c_n t_ r o_ d
d _ e_ _S , __
_ ..,__
l m _ ________ _ FerrN/so/
Otros suelos con un �mbio extura) abrupto y condici on es reducidas dentro de 1 m Plsnosol
cos...:us:..::e:..: ..;
...;Occtr:..: l. o : s . o.:..:nc'-c;..;o.::. n dic
:.: :..:
..; .n =- es:..:c..:red�"""uc""to-'-'
c.cio.:..
c c. "' ra s
cc _ _ ____ _____________ _ _ Est11gnoso/
Otros suelos con un H. mólico (oscuro, alta saturación bási�) con croma 2 en húmedo a una
Chernozcm
profundidad2:0,2 mycar onatos secundarios dentro de 0,5 m bajo el H. mólico
Otr os_ su
___el o_s_co_
__ n_un _H._m_ó_li_ co._
__
_c_
y a rbon_ _at_ o_s _ sec
_ u_an
n_ d _ o s de_ n_ _tro_ d
_ ·_ .S _ m _ba� ·o_
_ _ e _ 0__ �J e_l _ H_. m_ó_
_co
li___ _ __ Ksshmozem
,.._ suelos con un H. ólico y una saturac i n básica � 50% en todo el primer metro y ca e n
....,Otros
m ó ce de
Phacozem
carbonatos secundarios
..;;O;..;tr o:..:sc..:s:.:u:..:el.:o:..:
::.: ..;s ...;c;..;o..cn-';;;;;;.. H ,,_. g'"'
un :..:..;.. íp:..:s""' i co'--"- o pe
'-"-..;.. ro
t ;;;. gip si-" c-'- o (_,�ri.cc:. o..cen'--"y'-'c-'-s"'"
.;;.,"'"".:.. o)'- d_ e n_ t_ ro_ de"'"" _ '--l m_ _________ Gipsiso/
Otr s (cemen . tado con s li --' dentro de l m
o suelos con un H. dúrico o pettodúrico
. .;; :..cc:.::.....::-= : í ce) . ____ __ Duriso/
..;; ;.::..:
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d. .c . .;. :-'o
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:- Calciso l
Otr os suel os c u H. cál ci co opetr á l e (· c o e aC 3 o ) n tr d l m
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Otros suel os con un H. árgico (directa o indirectamente enriquecido en arcill a) dentro de I m, c on
Albeluvisol
lenguas albelúvicas
O ros suelos con un ll. gico y una CIC de arcilla� 24 cmol. kg comenzando dentro de 1 m y un a
Aliso/
saturación básica < 50% en la mayor parte entre 0,25y0,50 m
..:Otro
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co _ :..cco..::m en.;..1.an-'-
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de_ --'- n-'- tr0.:..:...cd..::
e ...;l __m _____ _ _________ Nitiso/
Otros suel os c o n un H. árgico una y CIC de arcilla <24 c mol., kg·1 u y ansatura c ión básica < 50%en
A crisol
la mayor parte entre 0,5 y lm
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Otros suel os co n un H. árgi co d entro de l m L /.r , 9 0 I
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Otros sue ol s con tc,xtu ras más gruesa s que fran _ _ co _ _ _aren o sos en a l me -n os-I m
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_ Arenoso/
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Otr os sue l o on H m bi co co men n do dentr de 0 m y fina l izo do a�o 0 . 2 5m
Otros sue l os Regoso/

Los cuadros l-8 y 1-9 se incluyen solo a manera de referencia, pero son insuficientes
para efectuar una clasificación de los suelos. Para ello se debe recurrir a las
publicaciones originales, siguiendo estrictamente las claves all í señaladas, esto es Soil
Survey Staff(2006) y TUSS Working Group WRB {2006).

El Cuadro 1 - 1 O constituye una aproximación que tiende a correlacionar ambos sistemas,


n mvel de categorías superiores.

33
Cu1ulro 1-10. Correlación entre Órdenes (Soi/ Townomy, sn y Grupos de Referencia ( WRB)

- wRBrrs_:
Alflso/ Andi,ol Arldiso/ l;ftt/511/ (.'rlho/ "''"""' lncoptúol Mo/U1n S¡xjdo.fDI Ox/sol l'lrlsnl Vutlsol rTS'\1 lill

Acrio;ol ± ± + Acris"l
Albeluv1sol + ± ± Albdu,1'"'
Aliso! ± + Ahs(ll

\ndosc>I + Ando<,¡
Anm»ol ± ± + ± ± ± AnltO><•I

An:nosol ::1:. Arcno•ol

Calc,sol ± + ± Calc,,.,1
l'lllllbISOI ± + Camt,isol
C.:hcmozcm + Chemozcm

Críosol T Cnowt

Ourisol ± + ± ± 0un,,,1
rerra.,ol ± + ± forrasol

Flunsol + Floviwl
Cile1sol ± ± ± ± ± ± ± Olct ol

Grpsisol ± + ± ± GlpSISOI
l listo,ot ± + llisto,;ol
Ka,WJOL<m + Kastanorem
t.ep1o;,ul ± + ± ± Leptosol

1 i<isol -t- ± Luusot


Luvisol + ± luvlSOI

Nil1sol ± ± + Nitisol

raeo7.em + faeozcrn
Plano.oles ± ± ± ± Plano oles

Plinto.sol ± ± ± Plu!to,.ol
Pod:tol + Pod:tol

Regosol + Reg sot

Solonch�tks + ± Solonchaks
Soloocu ± ± Solonel7

F"agnnMtl ± ± ± ± ± E:.sta¡nosot
Tt..'llOSOI ± ± + ± ± ± Tccnosol

Umbri,ot + Umbnsol
Vcnisol + Verto.ol

AJllJo/ \ndlwl lr/dlJo/ Enrisol C.Usn/ Hl1to<1JI lnrrplkH/1 lito/bol EJptidosDI O,bol l1tkal 1·umo1 _TS/WRB
WRBfl'S'

.: lod1ca que iodos o ca,,i todos los bUclos de WRB estón en ST y viceversa
,;,:: Indico que algunos �u.-tos de WRB "'1lin en ST y vicc,·crsa

34
1 .5 Zonas Edáficas de Chile

El término Zona Edáfica sugiere una uniformidad u homogeneidad de los cuerpos


suelos que se encuentran enmarcados dentro de ella. Sin embargo, para una realidad
geográfica y fisiográfica como la de Chile ello no ocurre, pues los paisajes han sido
remodelados por diferentes agentes tales como el agua, el hielo, el viento, el volcanismo y,
más recientemente, por el hombre. Teniendo presente la enorme variabilidad de suelos que
se puede encontrar en una misma Zona Edáfica, existen al menos dos elementos que pueden
considerarse como relativamente constantes, que son, el contenido de agua y la temperatura
media en la sección de control de los suelos.

En base al trabajo de Van Wambeke y Luzio ( 1982) conjuntamente con los


reconocimientos de suelos reali?ados recientemente entre la 111 Región de Atacama y la XI

..
Región de Aysén (CIREN, desde 1996 a 2007), es posible asociar los regímenes de humedad
y de temperatura para los suelos en Chile, a las grandes regiones climáticas del país,
tomando ambas variables en escalas generalizadas, esto es 1 :500.000 o menor. Lógicamente,
el régimen ácuico escapa a esta tendencia, a causa de sus requerimientos especiales.

Las variaciones en el clima que han estado ocurriendo en las últimas décadas en el país
y a nivel planetario hacen variar las condiciones climáticas locales. de tal forma que la
sección de control de los suelos puede, en algunos años, permanecer próxima a capacidad
de campo por periodos prolongados, hasta semanas o meses en el verano. En cambio, en
otros años la sección de control de esos mismos suelos, se encuentra próxima a marchitez
permanente durante todo el año.

Ésta ha sido, además de la falta de estudios de detalle en cada reg10n, la mayor


dificultad para establecer con precisión los limites de los regímenes de humedad y de
temperatura de los suelos para el país, aun cuando aparentemente no debiera serlo si se
consideran los marcados rasgos fisiográficos que jalonan el relieve en toda su extensión, de
norte a sur y de este a oeste.

Los mapas que sirven de base cartográfica para las separaciones de las Zonas Edáficas
tienen un valor referencial y esquemático. En primer lugar porque una escala precisa carece
de sentido a este nivel de aproximación y, en segundo lugar, puesto que como ya se explicó
los limites de los regímenes de humedad y de temperatura tampoco se pueden delinear con
precisión.

Este texto ha tomado el concepto de Zonas Edáficas, subdividiendo el país en ocho


Zonas, cuyos límites pueden parecer arbitrarios. pero en la práctica reflejan diferencias en
las propiedades de la mayoría de los suelos, que los hacen muy particulares y diferentes de
aqueUos de otras Zonas Edáficas del país (Cuadro 1 - 1 1 y Figura 1 - 1 7).

Cuadro 1-lt. Zonas Edáficas de Chile

Zona Edáfica Desde Hasta


A. Suelos de la Zona Desértica 1 8" OO'LS 2CJOOO'LS
B. Suelos de la Zona Árida y Semiárida 2CJO OO'LS 32"00'LS
C. Suelos de la Zona Mediterránea Árida 32"00'LS 37"45'LS
D. Suelos de la Zona Mediterránea llúmeda 37" 45'LS 43"00'LS
E. Suelos de la Zona Húmeda 43"00'LS 50" OO'LS
F. Suelos de la Zona de Magallancs 50"00'LS 55" OO'LS
G. Suelos de la Zona Antártica 62° OO'LS 63" OO'LS
H. Suelos de la Isla de Pascua y de Juan Fcmández - -

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Figura 1-16. Regímenes de Humedad y Temperatura de los suelos propuestos para Chile.

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Figuro 1·17. Fisiografia general y Zonas Edálicas de Chile.

37
CAPÍTUL0 2
Suelos de la Zona Desértica
(Desde 18° LS basta 29° LS)

Luzio, W., Casanova, M. Seguel, O. 2009. Suelos de la Zona Desértica (Desde 18° LS
hasta 29° LS). pp: 39-80. In: Suelos de Chile. (Luzio, W., Editor). Universidad de Chile.

39
2.1. Suelos del Sector Altiplánico

2.1.1 Reseña de la geología y geomorfologia del área

Con anterioridad al Plioceno, se desarrolló una cuenca sedimentaria fluvio - lacustre con
abundante actividad orgánica, donde se han podido identificar restos fósiles de mamíferos (Salas
et si., 1966; González, 1965; Charrier y Muñoz, 1997). Hacia finales del Mioceno ( 1 9 Ma),
preferentemente en el Plioceno, se originó una actividad volcánica explosiva de carácter ácido que
generó mantos ignimbriticos gruesos y extensos. Éstos recubrieron a los depósitos anteriores en la
precordillera y Cordillera Andina, lo que produjo una superficie casi plana. A fines del Plioceno
y/o en el Pleistoceno Inferior, un fuerte tectonismo produjo un alzamiento diferencial de bloques a
lo largo de grandes fallas de dirección nor-noroeste. Una de estas fallas fonnó la cadena

..
occidental de la Cordillera de Los Andes que, a su vez, generó la cuenca del Altiplano (Figura 2-
1, al final del Capítulo). Esta cuenca fue rellenada parcialmente con diatomitas de edad
pleistocénica (Figura 2-2) .

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Figura 2-2. Fisiografla general de la Zona Desénica.

41
Hacía finales del Pleistoceno se produJO un intenso período de actividad volcánka en la corjjJ �ra,
que se prolongó basta el Holoceno Reciente y que generó estructuras volcánicas andesíticJs 4ue
sobrepasan los 6.000 msnm. Los volcanes cuaternarios corresponden fundamentalmenlt a
cstratovolcanes, grandes calderas, domos y conos de piroclastos (González, 1965; Moreno y
Vareta, 1985). Sus productos de eyección son esencialmente de composición andesítica (rar<J ,·ez
riolitica) durante la época glacial y de composición andesítica más básica. durante el volcamsmo
postglacial (Figura 2-3, al final del Capítulo). Según Moreno y Vareta ( 1985) los matenales
Yolcánicos más abundantes están representados por flujos de lavas de superficies rugosas o de
bloques angulares ignimbríticos, depósitos de cenizas y lapilHs cuyo principal constituyente es la
pómez. Las rocas son de textura porfírica con cristales de plagioclasas, piroxcnos (augita e
hiperstena), anflbolcs (homblenda). magnetita y ocasionalmente olivino, cuarzo. biotíta y
feldespato potásico (sanidina) inmersos en una pasta vítrea.

En la actualidad el paisaje se compone de planos remanentes muy dísectados, lomajes y colinas


precordiJJeranas y un núcleo montañoso escarpado, surcado por quebradas, algunas de las cuales
mantienen cierta utilización agrícola en sus partes más bajas. Se encuentran además, enormes
depósitos de lavas riolfticas, originadas probablemente por flujos de lavas terciarias y mezcladas
con andesitas y basaltos cuaternarios. Estos depósitos abarcan desde la frontera con Perú basta las
cercanías de Copiapó. Generan una fonnación de plano inclinado, con una pendiente promedio de
7 a 8%, como parte de los primeros contrafuertes de la Cordillera de Los Andes. A causa de
procesos de erosión antigua, esta formación ha sido intensamente dísectada, generando quebradas
profundas que, actualmente, están cursadas por pequeños cauces de agua carentes de la energía
necesaria para continuar con el proceso erosivo. En el Valle de Cbacalluta los diferentes procesos
han dado origen a suelos estratificados, pobremente estructurados y, en algunos casos. con
estratos pétreos salinos, extremadamente duros que sobreyacen a suelos de origen aluvial (Kühne
y Freres. 2002). Los valles generados por erosión hídrica son escasos y angostos, de escasa
importancia desde el punto de vista agrícola, pero que mantienen una población con una
agricultura rudimentaria.

En el sector propiamente de montaña, las pendientes son mayores, las laderas de los cerros son
escarpadas, con profundas y estrechas quebradas. En las partes medias y bajas de las laderas es
posible encontrar coluvios de granulometria muy heterogénea. En términos generales, Sillitoe et
al. ( 1 968) señalan que la Cordillera de la Costa está constituida por rocas sedimentarias e ígneas
del Mesozoíco, la Precordillera está compuesta de rocas del Mesozoico al Eoceno, el Valle
Central corresponde a una cuenca rellena por sedimentos del Oigoceno
l al Püoceno y las cuencas

..
Preandinas por sedimentos del Mioceno al Holoceno.

La humedad Uega a esta zona a través de tres vias. Durante el verano masas de aire (monzónícas)
del noreste provocan precipitaciones convectivas provenientes del Amazonas (Garreaud et al.,
2003). En invierno las masas de aire provenientes desde el sur (oeste) provocan precipitaciones
frontales de ciclones extratropicales (Vuille, 1999). Houston and Hartley (2003) han definido un
límite entre ambos sistemas que aportan precipitaciones a La zona, y que corresponde a una Hnea
imaginaria de dirección NO - SE (Figura 2-4). De esta forma, se han separado áreas que tienen
una precipitación máxima en verano y otras, una precipitación máxima en invierno. Los datos
aportados por estos autores (op.cit.) permiten definir, aunque en fom1a general, los regímenes de
humedad para esta zona, de tal manera que las áreas al oeste de la línea ya señalada, mantienen
una combinación de regímenes arídico - térmico y las áreas ubicadas al este se consideran con
regímenes ústico - térmico (Figura 2-4).

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4 Copla� (20.l)

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Figura 2--4. Precipitaciones normalizadas (Ln3) en la Zona Desértica de Clule. Entre paréntesis. medias mensuales
de cada estaciónmeteorológica considerada (Houston and Hartley. 2003; Houston, 2006).

La tercera fuente de humedad son la niebla y la llovizna, que se desarrollan bajo la capa de
inversión (800 msnm), que es más frecuente en invierno y están asociadas al paso de sistemas
rontales. Schemcnauer and Cereceda ( 1991) y Cereceda and Schemenauer ( 1991) sugieren que
1
'ta precipitación puede ser equivalente a 1 00 mm año- y ocurre, preferentemente, entre los 26°
� 28° LS; aunque decrece hacia el norte, probablemente es sobrestimada debido a los procesos de
eV1potranspiración.

43
2 . 1 . 2 Características de los suelos

Suelos esqueletales. De acuerdo a los antecedentes disponibles, es probable qUt: en los


sectores altiplánicos, exista un régimen de humedad ústico y regimenes de temperatura lngído
para las áreas de mayor altura y térmico para las áreas más próximas a la Depresión intermedia.
Sin embargo, no existen datos suficientes para su corroboración, en particular, sobre el contenido

..
de agua y la temperatura de los suelos. Esta zona comprende las áreas ubicadas por enctma de la
cota 1 .500, es decir, incluye lo que podría llamarse el piedmont de la Cordillera de Los Andes, los
cordones montañosos y el Altiplano propiamente tal. Si se considera la antigOedad de los
materiales volcánicos (fines del Pleistoceno y Holoceno) no se debiera esperar una evolución
pedogénica avanzada en los suelos y, menos aún, una translocación de componentes dentro de los
perfiles, a causa de las bajas temperaturas medias y la marcada aridez, factores que determinan un
régimen orgánico muy débil.

Las características de los regímenes hidricos y de temperatura de los suelos, han dado origen a un
débil desarrollo de los organismos del suelo y, en general, de la vegetación. De esta mane� la
pedogénesis se manifiesta en fonna primaria para una gran mayorla de materiales geológicos,
dando como resultado suelos de desarrollo incipiente, en los cuales solamente es posible
distinguir un horizonte A, con escasa acumulación de materia orgánica sobre un sustrato que,
generalmente, no presenta evolución pedogénica. A estos suelos se les considera como
esqueletales, con un perfil A-� cuando se encuentran sobre roca sin meteorizar o con un perftl A­
Cr, cuando el material subyacente presenta algún grado de meteorización. El contenido de CO
rara vez alcanza valores superiores al 1% en los centímetros superficiales, para casi desaparecer
en los horizontes más profundos (0,09%) (Luzio et al., 2002a). Los horizontes C o R se han
descrito a partir de los 40 ó 60 cm de profundidad, además de presentar gravas en el perfil, lo que
ha justificado la denominación de esqueletales. De acuerdo a la información geológica publicada
sobre el área, se puede deducir que la mayor parte de las rocas subyacentes en los suelos son de
naturaleza volcánica, principalmente de origen andesítico. De acuerdo con estas condiciones y
siguiendo la clasillcación de suelos del USDA (Soil Survey Staff, 2003), la mayoría de estos
suelos caen dentro de la calificación de Lithic Usthorthent (Figuras 2-5 y 2-6, al final del
Capítulo).

En todos los suelos es común una pedregosidad superficial abundante, que varia entre 5 y 50%,
cuyo tamaño va desde gravas finas hasta guijarros subangulares, generalmente de origen
volcánico; también son frecuentes las gravas con diferentes grados de meteorización. Existe un
recubrimiento de arena, de variada graoulometria y de espesor variable, entre l y 1 O cm, cuyo
origen se encuentra en los procesos de transporte y depositación eólicos de intensidad en la zona.
En un estudio realizado por TREN {1976) para la misma zona, se describieron gravas finas y
medias de litologia heterogénea, tales como riolitas, andesitas y basaltos con arenas y gravas
pumicíticas en la mayor parte de los suelos que fueron identificados.

La profundidad del solum no supera los 60 cm. Los horizontes A son de color pardo amarillento
(7.5YR a l OYR) y en algunos casos puede llegar a pardo oscuro y pardo rojizo (7.5YR y 5YR), lo
cual indica alguna segregación de óxidos de hierro en la matriz del suelo y, por lo tanto, una
meteorización débil a moderada de los minerales ferromagnésicos. En todos Jos suelos los
horizontes superficiales tienen un valor y un croma (Munsell) igual o superior a 3, rasgo que
refleja los bajos contenidos de MO. Las clases texturales dominantes de los horizontes A son
gruesas, y sólo en algunos casos se presentan texturas medias. Las estructuras dominantes son de

44
bloques subangulares débiles, aun cuando también se describen horizontes sin estructura, es decir,
grano simple o maciza.

Una característica casi general a este tipo de suelos, es que el mayor contenido de COse
encuentra en los horizontes superficiales, con un decrecimiento regular en profundidad. Esta
tendencia se ha atribuido a que, en Ja mayoria de ellos, La vegetación dominante es de coironal,
cuyo sistema radical se desarrolla más abundantemente en los primeros centímetros de
suelo (Luzio y Vera, 1982). Sin embargo, también se encuentran suelos en los que la MO
presenta una distribución irregular en profundidad, proveniente de la estratificación de los mate­
riales de origen (Cuadro 2 -1 ).

C�tadro 2-1. Características llsicas y qu1micas de un suelo esqueletal, entre San Pedro de At.acama y El Tatio. (S.A.
CORFO-UCH, 1982b)

Profundidad (cm) 0 -20 20-34 34-69 69-105


Distribución de partículas por tamaño (%) A c. c2 CJ
2-0,05 70,8 54,8 80.0 82,8
0,05-0,002 1 5,2 23,2 9,2 9,2
< 0,002 1 4,0 22,0 10.0 8,0
Clase textura! Fa FAa Fa af
Carbono orgánico (%) 0,29 0,41 0,05 0,06
pH'IIlu• 6,50 6,60 6,60 7,20
Conductividad eléctrica (dS 0,18 10,0 0,14 0,14
Ca 3,6 4,7 2,2 2,7
Cationes extraíbles Mg 1 ,2 1,8 0,8 0,9
(cmoJ.,kg.1) K 0,7 L,l 0,5 1,1
Na 0,4 0,3 0,3 2,2
CJC (pH 7,0) (cmolckg· ) 7,0 9,2 4,5 4,9
Saturación básica H 7,0 (%) 100,0

Suelos con pedogénesis incipiente. Sin ocupar una posición geomorfológica definida y, en
forma excepcional, algunos suelos presentan procesos pedogénicos más intensos, evidenciados a
través de la formación de horizontes cámbicos (Bw), con una granulometria de fina a
moderadamente fina y una estructura bien desarrollada. El color de estos horizontes B fluctúa
entre el pardo rojizo (5YR3/4) y el pardo amarillento oscuro (7.5YR4/4 y 10YR4/4). Las •
estructuras más frecuentes son de bloques angulares y subangulares, aun cuando en forma
ocasional, algún suelo puede presentar un horizonte B con estructura prismática gruesa fuerte.
Algunos horizontes C se encuentran fuertemente compactados y presentan abundantes gravas de
pómez o tobas con distintos grados de meteorización.

En Los suelos de estas regiones es muy frecuente encontrar discontinuidades litológicas


ocasionadas por las frecuentes y sucesivas depositaciones eólicas, aluviales y volcánicas en forma
de riadas de constitución petrográfica muy diferente. Esta puede ser la explicación para la gran
dispersión de datos que se presenta cuando se miden algunos parámetros, tales como las
retenciones de agua por borizontes, en los diferentes suelos. Datos de Luzio et al. (2002a) señalan
que la retención de agua puede variar entre 3 y 21 ,6% a 1 .500 kPa y entre 6,5 y 35,1% a 33 k.Pa.
Se considera que la fracción arcilla es la responsable de la retención de agua a 1.500 kPa para la
mayoría de los suelos (r = 0,868); por otra parte, los contenidos de MO son lo
sulicientemente bajos (Luzio et al., 2002a) como para tener alguna influencia en el
comportamiento de los suelos. A modo de ejemplo, el Cuadro 2-2, presenta las características del
suelo Chirigualla, clasificado como Vitrandic Haplocambid.

45
Cuadro 2-2. Caracteristicas fisicas y químicas del suelo Chirigualla. aproltimadamente entre 18"45'$ ) ,,.¡ -15'W
(Luzio er al., 2002a)

Profundidad (cm) 0 - 22 22-43 43-70 70-86


A, B� BC e
2-1 4,7 3,0 4,0 3,1
1-0,5 10,2 9.3 8.3 8,4
Distribución de 0.5-0,25 13,6 1 1,4 9,4 11,2
partículas por 0,25-0,10 21.6 17,5 1 1,5 14,4
tama�o 0,1()..0,05 9.9 5,8 3.5 5,0
(%) 2-0,05 60.0 47,0 36.7 42,1
o 05-0,002 + 0,002 40,0 53.0 63,3 57,9
Agua retenida 33 kPa (%) 17.7 30,9 31,9 35,1
Agua retenida 1500 kPa (%) 10,4 17.5 19,2 21,6
Carbono orgánico (%) 1.3 0,4 0,2 0,1
pH- 6,9 7.2 7.5 7,9
ConductiVIdad eléctrica (dS m·' ) 0.43 0,47 0,72 0,5
Ca 7,0 15.2 17,7 21,8
Cationes
Mg 2,8 8,4 8,7 1 1,7
extralbles
K 1,0 t,l 1.2 1.1
( cmolc kg'1)
Na 1,3 2,3 1,8 1,6
CIC (pH 7,0) (cmolck&.) 12,9 24.2 32,9 39,7

La distribución de raíces a través de los perfiles presenra. en general, una mayor concentración en
los horizontes A, bajo una estrata de arena eólica, cuando está presente. y sólo en algunos casos en
los horizontes subsuperficiales (Luzio, 1990).

En estos suelos, los mayores contenidos de CO pueden encontrarse en los


horizontes B, componamiento que podría explicarse por el tipo de vegetación de tolar que,
generalmente, domina en esta clase de suelos: plantas que tienen una raz í pivotante y una mayor
distribución de masa radical hacia los horizontes más profundos. Nuevamente, se estima que los

bajos contenidos de CO tienen escasa o nula in1luencia en otras propiedades de los suelos, tales
como la capacidad de retención de agua, la CIC y la reacción del suelo (Cuadro 2-2).

Los valores de ClC para todos los suelos son medios a bajos, lo cual puede atn'buirse al
predominio de las fracciones granulométricas más gruesas que, a su vez, constituyen una
evidencia del bajo grado de meteorización de los materiales parentales. En el caso del suelo
Chirigualla (Cuadro 2 - 2), es particularmente elevada entre los 43 y 86 cm de profundidad. Al
igual que para los contenidos de agua de los suelos, los valores de CTC muestran también una
1
gran dispersión, desde 0,59 basta 39,7 cmolc kg- (Luzio el al., 2002a) situación que también está
I
asociada a la marcada estratificación que evidencian los suelos. Se asume que la fracción arciUa es
la responsable de la casi totalidad de la ClC, lo que ha sido corroborado por Luzio y Vera ( 1982)
en suelos de diferentes ecosistemas de las regiones desérticas del norte de Chile.

Suelos formados en materiales volcánicos recientes. Desde el Pleistoceno Inferior hasta


el Holoceno Reciente, la región altiplánica de Chile ha sido cubierta por numerosos sed1mentos de
origen volcánico (González. 1965; Charrier y Muñoz, 1997). Las tefras de granulometria variada
han cubierto extensas áreas, incluyendo las cuencas donde se han formado suelos orgánicos
bidromórficos. Estos sedimentos volcánicos han tenido una evolución pedogénica de escasa
importancia, a causa del limitado régimen biológico, producto de la escasa djsponibilidad de agua.
Numerosos autores (Díaz y Wdgbt, 1 965; González, 1965; Luzio y Vera, 1 982; Luzio. 1990; S.A.
CORFO-UCH, L 982a) han señalado que los materiales volcánicos constituyen depósitos

46
sedimentarios de gran extensión en toda la región altiplánica y, por ende, no es de extrafiar que
ellos sean materiales parentales frecuentes de los suelos de la región. Las Figuras 2-7 y 2-8 (al
fmal del Capitulo) constituyen un ejemplo de suelos desarrollados en tefras estratificadas, entre
Calama y Ollagüe (S.A. CORFO-UCH, 1982a).

Un claro ejemplo de suelos desarrollados a partir de materiales volcánicos, lo constituye el pedón


descrito en una amplia cuenca depositacional entre Putre y Parinacota (Figuras 2-9 y 2-10, al tina!
del Capítulo). En este caso se trata de suelos ubicados en posición de lomajes suaves en una
meseta altiplánica. Las pendientes son complejas y fluctúan entre 5 y 12%, con una pedregosidad
superficial escasa. Son suelos delgados, constituidos principalmente por materiales volcánicos,
con fragmentos de pómez a través de todo el perfil. Los colores dominantes son pardo rojizo
oscuro (5YR4/4) en la superficie y pardo muy pálido ( 1 0YR7/3) en profundidad. Las clases
texturales son medias a moderadamente finas hasta los 2 1 cm de profundidad y arenosa gruesa
con gravas purnicíticas de hasta 4 cm de diámetro hasta los 120 cm de profundidad. Las raíces son
escasas a través de todo el suelo, exceptuando el segundo horizonte. La estructura de bloques está

bien desarrollada en los primeros centimetros, lo cual indica una cierta evolución pedogénica: sin
embargo, desde los 2 1 cm hacia abajo no hay estructura (maciza), con 70% de gravas de pómez
desde 2 basta 4 cm de diámetro. Es probable que todo este sector corresponda a un depósito
pumicítico lahárico (Cuadro 2-3).

Cuadro 2-3. Características fisicas y químicas de un suelo formado en matenales volcánicos recientes, entre Putre )
Parinacota (S.A. CORFO -UCH. 1982a)

Profundidad (cm 0-8 8-JS 15-21 21-liS


Distnbución de panículas por tamaño(%) A11 e
2-0,05 56.0 52,0 47.2 60,0
0,05-0.002 24,0 20,0 24,8 22,0
< 0 ,002 20,0 28,0 28,0 18,0
Clase textura! Fa-FAa FAa FAa Fa
Carbono orgánico (%) 0,28 0,61 0.48 0,08
pH ��¡ua 7,00 7,20 7.30 7,10
Conductividad eléctrica (dS m"1) 0.32 0.24 0.31 0,3 1
Ca 3,6 7,5 10.4 8,6
CatiOnes extraibles Mg 1.9 3,3 4.4 3.6
(cmol,; kg'1) K 0.5 1.0 1.2 1,0
Na 0,3 0,4 0.5 0.6
_gc (pH > 8.8 15,6 20.0 13.7

De la literatura consultada, se ha seleccionado un suelo al cual se le midieron las propiedades


ándicas (Soil Survey Staff. 1999), de tal manera de poder identificar el grado de evolución de los
materiales parentales volcánicos (Cuadro 2-4).

En el horizonte A1 del suelo Chirigualla, el contenido AI+VlFe(ox) alcanza un nivel de 1,8%


(Luzto et al., 2002a), cifra que pemlite suponer La presencia de un estado de transición más
avanzado hacia minerales de ordenamiento de rango corto (MORC), es decir la alófana. la
imogolita y la ferrihidrita. Si se considera que el oxalato ácido extrae el Al y el Fe (además del St)
de los MORC, Los valores sefialados son demasiado bajos como para estimar la presencia de estos
minerales, lo cual significa que la meteorización de los alumino-silicatos primarios es muy
Limitada (Soil Survey Staff, 1999). La escasa evolución de los alumino-silicatos primarios se
aprecta, además, por la elevada cantidad de vidrios volcánicos frescos, que alcanzan hasta el 48%
en la fracción de 0,02 a 2 mm.

47
Cuadro 2-4 Proplédadcs ándicas del suelo Chirigtlalla, aproximadamente entre 18"45'S y 69"45'\V ,LL l l• et
al..2002a)

Profundidad (cm) 0-22 22- 43 .J3-70 70-86


Bw BC e
Pm <%) 21 ,70 25,30 20,40 16, 0
Al0, (%) 0,45 0.33 0.30 0.12
Fe., (%) 2,60 0,44 0.26 0.11
A l + Y: Fe(%) 1,80 0,55 0,43 0,18
Vidrios
__ vo�lcánicos (%) (0,02 - 2 mm) 44,00 48.00 45.00 39,00
=

A causa de estos antecedentes, los suelos no alcanzan a cumplir los requisitos mínimos para ser
considerados como Andisols y, por lo tanto, se han clasificado como Usthorthent y. en aquellos
casos que logren desarrollar un horizonte B cámbico, como Vitrandic Haplocambids, según Soil
Survey Staff (2006). Resultados similares obtuvo Norambuena (•) en suelos que describió y
analizó en las proximidades del Volcán lrruputuncu, en la Cordillera de Los Andes, al sureste de
la ciudad de Iqujque.

Suelos saturados en cuencas depresivas del paisaje (bofedales, vegas). El Altiplano


representa una meseta de altura, que caracteriza aJ sector oriental de la Región de Tarapacá. con
una altura promedio de 4.500 msnm. En ella, además de los suelos ya mencionados, se encuentran
suelos en cuencas con drenaje restringido y en algún caso impedido, con alto contenido de MO y
acumulaciones salinas.

En planos del relieve deprimido, asociados a los sectores de inundación de los cursos de agua y de
ríos. se crean condiciones de drenaje pobre y gran riqueza en vegetación, conocidos localmente
como vegas. Se podría decir que en la mayoría de las vegas se encuentran suelos minerales ricos
en MO. En cambio, existen otras situaciones. asociadas a cuencas cerradas de drenaje impedido,
donde se han dado las condiciones para la acumulación de mayor cantidad de MO. A estos suelos
o áreas de suelos se les denomina localmente como bofedales. Squeo et aL (2006) les clasifica en
base a la geomorfología y condiciones hidrológicas en bofedales de laderas, de quebradas y
planos (Figura 2 - 1 1 ).

(•) Pablo Norambucna, comunicación personal

48
Vista en perfil Vista en plmll

(A) (8)

(C)

(6) (F)

Figura 2-11. Tipos de bofedales en los Andes altos de Chile (A y B: de ladera; C y D: de quebrada; E y F: planos).
Las flechas indican la dirección del Oujo de aguas (Squeo et al., 2006).

Los perfiles de estos suelos corresponden a una masa compacta de MO en distintas


fases de descomposición; poseen un drenaje restringido (régimen de humedad ácuico), fácilmente
distinguible por la abundancia de rasgos redoximórficos, tales como empobrecimientos o
enriquecimientos en óxidos de Fe; los niveles freáticos pueden, en la época de las lluvias, alcanzar
la superficie y. en muchos de ellos, los contenidos de sales son elevados.

Algunas cuencas son exorreicas, por lo cual el nivel freático se encuentra en movimiento
constante, impidiendo la acumulación excesiva de sales y la formación de condiciones de
reducción. En cambio, otras son endorreicas, lo que ha facilitado la acumulación de sales, las que
pueden Uegar a constituir una costra dura en la superficie, conformada principalmente por
carbonato de calcio (CaC03).

Desde el punto de vista fisico, en la fracción tierra fina (fracción inferior a 2 mm) domina el
-.tparado textura! limo (cuadros 2-5 y 2-6). La retención de agua puede variar entre 15.7 y 134.0%
a 1 500 kPa y entre 50,0 y 241,0% a 33 kPa. La densidad aparente puede variar entre 0.06 y 0.60
:>.lg m 1 y la densidad de partículas entre 1 ,39 y 2,22 Mg m·3 (Luzio etal., 2002a).

49
Cuadro 2- 5. 1\lgunas propiedades ftSicas y quinucas del bofcdal de Surire (Luzio et al 2002a) .•

Profondídnd
- (c_m�>--,----,- o- 20 20-29 29-51 51-66 6f,-IIU
---•
D1slribuc1ón de partículas por tamaño (%) O.t.l 2\¡:__
2-0,05 14,2 9,4 17,4 24,4 29.8
0,05-0,002 72,6 67.3 57.0 61,1 48 4
< 0,002 13.2 �3 14,5 .21.�
- -�- 25,7
Clase textu� F
y:-- FL FL fL F
Carbono orgánico (%) 8.8 - -3,8-
1-
- 4.1 2.6 2,fl
pH.fUI' 8.1 7.9 7,8 8.0 -1,':1
pH�o;o 7,3 7.2 7.1 7.2 4.5
Conductividad eléctrica (dS m'1) 16,0 3.9 3.0 2.6 4,0
CaCO, eqUivalente (%) 38,5 29.6 22,6 45,8 0.0
Id__
Ca 105 65.1 57,4 45.7 9.7
Mg 10.0 9,6 3,8 2,4 8.9
Canones extrrublcs
K 262,0 2,7 1' 1 O,t!3 0,04
(cmol0kg 1 )
Na 59.1 18.2 4.1 2.2 2.6
Suma 436 95.7 66,4 51.1 21,2
Capacidad tot3l intercambio pH 7,0 37,6 47,2 18 9
. 8.1 9,8
Sa!uración básica 7 .O (%
_l_ 99.0 98.0

Si bien la descomposición de la MO puede ser muy lenta debido a los efectos del
encharcamiento y la oligotrofia sobre la actividad microbiana (Zak and Grigal. 1991), a lo largo
del tiempo se mantiene un nrvel mínimo de descomposición (Damman, 1988). Los contenidos de
CO pueden ser muy variables e irregulares en su distribución en profundidad, debido a la
estratificación de los suelos. En algunos de ellos puede fluctuar entre 33,4 y 41 ,6%; en cambio en
otros, puede ser muy marcada: entre 2,0 y 13,8% (cuadros 2-5 y 2-6). El tipo de pedón más
común corresponde a aquel que presenta horizontes fibricos en superficie y sápricos en
profundidad, constituyendo un fango saturado a causa de la presencia del nivel freático.

Cuadro 2-6. Algunas propiedades físicas y quunicas del bofcdal de Caquena (LULio ce si. 2002b) .

--- �
Profundidad O - 13 1 3 - 24 24-36 36-49
Distnbución de partículas por tamaño % Ou On o., -
2-0.05 28,3 27,3 34,3 11,1
0.05-0,002 43,7 43,6 47,0 47.1
< 0.002 28,0 29,1 18,7 41,7
Clase textura! FA FA F AL
--

Carbono orgánico (%) 39,2 � --- 36,3 33,4


8,5 7.7 7,6 6,7
pHKo 7.9 7.1 7.1 6,3
Conductividad eléctrica (dS m·1) 2,9 2.3 2,4 2.0
CaC03 equivalente (%)
0.7 03
Ca 56.0 52,4 61.3 32,6
Mg 57.2 33,6 35.2 19,8
Cationes extralbl�s
K 150.0 2.9 2,9 2.5
(cmolc kg'1)
Na 26,3 14,6 14.3 14,0
Suma 289,0 103.0 1 14,0 68.9
Capacidad toial imercambio pH 7,0 1 10,0 96.7 101,0 87.2
Saturactón 98,0

50
En muchos suelos, el pHagua de los horizontes superficiales está dentro del rango moderadamente
alcalino, con una leve disminución en profundidad, hasta ligeramente alcalino o neutro en los
horizontes más profundos. En otros suelos se presenta la tendencia a mantenerse dentro del rango
ligeramente alcalino en los horizontes subsuperficiales y. sólo en los horizontes más profundos, el
pH se encuentra en el rango ácido (cuadros 2-5 y 2-6). A esa profundidad, a causa de la carencia
de oxígeno, el S se encuentra en forma de sulfuros, el cual en contacto con el aire se transfonna en
sulfatos, lo que explicaría el pH ácido encontrado a esa profundidad (Tan, 1993; Soil Survey
Staff, 1999).
En la mayoría de estos suelos, la conductividad eléctrica (CE} es mayor en los horizontes
superficiales que en los horizontes más profundos (cuadros 2-5 y 2-6). Sin embargo, los niveles de
conductividad pueden presentar una gran variabilidad, lo cual se ha atribuido en mayor medida a
la posición que los suelos ocu an en el paisaje y su relación con los niveles fTeáticos. Así, las CE
r
más bajas (2,02 a 2,89 dS m· ) se encuentran en aquellos suelos donde el nivel freático está en
movimiento, constituyendo flujos subsuperficiales de agua. de tal forma que la acumulación de
sales está impedida. Los bajos niveles de salinidad detenninan que el suelo sea calificado como no
salino, aun cuando se trate de un bofedal que se encuentra en una posición depresiva del paisaje.
En otros suelos la CE puede ser tan alta como 16 dS m·1 en los horizontes superficiales, con un
leve decrecimiento irregular en profundidad. Esta mayor acumulación salina se atribuye a que
estos suelos se encuentran en cuencas endorreicas con drenaje restringido, lo cual crea las
condiciones adecuadas para que se produzca una acumulación importante de sales.
.. •
Se considera que los procesos de adición son Jos más importantes en estos suelos orgánicos. El
material parental corresponde a los depósitos orgánicos acumulados durante el Holoceno en
cuencas originadas, tanto por los procesos tectónicos pliocénicos como por la actividad volcánica
pleistocénica. De esta manera, los suelos orgánicos hidromórficos del Altiplano deben
considerarse como suelos recientes. Estos procesos de adición representan una profunda y
constante paludización que ha originado una marcada estratificación en la mayoría de los suelos,
conjuntamente con las acumulaciones de sales solubles provenientes de la meteorización de los
materiales volcánicos en las partes más altas de la cuenca. Las translocaciones están representadas
principalmente por las redistribuciones de sales solubles a través de los perfiles, cuya intensidad
en general, es muy limitada.
La mayoría de estos suelos orgánicos ha sido clasificado como Haplofibrist y Haplohemist (Soil
Surve Staff, 2006). Algunos son también altamente salinos, con CE que puede Uegar a los 150
r
dS m· . Se les ha clasificado como Endoaquents y Halaquepts/Endoaquepts (figuras 2-12 a 2-17,
al final del Capítulo).
Suelos de los Valles Cordilleranos. Los Valles Cordilleranos de orientación este-oeste son
estrechos, con un piso relativamente plano y laderas abruptas con abundante pedregosidad y
frecuentes afloramientos rocosos (Figura 2-18, al final del Capftulo). La casi totalidad de Jos
suelos descritos son de origen aluvial. Sólo algunos son coluviales o tienen influencia coluvial.

..
Los estudios de suelos realizados son escasos. pudiendo mencionarse algunos, tales como el del
··alle de río Lluta (Díaz, l958a), la Quebrada de Camarones (Díaz y Meléndez, 1958). el valle de
Azapa (Wrigbt y Meléndez, 1961) y el valle de Chacalluta (Servicio Agrícola y Ganadero. 2002).
51
De estos estudios - algunos con varios años de antigüedad y otros más recientes - se p tcden
extraer algunas conclusiones que son comunes a todos los suelos de los valles. En lm e tores
altiplánicos, los valles son muy estrechos, las pendientes de las laderas son superiores a 1 00% y
con abundante rocosidad. La mayor parte del piso de los valles está constituido por sed mentas
gruesos, esencialmente gravas redondeadas y/o facetadas. Hay sectores en los cuaJe� ..... han
logrado formar teiTa7..as aluviales, constituidas por sedimentos de arenas, con clara estratttll..'acJón
..
y bien seleccionadas. En aquellos casos donde ha existido una ligera evolución, representada
principalmente por una escasa acumulación de MO y se ha logrado formar un
horizonte A, los suelos alcanzan a cumplir los requerimientos mínimos para clasificar como
Entisols (suelos recientes) Gran Grupo Ustorthent (régimen de temperatura frígido).

Otra situación fisiográfica común, es que también en las márgenes de los cursos de agua se
producen procesos de paludización, los cuales dan origen a suelos orgánicos o suelos minerales
con un elevado contenido de MO, aun cuando la profundidad es escasa y el desarrollo es limitado
(Figura 2 -19, al final del Capítulo).

2.2 Suelos de la Depresión Intermedia

Desde un punto de vista fisiográfico, estas áreas se caracterizan por presentar superficies
ligeramente onduladas y erosionadas; además se observan sectores con costras duras de sales,
carbonatos o sílice. Una parte importante de este sector está ocupado por el Desierto de
Atacama, considerado como el desierto de aridez continua más antiguo de la Tierra (Clarke,
2006). No obstante, considerando que puedan existir situaciones puntuales que debieran
evaluarse individualmente, Los suelos que se encuentran en la Depresión Intermedia presentan un
régimen de humedad arídico y un régimen de temperatura térmico (entre los 18° y los 29° LS), en
las Regiones de Arica y Parinacota (XV), de Tarapacá (1), de Antofagasta (JI) y de Atacarna (rTT).

Suelos de Llanuras DepositaciooaJes. El término llanuras depositacionales corresponde a


una expresión que se utiliza en este texto para indicar a extensas áreas de la zona desértica de
Chile entre los L8° y los 29° LS, que se encuentran a alturas aproximadas entre los 1 .000 y los
2.800 msnm, es decir, un área jalonada por la Cordillera de Los Andes (y Precordillera) y la
Cordillera de la Costa. Corresponde básicamente a un graben constituido por mantos de rocas
volcánicas terciarias (ignimbritas, riolitas) que están subyaciendo a importantes depósitos de
sedimentos terciarios y cuaternarios aluviales y/o lacustres, as{ como a riadas holocénicas (Figura
2-20, al final deL Capítulo). Las características principales de esta zona son las grandes
extensiones con pendientes uniformes y la presencia de suelos con diferentes grados de salinidad.
Estas planicies han sido fuertemente erosionadas y disectadas por fenómenos principalmente
aluviales, cuya mayor intensidad parece haber ocurrido a comienzos del Cuaternario. Estos
fenómenos dejaron como consecuencia. un paisaje de lomas y planos remanentes (llamados
pampas), separados entre sí por valles y quebradas de tamaño diverso (Liuta, Azapa, Vítor,
Camarones, Chiza, Suca, Tana y Tiliviche, entre las principales). Los valles de mayor tamaño
llevan cursos de agua superficiales que. generalmente, se transforman en aguas subterráneas antes
de desembocar en el mar. La superficie de estas llanuras depositacionales está constituida
comúnmente por gravas, como un pavimento de grandes extensiones similar a un desierto
pedregoso, en que los fenómenos de deflación eólica tienen una expresión limitada. Un ejemplo
de esta acción eólica limitada la constituyen los barjancs que se distinguen con facilidad al interior
de Huara.

52
En estos amplios sectores se encuentran los que se podrían considerar como los verdaderos suelos
de desierto, descritos muy tempranamente por Diaz y Wright (1965) y que se caracterizan por un
desarrollo de perfil muy débil, en los cuales es posible encontrar mezclas de sedimentos aluviales
,.
) coluviaJes y que, además, pueden ser salinos. Dentro de este grupo también se incluyen los
suelos del piedmont de la Cordillera de Los Andes que ocupan grandes sectores, donde se
encuentran algunos de los oasis más importantes de la zona.

Los suelos de estas áreas ocupan posiciones de lomajes o de cerros bajos. con pendientes que no
son 'superiores a 10%. Presentan abundante pedregosidad superficial (40%) constituida
básicamente por fragmentos angulares de composición básica y ácida mezclados. Los suelos son
delgados, desarrollados sobre una toba riolítica, con una textura gruesa en el horizonte superficial.
de color pardo a pardo oscuro y sin estructura (grano simple). Estos suelos responden al concepto
de Torriorthents (Soil Survey Staff, 2006). En otros casos, es posible encontrar suelos con un
mayor grado de desarrollo, evidenciado por la presencia de un horizonte B, de débil expresión,
.:on una clase textura! moderadamente gruesa y una estructura de bloques subangulares.

Aun cuando la vegetación de estas áreas es muy escasa y, en sectores, completamente inexistente,
muchos de los suelos descritos en ellas presentan una distribución de raíces heterogénea en
profundidad y que alcanzan hasta el sustrato rocoso. Este sustrato (horizonte R), puede presentar
grietas, en las caras de las cuales existen recubrimientos de materiales calcáreos, lo cual
evidenciaría algún proceso de translocación de componentes a través del perfil. Aquellos suelos
que presentan algún grado de desarrollo (principalmente evidenciado por la presencia de un
horizonte B) han sido clasificados como Aridisols. es decir, suelos representativos de regiones
aridas y desérticas, y que presentan algún grado de evolución. Se les considera principalmente,
como Lithic Haplocambids.

En algunas cuencas depositacionaJes de topografía plana, con microrelieve acentuado en sectores.


se encuentran suelos estratificados, de texturas gruesas, desde arenosa hasta franco arenosa
tfigura 2-21, al final del Capitulo). En algunos de estos suelos se suelen intercalar estratas de
texturas más finas, que pueden ser limosas a franco limosas. Aun cuando no se les incluye en el
concepto de salares, pueden presentar altos contenidos de sales, con una conductividad eléctrica
que es irregularmente variable en profundidad, desde 2 hasta 30 dS m·•, pues se asocia a la
naturaleza de la estrata. Al mismo tiempo pueden presentar contenidos variables de carbonatos,
desde 1 a 6%. En estos casos el complejo de intercambio está dominado por Ca++ (Cuadro 2-7).

Suelos con alto contenido salino (salares). Hacia finales del Pleistoceno, se produjo un
mtenso período de actividad volcánica en la Cordillera de Los Andes, el cual se prolongó hasta el
Holoceno Reciente y que generó estructuras volcánicas andesiticas que sobrepasan los 6.000
msnnL Sus efusiones jugaron un papel importante en el control de la red de drenaje y en el
desarrollo de cuencas lacustres elevadas en el Altiplano. Es en este período cuando se
desarrollaron los depósitos evaporíticos acumulados en los salares (González., 1965).

Una inusual escasez regional de carbonatos y una abundancia de sulfatos y cloruros ha sido
observada por numerosos investigadores (Alonso et al., 1991; Risacher and fritz, 1991). aunque
� informan algunos casos de concentraciones locales de nitratos, boratos. yodatos. cromatos.
�)tasio y litio (Ericksen, 1983; Searl and Rankin, 1993). En la mayoría de los lagos salinos del
nJUndo, acorde al modo de evolución observado, se identifican 3 grupos principales: alcalinos
'lHCOJ·C03-Cl, pH> 9, trazas de Ca y Mg), ricos en sulfatos (Na/S04-Cl, bajos en Ca, pH <
Q) ricos en Ca (Na-Ca/Cl, bajos en S04, pH< 9). En el norte de Chile la mayor parte de los

53
salares descritos pertenece al grupo de los ricos en Ca y/o ricos en so4 (Figura 2-22) c;;egún
Risacher eral. (2003) los salares alcalinos casi no existen.

Cuadro 2-7. Características fisicas y químicas de un suelo de las Llanuras Depositacionales, ce ca de b1a {S.A.
CORFO-UCH, 1982a)

Prof11odidad (cm) 0-20 20-31 31 -10S


Distribución de part(culas por tamaño(%) 2B R
2-0,05 70,6 42,6 64,6
0,05-0,002 12.8 22,8 22,8
< 0,002 16,6 34,6 12,6
Clase textura! Fa FA Fa
Carbono orgánico(%) �12 �16 0�2
pH- 8,4 8,8 8,2
Conducuvidad eléctriCa (dS m'1) 0,6 0,7 4,0
CaC03 equivalente (%) 0,0 0,0 4,51
Ca 6,5 30.0 27,0
Catione:. extrafbles Mg 1,6 5,3 1,8
(cmole kg'1) K 1,6 3,9 l,J
Na 0,9 2,4 4,0
_ge (pi 1 7,0) (cmol<kg·) 8,8 3.3 13,7

tMJIII

so. X
-�

_.._ JoqO. c..+so, 181
c.. []

. ...."'
ttllRU
.lllllU-'VtU:WC..

- .....

.. .,,. w ...

2-22. Ubicación y composición qufmica (S04 y/o Ca) de va ios sala es del norte de Chile (Risacber ceal., 2003).

54
La falta de alcalinidad se atribuye a la abundancia de S nativo en la Cordillera Occidental y a la
deposición atmosférica de polvo del desierto rico en yeso. La oxidación del S produce S04 que
acidifica las aguas que fluyen, reduciendo drásticamente su contenido de carbonato.

Se puede considerar que los suelos desarrollados en estos depósitos evaporiticos representan una
situación extrema en cuanto a las características y propiedades. Esto se debe a que, aun cuando
estos suelos poseen una costra superficial sellada. extremadamente dura (que en algunos casos
puede tener hasta un metro de espesor) constituida por sales como sulfatos, cloruros y
eventualmente carbonatos, puede prosperar una vegetación en buenas condiciones (figuras 2-23 y
2-24, al final del Capítulo). En general la topografia es plana a suavemente ondulada con
microrelieve fuerte. La marcada estratificación de los suelos indica que la depositación de los
sedimentos tiene su origen en acciones de carácter lacustre o bien, como depósitos de fondos
marinos. De todas maneras, la evolución edáfica es incipiente y, en ocasiones inexistente, es decir,
se podría calificar como una sucesión de capas de sedimentos (Figura 2-25, al final del Capítulo).

La característica común que presentan todos estos suelos de salares es la presencia de una costra
superficial muy dura, quebradiza. de espesor variable (de 13 a 30 cm) constituida esencialmente
por cloruros y sulfatos y muy secundariamente, por carbonatos. Estos salares fueron reconocidos
primariamente por Díaz y Wright ( 1965), quienes describieron a estos suelos con una costra
superficial de cloruro de sodio la cual corrientemente se quiebra en placas individuales y se
curvan como trozos de alfarería quebrada. Incluso describen su superficie, tal como si diera la
unpresión de espuma de olas, un mar agitado o una superficie de coral. Estos autores (op.cit.)
consideran que el origen de los salares se encuentra en la acumulación eólica de cristales salinos,
debido a que en estas cuencas no existe un nivel freátíco dentro de los 50 a 100 cm superficiales y,
por lo tanto, la acumulación de las costras salinas sólo podría tener un origen eólico.

... .
Sin embargo, es dificil pensar que la formación de los salares sea el resultado de procesos
holocénicos, con especial connotación eólica. Mortensen (citado por Brüggen. 1950) señala la
escasa importancia de los vientos en el desierto del norte del pafs, cuya influencia sólo ha
generado rasgos de escasa incidencia en el paisaje. Más aún, Brüggen (1 950), insiste en la
formación de enormes cuerpos de agua lacustrinos post-pliocénicos, sin una red de drenaje
definido. La pérdida de las aguas de los lagos por evaporación, constituiría el punto de partida de
la salinización. Es posible que la acumulación de sales sea aún un proceso activo, aun cuando en
la actualidad esté más relacionado con el ascenso capilar desde los niveles freáticos que se
encuentran a escasa profundidad.

Más recientemente, los procesos de distribución de sales en ambientes áridos ha sido examinada
por diferentes autores (Goudie et al., 2002; Bao et al., 2004). Para Goudie et al. (2002) las fuentes
regionales de sales en el norte de Chile han sido principalmente el océano, la actividad volcánica
y la meteorización de rocas y, secundariamente, habría existido un aporte cíclico de
acumulaciones salinas preservadas (dada la aridez prolongada) en depósitos geológicos (Figura 2-
26). Bao et al. (2004) estiman que el sulfato secundario de los suelos de Atacama proviene, prin­
cipalmente, del sulfato derivado de la oxidación de S Gaseoso atmosférico. las fuentes de este S
gaseoso reducido, incluyen emisiones biológicas del océano cercano y probablemente en menor
pwporción, proviene de las emisiones volcánicas de sitios cercanos o remotos.

55
-Este. LÓS.ANDES PRE-COR.DlLLERA '
.· ·.·
VALLECENTRAL Oeste
--+

lllCRACIÓNDt.
<.'Al'IURID�

Figura 2-26. nustración de las fuentes de sales y mecanismos de concentración que pueden ocurrir a lo largo de un
lransecto regional del norte de Chile (Berger and Cooke. 1997).

El pH en la costra de estos salares, puede fluctuar entre 8,5 y 8,9. La característica común a la
mayoría de estos suelos la constituye el aumento del pH con la profundidad, alcanzando valores
de hasta 9,8 a los lOO cm (Cuadro 2-8). La CE puede llegar a 500 dS m'1, y solamente en algunos
casos puede bajar a 150 dS m·1, siguiendo una tendencia inversa a la del pH; esto es, decrece con
la profundidad, llegando a valores de l O y 25 dS m·1• La MO en la costra superficial es muy baja,
normalmente es inferior a 0,3%; sin embargo, es frecuente que en la segunda estrata
inmediatamente debajo de la costra, ésta aumente hasta 0,5%. Esto se podría explicar porque a esá
profundidad se produce la máxima acumulación de raíces. En el resto del perfil la MO sigue la
tendencia normal, es decir, disminuye hacia los horizontes o estratas más profundas. A diferencia •
de lo que pudiera pensarse, el contenido de CaC03 en la costra y a través de las estratas en
profundidad es bajo, normalmente inferior a 2%; sólo en algunas estratas, bajo los 70 cm,
claramente definidas de acumulación de carbonatos, se pueden alcanzar valores cercanos al 10%.

La CIC presenta valores muy irregulares en profundidad, lo cual se debe a la marcada


estratificación de estos suelos. Puede variar, desde una capa a otra, desde 6 hasta 28 cmolc kg'1,
sin que exista una clara relación con el contenido de la fracción fina (arcilla) de cada estrata.. No
existen estudios acerca de la mineralogía de la fracción arcilla que pudieran explicar esta
tendencia. En el complejo de intercambio, el Na+ alcanza valores muy elevados en la costra (hasta
750 cmolc kg-1), lo cual implica una saturación del complejo sobre el 35% con Na+. Hacia las
estratas más profundas, los valores absolutos de Na+ disminuyen (10-15 cmolckg"1); sin embargo,
el porcentaje de saturación del complejo aumenta hasta 46%. El segundo catión en importancia es
el Ca++, seguido por el K+ y el Mg+- (Cuadro 2-8). De acuerdo con Soil Survey Staff (2006) estos
suelos satisfacen los requerimientos de los Typic Haplosalids.

56
Cuadro 2- 8. C racterísticas fisicas y químic s de un suelo de Salar de Pintados (S.A. COR.FO-UCH, 1982b)

Profundidad cm 0-30 30-50 50-78 78-85 85- 1 1 7 1 17-130


Dil.tribución de partículas por tamai'lo (o/o) Anm 2C,
2-0,05 32,6 38,6 17,4 21 4
, 67,4 13,4
0.05-0,002 60,0 27,4 36,0 58,0 22,0 53,2
< 0,002 61,4 43,0 46,6 20,6 10,6 33,4
Clase textura[ A A A FL Fa rAL
Carbono orgánico (%) 0,07 0,33 0.28 0,04 0,11 0,06
8.6 8,8 8,9 9.5 9.1 9,6
'
Conductivid d eléctrica {dS m· ) 54,0 1 50,0 150,0 64.5 1 8,8 25,0
CaCO3 equivalente (%) 1,86 1,01 0,0 9.5 0,0 0,0
Ca 33,8 8,6 8,3 17,5 1,65 3,9
Cationes extraibles Mg 0,29 1,0 1,0 0,8 0,4 0,7
1
(cmol< kg- ) K 225,0 16,5 14,0 9,0 6,5 10,0
Na 575.0 63,5 65,0 30,5 12,2 21,5
CIC (pH 5,0 28.7 20.0 20,0 8,1 22.5

2.3 Suelos del Sector Costero

Los suelos que se encuentran en estas áreas, ocupan una franja costera que se extiende desde la
línea de costa oceánica hasta aproximadamente la linea de máxima altura de la Cordillera de la
Costa: entre los 18° y los 29° LS. Los suelos tienen un régimen de humedad arídico y un régimen
de temperatura isotérmico. En su mayoría se les ha considerado como Torriorthents y, aquellos
con un mayor desarrollo de perfil, como Haplocambids.

La Cordillera de la Costa propiamente tal, está litológicamente fonnada por rocas sedimentarias
marinas del Jurásico, con algunas intrusiones de rocas graníticas que varían entre granitos.
granodioritas y gabros (Mortimer and Rendic, 1975). Corresponde a una zona cuya cota superior
no sobrepasa los 1 .000 msnm, siendo los rasgos más característicos del paisaje los acantilados, las
fom1aciones coluviales, los valles con pequeños cursos de agua que llegan hasta el mar y una
franja litoral, constituida por terrazas marinas de escasa magnitud y desarrollo (Figura 2-27, al
final del Capítulo).

La Cordillera de la Costa cae abruptamente al mar en fonna de acantilados de varios cientos de


metros de altura, en la base de los cuales se forma una sucesión continua de coluvios. Así se
estructura una estrecha franja litoral, fonnada por depósitos sedimentarios que dan origen a
escasas y angostas playas de rodados y arenas. Esta franja litoral es discontinua, de modo que hay
sectores en los cuales la Cordillera cae directamente al mar. En estas verdaderas terrazas marinas,
los escasos afloramientos rocosos están profundamente meteorizados, producto de la elevada
humedad ambiental, la excesiva salinidad y Ja fluctuación diaria de temperatura. La fonnación de
estas terrazas marinas está restringida a las cercanías de los cauces que llegan al mar, taJes como
ocurre en la Quebrada de Tiliviche, Río Can1arones, Caleta Vítor y Río Loa. En estos sectores es
...
posible distinguir uno o dos niveles de terrazas, formadas entre la línea de la más alta marea y el
escarpe propiamente tal de la Cordillera de la Costa.

Algunos suelos desarrollados en estas terrazas están fonnados por una sucesión de estratas. ya
can de origen claramente marino o claramente coluvial. Las primeras evidencian gravas
r...jondeadas con pulimento marino; las segundas están constituidas por gravas angulares, con una
m :miz arenosa gruesa. El pH generalmente se encuentra sobre 8,4, pudiendo alcanzar valores de

57
9,2. A causa de la marcada influencia marina, la presencia de carbonatos es frecuente, por lo que
++
el complejo de intercambio está dominado por Ca ; sin embargo, entre los cationes solubles
domina el Na-, pudiendo alcanzar una Relación de Adsorción de Sodio (RAS) de 25,2.

...
En los sectores donde la Cordillera Uega directamente al mar, sin una transición de terrazas. como
ocurre en las proximidades del paralelo 25° LS, en las cercanías de Taltal, el relieve es muy
escarpado. Las pendientes son superiores a 20%, con abundante pedregosidad tanto en superficie
como en profundidad, con afloramientos rocosos comunes (Figura 2-28, al final del Capítulo). La
ütología dominante corresponde a granito rosado, andesita y gneiss granítico. También se hao

- -
descrito evidencias de erosión hldrica. Los suelos son delgados sobre un sustrato formado por
gravas angulares que pueden ocupar el 80% en volumen. El pedón que se ha tomado como
ejemplo (Cuadro 2-9), posee texturas gruesas a través de todo el perfil, con un alto contenido de
MO en los primeros centímetros, lo cual corresponde a una acumulación muy superficial de restos
orgánicos, derivado del ecosistema de Matorral Mediterráneo donde fue descrito (S.A. CORFO -
UCH, 1982b). También existe una ligera acumulación de carbonatos en superficie y una CE muy
elevada, pero solamente en los 5 cm superficiales. Los suelos que se encuentran en estos
ecosistemas, generalmente presentan un horizonte A delgado. producto de la acumulación de

..
restos vegetales, con un límite abrupto con los horizontes B o C subyacentes. La pedregosidad
angular, abundante en el perfil, constituye una evidencia de los procesos coluviales a los que ha
estado sometido todo el sector (Figura 2-29, al final del Capítulo).

Cuadro 2-9. Características fisicas y químicas de un suelo de la Cordillera de la Costa en las proximidades de Taltal,
25"00' l l " - 70"25'36" (S.A. CORFO-UCH, 1982b)

Profundidad (cm) 0-S S-36 36-100


Distribución de partículas por tamaño(%) A c. Cz
2-0.05 63,4 64,4 70,4
0.05-0,002 22,6 18,6 l3,6
< 0,002 14,0 17,0 16,0
Clase textural Fa Fa Fa
Carbono orgánico (%) 5,1 0,9 1,0
pHogua 8,8 8,4 8,4
Conductividad eléctrica (dS m·1) 54,0 150,0 150,0
CaCO, equivalente(%) 1,1 0,2 0,2
Ca 25,9 4,2 8,1
Cationes extraíbles Mg 8,9 4,6 2,8
(cmol. kg.1) K 1,6 1,6 0.6
Na 4,1 3,0 2,1
CIC (pH 7,0) (cmolc kg·) 14,9 10,9 7,8

El elevado relieve de la Cordillera de la Costa, se caracteriza además por ser una zona de fallas
que contrasta con las superficies ligeramente onduladas, erosionadas y con costras duras de las
áreas del Interior. Su parte norte se observa disectada por quebradas y cañones muy profundos.
Solo los troncales de las quebradas contienen cauces con tlujo activo o intermitente; algunos
tributarios son relictos y no contienen evidencias de flujo reciente o de sedimentos fluviales
relictos en sus fondos.

58
2.4 Suelos del Valle de Copiapó

Los suelos del valle del río Copiapó se encuentran sobre sedimentos fluviales recientes.
probablemente retrabajados, debido a que las etapas de sedimentación pudieron haber sido
alteradas por fases cambiantes de erosión. transporte y sedimentación. Estos procesos de
alteración de las fases de sedimentación aluvial pudieran haber tenido su origen en los aportes de
materiales provenientes de las quebradas que desembocan en el valle, tales como Paipote.
Meléndez, Pintada, Cerrillos, Homitos, Los Loros y otras de menor importancia. El valle presenta
dos fases diferentes de evolución. En el curso superior y medio presenta fonnas de escasa
evolución geomorfológica, caracterizadas por paredes abruptas. valle con perfil en V y un curso
sin meandrizar. Aquí, los sedimentos se caracterizan por la predominancia de materiales gruesos
(desde arenas finas hasta gravas medias), aun cuando localmente se han depositado sedimentos
más frnos, tales como arenas finas, limos y hasta materiales del tamaño arcilla. Uno de los suelos
que caracteriza a estos sectores altos del valle corresponde a la Serie Amolanas, que tiene
abundante pedregosidad angular en superficie y a través del perfil (figuras 2-30 y 2-31, al final
del capítulo). En el curso inferior, desde Chamonate hacia la costa, el valle se ensancha, las
paredes son menos escarpadas y su fondo es plano, constituyendo prácticamente una penilla­
nura. En este sector dominan los materiales más finos, tales como limos y arcillas; además,
constituyen las áreas de acumulación de sales y de carbonatos.

Los suelos de la sección superior del valle - esto es, desde la ciudad de Copiapó hacia el este - se
caracterizan por una marcada estratificación de origen aluvial, con texturas gruesas en superficie
(franco arenosas) y que pueden llegar hasta franco arcillo arenosas. En profundidad se intercalan
estratas de arenas y gravas, conjuntamente con otras de clases texturales más finas. En la mayoría
de ellas se encuentran abundantes ftlamentos de carbonatos de calcio, con fuerte a violenta
reacción al HCl. Las discontinuidades litológicas entre los horizontes señalan una sucesión de
procesos de sedimentación importantes que han rellenado el fondo del valle. Algunos de los
horizontes han alcanzado el desarrollo pedogénico necesario como para considerarlos horizontes
B. Todos estos suelos fonnan parte del sistema de terrazas del río Copiapó y como tales,
presentan pendientes moderadas, no superiores al 3%. Uno de los suelos más representalivos de
este sector y que responde a estas características morfológicas y geomorfológicas, es el suelo
Apacheta, que se puede apreciar en las figuras 2-32 y 2-33, al final del Capitulo. En el Cuadro 2-
1 0 se presentan las propiedades fisicas y químicas de este suelo, tomadas del Estudio Agrológico
del Valle de Copiapó (CIREN, 2007).

En el mismo sector se encuentran los suelos desarrollados en posición de coluvios, que en los
últimos años han sido habilitados para su utilización, esencialmente con parronales. Se trata de
suelos de escasa evolución pedogénica, pero que ha sido suficiente para el desarrollo de una
estructura débil y consecuentemente, se ha logrado evidenciar un horizonte B. Presentan
abundante pedregosidad en superficie y en el perfil que, en algunos casos, impide determinar la
clase textura! al tacto a causa de su abundancia. Los colores se mantienen en el pardo rojizo
oscuro (5YR3/2-3/3) y algunos perfiles tienen reacción al HCI.

En la parte baja del valle, es decir, desde la ciudad de Copiapó hacia Caldera, el valle se ensancha
' los suelos presentan algunos rasgos que difieren de los suelos de la parte alta. Aquellos que
ocupan la posición de terrazas remanentes, presentan pendientes no superiores a 3%, tienen altos
.mtenidos de sales y de carbonatos a través de todo el perfil. Los suelos son profundos,
"
·o;tratificados, cuyos colores varían entre los matices l OYR, 7.5YR y 5YR y cuyas clases
1 ·xturales son dominantemente fmas, esto es franco arcillo limosa, franco arcillosa y arcillosa. La

59
mayoría de ellos presenta una estrata de MO de color negro ( 1 OYR2/l ), a profundidades
variables. El pH tiene valores normalmente sobre 8,0 pudiendo llegar hasta 8,8. La CE e� Jita,
1
con valores hasta los 85 dS m· , con la particularidad que, en todos los suelos analizados. Jos
valores más elevados se encuentran en el horizonte Ap, con un fuerte decrecimiento en el segu1dn
horizonte. Algo similar ocurre con la RAS, que alcanza un valor de hasta l l O en el honztmlc
superficial, para descender a 20 en el horizonte subyacente.

Estas acumulaciones de sales en superficie deben tener su explicación en problemas de manejo,


fundamentalmente en el sistema de riego y en la forma cómo los a&'licultores están aplicando agua
a los cultivos. No se trata de acumulaciones de sales con origen genético, por lo tanto su origen se
considera esencialmente antrópico. De todas maneras, la mayoría de los suelos cae en el concepto
de suelos salinos (en algunos casos de muy fuertemente salino) y algunos horizontes caen en el
concepto de salino sódico. Es muy interesante destacar que, aun cuando la salinidad y, en algunos
casos la sodicidad son extremas, se han desarrollado explotaciones agricolas en buenas
condiciones, tales como vid, limoneros y olivos en el caso de frutales y tomates, alcachofas y
espárragos en el caso de cultivos. El suelo más representativo de este grupo corresponde a la Serie
Ramadillas (figuras 2-34 y 2-35, al final del Capítulo). En el Cuadro 2-1 1 se presen tan las
propiedades flsicas y químicas de este suelo tomadas del Estudio Agrológico del Valle de
Copiapó (CIREN. 2007).

Cuadro 2-10. Propiedades tisicas, químicas y flsieo-químicas de la Serie Apacheta (ClR.El\. 2007)

Profundidad (cm) o-11 l l - 48 48 - 60 60-80 80-91 91 - 120


Distribución de partlculas por tamaño (o/o) B JC2 5Ab
2-0.05 23,0 31,0 19,0 33,0 5,0 37,0
0,05-0.002 5 1 ,0 3 1.0 63,0 43,0 84,0 41,0
< 0,002 26,0 38,0 18,0 24,0 1 1 ,0 22,0
Clase textura! FL FA FL F FL f
Agua retenida 33 J.J>a (%) 17,2 22,8 1 1,5 19,0 6.4 18,7
Agua retenida 1.500 kPa (%) 8,8 12.6 5,7 8.3 2,9 7.7
pH- 7.7 8,2 !!,5 8,5 8,6 8,6
Carbono orgánico (%) 1,33 1.22 0.17 0.17 0,12 0,29
CaC03 equivalente (%) 4,3 6,0 2,0 3,8 1,5 2,6
Yeso (%) 0.12 0,00 0,00 0,00 0.00 0,00
Conductividad eléctrica (dS 8,1 1,8 1,3 1,3 0,7 1,0
Ca 42.9 10.5 6,9 7.7 3.6 5,3
C-ationes disueltos Mg 22,6 3,6 2.3 2.5 1.2 1,9
1
(mmol, L' ) K 3,1 1,0 0,4 0.4 0.2 0.2
Na 38,0 4,5 3,4 3,7 2,3 2,9
RAS 6,6 1,7 1,6 1,6 1,5 1,5
PSI (calculado de la RAS) 8,8 2,4 2,3 2,3 2,1 2,1
Saruración de agua(%) 37,4 44.5 24,7 34.9 25,9 33,4
Ca 30,80 23,80 14.70 23,50 8.50 23,50
Extracción con acetato de NH, Mg 5.42 4,11 2.17 3,19 1.48 339
(cmol. kg'1 ) Na 2.48 0 61 0,3 0,41 0,43
, 0.23
K 1,35 1.31 0,43 052 0.24 049
Cationes intercambiables K 1,2 1,26 0,42 0,51 0,24 0.48
1
(cmolc kg' )
Na 1 06 0,41 022 0,28 0,17 0,33
CIC (pH 7,0) (cmol., kg·) 16,8 18,9 9,6 1 1,8 3,9 13.5
Saturación de bases (%) 100,0 100,0 100,0 100,0 100.0 100,0
Saturación de Na¾ 6,3 2.2 2,2 2,4 4,4 2.5

60
Cuadro 2-11. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de la Serie Ramadillas (CIREN, 2007)

Profundidad (cm) O - 21 2 1 - 39 39 - 58 58 - 76 76 - 87 87-110


Distribución de partlculas por tamaño (%) Ap 8 82
1
2-0,05 68,0 35,0 59,0 44,0 69,0 55,0
0.05-0.002 6,0 5.0 19.0 16.0 21,0 15.0
< 0,002 10,0 30,0
29,0 60,0 22,0 40,0
Clase textura! FAa A FAa A Fa FAa
Agua retenida 33 kPa (%) 37 6
, 39.7 38,1 41.9 41,0 38,3
Agua retenida 1 .500 kP11 (%) 20,3 23,3 22.6 26.0 22,4 22,1
pHo¡;ua 7,7 8,1 7,9 79. 7,8 8.0
Carbono orgánico (%) 2.03 1.28 0,41 0,41 1,04 0,23
CaC03 equivalente (0'o) 8,5 9.6 1,6 1.9 2,5 15.2
Yeso (%) 0,71 0.00 1,09 1,08 1,13 1,09
Conductjvidad eléctrica (dS m'1) 33,7 9,0 9,0 10,8 9,6 9.0
Ca 1 1 7,3 26,8 24,6 24,8 22,6 25,4

Cationes disueltos Mg 123,4 17,7 21,8 34,1 42,6 32,1


(mmol. L'1) K 8,1 1,0 1,0 1,0 0,9 0,8
Na 190,1 62,5 62,9 78.9 63. 1 55.2
RAS 17,3 13,2 13,1 14,5 11,1 10,3
PSI (calculado de la RAS) 19.6 15,5 15,3 16,8 13,1 12,2
Saturación de agua (%) 77, 1 80,8 65,8 76,4 70,7 73.1
Ca 62,2 48,9 104,0 109,0 129,0 1 12,0

Extracción con acetato de � Mg 19.3 10,7 9,9 17. 1 14.8 12,2


(cmol. k.g'1) Na 16,1 8.78 6.78 9,65 5,91 5,83
K 6,59 1 .27 0.95 l.l7 0,65 0.81
Cationes intercambiables K 5,96 1.19 0,89 1.09 0,59 0.75
(cmole kg'1) Na 1,43 3.73 2,64 3,63 1,44 1,79
ClC (pH 7,0) (cmolc kg·) 33,0 31, 7 27.3 30,4 27,5 23,6
Saturación de bases (%) 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0
Saturación de Na (%) 4,3 11,8 9,7 11.9 5,3 7.6

Al igual que en la parte superior del valle, también en este sector se encuentran suelos en posición
de coluvios que han alcanzado un limitado desarrollo, de tal forma que deben considerarse como
suelos esqueletales. Los colores son variables, pero domina el matiz 5YR. Las clases texturales
son generalmente gruesas, tales como franco arenosas o arenosas y ocasionalmente, se puede
encontrar algún horizonte de clase textura! franco arcillo arenosa. El contenido de gravas
angulares y subangulares, entre 2 y 10 cm de diámetro, puede aJcanzar el 80% en volumen, con
una matriz abundante en grava fina. A diferencia de los suelos en igual posición en la parte
superior del valle, en este sector bajo todos los suelos presentan una fuerte reacción al HCI en
10dos los horizontes. La Unidad No Diferenciada Bramador (ClREN, 2007) clasificada
tentativamente como Torriorthenl constituye un ejemplo de esta clase de suelos (figuras 2-36 y 2-
!7. al fmal del Capítulo).

61
2.5 Suelos del Valle de Huasco

Este valle se encuentra entre los denominados valles transversales que se extienden dl.d los
cordones de la Cordillera de Los Andes y llegan hasta el Océano Pacífico. A la altura de 1<� 1.1ttdad
de Valienar el valle se ensancha en un conjunto de amplias terrazas a ambos lados del río (t'ICA­
HIDROCONSULT, 1980). En el Estudio Agrológico del VaJle del Rio Huasco (op., •t l se
definieron 12 Senes de Suelos, que se aprecian espacialmente en la Figura 2-39. En el l -;rudio
Agrológico del Valle de Copiap6 y Valle del Huasco (CTREN, 2007) se estableció una correlación
de la cartografia de tal manera que se identificaron 1 1 Series de Suelos y 6 Tipos Misceláneos de
Terrenos. En este capítulo se describen Agrupaciones de Suelos de acuerdo con la posición
fisiográfica que ellos ocupan, estableciendo los siguientes grupos:

Suelos aluviales recientes en terrazas de posición baja. Corresponden a suelos muy


estratificados y sin desarrollo de perfil que se encuentran en las márgenes de los rios. Son de
texturas gruesas y medias con pedregosidad en la superficie y a través del perfil; normalmente con
topografia plana. Dentro de este grupo se hizo la diferenciación entre los suelos con problemas de
drenaje y salinjdad, separándolos de aquellos sin saünidad y con buen drenaje. Los primeros se
ubican en sectores más bajos del valle; en cambio, los suelos bien drenados se ubican en la parte
alta y media del mismo. Se puede señalar que la Sene Huasco es representativa de los suelos
aluviales recientes de las terrazas planas o casi planas, cuyo sustrato está constituido por gravas
redondeadas con matriz arenosa o areno francosa. En el Cuadro 2-12 se presentan las principales
propiedades químicas y físicas de la Serie Huasco (CIREN, 2007).

Cuadro l-12. Propiedades fisicas, qutmtcas y fistco-quliDlcas de la Sene Huasco (CIREN. 2007)

Profundidad cm) 0-17 1 7 - 44 44-75


A At AC
Dtstribución 2-1 1,3 6.5 3.6
de panículas 1-0,5 5.4 9,0 11.1
por ta año 0,5-0,25 14,0 15.6 21,0
(%) 0,25-0, 10 19.5 18.9 24,8
0.1 0-0.05 12,4 12,2 1 1.9
2-0,05 52.6 62.2 72.4
0,05.(),002 30,9 20,5 15,8
< 0,002 16,5 17,3 1 1 .8
Clase textura! Fa Fa Fa
Agua retenida 33 kPa (%) 21.7 17,4 1 1 ,9
Agua retenida 1.500 kPa (%) 1 1,3 8.8 3.0
Carbono orgánico (%) 2,4 1,1 0,7
pH""'" 8,3 8,2 8,1
CnCOJ(%) 2.5 0,2 o.o
Conductividad eléctrica (dS n¡"1 0,6 0,7 1.2
Ca nd nd 1 1,3
Cationes
Mg nd od 2,6
e>.traíbles
1 K 0.5 0,4 0,1
(cmol.kg. )
0.4 02 01
19,2 18,0 14,2

Suelos de terrazas de posición alta. También dentro de este ¡,rrupo se hacen diferencias
derivadas de los rasgos morfológicos de los suelos. Así, se identifican los suelos de escasa
evolución. de texturas gruesas, abundante pedregosidad, de topografía plana y con buena
permeabilidad y drenaje. En segundo lugar, se identifican los suelos sobre tertel, estrata que se

62
encuentra a escasa profundidad. Algunos de estos suelos presentan además acumulaciones de ,

carbonato de calcio (Cuadro 2-13). En tercer lugar, se encuentran suelos con acumulaciones de
carbonato de calcio y sin tertel.

Cuadro 2-13. Propiedades físicas, qulmicas y fisico-qwmicas de un suelo de terrazas de posición alta con tertel,
Ventanas (ClCA-HlDROCONSULT, 1980)

Profundidad (cm 0-11 1 1 -23 23-42 42-60


A B
Disuibución 2-1 1.6 1,3 2,2
de partículas 1-0.5 4,3 5.0 5.4
por tamaño 0,5-0,25 11,2 1 1,2 10,4
(%) 0,25-0,10 20,2 18,4 17,7
0,10-0,05 20,2 20,3 19,8
2-0,05 57,5 56,2 55,5
0.05-0,002 25,4 25,4 29,4
< 0,002 17,1 18,4 15,1
e ase textura! Fa Fa Fa FAL
Densidad aparente (Mg m· ) 1,44 1,49 1.54
Agua retenida 33 kPa /%) 18,7 19,9 18.1
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 13,2 14.6 12,8
Carbono orgánico (%) 1,4 1.4 o.s
pH.,. 8,1 8,3 8,4
CaC01(%) 6,1 6.4 7,4
Conductividad eléctrica (dS 1,4 0,9 0,7
Ca nd nd nd
Cationes
Mg nd od nd
extraíbles
(emole kg'1) K 1,0 1,2 1,2
Na 0,3 04 0,4
CIC (pH 7,0) (cmo(.kg.) 12,5 13,4 1 1, 1

Suelos d e terrazas intermedias del interior del valle. Son suelos planos, de buen
drenaje. de texturas medias y finas, estratificados y de colores pardos y pardos rojizos. Se
consideran como los mejores suelos agrícolas del valle.

Suelos de Piedmoot. La mayor parte de las formaciones de piedmont se encuentran en los


sectores medios y altos del valle. En ellos se desarrollan suelos pedregosos, de texturas gruesas
que descansan sobre un sustrato aluvio-coluvial. Las pendientes son variables, pero no excesivas.

Los suelos del valle del Huasco presentan pocos problemas de salinidad. Solamente en algunos se
han descrito conductividades eléctricas elevadas, como oc urre en las cercanías de la
desembocadura del rio Huasco, en las Series Bellavista y Paona y en el área de Huantemé, en la
Serie Huantemé. La condición salina en estos sectores del valle se debe principalmente al aporte
de aguas de riego con un elevado tenor salino. influye también el alto nivel freático que se
presenta en esos sectores, encontrándose el agua, en algunos casos, sólo a 60 cm de profundidad
CCNR-INlA, 1995). En el Cuadro 2-14 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas
de la Serie Huantemé (CIREN, 2007).

63
Cuadro 2-14. Proptedades fisicas, químicas y fisico-quimicas de la Serie Huantcmé (CTREN, 2007)

Profundidad cm 0 - 13 13 - 29 29-45
A B Bz
Distribución 2-1 3,9 3,2 2,3
de partículas 1-0,5 12,5 10,0 7,0
por tamaño 0,5-0,25 16.3 13,6 12 .8
(%) 0,25-0,10 20,6 12,6 12,8
0,10-0,05 16,3 7,7 7,3
2-0,05 69,6 47,1 42 2
0,05-0.002 24,2 39,5 22,6
< 0,002 62 13,4 35,2
Clase textura! Fa F FA
Agua retenida 33 kPa (%) 12,3 19,0 23,8
Agua retenida 1.500 kPa (%) 5,5 13,4 17,7
Carbono orgánico (%) 0.3 0,2 0,2
pHa¡,..,. 7,7 7,6 8,0
CaC03(%) 0,0 0,1 0,8
Conductividad eléctrica {dS 96.2 69,6 33,6
Ca 3,4
Cationes
Mg 12
extraíb1es
K 1,2 2,3 1,7
(cmolc kg'1)
Na 26 4,0 3.8
ere (pH 7,0)(cmo4 kg·) 8.5 13,2 1 1.7

/""
. .I

,
.. ,

64
71 º 7ff' :-
· ·.

$w• d, Sv•lii

Bellrrista (BUT)
· Buena XaperllJWI (BXZ)
Cuancha (CVA)
ChaAar (C}ú\) · .-::
' Chandí,aqliÍn (CQN}
Freirina (J1lm)
Huantwmi (HfM)
Hnna ((HSC)
_: J;a C11mpaJ'úa (LCM)
Paaria � •••
0

PN
(

Tatua (IT.R)

·,\.
Ventana (VTN)

...__¡'----­
.. ,:

Figura 2-39. Series de Suelos del valle del rio Huasco (CNR-INIA, J Q9S).

65
Figura 2-1 . Pallachatas. Sector del Altiplano en las proxamidades del Lago Chungará y el Ponezuelo Tambo
Quemado. Ambos Estratovolcanes constiruyen algunas de las estructuras que evidencian el origen de los abundantes
sedimentos volcánicos del sector.

Figura 2-3 . Volcán Güallatire, próximo a la frontera con Bolivia. Sector Altiplánico, al sur-este de Chapiquilla.

66
Figura 2-5. Suelo esqueletal de alrededor de 20 cm de profundidad sobre roca ácida. del tipo liparita. La ausencia de
vegetación en estos suelos de regiones desérticas se puede apreciar por la falta de raíces en el perfil. (Litbic
Ustorthent). Región de Antofagasta.

Figura 2-6. Paisaje del desierto pedregoso, con los suelos esqueletales, sobre roca, con ausencia cast total de
vegetación.

67
Figura 2-7. Cráter adventicio en las proximidades de La Pampa del Avestruz. Camino de Calama a OllagOe. La
superficie está constituida por bloques y bombas volcánicas. esencialmente de composiCIÓn liparitica

Figura 2-8. Suelo de ongen volcánico, constituido por una sucesión de estratos provenientes de diferentes tefras
(tanto de cenizas como de Japillis). Los estratos están constituidos por materiales de diferente composición y
diferente granulometría, con limites abruptos entre ellos. Pampa del Avestruz, camino de Calama a Ollagüe.

68
Figura 2-9. Suelo ubicado entre Putre y Parinacota, en una Pampa de sedimentación de origen volcánico. La
vegetación del área es del tipo coirona1, moderadamente densa, por lo cual ha sido posible la acumulación de materia
orgánica en el horizonte superficial Aun cuando este contenido es escaso. ha sido suficiente para bajar el croma de
este horizonte. El subsuelo está constituido por una capa de cenua ácida del tipo pómez, algunos fragmentos de los
cuales se pueden apreciar en el horizonte A.

¡:igura 2-10. Paisaje del suelo ubicado en una planicie de sedtmentación de origen volcánico. entre Putre y
''arinacota.

69
Figura 2-12. Bofedal de Huasco, al interior de Pozo A !monte. Corresponde a una cuenca con drenaje restringido, en
la cual se han acumulado sales y algo de carbonatos. Sostiene una vegetación que se mantiene a través del año y que
penrute su uso con fines ganaderos (camélidos).

Figura 2-13. Perfil del suelo del Salar de lluasco, marcadamente estratificado, con abundante materia orgánica en

los honzontcs superficiales y rasgos de acumulación de sales. En los hori?omes inferiores se observa el color gris
producto de los empobrecimientos rcdox, caracterlsticos de los suelos de drenaJe pobre.

70
Figura 2-14. Bofedal de Parinacota. Se observa una rica cubierta vegetal y el nivel freático en la superficie o muy
próximo a ella.

Figura 2-15. Horizonte superficial y parte del honzonte subsuperficial del suelo orgáruco en el bofedal de
l'armacota. La mayor parte de las raíces están v1vas. Solamente en los boritontes más profundos ( 1 m
,roximadamente) la descomposición de los sedimentos orgánicos es completa.

71
Figura 2-16. PIUS8JC de un sector del bofcdal de lsloga. Se observan algunas manchas superficiales de
concentraciones salinas.

Figura 2-17. Perfil del suelo en el bofedal de lsluga. Los colores grises indican la presencia de procesos de
reducción por periodos prolongados. A diferencia de otros bofedales, en este caso no existe una gmn acumulación de
materia orgánica. Se trata de un suelo mineml, con mayor contenido de materia orgáruca que los suelos de desierto.
Correspondería a un Halaquepts/Endoaquepts.

72
Figura 2-18. Valle del Río Lluta. Los suelos de origen aluvial y de escasa evolución. en el fondo del valle, son de
granulometría variable aunque dominan las texturas gruesas. El límite entre el fondo del valle que es la ;rona de
cultivo y la zona de desierto propiamente tal, es prácticamente abrupto.

Figura 2-19. Río Caquena. En los sectores bajos del reheve y próximos al cauce del río se han producido procesos
1.1� paludlzación generando suelos orgánicos o minerales con alto comenido de materia orgánica. La vegetación verde
1e se mantiene gran parte del año sustenta el ganado de pequeños agricultores.

73
..
Figura 2-20. Paisaje característico de las denominadas llanuras depositacionales.
i
,r
La superficie de los suelos se
encuentra cubierta con abundantes gravas de composición variada, tanto angulares, como subangulares. Los suelos,

..
en su mayoría corresponden al concepto de esqueletales y en escasas situaciones se puede diferenciar con claridad
un horizonte B débilmente estructurado. También es posible encontrar suelos estratificados, producto de los
sucesivos depósitos de materiales eólicos, aluviales o lacusrrinos.

Figura 2-21. Suelo característico de las llanuras depositacionales, en el cual se evidencia la estratificación de los
materiales. El suelo presenta un perfil A - C.

74
Figura 2-23. Paisaje del Salar de Pintados. La superficie constuuu.la por una
costra salina compactada y cementada ha sido descrit:1 como lo superficie de un
m11r ngítado. Los tamarugos del segundo plano han sido plantados haciendo
unos hoyos profundos, en los cuales las plantas se han asentado sobre
las capas inferiores por debajo de la costra salina.

Figura 2-25. Perfil del suelo en el Solar de Pmtados La costra superfic1al tiene
aproximadamente 30 cm de espesor. Debajo de ella hay una sucesión de
estratos de diferente naturaleza granulométrica y diferente composición. Se
puede observar el buen desarrollo del sistema radical por debajo de In costra
Figura 2-24. Paisaje de un sector del Salar de Zapiga. Cabe hacer notar el
-.l salina.
Vl
excelente estado de la vegetación.
....¡
"'

Figura 2-27. La Cordillera de la Costa cae abruptamente al mar en forma de


acantilados de varios cientos de metros de altura. en la base de los cuales se
forma una sucesión continua de coluvios. Constituye una estrecha franja litoral,
fonnada por depósitos sedimentarios que dan origen a escasas y as\gostas playas
de rodudos y arenas. Esta franja litoral t>S discontinua, de modo que hay sectores
en los cuales la Cordillera cae directamente al mar.

F gura 2-29. En los sectores donde la Cordillera llega dsrectamcntc al mar, sin
i

una transición de terrazas, y en ecosistemas de Matorral Mcditemínco, Jos


F gura 2-28. Cordillera de la Costa en las cercanías de Taital. El relieve es muy
i
suelos, generalmente, presentan un horszonte A delgado. producto de la
escarpado, las pendientes son superiores a 20%, con pedregostdad superficial
acumulación de restos vegetales. Los suelos son delgados sobre un �usrrato
abundante y con afloramtentos rocosos comunes. La litologla dominante
formado por gravas angulares que pueden ocupar d SO% en volumen
corresponde a grantto rosado. andesita y gneiss granítico.
Figura 2-30. Perfil de la Serie Amolanas, con abundante pedregosidad en el perfil que, en algunos casos,
puede llegar al 70%.

Figura 2-3 1. Patsaje de la Serie Amolanas en posición de coluvto, que muestra pendienteS aproxtmadas
� � a 5%.

77
Figura 2-32. Perfil de la Serie Apacheta. Suelo estratificado, en el cual se intercalan horizontes de clases
texturales franco arcillo arenosas, con estratas arenosas e incluso estratas de gravas redondeadas y
facetadas. Los horizontes de clases texturaJes más finru; presentan buena estructuración. por lo que se
pueden considerar como horizontes B.

Figura 2-33. Paisaje característico que domina en todos los sectores donde se encuentra la Serie
Apacheta en el valle de Copiapó.

78
figura 2-34. Perfil de la Scne Ramadilla. Corresponde a un suelo profundo. estratificado. cuyo� colores
\arian entre los matices IOYR. 7.5YR y SYR y cuyas clases texturalcs son dominamementc finas. esto es
franco arcillo limosa. franco arcillosa y arcillosa. Presenta una estrata de matcña orgánica de color negro
( 1 OYR2/l ). la que se presenta en numerosos otros suelos de este sector.

Fh:ura 2-35. Paisaje de la Serie Ramadilla en un sector con olivos. entre la ciud<�d de Copiapó y Caldera.

79
figura l-36. Unidad No Diferenciada Bramador. El color dominanlt: del suelo es pardo roJizo (5YR
4,3), de clase textura! franco arcillo arenosa. Las gravas angulares de 2 a 1 O cm de diámetro ocupan un 70
a 80% del volumen. fuerte reacción al ác1do clorhídrico.

Figura 2-37. Sector de coluvios asociado a la Unidad No Diferenciada Bramador, en las proximidades de
Chamonate en el valle de Copiapó.

80
CAPÍTUL0 3
Suelos de la Zona Á rida Semiárida
(Desde 29° LS hasta 32° LS)

Ca,anova, M., Seguel, O. Luzio, W. 2009. Suelos de la Zona Árida y Semiárida (Desde
29" l e;; hasta 32° LS). pp: 8 1 - 123. In: Suelos de Chile. (Luzio. W . Editor). Universidad de Chile.
.

81
3.1 Características generales de la Zona

En esta Zona las precipitaciones son de mayor magnitud que en la Zona Desértica. En el valle del
río Elqui (extremo norte de la Zona) las precipitaciones anuales son de 100 mm, con una
variabilidad de ± 60 mm; mientras que en su extremo sur (32° LS) son de 250 mm, caracterizada
también por una gran irregularidad en su distribución (Bischoff-GauB et al., 2006).

En este sector de la Cordillera de Los Andes se ha documentado una fase húmeda hace 30.000
aftos, seguida por condiciones áridas en todo el Norte Chico durante el Last Glacial Temperature
Minimum (LGTM) hace 1 9.000 años. Después del último Periodo Glaca
i r, el clima se volvió más

árido y cálido, manifestándose en una cubierta vegetacional menos densa y un incremento de


lluvias intensas, lo que condujo a una severa erosión del suelo y a la activación de abanicos
aluviales. Estas condiciones de aridez prevalecieron hasta mediados del Holoceno. Existen datos
que señalan que la semiaridez actual prevalece desde hace aproximadamente 3.000 años, aunque
con condiciones geoecológicas semiestables, influenciadas crecientemente por la actividad del
hombre (Veit, 1993).

Tal como en la Zona Árida, a nivel transversal ocurren cambios fisiográ:ficos que inducen
condiciones diferentes según la altitud. En el Cuadro 3-1 se incluyen las fajas altitudinales
principales.

No obstante estas condiciones de semiaridez, el Parque Nacional Bosque Fray Jorge, inserto en la
Cordillera de la Costa de esta Zona (Figura 3-1), posee la singularidad topoclimática de
concentrar condiciones atípicas de humedad para esta latitud, producto de una aceleración de los
procesos de condensación, al enfrentarse las masas de aire oceánicas con dicho cordón, que las
obliga a elevarse y concentrar su contenido de agua; ello permite la mantención de un ecosistema
vegetacionalmente azonal (Novoa-Jerez et al., 2004). Se observa en consecuencia, la persistencia
de sectores de bosque lluvioso, rodeados de una matriz de vegetación xerofitica (del Val et al.,
2006).

Cuadro 3-1. Fajas geoecológicas altitudinales a 30° LS (Viel, 1993)

Altitud {msnm) Características


5.300 Limite de las nieves perpetuas, muy ligera glaciación en exposiciones sur-este
5.100 Límite inferior de permafrost continuo
4.450 Límite de vegetación
4.200 Umite inferior de permafrost discontinuo
Faja andina con movimiento de suelo superficial, reptación seca, erosión de suelo, suelo
3.500-4.200
superficial congelado v suelos relictos bajo 4.000 msnm
Faja subandina, con movimiento de suelo superficial pero sin congelamiento, frecuentes
•. 900-3.500
suelos relictos
Faja superior desértica, fuerte erosión de suelos, suelos relictos casi completamente
800-1.900
erosionados (800-1.400 msnm)yocurrencia aislada de costras calcáreas
Faja inferior desértica, influenciada por neblinas costeras, de relativa estabilidad
< 800
morfodinámica condiciones naturales, suelos relictos frecuentes dunas

83
Figura 3-1 Ubicación del bosque relicto del Parque Nacional Fray Jorge en el sector costero de la Zona.

En esta Zona no se presentan los rasgos fisiográficos que caracterizan longitudinalmente a todo el
país, es decir, se rompe la continuidad de Cordillera de la Costa - Graben Central - Cordillera de
Los Andes. Tampoco se han descrito evidencias de volcanismo activo, en contraste con lo que
ocurre tanto al norte como al sur de eUa.

Varios autores, citados por Pouget et al. ( 1996), distinguen cuatro rasgos fisiográficos
princtpales en esta Zona. Las planicies litorales, representadas por una angosta faja cuya
extensión fluctúa entre algunas centenas de metros hasta un máximo de 5 km, constituida por
antiguas terrazas de abrasión marina. Ln CordiJJera de la Costa, integrada por materiales
paleozoicos y mesozoicos y por un complejo granítico de edad jurásica, que se extiende a todo lo
largo del litoral, alcanzando una altura de 900 a 1.000 msnm. Las serranfas interiores, de altura
variable entre 800 y 1.000 msnm, las cuales se ven interrumpidas por planicies de topografia más
o menos ondulada y la Cordinera de Los Andes que constituye el principal elemento
morfológic-o. con un ancho promedio de 35 km y alturas de 2.200 a 5.000 msnrn, constituida
principalmente por afloramientos mesozoicos y cenozoicos (Figura 3-2).

84
·- -
. 1:.-. tb y......_....... o ·-,..­ 111 -dd-

o- o '-Jto<Id lloMr1w D c..-..


D y..,.._• .- ....- D u..- o -.... - D u......
- ---

Figura 3-2. Fisiografia general de la Zona Árida y Sem1árida de Chile en el valle del rlo Limarí (Pouget et al., 1996).

Desde el punto de vista geomorfológico, las serranfas interiores se ven interrumpidas por los
valles de orientación este - oeste, en los cuales se encuentran dos clases de suelos dominantes: los
suelos de origen aluvial y los de origen coluvial. En los lomajes y cerros que jalonan estos valles
� encuentran suelos residuales desarrollados directamente a partir de la meteorización de las
rocas graniticas u otras relacionadas, que constituyen el sustrato geológico dominante del sector.
En general, los suelos presentan mayor desarrollo que en la Zona Desértica, lo cual se evidencia
t-�r la presencia frecuente de horizontes de diagnóstico, tales como cámbicos y argilicos, cuyo
cngen no se encontraría en procesos pedogénicos actuales. La mayor parte de la agricultura se
des1rrolla en los sectores más planos de terrazas aluviales y, cada vez más, en los sectores de
col u'10s y laderas de cerros de estos valles estrechos, tales como Elqui, Limarí, Hurtado, Choapa,

85
lllapel y Quilimarl. Se considera que esta actividad antropogéoica sería la respoos.lblc de los
intensos y extensos procesos de erosión que afectan a toda la Zona.

..
A través de la segmentación del paisaje, se pueden considerar elementos identificables d�o el que,
de alguna manera u otra, se asocian a características pedogénicas diferentes. De este modo. la

dmribución de los suelos se puede asociar en forma más lógica a su paisaje y además. e::. posible
explicar algunos de sus rasgos morfológicos. Consecuentemente, en este Capitulo se cons1dcrarán
las zonas interiores. los vaUes y las zonas costeras.

3.2 Suelos de las zonas interiores

El conocimiento de los suelos de estas áreas es mu}' limjtado, dado que la mayor pane de los
estudios edáficos se han realizado en los valles transversales, donde se lleva a cabo la casi
totalidad de la actividad agrícola. El Régimen de Humedad de los Suelos continúa siendo arídico
y el Régimen de Temperatura térmico, debido a que en estas áreas la influencia marina es mlmma
y, por lo tanto, la ruferencia entre la TMV y la TMJ es superior a 6°C. El relieve es de cerros y
lomajes, interrumpido solamente por los valles que atraviesan con una orientación preferencial E­
O y que se describirán más adelante Este relieve se ha caracterizado como moderadamente
ondulado (8 a 15%) y de lomajes (20 a 30%), entre los cuales se encuentran depresiones que no
alcanzan a constituir valles en sentido geogrático-geomorfológico.

En los valles y en posición de p1edmonts, conos aluviales y terrazas, la mayor parte de los suelos
exhibe un perfil de tipo A-C. En otras posiciones onduladas de lomajes y de píedmont, se han
desarrollado suelos cuyo material de origen es una roca granítica con diferentes grados de
meteorización. La mayor parte de éstos evidencia un desarroUo pedogénico que alcanza sólo a la
formación de un horizonte cámbico. En muy pocos suelos se han descrito horizontes argiltcos,
cuya presencia señala una mayor evolución pedogénica. En sectores más localizados, hay suelos
de escaso desarrollo (perfil A-Ck), formados a partir de (o sobre) materiales calcáreos.

Los suelos de menor desarrollo pedogénico ocupan posición de abamcos aluviales o terrazas
recientes en las laderas de los valles. El horizonte A, de clase textural comúnmente areno francosa
y más excepcionalmente franca, no alcanza una profunrudad superior a Jos 50 cm. Su color varía
entre el pardo oscuro (7.5YR4/3) y el pardo grisáceo oscuro ( 1 OYR3/1 ). Su estructura es de
bloques angulares y subangulares débiles. El límite con el horizonte e es generalmente abrupto,
señalando con esto una discontinuidad en los procesos de formación de los suelos o bien en los
procesos de sedimentación. El horizonte e puede estar constituido por una secuencta de estratas
de granulometria gruesa (arenas y gravas) o bien solamente por gravas redondeadas o
subredondeadas con arenas intersticiales. Estos suelos, de limitado desarrollo, se encuentran en
diferentes clases de pendiente, desde posiciones planas hasta lomajes, donde ocurren procesos de
erosión moderada y, en algunos casos, severa. Aun cuando se trata de suelos que tienen en común
el escaso desarrollo del perfil sobre un sustrato de gravas y arena, las fuertes variaciones en su
topografia hacen que posean aptitudes muy diferentes. De esta manera, las Fases de menor

..
pendiente pueden presentar Clase m de Capacidad de Uso, en cambio las Fases que se encuentran
en penruentes mayores y con procesos de erosión activos, se han identificado en Clase VII.

Los suelos desarrollados a partir de graruto tienen una profundidad que varía entre 60 y 130 cm
hasta la roca, característica que está asociada principalmente a la intensidad de los procesos de
erosión que, en este sector, son moderados a severos. El relieve es moderado a ligeramente

86
ondulado (Figura 3-3, al final del Capítulo). La clase textura! del horizonte superficial puede
variar entre franca. franco arenosa y franco arcillo arenosa, asociada con variable cantidad de
gravas. Dominan los matices 5YR y 7.5YR con croma/valor variables entre 3/2 hasta 4/4. En
profundidad, se incrementa el contenido de arcilla. de tal forma que los horizontes B pueden
llegar a tener clase textura! franco arcillosa e incluso arcillosa. La estructura es generalmente de
bloques subangulares medios y fuertes, con una buena penetración radical. Aun cuando existe un
incremento en el contenido de arcilla hacia los horizontes subsuperficiales, esta característica no
estaría asociada a procesos pedogénicos que implican la translocación de arcillas (ausencia de
cutanes), sino más bien correspondería a procesos pedogénicos de alteración sin iluviación; por lo
tanto, todos los suelos descritos en estas situaciones presentan un horizonte cámbico, Bw. La
transición entre el horizonte B y el C, generalmente es gradual, dependiendo del grado de
meteorización que haya alcanzado La roca subyacente; en muchos casos este horizonte de
transición es rico en I111c1Í i11o, es decir fragmentos de cuarzo, feldespatos y minerales
ferromagnésicos provenientes de la meteorización de la roca granítica. El color de este horizonte
'
puede ser de un amarillo parduzco (1 0YR6/6), pardo amarillento ( l OYRS/3.5) o bien pardo fuerte
(1.5YR516) y su clase textura! es generalmente gruesa: franco arenosa gruesa o franco arcillo
arenosa gruesa. Se les ha clasificado como Haplocambids (Figura 3-4, al final del Capítulo). En
el Cuadro 3-1 se presentan Las principales propiedades fisicas y químicas que caracterizan a la
Serie El Tambo, considerado un suelo representativo de este grupo. Otros suelos de
características similares y con un desarrollo pedogénico semejante lo constituyen las Series de
Suelo Cerrillos de Rape! y Chillepín.

En estas zonas interiores también se pueden encontrar suelos que presentan una mayor evolución,
ev1denciada por la presencia de rasgos de iluviación y el claro desarrollo de un horizonte Bt.
Generalmente están ubicados en posiciones de piedmont o de tipo aluvio-coluvial, con pendientes
que pueden variar desde ligeramente ondulada (2 - 5%) hasta moderadamente ondulada (8 - 1 5%).

Son suelos desde ligera a moderadamente profundos, es decir, se pueden encontrar perfiles entre
50 y 90 cm de profundidad hasta el sustrato, el cual es, generalmente, un conjunto de gravas y
botones o bien roca granítica con diferentes grados de meteorización. El sustrato de algunos
suelos constit ido de gravas y botones también puede presentar diferentes grados de alteración.

Estos suelos constituyen un grupo relativamente homogéneo pues, morfológicamente, presentan


pocas variaciones. Las clases texturales son arcillosas a través de todos los per les y sólo en
algunos horizontes superficiales puede ser franco arcillosa. La estructura es de bloques
subangulares medios y gruesos fuertes y, en algunas ocasiones, puede ser prismática. Llama la
atención el matiz de todos los horizontes de todos los suelos, que varía desde 5YR hasta lOR, es
decir, entre el pardo rojizo oscuro hasta el rojo muy oscuro. Este rasgo morfológico constituye
una característica relevante, que señala al menos una importante segregación de óxidos de Fe, por
tanto, la existencia de procesos pedogénicos intensos a partir de la meteorización de los
materiales parentales. Las raíces son escasas y finas y decrecen notoriamente hacia los horizontes
más profundos. La mayoría de los suelos de este tipo se han descrito con reacción al HCl, de débil
a moderada y, como es el caso de la Serie Combarbalá (Cuadro3-2), el CaC01 se incrementa eo
profundidad. Además de la Serie Combarbalá, se incluyen en este grupo a las Series Pintacura
(figunis 3-5 y 3-6 al final del Capítulo) y Tahu:inco. De acuerdo a su clasificación taxonómica
perte-necen a los Grandes Grupos Haplargids y Paleargids.

87
Cuadro 3-1. Propiedades fisicas., químicas y físico-químicas de la Serie El Tambo (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0- 11 1 1 -21 21 - 32 32-80


Distribución de partfculas por tamaño (o/o) Áp B¡ Bz BC

2-1 0,3 0,1 0,2 0,2


1-0,5 0,7 0,5 0,7 1,0
0,5-0,25 4,1 4,0 4,9 6.6
0,25-0, 1 0 19,1 21,7 27,1 20,8
0,1 0-0,05 31,5 26,5 33,3 39,1
2-0.05 55,8 52,8 66,1 67.7
0,05-0,002 29,4 32,2 25.33 25.5
< 0,002 14,8 15,1 8,6 6,7
Clase textura] Fa Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m"3) 1,26 1,30 1 '15 1,20
Agua retenida 33 kPa (%) 22.7 20,6 1 1 .8 9,1
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 12,6 1 1,4 6,5 5,0
Carbono orgánico (%) 1,67 1,10 0,64 0,46
pH.lll"' 7,20 7,63 7,81 8,03
Conductividad eléctric-a (dS m·') 4,9 1,0 0,6 0,5
Ca 42,0 5,4 3,1 2,1
Iones solubles (extracto Mg 14,7 1,7 1,0 0,6
de saturación)
K 1,5 0,2 0,1 0,0
(mmoi+/L)
Na 10,3 2,9 2,3 2,1
Suma (mmol. L"1) 68,5 10,3 6,4 4,9
C01 (mmol. L"1) 0,0 0,0 0,0 0,0
HC03 (mmolc L"1) 6,0 3,8 1,2 2,0
Cl (mmoi,L.1) 13,2 15
, 0,5 0,4
S04 (romo!. L"1) 21,0 1,8 2,2 1,4
Saturación agua (%) 43 41 36 36
Ca 15,9 13.5 11,0 9,8
Cationes extraíbles Mg 3.31 2.68 2,32 2,04
(cmol, kg.1) K 0,70 0,31 0,14 0,10
Na 0,64 0,35 0,32 0,32
Suma (cmol, kg"1) 20,59 16,81 13,76 U,23
CJC (pH 7,0) (cmolc kg.1) 19,6 18,7 16,0 14,3
Saturación básica pH 7,0 (%) 100,0 90,0 86,0 85,0

88
Cuadro 3-2. Propiedades f'ISicas, químicas y fisico-químicas de la Serie Combarbalá (CJREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-25 25--'5 45-90


Distribución de partículas por tamado (%)
1-0,5 3,7 3,1 1,4
0,5-0.25 4,9 4.7 3,6
0,25-0,10 6,2 4,0 3,0
0,10-0,05 17,6 12,1 10,0
2-0,05 32.6 23,9 18,0
0,05-0,002 24,0 25.0 25,3
< 0,002 43,4 51,1 56,7
Clase textura! AL AL A
Densidad aparente (Mg m·3) 1,76 1,95 1,95
(
Agua retenida 33 kPa %) 33,1 37,1 40,2
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 17,9 26,8 26,5
Carbono orgánico (%) 1,51 0,75 0,46
pHa¡,,... 7.51 7.93 8,09
1
Conductividad eléctrica (dS m' ) 1,1 0,4 0,5
CaC03 equivalente(%) 0,9 1,8 3,3
Iones solubles Ca 8,7 2,7 1,7
Extracto de Mg 1,7 0,5
1 0,6
Saturación (mmo� L- )
K 0,5 0,1 0,1
Na 1,4 1,5 3,3
Suma (mmo� L-1 ) 12,3 4,9 5,5
C03 (mmol� L'1) 0,0 0,0 0,0
HC03 (mmo�L-1 ) 5,6 2,0 2,0
C1 (mmo�L'1 ) 3,0 0,1 0,3
1
S04 (mmolcL- ) 2,3 1,9 2,8
Saturación agua(%) 68 77 78
Cationes extraíbles Ca 32,9 42.4 26,0
(cmol� kg-1 ) Mg 5,11 7,71 4,61
K 1.32 0.85 0.31
Na 0,30 0,53 0.74
Suma (cmolc kg'1) 39,7 51,4 31.6
ClC (pH 7,0) (cmolc kg'1 ) 38,7 43,0 47,0
Saturación básica pH 7,0 (%} JOO,O 100,0 67.0

E último grupo de suelos que se podría identificar en estas zonas interiores corresponde a suelos
c.esarrollados a partir de (o sobre) materiales calcáreos. No existen estudios pedogénicos, por lo
t.mto no es posible definlr con certeza los procesos que han ocurrido en estos suelos para
ee�erminar si los materiales calcáreos subsuperficiales han actuado como materiales parentales o
Estos suelos ocupan sectores del paisaje desde suave a moderadamente ondulados hasta de
(20 a 30% de pendiente) e incluso de cerros (30 a 50% de pendiente). Su distribución
como bastante localizada, en sectores próximos a Punitaqui y también en las cercanías de
.ma (Figura 3-7, al final del Capítulo). En los sitios descritos son frecuentes los afloramientos

89
rocosos y la abundante pedregosidad superficial, además de una erosión de tlujo precanalltado
fuerte. Se trata de suelos que, generalmente, presentan un desarrollo pedogénico muy incip1ente.
con perfiles del tipo A - C (Ck); esto significa que no existe transición entre el sofum y el
horizonte cálcico; en otros casos puede desarrollarse un horizonte Bw. Las clases texturalt.s son
finas, franca o franco limosa en superficie y :franco arcillosa o franco arcillo limosa en los

-
horizontes más profundos. Los colores de los horizontes superficiales y subsuperficiales son pardo
oscuro o pardo amarillento oscuro, en los matices 7.5YR y 1 OYR, basta gris claro (1 0YR7/2) en el
horizonte calcáreo. Las raíces son comunes y disminuyen con la profundidad. Estos suelos son de
escasa importancia agrícola, debido a su limitada distribución y fuertes pendientes; en su mayor
parte se encuentran con praderas naturales. Dependiendo de las pendientes, las Clases de
Capacidad de Uso pueden variar entre m y Vll. En el Cuadro 3-3 se presentan las principales
propiedades de la Serie Marquesa, que se ha tomado como ejemplo de este grupo de suelos y que
se ba clasificado como Typic Haplocalcid.


Cuadro 3-3. Propiedades tisicas, químicas y fisko-quimicas de la Serie Marquesa (erREN. 2005a)

Profundidad (cm) 0-32 32- 100

Distribución de partículas por tamaño (%)


2-1 1,5 2,1
1-0,5 3,4 4,6
0,5-0,25 3,7 3,8
0,25-0,10 4,5 4,6
O,l0-0,05 18,5 9,2
2-0,05 31,6 24,3
0,05-0,002 54,1 46,4
< 0,002 14,3 29,3
Clase textural F FA
Agua retenida 33 kPa (%) 26,7 19.7
Agua retenida 1500 kPa (%) 15,5 l l,5
Carbono orgánico (%) 0,8 0,2
pH- 8,0 8,3
Conductividad elél.'trica (dS m·1) 1,1 2,4
CaC03 equívalente (%) 0,9 33,5
Ca

Cationes extraibles Mg
(emol. kg.1) K 0,2 0,1
Na 0,6 1.7
CTC (pH 7.0) (cmol, kg-1 ) 15,2 14,8

90
3.3 Suelos de los Valles

Si bien es cierto que estos valles pueden presentar diferencias en sus caracteristicas
geomorfológicas y edáficas, existen algunos patrones que les son comunes y que se repiten a lo
largo y ancho de ellos. En esencia, hay dos grandes clases de suelos que se asocian a la formación
donde se encuentran: los desarrollados a partir de sedimentos aluviales, generalmente en la
posición de las terrazas de Jos ríos y los suelos de origen coluvial, asociados a los conos de
deyección o coluvios que se proyectan desde las laderas de los valles hacia las posiciones más
bajas. Lógicamente que entre ambas situaciones características existen variaciones,
combinaciones y superposiciones de ellas.

3.3.1 Valle del río Elqui

En los sectores más altos del valle el relieve es muy escarpado, con fuertes gradientes. Las
montañas superan los 3.500 msnm y son frecuentes las cimas superiores a 5.000 msnm. La
cadena montañosa está cortada por valles profundos, la mayoría de origen glacial o glaciofluvial.
...
Las pendientes muy pronunciadas, la escasez de vegetación y exposición a fuertes vientos,
Jeterminan que estas áreas sean muy susceptibles a fenómenos de remoción en masa, por lo que
son frecuentes las avalanchas y los desprendimientos de materiales superficiales que se
encuentran sueltos. En las áreas de menor pendiente, donde es posible la acumulación de agua, se
-;311 formado suelos identificados como humedales, vegas de altura o veranadas y que están casi
:>ennanentemente inundados. Según Cepeda y Novoa (2008) en los llanos esteparios, Jos suelos
�"'ll delgados (menos de 40 cm) con bajo contenido de MO (0,2%).

suelos más representativos de este valle, en sus sectores medios y bajos, se encuentran en
;JOStción de terrazas aluviales recientes o remanentes, en posiciones más elevadas en el paisaje
Figura 3-8, al final del Capítulo). En casos especiales, se han descrito en terrazas claramente más
antiguas, en las cuales los suelos ban tenido una evolución mayor. Como en muchos casos estas
teTiaZas se apoyan en las laderas del valle, es posible que algunos de los suelos de origen aluvial
se confundan con coluvios o piedmonts que, en general, tienen pendientes más elevadas. No
• :tante, continúan manteniendo las características aluviales a través de sus perfues. Estos
{.;.;.timos son generalmente de tipo A-C y, en otros casos, pueden tener una evolución ligeramente
;:::yor
:¡ que se manifiesta por la presencia de un horizonte cámbico, con perfiles A-B-C.

los suelos de origen aluvial y que se encuentran en las terrazas bajas son delgados y muy
de�gados (menos de 40 cm de profundidad); tienen un horizonte A con una clase textura) entre
:=mea y franco arenosa, con estructura de bloques subangulares medios débiles; el color
=eueralmente es pardo a pardo oscuro en los matices lOYR y 7.5YR. Su límite inferior con el
�-izonte C es generalmente abrupto. Este horizonte C está constituido por gravas y piedras
re-joodeadas que alcanzan al 80% en volumen, con arena y grava fina intersticial. También, puede
cs::ar constituido por una sucesión de estratos de arenas de diferente granulometría, mezcladas con
-;ravas tinas y medias, redondeadas. Los suelos son de topografía plana y sólo algunas Fases
�n ser ligeramente onduladas. Debido a sus características morfológicas, son de buen drenaje
con buena aptitud para cultivos de la zona; a la mayoría de ellos se les han asignado Clases ll y
m de Capacidad de Uso y solamente algunas Fases se han ubicado en Clase VI a causa de su
,;scasa profundidad y excesiva pedregosidad. Ejemplos de estos suelos de mínimo desarrollo son

Series Chapilca (Torriortbent) y Puclaro (Torrifluvent).

91
Otros suelos. en la misma posición geomorfotógica. pero con mayor grado de evolución. tí�nc.>n un
perfil A - B - C y una profundidad de 60 a 90 cm sobre un sustrato de arenas y gravas qu\: )�!Upan
el 80% en volumen. El horizonte superficial posee una clase textura! que puede variar entn. frnnco
arcillo limosa y franco arcillo arenosa, con estructura de bloques subangulares bien desarrol"tdos
Los colores se mantienen en el pardo oscuro en los matices IOYR y 7.5YR. En el hontome B.
generalmente se incrementa el contenido de la fracción fina, al mismo tiempo que disminuye la
cantidad de raices fmas. El contenido de CO no alcanza el 2% en el horizonte A y s1cmpre
disminuye en profundidad hasta valores de 0,1%. La CE siempre es más elevada en los hon:wntes
superficiales y disminuye en profundidad, desde 1,4 a 0,6 dS m·1• El contenido de carbonatos es
bajo y sólo se presenta en algunos suelos. A la mayoría de las Fases de Las Series reconocidas se
les han asignado Clases de Capacidad de Uso entre 11 y W y solamente en algunos casos. a causa
de un drenaje imperfecto, se les ha asignado Clase JV. Las Series características de este grupo son
Alfalfares. las Palmeras de Coquimbo y Altovalsol (Typic J laplocambid). En el Cuadro 3-4, se
muestran las principales propiedades de este último suelo.

Cuadro 3-4. Propiedades físicas, químicas y fisico-químicas de la Sene Altovalsol (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-19 19-36 36-62

Distribución de pardculas por tamaño (%) Ap u.

2-1 3,7 7,2 8,3


J-{).5 8.7 12,6 13,3
0,5-0,25 8,8 9,5 1 1 ,7
0,25-0,10 12,5 9,8 1 1,6
0,10-0,05 16.0 9,7 9,4
2-0,05 49.9 48.8 54.3
0,05-0,002 27,6 29,2 14,3
< 0,002 22,5 22,0 31,4

Clase textural FAa F fAa


Dens1<lad aparente (Mg m'1) 1,6 1,6 1.5
Agua retenida 33 kPa (%) 25,6 25,2 27.3
Agua retenida 1.500 kPa (%) 15.5 1 8,3 17,7
Carbono orgánico (%) 1,5 0.7 0,4
pHog,. 8.1 7,8 8,1
Conductividad eléctrica (dS m'1) 0,9 0,6 0,6
CaC03 equivalente (%) 0.0 0,0 0,6
Ca 14,8 18,3

Cationes exlraíbles Mg 2.9 4.3


1
(cmol., kg- ) K 0,7 04
, 0,4
Na 0,6 0,8 1,2
Suma (cmol., kg'1 ) 19,0 23,8
CIC (pH 7,0) (cmolc kg.1 ) 19,1 24.2 20.8
Saturación básica pH 7,0 (%) 99,0 98,0

92
3.3.2 Valle del río Limari

Bajo este título se incluyen los vaJJes del río Hurtado y el río Grande, además del Limarí
propiamente taL Al igual que en los otros valles de la Zona, se encuentran suelos con diferente
grado de desarrollo, con perfiles de tipo A-C, A-B-C y A-Ba-C, además de una sola Serie con
características vérticas y un claro horizonte Bss.

Los suelos con perfiles A-C ocupan posiciones de terrazas aluviales recientes o bien de coluvios
con pendientes muy variables, desde 1-3% hasta 15-20% y con buen drenaje. Son suelos
ligeramente profundos, de menos de 60 cm, con un sustrato de gravas y piedras angulares y
subangulares que ocupan un 40% en volumen y una matnz que puede ser hasta arcillosa. Las
clases tex:turales son finas, entre franco arcillo arenosa a franco arcillosa y la estructura es de
bloques subangulares en los horizontes superficiales y subsuperficiales y sin estrucrura (maciza)
en los horizontes en contacto con el sustrato. El contenido de MO es siempre bajo: 1.6% en el
horizonte superficial y 0,2% en los horizontes inferiores. A causa de la variabilidad en las

..
pendientes, también sus Fases presentan Clases de Capacidad de Uso muy variable, desde lll
hasta VIl en los casos más extremos. En el Cuadro 3-5 se presentan las características principales
de la Serie Huatulame (Typic Torriortbent), considerada como un suelo representativo de este
grupo.

93
Cuadro 3-5. Propiedades físicas, quúnicas y tísico-químicas de la Serie Huarulame (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0 - 16 1 6 - 59
Distribución de partlculas por tamaño (%)

2-1 5,4 9,0

1-0.5 8,7 15,5

0,5-0,25 10,6 12,0


0.25-0,1 0 11,8 5,6
0.10-0,05 15,7 15.8
2-0,05 52,2 57,9
0,05-0,002 39,6 27,8
< 0,002 8,1 14,3
Clase texrural F Fa

Densidad aparente (Mg m'3) 1,66


Agua retenida 33 kPa (%) 13,2 15,9
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 6,2 7,4
Carbono orgánico (%) 1,16 0,35
pHagua 7,35 7,62
1
Conductividad eléctrica (dS m- ) 1.2 0,3
CaC03 equivalente (%) 0,0 0,0
Ca 8,8 2,2

Cationes extraJblcs Mg 2,0 0,5


1
(cmol., kg- ) K 1,8 1,2
Na 0,4 0,3
1
Suma (cmol, kg' ) 19,0 13,0
1
CTC (pH 7,0) (cmolc kg' ) 13,0 4,2
Saturación básica pH 7,0 (%) 87,0 84,0

Los suelos con un horizonte 8 (generalmente Haplocambids), se encuentran en terrazas aluviales


con pendientes que no van más allá de 2 a 5%. Son suelos ligeramente profundos, de hasta 63 cm
sobre un sustrato de gravas con matriz arenosa o franco arenosa. Dominan las estructuras de
bloques fuertes y los suelos tienen una buena penetración radical. El contenido de CO es siempre
inferior a 2% en superficie, con un decrecimiento regular en profundidad. En algunos casos la CE
1
puede llegar a 5 dS m· , en los horizontes superficiales. La Capacidad de Uso puede variar entre
11, lll y IV dependiendo principalmente del drenaje, el que puede fluctuar entre imperfecto y
pobre. La Serie Huamalata (Typic Haplocambid) constituye un ejemplo de estos suelos y sus
propiedades se presentan en el Cuadro 3-6.

94
Cuadro 3-6. Propiedades llsicas, químicas y físico-químicas de la Serie Huamalata (CrREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-13 1 3 - 27 27-40 40-63


Distribución de parúculas por tamaño (%) Ap 8,. BC e,
2-1 0,3 0,1 02 0,2
1-ú,5 0,7 O.S 0,7 1,0
0,5-ú,25 4,1 4.0 4.9 6.6
0,25-0, 10 19.1 21,7 27,1 20,8
0,10-0,05 3 1,5 26,5 33,3 39,1
2-0,05 55.4 52,8 662 67,7
0,05-0,002 29.4 32.2 25,3 25,5
< 0,002 14,8 15 1
, 8,6 6.7
Clase textura! Fa F Fa Fa
3
Densidad aparente (Mg m' ) 1,78 1,65 1,57
Agua retenida 33 kPa (%) 13,8 1 3,0 9,5 8,2
Agua retenida 1.500 kPa (%) 9,2 8,2 5,9 5,2
Carbono orgánico (%) 1,57 1,10 0,64 0,46
pH- 7.20 7,63 7,81 8,03
1
Conductividad eléctrica (dS m' ) 4,9 1,0 0,6 0,5
Ca 42,0 5,4 3,1 2,1
Iones solubles extracto Mg
1 14,7 1,7 1,0 0,6
de saturación (mmol< L' )
K 1,5 0,2 0,1 0.0
Na 10,3 2,9 2,3 2,1
Suma 68,5 10,3 6,4 4,9
HC01(romol. L' ) 1
6,0 3,8 12 2,0
1
Cl (mmol, L' ) 13,2 1.5 0,5 0.4
1
S04(mmol. L' ) 41,0 4,8 5,0 2,2
RAS 1,9 1,6 1,6 1 ,8
Ca 15,9 13,5 1 1,0 9,8
Cationes extraíbles Mg 3 31
, 2,68 2.32 2,04
1
(cmolc kg. ) K 0.70 0,3 1 0.14 O.JO
Na 0.64 0,35 0,32 0,32
Suma (cmolc kg'1 ) 20,6 16,8 13,8 12,2
CIC (pH 7,0) (cmol. kg'1 ) 19,6 18,7 16,0 14,3
Saturación básica pH 7,0 (%) 100,0 90.0 86,0 85,0

Otros suelos, moderadamente profundos (90 cm), se encuentran ocupando posiciones coluviales y
c3e piedmont, con pendientes desde 5 a 8% hasta 20 a 40%. Presentan un mayor grado de
desarrollo pedogénico, evidenciado a través de la presencia de un horizonte argilico (B.). El
-12onte superficial tiene una clase textura! franco arcillosa que se hace arctllosa hacia los
tontes más profundos; la estructura es de bloques subangulares fuertes y los colores se
CICJentran en el matiz 7.5YR. A causa de las pendientes, presentan buen drenaje y su Capacidad
Ce L:'0 es muy variable, desde m a VU. La Serie Serón (Typic Haplargid) representa a este

- pl de suelos y en el Cuadro 3-7 se presentan sus principales propiedades.

95
Cuadro 3-7. Propiedades físicas, químicas y físico-químicas de la Serie Serón (CREN,
I 2005a)

Profundidad (cm) 0 - 23 23-60 60-90


Distribución de partlculas por tamaño (G/o) Ap B, B,
2-J 14,0 10,6 6,6
1-0,5 11,4 13,3 9,1
0,5-0,25 11,3 13,7 11,4
0,25-0, 10 12,6 14.0 12,3
0,10-0,05
2-0,05 ..
0.05-0,002
1 1 ,4
60,8
26.0
1 1,6
63,3
25,9
10,9
50,4
22,1
< 0,002 13,2 10,8 27,5
Clase textuml Fa Fa FAa
Densidad aparente (Mg m·3) 1,66 1,95 1,97
Agua retenida 33 k.Pa (%) 16,8 12,5 23.8
Agua retenida 1.500 kPa (%) 9,6 7,7 15,1
Carbono orgánico (%) 1,22 0,35 0,23
pHagua 8,02 8,44 8,27
Conductividad eléctrica (dS m·1) 0,6 0,3 0,2
CaC03 equivalente (%) 0,0 0.0 0,0
Iones solubles (extracto Ca 5,0 1,5 1,2
1
de saturaci6n) (mmol. L" ) Mg 0,9 0,3 0,36
K 0,08 0.03 0,02
Na 1,0 0,7 0,6
Suma 7,0 2.5 2,2
1
HC03(mmol0 L' ) 4,8 2,0 1,5
Cl (mmolc L'1 ) 0,4 0,1 0,1
S04(mmol., L'1 ) 0,9 0,4 0,7
Satumción agua (%) 36,5 25,4 43, 8
Ca 17,8 16,0 23,2
Cationes extraíbles Mg 2,6 2. 33 6,41
1
(cmolc kg- ) K 0,25 0,13 O,ll
Na 0,21 0,23 0,35
1
Suma (cmolc kg. ) 20,86 18,69 30,07
ere (pH 7,0) 14,0 17,0 21 .3
Satumción básica pH 7,0 (%) 100,0 100,0 100,0

96
En el valle del Limarí se han descrito dos suelos con características vérticas muy claras, la Serie
Tuquí (Petrocalcic Calcitorrert, CIREN, 2005a) y el suelo San JuJián en la Vifia TabaU1 (Sodic
Haplotorrcrt, Aburto et al., 2008). Se han diferenciado en dos unidades taxonómicas debido al
mayor contenido de Na• intercambiable y alto contenido en yeso (suelo San Julián) y porque el
suelo de la Serie Tuquí se ha desarrollado sobre un horizonte petrocá
lcico, ausente en el suelo de
la Viña Tabali.

El suelo de la Serie Tuquí, de origen sedimentario, se encuentra ocupando una terraza aluvial
antigua, ligeramente profundo, formado a partir de sedimentos provenientes de rocas básicas.
Presenta un perfil evolucionado, con estructura prismática, alto contenido de arcilla, grietas y
cutanes de stress, características que evidencian las propiedades vérticas. De textura superficial
franco arcillo limosa y color pardo rojizo oscuro en el matiz 5YR: de textura arcillosa y color rojo
�'SCUro en el matiz 2.5YR en profundidad. Descansa sobre un sustrato. que constituye un horizonte
petrocálcico (85 cm) muy compactado, que impide el desarrollo radical en profundidad. El
subsuelo presenta manchas de carbonato de calcio. Suelo de permeabilidad moderadamente lenta
1 de buen drenaje. Presenta ligera pedregosidad superficial. El contenido de CO varía desde 1,8%
en superficie, hasta 0,2% en profundidad; la CE aumenta ligeramente hacia los horizontes más
profundos. El contenido de CaCOJ es elevado a través de todo el suelo. sobre 10% bajo el horizonte
superficial y mayor aún en el horizonte petrocálcico; valor que se asume, pues no hay datos
malíticos. Todas las Fases son bien drenadas, la mayoría de ellas se ubica en Clases m y IV de
Capacidad de Uso. Algunas se ubican en Clases JV y otras en VI por escasa profundidad y/o
mayor pendiente. En el Cuadro 3-8 se presentan las principales propiedades de este suelo.

las propiedades del suelo San Julián son muy similares a las del suelo Tuqui. También se trata de
un suelo sedimentario desarrollado en otra terraza del río Limarí. Es profundo (> 125 cm), con más
de 50% de arcilla entre los 1 3 y los 1 1 O cm y con abundantes slikensides entre Jos 43 y los 1 1 O cm
Jc profundidad. Los colores también son muy similares: pardo rojizo oscuro y pardo rojizo en los
matices SYR y 2.5YR. En el horizonte 2C ( 1 1 0 a 125 cm) se describieron masas de yeso muy
�esas, además de 40% de fragmentos angulares no especificados. No se describieron carbonatos
en el perfil ni tampoco un horizonte petrocálcico. El contenido de CO varía entre 0,9% en

5Uperficie y 0,3% en el horizonte más profundo. La CE se incrementa con la profundidad hasta
.llcanzar 10,7 dS m·1 y la RAS Uega a 38 entre los 63 y J I O cm de profundidad. Los análisis
(-\burto et aL, 2008) demuestran que este suelo es rico en yeso, en particular en el horizonte 2C.
La clasificación taxonómica a nivel de Subgrupo (Sodic) obedece a La elevada RAS que se
encuentra sobre 13 en todos Jos horizontes, a excepción del horizonte Ap (figuras 3-9 y 3-1 O, al
tlnal del Capítulo).

Hle �uelo corresponde a un perfil seleccionado para discusión en la lnremaliona/ Conference and Ficld Workshop
m 5'>Jl Classífication (2008). Por lo tanto, no aparece como una unidad tallonómica separada en el Estudio
\ ro1·••gico de la IV Región (CIREN, 2005a) sino que ba quedado asimilado como un Taxa Adjunto a la Serie
T�10UI.

97
Cuadro 3-8. Propiedades fisicas, quimicas y ñsico-quimicas de la Serie Tuqui (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-18 18-69 69-85

Distribución de partículas por tamJliio (%) :s.. BC


2-1 2,7 0,9 0,3
1-0,5 5,1 4,0 3,3
0,5-0,25 9,4 5,5 4,1
0,25-0,1 0 1 1,8 7.0 5,1
0,10-0,05 8,7 6,6 6,0
2-0,05 37,7 24,0 18,8
0,05-0,002 23,0 20,7 22,4
< 0,002 39.3 55,2 58,7
Clase textura! FA A A
Densidad aparente (Mg m'3) 1.75 1,93 1.91
Agua retenida 33 kPa (%) 22,4 29,4 32,8
Agua retenida 1.500 kPa (%) 14,0 16,4 17,9
Carbono orgánico (%) 1.80 0,35 0,23
pHagu:� 7,74 8,00 8,07

Conductividad eléctrica (dS m'1) 0,9 1,1 1,3


CaC03 equivalente (%) 0,7 11,9 10,7
Ca 7,0 4,7 3,7
lones solubles (extracto Mg 1,8 2,3 2,9
de saturación)
K 0.8 0,1 0,1
(mmol., L'1 )
Na 1,0 5,3 8,0

Suma 10,6 12,4 14,6


C03 (mrnolc L'1) 0,0 0,0 0,0
HCOJ (mmolc L'1 ) 5,4 1,8 1,6
Cl (mmo1 L'1)
0 0,7 1,7 1,0
S04 (mmol, L'1 ) 4,1 9,0 1 1 ,0
Ca 27,9 30,9 29,9

Cationes extraíbles Mg 4,57 9,35 13,6


(cmol., kg'1) K 1,83 0,52 0,65
Na 0,20 1,14 1,83
Suma (cmol, kg-1) 34,5 41,9 46,0
CIC (pH 7,0) 30,2 26,7 29,7
Saturación básica pH 7,0 (%) 100,0 100.0 100,0

3.3.3 VaJie deJ río Choapa

Se incluyen también los suelos que se han descrito en el valle del rio Tllapel. En términos
generales, los suelos de estos valles se pueden lih'TUpar en dos clases, los suelos de origen aluvial
que forman parte del sistema de terrazas aluviales recientes y de mayor antigüedad, la mayor parte
de los cuales presentan pendientes bajas; y un segundo
lf grupo de suelos derivados de rocas
graníticas con diferente grado de meteorización y que ocupan los coluvíos y piedmonts que
jalonan ambos valles (Choapa e lliapel) y que, en varios casos, se superponen sobre las terrazas

98
aluviales. Todos los suelos se caracterizan por la presencia de horizontes B cámbicos, lo que
demuestra una mayor madurez pedogénica que la descrita para los suelos del Valle del Elqui.

Los suelos que se ubican en posición de terraza aluvial, tienen topografia plana, o bien tienen 1 a
3% de pendiente; sólo en algunos casos, presentan pendientes de 2 a 5% y más raramente de 5 a
8%. El sustrato común a todos ellos lo constituye una mezcla de gravas redondeadas con arena y
grava fina como material intersticial en porcentajes variables. Uno de los suelos descritos, la Serie
Tranquilla (CIREN, 2005a), tiene un sustrato arcillo limoso con escasas gravas bajo los lOO cm de
profundidad. Todos tienen colores pardos en los matices 7.5YR y 1 OYR y sólo la Serie Tunga (op.

..
cit.) tiene un color rojo oscuro, en el matiz 2.5YR. en los horizontes inferiores. Las clases
texturales de los horizontes superficiales son en su mayoria franco arcillo limosas y franco arcillo
arenosas, mientras que en los horizontes subsuperficiales se hacen más finas, esto es, franco
arcillosa, arcillo limosa y arcillosa. La estructura dominante es de bloques subangulares medios en
sus diferentes grados y la profundidad del solum puede fluctuar entre 55 y 1 1 0 cm. El contenido
de CO es inferior a 2% en superficie y decrece regularmente con la profundidad basta valores de
0.3%. La mayoria de los suelos está libre de carbonatos o los presentan en cantidades
despreciables; solamente la Serie Tunga los tiene en cantidades significativas: 2,9% en superficie
y 9,3% en profundidad. Todos Jos suelos tienen perfiles del tipo A - B C, en los cuales el
-

horizonte B califica para horizonte cámbico. Las Clases de Capacidad de Uso se han definido
principalmente en función de las Clases de Drenaje y la pedregosidad superficial; de esta manera,
se han descrito Fases desde Clase I hasta Clase IV. en función de ambas características. En este
grupo de suelos se incluyen las Series de Suelos Choapa, Huintil, illapel. Quelén, Tranquilla y
Tunga, todas clasificadas como Haplocambids (figuras 3-1 1 y 3-12, al final del Capítulo).

El segundo grupo de suelos identificables en el valle, corresponde a aquellos derivados de


materiales graníticos que se encuentran preferentemente en posición de coluvios y de piedmonts.
Sus pendientes son variables: 1-3% y 2-5% en las condiciones más planas y de 15-20% y 20-30%,
las más escarpadas. La característica común es que el sustrato de todos ellos está constituido por
granito con diferentes grados de meteorización o bien por arena granítica (del tipo maicillo). Los
colores de los horizontes superficiales son pardo oscuro o pardo rojizo oscuro, en los matices
... 5YR y 5YR. Hacia los horizontes subsuperficiales se hacen más rojizos, en los mismos matices,
con colores pardo fuerte o pardo rojizo oscuro. La clase textura! de los horizontes superficiales
varía entre franco arcillosa y franco arcillo arenosa, haciéndose más fina hacia los horizontes
,ubsuperficiales, esto es arcillo arenosa y arcíllosa. Solamente la Serie El Tambo escapa de esta
:endencia, pues hacia los horizontes inferiores, las clases texturales son más gruesas, franco
arenosa y areno francosa. En todos los suelos domina la estructura de bloques subangulares finos
�· medios con diferentes grados de cohesión. La profundidad del solum fluctúa entre 50 y 80 cm
'laSta el sustrato granítico. El contenido de CO, en los horizontes superficiales, es ligeramente
superior al de los suelos de origen aluvial, alcanzando valores entre 1,7 y 3,7%, siempre con un
Jecrecimiento gradual con la profundidad, hasta valores de 0,3%. Se han informado valores de CE
de 0,4 hasta 4,9 dS m- 1 , pero ninguno de estos suelos presenta carbonatos. Todos con buen
drenaje, principalmente a causa de la posición que ocupan en el Valle. Las Clases de Capacidad
de Uso varían desde l l l hasta vn, dependiendo de la pendiente, la pedregosidad y, en algunos
ctsos, de la rocosidad superficial. Todos los perfiles son del tipo A-B-C, a excepción de la Serie
Tthuinco, que tiene un horizonte Bt, por lo cual se ha clasificado como Paleargid. Además de esta
S-r1e se han considerado en este grupo a las Series de Suelos Camisas, Cuncumén, Chillepín y El
T ambo. En el Cuadro 3-9 se presentan, como ejemplo, las propiedades de la Serie Tahuinco
T )pie Paleargid) (Figura 3-13, al final del Capítulo)

99
Cuadro 3-9. Propiedades fisicas, químicas y fis:ico-quimicas de la Serie Tahuinco (ClREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0 - 12 12-30 30-58


Distribución de particulas por tamaño (%) B B,

2-1 3.3 5,2 1,7


l-0,5 9,5 15,7 10,0
0,5-0,25 14,9 16,6 12,2
0,25-0.1 0 16,7 16,4 12,4
0,10-0,05 13,9 10,9 10,1
2-0,05 58,3 65,4 46,4
0,05-0,002 23,4 •
19.7 20,4
<0,002 18,3 15,0 33,2

Clase textura! Fa Fa FAa

Densidad aparente (Mg m·� 1,50 1,58 1.91

Agua retenida 33 kPa (%) 17,5 1 1,5 14,5

Agua retenida 1.500 kPa (%) 10,8 6,8 9,5


Carbono orgánico (%) 2,5 1,0 0,4
Ca 5,5 2,60 2,90
Iones solubles
(extracto de Mg 2,62 0,84 0,99
saturación)
K 0,23 0,05 0,05
(mmo� L"1)
Na 1,84 1,32 2,13

Suma 10,2 4,8 6,1

pHagua 8,05 8,19 8,58

Conductividad eléctrica (dS m"1) 0,9 0.4 0,5

Ca 16,7 11,1 19,5

Cationes extra/bies Mg 3,8 2,5 5,5


(cmol.: kg"1) K 0.4 0,2 0,3
Na 0,3 0,2 0,5
Suma (cmol., kg"1) 21,2 25,8
14,0
C03 (mmole L"1) 0,0 0,0 0,0
HC03 (mmol., L"1) 5,6 3,6 3,8
Cl (mmolc L"1) 0,4 0,3 0,5
S04 (mmol., L"1) 3,4 0,8 l,l

CIC (pH 7,0) 19,9 16,3 19,9

Saturación básica pH 7,0 (%} 100 86 tOO

100
3.3.4 Valle del río Quilimarf

Cartográficamente, se ha identificado en este valle una Serie de Suelos del mismo nombre y cuyas
principales propiedades se encuentran en el Cuadro 3-10. Se trata de un suelo moderadamente
profundo, de origen sedimentario en posición de piedmont y terrazas intermedias y altas del valle
del rlo Quilimarí. De clase textura! superficial franco arciUo arenosa y color pardo rojizo oscuro
en el matiz 5YR; en profundidad, la clase textural es arcillosa y el color es pardo rojizo y de igual
matiz. El sustrato está constituido por gravas angulares y subangulares no meteorizadas, con
matriz arcillosa de color rojo amarillento en el matiz 5YR El CO varia desde 1,5% en superficie
hasta 0,5% en profundidad. Este suelo presenta buen drenaje. Las Fases varían desde Clase TTI
hasta VI de Capacidad de Uso, en función de la pendiente (hasta 8 a 15%) y de la profundidad del
suelo (entre 50 y l OO cm). En el Cuadro 3-10 se presentan las principales propiedades químicas y
fisicas de la Serie Quilimarl (Typic Haplocambid).

Cuadro 3-10. Propiedades físicas, químicas y tisico-químicas de la Serie Quilimarl (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0 - 20 20-40 40-80


Distribución de partículas por tamallo (%) A• A1 B,.
2-1 2,9 6,4 2,4
1·0,5 11,3 6,8 2.5
0,5-0,25 14,4 7,8 3,5
0,25-0,10 18,3 12,0 5.4
0,10-0,05 15,9 8,9 5.0
2-0,05 62,7 41 9
. 18,8
0,05-0,002 29,8 17,3 78,6
< 0,002 7,5 40,8 2,5
Clase tex:tural Fa A FL
3)
Densidad aparente (Mg m' 1,71 1,57 1,81
Agua retenida 33 k.Pa (%) 14,5 38,2 13,6
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 4.7 19,7 4.7
Carbono orgánico (%) 1,45 0,52 0,35
6,50 8,20 7,37
Ca 3,8 10,7 3.0
Cationes extraíbles Mg 2,06 10,5 2,19
(cmolc kg-1) K 0,27 0,34 0,11
Na 0,22 7,65 0,72
Soma (cmo� kg.1) 6,35 29,19 6,02
CIC(pH 7,0) 4,4 28,2 3,7
Saturación básica pH 7,0 (%) 100,0 100,0 100,0

101
3.4 Suelos del Sector Costero

Los suelos de todo este sector caen todavía en el concepto de Régimen de Humedad andtco,
debido a que la sección de control de los suelos se encuentra seca por más de la mitad del tiempo
acumulativo, cuando la temperatura del suelo se encuentra sobre Jos 5°C. Al mismo tiempo. el
Régimen de Temperatura es isotérmico, porque la temperatura media anual del suelo (TI\tAS)
fluctúa entre l5°C y 22°C y la diferencia entre la temperatura media del verano (TMV> ) la
temperatura media del invierno (TM1) difieren en menos de 6°C (Soil Survey Staff, 2003), a causa
de la fuerte influencia marítima que domina en toda el área.

En estos sectores se reconocen claramente dos clases de formaciones geomorfológicas: las


terrazas marinas y los cerros del batolito costero. Los suelos que se desarrollan en ambas
formaciones presentan diferencias de posición topográ
fica. de desarrollo pedogénico y
morfológicas en el perfil. Se asume que toda la costa de esta región corresponde a un litoral de
emergencia, por lo que el perfil de la costa aparece en su mayor parte muy uniforme y parejo, con
muy pocos accidentes geográficos, tales como islas, penínsulas pronunciadas y canales que
caracterizan, por ejemplo, al litoral de inmersión desde la Isla de Chiloé hacia el Sur.

3 . 4 . 1 Suelos de las terrazas marinas

Las terrazas se presentan en varios escalones desde La linea litoral. Paskoff (1970), distingue tres
niveles de planicies como dominantes y que presentan una ligera inclinación hacia el oeste, aun
cuando hay áreas donde reconoce la existencia de otros niveles adicionales. En estudios más
recientes, SailJard et al. (2009) distinguen 5 niveles de terrazas en la zona, con altitudes
aproximadas de 6, 25, 55, 170 y 425 msnm (Figura 3-14). Cada plataforma constituye una
superficie de abrasión marina tallada en rocas ígneas, que actualmente se encuentran cubiertas con
sedimentos siliciclásticos de menos de 20 cm de espesor (Figura 3-15, al final del Capítulo).

En el extenso trabajo de Paskoff ( 1970) se puede encontrar una detallada descripción de la


geomorfología y de la geología de estas áreas para la Zona Áiida y Semiárida de Chile. Desde el
punto de vista edáfico es posible establecer algunas diferencias entre los suelos que se encuentran
,.
en posición de terrazas: los suelos de las terrazas bajas e intcm1edias en altura, en las cuales se
encuentran: a) suelos sin desarrollo de perfil, b) suelos con horizonte cálcico, e) suelos con tertel y
d) suelos con horizonte nátrico. Los suelos de terrazas intermedias y altas presentan,
generalmente, un mayor desarrollo pedogénico, que se evidencia por la presencia de horizontes
cámbicos y, en algunos casos, horizontes argilicos.

102
,.
1011111

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- - .. - :::::::

-111

Flgara 3-14. Distribución de los distintos niveles (l, D, In, lV y V) de terrazas marinas en la Zona Árida y Semiánda
��lard et al., 2009).

uelos s i n desarrollo de perfil . En las terrazas bajas e intennedias, particularmente en las


�.ercanías de la ciudad de Los Vilos y hacia el norte de ella (entre 30°00' y 3 1 °45'), y en sectores
?IÓxirnos a la ciudad de La Serena, se encuentran dunas estabilizadas que han dado origen a
5tlelos de muy escaso desarrollo, lo que se distingue por la ausencia de horizontes de diagnóstico.
Las pendientes son unifonnes, con una gradiente que puede alcanzar hasta 6%, con algunos
alloramientos rocosos, pero sin pedregosidad ni en la superficie ni en el perfil (Figura 3-16, al
mal del Capitulo). Los perfiles, del tipo A - C, son de texturas gruesas, arenosas, areno francosas
basta franco arenosas, con límites claros y difusos entre los horizontes o estratas. La profundidad
de los suelos puede Uegar hasta los 150 cm. Los colores dominantes son pardo fuerte y pardo
mnarillento ( l OYR y 7.5YR), con croma y valores altos (4/4 y 5/6). En algunos suelos los colores
pueden llegar al pardo rojizo en el matiz 5YR. A estas arenas se les ha asignado un ongen
gta-:Jtttco, lo cual parece lógico si se considera que el Batolito está constituido dominantemente
por esta roca ígnea. El pH (H20) fluctúa entre 6,3 y 8,0; el contenido de MO. en el horizonte
sur-:rlicial, puede alcanzar hasta 2%, lo cual sugiere un mayor nivel de fertilidad y una mayor
1
e-;¡; hlidad de Las dunas cercanas. La CIC se encuentra bajo los J O cmolc kg- • La SB es variable,

103
r. 1 r. 1 r.
l t 1 1 Z5:t;l/ S5 :t 5

• T1C170t20)
T1C4Z5t 15)

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-11.r -11.1·

Figura 3-14. Distribución de los distintos niveles (1, 11, 111, IV y V) de terrazas marinas en la Zona Árida y Semiárida
(Saillard el al., 2009).

Suelos sin desarrollo de peñil. En las terrazas bajas e intermedias, particularmente en las
cercanías de la ciudad de Los Vilos y hacia el norte de ella (entre 30"00' y 3 1°45'), y en sectores
próximos a la ciudad de La Serena, se encuentran dunas estabilizadas que han dado origen a
suelos de muy escaso desarrollo, Jo que se distingue por la ausencia de horiz.ontes de diagnóstico.
Las pendientes son uniformes, con una gradiente que puede alcanzar hasta 6%, con algunos
afloramientos rocosos, pero sin pedregosidad ni en la superficie ni en el perfil (Figura 3-16, al
final del Capítulo). Los perfiles, del tipo A - C, son de texturas gruesas, arenosas, areno francosas
hasta franco arenosas, con límites claros y difusos entre Jos horizontes o estratas. La profundidad
de los suelos puede llegar hasta los 150 cm. Los colores dominantes son pardo fuerte y pardo
amanllento ( lOYR y 7.5YR), con croma y valores altos (4/4 y 5/6). En algunos suelos los colores
pueden llegar al pardo rojizo en el matiz 5YR. A estas arenas se les ha asignado un origen
granuico, Jo cual parece lógico si se considera que el Batolito está constituido dominantemente
por esta roca ígnea. El pH (H20) fluctúa entre 6,3 y 8,0; el contenido de MO, en el horizonte
supeticial, puede alcanzar hasta 2%, lo cual sugiere un mayor nivel de fertilidad y una mayor
1
es tal Ji dad de las dunas cercanas. La CIC se encuentra bajo los 1 O cmole kg- • La SB es variable,

103
puede fluctuar entre 2 y 80%, siempre con Ca como catión dominante. La CE, generalmente se
1
encuentra bajo 0,8 dS m· . En algunos pedones se han descrito rasgos redoximórficos baJo el
metro de profundidad, en la forma de nódulos y láminas delgadas de Fe, cuya presencia sug1·ere un
régimen más húmedo que el actual. También es probable que estos suelos hayan ocupad�} una
posición deprimida en el paisaje y que se encuentren, en la actualidad, en posiciones más alt,ts a
causa de actividad tectónica (Figura 3-17, al final del Capítulo). A pesar de estos rasgos
pedogénicos, no se han reconocido horizontes cámbicos, por lo cual todos estos suelos se han
clasificado como Torripsamments (Soil Survey Staff, 2003). Las Clases de Capacidad de Uso más
frecuentes son II y lii y a algunas Fases se les asignó la Clase TV, principalmente por pendtentes
complejas de 5 a 8%. En el Cuadro 3- 1 1, se describen algunas propiedades de un pedón que
caracteriza a este grupo de suelos y que corresponde a la Serie La Compafiía. descrita en las
proximidades de La Serena.

Cuadro 3-ll. Propiedades físicas, químicas y fisico-qwmicas de la Serie La Compañía (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-U ll-30 30-50 50-80 80- 105 105- 120

Distribución de partículas por tamallo (%)

2-1 0.0 0,0 0,0 0,0 0,0 0.0


1-0,5 0,3 0,3 0.3 0,3 0,2 0,3
0,5-0,25 17,6 19,7 17,9 24,0 16,1 15,3
0.25-0,10 50,2 52,9 52.5 49,7 48,0 49.9
0,10-0,05 17,6 18,6 18,5 18,1 19,1 18,7
2-0,05 85,7 91.5 89,2 92,1 93,8 84,2
0,05-0,002 10,3 5,4 7,4 5,3 3,6 4,1
< 0,002 4,0 3,1 3,4 2,6 2,6 1 1,7

Clase lexlural aF a a a a aF
3
Densidad aparente (Mg m" ) 1.63 1,69 1.59 1.75 1.83 1.96

Agua retenida 33 kPa (%) 4,0 3.2 2,9 2,9 9,2 9.5

Agua retenida 1500 kPa (%) 2,1 2,0 2,0 2.2 6,8 6.3

Carbono orgánico (%) 0,2 0,2 0, 1 0,0 0,0 0,0

pH��¡�oa 6,3 6,7 6,6 6,9 6,9 7,2


1
Conductividad eléctrica (dS m" ) 0,8 0,4 0,5 0,5 0,5 0,5

CaC03 equivalente (%) 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0

Ca J,l 0,8 0,8 0,6 1,7 1,6


Cationes Mg 0,6 0.8 0,8 0,9 3,7 3,7
1
extraiblcs (cmol.kg" )
K 0,5 0.4 0,4 0,2 0,5 0,5

Na 0,2 0,1 0,1 0.2 0,7 0,6

Suma (cmole kg-1) 2,4 2.1 2,1 1,9 6,6 6,4


1
C1C (pH 7,0) (cmol0 kg. ) 4,4 3,8 3.6 2,6 8,2 8,9

Saturación básica pH 7,0 (%) 55,0 55,0 58,0 73,0 80,0 72,0

104
Suelos con horizonte cálcico. La mayoría de estos suelos se encuentra en posición de piedmont y son
ligeramente profundos a profundos. De clase textural superficial franco arcillo arenosa y color pardo
oscuro en el matiz 7.5YR; en profundidad son arcillosos y de color pardo rojizo en el matiz 5YR.
Generalmente no muestran reacción al HCl en los horizontes superficiales; sin embargo, el contenido
de carbonatos se incrementa en profundidad, hasta horizontes cálcicos con reacción violenta. El
horizonte 8 cámbico está bien desarrollado y puede presentar varias subdivisiones que, en algunos

.
casos, puede incluir un horizonte cálcico (Bk)· La textura es predominantemente fina, con extremos
entre arcillo limosa a arcillo arenosa; sin embargo, la mayor parte de Jos horizontes B presenta grava
fina angular, que en algunos casos puede alcanzar hasta el 30% del volumen. La estructura presenta
mayores variaciones, que va desde bloques subangulares bien desarrollados hasta estructura
'( ;
prismática. Algunos perfiles evidencian un grado de no estructura maciza. Los colores se mantienen

en los matices 5YR y 7.5YR; con valores normalmente altos, entre 3 y 5 y cromas igualmente
elevados, entre 4 y 5. Los horizontes B1c pueden tener cromas de hasta 6. El espesor de los horizontes

.. ...
t a
B puede fluctuar entre 45 y 70 cm, pudiendo extenderse más allá de los 90 cm. Las Clases de
'
Capacidad de Uso varían entre m y IV, principalmente en función de la pendiente. En el Cuadro 3-12,

1
se presentan algunas propiedades de la Serie Barrales (Typic Haplocalcid) que caracteriza a estos
suelos.


Cuadro 3-12. Propiedades físicas, qulmicas y físico-químicas de la Serie Barrales (ClREN. 2005a)

Profundidad (cm) 0-16 16-36 36-52 52-71 71 - 95 9 5 - 125

Distribución de particulas por tamaño (%) Ap 8¡ 81<1 B�a Bk3 ck

2-1 0,3 0,7 1,4 1,8 3,0 3,0


1-0,5 3,4 4,3 4,2 4,3 6,8 6,1
0,5-0,25 1 1,4 1 1,1 9,2 6,0 7,5 7,4
0,25-0,10 21,5 19,5 14,2 10,1 12,2 1 1 ,7
0,10-0,05 10,4 9,3 7,3 7,4 8,3 7,7
2-0,05 47,0 44,9 36,3 29,6 37,8 35,9
0,05-0,002 22,7 20,2 20,4 39,7 41,4 36,5
< 0,002 30,3 34,9 43,3 30,7 20,8 27,6

Clase textural FAa FA A FA F FA

Agua retenida 33 kPa (%) 23,0 23.8 28,3 27.8 26,9 •


29,2

Agua retenida 1 .500 kPa (%) 15,1 16,1 18,8 18,6 17.9 1 8.3

Carbono orgánico (%) 0,9 0,4 0,3 0,3 0,2 0,1

plf.au. 8,2 8,4 8,5 8, 7 8, 7 8,8

Conductividad eléctrica (dS m-1) 0,6 0,6 0,6 0,7 0,9 1,4

CaC03 equivalente (%) 1,5 4,6 21,7 49,2 58,3 56,2

Ca

Cationes extraíbles Mg
(cmolc kg'1) K 1,4 0,5 0.3 0,1 0,1 0,1

Na 0,6 0,9 1,2 1,1 1.1 1,7

CIC (pH 7,0) (cmolc kg'1) 26,0 25,2 23,6 14,6 1 1 .8 13,7

105
"
Suelos con Tertel. Los suelos que presentan este horizonte limitante se encuentran en post( on
de terrazas marinas y también en posición de coluvios y piedmonts adosados entre las terrazas y
el batolito costero. Se trata de suelos ligeramente profundos y delgados, cuyo sustrato lo
constituye una capa dura y extremadamente dura que, en algunos suelos, está constituida casl
exclusivamente por carbonatos endurecidos y en otros, la cementación es una mezcla de sllice y
"
manganeso sin reacción. A ambas clases de sustrato se les conoce localmente como certel. sm

..
hacer una diferenciación acerca de su composición, más bien haciendo referencia a que se trata de
una capa extremadamente dura y completamente limitante al paso del agua y las raíces. Esta es la
1 " clases de suelos en esta sección.
razón por la cual se han considerado conjuntamente a ambas

En el caso de los suelos con tertel calcáreo es necesario hacer una diferenciación entre los suelos
cuyo sustrato es una roca calcárea no relacionada pedogénicamente con el suelo, de aquellos
suelos que poseen un horizonte petrocálcico (Bm-C�an) cuyo origen está directamente relacionado
con los procesos de formación del suelo (Figura 3-18 al final del Capítulo). En ambos casos la
reacción al HCI es de moderada a violenta, con niveles de carbonatos que varían de 13 a 35% en
los horizontes superficiales y más de 50% en el sustrato. En los suelos que se encuentran sobre
' a
roca calcárea no relacionada, las clases texturales presentan escasa variación en los horizontes
superficiales, entre franca y franco arenosa, en cambio en los horizontes subsuperficiales puede
variar entre franca y arcillosa. Los colores son pardos en superficie en los matices 7.5YR y IOYR
,,
y se hacen más rojos en los horizontes subsuperficiales; el horizonte petrocálcico presenta colores
desde grises oscuros hasta grises claros (5YR7/l). El pH se mantiene a través de los perfiles sobre
8 a causa de la presencia de carbonatos; consecuentemente, el complejo de intercambio está
siempre saturado. El CO siempre decrece regularmente con la profundidad, desde valores
máximos de 1,5% hasta 0,3% y la CE es siempre • bajo1 1 dS m-•. El uso de estos suelos es limitado,
ya sea por Ja escasa profundidad del solum que, en algunas Fases no supera los 25 cm, por las
gradientes para aquellos casos en posición de coluvios con más de 15% de pendiente, o bien por la
pedregosidad superficial, que puede ser de moderada a abundante. Por ... estas razones, las Clases de
Capacidad de Uso más comunes son m y N, pero en casos excepcionales, VI y Vll. Las Series

..
Millahue y Cerrillos de Elqui son los suelos más representativos de este grupo. En el Cuadro 3-13
se presentan las principales propiedades químicas y flsicas de esta última, clasificada como Calcid
Petrocalcid.

L06
Cuadro 3-13. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de la Serie Cerrillos de Elqut, (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0 - 15 JS-32 32-55


Distribución de partículas por tamafto (%) Ap Bu Bta
2-1 2,4 2,4 2.4
1-0,5 4,5 4,5 4,8
0,5-0,25 8,0 8,4 6,9
0,25-0,10 21,7 21,8 1 8.5
0,10-0,05 13,8 14,0 1 1 ,2
2-0,05 50,4 51,4 43,8
0,05-0,002 30,8 32.2 34,5
< 0,002 18,8 16,4 2 1,7
Clase textura! F F F

Densidad apa.rente (M g m'3) 1,39 1,42


Agua retenida 33 kPa (%) 23,0 23,0 25,5
Agua retenida 1.500 kPa (%) 18,3 14,7 19,5
Carbono orgánico (%) 1,5 0,9 0,5
pH..,.. 8,1 8.1 8,0
Conductividad eléctrica (dS m'1 ) 0,9 0,9 0,9
CaC03 equivalente(%) 13,0 15,6 32,5
Ca
Cationes cx<raíbles Mg
(cmolc kg-1 ) K 2,8 1,7 0,6
Na 0,5 0,6 0,7
CIC (pH 7,0) (cmolc kg'1 ) 23,2 19,2 16,1

Los suelos que se encuentran sobre un horizonte petrocálcico de naturaleza pedogénica han sido
descritos en los alrededores de la bahía de Tongoy (Figura 3-18, al final del Capítulo). Esta
t:tima se considera una paleobahía de sedimentación (Saillard et al., 2009), fuertemente
influenciada por las fluctuaciones relativas del nivel del mar, por cambios eustáticos y controles
tectónicos tanto regionales como locales. Durante una serie de transgresiones y regresiones
marinas, la babia fue llenada con arenas, coquinas y gravas (Le Roux et al., 2006). Uno de los
suelos característicos descritos en las terrazas próximas a Tongoy muestra en el horizonte
wperficial un color pardo (1 OYR4/3), una clase textura! franco arenosa y una pedregosidad
superficial moderada. En los horizontes subsuperficiales el color es pardo a pardo rojizo en los
matices 7.5YR y 5YR y de clase textura} franco arcillosa y franco arcillo arenosa. Entre los 28 y
56 cm de profundidad se describió un horizonte nátrico a causa de su estructura prismática, el
mcremento de arcilla de más de 20% entre el horizonte eluvial y el iluvial y la RAS de 20
(o\burto et al.,
2008). El horizonte petrocálcico está formado por una sucesión de capas
bm nares en su parte superior y el contenido de CaC03 es de 68% (Figura 3-19, al final del
Cap tulo). A causa de estas propiedades se le clas1ficó como Natric Petrocalcid (op.cit.) (Figura
.3-.::L. al final del Capítulo).

107
Otros suelos, sin reacción al JTCI a través de todo el perfil, se encuentran sobre un d1r1pán,
sustrato compactado y cementado con sílice y manganeso. Ocupan La posición de tt1!I•as y
también de coluvio, con pendientes de 1 a 3%, 3 a 8% hasta 8 a 15%. El color de los ht ••mtes
superficiales es pardo o pardo rojizo en los matices 7.SYR y 5YR, que se hace más rojo hm. 1a los
horizontes inferiores basta un rojo débil (2.5YR4/2). Aún cuando en los horizontes superficiales
las clases texturales son medias, éstas se hacen finas en los horizontes próximos al duripán. franco
arcillo arenosa y arcillosa. Las raíces son escasas y desaparecen en el duripán, a ex.cep�:.wn de
aquellas que logran penetrar por las grietas. El contenido de CO es ligeramente superior a 1 % en
• en profundidad; el pH varia de 6,6 a 8,6 y la CE puede alcanzar valores
el epipedón y llega a O, 1 %
1
de 1 ,2 dS m· en algunos horizontes, pero lo corriente es que se encuentre bajo 0,5 dS m 1 Todos
los suelos de esta categoría presentan buen drenaje y sus limitaciones de uso provienen de la
escasa profundidad, las pendientes que pueden llegar a ser excesivas y, en algunos casos, La
excesiva pedregosidad superficial. Estas características hacen que las Clases de Capacidad de Uso
m y IV sean las dominantes. Las Series de Suelos utilizadas para este análisis son La Torta,
Quebrada de Martínez, Tambillo y Xeres. En el Cuadro 3-14, se presentan las principales
propiedades de la Serie Tambillo (Cambidic Haplodurid).

Cuadro 3-14. Propiedades fisicas. químicas y fisico-quimicas de la Serie Tambillo (ClREN. 2005a)

Profundidad (cm) 0-17 17-33 33-48 48-61


Distribución de particulas por tamaño (%) 8, 83
2-1 3.0 5,0 11,1 8.5
1-0.5 1 1.8 13.1 19,2 17,3
0,5-0,25 18,2 17,5 8.1 110.

0,25-0,10 19,5 18,8 7,4 1 1.2


0,10-0,05 12,4 1 1 ,6 6,4 8,4
2-0.05 64,9 66,0 52,2 56,4
0,05-0,002 26,3 23,7 18,4 18,3
< 0,002 8,8 10.3 29.4 25.3
Clase texlUra1 Fa Fa FAa FAa
Agua retenida 33 kPa {%) 12,5 12.2 20,6 21.4
Agua retenida 1.500 kPa (%) 5,8 6.0 15,0 15,2
Carbono orgánico (%) 0,4 0,3 0,3 0,1
pH- 6,9 7;1. 7,0 8,2
Conductividad eléctrica (dS m"1) 0,8 0,5 0,8 1.2
Ca 3,6 4,8 8,5 11,8
Cationes extraíbles (cmolckg-1) Mg 2.0 3,1 9,4 13,1
K 0.3 0,1 0.1 0,1
Na 0,2 0,4 1,7 3,5
Suma (cmolc kg"1) 6,1 8,4 19.7 28,5
CIC pH 7,0 (cmol., kg"1) 7,6 9.6 23.8 28,5
Saturación básica pH 7.0 (%) 80,0 88,0 83,0 100,0

108
La formación de estos panes cementados con sílice (duripanes) se extiende hacia el interior, como
ocurre en las proximidades de la localidad de Las Cardas, entre Coquimbo y Ovalle. También se
presentan suelos con carbonatos en el perfil y como panes endurecidos, aun cuando son más

..
localizados. En todo caso, dominan los suelos cuyo sustrato está constituido por panes silícicos
que incluyen además, abundante Fe y Mn. Pareciera ser que estos duripanes se han formado bajo
un suelo diferente al actual, el cual fue erosionado, dejando al descubierto el duripán. En el
presente estos duripanes están bajo sedimentos coluviales de naturaleza variable, que constituyen
los suelos actuales en discordancia con el sustrato (limite abrupto entre el suelo y el duripán). La
mineralogía de la fracción fina indica que el mineral más abundante es montmorrillonita y en
segundo lugar es caolinita (Aburto et al., 2008) (figuras 3- 2 1 y 3-22, al final del Capítulo).

Suelos con horizonte nátrico. Existen algunos sectores muy localizados, en las cercanías de
Huentelauquén, con pendientes desde ligera
(2 a 5%) a suavemente onduladas (5 a 8%), donde los
,
suelos presentan sodicidad (Figura 3-23, al final del Capítulo), manifestada por la presencia de un
horizonte nátrico, además de otras evidencias de exceso de sodio, tales como manchas superficiales de
MO dispersa (Figura 3-24, al final del Capítulo). El porcentaj e de sodio intercambiable (PSI) en los
horizontes nátricos puede variar entre 21 y 65%. Se trata de suelos de clases texturales
finas en los horizontes superficiales y subsuperficiales, esto es, franco arcillosa, franco arcillo
arenosa, franco limosa o arcillosa. La estructura del horizonte Bt es prismática y en algunos casos
columnar, con abundantes cutanes en las caras de los agregados. Es destacable la presencia de
concreciones de Fe y Mn abundantes en todos los horizontes Bt descritos. Este rasgo evidencia la
presencia de períodos de exceso de agua, seguidos por periodos en que los suelos se encuentran secos,
proceso que se asocia tanto a la distribución de las precipitaciones como a la topografia ondulada en la
que se distribuyen. En general, los colores se encuentran en los matices pardos y pardo oscuros
(7.5YR y 1 OYR) e, igualmente que otros suelos del área, el croma y el valor son altos (4/4 a 6/4). Es
frecuente encontrar en los horizontes subsuperficiales clastos angulares o facetados de origen coluvial,
cuya presencia se debe a la influencia de fenóm enos de flujos laterales desde los Jomajes y cerros
propios de la Cordillera de la Costa. Las masas esféricas de carbonatos parecen provenir de la
meteorización de fragmentos gruesos in sítu, en un medio alcalino. El suelo aparece con múltiples
discontinuidades litológicas, indicando numerosos eventos geológicos y pedogénicos intercalados. Se
les ha clasificado como Natrargids, en los subgrupos Typic y Xerollic. En el Cuadro 3-15 se presentan
algunas propiedades químicas y físicas de un Typic Natrargid, descrito en las proximidades de
Huentelauquén. Cartográfica y taxonómicamente corresponde a la Serie Huentelauquén (figuras 3-25
y 3-26, al final del Capítulo).

109
Cuadro 3-15. Propiedades fisicas y qulmtcas de la Sene Huentelauquén (CIREN, 2005a)

Profundidad (cm) 0-7 7-25 25-52 5 2 - 81 !1 1 123


Distribución de partículas por tamBño (%) At Az Bu Ba Bo
2-0.05 26,0 24,0 12,0 24.0 14.0
0,05-0.002 60,0 60,0 22,0 18,0 �2.0
< 0,002 14.0 16,0 66,0 58,0 64,0
Clase textura) FL FL A A
3
Densidad aparente (Mg m' ) 1,20 1,35 1,42 1,48 1 ,50
Agua retenida 33 kPa (%) 1 1 ,00 10,80 33,20 30,()() 29,30
Agua retenida 1.500 kPa (%) 6.43 6.08 24,40 22,30 20,00
Carbono orgánico (%) 0,75 0,60 0,28
pilO&... 7,5 7,5 8,4 8.3 8.4
1 5,29 5.28
Conductividad eléctrica (dS m' ) 3.08 3,03 6,45
CaC03 equivalente(%) 0,5 0,5 2,4 15,5 20,9
Ca 6,35 4,43 2,74 3,06 2,18
Iones solubles cl\ttacto 4,39 5.21 3.44
1 Mg 3,60 3.95
de saturación (mmolc L' )
K 1,45 0,45 0.56 0.68 0,54
Na 18,70 20.90 46,50 58,30 46,30
Suma (mmol.c L 1 ) 30,89 29,38 53.75 67,25 52,46
HCOJ (mmo� L'1 ) 1,00 1,25 4,00 4,25 3,75
1 27,10 28.20
Cl (mmol, L- ) 46,30 55,80 47,00
so. (mmol< L 1) 3.04 2,04 6,64 8,82 8.40
RAS 8,07 IQ.43 25.42 28.67 27,62
Ca 2,30 2,40 5,60 20,00 19,50
1 0,92
Cationes extraibles (cmo�kg- ) Mg 1.50 10,20 9,90 9.00
K 0,97 0,66 2,41 1,99 1,75
Na 1,19 1,55 9,77 10,00 9,56
1
Suma (cmolc kg' ) 5,38 6,11 27,98 41,89 39,81
1
CIC (pH 7,0) (cmolc kg' ) 7,64 7,83 22,9 21,8 20,9
Saturación básica (%) 70,0 78,0 100.0 100,0 JOO,O

3.4.2 Suelos en posición de lomajes y cerros de la Cordillera de l a Costa

Desde el punto de vista geológico, se trata de una formación relativamente homogénea,


constituida esencia)mente por rocas ígneas graníticas o asociadas al granito. Desde el punto de
vista topográfico, presenta variaciones de relieve, desde sectores suavemente ondulados (5 a 8%
de pendiente) hasta lomajes (20 a 30% de pendiente). Desde el punto de vista edáfico, los suelos
se diferencian por posición, grado de pendiente, grado de diferenciación de horizontes,
profundidad del perfil, intensidad de la erosión, pedregosidad en superficie y en el perfll.
considerando los principales factores que han influido en el desarroUo e intensidad de la
pedogénesis. Con el fin de sintetizar y hacer más comprensiva las características y la distribución
de los suelos de esta Fonnación, se ha tomado la opción de agruparlos en dos categorías,
considerando el grado de desarrollo del perfil.

110
Suelos delg ados con escaso desarrollo sobre roca. Se trata de suelos esqueletales que se
ubican en laderas de cerros, con pedregosidad en superficie y frecuentes afloramientos rocosos,
ocupando todas las posiciones del relieve. La profundidad del suelo no es mayor de 50 cm y se
encuentra sobre roca fresca o con diferentes grados de meteorización o bien, sobre fragmentos de
roca gruesos. Los perfiles son del tipo A-C (R); los colores generalmente se encuentran en el
matiz SYR y Las clases texturales son gruesas, esto es arenosa o franco arenosa. El contenido de
MO en el horizonte A no supera el 1 %; el pH fluctúa entre 6,2 y 7,0; la CE es inferior a 1 dS m·1
i la SB es baja, generalmente inrcrior a 8%. En algunos suelos se han descrito horizontes de
transición (A2, AC), de clases texturales más finas, tales como franco arenosa fina, pero que no
alcanzan a evidenciar el desarrollo pedogénico de un horizonte B. Es posible que localmente y en
algunos sectores, la limitada profundidad de los suelos esté relacionada con procesos erosivos
antrópicos. Las Clases de Capacidad de Uso más frecuentes para estos suelos son IV y VI, tanto
por profundidad como por pendiente. De acuerdo a sus características morfológicas, químicas y
físicas se han clasificado como Torriorthents.

Suelos con horizonte B. El otro grupo de suelos que se encuentra en esta misma posición,
corresponde a suelos con horizontes cámbico o argílico. Se encuentran en pendientes que fluctúan
entre 6 y 1 2%, con afloramientos rocosos y pedregosidad superficial comunes y evidencias de
erosión ligera. Si bien se considera que estos suelos derivan de la meteorización de la roca
granítica, a causa de los perfiles completos que se han podido describir no se pueden descartar las
influencias coluviales y de sedimentación marinas, que se hacen evidentes en situaciones
puntuales del sector litoral.

La clase textura! del horizonte A puede variar entre ITanco arenosa a franco arcillo arenosa y los
colores se mantienen en el matiz 7.SYR. Los horizontes B,. o s� tienen clases texturales más
finas, franco arcillosa a arcillosa. El matiz varía entre 7.5YR hasta SYR, con estructura bien
desarrollada de bloques subangulares fuertes o bien prismas fuertes. El contenido de MO alcanza
hasta 2% en el horizonte superficial y 0,3% en el horizonte inmediatamente superior a C, aunque
el decrecimiento en profundidad no siempre se produce gradualmente. El pH varía entre 6,1 y 7,7;
3 CTC, en tos horizontes superficiales es baja, esto es entre 5,2 y 1 0,1 cmole kg"1; sin embargo se
eleva considerablemente en los horizontes diagnósticos subsuperficiales, particularmente si se
trata de horizontes argílicos, alcanzando hasta 26 cmolc kg·1• Esta característica estaría
t:\1denciando que la capacidad de intercambio en estos suelos de regiones áridas, es más
jcpendieote de la fracción arcilla que del contenido de MO. El complejo de intercambio se
encuentra dominado por Mg.,.... y no por ca·'. como ocurre generalmente en los suelos de la zona
central del país. Aun cuando se trata de suelos no salinos, la CE puede alcanzar hasta 2,0 dS m·1•
los suelos con horizonte cámbico se han clasificado como Carnbortbids y aquellos con horizonte
arocilico como Paleargids. Existen muy pocos análisis fisicos y qulmicos de los escasos perfiles de
rueJos que se han descrito. En el Cuadro 3-16, se describen algunos análisis de un perfi1 de la
'erie Mincba (Typic Haplocambid).

111
Cuadro 3-16. Propiedades fisicas y químicas de la Serie Mincha (CIREN. 2005a)

Profundidad (cm) 0-8 8 - 28 28-50 50-7l


Distribución de partículas por tamaño (%) A, 8, 82 83
2·0,05 46,6 41!,6 22,6 16,6
0,05-0,002 36,0 34,0 14,0 14,0
< 0,002 17,4 17,4 63,4 69,4
Clase Textura! F F A 11
Densidad aparente (Mg m"1) 1,43 1,40 1,51 1.54
Agua retenida 33 kPa (%) 1 1 .00 1 1 ,00 32,50 36,40
Agua retenida 1.500 kPa (%) 8,25 6,43 22,50 24,70
Carbono orgánico (�•) 0,79 0,52 0,42
pH- 7,8 7,0 6.6 6,4
Conductlvidad eléctrica (dS m'1) 0,33 0,31 1,17 1.98
CaC03 equivalente (%) 0,50 0,00 0,00 0,00
Ca 1,39 1,31 1,25 1.28
Iones solubles Extracto Mg 1,12
0,77 0.70 0,75
de saturación (mmoL: L'1)
K 0,37 0.24 0,31 0,40
Na 3,63 2,66 10,10 12.80
HC03 (mmoL: L"1) 3,50 1,75 0,50 0,25
Cl (mmol.: L"1) 1,96 2,59 9,45 13,30
S04 (mmol. L"1) 1,12 1,06 3,41 10,50
RAS 3,49 2,65 10,10 1 1,68
Ca 3,70 3,20 7,10 8,70

Cationes extraíbles Mg 1,70 1,60 8,90 9,00


(cmolc kg'1) K 0,78 0,66 1,54 1.94
Na 0,25 0,23 3,23 4,48
CIC (piJ 7,0) (cmoL: kg-1) 9,24 8,73 24,60 23.90

Datos proporcionados por Femández (2004) para un suelo ubicado en el Parque Nacional Fray
Jorge, en el interior de las alturas de Talinay (entre 30° 34' S; 71°06'0 y 3 1 ° 30' S; 71° 1 1 ' O),
señalan que el pH es bajo, el contenido de MO es elevado y la relación C/N es elevada, lo que
implica una dinámica de incorporación lenta.

112
Figura 3-3. Patsaje con relieve moderado a ligeramente ondulado en las zonas intenorcs. Los suelos desarrollados a
partir de granito tienen una profundidad que varia entre 60 y 130 cm hasta la roca, característica que está asociada
principalmente a la intensidad de los procesos de erosión que, en este sector, son de moderados a severos.

f"igura 3-4. Perfil que caracteriza a algunos de los suelos de las zonas interiores desarrollados a partir de granito.
Aun cuando existe un incremento en el contenido de arcilla hacia los horizontes subsuperficiales, este incremento
e>l<iriu asociado a procesos pedogénicos de alteración sin iluviactón, a causa de la ausencta de rasgos de
tronslocación de arcillas (cutancs); por lo tanto, todos los suelos descritos en estas situaciones presentan un hori:ronte
ombico (B,. ).

113
Figura 3-5. Peñ:ü de la Serie Pintacura. Llama la atención el matiz del suelo, que varía desde 5YR hasta 1 OR, es
decir, desde el pardo rojizo oscuro hasta el rojo oscuro. Ese
t rasgo morfológico constituye una caractcristica
relevante, que señala al menos una importante segregación de óxidos de Fe. por lo tanto, la existencia de procesos
pedogénicos intensos a partir de la meteori1.ación de los materiales parentales.

Figura 3-6. Paisaje de la Serie Pintacum. El relieve es suavemente ondulado en posición de piedmoot o de tipo
aluvio-coluvial, con pendientes que pueden variar desde ligeramente ondulada (2 - 5%) hasta moderadamente
ondulada (8 - i 5%).

1 14
Figura 3-7. Perfil de un suelo desarrollado a panir de roca caiza
l en las áreas próximas a Punitaqui, que ocupan
posic1ones onduladas y de Jomajes. Su distribución aparece como bastante localizada y, en las prospecciones
realizadas. no se han descrito en otros sectores del interior.

3-8. Paisaje del Valle del río Elqui en los sectores más alws del �alle. Se puede apreciar que el relieve es
�scarpado con fuertes gradientes. Las montañas superan los 3.500 msnm y son frecuentes las cimas superiores a
msnm. La cadena montañosa está cortada por valles profundos, y las pendiemes son muy pronunciadas. Los
aluviales planos o casi planos del fondo del Valle son intensamente utilizados en agncultura.

115
Figura 3-9. Suelo San Julián en la Viña Tabalí (Sodic Haplotorrert). Se trata de un suelo sed1mentarío desarrollado
en una terraza del río Llmarí. {foto T. Reinsch)

Figura 3-lO. Paisaje del suelo San Julián eo Taball

116
Figura 3-11. Serie Quelén. Los suelos de esta Serie se ubican en posición de terraza aluvial, tienen ropografía plana,
o bien sólo en algunos casos, presentan pendientes de 2 a 5%. El sustrato común a todos ellos lo constituye una

mezcla de gravas redondeadas con arena y grava fina como material intersticial en porcentajes variables.

Fi!!lln 3-12. Paisaje de la Serie Quelén.

117
Figura 3-13. Serie Tahuinco. Suelos derivados de materiales graníticos en posición de coluvios y de piedmonts. Sus
pendientes son variables: 1-3% y 2-5% en las condiciones más planas y de J 5-20% y 20-30% las más escarpadas. La
característica común es que el sustrato de todos eUos está constitujdo por granito con diferentes grados de
meteorización o bien por arena granítica (del tipo maicillo).

Figura 3-15. Sucesión de niveles de terrazas marinas en la Región de Coqllimbo.

118
firura 3-16. En las terrazas bajas e iotenncdias, panicularmeote en las cercanías de In ciudad de Los Vilos y hacia
�1 none de ella (entre 30"00' y 31°45'). y en sectores próximos a la ciudad de La Serena, se encuentran dunas
�bilizadas que han dado origen a suelos de muy escaso desarrollo (Torripsamment). (Foto T. Reinsch)

FJV�ra 3-17. Detalle de los rasgos redoxim6rficos del perfil anterior en la fonna de nódulos de Fe y láminas
de Fe, cuya presencia sugiere un régimen más húmedo que el actual. También es probable que �tos suelos
-an ocupado una posición deprimida en el paisaje y que se encuentren, en la actualidad. en pos
iciones más altas a
cms:.� de actividad tectónica. (Foto T. Reinscb)

1 19
120
FIJ:ura 3-19. El horizonte petrocálcico C!>tá formado por una sucesión de capas
laminares en M• parte superior. (Foto T. Reinsch)

Figura 3-18. Suelos desarrollados sobre un horizonte petrocálcíco de naturaleza


pedogénica en los alrededores de la bahía de Tongoy, clasilicado como Natric
Petrocalc1d.

Figura 3-20 Paisaje del Suelo desarrollado sobre un horiwnte pcuocálcíw en


los alrededores de la bahía de Tongoy, clasificado como Natnc l'ctwcak:!.l
(Foto T. Rcmscb)
figura 3-21. En sectores como el denominado Las Cardas entre la S�na y Ovalle se encuentran suelos sobre un
Co�npán, sustrato compactado y cementado con s!lice y manganeso. Tam!lién se pueden encontrar suelos con
.arbonatos en el perfil y como pones endurecidos, aún cuando, más bien localizados. Ocupan la posición de terrazas
y también de coluvios, con pendientes de 1 a 3%, 3 a 8% hasta 8 a 15%.

ra :l-22. Paisaje del suelo descrito en Las Cardas. (Foto O. Spargaaren)

121
Figura 3-23. En las cercanías de Huentelauquén, con pendientes desde ligera (2 a 5%) a suavemente
onduladas (5 a 8%) existen suelos con elevada sodicidad y horizontes nálricos. (Foto T. Reinsch)

Figura 3-24. Superficie de un Natrargid, en Huentelauquén. con evidencias de materia orgánica dispersa
a causa de la elevada sodicidad.

122
Figura 3-25. Perfil del suelo ubicado en Huentelauquén y clasificado como Typic Natrargid. Suelo
poligenético profundo, con sucesión de horizontes que evidencian procesos diferentes. Se pueden
observar horizontes con estructura colurnnar y prismática. (Foto T. Reinsch)

f'Igura 3-26. Detalle que muestra la parte superior de las columnas en el suelo de Huentelauquén. (Foto
T Reinsch)

123
CAPÍTUL0 4
Suelos de la Zona Mediterránea Á rida
(Desde 32°00'LS hasta 37°45'LS)

Luzio, W., Seguel, O., Casanova, M. 2009. Suelos de la Zona Mediterránea Ári da (Desde
32°00' LS hasta 37°45'LS). pp: 125- 194. In: Suelos de Chile. {Luzio, W .. Edilor). Universidad de
Chtle.

125
4.1 Características generales de l a Zona

Durante el Cuaternario quedó definido el relieve actual de la Zona, esto es, la presencia de una
Depresión Intermedia, la Cordillera de Los Andes y la Cordillera de la Costa. Paralelamente, se
.. ••
generaron las planicies litorales y las terrazas marinas. Las glaciaciones terminaron de realizar la
modelación del paisaje en algunos sectores más marcadamente que en otros. Los materiales
acarreados desde la alta Cordillera de Los Andes, ya sea en la masa de hielo, en forma de lahares
o bien como arrastres aluvionales, fueron depositados preferentemente en la Depresión
Intermedia. Estos procesos disminuyeron la altura de las montañas al desgastarlas, formando
amplios valles por donde escurrieron los actuales ríos. Al mismo tiempo, esos sedimentos
conformaron el relleno de la Depresión Intermedia, dando origen a los materiales de partida para
la mayor parte de los suelos de este sector.

La Cordillera de Los Andes constituye el límite natural de Chile en el sector oriental. En ella se
pueden describir valles de altura cuyos rellenos están constituidos por abundantes sedimentos
glaciales y/o volcánicos (Figura 4-1, al final del Capítulo). Particularmente estos últimos han
..
tenido una amplia e intensa difusión durante el Terciario y el Cuaternario, manifestada a través de
abundantes bloques, bombas y gruesas capas de cenizas volcánicas que constituyen el material
parental de numerosos suelos. La Cordillera tiene un ancho promedio de 60 a 80 km y su mayor
altura se encuentra al interior de Rancagua, con cumbres que sobrepasan los 5.500 msnm. Los
suelos que se han podido desarrollar en esta gran Formación. presentan rasgos heredados de sus
materiales parentales y con una evolución pedogénica muy limitada. Sin embargo, se puede
plantear que la Cordillera de Los Andes ha tenido una considerable influencia en la formación de
muchos suelos de la Depresión Intermedia, a causa de la inestabilidad de los sistemas montañosos
y los consecuentes procesos erosivos y de arrastre de materiales que han formado el basamento
de esta última.

La Depresión Intermedia, considerada una fosa tectónica (Graben) de dirección aproximada norte
- sur, se encuentra flanqueada hacia el oriente por la Pre - Cordillera de Los Andes y hacia el
poniente por los cerros de la Cordillera de la Costa. Presenta un relieve desde plano hasta
moderadamente ondulado, con un ancho estimado entre 50 a l OO km. La Depresión Intermedia
en esta Zona no constituye una unidad continua, sino que está formada por una serie de cuencas
de origen tectónico de diferentes dimensiones, hidrografía, altura y características edáfícas. Las
cuencas están rellenas con sedimentos fluviales, glaciales, fluvio-glaciales y volcánicos, cuya
potencia es desconocida en su mayoría. Además, es necesario tener presente que esta Depresión
se encuentra surcada por numerosos y frecuentes cursos de aguas de dirección preferente este -
oeste que han construido valles de gran importancia edáfica y consecuentemente agrícola. Esta
característica se observa más marcadamente en el sector norte de la Zona, esto es desde Ja ciudad
de Chillán hasta la cuenca de Santiago. La altura promedio de esta Depresión es de 400 msnm.
Esta Depresión está rellena con más de 500 m de depósitos fluviales, aluviales, fluvioglaciales y
glaciales (Araneda et al., 2000).

La Cordillera de la Costa tiene un ancho variable de unos 40 a 60 km. con alturas máximas de
:: 000 m frente a Santiago y Rancagua. A partir de estas cimas y en dirección hacia el sur,
comienza a perder altura, en particular, al sur de la hoya del rio RapeL donde se deprime
"ruscamente, alcanzando alturas inferiores a los 1 .000 msnm. El Basamento Cristalino
Precámbrico (600 millones de afios) se puede observar en algunos afloramientos de ella, en su
.1yor parte expuestos, a causa de Jos intensos y profundos fenómenos de erosión que ha sufrido

127
y el consecuente arrastre de la cubierta meteorizada. El macizo costero es atravesado rl'í lo:.
grandes ríos de origen andino que desembocan en el Océano Pacifico, sin originar condtc1une�
deltaicas, principalmente a causa del gran desnivel entre el continente y el océano.

Las Planicies Costeras constituyen una Formación discontinua que, en muchos sectorl!s, �e
confunde con la Cordillera de la Costa. Localmente estas Planicies se identifican como tt.!rr;1zas
ubicadas en diferentes cotas, desde aproximadamente 4 a 34 msnm, y se caracterizan por
superficies planas con un relieve poco pronunciado. La costa propiamente tal, se caracteri:¿a por
presentar extensas playas de arena que se alternan con acantilados rocosos. Normalmente estas
playas se encuentran al norte de la desembocadura de los grandes ríos, a causa de la dirección sur
- norte de las corrientes litorales.

En la Figura 4-2 se muestra una aproximación de lo que significa un corte transversal oncnte -
poniente a la altura de la Región Metropolitana (Lavenu y Cembrano, 2008).

Cordillera Principal

Jlj;_!L
N S NW Sil N 1000

r: 1 .,
2.000
g f e
1.500
Cordtllera de la COQ8 Depresión Cen1ral
1000

□□
500

Om

w
Olan so 100 E

S w
1117•. ¡»-111
E

11!0
@ID
1,...
- --,¡¡¡-m- ..


d e b 8

Figura 4-2. Perfil de los ríos Volcán y Maipo y ubicación de los afloramientos de la superficie de las tobas y de la
lgnimbriUI Pudahuel. En los marcos 'a'-'g' se indica la altura de las Lobas en relación con el lecho de los ríos con linea
de trazos (Lavenu y Cembrano, 2008).

4.2 Suelos de los sectores cordilleranos

Este sector comprende las áreas de la Cordillera de Los Andes en las zonas ubicadas entre el
límite de las nieves eternas y la linea de la vegetación de altura. En ellas, hay localidades alto­
andinas, que muestran la concentración típica de las lluvias en invierno; otras presentan lluvias
irregularmente repartidas durante el año, e incluso dos máximas, en invierno y en verano. Sin
embargo, la escasez de datos de precipitación (sólida y líquida) y de temperatura de los suelos

128
impide alguna aproximación para establecer sus regímenes de humedad y de temperatura. La
físononúa vegetal es semejante a la de estepas de granúneas del tipo pajonal, tales como Stipa sp
y Festuca sp.

No existen reconocimientos de suelos de estas áreas, por lo cual sólo se pueden establecer
algunas generalizaciones provenientes de observaciones puntuales, pero que permiten formarse
una idea aproximada de los suelos de estos sectores. En todo caso. los procesos pedogénicos no
han tenido la intensidad suficiente para dar origen a suelos con una clara diferenciación de
horizontes. La mayoría son suelos esqueletales, con abundante pedregosidad en el perfil, de tipo
angular. La granulometría está dominada por la fracción arena. cuyo origen se encuentra en rocas
andesíticas y basálticas. Todas estas áreas debieran considerarse con una Clase YW de Capacidad
de Uso, esto es de preservación, sin intervención. La mejor aproximación taxonómica para estos
suelos es que se les puede considerar como Entisols.

4.3 Suelos de los sectores de la pre-cordHiera de Los Andes

Corresponde a áreas ubicadas en los primeros cordones de la Cordillera de Los Andes y algunos
cerros que se extienden, como prolongaciones de ella, hacia la Depresión Intermedia. En estas
áreas dominan dos posiciones geomorfológicas en las que se han desarrollado suelos
característicos: a) los cerros, piedmonts y planos aluvio-coluviales y b) las terrazas aluviales más
o menos planas, asociadas a los valles de los ríos que bajan desde la Cordillera.

4.3.1 Regiones de Valparaiso y Metropo litana (32 ..00' - 34°00' aprox.)

Los suelos en posición de cerros, piedmonts y planos aluvio-coluviales presentan un desarrollo


pedogénico interesante, pues la mayorfa de ellos ha evolucionado basta la formación de
horizontes diagnósticos subsuperficiales (B) y epipedones mólicos. Dominan las pendientes de 2
a 5% y de 8 a 1 5%, sin embargo en los sectores de lomajes y cerros son frecuentes las pendientes
de 15 a 20% y de más de 30%. El sustrato está constituido por rocas del tipo andesitas y dioritas
ya sea constituyendo masas más o menos continuas, o bien en forma de fragmentos,
principalmente angulares. La profundidad del solum generalmente es superior a 1 m y sólo en
algunos casos es ligeramente profundo (menos de 50 cm). La clase textura! del horizonte

...
superficial varía desde franca a franco arcillo limosa y en los horizontes más profundos va desde
franco arcillo limosa hasta franco arcillosa. El contenido de CO en el epipedón varía entre 1,6 y
2.1%, Jo cual es más bien bajo, pero suficieme para cumplir, conjuntamente con las demás
propiedades, con los requerimientos de un epipedón mólico. Los colores se mantienen en el
matiz 1 OYR, entre el pardo y pardo oscuro. Desde el punto de vista de uso y manejo, éstos
pueden ser muy variables. Las Fases más profundas y que se encuentra en las pendientes
menores. tienen Clase de Capacidad de Uso 1 y TI, en cambio aquellas Fases con menos de 50 cm
de profundidad y en pendientes superiores a 30°/o. han sido calificadas en Clases VT y VIL
Taxonómicamente, los suelos han sido clasificados en el Gran Grupo Tlaploxeroll. El análisis de
este grupo de suelos ha tenido que basarse en los escasos ejemplos que se pueden asimilar a esta
categoría, pues en la mayor parte de los reconocimientos agrológicos, estos suelos han quedado
fuera de estudio. Para esta discusión se han utilizado las Series Huingán, Los Cardenales y la
As>eiación Challay. En el Cuadro 4-1 se presentan algunas propiedades físicas y químicas de la
Sene Huingán (Fluventic Haploxeroll) que se encuentra en posición de piedmonts y planos
depositacionales profundos.

129
Cuadro 4-1. Propiedades físicas. qulm1cas y fis11:o-químicas de la Serie Hutngán (CIREN, 1996a)

Profundidad cm 0 - 28 28-58 58-91 91 - 122


DisLribución partículas por tamafto (%) A¡
2-1 0,1 4,0 0,9 3.2

1-0,5 3,6 14,1 1 1 ,0 8,4

0,5-0,25 7,0 1 1 ,0 12,1 6.4

0,25-0,10 12,6 1 1,4 10,6 9,2

0,10-0.05 14,7 15,9 9,9 24,6

2-0.05 38,0 57.4 44,5 51,8

0,05-0,002 40,1 30,1 38,9 37,3

< 0.002 21,9 12.5 16,6 10,9

Clase lextural F Fa F F
Agua retenida 33 kPa (%) 26,0 15,0 20,0 15.0

Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 13.0 8,0 10,0 7,0

Carbono orgánico (%) 1,6 0.4 0,8 0,2

pHo¡;... 7,9 7,5 7,5 7,6


Conductividad eléctrica (dS m'1) 1,0 0.7 0,9 0,8

Ca 0,0 0,0 0,0 0,0

Complejo de cambio
Mg
(cmolc kg'1) K 0.4 0..2 0,2 0,2

Na 0.7 0,6 0,6 0,7

Suma de bases (cmole kg·) 15,0 1 1 ,2 13,3 13,1

CIC (cmol, kg· ) 15,8 12,8 14,9 14,3

Saturación de bases (%) 95.0 88,0 89,0 92,0

Los suelos en posición de terrazas aluviales. aun cuando ocupan superficies limitadas, son
profundos (> 120 cm) con topografia plana o casi plana ( 1 a 3%), constituidos por sedimentos
aluviales de granulometría media y gruesa, en algunos casos mezclados con materiales de origen
volcánico. La clase textura! superficial es franca y en profundidad es franco arenosa fina; el
sustrato está constituido por arena gruesa. La penetración radical alcanza los horizontes más


profundos y las raíces finas pueden ser comunes a los 1 00 cm de profundidad. Los colores se
mantienen en los matices IOYR y 7.5YR. El contenido de CO no supera 1,6% en el epipedón; el
1
pH es superior a 7,7 y, en algunos suelos, La CE puede alcanzar 1,4 dS m· • Si bien la CIC puede
ser baja, las condiciones climáticas favorecen la alta SB. Son suelos con ninguna, o bien escasas
limitaciones de uso, razón por la cual se les ha ubicado en Clases 1 y Il de Capacidad de Uso. En
el Cuadro 4-2 se presentan algunas propiedades físicas y químicas de la Serie Estero Seco (Ultic
HaploxeroU), considerada como representativa de este grupo.

1 30
Cuadro 4-2. Propiedades fisicas, qufmicas y fisico-químicas de la Serie Estero Seco {CJREN, 1996a)

Profundidad (cm) 0 - 36 36-56 56 - US 125y+


Distribución panículas por tamaí'lo (%) 2C
2-1 0,8 1,8 1,6 5,6
1-0,5 6,4 7,9 8.0 4,1
0,5-0,25 6,2 1 1 ,4 11,1 32,8
0,25-0,10 9,4 15,6 19.6 17.2
0,10-0,05 10,2 12,4 19,6 12,5
2-0,05 32,0 49.1 59.9 72:2
0.05-0,002 47,1 34,9 28,8 22.6
<0,002 20,9 16,0 1 1,3 5.2
Clase textura! F Fa Fa Fa

Agua retenida 33 lePa. (%) 22,0 15.0 1 1.0 9.0


Agua retenida 1.500 kPa (%) 11,0 10,0 7,0 5,0
Carbono orgánico (%) 1,6 0,9 0,4 0,2

pH.,.... 7.9 7,6 7.5 7,7


1
Conductividad eléctrica (dS m' ) 1,4 1.4 0,9 0.5

Ca 1.8 0.0 0.0 0,0

Mg 1,3 1,0 0,7 0,6


Complejo de
1
cambio (cmol� kg' ) K 0,3 0,3 0.2 0,2

Na 0,5 0,4 0,4 0,3

ere (cmol, kg' ) 12,0 9,5 8,4 5,9

Saturación de bases % 93,0 74,0 80,0 80,0

4.3.2 Regiones de O' Higgins y Maule (34°00' - 36°00' apro x .)

Los suelos que se encuentran en posición de cerros, con pendientes de 1 5 a 20% y de 30 a 50%,
son generalmente delgados a ligeramente profundos (entre 40 y 60 cm de profundidad) sobre
rocas frescas del tipo dioritas o andesitas. Las clases texruraJes pueden ser muy variadas, desde
ftanco arenosa hasta franco arcillo limosa en superficie, y desde franca con gravas basta franco
arcillosa en profundidad. El contenido de CO en el horizonte superficial puede fluctuar entre 1,5
y 3,0%, cantidad suficiente para un epipedón mólico, como efectivamente se presenta en varios
suelos que, además, mantienen una SB elevada a través del perfil, por lo cual han sido
clasificados como Haploxerolls. Los colores se encuentran en el matiz lOYR, pero con valor y
croma alto (6/3 - 6/4). El arraigamiento disminuye gradualmente hacia los horizontes más
profundos, hasta encontrar raíces finas y medias escasas u ocasionales en el contacto con el
sustrato. En algunos suelos los procesos de iluviación han sido lo suficientemente intensos como
para alcanzar a desarrollar horizontes argílicos. La utilización de estos suelos está restringida a
pastos naturales y, sólo en algunos casos, para forestales. Se les ha considerado como suelos de
Clases VT y Vll de Capacidad de Uso. En el Cuadro 4-3 se presentan algunas propiedades fisicas
> quimicas de un perfil considerado representativo de la Asociación Challay (Lithic Haploxeroll).

131
Cuadro 4-3. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quunicas de un perfil de la Asoctación Challay (CIR.EN 1 •19Gb)

Profundidad cm 0 - 16 16-42
Distribución particulas por lllmaño (%) 81
2-1 4.20 3,80
1-0.5 9,10 &,00
0,5-0,25 10,40 8,10
0,25-0,10 10,50 8,50
0,10-0.05 9,50 7.90
2-0,05 43.70 36.30
0.05-0.002 38,10 37,40
< 0.002 18,10 26 30
Clase textura! F F
Carbono orgánico (%) 1,79 0.77
5,68 5,76
Ca 8,62 17,47
Mg 1,46 3,22
CompleJo de
cambto (cmol<kg'1) K 0,17 0.11
Na 0,15 0.37
Al 0,46 0.79
Suma de bases (cmol. k ) 10,40 21,17
CIC (cmol, 16,17 22,68
Saturación de bases (%} 64 93
Saturación de Na % 0,9 1,6

Un segundo grupo de suelos se presenta en posición de piedmonts y coluvios con pendientes


...
inferiores a los del grupo anterior, de 3 a 5% y de 8 a 15%. Son suelos moderadamente profundos
a profundos sobre un sustrato de gravas angulares con matriz arcillosa. Los colores son bastante
uniformes dentro de los matices lOYR y 7.5YR, haciéndose más rojizos hacía los horizontes más
profundos; la arcilla siempre se incrementa hacia los horizontes inferiores hasta franco arcillo
limosa o bien arcillosa. El contenido de CO puede variar mucho, desde 0,8 hasta 6,3%, en
particular en los epipedones. Algunos suelos han tenido un desarrollo pedogénico suficiente para
la formación de un horizonte argílico, con claros rasgos de iluviación. además de un considerable
incremento de arcilla hacia los horizontes subsuperficiales. A causa de su relieve la mayoría de
las fases presenta buen drenaje. La mayoría de los suelos de este grupo presenta mejor aptitud de
uso que los del grupo anterior. La mayoría de las Fases se ha ubicado en Clases 11 y Ill de
Capacidad de Uso y solamente aqueUas con las pendientes más fuertes, en Clase IV. En el
Cuadro 4-4 se presentan algunas propiedades ñsicas y químicas de la Serie Huccán (Ultic
Haploxeroll), considerada como representativa de este grupo.

132
Cuadro 4-4. Propiedades fisicas, qulmicas y fisico-quimicas de la Serie Huecáo (CTREN, 1997b)

Profundidad cm 0 - JS lS-60 60-9S


Distribución de partículas por tamafto (%) B, Bz
2-0,05 48.2 52,0 44.0
0,05-0,002 30.6 28,7 34,2
< 0,002 21.2 19,3 21.8
Clase textura! F F f
Agua retenida 33 kPa (%) 30,0 30,0 33.0
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 17,0 16,0 19.0
pH,... 6.3 6,3 7,0
Carbono orgánico (%) 1.2 0,6 0,2
Ca 16,8 20,0 26,1
Cationes Mg 3,0 :L6 5,0
intercambiables
(cmol.,kg'1) Na 0,4 0.5 0.8
K 0,4 0,2 0,1
Suma de bases (cmot., kg'1) 20.6 24,3 32,0
CIC (cmolc kg'1) 29,1 32,4 39.4
Saturación de bases (%) 71,0 75,0 81.0

Otros suelos que ocupan terrazas altas y lomajes suaves en la precordillera, son derivados de
cenizas volcánicas holocénicas cuyas propiedades químicas y fisico-químicas son particularmente
uniformes. Las pendientes que dominan son de 1 a 3% y de 2 a 5%, pero pueden alcanzar valores
de 8 a 15% localmente. Los suelos son profundos o muy profundos � 120 cm) y solamente en
algunos casos puede presentarse un sustrato de gravas angulares y redondeadas a menos de un
metro de profundi dad. Los horizontes superficiales presentan color pardo oscuro o negro (en el
matiz lOYR) y hacia los horizontes más profundos el matiz se hace más rojizo (7.5YR y 5YR).
en tanto el matiz y el croma se hacen más fuertes (4/6 - 5/6). La clase textural varia desde franca
a franco limosa, manteniendo una gran uniformidad entre los suelos y dentro de cada perfil. Se
trata de suelos bien estructurados, con buena penetración radical, con un elevado contenido de
CO en los epipedones (sobre 5%), un pH entre 6,0 y 6,5 y una SB inferior a 50% en lodos los
perfiles. Sus propiedades fisicas sumadas a un buen drenaje, hacen que estos suelos muestren
excelente aptitud agrícola, que se refleja en que la mayoría de las Fases de las diferentes Series
descritas haya sido calificadas en Clases I. n y lll de Capacidad de Uso.

Estudios recientes (Stolpe et al., 2008) han dejado en evidencia que algunos de estos suelos
Jerivados de cenizas volcánicas, tal como el suelo Bramadero, ha tenido una evolución de tal
"llagnitud que ya no se puede considerar como un Andisol. Esto se debe a que la densidad
aparente (Db) de la mayoría de los horizontes se encuentra entre 0,95 y 1 , 1 7 Mg m.J, siendo el
3
limite de 0,9 Mg m· , y porque su mineralogía (fracción < 0,002 mm) está dominada por
haloisita, mineral resultante de la desilicificación de alófana e imogolita (Tan, 2000). Aun cuando
e:• contenido de [Al ox+Y2Fe0x] se mantiene sobre 2% hasta los 90 cm de profundidad, no es
�..1ficiente para que el suelo califique como un Andisol (Figura 4-3, al final del Capítulo). Las
� ncipales Series descritas y que pertenecen a este grupo son Bramadero, Radal y Los Queñes.
L el Cuadro 4-5 se presentan algunas propiedades físicas y químicas de la Serie Bramadero
'ndic Haploxeroll).

133
Cuadro 4-5. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quimicas de la Serie Bramadero (CTREN, 1997b)

Profundidad cm 0 - 17 1 7 - 48 48-82 82- 120


Distribución paniculas por tamaño(%) Ae A1 AB B
2-1 0,7 1,4 0,8 0,4
1-0.5 5.1 6,7 4.4 4,2
0.5-0,25 1 1 ,2 13,3 10.6 1 1 .4
0,25-0,10 13.3 15,7 14.7 15,9
0.10-0,05 10,5 11,1 11.1 10,4
2-0.05 40,8 48.2 41,6 42,3
0.05-0,002 34,5 29.5 36,9 32,3
< 0,002 24,7 22,3 21,5 25.4
Clase textura! F F F F
Agua retenida 33 kPa {%) 35,0 35,0 34,0 46,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 18,0 17,0 20,0 30.0
Carbono orgánico (%) 5,2 3,1 1,9 1,1
pH"",. 6,0 6.2 6,1 6,0
Ca 10,2 7,9 5,4
Complejo de Mg 1.1 1,2 2,0
cambio (cmolekg'1)
K 1.5 1.2 1,0
Na 0,1 0,1 0,3
Suma de bases (cmol< kg' ) 12,8 10,4 8,6
CIC (cmol.: kg' ) 31.1 25,8 28,0
Saturación de bases (%) 41,0 40,0 31.0
Retención de P {%) 90,0 92,0 93 0
. 85,0
Al ox (%) 1,52 2,19 •
2.42
Fe ox (%) 0,43 0,52 0,45
Al ox + V,Fe ox (%) 1,73 2,45 2,65
Vidrios (fracción 0,02-2 mm) (%) 87,1 91,2

Los suelos más recientes, desarrollados a partir de sedimentos aluviales medios y finos, ocupan
una posición de terrazas planas o casi planas, con 1 a 3% de pendiente y con sustratos muy
variados: brecha volcánica, arenisca y gravas redondeadas y subredondeadas. Se trata de suelos
planos o casi planos que, solamente en algunos sectores, pueden alcanzar un relieve suavemente
ondulado (5 a 8%). El resto de las propiedades flsicas y morfológicas presenta mayor dispersión,
lo cual podría considerarse como normal debido a la dinámica de los procesos que han dado
origen a los materiales de partida de estos suelos. De esta manera, las clases rexturales pueden
variar desde franco arenosa fina hasta arcillosa en los diferentes horizontes; los colores se
encuentran en Jos matices 5YR, 7.5YR y IOYR; el espesor de los suelos varía desde profundo a
delgado; el drenaje es de bueno a imperfecto, por lo tanto también sus aptitudes agricolas son
muy variadas, de manera que se pueden diferenciar Clases ll, l l l y IV de Capacidad de Uso, en
función de la severidad de las limitaotes sedaJadas. Si bien es cierto que sus propiedades y
aptitudes pueden ser variables, se han considerado dentro de un mismo grupo a causa de la
posición de terrazas aluviales en que se encuentran. lo que implica una segmentación importante

134
del paisaje y una diferenciación en el uso y el manejo de los suelos. Estas variabilidades en sus
propiedades se reflejan también en la clasificación taxonómica de los suelos, de tal manera que
ellos pueden pertenecer a los Órdenes Mollisol, Inceptisol y Alfisol.

Las principales Series de Suelos que responden a estas características son: Condell, Guatas, Las
Trancas, Romeral y Coguil. En el Cuadro 4-6 se presentan algunas propiedades físicas y químicas
de la Serie Romeral (Andic Dystroxerept).

Cuadro 4-6. Propiedades fisicas, qulmicas y fisico-quimicas de la Serie Romeral (CIREN. 1997b)

Profundidad (cm) 0 - 22 22-38


Distnoución panículas por tamaño (%) A1
2-1 2,3 1.8
1-0,5 1 1,6 12.1
0.5-0,25 16,1 16,6
0,25-0, 1 0 14,3 15,2
0,10-0,05 1 1,6 1 1 ,9
2-0,05 56,1 57.6
0,05-0,002 28,9 28,2
< 0,002 15,0 14.2
Clase textural Fa Fa
Carbono orgánico (%) 3.2 3.1
pH"'"" 6,1 6.5
Ca 7,3 9,6
Complejo de Mg 0,8 0,8
cambio (cmolckg'1)
K 0,7 0,4
Na 0.3 0,5
Suma de bases (cmolc kg·) 9,2 1 1.2
CIC (cmolc 19,8 20.8
Saturación de bases(%) 46 54

Retención de P (%) 65 69
Al ox (%) 1,2 1,3
Fe ox (%) 0,37 0,4
Al ox + Y.Fe ox (%) 1,39 1,51
Vidrios (fracción 0,02-2 mm) (%) 69,0 75,3

4.3.3 Región del Bío-Bío (36°00' - 37°45' aprox.)

En el sector pre-cordillerano de esta Región. los únicos suelos de los que se tienen datos
morfológicos y analíticos confiables son aquellos que se encuentran en posición de terrazas
ah.\•ates asociadas a los ríos importantes de la zona, tales como el Laja y el Duqueco (Figura 4-4,
al tina! del Capítulo). Esto se debe a que en los reconocimientos de suelos regionales, esos
5ectores aparecen como las áreas con mayor potencialidad de utilización agrícola. Se les reconoce
un matcriaJ parental de origen volcánico, aun cuando en muchos casos no se hicieron los análisis
e-.¡�cíticos para determinar si existen o no propiedades ándicas. Los suelos ocupan posiciones de

135
terrazas aluviales altas. con pendientes entre 1 y 3%. En su mayoría son suelos solo üger•mente
profundos, es decir hasta 75 cm. sobre un sustrato de arenas y gravas de origen aJuv¡al. pero
también mezcladas con materiales gruesos de origen volcánico. Los horizontes superfic .1les y
subsuperficiaJes presentan color pardo rojizo oscuro en el matiz SYR y el sustrato puede 11egJr a
tener un color gris muy oscuro. Las clases texturales varían entre franco arenosa y franco hr10sa,
con estmctura de bloques subangulares; en cambio, en los sustratos las clases texturales son
siempre arenosas y sin estructura (grano simple). El arraigamiento es moderado en el suelo, con
un decrecimiento abrupto en el sustrato. El pH en todos los horizontes se mantiene alrededor de 6
y la SB no es superior a 20% en todos los suelos. Algunos cumplen con los requerimientos de las
propiedades vítricas, por lo que han sido clasificados como Andisols. Presentan buen drenaJe, aun
cuando, en general su aptitud agrícola es limitada, por lo que las Fases de las distintas Series
descritas varían entre l V y Vil de Capacidad de Uso, dependiendo de la profundidad. cantidad de
gravas y clases texturales (muy gruesas). Las Series Antuco y Manque! se pueden considerar
como representativas de este grupo. En el Cuadro 4-7 se presentan algunas propiedades físicas y
químicas de la Serie Antuco (Humic Vitrixerand).

Cuadro 4-7. Propiedades fisicas, qulm1cas y fis•co-quimicas de La Serie Anruco (ClREN, 1999)

Profundidad (cm) 0 - 15 15-35 35 - 45 45-75


Distribución partículas por tamaí'lo (%) Al Az AC
2-1 8,5 22.3 26.2 23,0
1-0,5 11.1 19,3 28,5 3 1 .6
0,5-0.25 12.2 19,6 24,3 27,6
0,25-0.1 0 14.8 20,3 15.3 14,2
0.10-0,05 23.1 10.3 3,7 2,5
2-0,05 69,7 91,8 98,0 98,9
0,05-0,002 27.7 8.0 1,8 1.0
< 0,002 2,6 02 0,2 0,1
Clase textura! fa 8 a a
Densidad aparente (Mg m· ) 1.38 1,59 1,67 1,62
Agua retenida 33 kPa (%) 1 !.9 8,8 5,8 5.8
Agua retenida 1.500 kPa (%) 5,8 4.7 2.3 2.3
Carb<lno orgánico (%) 2.47 0,88 0,32 0,16
pH- 5.8 6,0 6,3 6.3
Retención de P % 35 43 22 18
Ca 1,28 0.61 0.64 0.49
Mg 0,15 0,11 0,11 0,09
Complejo de cambio
K 0.13 0,06 0,03 0,03
(cmolc kg'1 )
Na 0,03 0,01 0,00 0.01
Al 0,03 0.07 0,00 0,00
Suma de bases(cmol., kg·) 1,59 0,79 0,78 0,61
ClC (cmolc kg' ) 7,75 3,17 3,45 1,49
CICE (C[C efectiva) (cmol0 kg.1) 1,62 0,86 0,78 0.61
Vidrio (Fracción 0,02 - 2 mm) (%) 68,0 40,0 34,0 32,0
Al OX + �Fe ox (%) 0.80 1,06 0,62 0,56
Saruración de bases %) 21.0 25,0 23,0 41.0

136
4.4 Suelos de la Depresi ón Intermedia

Corresponde a un Graben de relieve plano a moderadamente ondulado que se ha formado entre


la Pre - Cordillera de Los Andes y los cerros de la Cordillera de la Costa. No constituye una
unidad fisiográfica continua, sino que está formada por una serie de cuencas de origen tectónico
de diferentes dimensiones, hidrografia, altura y características edáficas. Las cuencas están
rellenas con sedimentos fluviales, glaciales, fluvio-glaciales y volcánicos, a partir de los cuales
se han desarrollado los suelos del sector.

4.4.1 Regi o nes de Valparaíso y Metropolitana (3roo• - 34°00' aprox.)

Suelos en terrazas aluviales. Los suelos que ocupan la posición de terrazas aluviales,
abanicos y conos generados por la acción de las corrientes superficiales, presentan varias
características comunes, que los identifican como provenientes de sim1lares procesos geológico­
pedogénicos (Figura 4-5, al final del Capítulo). Todos ellos se encuentran.. geográficamente,
asociados a cursos de ríos actuales ocupando las terrazas bajas e intermedias en el paisaje, o bien,
como terrazas denominadas remanentes, asociadas a cursos de ríos que ya no están presentes. El
- .
relieve es siempre plano o casi plano, con muy escasas situaciones donde podría llegar a ser
ligeramente ondulado (2 a 5% de pendiente). La mayoría de estos suelos son profundos, entre
100 y 140 cm hasta la profundidad de descripción. pues el sustrato no siempre es visible a esa
profundidad. Cuando se describe, el sustrato consiste, para la mayor parte de los suelos, en el
típico sedimento de origen aluvial constituido por gravas redondeadas o facetadas con una matriz
de arena media o gruesa (Figura 4-6, al final del Capítulo); en otros suelos la matriz puede ser
franco arenosa, franco limosa e incluso franco arcillosa. El sustrato aluvial puede limitar en
forma importante la profundidad del suelo, como ocurre, por ejemplo, en la Serie Putaendo, que
-;e encuentra a los 34 cm de profundidad. La mayoría de estos suelos son de clase textura! media a
.;mesa (desde franca a arenosa gruesa) a través del perfil, con un incremento de la fracción gruesa
con la profundidad. Solamente algunos suelos presentan clases texlurales medias y finas, las
cuales, generalmente, se mantienen a través del perfil; es el caso de las Series La Ligua, Las
Chilcas, Mapocho y, en parte, la Serie Maipo. El color de los horizontes superficiales es pardo a
pardo oscuro en el matiz IOYR y más raramente en el matiz 7.5YR. Solamente los suelos La
Ligua y Las Chilcas tienen un color pardo rojizo oscuro en el matiz 5YR. En profundidad, el

'
..:olor generalmente tiene un croma y un valor (MunseU) más elevado que en la superficie (3/4 y
.¡ 4) con la excepción de aquellos suelos que manifiestan problemas de drenaje y evidencias de
:-educción en algunos horizontes, como ocurre en las Seóes Pataguas, Codigua y algunas Fases de
Rinconada de Lo Vial.

La estructura es, para la mayoría de los suelos, de bloques subangulares medios y gruesos, de

zra_do débil y moderado, y raramente fuerte. Los horizontes más profundos pueden no tener
estructura, ya sea corno grano simple (Series Codigua, Tsla de Tluechún y Liray) o bien maciza
Series Las Chilcas, Las Varillas y Pataguas). Las raíces finas y medias, aunque escasas, pueden
alcanzar hasta los horizontes más profundos y solamente las Series Lampa, La Ligua, Putaendo )'
Rinconada de Lo Vial no se observan en los horizontes más profundos. El pH varía entre 6,8 y
S.2 para casi todos Jos suelos considerados, donde Jos mayores valores se encuentran en los
boriLontes inferiores. La SB es siempre superior a 75%, sin tendencia especial dentro de los
perlilcs. Muchos suelos se han descrito con carbonato de calcio en la matriz y en mayor cantidad
en los horizontes superficiales. Esto se ha atribuido a su incorporación por las aguas de riego. en
�pt'ual los suelos regados con aguas del río Maipo, como ocurre en la Serie Santiago (5%).
So •mente en la Serie La Higuera (Calcixeroll), la presencia de carbonatos se consideraría como

137
pedogénica, con 34, 1 % en el horizonte superficial y 21 ,4% en profundidad. La mayoría de estos
suelos presenta algún nivel de salinidad a través del perfil. pero no superior a 2,5 dS m·•.

La mayoría son suelos que presentan buena penneabilidad y buen drenaje. Solamente en al� unas
Fases el drenaje puede ser de moderado a imperfecto, especialmente cuando el relieve prcsl:nta
una ligera a moderada concavidad (como en algunas Fases de las Series Mapocho, Líray y
"'
Pataguas). Las propiedades descritas para estos suelos determinan que ellos posean buena aptitud
agrícola para la mayoría de los casos, de tal manera que las Clases de Capacidad de Uso varían de
una Serie a otra entre I y m. Las Fases con drenaje imperfecto pueden mostrar una aptitud más
limitada, de tal manera que se han calificado en Clase lV. Desde el punto de vista taxonómico, es
notable la gran unifonnidad que se encuentra y que evidencia una gran similitud en materiales de
origen y en procesos pedogénicos. De esta manera, de todos los suelos seleccionados para este
análisis (30 Series), el 80% se clasificó en el Gran Grupo Haploxeroll, Sub Grupos Fluventic.
Ultic y Entic. El resto corresponde a lnceptisols, Gran Grupo Haploxerept. A manera de ejemplo
se presentan en los cuadros 4-8 y 4-9, las propiedades de dos suelos considerados como
representativos de este grupo: Maipo (Fluventic Haploxeroll) y Codigua (Entic Haploxeroll).

138
Cuadro 4-8. Propiedades tlsicas, quimicas y fisico-qulmicas de la Serie Maipo (CIREN, 1996a)

0 - 16 1 6 - 33 33 - 50 50-74 74-92 92- 120


Profuodidad (cm)
A An Bt Bz c. c1
2-1 1,0 2,3 2,8 2,8 3,5 4,9
1-0,5 3,6 3,4 4,6 7,3 8,0 9,4
Distribución 0,5-0,25 5,4 4,9 5,3 7,2 8,5 9,3
partículas 0,25-0,10 15,8 12,9 6.3 8,1 9,5 1 1 ,5
por tamaf!o 0,10-0,05 16,2 14,5 6,8 7,9 10,8 10,7
(%) 2-0,05 42,0 38,0 25,8 33,3 40.3 45,8
0,05-0,002 31,7 39,7 40,6 34,9 31,9 31,6
< 0,002 27,3 22,3 33 6 31 8 27,8 22,6
Clase textura! FA F FA FA FA F
Densidad aparente (Mg m· ) 1,5 1,6 1,7 1,9 1,9 1,8
Agua retenida 33 kPa (%) 21,0 22,0 24,0 23,0 27.0 22,0
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 13,0 14,0 16,0 16,0 18,0 13,0
Carbono orgánicu (%) 1,5 1.2 1,2 0,8 0,4 0,3
pH .,ua 8,0 8,0 7,8 7,7 7,7 7,6
Conductividad eléctrica (dS m"1) 0,7 0,5 0,4 0,4 0,5 0,8
CaC03(%) 2,7 2,3 0,0 0,0 0,0 0,0
Ca 21,3 19,5 19,0 20,0
Complejo de
Mg 2,3 2.1 2,2 2,1
cambio
K 2,2 0,5 0,6 0,6 0,5 0,5
(cmol0 kg"1)
Na 0,2 0,3 0,5 0,7 0,8 0,9

-
Suma de bases cmol, k 24,7 22,9 22,5 23,5
CIC (cmolc kg· ) 17,9 18,1 30,5 28,7 26,4 26,3
Saturación de bases (%) 81,0 80,0 8 5,0 89,0

Cuadro 4-9. Propiedades fisicas, qufmicas y flsico-químicas de la Serie Codigua (ClREN. 1996a)

Profundidad cm 0-22 22 - 40 40-55 55-70 70- 100


Distribuciónpanículas por tamaño(%) Á¡ c. 2c2 2CJ 3C4
2-1 0,8 1,7 3,7 1,5 4,0
1-0,5 3,9 9.2 18,8 11,0 16,0
0,5-0,25 15,6 49,1 51,8 51,2 42,5
0,25-0,10 19,4 28,7 20,8 29,7 30,5
0.10-0,05 14.7 6,2 3,1 4,9 5.0
2-0,05 54,4 94,9 98,2 98,3 98,0
0,05-0,002 25.9 4,9 1,8 1.7 2,0
< 0,002 19,7 0,2 0,0 0,0 0,0
Clase lexlural Fa a a a a
Densidad aparente (Mg m· ) 1,7
Agua retenida 33 kPa (%) 22 5 5 4 5
Agua retenida 1.500 kPa (%) 12 3 3 2 3
Carbono orgánico (%) 2,4 0,5 0,1 0,1 0,1
pHagua 7,7 8,2 8,4 8,4 8,4
Conductividad eléctrica (dS m"1) 1,0 0,5 0,4 0,4 0,6
CaCOJ % 2,8 1,4 1,2 1,0 1,4
Ca n.d n.d n.d n.d n.d
Complejo de cambio Mg n.d n.d n.d n.d n.d
(cmolc kg"1) K 0,2 0,1 0,1 0.1 0,1
Na 0,6 0,4 0,3 0,3 0,3
CJC (cmolc ki) 20,6 6,4 5,0 3,6 4,3

139
Suelos en postcton de cerros. Éstos corresponden a prolongaciones de los cerros d.. la
Cordillera de Los Andes que se internan hacia la Depresión Intermedia, dando origen tk,Je
lomajes suaves hasta cerros muy escarpados con pendientes superiores a 50%. Es esca�a la
información que se tiene de los suelos que se encuentran en estas posiciones, pues en la mavona
de los reconocimientos realizados por las instituciones del Estado, se ha considerado que son
suelos sin aptitud agrícola y que, además, están por sobre la cota de riego, por lo tanto no se
habría justificado su reconocimiento y caracterización. A partir del año 2000 aproximadamente.
se han incrementado en forma considerable las plantaciones frutales en esta clase de suelos,
particularmente en la regiones de Valparaíso y Metropolitana (Figura 4-7, al final del Capitulo).
Por esta razón, es necesario proporcionar algunos elementos de juicio acerca de sus propiedades a
partir de los escasos datos disponibles.

Topográficamente presentan pendientes de 8 a 1 5%, de 1 5 a 20% y más de 50% en los sectores


más escarpados; son suelos ligera a moderadamente profundos (75 cm hasta la roca) sobre un
sustrato constituido por rocas básicas del tipo andesitas y dioritas con diferentes grados de
meteorización. Los colores en superficie son pardo oscuros en los matices 7.5YR y lOYR que.
hacia los horizontes más profundos, puede llegar a un rojo amarillento (5YR4/8), como ocurre en
el perfil descrito para la Asociación La Lajuela. La mayoría de estos suelos son de clases
texturales medias y finas (franco arclllo limosa basta arcillosa), con una tendencia a hacerse más
fmas hacia los horizontes en contacto con el sustrato. Presentan buena estructura, de bloques
subangulares finos y medios en todos los horizontes y sólo en algunos suelos puede ser maciza.
Presentan buena penetración radical, limitada solamente por la presencia del sustrato. El pH es
variable, desde 5,5 hasta 7,5, al igual que la SB, que puede variar entre 64 y 100%. No se han
descrito suelos con salinidad ni con carbonatos, aun cuando no se descarta la presencia de estos
últimos en algunos suelos, como herencia de sus materiales parentales. Todos presentan buen
drenaje y buen escurrimiento superficial; a pesar de ello, solamente algunos suelos han
evidenciado procesos de erosión moderada. Al respecto, se estima que estos procesos erosivos
podrían ser más intensos y frecuentes de los descritos y que incluso podrían acentuarse, por
efecto del uso agrícola actual al que están sometidos.

Prácticamente todos los suelos descritos presentan pedregosidad angular y subangular a través del
perfil (moderada a común) y la rocosidad se hace abundante en las Fases con pendientes más
escarpadas (>50%). A causa de sus propiedades y posición en el paisaje, se les considera en
Clases V1 y vn de Capacidad de Uso, independiente del uso actual al que están sometidos. Para
el análisis de este tipo de suelos se ha utilizado la información proveniente de los perfiles que
califican a las Asociaciones de Suelos en los Estudios Agrológicos respectivos; éstas son las
Asociaciones La Parva, Mansel (figuras 4-8 y 4-9, al fmal del Capítulo), Challay y La Lajuela
(figuras 4-10 y 4-11, al fmal del Capítulo). La gran variabilidad de suelos que se puede encontrar

-
en una agrupación cartográfica de esta naturaleza se reneja en la variabilidad taxonómica de
ellos; de esta manera se han descrito Palexerolls, Haploxerepts, Haploxerolls y Haploxeralfs. En
el Cuadro 4-10 se presentan las propiedades de un perfil representativo de uno de los miembros
de la Asociación La Lajuela (Ultic Haploxeralf).

140
Cuadro 4-10. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Asociación La
Lajuela (CIREN, 1996b)

Profundidad (cm) 0-12 12-28 28-50 50-70 70 +


Distribución partículas por tamaño(%) A1 Bm Brll Bt23 e
2-1 4.6 2.6 4.0 2.4 7.8
1-0,5 7.0 6.4 8.0 6.1 16.2
0,5-0,25 7.3 6.6 7.6 6.6 12.4
0,25-0,1 0 9.8 8.8 8.0 8.6 10.4
0,1 0-0,05 13.2 10.1 8.5 10.8 1 1 .6
2-0.05 41.9 34.5 36.1 34.5 58.4
0,05-0,002 39.3 36.8 35.8 34.3 30.7
<0,002 18.8 28.7 28.1 31.2 10.9
Clase textura! Pa F FA FA FA
Agua retenida 33 kPa (%) 27 21 25 24 19
Agua retenida 1 .500 k:Pa (%) 13 15 14 15 ll
Carbono orgánico (%) 4.4 2.4 l.5 0.9 0.6
H .., 5.4 5.4 4.8 5.0 5.0
Ca 6.0 6. 1 4.0 4.2 3.7
Complejo de cambio Mg l .O 1.6 1.8 2.3 2.3
(cmolc kg'1) K 0.3 0.4 0.5 0.4 0.2
Na 0.0 0.1 0.0 0. 1 0.1

Suelos en posición de Piedmont. Estos suelos ocupan una posición intermedia entre los
cerros y los valles intermontanos y, en su mayoría, sus materiales de origen provienen de los
sedimentos transportados desde las partes más elevadas del relieve. Las pendientes más suaves
son de 1 a 3% y las más pronunciadas son de 8 a 15% (Figura 4-12, al final del Capítulo). Son

suelos profundos y moderadamente profundos y solamente en algunos casos son suelos delgados
(45 cm en la Serie Vichiculén). El sustrato está constituido por gravas angulares y subangulares
asociadas a una matriz muy variable, cuya granulometría puede ir desde arenas gruesas hasta
arcilla y en porcentajes muy variables. Las gravas pueden ser de origen granítico o bien de tipo
basáltico - andesítico, dependiendo si los materiales de origen provienen de la Cordillera de la
Costa o de la Cordillera de Los Andes, respectivamente. Los colores superficiales son pardo,
pardo oscuro y pardo grisáceo muy oscuro en los matices lOYR. 7.5YR y SYR que, en algunos
casos puede variar a pardo amarillento oscuro en los horizontes más profundos. A causa del
origen de estos suelos, las variaciones texturales pueden ser considerables tanto en superficie
como en profundidad; de esta forma las clases texturales de los epipedones puede ser areno
francosa fma, franco arenosa, franco arcillo arenosa, franco arciflo limosa, franco arcillosa y
arcillosa, es decir, casi toda la gama del triángulo textural. En los horizontes más profundos la
variabilidad es similar. Cabe bacer notar, eso sf, que dentro de cada peñu las clases texturales son
relativamente homogéneas, con lo cual se podría establecer que existen piedmonts con suelos de
clases texturales gruesas, medias y finas. La estructura es dominantemente de bloques
subangulares medios y finos; en algunas Series desaparece (maciza) en los horizontes más
profundos, como ocurre en las Series Cuesta Barriga, Pomaire y Las Rosas; en otros casos hay
grano simple, como sucede en las Series Chicauma, Pintué y Olmué. Pocos suelos presentan
estructura prismática, como ocurre en las Series Huechuraba, Rungue y Calle Larga. La
penetración radical es adecuada y se han descrito raíces finas escasas hasta la profundidad de
descripción. El pH de los horizontes superficiales varia entre 6,0 y 7,4; en los horizontes más
profundos es un poco más elevado, varía entre 7.2 y 8,3. La SB se encuentra siempre sobre 70%.

141
A causa de la posición y las pendientes. estos suelos tienen buen drenaje y sólo en algunas Ftses
se puede presentar un drenaje moderado. En la mayorla de los suelos considerados no se ha
descrito erosión, solamente se ha presentado de ligera a moderada en algunas Fases de las Series
' Cbicauma, Calle Larga y Cristo Redentor. En cambio la pedregosidad, tanto en d
Cuesta Vieja,
perfil como en superficie, es común a todos los suelos y ha sido calificada desde moderada a
abundante. Asi como la mayoría de las características ha sido considerada como muy variada
dentro de este grupo de suelos, también las Clases de Capacidad de Uso presentan una disperstón
acorde con las propiedades descritas. De esta manera, los suelos con pendientes más suaves,
menor pedregosidad y más profundos pueden presentar Fases en Clase II de Capacidad de Uso.
En contraste, los suelos que presentan las pendientes más escarpadas, abundante pedregosidad y
clases texturales gruesas, se han calificado en Clases IV y VI. La mayoría de los suelos pertenece
al Orden Molliso!, Grandes Grupos ArgixeroJls y Haploxerolls; le siguen los suelos
pertenecientes al Orden Inceptisol, Gran Grupo Haploxerept. Para este análisis, además de las
Series ya señaladas, se han considerado las Series Encón, Jahuel, Santa Rita de Casablanca, Guay
- Guay, Lo Prado y Quilapilún. En el Cuadro 4- J 1 se presentan algunas propiedades de un perfil
de la Serie Cb:icauma (Typic Haploxerept).

Cuadro 4-11. Propiedades físicas, quí icas y físico-quimicas de un perfil representativo de la Serie Chicauma
(CIREN, 1996a)

Profundidlld cm} 0 - 17 17-40 40-65 65-96 96-115


Distribución paniculas por tamaño(%)
2-1 3,0 5,0 2,1 3,0 6,5
1-0,5 13 8
, 22,2 14,1 13.6 20,8
0,5-0,25 24,0 33,1 28,7 25,9 26,0
0.25-0.10 24,8 17.5 28,1 29,9 22,0
0,10-0,05 14,3 7,2 12,9 14,2 10,8
2-0,05 79,6 85,0 85,9 86,6 86,1
0,05-0,002 17,8 1 1,2 9,0 8,6 9,9
<0,002 2,6 3,8 5, 1 4,8 4,0
Clase textura) aF aF aF aF aF
Agua retenida 33 kPa (%) 8,0 5,0 6,0 6,0 5,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 4,0 30
, 3.0 3,0 3,0
Carbono orgánico(%) 0,7 0,3 0.2 0,1 0,1
Ca 4.0 3,1 3,1 3,1 3,3
Complejo de cambio Mg 0,6 0,7 0,8 0,9 0,6
(cmol.: kg'1) K 0,3 0,2 0,2 0,1 0,1
Na 0,0 0,0 0,0 0.0 0,0
Suma de bases (cmole k • 4,9 4.0 41. 4,3 3,4
CIC (cmolc 6,4 64, 4,7 5,7 4,9
Saturación de bases 77,0 63,0 87,0 75,0 69,0

Suelos e n cuencas de sedimentación lacustre. El paisaje y la posición dentro de él es lo


que caracteriza a estos suelos de topograña plana o casi plana (1 a 3%). Raramente presentan
algunas Fases con pendientes de 2 a 5% y de 5 a 8%, cuando se asocian con los piedmonts que
"
jalonan los valles donde se encuentran, como ocurre con la Serie Chicureo. Generalmente se han
descrito como formando parte de terrazas aluviales bajas, cuencas lacustres, planos de
sedimentación o planos aluviales cóncavos. La profundidad de estos suelos no está bien definida,
desde el momento que las descripciones no siempre alcanzan al sustrato, ya sea por la

..
profundidad de la observación (calicata), o bien por la presencia de un nivel freático que impidió
alcanzar capas más profundas. Por esta razón, la profundidad de la mayoría de los suelos

142
descritos puede más bien inferirse que determinarse en forma absoluta. En aquellos casos en que
se hace una explicita descripción, el sustrato consiste en un depósito de carácter aluvial con
gravas, en su mayoría redondeadas, con una matriz de material fino franco arcilloso e incluso
arcilJoso, que suele encontrarse bajo los 1 00 cm. como ocurre en las Series Artificio y Colunquén
(CIREN, l997a). En otros casos el suelo se describió hasta una capa franco arcillo limosa y
arcillosa con diferente porcentaje de gravas aluviales, tal como ocurre en las Series Pucalán,
Batuco, Hospital, La Vilana y Peralillo, entre otras. En otros suelos su profundidad está limitada
por la presencia de una capa fuertemente compactada y cementada, descrita como horizonte
petrocálcico, que se puede encontrar entre los 40 y los 70 cm. Esta situación se menciona en las
Series Chincolante, San Isidro y Agua del Gato (Petrocalcic Calciaquoll), cuyas propiedades
químicas y ñsicas se muestran en el Cuadro 4- 12.

Cuadro 4-12. Propiedades tísicas. químicas y físico-químicas de un perfil representativo de la Serie Agua del Gato
(CIREN, !996a)

Profundidad (cm) 0 - 19 19-46 46-70 70-85


Distribución partículas por l.alJlaño (%) Ae Au AC 2C,
2-1 0,6 0,1 0,2 1,4
1-0,5 1,0 0,3 0,7 4,6
0.5-0.25 1.4 0,7 1,4 8,7
0,25-0, 1 0 3,6 2,9 62
, 12.3
0,1 0-0,05 7.5 7, 1 8,6 8,6
2-0,05 14,1 1 1 ,1 17,1 35,6
0,05-0,002 55.4 49,9 46,9 41,9
< 0,002 30,5 39 o 36,0 22,5
Clase textura! FAL FAL FAL F
Agua retenida 33 kPa (%) 35,0 38,0 36,0 26,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 26.0 30,0 28,0 18,0
Carbono orgánico (%) 3.3 2.6 1.1 0,4
pHagua 7,8 7,5 7.5 8,0
Conductividad eléctrica (dS m'1) 0.8 1,3 1,4 1,7
CaCO (%) 1.4 0,2 0,3 36,9
Ca
Complejo de cambio Mg
(cmol, kg.1) K 0.8 0,7 0,7 0,2
Na 1,5 2,5 1,6 1,5
CIC cmol k - 42,0 50 9
. 40,9 20,5

Los colores de los horizontes están asociados a la mayor o menor disponibilidad de oxígeno,
debido a que la mayoría de estos suelos no presentan un drenaje completamente libre. Para la
mayoría de los suelos se describen rasgos redoximórficos (oxidaciones, moteados) de comunes a
abundantes a partir de los 20 ó 30 cm y, en los casos más extremos, en todo el perfil. De esta
'llanera, Jos epipedones pueden tener colores negros ( lOYR2/I ; 2.5Y2.5/I ); gris muy oscuro
JOYRJ/1) o bien pardo rojizo oscuro (5YR3,2}. Los horizontes más profundos pueden presentar
colores asociados a procesos de óxido - reducción, tales como gris oscuro (5YR4/I ), pardo
gnsáceo (2.5Y5/2) o gris (1 0YR5/l). Cuando el sustrato lo constituye un horizonte petrocálcico
el color puede variar entre el pardo grisáceo ( 1 OYRS/2) y el gris ( 1 OYR5/1 ) Todos los suelos
.

considerados son <le clases texturales finas, entre franco arcillosa. franco arcillo limosa, arcillo
h"')Sa y arcillosa. con muy escasa variación dentro de un mismo perfil (figuras 4-13, 4-14. al
fir!)1 del Capítulo). Para la mayoría de los suelos la estructura es prismática., incluso en los
he'IZontes superficiales, hasta sin estructura (maciza) en los horizontes más profundos.

143
Tanto la presencia de capas limitantes (horizontes petrocálcicos) como los niveles fn.a11cos.
relativamente superficiales, determinan que no ex.ista una buena penetración rad11. 11 en
profundidad. La presencia de carbonato de calcio en el perfil no está asociada necesariamen t. :1 la
presencia de un horizonte petrocálcico. pues varios suelos que no poseen este horiLonte �e han
descrito con reacción al HCI, de moderada a fuerte a través del perfil. En los hommtes
petrocálcicos, el contenido de carbonatos es superior a 40%. Solamente algunos suelos (Batuco y
Peralillo) presentan problemas de salinidad de consideración que afectan y limitan la utilización
1
agrícola de ellos. En el primero se ha medido 18 dS m· 1 y en el segundo 23 dS m· • El contenido
de CO se mantiene con los mayores valores en los horizontes superficiales (desde 1 , 1 hasta 8.1 %)
y un decrectmiento regular con la profundidacl hasta valores tan bajos como 02%. Depend1endo
del contenido de los carbonatos y la salinidad, el pH puede variar entre 7,0 y 9,3, siempre con los
valores más altos en los horizontes más profundos.

Se han descrito solamente dos suelos orgánicos. las Series Palomar (Typic Medibemist) y
Panquehue. Esta última forma parte de un sector de pantano que. presumiblemente se podría
calificar como Fibrist, aun cuando los antecedentes de descripción y los analíticos impiden una
mejor aproximación.

Para la mayoría de los suelos, el drenaje es imperfecto en todas sus Fases y en algunos puede ser
pobre y muy pobre, como sucede en las Series Peralillo y la Urraca. Sin embargo, las Clases de
Capacidad de Uso que mejor han descrito a estos suelos son ffiw y IV... . para la mayoría� y
solamente en algunas Fases han sido calificadas en Clases V y Vl. Más del 60% de los suelos
analizados han sido clasificados en el Orden Molfuol. Grandes Grupos Palexeroll. Epiaquoll,
Haploxeroll. Calciaquoll y Calci.xeroll. Los Vertisols descritos pertenecen todos al Gran Grupo
Haploxerert. Las Series de Suelos que se utilizaron para este análisis, ademas de las ya
mencionadas son: Artificio, Colunquéo, Lo Campo. Huechún., Llay-Llay, Paine, Puntilla,
Tronador y Valdivia de Paine.

Suelo de origen volcánico. Para esta Zona sólo se ha descrito un suelo de este tipo. la Serie
Pudahuel, que no ha sido clasificado como Andisol, pues sus propiedades fisicoquímicas no son
suficientes para ello. No obstante, su ongen a partir de cenizas volcánicas ácidas (pumíceas) ha
sido mencionado por varios autores (Tosso, 1985; CIREN, 1996a). Se estima que este suelo se ha
originado a partir de los sedimentos de cenizas provenientes del gran lahar del volcán San José,
de edad pleistocénica (Besoaín, 1985).

Se presenta en un relieve de Jomajes suaves con pendientes de 1 a 3% y de 2 a 5%; en Jos


sectores fuertemente ondulados, las pendientes pueden alcanzar entre J 5 y 20%. Esa t variación en
el relieve influencia también las condiciones de drenaje del suelo, de tal manera que las áreas
....
deprimidas del paisaje se han separado como Fases de drenaje moderado hasta imperfecto. Las
Fases distinguen desde suelos moderadamente profundos hasta delgados, dependiendo de la
profundidad a la que se encuentra el duripán silícico que limita la profundidad del suelo. Las

...
Fases más delgadas deben su origen, por lo general, a procesos de erosión que en la actualidad
continúan activos. Se trata de un suelo de clases texturales gruesas, franco arenosa en superficie y
arenosa en los horizontes más profundos. El color es pardo oscuro en superficie (7 .5YR3/2) y
pardo pálido ( 1 OYR6/3) en el duripán. El pH varía entre 7,5 y 7,9 y como se ha descrito con
carbonatos (aunque en escasa cantidad), se asume que la SB estarfa próx.ima a 1 00%. A causa del
relieve y la variable profundidad que presentan las distintas Fases, se le ha considerado en Clases
...
de Capacidad de Uso lll y TV, en general con baja aptitud agrícola. Considerando la escasez de
datos analíticos más precisos se le ha clasificado provisoriamente (Aburto et al., 2008) como

144
Vitrandic Durixerept (figuras 4-15 y 4-16, perfil y detalle duripán respectivamente, al fmal del
Capítulo). En el Cuadro 4-13, se presentan algunas propiedades físicas y químicas obtenidas a
partir del Estudío Agrológico de la Región Metropolitana (ClREN, 1996a).

Cuadro 4-13. Propiedades Jlsicas, quimicas y fisieo-químicas de un perfil representativo de la Serie Pudahucl
(CIREN. 1996a)

Profundidad cm 0 - 19 19-34 34-48 48-55


Oist.ribución partículas por tamaiio (%) B e,
2-1 2,9 2,9 1.3 2,3
1-0,5 6.5 6,2 3.3 6,3
0,5-0,25 10,3 1 1,8 lOA 27,5
0,25-0,1 0 19.6 23.0 25.3 15.8
o, 1 0-0,05 19.2 20,1 19,8 7,8
2-0.05 58,5 64,0 60.1 69.7
0.05-0,002 24.7 1 8,6 �0.9 19,5
< 0.002 16.8 17,4 19,0 10.8
Clase textura! Fa Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m· ) 1,6 1.4 1,3 1.4
25,0 27,0 27,0

Agua retenida 33 kPa (%) 24,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 1 1.0 13.0 18 0
. 13,0
Carbono orgánico (%) 1,2 0,5 04
. 0,2
plla¡ua 7.5 7.9 7.7 7,7
ConductiVIdad eléctrica (dS m'1) 0,5 0,4 0,3 0,5
CaC03 % 0,1 0,1 0,1 0.1
Ca n.d. o.d. n.d. n.d.
Complejo de cambio Mg n.d. n.d. n.d. n.d.
(cmol< l..g'1) K 0,3 0,3 0.4 0,3
Na 0,2 0,3 0,4 0,3
ere (cmol.: kg·) 11.7 10,0 10,4 9,0

4.4.2 Regiones de O'Higgins y Maule (34°00' - 36°00' aprox.)

Suelos en terrazas aluviales. En estas Regiones se han descrito una gran cantidad de suelos
que ocupan esta posición en el paisaje y que, además, han tenido su origen en procesos
relacionados con transporte y depositación aluvial. Como se puede esperar, se trata de suelos
planos, con topografla que varia entre 1 y 2% y solamente en algunos casos el relieve puede
variar a una pendiente de 2 a 3%. Para el caso de cuencas aluviales de menor tamaño, asociadas a
cursos de agua también menores, la formación más frecuente es de terrazas aluviales de
diferentes alturas y extensiones, pero siempre claramente diferenciadas como unidad
geomorfológica independíente. En el caso de valles extensos, tales como los asociados a los ríos
Cachapoal, Tinguiririca, Lontué y otros, los suelos se han desarrollado en posición de abanico
aluvial de grandes extensiones. La profundidad de los suelos es muy variable. desde los suelos
delgados (menos de 50 cm) como sucede con las Series Cachapoal, Casas de Carén, Limanque
(figuras 4-17 y 4-18, al final del Capítulo) y Zamorano hasta suelos profundos (más de 1 00 cm)
como ocurre con las Series Nilahue (130 cm), Rancagua (145 cm), Tinguiririca ( 1 3 3 cm),
Carrizal (148 cm) y Cunaco (140 cm). El sustrato está constituido, en la mayoría de los casos, por
gravas redondeadas y subredondeadas de tamaño variable } en cantidad variable, con una malriz
que es arenosa o franco arenosa. Esta matriz puede ser mas fina, entre franco arcillosa, franco
lunosa o franco arcillo arenosa, como ocurre en las Series Nilahue, O'Higgins, Aytué, Cachapoal.
lolbún y Duao.

145
Las clases texturales de los horizontes superficiales pueden ser franca, franco limosa. Iraneo
arcillosa, f:ranco arcillo limosa y, en una menor cantidad de suelos, puede ser de clas,, más
gruesas, tales como franco arenosa o franco arenosa fina (Series Quilamuta, Tinguiririca, ( rrizal
y Malambo). En cambio, en el horizonte genético más profundo, en contacto con el sustralll. no
se pudo establecer una tendencia clara, a causa de la gran variabilidad que se ha descrito (desde
arcillosa basta arena gruesa). La mayoria de los suelos muestra una gran homogcnetdad
estructural, que se manifiesta por la presencia de bloques subangulares medios y fim)� con
diferente consistencia. Escasos suelos muestran grado de no estructura (maciza o grano stmple),
en particular, en los horizontes más profundos. Tanto en superficie como en profundidad
dominan los colores pardos y pardos oscuros, en los matices IOYR y 7.5YR; los suelos con
drenaje mi perfecto pueden variar entre el pardo grisáceo, el gris oscuro y el negro; en cambio,
aquellos suelos en los cuales se observa alguna influencia de materiales graníticos, pueden tener
colores pardos rojizos oscuros en el matiz 5YR. La penetración radical es buena en todos los
suelos, con un decrecimiento regular con la profundidad; solamente en los sustratos constituidos
exclusivamente de gravas no se han descrito raíces.

El CO es siempre bajo en los epipedooes, sin superar el 3%, decreciendo basta 0,1% en los
horizontes inferiores. La SB, en todos los horizontes de todos Jos suelos, se encuentra sobre el
65%, sin una tendencia clara a aumentar o disminuir con la profundidad. Solamente algunos
suelos se han descrito con una SB particularmente baja, como las Series Carrizal (38%), Lontué
(35%) y Malambo (36%). El pH se manifiesta sin grandes variaciones, entre 6 y 7. La presencia
de carbonatos es ocasional en algunos horizontes de algunos suelos, sin que interfieran en su uso
y manejo. En cambio, la presencia de rasgos redoximórficos es frecuente y se han descrito desde
comunes a abundantes en los horizontes subsuperficiales. En general, el drenaje de los suelos es
bueno, con Fases de drenaje moderado que puede Uegar a imperfecto en algunas de ellas.

De esta manera, y considerando todas las característ-icas descritas, las Clases de Capacidad de
Uso de estos suelos de origen aluvial pueden variar desde Clase J a IV, ya sea por una
disminución en su profundidad, un aumento en la pedregosidad en el perfil o un drenaje más
pobre o un conjunto de todas estas características. Los mejores suelos, desde el punto de vista de
su aptitud agrícola, con varias Fases en Clase I, son las Series O'Higgins, Olivar y Talcarehue. Se
considera que los suelos con menor aptitud agrícola son las Series: Graneros de la Cabaña, por
profundidad y drenaje; Limanque, por profundidad y pedregosidad y Lontué, por profundidad y
clases texturales gruesas. Desde el punto de vista taxonómico los Órdenes que se han descrito
son: Allisol (Gran Grupo Haploxeralf), Entisol (Grandes Grupos Xerofluvent y Xerorthent),
Mollisol (Grandes Grupos Haploxeroll, Palexeroll y Argixeroll) e lnceptisol (Gran Grupo
Haploxerept).

Además de las Series de Suelos ya mencionadas, para este análisis se han tomado en
consideración las Series Pataguas, Peumo, Ranquilhue, Antivero, Callejones, Cocalán, Corcolén,
Chépica, Graneros, La Burra, La Rosa, Las Garzas, Macarena, Marchan!., Achibueno, Caone,
Comallc, Culpehue, Chiguay, Guaycután, Huapi, Huelón, Linares, Loita, Los Puercos,
Perquilauquén, Liucura, Melozal, Perquin, Piedra Blanca, Putagán, San Javier y Santa Rosa de
Lontué. En los cuadros 4-14 y 4-1 5 se presentan las principales propiedades quimicas y fisicas
de la Serie O'Higgins (Fiuventic Haploxeroll) y la Serie Lontué (Typic Haploxerept)
consideradas representativas de este grupo de suelos.

1 46
Cuadro 4-14. Propiedades de un perfil representativo de la Serie O'Higgios (CIREN, 1996b)

Profundidad cm 0-18 18-35 35-63 63-84 84-120


Distribución partículas por tamaño(%) Áp Au
2-1 0,5 0,4 0.3 0,2 0,4
1-0,5 2.1 1,8 2,0 1,3 2,1
0,5-0,25 2.7 2,8 4. 1 2,4 3,0
0,25-0,1 0 7,1 6.4 10.4 7.7 6.7
0,10-0,05 7,2 6,5 11,0 15,9 13,8
2-0,05 19,6 17,9 27.8 27.5 26 0 .

0.05-0,002 65,5 51,0 68.1 70.4 59.6


< 0 002 14,9 31.1 4. 1 2.1 14,4
Clase textura! FL FAL FL FL FL
Densidad aparente (Mg m· ) 1,48 1 49 1,41 1.30. 1.53
Agua retenida 33 lePa(%) 30A3 28.22 28.00 27,82 28.03
Agua retenida 1.500 lePa (%) 17,29 16,94 17.58 17.05 1 6.27
Carbono orgánico (%) 2,0 1.6 0,7 0.5 0,5
6.5 6,4 6,5 66 65 . .

Ca 18,23 19,23 21.40 22,27 22,40


Complejo de cambto Mg 1,43 1,58 2,15 3,40 5,18
(cmoJ., lcg'1) K l ,l l 0,69 0,43 0.37 0,40
Na 0,23 0,24 0,40 0,48 0,47
Suma debases (cmolc k..(1______________
21.00 21,74 2_4�___
,3_8 26,52_ __ 28,45
_ _
__
CIC (cmolc kg'l) 23,63 23,79 25,90 26.17 29.25
Saturación de bases (%) 89,0 91.0 94,0 100,0 97,0
Saturación de Na% 1,0 1,0 15 1.8 1,6

Cuadro 4-IS. Propiedades de un perfll representativo de la Serie Lontué (CLREN. 1997b)

Prorundidad cm 0-22 22 - SS
Distribución de partículas por tamallo (%) B
2-1 0,8 6.1
1-0,5 7,1 11,3
0,5-0,25 12,8 14,4
0,25-0,10 21,3 21,1
0.10-0,05 14,8 13,5
2-0,05 56,8 66.4
0.05-0,002 32,8 25.6
< 0,002 10,4 8,0
Clase textural Fa Fa
Agua retenida 33 lePa(%) 23,0 22,0
Agua retenida 1.500 lePa (%) 1 4.0 15,0
pH- 6,2 6,5
<;:arbono orgánico (%) 3,0 2,7
Oxidos libres de Fe(% 1,3 1,1
Ca 6.0 5,2
Cationes
Mg 07. 0,5
intercambiables
K 0,4 0,3
(cmolc kg'1)
Na 0.3 0,3
Suma de bases �cmo� kg·• í.4 6.3
ere (cmol., kg·) lí,O 22,8
Saturación de bases (%) 44,0 28.0

Suelos en posición de piedmont. Estos suelos ocupan planos inclinados, correspondientes a


coluvios y piedmonts, de pendientes moderadas, en una posición mtermedia entre los cerros más

147
escarpados y los suelos de los valles aluviales. Las pendientes más frecuentes son de 1 a 3° de 2
,

a 5% basta de 3 a 8%. La mayoría de los suelos son de moderadamente profundos a protundos.


con algunas excepciones de suelos delgados, tales como las Series Majadilla, Loma Grande y
Cabrería. En los suelos descritos como profundos y muy profundos no se identificó t.l 5us­
trato, en cambio, en los suelos de menor profundidad se pudieron diferenciar dos clases de
sustrato: a) el constituido por gravas angulares y subangulares con matriz, ya sea arcillosa
o franco arcillosa o bien franco arenosa y arenosa gruesa y b) roca meteorizada en difer\.n­
tes grados, identificada como de origen granitico.

La clase textura! de los horizontes superficiale:. es en su mayoría franco arcillosa y franco arcillo
arenosa, aun cuando también se ban descrito otros suelos de textura más gruesa, taJes como
franca, franco arenosa y franco arenosa fina. Existe una tendencia al aumento de la fracción fina
hacia los horizontes más profundos para la mayoría de los suelos y, sólo en algunos casos, las
clases texturales se mantienen sin variación con la profundidad. En superficie los colores varían
entre el pardo oscuro y el pardo rojizo oscuro en los matices lOYR, 7.5YR y 5YR, y en los
horizontes más profundos la variabilidad de colores es mayor, presentándose colores taJes como
pardo amarillento oscuro, pardo grisáceo oscuro, gris, pardo rojizo y pardo rojizo oscuro. La
..
variación de color en profundidad se atribuye a que muchos suelos presentan un drenaje de
moderado a imperfecto y a que los rasgos redoximórficos son abundantes en los horizontes más
profundos, aun cuando también pueden llegar a ser comunes a través de todo el perfil.

La estructura dominante es de bloques subangulares medios. También se han descrito algunos


suelos con estructura prismática y, sólo en algunos casos y en profundidad, sin estructura
(maciza). El arraigamiento es débil en la mayoría de los suelos, de tal forma que en los horizontes
más profundOS1 se han descrito raíces muy escasas o bien sin su presencia. La pedregosidad en el
perfil, de tipo angular y subangular, es de común a abundante en todos los suelos y solamente en
algunos es abundante en superficie, como ocurre en las Series Montonera y Maitén de MaUoa En
el Cuadro 4-16 se presentan las principales propiedades lisicas y químicas de un perfil de la Serie
Maitén de Malloa (Typic Haploxeroll).

148
Cuadro 4-16. Propiedades de un perfil representativo de la Serie Maitén de Malloa (CIREN, 1996b)

Profundidad (cm) 0-20 20 45


- 45-80 80-110
Distribución de partículas por tamaño(%)
2-1 5.4 8,4 55
. 9,3
1-0,5 12,2 13.6 17,6 18.3
0,5-0,25 8,7 9,0 14.2 l l,l
0,25-0,10 13,3 14.3 16,8 16.7
0,10-0,05
2-0.05
12,1
53,7
9.8
55,1
8,1
62.2 •
1 1,5
66.9
0,05-0,002 33,8 29.8 22,4 20.1
< 0,002 12,5 15,1 ISA 13,0
Clase textura! Fa Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m·) 1.69 1,80 1,82
Agua retenida 33 kPa (%) 16,9 14,8 12,8 12.2
Agua retenida l.500kPa (%) 7,1 6,7 6,7 7.5
pHasua 6.2 6.2 6.6 6,7
Carbono orgánico(%) 1,8 o,6 0,3 0.3
Ca 17.2 13,7 12,1 10,7
Callones
Mg 2,6 2,3 2,9 4,9
intercambiables
K 0,9 0,8 0,7 0,6
(cmot. kg"1)
Na 0,2 0,2 0,1 0,2
Suma de bnses�cmol,kg·) 20.9 17,0 15,9 16.5
CTC (cmot. kg") 23.5 18,8 18,8 17.9
Saturación de bases (%) 89 90 84 92

La SB es inferior a La de los suelos que ocupan la misma posición en las regiones de Valparafso y
Metropolitana, esto es, entre 44 y 80%; generalmente, con los mayores valores hacia los
horizontes más profundos. El CO alcanza 2,5% como máximo en los epipedones y decrece en
profundidad hasta O, 1%. También el pH es inferior al de los suelos de la Zona de más al norte,
con valores entre 4,9 y 7,5. Tanto por las pendientes como por la profundidad de Jos suelos, así
como por la abundante pedregosidad. La aptitud agrícola de los suelos es más limitada, por lo que
a la mayoría de ellos se les ha asignado Clase lV de Capacidad de Uso y solo a algunas Fases,
una Clase m. De acuerdo a la clasificación taxonómica, se han identificado Mollisols (Grandes
Grupos Palexeroll, Haploxeroll y Argixeroll). Tnceptisols (Grandes Grupos Haploxerept y
Epiaquept), Alfisols (Grandes Grupos Haploxeralf y Palexeralt) y Entisols (Grao Grupo
Xerotluvent).

Además de las Series de Suelos ya mencionadas, se han tomado en consideración para este
análisis las Series Goyana, Ajial, Larmahue, \lfancumán, Pichidegua, Yaquil, Comávida, La
Palma. Licantén, Pencahue, Talguenal, Tricao y Yirquén.

Suelos en cuencas de sedimentación lacustre. Los suelos que se encuentran en esta


posición ocupan las partes más deprimidas del paisaje. ya sean planos de inundación, cuencas de
sedimentación o bien terrazas aluviales antiguas en las posiciones más bajas del paisaje. Se trata
de suelos que presentan una topografia plana (0 - 1 °/o) y sólo en algunas Fases de algunas Series
de Suelos la topografia puede ser casi plana (l 3%). Asociada a los mecanismos de depositación
-

de los sedimentos, la composición granuJométrica de los suelos está dominada por clases
texturales finas, esto es arcillosa, franco arcillosa o bien arcillo limosa. Para la mayoría de los
suelos esta distribución de partículas es homogénea a uavés de los perfiles } solamente en
algunos de ellos se presenta un incremento de La fracción fma con la profundidad. La mayoría de

149
los suelos considerados dentro de este grupo se ha descrito como moderadamente profi.11 k,s y
profundos, esto es, entre 75 y 100 cm y entre 100 y 150 cm respectivamente, y solamente dgunos
son ligeramente profundos, es decir, entre 50 y 75 cm. Estos últimos tienen como limitan <.: u1.. la
profundidad a estratas cuyo origen puede estar relacionado más bien con procesos geológlC<� que
con procesos pedogénicos. De esta manera son ftecueotes las tobas y las brechas volcámcas que
pueden aparecer en las descripciones como duripanes. En otros casos, el sustrato está consllluido
por una arenisca compactada y cementada que también ejerce el efecto de limitantc de la
profundidad del suelo.

La mayoría de los suelos tiene colores pardo, pardo grisáceo, pardo oscuro, gris oscuro y negro
en el matiz 1 OYR. Las Series Colchagua, Gualas, Malloa, Palquiales y PupiUa tienen colores
dominantes en el matiz 5YR En la mayoría de los horizontes más profundos los colores grises
están asociados a rasgos redoximórficos, en particular empobrecimientos, indicando con ello la
presencia de niveles freáticos en algún período del año. La mayoría presenta buena
estructuración, ya sea de bloques o prismática moderada o fuerte en los horizontes superficiales y

subsuper iciales; solamente en profundidad, en contacto con el sustrato, aparece en muchos
suelos un grado de no estructura maciza. El sistema radical se desarrolla en buenas condiciones a
través del per il; solamente en profundidad y en los horizontes en contacto con el sustrato las
raíces son escasas o inexistentes. El CO no es particularmente elevado en Jos horizontes
superficiales, varía entre 1,5 y 4,0% como regla general. Solamente la Serie Gatera se saJe de esta
regla y alcanza a 5,8% en el horizonte A. La disminución en profundidad es normal, alcanzando
valores de 0.1% como ocurre en la Serie Collín. El pH varía entre 5,3 y 7.9, con una tendencia a
valores más altos en los horizontes más profundos. La presencia de rasgos redox:imórficos es
común a abundante en todos los suelos y a rravés de todo el perfil. En algunos suelos se han
descrito los niveles freáticos a 90, 50 y hasta 20 cm de profundidad. Por estas razones Lodos los
suelos que se encuentran en este grupo han sido descritos con drenaje imperfecto y en muchas
Fases como pobre. Las Clases de Capacidad de Uso que mejor se representan en estos suelos son
lll" y IV.,. y, en los casos de drenaje más pobre, se les ha asignado una Clase Vl�.

...
Al considerar la clasi icación taxonómica de los suelos, se puede apreciar que la mayoría se ha
clasificado en dos Órdenes, Vertisol y Mollisol y, en menor proporción, como lnccptisol y
Alfisol. Los Grandes Grupos más frecuentes dentro de los Vertisols son los Haploxererts,
Durixererts y Epiaquerts; en menor proporción, Calcixererts. Los Momsols más frecuentes son
Durixerolls, Haploxerolls y Argixerolls.

Además de las Series ya mencionadas, se han utilizado para esta discusión las Series Alantaña,
Almahue, Huique, Laguna de San Vicente de Tagua Tagua, Libueimo, Los Cardos, Puquillay,
Quiahue, San Vicente, Curicó, ChequeoJemo, El Molino, Guaiquillo, Los Coipos, Palmilla,
Quella (figuras 4-19 y 4-20, al final del Capítulo), Quepo, Quicharco y Treile. En el Cuadro 4-17
se presentan las principales propiedades químicas y físicas de la Serie Quicharco (Typic
Argixeroll) considerada como representativa de este grupo.

1 50
Cuadro 4-17. Propiedades de un perfil representativo de la Sene Quicharco (CIREN, 1997b)

Profundidad cm 0 - 10 10-36 36-60 60-90 90+


Distribución de partículas por tamaño(%) Bo BC e
2- 1 0,1 0,0 0,1 0,1 0,4
1-0,5 0,3 0,1 D.6 0,8 2,2
0,5-0,25 0,9 0,4 1,0 1,8 5,3
0,25-0, 10 3,6 2,7 4,4 4.4 1 1 ,8
O, 10-0,05 5,9 6,2 7,5 6,6 15,7
2-0,05 10.8 9,4 13,6 13,7 34,4
0,05-0,002 52,5 50,0 40,3 44,9 47,0
<0002 36 7 40,6 46 1 414 18.6
elase textura1 FAL AL AL AL F
Agua retenida 33 kPa (%) 35,0 33.0 39,0 43,0 34,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 24,0 23,0 29,0 30.0 n.o
pH...,. 6,2 6,6 66
. 6.6 6,7
Carbono orgánico {%) 3,7 1,5 0,9 0,6 0,2
Óxidos libres de Fe % 24, 2,6 22 21 1,8
Ca 18,6 20,2 23,0 20,9 15,8
Cationes
Mg 4,0 5,4 10.0 10,1 8,8
intercambiables
K 0.7 0,8 0,6 04
, 0,2
(cmol< kg'1)
Na 04 0,5 08 0.8 0,7
Suma de bases (cmolc k 1 23.7 26,9 34 4
, 32,2 25,5
g" )
CLC (cmol< kg"') 32,8 35,6 42,4 40,3 31,4
Saturación de bases (%) 72,0 76.0 81,0 80,0 81,0

Suelos so bre toba volcánica. Los suelos que presentan esta capa limitante no ocupan una
posición geomorfológica definida en el paisaje, pues han sido descritos como parte de terrazas
antiguas remanentes, abanicos piroclásticos, parte de un lahar, cuenca de sedimentación,
posiciones altas y bajas del relieve. Asimismo, la capa limitante ha sido descrita de diferente
fonna, ya sea como toba y brecha volcánica, hardpan cementado con Si y Fe, o bien arenisca
cementada con Si. Así como la posición que ocupan estos suelos en el paisaje no es homogénea,
el relieve también es variable, de tal manera que se pueden encontrar estos suelos en pendientes
de O - 1 %, 5 - 8% y hasta 8 - 1 5%. A raiz de la presencia de la capa Limitante, los suelos no son
profundos, sino que caen en La categoría de ligeramente profundos y, en algunos casos delgados.
salvo excepciones, como ocurre con la Serie Canosa ( 1 3 0 cm) y la Serie Huenutil (125 cm)
�figuras 4-21 y 4-22, al final del Capítulo). La clase textura! del horizonte superficial puede variar
desde franco arenosa fina basta franco arcillosa y, en profundidad, desde franco arenosa hasta
arcillosa, siempre con un incremento de La fracción arcilla hacia los horizontes inferiores dentro
de cada perlil. Dominan los colores pardo oscuros en el matiz 7.5YR en los horizontes
superficiales y subsuperficiales, mientras que en los horizontes en contacto con la toba o, en la
toba misma, dominan los colores pardo grisáceo o gris (2.5YS/2; 1 OYRS/1 ) La estructura es de
.

bloques subangulares en superftcie y alcanza un grado de no estructura (maciza) en los horizontes


más profundos. El sistema radical presenta un escaso desarrollo, de tal manera que sólo se
descnben raíces finas escasas y en los horizontes más profundos ellas desaparecen por completo.

La SB se encuentra entre SO y 80% con un incremento hacia los horizontes más profundos. Sólo
excepcionalmente, en la Serie San Rafael un horizonte más profundo alcanzó l 00% de SB. El pH
varia entre 5,2 y 7,5 y el contenido de CO en los horizontes superficiales varia entre 0,6 y 3,5%;
en d horizonte subsuperficial inmediatamente sobre la toba, el CO se encuentra entre O, 1 y 0,4%.
Todos los suelos presentan rasgos redoximórficos comunes a abundantes, algunos de ellos desde
la o;upcrlicie. De esta manera, el drenaje de los suelos se ha identificado como imperfecto para la

151
mayoría de ellos y en algunos como pobre. Las Clases de Capacidad de Uso que dominan son
m" y IVw y, en los casos de los suelos delgados y más pobremente drenados, se les ha as1gnado
una Clase Vlw. Los Órdenes AJfisol y Mollisol son los más representados en este grupo de suelos,
principalmente Durixeralfs y Durixerolls, respectivamente. Algunos suelos han sido clasificados
dentro de los lnceptisol y Entisol. tales como Durochrepts y Endoaquents, respectivamente.
Además de las Series ya mencionadas, se han utilizado para esta discusión las Series Teno,
Caliboro, Camarico, Campanacura, El Peñón, Pangue, Parral, Peumal, Quelmenes, Quillayes
(Figura 4-23, al final del CapítuJo), Tonlemo, Unicavén. Vaquería y Villaseca. En el Cuadro 4-
18 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de La Serie Quillayes (Aquic
Haploxerept), considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 4-18. Propiedades de un perfil representativo de la Serie Quillayes (ClREN, 1997b)

Profundidad (cm) 0-12 1 2 - 23 23-29 29-45


Distribución de partículas por tamañof¾o-"__
)-'-- A __,_1
_ __ _ _A _2 _ _ _
.__ _ B_._1
_ _ _ _Bz�-
_.
2-J 0,6 0,4 0,9 0,9
1-0,5 3,6 3,0 4,3 5.4
0,5-0,25 1 1 ,8 1 1 ,9 12,0 12,2
0,25-0,10 24,4 21,7 16.8 16.8
0.10-0,05 18,9 13.9 1 1,1 1 1 ,6
2-0,05
0,05-0,002
< 0.002
59,3
28,0
12,7
50,9
29,1
20,0
45,1
28.7
26,2
..
46,7
25,7
27,6
Clase textura! Fa F F FAa
Agua retenida 33 kPa (%) 13 0
, 17,0 21,0 23,0
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 5.0 9,0 12,0 14,0
pHos,,. 6.2 6,3 6,4 6,2
Carbono orgánico (%) 0.6 0,6 0,4 0,4
Óxidos libres de Fe% 1,2 1,6 1,8 1,4
Ca 1,7 3,0 4,0 4,2
Cationes
Mg 0,5 1.1 1,8 2,0
intercambiables
K 0,2 0,1 0,2 0,3
(cmolc kg-1)
Na 0,1 0,1 0,2 0.2
Suma de bases 2,5 4,3 6,2 6,7
CIC (cruel. kg· ) 3,9 64, 9,6 1 1 ,0
Saturación de bases 64,0 67,0 65,0 61,0

Suelos sobre sedimentos fluvioglaciales. Los suelos que presentan esta clase de sustrato
ocupan posiciones en el paisaje del tipo lomajes suaves, terrazas remanentes, terrazas aluviales y
más raramente cuencas sedimentarias (figuras 4-24 y 4-25, al final del Capítulo). Por esta razón
no se encuentran suelos planos, sino que la mayoría de ellos presenta pendientes de 2 a 5% y 5 a
8% y hasta 20 a 30% en determinadas Fases de algunos suelos. Los suelos que se han descrito
son moderadamente profundos y profundos, desde l 00 a 155 cm hasta el sustrato y solamente un
suelo, la Serie Panguilemu, se ha descrito con 63 cm de profundidad. Aun cuando hay gran
variabilidad en los colores, que pueden encontrarse en los matices 5YR, 7.5YR hasta 2.5YR.
existe una tendencia hacia los colores más rojizos, tanto en los horizontes superficiales como en
profundidad. De esta manera, son frecuentes los colores pardo rojzo i oscuro (5YR3/4 y
2.5YR3/4) y pardo rojizo (5YR4/3). Las clases texturales de los epipedones varian entre franco
arcillo arenosa, franco arcillosa y franco limosa; solamente en un caso (Serie Matacabritos), el
horizonte superficial es franco arenoso muy fino. Hacia los horizontes inferiores siempre existe
un incremento de Ja fracción fina, de manera que se pueden encontrar clases texturales como
franco arcillosa y arcillosa. Domina la estructura de bloques subangulares a través de todos los

152
perfiles; solamente en un caso, en contacto con el sustrato, se ba descrito estructura prismática,
mientras que en otro desaparece la estructura (maciz.a) en la misma posición en el perfil. Hacia
los horizontes más profundos las raíces son escasas y en numerosos suelos éstas no existen, en
particular en contacto con el depósito fluvioglacial.

La SB es fluctuante en los diferentes suelos y a través de los perfiles, con valores que varían entre
38 y 83%, por lo general con un incremento hacia los horizontes inferiores. El pH varia entre 5,0
y 6,6 y el CO alcanza valores máximos de 2,2% en los epipedones y de 0,2% en los horizontes
inferiores, en contacto con el sustrato tluvioglacial. A causa de la presencia de dicho sustrato,
que actúa como limitante al paso del agua y de las raíces, es frecuente encontrar rasgos
redoximórficos de comunes a abundantes, desde el segundo horizonte o bien desde la superficie.
De esta manera, la mayoría de los suelos se ha calificado con drenaje imperfecto a pobre. La
aptitud agrícola es limitada, asignándoseles Clases de Capacidad de Uso que varían entre illw y
VT... Desde el punto de vista taxonómico, los taxa más representados son los Xeralfs
(Haploxeralfs, Palexeralfs), seguidos por Xerepts y en menor cantidad por Xerolls. Para el
análisis de este capítulo se han tomado en consideración, además de las Series ya señaladas, las
Series Mariposa, Mirador, Panimávida, Peteroa, Peumo Negro, TaJea (figuras 4-26 y 4-27, al
final del Capítulo) y Trilico. En el Cuadro 4-19 se presentan las principales propiedades
químicas y fisicas de la Serie Talca (Pachic PalexeroiJ), considerada como representativa de este
grupo.

Cuadro 4-19. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Serie Talca (CIREN,
1997b)

Profundidad (cm) 0-16 16-70 70- 100


Distribución de partículas por tamaño (%) Ap B11
2-1 0,0 0,0 0,4
1-0,5 1,4 1,9 5,3
0,5-0,25 10,1 11,2 18,9
0,25-0,10 15,2 13,6 1 9,8
0,10-0,05 10,0 7,4 1 1,2
2-0,05 36,7 34,1 55,6
0,05-0,002 37,4 21,7 23,2
< 0,002 25,9 45,2 21,2
Clase textura! F A FAa
Densidad aparente (Mg m· ) 1,7 1,5 1,6
Agua retenida 33 kPa (%) 20,0 25,0 22,0
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 11,0 20,0 15.0
pHap 5,8 6,4 6,6
Carbono orgánico(%) 1 ,2 0,3 0,2
Ca 4,0 5,2 5,0
Cationes Mg l,l 2,3 2,3
intercambiables
1 K 0,4 0,2 0,2
(cmolc kg" )
Na 0,1 0.2 0,3
Suma de bases 5,7 79, 7,7
ere (cmolc 10,4 16,3 14,4
Saturación de bases (%) 55,0 48,0 53,0

153
Suelos de o ri ge n volcánico. En esta Zona, los suelos derivados de cenizas volcámcas 1Ún
no alcanzan su mayor expresión, cuyo máximo desarrollo en superficie y en evoluc1ón
pedogénica se encuentra al sur del paralelo 38° LS. Incluso algunos de los suelos utilizado: ma
el análisis de este capítulo, se podrían considerar más bien como parte del sector dL r re­
cordillera o en las cercanías de Stl Umite con la Depresión Intermedia. La mayoría de estos suelos
se encuentra en posición de lomajes suaves, con pendientes de 2 a 5% y hasta 5 a 8%; solam�nte
uno de los suelos utilizados en este análisis (Serie Maulecura), se encuentra en un abanico aluv1al
con un sustrato constituido por gravas redondeadas y arena intersticial, sugiriendo con ello un
transporte aluvial de las cenizas volcánicas. El color de los horizontes superficiales es
regularmente oscuro, lOYR2/I (negro) o bien 10YR2/2 (pardo muy oscuro), en cambio, en
profundidad los colores presentan un croma y un valor (Munsell) más elevado y también pueden
cambiar de matiz. De esta manera los horizontes más profundos pueden tener c-alores pardo fuerte
(7.5YR5/6) hasta rojo amarillento (5YR416). Las clases texturales son particularmente uniformes
entre horizontes y de un suelo a otro, así domina la clase textura! franca o franco ümosa en
superficie y en profundidad. Locabnente puede variar a franco arcillo arenosa. Se trata de suelos
profundos, de 150 cm o más y. al menos en las descripciones que se dispone, no se llegó a lo que
pudiera considerarse como un sustrato. La excepción la constituye el suelo Maulecura, en el cual
el sustrato aluvial se describió a los 50 cm de profundidad. Al igual que la clase textura(, la
estructura es muy uniforme entre los horizontes y de un suelo a otro, esto es, de bloques
subangulares medios moderados.

Las características fisicas determinan que prácticamente todos los suelos posean una excelente
penetración radical, de tal forma que se describen raíces comunes o abundantes hasta los 150 cm.
La SB es la característica de los suelos derivados de cenizas volcánicas, esto es inferior a 500/o y,
en la mayoría de los suelos, con una disminución en profundidad. El CO es medio a elevado en
..,
los epipedones, desde 5,0 a 6,5% y con decrecimiento gradual con la profundidad hasta 1 ,0%. El
pH se mantiene bastante uniforme en la mayoría de Jos suelos, entre 6,0 y 6,7. La retención de P
se encuentra sobre 90%, además de cumplir con el resto de las propiedades ándicas. Todas las
Fases de las diferentes Series de Suelos tienen buen drenaje y no se han descrito rasgos
redoximórficos en ningún suelo. La homogeneidad de las propiedades descritas también se
manifiesta en la clasificación taxonómica de los suelos, de tal manera que todos ellos son
Haploxerands. Solamente el suelo Maulecura califica para las propiedades vítricas, pues posee
más de 80% de vidrios volcánicos y tiene una retención de P entre 38 y 53%, por lo cual se ha
clasificado como Vitrixerand. Para este anáüsis, además de la Serie Maulecura, se han utilizado
las Series Bramadero, DiguiUín y Rada!. En el Cuadro 4-20 se presentan las principales
propiedades químicas y fisicas de la Serie Diguillín (Humic Haploxerand), considerada como
representativa de este grupo.

154
Cuadro 4-20. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Serie Diguillín
(ClREN, 1997b)

Profundidad cm) 0 - 18 18 - 49 49-85 85-100+


Distribución de partículas por tamaño (%) Ap Au AB B
2-1 0,1 0,0 0,0 0,1
1-0,5 1,5 0,7 0,3 0,7
0,5-0,25 2,8 2,0 0,8 1,8
0,25-0,10 4,8 3,9 1.8 3,4
0,10-0.05 7,3 6,3 3.0 5.4
2-0,05 16,5 12,9 5/) 11,4
0,05-0,002 51,7 62,2 60.9 42,0
<0,002 3 1 ,8 24 9. 33.2 ,,
46,6
Clase textura! FAL FL FAL AL
Agua retenida 33 kPa (%) 48,0 66,0 65,0 45.0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 28,0 39,0 40,0 25,0
pRa¡¡ua 6,3 6,5 6,4 6,2
Carbono orgállico (%) 6.0 5,3 4,1 1,5
Ca 11,4 10,4 6,8 6,7
Cationes Mg 1,1 1,4 l,O 1,2
intercambiables
K 1,1 0,5 0,5 0,4
(cmol0 kg"1)
Na 0,1 0,2 0,1 0,1
Suma de bases (cmol., kg· ) 13,7 12,5 8,4 8,3
ere (cmolc kg" ) 39,8 41.6 36,8 35,9
Saturación de bases (%) 34,0 30,0 23,0 23,0
Retención de P (%) 91,0 95,0 97,0 97,0
Al ox (%) 2,78 2,95 2,79 3,15
Fe ox (%) 0,36 0,33 0,38 0,41
Al ox + Yl Fe ox (%) 2,95 3,12 2,98 3,36

4.4.3 Región de Bío-Bío (36°00' - 37°45' aprox.) ..


Suelos en terrazas aluviales. En esta Región se ha descrito una cantidad importante de
suelos que se encuentran en esta posición y que, además tienen su origen en procesos aluviales.
Todos los suelos descritos están asociados a los ríos actuales, incluso a esteros de menor

-, -
importancia; pocos casos se identifican asociados a terrazas remanentes y cursos de agua no
existentes en el presente. Una de sus características esenciales es que poseen pendientes muy
O a 1% o como máximo 1 a
suaves o poseen una topografia plana, es decir, las pendientes son de
3%. Se han considerado también en este grupo a suelos con pendientes muy superiores y que
corresponden a las caídas de las terrazas hacia los cursos aluviales, en el caso de las terrazas altas
de los valles. Se han incluido también en este grupo a suelos que ocupan planos de nundación
i en
sectores intermontanos, por representar un origen semejante. Como se puede esperar, el sustrato
más frecuente está constituido por gravas redondeadas con arena intersticial, aun cuando se han
descrito sustratos solamente de arenas estratificadas; o bien en otros casos, el material intersticial
entre las gravas es franco arenoso o franco arcillo arenoso. En varios suelos no se describió el
:>Ustrato, pues no fue visible hasta la profundidad de observación.

155
Los colores de los horizontes superficiales son pardo oscuro, pardo grisáceo oscuro o pardo roJ t70
l'
oscuro en los matices l OYR, 7 .5YR o 5YR; solamente en aquellos suelos que presentan un

..
régimen de humedad ácuico, los colores pueden variar en valor y croma (Munsell).
manteniéndose en los mismos matices, es decir gris oscuro (4/1), gris parduzco claro (5/2). gris
muy oscuro (3/1). En los horizontes más profundos, se mantienen los mismos matices y los
valores y cromas se hacen más oscuros. Como se debería esperar, a causa del origen de los
suelos, las clases texturales en superficie y en los horizontes subsuperficiales son muy variables.
Las clases texturales descritas para los epipedones son franco limosa, franco arcillosa, franco
arenosa, franca, areno francesa, arcillo limosa, franco arenosa muy fina. En los horizontes más
profundos también se puede apreciar una gran variabilidad, si11 embargo son más frecuentes las
clases texturales gruesas, tales como arenosa gruesa, arenosa y areno Jiancosa. La estructura
dominante en todos los perfiles es de bloques subangulares finos, medios y gruesos, desde débiles
hasta fuertes. En aquellos horizontes en que domina la fracción arena, el grado de no estmctura se

..
describe generalmente como de grano simple. Se trata de suelos profundos y muy profundos, esto
es de 140 a 160 cm. Algunos suelos se describieron como ligeramente profundos (50 a 75 cm)
hasta el sustrato aluvial constituido por gravas con matriz gruesa, como ocurre con las Series
Pedregales, Perquilauquén y Culenar.

A causa de las condiciones físicas de los perfiles, el sistema radical de la vegetación se desarrolla
en buenas condiciones, de tal forma que se han descrito raíces finas y medias hasta el contacto
con el sustrato. En algunos suelos no se encontraron raíces en los horizontes más profundos ( 160
cm), como ocurrió en las Series Llahuecuy, Maca! Poniente y Tomeco. Las condiciones de
drenaje están asociadas más bien a la posición que los suelos ocupan en el paisaje (terrazas altas o
relieve cóncavo), que a la permeabilidad dentro del perfil, de manera que la mayoría de los suelos
son bien drenados. Aquellos que se encuentran en sectores planos depresivos, pueden presentar
drenaje moderado o imperfecto. En los casos más extremos se puede presentar un régimen de
humedad ácuico, como ocurre en las Series Culenar, Changaral, Los Olmos y Los Sauces.

El contenido de CO es particularmente bajo en la mayoría de los suelos de este grupo, de tal


manera que en los horizontes superiores son frecuentes los contenidos entre 1,5 y 2,5% y, en los
horizontes más profundos en contacto con el sustrato, entre 0,1 a 0,5%. Como es esperable, la SB
es variable, dada la gran dispersión de clases de materiales y de granulometría, de tal forma que
se encuentran valores entre 36 y 100%, con una débil tendencia a que los valores más elevados se
encuentren en los horizontes más profundos, sin llegar a constituir una norma. Los valores
extremos de pH para todos los horizontes en todos los suelos son de 5,6 y 7 ,6. Los pH más
elevados se han encontrado en la mayoría de los suelos, en los horizontes más profundos y en
contacto con e] sustrato. Los rasgos redoximórficos son comunes a abundantes desde la superficie
en aquellos suelos que se han descrito con régimen de humedad ácuico (Series Culenar,
Changaral, Paillihue, Santa Teresa, Los Olmos y Los Sauces). En otros suelos sólo se hao
descrito como ocasionales y en algunos horizontes, de tal manera que no identifican procesos de
reducción importantes.

Se considera que la aptitud agrícola de estos suelos está gobernada por tres factores esenciales: la
granulometría, la profundidad y el drenaje; evidentemente, no en ese orden ni tampoco

.. ...
simultáneamente. De esta manera, las Clases de Capacidad de Uso son variables, dependiendo de
la limitante más severa que evidencia el suelo. Se han descrito Clases ms y TVs, lllw, TVw hasta
VIw. Sin embargo, en este grupo también se han descrito suelos con Clase U, lo cual evidencia

una excelente aptitud. Desde el punto de vista taxonómico, Mollisols e lnceptisols son los
Órdenes más representados y, en menor proporción, Entisols. Así, Haploxerolls, Haploxerepts y

156
Xerofluvents respectivamente, son los Grandes Grupos más comunes que se han descrito.
Aquellos suelos con mal drenaje y que presentan endosaturación, se han clasificado como
Endoaquolls, Endoaquepts y Endoaquents.

Para este análisis se han considerado, además de las Series ya mencionadas, a las Series
Anilehue, Cabrero, Coigüe, Confluencia, Chacaico, Dadinco, Duqueco, Ninhue, Quillón, El
Manzano, Huapi, Los Tilos, Llahuén (figuras 4-28 y 4-29, al final del Capítulo) y Manque!. En
el Cuadro 4-21 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de Ja Serie Tomeco
(Fluvaquentic Haploxeroll), considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 4-21. Propiedades fisicas, químicas y fisieo-químicas de un perfil representativo de la Serie Tomeco
(CIREN, 1999)

Profuodjdad (cm) 0 - 18 1 8 - 47 47-85 85 - 1 15 115 -150


Distribución de partículas por tamaño(%) Ap A2 � e
2 1- 0. 1 0.1 0,2 0, 1 0,1
1-0,5 0,3 0,4 0,2 0,2 0,2
0,5-0,25 0.2 0,5 0,1 0,2 0,3

0,25-0.10 1 ,2 1,8 1,6 1,7 2,4

0.10-0,05 10,6 11,7 9,4 12,5 1 9,4


2-0,05 12 5
, 14 6
. 1 1 .6 14,8 19 4
,

0,05-0.002 50.5 54.2 53,0 50,0 47,6

< 0,002 36,9 3 1 ,2 35,4 34,7 33,0

Clase textura! FAL FAL FAL FAL FA


Densidad aparente (Mg m· ) 1,29 1,07 1,11 1,10 l. I R
Agua r tenida 33 kPa (%) 33.8 29.3 32,2 32,0 33,2
Agua retenida 1.500 kPa (%) 17,0 16,8 18 8
, 18,4 18,3

pH.,.ua 7. 1 7,2 7,4 7,5 7,6

Carbono orgánico (%) 1 ,9 0,54 0.85 0.82 0,85

Ca 1 1 ,6 10,3 1 1,5 11,1 11,2


Cauones Mg 8.92 835 8,8 8,59 8.55
intercambiables
1 K 0,30 0.23 0,34 0.33 0,3 1
(cmol. kg' )
Na 0,34 0.24 0,24 0.24 0,26

Suma de bases (emol. 21,2 19,1 20,8 20,2 20,4

ClC (cmol. kg' ) 26.1 23.5 26.8 27.0 26.4

Saturación de bases (%) 81.0 81,0 78,0 75,0 77,0

Retención de P (%) 32.0 2 7.0 35,0 25,0 28,0

Suelos sobre toba volcánica. Además de la presencia de una toba volcánica como sustrato
de estos suelos, también es característico de ellos su relieve plano o casi plano o cóncavo, con
pendientes de O a 1% o bien de 1 a 3%. En cambio. la unidad geomorfológica en la que se
encuentran, puede ser variable, pues se han descrito sobre abanicos piroclásticos (Abanico de San
Ctrlos), terrazas remanentes, paisajes lacustrinos y planos depositacionales deprimidos. Se trata
d� o:;uelos de clases texturales medias y finas en los horizontes superficiales (franco arcillosa,
fimea, franco arcillosa limosa) que se hacen más finas hacia los horizontes más profundos
tnmediatamente sobre la toba, esto es principalmente arcillosa. La profundidad de los suelos se ha

157
.. .. ..
medido hasta la aparición de la toba, la cual se puede encontrar desde 1 1 O hasta 1 3 0 cm y, \;n los
casos de suelos delgados aparece entre los 50 y los 80 cm.

El color de los horizontes superficiales varia principalmente en los matices SYR y lOYR. ya sea
pardo rojizo oscuro o pardo grisáceo oscuro. En profundidad aumenta el valor (MunseJJ) con lo
cual los colores se hacen más grises y pálidos. En casi todos los suelos considerados .:n esta
categoría, la estructura es de bloques subangulares medios moderados en los honLOnles
l.
superficiales, la cual desaparece en los horizontes que se encuentran en contacto con la toba. y se
describe como masiva. Dadas las características morfológicas descritas, es muy lógico considerar

que los sistemas radicales adquieren un desarrollo limitado, de tal forma que se han descrito
raíces escasas u ocasionales y muchas veces inexistentes en los horizontes en contacto con la
..
toba. El drenaje es moderado, imperfecto y pobre, dependiendo de la Fase que se considere; en
todo caso constituye una limitante para su uso. Además, la presencia de rasgos redoximórficos,
de comunes a abundantes y desde la superficie en prácticamente todos los suelos, constituye la
evidencia de los problemas de drenaje de estos suelos. El contenido de CO es bajo en los
horizontes superficiales, de 0,6 a 1,5%; solamente la Serie Santa Clara alcanza un valor mayor,
3,2%. En profundidad, es claramente inferior, 0,3 y O, 1 % , en todos los suelos. La SB es siempre
superior en los epipedones, desde 47% a 68%, y aumenta hacia el contacto con la toba, con
valores desde 75 a 95%. El pH se hace más alcalino hacia los horizontes inferiores, desde 5,9 a

..
6, l en superficie hasta 6,9 a 7,5 en profundidad.

..
Las propiedades descritas determinan que estos suelos presenten limitaciones moderadas a
severas en su uso, por lo que las Clases de Capacidad de Uso varían entre Jllw y Vlw. Desde el
punto de vista taxonómico, existe gran variabilidad, pues Los suelos descritos se han clasificado
en los Órdenes Vertisols, Inceptisols, Alfisols y Mollisols. Es probable que la diversidad de
unidades geomorfológicas en las que se han descrito, sea una de las razones que han definido las
diferentes direcciones en la pedogénesis de los materiales originales. Para esta discusión, además

de la Serie Santa Clara ya mencionada, se han utilizado las Series Canosa (figuras 4-30 y 4-3 1 , al
final del Capítulo), Huenutil, Parral, Quella, Tiuquilemu y Villaseca.

En el Cuadro 4-22 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de la Serie Santa
Clara (Vertic Duraquoll) considerada como representativa de este grupo.

!58
Cuadro 4-22. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Serie Santa Clara
(CffiEN, 1999)

Profundidad cm 0 - 13 13-25 25 - 53 53 - 89
Distribución de particulas por tamaM (%) BC
2-1 3,7 3,3 2,6 2,5
1-0,5 9,8 8,8 8.0 7,5
0,5-0,25 12,2 10,4 9,3 9,6
0,25-0,1 0 8,9 8,3 7,5 8,2
0,1 0-0,05 5,3 4,4 7,8 4,0
2-0.05 39,9 35,2 32,2 31,7
0,05-0.002 6,4 16,4 19.1 21,1
< 0,002 53,7 48,4 4S,7 47,2
Clase textura! A A A A
Agua retenida 33 lePa (%) 27,0 36,0 37,0 36,0
Agua retenida 1.500 lePa (%) 16.0 22,0 23.0 24.0
pH.¡¡wo 6,0 6,0 6,8 7,5
Carbono orgánico (%) 3,2 0,9 0,5 0,3
Ca 8.8 8,4 10,7 11,3
Cationes Mg 3,4 5,4 9,9 1 1,4
intercambiables
1 K 0,2 0,1 0,1 0.1
(cmol. kg- )
Na 0.1 0,2 0,7 1,0
Suma de bases (cmol. kg' ) 12,5 14,1 21,4 23,8
CIC (cmol. kg· ) 21,0 20,3 26,8 25,9
Saturación de bases (%) 59,0 69,0 80.0 92,0

Suelos sobre sedimentos fluvioglaciales. La posición que estos suelos ocupan en el


patsaJe, conjuntamente con los materiales que conforman el sustrato, constituyen las
características principales que permiten identificarlos en terreno. De esta manera, se encuentran
ocupando abanicos piroclásticos (San Ignacio y San Carlos), terrazas remanentes, lomajes suaves
remanentes y piedmonts. Las pendientes varlan entre 1 a 3%, 5 a 8% y en las condiciones más
extremas se encuentran hasta 8 a 15%. El sustrato fluvioglacial se caracteriza por un conjunto de
gravas subredondeadas y angulares frescas y con diferentes grados de meteorización, embebidas
en una matriz arcillosa o arcillo arenosa que ocupa entre el 20 y el 40% en volumen. Los
borízonles superficiales generalmente poseen colores rojizos, en los matices (7.5YR y 5YR), esto
es, pardo rojizo y pardo rojizo oscuro. En algunos sectores de la Serie Collinco existe un depósito

de cenizas volcánicas recientes en superficie cuyo espesor varia entre 12 y 42 cm (Kühne et al.,
2005). En profundidad los colores se hacen más rojos de tal manera que Jos colores rojo oscuro y ..
pardo rojizo (en los matices 5YR y 2.5YR) son frecuentes. En los epipedones las clases texturales
son finas, esto es, franco arcillo limosa, franco arcillosa y arcillosa. En todos los suelos descritos
el contenido de la fracción fina se incrementa hacia los horizontes inferiores, en contacto con el
sustrato. La estructura dominante es de bloques subangulares con diferente grado de expresión y
solamente en algunos casos se han descrito prismas; en contacto con el sustrato, también se ha
descrito la condición de no estructura maciza.

La profundidad de los suelos, a la que se encuentra el sedimento tluvioglacial, es muy variable,


puc:s está relacionada con la intensidad del evento que dio origen a este último y a las condiciones
t�"ográficas originales. Los suelos más profundos se han descrito hasta los 140 6 150 cm (Series

159
" ...... 47 y 52 cm; .-s el
Trilico y Niblinto) y los más delgados tienen una profundidad que varia entre
t
caso de las Series Carimay y Talquipén. De acuerdo a las características descritas, es esperable
que l.as condiciones de drenaje sean también variables, de esta manera se han identificado suelos
bien drenados, moderadamente bien drenados hasa
t imperfectamente drenados. El sistema radical
está débilmente desarrollado y es frecuente que en los horizontes más profundos se descnban
raíces aisladas o bien no existan raíces de ninguna clase.

..
El CO presenta los mayores valores en los horizontes superficiales, Jos que pueden variar entre
, para disminuir hacia los horizontes inferiores, con valores de 0,7 hasta 0,2%. La SB
1,8 y 5,1%,
siempre es baja en los cpipedones y se increment-a hacia el sustrato, con valores que varían de 1 5
a 5 1 % en superficie y entre 44 y 65% en los horizontes
... 1 inferiores. El pH se mantiene entre 5,6 y
6,4 con una ligera tendencia a ser más alcalinos en profundidad. Los rasgos redoximórficos se
han descrito de comunes a abundantes. a partir del segundo horizonte, solamente en aquellos
suelos que se han identificado con problemas de drenaje. Solo en la Serie Cato se describió un
nivel freático a los 80 cm de profundidad. La aptitud de estos suelos es limitada, de acuerdo a las
propiedades que se han descrito, de tal manera que la mayorfa de los suelos posee Clases llis,
lllw y fVs de Capacidad de Uso. A aquellas Fases que presentan las pendientes más fuertes se
les ha asignado una Clase VIe. Taxonómicamente Xerepts y Xeralfs son los Subórdenes más
comunes que se han identificado. Para este análisis se han utilizado, además de las Series ya
mencionadas, las Series Bidico, Bulnes, Collinco, Collipulli (figuras 4-32 y 4-33 al final de1
Capítulo). Mirador. Trasval, Tres Esquinas y Virquén.

Suelos derivados de materiales volcánicos. El título de este sub-capítulo se plantea como


suelos derivados de materiales volcánicos y no como suelos volcánicos, debido a que en esta
Zona todavía no se encuentra la expresión máxima del desarrollo pedogénico de estos suelos.
Sólo algunos suelos descritos en esta Zona presentan bien expresadas las características propias
de Jos Andisols, tal como ocurre en las Series Mayulermo (Figura 4-34, al final del Capítulo) y
,..

. .. ..
Santa 6
Bárbara (Typíc Haploxerands).

..
Las principales posiciones
aluviales, terrazas fluvioglaciales ....
y planos depositacionales. ..
< geomorfológicas en las que se encuentran corresponden a abanicos

El sustrato puede ser de gravas y


piedras con una matriz
f

considerados el sustrato no se describió hasta .. .


desde franco arenosa fina hasta arclllosa; en varios de los suelos
•L

,, observación, que llegó a más de


La profundidad de
160 cm. Los colores dominantes se encuentran en el pardo oscuro y pardo rojizo oscuro en los
matices 5YR y 7.5YR, con un ligero incremento del valor y el croma (Munsell) hacia los
horizontes inferiores,
.. o sea hacia colores más luminosos. Las
particularmente homogéneas de un suelo a otro y dentro de cada suelo, fluctuando entre franca,
franco limosa y franco arenosa, y en casos muy particulares,
clases texturales

areno francosa y arenosa como•


son

. ,las Series Coreo y Arenales (Figura 4-35, al final del Capítulo). La estructura es de
ocurre en
bloques subangulares medios, débiles y moderados y sólo se describe como grano simple para las
...
dos Series antes seilaladas. En general, se trata de suelos profundos y muy profundos, esto es 1 5 0
a 160 cm y solamente e n e l caso de la Serie Lomas Atravesadas u n sustrato de arenisca
•cementada limita la profundidad del suelo a 90 cm. Se trata de suelos bien drenados, tanto por la
u:

topografia como por su penneabilidad interna. El sistema radical está bien desarrollado, de tal
forma
,: que se describen raíces incluso hasta los 160 cm de profundidad.

160
En el Cuadro 4-23 se presentan las principales propiedades quuntcas y fisicas de La Serie
Collipulü (Typic Rhodoxerall), considerada como un suelo representativo de este grupo.

Cuadro 4-23. Propiedades físicas, quím1cas y flsico-químicas de un perfil representativo de la Serie Collipulli
(CIREN, 1999)

Profundidad cni 0-1 5 1 5 - 35 35-47 47- 84 84- ISO


Distribución de partículas por tamailo (%) Ap Bt2
2- 1 0.2 0,2 0,2 0,0 1,1
1-0,5 0,7 0,4 0,5 0.3 3.5
0,5-0.25 1,9 1,5 1.6 1,0 4,8

0.25-0.10 5.7 4,5 5,0 3.1 6,3


0,10-0,05 7.5 6,6 7,0 5,2 5,1
2-0,05 16.1 13,2 14,3 9,8 21,5
0,05-0.002 38,9 36,6 35.4 28,5 24,9

< 0.002 45,0 50,2 50,3 61.7 53,6


Clase textura! A A A A A
Densidad aparente (Mg m·· ) 1 , 14 1 , 16 1,11 1,03 0,91
Agua retenida 33 kPa (%) 32,2 30,7 29,8 31,6 3 6,3
Agua retenida 1.500 kPa (%) 20,3 20,6 20,6 25.7 2&,3
pll.,.. 5,9 5,7 5,7 6.1 6,2
Carbono orgánico(%} 3,68 2,3 1 1,72 1.03 0,66
Ca 6,85 6.3 1 5,72 6,75 7.2&
Mg 3.44 3.06 2,8 2.48 3,04
Cationes
intercambiables K 0,1 0,05 0,03 0.03 0,04
1
(emol. kg' ) Na 0,12 0,10 0,08 0,12 0,27
Al 0, 1 4 0,35 0,73 0. 1 5 0,03
Suma de bases emol. 10.51 9.52 8,63 9,3 8 10,63
CIC (cmolc kg· ) 29,3 30,5 25,7 20,8 19,7
1
CTCE (cmot. kg- ) 10.65 9,87 9,36 9.53 10.66
Saturación de bases (%) 36,0 3 1,0 34,0 45.0 54,0
Saturación de Al (%) 1.3 3.5 7,& 1.6 0,3
Retención de P %) 62.0 58,0 59.0 59,0 67,0

En todos los suelos que califican como Andisols. el contenido de CO es elevado en los
epipedones, entre 5,4 a 9,2%, el que decrece regularmente con la profundidad hasta alcanzar
valores de O, 1% a los 150 cm. Solamente en las Series Arenales y Coreo, ya señaladas, el CO
varía entre 1 ,O y 1 ,8%, respectivamente. La SB aumenta con la profundidad, desde valores de 20
a 30% en los cpipedones hasta 85% en algunos suelos. En el caso de la Serie Trupán la SB
decrece con la profundidad. El pH se mantiene uniforme en todos Jos suelos entre valores
extremos de 5,4 y 6,7. A causa de las excelentes condiciones de drenaje, no hay evidencias de
rasgos redoximórficos en los suelos tomados como ejemplo para este análisis.

l:n todos los suelos considerados las propiedades ándicas se encuentran dentro de los rangos
3
propuestos (Soil Survey StafT, 2006); esto es, una Db _:s 0,9 Mg m· , una retención de P ?: 85% y
un contenido de (Al ox + YzFe 0,] ?: 2%. Las Series Caillihue y Coreo cumplen con los
rl!querimientos del Suborden Vitrand. En el caso de la Serie Arenales, si bien no cumple Jos
requerimientos para ningún suborden de los Andisols, de acuerdo a los antecedentes analíticos

161
disponibles, se le considera como un suelo desarrollado a partir de arenas volcánicas andes• ¡;ar;; - ·u
basálticas, y es la razón por la que se ha incluido en este grupo.

Los suelos derivados de cenizas volcánicas (Andisols) constituyen un grupo de suelos que. t'II su
mayoría, presentan muy buena aptitud agrícola. Así, son frecuentes las Fases de Series que
poseen Clase de Capacidad de Uso 1 y ll, mientras que las Fases con Clases N y VI se dcl.1cn
esencialmente a pendientes excesivas y riesgos de erosión. Las Series Coreo y Arenales tienen
Clases IV y Vl debido a su granulometria gruesa y muy gruesa. Para este análisis se han
utilizado, además de las Series ya mencionadas, las Series Arrayán, Candelaria, Paicaví, Trupán y
Yungay. En el Cuadro 4-24 se presentan las principales propiedades de la Serie Trupán (Humic
Haploxerand), considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 4-24. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quimicas de un perfil representativo de la Serie Trupán
(ClREN. 1999)

Profundidad (cm) 0 - 15 1 5 - 32 32-57 57-96 96-116


Distribución de partículas por tamafto (%) Ap
2-1 0,1 0,1 0,1 0,1 0,2
1-0.5 0,2 0.1 0,2 0,4 1,0
0,5-0.25 0,5 0.3 0,3 1,0 1,9

0,25-0,10 2,0 2.1 1.5 2,8 4,2


0,10-0,05 10 5
. 7,2 5.8 8,7 12.4
2-0,05 13,4 9,9 7.9 12.9 19,5

0,05-0,002 60,6 62,1 64,7 66.8 66.8


< 0,002 26,0 28,0 27,3 20,3 13 .7

Clase textura! FL FL FL FL FL

Densidad aparente (Mg 0,82 0,84 0.77 0,81 0,92


Agua retenida 33 k.Pa (%) 64,2 61,1 61,0 58,0 50,9
Agua retenida 1.500 kPa (%) 28,2 30.3 32,7 32,4 31,2

pH"'"" 6.0 5,9 5,9 5,9 6,2


Carbono orgánico (%) 6,18 2,90 4,91 3 26
, 1,68
Ca 8.11 8,35 7,83 5,37 4.39
Mg 1,45 0,95 0.17 0,63 0,59
Cationes
intercambiables K 0.35 0.13 0.13 0,08 0,06
(cmol. kg-1) Na 0,15 0,15 0,15 0,12 0,08
Al 0,04 0,02 0.02 0,06 0,00
Suma de bases (cmo10 kg' ) 10,05 9,58 8,87 6,21 5,12

CJC (cmolc kg- ) 43,9 52,0 49,4 46,7 37,2


CJCE (cmol.: kg-1) 10.09 9,60 8,89 6,27 5.12
Saturación de bases (%) 23.0 18,0 18,0 lJ,O 14,0
Retcnc1ón de P (%) 97.0 100,0 100.0 100,0 100,0
Al ox + V2 Fe ox (%) 3,82 4.30 4.60 4.65 4,11

162
4.5 Suelos de la Cordillera de la Co sta ..
4.5.1 Regiones de Valparaíso y Metropolitana (32°00' - 34°00' aprox.)

Suelos de cerros en la Cordillera de la Costa. En estas Regiones, la Cordillera de la


Costa está constituida esencialmente por el batolito granítico con algunas intrusiones de
materiales básicos, mezclados de manera discontinua. De esta forma, el granito ha constituido la
roca de origen de la mayoría de los suelos que se encuentra en esta formación y solamente en
casos muy puntuales se ha descrito el material parental como granito metamorfizado, sin que en
la descripción de los suelos aparezca una explicación al respecto. En otros casos. el sustrato ha
sido descrito como arenisca cuarcífera o bien simplemente como gravas graníticas. Todos los
suelos que pertenecen a este grupo han sido descritos con gravas angulares y subangulares a
través de los perfiles, esencialmente de cuarzo. La topografia es de cerros, lo cual significa
pendientes de 8 a 15%, de 20 a 30% hasta más de 50%; solamente en algunos sectores las
pendientes pueden ser inferiores, de 5 a 8%, en el caso de suelos en posición de abanicos y
piedmonts. El color que domina en los horizontes superficiales es el pardo rojizo oscuro en los
matices SYR y 7.5YR; en los horizontes más profundos, hacia el contacto con la roca granítica, el
color se hace pardo rojizo en los mismos matices. La clase textura! del horizonte superficial es
generalmente franco arcillosa, variando entre franco arcillo arenosa y franco arcillo limosa. Hacia
los horizontes más profundos se mantiene el alto contenido de arcilla, aun cuando aumenta la
fracción gruesa, de tal manera que son frecuentes las clases texturales de arcillo arenosa
inmediatamente sobre el sustrato. La estructura se mantiene de bloques subaogulares medios y
gruesos a través de los perfiles y generalmente se hace maciza inmediatamente sobre el sustrato.

Como se trata de una Formación que ha sufrido profundos procesos de erosión, la profundidad de
los suelos suele ser variable. Se estima que los suelos que no han sufrido procesos de erosión
severos son profundos y muy profundos (más de 120 cm basta la roca o el sustrato) y aquellos
con erosión severa no superan los 70 a 80 cm hasta el sustrato. Sin embargo, se han descrito
sectores con suelos de menos de 50 cm de profundidad, en condiciones extremas. El sistema
radical se desarrolla en buena forma con un decrecimiento gradual con la profundidad, hasta
desaparecer en contacto con el sustrato. Dada la topografía que ocupan los suelos, presentan buen
drenaje superficial.

La SB es variable de un horizonte a otro y de un suelo a otro, con valores extremos de 64-65%


hasta 90-97%, sin una tendencia definida con la profundidad. El pH, en todos los horizontes de
los suelos considerados, varía entre 6,0 y 6.6 y el contenido de CO, en los horizontes
superficiales, varía entre 1 , 1 y 1 ,5%. En los horizontes más profundos se mantiene en 0,2%.

La limitante más importante para el uso de estos suelos está dada por la posición de cerros que
ocupan en el paisaje y por las fuertes pendientes, por lo cual las Clases de Capacidad de Uso
varian entre IV y VTI. Desde el punto de vista taxonómico, domina el Gran Grupo Haploxeralf y
en menor proporción Haploxeroll. Para este análisis se han tomado en consideración las Series de
Suelos Lo Vásquez (figuras 4-36 y 4-37. al final del Capítulo) y Viluma, además de las
Asociaciones Maca! y Mansel.

En el Cuadro 4-25 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de la Serie Lo


Vasquez (Uitic Haploxeralf) considerada como representativa de este grupo.

163
Cuadro 4-25. P.ropiedades física�, quimicas y fisico-quimicas de un perfil representativo de la Serie Lo \- ls,¡nez
(ClREN. l 997a)

Profundidad (cm 0 - 18 18-32 32-43 43-57 57-78


Distribución de particulas por tamaño (%) A¡ Bm B,n B3
2-1 4,8 4,0 4,9 4,7 3,8
L-0.5 1 1,5 9,5 9,4 12,4 12,5
0,5-0,25 10.6 9.9 9.5 12.1 12.4
0.25-0.1 0 13.9 12,5 13,3 14,5 14,3
0,10-0,05 15,0 1 1,0 '
1 1,0 13,1 12,3
2-0,05 55,8 46,9 48,1 56,8 55,3
0.05-0,002 29,4 24,7 21,1 14,0 27,5
< 0.002 14,8 28,4 30.8 29.2 17.2
Clase textunú Fa FAa FAa FAa Fa
Densidad aparente (Mg m· ) 1.6 1,8 1.8 1.8 1.8
Agua retenida 33 kPa (%) 21,0 24,0 22,0 22,0 20.0
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 9.0 9,0 12.0 12,0 1 1 ,0
pHag,.._ 6.6 6.7 6,7 6,7 6,7
1
Conductividad eléctrica (dS m' ) 0,3 0.2 0,1 0.1 0,1
Carbono orgánico (%) 1 '1 0,5 0,4 0,2 0,2
Ca 8.5 1 1 ,9 10,6 13,8 14,8
Cationes Mg 2,3 3.4 3,3 4,9 5,3
intercámbiables
1 K 0.1 0.2 0,2 0,2 0,1
(cmolc kg- )
Na 0.1 0.2 0.3 0,3 0,4
Suma de bases (cmolc kg· ) 1 1,0 15,7 14.4 19,2 20,6
CIC (cmolc kg· ) 13,8 21.6 22,4 23,9 24,8
Saturación de bases (%) 79,7 72,7 64,3 80,3 83,1

Suelos en lomajes y terrazas costeras. En este grupo se ha incluido a todos aquellos


suelos que se encuentran en posición de terrazas marinas, lomajes suaves próximos a los sectores
costeros y terrazas remanentes, tanto de origen marino como aluvial. que se han formado en los
valles próximos a la costa. La posición que ocupan estos suelos determina que sus pendientes
sean también inferiores a la de los suelos de los cerros de la Cordillera de la Costa (figuras 4-38 y
4-39, al final del Capítulo), de tal manera que las pendientes más frecuentes son de 2 a 5%, 8 a
15% y solamente en algunos casos, las caídas pueden ser superiores a 30%, como ocurre en la .,
Asociación Matanzas.

..
El sustrato más frecuente corresponde a arenas y areniscas graníticas, en algunos casos mezcladas
con gravas de origen mixto.o . Solamente en la Serie Catapilco se describió un sustrato del tipo
arcillolita. El color superficial dominante es el pardo oscuro en el matiz 7.5YR, y en algunos
casos, es el pardo rojizo oscuro. Hacia 1os horizontes más profundos el valor y el croma
(Munsell) aumentan, dando origen a colores pardo amarillentos. Las clases texturales dominantes

..
son gruesas en los horizontes superficiales, tales como franco arenosa, areno francosa y más
raramente franco limosa; sin embargo se ha podido apreciar que no existe ninguna tendencia
clara hacia los horizontes más profundos, particularmente aquellos que se encuentran en contacto
con el sustrato. De esta manera, las clases texturales que se han descrito para estos horizontes son
arcillosa, arcillo arenosa, franco arcillosa, arenosa y areno francosa fina. En varios suelos se ha

164
descrito grava de cuarzo común a través de los perfiles, lo cual podría indicar el origen granítico
de los materiales de partida.

La estructura más frecuente es de bloques subangulares medios y gruesos, la que generalmente


cambia a maciza en los horizontes inferiores. La profundidad hasta el sustrato es variable, pues se
han descrito suelos de 54 cm (Serie Catapilco) hasta 120 cm en el caso de la Serie Lingo-Lingo.
Las raíces tienden a desaparecer con la profundidad, sin embargo aún se describen como escasas

en la proximidad al sustrato. Todos los suelos considerados presentan buen drenaje y solamente
ciertas Fases de algunas Series pueden presentar un drenaje imperfecto. En estas últimas se han
descrito rasgos redoximórficos (masas y concreciones) desde escasos hasta comunes en los
horizontes subsuperficiales.

La SB que presenta la mayoría de los suelos se encuentra entre los rangos corrientes para los
suelos del sector, es decir entre 60 y 90% y solamente la Serie Tabolango se ha descrito con un
horizonte con 32%, en forma excepcional. Los niveles de CO son particularmente bajos y no
superan 1 ,5% en los horizontes superficiales y varían de O, 1 a 0,4% en los horizontes más
profundos. El pH no evidencia la presencia de carbonatos ni sales, de tal forma que sus valores
fluctúan entre 5,6 y 7,8. Se considera que la clasificación taxonómica de los suelos de este sector,
conjuntamente con los análisis químicos y fisicos, requiere a la fecha de una actualización, por lo
que solo se puede señalar que los Órdenes más representados son Alfisol, Mollisol e lnceptisol.

Para el análisis de estos suelos se han tomado en consideración, además de las Series ya
señaladas, a las Series Loncura, Longotoma, Santo Domingo, Tabolango y la Asociación La
Manga.

En el Cuadro 4-26 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de la Serie Lingo­
Lingo (Typic llaploxerept) considerada como representativa de este grupo.

165
- quimicas de un perfil representativo de la Serie Língo-lm!l-o
Cuadro 4-26. Propiedades fisicas, químicas y fisico
(CIREN. 1996a)

Profundidad cm) 0-22 22-36 36-53 53-68 68- 120


Distribución de partículas por tamaño (%) A1 A Bz e
2-1 8,5 9,6 5,0 3,3 8,1
1-0,5 20,4 3 1 .4 24,4 14,6 24,0
0,5-0,25 15,3 17,5 20,6 18,9 14,9
0.25-0,10 16,1 10,9 11,4 12.7 9,0
0,10-0,05 12,2 7.4 8,3 7,8 9,0
2-0,05 72,5 76,8 69,7 57,3 61,4
0,05-0,002 17,2 15,8 14,6 21,9 13,1
< 0,002 10.3 7,4 15,7 20,8 25,5
Clase rextural Fa Fa Fa FAa PAa
Densidad aparente (Mg m· ) 2,0 2,0 1,9 1,9 1,9
Agua retenida 33 kPa (%) 10,0 8,0 11,0 18,0 15,0
Agua retenida 1.500 lePa (%) 4,0 4,0 6,0 10,0 9,0
pHaguu 6.! 6,5 6,6 6,2 5,7
Conductividad eléctrica (dS m"1) 0.1 0,1 0,3 0,4 1,1
Carbono orgánico (%) 0,5 0,2 0,2 0.2 0,2
Ca 1,8 1,7 2,8 5,1 7,1
Cationes Mg 0,9 0,9 1,6 2,8 3,2
intercambiables
K 0,1 0,1 0,1 0,2 0,2
(cmole kg-1)
Na 0.1 0,1 0,3 0,6 0,9
Suma de bases (cmolc kg· ) 2,9 2,8 4,8 8,7 11,4
ere (cmolc kg" ) 3,8 3,8 5,8 13,1 12,3
Saturación de bases (%) 76 74 83 66 93

4.5.2 Regiones de O'Higgins y Maule (34°00' - 36°00' aprox.)

Suelos de cerros en la Cordillera de la Costa. Se puede considerar que en estas


Regiones se continúa con la mayoría de las características de los suelos de las Regiones
anteriores (Valparafso y Metropolitana), con la diferencia que comienzan a aparecer los....
materiales metamórficos, los cuales alcanzan su máxima expresión al sur del paralelo 37°45'. Por
lo tanto, el Batolito granítico continúa siendo la formación geológica que ha dado origen a la
mayor parte de Jos suelos que ocupan la posición de cerros (Figura 4-40, al final de Capítulo). En
esta posición las pendientes más frecuentes son de 30 a 50% y solamente en el caso de lomajes

adosados a Jos cerros de la Cordillera de la Costa, las pendientes pueden ser de 5 a 8% y de 15 a
20%.

El sustrato de los suelos es roca granítica con diferentes grados de meteorización, o bien gravas
de origen granítico ricas en cuarzo con una matriz que puede ser franco arcillo arenosa. La

-
profundidad de los suelos no es superior a los 100 cm, a pesar de la antigüedad de Jos suelos y de
la profundidad de la meteorización, lo cual se podrfa explicar a causa de los intensos procesos de
erosión a los que se encuentra sometida la mayor parte de la Cordillera de la Costa. Los colores
de los horizontes superficiales se mantienen en Jos matices pardo rojizo oscuro (5YR y 7.5YR);

166
en los horizontes más profundos, el color se hace pardo rojizo en los mismos matices, con la
excepción de la Asociación Piuchén, que alcanza marices 2.5YR. Las clases texturaJes son finas y
muy fmas, esto es franco arcillo arenosa, franco arcillosa y arciUosa. La profundidad de
amugamiento está acorde con la profundidad del sustrato; la estructura es comúnmente de
bloques subangulares medios y gruesos fuertes y ocasionalmente maciza en profundidad.

Todos los suelos presentan buen drenaje, lo cual tiene relación con la topografía que ellos
ocupan. Otras propiedades. tales como la SB, el contenido de CO y el pH se mantienen en los
mismos rangos que los descritos para los suelos semejantes de las Regiones precedentes.

..
Además, se mantiene como rasgo común la presencia de grava de cuarzo angular y facetada, de
común a abundante a través de todos los horizontes. Desde el punto de vista taxonómico son
principalmente considerados como Xeralfs, y en menor proporción como Xerepts. Las Clases de
Capacidad de Uso más frecuentes son IV, VI y Vll y solamente en contadas circunstancias se ba
identificado una Clase lll en aquellos sectores de lomajes con pendientes más suaves. Además de
la Asociación Piuchén se han considerado para este análisis la Asociación Maca! (que proviene
de Las regiones precedentes) y las Series Estancilla, Pumanque, Quinchamalal, Tregualemo y Lo
Vásquez (de las regiones precedentes).

En el Cuadro 4-27 se presentan las principales propiedades químicas y físicas de la Serie


Pumanque (Typic Durixerept) considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 4-27. Propiedades fisicas. químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Serie Pumanque
(CTREN, 1996b)

Profundidad cm o -12 12 - 24 24-38 38-58 58-82


Distribución de partículas por tamaño(%) Ap 8, 8rll Brll 83
2-1 2.5 2,3 1.4 2.2 19,0
l-0,5 18,4 16,1 11,9 12.8 11,0
0,5-0,25 20,8 19,4 16,0 12.1 8,0
0,25-0,10 15,7 14,0 13,8 1 1 .5 8,0
0,1 0-0,05 8,7 8,6 8,8 7.2 5,3
2-0,05 66,1 60,4 51,9 45,8 51,4
0,05-0,002 21,1 20.8 18.0 17.7 16,7
<0,002 12,8 18.9 30,1 36,5 31.9
Clase textura] Fa Fa FAa Aa FAa
Agua retenida 33 k.Pa (%) 13,0 15.0 16,0 16,0 13,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 6,0 .,,0 9,0 11,0 9.0
pHo¡¡uo 4,7 4,6 4.7 4,8 5,5
Carbono orgánico (%) 0,4 0,4 0.3 0.3 0.1
Ca 0,9 1,1 1,6 2,5 3,2
Cationes Mg 0,3 0,2 0,4 1,1 1,6
intercambiables
1 K 0.2 0,3 0,2 0,1 0,1
(cmolc kg. )
Na 0,0 0,0 0.1 0,1 0,1
Suma de bases (cmol, kg· ) 1,4 1,6 2,3 3,8 5,0
CIC (cmoJ., kg· ) 6,0 7.6 8,4 8,7 9.7
Saturación de bases (%) 23,0 21,0 27.0 43.0 51.0

167
Es necesario destacar que los suelos de la Serie Tregualemo presentan propiedades án:i ICas
bastante próximas a los límites para ser considerados como Andisol. La Db es de 0,9 Mg m la
retención de P de 88% y el [Al 0, + Y2Fe ox] de 1 ,6%, por lo cual se ha considerado como llll
lnceptisol intergrado hacia Andisol. Es interesante la presencia de estas características en suelos
de la Cordillera de la Costa, pues de alguna manera estarían indicando que las tefras provenientes
de los centros volcánicos de la Cordillera de Los Andes habrían alcanzado, en alguna
oportunidad, a los sectores costeros. Situaciones semejantes se repiten en la costa de más al sur
de Chile, por lo cual este caso no se trataría de un fenómeno aislado. confirmando que la
distribución de cenizas volcánicas ha sido extensa en dirección oeste. Se han planteado bipótes1s
para explicar la presencia de suelos con propiedades ándicas en estas áreas, sin que exista
consenso entre los investigadores.

Ocupando la misma posición de cerros de la Cordillera de la Costa, se observan otros suelos,


cuyo origen se encuentra en las rocas metamórficas que, a partir de esta latitud, comienzan a
dominar el paisaje. Las condiciones texturales, de estructura, de topografia. relieve, profundidad
al sustrato, distribución radical y drenaje son semejantes a las de los suelos de origen granítico.
La diferencia morfológica más destacable la constituye el color que, en estos suelos, se hace
notablemente más rojo. en el matiz 2.5YR, siendo común colores pardo rojizo oscuro (3/4). rojo
(5/6) y rojo fuerte (3/6), especialmente en los horizontes inferiores (Figura 4-4 1 , al final del
Capítulo). Se trata además de suelos más desaturados, esto es con SB no superior a 50% en el
perfil. La meteorización de la roca metamórfica también proporciona gravas cuarcíticas que se
distribuyen irregulannente en los perfiles. La aptitud de estos suelos, en términos generales, es
más bien forestal, por lo que las Clases de Capacidad de Uso más frecuentes son VI y VII. A
causa de las características fisicas, químicas y morfológicas, se les ha considerado principalmente
como Rhodoxeralts. Los suelos más representativos de este grupo lo constituyen las Asociaciones
Alto Colorado, Curanipe y Constitución.

En el Cuadro 4-28 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de un perfil de la


A!.ociación Constitución (Typic Rhodoxeralf) considerada como representativa de este grupo.

168
Cuadro 4-28. Propiedades TISÍcas, químicas y fisico-químicas de un perfil representativo de la Asociación
Constitución (CIREN. 1997b)

Profundidad (cm) 0 - 25 25-55 55-90 90 - 150


Distribución de partículas par tamailo (¾) A¡ e
2-1 7,4 4,9 2,5 1,9
1-0,5 4,7 4.1 3.0 3,0

0,5-0,25 3,6 3,3 3,1 6,4


0,25-0,10 4.1 4.2 4,7 13,2
0,1 0-0,05 5,0 4,0 4.9 8,2

2-0.05 24.!1 20,6 18.4 32.8


0,05-0,002 44.1 41.4 42.4 37.2

< 0,002 30.0 38.2 39,2 30,0


Clase textur.tl FA FA FAL FA
Densidad aparente (Mg 1 .4 1,3 1,2 1,1

Agua retenida 33 kPa (%) 30,9 27,8 30,1 32,1

Agua retenida 1.500 kPa (%) 21.6 1 8,5 20,6 21,1

pH.�,. 5,4 5,4 5,5 5.4

Carbono orgánico (%) 2,55 0,68 0,28 0,25

Ca 3,21 1,43 3,32 3.11


Cauones Mg 1,84 1,03 2,30 3,21
intercambiables
K 0,51 0,37 0.16 0,06
(cmol0 kg'1)
Na 0.09 0,06 0,07 0,07
Suma de bases (cmolc kg· ) 5.65 2,88 5. 85 6,44

ClC (cmol� kg· ) 19,29 1 1 ,82 1 1 ,76 15,98

CICE (cmol� kg-1) 6,14 4,94 6,85 8,54

Saturación de bases (%) 29.0 25,0 50.0 40.0

Suelos en lo majes y terrazas costeras. Se ha incluido en este grupo a aquellos suelos que
se encuentran en posición de terrazas de origen marino o aluvial muy próximas a la costa, así
como a suelos de lomajes suaves también en sectores costeros. A diferencia del grupo de suelos
anterior, las pendientes pueden ser de 1 a 3% y de 2 a S% y solamente en forma excepcional, en
las caídas de Las terrazas, pueden llegar a 8 a 1 S% y 1 5 a 20%. De acuerdo a la información que
se dispone, no es posible establecer una clara diferenciación en cuanto al sustrato o bien al
material de origen, pues se han descrito variados sustratos, tales como areniscas, gravas
cuarcíferas y sedimentos marinos. A pesar de estas condiciones dispares de origen, se ha optado
por dejar a estos suelos en una sola categoría. considerando que la posición que ocupan es más
relevante desde el punto de vista de su uso y manejo. Los colores superficiales varían entre el
negro y el pardo rojizo oscuro, mientras que en profundidad varian entre el pardo rojizo oscuro y
el pardo grisáceo oscuro. Las clases texturales varían entre franco arenosa y franco arcillo
arenosa en los epipedones; desde franco arcillo limosa a arcillo limosa en los horizontes más
profundos. Los suelos son profundos y muy profundos (se han descrito hasta más de 120 cm)
sotfe los sustratos ya señalados. Presentan una buena condición de arraigamiento, ya que se han
descnto raices finas y medias comunes en los horizontes más profundos. A causa de la posición
quL· ocupan y las pendientes, varias Fases se han descrito con drenaj e moderado a imperfecto e
inLluso algunas como pobremente drenadas.

169
La SB es variable y se han identificado valores extremos entre 19 y 72%. En igual fofT'J. el
contenido de CO es variable, pero en este caso se mantiene en valores bajos, entre 1.6 y 3 n en
superficie y bajo 0.5% en los horizontes inferiores. El pH está bajo 6,5 y en el caso de la "erie
Carampangue alcanz-a 4,6 en el epipedón. Dadas las condiciones de drenaje imperfecto y rl'l,re,
no es de extrañar que se hayan descrito rasgos redoximórficos comunes a abundantes,
inmediatamente debajo del horizonte superficial. En algunos suelos se han descrito tambréo
gravas cuarcíticas comunes en los perfiles. Si bien existen diversas Fases en los suelos descntos,
la Clase de Capacidad de Uso que mejor representa a este grupo es la Clase IV. A los suelos con
mejor aptitud agricola se les ha asignado Clase III y a aquellos con las mayores limitaciones la
Vl, principalmente por sus condiciones de drenaje. La clase taxonómica que mejor representa a
estos suelos, por su morfología y grado de desarrol lo corresponde al Orden lnceptisol. A causa de
la escasez de datos fisicos y quírrucos, no es posible obtener una mayor precisión taxonómica.
Además de la Serie Carampangue, se han uriliza.do para este análisis las Series Pilpoy, San Pedro
de Alcántara, Bucbnpureo, Cobquecura, Chanco y las Asociaciones Rosario y Matanzas.

En el Cuadro 4-29 se presentan las principales propiedades quimkas y físicas de un perfil de la


Asociación Matanzas (Oxic Haplustoll), considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 4-29. Propiedades fisicas, químicas y físico-qulmicas de un perfil representativo de la Asociación Matanzas
(ClREN, 1996b)

Profundidad cm 0-20 20-64 64-95


Distribución de partículas por tamaño(%) Bu Bn
2-1 0,00 0,05 0,43
1-0,5 0,69 0,70 1,82
0,5-0,25 6,40 6,49 7,64
0,25-0,10 19,14 16,43 14,21
0,10-0,05 21,11 15,78 •
13,35
2-0,05 47,35 39,46 37,44
0.05-0,002 37,27 42,95 44,40
<0,002 15,17 17.49 18,05
Clase textura! F F
pH- 5.82 6,42 6,76
Carbono orgánico (%) 2.17 1,52 0,39
Ca 7,85 9,06 5,16
Cationes Mg 4,30 3,90 4,38
intercambiables
K 1,23 0,69 0,31
(cmolc kg-1)
Na 0.40 0,38 0,85
Suma de bases (cmol< kg' ) 13,78 14,03 10,70
CIC (cmolc kg' ) 17.40 16.89 12.58
Saturación de Na (%) 2,3 2,2 6,8
Saturación de bases (%) 79,0 83,0 85,0

170
4.5.3 Región de Bío-Bfo (36°00' - 37°45' aprox.)

Suelos de cerros de la Cordillera de la Costa. El relieve es pronunciado, con pendientes


que varían de 5 a 8% y de 8 a 15% en los sectores de lomajes; de 30 a 500/o y más de 50% en las
áreas de cerros propiamente tales. El material parental corresponde a roca metamórfica, con
diferentes grados de meteorización, pero con su estrucrura esquiStosa reconocible que aún se
manifiesta en los horizontes inferiores de los suelos. Desde el punto de vista geogrático -
fisiográfico, este sector constituye una prolongación de la Vll Región del Maule, por lo que la
división administrativa del país no coincide en este caso. necesariamente. con los rasgos del
paisaje, como sí pudiera ocurrir en otros sectores del prus. Continúan los colores rojos y pardo
rojizos en el matiz 5YR las clases texturales fmas y mu) finas. generalmente con un incremento
de la fracción fina hacia los horizontes inferiores. La profundidad de los suelos generalmente es
superior al metro, las estructuras son de bloques subangulares medios fuertes y la distribución de
ralees finas y medias es de comunes a abundantes en contacto con la roca subyacente.

La SB es muy variable y puede fluctuar entre 9 y 80% en el horizonte superficial y entre 30 y


90% en Los horizontes más profundos. El CO varía entre 1,0 y 5,5% en los epipedones y el pH
entre 5,4 y 6,5. Al igual que en los otros suelos derivados de los mismos materiales parentales.
son frecuentes las gravas cuarcíticas a través de todo el perfiL De acuerdo a la posición que
ocupan y a sus propiedades físicas y químicas, son suelos mayoritariamente de aptitud forestal.
razón por la cual se les ha asignado Clases de IV a VIl de Capacidad de Uso. Con la excepción de
la Serie Tregualemo, considerada como un lnceptisol intergrado hacia Andisol, al resto de los
suelos, de extensión mayoritaria, se les ha clasificado como Haploxeralfs y Rhodoxeralfs. Para
este análisis se ha considerado a las Series Tregualemo, Pantoja y la Asociación Constitución
(Cuadro 4-28).

Suelos e n lomajes y terrazas costeras. Los suelos de estos lomajes y terrazas tienen en
común la posición fisiográfica en que se encuentran, si bien es cierto que su fonnación puede •
tener origen en la sedimentación marina o aluvial. Además, se trata de suelos planos o casi planos
cuyas pendientes más frecuentes son de O a 1% y de 1 a 3% y solamente algunas Fases de
algunos suelos pueden tener pendientes superiores, de 5 a 8%. El sustrato que se encuentra general­
mente a más de 1 20 cm de profundidad, se ha descrito, en la mayor parte de los casos, como
constituido por arenas o areniscas en su mayoría ricas en cuarzo. (Figura 4-42, al final del Capítulo).
Solamente en el caso de la Serie Laraquete los suelos son delgados, de 42 cm basta el sustrato de
arenas. Al igual que ocurre con los suelos de los cerros en la Cordillera de la Costa, esta
formación de lomajes y terrazas costeras constituye una prolongación de la misma formación que
proviene de la Región del Maule, muchos de cuyos suelos se continúan hacia la Región del Blo­
Bío (Figura 4-43, al final del Capítulo). En superficie dominan los colores pardo oscuros y pardo
rojizo oscuros en los matices lOYR, 7.5YR y hasta 5YR. En los horizontes más profundos
generalmente, el valor y el croma (Muosell) son más altos, tomando el color de los materiales del
sustrato.

El origen de los suelos determina que las clases texturales sean variables, de tal forma que en los
horizontes superficiales se puede encontrar clases tales como areno francosa. franco arenosa,
franco limosa y franco arcillo limosa. Sin embargo. dentro de cada suelo el perfil textura! en
profundidad resulta bastante homogéneo, de tal manera que las mismas clases texturales de la
superficie se pueden encontrar en los horizontes más profundos. La estructura que domina es de
bl'"�ques subangulares en sus diferentes tamaños y grados; sólo en algunos casos es débilmente
pnsmática en profundidad. Las rafees finas llegan sin dificultad hasta el sustrato, en particular en

171
• ,
..
aquellos suelos que presentan un drenaje libre. Al respecto, es interesante notar que se obsl.'rva
una relación entre la clase de drenaje, la posición y el origen del suelo; de esta forma los suelos
en posición de lerra7.as marinas se han descrito con buen drenaje y con perfiles sin evidencms de

..
rasgos redoximórficos; en cambio, aquellos que se encuentran en terrazas aluviales presentan
••
numerosas Fases con drenaje imperfecto ,.,
y pobre,
abundantes desde los horizontes superficiales.
con rasgos redoximórficos de comum:s a

..
Un rasgo común a todos estos suelos lo constituye la baja SB, particularmente en los horizontes
,
......
superficiales, con valores de 6 hasta 1 1%. Sin embargo, la SB de la Serie Buchupureo, se asocia
más a los valores de los suelos en terrazas marinas. La característica común a todos ellos es que
,
...
� valores de 75 y 80%. El contenido de CO
la SB aumenta hacia los horizontes inferiores, hasta

"
mantiene la tendencia normal tanto para los suelos de origen marino como aluvial, esto es. los

..
•.
.. �
mayores valores se encuentran en los epipedones, con un decrecimiento gradual en profundidad,

, -
(3,4 hasta 0,2%). El pH fluctúa enlTe 5,1 y 6,5 en los diferentes horizontes, sin que exista una

/ clara con la profundidad. Solamente en los suelos de la Serie
tendencia "
... � Miramar, que presenta un
drenaje pobre, se alcanza un pH de 8,4 en el horizonte próximo al sustrato (120 cm). Las Clases
'
de Capacidad de Uso de las diferentes Fases varían entre ID y IV, esencialmente a causa de la

mayor o menor limitación por drenaje. No existen antecedentes suficientes para establecer una

� taxonómica definitiva, por lo que se asume que la mayoría de los suelos son
sistematización
lnceptisol y algunos presentarían propiedades que �
permitirían •
considerarlos como Mollisol.
Además de las Series Laraquete y Miramar, se han utilizado
L
para esta discusión las Series ..
Antihuala. Las Puentes, Buchupureo, Carampangue y Cobquecura. Estas tres últimas representan
su prolongación desde la Región del Maule.


En el Cuadro 4-30 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de un perfil de la

Serie Buchupureo (Fluventic Haplustept), considerada como representativa de este grupo.

L72
Cuadro 4-30. Propiedades físicas, químicas y físico-químicas de un perfil representativo de la Serie Buchupureo
(CIREN, 1999)

Profundidad (cm) 0 - 20 20-54 54 - 90 90 - 120


Distnl>uc16n de partículas por tamailo (%) B, 81 BJ
2-1 0,3 0,5 0,0 0,1
1-0.5 1,1 0,9 0,3 0,7

0,5-0.25 3,6 3.7 2,2 2,6

0,25-0,10 8,6 12,1 12,8 7;3

0,10-0.05 12,2 20,3 22,7 L2.6

2-0,05 25,9 37,6 38,1 23.5

0,05-0,002 56,4 48,7 47,4 58,3


< 0,002 17,7 13,7 14,5 18,3

Clase textural FL F F FL
Densidad aparente (Mg 1,24 1,15 1,08 0,91
Agua retenida 33 kPa (%) 32,1 26,9 19,6 29,2

Agua retenida 1.500 kPa (%) 11,8 10,2 10,8 12,4

pTTaguo 5.6 6,2 6,4 6,5

Carbono orgánico (%) 1,59 0,85 0,78 0,94

Ca 7,69 7,65 8,33 8.81


Cationes Mg 3,30 3,54 3,96 4,11
intercambiables
K 0,14 0,09 0,08 0,09
(cmolc kg'1)
Na 0,15 0,15 0,17 0,18

Suma de bases {cmolc kg· ) 1 1 ,28 11 ,43 12,54 13.19

CIC (cmolc 18;39 15,97 16,64 19,67

CICE (cmolc kg.1) 1 1,35 1 1,43 12,54 13,19

Saturación de bases %) 61,0 72,0 75,0 67.0

173
Fl¡¡ura 4-1 La Cordillera de Los Andes constituye el limtte naroral de Chile en el sector oriental. En ella se pueden describir
abundantes sedimentos glaciale> y volcánicos en lo� valles altos. los suelos en posición de cerros, ptedmonrs y planos aluvio­
coluvtales presentan un desarrollo pedogéruco mteresante, pues la mayoria de ellos ha evolucionado hasta la formación de
horizontes diagnósticos subsuperficiales (B) y eptpedones mólicos.

figura 4-3. Serie Bramadero. Suelo derivado de cemzas volcámcas que se distribuye aproximadamente a partir de 40 km hacia el
este de la ciudad de TaJea por camino a Sao Clemente. Se trata de suelos bien estrUcturados, con buena penetración radical, con
un elevado contenido de carbono orgánico en los eptpcdones (sobre 5o/o) y un pH entre 6,0 y 6,5.

174
Figura 4-4. Muchos suelos que ocupan term¿as altas y lomaJes suaves en la precordillera, son deO\·udo:. de centzas volcámc:l!>
holocénicas, cuyas propiedades químicas y fisico-químicas son panicularmente uniformes. Las pendientes que dominan son de 1
a 3% y de 2 a 5%; los suelos son profundo� o muy profundos e120 cm). Solamente en algunos casos, puede presentarse un
)UStrnto de gravas angulares y redondeadas a menos de 1 m de profundidad.

figur• 4-5. Los suelo; de oñgen aluvial ocupan la postctóo de terrazas. abarucos y conos generados por la acctón de las
corncnt.:s superficiales.

175
Figura 4-6. Serie Santiago. Los rasgos redoximórficos (enriquecimientos) que se aprecian en el sustrato de gravas redondeadas.
se hacen ev1dcotcs en áreas coo niveles freáticos 1luctuantes En este C3\0 se relacionan con problemas de manejo más que con
ev1dencias deb1das a procesos pedogémco�

Figura 4-7. Las plantac1oncs de frutales en posición de cerros se han mcrement.'ldo considerablemente en los últimos ailns en las
regiones de Valparaíso y Metropolitana. bn la figura se pueden aprecmr las plamaciones en pendientes superiores a 30%.

176
Figura 4-8. Sector que, cartográficamente, se encuentra �n la Asociación Mansel. Corre!>ponde a prolongaciones de los cerros de
.a Cordillera de Los Andes que se mteman hacia la Depresión lntennedia., dando origen a lomajes suaves y cerros muy escarpados
con pendientes superiores a SO"Io. Topográficamente pre!.enUln pendientes de 8 a 15%, de 1 S a 20% y más de SO"ro en los sectores
más esc:upado�.

fleura 4-9. Perfil que caracteri7J� n suelos de la Asociación Manscl. Se tr:na de >uelo:. la� a modendamcnte profundos sobre
un wMrato constiruido por rocas básicus del tipo andesita.� y dioritas, eon diferen«:.:> � de meteoriaC1ón La pedregosidad
angular y subangular es común a través del perfil y la rocosidad se hace abund:mtc en la. F� coo pendientes más escarpadas.

177
...J
00

figura 4-11. u Asociación 1.11 Lajuela se presenta en pendientes de 8 a de 15 a 200.4 y


más de 500/o en los sectore<; más esealp8dol..

Fl.gura 4-10. Los miembros de la Asociación u tajuela son suelos de hgere a moderadarneme
profundos sobre un sustmto consllluido por rocas bis1cas del upo andesitas y dionta5. y
tamb•�n con intrusiones graníticas con diferentes grados de metconac•ón. Los colores en

5Upcrficie son pardo o!leuros en los mauces 7.SYR y 1OYR y en los horizontes más profundos
puede llegar a un rojo amariUenio (SYR4/8), como ocurre en el perfil de la fotografla.
Fl&ura 4-U. Suelos que ocupan una posición de piedmont y lomAJCS SU3Ves en la V Región,
i termontanos y, en su mayorla. sus materiales de ongen ¡'1rnv1cner
entre los caros y lo.. valles n
de los �duneotos U1J1Sponados desde las panes mis elevadas del n.....•·
Fl¡ura 4-l3. Perfil de la Serie Chicureo. Los epipedones pueden tener colores negros (JOYR2/I; 2.5Y2.5/l). Todos los suelos
considerados son de clases texturales finas. entre franco arcillosa, franco arcillo limosa, arcillo limosa y arcillosa, con muy escasa
\ar1ací6n dentro de un mismo perfli.

�ara 4-14. Paisaje asociado a la Serie Ch1cureo. Estos suelos se caracterizan por una topografia plana o casi plana. que
te presentan algunas Fases con pendientes de 2 a 5°/o y de S 11 8%, cuando se asocan
i con los p1edmonts que jalonan los
'alle>.

179
Flgura4-IS. Sene Pudahuel. Se presenta en un relieve de lomajes suaves con pendientes de 1 a Jo/o y de 2 a 5%, adosados a los
piedmonts graníticos de la Cordillera de la Costa (Foto T. Reinsch).

Figura 4-16. Serie Pudabuel Deralle del dunpán sillctco (Foto T. Reinsch).

180
Figura 4-17. Perfil de la Serie Limanque. El sustrato está constituido, en la mnyorla de los casos, por gravas redondeadas y
subredondeadas de tamaño variable y en cantidad variable, con una matriz que es arenosa o franco arenosa.

Figura 4-18. Patsaje de la Serie Limanque. Se trata de suelos planos. con topografia que varia entre 1 y 2% y solamente. en
algunlls .;asos, con pendiente de 2 a 3%.

181
Figura 4-19. Perfil de la Serie Quella Dominan las clases textmales finBS, esto e� arcillosa, franco arcillosa o b1en arcillo hmosa.
Se pueden apnx1ar grietas abundantes, preferentemente verticales.

Figu ra 4-20. Paisaje de l a Sene Quella. Se encuentra en las partes más dc:pnmidas del paisaje, ya sean planos de inundac1ón,
cuencas de sedimentación o bien terrazas aluviales antiguas. Se trata de suelos que presentan una topografía plana (O 1%) y, sólo
en algunas Fases la topografla puede ser casi plana ( 1 a 3%).

182
Figura 4-21. Perfil de la Serie Hueoutil. La capa liroitantese ha descrito corno toba y brecha volcánica, hardpao cementado con
Si y Fe, o bien arenisca cementada con Si. Se encuentra a profundidades variables, de tal manera que Jos suelos se bao
considerado desde ligeramente profundos hasta profundos.

Figura 4-22. Paisaje de la Serie Huenutil. Así como la posición q·ue ocupan estos suelos en el paisaje no es homogénea, el relieve
tamb1cn es variable, de forma tal que se pueden encontrar en pendientes de O 1%, 5 8% y hasta 8 15%.
- -

183
F'igur• 4-23 Muchos suelos que se han desarrollado sobn: toba >'Oicánica u otro sedimento compacllldo y cementado, como el
que se eocuenU'll en la Serie Qw!layes. han mOUido para que el drenaJe de tos suelos sea unpeñecto y en algunos casos pobn:.
Asl, son frecucmes los rasgos redox1mórficos. descntos de comunes a abundames.

figura 4-24. En la formación de los Cerrillos de Teno, los suelos presentan un sustrato Ouvloglacial conformado por clastos
angulan:s y redondeados de muy variados tamatlos y sin ninguna selección

1 84
figura 4-25. Paisaje de los sectores denominados Cerrilo
l s de Teno. En las áreas de lomajes suaves, las pendientes más
·recuentes son de 2 a So/o y de S a So/o.

ra 4-26. Perfil de la Serie Talca, sobre sedimentos fluvioglaciales. Las clases te¡cturales de los epipedoncs varian entre
dreillo arenosa, franco arcillosa y franco limosa. Hacia los horizontes n
i feriores siempre existe un incremento de la fracción
de manera que se pueden encontrar clases texturales franco arcillosa y arcillosa. A causa de la presencia del sustrato
que actúa como Ltm1Ulnte al paso del agua y de las raíces, es frecuente encontrar rasgos redoximórficos desde el
boriLonte o bien desde la superficie.

185
Figura 4-27. Paisaje de un sector de la Serie Talca. Se trata de sectores de alta producción agricola, tanto de cultivos anunles
como de frutales y lllilas.

figura 4-28. Serie Llabuén. El sustrato más frecuente está constituido por gravas redondeadas con a:ret1a intersticaal, aun cuando
se han descrito sustratos solaml:nte de nnenas estratificadas. En el caso de la Sene Llahuén, el sustrato de ongen aluvaal, no fue
visablc: hasta la profundidad de observación. El contenido de CO es bajo en la mnyoria de los suelos, de tal manera que en los
horizontes superiores son frecuentes los contenados entre 1,5 y 2,5% y, en los horizontes ms
á profundos alcanza valores entre O1
y 0,5%.

186
Figun 4-27. Paisaje de un sector de la Serie TaJea. Se 11'814 de sectores de alta producción agrieola. tanto decultivos anuales
como de frutales y vidas.

Figura 4-28. Serie Llahuén. El SUStrato más frecuente está constirujdo por gravas redondeadas con arena intersticaal, aun cuarldft
se han descrito sustratos solamente de arenas estratificadas. En el caso de la Serie Uabuén, el sustrato de ongen aluvial, no fut
visible hasta la profunrudad de observación. El con1enido de CO es baJO en la mayoria de los suelos, de tal manera que en 101'
horizontes superiores son frecuentes los eonterudos entre 1,5 y 2,5% y, en los horizontes más profundos alcanu valores entre O.
y O.So/o.

186
Figura 4-29. Paisaje de la Serie Llahuén. Unade sus características esenciales es su topografia plana, con pendientes de O a 1% ó
como máximo J a 3%.

Figura 4-30. Perfil de la Serie Canosa. Las cla�es texturales son medias y finas en los horizontes superficiales (franco arcillosa.
franca, franco arcillosa limosa) y se hacen más fmas (arcillosa) hacia los horizontes más profundos, inmediatamente sobre la toba.
La profundidad de los suelos es de 130 cm hasta la toba y, en la� Fases delgadas, aparece entre los 50 y los 80 cm.

187
Figura 4-31. Paisaje de la Serie Canosa. Es característico su relieve plano, casi plano o cóncavo, con pendienes t de O a 1% o
bien de 1 a 3%. Principalmente se encuentra en terraza� ♦
remanentes, paisajes lacuslrinos y panos
l depositacionales deprimidos.

Figura 4-32. Serie Collipulli. Los hori:¡:ontes superficiales generalmente pa-;een colores rojizos, en los matices (7.5YR y 5YR).
En profundidad los colores se hacen más rojos, de tal manera que son frecuentes los colores rojo oscuro y pardo rojizo (SYR >
2.5YR). En los epipedones las clases texturales son finas, esto es, fumco arcillo limosa, franco arcillosa y arcillosa, y el contenido
de la fracción fina se incrementa hacia los horizontes ínferiores.

188
Figura 4-33. Detalle del sustrato nuvioglacial de la Sene Collipulli que se �-aractcriu por un conjunto de gravas subredondeadas
y angulares frtscas y con diferentes grados de meteoriucoón. =bebidas en ana mauit arcollosa o arcillo arenosa que ocupa
entre 20 y 40!1• lkl volumen.

Figura 4-34. Perfil <k la Serie Mayulmno. Las principales posiciones geomorfológicas en las que se encuentra este suelo
corrcs¡x>nde a abanicos aluviales. terrazas Ouvioglac•ales y planos ckposttacionales. El sustrato puede ser de gravas y piedras con
una mauiz desde franco arenosa 11na hasta a.rcillosa. sin embargo, en varios sectores el sustrato no se alcaoza hasta la prorundidad
de observación.

189
Figura • Arenales, si bien no cumple los requerimientos para níngún Suborden de los Andísols, de acuerdo a los
4-35. La Serie
anteceden1es anallticos disponibles, se le considera como un suelo desarrollado a partir de arenas volcánicas andesiticas y
basálticas. Las clases texturales varían entre areno francosa y arenosa como también ocurre en la Serie Coreo.

Figura 4-36. Perfil de la Serie Lo Vásquez. La Cordillera de la Costa está constituida esencialmente por el batolito granltico con
algunas intrusiones de materiales básicos mezclados de manera discontinua. Se aprecia con c
l aridad que el suelo se ha genera.!;.
directamente de la meteorización de la mea granítica. que domina en todo el sector de la Cordillera de la Costa.

190
Figura 4-37. La Cordillera de la Costa ha sufrido profundos procesos de erosión, por lo que la profundidad de los suelos suele sur
variable. Se estima que los suelos que no han sufrido procesos de erosión severos son profundos y muy profundos (más de 120 cm
hasta la roca o el sustrato) y aqueUos con erosión �vera no alcaruan más de 70 a 80 cm hasta el sustrato. Sin embargo, se han
descnto sectores con suelos de menos de SO cm de profundidad, en condiciones extremas.

Figuna 4-38. Paisaje que muestra los sectores de suelos que se encuentran en posición de terrazas marinas, lomajes suaves
próxamos a los sectores costeros, tetra.alS remanentes tanto de origen marino como aluvial que se hao formado en los valles
próxamos de la Cordillera de la Costa. Las pend•entes más frecuentes son de 2 a 5%, 8 a 15% y solamente en algunos casos de las
caidas pueden ser superiores a 300.4. Se puede apreciar la intensa erosión de flUJO precaoahz.ado (laminar) a que hao estado
exruc;tos estos suelos a causa del manejo.

191
..
Figura 4-39. Trigo de secano en los suelos de las terrazas marinas. La Clase dé Capacidad de Uso que mejor representa a este
grupo es la Clase IV. A los suelos con mejor aptitud agrícola, se les ha asignado Clase LIT y a aquellos con las mayores
limitaciones la Clase Vl, principalmente por sus condiciones de drenaje.

Figura 4-40. Paisaje de la Cordillera de la Costa de la VIl Región del Maule y parte de la VIII del Bio-Bio. A la mayoría de
los suelos se les ha asignado Clases de Capacidad de Uso VI y VIL Gran parte de eStas áreas se encuentra plantada con pinos
(Pinus radiata) y eucalíptus (Eucaliptus sp).

192
Figura 4-41. Perfil de la Asociación Constitución. A partir de la vn Región del Maule hacia el sur, en la Cordillera la Costa, se
presentan suelos originados a partir de rocas metamórficas. Las condiciones texturales, de estructura, topografía, relieve,
profundidad al sustrato, distribución radical y drenaje son semejantes a las de los suelos de origen granltico. La diferencia
moñológica más deslacable la constituye el color que, en estos suelos, se hace nolablemente más rojo, en el matiz 2.5YR.

F11:ura 4-42. Los suelos de lomaJes y tenuas de la Reg1ón del Bio-Bío, uenen en común la pos1c1ón fis1ográfica, si bien es c1erto
'1 m formación puede tener ongen en la sedimemac1ón marina, aluvial o en sedimentos metamórficos. El sustrato, que se
ICflll'll genernlmtjnte a más de 120 cm de profundidad, e�ui consututdo por arenas o areniscas en su mayoria ricas en cuano.

193
i
Figura 4-43. Los suelos que se encuentran en lomajes y terrazas costeras tienen un orgen que puede estar relacionado con
sedimentación marina o aluvial. Además, se trata de suelos planos o casi planos cuyas pendientes más frecuentes son de O a 1% y
de 1 a 3%, y solamente algunas Fases de algunos suelos pueden tener pendientes superiores, entre 5 y tl%.

194
CAPÍTULO S
Suelos de la Zona Mediterránea Húmeda
(Desde 37°45'LS hasta 43°00'LS)

Lurio, W., Casanova, M., Seguel, O. 2009. Suelos de la Zona Mediterránea Húmeda (Desde 37° 45 'LS
hasta 43°00' LS). pp: 195-261 In: Suelos de Chile. (Luzio, W., Editor). Universidad de Chile.

195
5 . 1 Reseña geológica de la región comprendida entre Los Ángeles y Chiloé

Según Cisternas y Frutos (1994), entre Los Ángeles y Chiloé se extiende la denominada Cuenca
Terciaria con un eje longitudinal NNE-SSW, a lo largo del flanco occidental de la actual
Cordillera de la Costa y de la Depresión Central. Dorsales o bloques elevados del Basamento
Metamórfico - Paleozoico subdividen longitudinal y transversalmente la cuenca principal en
varias subcuencas, tales como la de Los Ángeles - Temuco, la de Osomo - Llanquihue, la de
Pupunahue y otras de menor importancia. Estos mismos autores (op.cit.) establecen que las
secuencias estratigráficas del Terciario se simplifican, si se consideran unidades genéticas
controladas por procesos. De esta forma establecen una primera Unidad Genética representada
por secuencias continentales del Oligoceno-Mioceno Inferior, que inician el relleno de la Cuenca
y representan los productos de sedimentación de sistemas aluviales y fluviales, además de
equivalentes volcaniclásticos. Una segunda Unidad Genética corresponde a secuencias volcánicas
del Oligoceno Superior - Mioceno Inferior y que representan el denominado Cinturón Volcánico
de la Costa. La tercera Unidad Genética corresponde a secuencias marinas del Mioceno Medio
dispuesta sobre volcanilas y sedimentitas continentales.

,
Según Moreno y Varela ( J 985) durante el Cuaternario la actividad volcánica en Los Andes de
Chile fue de gran intensidad con considerables volúmenes de materiales emitidos (Figura 5-1, al
final del Capítulo). Gran parte de los piroclastos más finos (cenizas y polvo volcánico) fueron
transportados hacia territorio argentino por la acción de los vientos del oeste. Sin embargo, es
necesario considerar que en esta zona hay una gran influencia de los vientos del este (puelche),
cuyo efecto fue el de depositar tefras en los valles y flancos de la cordillera andina de Chile hasta
la latitud 39°; desde allí hacia el sur los depósitos se extienden hacia la Depresión Intermedia.
Asl, se originaron gruesas capas de lapillis y cenizas en áreas interiores de la Cordillera,
especialmente en las proximidades de los centros volcánicos más activos. Desde Loncoche hacia

el sur (op. cit.) los depósitos volcánicos dominan en gran parte de la Depresión Intermedia,
cubriendo otros materiales sedimentarios y volcánicos más antiguos. A causa de la acción fluvial
y de las lluvias, pane de esta cubierta fue removida y retransportada, dejando al descubierto,
localmente, los estratos inferiores. En estos lugares es posible encontrar suelos desarrollados
sobre materiales más antiguos de origen sedimentario (fluvial, lacustre o glacial) y netamente
volcánico (flujos piroclásticos, lahares).

Los flujos piroclásticos y laháricos descendieron desde los volcanes andinos, utilizando los valles
glaciales y fluviales como corredores naturales, algunos de los cuales se introdujeron en los valles
de la Cordillera de la Costa, alcanzando hasta el mar en varias localidades. Los lahares más
importantes fueron los del Laja, Malleco y Osomo (Moreno y Varela, 1985) considerando la
región motivo de este capitulo.

5.2 Caracteristicas y propiedades de los suelos del sector Údico - Mésico

5.1.1 Suelos de la Cordillera de Los Andes

Geográficamente se puede asignar a este sector un área que va desde una línea imaginaria de
'lorte a sur, más o menos a lo largo del meridiano 72°00' y que va desde Curacautín, Melipeuco,
e meo, Pucón y Villarrica hasta algunos sectores cordiUeranos en los cuales existe información
e da'ica. De estos úJtimos, sólo hay referencias a nivel de Asociaciones de Suelos, en general
d el1do a su escasa utilización agrícola y a la limitada accesibilidad de la mayoría de los sectores
.:o: :11leranos(Figura 5-2, al final del Capitulo).

197
En todo este sector, entre los 600 y los 1 .400 msnm, existe una dominancia de suelos den tdos
de tefras de granulometria gruesa y media. es decir, pum.ícea, cineritica y fragmenta!. Se tn. a de
suelos profundos y moderadamente profundos, con clase textura! que varía entre franco ar uo�a
gruesa y franco limosa. Generalmente presentan colores pardos en superficie, que se encw:.ntran
en el matiz IOYR y que puede Uegar a un color pardo amarillento, en el matiz 7.5YR l!n
profundidad. La mayor parte de los suelos tiene como sustrato, en limite abrupto, a gra'<as
escoriáceas de origen volcánico cuyo tamaño puede variar entre 2 y 6 cm de diámetro. La
topografía corresponde a la denominación de ceuos, es decir, entre 30 y 50% de pendiente. La
permeabilidad es de moderada a rápida y el drenaje es de bueno a excesivo.

La evolución de los materiales volcánicos iniciales ha sido suficiente como para calificar a estos
suelos como Andisols, es decir presentan una densidad aparente (Db) inferior a 0,9 Mg m-3, una
retención de P superior a 85% y un [Al ox + Ylf"e 01] superior a 2%. En algunos casos, como
ocurre con la Asociación Los Nevados, estas propiedades se cumplen en forma bastante ajustada,
en el 60% de los 60 cm superficiales, debido a que aproximadamente, bajo los 50 cm de
profundidad, aumenta considerablemente la cantidad de material cineritico grueso. El contenido
de CO es elevado en los 25 cm superficiales, alcanzando valores de 9,5% y con un decrecimiento
gradual en profundidad, que puede llegar a 2,3% a los 120 cm en los suelos más profundos. En
algunos suelos la Capacidad de Intercambio Catiónica Efectiva (ClCE) es inferior a 2 cmolc kg-1,
indicando con ello una baja disponibilidad de bases de intercambio y una baja cantidad de
Al+-++ (KCl).

Se puede señalar que la limitante principal que presentan estos suelos para su utilización agrícola.
además de las propias de los Andisols (elevada retención de P), la constituye la topografia. la cual
es demasiado escarpada para cualquier tipo de labranza. Las pendientes de 20 a 30% son
rrccuentes y, aun cuando Jos suelos pueden ser profundos, su aptitud agrícola está limitada por su
susceptibilidad a /a erosión. Por estas razones la mayoría de /as Fases de las Series o

..
Asociaciones descritas en este sector se ha clasificado en Clase rv, VI y VIT de Capacidad de
Uso, con aptitud netamente forestal e idealmente para forestación con especies nativas. Los
sectores con pendientes superiores a 50% debieran considerarse como Clase VJll y no debieran
tener intervención de ninguna naturaleza. En el Cuadro 5-l se presentan las principales
propiedades fisicas y químicas de un perfil de la Asociación Los Nevados (Acrudoxic
Hapludand), que se considera representativa de Los suelos de este sector.

198
Cuadro S-1. Propiedades físicas, químicas y fisico-químicas de un perfil de la Asociación Los Nevados (CIREN,
2002)

Profundidad (cm) o - 20 20 - 42 42 - 80 80+


Distribución de partlculas por tamailo (%) A, AC, AC, e
2- 1 2,9 2,7 20.9 43,2
1-0,5 7,8 2,9 12,7 18,8
0.5-0,25 1 1 ,9 9,0 10,7 6,2
0,25-0, JO 23,5 22,0 1 5,9 6,9
0,1 0-0,05 1 5,8 19,9 11,3 9,2
2-0,05 62,1 56,6 71,6 84,3
0,05-0,002 25,2 36,0 21,0 15,0
< 0,002 1 2,6 7,3 74 0,7
Clase textura! Fa Fa Fa aF
Agua retenida 33 kPa (%) 34,6 30,6 24,8 18,2
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 31,2 2 1 ,6 16,3 8,5
Carbono orgánico (%) 9,28 4,19 1,55 0,30
H,..., 5,9 61 6, 1 6,1
Ca 0,65 0,29 0,24 0,24
Complejo de Mg 0,25 0,10 0,06 0.05
cambio
(cmol0kg'1) K 0,1 J 0,03 0,01 0,01
Na 0,08 0,04 0,02 0,02

Suma de bases (cmol.,kg.1) 1,29 0,46 0,33 0,32


Capacidad total intercambio 26,9 22,1 10,2 6,2
CICE 1,51 0,46 0,33 0,32
Retención de P (%) 97 100 97 81
Al ox + �fe OX (%) 2,31 4, 1 1 3,3 1 2.60
Saturación de bases o/o 4,0 2,0 3.0 5,0

5.2.2 Suelos de l a pre-Cordillera de Los Andes

En una posición más próxima a la Depresión Intermedia. pero siempre dentro del concepto de
pre-cordillera (Curacautin, Lonquimay, Melipeuco. Cuneo, Pucón. Villarrica), alcanzan su
máxima expresión los suelos derivados de cenizas volcánicas: los Typic Hapludands. Se trata de
suelos generalmente profundos y más raramente moderadamente profundos que se ubican en
posición de terrazas aluviales, como producto de re-transporte aluvial de las cenizas volcánicas;
también se ubican en planos de origen Ouvioglacial o bien sobre conglomerados de origen
volcánico compactados y cementados (Figura 5-3, al fmal del Capitulo).

Los suelos de origen volcánico que se encuentran ocupando una posición de terrazas aluviales,
presentan un sustrato generalmente constituido por gravas y piedras redondeadas y
subredondeadas alrededor de los 100 cm de profundidad y con una matriz que puede variar desde
franco arcillosa hasta arenosa. Las Fases planas (O - 1 % de pendiente) o casi planas ( 1 - 3%)
pueden presentar drenaje moderado a imperfecto, aun cuando el suelo pueda tener permeabilidad
moderadamente rápida. Las Fases ligeramente onduladas (2 a 5% de pendiente) generalmente
tieren buen drenaje. Algunos suelos tienen como sustrato un conglomerado fluvioglacial (Series

199
Quintrilpe y Rarinuca) en los que la presencia de pómez es frecuente. Sin embargo, deb1l.□a la
profundidad a la que se presenta, no constituiría un impedimento serio a la penetración rad 11 de
la mayoría de los cultivos.

En el caso de los suelos clasificados como Hapludands (Series Cuneo, Melipeuco, Mtleo.
Quintrilpe) el contenido de CO es alto (sobre 5,5%) en el horizonte superficial y decrece
regulannente en profundidad, a excepción de aquellos casos que tienen un suelo enterrado bajo
los 50 cm de profundidad. En estos, al mismo tiempo de aumentar el contenido de
CO, disminuye el croma y valor (Munsell). Otros suelos pueden tener contenidos de CO
mayor en los horizontes superficiales, esto es 1 0 ó 14%, en cuyos casos dominan los epipedones
melánicos o similares a él. El pH se encuentra en el rango entre débilmente ácido a fuertemente
ácido (6,6 y 5,2). La CTCE se mantiene entre 3 y 1 0 cmo� kg"1 para la mayoría de los suelos del
sector y con una saturación de Al inferior a 5%. Solamente la Serie Villarrica manifiesta una
saturación de Al superior a 30%. La CTCE inferior a 2 cmo� kg"1 caracteriza a los Sub Grupos
Acrudoxic, en la mayoría de los cuales la saturación de Al en el complejo de intercambio es
inferior a 1% y, en muchos horizontes es 0%.

El contenido de agua retenida a 33 kPa se mantiene sobre 50% para todos los horizontes de la
mayoría los suelos y, en algunos de ellos puede alcanzar 80%, cifra que es concordante con las
propiedades ándicas que caracterizan a estos suelos.

Todos los suelos de esta Sub Región cumplen con las propiedades ándicas en la mayoría de los
horizontes. Solamente algunas capas, probablemente producto de sedimentaciones más recientes,
no alcanzan los valores mínimos para estos requerimientos. Éstas se encuentran generalmente en
superficie, sin embargo, su espesor no es suficiente para cambiar las características ni el
componamiento de los suelos.

Los suelos que se encuentran en la pre-Cordillera y más próximos a la Depresión Intermedia


tienen las mejores aptitudes agr!colas, principalmente debido a que se presentan en una posición

topográfica más adecuada, esto es como terrazas aluviales, terrazas remanentes o bien sobre
depósitos fluvioglaciales de escasa gradiente (figuras 5-4 y 5-5, al final del Capítulo). De esta
manera. es posible encontrar Fases de Series, con Clases de Capacidad de Uso II y m y con 1 a
3% de pendiente (Series Cuneo, Los Prados, Molco, Rarirruca) y al!,>unaS que. si bien tienen
escasa gradiente, presentan drenajes imperfectos como ocurre en algunas Fases de las Series
Melipeuco y Quintrilpe.

En el Cuadro 5-2 se presentan las principales propiedades fisicas y quimicas de un perfil de la


Serie Cuneo (Acrudoxic Hapludand), que se considera representativa de los suelos de este sector.

200
Cuadro S-2. Propiedades fisicas, qulmicas y fisico-químicas de un perfil de la Serie Cuneo (CrREN, 2002)

Profundidad (cm) 0-19 19-30 30-59 59-86 86- 100


Distribución de partlculas por tamafio (%) A, 2B,.., 3B.-J 38,.3 3BC
2-1 1,0 1,2 1,0 0,2 0,8
1-0,5 2,7 2,1 1,8 0,3 1,1
0,5-0,25 5,2 4,1 5,3 3.8 2,7
0,25-0,1 0 11,6 10,7 9.2 12.5 4.4
0,10-0,05 32,1 13,8 16,6 23,6 14.0
2-0,05 52,7 32,0 33,9 40,4 23,1
0,05-0,002 31,6 43,6 39,9 39,1 44,6
< 0,002 15,7 24,4 26,2 20,5 32,3
Clase textura! Fa F F F rA
Densidad aparente (Mg m·) 1,05 0.81 0.73 0,78 0,67
Agua retenida 33 kPa (%) 26,5 41,0 50,8 47,2 56,3
Agua retenida 1500 kPa (%) 12,4 28,4 28,5 27,1 43,8
Carbono orgánico (%) 3.29 3,26 5,86 5.78 2,67
pH 6.0 6.3 5,4 5,9 6.0
Ca 3,96 1,70 0,90 0,93 0,56
Complejo de
Mg 1,52 1 ,23 0,25 0,32 0,26
cambio
K 0,08 0,04 0,04 0,02 0,01
(cmol. �cg·•)
Na 0,09 0,06 0,07 0,08 0,06
Suma de bases (cmolc kg'1) 5,65 3.03 1,26 1.35 0,89
Capacidad total intercambio (cmol. kg'1) 21,5 41.8 42,9 37,0 39,7

CICE (cmol. kg-1) 5.65 3,03 1,31 1,38 0,89


Retención de P (%) 76,0 99,0 98,0 96,0 99,0
Al ox + Y.Fe ox (%) 2,27 4,28 3,82 3,27 3,53
Saturación de bases % 26,0 7,0 3,0 4,0 2,0

5.2.3 Suelos de la Depresión Intermedia

Geográficamente se puede asignar a este sector el área que corresponde a lo que tradicionalmente
se ha denominado la Depresión Intermedia, es decir, un amplio territorio ubicado entre el flanco
poniente de la Cordillera de Los Andes y el flanco oriente de la Cordillera de la Costa,
considerando, por supuesto, que ambos Límites son un tanto difusos. La razón de la imprecisión
para estos límites se debe a las variaciones en la geomorfologia y a la intervención de agentes
modificadores del paisaje, tales como las depositaciones de sedimentos aluviales, sedimentos
volcánicos eólicos y aluviales, corrientes laháricas y algunas evidencias de sedimentos glaciales.

En todo este sector, entre 50 y 400 msnm, existen diferencias en topografía que van desde la
presencia de terrazas aluviales planas o casi planas a lomajes de pendientes de hasta 1 5 a 20%.
óg1camente, esta variabilidad determina la presencia de una ampJja gama de suelos con
ct-acteristicas diferentes, aun cuando la mayoría de los Estudios Agrológicos se inclina a
establecer que existe una dominancia de suelos derivados de tetras holocénicas y pleistocénicas,
¡xr lo que la mayoría de los suelos tendría su origen en sedimentos volcánicos provenientes de
d erentes épocas geológicas.

201
Los suelos se pueden agrupar en determinadas clases, tratando de explicar su distribu.·ton
paisajística. Para ello se han tomado en consideración parámetros morfológicos, geomorfolog �.os
y también de desarrollo pedogénico, todos los cuales ayudan a entender la presencia de cteros
suelos en detem1inados paisajes. De esta manera, se ha identificado como un primer grupo a os
suelos que se supone presentan una mayor antigüedad (pleistocénicos) y que tienen un ma').w
desarrollo de perfil, a causa de la presencia de un horizonte de iluviación (Be) y cuyo origen �e
,.
encontraría en la evolución de tefras de mayor antigüedad. Dentro de este grupo se han separado
aquellos suelos que tienen una saturación de bases muy baja y a los que se les atribuye Ja mayor
antigüedad. Un segundo grupo de suelos corresponde a aquellos con menor grado de evolución,
en cuyo perfLI sólo puede diferenciarse un horizonte B sin evidencias de translocación de
componentes (B o El tercer grupo está representado por los suelos volcánicos holocénicos,
con epipedones úmbricos o melánicos y que corresponden a Jos Andisols típicos. Como cuarto
grupo se hao separado a aquellos Andisols pobremente drenados y que se identifican con el
concepto de ñadis. Finalmente y en fonna aislada, y con escasa representatividad en superficie, se
encuentran suelos con saturación de bases superior a 50% en todo el perfil y con epipedones de
colores oscuros que caen dentro del concepto de Mollisols.

Suelos con horizonte argUíco (B,). Son suelos profundos y moderadamente profundos que
descansan sobre conglomerados fluvioglaciales, parcialmente meteorizados de composición
andesítico-basáltica o sobre brechas volcánicas con diferente grado de meteorización. Ocupan
una posición de lomajes con topografia de suave a moderadamente ondulada, con pendientes
dominantes de 8 a 15% y hasta 20 a 30% en algunas Fases. Son suelos de penneabilidad lenta y
de buen drenaje; solamente algunas Fases de relieve cóncavo y en las depresiones, pueden
presentar drenaje imperfecto. Los horizontes superficiales son de clase textura] franco arcillosa o
franco arcillo limosa, en cambio, el subsuelo (horizonte B) de todos ellos es de clase texturaJ
arcillosa. Por ello existe un claro incremento de la fracción fina con la profundida� de tal manera
que el contenido de arciJla de los horizontes B puede variar entre 40 y 65%. La fuerte erosión que
han sufrido estos suelos a causa de la labranza en pendientes no aptas, ha Uevado a que la mayor
parte de los perfiles que se describen en la actualidad sean incompletos a causa de la decapitación
de los horizontes superficiales.

Otro rasgo que caracteriza a este grupo de suelos corresponde al color de los horizontes, que var[a
entre los matices SYR y 2.5YR, es decir, desde el pardo rojizo oscuro hasta el rojo oscuro. Tanto
el contenido de arcilla como los colores hao constituido las razones por las cuales a estos suelos
se les ha conocido como los suelos rojos arcillosos.

El pH se encuentra en el rango entre débilmente ácido a fuertemente ácido (6,2 y 5,3), con una
baja saturación de Al en el complejo de intercambio. Al mismo tiempo la SB es baja a
intermedia, entre 3 1 a 65%, a través de los perfiles. Las cifras más altas se encuentran en los
horizontes más profundos, con lo cual los suelos califican dentro del Orden Alfisol.

La ClC es variable de un suelo a otro y, de un horizonte a otro dentro del mismo suelo. Las cifras
1
varían entre 13 y 3 1 cmolc kg· , sin que exista ninguna tendencia con la profundidad, ni tampoco
se asocia al incremento de la fracción arcilla por la presencia del horizonte argilico. Esta
variabilidad podria estar asociada, además de la translocación de componentes a la que han
estado sometidos los suelos, a una estratificación original de los materiales parentales.

202
Es interesante destacar que los parámetros que defrnen a los suelos volcánicos -las propiedades
ándicas- se encuentran débilmente representadas, hecho que podría considerarse como uno de los
elementos de juicio que se ha tenido para considerarlos como originados a partir de cenizas
3
volcánicas antiguas (Besoaín, 1958). La Db es ligeramente superior a 1 Mg m· , e incluso en
algunos horizontes puede ser inferior, la retención de P está sobre 50% en todos los suelos y
puede llegar a 66% en algunos horizontes; el [Al ox+Y2fe 0,] siempre es inferior a 1%, aun cuando
próximo a esa cifra. De acuerdo con estos datos, parece lógico deducir que los materiales
originales de naruraleza amorfa hubieren evolucionado hacia algunas formas de minerales
cristalinos (Besoaín y González, 1978) y que aún pudieran encontrarse algunos rasgos, aunque
débiles, que los identifican.

La aptitud agrícola de estos suelos está asociada en gran parte a la topografla, asl como la
erodabilidad actual y potencial de ellos. Las Fases de menor pendiente (2 a 5%) presentan, en
general La mejor aptitud y, al mismo tiempo presentan el menor grado de erosión; la mayor parte
se ha clasificado en Clases lll y IV de Capacidad de Uso. Las Fases de 1 5 a 20% de pendiente,
presentan erosión de flujo precanalizado (laminar) severa, de surcos y con cárcavas frecuentes. A
estas Fases se les ha considerado en Clase VII, por lo que su aptitud es de praderas permanentes o
forestales, pero no para cultivos que impliquen labranza.

Los principales suelos que se han considerado para este análisis son las Series Mininco {Typic
Rhodudalfs) y Metrenco (figuras 5-6 y 5-7, al fmal del Capítulo). En el Cuadro 5-3 se presentan
las principales propiedades de un perfil de la Serie Metrenco (Typic Paleudults) considerada
representativa de este grupo de suelos.

203
Cuadro 5-3. Propiedades físicas. qufmicas y flsico-quimicas de un perfil de la Serie Metrenco (CIR.EN, 2002)

Profundidad (cm) 0 - 13 1 3 - 43 43-66 66-85 85- 120


Distribución de partículas por tamaño (%) A1 Bu Btz Btl B14
2-1 0,2 0,1 0,2 0,1 0.2
1-0,5 0,8 0,2 0,3 0,4 0,3
0.5-0.25 1.0 0,4 0,5 0.9 0.7

0,25-0, JO 2,6 1.6 3.4 2,8 3,2

0,10-0,05 7.2 9.3 9.7 9,5 L 1.7


2-0,05 11,9 L J,5 14,2 1 3,7 16.3

0,05-0,002 40.0 35,1 41,6 35.9 38.2


<0,002 40,1 53,4 48.0 50.3 45,5

Clase textura! AL A A A A

Densidad aparente (Mg m·3) 0,98 1.07 0,96 1,11 1.13


33 kPa (%) 34,7

..
Agua retenida 29.4 33.5 34.5 32,7
Agua retenida 1500 k.Pa (%) 22,8 26,2 26,6 26,1 25.1

Carbono orgánico (%) 1,94 0,45 0,28 0.36 0,33


H • 5 .3 5,4 5,6 5,4 5,5
Ca 3,73 4,62 4.07 4.06 3.89
Complejo de
Mg 1 '77 2 48 2 59 2 62 2'50
' '
cambio -
K 0,49 0,16 0,05 0.07 o;m¡
{cmolc kg"1 )
Na 0,06 0,09 0,12 0,1] 0,09
Suma de bases (cmol0 kg·) 6,05 7,35 6,83 6,86 6,56
Capacidad total intercambio (cmolc 18,3 15,8 17.3 13.1 16.7
ctCE {cmole kg"1 ) 6,30 7,35 6,85 6,91 6,60
Retención de P (%) 57,0 55,0 55,0 53,0 53,0
AJ ox+ I/2Feox(%) 0,79 0,74 0.67 0,59 0,58
Saturación de bases(%) 33.0 46,0 40,0 52,0 35,0

..
Suelos con horizonte cámbico (B). Dentro de esta clase se han descrito suelos

-
moderadamente profundos y profundos que ocupan posición de terrazas aluviales con 1 a 3% de
pendiente y bien drenados. Otro grupo importante lo constituyen los suelos delgados sobre un
sustrato constituido por un duripán fonnado por brechas volcánicas, conglomerados o gravas con
diferente grado de meteorización, pero que impide el paso de las raíces. También existen suelos
en posición de Iomajes y cerros con pendientes superiores al 30%.

Un primer grupo, que corresponde a suelos profundos y moderadamente profundos, tienen clases
texturales finas y moderadamente finas: franco limosa y franco arcillo limosa en el horizonte
superficiaJ y franco arcillosa y arcillosa en el horizonte B y los colores se mantienen en los
matices 7.5YR y 1 OYR con cromas y valores bajos (Munsell). La secuencia nonnal de horizontes
para estos suelos es un epipedón úmbrico y un horizonte cámbico con SB bajo 50% a través del
perfil. En algunos casos puede presentarse un duripán bajo los 100 cm. En algunas Fases los
rasgos redoximórficos son abundantes evidenciando condiciones actuales de drenaje imperfecto y
pobre.
3
La Db se mantiene sobre 1 Mg m" a través de todos los horizontes en todos los suelos;
ocasionalmente algún horizonte puede tener una Db de 0,9 Mg m-3• La retención de P puede
llegar a ser inusualmente elevada (80%) para este tipo de suelos, indicando con ello algún origen

204
o contaminación con materiales de origen volcánico. El contenido de CO decrece regularmente
con la profundidad alcanzando un máximo de 4,7% en el epipedón; el pH se mantiene en el rango
de débilmente ácido a través de todos los horizontes. La CIC es muy variable, tanto de un suelo a
otro como de un horizonte a otro dentro del mismo perfil (13 a 34 cmolc: kg'1 ).

En el Cuadro 5-4 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de un perfil de la


Serie Nueva Imperial (Typic Humaquept} considerada representativa de este grupo de suelos.

Cuadro 5-4. Propiedades de un perfil de la Serie Nueva Imperial (CJREN, 2002)

Profundidad cm 0 - 11 1 1 - 25 25-SS
Distribución de partículas por tamano (%) Áp 8l
2- 1 0,9 0,6 0,9
1 - 0,5 1,4 1,0 1,3
0,5- 0,25 1,8 1,3 1,9
0,25 - 0,10 2.2 1 ,7 2,4
0,10-0,05 4,8 4,0 8.2
2-0.05 1 1,1 8,7 14,7
0,05-0,002 45,3 34,3 31,6
< 0,002 43,6 57 1
, 53 7
Clase textura! AL A A
Densidad aparente (Mg m 1,03 1, 1 1 1 ,02
Agua retenida 33 kPa (%) 38,0 35,9 39,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 29,4 29,9 32,0
pHogua 5,7 6,4 6,6
Carbono orgánico{%) 4.71 2,61 1,79
Cationes Ca 8,06 9,95 1 1 ,07
Mg 2,12 2.48 3,05
intercambiables
Na 0,22 0,37 0,64
kg'1)
0,09 0,04 0,04
Suma de bases {cmolc kg") 10,49 12,84 14,80
Capacidad total intercambio (cmolc 33.0 34,7 30,0
CICE (cmol" kg'1) 10,66 12,90 14,81
Saturación de Al (%) 1,6 0,5 0,1
Al ox + y, Fe OX {%) 1.66 1.41 1,12
Saruración de bases % 32,0 37,0 49.0

El segundo grupo que se puede identificar dentro de los suelos con horizontes B, lo constituyen
aquellos suelos ligeramente profundos y delgados sobre un duripán o más generalmente un
horizonte cementado y compactado, siempre con límite abrupto con el suelo suprayacente. La
identificación de este grupo de suelos en forma separada, se ha basado en que su aptitud de uso es
inferior a causa de la limitación de profundidad, aun cuando el resto de las propiedades
permanezcan más o menos semejantes. La capa limitante se ha descrito entre los 50 y los 60 cm
de profundidad. Las clases texturales dominantes son franco limosas, franco arcillo limosas y
arcillosas con un ligero incremento de la fracción arcilla hacia los horizontes subsupcrficiales.
Todos estos suelos se encuentran ocupando terrazas aluviales con topografia plana o casi plana y
con algunas Fases pobremente drenadas en las posiciones más deprimidas (Figura 5-8, al final del
Capítulo). Su aptitud varía entre las Clases l l l y IV de Capacidad de Uso. En el Cuadro 5-5 se
presentan las principales propiedades quimicas y fisicas de un perfil de la Serie Perquenco (Andic
Durudcpt) considerada representativa de este grupo de suelos.

205
Cuadro 5-5. Propiedades lisieas, químicas y físico-químicas de ·un perfil de la Serie Perquenco (CIREN, 200�)

Profundidad (cm) 0-12 12-29 29-47 47-60


Distribución de particu1as por ramaño (%) B, e
2-1 1.1 1,0 1,6 5,0
l - 0,5 42. 3,4 4,2 9,6
0,5 0,25
- 7,8 7.8 8,0 12,7
0,25 -0,10 8,4 8,2 8,9 12 2
.

0.10- 0,05 6,8 6,8 6,3 6,8


2-0,05 2 8,5 26,8 29,0 46,4
0,05-0,002 41,8 38,2 37,5 3 0,3
< 0,002 29,7 35,0 33,5 23,3
Clase textura! FA FA FA F
Densidad aparente {Mg m· ) 1, 12 1,05 1,00 1,08
Agua retenida 33 kPa (%) 38,6 34,0 31,2 33,9
Agua retenida 1.500 k:Pa (%) 22,0 20,5 20,4 23,4
pH- 5,3 6,0 6,3 6,2
Carbono orgánico(%) 5,62 3,20 2,43 1,02
Ca 5,74 8,36 8,95 10,03
Cationes
Mg 0,93 1,23 1 ,55 3,29
intercambiables
Na 0,05 O,o7 0 12
, 0,23
(cmol.,kg'1)
K 1 08
, 0,67 0,40 1 ,24
Suma de bases (cmolc kg'1) 78 , 10,3 ll,O 14,8
Capacidad total intercambio (cmo1� kg-1) 29,0 29,0 27 6 , 29,4
CICE (cmolc kg'1) 8,5 10,5 1 1,1 14,9
Saturación de Al (%) 7,8 1,2 0,7 0,5
Retención de P (%) 76,0 77.0 73,0 67,0
Al ox + � Fe ox (%) 1,16 1,23 1.10 0,70

.. ..
Saturación de bases (%) 27.0 36,0 40.0 50,0

El tercer grupo que merece una mención, corresponde a suelos con topografía de cerros con 30 a
50% de pendiente, profundos, formados a partir de cenjzas volcánicas añtiguas, que se ubican en
la Depresión Intermedia a alturas entre los 300 y los 400 msnm. Se trata de suelos con alto
contenido de arcilla (40 a 55%) que se incrementa hacia los horizontes B, de color pardo rojizo y
pardo rojizo oscuro (en el matiz 5YR y 2.5YR), bien estructurados y que pueden descansar
sobre un conglomerado muy meteorizado bajo los 120 cm de profundidad. Es probable que su
origen en tefras muy antiguas se encuentre relacionado con algunas propiedades que se asocian a
las ya mencionadas propiedades ándicas de suelos volcánicos holocénicos. Esto es, una Db de 1
Mg m·l, e incluso menos en algunos horizontes, y una retención de P sobre 60%, cifra demasiado
elevada para suelos que se podrían considerar sin relación con depósitos volcánicos. A causa de
su topografía de lomajes y de cerros su aptitud es forestal y se encuentran clasi ñcados en Clases
vr y VIT de Capacidad de Uso. En el Cuadro 5-6 se presentan las propiedades de la Serie Ñielol
(Oxic Dystrudept) considerada representativa de este grupo de suelos. Se ha considerado para el
análisis de este grupo de suelos con horizontes cámbico B, las Series Coigüe, Cholchol, Nueva
lmperial, Huelcbe, Ercilla, Lautaro y Ñielol.

206
Cuadro 5-6. Propiedades fisicas, químicas y tlsico-quimicas de un perfil de la Serie Ñiclol (ClREN, 2002)

Profundidad (cm) 0 - 15 15-35 35-65 65-93 93- 120


Distribución de partículas por lamailo (%) A, B1 B.., B,z n.J
2-1 0,8 1,1 0,9 0,5 0,1
1 - 0,5 1,3 1,7 1,2 0,9 0,3
0,5- 0,25 2,8 2,5 1,7 1,2 0,9
0,25-0,10 4,2 3,7 3,2 2,9 2.5
0,10-0.05 5,3 4,2 4,9 4,9 5,9
2-0,05 14,3 13.2 1 1,9 1 0,7 9,8
0,05-0,002 41,6 36,6 •
35,1 36,3 36,8
< 0,002 44,1 50,1 53,0 53,0 53,4
Clase textura! AL A A A A
Densidad aparente (Mg m'3) 1,01 1,05 1,01 0,98 1,05
Agua retenida 33 kPa (%) 24,9 23,8 28,0 34,8 36,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 17,8 18,8 21,7 25,7 27,3
pH- 5,5 5,6 5,6 5,6 5,4
Carbono orgánico (%) 2,99 1,39 0,67 0,50 0,35
Ca 3,60 3,55 5,21 5,71 6,59

Cationes Mg 1.81 1,71 3,24 3,77 3,39


intercambiables Na 0,08 0,08 0,09 0,10 0,11
(cmo1c kg'1) K 0,24 0,14 0,06
0,06 0,04
A1 1,27 2,42 3,33 3.89 3,44
Suma de bases (cmol., kg-1) 5,73 5,48 8.60 9,62 11,15
Capacidad total intercambio (cmot. kg'1) 18,8 25,2 2 1 .4 18,8 21,7
CICE (cmol, kg 1) 7,00 7,90 1 1,93 13,51 14,59
Saturación de Al (%) 18,1 30,6 27,9 28,8 23.6
Retención de P (%) 61.0 58,0 52.0 49,0 49,0
A l ox + � Fe ox (%) 0,88 0,66 0,35 0,26 0.22
Saturación de bases 31 0
, 22.0 40,0 51,0 51,0

Andisols. En la Depresión Intermedia los suelos derivados de cenizas volcánicas holocénicas se


encuentran ampliamente representados y, evidentemente cumplen con todos los requerimientos
para ser considerados como Andisols. Sin embargo, dentro de ellos es posible establecer algunas

.... -
diferencias que pueden ser importantes cuando se consideran aspectos acerca de su uso, manejo y
conservación. Un primer grupo importante de Andisols corresponde a suelos profundos y
moderadamente profundos que no presentan restricción para el arraigamiento, en la mayoría de
las Series y en la mayoría de sus Fases. Se presentan en posición de terrazas aluviales recientes o
remanentes más antiguas, donde las cenizas volcánicas originales han sido rcdepositadas por el
agua. Por esta razón, el sustrato de casi todos estos suelos está constituido por gravas
redondeadas y/o facetadas con arenas intersticiales características de los depósitos aluviales. En
algunos suelos el sustrato puede encontrarse a menos de 1 m de profundidad, sin constituir una
lirrutante al paso de las raíces.

207
Las clases texturales dominantes son franco lunosas en los horizontes superficiales y el sub:,uelo
mientras que franco arcillo limosas o franco arcillosas en los horizontes más profundo:;. los
colores más frecuentes se encuentran en los matices 7.5YR y IOYR y sólo en casos muy
puntuales los suelos pueden tener matiz pardo rojizo y rojo (SYR y 2.5YR)

El contenido de CO varia entre 3 y J I % en el epipedón. con un decrecuniento gradual cqn la


profundídad. pero que no llega a 1°/o, mcluso a los 120 cm de profundidad. En los suelos que
presentan una marcada influencia alu\Jal el CO presenta un decrecimiento irregular, marcando
claramente la estratificación de los materiales. La SB es particularmente baja, pues en todos los
suelos es < 25%. llegando en algunos horizontes a 2% (Serie Toltén).

Son suelos de buena aptitud agrícola, con la restricción común a todos estos suelos cual es. la
alta retención de P. La mayoría de las Fases se han clasificado en Clases ll y W de Capacidad de
Uso. a causa de ligeras limitaciones en el drenaje en los sectores más deprimidos de la topografia.
Para este análisis se han tomado en consideración las propiedades y caracteristicas de las Senes

-
Barros Arana, Gorbea. Lastarria. Loncoche, Malihue, Quecheregue, Temuco, Vilct'm, Victoria )'
Toltén (Acrudoxic Hapludand). En el Cuadro 5-7 se presentan las principales propiedades físicas
y quimicas de un perfil de esta última Serie considerada representativa de este grupo de suelos.

Cuadro 5-7 P op1edades nsicas. químicas y lisaco-quamicas de un perfil de la Serie Toltén (CIREN, 2002)

Profundidad (cm) 0 - 20 20-40 40 - 70 70- tOO 100-110


Distribución de partlculas por tamaño (%) 81 Bt B1 S.
2-1 0,0 0,0 0,0 0,1 0.0
1 - 0,5 0,4 0,1 O,J 0,4 0,2
0,5- 0,25 1,6 0.9 1.4 2.5 3.3
0.25 -0,10 4,4 4,2 3,8 4.3 4,6
0.10-0,05 12.4 8.6 4,5 7,8 12.1
2-0,05 18 7
. 13.9 9,7 15,0 20,4
0,05-0,002 50.0 58,4 48,4 56,4 54,5
< 0,002 31,2 27 8 41,9 28 S 25 o
Clase textu a! FAL FAL - FL AL FAL FL
Densidad aparente (Mg m·l) 0,61 0,65 0,93 0,86 0.90
Agua retenida 33 k.Pa (%) 57,3 52,4 42.4 40,3 44.4
Agua retenida 1.500 kPa (%) 36.0 36,6 31.7 33,5 33.1
pll- 5.8 6.2 5,9 5.9 5,9
Carbono orgánico (o/'!) 10,73 3.62 2.31 1.88 1,80
Cu 2,68 0,34 0 23
, 0,28 0,20
Cationes Mg 1,10 0.21 0,21 0,25 0.18
i te cambiables
n Na 0,15 0,10 0,06 0,07 0.10
(cmol.: kg'1) K 0.14 0,09 0,13 0, 1 1 0.09
Al 0,22 0,00 0.01 0,02 0,03
Suma de bases (cmolc kg'1) 4,07 0,74 0,63 0,71 0.57
CIC (cmol.. kg· ) 40,5 28,7 23,7 26,9 24,5
CICE (cmoL, kg'1) 4,29 0,74 0,64 0,73 0,60
Saturación de Al (%) 5,1 0,0 1,6 2,7 5,0
Retención de P (%) 98,0 100,0 100,0 100,0 100,0
Al ox + Y.Fe ox(%) 2,99 3,97 3,27 3,99 3,92
Satu ación de bases % 10,0 3.0 3,0 3,0 2,0

208
Un segundo grupo de Andisols que merece una mención especial corresponde a suelos
profundos, de colores pardo oscuros y negros y que presentan un elevado contenido de CO a
través de todo el perfil. Todos ellos presentan un epipedón melánico o bien un horizonte que
cumple los requerimientos del epipedón melánico a excepción del valor y croma (Munsell). Uno
de los rasgos sobresalientes de este grupo de suelos lo constituye el elevado contenido de CO,
que se distribuye a través de todo el perfil. La mayoría de estos suelos puede tener entre 8 y 6%
hasta los 60 cm y, en algunos suelos, llega a 3% a los 140 cm de profundidad. El contenido de
agua puede variar de 38 a 61% a 1.500 kPa, y de 64 a 80% a 33 kPa. La CIC puede alcanzar 57
1
cmok kg· , lo que evidencia la dominancia de minerales de ordenamiento de rango corto. Al igual
que todos los suelos de esta región, mantienen una SB bajo 17% y que, en algunos horizontes
puede ser tan baja como 2%. Desde un punto de vista taxonómico, estos suelos se incluyen en los
Grandes Grupos Melanudands y Fulvudands. Presentan las mejores aptitudes desde el punto de
vista agrícola y la mayoría de ellos se lla clasificado en Clase ll y lll de Capacidad de Uso;
solamente algunas Fases en Clase IV y VI, fundamentalmente a causa del incremento en la
pendiente. Todos son bien drenados y con clases texturales franca. franco limosa y franco arcillo
limosa.

En el Cuadro 5-8 se presentan las principales propiedades fisicas y químicas de un perfil de la


Serie San Patricio (Acrudoxic Melanudand) considerada representativa de este grupo de suelos.

Cuadro 5-8. Propiedades fisicas. químicas y fisico-químicas de un perfil de la Serie San Patricio (CIREN, 2002)

Profundidad (cm 0 - 16 16-38 38-84 84- 103


Distribución de panículas por tamaño (%) B,
2-1 0,4 0.2 0.4 l,l
1 - 0,5 0.5 0,3 0,3 1,1
0,5 - 0,25 1,5 1,2 1,0 1,5
025 - 0,10 4.4 4.3 3,1 1.6
0,10-0,05 10,8 12,2 3,1 2,5
2-0.05 17.8 18,1 8,1 8,0
0.05-0,002 47,7 49,6 55.6 41.8
< 0,002 34,5 32,3 36,3 50.2
Clase textural FAL FAL FAL AL
Densidad aparente (Mg 0,73 0,87 0,73 0,94
Agua retenida 33 lePa (%) 67.2 68,7 63,9 78,4
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 34,6 34,1 44.8 61,2
pH"'"" 5,8 5,6 6,0 6,0
Carbono orgánico (%) 10,48 8,57 6,87 3,24

Ca 2;2.7 1,75 1,13 0,53


Cationes Mg 0,62 0,26 0,48 0,42
intercambiables Na 0 13
, 0,07 0,06 0,05
(cmolc kg.1 ) K 0,11 0,07 0,02 0,02
Al 0,22 0,14 002 0,00
1
Suma de bases (cmol.: kg. ) 3.13 2,15 1,69 1,02
.
CIC (cmol., kg 1) 48,6 47,5 57.4 36,0

CICE (cmolc kg.1) 3,35 2,29 1,71 1,02

Saturación de Al (%) 6,6 6,1 1.2 0,0


Retención de P (%) 98 99 100 99
Al ox + Y.Fe ox (%) 3,82 4,03 4,17 4,13
Saturación de bases (%) 6,0 5,0 3,0 3.0

209
Ñadis (semi - 1\adis). Otros suelos también derivados de cenizas volcánicas y clasific1Jos
como Andisols, presentan limitaciones morfológicas que pueden afectar el uso y manejo de �UDs.
Son suelos moderados a ligeramente profundos, cuyo sustrato está constituido por grm as
cementadas con materiales semejantes a un fierrilo
l (sus características se discuten en A odisu ls
con régimen ácuíco, Ñsdi s). depósitos fluvioglaciales compactados, escorias volcánicas •J
brechas volcánicas parcialmente meteorizadas.

La presencia de un fierrillo u horizonte semejante a él en estos suelos constituye la manifestación


más septentrional de este rasgo morfológico que es característico de los suelos de la Región
Údica-Tsomésica. En estricto rigor, ambos horizontes no son comparables, sin embargo, la
translocación y posterior precipitación de fe, actuando como agente cementante de los depósitos
aluviales, indica la presencia de procesos pedogénicos incipientes que, más al sur, alcanzan su
máxima expresión. Los suelos son delgados a ligeramente profundos y se encuentran sobre
material volcánico del tipo escorias, brechas o lavas sin meteorizar. En todos los suelos de este
grupo el limite entre el suelo y el sustrato es abrupto, lo cual sumado al relieve plano o casi plano
determina que muchas Fases presenten drenaje imperfecto y hasta pobre (figura 5-9, al final del
Capítulo).

Las clases texturales se mantienen en Los mismos rangos, esto es, franco limosas, franco arcillo
limosas y las más gruesas hasta franco arenosas. Los colores tampoco presentan diferencias con
los demás Andisols. es decir, varían entre los matices lOYR y 7.5YR. El contenido de CO puede
llegar a 10% en el epipedón con un decrec1m1ento gradual con la profundidad hasta 0,5%. El pH
se mantiene en rangos que fluctúan entre moderadamente a fuertemente ácido (5,4) (Sadzawka,
2006a). La CIC es muy variable en los diferentes horizontes, desde 7,9 basta 58 cmolc kg-1,
valores que se encuentran en los rangos normales y predecibles para estos suelos (Sadzawka,
2006b). La SB siempre es inferior a 50%, siendo los valores más frecuentes entre l O y 40%; sólo
un suelo presenta una saturación de 2% a través de todo el perfil (Serie Pitrufquén). Los suelos
pertenecientes a esta misma Serie tienen las condiciones de drenaje más extremas, cuyas fases
van desde imperfectamente hasta muy pobremente drenadas en las cuales el nivel freático se
encuentra entre los 30 y los 70 cm de profundidad y, en algunas épocas del afio está en superficie.
La mayoría de las Fases se ha clasificado entre Clase lU y rv de Capacidad de Uso,
principalmente a causa de las deficientes condiciones de drenaJe.

En el Cuadro 5-9 se presentan las principales propiedades fisicas y químicas de un perfil de La


Serie Pitrufquén (Lithic Placudand) considerada representatJva de este grupo de suelos.

210
Cuadro S-9. Propiedades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil de la Serie Pitrufquén (CIREN, 2002)

Profundidad {cm) 0 - 13 13-30 30-46


Distribución de partículas por tamaño (04) 81
2-1 2,0 2,0 3,4
1 0,5 4,8 4,8 5,7
0,5 - 0,25 5,8 5,8 5,3
0,25 -0,10 6,0 6,0 4,4
0.10- 0,05 1 1.3 1 1 ,3 5,2
2-0,05 30,0 30,0 23,9
0,05-0,002 44,5 44,5 41,4
<0,002 25,5 25,5 34,7
Clase textural F F FA
Densidad aparente (Mg m'3) 0,72 0,72 0.65
Agua retenida 33 lePa (%) 60,9 60.9 72.8
Agua retenida 1.500 kPa(%) 31,3 31,3 44,0
pH.p 5,5 5,5 5.4
Carbono orgánico % 8,58 8,58 5,52
Ca 0,31 0,3 1 0 38
,

Cationes Mg 0,17 0,17 0,38


intercambiables Na 0,07 0,07 0,09
1
(cmolc kg- ) K 0,10 0.10 0,04
Al 0.29 0.29 0,00
Suma de bases (cmol0 kg'1) 0,65 0,65 0,89
CIC (cmol- kg'1) 39,4 39,4 43,1
CICE (cmolc kg-1) 0,94 0,94 0,89
Saturación de bases (%) 2,0 2.0 2,0
Saturación de Al (%) 30 9
. 30,9 0,0
Retención de P (%) 97,0 97,0 99,0
Al ox + 'hFe ox % 3,34 3.34 4,29

Suelos con alta saturación de bases (Mollisols). Se trata de suelos profundos, de clases
texturales medias y frnas, que se encuentran en posiciones de terrazas aluviales y planos
depositacionales de origen fluvioglacial, con topografía que va desde plana a suavemente
ondulada. Los colores dominantes se encuentran en el matiz 1 OYR con croma y valor (Munsell)
bajos, es decir, pardo oscuro, pardo grisáceo oscuro y negro en algunos casos.

El contenido de CO no es particularmente elevado, como seria esperable; incluso, en algunos


suelos el requerimienlo para la presencia de un epipedón mólico se encuentra casi en el limite
inferior. La SB se encuentra sobre 50% a través de todos los perfiles, sin embargo sólo en un caso
alcanza valores sobre 90%. La CIC varía de 12 a 27 cmol ki1, cifras que constituyen un

elemento importante para deducir que no hay dominancia de minerales del tipo 2:1, sino más
bteo, se estima que la mineralogía es de origen mixto con dominancia de minerales del tipo 1: l .
Sólo en l a Serie Santa Rosario existe la evidencia d e la contaminación (o recubrimiento de los
scd1mentos originales) con cenizas volcánicas holocénicas, pues la retención de P alcanza al 78%,

21 1
la Db está bajo 1 Mg m·3 en el epipedón y, alrededor de 1 Mg m·3 en todo el perfil. Ademas el
LAI ox + Ylfe o�] presenta valores superiores a 1 % a través de todo el perfil. En general, se Lrata de
suelos con buena aptitud agrícola, en los cuales dominan las Clases de Capacidad de Uso ll y lll.
Sin embargo, hay Fases que pueden presentar Limitaciones ya sea por drenaje y niveles frcaticos
muy superficiales y, en Jos casos opuestos, por pendientes excesivas y riesgos de erosion Para
este análisis se han tomado en consideración las Series Negrete, Puralaco, Rapelco, Renaico.
Trintre y Santa Rosario.

En el Cuadro 5-10 se presentan Las principales propiedades fisicas y químicas de un perfil de la


Serie Rapelco (Typic Hapludoll) considerada como representativa de este grupo de suelos.

Cuadro 5-1O. Prop1edndes tisicas, químicas y tisíco-quimicas de un perfil de la Serie Rapelco (CIREN, 2002)

Profundídad (cm) 0 - 25 25-41 41 - 64 64 - 1 1 0

Distribución de panículas por tamaño (%) A1 B• s,


2-1 0,1 0,1 0,1 0,1
1 - 0,5 0,1 0,2 0,2 0,5
0,5 - 0,25 0.8 0,9 1,0 2,8
0,25-0,10 6,5 6,6 10,2 18,9
0.10-0,05 48,1 46.8 41,0 41,6
2-0,05 55,6 54,6 52 5
. 64, 1
0,05-0,002 37,4 40,0 41,5 29,3
< 0,002 6,9 5,4 6,0 6,7
Clase textura! Fa Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m'3) 1,27 1,03 1,20 1,38
Agua retenida 33 k:Pa (%) 2 1 ,4 22.2 22.1 22,0
Agua retemda 1 .500 k.Pa(%) 8,7 9,4 9.2 8,0
pH- 6,2 6,4 6,6 6,8
Carbono orgánico (%) 2,73 2,12 1.67 1,34
Ca 5,34 5,44 5,54 5,22
Cationes
Mg 0,64 0,68 0,63 0,50
intercambiables
(cmol< kg'1) Na 0,06 0,07 0,1 9 0,33
K 0,36 0,32 0,24 0,17
Suma de bases (cmol.: kg.1) 6,40 6,5 1 6,60 6,22
CJC (cmol< kg"1) 10,5 10,6 1 1,4 9,6
CICE (cmol.: kg'1) 6,41 6,52 6,61 6,23
Retención de P (%) 54,0 58,0 64,0 63,0
Al OX ·+ Y, Fe ox (%) 0,84 1,00 1,18 1,30
Saturación de bases %) 61,0 61,0 58,0 65,0

5.2.4 Suelos de la Cordillera de l a Costa

La delimitación de ese sector está basada en el rasgo geológico y geomorfológico sobresaliente


que significa la Cordillera de la Costa, que se levanta al oeste de la Depresión Intermedia, en
forma gradual en. algunos sectores y en forma más abrupta eo otros, hasta alturas que alcanzan los
800 msnm. En la vertiente oriental de la Cordillera de la Costa, entre los 250 y 300 msnrn se
encuentran suelos profundos, desarrollados a partir de cenizas volcánicas y depositadas sobre el
complejo metamórfico.

212
Suelos con horizonte Bt. Los suelos de mayor evolución pedogénica se han desarrollado a
partir de las rocas metamórficas de la Cordillera de la Costa, en posición de lornajes fuertes y de
cerros. A algunos de ellos (Series Araucano y Cu.reltúe) se les ha considerado como derivados de

...
cenizas volcánicas antiguas y redeposita dassobre materiales en discordancia, como ocurre con el
suelo Correltúe, cuyo sustrato lo constituye un micaesquisto con diferentes grados de
meteorización. En el caso de los suelos de la Asociación Nahuelbuta, su origen se encontraría
directamente en la meteorización de las rocas metamórficas, tales como filitas y micaesquistos.
Una de las características de estos suelos es, que todos ellos, ocupan un tipo de relieve que va
desde suave y fuertemente ondulado hasta un relieve de cerros (Figura 5-l O, al final del
Capítulo). Las propiedades ándicas, para varios de estos suelos, se encuentran muy próximas a
Jos límites para considerarles Andisols. En particular. en el suelo Correltúe, las propiedades
ándicas son muy claras pues la Db se encuentra bajo 1 Mg m-3 en todos los horizontes, la
retención de P es superior a 90% a través de todo el perfil y el [Al 0.--r Yzfe 0,] se aproxima a 2%
en varios horizontes. Por lo tanto, es indiscutible la influencia de materiales volcánicos en su
formación. En el Cuadro 5- l l se presentan las principales propiedades de un perfil de la Serie
Correltúc (Andic Haplobumult), descrita sobre micaesquísto a los 130 cm de profundidad.

Cuadro 5-11. Propiedades físicas, químicas y físico-qulmicas de on perfil de la Serie Corre1túe (CIREN, 2002)

Profundidad (cm) 0-7 7-28 28-64 64-98 98- 130


Distribución de partlculas por tamaño (%) At Al B,, Bu BtJ
2-1 0,6 0.7 0,5 0,5 0,9
1 -0,5 0,9 0,9 0.8 0.6 0,9
0,5 - 0,25 1,0 1,5 1,3 1,0 1,5
0,25 -0, JO 6,8 7,1 2,5 2,3 2.9
0,10- 0,05 9,2 9,3 5,7 5,5 5,8
2-0,05 18,7 19,5 10.8 9,9 12.2
0,05-0,002 37.2 42,8 40,7 44,0 40,9
< 0,002 44,1 37,6 48,5 46,1 47,0
Clase texiural A F A - FAL AL AL AL
Densidad aparente (Mg m·)) 0,67 0,84 0.69 0,71 0,79
Agua retenida 33 kPa (%) 56,9 62,0 47,9 41,2 37,7
Agua retenida 1.500 kPa(%) 38,9 39,8 34,4 28.7 27.2
pH- 5,6 4,9 5.2 5.4 5.2
Carbono orgánico (%) 1 1,99 8,30 1,86 1,32 1,12
1,60 0,14 0,13 0.21 0,33
Cationes Mg 0,53 0,05 0,03 0,03 0,05
intercambiables Na 0.16 0,10 0,05 0,07 0,08
(cmolc kg'1) K 0,15 O,o? 0,03 0,03 0,02
Al 0,70 0.48 0,01 o 01 0,00
Suma de bases (cmole kg.1) 2,44 0,36 0,24 0,34 0,48
CIC (emoL: kg'1) 36,6 32,2 13,3 18.2 17,2
CICE (cmolc kg"1) 3,14 0,84 0,25 0,35 0,48
Saturación de Al (%) 22,0 57,0 4,0 3,0 0,0
Retención de P (%) 96 0
, 97,0 92,0 94,0 89,0
�1 ox + Y, Fe ox (%) 1,96 2,31 1,40 1,46 1,17
lndice melánico 1,93 1,89 1,89 1,89 2,17
Saturación de bases(%) 7,0 1,0 2,0 2,0 3,0

213
Los suelos derivados de la meteorización de la roca metamórfica, en los que no se ha detecwdo
influencia de contaminación con tefras holocénicas son suelos profundos, cuyos borizortes de
acumulación de arcillas (Bt) pueden llegar a los ISO cm, de clases texturales finas y mu) tinas.
desde franco arcillo ümosa hasta arcillosa. Desde el punto de vista pedogénico, son suelos hien
evolucionados a causa de la presencia de prominentes horizontes argiücos; sin embargo los
horizontes de eluviación, morfológicamente, no son evidentes, ya sea por color o clase textura!
La fracción arcilla puede variar entre 35 y 73% en los horizontes Bt. La estructura es
generalmente fuerte y puede variar entre bloques subangulares medios y gruesos hasta pnsmas
gruesos. Los colores dominantes son desde pardo rojizo oscuro al rojo oscuro, en los mattces
2.5YR y SYR. Solamente el alto contenido en CO de algunos horizontes superficiales, influye en
un matiz más pardo ( lOYR).

La CIC, aun cuando es muy variable entre los suelos (desde 14 hasta 36 cmolc kg-1), en todos
ellos presenta una disminución con la profundidad, siguiendo una tendencia similar a la del CO, a
pesar que su influencia en la CTC puede ser de magnitud limitada. En igual forma la SB puede
variar considerablemente de un suelo a otro, pero siempre se encuentra bajo 40%. Sólo algunas
Fases de pendientes menores (2 a 5% y 5 a 8%) presentan aptitud agrícola, en particular para
praderas y cereales. Se considera que la mejor aptitud para estos suelos es la forestal y algunas
Fases con Clases de Capacidad de Uso VIl y Vlli deberían considerarse de preservación, debido
a que ya, en la actualidad, presentan erosión severa. Tratándose de suelos profundos y muy
profundos debieran manejarse con un estricto criterio conservacionista, ya que constituyen parte
del escaso patrimonio edáfico del país. Estos suelos se hao clasificado en Jos Sub Órdenes Udults
y Humults (Uitisols). Se considera que Jos suelos de la Asociación Nahuelbuta (Rhodic
Paleudult) constituyen un ejemplo del concepto central de este grupo de suelos, por lo que en el
Cuadro 5-12 se presentan las principales propiedades fisicas y químicas de un perfil perteneciente
a esta Asociación (Figura 5-11, al ftnal del Capítulo).

214
Cuadro 5-12. Propiedades físicas, quimicas y fisico-qulmicas de un perfil de la Asociación Nahuclbuta (CLREN,
2002)
Profundidad (cm) 0-27 17-62 62-150
Distribución de partículas por tamaño (%) Al Bu Bu
2-1 1,1 0,5 0,1
1-0,5 1,2 0,8 0.4
0,S-0,25 2,0 1,3 1,3
0,25-0,10 4,0 3,0 2,5
0,I0-0,05 4,6 3,4 2,2
2-0,0S 12,8 8,9 6,6
0,05-0,002 34,S 28,3 20.5
<0,002 52 6 62.8 72,8
Clase tcxrural A A A
3
Densidad aparente (Mg m" ) L,41 1,02 1,06
Agua retenida 33 kPa (%) 32,0 34.8 37,7
Agua retenida 1.S00 JcPa(%) 22.7 27,6 31.7
pH..,. 5,2 S,3 S,4
Carbono orgánico(%) 2,08 0.83 0,54
Ca 3,72 4,30 4,61
Cationes Mg L,81 2,02 2,30
intercambiables Na 0,1S 0,15 0,13
(cmol. kg-1) K 0,32 0,10 0,04
Al 0,47 0,10 0,00
º
Suma de bases(cmolc kg 1 ) 6,00 6,57 7.07
ere (cmol., kg"1) 22,90 19,43 17,77
1 7,07
CICE(cmol0 kg- ) 6,47 6,67
Saturación de Al (%) 7,3 1,5 o.o
Saturación de bases (o/o) 26,0 34,0 35,0

Suelos con horizonte B. En los sectores de topografía más plana, ubicados entre los macizos
metamórficos de la Cordillera de la Costa, se han descrito suelos de evolución pedogénica
intermedia {han desarroUado un horizonte B, cámbico) que, en su mayoria, están ocupando la
posición de terrazas aluviales recientes o remanentes. Los materiales de origen de estas terrazas
provienen, en gran parte, de los sedimentos que han sido arrastrados desde las partes más altas
del relieve por efecto de la erosión severa que afecta a estos sectores. Por lo tanto, los suelos son
ricos en mica y en cuarzo, minerales provenientes de la meteorización de las rocas metamórficas.
Algunos de estos suelos se han desarrollado en los coluvios y piedmonts, con topografia de
lomajes, que se adosan a los cerros de la Cordillera de la Costa.

Se trata de suelos profundos, de clases texturales finas, generalmente franco arciJJosa a arcillosa
•de 27 a 50% de arcilla). El color dominante es el pardo rojizo oscuro, en los matices 5YR y
2.5YR, que son heredados de los materiales parentales. Los suelos planos o casi planos tienen
permeabilidad moderadamente lenta y drenaje mi perfecto y sus horizontes más profundos (más
de 100 cm) presentan abundantes oxidaciones y concreciones de Fe y Mn y colores gley (2.5Y).

El contenido de CO es bajo, no supera 2,3% en los horizontes superficiales y decrece en


1
profundidad hasta 0,1%. La CIC no supera los 17 cmolc kg· en ningún horizonte, incluso
1
dominan los valores entre 1 1 y 13 cmolc kg· lo que indicaría abundancia de minerales
secundarios del tipo kandíticos. La SB se mantiene bajo 30% en todos los horizontes. Si bien es

215
cierto que el origen de estos suelos es claro, aun cuando no existe ningún estudio pedogénico que
lo confinne, no se puede evitar deducir que algún tipo de contaminación con materiales
volcánicos pudiera existir, pues la retención de P, de alrededor de SO%, se considera excesiva
para suelos que no tuvieren ninguna relación con depositación de tefras. Sólo las Fases casi
planas o en posición depresiva tienen drenaje imperfecto; las concreciones y nódulos de Fe y Mn
se encuentran en los horizontes bajo los 85 cm con una matriz de color pardo oliva (2.5Y). Las
clases de Capacidad de Uso están relacionadas tauto con el drenaje imperfecto (puede ser ffiw)
como con las pendientes excesivas como en el caso de los suelos que se encuentran en posición
de coluvios o piedmonts (Clases IVey Vle). En el Cuadro S-13 se presentan las propiedades de la
Serie los Copihues (Oxiaquic Dystrudept), considerada representativa de este grupo de suelos.

Cuadro 5-13. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quimicas de un perfil de la Serie los Copibues (CIREN. 2002)

Profundidad (cm) 0 - 19 19-48 48-84 8 4 - 1 20


Distribución de partfculas por tamaño (%) Ap 81 82 83
2-1 1,7 1.9 1,5 1,5
1 - 0,5 3,6 2,6 2 ,4 3,1
0,5-0.25 6,2 4,2 3,9 4,3
0,25-0.10 1 0,1 8,3 6,7 8,1
0,10-0,05 15,7 12,5 11,9 1 1 ,3
2-0,05 37,5 29,6 26,6 28,3
0,05-0,002 35,3 27,3 22,8 26,5
<0,002 27.3 43,1 50,7 45,2
Clase texturaJ FA A A A
Densidad aparente (Mg m·� 1,44 1,36 1,31 1,36
Agua retenida 33 kPa (%) 24,5 21,4 23,5 24,9
Agua retenida 1.500 kPa (%) 11,3 13.3 15,6 16,0
pl:l._ 5,5 5,7 5,9 5,8
C.arbono orgánico (%) 2,34 0,83 0,59 0,46
Ca 2,19 1,53 1,87 2,04
Cationes 0,98
Mg 1,18 1,21 1,24
intercambiables
(cmol. kg"1) Na 0,11 0,10 0,10 0,11
K 0,32 0,19 0,15 0,12
Suma de bases (cmol. kg"1) 3,80 2,80 3,33 3,51
CIC (cmolc kg"1) 15,3 13,9 1 2,0 17,6
CTCE (cmol. kg"1) 4.06 3,63 3,69 3,66
Retención de P (%) 47,0 50,0 52,0 50,0
Al ox + V. Fe ox (%) 0,5 1 0,40 0,36 0,32
Saturación de bases (%) 25,0 20,0 28,0 20,0

Aodisols. Los suelos derivados de cenizas volcánicas en esta área se encuentran en posición de
lomajes y de cerros con pendientes complejas y una topografia ondulada y disectada. Son suelos
profundos (120 cm) que, en algunos casos se encuentran directamente sobre el micaesquisto
parcialmente meteorizado (Figura S-12, al final del Capítulo).

216
Los colores dominantes se mantienen en el matiz 1 OYR, sin embargo, un grupo de estos Andisols
se han descrito con matices 7.5YR y 5YR. Estos colores más rojos generalmente están asociados
a una mayor cantidad de rasgos de iluviación (cutanes) prominentes entre Jos 50 y 100 cm de
profundidad, lo que indicaría un mayor grado de evolución de estos suelos. Las clases texturales
se mantienen entre franca, franco limosa y franco arciiJo limosa y con muy buen arraigamiento y
actividad biológica en los horizontes más profundos. El contenido de CO varía entre 5 y 7% en
los horizontes superficiales con un decrecimiento gradual en profundidad. Las mayores
limitaciones que presentan estos suelos, independiente de las propias de Jos Andisols, están
relacionadas con la topografia ondulada y montañosa y las pendientes excesivas, lo cual influye
en que las Clases de Capacidad de Uso dominantes sean las Clases TVe hasta VIIe. Las Fases de
menor pendiente (2 a 5%) pueden tener una mejor aptitud, pues se trata de suelos profundos, sin
problemas de arraigamiento, buena permeabilidad y buen drenaje. En el Cuadro 5-14 se presentan
las principales propiedades fisicas y químicas de la Serie Quiripio (Acrudoxic Ultic Hapludand),
considerada como representativa de esle grupo de suelos.

Cuadro 5-14. Propiedades fisicas, químicas y físico-químicas de un perfil de la Serie Quiripio (CIREN, 2002)

Profundidad (cm) 0 - 10 1 0 - 23 23-30 3 0 - 50 5 0 - 83 83- 120


Distribución de partículas por tamaño (%) Au An n, . Bu
2-1 0,2 0,3 0,2 0,1 0,2 0,1

1 - 0,5 0,5 0,5 0,4 0,5 0,4 0,4

0,5- 0,25 1,0 1,0 0,9 1,0 0,9 1,1

0,25-0,10 2,1 2,1 1,9 1,9 1,7 2,1

0,10- 0,05 7,5 8,8 5,4 10,2 4,8 8,6

2-0,05 1 1 ,3 12,9 8,9 13,9 8,1 12,6

0,05-0,002 55,9 54,4 55,6 62,2 53,4 48,4

< 0,002 32,8 32,7 35,5 24,0 38,5 39,0

Clase textura] FAL FAL FAL FL FAL FAL

Densidad aparente (Mg m"3) 0,70 0,80 0.74 0.76 0,73 0,68

Agua retenida 33 kPa (%) 54,6 54,3 48,5 41,9 48,5 46,7

Agua retenida 1 .500 lePa (%) 30,3 29,2 34,4 30,8 36,4 37,9

pH'IgUO 5,6 5.9 5.9 5,9 5,9 5,8

Carbono orgánico (%) 5,38 6.79 3,70 2,60 1,75 1,52

Ca 3,12 2,21 1,39 1,17 0.86 0.86

Cationes Mg 1,32 0.64 0,41 0,42 0,41 0,48

intercambiables Na 0,15 0,13 0,18 0,28 0,27 0,40


(cmolc kg"1) K 0,87 0,56 0,19 0,13
0,83 0,31

Al 0,12 0,10 0,04 0,02 0,02 0,02

Suma de bases (cmol., kg"1) 5,46 3,81 2.54 2,18 1,73 1,87

CJC (cmolc kg"1) 30,2 31,0 22,4 22,0 20.6 18,0

CICE (cmolc kg"1) 5,58 3,91 2,58 2,20 1,75 1,89

Saturación de Al (%) 2,2 2,6 1,6 0,9 1,1 1,1

Retención de P (%) 95,0 98,0 97,0 98,0 98,0 96,0


-\1 OX + �Fe OX (%) 2,97 3,16 2,74 3,05 2,92 2,96
Saturación de bases(%) 18,0 12.0 1 1,0 10.0 8,0 10,0

217
5.3 Características y propiedades de los suelos del Sector Ú dico - lsomésicn

5 . 3 . 1 Suelos de la Cordillera de Los Andes

En estas áreas de la Cordillera de Los Andes existe una dominancia de suelos derivados de
materiales volcánicos, provenientes de tefras de diferente granulometría y, consecuentemente,
con diferentes grados de evolución. Es evidente, entonces, que estas diferencias se expresan a
través de variadas propiedades que exhiben los suelos, aun cuando todos ellos posean un tipo de
material de origen semejante. Con el fin de sistematizar y hacer comprehensivo el conocimiento
que se posee de los suelos de estas regiones, se propone una agrupación de ellos en tres clases,
atendiendo a la mayor o menor evolución de los materiales de partida y a la presencia o ausencia
de fenómenos de tixotropia.

De esta manera, se ha diferenciado un primer grupo de suelos que se ubica en los sectores más

..
..
elevados de la Cordillera (desde 900 a 1.200 msnm) con una topografia de lomajes fuertes y
cerros y cuya granulometría es de las más gruesas, de tal forma que todos ellos pertenecen a las
Familias cinerítica y pumícea (figuras 5-13 y 5-14, al final del Capítulo). Los suelos son
estratificados, alternando capas de pómez y arenas, de finas a gruesas. La mayoría de estos
...
suelos, a causa de las fuertes pendientes en las que se encuentran sólo poseen aptitud forestal y,
en la actualidad se presentan con una densa cubierta de bosque nativo. De esta manera, sólo
existen algunos sectores localizados donde se ha identificado alguna erosión evidente. Tampoco '
se observan fenómenos tixotrópicos a causa de la juventud y escasa evolución de los materiales
volcánicos. Dominan las Clases de Capacidad de Uso Vl y Vll.

Un segundo grupo de suelos que ocupan la misma posición que los del grupo anterior, es decir de
lomajes fuertes, cerros y de montaña con pendientes muy escarpadas, se caracterizan por
presentar una marcada tixotropía. Las tefras se han depositado, en discordancia, sobre roca
basáltica que no mueslra evidencias de meteorización (Figura 5-15, al final del Capítulo). En
estos suelos, la retención de agua a 1 500 kPa, en muestras húmedas, es superior a 100%, lo cual
hace que frente a determinada alteración, tal como un movimiento sísmico, el suelo se comporte
como un liquido, generando deslizamientos que se ven facilitados por las fuertes pendientes y el
contacto discordante con la roca subyacente. Cuando se producen deslizamientos a causa de la
tixotropía, la cubierta vegetal no es capaz de sostener el suelo y, esta es la razón para
considerarlos como extremadamente susceptibles a procesos erosivos. Todos ellos se consideran

..
con Clase VII de Capacidad de Uso y en casos especiales en Clase VliJ (Figura 5-16, al final del

..
Capítulo). Para el análisis de estos suelos se han utilizado las Series Chapo, Los Riscos, Ralún y
la Asociación Los Nevados. En el Cuadro 5-15 se presentan las principales propiedades físicas y
químicas de la Serie Los Riscos (Acrudoxic Hydrudand), considerada como representativa de
este grupo de suelos.

2l8
Cuadro S-15. Prop1edades fisicas, químicas y fisico-químicas de un perfil de la Serie Los Riscos (CTREN, 2003)

Profundidad (cm) 0-9 9-22 22-40 40 - 6 5 65-100


Distribución de partículas por tama�o (%) A.J A2 8 81 BC
1
2-0,05 83,2 79,2 93 2
. 93,2 89,2
0,05-0,002 7,3 9.3 1,3 1.3 3.3
< 0,002 9,5 1 1 ,5 5,5 5,5 7,5
Clase textura! aF Fa a a a
Densidad aparente (Mg m'3) 0 53
, 0,86 0,48 0,41 0,44
Agua retenida 33 k.Pa, suelo seco (%) 56,4 32,2 31.9 24,8 35,1
Agua retenida 1.500 kPa, suelo seco (%) 56.2 26,3 28.8 24.0 30 4 ,

Agua retenida 1.500 k.Pa, suelo húmedo (%) 1 1 5,2 31,5 125.3 94.9 124,0
pH.,... 5,6 5,9 6,1 6,2 6,3
Carbono orgánico (%) 12.6 6,0 4.2 3.7 2,7
Ca 2,41 0,39 0,47 0,71 1,0

Cationes Mg 0.90 0,16 0,20 0.25 0,32


intercambiables Na 0,22 0,09 0, 1 0 0.06 0,05
(cmolc kg.1) K 0,26 0,06 0,03 0 03
, 0,03
Al 0, 1 0 0,03 0,01 0 01
. 0,00
Suma de bases (cmol.: kg.1) 3,79 0,70 0,80 1,05 1,40
Acidez a pll 8.2 73,3 52 4
, 49.9 48.0 46,1
CIC (pH 7) (cmol<: kg.1) 66,6 52,7 49. 1 49,0 46,7
ClC (suma) (cmolc kg.1) 77.0 53,1 50,7 49,1 47,5
CICE (cmol0 kg'1) 3,89 0,73 0,81 1,06 1,40
Saturación de Al por CICE (%) 2,6 4,1 1,2 0,9 0,0
Densidad Óptica (ODOE) 0.74 0,56 0,43 0,25 0 27
,

Retención deP (%) 99 99 99 99 99


Si OX (%) 2,02 2,5 1 3,60 3.36 4,31
Al o:-<+ Y, Fe ox (%) 5,76 7.29 8,86 7.97 9,32
lndice Melánico 2.24 2,15 2,49 2,71 2,40
SaturaciÓn de bases (pH 7) (%) 5.7 1,3 1,6 2,1 3,0
Saturación de bases (suma) (%) 4.9 1.3 1,6 21, 2,9

El tercer grupo de suelos que se puede identificar en esta Sub Región corresponde a suelos que
:.ambién se encuentran en posición de lomajes fuertes y de cerros de la Cordillera de Los Andes.
-:-ienen las propiedades de los Andisols muy bien representadas, sin tixotropía. Corresponde a
suelos moderadamente profundos a profundos. algunos con sustrato de pómez con diferentes
-;-ados de meteorización. Todos presentan buen drenaje con pendientes que pueden variar de 1 5 a
. Las clases texturales son medias y finas, pero algunos suelos muestran estratificación con
�teriales más gruesos, producto de las deposiciones sucesivas de tefras de granulometria
va.!1ada. Corresponden al concepto de Hapludand, pero con una CICE inferior a 2 cmole kg-1, por
lo �ual se les identifica dentro del concepto del Sub Grupo Acrudoxic. La mayor limitante de
est,s suelos la constituye las elevadas pendientes. por lo cual las Clases de Capacidad de Uso
¡;:e.den variar entre fV y VIL

219
5.3.2 Suelos de la Pre - Cordillera de Los Andes


En estos sectores precordilleranos se puede identificar un grupo de suelos localizados entre los
300 y 900 msnm, con un débil desarrollo de perfil, moderadamente profundos, en posición de
lomajes y de cerros, con pendientes que pueden variar desde 15 hasta 50%. Se trata de suelos
derivados de cenizas y arenas volcánicas de variada granulometria que se han depositado sobre
arenas gruesas y escoria volcánica, la mayoría de origen basáltico. Si bien es cierto que los
materiales parentales son volcánicos, estos suelos no han desarrollado las propiedades ándicas en
3
su plenitud. De esta forma, presentan una Db inferior a 1 Mg m- , pero la retención de P no
alcanza 85% en todos los horizontes, al igual que ocurre con [Al ox + YzFe ox] que no llega a 2% en
la mayoría de los horizontes, aun cuando los valores que da el laboratorio son próximos a esa
cifra, requerida para ser considerado como un Andisol.

A causa de la granulometria gruesa que domina en la mayoría de las capas, la posición en la


Cordillera de Los Andes y las pendientes fuertes en que se encuentran estos suelos, se podría
asumir que la ausencia de propiedades ándicas proviene de una falta de evolución de las tefras
originales hacia minerales de ordenamiento de rango corto (MORC). Se estima como menos
probable que se trate de una pedogénesis más avanzada, es decir, una evolución desde los MORC
hacia minerales cristalinos. De todas maneras la falta de estudios acerca de la pedogénesis de
estos suelos impide definir, en forma clara, la orientación de los procesos que han ocurrido en
estos suelos. Esta es la razón por la que han sido clasificados como Andic Dystrudepts. La mayor
limitante de uso de estos suelos continúa siendo la posición de lomajes ruertes y de cerros, por lo
que presentan Clases VT y VTT de Capacidad de Uso. En el Cuadro 5-16 se presentan las
principales propiedades fisicas y químicas de la Serie Choshuenco (Andic Dystrudept).
considerada como representativa de este grupo de suelos.

'

220
Cuadro 5·16. Prop edades fisicas. químicas y fisico·químicas de un perfil de la Serie Choshuenco (CIREN, 2003)
1

Profundidad (cm) 0 - 29 29-54 54-86


Distribución de partículas por tamaf\o (%) A1 BWI
2-1 8,4 13.2 8.5
1 - 0,5 10.5 12,1 9,6
0,5- 0,25 13.2 10.2 9.4
0,25 - 0,10 20,6 17,5 18.5
0,10- 0,05 20,3 13,3 16,7
2-0,05 73.0 66.4 62,8
0,05-0,002 18,8 22,3 21,4
< 0,002 8,2 11,3 15,8
Clase textura! Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m·3) 0,93 0,91 0,89
Agua retenida 33 kPa (%) 23,9 27,4 32,6
Agua retenida 1.500 kPa (%) 16,1 16,0 17,8
pH01.,. 5,6 5,7 5,6
Carbono orgánico (%) 4,38 3,44 4,12
Ca 2,39 1,43 1,22

Cationes Mg 0,45 0,47 0,39


intercambiables Na 0,10 0,06 0,06
(cmolc kg'1) K 0,10 •
0,07 0,05
' Al 0,16 0,07 0,05
Suma de bases (cmole kg.1) 3,04 2,03 1 ,72
CIC (croo� kg'1) 25,0 26,9 29,2
CICE (cmol.: kg'1) 3,20 2,10 1,77
Saturación de Al (%) 5,0 3,0 3,0
Retención de P (%) 63,0 87,0 92,0
Al ox+ Y, Feox (%) 1,07 1,98 2,41
Índice Melánico 1,95 1,66 1,66
Saturación de bases (%) 12,0 8,0 6,0

En amplios sectores, entre los inicios de la Precordillera de Los Andes y la Depresión Intermedia,
se ha descrito un grupo de suelos cuyo rasgo común más sobresaliente lo constituyen los colores
grises y pardo muy oscuro a negro. Se trata de suelos profundos que pueden llegar basta los dos
metros antes de alcanzar el sustrato. Están formados a partir de la meteorización de tefras finas
que se ubican en planos de origen lacustre o aluvial, teniendo como sustrato a gravas y piedras

redondeadas o sub redondeadas de origen aluvial, o bien, sedimentos fluvioglaciales con
diferentes grados de cementación. El horizonte superficial tiene UD contenido de CO superior a
6% y, en adición a las propiedades ándicas, presentan un valor y UD croma (Munsell) inferior a 2
conjuntamente con un índice melánico inferior a 1,7. Las clases texturales varian entre francas,
franco limosas y franco arcillo limosas, con estructura bien desarrollada y una excelente
penetración radical. Como ocurre en la mayoría de estos suelos la SB es muy baja, generalmente
.,ajo 1 O% y, en algunos casos, es tan baja como l%. Se trata de suelos muy productivos y con
buena aptitud agrícola que, a pesar de las limitantes propias de los Andisols, pueden llegar a tener
(tase l l de Capacidad de Uso. Se han detectado como limitantes más importantes en las Fases

221
reconocidas de estos suelos, el drenaje imperfecto y las pendientes de ligera a modcradar1ente
onduladas, que explican una disminución en su aptitud. Para esta discusión se bao considemdo
las Series Calafquén, Puerto Fonk (figuras 5-17 y 5-18, al final del Capítulo) y Piedras Negras
por considerarlas que representan en mejor forma Las características de este grupo. En el Cuadro
5-17 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de la Serie Calafquén (Acrudo."\ic
Fulvudand), que ejemplifica en buena forma a esta clase de suelos.

Cuadro 5-17. Propiedades físicas, químicas y f1S1co-químicas de uo perfil de la Serie Calafquéo (CIREN, 2003}

Profundidad (cm) 0 - 24 24-45 45-70


Distribución de partículas por tamaffo (%) AP Bw. Bw:
2- 1 0,4 0,7 2,4
1 - 0,5 0,9 1,6 2,0
0,5- 0,25 2,9 2,2 1.7
0,25-0,10 8,4 8,2 4,2
0,10- 0,05 16,4 12,6 8,2
2-0,05 29,2 25,4 18,6
0,05-0,002 43,3 39,2 39,0
< 0,002 27,5 35,5 42,5
Clase texrural f FA A
Densjdad aparente (Mg m"1) 0,62 0,63 0,61
Agua retenida 33 k.Pa, suelo seco (%) 57,4 61.4 73,3
Agua retenida 1 500 kPa, suelo seco (%) 37,6 38,3 46,3
Agua retenida L500 k.Pa, suelo húmedo (%) 39,1 51,3 52.4
pH- 5,4 5,5 5,6
Carbono orgánico (%) 10,25 10,11 7,82
ca 4,31 0,53 0,24

Cationes Mg 1,46 0,20 0,08


intercambiables Na 0,09 0,07 0,08
(cmol. kg"1) K 0,14 0,06 0,03
Al 0,33 0,25 0,03
Suma de bases (cmolc kg"1) 6,00 0,86 0,43
CIC (cmol. kg"1) 57,5 65,6 58,4
CICE (cmole kg"1) 6,33 1,11 0,46
Saturación de Al (%) 5,0 23,0 7,0
Retención de P (%) 97 99 99
Al ox + V1 Feox (%) 2,91 4,05 4,93
Índice Mclánico 1,71 1,63 1,71
Saturac1ón de bases (%) 10,0 1,0 1,0

222
5.3.3 Suelos de l a Depresión Intermedia

Al igual que en La zona de la Precordillera existe una clara dominancia de los suelos derivados de
cenizas volcánicas con algunas características que Jos hacen diferentes entre sí, tales como clases
de drenaje, presencia o ausencia de horizontes limitantes (duripán, horizonte plácico), clases
texturales extremas o diferencias en pendiente. EL análisis de esta Sub Región se basa justamente
en estos parámetros para establecer categorías o clases de suelos derivados de materiales
volcánicos. En forma ocasional se han descrito suelos que solamente presentan una
contaminación con materiales volcánicos pero que no han desarrollado las propiedades ándicas
(lnceptisols); y otros de mayor desarrollo pedogénico, con horizontes B de iluviación (Uitisols).

Andisols típicos. Se les denomina Andisols tí picos, porque responden a lo que se podría
considerar el concepto central de un suelo derivado de cenizas volcánicas holocénicas, es decir,
un trumao. Además, este atributo permite diferenciarlos de otros grupos también importantes de
suelos derivados de cenizas volcánicas que presentan algunas propiedades diferentes. tales como
drenaje imperfecto, presencia de duripán, horizonte plácico o presencia de un epipedón melánico.
Se trata de suelos profundos y, ocasionalmente, moderadamente profundos, de clases texturales
franca, franco limosa y franco arcillo limosa con colores que varían entre los matices lOYR,
7.SYR y SYR, con valores y cromas (Munsell) bajos (2/1 - 2/2 - 3/2) en los hori7ontes
superficiales; en cambio, en los horizontes más profundos los valores y cromas suben hasta,
generalmente, 4/4, razón por la que algunos edafólogos se refieran a ellos como suelos de un
negro sobre a.maríllo. Ocupan una posición de terrazas remanentes de origen aluvial o
fluvioglacial con topografia plana a ligeramente ondulada y excepcionalmente de lomajes suaves.
Son suelos bien drenados, de buena permeabilidad y muy buen arraigaroiento hasta los horizontes
más profundos. La secuencia normal de horizontes diagnósticos es de un epipedón úmbrico sobre
un horizonte cámbico, el cual puede presentar rasgos de iluviación en forma de cutanes
principalmente en canales de raíces; sin embargo, estos rasgos de iluviación son insuficientes
para considerar la presencia de un horizonte argílico. Algunos de ellos pueden presentar un
sustrato de tobas volcánicas o un depósito de gravas de origen fluvioglacial con diferentes grados
de compactación y cementación, bajo los 1 SO cm de profundidad.

Además de las propiedades ándicas que presentan los suelos, cabe destacar el alto contenido de
CO en los horizontes superficiales que puede llegar a 12,5%, con un decrecimiento gradual en
profundidad. En algunos suelos puede existir un horizonte subsuperficial con un incremento en
eo debido a la presencia de suelos enterrados, fenómeno frecuente en los suelos
derivados de tefras holocénicas. Llama la atención los elevados valores de la ere que, en el caso
1
del suelo Osomo, puede llegar a casi 67 cmolc kg" • En términos generales se puede observar que
no existe una relación directa entTe el contenido de co y la ere. Esta falta de dependencia de la
ere de la fracción orgánica, a pesar del elevado contenido de esta última, se atribuye a la
presencia de los MORe que, en estos suelos, constituyen la fracción mineralógica más
lUlportante y, por lo tanto, serían responsables de la mayor parte de la ere.

Algunos suelos tienen un horizonte superficial que cumple con los requerimientos de
profundidad, espesor y contenido de eo para ser considerado como epipedón
mclánico, sin embargo no cumplen con los requerimientos de color y/o indice melánico, razón
la cual se han clasificado en el Gran Grupo Fulvudand. Esta es la única propiedad

223
diferenciante que Jos separa de los Andisols típicos, pues el resto de sus características ,on

semejantes.

Otros suelos moderadamente profundos, en posición de terrazas aluviales, se encuentran sobre un


depósito de gravas redondeadas y subredondeadas con diferente grado de cementación que. en
algunos casos, incluso puede desarrollar una clase de fienillo discontinuo, que oo respondena a
la definición estricta de un horizonte plácico. Sin embargo, puede afectar el drenaje de los suelos
que podría calificarse de moderado a imperfecto en algunas Fases. En algunos suelos la CICE es
1
inferior a 2 cmolc kg" en algunos horizontes que totalizan más de 30 cm de espesor. Todos los
suelos de este grupo poseen una muy buena aptitud agrícola: dominan las Clases de Capacidad de
Uso Il y lll. Existen algunas excepciones, hacia ambos extremos, como las Fases de la Serie
Corte Alto de Capacidad de Uso J; otras Fases de Clase VI de la Serie Paillaco por drenaje
imperfecto y la Clase VII de la Serie Osomo por pendiente y riesgo de erosión. Para el análisis
de este grupo se utilizaron las Series Corte Alto, Osomo, (figuras 5-19 y 5-20, al finaJ del
Capítulo), Paillaco, Puerto Octay, Crucero, San Pedro, Llastuco, Malihue, Muticao y Pelcbuquín
(figuras 5-21 y 5-22, al final del Capitulo). Para ejemplarizar las características de estos suelos se
presentan en los Cuadros 5-18 y 5-19 las propiedades químicas y físicas de un pcdón de la Serie
Corte Alto (Cuadro 5-18) y un pedón de la Serie Paillaco (Cuadro 5-19). La Serie Corte Alto
(Typic Hapludand) corresponde a un Andisol muy profundo, estratificado que ocupa la posición
de terrazas remanentes y lomajes suaves y con las propiedades ándicas muy bien expresadas. El
segundo caso, la Serie Paillaco (Typic Hapludand), corresponde a un Andisol que ocupa terrazas
aluviales más recientes y posee una menor profundidad que el suelo Corte Alto; además presenta
un sustrato aluvial de gravas redondeadas con variable grado de cementación.

224
Cuadro 5-18. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quimicas de un perfil de la Serie Corte Alto (CIREN. 2003)

Profundidad (cm) 0 - 18 18-47 47-77 77-122 122- 170 170- 194

Distribución de partículas por tamaño (%) A Bwt Bwz 2C1 2C1 3C3
2- 1 0,5 0,3 0,5 0.2 0,3 0,4
1 0,5 1,4 1,4 2,6 3,5 2,4 3,8
0,5- 0.25 4,9 4,8 8,2 18,0 7,9 12,4
0,25 - 0,10 7,6 10,3 16,2 35,6 24,0 22,3
0,10- 0,05 6,0 12,3 22,0 22,9 34.3 14,7
2-0.05 20,4 29,1 49,5 80.2 68,9 53,5
0,05-0,002 33,8 41,5 38,6 18,1 30,6 31,0
< 0,002 45,8 29,4 11,9 1,7 0,5 15,5
Clase textura! A FA F af Fa Fa
Densidad aparente (Mg m'3) 0,86 0,88 0,93 0,85 0,66 0,76
Agua retenida 33 kPa. suelo seco (%) 41,7 42,7 45,7 55,3 75,6 61,1
Agua retenida 1.500 kPa, suelo seco (%) 28,7 24,4 24,6 22,3 32,5 26,8

pll-aua 5,6 5,3 5,8 6,2 6,2 6,3


Carbono orgánico (%) 6.76 1,26 0,84 0,88 0,43 0,50
Ca 9,4 3,1 4,8 2,0 1,7 6,0

Cationes Mg 2,4 1,0 1.2 0,4 0,2 1,6


n
i tercambiables Na 0,1 0.2 0,7 0.3 0.2 1,8
(cmolc kg'1) K 1,6 1,2 0,1 0,1 0,2 0,2

Al 0,7 1.1 0,2 0,1 0,1 0,2


Suma de bases (cmolc kg'1) 13,5 5,5 6,8 2,8 2,3 9,6

CIC (cmolc kg'1 ) 46,8 34,2 32 9


, 29,5 33,7 30,9
CTCE (cmolc kg-1) 14,2 6,6 7,0 2.9 2,4 9,8

Saturación de Al (%) 5,0 17,0 3,0 3,0 4,0 2,0


Retención de P (%) 89,0 96,0 99,0 99,0 99,0 91.0
Al OX + %Fe OX (%) 1,9 2,2 2,15 5,3 7,0 2,1
Saturación de bases (%) 34,0 24.0 32,0 14,0 11,0 37,0

225
Cuadro 5-19. Propiedades llsicas. quirrúcas y fisico-quimicas de un perfil de la Serie Paillaco (CIREN. 2003)

Profundidad (cm) 0 - 18 18-31 31 -46 46-65


Distribución de partículas por tamaño (%) Bt BCI BC2
2-1 1,2 1.3 2,3 3,6
1 - 0,5 2,6 2,7 3,9 5,4
0,5 -0,25 3,8 3,1 3,7 5,3
0,2 5 - 0,10 5,3 3,4 3,1 4,0
0,10-0,05 9,6 7,0 5,5 6,4
2-0,05 22,6 17,6 18,7 24,7
0,05-0,002 45,1 52.7 39,6 37,7
< 0,002 32,3 29.7 41,8 37,6
Clase textura] FA FAL AL FA
Densidad aparente (Mg m·1) 0,81 0,74 0,66 0,58
Agua retenida 33 kPa (%) 59,2 50,8 53,1 43,5
Agua retenida 1.500 kPa (%) 34,7 37,1 41,0 27/}
pH"'9'3 5,6 5,9 6,4 6.1
Carbono orgánico (%) 8,25 2,59 2.57 1,44
Ca 2,59 2,49 2,58 2,98

Cationes Mg 0,47 0,68 0,69 0,39


intercambiables Na 0,33 0,07 0,05 0,03
(cmolc kg.1) K 0,16 0,06 0,03 0,03
Al 0,04 0,01 0,00 0,01
Suma de bases (cmolc kg-1) 3,55 3,30 3,35 3,43
ere (cmol. kg-1) 42,2 34,9 36,5 27.0
CICE (cmolc kg.1) 3,59 3,31 3,.35 3,44
Saturación de Al (%) LO 0,0 0,0 0,0
Retención de P (%) 98,0 99,0 99.0 99,0
Al ox + Yz fe ox (%) 3,54 4,67 4,14 3,53
Índice Melánico 2,14 2,70 4,56 4,00
Saturación de bases (%) 8,0 9,0 9,0 13,0

Andisols con duripán y drenaje moderado. Estos suelos, moderadamente profundos, se


han desarrollado por la sedimentación de cenizas volcánicas sobre terrazas aluviales o planos de
depositación fluvioglaciales, a alturas que var
ían entre los 40 y los 150 msnm y, solo en casos
excepcionales, pueden llegar a los 200 msnm. Las clases texturales van desde franca, franco
limosa y franco arcillo limosa y en aquellos suelos donde la influencia aluvial es más evidente,
las clases texturales son más gruesas, tales como franco arenosa. La topografia es plana a casi
plana ( 1 a3%), con permeabilidad moderada y drenaje moderado. Los colores dominantes son el
pardo y el negro, en el matiz 1 OYR y rara vez en el 7.5YR. En los horizontes subsuperficiales y,
en particular en aquellos horizontes que se encuentran n
i mediatamente sobre el sustrato, se han
descrito oxidaciones abundantes de color pardo fuerte (7.5YR5/6) y rojo amarillento (5YR5/6).
Cuando las gravas de origen aluvial o fluvioglacial, que constituyen el sustrato de los suelos,
están cementadas, se forma un duripán que limita las condiciones de drenaje del suelo.

226
Algunos suelos (Serie Panguipulli) han desarrollado un epipedón melánico, a causa del alto
contenido de CO, los valores y cromas (Munsell) muy bajos y un índice meláníco inferior a 1 ,7.
Otros suelos, tales como ltropulli y Lanco (figuras 5-23 y 5-24, al final del Capítulo) se
encuentran en posición de terrazas recientes o remanentes y desarrollados sobre un sustrato
tluvioglacial con diferentes grados de cementación, que también se considera un duripán.
Presentan abundante actividad biológica y excelente penetración radical hasta la capa limitante.
La aptitud agrícola de estos suelos es inferior a la de los denominados Andisols típicos, a causa
de su menor profundidad efectiva y a las condiciones de drenaje moderado. Las Clases de
Capacidad de Uso que dominan varían entre lli y IV, dependiendo exclusivamente del drenaje.
Los suelos considerados representativos de este subgrupo son Panguipulli, San José, Loncoche,
ltropulli y Lanco. En el Cuadro 5-20 se presentan las propiedades químicas y fisicas de un pcdón
de la Serie ltropulli (Typic Durudand), considerada como representativa de este grupo.

Cuadro 5-20. Propiedades físicas. quimicas y fisico-quimicas de un perfil de la Serie lttopulli (CTREN, 2003)

Profundidad (cm) 0 - 16 1 6 - 35 35-58 58-100


Distribución de partfculas por tamaí\o (%) AP AB Bw• Bwt
2-1 0,7 0,7 0,6 1,0
1 - 0,5 0,9 0,8 1,0 1,2
0,5- 0,25 1,4 1.0 1,2 1,5
0,25 -0,10 3,7 3,2 2,4 2,2
0, 10- 0,05 12,2 7,5 7,5 5,4
2-0,05 19,0 13,3 12,7 1 1 ,4
0,05-0,002 45,4 52,3 52,6 43,6
< 0,002 35,6 34,4 34,6 45,0
Clase textura! FAL FAL FAL AL
Densidad aparente (Mg m'3) 0,62 0,75 0,55 0,58
Agua retenida 33 kPa (%) 59,1 61,6 63,1 60,8
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 40,2 47,1 49,1 45,0
pH"""" 6,0 5,7 6,1 5,7
Carbono orgánico (%) 4,60 4,10 2,69 2,19
Ca 4,85 1,65 1,72 2.22

Cationes Mg 1,83 0,30 0,20 0,40


intercambiables Na 0,47 0.24 0,27 0.24
(cmolc kg.1) 0,17 0,07 0.02
K 0,04
Al 0,05 0,01 0,01 0,00
Suma de bases (emolc kg'1) 7,32 2,26 2,23 2,88
CIC (emolc kg.1) 42,7 35,9 36,5 37,4
CICE (cmol., kg'1) 7,37 2,27 2,24 2,88
Saturación de Al (%) 1,0 0,0 0,0 0,0
Retención de P (%) 97,0 99,0 99,0 99,0
Al ox + 'h Fe ox (%) 3,54 3,67 3,80 3,37
Índice Melánico 2,18 2,41 2,95 8,25
Saturación de bases (%) 17,0 6,0 6,0 8,0

227
s). Este grupo de suelos presenta como rasgo comun.
Andisols con régimen ácuico ( Ñadi
además de las propiedades ándicas, un drenaje imperfecto que puede Uegar, en algunas Fases, 11

muy mal drenadas. El origen del mal drenaje se encuentra tanto en la topografia como en la
morfología de los suelos. Generalmente ocupan las posiciones planas o deprimidas del pat'>aJC
(Figura 5-25, al final del Capítulo) y como sustrato se ha descrito un depósito :tluvioglacial
formado por gravas y arenas que constituye un duripán o un horizonte plácico (fierrillo) o ambos.
el cual no sólo impide el paso del agua sino también de las ralees.

El fierrillo constituye una capa de pocos centímetros de espesor, extremadamente fi1111e y


fuertemente cementado con hierro y aluminio, en el cual se mezclan los colores negro (N 2/0) y
rojo amarillento (5YR5/8) (figuras 5-26 a 5-30, al final del Capítulo). En la mayoría de los casos
se presenta como una capa discontinua la cual ayuda a mejorar las condiciones de drenaje de los
suelos. Estos horizontes diagnósticos son moderados a fuertemente ácidos, con un contenido de
CO muy elevado para este tipo de horizontes; Palma (1 993) informa valores desde 1,1 a 5,6%. La
misma autora detectó que el Fe es el elemento más abundante en los fierrillos cementados,

..
particularmente el Fe extraible en solución de oxalato ácido (es decir el Fe de baja cristaJinidad
más el Fe complejado con la MO) conjuntamente con el Fe extraíble con una solución de
ditionito-citrato (total del Fe Libre del suelo). El Al sigue una tendencia semejante, pero en menor
proporción, por lo que la autora concluye que el Fe constituye el elemento fundamental en la
cementación de estos horizontes. El Si y el Mn se encuentran representados en cantidades ínfimas
por lo que no tendrían responsabilidad en la cementación del lierril.lo

La profundidad de los suelos es muy variable, dependiendo de la profundidad a la que se


encuentra la capa limitante, por lo tanto, la variación va desde Fases muy delgadas hasta Fases
muy profundas. Las pendientes dominantes van de casi plana (1 a 3%) hasta ligeramente
ondulada (2 a 5 %), de tal manera que el escurrimiento superficial es lento. En algunos suelos, el
nivel freático se puede encontrar cercano a la superficie en invierno y desciende bajo 1 m en
verano, en cambio, otros suelos permanecen saturados todo el año. Estas mismas características
se mantienen en los suelos del Archipiélago de CbiJoé y, en particular, tienen una amplia
distribución en los sectores centrales de la Isla Grande de Chiloé. En las figuras 5-31 y 5-32 se
muestran un perfil de la Serie Calonje y los paisajes asociados a este tipo de suelos.

El horizonte superficial suele ser un hori.wnte O, constituido por un colchón de Sphagnum, raíces
y hojas, y dependiendo de su espesor, puede constituir un epipedón hístico. Su color más
frecuente es negro, pero variando entre los matices 5YR y lOYR. En profundidad siempre existe
un buen desarrollo del perfil que implica la presencia de un horizonte cámbico y en varios casos,
como ocurre en las Series Frutillar (figuras 5-33 y 5-34, al fmal del Capítulo), Llanquihue y
Maullín se ha desarrollado un horizonte con evidencias de iluviación de arcillas. Respecto de
estos últimos suelos surge la discusión si poseen un horizonte argilico o no, debido a que no
siempre se aprecia con claridad, en los análisis de laboratorio, un incremento de la arcilla hacia
los horizontes subsuperficiales. Esto podría explicarse por los problemas de dispersión que
normalmente presentan estos materiales volcánicos. Sin embargo, en las descripciones de terreno
sí se puede apreciar un incremento de la tracción arcilla, pues los perfiles texturales generalmente
van desde franco o franco limosa en superficie hasta franco arcillo limosa, e incluso franco
arcillosa en los horizontes B.

Los rasgos redoximórficos aparecen desde los 30 cm hasta el contacto con el duripán o el
í1errillo, en cantidad variable y en un color rojo amarillento (5YR4/6-5/8). El duripán constituye

228
un horizonte cementado con sílice, que puede ser discontinuo y cuyo color dominante es gris
oscuro ( l OYR 4/1) o gris (IOYRS/1).

En términos generales, se puede considerar que estos suelos poseen una aptitud moderada para
praderas, aun cuando es necesario considerar caso por caso. En todos ellos existe una dominancia
de las Clases de Drenaje 3 (imperfectamente drenado) basta 1 (muy pobremente drenado); sin
embargo, se han descrito Fases de la Serie Frutillar con Clase de Drenaje 4 (moderadamente bien
drenado) y Clase de Capacidad de Uso llw. Es necesario considerar. eso si, que la Serie Frutillar
constituye uno de los suelos más profundos de esta categoría. Este mismo análisis se puede
aplicar a los suelos Llanquihue y Maullín. Todos los suelos se han clasificado en los Grandes
Grupos Duraquand, Endoaquand y Placaquand. En el Cuadro 5-21 se presentan las propiedades
de un pedón de la Serie MauWn (Hydric Endoaquand), considerado como representativo de este
grupo.

Cuadro 5-21. Propiedades fisicas, químacas y üsico-quirrucas de un perfil de la Serie Maullin (erREN, 2003)

Profundidad (cm) 0 - 13 13-30 30-52 52-90 90 - 1 12


Distribución de partículas por tamaño (%) A, Al BA B, Bq,
2-0,05 78,9 84,8 88,9 73,2 81,2
0,05-0,002 10,4 4,4 4,4 17.3 9,3
<0.002 10,8 10,8 6,8 9,5 9,5
Clase textural Fa aF a Fa aF
Densidad aparente (Mg m'3) 0,54 0,60 0,57 0,52 1,06
Agua retenida 33 kPa, suelo seco (%) 60,5 34.4 38,8 27,5 26,8
Agua retenada 1.500 kPa, suelo seco (%) 47,9 31,1 34,1 19,5 21,0
Agua retenida 1.500 kPa, suelo húmedo (%) 63,1 76.8 85,9 99,0 125,2
pHagua 4,9 5,3 5,4 5,5 5,5
Carl>ono orgánico (%) 18,9 13,3 8,0 3,0 5.3
Ca 0,40 0,19 0,12 0.10 0,17
Calioncs Mg 0,26 0,13 0,10 0,03 0,05
intercambiables
0,17 0.10 0,10 0,07 0,10
(cmolc kg'1) Na
K 0,26 0,15 0.08 0,03 0,02
Suma de bases (cmol., kg"1 ) 1,09 0,57 0,40 0,23 0,34
1 2,2 1 0,83 0,16 0,01 0.01
Al¡xCil(cmol., kg' )
Acidez (pH 8,2) 89,8 72,3 68,9 39.4 48,2
CTC (pH 7) (cmol< kg'1 ) 59,5 53,1 62,9 38,7 41,0
ere (por suma) (cmolc kg'1) 90,8 72,9 69,3 36,6 48,5
CICE (cmolc kg'1) 3,30 1,40 0.56 0,24 0,35
Saturación de AJ (%) por CTCE 67 0
, 59,3 28.6 4,2 2,9
Retención de P (%) 97.0 99,0 99,0 99,0 99,0
Al ox + y, Fe ox (%) 1,54 2,77 6,48 4,44 6,80
Índice Melánico 2,03 2,02 2,38 2.26 2,00
Densidad óptaca (ODOE) 0,43 1,26 0,89 0,29 0,50
Saturación de bases (%) a pH 7 1,8 1,1 0,6 0,6 0,8

229
SueJos derivados de cenizas volcánicas, no AodisoJs. En esta categoría se inclu�en
suelos derivados de cenizas volcánicas depositadas sobre planos aluviales, o preferentemente
fluvioglaciales. Los elementos de juicio que se han evaluado para considerarlos corno derivados
de cenizas volcánicas, con una mayor evolución pedogénica, son la Db, cercana o ligeramente
superior a 1 Mg m·3, una elevada retención de P que, en algunos horizontes superficiales puede
llegar a 98% y un [Al ox + Y2F'e0,] sobre 2% en los horizontes superficiales y cercanos a 1% en los
horizontes subsuperficiales. Es interesante destacar que todos estos parámetros presentan una
distribución irregular con la profundidad, al igual que el resto de las propiedades medidas, lo cual
de alguna manera permite inferir la depositación.t de capas sucesivas de diferentes tefras.

Las clases texturales varían desde franca, franco limosa, franco arcillo limosa hasta arcillosa en
los horizontes más profundos. Presentan un buen desarrollo de perfil evidenciado por la presencia
de horizontes cámbicos. Un tipo frecuente de sustrato, lo constituye una toba con diferentes
grados de alteración, generalmente bajo un metro de profundidad. Los suelos que ocupan sectores
deprimidos en el paisaje y en posición topográfica baja con pendientes de O a 1% o bien de forma

cóncava, pueden presentar niveles freáticos próximos a la superficie la mayor parte del año, si no
están artificialmente drenados. Los suelos con drenaje imperfecto y mal drenados generalmente
presentan colores grises en la matriz y una gran abundancia de rasgos redo:x.imórficos. Las
características de drenaje de estos suelos constituyen la mayor limitante para su uso, de tal
manera que pueden ser calificados en Clase Vllw de Capacidad de Uso, para aquellos suelos muy
pobremente drenados. En el Cuadro 5-22 se presentan las propiedades químicas y físicas de un
pedón de la Serie Huiño - Huiño (Fluvaquentic Humaquept), considerada como representativa de
este grupo (figuras 5-35 y 5-36, al final del Capítulo).

230
Cuadro 5-22. Propiedades fisicas, qulmicas y fisico-quimicas de un perfil de la Serie Huiño - Huil'io (ClREN,
2003)

Profundidad (cm) 0 - 27 27-40 40-59 59-80 80- 150


Distribución de partículas por tamaño (%) B.., D.n e
2-0,05 34,.5 24,.5 28,5 28,5 38,5
0,05-0,002 38,2 37,6 31,6 27,6 19,6
< 0,002 27,3 37,9 39,9 43,9 41,9
Clase textura! FA FA FA A A
Densidad aparente (Mg m'3) 1,10 1,03 1,13 1,02 1,09
Agua retenida 33 kPa, suelo seco (%) 61,2 44,8 42,9 41,9 41,9
Agua retenida 1.500 kPa, suelo seco (%) 40,6 25,0 21,5 24,9 28,3
piiagua 5,04 5,12 5,39 5,53 5,84
Carbono orgánico (%) 7,09 4,13 2,15 1.51 0,64
Ca 2.64 1,84 4.67 8,63 ll,04
Cationes Mg 0,41 0,53 1.45 3,14 5,16
intercambiables
(cmolc kg'1) Na 0,11 0,13 0,26 0,50 0,89
K 0,81 1,00 0,82 0,58 0,45
Suma de bases (cmolc kg'1) 3,97 3,.50 7).0 12,8.5 17,54
Al por KCI 0,67 2,71 1,09 0).2 0,08
Acidez a pH 8,2 (cmolc kg'1) 83,1 38,4 26,9 23,1 22,8
kJC (pH 7) (cmol. kg'1) 46,1 24,2 22,0 24,6 28,7
ClC por suma (cmol. kg"1) 87,1 41,9 34,1 36,0 40,4
ClCE (cmolc kg"1) 4,64 6,21 8,29 13,07 17,62
Saturación de Al (%) por CICE 14,4 43,6 13,1 1,7 0,.5
Retención de P (%) 98,0 62,0 48,0 51,0 58,0
Al ox + '!. Fe ox (%) 2,97 0,65 0,39 0,37 0,52
Índice Melánico 1,74 1,64 1,62 1,59 1,64
Densidad óptica (OOOE) 0,47 0,11 0,06 0,04 0,03
Saturación de bases (%) a pH 7 8,6 14,5 32,8 .52,3 61,1
Saturación de bases (%) suma 46 8,3 21,1 35,7 43,4

Suelos derivados de cenizas volcánicas antiguas. Son suelos profundos que se han
desarrollado a partir de cenizas volcánicas antiguas. Con clase texturaJ superficial franco arcillosa
y arcillosa hacia los horizontes más profundos. El color es pardo rojizo oscuro a rojo amarillento
en profundidad en los matices 5YR y 2.5YR. Presentan buena estructuración a través del perfil,
Jlegando a prismas gruesos fuertes y una adecuada penetración radical hasta 1 m. Los rasgos de
iluviación (cutanes) en el horizonte B, no son prominentes, pero si lo suficiente para describirlos
con claridad. Se presentan en forma de terrazas disectadas y erosionadas con pendientes
complejas de 5 a 20% y también en topografia tanto de lomajes como de cerros con más de 20%
de pendiente. A causa de la fuerte erosión a la que están sometidos estos suelos, su profundidad
puede variar considerablemente.

Besoaín ( 1985) consideró a estos suelos como derivados de cenizas volcánicas antiguas, antes
que se tuviera una definición sobre las propiedades ándicas. En la actualidad (Soil Survey Staff,
2006) se puede tener una mayor certeza sobre esta condición, pues los análisis más recientes han
evtdcnciado que presentan una retención de P, a través del perfil, que var[a entre 86 y 90% y un

231
[Al 0� + Y.J"e 0�] sobre 1%, sin embargo, la Db puede llegar a 1,5 Mg m.J, la cual es muy ele'uda
para considerarlo un Andisol. Esto significaría, de acuerdo a Besoain (op.cit) que una propcrcwn
importante de la fracción mineralógica ha dejado de estar constituida por MORC, evolucionJndo
hacia fonnas más cristalinas tales como la baloisita y caolinita. Como ejemplo de esta clase:- de
suelos se puede citar a la Serie Cudico que se ha clasificado como un Typíc Hapludult (figura" 5-
37 y 5-38, al final del Capítulo).

Su aptitud agrícola está Limitada por las fuertes pendientes y la erosión que, en muchas Fases, se
ba calificado como severa. De esta manera, la mejor aptitud de utilización agrícola se encuentra
en las Fases profundas y ligeramente onduladas con 2 a 5% de pendiente y sin erosión. En otro
extremo se encuentran las Fases con pendientes de 20 a 30% y erosión severa que se han
calificado en Clase Vlle de Capacidad de Uso. En el Cuadro 5-23 se presentan las propiedades
químicas y fisicas de un pedón de la Serie Cudico.

Cuadro S-23. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quúnicas de un perfil de la Serie Cudico (CIREN, 2003)

Profu.odidad (cm) o - 16 16-35 J S - 69 69 - 89 89-110

Distribución d e partículas por tamaflo (%) A, AB B,, B,l Bo


2-0,05 42,8 14,8 11,4 7.4 55,4
0,05-0,002 10,4 12.0 12.7 8,7 10,7
< 0,002 46,8 73,2 75,8 83,8 33,8

Clase textural A A A A FAa

Densidad aparente (Mg m"1) 1,18 1,17 1,24 1,34 1,55


Agua retenida 33 kPa, suelo seco (%) 32,7 28,8 26,7 29.5 30.9
Agua retenida 1.500 kPa, suelo seco (%) 27,1 24,7 24,2 26,8 26,8
Agua retenida 1.500 K.Pa, suelo seco (%) 29,3 30,7 36,0 35,4 33,0
5,20 5,21 5,08 5,10 5,10
Carbono orgánico (%) 4,30 1,92 1,51 1,22 0,93
Ca 1,06 0,68 0,36 0.28 0,17
Cationes
Mg 1,13 0,54 0.26 0,44 0,59
mtercambiables
(cmol< kg1) Na 0,29 0,21 0,15 0,19 0,19
K 0,49 0.31 0,28 0,26 0.24
Suma de bases (cmot_. kg"1) 2,97 1,74 1,05 1,17 1,19
Alum¡(cmolc kg"1) 1,44 1,50 2,03 1.74 1,0
Acidez (pH 8,2) (cmol. kg"1) 44,7 36,8 38,7 38,0 31,6
CIC (pH 7) (cmolc kg"1) 31,1 23,8 21,9 17,8 16,0
CIC (por suma) (cmol. kg"1) 47.7 38.6 39,8 39,2 32,8
CICE (cmolc kg"1) 4.41 3,24 3,08 2,91 2,19
SaturaCIÓn de Al (%) por CICE 32,7 46,3 65,9 59,8 45,7
Retención de P (%) 90,0 90.0 89,0 88,0 86.0
Al ox + y, Fe ox (%) 1,17 1,01 1,09 0,90 0.70
índice Melánico 1,95 1,95 1,90 1,75 1.77
Densidad óptica (ODOE) 0.21 0,15 0,17 0,15 0,10
Saturación de bases (%) a pH 7 9,6 7,3 4.8 6,6 7,5
Saturación de bases (%) por suma 6,2 4,5 2,6 3,0 3,6

232
5.3.4 Suelos de l a Cordillera de l a Costa

La Cordillera de la Costa, en esta parte del pafs, conforma una entidad fisiográfica bien definida,
con alturas máximas que pueden alcanzar los 1 . 1 00 msnm. Constituye la continuación de la
Cordillera de Nahuelbuta, de tal forma que las rocas metamórficas son los materiales geológicos
dominantes. En los suelos que se han descrito en esta formación, se ha podido constatar que las
rocas se encuentran más meteorizadas y, por lo tanto, con una estructura petrográfica menos
reconocible. Además de la topografia de cerros que corresponde a los sectores más elevados, se
pueden distinguir formas desde lomajes suaves hasta fuertemente ondulados. En este Capítulo se
hace referencia a los suelos que se extienden desde la ciudad de Valdivia hacia el sur, siguiendo
aproximadamente el meridiano 73°30' hasta Carelmapu (Figura 5-39, al fmal del Capítulo).

'
Inceptisols con propiedades ándicas. En este sector de la Cordillera de la Costa se han
descrito suelos derivados de la meteorización de la roca metamórfica paleozoica, con una
expresión pedogénica suficiente para desarrollar un horizonte Bv. (Luzio et al., 2001 ). Además,
los suelos presentan algunos horizontes con propiedades que se aproximan a las que poseen los
suelos derivados de cenizas volcánicas, aun cuando desde un punto de vista mineralógico no es
posible asegurar la contaminación con materiales de este origen (op.cit.).

En esta amplía zona se pueden considerar dos sectores diferentes desde el punto de vista edáfico
y que están asociados a relieves bien defmidos. El primero corresponde a los sectores más
próximos a la Depresión Intermedia (se les podría identificar como de pre-cordillera) donde se
pueden describir zonas de lomajes suaves, de 5 a 8% de pendiente, en alturas que varían desde
.'
60 a los 150 msnm. El sustrato de los suelos consiste en depósitos fluvioglaciales constituidos
por gravas multicolores, redondeadas y subredondeadas, con diferente grado de meteorización, o
bien, presentan una toba muy meteorizada que se encuentra a profundidad variable. La
profundidad de los suelos está determinada en gran medida por el grado de erosión que han
sufrido los suelos que, en este sector, se ha identificado como de ligera a moderada. El segundo
sector, se encuentra en la Cordillera propiamente tal. donde la topografia es compleja, de lomajes
y cerros, fuertemente ondulada, con pendientes que varían de 8 a 15% y también de 20 a 50%.
Los suelos, moderadamente profundos, descansan directamente sobre rocas metamórficas del tipo
filitas y rnicaesquistos, por lo general, profundamente meteorizadas. A causa de las pendientes y
la explotación inadecuada de los bosques nativos, la erosión se ha calificado de moderada a
severa la cual, en algunos suelos, se presenta con cárcavas profundas y frecuentes. Varios suelos
son delgados a muy delgados debido a la decapitación sufrida por efecto de la erosión severa.

Si se considera la antigüedad de los materiales subyacentes a los suelos (Aifaro et al., 1994;
Troncoso et al., 1994) y que constituyen los materiales parentales, llama la atención la limitada
evolución pedogénica que muestran los suelos. Aun cuando se trata de superficies antiguas
estables no hay evidencias morfológicas de rasgos de iluviación de arcillas (corroborado por los
contenidos de arcilla de los diferentes horizontes) o de componentes orgánicos. Sólo se han
descrito horizontes de alteración in situ (8), cuyos rasgos más sobresalientes son un incremento
de la fracción fina y un valor y croma (Munsell) más altos en relación al horizonte superficial.

En el sector de pre-cordiUera los suelos tienen clases texturales medias (franca, franco arenosa)
en los horizontes superficiales y finas (franco arcillosa, franco arcillo limosa, arcillo limosa) en

233
los horizontes más profundos, en contacto con el sustrato. Los colores se mantienen en el 1rdor
oscuro {7.5YR) en superficie y se toman más rojos en profundidad, generalmente pardo fllJIZO
oscuro en el matiz SYR. El contenido de CO varia entre 5,6 y 7,2 % en los honz•ntes
superficiales, con un decrecimiento regular con La profundidad hasta 1%. La CIC varía dl 1 3 a
'
42 cmolc kg· en los diferentes suelos, sin que se presente una tendencia definida con la
profundidad. La SB se mantiene bajo 50% en todos los horizontes y en algunos de ellos puede
3
llegar a valores tan bajos como 3%. La Db es inferior a 1 Mg m· y sólo en algunos horizontes
• y en algunos de
puede llegar a 1 , 1 Mg m·3; el [Al ox + 'hFe ox] en todos los horizontes es � l %
ellos alcanza a 2,2%; a su vez la retención de P varia entre 67 y 93%, valores que se consideran
demasiado elevados para suelos cuyo material de origen no es volcánico. Los tres últimos
parámetros mencionados son los que han determinado que todos estos Inceptisols hayan sido
intergrados hacia Andisols. Llama la atención La elevada diferencia entre la ClC y la ClCE, la
cual constituye una medida de la carga variable y que alcanza a 70% de La carga total; esto

significaría una gran cantidad de componentes no cristalinos, lo cual no es efectivo para estos
suelos {Luzio et al., 2001). Por lo tanto la elevada carga variable no provendría de MORC sino
que tendría su origen en La presencia de minerales tales como la caolinita, clorita y gibbsita (op.
cit.).

Los suelos de Cordillera propiamente tal, son de texturas finas en los horizontes superficiales y
en profundidad, con un claro incremento hacia los horizontes inferiores, bien estructurados y con
buena penetración radical. Dominan los colores rojizo y pardo rojizo, rojo amarillento y pardo
amarillento oscuro en los matices 2.5YR y 5YR y más raramente 7.5YR y IOYR. La mayoria de
los suelos presentan gravas de cuarzo y micaesquisto meteorizado a través del perfil, en algunos
casos, incluso a partir de los 22 cm de profundidad. En estos sectores la erosión manifiesta su
máxima expresión, a tal extremo de reducir La profundidad efectiva de los suelos de manera que,
algunas Fases, han alcanzado La calificación de suelos delgados y muy delgados.

3
La Db está bajo l Mg m· en casi todos los horizontes y sólo excepcionalmente, algunos pueden
3
alcanzar 1,2 - 1,3 Mg m· • El CO puede alcanzar valores elevados (7 y 1 1 %) en algunos suelos,
sin embargo, los valores más corrientes se mantienen bajo 5%. La ClC es particularmente alta en
los horizontes superficiales y subsuperficiales, desde 40 a 60 cmol.: kg"1 • Los suelos se encuentran
completamente desaturados, siendo el promedio de SB de 5%, de tal manera que el complejo de
intercambio se encuentra saturado con H y Al. Este último es muy elevado en todos los
horizontes de los suelos tomados para este análisis, esto es sobre 40%. En particular, en algunos
horizontes llega hasta 23 cmol.: kg"1 , lo que determina que la saturación con Al alcanza a 94%
para esos horizontes. Si se considera que la toxicidad de Al se manifiesta sobre 0,2 cmolc kg"1 de
Al intercambiable, todos los suelos de este sector se encuentran muy por encima de ese umbral,
por lo cual su comportamiento debiera estar relacionado con el de los suelos muy fuertemente
ácidos (pH <5,0). Sin embargo, la mayoría de los horizontes tienen pH superior a 5,0 lo cual
podría deberse a varios factores, tales como que el oxalato ácido extrae todas las formas de Al
activos, por lo cual habría una menor liberación de protones a la solución suelo; también se
podrfa explicar a causa de la adsorción de Al sobre caolinita y vermiculita, lo cual produciría un
incremento del pH de la solución (Lurio et aL, 200 l ).

A causa de las pendientes y de los sectores que ocupan estos suelos, la mayoría de eUos presentan
aptitud forestal. Dominan las pendientes complejas de 20 a 30% y de 30 a 50% y sólo algunas
fases son de 8 a 15%, con erosión de moderada a severa, por lo cual se les han asignado Clases de
Capacidad de Uso VI y Vll. Los sectores de la denominada pre-cordillera presentan pendientes

234
menos escarpadas (5 a 8% y 8 a 15%), por lo que tienen una mejor aptitud y son utilizados con
cultivos anuales. La erosión es ligera y las Clases de la mayoría de las Fases son Il, m y JV.

Para el análisis de los suelos de este sector se han utilizado las Series de Suelos La Pelada
(figuras 5-40 y 5-41, al fmal del Capítulo), Hueñi, CoUihuinco, La Unión, Piedra de Oro,
Punotro, Rcpil, Perquillán y Bahía Mansa (figuras 5-42 y 5-43, al final del Capítulo). En el
Cuadro 5-24 se presentan las propiedades químicas y fisicas de un pedón de la Serie Hueñi,
(Andic Dystrudept) moderadamente profundo y desarrollado a partir de rocas metamórficas, con
pendientes entre 30 y 50% y que. se ubica en plena Cordillera de la Costa entre alturas que varían
entre 500 y 900 msnm. En el Cuadro 5-25 se presentan las propiedades químicas y fisicas de un
pedón de la Serie Repil (Andic Dystrudept), que se ubica en una posición intermedia adosada a la ...
Cordillera de la Costa, con topografia de lomajes suaves y un sustrato constituido por sedimentos
marinos, mezclados con rocas metamórficas meteorizadas.

Cuadro 5-24. Propiedades fisicas, químicas y fisico-quírnicas de un perfil de la Serie llueili (ClREN. 2003)

Profundidad (cm) 11-14 14-34 34-72 72-120


Distribución de partículas por tamallo (%) A• B 2C1 2C1
2-0,05 56,9 62,9 74.9 74,9
0,05-0,002 23,6 19,6 13,6 1 3,6
< 0 002 19,4 17,4 1 1 .4 11,4
Clase textura) Fa Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg 0,88 0,96 1,31 1,36
Agua retenida 33 k.Pa (%) 30,5 25,9 12,7 11,1
Agua retenida 1.500 k.Pa (%) 22,5 2 1,3 8,1 6,4
pHosua 5,27 5,36 5;1.7 5,23
Carbono orgánico(%) 6,16 3,60 0,93 0.47
Ca 0,24 0,1 1 0,12 0.13
Cationes
Mg 0,23 0,10 0,05 00,5
intercambiables
Na 0;1.2 0,20 0,11 0,09
(cmolc kg"1)
0,17 0,08 004 0,05
Suma de bases (cmolc 0,86 0.49 0,32 0,32
�KOl(cmolc kg"1) 1 62
. 1,25 1,08 0,93
C1C (pH 7) (cmol, kg"1) 39,9 40,0 12,5 9.1
CICE (cmolc kg"1) 2.48 1,74 1.40 1,25
Saturación de Al (%) 65 72 77 74
Retención de P (%) 87,0 87,0 45,0 34.0
Al ox + Y, Fe ox (%) 1.37 1,66 0,52 0,36
Índice Melánico 2.,1 9 2,33 2,37 2,29
Saturación de bases (%) 2.2 1,2 2,6 3,5

235
Cuadro S-25. Propiedades fisicas, químicas y fisic<H¡uímicas de un perfil de la Serie RepiJ (ClREN. 2003)

Profundidad (cm) 0-9 9 - 27 27-41 41 - 85 85- 130


Distribución de partículas por Lamaño (%) At AB Bt B� Bl
2-0,05 28 6
, 24,6 25,3 14,9 18,9
0,05-0,002 27;3 27,3 25,6 34,0 25,6
< 0,002 44,2 48,2 49,1 51 1
, 55,4
Clase texrural A A A A A
Densidad aparente (Mg m'1) 0,89 1.09 0,88 1,01 0,96
Agua retenida 33 kPa (%) 38,9 39,3 37,2 38,0 39,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 25,2 26,9 27,3 25,8 26,4
pH- 5,09 5,29 5,12 4,74 5,00
Carbono orgánico (%) 5,58 5,00 3,26 1 ,5 1 1,05
Ca 2,67 2.11 1,62 2,06 0,65
Cationes Mg 1,71 1,10 0,79 0,51 0,46
intercambiables
(cmolc kg'1) Na 0,23 0,27 0,25 0,29 0,12
K 0,43 0,21 0,27 0,25 0,17
Suma de bases (cmolc kg'1) 5,04 3,69 2,93 3, 1 1 1,40
A�..:u1(cmol.: kg'1) 8,75 9,39 12,55 \8,39 22,48
Acide¿ (pH 8,2) (cmol.: kg'1) 49.6 46.6 50,0 40.4 41.0
CJC (pH 7) (cmol.: kg'1) 36.3 34.3 37,8 31,1 28,8
CJC (por suma)(cmot., kg'1) 54,6 50,3 52,9 43,5 42,4
CTCE (cmolc kg.1) 13,79 13,08 1 5.48 2 1 .50 23,88
Saturación de Al (%) por C1CE 63,5 71 8
, 81,1 85,5 94.1
Retención de P (%) 82,0 87.0 90,0 93,0 91,0
Al ox + Y, Fe ox (%) 1.58 1.63 1,74 2,15 1.44
Índice Melánico 1,92 1,85 1,78 1,97 1,71
Saruración de bases (%) a pH 7 13,9 10.8 7,7 10,0 4,9
Satumción de bases (%) por suma 9,2 7,3 5,5 7,1 3,3

Ultisols con influencia volcánica. Se trata de suelos profundos que pueden haber derivado
de dos materiales parentales diferentes. En primer lugar, a un grupo de ellos se les ha considerado
como derivados de cenizas volcánicas antiguas, depositadas sobre el complejo metamórfico, con
una evolución suficiente para que el complejo mineralógico evidencie características de
componentes cristalinos, conjuntamente con las características provenientes de los MORC. En
segundo lugar, a otros se les ba identificado como derivados directamente de la meteorización
profunda de rocas metamórficas de la Cordillera de la Costa.

Estos suelos se ubican tanto en la Cordillera de La Costa, con topografia de cerros (>30%
pendiente), como en áreas de pre-cordillera con topografía de lomajes fuertes y pendientes
menores (8 a 15% y 1 5 a 20%). Por lo tanto, se encuentran en alturas que varían desde los 100
hasta los 700 msnm. Se trata de suelos moderadamente profundos a,muy profundos, como ocurre
en el caso de la Serie Los Ulmos que puede alcanzar más de 230 cm de profundidad. Las clases
texturales son medias en los horizontes superficiales y más finas en los horizontes más profundos,
es decir, desde franco limosa hasta franco arcillo limosa y arcillo limosa. Además del incremento

236
de la fracción fina hacia los horizontes subsuperficiales, en todos los suelos se presentan
'
evidencias claras de iluviación, a través de la presencia de cutanes delgados discontinuos entre
los 22 y 66 cm de profundidad, principalmente en las paredes de poros y más ocasionalmente en
las caras de los agregados. Los colores dominantes en todos los suelos se encuentran en el matiz
5YR, entre el pardo rojizo oscuro y el rojo amarillento. Todos los suelos tienen un buen
arraigamiento, de tal manera que se pueden describir raíces ftnas comunes hasta los 100 cm.

Algunas propiedades de estos suelos señalan que el contenido de CO es elevado en los horizontes
superficiales, aun cuando no alcanzan los niveles de los Andisols; puede variar entre 4 y 1 2 % y
siempre con un decrecimiento regular con la profundidad hasta valores de 0,4%. La CIC es alta
1
para la mayoría de los horizontes de los suelos (en algunos de ellos puede llegar a 79 cmok kg- )
1
fluctuando entre 1 6 y 49 cmole kg- • La SB responde a las condiciones de desaturación de todos
los suelos de la Región, es decir se mantiene bajo 10%, con valores extremos de 20 y 1 % en
detenninados horizontes. Al igual que los Jnceptisols con propiedades ándicas, estos suelos
presentan algunas características intrínsecas que los hacen interr,dos obligados hacia los suelos
volcánicos. De esta manera, la Db varía de 0,7 hasta 1,4 Mg m- , la retención de P varia entre 70
y 97% y el [Alox. + lhFe0x] se mantiene sobre 1 % en casi todos los suelos y en algunos horizontes
es superior a 2%. Por lo tanto, a la luz de estas cifras no es posible desconocer que existe alguna
influencia de materiales volcánicos, situación que ha sido señalada como común para los suelos
de esta zona. De los suelos utilizados para este análisis (Correltúe, Hueicoya, Huilma y Los
Ulmos), Correltúe es el que presenta estas propiedades de manera más prominente. La Db varia
entre 0,7 y 0,8 Mg m-3 en todo el perfil, la retención de P va de 89 a 97% y [Al 0, + lh Fe0x] va
desde 2,3 a l ,2% en los horizontes más profundos. También la saturación del complejo de
intercambio con Al es muy elevada, alcanzando 83% en el suelo Hueicoya.

La mayoría de estos suelos tiene aptitud para praderas y forestal, esencialmente por la topografia
que los caracteriza y por la erosión de moderada a severa que sufren varias Fases de ellos. Todas
las áreas que presentan pendientes de 30 a 50% tienen aptitud forestal y se les ha asignado una
Clase de Capacidad de Uso VI, VII y, en los casos más extremos, VIII. A las Fases moderada y
fuertemente onduladas con pendientes de 5 a 8% y de 20 a 30%, se les han asignado Clases entre
IV y VI, dependiendo del grado de erosión que sufren. De los suelos analizados, la Serie Huilma
(Figura 5-44, al ftnal del Capitulo) es la que presenta la mejor aptitud agrícola, pues se trata de
suelos profundos, bien estructurados y con buen arraigamiento a través del perfil, con fases
ligeramente onduladas y pendientes entre 2 y 5% a las cuales se les ha asignado Clase n de
Capacidad de Uso. En el Cuadro 5-26 se presentan las propiedades químicas y fisicas de un
pedón de la Serie Correltúe (Andic Haplohumult) suelo desarrollado a partir de cenizas
volcánicas antiguas depositadas sobre el complejo metamórfico.

237
Cuadro 5-26. Propiedades físicas, químicas y fisico-<¡uímicas de un perfil de la Serie Correltúe (CIREN. 2003)

Profundidad (cm) 0-7 7 - 28 2 8 - 64 64 - 98 98- 1311


Distribución de pa.rtlculas por tamaño (%) A, Al B,, Bu Bu
2-0,05 18,7 19,5 10,8 9,9 12.2
0,05-0,002 37,2 42,8 40,7 44,0 40,9
< 0.002 44,1 37,6 48,5 46.1 47.0
Clase textura! A FA AL AL AL
Densidad aparente (Mg m'3) 0,67 0,84 0,69 0,71 0.79
Agua retenida 33 kPa (%) 56,9 62,0 47,9 41,2 37,0
Agua retenida 1.500 kPa (%) 38.9 39,8 34,4 28,7 27,2
pH- 5,6 4,9 5,2 5.4 5,2
Carbono orgánico(%) 1 1 ,99 8,30 1,86 1,32 1 , 12
Ca 1.60 0,14 0,13 0,21 0,33
Cationes
Mg 0,53 0,05 O.Q3 0,03 0,05
intercambiables
(cmolc kg'1) Na O,l6 0,10 0,05 0,07 0,08
K 0,15 0,07 0,03 0,03 0,02
Suma de bases (cmolc kg'1) 2,44 0.36 0,24 0,34 0,48
A1Q.:C11 (cmolc: kg-1) 0,70 0,48 0,01 0,01 0,00
CIC (pH 7) (cmol< kg-1) 36,6 32.2 13,3 1 8,2 1 7,2
CICI:. (cmolc kg'1 ) 3,14 0,84 0,25 0,35 0,48
Saturación de Al (%) 22,0 57,0 4,0 3,0 0,0
Retención de P (%) 96 97 92 94 89
A1 ox 1 !h Fe ox (%) 1,96 2,31 1,40 1,46 1,1 7
Índice Mclánico 1,93 1.89 t89 1.89 2,17
Saturación de bases (%) 7,0 1,0 2,0 2,0 3,0

238
Figura S-1. Durante el Cuaternario la actividad volcánica en Los Andes de Chile fue dll gran intensidad con considerables
volúmenes de materiales emitidos. En la Figura se destaca la sucesión de capas de sedimentos volcánicos (tefras).

figura S-2. Entre los 600 y los 1 .400 msrun, existe una dominancia de suelos derivados de tefras de granulomeuia gruesa y
med1a. e:. decir pumicea. cinerit
ica y fragmenta!. Se trata de suelos profundos y moderadamente profundos, con clase textura!
grul.a. La mayor pane de los suelos llene como sustrato a gravas escoriáceas de ongen volcánico cuyo tamailo puede variar entre
2 y h cm de diámetro.

239
Figura 5-J. Sector pre-cordillcrano con escasa información edática. Se puede observar un valle glacJal en medio de una
topogralia muy abrupta.

240
Figura S-4. Pertil de la Serie Los Prados. Los suelos que �>C encuentran en la pre-cordillem, mús próximos A la Depresión
Intermedia, tienen laJ> mejores aptitudes agrícolas, principalmente debido a que se pre>entan en una posición topográfica más
adecuada, como terrazas aluYiales, terrazas remanentes o bien sobre depósitos Ouvioglaciales.

Figurw 5-S. PaisaJe de la Serie Los Prados. Se trata de suelo" generalmente profundos que dominan en la pre<ordillera de Los
Ande, pero en posictones más próximas a la Depresión lnttnncdta. donde alcanzan su máxima exprestón los suelo. derivados de
'cnJ7.L' volcánicas.

241
Figura S-4. Pcrftl de la Sene Los Prados. Lo; suelos que se encuentran en la pre-cordillera. más próximos a la Depresión
lnu:nnedia. tienen las mejores aputudes agricolru.. principalmente debido a que se presentrul en una posición topográfica más
adecuada. como terrazas aluviales, te1Tll7.as remanentes o bien wbrc depósito" nuvioglaciales.

figur11 5-5. Paisaje de la Serie Lo� Prados. Se trata de suelos generalmente profundos que dominan en la pre-cordíllera de Los
Andes pero en posiciones mtís próximas a la Depresión Intermedia, donde alcaJUan su máxima eKpresión los suelos derivados de
cemtal. volcánicas.

241
Figura 5-6. Perfil de la Serie Mctrenco. Son suelos profundos y moderadamente profundos que descansan sobre conglomerados
nuvioglaciales. parcialmente metenri1udos de composición andesitico-basáltica o sobro brechas volcánicas con dilcrcnte grado de
meteorización.

Figura S-7. Prusaje de la Sene Metrenco. Los suelos ocupan una posición de lomajcs con lopogrnfia de suave a moderndamente
ondulada con pendientes dominantes de 8 a 15�. y hasta 20 a 30%. En algun3.� Fases de relieve cóncavo y en las depresiones, se
puede presentar drenaJe imperfectO

242
Figura S-8. Paisaje de un sector de la Depresión Intermedia en las proximidades de Pit.rufquén. El cult1vo, en primer plano, es
cebada (Hordeum vulgure).

Figura S-9. Suelos derivados de cenizas volcánicas mode.rada a ligeramente profundos cuyo sustrato está constituidO por gravas
cementadas con materiales semejantes a un liCITillo, depósitos fluvtoglac1ales compactados, escorias volcánicas o brechas
volcanicas parcialmente meteorizadas. El susrrato limita seriamente la profundidad del suelo y cons�ucntemente sus aptitudes de
uso

243
Figura 5-10 En segundo plano se observa el relieve caructeristico de la Conlillera de la Co,ta en la zona de Arauco. El relie'e e�
pronunciado, con pendientes que varían de 5 a 8°/o y de 8 a 15% en los sccturc� de lomajes y de 30 a scw. y más de SO"Io en las
áreas de cerros propiamente tal�. El material parental co�pondc a roca metamórfica, con diferentes grado� de meteori7.ación,
pero con su estructura C>QUI�tosa reconocible que aún ((! manifiesta en los horizonte> mferiores de Los suelos.

Figura S-Il. Corte que muestra la roca metamórfica caracteristica de la Cordillera de Nahuelbuta y el suelo que se desarrolla
sobre ella. En este caso, el suelo ha sido decapitado y en su mayor parte se trata de perfiles incompletos.

244
Figura 5-12. Perfil de la Serie Quiripio. Los suelos derivados de cenizas volcánicas en la Cordillera de la Costa se encuenttao en
posición de lomajes, de cerros con pendientes complejas y una topografla ondulada y disectada. Son suelos profundos (120 cm)
que, en algunos casos, se encuentran directamente sobre el micaesquisto parcialmente meteorizado.

245
Figura S-13. En los sectores más elevados de la Cordillera de Los Andes (desde 900 a L.200 msnm), con una topografia de
lomajes fuertes y cerros, se encuenlr.ln suelos con granulometria gruesa, de tal forma que todos ellos peneoecen a las Farruhas
cineritica y pwnfcea. Los suelos SQI1 estratificados, alternando capas de pómez y arenas de finas a gruesas.

Figura S-14. A causa de las fuenes pendientes de estaS áreas de la Cordillera de Los Andes, los suelos sólo poseen aptitud
forestal Todavía se pueden observar áreas con una densa cubiena de bosque nativo, como el que se muesua en la figura.

246
Figura S-15. Sucesión de tcfras, sobre las cuales se ha desarrollado un suelo delgado con propiedades ándicas. En estos suelos. la
retención de agua a 1.500 kPa. en muestras húmedas, eb superior a LOO%. de tal manera que frente a detennínada alteración, tal
como un movimientosísmico el suelo se comporta como un líquido (ti>Cotropia), generando deslizamientos que se veo facilitados
,

por las fuertes pendientes y el contacto discordante con la roca subyacerue.

Fi¡:unt 5-16. Cuando se producen deslizamientos, a causa de la tiJtotropia, la cubterlll vegetal no es capa¿ de sostener el suelo y,
cs1a e a ta7Ón para considerarlO<; como extremadamt:nte susceptibles a procesos erostvos Todos ellos se consideran con Clase
VIl de • 1pacidad de Uso y en casosespeciales en Clase VIII

247
Figura S-17. Perfil de la Sene Pueno Fonck. Entre pre-cordillera de Los Andes y la Depresión Intermedia se han descrito suelos
de colores grises y pardo muy oscuro a negro. Se trata de suelos profundos que pueden Uegar hasta los 2 m anteS de alcanzar el
sustrato. Están fonnados a parur de la meteorización de tefras finas que se ubican en planos de ongen lacustre o aluvial El
horizonte superficial nene un contenido de CO supenor a 6°/o,

Figura S-18. Paisaje de la Serie Puerto Fonck, m las proXlllildades del Lago Puyehue. Se encuentra ocupando posiciones de
terrazas remanentes y Jomajes suaves.

248
Figura 5-19. Perfil de la Serie Osomo. Corresponde al concepto central de un suelo derivado de cenizas volcánicas holocérucas,
esdecir un trumao. La secuencia normal de horizontes diagnósticos e� de un epipedón úmbrieo sobre un horizonte cámhico. el
cual puede presentar msgos de iluviación en forma de cutanes principalmente en canales de raíces.

Figura 5-20. Los suelos de la Serie Osomo ocupan una posición de terrazas remanentes de origen aluvial o fluvioglacial, con
topografia plana a ligeramente ondulada y excep<:ionalmentc de l omajes suaves.

249
F-igura 5-21. Perlli de la Serie Pelchuquín. Son suelos bien drenados, de buena permeabilidad y muy buen arraigamiento basta los
horizontes más profundM. Ademas de las propiedades ándicas, estos suelos presentan un alto connlnído de CO en los horfzomes
superficiales que puede llegar a 12,5%, con un decrecimiento gradual en profundidad.

Figura 5-22. Pai saje de la Serie Pelchuquín. Al igual que los demás Andisols de la Zona, estos suelos ocupan posiciones de
terrazas de origen aluvial o iluvioglacial con topografia dominante plana a ligeramente ondulada.

250
Figura 5-23. Perfil de la Serie Lanco. Estos suelos. moderadamente profundos y delgados, se hao desarrollado por la
sedimentación de cenizas volcánicas sobre terrazas aluviales o planos de depositación Uuvioglaciales,

Figura 5-24. Paisaje de los suelos de la Serie Lanco. Las alturas varían entre los 40 y los 150 msnm y sólo en casos
...
e\Cepcionales pueden llegar a los 200 msnm. La topogra!rn es plana a casi plana (1 a 3%), con permeabilidad moderada y drenaje
moderado.

251
Figura 5-25. Los Ñudis tienen en común, 3demás de Las propiedades ándicas, un drenaje imperfecto que puede llegar, en algunas
Fases, a muy mal drenados. El origen del mal drenaje se encuentnl tanto en la topografía como en la morfología de los suelos.
Generalmente oeupan las posiciones planas o deprimidas del paisaje.

Figura 5-26. Horizonte plácico con límites abruptos entre el suelo y el sustnlto. Frecuente en suelos de la Isla de Chiloé.

252
Figura 5-27. Depositaciones de óxidos de fe diseminados en forma difusa entre el suelo y el sustrato tluvioglacial inferior. El
horizonte plácico puede presentarse en estas fonnas en los sectores próximos a Maullín.

figura 5-28. Horizonte plácico con alto contenido en óxidos de Fe y bajos contenidos de CO. Constituye un impedme
i nto al paso
de raíces y agua.

253
Figura 5-29. Hoñzonte pácico
l muy delgado (en el centro de la fotografla) acompañado de óxjdos de Fe depositados en forma
difusa, tanto hacia arriba como abajo del mencionando horizonte. Esta forma de horizonte plácico es frecuente en algunos sectores
de la Isla de Chi
l oé.

Figura 5-30. Sec.ción delgada de un corte de un horizonte plácico. A: corresponde a un vacío; B: recubrimientos de óxidos de Fe
de color rojo oscuro; más próximos al vacJo constituyen una capa delgada de color amarillo y C: en color negro los materiales
isotrópicos de origen amorfo conjunt.nmente con fragmentos de minerales tales como cuarzo y feldespatos.

254
figura 5-31. Perfil de la Serie Calonje en la Isla Grande de Chiloé. El epipedón tiene un elevado contenido en CO, pero no
alcanza a calificar como rustico. El suelo es delgado y muy delgado con un sustrato de naturaleza fluvioglacial de gravas y arenas
que, en la mayor parte de los casos, forma un duripán o un horizonte plácico {fierrillo) o ambos, el cual no sólo impide el paso del
agua sino también de las raíces.

Figura 5-32. Paisaje de los sectores centrales de la Isla de Cbiloé, asociados a ñadis en las partes depresivas y a trumaos en las
partes más elevadas del relieve.

255
Figura S-33. Perfil de la Serie FrutiUar. El horizonte superficial suele ser un horizorue O, constituldo por un colcll
ón de
Sphagnum, raíces y hojas, y dependiendo de su espesor, puede con�tiruir un epipedón hístico. Su color más frecuente es negro,
i
pero variando entre los matices 5YR y LOYR. En profundidad siempre existe un buen desarrollo del perfil que mplica la
presencia de un horizonte cámhico.

Figura S-34. Paisaje de la Serie Frutillar en las proximidades del pueblo del mismo nombre.

256
F'iguru 5-35. Perfil de la Serie Huiiio-Huiño. Este suelo se ha incluido en un grupo de suelos derivados de cenizas volcánicas
depositlldas sobre planos aluviales, o más preferentemente fluvioglaciales. Sin emt>argo, no alcanzan a cumplir, en su totlllidad,
con 1� propiedades andicas.

Fi¡:uru S-36. Los suelos pertenecientes a la Sene Hu1í'IO-Hu1ño ocupan sectores deprim1dos en el paisaje, con pendientes de O a
1 •icn de forma cóncava. Pueden presentar niveles freáoco� próximos a la superficie la mayor parte del año. SI no están
art 1c1almente drenados.

257
Figura 5-37. Perfil de la Serie Cudico. Son suelos profundos que se han desarrollado a partir de ceni7.as volcánicas antiguas.

..
Con textura superficial franco arcillosa y arcillosa hacia los horizontes más profundos. Los rasgos de iluviación (cutanes) en el
horizonte B, no son prominentes, pero sf lo suficiente para describirlos con claridad.

Figura 5-38. Los suelos pertenecientes a la Serie Cudico se presentan en forma de terrazas disectadas y erosionadas, con
pendientes complejas de 5 a 20% y también en lópógraffa de lomajes y cerros con más de 20% de pendiente. A causa de le. fuerte
erosión a la que están sometidos estos suelos, su profundidad puede variar considerablemente.

258
Figura S-39. Cordillera de la Costa en las proximidades de Carelpamu.

Fi¡:ura S-40. Perfil de la Serie La Pelada. Los suelos descansan dírectamente sobre rocas metamórficas del tipo filitas y
mtcac,quistos, en general, profundamente meteonzadas. La mayoóa de los suelos son delgados a muy delgados debido a la
decapttación sufrida por efecto de la erosión severa.

259
Figura 5-11 . Paisaje de ta Serie La Pelada. A causa de las pendientes y la eKpOtación
l inadecuada de los bosques nativos.. la
erosión se ha calificado de moderada li severa la cual, en algunos suelos, se presenta con cárcavas profundas y frecucotes.
Dominan las pendientes complejas de 20 a 30% y de 30 a 50% y sólo algunas fases son de 8 a 15%, con ero$.i6n de moderada n
severa, por lo cual se les han asignado Clases de Capacidad de Uso VI y Vll.

Figura S-42. Perfil de la Serie Bahía Mansa. Se trata de suelos de texturas finas en los horizontes superficiales y en profundidad,
con un incremento de la fracción arcilla hflcia los horizontes inferiores. Dominan los colores rojizo y pardo rojizo, rojo
amarillento y pardo amarillento oscuro en los matices 2.5YR y 5YR. La mayoría de los suelos presen1a11 gravas de cuarzo y
m1caesqwsto meteorizado a través del perfil.

260
Figura 5-43. Paisaje de la Serie Bahfa Mansa. A causa de las pendienteS) de los se<:lores que ocupan escos suelos, la mayoria de
ellos presentan aptuud forescal.

figura 5-44. Perfil de la Serie Huilma. Estos suelos se ubtcan tanco en la Cordillera de la Costa, con copografia de cerros (más de
JO'. pendience), como en áreas de pre<Ordillera de la Cosca. con ropografla de lomajes de suaves a fuertes (hasta 200/e). Se
m.:uenuan en ahunu que varían entre los 100 msnm hasta los 700 msnm. De acuerdo a sus proptedade> quúnicas )' lisicas se
puede inferir que exisce mfluencia de maceriales volcánicos en su foonae�ón, struact6n que ha stdo sellalada como común para lo;,
"'dos de esta zorca.

26l
CAPÍTUL0 6

Suelos de la Zona Hú meda


(Desde 43° LS hasta 50° LS)

Luzio, W., Seguel, O. Casanova, M. 2009. Suelos de La Zona Húmeda (Desde


43° LS hasta 50° LS). pp: 263-289. ln: Suelos de Chile. (Luzio, W., Editor). Universidad
de Chile.

263
6 . 1 Resella Geomorfológica de la Región

La geomorfología de la XI Región de Aysén está c laramente dominada por dos clases


de procesos, los volcánicos y los glaciales, que se superponen y se asocian
indistintamente, haciendo muy compleja la interpretación de la distribución de los
suelos.

,.
Las formas del paisaje de origen glaciar y sus depósitos más frecuentes son las
morrenas (laterales, de fondo y frontales) y los valles en U, con sus respectivas
hombreras (figuras 6-1 y 6-2, al final del Capítulo). Los depósitos fluvioglaciales tienen
mayor representatividad en el sector norte de la Región de Aysén, lo cual se atribuye a
que la topografía general de la zona es menos abrupta en sectores muy amplios,
probablemente debido a que la acción de los glaciares ha sido más intensa. dejando
amplias áreas de sedimentos de diferente naturaleza. En el sector sur de la Región de
Aysén no se distinguen con claridad los depósitos fluvioglaciales, lo cual se atribuye a

• ..
que la topografía general de la zona es demasiado abrupta, con pendientes que muchas
veces son de 90° y los valles de los ríos se encuentran en cajones estrechos con procesos
de erosión aluvial activos (figuras 6-3 y 6-4, al final del Capítulo). En la Provincia de
Palena, los valles de origen glacial fueron rellenados con diferentes clases de materiales
tales como morrénicos, aluvionales y fluviales. Sobre ellos se depositaron materiales
volcánicos provenientes de los volcanes Michimahuida, Apagado, Hornopirén y
Chaitén, que constituirían los materiales de partida para la mayoría de los suelos del
área (Ahumada et al., 2004). Los suelos más evolucionados se caracterizan por tener un
solum de texturas finas y muy finas y los suelos más jóvenes tienen clases texturales
medias y gruesas (op. cit.).

Las terrazas kame, de origen fluvioglacial, se encuentran muy bien representadas en


las márgenes del Lago General Carrera. Éstas se forman en las zonas marginales de los
glaciares en forma de colinas redondas, estratificadas con guijarros y arena. formando
escalones aterrazados. Estas unidades topográficas, surgidas de aguas de fusión, se
desarrollan en los márgenes de los valles glaciales.

Las formas debidas a la gravedad corresponden a depósitos coluviales, asociados a


fenómenos de deslizamientos a causa de las fuertes pendientes (sobre 60%). Estas
formaciones, cuando son de pequeñas dimensiones, en gran medida a causa de la
estrechez de los valles y a la activa acción fluvial que arrastra todo vestigio de estas
formaciones, carecen de toda utilización agrícola, ganadera o forestal. Aquellos
coluvios de extensiones considerables, en muchos casos están utilizados con actividad
ganadera o forestal. Se considera que en la Provincia de Patena, los suelos ubicados en
posición de cerros escarpados habrían recibido los mayores aportes de cenizas, en
comparación con los sectores propios de los valles, cuyos materiales de relleno serían
principalmente de origen aluvial. Estos últimos habrían generado suelos de escaso
desarrollo a partir de una mezcla de materiales aluviales y volcánicos (Ahumada et al. .

2004).

Las formas debidas a procesos aluviales corresponden principalmente a terrazas, de


magnitud muy variable, generalmente con 1 a 3% y 2 a 5% de pendiente. Algunas son
algo alomadas, en posición baja y otras en posición algo más elevada con sustrato de
gravas redondeadas y facetadas y siempre asociadas a los numerosos ríos de la zona.
Muchos de los suelos que constituyen estas terrazas aluviales están formados a partir de

265
cenizas volcánicas de características muy semejantes a los suelos de las posiciones más
altas, lo que hace presumir que las depositaciones de cenizas volcánicas son
relativamente recientes (Holoceno). En las proximidades de la ciudad de Coyhaique, las
terrazas aluviales pueden alcanzar dimensiones de importancia, tanto por su extensión
como por la calidad de los suelos que las conforman, constituyendo áreas de
potencialidad agrícola o ganadera (Figura 6-5, al fmal del Capitulo).

Los depósitos volcánicos corresponden a materiales finos (cenizas) del tamafio arena,
pero también es posible encontrar de granulometría medía y gruesa (lapilüs de pómez).
Los fragmentos de pómez, la mayoría de ellos meteorizados en grado medio, se
encuentran ampliamente distribuidos en los suelos, ya sean como estratas en

..
discontinuidad litológica, o bien mezclados con la matriz del suelo. Los materiales
volcánicos se han depositado cubriendo diferentes tipos de formaciones, tales como
terrazas aluviales, morrenas. colu\ios y afloramientos rocosos, de tal manera que los
suelos desarrollados a partir de estos materiales derivan de emisiones coetáneas a partir
de los mismos centros volcánicos. Por lo tanto, las tefras han dado origen a suelos
similares, aún cuando el sustrato sobre el cual se han desarrollado puede ser de diferente
naturaleza. De esta manera se mantiene el mismo taxón. especificando en el rango de
variaciones que el suelo se puede encontrar sobre diferentes sustratos. Debido a que los
eventos volcánicos (depositación de las tefras) han sido esporádicos, los suelos
manifiestan una marcada estratificación, de tal manera que sólo algunas capas de
materiales volcánicos de los suelos han evolucionado hacía propiedades ándicas. Por lo
tanto, varios suelos no alcanzan a cumplir con los requerimientos para ser considerados
como Andisols. Esta característica hace una diferencia con los suelos de la X Región de
Los Lagos, donde las tefras han sido de mayor potencia y con materiales de mayor
homogeneidad, tanto en su granulometría como en su composición.

...
El 8 de Agosto de 1991, el Volcán Hudson tuvo una erupción de gran magnitud que
afectó, con la depositación de cenizas y lapillis, (aparentemente de carácter ácido, del
tipo pómez), alrededor de 600.000 hectáreas que estaban cubiertas con bosques y
pastizales. En algunos sectores el depósito de cenizas alcanzó 2 m de altura. En la
actualidad, gran parte de estos depósitos de cenizas y lapillis han sido lavados y
arrastrados hacia los abundantes ríos y quebradas que existen en la zona. Este fenómeno
de erosión hídrica se ha visto favorecido por las fuertes pendientes que dominan en la
zona, además de las lluvias de gran intensidad y frecuencia. Es notable incluso, señalar
que muchos ríos transportan una gran cantidad de sedimentos, fenómeno fácilmente
comprobable a causa de los diferentes colores de las aguas de los ríos. Por estas razones,
al describir los suelos en la actualidad, sólo es posible distinguir la presencia de cenizas
en capas que no tienen más de 1 5 a 20 cm de espesor en Jos horizontes superficiales de
los suelos (Figura 6-6, al final del Capítulo). En el sector de Chile Chico y a causa de la
labranza de aquellos sectores que tienen agricultura intensiva, la ceniza ha sido
incorporada en los horizontes superficiales, formando parte del suelo, sin que presente
evidencias de meteorización. También se le ha descrito formando bolsones
discontinuos y claramente diferenciables del material suelo.

Los sectores de Puyuhuapi, La Junta y Lago Verde, presentan vaJJes muy encajonados,
con escasos y pequeños sectores de terrazas, algunos de Jos cuales están moderadamente
habilitados. Generalmente, el camino va siguiendo los cursos de agua principales, con
pendientes de las laderas superiores a 60% y en muchos casos cercanas a los 90°, con
afloramientos rocosos casi continuos. Cabe señalar que, a pesar de estas pendientes tan

266
fuertes, la mayoría de las laderas se encuentran con abundante vegetación de bosque, lo
que hace presumir que existe suelo, aunque de escasa profundidad, en pequeñas
salientes de la roca. La vegetación dominante es de coigüe (Nothofagus dombeyt), tenga
(Nothofagus pumilio), ñirre (Nothofagus antarctica), tepa (Laurelia philippiana), luma
(Amomyrtus Juma), ciruelillo (Embothrium coccineum), arrayán (Luma apiculata),
ciprés de las guaitecas (Pilgerodendron uviferum) y chilco (Fucsia magallanica) entre
otras.
Los Mallines (Figura 6-7, al final del Capítulo) corresponden a sectores que
generalmente ocupan las posiciones más bajas del relieve }, por lo tanto, tienen
condiciones de drenaje desde imperfecto hasta muy mal drenado. Los suelos que se
encuentran en estas posiciones corresponden a suelos minerales y a suelos orgánicos.
Los suelos minerales presentan una enorme variabilidad estratigráfica, de tal manera
que se hace dificil establecer una secuencia de estratas u horizontes que caracterice, al
menos de una manera general, a estos suelos. En el caso de los Mallines orgánicos, la
variabilidad está relacionada con el contenido y el grado de humificación de los
materiales orgánicos y la profundidad que alcanzan. Se les encuentra en cuencas de

sedimentación lacustre, en terrazas aluviales y en planicies carentes de drenaje natural.


También aparecen asociados a las planicies dejadas por los ríos a causa de las marcadas
meandrizaciones, como ocurre en el Río Cisnes. Finalmente, también se les puede
encontrar en las áreas de quiebre de pendientes fuertes de los cerros con las terrazas
aluviales.
La característica común a todas estas situaciones es la de presentar una saturación con
agua permanente con escasa variación durante las estaciones menos lluviosas del afio.
Su vegetación original corresponde a la de bosque nativo bidromórfíco, asociado en las
áreas más húmedas a ciperáceas y juncáceas. En algunas áreas éstos han sido
habilitados, entendiendo por habilitado la tala de los árboles, pero sin establecer un
sistema de drenaje. Solamente en las cercanías de Puerto Aysén se puede apreciar la
habilitación de un Mallín, con sistema de drenaje. Los Mallines del Río Cisnes están
constituidos por el suelo Queulat, con topografía plana y microrelieve moderado, que
incluyen Jomajes suaves de 2 a 5°1o y que tienen la característica de estar
permanentemente saturados.
Una característica común a la mayoría de los suelos de esta zona corresponde a la
tixotropía. Este fenómeno está asociado a la presencia de geles, en este caso derivados
de los materiales volcánicos (tales como la alófana, la imogolita y la ferrihidrita), cuyo
efecto sobre los suelos hace que éstos cambien su comportamiento de sólido a líquido al
sufrir alguna alteración fisica (como por ejemplo, un movimiento sísmico). Debido a la
presencia de esos minerales de baja cristalinidad, que poseen una gran superficie
específica, los suelos tienen la capacidad de retener una enorme cantidad de agu� la
cual puede llegar a más de 1 00% a PMP, de tal manera que con pendientes sobre 60%,
se pueden producir con facilidad los deslizamientos de estos suelos.
Con el fin de sistematizar y tratar de comprender la distribución de los suelos para una
Zona que posee escasos estudios de suelos y ninguno pedogénico, se propone una
sectorización más bien empírica, pero que responde bastante bien a las propiedades y
características que exhiben los suelos. De esta manera el paisaje edáfico se ha subdivido
en tres sectores, sin que puedan establecerse límites claros y definidos entre ellos. El
primer grupo corresponde a los Andisols, taxonómicamente bien expresados, pero cuyo
267
sustrato puede ser morrénico, fluvioglacial, aluvial e incluso roca. Estos suelos de
... •
origen volcánico se encuentran en lo que se podría denominar el sector central de la
Zona, aproximadamente entre los meridianos 7 1 °45' y 72°30'. Se asume que en toda
esta área los suelos se encuentran bajo un régimen de hLm1edad údico y un régimen de

..
temperatura isomésico; sin embargo no existen datos que puedan corroborar estos
regímenes. A partir del meridiano 71 °45' hacia el este, se observa con claridad un
cambio en el paisaje: desaparecen los bosques de coníferas y latifoliadas y esta
vegetación es reemplazada por una cubierta más o menos densa de coironal. En iguaJ
forma las propiedades de Los suelos cambian, particularmente en lo referente a la
,..
saturación de bases, la que es superior a 50% en todos Jos suelos descritos. En este caso
y también, a causa de la falta de datos fidedignos, se ha asumido que el régimen de

..
humedad de los suelos se aproxima en mejor forma hacia un régimen xérico. También
hacia estas áreas la actividad agrícola es muy diferente a la del sector anterior,
permitiendo cultivos imposibles de desarrollar en el denominado sector central. Un
tercer gmpo corresponde a Los suelos de desarrollo intermedio (presencia de un
...
horizonte cámbico) que se encuentran en terrazas aluviales, o bien, sobre sedimentos

'I
fluvioglaciales, y que no manifiestan propiedades ándicas lo suficientemente bien
expresadas como para ser considerados como Andisols.

6.2 Andisols del Sector Central (entre 7 1 °45'W y 72°30'W


aproximadamente)

Los suelos derivados de cenizas volcánicas que se encuentran en este sector no ocupan •
... ..
necesariamente una única posición en el paisaje, de tal manera que es posible
encontrarlos
A.
en terrazas aluviales de los rios Rosselot, Simpson y Mañihuales. Además en
terrazas :fluvioglaciales, en lomerios de origen morrénico e incluso en posición de cerros
escarpados. Esta variedad de situaciones geomorfológicas hace presumir que las tefras
holocénicas han tenido una gran dispersión, cubriendo extensas áreas de formas y
...
origen diferente. Esto implica, además, que las pendientes que dominan en cada suelo y
sus Fases sean también muy variables. De esta manera, en los suelos en terrazas
aluviales de los ríos ya mencionados, las pendientes pueden variar entre 1 a 3% y 5 a
8%. En los lamerías de morrenas puede ser de 5 a 8% y de 8 a 15% y en las posiciones
de cerros puede ser de 15 a 20% y 30 a 50%.

De acuerdo con lo señalado en el párrafo anterior, es lógico que exista una variabilidad
en los sustratos de cada suelo que, de alguna medida, están asociados a las posiciones y
situación geomorfológica que los suelos ocupan en el paisaje. Así, los suelos que se
encuentran en la posición de terrazas aluviales presentan un sustrato constituido por
gravas redondeadas y faceadas
t con materiales intersticiales del tamaño arena. Los
suelos sobre morrena y terrazas fluvioglaciales tienen un sustrato fonnado por gravas ...
angulares y subangulares mezcladas con arcilla y roca basáltica meteorizada. En
algunos casos los suelos sobre terrazas fluvioglaciales presentan un sustrato constituido
casi exclusivamente por arcilla glacial con clara estratificación. En el caso de los suelos
volcánicos en posición de cerros, el sustrato más w frecuente lo constituye una roca
basáltica con diferentes grados de meteorización. En casos más aislados se ha descrito
una roca metamórfica, también con variable grado de descomposición. La variabilidad
en los sustratos que se han descrito para los suelos queda de manifiesto en la Serie
Queulat, cuyo sustrato es normalmente morrénico, con clastos angulares y subangulares
distribuidos en forma irregular, pero también se le ha descrito sobre afloramientos

268
rocosos. Ocasionalmente se puede presentar sobre sedimentos aluviales en terrazas de
escasa dimensión del Río Cisnes.

Los colores de los horizontes superficiales varían entre el negro (5YR2.5/ l ) y el gris
muy oscuro (7.5YR3/l), en cambio hacia los horizontes inferiores no existe una
tendencia clara hacia algunos colores defmidos, de tal manera que se han descrito
colores pardo oscuro, negro, pardo oliva, gris muy oscuro y rojo oscuro en los matices
1 OYR, 7.5YR. 2.5Y y 2.5YR, respectivamente. Las clase� tcxturales de los horizontes
superficiales son medias y gruesas (franco limosa, franco arenosa y areno francosa) que,
prácticamente como regla general, se hacen más finas hacia los horizontes más
profundos, de tal manera que son frecuentes las clases arcillo limosa y franco arcillo
limosa. Dominan las estructuras de bloques subangulares a través de todos los perfiles.
La mayoría de los suelos descritos son profundos y moderadamente profundos:
solamente la Serie Murta se describió de 67 cm de profundtdad (figuras 6-8 y 6-9, al
final del Capítulo). Todos los suelos se han descrito con una buena penetración radical,
que alcanza normalmente hasta el sustrato.


A causa de la posición y las pendientes en que se encuentran, todos los suelos presentan
un buen drenaje y, sólo localmente, algunas Fases de la Serie Torreones, en las terrazas
del río Sirnpson, se han descrito con drenaje moderado a imperfecto. Una de las
propiedades que caracteriza a estos suelos es su marcada estratificación, donde las
estratas de pómez del tipo lapillis, se intercalan entre las capas de cenizas de colores y
granulometria diversa. Otra propiedad común a la mayoria de estos suelos la constituye
la tixotropía, que no se manifiesta de manera uniforme en todo el peñU. sino que
aparece en algunas capas de cenizas, lo cual facilita que se produzcan deslizamientos
diferenciales que, en su mayoría, han sido de carácter catastrófico. En el caso del suelo
Queulat y en los sectores con pendientes sobre 60% y frecuentes afloramientos rocosos.
el perfil del suelo es delgado a muy delgado (menos de 30 cm de espesor). En las partes
bajas del relieve el suelo es más profundo, pudiendo llegar hasta los 2 m sobre el
sustrato, lo que se atribuye a los fenómenos de cumulización, facilitados por la fuerte
tixotropía (de moderadamente a fuertemente untuoso) que muestra el suelo (Figura 6-
1 O, al final del Capítulo).

Se trata de suelos desaturados en todos los horizontes, con valores extremos de 49% y
1% de SB; sin embargo, los valores más comunes se sitúan bajo 20%. El CO puede
alcanzar valores elevados en los horizontes superficiales ( 1 3%) con un decrecimiento
irregular con la profundidad, lo cual se relaciona con la marcada estratificación que
muestra la mayoría de los suelos. El pH se mantiene en el rango ácido, con valores
extremos de 6,3 y 4,7. Los rasgos redoximórficos están representados principalmente
por segregaciones de Fe, generalmente de color rojo oscuro (2.5YR 3/6) solamente en
algunas de las estratas intercaladas. En el caso de la Serie La Junta, se describieron,
además de las segregaciones de óxidos de hierro de color pardo rojizo (SYR 4/4) (20%),
acumulaciones de materia orgánica de color negro ( 1 OYR2.5/l) presumiblemente
translocada, lo cual hace suponer procesos de podsolización débiles.

A causa de las pendientes, la estratificación y Jos fenómenos de tixotropía frecuentes en


estos suelos, las Clases de Capacidad de Uso que dominan son las Clases VI y Vll, y en
casos especiales VTTT. Los suelos derivados de cenizas volcánicas en posición de
terrazas aluviales presentan mejor aptitud por su menor pendiente, adecuada
profundidad y buenas condiciones de drenaje, de tal manera que son frecuentes las

269
Fases con Clase l l y l l l de Capacidad de Uso. Taxonómicamente el Gran Grupo que
domina es Hapludand (Serie PoUux, figuras 6 - 1 1 y 6-12, a l final del Capítulo) y en
menor proporción Fulvudand. con los Sub Grupos Typic, Acrudoxic y Thaptic. En los
Cuadros 6-1 y 6-2 se presentan las propiedades químicas y fisicas de pedones
representativos de las Series Queulat (Eutric Pachic Fulvudand) y Mañihuales (Thaptic
Hapludand) respeclivameote (figuras 6-13, 6-14, al final del Capitulo).

Cuadro 6-1. Propiedades de la Serie Queulat (CIREN. 2005b)

Profundidad cm 0-17 1 7 - 36 36 - 68 68- 100


Distnbución de panículas por tamaño(¾) A, AB B, B,
2-0.05 75.5 8 1 ,7 76,1 81.7
0.05-0,002 14,6 1 1 .4 17,1 1 1.4
< 0,002 9,9 6,9 6,8 6,9
Clase textura! Fa af af aF
Denstdad aparente (Mg 0,87 0,86 0,95 0.98
Carbono orgánico (%) 12,88 8,99 9.34 7,77
pH.�,,. ( 1 : 1 ) 4,69 5,01 5,07 5,20
Retención de P (%) 98,0 99,0 99,0 99,0
Ca 0,41 0.51 0,49 0,47
Cationes extraíbles Mg 0,23 0.16 0,15 0.13
1
(cmol.kg- ) K 0,17 0.07 0,05 0,06
Na 0.21 O,Q7 0.06 0,03
º
Suma de ba!>es (cmoJ.,kg ) 1 ,02 0.81 0, 75 0,69
�...C'Il 1,39 0,36 0,14 0,07
Acidez a pH 8.2 (crnol.kg-1) 86.9 90,9 93,4 89,0
C!C a pll 7,0 (cmo�kg'1 ) 5 1 .4 52,8 49,2 48,4
CIC por suma (cmol.kg-1) 87,9 91,7 94,2 89,7
CICE (cmol.kg'1 ) 2,4 1 1,17 0,89 0,76
Densidad óptica DOEO 1,35 L.24 1,11 0,98
Si.,, 0,25 0,95 1,78 UB
A I 0 , + Yl f'e 0x(%) 4,51 5,52 7,50 8,32
� - Olsen (mg kg'1) 3,0 1,0 1,0 1,0
lndtce melánico 2.50 2,45 2,50 2.52
Saturación básica a pH 7.0 (%) 2,0 2,0 2,0 1,0
Saturac1ón básica r suma % 1.0 1.0 1,0 1,0

270
Cuadro 6-2. Propiedades de la Serie Mai\ihuales(CIREN. 2005b)

Prof�tndldad (cm) 0-4 4-8 8 - 13 1 3 - 2J 2 1 - 38 38 - 59 59-77 77 -100


o A, A21 A¡¡ 2C 38, 3B1 41!,
Distribución de 2-0,05 58,2 57,4 59,2 60,9 81.0 71,1 60.2 58,2
panlculas por 0,05-0.002 31,1 32,7 29,4 30,0 12.8 24.2 31,1 31,9
tamaño(%) < 0.002 10,7 99 1 1 ,5 9,1 6.1 4,7 8.7 9.9
Clase textura! Fa Fa Fa Fa aF Fa Fa Fa
Densidad aparente (Mg m· ) 0.72 0,7R 0,79 0,87 1 .03 0,78 0,69 0.72
Carbono orgánico (%) 8,47 8,29 8.53 8,87 1 ,45 3.5-t 5.28 4,18
pH11., (1 : 1 ) 6,04 5,98 5,82 5,27 5,76 5,73 5,62 5,82
Retención de P (% 82 89 97 91 80 98 98 98
Ca 9,14 6,89 3,39 2,02 0,65 0,95 1,57 1,10
Cationes
Mg 2,07 1,58 0,79 0,46 0,10 0,1 5 0,21 0,18
extraíb1es
K 0.38 0,25 0.19 0,18 0,03 0,03 0.02 0,03
(cmo1c kg'1)
�a 0.22 0, 15 0.13 O,Q7 0,03 0.09 0.10 0.10
Suma de bases (cmol, kg·) 11.81 8,87 4,5 2,73 0,81 1.22 1.90 1,41
A�KCl) 0,04 0,04 0,09 0,72 0.14 0,02 0.02 0,01
Acidez a pH 8,2 34,4 41,4 84,1 60,9 1 7,2 41,9 75.9 64,6
C1C a pH 7,0 (cmo1c kg'1) 32,8 29.3 33,7 29,0 7,8 22,0 28,2 3!,3
CIC por suma (cmo1c kg'1) 46.2 50.3 88,6 63,6 18,1 43,1 77,'d 66,0
ClCE (cmolckg·1) 1 1 .8 8,9 4.6 3,5 1.0 1,2 1.9 1 .4
Densidad óptica DOEO 0.36 0,43 0.65 0.70 0.30 0,46 0,5 1 0.44
Si," 0,52 0,50 0.99 0,18 0,42 1,-*4 1.32 1,41
Al.,.+ � Fe(U (%) 2,27 2,45 4,47 1,92 1,53 4.54 4,67 5,03
P - Olsen (mg kg'1) 13,0 5,0 8,0 14,0 5,0 5,0 2,0 2,0
lndice melánico 2,17 2,13 2,17 2,10 2,44 2,28 1,76 2 ,35
Saturación básica a pH 7,0 (%) 36,0 30,0 1 3,0 9,0 10,0 6.0 7.0 5,0
Saturación básica por su a (%) 26,0 18.0 5,0 4,0 4,0 3,0 2,0 2,0

6.3 Suelos con alta saturación de bases (desde 7 1 °45' hacia el este)

Aun cuando no se tienen datos en detalle para los regí.menes de humedad y temperatura
de los suelos de este sector, se ha asumido que ellos presentan una condición próxima a
un régimen de humedad xérico y de temperatura térmico. Esta presunción se ha basado,
además de las condiciones agrícolas muy contrastantes con las condiciones de otros
sectores de la Zona, especialmente en el resultado de los análisis químicos. El dato más
significativo está relacionado con la SB del complejo de intercambio que, para estos
suelos, se encuentra siempre sobre 50%, a través de todo el perfil; en contraste con los
otros suelos de la Región, cuya SB normalmente se encuentra bajo 30% y muy
frecuentemente bajo l 0%.

La mayoría de los suelos de este sector se presenta en posición de terrazas lacustres,


planicies de origen glacial, valles glaciales con fondos morrénicos y en áreas claramente
de origen aluvial. Estas áreas de influencia aluvial son las que presentan las pendientes
más suaves, siendo frecuentes los suelos planos y casi planos (O a 1 % y l a 3%) hasta
suavemente ondulados (5 a 8%). En el caso de los suelos que se encuentran en planicies
de origen glacial y fondos morrénicos, el relieve es más acentuado, de tal manera que
dominan las pendientes complejas desde suavemente ondulada (5 a 8%) basta
fuertemente ondulada ( 15 a 20%).

Los suelos de la Serie La Estancia (figuras 6-15 y 6-l6. al fmaJ del Capítulo) merecen
una consideración aparte, a causa de sus características paniculares y muy claramente
definidas. Su sustrato está constituido por gravas angulares finas, medias y gruesas. El

271
paisaJe e:.ta dominado por procesos glaciales y postglaciales. El suelo ha evolucionado
en una amplia plan1C1e, con pendientes dominantes entre 2 y 5%. con bloques erráticos
comunes Esta planicie se encuentra Jalonada por morrenas laterales de orientación
dominante este-oeste, que se adosan a cordones montañosos de orientación similar. La
planicie se encuentra interrumpida hacia el oeste por una morrena terminal (Loma
4 tra\csada) que habría actuado como un verdadero tapón a los escurrimientos de las
aguas, una vez que comenzaron los procesos de fusión glacial. De esta forma se
generaron las condiciones adecuadas para la formación de una cuenca lacustre, cuyo
drenaJe fue posible a través de una estrecha garganta que labró el Río Cisnes, en el
costado sur de la Loma Atrnvesada.

Posteriormente. a causa de las condtctones climáticas más bien xéricas (entre 300 y 500
mm de precipitación anual, concentrados en los meses de invierno) que dominan en toda
la región, las condiciones lacustres del área se habrían ido transformado en condiciones
de pantano o de semipantano, donde se depositaron sedimentos fmos, tales como limos
y arcillas. En esta amplia planicie quedan vestigios de estos procesos, representados por
pequeilas lagunas que aún persisten en algunas depresiones y cuyo proceso de
desaparición es evidente, a causa de las marcas dejadas por los niveles superiores del
agua. Es muy probable que estos procesos lacustres, semilacustres, pantanosos y
semipantanosos se hayan desarrollado sobre la morrena de fondo, ya que el sustrato
del suelo está constituido por gravas angulares y subangulares abundantes sin
orientación definida. L.as etapas de pantano o de semipantano, como procesos de
formación del suelo, quedan en evidencia a través de los rasgos redoximórficos
comunes, sean ellos empobrecimientos (matriz reducida) y enriquecimientos
(acumulaciones de Fe). finalmente, cabe señalar que se describieron fragmentos de
vidrio volcánico a partir del horizonte A2. lo cual no es de extrañar, debido a la intensa
actividad volcánica holocénica evidenciada en toda la Zona. Los vidrios volcánkos se
encuentran, en varios sectores, mezclados con los sedimentos lacustres o semilacustres.

Los suelos pertenecientes a este grupo son moderadamente profundos y profundos


(entre 50 cm y 108 cm) sobre un sustrato que puede ser variable: sucesión de estratas de
arenas intercaladas con capas de clases texturales más finas, tales como franco arenosa,
gravas angulares con material grueso intersticia l y arcillas glaciales. Los colores de los
horizontes superficiales se mantienen en el pardo oscuro, pardo grisáceo oscuro, negro y
solamente se ha reportado un caso de color pardo rojizo oscuro (Serie Valle de
Cbacabuco, figuras 6-17 y 6-18, al final del Capítulo). Generalmente el valor (Munsell)
aumenta hacia ... los horizontes más profundos, determinando colores más claros. Tal
como se podría esperar, tratándose de suelos de origen sedimentario, las clases
texturales son muy variables, tanto para los suelos de origen aluvial como para aquellos
de origen glacial; sin embargo, se ha podido apreciar que existe una cierta uniformidad
textura! dentro de cada perfiL Así, un suelo que tiene una clase textura! arcillosa en
superficie cambia a franco limosa en el horizonte más profundo (Serie Chile Chico); en
cambio otro suelo que tiene una clase textural franco arenosa en superficie, cambia a
areno francosa en el horizonte más profundo (Serie Fachinal, figuras 6-19 y 6-20, al
fmal del capítulo). Tampoco existe una tendencia a que los horizontes más profundos
posean clases texturales más gruesas, pues en la Serie La Estancia el horizonte
superficial es franco arcillo arenoso y el horizonte más profundo es arcillo limoso. Se
trata de suelos bien drenados, con la excepción de algunas Fases de los suelos de origen
aluvial (Series Chile Chico y Fachinal) que poseen drenaje imperfecto.Todos presentan
buena penetración radical hasta la profundidad de descripción.

272
En casi todos Jos suelos descritos la SB se encuentra sobre 85%. Solamente en la Serie
Puesto Viejo (figuras 6-21 y 6-22, al final del Capítulo) es de 67%. El pH es más ácido
en los horizontes superficiales, con valores entre 6,3 y 6,8; en cambio en Jos horizontes
más profundos se hace más básico, alcanzando valores de 8,3 y 8.6. Las Fases con
drenaje imperfecto manifiestan rasgos redoximórlicos. casi desde la superficie, de
comunes a abundantes, en particular en las Series Chile Chico y Fachinal y en algunas
Fases de La Serie La Estancia. Son frecuentes las cstratas intercaladas, ya sea de vidrios
volcánicos o de cenizas volcánicas. Solamente en la Serie Fachinal se han descrito
filamentos de carbonatos bajo los 13 cm de profundidad.

La aptitud agricola de estos suelos es más bien limitada: a la mayoria de las Fases se les
ha asignado Clases entre rv y VIl de Capacidad de Uso. Solamente algunas de las Fases
de las Series Chile Chico y Fachinal fueron descritas con Clase Ul de Capacidad de
Uso. Desde el punto de vista taxonómico, la mayoría de los suelos califican como
Haploxeroll y Palexeroll y solamente la Serie Puesto Viejo se clasificó como
Haploxerept. En el Cuadro 6-3 se presentan las propiedades químicas y físicas de la
Serie La Estancia (Typic Palexeroll) considerada representativa de los suelos de este
grupo.

Cuadro 6-3. Propiedades fisicas. qUJmicas y fisJ<:o-quim•cas de un perfil de la Sene La Estancia


(CIREN. 2005b)

Profundidad (cm) o - 12 1 2 - 29 29 - 74 74 - lOS


A A B BC
Distribución de 2-0,05 47,2 41,7 0.4 0.9
panículas por tamai\o 0,05-0.002 31.7 3 1.8 29.4 29.3
%) < 0.002 21.1 26,5 70,2 69.8
Clase textura! F F A A
Densidad aparente (Mg m· ) 1,17 1.15 1,02 1.06
Carbono orgánico (%) 1,91 1 .45 0,75 0.41
pH.,.. { 1: 1) 6,46 6,50 7,56 8.33
Retenc16n de P 19 24 31 29
Ca 7,26 8.48 16,31 1 5,69
Cationes extraíbles Mg 3,04 3.72 9.05 8,71
(cmol.kg.1) K 0,60 0.31 0. 19 0, 13
Na 0,10 0,22 0.90 0.91
Suma de bases (cmol, k 1 1 .00 12.73 26,45 25.44
AI,Kcn 0,00 0,0 0,00 0.00
Acidez a pH 8.2 29.1 27.1 42.4 26.4
CIC a pH 7.0 (cmolc kg'1� 12,2 19,1 33.8 26.8
CIC por suma (cmol0 kg' ) 40,1 39.8 68,9 51,9
CICE (cmolckg'1) 11,0 1 2,7 26,5 25.4

Densidad óptica DOEO 0,07 0,09 0.05 0.03
Si,.. 0.05 0,0--t 0,04 0.05
Al0,+ Yt Fe0x(%) 0.28 0,35 0,22 0.20
� - Olsen (mg kg'1) 12,0 3,0 l.O 2,0
lndice melánico 1,65 1 ,66 1 ,70 2,33
Saturación básica a pH 7,0 (%) 90.0 67,0 78,0 95.0
Saturación básica or suma % 2 7,0 32,0 38,0 49,0

273
6.4 Suelos en posición de terrazas con horizonte cámbico

Se ha estimado que se puede separar a estos suelos como un grupo aparte, en función de
su grado de evolución y de la posición que ocupan en el paisaje. Se trata de suelos que
no han desarrollado propiedades ánd1cas, de tal manera que no se pueden considerar
Andisols, la SB es generalmente inferior a 50% y se distribuyen en la zona de régimen
údico. Se encuentran en posición de lomajes suaves, terrazas aluviales recientes y
remanentes cuyas pendientes más frecuentes son de 5 a 8%, de 8 a 15% y, en el caso de
los lomajes más pronunciados. pueden alcanzar pendientes de hasta 20 a 30%. En
muchos casos se hace dificil identificar y separar los procesos que han dado origen a
estos suelos debido a la superposición de ellos, tanto en el tiempo como en el paisaje.
Así, muchas de las terrazas que se asocian a estos suelos se encuentran en los valles de
los ríos, sin embargo el sustrato está constituido por gravas angulares o subaogulares
que más bien corresponden a un tipo de transporte diferente. En otros casos los
sedimentos fluvioglaciaJes son claramente identificables, mientras que en otros sectores,
el sustrato está constituido por arcillas glaciales.

Los horizontes superficiales tienen colores que se mantienen en el pardo oscuro, pardo
grisáceo muy oscuro y negro, en los matices IOYR y 7.5YR. Los horizontes más
profundos en contacto con el sustrato, generalmente presentan un valor (Munsell) más
alto, llegando a un pardo amarillento ( 1 0YR5/4) en el caso del suelo Coyhaique. Una
característica que es común a todos estos suelos lo constituye el incremento de la
fracción fina (arcilla) hacia los horizontes más profundos. De esta manera, las clases
texturales de los epipedones varian entre franco arenosa y areno francosa, en cambio en
los horizontes más profundos las clases que dominan son franco arcillo limosa, franco
arcillo arenosa y arcillo limosa. La estructura de bloques subangulares finos y medios es
muy uniforme en todos los horizontes, incluyendo los epipedones. La profundidad hasta
el sustrato es variable desde 80 cm, 1 1 O cm y hasta 160 cm. Las condiciones texturales
y estructurales permiten una adecuada penetración de las raíces, de tal manera que las
raíces finas se han descrito hasta los horizontes más profundos (Figuras 6-23 y 6-24, al
final del Capítulo).

Se trata de suelos bien drenados, en los cuales se han descrito algunos rasgos
redoximórficos escasos, generalmente bajo los 100 cm. La mayoría de los perfiles son
estratificados y, en algunos de ellos, se han identificado estratas de pómez intercaladas,
fenómeno que es frecuente en la mayoría de los suelos de la Zona. La SB es variable,
aún cuando siempre se mantiene en valores medios a bajos, es decir, entre 6 1 % y 6%.
La estratificación de estos suelos queda en evidencia con la distribución irregular del
CO con la profundidad, tal como ocurre en la Serie Simpson (Cuadro 6-5). El pH se
mantiene en valores entre ligeramente ácido a neutro, esto es, entre 6,0 y 7,O.

La aptitud agrícola de estos suelos es limitada, tanto por la estratificación de ellos como
por las �ndiences en que se encuentran. Por esta razón son frecuentes las Fases de las
-----6eric�á" las cuales se les hao asignado Clases de Capacidad de Uso IV, Vl y VII_
Solamente algunas Fases de terrazas con influencia aluvial, las cuales presentan
menores pendientes, tienen Clase lll. Todos los suelos que se han utilizado para esta
discusión, tales como las Series Cochrane (figuras 6-25 y 6-26, al final del Capítulo),
Coyhaique, Ñirehuao (figuras 6-27 y 6-28. al final del Capitulo) y Simpson, han sido
clasificados en el Gran Grupo Dystrudept, principalmente en los SubGrupos Andic y
Hurnic. En los Cuadros 6-4 y 6-5 se presentan las propiedades quimicas y físicas de las

274
Series Ñirehuao (Humic Dystrudept) y Simpson (Andic Dystrudept) consideradas
representativas de los suelos de este grupo.

Cuadro 6-4. Propiedades fisicas, qui icas y físico-químicas de un perfil de la Serie Ñirehuao (CIREN, 2005b)

Profundidad cm. 0 - 20 20 - 32 32 - 43 43 - 5 1 5 1 -80


A A B B B
Distribución de 2..(),05 70,7 63,1 57,2 54,4 54,8
partículas por ta �o 0.05-0,002 21,5 25,7 27,0 23,5 21.6
(%) < 0,002 7,9 11,3 15,8 22.2 23,6
Clase textura! Fa Fa Fa FAa FAa
Densidad aparente (Mg m· ) 1,07 1,16 1,29 1,11 1,23
Carbono orgánico (%) 5,39 2,84 1,62 0.87 0,70
pH....- (1:1) 6,13 6.17 6.20 6.16 6,35
Retención de P % 48,0 51,0 56,0 48,0 34.0
Ca 1 1,80 6.69 5.16 4,80 4,95
Cationes extraibles Mg 2,04 1,17 1,32 1,78 1,88
(cmoi. kg-1) K 0,51 0,59 0,72 0,65 0,32
Na 0,09 0,08 0,16 0,20 0,23
Suma de bases 14,44 8,53 7,36 7,43 7,38
A�KCJ) 0,02 0,03 0.01 0,03 0,03
Acidez a pH 8,2 36.4 43,9 34,7 40,0 26,7
CIC a pH 7,0 (cmolckg-1) 25,1 18,8 18,5 13,1 13,8
CIC por suma (cmolckg-1) 50,9 52.4 42,1 47,4 34,0
CICE (cmolckg'1) 14,5 8,6 7,4 7,5 7,4
Densidad óptica DOEO 0,40 0,22 O.l S 0.13 0,11
Si... 0,16 0,29 0,27 0,18 0,04
Alo,.+ !12 feox(%) 1,09 1,30 1.18 0,97 0,51
f - Olsen (mg kg'1) 8,0 4.0 3,0 4,0 2,0
lndice melánico 1,81 1,68 1,65 1,66 1,69
Saturación básica a pH 7,0 (%) 57,0 45,0 40,0 57,0 54,0
Saturación básica suma % 28 O 16,0 17.0 16 O 22,0

275
Cuadro 6-5. Proptedades fisicas, quimicas y fisico-químic� de un perfil de la Serie Simpson
(ClREN. 2005b)

Profundidad cm o -10 10-31 3 1 - 68 68-82 82- JlO


Dastribución de partlculas por Lru:nafto (%) A, 81 B,
2-0,05 48,5 56 9
. 45,6 50,4 45,3
0,05-0.002 47.1 33.4 42.7 39,7 �6.4
< 0.002 4,4 9.7 11,7 9,9 8.3
Clase textural Fa Fa F F Fa
Denstdad aparente (Mg m 0.72 0,88 0,79 0,84 0."'3
Retención de agua 33 kPa (%) (Suelo seco) 31.8 30,8 37.1 29 4 , 36.2
Retención de agua J .500 kPa (%) (Suelo seco) 19,1 17.3 24,4 16.6 21.5
Retención de agua 1 .500 kPa (%) (Suelo húmedo) 17.7 13.3 23.6 20,2 27.1
Carbono orgánico (%) 4,29 3,54 4,87 2 26
, 3,25
pll,.... ( l : l ) 6.49 6,29 6,21 6,48 6.46
Rclcncíón de P (%) 72.0 78,0 81,0 89,0 88.0
Cationes cxtratble:.
Ca 11.3 5,14 6.39 4,29 5.44
Mg 3.22 1,61 1.62 1,11 1,86
K 1,42 0,88 0.50 0.40 0.27
(cmolJkg)
Na 004 O 03 0,09 0,1-1 0,23
Suma de bases (cmol+lkg) 15,71 7,66 8,60 5,94 7,80
Al KCI 0.02 0,01 0,02 0,00 0,00
Acidez a pH 8.2 25 0
, 1 1.8 3 1 .6 25.4 30,8
CIC a pll 7.0 32,6 25,1 30,6 24.5 31.2
CIC por suma 40.8 1 9,5 40,2 31,4 38,6
CICE (CIC Efectiva) 15,7 7,7 8.6 5,9 7,8
Densidad óptica DOEO 0,34 0,30 0,35 0,23 0,30
Stu,. 0,88 0,90 0,78 1,15 1.11
Alux + Y. Fe"' 2.4 1 2,53 2.70 2,75 2,93
P-Oisen (mg kg'1) 5,0 2.0
Índace me1áruco 2,04 1,75 1,85 2,33 1.94
Saturación de Al (0to) 0.1 0.1 0,2 0.0 0,0
Saruractón basica a pll 7,0 (%) 48.0 31,0 28,0 24,0 25,0
Saruración básica r suma (%) 39.0 39,0 21,0 19,0 20,0

276
Fleura 6-1. Sector de Cerro Castillo y Río !bállez. El paisaje de la Región de Ays�n está dominado por dos clases de
procesos. los volcánicos y los glaciales, que se superponen y se asocian indistintamente. haciendo muy compleja la
mterpretación de la distribución de los suelos.

Fleura 6-2. Valle de origen glacial, en las proximidades de Villa Ortega. En el costado derecho se aprecia una
hombrera.

277
Figura 6-3 Los proceso:. de erosión aluvtal activos influ)Cn en que los valles de los ríos se encuentren en cajones
esrrechos y profundos.

Figura 64 Rlo Bak.er en las proximidades de la Hactenda Chacabuco. La tnlensa erosión aluvial del río ha labrado
valles estrechos y profundo� Se consideraque estos proccsOl> de erosión aluvial sonactivos en la actualidad.

278
Figura �5. En las proximidades de la ciudad de Coyhaique. las terrazas aluv1ales pueden alcanzar dimensiones de
importancia, tanto por su extensión como por la calidad de los suel� que las conforman, constituyendo áreas de
potencialidad agrícola o ganadera.

Figura 6-6. Capa de cenizas volcámcas generadas por la erupción del volcán Hudson. En la actualidad gran parte de
los materiales (cenizas y lapillis) han sido lavados y arrastrados hacia los abundantes rlos y quebradas que existen en
la zona, de tal forma que las capas de cenizas no tienen más de J 5 a 20 cm de espesor en los horizontessuperfictules
de los suelos.

279
figura 6-7. Lo� Mallines corresponden :1 sectores que generalmemc ocupan las posic1ones más bajas del relieve y.
por lo lllllto. uenen condiciones de drenaje desde imperfecto hasta muy mal drenado. Los suelos, ya sean minerales u
orgán1cos. se les encuentra en cuencas de sedimentaciÓn lacusrre. en terr323s aluv1alcs y en planicies carentes de
drenaje natural.

Figura 6-8. Perfil de la Se.rie Murta. Estos suelos se han desarrollado sobre morrenas y terrazas fluvioglaciales.
Tienen un sustrato formado por gravas angulares y subangulares mezcladas con arcilla y roca basáltica meteorizada.

280
figura 6-9. Paisaje de la Serie Murta, en las proximidade� del Lago General Carrera.

Figura 6-10. Perfil de la Serie Queulat. Una de las propiedades que caractcria a estos suelos es su marcada
e�tratificación. donde Las estratas de pómez del tipo lapillis. se mtercalan entre las capas de cenizas de colores y
granulometria diversa. Otra propiedad, común a la mayoría de estos suelos, la constituye la tixotropía que no se
...
manifiesta de manera uniforme en todo el perfil, sino que aparece en algunas capas de cenizas, lo cual facilita que se
produzcan deslizamientos diferenciales que, en su mayoría, hao stdo de car:l.cter catastrófico.

281
fígura 6-11 Perfil de la Serie PoUux. Se trata de suelos con buena penetración radical que alcanza normalmente
hasta el sustrato. Una de las propiedades que caracteri1a a estos suelos es su marcada estratificación, donde las
estrams de pómez del tipa lapillis. se intercalan entre las capas de cenizas de colores y granulometria diversa.

Figura 6-12. Patsaje de la Serie PoUux. A causa de la posición y las pendientes en que se encuentran los suelos, eUos
preseman un buen drenaje y sólo localmente, algunas Fases se han descrito con drenaje moderado a m i peñecto. En
general estos suclos derivados de cenizas volcárucas presentan buena aptitud para su uso agrfcola.

282
..
Figura 6-13. Perfil de la Serie Mañihuales. Los suelos derivados de cenizas volcánicas se caracterizan por una
marcada estratificación, donde las estratas de pómez del tipo lapillis, se intercalan entre las capas de cenizas de
colores y granulometria diversa. Algunas capas de estos suelos son tixotrópicas, lo cual facilita que se produzcan
deslizamientos diferenciales.

Figura 6-14. Paisaje de la Serie Mañihuales. Los suelos derivados de cenizas volcánicas en posición de terrazas
aluviales presentan mejor aptitud por su menor pendiente, adecuada profundidad y buenas condiciones de drenaje, de
tal manera que son frecuentes las Fases con Clase Il y m de Capacidad de Uso.

283
Figura 6-15. P�rfil de la Serie La Estanc1a. Su sustrato e.tá consutoido por grava.� angulares fmas. medias y gruesas.
El paisaJe estli dominado por procesos glac1ales y postglacaales, con bloques erráticos comunCli.

Figura 6-16. Paasaje de la Serie La Estancia. El suelo ha evolucionado en una amplia plarucae dominada por proceso�
glacaal�� y postglaciales, con bloques erráticos comunes y pendientes entre 2 y 5%. Esta planicie se encuentra
jalonada por morrenas laterales de orientacaón dominante este-oeste, que se adosan a cordones mootai!osos de
orientación similar. La planicie se encuentra interrumpida bacía el oeste por unu morrena tcrmínal ("Loma
Atravesada") que babrín actuado como un verdadero tapón a los escurrimientos de las agua!. una ve1. que comenzaron
los procesos de fusión glacial.

284
figura 6-17. Perfil de la Serie Valle de Chacabuco. Los suelos penenecitnto a esta Serie son moderadamente
profundos y profundos, sobre un sustrato que puede ser variable: soces1ón de e"tratas de arenas intercaladas con capas
de clases textorales más finas. tales como franco arenosa, gravas angulares con matmal grueso intersticial y arcillas
glaciales. Los colores de los horizontes superficiales se mantienen en el pardo oscuro, pardo grisáceo oscuro y negro.
Ocneralmeote el valor (Munsell) aumenta hacia los horizontes más profundos. determinando colores más claros.

Figura 6-18. Paisaje de la Serie Valle de Cbacabuco. Ocupa todo el fondo del Valle de Chacabuco en posición de
terrazas de origen glacial. Las pendientes pueden variar entre 2 y 5%. En los terrenos más escarpados puede llegar
basta 20"/o

285
Figura 6-19. Perfil de la Serie Fachinal. Los suelos de este sector son moderadamente profundos y profundos (entre
50 cm y 108 cm) sobre un sustrato que puede ser variable: sucesión de estratas de arenas intercaladas con capas de
clases texturales más finas tales como franco arenosa, gravas angula(es con material grueso intersticial y arcillas
glaciales.


Figura 6-20. Paisaje de la Serie Fachinal. La aptitud agrícola de la mayoría de los suelos de este sector es limitada. A
la mayorla de las Fases se les ha asignado Clases entre IV y VIl d.e Capacidad de Uso. Solamente algunas Fases de
las Sedes Chile Chico y Fachinal fueron descritas con Clase m.

286
Figura 6-21. Perfil de ln Serie Puesto Viejo. Se trata de un Mullo sedimentario, influenciado por eventos glacio­
lluviales.

Figura 6-22. Paisaje de In Serie Puesto Viejo. Las características de la vegetación evidencian una condrción de mayor
andez que en los <ectore� más centrales de la Zona.

287
francosa, en cambio en los horizontes más pofundos
r
"
Figura 6-23. Perfil de la Serie Símpson. Las ala�es texturales de los epipedones varían entre franco arenosa y areno
las clases que dominan son franco arcillo limosa, franco arcillo
arenosa y arcillo limosa.

Figura 6-24. Paisaje de la Serie Simpson. Se encuentra en posición de lomajes suaves, en tcmzas aluviale
s
recientes y remanentes, cuyas pendiemes más frecuentes son de 5 a 8% y de 8 a 1 5%.

288
Figura6-25. Perfil de la Serie Cochrane Se tral.a de suelos bten dn.nado:. en los cuales �e han descrito algunos
rasgos r�do¡um6rticos escasos y generalmente bajo los 100 cm. La mayoría de los perfiles son cstratjficados y. en
algunos de ellos, se han identificado c�lr.ltas de pómez intercaladas.

Figura 6-26. Pai�je de la Serie Cochnme. La aptitud agrícola de C>tos suelo, es limt!ada, l.anto por la estratificación
de ellos asi como por las penruentes en que se encuentran. Por esta I'IUÓD son frecuente" las Clase\ IV. V1 )' Vll de
Capacidad de Uso.

289
Figura 6-27. Perfil de la Serie ffirehuao. Muchas de las terrazas que se asocian n e;tos suelos se encuem:ran en los
valles de los ríos, sin embargo el sustrato está constituido por gravas angulares o suhangulares que más bien
corresponden a un tipo de transporte diferente. En otros casos los sedimentos lluvloglacialcs son claramente
identiiícabh:s y, en otros, el sustrato está constituido por arcillas glaciales.

figura 6-28. Paisaje de la Serie Ñirehuao. Se presenta ocupando terraza.� remanentes, principalmente de origen
fluvioglaciaL

290
CAPÍTUL0 7
Suelos de la Zona de Maeallanes
(Desde 50°LS hasta 55°LS)

Luzio, W., Casanova, M. Seguel, O. 2009. Suelos de la Zona de Magallanes


(Desde 50° LS hasta 55° LS). pp: 291- 306. in: Suelos de Chile. (Luzio, W., Editor).
Universidad de Chile.

291
7 . 1 Antecedentes Generales

Desde el punto de vista fisiográfico, tradicionalmente, en esta zona se han identificado


tres entidades relevantes: La Cordillera Magallánica, la Precordillera Magallánica y la
Pampa.

La Cordillera Magallánica está constituida por un batolito granítico como basamento


cristalino, además de rocas efusivas de diferentes edades. Este macizo se levanta con un
aspecto de muralla, cuyas máximas alturas sobrepasan los 3.000 msnm. (figura 7-1, al
final del Capítulo). Petrográficamente dominan los esquistos, filitas y gneisses del
Paleozoico Inferior o del Precámbrico. El relieve actual está completamente
influenciado por la acción glacial cuaternaria (IREN, 1967).

La Precordillera Magallánica posee un relieve más suave que la Cordillera y está


constituida por rocas sedimentarias y metamórficas, tales como areniscas y pizarras.
atribuidas al Cretáceo y al Terciario. También se han descrito materiales volcánicos en

contacto con la Cordillera Magallánica. Hacia el este el relieve se suaviza,
constituyendo un paisaje ligeramente ondulado a plano. También en esta zona se han
descrito paisajes de mesas, mesetas y cuestas (IREN, 1967).

La denominada Pampa se extiende desde la Precordillera hacia el Océano Atlántico, de


relieve plano y cuyo basamento está conformado por sedimentos terciarios (areniscas y
arcillas) sobre los cuales se han depositado los rellenos glaciales y fluvioglaciales
cuaternarios.

Bentley y McCulloch (2005) han propuesto un bosquejo de la geología de Magallanes


(Figura 7-2), donde muestran los principales materiales del basamento rocoso.

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l'igura 7-2. Geología generalizada de la zona (adaptada de Bentley y McCulloch, 2005).

293
Del estudio realizado por Díaz et al., ( 1959-1 960) en un reconocimiento de suelos
,.
generalizado de la Región, que abarcó 2.505.000 ha de un total de 13.542.000 ha, se

..
pueden extraer algunos lineamientos ge.ológicos generales. Estos autores (op. cit)
sefialan que durante el Cretáceo Inferior, el mar invadió gradualmente e l continente,

.
aproximadamente desde el paralelo 43 hacia el sur, lo que trajo como consecuencia la

...
formación de areniscas marinas, producto del lavado y redistribución de arenas
cuarzosas. Posteriormente, durante el Terciario se inició un período de gran actividad
volcánica, responsable de la formación de los macizos de El Paine y Balmaceda.
Paralelamente se produjo un avance marino, dejando grandes depósitos de limos y
arcillas y que se conoce como Transgresión Marina del Terciario Interior. Al término
del Terciario se produjo un nuevo período de actividad volcánica que cubrió extensas
áreas con cenizas, lavas y pómez, sedimentos que, en muchos casos, fueron
redistribuidos por los ríos.

Durante el Cuaternario, la zona fue cubierta por una considerable capa de hielo,
responsable de una actividad erosiva de gran importancia que generó diversos canales,

..,,,
lagos y bahías que persisten basta el presente. Esta actividad glacial dejó también como
resultado un complejo sistema de morrenas que actuaron como diques, dando origen a
la formación de grandes Lagos glaciales cuyos sedimentos en forma de varves se

..
encuentran en las márgenes del Estrecho de Magallanes. A fines del último período
glacial, se produjo una activación del volcanismo extrusivo, cuyas consecuencias fueron
la formación de extensos recubrimientos de lavas basálticas y cenizas en grandes áreas
de la pampa.

Algunos antecedentes de Tierra del Fuego (Getding y Thiers, 2002), en particular de la


precordillera oriental o subandina oriental, señalan que se trata de una zona mesetiforme
con cordones montañosos de baja altura, cuyas cumbres raramente superan los 1.200 m.
Hay un profundo labrado de Los valles por efecto de los hielos cuaternarios y fenómenos

postglaciales. Los valles están rellenos con depósitos glaciales, tluvioglaciales, fluviales
y lacustres. El sustrato geológico de este sector está formado por depósitos marinos del
- -• Cóndor, además
Terciario en el sector de Río Bueno y del Cretáceo en el sector de Río
de extensos depósitos de cenizas volcánicas.

En el sector de Puerto Edén, Calderón et al. (2007) describen


·�
"' una sucesión de esquistos,
"
�eisses, migmatitas y granitoides-biotita y granitoides biotita-homblenda del Complejo
lgneo y Metamórfico Puerto Edén, perteneciente al batoy lito Patagónico Sur. Los autores
J

atribuyen estas formaciones al Jurásico


¡,
� tardío.

• ..
Díaz et al. (1959-1960) observaron una estrecha coincidencia entTe la distribución de los

• • -
distintos Grandes Grupos de Suelos y los sistemas de morrenas
I' que se han descrito

como depósitos de los avances glaciales del Cuaternario. Así, el sustrato de los Suelos
Castaños está muy meteorizado y, en parte, disgregado. En los suelos de Podzol el
sustrato es una masa arcillosa compacta. conocida localmente como masacote y que los
autores hacen responsable de la presencia de turberas en la zona. Otra característica que
..
es común a todos los suelos de la Región es La presencia de cenizas volcánicas en
distintas cantidades y a diferentes profundidades.

294
7.2 Regímenes de Humedad y Temperatura de los suelos

Tomando como base el análisis climático


r"I realizado por IREN ( 1 967), en la Zona se han
diferenciado cinco tipos de áreas climáticas. Considerando que no existen datos de
humedad y temperatura de los suelos, se intentará hacer una aproximación a los
regímenes de humedad y temperatura que los suelos podrian poseer.

En el extremo norte de la Zona se ha ident - 1\..ificado el clima Templado Frio de Gran

Humedad, que no solo afecta la parte insular sino también a gran parte de las áreas
continentales. Esta clase de clima se prolonga hacia el sur como una cuña que se
introduce en el Clima de Tundra. Desde el Océano Pacífico y hacia el este, cubriendo
de preferencia el territorio insular, se identifica un clima de Tundra Isotérmico. Desde el
punto de vista edáfico, ambos tipos de climas se podrían asimilar a un régimen de
humedad údico, a causa de la distribución uniforme y abundante de las precipitaciones a
través del año, de tal forma que se asume que la sección de control de los suelos no está
seca por tanto tiempo como 90 días acumulativos en años normales. En cuanto al
régimen de temperatura, se estima que el régimen cdico podria ser el más próximo a las
condiciones reales, pues por definición la TMAS es inferior a 8°C y no bay pennafrost.
Al menos en ninguno de los suelos descritos ha habido evidencia de involución de
horizontes por congelamiento - descongelamiento.

E l clima denominado Transandino con Degeneración Esteparia, corresponde a una faja


de dirección NW - SE a partir del paralelo 51° LS, que atraviesa las ciudades de Punta
Arenas y Porvenir. A causa de la disminución del promedio anual de las precipitaciones,
pero con una media del verano superior a la media del invierno, el régimen de humedad
de los suelos se corresponde bien con el régimen ústico. El régimen de temperatura se
considera frígido debido a que la TMAS es inferior a 8°C y la TMV - TMl es superior a
6°C.

Más hacia el este, se ha descrito el clima de Estepa Frio, cuyas características


principales son las de ser seco con una temporada húmeda corta. Los parámetros de
precipitación y temperatura son similares a los del tramo anterior, por lo que se ajusta
bien a un régimen de humedad ústico y un régimen de temperatura frígido.

7.3 Suelos

Se trata de una Región que posee escasos estudios de suelos, la mayor parte de ellos de
carácter generalizado y que solamente abarcan determinados sectores. Se estima que
debieran considerarse sólo como de carácter exploratorio. Los estudios geológicos
pueden ser más completos, sin embargo, ellos caen fuera del centro de atención de esta
publicación, por lo que solamente se considerarán algunos elementos de carácter
general.

Algunos de los estudios consultados (Díaz et al., 1959-1960), establecen una


diferenciación primaria entre los suelos minerales y los suelos orgánicos. Otros (lREN,
1967) han diferenciado los suelos en función de zonas fitoclimáticas y a nivel de
Asociaciones de Suelos. Otros (CNR. 1997) han realizado un reconocimiento por
Provincias y dentro de ellas han establecido Sectores de suelos asociados
geográficamente, pero que no necesariamente presentan características semejantes. En

295
función de estos antecedentes. se hará una revisión y una descripción de los suelos con
los elememos que se dispone. Varios de Jos conceptos e interpretaciones que provienen
de estos estudios se analizan y se discuten a la luz de las nuevas ideas y principalmente
de los nuevos conceptos taxonómicos, tratando de establecer, cada vez que sea posible,
alguna correlación. Por lo tanto, para identificar a los suelos, será necesario utilizar una
termmología que ya no está vigente, tratando de llegar a la mejor aproximación posible
con la terminología actual. De manera arbitraria se seguirá el ordenamiento del estudio
de la Comisión Nacional de Riego (CNR, 1997) por considerar que se puede asociar en
mejor forma con Los regímenes de humedad y temperatura de los suelos.

7.3.1 Suelos de la Provincia de Ú ltima Esperanza

Este sector se asocia con un régimen de humedad úsrico y un régimen de temperatura


frígido. Los suelos descritos ocupan posiciones de terrazas aluviales con relieve plano a
suavemente ondulado, cuyas pendientes más frecuentes son de 1 a 3% y 2 a 5%, y
solamente algunas Fases de la Serie Última Esperanza se han descrito con pendientes de

..
5 a 8% y excepcionalmente de 8 a 1 5%. En algunos suelos el relieve es plano ­
cóncavo, cuyo etecto ha sido el de generar un drenaje pobre con un nivel freátíco que
puede tluctuar entre los 50 y los 90 cm de profundidad. Además, en varios de estos
suelos se han formado horizontes orgánicos en superficie (podría corresponder a un
epipedón hístico) que puede llegar a 25 cm de espesor (Figura 7-3, al final del
Capítulo).

El sustrato de los suelos es variable, aun cuando ocupan posiciones sioúlares en el


paisaje. De esta manera, se han descrito sustratos de gravas redondeadas con arena
intersticial, arenisca compactada, arcilla compactada y cementada y un material
glaciolacuslre compactado, muy duro, de textura arcillosa o arcillo limosa, con un cierto
grado de agrietamiento denominado localmente como masacote.

El color de los horizontes superficiales varía entre el pardo oscuro (7.5YR3/2) hasta el
negro (5YR - 1 OYR2/l), estos últimos generalmente asociados a la presencia de un
horizonte orgánico superficial. En los horizontes más profundos son frecuentes los
colores gris (SYS/1 ) y gris oliva (5Y4/2), asociados a suelos con niveles freáticos altos.
de drenaje pobre a muy pobre. La clase textural de los horizontes superficiales varia
entre franco arcillo limosa y franco limosa y sólo en algunos suelos se hace ligeramente
más gruesa. esto es, franco arenosa frna. En cambio, en los horizontes más profu11dos no
existe una tendencia definida, pues se han descrito variadas clases texturales, tales como
arcillosa, arcillo limosa, franco limosa, franco arenosa hasta arenosa muy tina. La
estructura se mantiene de bloques subangulares a través de los perfiles y en los
horizontes más profundos alcanza un grado de no estructura, maciza.

Varios suelos se han descrito como profundos y muy profundos ( J 00 hasta 130 cm); Jos
suelos con profundidad limitada (delgados, de 25 a SO cm, y Ligeramente profundos, de
50 a 75 cm) corresponden a suelos con nivel freático alto o bien, su profundidad quedó
definida por la presencia de sedimentos tluvioglaciales parcialmente cementados. Se
considera que la cantidad y distribución del sistema radical en el perfil puede ser poco
significativo, considerando que la cubierta vegetal en general es escasa. Hacia los
horizontes inferiores las raíces se describen como escasas o inexjsteotes y, solamente en

296
aquellos suelos que poseen un horizonte orgánico de gran potencia (alrededor de los 40
cm de espesor) las raíces finas son abundantes en el subsuelo.

El drenaje es imperfecto a pobre en todas las Fases de Los suelos descritos. Escapan a
esta situación las Fases de las Series Última Esperanza y Tres Pasos, cuyas pendientes
varían de 5 a 8% y de 8 a 15%. Algunas Series, tal como la Serie Las Chinas, presentan
un alto contenido de Na, con una RAS de 59 y 76 para los horizontes de O a 20 cm y de
20 a 50 cm respectivamente (Cuadro 7-1). Además presenta carbonatos en niveles que
no superan 3,5%. Las Clases de Capacidad de Uso asignadas a los suelos están en
función de la Clase de drenaje, la profundidad y la pendiente, variando desde ITI hasta
vn, siendo la Clase V la más frecuente en varias Series.

Cuadro 7-1. Algunas propiedades de la Serie Las Chinas. Fase fuertemente salina y alcalina. (Comisión
Nacional de Riego, 1997)

Profundidad (cm) o - 20 20- so


pHo¡¡ua 1 : 1 9.25 9.39
1
Conductividad eléctrica (dS m' ) 7,8 10,8
CaC01(%) 3.4 2,7
Saturación de agua(%) 1 1 8.0 149.0
Ca 3,2 3.5
Cationes solubles Mg 1.4 1.7
1
(mmo� L- ) K 0,2 0,2
Na 89,1 123,2
col 0,0 0,0
HCO; 4,8 4,0
Aniones solubles
1 Cl 34,0 5 1 ,8
(mmolcL' )
so� 53,0 74,0
RAS 59,1 76,8


Según Díaz et aL (1959-1960) en este sector se presentan los denominados Suelos

,.
Castaños, los Suelos Pradera-Pianosol y más hacia el oeste, en los sectores insulares, los
denominados Podzoi-Pradera Alpina. Los Suelos Castaños se presentan bien
estructurados, con un incremento en el contenido de arcilla hacia el horizonte B. De
acuerdo a las descripciones de perfiles que caracteri7an a algunas Series, se podrían
asimilar al concepto de Inceptisol y más precisamente a Dystrustept, asumiendo una SB
inferior a 60% y sin carbonatos. Aquellos suelos descritos con carbonatos caerían mejor
en el concepto de Haplustept. La mayoría de los suelos aparentemente se han
desarrollado a partir de sedimentos glaciales y, solamente en un caso. se identificó como
desarrollado a partir de cenizas volcánicas.

Los Suelos Pradera-Planosol varían de moderadamente profundos a profundos, con un


incremento de la fracción fina hacia los horizontes subsuperficiales, de tal forma que en
los epipedones son frecuentes las clases texrurales franco arenosa y franco arenosa fina,
en cambio en los horizontes B dominan las clases texturales franco arcillo limosa.
franco arcillosa hasta arcillo limosa. Se podría esumar que se trata de un grupo de
suelos que han evidenciado un mayor grado de evolución pedogénica que los suelos
anteriores. como sería el caso de la Serie Calafate. en cuyo perfil se describieron
serosidades, que podrían asimilarse al concepto de los cutanes actuales. De acuerdo a
las correlaciones aceptadas internacionalmente, un Planosol tendría su equivalente en un
Alfisol o un Ultisol de la US Soil Taxonomy, dependiendo de la mayor o menor SB a
180 cm de profundidad, respectivamente. Es más aceptable que la mejor correlación sea
con un Ultisol, considerando que la SB podría ser baja. Una característica común a

297
todos ellos es el color del hori2onte superficial que varia desde el negro ( l 0YR2/l )
hasta el gris muy oscuro { l OYR3/l ) cuyo origen estaría en el mayor contenido de
materia orgánica (se ha descrito como colchón de raíces). Además tienen en común un
aumento del valor y el croma (Munsell) hacia los hori2ontes inferiores, de tal manera
que son comunes los colores pardo muy pálido ( I OYR7/4), pardo amarillento claro
( 1 0YR6/4) y pardo oliva claro (2.5Y5/4). El sustrato común a todos estos suelos lo
constituyen materiales de origen glacial, mezclados con rocas graníticas y arcilla glacial
con cantidades variables de gravas. La mayoría de estos suelos se presentan en posición
de lomajes suaves de 3 a 5% y de 5 a 7% de pendiente.

Finalmente, los suelos de Praderas Alpinas son suelos delgados, de menos de 50 cm de


profundidad, que se han descrito sobre pi2arras o sobre sedimentos glaciales mezclados.
Dominan los colores pardo roji2o oscuro (5YR3/4) en los hori2ontes superficiales y
pardo amarillento ( 1 OYR5/8) en los horizontes subsuperficiales. Las clases texturales
son finas y moderadamente finas en los hori2ontes subsuperficiales, esto es franco
limosa, arcillo arenosa y arcillosa; en cambio, en los hori2ontes superficiales suele haber
uoa cubierta de materiales más gruesos, que han sido calificados como arena fina.
Ocupan un paisaje de lomajes ondulados suaves, con pendientes de 2 a 3% y hasta 5%.
A causa de los limitados datos que se dispone para estos suelos, es prácticamente
imposible establecer una correlación taxonómica con Órdenes de La Ta.xonomia (Soil
Survey Staff, 2006).

7.3.2 Suelos de la Provincia de Magallaocs

En esencia existe una dominancia del régimen de humedad ústico y un régimen de


temperatura frígido. No se descarta que puedan existir sectores más secos hacia el este,
pero siempre como ústicos, o más húmedos hacia el oeste, que podrian caer en el
concepto de údico.

Los suelos se encuentran ocupando pOSICiones de terrazas medias y altas, con


pendientes que varian de 1 a 3% hasta 5 a 8%. También se ubican en áreas suavemente
onduladas. con pendientes de basta 5 a 8% y solamente algunos suelos ocupan

..
posiciones deprimidas del paisaje con pendientes de O a 1 %. Se trata de áreas que han
sufrido diversos procesos de modelamiento del paisaje, por lo cual los sustratos de los
suelos son variados, tales como sedimentos glaciales y fluvioglaciales, gravas
redondeadas frescas y meteorizadas con matriz arenosa y el ya mencionado masacote
(Figura 7-4, al final del Capítulo). Los colores parecen seguir un patrón más constante,
de tal forma que en los hori2ontes superficiales dominan los colores pardo rojizo oscuro
en los matices 5YR y 7.5YR, e incluso cuando el color es negro cae en un matiz 5YR.
En igual forma, hacia los horizontes más profundos dominan los colores asociados a
procesos de reducción, tales como gris oliva (2.5Y4/4, 5Y5/2), gris azulado (5B5/ l ) y
gris verdoso (5G5/l). Cabe hacer notar que no siempre estos colores están asociados a •
condiciones de drenaje pobre, por lo cual se podría asumir que, en algunos casos, los
colores provienen de Jos materiales de origen de los suelos.

Las clases texturaJes de los hori2ontes superficiales varían sólo entre franco limosa y
franco arenosa muy fina; en cambio en los horizontes más profundos, en contacto con el
sustrato cuando este se hace visible, las clases texturales son muy variadas, esto es
arcillosa, arcillo arenosa, franco arcillo limosa, franco arcillo arenosa, franco arenosa
fina y areno francesa. Es probable que esta dispersión granulométrica se encuentre

298
relacionada con la gran variabilidad de sustratos que se han descrito para estos suelos.
La mayoría de los suelos de esta área se han descrito con abundantes gravas en el perfil.
La estructura dominante a través de los perfiles es de bloques subangulares, que se hace
maciza en los horizontes más profundos. En aquellos suelos que presentan un horizonte
superficial orgánico se ha descrito una estructura granular. La profundidad hasta el

sustrato es variable entre 60 y 120 cm. El drenaje está relacionado con la posición que
los suelos ocupan en el paisaje, de tal forma que los suelos con drenaje pobre y muy
pobre están asociados a suelos planos o casi planos, con Clases de Capacidad de Uso
lV, V y VI. Aquellos suelos en posiciones suavemente onduladas presentan buen
drenaje, con Clases W y IV. Cabe señalar que en este sector se ha descrito la Serie
Tehuelche, que presenta Fases salino - alcalina (Cuadro 7-2).

Cuadro 7-l. Algunas propiedades de la Serie Tehuelche, Fase salma y alcalina. (CNR. 1997)

Profundidad cm o - 20 20 - 40
pH.¡¡w 1:1 8,03 8.09
Conduclividad eléctrica (dS m'
1) 1 1 ,7 10.9
CaC03 (%) 1 1 ,0 9,6
Saturación de agua(%) 90,0 71,0
Ca 17,4 15,3
Cationes solubles Mg 1 1 ,1 9,3
(mmoleL'1) K 5,5 4,7
Na 123,6 105,5
HC01 5,4 4,4
Aniones solubles Cl 95,8 95.0
(mmo1eL'1) so4 48,0 37,0
RAS 32,7 30,1

De acuerdo con Díaz et al. (1959-1960) dominarían los suelos Pradera-Pradera


Planosol, que se caracterizan por ser moderadamente profundos a delgados, en general
sobre sedimentos glaciales mezclados. Su posición corroboraría la presencia de colores
asociados a procesos de reducción, pues la mayoría de ellos ocupan sectores planos o
casi planos entre morrenas, con pendientes máximas de 2 a 3%. Se estima que su origen
se encuentra en sedimentos glaciales mezclados, en algunos casos con gravas graníticas
y basálticas. Hacia el oeste se ha descrito una franja de orientación NW SE en la cual
-

se encontrarían bien representados los Podzoles.


Los suelos Podzol propiamente tal se caracterizan por presentar un perftJ cuyo horizonte
superficial está constituido por una turba o por una capa muy rica en raíces y materia
orgánica, normalmente de color negro ( 1 0YR2/1). Le sigue un horizonte mineral franco
arenoso fino, franco limoso o incluso arenoso de color gris claro (2.5Y7/l) o gris (IOYR
6/1 ), para terminar en un horizonte franco limoso o franco arciUo limoso de color pardo
fuerte (7.5YR5/6) o franco limoso de color pardo amarillento (JOYRS/4). Los suelos se
han descrito como moderadamente profundos a delgados, sobre un sustrato de
sedimentos glaciales con gravas y piedras o bien un esquisto cretácico (Figura 7-5, al
final del Capítulo). Ocupan una posición de lomajes en antiguas morrenas laterales. El
concepto de Podzol estaba sustentado en la presencia de un horizonte de eluviación (A2
- E) el cual aparentemente coincide con el segundo horizonte de colores grises, descrito
para estos suelos. En el Cuadro 7-3, se incluye algunas propiedades de un suelo
identificado como tal.

299
Cuadro 7-3. Suelo Podzol. Punta Arenas {Diaz et al.. 1959-1960)

0 - 2 2 - 6 6 - 10 1 0 - 15 15 +
Profundidad (cm)
A. Az e, e,
2- 1 0,8 3,0 4,2 5,1
1-0.5 2,6 5,0 7,6 7,4
Distribución 0,5-0,25 4,3 4,5 8,6 7 ,8
partículas 0,25-0, 10 1 6,3 J I ,2 2 1 ,2 20,8
por tamaño o, 10-0,05 20,7 15,6 23.1 21,5
(%) 2-0.05 44,7 39,3 64,7 62,6
0,05-0,002 47,0 38,5 31.2 30,3
< 0,002 8,3 22,2 4,1 7,J
Clase textura] F F Fa Fa
Carbono orgánico (%) 0.73 4,45 0,97 0,44
pHogus 5 ,8 4,9 4,6 5,0 5,2
Ca 8,6 1,7 2,1 0,3 0,5
Complejo de Mg 2,5 0,6 1,l 0,1 0,2
cambio
1 K 1,0 0,2 0,3 0,2 0,2
r)
(cmolc kg'
Na 0,3 0,2 0,4 0,2 0,1
Swna de bases (cmol, 12,4 2,7 3,9 0.8 1,0
ere ( cmolc kg' ) 33,6 9,3 47,5 2 1,0 1 5,9
Saturación de bases (%) 37,0 29,0 80 4,0 6,0

Sin embargo, el concepto actual de Spodosol (Soil Survey Staff, 2006) se basa en la
presencia de un horizonte de iluviación (Bns) el cual no estaría claramente identificado
en las descripciones mencionadas. Cabe señalar al respecto, que existen variadas
publicaciones que señalan la presencia de Spodosols a partir de la Región de Aysén...
hacia el sur, basándose en la presencia de un horizonte de color gris o de alto valor
(Munsell). desconociendo que toda la Zona ha estado sometida a intensas y repetidas
sedimentaciones de tefras ricas en sílice que han dejado su huella como una capa de
color gris (e incluso blanco) en numerosos suelos de estas regiones. Díaz et al. . ( 1 959-
...
1 960) han identiticado a las Series Loreto y Arka-Aloe como pertenecientes a este
grupo. Gerding y Thiers, (2002) en el sector de Río Bueno en Tierra del Fuego,
identificaron suelos que podrían incluirse en este grupo. De esta manera, describen un
horizonte superficial constituido por mantillo de 2 a 20 cm de espesor y bajo él una
secuencia de horizontes de dos clases: A-B-C y E-2Bh,- C. Estos autores ( op.cil)
estiman que se trata de suelos jóvenes, delgados a muy delgados, influenciados por
actividad volcánica, topografía y clima, de pH entre 4 y 5,5 con una alta saturación con
Al (>60%). Debajo . del
' mantillo existe un horizonte blanco ( lOYRS/1 ) de clase textural
franco limosa y sin estructura (masiva). En Ja formación de este horizonte habrían
influido la dcpositación de cenizas volcánicas sin descartar en forma definitiva los
procesos de podzolización.

7.3.3 Suelos de la Provincia de Tierra del Fuego

....
La mayoría de los suelos descritos para esta área se encuentran en posición de terrazas
aluv1ales a diferentes alturas (bajas, medias y altas), pero todas ellas con pendientes
máximas entre 1 y 3%. Aun cuando los sustratos más comunes corresponden a
materiales aluviales, tales como gravas redondeadas con matriz arenosa, también son

300
frecuentes los sustratos de origen fluvioglacial, asociados en algunos casos con
mazacote. El color de los horizontes superficiales mantiene una cierta uniformidad, ya
que varía entre negro y pardo rojizo oscuro en los matices SYR y 2.5YR. En los
...
horizontes más profundos nuevamente dominan los colores provenientes de procesos de
reducción, esto es el oliva pálido (5Y6/4), gris verdoso (5GY5/l) y el b'Tis azulado (5B
511 ). Las clases texturales de los epipedones varían entre franco limosa y franco arenosa
fina, con dos tendencias a variar en profundidad, de acuerdo a los suelos descritos. Un
grupo de suelos presenta horizontes subsuperficiales de clase textura\ franco arcillo
arenosa y arcillosa y en otro grupo las clases texturales son gruesas, arenosa y areno
francosa. La estructura presenta la misma tendencia que en los grupos de suelos
anteriores, es decir, de bloques subangulares en superficie a maciza hacia los horizontes
subsuperficiales. La profundidad al sustrato es variable, pues se han descrito suelos de
45 cm sobre un sustrato fluvioglacial, hasta otros con un solum de hasta 120 cm.

Con relación al drenaje, dominan los suelos con drenaje imperfecto a pobre, propiedad
que ha definido la mayor parte de las Clases de Capacidad de Uso. De esta manera, las
Clases más frecuentes son IV, V y Vl.

Según Díaz et al. (1959-1960) existen grandes extensiones de los suelos denominados
Pradera-Pradera Planosol, los que se caracterizan. entre otras cosas, por presentar un
incremento del contenido de la fracción fina hacia los horizontes subsuperficiales. de tal
manera que son comunes las clases textnrales franco arcillosa, franco limosa y franco
arcillo limosa. Se podría asumir que aquellos suelos que presentan claramente un
incremento de la fracción fina hacia un horizonte 8, se podrían asimilar al concepto de
lnceptisol y más precisamente Dystrustept, en cambio aquellos de clases texturales
gruesas a través de todo el perfil se deberían considerar mas bien dentro del concepto de
Enrisol, probablemente Cryorthent.

De acuerdo a los autores consultados, en Tierra del fuego continúa la presencia de


suelos con características de 1>odz.ols que. según Diaz er al. ( \ 959-\960) se

..
diferenciarían en cinco subgrupos: Podzol propiamente tal, Podzol de Agua
Subterránea, Pardo Podzólico, de Pradera Alpina y Gris de Bosque.

En el sector de Río Cóndor, la secuencia de horizontes es la misma que para los suelos
de Río Bueno, incluso en los suelos de las terrazas marinas, aun cuando son más
delgados (entre 5 y 48 cm) que en Río Bueno. En cuanto al horizonte E. que seria
comparable al horizonte C, mantiene las características de color blanco, clase textura!
franco limosa, masivo, con escasa pedregosidad y pocas raíces, alta acidez, alto
contenido de aluminio y bajo contenido en nutrientes. Según varios autores citados por
Gerding y Tbiers (2002), el horizonte E seria la respuesta a procesos de podzolización.
Otros plantean que su origen se encontrarla en la depositación de cenizas volcánicas en
combinación con procesos de podzolización. Según estos autores ( op.cit.) las relaciones
para C, N. Na. Al, Fe y Cu entre los horizontes B y A es mayor para suelos con
horizonte E que para aquellos que no lo tienen, por lo tanto, indicaría una mayor
eluviación de elementos desde el horizonte E y una acumulación en el horizonte
subyacente Bt� (Figura 7-6, al final del Capítulo). Sin embargo, el horizonte E tiene un
alto contenido de arcillas que no seria tipico de un horizonte de eluviación, lo cual
estaría a favor de la hipótesis de una depositación de tefras. además que aparece como
un material de diferente origen, con textura y estructura uniforme, sin pedregosidad y
preferentemente en terrenos de menor elevación, más frecuentemente bajo bosque que

301
bajo estepa y con una orientación preferentemente norte. Éstas podrían ser las razones
que refuerzan la hipótesis de un origen volcánico. Al respecto, hay varios antecedentes
de depós1tos de tefras provenientes de los volcanes Burney, Reclus y del volcán Cook
en la isla Gordon (Figura 7-7).

o__400km
55"

Figura 7-7. Volcanes más importantes en la zona.

El viento y la geomorfología ayudarían a que se produjeran depósitos de cenizas


volcánicas y sedimentación de materiales finos provenientes desde otros sitios. Las
cenizas se habrían acumulado en las lomas abrigadas de los vientos dominantes, que
serian las de exposición preferentemente norte. Así, las secuencias más frecuentes de
horizontes son O-E-2B... -C; o bien 0-A-B-C y 0-A-B,.. -C. Según los autores (op. cit.)
dominarían Spodosols e Inceptisols. En los sectores cóncavos del paisaje dominarían los
Aquods y donde no existen problemas de drenaje, los Cryods. Los suelos restantes
corresponderían a Cryepts. En el Cuadro 7-4 se describen algunas propiedades químicas
y fisicas de un suelo de Tierra del Fuego.

302
Cuadro 7-4. Propiedades de un perfil del silio 14. Río Bueno y Vicuña (Gerding y Thiers. 2002)

5 - 0 0 - 5 5 - 15 1 5 -34
Profundidad (cm)
E BC
Carbono orgánico (%) 20,8 2,1 1 1 ,8 13,5
pH- 5,02 4,66 4,69 4 95
,

Ca 2,44 2,94 0,63 0,29


Complejo de Mg 4,88 0,96 0,53 0,13
cambio
K 0,94 0,39 0,26 0,08
(cmol. kg'1)
Na 0,30 0,10 0,13 0,10
Suma de bases (cmoL, kg' ) 8,56 4,40 1,55 0,61
N% 0,9 0,12 0,07 0,46
Al por KCI 0,69 2,64 9,04 4,09
Saturación de Al (%) 7,4 37 6 85.4 87 0 ,

7.3.4 S ue l os orgánicos

El conocimiento de los suelos orgánicos es más limitado que el que se tiene de los
suelos minerales para la Zona, pues son pocos los trabajos de reconocimiento e
identificación de estos ecosistemas. Los escasos trabajos que existen se ban concentrado
en la descripción e identificación de las especies vegetales que componen cada sistema,
pero no de los suelos en los cuales se encuentran dichas especies.

Según Clausen et al. (2006) existirían nueve tipos mayores de humedales en La


Patagonia, considerándolos únicos para América del Sur, principalmente en función de
las especies vegetales que dominan en cada humedal. Para los objetivos de este libro se
tomarán como ejemplo aquellos que se consideran como más próximos al concepto de
suelos orgánicos. De esta manera, uno de estos humedales es descrito como Carex­
Nothophagus, el que se encuentra principalmente en depresiones dentro de morrenas
glaciales y con pendientes que pueden alcanzar 28% en laderas de colinas. Un segundo
tipo corresponde a las denominadas Turbas, descritas en las cercanias del Lago Grey y
corresponden al concepto de pantano, ciénaga o marjal cuya vegetación dominante
corresponde a Sphagnum mage/Janicum. El tercer tipo de humedal, considerado por los
autores como el más importante de la zona, se denomina Vega, ya descrita por otros
investigadores. Se consideran como depresiones frecuentes del sustrato, debido a
procesos glaciales que han originado un horizonte impermeable (de arcilla) muy
...
próximo a la superficie. Generalmente se les considera más como praderas húmedas que
como humedales, debido a que constituyen un habitat esencial para el guanaco (Lama
guanicoe) en la época de primavera - \'erano. Se encuentran paisajes de tipo cóncavo
con pendientes suaves, de menos de 1%. Para filipová el al. (2008) las Vegas son
sistemas altamente productivos en estas zonas semi-áridas, pues sostienen la ganadería
local, focalizada en la crianza de ovejas. El pH es más alto en el caso de los Fluvisols
debido a su material parental que, en la mayoría de los casos, está constituido por
sedimentos calcáreos. Procesos similares se presentan cuando se drenan los Histosols
debido a que los horizontes orgánicos se cementan por Las sales que precipitan. Los
Grupos de Referencia de Suelos (WRB) más frecuentes encontrados en la zona son los
Histosols y los Fluvisols. Éstos se podrían correlacionar de acuerdo a Soil Taxonomy
(Soil Survey Staff, 2006) con Histosols en el caso de los suelos orgánicos y con los

303
..
Órdenes Entisols (Fluvents) e lnceptisols,
..
y subgupos Fluventic y Fluvaquentic, para el
caso de los suelos minerales de escaso desarrollo de perfil. Filipová et al. (2008)
concluyen que existen variaciones considerables en las propiedades de Jos suelos, tanto
entre Grupos de Referencia como dentro de cada uno de ellos.

•304
Figura 7-1. Paisaje que mucsun un sector de la Cordillcrn Magallamca. constit.uida por un batolito granít1co como
basamento cristalino, además de rocas efusiva; de diferentes edades. r:ste macizo se eleva a alturas máximas que
sobrcpasnn los 3.000 msnm.

Figura 7-3. En toda la Zona &!Mica existen suelos con relieve plano cóncavo, cuyo efecto ha sido el de generar un
drenaJe pobre con un nivel fre:ltico que puede fluctuar entre los 50 y los 90 cm de profund1dad Además, en vanos de
estos suelos se han formado horizontes orgánicos en superficie, el cual podría corresponder a un epipedón hí�uco, que
puede llegar a 25 cm de espesor.

305
figura 7-4. Suelo� en posiciones de terra.tas con peodlcnto:s que varían de 1 a 3°/o has�a S a 8"/o En algunos cas�
ocupan posic•ones deprimidas del paiSBJe. con pendiente> de O a 1%. Se lnlta de áreas que han sufrido diversos
procesos de modelamiento del palsaJe, por lo cual los sustratos de los suelos son variados, tales como sedimentos
glac.:tles y nuvioglacialcs, gravas redondeadas frescas y meteorizadas con matriz arenosa y maz.1COIC.

f'lgun 7-S. Perfil que identifica a In clase de suelos Podzoles. Se han descrito con un horizonte superficial
constituido por una turba o bien por una capa muy rica en raíces y materia orgánica. nolllla!menn: de color negro
( IOYR2/l). Le sigue un bonzonte mmeral franco arenoso lino, franco limoso o incluso arenoso de color gris claro
(2.5Y7/l) o griS ( 1 OYR6/l ), para tenninar en un horizonte ftanco limoso o franco arcillo limoso de color pardo fuene
(7.SYRS/6) o franco limoso de color pardo amarillento (10YR5/4).

306
Figura 7-6. El honzonte E podria ser la respuesta a procesos de podzoliLacion, o bien su origen se encontraría en la
depositación de ceoi;¡;as volcánicas en combinactón con proceSO$ de podzolizactón. El ele,·ado contenido de arcilla en
el horizonte E no seria caracterislico de un honzoote de elu\Í3cióo. lo cual estaría a favor de la hipótesis de una
depositación de tefras que podrían haber sufrido procesos de extraCCión de componentes (Foto W. Vera).

307
CAPÍTULO S
Suelos de la Zona Antártica
(Entre 59°W y 61 °W hasta 62°8 y 63°8)

Luzio, W., Casanova, M., Seguel, O. 2009. Suelos de La Zona Antártica (Entre
59°W y 61°W hasta 62°S basta 63°$). pp: 307- 322. In: Suelos de Cbile. (Luzio, W.,
Editor). Universidad de Chile.

309
8.1 Antecedentes generales

Según Vaughan y Spouge (2002) en la Antártica se podrían diferenciar dos áreas


principales, separadas por las Montañas Transantárticas (Figura 8-1). La del lado Este,
constituye una
capa de hielo que descansa sobre un manto sólido que podría quedar
sobre el nivel del mar si el hielo fuera removido. La parte Oeste, en cambio, constituye
un denominado casquete marino que se ubica sobre la corteza terrestre muy por debajo
del nivel del mar.

1
ww,

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\ \
\
\

.... _

Figura 8-1. Geomorfologla general de la Antártica (Vaughan y Spouge, 2002).

Bockheim y Ugolini ( 1990) definen 4 macro-zonas pedológicas en la Región


Circumpolar Sur (Figura 8-2): la zona de Bosque Subantártico (S), la Tundra
Subantártica (T), el Desierto Polar Antártico (P) y el Desierto Polar Frío (C).

311
00 3[)0

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f209.

1500 ta.OO 1SOO


Figura 8-2. Zonas pedológicas definidas por Bockheim y Ugolini (1990).

En este Capítulo s� consignan las investigaciones realizadas por diversos autores


(Haberland, 1992; Alvarez, 1993; Henriquez, 1994) quienes efectuaron campañas de
terreno para reconocer algunos de los suelos del archipiélago de las Sbetland del Sur, en
el marco de las investigaciones realizadas por el Instituto Antártico Chileno. Las
principales islas de este archipiélago son (Figura 8-3) Decepción, Livingston,
Greenwich, Robert, Nelson, Rey Jorge y Elefante (Gonz.ález-Ferrán y Katsui, 1 970).
Los reconocimientos se concentraron en Las lslas Robert y Livingston, además de
algunas observaciones en La isla Rey Jorge.

Islas ShetJand bla.R.eyJo


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bla l.ivingi,,n
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200km �ktll
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Figura 8-3. Islas principales del Arc.h.ipiélago Shetland del Sur.

3L2
La Formación Coppermine de la Jsla Robert, que constimyó uno de los sitios de
estudio, está formada por una estratificación de lavas y piroclastos correspondiente al
volcanismo Cenozoico de la región (Hervé y Araya, 1 965). Las coladas de lavas .., son
del tipo aa y su composición es basáltica y andesítico-basáltica, de estructura prismática
imperfecta y color verde oscuro. En la angostura entre la caleta Coppermine y Bahía
Carlota, los mismos autores han descrito rocas sedimentarias elásticas, de edad
cuaternaria tanto de origen glacial como marino, con cristales de augita notorios y
depositaciones de calcita. Los sedimentos glaciales se manifiestan por la presencia de
morrenas y planicies de lavado (outwash plains}. �o se han descrito depósitos aluviales
a pesar de los escurrimientos anuales que se producen en los periodos estivales,
probablemente porque Jos procesos aún se encuentran en etapas erosivas y no de
sedimentación. Los depósitos marinos se concentran en los sectores de playas,
generalmente gravosas, en las cuales se han descrito algunos niveles de terrazas. La Isla
se presenta como mesetas con alturas entre 30 } 40 msnm y excepcionalmente se eleva
hasta 80 msnm.

El clima de la lsla Robcrt se considera periglacíal, típico de la Antártica Marítima


(Haberland, 1 992). El promedio anual de las temperaturas es siempre inferior a ooc. con
una oscilación entre -1 y -5°C. Las precipitaciones ocurren durante todo el año.
principalmente en forma de nieve, con algunas precipitaciones líquidas durante el
verano. El monto anual varía entre 400 y 700 mm (Hervé y Araya, 1965; Luzio et al.,
1990).

Según Haberland ( 1992) las condiciones climáticas extremas, además de la escasa


....
superficie descubierta de hielo no son elementos favorables para el desarrollo• de
especies vegetales, sin embargo. en algunos sectores existe un desarrollo vegetacional
considerable. Esta vegetación terrestre está constituida esencialmente por plantas
inferiores, tales como liquenes, musgos. algas, hongos y bacterias (Lamb, 1970;
Covarrubias, 1965). Todas las plantas son perennes, de tal forma que, si existen las
condiciones favorables, se desarrollan inmediatamente (Álvarez, 1 993). Es posible que
la vegetación que se ha descrito, asociada a los suelos en estudio, no se pueda
considerar como un verdadero factor de formación, a causa de su escaso desarrollo en
superficie y su escasa penetración en profundidad; más bien se podr!a considerar como
un signo de relativa estabilidad del sustrato.

La Isla Livingston, el segundo sit1o de investigación, está constituida por rocas


sedimentarias y volcánicas del Jurásico Superior y Crctácico Inferior (Hobbs. 1968).
También se han descrito sectores con rocas sedimentarias y volcánicas del período
Tithoniano (Willan, 1 992). Según González et al. (1970) existe una secuencia
sedimentaria fosilífera en el sector noreste, cuya potencia mínima se estima en 500 m,
además de la presencia de depósitos marinos y continentales.

Hacia el oriente, el relieve se hace montañoso, con alturas que pueden llegar hasta 1 .790
m, casi pennanentemente cubiertas con nieve y hielo. El sector central se presenta con
forma de un domo o plataforma glacial con alturas entre 200 y 400 m. Hacia el sector
occidental, que corresponde a la península Byers, el relieve es bajo, suave y aterrazado,
con algunos promontorios de rocas ígneas (Henríquez, 1994). Esta misma autora
(op.cit.) señala que en la Península Byers se pueden diferenciar varias unidades de
paisaje, tales como plataformas a distintas alturas con relieves cónicos. El clima se
caracteriza por una gran inestabilidad de las condiciones meteorológicas, bajas

313
temperaturas y precipitaciones en Jbnna de nieve, entre 400 y 700 mm por año. La
diversidad de flora y fauna es muy reducida y, al igual que en Ja Isla Robert, las
especies se reducen a aquellas pertenecientes a musgos, üquenes, algas y hongos.


Henriquez (1 994) considera que la crioturbación es la mayor limitación para el
crecimiento y el establecimiento de plantas.

8.2 Características generales de los suelos

Los suelos de la Antártica Marltima no se pueden considerar con características


semejantes a los suelos de la Antártica Continental, principalmente a causa de las
diferencias que existen en cuanto a régimen de precipitaciones (tanto sólidas como
liquidas) y al régimen de temperaturas. Se asume que en los regímenes marítimos las
combinaciones de precipitaciones y temperaturas medias y extremas son más favorables
a la existencia de organismos (vegetación), con la consecuente mayor acumulación de •
MO y, por lo tanto, más favorable a la formación de suelos en et concepto que se tiene
de su desarrollo en zonas extremas.

Se considera que el contenido de agua constituye un factor relevante en la formación y


evolución de los suelos de la Antártica Marítima. La disponibilidad de agua para
muchos suelos está relacionada con la variación climática estacional y que se logra
expresar en algunos rasgos morfológicos de los perfiles, tales como gleización. arcilla
translocada y algunos rasgos de superficie como poUgonos y estriaciones producto de
los procesos de crioturbación (figuras 8-4 y 8-5, al final del Capítulo). Tampoco se
pueden dejar de lado los procesos de congelamiento y deshielo que constituyen agentes
de meteorización del manto petrográfico e, incluso, de los suelos y que determinan

procesos fisicos y químicos pedogénicos únicos del planeta. Es posible considerar que
los ciclos de congelamiento y deshielo puedan afectar la estructuración del suelo,
generando un incremento en el agrietamiento y, consecuentemente, en la generación de
agregados o bien en la dispersión de los ya existentes. Así, la formación de cristales de
hielo puede generar dilataciones entre las partículas del suelo, de tal manera que
constituirían procesos incipientes de formación de estructura. Para Hervé y Araya
(1965) es poco probable que se originen minerales de arcilla a causa de las condiciones
térmicas imperantes. Asi, La fracción fina correspondería más bien al producto de una
fina molienda de minerales y rocas. De esta fonna, la dinámica de los materiales
superficiales estaría muy influenciada por los procesos cíclicos continuos de
congelamiento/deshielo y por la presencia de un permafrost a profundidades variables
entre 40 y 70 cm (Vera, 1990).

Siguiendo a Campbell y Claridge (1987), es posible que los procesos pedogénicos se


e
bayan desarrollado en forma más lenta que en otros sitios del planeta y seria la razón

..
por la cual las diferencias entre el material parental y su suelo asociado serían sólo
someras. Al considerar el concepto de suelo en su acepción tradicional, no sería posible
excluir la influencia biológica, aun cuando ella se encuentre restringida a una débil
cubierta de líquenes, musgos y algas que, evidentemente, no podría afectar más que los
primeros centímetros del perfil (Figura 8-6, al final del Capítulo). Un caso que cae fuera

..
de estas consideraciones corresponde a los suelos denominados omitogénicos,
originados a partir de la acumulación de guano de pingüinos, caracterizados por una
... ..
elevada concentración de nutrientes que puede llegar a ser nociva para la mayoría de las
"
especies vegetales terrestres (Ugolini, 1972). No se pueden descartar otras situaciones

314
donde este factor biótico no tiene una influencia decisiva y la formación del suelo se
debe considerar más bien como el resultado de los procesos de meteorización del
sustrato geológico. En estos últimos casos podría ser discutible si este material
meteorizado �orresponde al concepto de suelo en su acepción tradicional.

La mayoría de los autores han considerado que los suelos formados en la Antártica
Marítima son poco profundos, de escaso desarrollo pedogénico, de clases texrurales
gruesas (Figura 8-7, al final del Capítulo) y con abundante pedregosidad tanto
superficial como en el perfil (Vera, 1990; Luzio el al., 1990). También se les ha
señalado con reacción neutra a alcalina, baja actividad biológica y altos contenidos de
sales solubles (Allen y Heal, 1970). Vera ( 1 990) ha señalado que los suelos antárticos
presentan un perfil A - C, con alto contenido de gravas en el perfil, sobre un contacto
lítico o sobre un permafrost. Schuller et al. ( 1990) describieron suelos con hasta 78% de
arcilla, aun cuando la mayoría son de clases texturales gruesas y con bajos contenidos
de CO. Solamente en la carpeta de musgos el contenido de CO fue próximo al 5%.
Luzio et al. ( 1990) informan de suelos con CIC de hasta 57 cmolc kg·', lo cual atribuyen
a la presencia de zeolitas a través de los perfiles. En todo caso, para la mayoría de los
autores, la formación de suelos estaría restringida a aquellos sectores que se encuentran
libres de la cubierta de hielo, al menos durante la temporada estival, de tal manera que
la circulación del agua liquida y las mayores temperaturas permitirían la acción de los
procesos de formación de suelos.

8.3 Suelos Minerales

Para Navas el al. (2008) algunas propiedades de los suelos, tales como pH, CE,
carbonatos y MO, medidas en suelos con diferentes sustratos litológicos en las Shetland
del Sur, muestran patrones similares. Las mayores diferencias observadas en los
perfiles de suelo estuvieron en la distribución de tamaño de los fragmentos gruesos y en
la textura del suelo. En cuanto a procesos de formactón involucrados en el desarrollo de

los suelos, los autores (op. cit.) señalan que el principal proceso es la meteorización
fisica, aunque procesos criogénicos y meteorización química también serían
importantes.

Los estudios de suelos realizado:> con mayor detalle se han centrado en las Islas Rey
Jorge, Roben y Livingston, pertenecientes a las Islas Shetland del Sur. Bockheim y
Ugolini ( 1 990) asignan tentativamente estas Islas a una Zona Desértica Polar. Para estos
autores los suelos zonales estarían representados por un tipo de suelos Brown Ea.rth, los
cuales no presentan una capa superficial de humus, no presentan lombrices y tienen un
pennafrost entre 1 y 2 m de profundidad (Figura 8-8, al final del Capítulo). Estos suelos
se presentan bajo una tundra líquenes-musgo o bien bajo una cubierta de Deschampsia
sp. También en algunas lslas del Archipiélago se han reportado suelos con colores
fuertemente oxidados (pardo rojizo oscuro. 5YR3/3) en el subsuelo.

En la Isla Robert, Haberland ( 1992) y Álvarez ( 1993) describieron, al menos 1 O


pedones, tomaron muestras y obtuvieron análisis de laboratorio, por lo cual se considera
una información bastante conliable. En el Cuadro 8-1 se presentan las principales
propiedades químicas y fisicas de un suelo en la Península Coppermine de la Jsla
Roben.

31 5
Cuadro 8-1. Propiedades químicas y fisicas de un perfil de la Península Coppermine (Haberland. 1992)

Profundidad 0-3 3- 8 8 - 18
Distribución partículas por tamaño (%) A AC e
2-l 9,6 14,7 7,3

1-0,5 15,6 18,0 17,7

0,5-0,25 15,9 15,2 17.1

0,25-0, 10 22.3 18,8 17,5

o, 10-0,05 14,5 15,2 10,9

2-0,05 77,9 81,8 70,4

0,05-0,002 11,3 1 1 .9 18,4

<0,002 10.8 6,3 Ll 2,

Clase textural Fa aF fa

Agua retenida 33 kPa (%) 18,3 16,0 26,2

Agua retenida 1.500 kPa (%) 12,2 1 1,7 16,5

Carbono orgánico (%) 1,7 1,1 0,3


p HogU> 5,2 4,8 6,1
RAS 0,46 0,35 0,31
Ca 1 1 ,3 9,6 26,6

Complejo de cambio Mg 18,7 12,8 36,8


(cmol. kg"1) K 1,1 0,9 2.2
Na 1,8 1,2 1,7
1 24,5
Suma de bases (cmol.: kg" ) 32,9 67,3
ere (cmolc kg"1) 34,0 33,5 51,5

Todos los suelos descritos tienen como sustrato una roca basáltica diaclasada, aún '
cuando la descnben con diferentes grados de meteorización. En algunos perfiles es
evidente la presencia de un permafrost descrito entre 50 y 1 00 cm de profundidad. Los
suelos son delgados y muy delgados considerando la profundidad hasta la roca, esto es,
desde 1 7 basta 70 cm. Los suelos descritos como más profundos se encuentran sobre un ..
pennafrost. entre 90 y 1 10 cm. La posición fisiográfica y las pend1entes son variadas:
desde planos inclinados (30 a 35%), lomajes suaves (7 a 10%), posiciones cóncavas (1 a
3%), terrazas altas (6%), taludes ondulados (3 a 5%), terrazas marinas (2%) y drumlins
(10 a 15%).

Según Álvarez ( 1993) en todos los suelos dominan las clases texturales gruesas, tales
como arenosa, areno francesa hasta franco arenosa, considerada como la más fina de las
descritas, tanto para los horizontes superficiales como para los subsuperficiales. Las
gravas angulares y subangulares son frecuentes en la mayoría de los horizontes. En
ninguno de los perfiles estudiados se describe grado de estructura, de tal manera que
aquellos suelos de clases texrurales gruesas y muy gruesas, se presentan como grano
simple y los demás, como masiva (figuras 8-9 y 8-10, al final del Capítulo). Solamente
en algunos suelos existe una cubierta de musgos y líquenes, generando un colchón de
materiales orgánicos de pocos centímetros, por lo cual en ningún suelo se describen
rafees en profundidad. El pH fluctúa entre 5,2 y 7,1 en el horizonte superficial y en los
horizontes más profundos entre 5,3 y 7,7, con un complejo de intercambio dominado
por Ca+2, Mg+2 e ff1• Aunque se detectó una baja presencia de materiales coloidales, la •

316
CIC es alta, a causa de la presencia de zeolitas o minerales semejantes a zeolitas.
También la SB se presenta particularmente alta, entre 80 y 100% y solamente en
algunos perfiles puede ser tan baja como 35 a 40%. No se describen rasgos
redoximórficos en ningún suelo. Originalmente los suelos fueron clasificados según Soil
Taxonomy (Soil Survey Staff, 1987) como Pergelic Cryorthents y Pergelic Cryochrepts.
Sin que existan antecedentes morfológicos o fisico-químicos nuevos que aportar, se
podrla asumir que la mejor correlación con Soil Taxonomy (Soil Survey Staff, 2006)
podría ser con Typic Haplorthels para ambos casos. En el Cuadro 8-2 se presentan las
principales propiedades químicas y fisicas de un suelo de la isla Robert.

Cuadro 8-2. Propiedades qulmicas y fiSlcas de un perfil de la Isla Roben (Áivarez, 1993)

Profundidad cm 0-8 8 - 30 30-47


Distribución panículas por tamailo (%) A e R
2-1 10,43 9.83 22.16
1-0,5 20,96 19,06 27,07
0,5-0,25 16,92 1 1 ,66 14,08
0,25-0, 1 o 16,27 12,21 10,53
0,10-0,05 9,17 1 2,04 6,93
2-0,05 73,74 64,81 80,79
0,05-0,002 13,03 18,65 10.72
< 0,002 13.22 16,54 8,49
Clase textura! Fa Fa aF
Agua retenida 33 kPa (%) 26,4 1 25,48 22,19
Agua retenida 1 .500 kPa (%) 15,46 14,61 14,76
Carbono orgánico (%) 0,29 0,13 0,12
pHaguo 7,00 7,55 7,65
RAS 0,40 0,37 0,34
Ca 26,1 28 7
, 36.3

Complejo de cambio Mg 28,5 29,0 22.8


(cmolc kg-1) K 1,02 1.01 0,73
Na 2,07 2.01 1,84
Suma de bases (cmole kg'1) 57,68 60,78 61.65
ere (cmole kg'1) 49,3 52,0 56,0

En la Isla Livingston, Henrfquez ( 1 994) describió y muestreó cinco suelos ubicados en


varias posiciones en el paisaje: terrazas altas, planos inclinados, terrazas marinas y
colinas dentro de un paisaje de outwash plain (Figura 8-11, al final del Capitulo). Las
pendientes más comunes son de 2 a 5% y solo excepcionalmente un plano inclinado
presentó pendientes sobre 20%. Los suelos van desde delgados (37 cm) hasta
moderadamente profundos (80 cm). El sustrato está constituido por roca de tipo andesita
con diferentes grados de meteorización. con arena intersticial en cantidades variables.
Las clases texturales son más finas que las descritas para los suelos de la Isla Roben, de
tal manera que en los horizontes superficiales dominan las clases franco arcillo limosa y
franco arenosa. También a través de los perfiles dominan las clases franco arcillo
limosa; solamente en el horizonte más profundo de dos suelos se describió arena gruesa
con gravas. El contenido de CO en superficie varia entre 0,2 y 0,6%, considerando que
la mayoría de los suelos presenta una carpeta de líquenes - musgos. Contenidos

317
similares se describieron también en los horizontes inferiores. El pH es elevado en los
horizontes superficiales, alcanzando valores de hasta 7,7, mientras que en profundidad
decrecen hasta 4.8 como el valor más bajo. Llama la atención que todos los suelos
presentan una SB de 100% con un complejo de intercambio saturado con Ca+l y Na+ y
en otros casos con Ca-2 y Mgi2. Aún cuando no existe mayor infonuación de terreno y
analítica, estos suelos se podrían asimilar a los sub Órdenes Gelepts o Cryepts, dado que
presentan un mayor contenido de fracción fma en los horizontes subsuperficiales. En el
Cuadro 8-3 se presentan las principales propiedades químicas y fisicas de un suelo de la
Isla Livingston.

Cuadro 8-3. Propiedades químicas y físicas de un perfil de la la lsla Ltvingston, (Henríquez, 1994)

Profundidad cm) 0-8 8 - 14 14-33 33 - 70


Distribución panículas por camaño l%) A, 2 A, 3C
1 3C,
2-0,05 79, 1 5 58,15 73,30 79,25

0.05-0.002 1 7,46 30,05 20.37 10,91

< 0,002 3,39 1 1,80 6,33 9,84

Clase textura! Fa Fa fa Fa

Agu3 retenida 33 kPa (%) 16,23 21.44 18,86 18,68

Agua reteruda 1.500 lePa (%) 1 1 .52 12,56 13.42 13.51

Carbono orgánico (%) 0.39 0,17 0,15 0,15


H 6.25 7.23 7,37 7.55
Ca 1.23 9,73 4,49 6.23

CompleJO de cambio Mg 6,99 6,58 4.93 4.32


1
(cmol. kg' ) K 3,19 1,80 1,00 0,60

Na 8.05 7,03 4,90 3,08


Suma de bases (cmol., kg· ) 19.46 25,14 15,32 14.23
1
CIC (cmolc kg' ) 22,94 21,54 19,44 18.24

8.4 Suelos Omitogénicos

En la Isla Rey Jorge. Michel et al. (2006). describieron este tipo de suelos en un sector
cuyo material parental está constituido por morrenas de fondo, cubiertas por rocas
volcánicas meteorizadas, principalmente basaltos andesíticos y gravas provenientes de
un outwash superior. Los Gelisols omitogénicos se caracterizan por ser profundos. con
una estrata activa gruesa, con algunas gravas hasta los 30 cm de profundidad y con un
epipedón Wstico humificado de color pardo. Los suelos más profundos ocurren en
pendientes suaves y sitios estables, ya abandonados por los pingUinos y donde 1a
vegetación alcanza su máxima altura y diversidad. En varios suelos es posible
identificar rasgos de crioturbación, fenómeno que ha originado la mezcla de horizontes

minerales y orgánicos, dando origen a formas particulares tales como cuñas y horizontes
retorcidos (convoluted).

En este tipo de suelos, la fosfati1.ación es el principal proceso pedogénico que causa


acidez y meteorización. La acción del hielo tiende a distribuir los agregados ricos en P
en el perflJ (Ugolini y Bockheim, 2008).

318
Se descnoió un suelo clasificado como Glacic Haploturbel (Michel et al. 2006),
.

ubicado en un nivel superior de una morrena lateral. Se trata de un suelo profundo con
estructura granular media que los autores atnouyen a los ciclos de congelamiento-
descongelamiento que ocasionan una compresión y rápido desecamiento de los
agregados. En el Cuadro 8-4 se presentan algunas propiedades de este suelo.

Cuadro 8-4. Algunas propiedades Osicas, químicas y fisico-qulmicas de un perfil de Glacic Haploturbcl
(Michel et al., 2006)

Profundidad (cm) o - 10 1 0 - 20 20-30 30 - 40 40-50 50 - 60


2- 0.02 36 30 32 31 37 32
Distribución
0,2-0,05 6 9 10 10 8 8
partlculas por tamaño
0,05-0,002 38 35 34 35 33 39
(%)
< 0,002 20 26 24 24 22 21
Clase textura! F F F F F F
pH"��"" 5,9 7,1 7.8 8,2 8,0 8,5
H 4,4 6, 1 5,7 6,3 6,4 6,6
N (%) 0,06 0,01 0,00 0.00 0,00 0,00
P-Mehlich-1 (rng drn'3) 1 85 392 290 246 324 298
K (mg dm'3) 228 244 224 216 244 232
Na (mg dm'3) 396 388 376 320 380 344
Al (cmo� dm'3) 0.2 0,0 0,0 0,0 0,0 0,0
H ..-Al ...,. (cmol< dm'3) 4,6 0.0 0,0 0,0 0,0 0,0
Ca (cmol< dm'3)
.... 15.42 7.83 8,18 7,79 7,86 7,87
... 5.00 4.98 2.69 4,6 4,45 4,42
Suma de bases 22,72 15.12 13,07 14,33 14.58 14,38
CIC (cmol.:dm·) 22.92 15,12 13.07 14.33 14.58 14.38

También se ha descrito un Lithic Umbriturbel. en cuyo caso el horizonte superficial está


constituido por una capa delgada de restos ñbricos y musgos mezclados con fragmentos
de roca. Entre los 1 0 y los 40 cm se presenta una capa pedregosa con rasgos de
reducción y bajo los 40 cm de profundidad, se describe una capa de material
humificado. de naturaleza fíbrica y mezclada con gravas finas. Otro suelo, clasificado
como Lithic Fibristel, presenta color y textura uniforme a través del perfil. El horizome
superficial está constituido por restos fibricos de musgos, en cambio hacia los
horizontes inferiores la MO, de color pardo. eslá parcialmente bumificada. Presenta un
drenaje pobre, aun cuando no se describieron rasgos redoximórficos. Finalmente se
describió un Psammentic Aquiturbel, ubicado próximo a un canal de derretimiento de
hielo, cercano a las guaridas actuales y sobre una terraza marina. Los datos químicos
para este suelo demuestran una clara influencia de ingresos laterales de guano y de
lixiviados desde fuentes más altas.

Posteriormente, Simas et al. (2007) describen. también en la Isla Rey Jorge, varios
pedones del tipo omitogénico, cuyas características se sintetizan en el Cuadro 8-5.
Debido a su evolución pedogénica única )' sus diferentes características tanto químicas,
mineralógicas, morfológicas como micromorfológicas, argumentan que el carácter
omitogénico debería ser considerado a un nivel alto en los sistemas de clasificación de
suelos, criterio que es compartido por Michel et al. (2006) y Tamocal et al. (2004).

Por último, Zhu et al. (2009) destacan la importancia que, en la actualidad, tienen estos
suelos en consideración a que el C y el N liberado en los ciclos de congelamiento­
descongelamiento desde excretas de animales marinos, juegan un rol significativo en las

319
emisiones de gases de efecto invernadero, los cuales pueden constituir una proporción
importante de los flujos anuales desde ecosistemas de tundra en la costa de la Antártica.

Cuadro 8-5. Síntesis de suelos omitogénicos descritos en isla Rey Jorge (Simas et al., 2007)

Altitud
Pedón Vegetacaón ST/ WRB Descripción general
msnm
Desierto Subpolar sin influencia omitogénica. Pavimeoto
Typic Haploturbel 1 de desierto sobre un till basáltico oxidado. Virtualmente
A lO 147 Ausente
Turbic Cryosol sin borizonación. Estructura granular media y grano
sim le.
Desierto Subpolar con débil influencia ornitogénica.
Litlúc Haplorturbel / Vegetación discontinua con plantas superiores
A9 87 D>C Turbl
-Leptic (Deschampsia antarctica) y algas verdes (Prasiola crispa).
Cryosol Formación de un delgado e incipiente horizonte A.
Estructura granular mediaygrano simple.
Roquerío abandonado en el nivel más alto y de mayor
Typic Psarnmoturbel antiglledad, con influencia ornitogénica. Cubierta
A4 72 D>C 1 Hapli-Turbic continua de vegetación. Horizontes A, B y C bien
Cryosol definidos. Estructura migajosa (crumb) en A y granular
media en B. Perma ost ue comienza a los 45 cm.
Bien drenado con un bien definido horizonte A bajo una
Typic Psammoturbel cubierta de vegetación continua. Fosfatización
1 evidenciada por un horizonte B blanquecino discontinuo
A3 69 D>M>C
Skeleti-Turbic a partir de los 20 cm. Estructura migajosa en horizonte A.
Cryosol Grano simple y estructura granular media en B.
Permafrost a 50 cm.
Andic Umbriturbel 1
D>M>C> Cubierta vegetacional bien desarrollada y presencia de un
A6 50 Umbri-Turbic
L horizonte A. Perroafrost desde los 60 cm.
Cr oso/
Terraza elevada bien drenada, en la parte inferior de la
Andic Umbriturbel/
pendiente. Cubierta vegetacional continua y un horizonte
Al 45 D>L Umbri-Turbic
A bien definido. lntluencia indirecta de pingllinos por
Cryosol
percolados laterales desde roqueríos.
Typic Haploturbel 1
Horizonte A incipiente, bajo una bien desarrollada
AS 45 p Andi-Turbic
cubierta de Prasjofa crispa. Permafrost a 65 cm.
Cryosol
Psammentic
Similar a Sitio 6, pero pobremente drenado con
Aquiturbel 1
A2 32 M>D predominancia de musgos. Recibe abundantes lixiviados
Oxyaqui-Turbic
e oso/
desde roqueños mas altos.
Terric Fibristel / Turba de musgos en terraza marina elevada. Horizonte O
A7 23 M>D Turbi·Hlstic librico de 50 cm, sobre un horizonte mineral. Permafrost
Cryosol a 70 cm de la superficie.
Terraza marina bajo una fuerte influencia de lixiviados
Andic Cryofluvent 1 ricos en nurrients desde roqueños. Son frecuentes los
A8 5 D>M>C
Gelic F
luvi.sols precipitados fosfaticos blancos en la superficie de rocas.
Grano simple como grado de no estructura.

M: musgos: L: líquenes; D: Dcschampsia antarctica; C: CclobJmthus quietensis; P: Prosiola crispa

320
Fígura 8-4. Los procesos de congelamiento y deshielo constituyen agentes de meteoriza.ción del manto
petrográfico e incluso de los suelos y que determinan procesos fisícos y químicos pedogénicos únjcos.

Figura 8-5. Formación de poligonos de materiales finos y gravas por efecto de los procesos de
crioturbación. Se puede considerar que los ciclos de congelamiento y desbielo puedan afectar la
estructuración del suelo, generando un incremento en el agrietamiento.

321
• ica, aun cuando ella se
11 la formación de los suelos no es posible excluir la influencia biológ
Figura 8-6. En
• a una débil cubierta de liqucncs, musgos y algas que, evidentemente, no podrla
encuentre restringida
afectar más que Jos primeros centímetros del perfil.

Figura 8-7. Los suelos formados en la Antártica Marltima son poco profundos, de escaso desarrollo
pedogénic<>. de clases texturales gruesas, con abundante pedregosidad tanto superficial como en el pedll y
baja actividad biológica. Generalmente presentan un perfil A - C.

322
Figura 8-8. Pennafrost a 1 m de profundidad bajo un suelo de tipo coluvial.

Figura 8-9. Perfil de un suelo en la Isla Rey Jorge que ejemplariza las clases texturales gruesas. tanto
para los horizontes superficiales como para los subsupcrficiales, además de la ausencia de estructura, que
se ha descrito como de grano simple o masiva.

323
Figura 8-10. Paisaje del suelo anterior. Los colores rojos se atribuyen a una gran cantidad de óxidos de
Fe, cuyo origen se estima más bien litocrórnico que pedogénico.

Figura 8-1 t. ·Paisaje en la Isla Rey Jorge que ejemplariza varias posiciones: terrazas altas, planos
inclinados y colinas dentro de un paisaje de outwash plain.

324
CAPÍTUL0 9
Suelos de la Isla de Pascua de Juan Fernández

Vista del crliter de Rano Kao (Hunt, 2007)

Lozio, W., Casanova, M., Seguel, O. 2009. Suelos de la Isla de Pascua y de Juan
Fernández. pp: 323-339. In: Suelos de Chile. (Luzio, W., Editor). Universidad de Chile.

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325

La Isla de Pascua se encuentra sobre una pequeña plataforma submarina que alcanza una altura
de 560 m. Se considera que el paisaje en general es montañoso, aun cuando sus alturas máximas
no superan los 70 msnm. Las pendientes son complejas y varian entre 1 a 3%. 3 a 8% hasta 4 a
15%; en los conos volcánicos son comunes las pendientes entre 15 a 20%. A medida que aumenta
la gradiente, los suelos se hacen delgados y muy delgados. Los materiales parentales son
esencialmente lavas andesíticas, escorias volcánicas y camadas de tobas, además de cenizas
volcánicas basálticas y andesiticas. Además del material volcánico finamente dividido, existe una
..
considerable cantidad de cenizas volcánicas más antiguas, mezcladas con la escoria de los conos
volcánicos. Como este material finamente dividido se meteoriza rápidamente, con frecuencia es
muy dificil distinguir con claridad los componentes del suelo derivados de los sedimentos
volcánicos recientes de aquellos provenientes de cenizas más antiguas (Wright, 1965).

Según Louwagie et al. (2006) la Isla se caracteriza por poseer varias limitaciones ambientales
severas, algunas de las cuales se han incrementado con el paso del tiempo y que se pueden
sintetizar en los cinco puntos siguientes: a) un ambiente insular fuertemente aislado, con
superficie y recursos limitados, b) una estación seca con un superávit o un déficit de humedad
impredecibles, a causa de las grandes variaciones climáticas, e) extensas áreas de suelos delgados
con grandes afloramientos de roca basáltica, d) suelos excesivamente drenados y e) isla volcánica
con suelos con propiedades ándicas que tiene como resultado una baja disponibilidad de P y de
K.

La erosión de flujo precanalizado se manifiesta en casi toda la Isla, y en sectores como en la parte
norte de ella son frecuentes las cárcavas. Según Aleayaga y Narbona ( 1969) el proceso de
erosión, que ha sido estimado como muy grave en infoiiJJes anteriores, puede decirse que tiene
muy poca importancia y signiñcación aun para los actuales sistemas de manejo imperantes. Sin
embargo, otros autores como Díaz ( 1949) ya señalaban que la erosión era un fenómeno de
gravedad que afectaba a todos los suelos con pendientes superiores a l 0%, en particular a
aquellos que estaban destinados a praderas, las cuales no alcanzaban a cubrir el 50% de la
superficie del suelo. Para Honorato y Cruz (1 999) un poco más de un quinto de la superficie está
afectada por fenómenos erosivos asociados a las laderas de los volcanes principales, con
pendientes superiores a 15%. Estos autores mencionan otros estudios que evalúan que La erosión
severa afecta aproximadamente 57% de la superficie total.

En la Isla, la evolución geomorfológica reciente está dominada por eventos volcánicos y marinos
(Muñoz, 2004). La edad de las formas determina la interrelación que existe entre eUas, tal como
sucede al considerar que los sectores más densos de la red de drenaje se encuentran en áreas
cuyas edades no superan los 5.000 años, como es el caso del sector de Hiva Hiva (Figura 9-2).

328
Geomorfología de Isla de Pascua
Carta 1
Formas Volcánicas y Marinas
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� Figura 9-2. Esquema de la geomorfología de la lsla de Pascua con sus formas de origen volcánico y marino (Muñoz, 2004).

Por otra parte. el estado de los acantilados está indudablemente relacionado con la baja
acctón de procesos elementales de meteorización sobre el material rocoso. Las
dtferenctas encontradas entre las costas norte y sur. al oriente del escudo volcánico
Mauoga Terevaka, hacen pensar que se deben tanto a diferencia de alturas del
acantilado, como a la profundidad del litoral (op.cit.).

Más recientemente, Mieth y Bork (2005) al estudiar en detalle la península Poike en la


1 1
Isla, estiman en 8,6 Mg ha' año' el suelo retrabajado por erosión (erosionado y
depositado dentro de la cuenca). Atribuyen la presencia de cárcavas al pastoreo
1
excesivo, cuyo proceso de formación estiman en más de 190 Mg ha' afto'1 • Estos
mismos autores destacan los efectos de fuertes vientos sobre la superficie del suelo en
los badlands de Cabo Cumming, pero precisan que el proceso de erosión dominante es
el de flujo superficial de agua.

Los diferentes autores han definido el clima de la Isla como tropical, subtropical
marítimo templado cálido y cálido moderadamente húmedo. En todo caso bay
coincidencia en que La temperatura media anual es alrededor de los 20uc, con una
máxima media de 24°C y una mínima media de l7°C; se estima que la temperatura
media anual del suelo es de 23°C. Se dan promedios anuales de precipitación de 1 .200
mm, con fluctuaciones entre l . 700 mm Los años lluviosos y 1 .000 mm los aftos secos.
Se considera que la evaporación es muy alta. pues la mitad o más del agua caída se
evaporarian. Louwagie et al. (2006), aplicaron el programa BASfC de Van Wambeke
( 1 985), llegando a la conclusión que el régimen de humedad de los suelos es údico y el
régimen de temperatura clasifica como isotérmico.

9 . 1 .2 Características generales de los suelos

Los factores que más influyen tanto ea la profundidad como en ta natur-aleza de los
suelos son la allitud. la pendiente, la naturaleza del material parental (ej: depósitos de
tefras y lavas) y la edad de estos depósitos (Wríght y Díaz, 1962). Los suelos arables se
ubican en algunos sectores esparcidos a través de toda la isla (Stevenson et al., 1 999;
\tfann et al., 2008).

Existe coincidencia entre los autores que los suelos tienen su origen en los materiales
volcánicos, aun cuando con matices diferentes. Para Díaz ( 1949) Jos suelos derivan de
cenizas volcánicas y de Javas volcánicas ntemperizadas
i estando la isla constituida en su
parte basal por corrientes de lava de natwvleza basáltica, y posteriormente de carácter
andesftico. Wright ( 1 965) considera a los suelos de la Tsla como parte de los trumaos
tropicales. conjuntamente con otros suelos asociados no trumaos. similares a suelos
latosólicos jóvenes ya descritos en Samoa Occidental. En tanto Alcayaga y Narbona
( 1 969) establecen que los suelos derivan en pa11e de cenizas volcánicas y en parte de
la\·as descompuestas. Mikhailov ( 1999) considera que, además de la actividad
volcánica Pleistocénica. han existido intensos procesos hidrotermales que han dado
origen a depósitos de arcillas rojas en las lineas de faJia, de tal manera que bajo la
influencia de los movimientos de masas, estas arcíllas se habrían redepositado en
pendientes acolinadas. Además. los depósitos de loess tendrían su origen en los vientos
dominantes del Este. que habrían transportado las partículas finas desde la zona de
abrasión hasta el plateau. Para este autor, la cubierta de depósitos de color rojo es
resultante de un metasomatismo hidrotermal de rocas volcánicas y el único producto de

330
9 . 1 .3 Descripción de los suelos

Para la descripción de los suelos se tomarán en consideración los estudios que


significaron un reconocimiento de detalle o semi-detalle con estudios de terreno y no
aquellos basados en literatura pre-exislente. Cronológicamente ellos son los de Díaz
( 1 949), Wright ( 1 965) y Alcayaga y Narbona ( 1 969).

Díaz ( 1 949) establece una agrupación de suelos en función de su Clase de Capacidad de


Uso e identifica siete Series de Suelos. Por tratarse de un estudio que se desarrolló en
los inicios de la edafología en Chile, presenta varias limitaciones y, obviamente, no se

...
midieron muchos de los parámetros que se miden en la actualidad. Sin embargo,
constituye un punto de partida en el que se apoyaron los estudios y descripciones
posteriores. tanto de autores nacionales como foráneos. Las pendientes donde se
describieron los suelos son variadas: de O a 6%, de 5 a 1 0%, de 1 O a 15% y más de 30%
para los más escarpados.

El color que domina en los horizontes superficiales es el pardo, variando entre el pardo
....
claro, pardo rojizo oscuro y pardo rojizo claro y solamente en un caso se describe un
color blanco, sin que se especifique la naturaleza de los materiales. Hacia los horizontes
más profundos domina el color pardo amarillento. Las clases texturales varían entre
franco limosa y franco arenosa fina a través del perftl y en todos los suelos. Para la

estructura se describen términos que no se utilizan en la actualidad, pero se asume que
podría ser algún grado de no estructura, tal como maciza. Los suelos se describieron
como profundos, entre 80 y 200 cm. La pedregosidad es común a abundante en
superficie, pero no se informa de pedregosidad en el perfil.

Algunos datos analíticos indican que el pH varía entre 5,5 y 6,6 tanto en superficie
1
como a través del perftl, mientras que la CIC varía de 28 a 60 cmolc kg' • El autor
estableció tres grupos de Capacidad de Uso: m, VT y VTT. Se presentó un mapa donde
se indican las Series de Suelos identificadas: Eyraud, Toro, Hotu-Matua, Roggeween, • "
Toromiro, Tea-Tea y Mohai. En el Cuadro 9-1 se presentan algunos datos aportados por
este estudio, para la Serie Hotu-Matua.

Cuadro 9-1. Algunas Propiedades fisicas y químicas de un perfil de la Serie Hotu-Matua (Diaz, 1949)

Profundidad (cm) o - 50 so - 100 100 - ISO


pHag
ua 5.84 6,15 6,34
N-NOJ (%) 0,004 0,004 0,0006
- 20s sol. (%)
PP 0,014 0,031 0,014
K- K20 sol. (%) 0,028 0,008 0,015
Cationes de cambio Ca 8,125 5,861 6,859
(cmo� kg-1) Mg 4.477 2,777 4,213
CIC 36.91 30,70 60.66

Wright (1 965) describió suelos en ladera del volcán, planicie en ladera de volcán y en
una posición suavemente ondulada. Las pendientes varían entre 7 y 14%. Identifica el •
sustrato de los suelos, ya sea como escoria volcánica o como toba meteorizada. Los

..
suelos son profundos, entre 125 y 1 7 5 cm hasta el sustrato. El color en superficie es
pardo oscuro (7.SYRJ/2 - 3/3), en cambio en los horizontes más profundos los colores
son pardo rojizo (2.5YR4/4 y 5YR4/4) y rojo amarillento (5YR5/8). Las clases

332
texturales son más finas que las descritas en el estudio anterior: franco arenosa ñna,
franco arcillo Limosa y arcillo limosa, tanto para el horizorue superficial como para los
horizontes subsuperficiales. La estructura se definió como de bloques subangulares para
todos los suelos. El único dato químico que se incluye en este estudio es el pH que, en
superficie varía entre 5,1 y 5.9 y que se hace más ácido en profundidad, hasta pH 4,8.
Este autor identifica tres Series de Suelos: Rano-Kao, Vinapu y Poike. Debido a la
limitada disponibilidad de datos morfológicos y analíticos, no fue posible establecer una
correlación con las Series de Suelos del estudio de Díaz ( 1949), ni tampoco establecer
alguna aproximación con una clasificación taxonómica, aun cuando este autor deja en
claro el origen volcánico de Jos suelos.

El estudio de toda la Tsla de Pascua, de Alcayaga y Narbona ( 1969) fue realizado a


escala 1 :40.000 con un exhausúvo reconocimiento de terreno. Los suelos se
describieron en laderas de volcanes. píedmontS y planos depositacionales con
pendientes generalmente planas o casi planas (0 a 1%: 1 a 3%), moderadamente
inclinadas (3 a 8%) y fuertemente onduladas ( 1 5 a 20%). Muy relacionada con la
posición en que se encuentran Jos suelos, está el contenido de gravas y piedras en
superficie; de esta forma la pedregosidad superficial es abundante en aquellos descritos
en las laderas de volcanes o en situación de piedmont (Figura 9-+).

Figura 9-4. Fragmentos gruesos en el perfil de un suelo en Isla de Pascua (foto Muiloz. 2004).

.El sustrato de todos los suelos se descn'bió como constituido por lavas con diferentes
grados de alteración y algunas de ellas descritas como porosas; solamente en un caso,
Serie Vaitea, el sustrato se describe como una mezcla de Javas y cenizas volcánicas. Las
clases texturales que se describen en este estudio son particulannente uniformes, pues
varían solamente entre arciUa densa y arcilla poco densa. tanto para Jos horizontes
superficiales como para los subsuperficiales. Este parámetro podria ser discutible, si se
considera que el origen de los suelos se encuentra en cenizas volcánicas y que la
mayoria de los autores Jos consideran incluso próximos a los trumaos (Andisols) del
continente.

333
Cuadro 9-2. Algunas propiedades fisicas y químicas de un perfil de la Serie Orito (Alcayaga y Narbona,
1969)

Profundidad (cm) o - 16 1 6 - 37 37 - 62 62-76


Distribución de 2-0,05 14,08 9.68 24,97
partículas por tamaño
(%)
0,05-0,002
< 0,002 •
24,85
60,37
41 ,96
43,39
38,40
35,96
Clase textura! A AL FA
Agua retenida, 33 Pa (%) 51,9 49,8 68.0 70.2
Agua retenida, 1.500 Pa (%) 34,3 32.0 39.5 37,2
P01- (ppm/suelo) 46.5 30,5 23.0 7.5
pH- 6,3 6.4 6,4 6.0
Carbono orgánico (%) 4.25 3,08 1.7 1 1,47
N(%) 0,42 0,08 0,03 0. 1 8
Ca 3,50 3,87 3,75 2,01
Cationes extrafbles Mg 5,96 6,i2 5,72 4,00
(cmolc kg'1) K 0,77 0,91 0,18 0,17
Na 1,08 1.38 2.23 1,98
CIC 51,15 47,68 48,96 44.62

Louwagie ec al. (2006) estiman que los suelos de la lsla de Pascua definitivamente
derivan de tefras, cuya meteorización ha llevado a la fonnación de materiales con claras
propiedades ándicas, de tal fonna que varios de los suelos que ellos estudiaron fueron
clasificados como Andísols o intergrados hacia Andisob. En el Cuadro 9-3 se hace un
resumen de las clasificaciones taxonómicas para ISSS ( 1998) y USDA. Soil Taxonomy
(1 999) (op.ct.).
i

Cuadro 9-3. Correlación entre lSSS (1998) y USDA. SI (1999) para algunos suelos de Isla de Pascua
(Louwagie et al., 2006)

Suelo WRB (1998) USDA (ST, 1999)


TP3 VA4 HyPCrdystri-Silandic 1.�luandJc) Andosol TyPic Hapludand
Akahanga: AK 1, (Silti'-Pachic) (Silt-Endo�c' ' Silti-Hiposodic)
i Andi c HapludoU
AK2 AK3 Pbaeozem
La Pérouse: LP4 Silti-Pachic Phaeozem TYPic Hapludoll
LP6 Silti-S\1\;ic Phaeozem TyPiC Argiudoll
LPI VAJ (HyPerdystn-Silandic)(Ferrali-Silanclic) Cambisol Andic Dvstrudept
Va1tea: VA2 y (Hyperdystri-Humic) (Hyperdystn-Umbrihumic) C mbisol Andic Dystrudept - Hurnic
LP3 Pachic D strude 1
VA8 Humi-episkeletic Leptosol Lithic Udorthent

9.1.4 Ev ol ució n histórica de los suelos

La mayor parte de los suelos de La Isla de Pascua bao sido disturbados por remoción de
la vegetación original de la Isla (Mieth y Borlc, 2005) por agricultura prehistórica
(Stevenson et al . 1999, 2006) y por un pastoreo histórico de ovejas.
.

Muchos de estos estudios han permitido reconstruir los perfiles originales de Jos suelos
de la Isla, evidenciando grandes cambios en éstos a través del tiempo. En la Figura 9-5
se puede observar una secuencia de evolución de los suelos según Stevenson et al.,
(2006). La secuencia de los procesos propuesta es la siguiente: ( 1 ) depositación de
sedimentos en el Pleistoceno tardlo, (2) desarrollo de suelo en el Holoceno temprano,

335
(2a) pre-colonízación de bosque de palmas Jubea. (3) deforestación antrópica alrededor
del Siglo Xll. (4) erosión por flujo precanalizado del horizonte A y parte superior del
horizonte B luego de La extracción de árboles, (5) primera fase de cultivo, (6) abandono
del cultivo e incremento de suelo coluvial, (7) reocupación de área cultivada por sitios
habitados, (8) continuo depósito coluvial, (9) instalación de un pavimento de
re\estimtento con fragmentos gruesos en los siglos XVIII y XIX.

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Figura 9-5 Estratigrafia del área Maunga Orito (Isla de Pascua) mostrando las fases diferentes de uso del
suelo y depósito de sedimentos coluviales (Stevenson et al., 2006).

Mieth y Bork (2005), en un estudio de la península Poike (Figura 9-6), llegan a


conclusiones similares. Para estos autores el proceso comienza con (A) la fonnación de
suelo bajo un bosque natural de palmas, (B) continúa con el corte y la quema del
bosque, (C) instalación de platafonnas Abu de piedra, (D) acumulación de más de 150
capas de sedimentos tinos y finaliza con (E) desarrollo de cárcavas.

336
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i ura 9-6 Reconstrucción del paisaje en la península de Poike, Tsla de Pascua (Mieth y Bork, 2005).
Fg

En consecuencia, antecedentes como estos deberían ser tomados en consideración al


momento de efectuar cartografias detalladas e interpretaciones de los suelos de la Isla,
que muestra innumerables perfiles truncados, paleosuelos y suelos enterrados (Figura 9-
7).

337
Figura 9-7. Perfil de un suelo enterrado ..
a- en Isla de Pascua (foto Muñoz. 2004).

9.2 Isla de Juan Femández

9.2.1 Antecedentes Generales

El Archipiélago de Juan Femández está constituido por las zonas emergidas de un


cordón volcánico submarino a una profundidad media de 1000 m, en una extensión de
250 millas desde Jos 74° W a los 83° W. Este cordón seria parte de una cordillera
sumergida que se extiende hacia el norte en forma casi paralela a la costa de Chile
continental.

La lsla Más a Tierra (también conocida como lsla Robinson Crusoe) abarca 48 km2 y su
máxima elevación es de 922 m. Su fonna es alongada y se encuentra serjamente
erosionada (Figura 9-8). Está compuesta de varios centros volcánicos que han irradiado
en el tiempo hacia estructuras periféricas (Baker et al., 1987). Datos de K-Ar sitúan la
edad de la lsla entre 3,8 y 4,2 m.a. (Stuessey et al., 1984; Farley et al., 1993).

Aproximadamente a 180 1cm al oeste de Más a Tierra se encuentra la Isla Más Afi.Jera
(conocida como Isla Alexaoder Selkirk), comparable en tamaño a Más a Tierra (52 km2)


pero con una estructura de cúpula muy accidentada, sin incisiones y que alcanza una
altitud de 1 .650 msnm (Figura 9-9). Los datos de K-Ar de Más Afuera dan edades del
orden de 1 a 2,4 m.a. (Stuessey et al., 1 984).

La mayor parte de la información geológica, geomorfológica y edáfica que se


proporciona en este sub-capitulo proviene de lREN ( 1982), cuyo Estudio de los
Recursos Físicos del Archipiélago de Juan Fernández provee de una fuente de datos
comprehensiva, aun cuando no reciente. Sin embargo, las fuentes de información acerca
de este grupo de islas son escasas y poco confiables. Justamente, a raíz de esto último se
hará solamente una resefia de las condiciones geológicas y edáficas de la Isla de Juan
Femández, basada en el lnforme ya señalado.

338
Figura 9-8. Isla Más a Tierra del Archipiéla!O Juan Femández (base Ea.rth-google).

Se considera que el origen de la Isla es volcánico. de carácter principalmente basáltico,


con distintos períodos de actividad diferenciados por litología, estados de alteración,
relaciones de contacto y morfología asociada. Por lo tanto. se trataría de un área
emergida de un relieve submarino volcánico relacionado con la Dorsal de Juan
femández de la Placa de Nazca.

Para los autores del Informe (op.cit.) se distinguen cuatro Pisos o sectores que
establecen diferencias en la morfología de la Isla.

El Piso Superior o Zona de Altas Cwnbres, corresponde a los relieves montañosos que
se ubican en la sección oriental de la rsla, cuyo perfil agudo y estrecho proviene de la
presencia de diques basálticos que conforman las c1mas. Este relieve abrupto se alterna
con algunas cumbres mesetiformes, producto de la presencia de capas más resistentes a
la erosión.

En el Pso
i Medio o Zona de Laderas y Cumbres Medias, sus líneas de cumbre
corresponden a divisorias de cuencas de marcada orientación norte. Las laderas tienen
pendientes fuertes, que varían entre 35 y 60% y cuya superficie está constituida por
afloramientos rocosos continuos con rocas de diferente dureza, lo que le confiere un

339
perfil escalonado. En esta franja altitudinal se ubica la cabecera de los valles
pnncipales.

El Piso Inferior o Relieves Bajos, se presenta como un área de cordones bajos y laderas
de pendiente fuerte a moderada (35 a 40%) que han sufrido fenómenos masivos de
deslizamiento total o parcial de la cubierta edáfica. Se estima que el origen de estos
procesos se encuentra tanto en causas naturales como antrópicas. En relación a estas
últimas, el sobrepastoreo y la tala de La vegetación original han dejado la superficie
desprovista de una cubierta protectora, llevando el proceso erosivo hasta la formación
de profundas cárcavas.

El Piso Deposicional, corresponde a áreas de depositación producto de procesos


aluvionales y aluviales, así como a depósitos eólicos activos. Los conos aluviales y los
aluviones se relacionan con los valles más desarrollados, que no concuerdan con la
dinámica fluvial actual. Corresponden a restos de conos de deyección en las
desembocaduras, disectados por los lechos fluviales actuales. Estos conos presentan una


estratificación gruesa con dominio de rodados y botones gruesos con una matriz de
grava fina y arena. En su superficie la granulometría es más fina, próxima al limo con
fragmentos de grava fina y arena gruesa. En la rsla, los depósitos eólicos activos se han
descrito en diferentes situaciones. Fundamentalmente se encuentran en dos unidades
morfológicas que se concentran al W y SW del Aeropueno. La primera se encuentra en
una planicie rocosa baja y está constituida por arenas finas pardo - amarillentas que
están en constante movimiento en la dirección de los vientos locales dominantes, esto
es, hacia el norte. La segunda unidad se encuentra al norte de la anterior y constituye un
depósito de arenas de escaso espesor, sueltas y en constante movimiento.

340
Figura 9-9. Isla Más Alilen1 del Archtpiélago Juan femández (base Eanh-google).

Con relación a la presencia de cenizas volcánicas, los autores (IREN, 1982) llegan a la
conclusión que el depósito cineritico no sería el resultado de la alteración de rocas, tales
como tobas rojas, ni de conglomerados volcánicos, sino que su origen se encontrarla en
erupciones volcánicas submarinas a partir de centros adyacentes al litoral. Al respecto,
señalan antecedentes históricos sobre la ocurrencia de un fenómeno eruptivo en febrero
de 1 835, con presencia de columnas de humo acompañadas de movimientos sísmicos.
Sin embargo, quedan muchas incógnitas por resolver, pues se estima que las cenizas
volcánicas habrían actuado como material parental de suelos en amplios sectores. No es
probable que las cenizas provenientes de esa erupción histórica hayan tenido la
posibilidad de evolucionar hacia suelos de origen volcánico, por lo que el origen de
ellos queda aún por estudiar.

9.2.2 Descripción de los suelos

Se considera que los suelos de la Isla deben su situación actual a la conjugación de


factores particulares de su entorno, tales como gradiente de pendiente y exposición,
cobertura vegetal, situación altitudinal, la dinámica natural de rejuvenecimiento de las
formas y, muy en particular, el impacto antrópico, representado por el sobre talajeo, el
corte de los bosques, incendios y la construcción de caminos y senderos. En IREN
(1982) se establece una primera agrupación de los suelos en tres clases, asociadas cada
una a sectores definidos del relieve.

341
..
.. -
'
Suelos de Montaña de desarrollo incipiente derivados de cenizas
, de desarrollo incipiente que se ubican sobre los 250 a 300
volcánicas. Son suelos
• ,,,
msnm, con pendientes fuertes y cortas que pueden llegar a 80%. Estos suelos� ocupan el

área central de mayor altura, con cubierta de vegetación boscosa endémica, Son suelos •
relativamente delgados, con un perfil A-C, de clases texturales medias a
moderadamente gruesas, con estructura de bloques subangulares y rocosidad en el

perfil. En los sitios donde se encuentran estos suelos son frecuentes los afloramientos

vegetación es frecuente
A -
rocosos de roca basáltica poco alterada. En los sectores de mayor densidad de
encontrar horizontes superficiales
1\ .-
orgánicos. A causa de la ..
A
erodables, por lo que se recomienda
. ., .
topografía accidentada y de las fuertes pendientes en que se encuentran son suelos muy
la manutención de la cubierta vegetal boscosa que
los cubre.


El contenido de MO es alto, pues se midieron valores entre 1 7 y 25%. Los datos
proporcionados para la CIC también muestran valores muy elevados, entre 70 y 1 00
cmolc kg·1, siendo el Ca+2 y el Mg+2 los cationes dominantes en el complejo de
intercambio. El pH varía entre 6,0 y 6.8, aun cuando se midieron valores inferiores a 5
en algunos suelos que los autores atribuyen al elevado c.ontenido en MO. Ocupan 1 .356
ha, que corresponden al 28,7% del total de la Isla.

- .. ...

Suelos de Relieve lntermedio y Mayor Desarrol l o Relativo. Estos suelos se
encuentran en pendientes que varían de 20 a 40%, ocupando lomas, laderas de

• ..
quebradas, sectores de piedmonts y planicies inclinadas remanentes, en las cuales son

comunes los procesos de arrastre coluvial con aporte de materiales detríticos desde las -
posiciones más altas. El sustrato más común está representado por rellenos
aglomerádicos con afloramientos rocosos en las partes más bajas. Se considera que el
� es mayor que el de los suelos del grupo anterior, pues la mayor
desarrollo pedogénico
parte de los suelos muestran un perfil A-B-C. En algunos casos se describieron
horizontes de acumulación de arcillas (Ba). Los colores dominantes son pardo y pardo
.. ..
A

rojizo en el matiz 7.5YR y las clases texturales


.. se describieron .. ' en
.. contenido
son medias a moderadamente finas.
4

También • ,. finas comunes a través de los pertiles. El


gravas
MO varía entre 4 y 9% y la CIC, si bien muestra valores inferiores a los del grupo de
suelos anterior, se mantiene sobre 40 cmolc kg"1. Ocupan 705 ha, equivalentes al 15,8%
de la superficie insular.

Suelos de Carácter Deposicional e n Relieves Semi-estabilizados. Son


suelos que ocupan una posición plana
... ..
a moderadamente inclinada. Son de clases
texturales finas sobre Wl sustrato de aglomerados y lavas. Presentan un moderado
desarrollo de perfil, pues se describieron secuencias de horizontes A-8-C. En los
sectores del Aeropuerto son más evidentes los procesos de erosión eólica. Ocupan 204
ha, equivalentes al 4,3% de la superficie de la Isla.

Finalmente, se describen los Suelos Misceláneos, que agrupan a todos aquellos


...
sectores que no constituyen áreas o superficies homogéneas por posición, intensidad de
los procesos de degradación, heterogeneidad de los materiales y otras condiciones
particulares extremas. Se incluyen en estos Suelos, áreas afectadas por procesos
erosivos muy intensos, de tal fonna que no fue posible identificar el suelo original al

..,
que correspondían. También se incluyeron en esta denominación a Jos terrenos rocosos,
acantilados y sectores de sustrato desnudo a raíz de la presencia de fenómenos erosivos
de carácter catastrófico.

342
CAPÍTULO 1 0

Cartografía eeneralizada de suelos de Chile

Casanova , M., Luzio, W., Seguel, O. 2009. Cartografía generalizada de suelos de Chile. pp: 341-350. In:
Suelos de Chile. (Luzio, W., Ed.).

343
1 0 . 1 Antecedentes Generales

La Cartografía de Suelos en Chile, tanto generalizada como de detalle, es el resultado de la labor


de varias instituciones nacionales y de numerosos profesionales que han contribwdo, a partir de
la década del '30, a la generación de información edáfica de relevancia para el país. En 1 942 el
Ministerio de AgricuJtura organizó el primer grupo de Ingenieros Agrónomos Edaf
ólogos para
realizar el levantamiento agrológico del país, como consecuencia de las recomendaciones
emitidas por una Comisión Oficial (Decreto 647, 30/09/1941).

En la década del '60 cabe destacar el denominado Proyecto Aerofotogramétrico


(OEAIBTD/Chile) que constituyó uno de los primeros esfuerzos sistemáticos para obtener
información acerca de la distribución de los suelos en Chile. al menos en las áreas con potencial
agrícola. Hasta 1970 - 1980, los estudios cartográficos se orientaron hacia la obtención de
información básica de suelos, cuya finalidad estaba relacionada con el uso agrícola y la definición
de la aptitud de uso, fundamentalmente para proyectos de riego y drenaje de carácter regional.
Entre 1990 y 2007, CIREN generó un conjunto de estudios tendientes a actualizar la información
edáfica entre la lU y la Xl Región de Chile.

Más recientemente, la orientación de los estudios de suelos ha derivado hacia el afinamiento, para
determinadas áreas, de los estudios generalizados realizados con antelación.

En este Capítulo se consignan los esfuerzos que han realizado diversos profesionales, orientados
a contar con un Mapa de Suelos de Chile. Se ha tomado como base la recopilación realizada por
Diaz ( 1958), referente a la labor del Sub-Departamento de Agrología del Ministerio de
Agricultura. Cabe hacer notar que muchas de estas aproximaciones para obtener una Carta de
Suelos de Chile provienen de expertos foráneos, muchos de los cuales nunca visitaron el pals, de
tal manera que sus mapas tuvieron como base los mapas o informes geológicos y climáticos
disponibles.

345
20-___-41-...,,..�- 20"

A Suelos da Desierto
B Suelosde Estepa P•rdo -C•III•IIo
C Suelos Rojos
O Suelos Montaliosos
E SueJosAmarillos
F suelos Neg""s y Negro O.grwd•dos
G Suelo• Grises de Bo� y Monúl�s
H SuelosPardosde B oequ.
1 Suelos de f'nlclenos
J Sueloa de Pcxtrol

ESCALAORAflCA

200 O JOO 200 300 400 $00 km

70"

Figura 10�1. Mapa de los suelos de Chile según Matthei ( 1930; de Dlaz. 1958).

346
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Figura 10-2. Mapa de suelos de Chile según Joffe (1936; de Oiaz, 1958).

347
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A Su.losAftno9osdeOnledo
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O SUe:toache Pradeftten In MorUfleede ...Zonn �


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1 &..tdoeForestaJnde MontaM, Ptrdot., e�· �
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ESCAl.<GIAFICA

100 o 100 lOO .)(0 ..tOO M._

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Figura 10-3. Mapa de suelos de Chile según Motylev (1938; de Diaz, 1958).

348
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.. DCAI.A<l2A1ICA

Figura 10-40 Mapa de suelos de Chile según Wilde (1946; de Diaz, 1958)0

349
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Figura 10-S. Mapa de Suelos de Chile segtin Robcrts y Dlaz (1958).

350
MA� OE ASOCIACIONES
OE GRANDES GRUPOS DE SUELOS
WAPA OE CHI�E 1 6 000.000
� · ··

Tonlotthtlll•
2 Comtorlhid• •To"1ortbonla
3 Solortbldt, cueftCOS M11imentorio1
4 Cr,orthenl& -Cr,o,,óeplo 1 ,llrlc)
5 Cryoflbriot -Cryoqueptw, ,¡,..,, cloprimldfl con dnno)o rMITlngldo
6 C.,,,borlhlda-Tonlol'ft>eoh-f'Qleorjblcu
7 CGmbo<'Hddo -Pcl.orlb�
B Cr,o,lhonl> -Comborlhida, ,¡,..,. N<Qfj)C>d<&a
9 )Coronio: Comborlhida mmda ootlfl f vallft iftt.,fflOflt-
10 Torrl0<ll1ents -Cambonbido-Polaotoicl•,•11 l•m•u•,,..-
11 C.,0,-t•. e,� (vllrlc). c,,oc11Rpt1,..- ....,.,.....
12 Ka¡,lmtalts-t.ls-..,i•,9lonldlldadopooitoe.S,, ....,¡,..
13 ttaplallol fs•U•toc;hNpta,óroaodeconaclola Cordlltefo cu le Coot11
14 Pallo...-.a.-
15 tlo¡,la1-111-Xatocbn!)tw- Colanr-
16 Hoplonrolla-X.roclu-i,ta-Pain...it•, planoo da Ad,� aumol..y lollárica
17 0,-,........,11
19 Poku,..lfo-tloplo-b1 ó,_..i.-.-.s. la Cc11dlara d• lo C..la
19 PGl-tr•, !l'oniclH de depGOil<>clóA IIOClrina
20 Poloudolla• Hopbodalt1,d..o. do .,.,,...dolo Conllll...,clo!llohvalbul o
21 Opfr-ph-Pol-llt


22 Haplohim,ilfh ... Hop,lo4u•Ph, ---ti• lolft.O}ti JC-ffro, cklaC:on:hll•rod• laCOete
Z3 tloplo-,ór- • .,.,....,_"" varllanlo «ionlGI an lo pro Cotdllloro da III Coa_lo
24 Dy•tro•<ltPI•• Placonclepto
25 Vflnmdo¡,b• 0,.1T'OMapla,<na• U«<pOdaa
. 26 liad.da-Sap,b1o • Andoplt, ÓTe<n diwclGdao
.
27 liilloool• •Sp..dooola ?
28 Aridlrol$-Alíta0la '>
2!# Pso_.,.lo - )(uocllrepts, f)lonos <ho qdimtfttoCI<ia IMuvrvlu y lollcÍrlcos
30 Campos de hielo

Figura 10-6. Mapa de suelos de Chile, según Luzio y Alcayaga (1992).

351
Alfisols

•• Andisols

Aridisols

Entisols

Gelisols

•• Histosols

lnceptisols

111111 Mollisols

-
Spodosols

Ultisols

Vertisols

-• RockyLand
..______..�! Shifti ng Sands

Ice/glaciar

Fi.gun 10-7. Mapa de suelos de Chile, según Soil Survey Staff(1999).

352
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UNIVERSIDAD DE CHILE

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